Download lenguas indoeuropeas en america

Document related concepts

Ablaut indoeuropeo wikipedia , lookup

Lengua fusionante wikipedia , lookup

Cognado wikipedia , lookup

Transcript
PROF. FELIX C. RAMIREZ
LENGUAS INDOEUROPEAS
EN AMERICA
CASA RAMIREZ E D I T O R E S
MEXICO
I 9 5 I
PROF. FELIX C. RAMIREZ.
LENGUAS INDOEUROPEAS
EN AMERICA
CASA RAMIREZ, EDITORES.
MEXICO
19 5 1
ATENTA INVITACION A LOS FILOLOGOS DEL MUNDO.
SEÑORES: Los indígenas de Michoacán hablan una lengua, para mí maravillosa, que como la que hablan los tristes pescadores de las Islas Aleutianas, que menciona el eminente filólogo español, don Julio Cejador, denuncia "un más
elevado natío" de estos aborígenes michoacanos; pues, la
lengua fcattsca o phurhembe revela profunda sabiduría; está
formada por palabras que expresan conceptos de alta intelectualidad, el mecanismo de formación de sus vocablos es
de una sencillez asombrosa, y, como todas las lenguas primitivas está construida sobre una manera de ver el Universo
distinta de la manera de ver otras razas.
El hecho de que esta lengua conserve aún su estado monosilábico, enseña las leyes de aglutinamiento, leyes que, en
mi concepto han seguido todas las lenguas primitivas y aun
las derivadas..
Las pocas personas (desgraciadamente pocas) que han
estudiado la lengua michoacana reciben la impresión de que
se trata de un idioma notablemente evolucionado, que es
tá a la altura del sánscrito, del griego, del latín, etc..
Veamos lo que sobre esta lengua nos dice el padre don
Manuel de San Juan Crisóstomo Nájera en su disertación sobre el habla de los indígenas de Michoacán:
"De la lengua que os presente un ensayo, señores,
no hay sino cuatro gramáticas, de las cuales la de Sierra
nunca vió la luz; la de Gilbert, es tan escasa que difícilmen— ,3—
te se halla un ejemplar y la de Lagunas que no es fácil entenderla. Basalenque formó una que debe ser la base de
las que en lo sucesivo se formarán; pues, arreglándola por
los principios de la latina, trata algunos puntos con mucha
claridad, aunque deja otros envueltos en la obscuridad con
que los trató Lagunäs. Los dos diccionarios del idioma no son
sino pequeños ensayos muy incompletos y pobres. Desgracia
ha sido ésta, no merecida, de una lengua que compensa con
usura el trabajo que se emplea en conocerla
".
"Cuando se estudia este idioma se ve que si se hubiera
de inventar una lengua no se haría sino imitando el tarasco.
Nada le falta y es tan sencillo que parece nada tiene. Declina nombres (y sus pronombres) y no tiene la diversidad de
terminaciones, ni las excepciones de otros idiomas; todos sus
verbos se conjugan de una manera; terminaciones invariables avisan cual es el tiempo y la persona; la raíz es la misma y la irregularidad de algunos verbos no consiste sino
en la mutación de alguna letra
".
"¿Qué más fácil y racional que el modo de formar las
diversas maneras con que puede significar un verbo, que poniéndole, algunas partículas, que lo dejan en el ser que tenía y lo dejan libre de la necesidad de recurrir a otro para
completar la significación? Curahaca, yo oigo; curagahaca,
yo soy oído; curaxahaca, estoy oyendo; curaxatcrhaca, estoy
oyendo siempre; curacurahaca, oigo de nuevo; curasíra, voy
a oír; curcmguechahaca, tengo voluntad de oír; curapehaca,
oigo indeterminadamente; curavahaca, oigo a muchos; curacuhaca, oigo a uno; curabezhaca, finjo que oigo; curabohaca,
voy oyendo; curaezhaca, voy a conocer que oigo; cuxaictKfhaca, obligo a otro a que oiga".
Si el tarasco no es un idioma de imaginación, lo es d*
comprensión. |Qué multitud de ideas en una sola sílaba qu»
se agrega"!
- 4
—
"Su sintaxis es igualmente sencilla en todo y algunas partículas y adverbios son raíces fecundas de verbos que a su
vez son raíces de los adjetivos y de los abstractos. Los nombres pueden pasar a verbos y lo mismo los adverbios y muchas de las partículas que entran en composición. Todas las
partes del idioma pueden ponerse en acción".
"Si examinamos la filosofía de este idioma hallaremos
en él cosas admirables; algunas os referiré: Dios, para los
tarascos es Avandaca, la razón personificada. |Qué sublime
idea! Es lo tanto como el voos o el koyos de platón. Amelius al leer el Evangelio de San Juan, dijo: "Este bárbaro rob é estas ideas a mi maestro". A cuál pueblo antiguo robaría
Platón las suyas? | Teólogos en los pueblos de Anáhuac! ¿Habría comentadores del divino Elohim? ¿La filosofía podía inventar cosas más bellas? .El cielo es Avandaro, el pctís de la
razón".
El padre Nájera cometió muchos errores porque no tuvo
más fuente para escribir su gramática que la de Basalanque; ni oyó hablar a los indígenas de Michoacán; pero la
descripción que hace de la lengua es exacta aproximadamente, al menos describe su impresión al conocer el phurhembe (tarasco).
Ni Basalenque ni Nájera pudieron penetrar en los arcanos de la lengua michoacana, porque la estudiaron como se
estudian los idiomas europeos; pero el mismo ejemplo que
pone Nájera revela cómo está construida la lengua michoacana.
Ciertamente, en esta Jengua cada fonema es un semantema, que contiene un concepto, un sentido propio; pero, además, cada sílaba tiene dos o más valores ideológicos, según
el lugar que ocupan en la pcdabra y según la sílaba que le
antecede o le sigue. Cada sílaba tiene dos o más funciones,
exactamente como en el sistema de numeración arábiga, con-
forme lo establece Victor Henry para las lenguas indoeuropeas, pero en la lengua phurhembe esto se ve con más claridad porque conserva su monosilabismo en estado viviente.
Intenté hacer el mismo estudio analítico en otras lenguas,
pero mis escasos conocimientos de ellas no me lo permitieron;
es por esto que invito a los filólogos a que conozcan la lengua de Michoacán que puede revelarles algunos secretos
lingüísticos que ya están ocultos para siempre en atros lenguas.
Se me critica el hecho de que busqué semejanzas entre
mi lengua natal y las lenguas indoeuropeas y no las busqué
en las lenguas del Anáhuac. Esta crítica obedece a ignorancia u olvido de que ya el señor Francisco Pimentel comparó
el tarasco con las lenguas nativas de esta región del Continente Americano, sin encontrar ninguna semejanza. El presente trabajo no es más que un esbozo de ensayo de comparación filológica, es sólo una especie de anuncio a los filólogos del mundo de que en Michoacán se habla tina lengua que merece ser estudiada, como dice el padre Náiera.
Para este estudio ofrezco dos trabajos: "Comentarios a las
gramáticas de Basalenque y de Nájera", únicas que se conocen de la lengua tarasca y Gramática Razonada de la
Lengua Phurhembe.
Por medio de este opúsculo reitero mi invitación a los
filólogos del mundo a que se tomen el trabajo de estudiar la
lengua de Michoacán, la que "compensa con usura el tiempo que se emplee en conocerla.
Atentamente, el Autor.
LENGUAS INDOEUROPEAS EN AMERICA.
I
La lengua phurhembe (tarasca)
Cuando he afirmado que la lengua que hablan los indígenas de Michoacán es indoeuropea, he provocado mofas
tanto para mí como para la misma lengua, y esto, no solo
de las personas que la ignoran, sino de las que la hablan,
principalmente cuando estas se creen ilustradas.
Dicen los ilustrados que aun hablan la lengua michoacana: ?Cómo una lengua tan pobre como el tarasco (phurhembe) que no tiene términos que signifiquen infinito, inmortalidad, esencia, substancia, etc., iba a ser parienta del
sánscrito, del griego, del latín?" No puedo ser, !o que usted
afirma es un solemne disparate.
Y sin embargo, el phurhembe tiene más semejanza con
las lenguas indoeuropeas que con las que se hablan en México, como el azteca, el zapoteco, el maya, etc.
El señor Francisco Pimentel, para probar que no era posible que los indígenas de Michoacán fueran de origen azteca, como lo aseguran los historiadores españoles y los que
IOÍ- copian, hizo una comparación detallada de las lenguas
que se hablaban en Anáhuac a la llegada de los españoles
en América, con el phurhembe, no encontrando ninguna semejanza entre esta lengua y aquellas, ni en su morfología
ni en su gramática.
•—7—
Todas las clasificaciones que se han hecho de las seiscientas y tantas lenguas y dialectos que se hablaban en Anáhuac pueden reducirse a diez familias, pero la lengua phurhembe no figura en ninguna de estas familias; es única, sin
relación ni parentezco con ellas..
La siguiente lista de vocablos pone de manifiesto la diferencia que hay entre la lengua azteca y la phurhembe..
ESPAÑOL
Agua
canoa
cerro
culebra
casa
estrella
coyote
perro
flor
papel
braguero
rojo
AZTECA
atl
acalli
tepetl
coatí
calli
citlal
coyotl
izcuintli
xochil
amatl
maxtlatl
tlatlahuaqui
Phurhembe
itsí
Chekákua o icháruta
juata
acuitze
lrekua o khumányekua
joscua
jihuatze
uichu
tsitsiki
tsiranda
iáhchutakua
charápiti
La terminación locativa que significa "lugar" en phurhembe es RO y en azteca CAN..
La diferencia que salta a la vista entre el phurhembe y
las lenguas nahoas es la carencia de la L en la primera y
la superabundancia de esta letra en las segundas. El phurhembe tiene en cambio, dos eres suaves; una como la r española de 'para" y la otra muy suave que se acerca a la I
como en las palabras uekórheni, caer de lo alto; phurhembe,
visitante; karhárani, subir, que se pronuncia tocando el paladar con la punta de la lengua.
La circunstancia especial de que la lengua phurhembe
—8—
carezca de términos para designar categorías y formas para
expresar respeto y reverencia, de los que abundan en el mexicano, indica que la organización social y política, era muy
diferente entre el pueblo phurhembe y el azteca, por lo que
definitivamente podemos afirmar que ni la raza ni la lengua
phurhembe tienen parentezco con las razas y lenguas nahoas.
Por el contrario, la semejanza entre el phurhembe, el cámara, el quechua y el guaraní, lenguas que se hablan en
las repúblicas hermanas de Sud-América, son tantas, tanto
en su fonética como en su morfología, así como en su gramática, que causan la impresión, estas semejanzas, de que
se trata de lenguas del mismo origen, que proceden de una
misma lengua, o que fueron una misma lengua; lenguas, que
a su vez, tienen mucha semejanza con las indoeuropeas, como lo veremos más adelante..
La lista de nombres que en forma de cuadro se transcribe en seguida, demuestra la semejanza morfológica entre
las citadas lenguas.
cámara y quechua
ARICA, aim. peñón agudo;
que. quizá sí
HUNI, aim. pasteles; que. altura..
iqui, aim. dormideras
iarata, aim. lugar cálido con
sombras
pomatha, aim. acto de comer del leopardo
pomarm, aim. orejas de
león
acho, aim, frutal
ambar, aim. mano
arihka, digo, le digo
uni. hueso o juni. toser.
iki, cuando
tarata, levántalo
pómata, arrójalo al suelo
phómarini, tentar el agua
de una vasija
acho, en la casa del señor
ambara, hazlo bueno, limpíalo
—9—
coni, aim. trabajoso
cahuicho, que. ocas secas
kütíi, mucho
kahuicno, en la Gasa del
borracho
ucmaku, pásalo, crúzalo
uamuko, donde se repica
uamani, golpear en el fondo
uaía. golpéalo o juaía, cerro
uarani, bailar
thiiidi, mosca
charama, ve tronando
huanac, que. enmendado
huamuco, que. nogaleria
huaman, que. alcón
huaía, que. año
hucrani, aim. engordar
thinthi, aim. langosta
charama, el obstinado que
nace de pie
uari, mujer, señora
huari, que. salvaje
kusko,
donde el que suena
cusco, que. ombligo
kuska,
suena, imperativo
cusca, aim. allanado
uarás, camote
huaros, aim. lucero
pakara, quédate
pacora, aim. el castillo
urna, aim. agua
u n a , ven haciéndolo
hauiri, aim. río
jauiri, pelo, cabello
pirhua, aim. troje
pinia hílalos
caras, aim. desnudo
karás, gusano
yauari,
metate.
yahuari, de jahuar, tigre
Como se ve por los ejemplos anteriores las tres lenguas
comparadas tienen la misma morfología, las tres carecen de
"1", sus terminaciones son iguales: ni, ta, ra, ru, ti, ma; la
sílaba "ro" final de las palabras, corresponde a las tres lenguas con el mismo significado de: "lugat de" o "lugar donde' '; no hay ninguna palabra, en las tres lenguas comparadas
que terminan en "ti" muy propia del mexicano.
Tatá, padre; purú, calabaza, tienen la misma ortografía
y el mismo significado en phurhembe y en quechua; otras
palabras tienen ligeras o graves modificaciones, como uarmi,
quechua y uari, phurhembe, que significan mujer; máhki y
jáhki, dicen, mano; uanicuy y uándikuni, dicen, matar y así
otras muchas palabras.
—10—
Debe tomarse en cuenta que los españoles alteraron mucho la pronunciación de las palabras y por consiguiente su
ortografía; que en la época en que se escribieron las gramáticas, los diciconarios y los vocabularios de las lenguas
indígenas, la escritura del español era detestable..
En México tenemos Cuernavaca por Cuauhnahua; uatemus por Cuauhtémoc, bocaneo por uekámeo; en Sud América hay Lima por Rimac; Chile por tshiri. Esto por una parte,
por la otra, la traducción que dieron los españoles a las palabras fué completamente caprichosa y con mentalidad española. Incapaces de comprender el verdadero sentido de
las palabras indígenas por la diferencia de comprensión de
las cosas dieron a los vocablos indígenas un sentido que no
tienen. Por ejemplo: irecha, phurhembe, que significa "el señor residente" lo tradujeron por "rey" y phurhembe, que solo
dice, visitante, lo tradujeron por su antítesis de irecha, diciendo que significa, macehual, plebeyo, gente baja.
Lo mismo pasó en Sud-América y en todas partes del Nuevo Continente. El eminente filólogo boliviano, Juan Durand,
dice que el nombre de Cusco, antigua capital del Perú, no
es cusco, ni significa "ombligo", que es cosco o costio, que
expresa la idea de lugar ancho y llano, y agrega: que se
sabe que la capital primitiva del Perú, estaba en un llano;
pero que debido a las inundaciones se cambió a la falda de
una montaña con el mismo nombre.
En Michoacán tenemos un lugar que se llama Costio,
que significa ancho, amplio.
Dice el mismo filólogo boliviano, en su magnífica obra,
"Etimologías Perú-Bolivianas, que Perú debe ser pirhú, con
"r" muy suave, como la del phurhembe y que significa, "granero" . En nuestra lengua hay el verbo piyuni, que dice, desgranar..
En aimara hay el vocablo charama, que significa, "el
obstinado que nace de pie" traducción netamente capricho—11—
sa. En la lengua phurhembe tenemos charaku, nombre que
se dá al recién nacido o al último de la familia. Este nombre
se deriva del verbo charani. tronar, reventar, hacer explosión, por el concepto que tenían los primitivos michoacanos
de la vida, que es una explosión y que se desarrolla por
medio de explosiones como lo confirma W. W. Powel en su
obra "Los Orígenes de la Vida".
Podíamos seguir comparando las tres lenguas para establecer definitivamente el parentesco de ellas, pero creemos que con lo dicho basta para que no haya duda ninguna
sobre el común origen del phurhembe, del cámara y del quechua.
—12—
II
FORMACION DE LAS PALABRAS PHURHEMBES.
Lo que dicen los ilustrados que aún hablan phuhembe
es rigurosamente exacto, la lengua de Michoacán es pobre
en vocablos. Es cierto que la lengua phuhembe carece de
términos comó: existencia, esencia, substancia, infinito, etc.,
como tampoco tenemos para expresar:: telescopio, microbio,
socialismo, historia, gramática, y todos los vocablos científicos,- pero hay algo más, no tenemos palabras para decir:
cama, cuchillo, piso, pared y otros muchos nombres de uso
vulgar, por la sencilla razón de que el léxico de la lengua
phurhembe no está formado, se va formando en el momento
de hablar, agrupando elementos monosilábicos de significación propia, según el concepto que quiera expresar el que
habla; para unos la música es shamóghekua, lo que repercute; para otros kústakua, lo que suena. Para los de paracho
y en general para los serranos la canoa es chekakuo, de donde se sacan astillas o leña, para los de la región lacustre de
Pátzkuaro es icháruta, lo que está echado a la orilla del lago. Para los de Pamatácuaro, la cúspide se llama thirónteikua,
lo que toca al cielo y para los de Paracho es térúntsicua. la
llegada a la parte más alta, el término, el fin superior de una
cosa; pero unos y otros se entienden porque cada uno expresa un concepto que tiene de la cosa y el que oye sabe
lo que el que habla quiere decir..
No tenemos nombre que signifique mesa, un objeto; por—13—
que nosotros designamos funciones. Si la mesa sirve para
comer la llamamos, thirétankuaru, "aquello sobre que se come", de thireni, "comer"; tan, "permanente"; kua. "aquello
qüe sirve para" y ru. superficie, frente, fachada. Si la mesa
sirve para escribir la llamamos, kuirútankua¡ru, de kuiru, hacer rayas sinuosas, grabar, y los demás elementos que ya
conocemos, y así, por este orden, se van formando las palabras según la función que desempeñan las cosas..
Pero esto que pasa en la lengua phurhembe pasa en todas las lenguas, pues, por cada nuevo concepto que se tiene se inventa o se forma la palabra con sus propios elementos, en las lenguas primitivas, con elementos ajenos en las
lenguas derivadas, como la castellana. En esta lengua no había el nombre telescopio, porque no había este instrumento,
pero luego que se inventó se buscaron elementos necesarios
para designar las funciones del nuevo instrumento, tomándose del griego los que expresan la idea de ver a lo lejos,
a distancia, y se formó la palabra telescopio. En todos los
idiomas indoeuropeos se tiene cuidado de que su lectura
comprensiva sea de derecha a izquierda: skopáo, ver, examinar y tele, lejos. En español tenemos bene-factor, compuesto de bene, bienes, íac, de facere, hacer y tor que se traduce
por "el que": la traducción de derecha para izquierda es:
"el que hace bienes"., la traducción de izquierda para derecha no tiene sentido.
En Azteca, tenemos: Teotihuacán, "lugar de los que tienen el dios".. Los elementos componentes son: el enclítico
locativo can. "lugar de"; más partícula posesiva hua, "que
tienen"; más nexo eufónico ti; más el radical teotl, "dios".
En phurhembe tenemos: Tzinapécuaro; de derecha para
izquierda: ro, "lugar de o lugar donde"; kua., "lo que sirve
para";pe, "a ellos, a otros"; tzina, "curar, sanar". Traduciendo de derecha para izquierda: "lugar donde hay lo que sirve para a ellos curar. Ro, phurhembe es igual a can o pan.
—14—
azteca y r© u o, castellano, en raerendadero, asoleadero,
apeadero. En la lengua michoaoana algunas veces se suprime ia r, como en tzakapo, en vez de tzakápuro, lugar de la
piedra; huetamo, por uetamuro. Igual cosa pasa en español en algunas palabras, como en sanatorio, debiendo ser
sanctoriro. Traduciendo esta palabra de derecha para izquierda tenemos: ó por ro, "lugar de" o "lugar donde". Vimos arriba que tor, español se traduce por "el que"; la i es
eufónica y sana, sanar o curar.. Sanatorio, dice: "lugar donde hay el que cura o sana" o también "lugar en el que se
hace sanar".
Empleando el mismo mecanismo de formación, podemos
construir, en phurhembe, el nombre que signifique telescopio o cualquiera otro, Scopio o skopein, es lo mismo que esheni, ver, examinar, en phurhembe y tele, igual a yauani. Juntando los dos elementos del phurhembe, formamos la palabra yauanshekua o yauansherakua. La construcción del phurhembe exige la terminación kua para formar un nombre sutantivo, que significa, como ya vimos, "lo que sirve para".
En phurhembe, lo mismo que en español y en todos los
idiomas indoeuropeos, al formar una palabra compuesta se
suprimen, al principio o al fin, algunas letras o se cambian;
pero en nuestra lengua no tenemos necesidad de recurrir a
dos palabras para formar una. Nos basta recurrir a los elementos simples de que disponemos. Tenemos dos palabras
que significan mirar: Erani, es mirar cerca como en un espejo, de hito en hito y eroni, mirar lejos, a distancia. A este
último verbo le agregamos una partícula de la misma lengua, para significar instrumento o "lo que sirve para". Pu,
dice, instrumento y kua, que ya conocemos, dice, "lo que
sirve para". Podemos decir, eropu o erokua; pero en la lengua phurhembe debemos expresar si la acción es intencionada o incidental. Como el acto de ver en un telescopio a lo
lejos siempre es intencionado tenemos que intercalar la síla—15—
ba te, por ra o re que hace transitivos los verbos neutros o intencionados los verbos transitivos. Por ejemplo khuini, dice
simplemente dormir, pero khui-ra-ni, dice dormirlo o dormir a
otro; thireni, dice, comer, thiré-ra-ni, dar de comer o hacer que
coma. Cuando en la raíz verbal hay una sílaba con r, entonces en vez de r, se pone t. Uerani, llorar; hacer llorar, se
diría, uerárani; pero como en phurhembe se evitan estas cacofonías, se dice, uetárani; así en eropu o erokua, tenemos
que intercalar la sílaba te, más una n, para indicar que la
función es permanente, y formamos erótenpu, instrumento
para ver a lo lejos u erotenkua, "lo que sirve para ver a lo
lejos".
Estamos viendo que tanto en español como en phurhembe, para la construcción de las palabras, se siguieron las
mismas leyes, y que muchos fonemas tienen la misma significación en ambos idiomas. Con estos antecedentes podemos
aventurarnos a la formación de palabras de orden moral o
metafísico, si conseguimos interpretar el sentido verdadero
de las palabras españolas, penetrando su sentido oculto o
sea la significación que tienen cada uno de los fonemas de
que consta la palabra..
Por ejemplo: existencia, se compone del prefijo ex. que
dice, salir o fuera; is, del verbo ser, que indica estado; te, lo
inmóvil en la amplitud; la n, dice, permanente, continuado,
y la termincaión cia, que significa, acción presente, habitual.
Existencia, por sus elementos y traduciendo de derecha a izquierda, dice, acción habitual y continuada de la inmóvil que
sale afuera", o de otro modo: "lo que sale de lo inmóvil para ser de una manera continuada". Lo inmóvil no existe, por
eso decimos en otro estudio: "Hay Dios, pero Dios no existe".
Dios es lo inmóvil, lo que no se transforma, ni evoluciona, ni
nace, ni muere; que no tiene principio ni fin. Esto es lo qué
significa dios o sea theos.
Ahora bien, si conocemos los elementos de que se com—16—
pone el sustantivo existencia, podemos sustituir estos elementos castellanos por sus equivalentes phurhembes y tenemo
desde luego; ué, dice, salir, fuera, como ué-me-ni, salir de]
agua; el verbo ser se expresa en phurhembe por ni, contracción de eni, ser o estar, igual a esse latino o a eimi, griego;
así es que las sílabas exis se expresa en phurhembe por uéni.
El fonema te, tiene el mismo sentido en español y en phurhembe, dice, inmóvil. La n, en una y otra lengua dice continuado, habitual, repetición, y por último, la terminación cia
se expresa en phurhembe por kua y de esta manera formamos el nombre uénitenkua; pero cuando la repetición es rítmica, como la salida de los trenes, entonces, agregamos después de la n una s y decimos: uénitenskua, que dice exactamente lo mismo que existenciaSubstancia, el único elemento nuevo que tenemos en este palabra, es sub, que dice abajo o debajo y su equivalente en phurhembe es ke, como en ké-ize-ni, bajar a tiera; keme-ni bajar al agua. La s es contracción de is, que precede
a la t en algunas palabras indoeuropeas
como standard,
stan, star y que en español se convierte en es, así es que
substancia puede decirse en phurhembe kénitenskua, o sea
lo que permanece inmóvil abajo o lo que está inmóvil abajo.
Ya dijimos en otra parte que en phurhembe, lo mismo
que en todas las lenguas primitivas las palabras no expresan ideas extáticas, sino dinámicas, todas expresan una función, un movimiento, así por ejemplo: éxodo, no dice, fuera
del camino, sino salir al camino. Los vocablos expresan lo
que hace la cosa o aquello para lo que sirve; así el nombre
dios tiene que expresar una función, un estado. Dios dé theos
está formado de los siguientes elementos de t, que en todas
las lenguas indoeuropeas dice, inmóvil, fijo, eterno; la h espirada, dice, en phurhembe, inmaterial. De pañi, llevar, portar, formamos phani, tocar con suavidad, como una caricia,
de la raíz pha se forma el nombre phámzkuaro lugar de amor.
—17—
lugar de caricia; la e, en las lenguas indoeuropeas, así como en phurhembe indica movimiento de dentro a afuera,
extensión, como, ver, emerger, expresar, expulsar, etc.; en
phurhembe: esheni. ver; eshani, enviar; eshérani, enseñar, etc.
la o dice lo contrario de la e, movimiento de fuera a dentro,
como ocultar, omitir, occiso, ocaso, etc.; en phurhembe: óhkuni,
estorbar; óhchakurani, tapar, ocultar; óghani, encerrar ópatani
cerras los ojos; ógharini, taparse la cara, por último, la s de
salir, de simiento, de surco, de saber, de sentir, de soñar, de
sol, etc.; lleva el sentido de emanar, fuente de donde salen
las cosas. En phurhembe tiene un sentido distinto la s, en,
fiani, poco; sesi. bien; sondi, un rato; sutupu, morral, etc., La
s después de la n dice repetición habitual, continuada, en
phurhembe, por consiguiente tenemos que buscar en esta
lengua un fonema que tenga el mismo sentido que la s en
español y este fonema es la sílaba ué que dice salir, emanar, emerger; pues la u, tanto en phurhembe como en las
lenguas indoeuropeas significa abajo, debajo, movimiento
de arriba a abajo, centro, interior y la e al contrario lo exterior; movimiento del centro a la superficie, al exterior, por
consiguiente ué, dice, salir, emanar, emerger, movimiento de
abajo para la extensión, para el espacio. El nombre dios de
theos está expresado en phurhembe por theo, como en azteca:
pero cada lengua tiene sus terminaciones propias, en mexicano esta terminación Ü, para formar el vocablo teoti, que significa dios; sin embargo, el vocablo azteca no expresa la
idea fundamental, de fuente, de causa, de origen que expresa la s indeouropea y que en phurhembe las sustituimos
por el fonema ué,. formando de este modo el nombre theoué
más la terminación propia de la lengua kua, para construir
el nombre completo: theouékua, "lo que sirve para hacer salir, emanar de lo desconocido al espacio, a la extensión de
lo inmóvil o de otro modo, lo inmóvil, e inmaterial, lo eterno
que ocupa todo el espacio infinito, desconcido para nos—18—
otros, pero de donde emanán todas las cosas.
Pero los michoacanos, que fundaron la lengua phurhembe, no tenían el mismo concepto de la divinidad, del Ser
Supremo, no lo concebían inmóvil, aunque sí como fuente
de las cosas, como supremo hacedor, lo cual está expresado
en el nombre kuricaúeri, que significa: "el que ordena que
se haga el fuego". El dios de los primitivos michoacanos no
era el fuego, el sol; ni el que hace el fuego, sino el que ordena que se haga el fuego, las cosas, para los primitivos michoacanos su dios era la suprema voluntad y concebían el
universo como una trilogía, la suprema voluntad que ordena;
las fuerzas de la naturaleza a quienes se les ordena y el
fuego o sean las cosas como producto del cumplimiento de
la orden.
Pusimos el ejemplo del nombre theouékua, para demostrar que sí se pueden formar en phurhembe vocablos con
la misma significación que los nombres españoles.
Si le preguntamos a un indígena michoacano como se
dice en phurhembe, "naturaleza", ilustrado o ignorante,
contestará que no hay en esta lengua ninguna palabra equivalente en su significado; pero si examinamos el nombre naturaleza por sus elementos fonémicos encontraremos que este nombre significa lo mismo que el phurhembe kueráhpiri q
kueráhpiri, "lo que o la que lleva para arriba lo que pare y
cría, lo que produce"..
Entre los actuales michoacanos indígenas es muy frecuente oírlos discutir sobre si se dice, kueráhpiri, con a o kueróhpiri y es que ignoran el sentido de la a y el de la o. La a
dá al verbo un sentido general, sin expresar número y la o
indica plural. Tenemos el verbo, pañi, llevar en general y
poní, dice llevarlos. Kuaráhpiri dice, criar en general y kueróhpiri, dice, criarlos..
Como se ve hay en la lengua vocablos de sentido moral
o metafísico; pero aun cuando no los hubiera se forman se—19—
gún el concepto que tenga de las cosas quien habla, con la
seguridad de que el que escucha entiende bien üo que se le
dice, porque conoce el sentido de los fonemas de la lengua
phurhembe.
Como se ve la lengua phurhembe no es tan pobre como creen los indígenas ilustrados que aun hablan nuestra
lengua.
—20—
ni
¿DE DONDE VIENEN LOS PRIMITIVOS MICHOACANOS?
Uno de los fines de, la filología comparada es conocer el
origen de las razas y pueblos..
Sin tomar en cuenta la lengua phurhembe la RELACION
DE MICHOACAN y con ella casi todos los historiadores españoles y criollos afirman que Michoacán fué poblado por
tribus aztecas; pero, como dijimos en artículo anterior, don
Francisco Pimentel refutó con éxito esta afirmación y probó
hasta la evidencia, comparando las lenguas de Anáhuac con
el phurhembe que no era posible que una misma raza hablara lenguas tan diferentes.
El Padre Durán quien fué copiado por el Padre Acosta,
para curar la anomalía que resulta de que una misma raza
hablara lenguas tan diferentes inventó la fábula de que los
aztecas que se quedaron en Michoacán crearon, por enojo
con sus compañeros, una lengua propia para su uso especial y a fin de que no los tuvieran como mexicanos.
Esta es la fábula absurda que refuta el señor Pimentel..
Más tarde el señor Lic. don Eduardo Ruiz, sabiendo que
las lenguas habladas en el Perú son muy semejantes a la
que se habla en Michoacán y que la organización políticasocial, las costumbres, la religiión y el régimen agrícola son
tan parecidos a los de los indígenas michoacanos, apreciación que confirma el señor Benjamín Carreón en su obra titulada "Atahualpa", el señor Lic. Ruiz, forja la leyenda de
—21—
que los michoacanos vinieron del Perú, y nada menos que
de los incas..
Hay en la leyenda del señor Lic. Ruiz muchos errores
históricos y de inierpretación de nombres, pero como él mismo dice, no se trata de una historia verdadera, sino de una
leyenda que tiene mucho d e fantasía.
El indigne historiador Prof. Jesús Romero Flores, también,
en su leyenda, trae a los primitivos michoacanos del Sur y
los distribuye en distintos puntos del ahora Estado de Michoacán.
Hasta aquí no ha habido más que leyendas sobre el origen de los michoacanos, leyendas ajenas por completo a la
arqueología y a la filología comparada.
La arqueología fué la primera que estableció la antigüedad remotísima de los primitivos michoacanos, establecidos en Anáhuac muchísimos años o tal vez siglos, antes
que vinieran del Norte las ordas salvajes conocidos por nahoas.
El señor Lic. Andrés Molina Enriquez, eminente etnólogo mexicano, después de haber visto el informe de los señores profesores Mena, Aguirre y Palacios, dice: "El hecho
de que todas las clasificaciones de referencia consideren el
tarasco (phurhembe) como un idioma cabal concuerda con
la antigüedad que le atribuyen los estudios de Chipícuaro".
(La Revolución Agraria en México, pág. 59).
En la página 49 de la misma obra, el señor Lic. Molina
Enriquez dice:
"LOS RASGOS ASIATICOS DE LAS FIGURAS DE CHUPICUARO".—En el informe de los señores profesores Mena
y Aguirre se asientan como conclusiones precisas la de qu»
los objetos estudiados corresponden a la cultura más antigua que se ha encontrado en el territorio nacional; la de qu®
esa cultura es la tarasca o tarascana, como ellos la llaman,
y la de que la misma cultura es de tipo mongolóíde. Los pá—22—
rrafos relativos dicen textualmente así: "Semejante circunstancia, la morfología y la decoración de la cerámica recogida, su identidad con la tarascana bien definida en colecciones del Museo Nacional, fundan el aserto de que la nueva
zona arqueológica (la de Chupícuaro, Estado de Guanajuato), pertenecen a la Cultura Tarascana. Estudios estatigráficos desde 1821 a la fecha, establecen que el tipo arqueológico de piezas, aun en los antropomorfas, el más antiguo, el
de más abajo, puesto que después de su yacimiento ya no se
encuentra sino suelo geológico, es el Tarascano, como el de
Chupícuaro, como el del Pedregal del Valle de México, como el de toda costa del Pacífico en las Américas
".
Los hallazgos arqueológicos del pedregal de San Angel
o sea del Valle d e México y que los arqueólogos llaman tarascónos, son las encontradas debajo de las capas formadas
por las erupciones volcánicas, es decir, esos hallazgos pertenecen a una época anterior a la formación del Ajusco,
por ejemplo..
En el Museo Michoacano existen dos mazorcas carbonizadas y petrificadas, las que fueron encontradas al pie de
la Montaña de Quinceo, lo cual significa, en nuestro concepto, que antes de formarse dicha montaña, el Valle de Uayángareo estaba poblado por agricultores y estos pertenecieron los restos arqueológicos llamados tarascanos..
El mencionado filólogo Juan Durand, al hablar del origen de los americanos, sienta la tesis de que los primitivos
pobladores de este continente fueron autóctonos, que en los
primeros tiempos fueron y vinieron de Norte a Sur y de Sur
a Norte, que más tarde hubo invasiones nórdicas, por el Sur
y por el Occidente.
Parece que los incas que arribaron a la región peruana»
por el siglo décimo de nuestra era, muchísimos años después
del apogeo de Tihuanacu, llegaron del Sur, procedentes d e
un naufragio, tal vez, el de la Atlántida, según lo indican loa
—23—
nombres de los fundadores del imperio del Perú, nombres
muy adulterados y de significación phurhembe.
Según los estudios que se han hecho de la cultura de
Tihuanacu, esta cultura floreció antes de la formación de
los Andes, como lo prueba el hecho de que la mitad de la
población de Tihuanacu quedó en la cima de la cordillera.
Los arqueólogos e historiadores de Tihuanacu juzgan a
los incas como usurpadores de una cultura que ellos no fueron capaces de crear, es decir, se apropiaron de la cultura
de Tihuanacu y la desvirtuaron. Algo parecido pasó en México, con nuestro Itzcóatl, que se apropió para los aztecas,
todos los códices que encontró en los pueblos conquistados..
El calendario conocido por "Azteca" es un documento
que los mexicanos no entendieron..
El Obispo de Cuernavaca, don Francisco Planearte y Navarrete, en su gran obra "Tamahchuan", establece que dicho calendario fué obra de los ulmecas, que llegaron , del
Oriente, tal vez de la Atlántida o de países europeos, quienes traían los elementos necesarios para formar calendarios,
de acuerdo con la posición cosmográfica de los pueblos..
Dice el mismo Obispo de Cuernavaca, que para formar
un calendario como el llamado "Azteca" se necesitan cuando menos 10,000 años de observaciones desde un solo punto de la tierra y no hace ni tres mil años que los Náhuas llegaron al Continente Americano, en un estado completo de
ignorancia y más los aztecas, que estaban considerados por
los mismos Náhuas como los más atrasados.
Si nos fijamos en la numeración azteca encontraremos
«que cinco se dice de dos modos, macuilli y chaco o chicua;
pues, seis se dice: chicuaze, en vez de macuilze; siete, chicóme en vez de maicuilme o macuilome. En cien o sean cinco
veintes volvemos a encontrar el macuilli, propio de la lengua,
en macuilpoualli, de macuilli, cinco y pouaili, veinte. El chico
o chicua, no es de morfología azteca, es un préstamo de otra
—24—
lengua y así está formado el idioma Náhua, de préstamos
de otras lenguas, principalmente de la phurhembe.
No fueron, pues, los conquistadores náhuas o incas los
creadores de la cultura de América, fueron los pueblos establecidos desde antes de la formación de las grandes montañas, entre ellos, sin duda, los primitivos michoacanos, como lo prueban la arqueología y la perfección de su lengua.
A las muchas coincidencias encontradas entre los pueblos de Sud-América y el micnoacano, tenemos que egregar
la coincidencia de la época de las grandes culturas, de antes del levantamiento de los Andes y de la formación de las
grandes montañas..
Si la cultura tarasca se extendía por todo el Valle de
México y por toda la costa del Pacífico y si encontramos nombres de montañas, ríos, lagos, lugares y hasta de personas,
de morfología phurhembe, aimctra, quechua y guarani desd e Sitialoa, en más abundancia desde Venezuela hasta Argentina y Chile, tenemos que convenir con el filólogo Juan
Durand en que hace miles de años, tal vez desde principios
de la época cuaternaria existió una raza que ocupaba el territorio comprendido desde el río Bravo hasta la Patagonia,
y sin duda que también en las islas del Atlántico, ya que en
Cuba, sobre todo, encontramos palabras de morfología phurhemb, como yaraguana, cuyaguateio, asiguanabo, hicocos,
marati, maraguata ,guanacayabo, caraguay etc.; que más
tarde, hará unos tres mil años, vinieron invasores de Occidente, según el Lic. Molina Enriquez; del Norte, por el estrecho de Berhing, según los antropólogos y por el Oriente, según el obispo Planearte y Navarrete.
Según tradiciones sudamericanas, los incas que se establecieron en la región peruana, vinieron del Sur.
Las razas que vinieron del Norte y tal vez, de Oriente,
desplazaron a los autóctonos y ocuparon el territorio llamado
Anáhuac, extendiéndose hasta cerca de Venezuela, quedan—25—
do como islote de la raza primitiva el territorio de Michoacán
o sea lo que comprende la cultura occidental, la cultura arcaica o tarascana.
Todo lo que se h a dicho respecto al origen del hombre
americano ha sido sin conocer las lenguas nativas que se hablan en este continente, sin haber hecho un estudio filológico
de ellas, comparándolas con las lenguas indoeuropeas, asiáticas o africanas y sin tomar en consideración la existencia
de la Atlántida.
La conclusión a que llega el Dr. Atl de que la presencia
de dos vocablos náhuatl en una tradición tan antigua como
lo de Sais, obliga a suponer que los náhuatl estuvieron en
alguna tierra al Oeste de las costas iberoafricanas o en la isla d e la leyenda platónica puesto que le dieron el nombre
en su lengua", es una conclusión muy propia del Dr. Atl, porque si el origen de los nombres fuera el origen de las razas,
Michoacán, que es nombre azteca, designaría una raza azteca; además dos palabras no bastan para establecer la
identidad de dos lenguas, es necesario comparar la morfología de estas lenguas.
De la misma manera la afirmación d e don Alfredo Chavero, en el primer tomo de "México a través de los Siglos",
de que: "en la antigüedad no había en Anáhuac lenguas de
flexión", es una afirmación caprichosa, que denuncia la ignorancia completa de las lenguas nativas de este continente, pues, ya hemos dicho que el phurhembe es tanto o más
flexivo que el sánscrito.
También es caprichosa, del mismo Chavero, la afirmación, en la misma obra, de que los náhuas de origen atlante
siguieron la costa del Pacífico, llegando hasta el Perú, en cuya raza inca encontramos parentesco con los nahoas..
Esta afirmación está en contradicción con lo dicho por los
arqueólogos Mena, Aguire y Palacios; está en contradicción
con la desemejanza de las lenguas aimara-quechua y el ná—26—
huatl y está en contradicción con las tradiciones peruanas,
que refieren la llegada por el Sur, en el siglo X, de un grupo
de náufragos que conquistaron aquella región, donde había
establecida una raza desde unos 15,000 o 20,000 años antes.
Como vimos en artículo anterior, la morfología de las lenguas aimara y quechua y la de las lenguas nahoas son muy
diferentes y siendo el mismo caso que con el phurhembe y
el azteca, podemos afirmar que no había ni hay ningún parentezco entre peruanos y náhuas.
Ahora bien, los españoles que escribieron las historias
de Michoacán, con informes de los mexicanos, dijeron que
los michoacanos eran de origen azteca, el señor Francisco
Pimentel probó que esto no era posible, por la gran diferencia que hay entre las lenguas phurhembe y azteca; después
el señor Lic. Ruíz hace venir a los michoacanos del Perú, haciendo lo mismo el insigne historiador Prof. Jesús Romero Flores; el señor Lic. Molina Enriquez, en vista de los hallazgos
arqueológicos de Chipícuaro y de acuerdo con sus teorías
sobre el encuentro de dos culturas opuestas, hace venir a los
michoacanos del Asia.
Repetimos que este maremágnum de opiniones contradictorias obedece a la ignorancia de la lengua phurhembe.
La opinión que puede acercarse más a la verdad es la del
señor Lic. Eduardo Ruiz, pero faltan datos para afirmar que
los michoacanos vinieron del Sur, porque puede haber sido
al contrario que de Michoacán hayan ido al Perú, empujados por las invasiones nórdicas; pero nada de esto es seguro.
En el artículo siguiente vamos a empezar a ver que el
phurhembe puede considerarse como lengua indoeuropea, y
como dos cosas iguales a una tercera son iguales entre sí,
resulta que también el aimura, el quechua y el guaraní son
lenguas indoeuropeas, planteándose nuevamente el problema sobre el origen de los americanos en general y de los
michoacanos en particular..
—27—
IV
ESTUDIOS COMPARATIVOS.
Hemos hecho referencia del guaraní como una de las
lenguas americanas que tiene morfología indoeuropea, sin
haberla comparado con el phurhembe, lo cual no hemos hecho porque no hemos tenido en nuestras manos ninguna obra
en guaraní, pero el mismo nombre uarani, es de morfología
phurhembe y significa "bailqr" en esta lengua; sin embargo,
no es esto lo que nos ha hecho decir que la lengua uarani
es también indoeuropea, sino la comparación que hace el
Dr. Benjamín Solari entre dicha lengua y el griego, con el
nombre de concernencias, como se ve en seguida:
"CONCERNENCIAS ENTRE EL GUARANI Y EL GRIEGO"
Guaraní
Angaíté
Añeté
Amó
Anhó
Anguyác
Ayuh
Aó
Aó-mí
Boyá
Bubuné
Griego
afección
agapé
cierto
alethés
allá, lejos
apó
suspiro
anía
ratón
urax
vuelvo
aú
actos
ropa
ennumí
ropita
alimento
borá
levadura, fermento buné
—28—
afección
cierto
lejos de
tristeza
ratón
de vuelta
bellón de lana
vestir
alimento
levadura
Caneó
cansancio
quemar
Cai (n-)
planta
Caá
derramar
Eighó
Eñemí
escóndete (ñemí)
Eyocó
impide, ataja tu
dile
Eré
andar
Icó
Yg-é
secar, escurrir
Manó
morir
Heíro
en hablando
amargo
Ró
Tembé
borde, labio
Tecó
ser, manera de s
tener
Recó
carácter
Tecó
volver, venir
U
curvo, recodo
Ughó
hacer
Yapó
carne
Soó
Soó
Etc., etc., etc.
anía
tristeza
kaio
quemar
a
planta
eibó
derramar
endiemí
perseguir
impedir
erucó
eró
hablar
venir
ikó
secar
auó
matar
kainó
eíro
hablar
amargo
pik-rós
borde elevado
ambé
escó
ser
eekhó
tener
ethós
carácter
aú
de vuelta
ubós
curvo
draó
hacer
soós
sano
zoon
animal
Etc., etc., etc.
(Dr. Benjamín Solari) ("Ensayo de Filología), págs. 7, 8 y 13).
Notemos desde luego, en los vocablos guaraníes, insertos antes, la ausencia completa de la "1" y de la combinación "ti" qué tanto abunda en el mexicano; así mismo se
nota que no hay sílabas compuestas y que las palabras
se forman por sílabas simples, morfología muy propia del
indoeuropeo como del phurhembe..
Tanto en el cámara como en el guaraní se ve la presencia de la combinación "mb", propia también del indoeuropeo y del phurhembe.
Respecto a las gráficas del alfabeto conocido por fenicio, se ha dicho mucho que es de origen maia o maya; de
—29—
una manera concreta dice Rodríguez Gavilán: "El mismo alfabeto maia, adaptado a las formas cursivas reclamadas para facilitar la escritura manual sobre papyrus, se llamó después "Alfabeto demótico" o "kopto", mucho más tarde, casi en nuestros días, fué adoptado por los comerciantes fenicios que lo divulgaron en todas las factorías del mediterráneo. Esta divulgación constituye sin duda un mérito, pero el
honor de la invención corresponde exclusivamente a América".
"La barbarie de los conquistadores españoles y el fanatismo de los sacerdotes que trajeron los indujo a quemar
los libros de las bibliotecas de América, salvo las inscripciones grabadas sobre algunos monumentos que, por ser de
granito no pudieron quemar, y que, a pesar de haberlos
martillado en muchos casos, y derribado siempre, comienzan a ser estudiados por sabios como el Dr. Leplongeon, tantas veces citado por mí en el estudio del alfabeto maia".
"El más antiguo alfabeto empleado en América, de que
yo tengo noticia, es el llamado Khelkatha usado desde remofas edades por Airamara de la altiplanicie andina y conservado hasta hoy por los indígenas de Sampaya, isla de Kosti o Go, ati-alta Luna del Lago llamado vulgarmente Titicaca".
"Decimos esto al solo objeto de demostrar que los fenicios no pudieron ser inventores de letras, que usaban millares de años antes de su aparición en el comercio del Mediterráneo; confirmando así nuestra aseveración de que, tanto los Hebreos como los Fenicios fueron meros copistas de
los Ekitu o Egipcios quienes anteriormente recibieron el Alfabeto Fonético inventado en América por los Maias de Yucatán.
Que los Ekitu no inventaron el actual Alfabeto Fonético
sino que lo recibieron de otro pueblo, era opinión admitlaa
entre los sabios europeos del siglo XVIII". (V. Rech, sur les
Amér. T. II. pág. 206, Berlin 1770)..
Tomado de "AMERICA LEVANTATE".
—30—
Es muy posible que las grafias que usamos en nuestra
escritura sean de origen maya y que hayan pasado los hechos como lo dice Rodríguez Gavilán que dichas grafías, inventadas por los mayas hayan pasado a Egipto y de éste a
•los fenicios que las divulgaron por el Mediterráneo, de donde las tomaron los pueblos europeos y que los españoles nos
las devolvieran a América; pero la morfología de la lengua
maya en nada se parece a la morfología de las lenguas europeas, como lo vamos a ver en seguida, y las grafias deben corresponder a los sonidos, es decir, a la fonética de la
lengua. El maya tiene sonidos que no tienen las lenguas europeas, lo que quiere decir que fué necesario inventar las
grafias necesarias que representaran los sonidos especiales
de aquellas lenguas.
Maya
quet
queel
quib
cuuc
chho
chhic
chhuhuc
chhom
hool
hokol
hona
hekab
helaan
hebix
kabet
kohaan
koox
ppac
ppocc
igual
frío
vela
codo
rata
pulga
dulce
zopilotecabeza
salir
puerta
abierto
diferente
como
necesario
enfermo
arisco
tomate
sombrero
—31—
ppoan
ppuluut
ttan
tteett
lavado
incienso
hablar
cadera
conejo
ttUU'l
Etc., etc., etc.
La ortografía de las palabras mayas es la adoptada
por el profesor Santiago Pacheco Cruz, tratando de adaptar las grafías usadas en español para tener una pronunciación aproximada al maya, y según dice el mismo profesor Pacheco Cruz la escritura ideográfica, figurativa y
simbólica, es la que usaban los mayas y de hecho en los
momentos que nos dejaron los mayab no se encuentra ningún signo parecido a los que usamos en español.
A primera vista aparece la tendencia monosilábica de
la lengua maya, ya que vaya entrando el aglutinamiento
o bien que vaya llegando el monosilabismo como el inglés,
pero la lengua yucateea no tiene ningún parecido con las
indoeuropeas, ni en su morfología ni en su semántica.
La morfología del zapoteco también difiere de la morfología del indoeuropeo y sin embargo, la mitología, las
ideas cosmogónicas, las ideas religiosas, el concepto del
universo y del más allá son casi idénticos entre zapotecos
y europeos..
Al estudiar el Dr. Blas Pablo Reko la botánica zapoteca encontró que los nombres de las plantas fueron aplicados con la misma mentalidad que los nombres de las plantas europeas. Textualmente dice el doctor Reko: "Así como
en Grecia y Roma dieron a las flores nombres de dioses,
del Sol, de la Luna, y de otros astros, como Heliotropium,.
Lunaria, Mercurialis, Centaurea, Artemisa, etc., así los antiguos habitantes de México, dedicaron sus plantas a diversas deidades, pero lo que sorprende es que estos nom-32-
bres concuerdan en muchos casos con los del mundo viejo y que los mitos asociados con ellos sean idénticos a los
dos hemisferios".
Compara el doctor Reko muchos nombres mitológicos
de los idiomas azteca, zapoteco y maya con otros nombres
de los idiomas europeos que tienen el mismo significado.
Dice más adelante el doctor Reko: "Otro paralelismo
sorprendente se refiere a los nombres míticos de la encina
en alemán y zapoteco. Del mismo modo como en la mitología nórdica la encina se llamaba Thonar-Eiche (Encino
del trueno) y estaba consagrado a Wotan, supremo dios
en el reino de los muertos, así en zapoteco se llama yaga
xoo (árbol del trueno)
" y termina diciendo: "Todo esto no puede ser una simple coincidencia, sino comprobación defintiva de un origen común de la mitología, pues,
casos como los citados no tienen límite en el estudio de
esta nueva ciencia".
Después de e§ta disgresión volveremos a nuestra comparación del phurhembe con las lenguas indoeuropeas, empezando por el verbo ser..
El verbo ser en phurhembe es eni, en latín esse, en griego eimi. La radical de estas tres formas del verbo ser en las
tres lenguas mencionadas, es la e, transformación de la a
sánscrita. La e del phurhembe, del griego y del latín recibe
las desinencias propias de la conjugación de cada lengua,
como se puede ver en seguida:
Español
soy
eres
es
somos
sois
son
Phurhembe
eska
eskariesti
eskachi
éskatsi
estix
Latí1?
e-sum
es
est
e-sumus
esíis
e-sunt
—33—
Griego
eimi
ei
esti
esmen
este
eisi
Sánscrito
asmi
asi
asti
asmas
asea
asante
El hecho de que el latín haya perdido la e radical en
algunas personas, indica que fué más evolucionado que el
sánscrito, que el griego y que el phurhembe; lo mismo podemos decir del español. Tal parece que el phurhembe y
el español tienen más parentezco que el phurhembe y el
azteca, maya o zapoteco, con la circunstancia favorable para el phurhembe que el sentido de su fonemas es más constante, lo que no pasa en español por haberse formado de
varias lenguas.
1/3 terminación "ro" en muchas palabras españolas tiene el mismo sentido que en phurhembe, "lugar de", "lugar
donde", "sitio en que", "sitio en donde". Por ejemplo tenemos en castellano, "merendero" lugar donde se merienda;
'apeadero", sitio en que se apea; "basurero", lugar donde
hay basura; "agostadero", campo donde se agosta; "embarcadero, lavadero", etc. En castellano la terminación "ro"
tiene otros significados; en cambio, en phurhembe, es constante su sentido de 'lugar de", "lugar donde", como en yuréeacaro, lugar donde pasa un río o sea yurékua (río, corriente de agua, cresciente); tzinapécuaro, lugar donde se sana
o cura o sea, lugar donde hay lo que sana o cura, es decir,
tzmápecua (medicina, medicamento). Algunas veces la terminación 'ro", phurhembe, se contrae en "o", como en tzacapo, en vez de tzacápuro, lugar donde hay tzacapu, piedra
o piedras; uetamo, en vez de uetámaro, lugar donde se pasa de salida, al camino. En aimara, la terminación "ro" algunas veces se cambia en "io" o en "yo", como en putumayo, por putúmaro; vilcamayo, por uicámaro o uecámaro.
La terminación ti, phurhembe, equivale a las terminaciones castellanas, ante, tor, dor y a sus femeninas, como,
phámscati, am-ante, kuirue-ti, escribi-ente; sesu-ti, benefactor; pharákupe-ti, torce-dor, el que tuerce o envuelve.
De la misma manera las terminaciones phurhembes ta
y nda, equivalen a las latinas del participio pasado tus, ta,
—34—
tum, o a las españolas to, do y cho y sus femeninos, como julca-ta, puesto; o ponido; tratándose de vestidos; óchakat-a,
oculto u ocultado, encerrado; áka-ta, comido; kuri-nda, por
kuri-ta; kuríka-ta, quemado, es el nombre del pan; charanda, enrojecido o tronado; úka-ta, hecho o terminado de hacer.
Tenemos en phurhembe otros vocablos terminados en
nda, que no corresponden exactamente a los participios pasados latinos o castellanos pero que en phurhembe sí lo son,
como, khuman-da, que significa sombra, del verbo khumani,
dar sombra o sombrear; khumcmda, literalmente dice, sombreado.
Tenemos otras correlaciones o concernencias, como dice
«1 Dr. Solan, entre el phurhembe y el griego y el latín, como
pir o pur luego e n griego,. El fuego se llama en phurhembe
cfapiri por chupiri; al rayo se le llama ssiírpiri, y al relámpago
se le nombra pbitakua, del verbo piritani, relampaguear.
Tenemos en phurhembe el verbo ekuátani, que significa igualar, emparejar dos cosas con el mismo sentido de ecuación,
equidad, igualdad, equinocio, equidistante, equilibrio, etc.
Él azteoatl coate o cuate, por gemelo, es de origen phurhembe.
En esta lengua del fonema pur, se forma el verbo puruani, hervir y el nombre puru, calabaza, que significa tanto
como ampolleta, burbuja, que está relacionado con el español puruficar o púrpura, color de fuego.
De mán, que significa inteligencia en sánscrito, se cambió en men, en latín y en min, en phurhembe, de donde se
formaron todos los verbos y nombres que significan una
operación mental, como: mítem, conocer; mimini, saber; mimishe, el sabio; míonskua, la memoria; mióntani, recordar;
muyuni, contar números; miuni, conocer un lugar, etc.
Mítani, dice, abrir, o sea conocer lo que hay dentro y
m&ani, cerrar; la sílaba ka invierte el sentido de la raíz.
Se ha dicho que el phurhembe como el latín carece de
—35—
artículo, lo cual no es exacto, lo que pasa es que el artículo
o mejor dicho la partícula que hace funciones de artículo v a
después del nombre. Señor se dice, dchá, uari, significa señora o mujer; el señor se dice, achati y la señora, uairti.
La declinación del phurhembe se hace como en latín por
medio de terminaciones, por ejemplo:
Nom. achati
Gen. acháti-ri
Dat. acháti-ni
ÁCus. acháti-ni
Voc. achá
Abla. acháti-ni jinguni
al señor
del señor
a o para el señor
al señor
señor
con el señor
No hay más que una declinación cuyo modelo es la anterior. También sólo tiene un modelo de conjugación, con
la tendencia de regularizarse.
La voz pasiva no se forma como en español con el verbo ser, sino con la partícula gha» intercalada entre la raíz
verbal y la terminación, como pañi, llevar; pá-gha-nL ser llevado; paahka, llevo; pá-gha-ahka, soy llevado, con la misma
estructura que la voz pasiva del sánscrito.
Podemos incorporar los pronombres phurhembes a la
familia indoeuropea o a los romances como se ve en seguida:
Primera persona
Sánscrito
griego
latín
gótico
islandés
hitita
phurhembe.
aham
egos
ego
\
LT
ek
uk
ii
Singular
español
francés
rumano
italiano
provenzal
portugués
phurhembe
—36—
ye
i~
eu
io
eu
eu
j'
)
Segunda persona
Latín
dórico
homérico
ático
phurhembe
tu
tu
tunee
su
thu
Singular
Español
francés
italiano
rumano
phurhembe
tu
tu
tu
tu
thu
Tercera Persona
Singular
Español
portugués
italiano
francés
rumano
phurhembe
él, ella
elle, ella
egli, ella
il elle
el ia
imá para los dos géneros
En phurhembe, el plural de los pronombres personales
se forma con el singular y la terminación cha, que es signo
.de plural y también significa usted, ustedes.
Antiguamente, y así se ve en la gramática de Basalenque los pronombres eran: fichá, nosotros, en vez de ju-chá;
thu-cha, vosotros, en vez de cha; ima-cha, por ime-cha. ellos
o aquellos.
Los pronombres demostrativos son i, este, esta; indé, ese
esa; imá, aquel, aquella; plural: icha, estos, estas; indecha,
esos, esas; imecha, aquellos, aquellas. La otra forma del plural de la tercera persona es imax, ellos, ellas, aquellos, aquellas.
Como los fonemas de que se componen las palabras de la
lengua phurhembe tienen el mismo significado que los que
forman los vocablos de las lenguas indoeuropeas, hay muchos términos semejantes entre aquella lengua y estas, por
ejemplo:
—37—
Phurhernb®
Karámani
pátani
kúskani
kuroni
kuani
kurámareni
Significado
SuBIr una cuesta
apagar
sonar, música
oír
griego akuo
cuidar
preguntar
Español
Encaramar
apagar
acústica
yo oigo
cuidar
cuestionario
En latín tenemos apeno, abrir, descubrir; en phurhembe, arátani, abrir, rajar, abrir la boca; arámareni. bostezar. El
latín tenemos operio, cerrar, cubrir; en phurhembe, óghani
encerrar; óhchakurani, tapar, cubrir. Tanto en latín comb en
phurhembe la a. dice abrir y la o lo contrario, cerrar.
El verbo llevar o portar, en sánscrito es bharami, en latín, fero; en griego, phero; en inglés, bear y en phurhembe,
pemL
Variando un poco las desidencias verbales de la conjugación de los verbos phurhembes es igual a la de los verbos latinos, por ejemplo, el verbo llevar:
Latín
fer-o
fer-is
íer-t
fer-imus
íer-tis
íer-unt
llevo
llevas
lleva
llevamos
'lleváis
llevan
phurhembe
pa-ahka
pá-ahka-ri
pá-ahti
pá-ahka-chi
pá-ahka-tsi
pá-tix
En latín como en phurhembe no se necesitan los pronombres, porque las terminaciones indican con toda claridad la persona y el número.
—38—
V
MECANISMO DE FORMACION DE LAS PALABRAS
PHURHEMBES.
Esta lengua conserva su carácter monosilábico y su
procesa de aglutincnniento, es decir, la sintaxis de la formación de los vocablos.
Cada fonema tiene su significado propio, expresa un
concepto, es una palabra. Estos fonemas modifican su significado por el lugar que ocupan en la palabra, por la sílaba
que les precede o les sigue. Hay fonemas que desempeñan •
varios papeles.
Si en la formación de esta lengua hubo algún acuerdo
convencional fué en la significación que se les dió a los fonemas y los papeles que se les hizo representar.
Mas parece que todas las lenguas se formaron de la
misma manera. Se dió a cada fonema una significación propia, para que expresara un concepto, una relación; este concepto se modifica por las sílabas que acompañan al fonema;
habiendo fonemas que tienen dos o más significados según
el lugar que ocupan en la palabra.
Veamos como describe Victor Henry en sus Antinomies
Lingüisitiques la formación y evolución general de las lenguas, según cita que inserta Albert Dauzat en su obra 'La
Vida del Lenguaje".
La cita dice así: "He aquí una lengua en su período de
monosilabismo: cada palabra llena o vacía, es una sílaba in—39—
variable, y es enhebrando estas sílabas una tras otra, coma
cuentas de un rosario, como se llega a expresar la relaá&i
de las ideas. La sílaba de relación fué sin duda un elemento independiente y de significado propio; hoy ya no es riad a en estado aislado; pero pegado a una sílaba significativa,
.toma y le tribuye un nuevo valor, como el cero a la derecíha
de una cifra, en nuestra numeración".
'Después las sílabas, de relación, menos acentuadas o
más rápidamente pronunciadas, vienen a incorporarse popo-a poco a la sílaba significativa, a formar con ella un solo
grupo articulado, percibido en lo sucesivo por el sujeto que
habla como la unidad primera e irreductible del lenguaje,
en una palabra, en fin, una larga palabra en la que cada
sílaba conserva, sin embargo, su propia individualidad, como el magiar halhaíatlansagomat = meam inmortalitaiern
(mi inmortalidad), en que hal significa "morir" y los demás
sufijos van uno a uno a añadir su valor a la idea fundamental; es la fase aglutinante".
"En seguida esas diversas partes del grupo articulado se
unen y reaccionan unas sobre otras hasta hacerse casi desconocidas, como en la palabra sodalitatibus (dativo y ablativo de sodalitas, tis, amistad trato), en la que únicamente
por el análisis más minucioso ¡y aun así!—• es posible determinar el papel exacto de cada una de las sílabas, destruyendo con el pensamiento "su íntima cohesión, es la fase llamada
de flexión".
"Siempre bajo las mismas influencias, las finales de las
palabras se ensordecen y caen, —y entonces se hace cada
vez más útil y necesario después, introducir en la proposición un nuevo auxiliar que indique la relación de las palabras con sus vecinas a falta de la desinencia del género., número y caso, que se haya hecho indistinta...., en otros términos, la lengua ha madurado para una nueva fase de monosi—40—
lcbismo, que llegará a un nuevo estado aglutinante, y así
sucesivamente hasta lo infinito".
"Lejos pues de representar un estado primitivo del lenguaje. el monosilabismo teórico del chino actual recubre quizá veinte capas subyacentes y para siempre inaccesibles de
evoluciones lingüísticas, con tres pisos cada una".
Este proceso de formación de una lengua, según lo describe magistralmente Victor Henry, se ve con toda claridad
en la lengua phurhembe. Cada fonema conserva aun su valor ideológico independiente, y junto con otros forma una
idea con sus relaciones correspondientes.
Como hemos dicho, en esta lengua se ve claramente su
monosilabismo y su proceso de aglutinamiento, siguiendo determinadas leyes de construcción de las palabras, lo que po
díamos llamar la "sintaxis" de los fonemas para construir v
cabios, porque el enhebramiento de las sílabas no se hace
al capricho, sino sujeto a reglas fijas y sabiamente dispuestas.
También tiene reglas para las derivaciones fonéticas de
acuerdo con las derivaciones ideológicas y aun cuando está
en su período aglutinante empieza a entrar a la etapa de
reducción de las palabras, por ejemplo: se dice, chkuándira,
mentiroso; por chikuánd'íra; chpiri, fuego, por chupiri; sheni,
ver, por esheni; shani, enviar por eshcmi; shákcmi, sentarse,
por uashákani; shanskua, silla, asiento, por uashánskua o
uashákanskua y así otras pocas palabras.
En la lengua phurhembe está comprobado el proceso
de las lenguas del monosilabismo al aglutinamiento, de
ésta a la flexión y de aquí a la reducción de las palabras
para volver al monosilabismo, según lo indica Henry.
El phurhembe es una lengua singular, porque por una
parte, apenas va pasando del monosilabismo al aglutinamiento, y por otra, es altamente flexible, como se ve en
su declinación y en su conjugación, y también ya es in-41-
diferente a los géneros, característica de las lenguas muy
evolucionadas.
Prácticamente iremos viendo cómo se forman las palabras phurhembes, cómo se enlazan los fonemas para formar los vocablos. Si examinamos por ejemplo, el nombre
largo del pueblo michoacano que destruyó el Patfioutín.
Farangaricutiro o sea Parágharikutiro, encontraremos que
está formado por cinco elementos, con significación propia:
para-ghari-ku-ti-ro.
Pará, es un prefijo o una preposición inseparable que
significa, "cosa redonda", circular, como disco; porque "cosa
redonda como cilindro o como esfera, se dice, quirá o kirá.
El origen de esta partícula prepositiva, como el de todos
los prefijos phurhembes, es un verbo que generalmente tiene una consonante espirada, espiración que se pierde al
convertirse el verbo en prefijo.
Pará, que significa "cosa redonda" o disco, viene del
verbo pharani, que significa, envolver, torcer, girar, trazar
círculos.
Ghari, dice, cara, rostro, fachada, enfrente.
Eu, tiene dos significados, según el lugar que ocupa y
según el fonema raíz con el que se junta. Ku, es un pronombre dativo que significa, "a él" "para él" y también significa
"mano". Cuando es dativo la pronunciación no sufre ningun a alteración, pero cuando dice, "mano" se alarga la vocal
que le precede, por ejemplo: del verbo jupani, lavar, sale,
)upá-ku-ni, lavar a él o lavarle y iupáa-khu-ni, lavarse las
manos y para expresar que se lavan las manos a otro se
duplica la sílaba ku, diciendo: jupáa-hku-ku-ni. Cuando ku
es pronombre hace el plural kua.
Ti, es arlículo o es pronombre. Es artículo cuando va
después de un nombre, por ejemplo iré, habitante; ireti, el
habitante y es pronombre cuando va después de una raíz
verbal, como ú-ti, el que hace, del verbo u-ni, hacer; phara-tí
—42—
o phará-ku-ti, el que tuerce o el torcedor, del verbo pharaoi,
torcedor que ya vimos.
Ro, dice, "lugar de", "lugar dónde", equivale al aztecatl
"can". Algunas veces esta partícula pierde la r como en tzakapo, por tzakápuro, lugar donde hay piedras, de tzakapu,
piedra.
Parágarikutiro, literalmente y leyendo de derecha a izquierda, dice: "lugar donde, el que le, en la cara, al frente,
Cosa redonda", lo cual se puede traducir por "lugar donde
fué puesta al frente cosa redonda o también lugar donde
hay cosa redonda puesta al frente.
Vemos pues, que esta palabra se formó, primero por un
prefijo, después sigue una partícula locativa, en seguida el
signo de dativo, equivalente a "le" a continuación de este
signo el agente expresado por tí y por último el enclítico
locativo ro.
El nombre del dios de los phurhembes es kurikaúerL
que significa "el que ordena que se haga el fuego". Este
nombre está compuesto de los siguientes elementos fonémicos, ku-ri-ka-úe-ri.
Eú, dice, encuentra, es la raíz del verbo kuni, encontrar.
Si a esta raíz le agregamos la sílaba ri, sin cambiar el acento, formamos kuri, que equivale a kuti, el que encuentra;
pero si cambiamos el acento sobre la sílaba ri, entonces se
forma el radical kurí, que significa arde, quema, del verbo
kurini, arder, quemar.
Las sílabas formadas por la r nunca se encuentran al
principio de palabra, es decir, nunca son raíces, siempre van
después de las radicales para formar verbos que dicen movimiento, vibración y en este caso las raíces se convierten
en prefijos expresando la idea de la raíz.
Suri, dice encuentra y vibra, es decir, quema. La sílaba
ka. desempeña varias funciones, como lo veremos en otra
parte, en el caso la sílaba hace el verbo transitivo; kuri-ka,
—A3—
dice, has arder, has la lumbre, del verbo kuríkani, hacer
fuego, hacer arder.
La sílaba úe, con el acento en la ú es imperativo plural
del verbo uni, que ya conocemos y significa que ellos hagan, así es que kurikaúe, dice, "que ellos hagan hacer el
fuego, arder.
La terminación ri, es contracción de uri y equivale a ti,
significando "el que o el que hace". Toda la palabra kurikaúeri, literalmente dice, "el que hace que ellos hagan que
se haga la lumbre, el fuego, que se haga arder." y traducido este nombre con alguna libertad dice: "el que ordena
que se haga el fuego"
Nótese que las palabras en phurhembe están construidas de derecha para izquierda, o mejor dicho deben traducirse de derecha para izquierda; pero esto que pasa en el
phurhembe pasa en todas las lenguas polisilábicas. En aztecatl tenemos: "Teotihuacán" que se traduce por "lugar
de los que tienen el dios". Los elementos componentes de
este nombre son: "El enclítico "can" que significa "lugar de";
partícula posesiva hue, "que tienen; nexo eufónico ti; el radical teotl, dios." (Gramática del Latín Clásico, pág. 16.).
En el mismo español tenemos "benefactor" compuesto
de bene, "bienes"; fac; hacer o hace y tor, que se traduce
por "el que", lo cual leído de derecha a izquierda nos da:
Bene-fac-tor, el que hace bienes.
Seguiremos analizando otras palabras de la lengua
phurhembe:
Tzinapékuaro o sea tzinápekuaro. Este nombre está formado por los elementos siguientes tzi-ná-pe-kua-ro. Tzi dies
vive, es raíz de tzini, vivir; de tzipeni, tener gusto; de tzíntemi.
resucitar, literalmente volver a vivir; de tzigharixiL despertar,
literalmente, tener vida en la cara, etc.; en general la raíz tzi,
forma todos los verbos que significan vida, lo contrario de
—44—
las palabras que se forman con la raíz ua, que dicen muerte,
daño.
Si a la raíz tzi, que dice vida, le añadimos la sílaba na,
que expresa el concepto de cuerpo animal, formamos el
verbo tz'ináni, que dice, curar, sanar, dar vida al cuerpo.
Si a tziná, que dice, cura, sana, le agregamos la sílaba
pe formamos el verbo tzinápeni, que dice curar o sanar a
otros, a ellos, porque el fonema pe después de la radical
verbal, es pronombre en acusativo de tercera persona plural. La sílaba kua tiene variog significados y algunas veces
equivale a la terminación española "ción", pero en general,
sustantiva las radicales del verbo, así tzinápekua, dice medicamento; otras veces se traduce por "lo que sirve para" y
este caso sería "lo que sirve para curar o sanar". La terminación ro ya la conocemos, así tzinapekuaro, dice, "lugar
donde hay medicamento o lo que sirve para curar".
Pondremos otros ejemplos:
El mundo como morada del hombre se llama parákpeni
por parákupeni que significa "estar o ser cosa redonda en
el centro de una plaza o patio, formado por paxá que ya conocemos; la sílaba ku está contraída en hk. Como dijimos,
esta sílaba ku, unqs veces es signo de dativo y equivale al
pronombre español "le" y otras veces dice mano para expresar que la acción se hace personalmente. Si decimos
pharáhkuti expresamos la idea de que una p e g o n a turce
personalmente algo, porque si queremos decir que no lo
hace en persona, sino que manda torcer, decimos, pfaaráhkurati, es decir, el que ordena que se tuerza.
Volvemos a encontrar la sílaba pe, pero ya con otro
significado, ya no dice "a otros", " a ellos", sino "plaza",
"patio".
En esta lengua hay nombres que llevan la desinencia
ni, signo de infinitivo o de acusativo. Es signo de infihitivo
cuando termina una radical verbal y de acusativo cuando va
—45—
después de un nombre; pero en el caso que nos ocupa es
contracción del verbo eni, ser o estai, por consiguiente la
traducción de paráhkupeni, es "ser o estar en el centro de
plaza o patio cosa redonda, con la indicación de que fué
puesta esta casa redonda personalmente por alguien.
Prefijos como pará, kirá. tiene la lengua phurhembe 20
que significan forma y 20 partículas locativas que dicen en
donde se realiza la acción del verbo que se forma juntando
una partícula prepositiva o prefijo y una locativa.
Para formar una palabra con estos dos elementos se
empieza por el prefijo y se agrega la locativa. Si se quiere
formar un verbo se agrega como desinencia final ni. pero
si'se quiere formar un nombre o un adjetivo se agrega una
de las siguientes terminaciones: kua, ri, ti, pu, pa, ndo, to, ta,
me, ki, ni, cha, ro, para expresar, para lo que sirve la cosa,
si es hacedor, si es agente, instrumento, cosa hedía, etc.
En los verbos formados por estas partículas y la terminación verbal nú se sobreentiende el verbo estar o tener,
por ejemplo: con el prefijo aghá que expresa el concepto de
estar parado, de pie o enhiesto y las locativas se forman los
verbos siguientes: agháhtsini, tener o estar parado algo en
la cabeza, en la cima o en la punta de un cerro, de una torre o de un edificio; tsi, dice, cabeza, cima, punta; aghándeni, estar parado en el suelo, nde, dice, suelo; agháhkuni,
tener parado algo en la mano.
Si a estos verbos les quitamos la terminación ni, signo
de infinitivo y en su lugar ponemos alguna 3e las terminaciones antes dichas formaremos nombres y adjetivos, por
ejemplo, agháhtsi-kua, lo que se pone parado en la cabeza,
cima y punta; agháhtsiti, el que tiene én la cabeza algo parado; agháhtsipa, el que lleva parado algo en la cabeza. Si
al verbo ághahtsini, tener parado algo en la cabeza, intercalamos la partícula ta antes de la terminación ni, formamos
-46-
otros verbos, nombres y adjetivos con la significación de poner, transitivo; así agháhtsi-ta-ni, dice poner parada una cosa en parte alta, en la cabeza o cima; aghándetani, poner
parada una cosa en el suelo. También de estos verbos se
forman nombres, como, agháhtsi-ta-kua, aquello que se pone parado en parte alta; agháhtsi-tati. el que pone parada
una cosa en parte alta, y así por este orden se forman una
cantidad enorme de verbos, nombres, adjetivos y participios.
Las partículas locativas también se ¿untan con radicales verbales de significación directa, por ejemplo, jupani,
dice, lavar en general, jupá-htsi-ni, lavarse la cabeza o bañarse; jupá-ku-ni, lavarse las manos; jupá-nde-ni, lavar el
suelo. Si queremos significar que la acción de lavar se ejerce en otro, intercalamos la sílaba ta. por ejemplo, jupáhtdíta-ni, dice, lavarle a otro la cabeza o también, hacer que
otro se lave la cabeza o se bañe.
Hay dos partículas que hacen transitivos los verbos o
mejor dicho los hace ordenativos, que son r a y ta, como de
tkireni, comer, formamos thiré-ra-ni, dar de comer o hacer
que coma; de este verbo salen nombres y adjetivos, como
tbiré-ra-lcua, lo que sirve para dar de comer; thiréra-ti, el
que da de comer; pero aun más, cuando después de la
silaba r a agregamos la ta, expresamos la idea de ordenar
q u e se h a g a la acción del verbo, como thiré-ra-ta-ni, ordenar que se dé de comer. Igualmente d e estos verbos se
derivan nombres y adjetivos, como, thiré-ra-ta-kua, aquello
que sirve para ordenar que se dé de comer; thiré-ra-ta-ri o
ti, el que ordena que se dé de comer.
Este es, en rasgos generales, el mecanismo de formación de las palabras phurhembes, en el artículo siguiente
analizamos algunas palabras castellanas de origen latino
o griego, para saber si el español se construyó de la misma
manera.
—47—
LENGUAS INDOEUROPEAS EN AMERICA
V!
ESTRUCTURA DEL ESPAÑOL
Tratemos de demostrar el parentezco de la lengua
phurhembre con las indoeuropeas, y y a vimos que muchos
vocablos son muy semejantes entre la lengua de Michoafcán y las de Europa e India, que la conjugación del verbo
ser, eni, es casi idéntica a la del griego eimi. También vimos que la estructura de las palabras phurhembes es semejante a la d© las indoeuropeas y que deben traducirse
los vocablos de derecha a izquierda, aunque esta circunstancia es común a todas las lenguas primitivas. Ahora vemos a ver si el español, el latín y el griego siguieron el
mismo proceso de formación que el phurhembe, tomando
en consideración que aquellas lenguas están muy evolucionadas, que sus palabras están muy reducidas y que es
necesario un esfuerzo mental para analizarlas y "determinar el papel exacto de cada una de las sílabas, destruyendo mentalmente su íntima cohesión" como dice Víctor Henry, y de paso veremos si la significación de los fonemas
semejante en una y otras lenguas.
Vimos en el artículo anterior que la sílaba tsi es una
partícula fc—ativa, que significa cabeza, cima, la parte más
alta o la puia*T de alguna cosa. Examinaremos algunas palabras españoles de origen latino o griego que tengan la
—48—
siicba ci, que tanto fonética como morfológicamente se parecen.
Tomemos como ejemplos: PRINCIPE, PRECIPITAR,
PRINCIPIO Y CACIQUE. En estas cuatro palabras se encuentra la sílaba "ci" en segundo lugar después de una preposición inseparable, como vimos el fonema tsi en las palabras phurhembes.
El diccionario define: "PRINCIPE, del latín pñncepscipis de primum, primero y caput-itis, cabeza. El primero y
más excelente superior". En este nombre la sílaba ci, como
mutación de caput-'ítis, dice cabeza, la persona que está
en la parte más alta de la nobleza. Claro está que "cabeza"
no dice siempre la parte más alta, sino la más adelantada,
como "cabeza de playa", "cabeza de puente". Esta acepción corresponde a la cabeza de los animales, que no siempre es la más alta, pero sí la más adelantada, y esta misma
significación tiene la sílaba ci, en otras palabras, como lo
veremos después.
El diccionario define: "PRECIPITAR, del latín praecipitare, de prae, adelante y caput-itis, cabeza. Despeñar, derribar o arrojar de un lugar alto". En este verbo lo mismo
que en príncipe, la sílaba ci, dice cabeza, pero ya en otro
sentido. Si analizamos el verbo precipitar con criterio phurhembe encontraremos que significa, llevar una cosa a su
fin antes de tiempos" porque consta de los siguientes elementos fonémicos pre o prae, dice, antes ci, cabeza, cima,
punta, fin, término; pi, llevar, portar y tar, es una forma de
pretérito de infinitivo pasivo que indica cosa hecha, cosa
terminada, que y a no se mueve. El mismo diccionario trae
como una de las acepciones de precipitar la idea que nosotros damos con criterio phurhembe.
El diccionario define: "PRINCIPIO, del latín prindpium.
Primer instante del ser de una cosa. Punta que se conside—49—
ra como el primero en una extensión o cosa". En el lenguaje militar el extremo o punta de un ejército, que va adelante se llama "cabeza de la columna" o sea el principio
de ella. También en esta palabra c i dice cabeza.
El diccionario define: "CACIQUE (voz caribe) Señor de
V-salios o superior de alguna provincia o pueblo de indios. Cacique, aunque sea voz caribe tiene el mismo significado que príncipe, lo que quiere decir que la sílaba ci,
en la lengua caribe también significa cabeza.
Vemos, pues, que las partículas tsi, phurhembe y ci,
española, tienen el mismo significado, que las dos son partículas locativas y que van después de una preposición o
de un prefijo.
Veamos esas mismas partículas qué sentido tienen en
ambos idiomas al principio de la palabra. En phurhembe
tenemos: tsiri. maíz o mazorca; tsiríghekua, las costillas; tsiríndakua, cerca de postes; tsini o ssini, dientes o dentadura; tsíríhtakua, enagua de rollo con pliegues; tsitsiki, flor;
tsikiata, canasto.
A p r j a e r a vista no hay ninguna semejanza entre la
mazorca, las costillas, la cerca de postes, la dentadura, las
enaguas de rollo con pliegues, la flor y el canasto; sin embargo, si nos fijamos en todos los objetos mencionados encontraremos que todos tienen la forma redonda y curva yy
además, que se forman de unidades repetidas: la mazorca, forma redonda y unidades repetidas; las costillas, form a redonda y unidades repetidas; la cerca de postes, forma redonda y unidades repetíHas; la dentadura, forma redonda y unidades repetidas; la enagua de rollo con pliegues, forma redonda y unidades repetidas; la flor, forma
redonda y unidades repetidas, etc.
Veamos en la lengua castellana qué significa ci en principio de palabra, en aquellas de uso común, como: círculo,
—50—
circunferencia, ciclo, cinturón, cilindro, cigarro, ciclo, címbalo, cimborrio, cimera, cimatarra, cincho, cintura, circo,
circuito, etc.
En todas estas palabras se ve con toda claridad el concepto de lo redondo y de lo curvo, aunque no de las unidades repetidas. En otras palabras que principian con la
sílaba ci tienen una idea lejana de lo curvo o redondo, como, cinegética y cinemática.
Los fonemas cine de la primera palabra significa "perro", y el cine de la segunda palabra dice "movimiento",
cuyo sentido de lo curvo o redondo está muy lejano, sin
embargo, todo movimiento es curvo o nace de él, al menos así lo concebían los fundadores de las lenguas y al
perro lo llamaron los griegos kinon o kino por el movimiento
de la cola, así como llamaron al hombre antropos, porque
sabe observar.
No olvidemos que los fonemas modifican su sentido por
el lugar que ocupan en la palabra y por las sílabas con
las que se juntan; así por ejemplo, "cielo" y "ciego", que
no obstante que tienen la misma raíz o el mismo fonema
inicial significan cosas muy distintas y no porque uno venga
de caelum y el otro venga de caecus, sino porque las sílabas "lo" y "go" modifican la significación del fonema "cié"'
de distinta manera.
Tratemos de explicar estas modificaciones recuriendo
al purhembe que conserva aun su sentido monosilábico,
con significación precisa cada uno de sus fonemas.
Apuntamos en otra parte que el fonema ka, en segundo lugar, es decir, después del fonema raíz, invierte el significado de éste. Por ejemplo, de ué que significa "salir" o
"sacar" se forman los siguientes verbos: ué-ma-nL sacar
del agua; ué-me-ni, salir del agua; ma y me, dicen, agua;
ué-pa-nL sacar del fuego; ué-pe-na, salir del fuego; pa y pe
dicen fuego. Si a estos verbos les intercalamos, después de
—51—
la raíz ué la sílaba ka, formamos verbos que significan precisamente lo contrario de los verbos primitivos. De ué-mani, sacar del agua, formamos, ue-ká-mani, echar al agua;
de ué-me-ni, salir del agua, formamos, ue-ká-meni. caer al
agua; de ué-pa-ni, sacar del fuego, formamos, ue-ká-pani
echar al fuego; de ué-pe-ni, salir del fuego, formamos ue-ká
pe-ni caer al fuego. Los verbos formados con ma y pa son
transitivos y los formados con me y pe son neutros o intransitivos.
Vamos a ver si en español encontramos fonemas que
hagan el mismo papel que la sílaba ka en phurhembe.
Tenemos desde luego "libre" y "liga", palabras que
con la misma sílaba raíz significan cosas opuestas.
Dice el señor Manuel J. Rodríguez en su obra "las Fuentes del Idioma Español", páginas 189, 191, 192 y 193 lo siguiente: "De la raíz sánscrita lubh, libh o lu, libertar, desligar, desear, querer, entran a formar en casi todos los idiomas modernos un gran caudal de palabras; en el idioma
qu® estudiamos se halla esta raíz bajo la forma de lib, lie,
liq, o lu, llevando cada una de estas formas cualquiera de
las dignificaciones expresadas y engendrando cada una de
ellos un suficiente grupo de voces
Al presentar aunque
aproximadamente toda la derivación castellana de la raíz
griega li y lu, vamos a recordar lo que dice A. Regnier a
este respecto: "Esta raíz expresa la idea abstracta y ab-.
soluta de desatar, libertar, deliberar"
No cabe duda que
«rsta raíz lu o li, que expresan indistintamente las ideas de
libertar destruir, resolver, explicar, pagar, se presenta en
las lenguas indoeuropeas en la forma de lu, por eso tienen
los latinos la palabra solutus, que significa desligado, los
ingleses to Loosen, desligar, desatar
En inglés to live,
vi\ir, alemán, leben, están formados por la raíz lu, lubh
sánscrita; porque la libertad es la verdadera vida de los
—52—
pueblos
Si la idea de desunir o desligar se expresa
con la raíz palabra lu, con el vocablo ligar, se manifiesta
en español la idea contraria. Este hecho no causa gran
sorpresa a los filólogos; pues amén de que sea exacto o
no el proverbio: "Los extremos se tocan" las necesidades eufónicas de la lengua española bien pudiera desechar de
la palabra ligar alguna partícula o signo negativo, que en
i i-motos tiempos prefijara a este vocablo."
En los términos obligar y religión, también se expresa
la idea contraria de libertar, desligar, desatar; pero no por
las razones que expone el señor Rodríguez sino' porque la
gutural g invierte el sentido de la raíz li, lo mismo pasa con
ei adjetivo flaco y los verbos flaquear, flagelar, flojear, etc.
Dice también el señor Rodríguez en la página 87 de su
mencionada obra, lo siguiente:
"La forma fia, de flatus (soplo).... da la idea de viento,
gas o flúido.... de donde nos explicamos las palabras flama, flamante, inflar, proceden de la misma raíz fia, de fiare,
soplar
El grupo consonántico fl equivale a 11, a pl, y ch para
formas las palabras inflar, llenar, pleno, enchido, inchado,
etc. ya sea por el aire o por cualquiera otra cosa, así es
que inflar tiene el mismo sentido que llenar y que inchar;
pero la presencia de las guturales q, c, j, g, después de las
sílabas fia, fie, fio, flu invierte la idea de llenar en los vocablos flaquear, flaco, flagelar, reflejar, flagrar, flojo, flujo.
En donde quiera que se encuentre una gutural después
de la raíz invierte la primera el sentido de la segunda, lo
a u e pasa en la lengua phurhembe en los ejemplos insertos
entes. Esta regla es general, tenemos por ejemplo vida de
vis fuerza y con una gutural formamos viejo, es decir, que
ya no tiene fuerza, que ya no tiene vida.
En el mismo caso está "cielo" y "ciego"; la sílaba go
invierte el sentido de la raíz cié.
—53—
Dice el señor J. González Moreno en su Gramática del
Latín Clásico que cielo no viene de coelum, sino de caelum
y que significa "lo azul" y no lo "hueco".
Puede venir la palabra cielo de coelum o de caelum,
que con la o o con la a, no se modifica el concepto de lo
cóncavo que da el fonema c en las sílabas ca, ce, ci, co, cu,
como lo vemos en las palabras: casco, cabeza, cóncavo,
convexo, cueva, cubrir, cerca, circuito, cintura, cilindro, en
las que domina la idea de lo curvo, de lo redondo; pero
los castellanos al romancear el latín coelum o caelum dieron a la sílaba cié, además del concepto de lo curvo, el de
que eso curvo está sobre nuestras cabezas, que está en
lo alto, como lo vimos al estudiar la sílaba ci y además que
es extenso. La sílaba lo, vino a completar la idea del cielo,
que está lejos, muy arriba.
Cuando y a se ha fijado a una palabra su sentido material v concreto se inicia su sentido metafórico. En la palabra "cielo" parece que los catellanos quisieron decir "luz"
y a que la luz nos vienes del cielo, por consiguiente "ciego"
dice no cielo,, no luz.
Vemos pues, que también en español los fonemas tienen distinto valor ideológico, según el lugar que ocupan en
la palabra y según la sílaba que les precede o les sigue;
que las guturales después de la raíz invierten el sentido
de ésta; pero no tan sólo las guturales desempeñan esta
función de negar o de invertir el sentido de la raíz, también
otros fonemas lo hacen, por ejemplo; patcmi, apagar. Vimos
que la sílaba pa, dice fuego y para expresar la idea de "nó
fuego" ponemos en seguida la sílaba ta, que dice inmóvil.
Parece que también en la palabra española apagar,
la sílaba pa dice fuego negado por la a o por la sílaba gar.
Dice Gonzále? Moreno que las lenguas se van formando y transformando paulatina e inconscientemente, pero
Vosller asegura que existe el espíritu que preside la forma—54—
ción y la transformación de ios idiomas. Si es cierto lo que
/dice Vosller el mismo espíritu colectivo que formó las lenguas
indoeuropeas formó el phurhembe, ya que, como estamos
viendo tanto aquellas como la michoacana están formadas
sujetas a las mismas leyes, al mismo pensamiento.
Se preguntará: ¿por qué si los fonemas tienen el mismo significado tanto en las lenguas indoeuropeas como en
la phurhembe las palabras para designar las cosas no son
iguales?
Contestamos: por la distinta forma de concebir las cosas. Por ejemplo "tele" y "lejos" significan lo mismo, sin
embargo estos dos vocablos expresan distintos conceptos.
Tel« está formado por te y le. la primera sílaba dice inmóvil y la segunda distante, es decir, de aquí para allá, de la
persona que habla a un punto distante y lejos, dice de allá
para acá, de lo distante a la persona que habla, y ya que?
jos, invierte el sentido de le.
En los vocablos que designan al hombre es donde se
ve, con más claridad, la diferencia de concepción del ser
humano. En inglés es mcm, tomado directamente del sánscrito que significa inteligente; en latín es homo que está relacionado con humus tierra vegetal o barro; en griego es
ántropos, que según Platón, significa el que sabe observar
y en purhembe es tzhiuériti, el valiente de tzhiueni, ser valiente.
En el artículo siguiente insistiremos en analizar el valos de los fonemas.
vn
VALOR DE LOS FONEMAS
Vimos que ma y me, después de la raíz ué, salir o sacar,
significan "agua", y pa y pe, dicen "fuego"; estas mismas
sílabas en otro lugar de la palabray junto a otras sílabas
significan cosa distinta.
Ya vimos sfüe lo mismo pasa en español y tal vez en
todas las lenguas indoeuropeas. La característica de la estructura de las palabras de estas lenguas es dar a los fonemas un valor propio, modificado por el lugar que ocupan en la palabra y por las sílabas que le anteceden o les
siguen, y aunque actualmente los vocablos en las lenguas
indoeuropeas, son verdaderos signos o símbolos de una
idea, que muchas veces expresan cosa distinta a lo que
dicen los fonemas de que están formados, sin embargo, estos fonemas nos dicen cómo concebían las cosas los constructores de las lenguas, y en muchas ocasiones su etimología nos da la verdadera significación de la palabra.
El fonema ma que con determinadas radicales dice
"agua", también dice "camino" con otras raíces verbales,
por ejemplo: karárani, significa "subir"; si en lugar de la
segunda ra ponemos ma diciendo, kará-ma-ni, expresamos
la idea de subir una cuesta o un camino de pendiente pronunciada. De thireni, comer, formamos, thiré-ma-ni, comer
d e camino o de pasada.
En otra parte pusimos como ejemplos las tres formas
—56—
de pasar que concibe el phurhembe, en los que figura la
sílaba ma, expresando "camino" Nitá-ma-ni, pasar de ida,
del verbo nirani, ir, alejarse; jutá-ma-ni, pasar de venida o
de vuelta, del verbo jurcmi, venir y uetá-ma-na, pasar de
salida, del verbo uéram. salir. Nótese que estos tres verbos
que significan pasar, contienen los fonemas necesarios para expresar el concepto de pasar. Se pasa de ida, de venida o de salida lo cual se expresa por las sílabas ni, ju, ué;
se pasa con relación a algo que está inmóvil y este concepto se expresa por medio de la sílaba ta; se pasa por el
camino, por una vía y este concepto se expresa por la sílaba » a y por último se expresa la existencia del acto por
medio de la sílaba ni, contracción del verbo eni, ser.
La misma sílaba ma en principio de palabra es raíz del
verbo mani o mákunü, que significa, unir, juntar, pegar,
adherir. Se acostumbra intercalar la sílaba ku que significa
"mano" en todos los verbos cuya acción se hace con las
manos o personalmente. Por último, ma, dice, uno, numeral. Nótese que ma es segunda persona del presente de imperativo del verbo mani, unir, juntar, pegar, mientras que
el español uno, es primera persona del presente de indicativo.
Vemos pues, que ma tiene cuatro significados por el
luqar que ocupa y por las sílabas con las que se junta.
Ahora, analicemos algunas palabras españolas para
saber qué significa el fonema
en estas palabras: tenemos. manar, manantial, mar, en latir madeo, macerar, masa, manchar, macular, mamar, maná, líiermita, emanar,
amamantar, amasar, camalote, comalia, dimanar, etc. De
estas palabras, algunas dicen con claridad "agua", como
manantial, manar y otras contienen una idea lejana de agua.
Es indudable que la sílaba ma como raíz o fonema inicial tiene un sentido general modificado por los fonemas
que le siguen, cuyo estudio debe encargarse a los señores
—57—
académicos de la lengua. Después de la sílaba inicial tiene varios sentidos. Vimos que el grupo consonántico fl, que
equivale a 11, a pl, y ch, expersa la idea de lleno, después
de las sílabas formadas por estos grupos consonánticos la
sílaba ma expresa distintos conceptos como flama, llama,
quema, con la idea de fuego. Después de otras radicales
parece que contradice el sentido de éstas, como después
de vict de victoria se forma vícti-ma que dice precisamente
lo contrario de vict. En la palabra tema la sílaba ma, dice
lo contrario que la te, que expresa la idea de inmóvil.
En humano hay algo de agua, pero al mismo tieippo
de mortal, como en quema, inflama. La sílaba ca, expreba
la idea de curvo, de redondo, lo mismo que ci; pero "cama" ya no dice cosa curva o redonda, porque este concepto está modificado por la sílaba ma.
Me, como ma, después de determinadas raíces también
dice "agua"; pero con otros radicales es pronombre personal equivalente a me español, por ejemplo, ú-me-gha-ni
me hacen o hacen para mí, del verbo uni, hacer; juá-megha-ni, me traen o traen para mí, del verbo juani, traer
La partícula gha es signo de voz pasiva, por lo que los anteriores vocablos deben traducirse por: me es hecho o es
hecho para mí, me es traído o es traído para mí.
Hay en español algunas palabras que contienen el fonema me con la idea de "agua", como húmedo, sumergir,
emerger; en otras palabras la sílaba me expresa otros conceptos.
En la lengua phurhembe, la sílaba pa, también tiene
varios sentidos según el lugar que ocupa en la palabra y
según las sílabas con las que se junta. Vimos que después
de la raíz ué, dice "fuego" ahora vamos a ver que después de otras raíces dice: "ir", así tenemos, de pireni, cantar, se forma piré-pa-ni, ir cantando; de tzanguárani, brincar, se forma tzanguára-pa-ni, ir brincando.
—58—
Como raíz inicial significa llevar, portar que ya vimos,
así pañi dice llevar. En los dos casos significa movimiento
de traslación con igual sentido que en las palabras españolas pasar, traspasar, pasear, palanquín, pala, palpitar,
patear, partir, etc. En la palabra parar, la sílaba ra invierte
el sentido de pa, pero vuelve a tener el sentido de traslalación en comparar, como pasa con el vocablo "desligar";
vimos que li, dice, libre, que la sílaba gar invierte o contradice su sentido el que vuelve a tener en desligar.
La sílaba pe tiene tres sentidos: dice fuego con determinadas radicales, con otras dice, plaza o patio y por último es pronombre plural de tercera persona, equivalente
al pronombre español "se", como, en jupani, lavar, se forma jupá-pe-ni, se lava o se lava a otros, a ellos.
Con estos ejemplos se ve el iuego de los fonemas, tanto
en phurhembe como en español y entiendo que en todas
las lenguas; juego bien coordinado para que con pocos fonemas se formen una cantidad enorme de palabras. Este
juego está sujeto a reglas precisas que desgraciadamente
no se han estudiado en las lenguas indoeuropeas y que en
la lengua phurhembe se ven con toda claridad porque todavía conserva, casi intacto, su monosilabismo.
De paso haremos notar que en español, la a inicial,
aunque no sea de origen griego, en algunas palabras, como prefijo, invierte, niega, contradice el sentido d e la raíz,
como en atizar, atacar, activar, etc. Como veremos adelante la t con las cinco vocales dice, inmóvil y las tres palabras transcritas dicen todo lo contrario de inmóvil porque
la a inicial niega el sentido de la tí se activa el fuego que
tiende a quedar inmóvil y a esto se lama "atizar"; se ataca
lo que está inmóvil y se activa lo que tiende a quedar inmóvil
Volviendo al fonema pa, que como vimos en phurhembe expresa la idea de traslación, haremos notar que en es—59—
pañol todas las labiales tienen el mismo sentido, como en
penetrar, buscar, virar, fugar; y cuando la h sustituye a la
i también dice traslación, como "huir". En phurhembe no
tenemos í la sustituimos por ph, como en phurhembeni, visitar; la ph, del phurhembe es p en español; acom-pa-ñar
en el camino en phurhembe decimos: ju-pámbeni, porque
cuando es acompañar dentro de una casa, es decir, que
no hay traslación decimos: ju-ka-mbeni, jukani, significa
ponerse, vestirse, cubrirse, así es que jukámbexü dice tanto como cubrir a otra persona. Parece que es más lógico
el phurhembe. Phakani significa "empujar"; en las dos palabras hay las labiales ph y p, pero estas expresan distintos conceptos de empujar. Pha, dice, toca, tienta y ka, dice
con fuerza, es decir tienta con fuerza, pero horizontalmente.
También puiar, dice fuerza, pero de abajo para arriba.
Tenemos que repetir que los fonemas phurhembes tienen el mismo significado que los fonemas de las lenguas
indoeuropeas, que este significado se modifica por el lugar
que ocupa el fonema e n la palabra y por las sílabas que
lo acompañan, sin olvidar que los fonemas de las lenguas
indoeuropeas han sufrido transformaciones y cambios; que
la p se cambia en b o en v, en mb en f; la t en d o c o z;
la fl, en 11, en pl, y en ch; que lo que es ma en sánscrito, es
me en latín y es mi en phurhembe; lo que es ex en griego
es ué en phurhembe; que lo que es p en phurhembe es ph
en griego y f en latín; que lo que es fi en sánscrito y en griego,
es vi en latín y tzhi en phurhembe; es por esto que no pode
mos encontrar semejanzas completas; pues en las mismas
lenguas indoeuropeas tenemos que lo que es p en latín es f
en inglés y en alemán.
Pero sigamos estudiando otros fonemas para ver si es
cierto lo que afirmamos, es decir, que los fonemas phurhembes tienen el mismo sentido que los fonemas indoeuropeos.
Cuando analizamos los verbos ni-tá-mani, pasar de ida;
—60—
ju-tá-mani, pasar de venida o de vuelta y ue-tá-mani, pascade salida, vimos que la sílaba ta dice inmóvil, es decir, que
se pasa con relación a otra persona o cosa que está inmóvil.
La sílaba ta con la significación de inmóvil es cons tante, por ejemplo: taghachuani, dice, pararlos, detenerlos,
inmovilizarlos de los pies.
Ahora vamos a ver el sentido que tienen las palabras españolas de origen latino que contienen el fonema t
Dice el señor Rodríguez en su citada obra "La Fuente
del Idioma Español" págs. 136 a 141, lo siguiente:
"De la raíz sánscrita sta que connota la idea de inmovilidad se formó el verbo latino sto, stas, are, estar
la raíz
st expresa en todas las palabras que transcribimos la idea
de quietud e inmovilidad, como estar, estación, estable, estela, estrella, estancar, estanque, estampa, éxtasis, estático,
son palabras que expresan, aunque muchas veces en sentido metafórico, la idea exacta de quietud, fijeza, inmovilidad
...Si anteriormente hemos dado las principales palabras
formadas de la raíz sta, ahora vamos a estudiar las que directamente se originan de la raíz del verbo latino sist-o, sisitis sjst-ere, detener, verbo que es una variante de latín sto,
stas, store, estar, existir, no mover.
El verbo sistere, cuyo supino es statum ha sido formado
del verbo ya estudiado stare, encierra ideas análogas a éste; así es que expresa por antonomasia la idea de colocar,
fijar, poseer, detener, consolidar, retener o reprimir
"
En la lengua phurhembe la sílaba ta, además de inmovilidad, después de un verbo formado por una preposición y
una partícula locativa significa colocar, poner para que permanezca inmóvil.
Ya vimos antes que de agká-htsi-ni, tener parada una cosa en la cabeza o en la parte más alta, se forma, aghá-tsi-tani, poner o colocar parada una cosa en parte alta; pará-htsini, tener cosa redonda en la cabeza o en parte alta, sale pa—61—
rá-htsi-ta-ni, poner o colocar cosa redonda como plato en
parte alta.
Encontramos que en la lengua española hay muchas palabras que llevan t, y sin embargo, no dicen inmóvil, como
tiempo, tempestad, templar, temblar, contemplar y todos los
derivados del latín tempus, el tiempo, esto depende de que
la m, como ya vimos antes, invierte el sentido de la T o al menos lo modifica.
Ya apuntamos antes que la c, ya sea con sonido dental
en ce, ci, o bien con su sonido gutural, dice, curvo, redondo,
como ya lo vimos antes; pero además tanto en la lengua española como en la phurhembe, dice, fuerza, potencia, energía, causa, como en calor, calcular, comer, curar, etc.
En phurhembe tenemos: kárani volar; karárani, subir;
karátam, levantar; karámani, subir una cuesta; karányheni,
suspirar; kétzeni, bajar; kóndeni, lugar ancho o compadecer;
kámeni, lugar con bastante capacidad para contener agua.
En la lengua phurhembe las derivaciones de las oclusivas p, k, t, no son exactamente las mismas que en latín, pero
tienen -el mismo significado; así, en phurhembe, de la p, se
deriva mb; de la t, se deriva nd y nz; de la k, se deriva j, ng
y de la ch, se deriva sh y yh.
En todas las lenguas la derivación ideológica es constante y en la lengua phurhembe, la derivación fonética está de
acuerdo con la primera, por ejemplo, tze, dice, tierra; nde, dice, suelo o superficie de la tierra. Aghátzeni, significa, estar
parado de pie en la tiera, como un poste; aghándeni, dice, de
pie en el suelo, sobre la tierra, como un hombre. Euritzeni.
dice, que se quema la tierra, como él parikutín y kuríndeni,
dice, que se quema la superficie de la tierra, como cuando
se quema el pasto. Kurini, es quemarse; kurita, dice, quemado, pero cuando lo quemado no es completo, se dice, kurinda
o sea a medio quemar, que es el nombre del "pan".
Si examinamos las derivaciones del latín o del griego, ve—62—
remos que siguen las mismas leyes que siguió la lengua phurhembe. Tanta semejanza del phurhembe y las lenguas indoeuropeas no pueden ser fortuitas ni casuales, es necesario
convenir que la lengua michoacana es de la misma familia
de las lenguas indoeuropeas: La misma morfología, la misma
forma de declinación que la del latín, por medio de desinencias, el mismo sistema de conjugación, la conjugación del
verbo ser eni, phurhembe, es casi idéntica a la conjugación
•del verbo eími, griego, teniendo por radical la e, que el latín
perdió en algunas personas y tiempos.
Todavía más veamos la semejanza de las desinencias de
la conjugación phurhembe con la de la sánscrita, así como
de la latina.
Español
sánscrito
;atina
phurhembe
yo llevo
tu llevas
el lleva
bhara-mi
bhara-si
bhara-ti
fer-o
fer-is
íer-it
pa-hka
pá-hka-ri
pa-ti
Según los etnólogos la raza michoacana es de origen
mongoloido, pero la lengua es de origen indoeuropeo, lo cual
abre de nuevo la interrogación ¿quiénes son los michoacanos? ¿De dónde vinieron
—63—