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LIBROS
Neuronas espejo
Entre el mito y la realidad
En 1988, un grupo de neurocientíficos
jeción resultaba del mayor interés e impor­
de Parma, encabezados por Giacomo Rizzo­
tancia, pero se necesitaban más datos para
latti, comenzó a trabajar en un experimen­
confirmar la hipótesis. Puesto que los dos
to que se proponía desentrañar de qué
fenómenos (ver y sujetar) se solapaban en
modo las neuronas de la corteza premo­
el tiempo, resultaba imposible determinar
tora del macaco controlaban la acción de
qué acontecimiento era responsable de qué
prensilidad. El equipo aplicó el método de
cambios operados en las pautas de excita­
«registro de una sola unidad», en el que las
ción neuronal. Siguieron los experimentos.
sondas de microelectrodos se inserían en
El equipo publicó un resumen en 1992.
el cerebro para medir la actividad eléctri­
Esbozaban una explicación del fenómeno
ca de neuronas individuales («unidades»),
peculiar que acontecía en la corteza pre­
mientras el animal realizaba una tarea. En
motora del cerebro del macaco. Además
concreto, los microelectrodos registraban
de excitarse durante sus propias acciones,
los potenciales de acción, las «espigas» que
como agarrar un objeto, algunas neuronas
una neurona genera para comunicarse con
del mono respondían a las acciones equi­
otras. Los potenciales de acción constitu­
parables ejecutadas por otros o el propio
yen el lenguaje de las neuronas.
investigador. A partir de tan simple pauta
El trabajo desarrollado indicaba que las
de respuesta, neurocientíficos y psicólogos
células de una región cerebral particular
habrían de pergeñar una de las teorías
del macaco, la F5 (área 5 del lóbulo fron­
más ambiciosas sobre la base neural de la
THE MYTH OF MIRROR NEURONS.
THE REAL NEUROSCIENCE OF
COMMUNICATION­AND COGNITION
tal), se excitaba con intensidad cuando el
conducta humana en la historia de la psi­
macaco realizaba acciones asociadas con la
cología. Esas células vinieron a llamarse
prensilidad; unas células respondían mejor
neuronas espejo y despertaron un enorme
Por Gregory Hickock. W. W. Norton &
a una sujeción de precisión (coordinación
interés científico.
­Company, Nueva York, 2014.
pulgar-índice, como la que se da al sostener
El informe de 1992 no mencionaba la
entre los dedos un grano de uva), mientras
expresión «neuronas espejo». El grupo
abido es que, siempre que una idea
que otras se excitaban cuando entraba en
de Rizzolatti publicó un artículo más ex­
escapa del laboratorio y adquiere
juego la mano entera (al asir una naranja).
tenso sobre la nueva clase de células en la
vida propia como explicación de
Por lo que parecía, tales células codificaban
revista Brain en 1996. El artículo, «Action
todos los misterios, se amontonan las
tipos específicos de sujeción de un obje­
recognition in the premotor cortex», re­
supuestas pruebas y adquiere inusitada
to. Algunos datos provisionales sugerían,
cogía registros de 532 neuronas del área
resonancia en la pluma de ensayistas y
además, que unas de esas neuronas de F5
F5. Había células en esa zona que se excita­
charlistas. Ha ocurrido así con la relati­
se excitaban con solo ver objetos asibles.
ban cuando los monos agarraban objetos y
vidad, el principio de incertidumbre, la
Las neuronas de sujeción de precisión se
cuando observaban que el experimentador
incompletitud gödeliana, la evolución a
excitaban con la mera presentación de un
ejecutaba las mismas o similares acciones.
través del equilibrio puntuado, la plas­
objeto pequeño. Esa y otras constatacio­
Los autores denominaron neuronas espejo
ticidad (de ecosistemas, del cerebro), la
nes llevaron a sugerir que las neuronas en
a las implicadas.
complejidad (de ecosistemas, del cerebro),
cuestión representaban, en cuanto grupo,
El artículo de 1996 corroboraba las ob­
la epigenética, y, en lo que llevamos re­
una suerte de vocabulario de posibles ac­
servaciones iniciales. Sugirieron, además,
corrido del siglo xxi, las neuronas espejo.
ciones motoras y que la información pro­
la importancia de las neuronas espejo pa­
Autores ha habido que especularon con
cedente de rasgos sensoriales de los objetos
ra la conducta humana. Y a la pregunta
entusiasmo sobre la función de las neu­
seleccionaba las acciones apropiadas.
so­bre la posible existencia de este tipo de
S
ronas especulares y las involucraron en
La idea de que las neuronas F5 podrían
células nerviosas en los humanos respon­
funciones tan dispares como la obesidad
coordinar la información visual sobre los
dieron con un sí rotundo. Repasaron tres
o el autismo.
objetos con programas motores para la su­
líneas de prueba a favor de su tesis, dos
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LIBROS
obtenidas por el equipo de Rizzolatti y una
en los asuntos más dispares, desde la esqui­
hay pruebas en los monos de que las neu­
tercera tomada de la bibliografía. En primer
zofrenia y abuso de drogas hasta la orienta­
ronas espejo faculten la comprensión de
lugar, un estudio de estimulación magnéti­
ción sexual o el bostezo contagioso.
la acción, ni se requieren para entenderla.
ca transcraneal mostró que en las personas,
En el año 2000, el psicólogo V. S. Rama­
Las neuronas espejo del macaco difieren de
cuando observan la acción de agarrar un
chandran pronosticaba que el impacto de
las respuestas cerebrales paraespeculares
objeto, aumenta su excitabilidad motora
las neuronas espejo en psicología reme­
de los humanos; la ejecución de la acción
relacionada con la mano. En un estudio de
daría lo que fue la revolución en biología
y su comprensión están disociadas en hu­
1995, el equipo de Parma empleó esa técnica
auspiciada por el descubrimiento de la
manos; la lesión del hipotético sistema de
de aplicación de campos magnéticos para
estructura del ADN, una suerte de marco
neuronas espejo de los humanos no pro­
despertar la actividad neural en regiones
unificador y principio capaz de explicar fa­
duce déficits en su comprensión.
de la corteza motora primaria que contro­
cultades mentales que habían permaneci­
De manera destacada, rechaza la pre­
lan brazo y mano. El estudio halló que los
do envueltas en el misterio, inaccesibles a
tensión de reducir la complejidad de la
potenciales evocados motores cuando las
la experimentación. Entusiasmo al que se
adquisición del lenguaje humano y su com­
personas observaban la acción de sujeción
sumaría, entre otros muchos, Marco Iaco­
prensión a las neuronas espejo. Se muestra
realizada por otros eran mayores que cuan­
bini, para quien alcanzamos la intelección
escéptico también ante la declaración de
do observaban solo los objetos. Los autores
de los demás gracias a ese conjunto curio­
que estas sean lo único que se requiera
del estudio interpretaron ese fenómeno
so de neuronas cerebrales. Estas servirían
para inferir la intención de los otros, una
como una prueba de que la observación
para unirnos a los demás, mental y emo­
capacidad conocida como comprensión
activaba de manera automática el sistema
cionalmente. Se sucedieron artículos y pu­
de la acción. Si las neuronas espejo de la
motor asociado a la prensilidad.
blicaciones sobre el papel de esas células
circuitería motora explicaran por sí solas
En segundo lugar, un estudio de tomo­
en el lenguaje, la imitación, la percepción
el lenguaje y la comprensión de la acción,
grafía de emisión de positrones mostró que
social, la empatía, la lectura de la mente, la
objeta Hickok, entonces los pacientes con
cuando los humanos observaban acciones
apreciación de la música, la apreciación del
una circuitería motora deteriorada debe­
realizadas por otros, se producía un incre­
arte, el disfrute del deporte o el autismo.
rían mostrarse incapaces de comprender el
mento de la actividad neural en el área de
El propio Dalai Lama visitó la Universidad
lenguaje y las acciones de los demás.
Broca, estructura que se supone homóloga
de California en Los Ángeles para asistir a
En una investigación del reconocimien­
de la región F5 del macaco. En tercer lugar,
una conferencia sobre neuronas espejo y
to del habla, a largo plazo y con la parti­
los pacientes que sufren lesiones en el ló­
cultivo de la compasión, por lo que a ve­
cipación de cien individuos con lesiones
bulo frontal, en la vecindad del área de Bro­
ces se les ha llamado «neuronas del Dalai
cerebrales (en su mayoría resultantes de
ca, presentan fallos de reconocimiento de
Lama». (En 2002, se informó de la presencia
ictus), quedó probado que los fallos en la
la pantomima. La bibliografía neurológica
de neuronas espejo fuera del área F5, en
comprensión del lenguaje se debían a tras­
reseña que los pacientes con trastornos de
una región sensomotora del lóbulo parietal
tornos en la región auditiva y no al hipoté­
lenguaje (afasias) suelen presentar fallos
del mono, llamada PF.)
tico sistema especular. Se ha comprobado
en el reconocimiento de pantomimas, al
The Myth of Mirror Neurons, The Real
que, si bien hay pacientes con deterioro en
identificar en ellos un gesto intencional.
Neuroscience of Communication and Cog-
la circuitería motora que presentan mer­
Su interés para el funcionamiento de las
nitio refleja la frustración de Gregory Hic­
mas sutiles en la percepción del lenguaje,
neuronas espejo resulta manifiesto: el
kok, profesor de ciencia cognitiva de la Uni­
no ocurre lo mismo con otros pacientes
reconocimiento de la pantomima puede
versidad de California en Irvine y director
con la misma alteración. De hecho, se da
construirse como una forma de compren­
de su centro de ciencia del lenguaje, ante
percepción del habla en pacientes que han
sión de la acción. El equipo de Parma su­
la persistencia de tales declaraciones exa­
sufrido daños en sus centros cerebrales
gería que la lesión del área de Broca era la
geradas sobre esas células. Hickok reexa­
motores y podemos entender acciones que
causante de los fallos en el reconocimiento
mina la historia de las neuronas espejo
no podemos acometer. Alguno distinguiría
de la pantomima.
y pone al descubierto la debilidad de sus
con razón entre Rizzolatti y sus epígonos;
A finales de los años noventa, los teóri­
apuntalamientos: un par de supuestos de­
el primero ha mantenido siempre que las
cos propusieron que las células aportaban
pendientes de código sobre la actividad de
neuronas espejo no bastan para el lenguaje
una forma nueva y elegantemente senci­
las neuronas espejo y la comprensión hu­
o la comprensión de la acción, en tanto que
lla de explicar la evolución del lenguaje,
mana. Apoyándose en un amplio espectro
la postura radicalista sería privativa de los
el desarrollo de la empatía humana y el
de observaciones procedentes de las inves­
segundos.
fundamento neural del autismo. Siguió
tigaciones sobre conducta animal, técnicas
La intervención de las neuronas espejo
toda una cohorte de estudios científicos
de neuroimagen, trastornos neurológicos,
es limitada, al menos en el contexto de las
que implicaron a las neuronas especulares
etcétera, va desmoronando tales bases. No
capacidades humanas cuya viabilidad se
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les atribuye. No olvidemos que la piedra
mono se convierta en plantilla neural del
esta y por qué la realiza. El mono «sabe»
angular teórica es una clase de células de la
lenguaje humano, la empatía, el autismo y
lo que está ejecutando y por qué. La mente
corteza motora de un animal que no puede
muchos comportamientos más? La razón
del primate inquisitivo desea conocer qué
hablar, ni apreciar la música ni mostrarse
aducida es sumamente sencilla y, por ello,
es lo que otros monos saben de sus propias
amistoso con sus congéneres. ¿Cómo admi­
atractiva. Cuando el mono busca un obje­
intenciones.
tir que una célula de la corteza motora del
to, «entiende» su propia acción, el fin de
—Luis Alonso
Cartografiando la experiencia espiritual
La espiritualidad es una cualidad innata del cerebro y, como tal,
debe poseer una función biológica
la espiritualidad y la religión no quedará
cial, los usos de una amplia variedad de
defraudado, ya que encontrará un repa­
drogas, como la mescalina y la ayahuasca
so exhaustivo a la cartografía cerebral de
de los nativos en Sudamérica, el cornezuelo
ambas.
en la antigua Europa o el LSD en la Euro­
La tradicional separación entre mente y
pa contemporánea, todos ellos con fines
cerebro, fruto del dualismo que impregna
espirituales. Estas drogas, utilizadas para
nuestra cultura occidental, no tiene senti­
acceder a la consciencia inhibida, reciben
do desde el punto de vista del neurocien­
también el nombre de enteógenas, es decir,
tífico; la distinción entre materia y espíritu
son sustancias que generan la presencia
queda obsoleta una vez descartado el dua­
de un ente (de un dios, en realidad) dentro
lismo; por ello, el autor se permite acuñar
de nuestro propio cerebro. De hecho, el
un neologismo para aquello que constituye
uso de drogas enteógenas podría ser tan
nuestro cerebro: «espiriteria».
antiguo como la humanidad: la coca se
El problema de qué entendemos por es­
utiliza en los Andes desde hace al menos
piritualidad va ligado a uno de los retos
7000 años, mientras que el soma de los
más complejos a los que se enfrenta la neu­
vedas (y después de Huxley en su mundo
rociencia actual, a saber, la definición de la
feliz), una bebida probablemente a base de
consciencia. Se señala que existen dos ti­
hongos alucinógenos, ya se menciona en
pos de consciencia: la del estado de vigilia,
1500 a.C. en la India. Estas drogas actúan
aquella en la que nos encontramos usted
sobre los sistemas de neurotransmisores
mientras lee esta reseña y yo mientras la
cerebrales, siendo las más potentes enteó­
EL CEREBRO ESPIRITUAL
escribo, y la inhibida, a la que se accede
genas aquellas que modulan los niveles de
Por Francisco J. Rubia. Fragmenta Editorial,
con dificultad mediante estados alterados,
dopamina y de serotonina.
Barcelona, 2015.
y que, según el autor, son la base de la ex­
¿E
periencia espiritual.
Cada región del cerebro es rica en un
conjunto específico de neurotransmisores,
s la experiencia espiritual un fe­
Así pues, deben existir regiones en el
la señalización mediante los cuales ejerce
nómeno cultural o una cualidad
cerebro que, al ser estimuladas, generen
una función concreta. Por ejemplo, las neu­
intrínseca de nuestro cerebro? El
la experiencia espiritual. La humanidad
ronas del sistema de recompensa cerebral,
profesor Francisco J. Rubia no tiene duda
ha buscado desde antiguo rutas de acceso
indispensable para la supervivencia del or­
alguna: lo segundo. Desde su primer ca­
a esta experiencia: desde la inducción de
ganismo, utilizan dopamina. Se cree que la
pítulo, El cerebro espiritual nos revela un
estados de trance chamánicos mediante
dopamina de la región prefrontal señala el
claro objetivo: explicar la espiritualidad
el ayuno o melodías repetitivas hasta la
valor de los estímulos que percibimos, por
desde un punto de vista biológico y los
ingesta de sustancias psicoactivas. A lo
lo cual la ingesta de sustancias que eleven la
mecanismos cerebrales que la subyacen.
largo de varios capítulos de este libro, re­
dopamina podría incrementar la importan­
El lector interesado en la neurobiología de
corremos, en un contexto histórico y so­
cia de los estímulos y episodios ocurridos
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LIBROS
en los rituales espirituales. De hecho, enfer­
este respecto: una de las consecuencias de
ligión no puede existir sin espiritualidad,
medades del sistema nervioso que cursan
la espiritualidad es la tendencia a personifi­
la espiritualidad es independiente de la re­
con excesos o déficits de dopamina hacen
car a seres inanimados, lo cual proporciona
ligión, pero, además, es la fuente de esta. En
que quienes las padecen sufran cambios en
ventajas para la supervivencia. Así, ver un
cuanto a los posibles beneficios biológicos
su espiritualidad. Por ejemplo, las personas
individuo en una roca no nos perjudica,
de la religión, encontramos el aumento de
con párkinson, que cursa con degeneración
mientras que no reconocer a un predador
la cooperación en el grupo y el alivio de las
de neuronas dopaminérgicas, tienden a ser
por confundirlo con un objeto inanimado
tensiones internas en él.
menos espirituales, mientras que las perso­
puede ser fatal. Sin embargo, también es
El origen de la religión podría también
nas con esquizofrenia lo son más.
posible que la espiritualidad no sea más
deberse al impulso antropomorfizador del
Además de la corteza prefrontal, otras
que un subproducto de la evolución, sin
ser humano. La magia supone la capacidad
regiones cerebrales como la amígdala y
una función concreta. Para algunos auto­
de los humanos de manipular el mundo
el hipocampo podrían ser cruciales para
res, la espiritualidad no es más que un
a voluntad; cuando esta falla surge la re­
la experiencia espiritual. La estimulación
subproducto de la autoconsciencia. Pero
ligión, que delega los poderes en un ser
de estas estructuras, mediante drogas en­
esta explicación no hace más que aplazar
superior.
teógenas, puede dar lugar a experiencias
el problema porque, entonces, ¿qué función
de abandono del cuerpo. Además, estas
adaptativa tiene la autoconsciencia?
En conclusión, el profesor Rubia nos con­
vence de que tener una mente humana no
estructuras participan en las conductas
Si bien para el autor la espiritualidad es
significa tener religión, pero sí poseer la
sexuales o agresivas, explicando que es­
una cualidad innata, la religión no lo es, ya
capacidad de adquirirla a través de una es­
tas acompañen a la experiencia mística.
que se trata de un constructo de tipo social.
piritualidad innata. La espiritualidad sería,
El orgasmo, de hecho, produce cambios
La religión sería una espiritualidad institu­
pues, la parte subjetiva de la actividad de
similares en las estructuras cerebrales a
cionalizada. Con frecuencia escuchamos
estructuras mentales que están al servicio
los éxtasis místicos.
que la religión es innata, ya que no existen
de la supervivencia. La única característica
Si la espiritualidad es innata, biológica,
sociedades humanas que carezcan de reli­
humana común a todos los seres espiritua­
debería estar sujeta a la evolución cerebral,
gión, pero el autor puntualiza: las socieda­
les que la mente humana imagina es, de
es decir, debería haber resultado beneficiosa
des animistas y chamánicas, o sociedades
hecho, que están dotados de mente.
para la supervivencia durante la evolución.
como la budista, no pueden considerarse
El autor nos ofrece diversas posibilidades a
religiosas, solo espirituales. Mientras la re­
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