Download Español - SciELO Argentina

Document related concepts

Manguito de los rotadores wikipedia , lookup

Músculo redondo menor wikipedia , lookup

Músculo deltoides wikipedia , lookup

Hombro wikipedia , lookup

Fractura del húmero wikipedia , lookup

Transcript
Rev Asoc Argent Ortop Traumatol
Año 74, pp 290-296
Artroplastia reversa de hombro
Indicaciones y técnica quirúrgica
SEBASTIÁN E. VALBUENA,1 IGNACIO SERÉ,2,3
ENRIQUE E. PEREIRA2,3 y PHILIPPE VALENTI4
Servicio de Ortopedia y Traumatología. Hospital Interzonal El Cruce. Buenos Aires, Argentina
Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas (CEMIC), Buenos Aires, Argentina
Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento (IADT). Buenos Aires, Argentina
Departamento de Cirugía del Hombro. Institut de la Main, Clinique Jouvenet, Paris, Francia
Introducción
La “artropatía del manguito de los rotadores” hace
referencia a aquellas artrosis glenohumerales secundarias
a roturas masivas del manguito, de tipo excéntrico, en las
que existe una alteración del normal centrado de la cabeza humeral con la glena. Descrita por Neer en 1983,9 fue
luego clasificada por Hamada y cols.1 de acuerdo con su
comportamiento radiográfico (Tabla 1).
La alteración anatómica y biomecánica resultante
puede generar un cuadro clínico muy doloroso e incapacitante, denominado “hombro seudoparalítico”, caracterizado por la pérdida de la movilidad activa del hombro
con relativa conservación de la movilidad pasiva. El tratamiento de esta artropatía representa un verdadero desafío terapéutico y continúa siendo controvertido. La prótesis anatómica total de hombro asociada con una rehabilitación estándar, propuesta inicialmente, fue abandonada
debido al rápido aflojamiento del componente glenoideo
a causa de las fuerzas cizallantes producidas por la incongruencia entre la glena y el componente humeral.1-13 La
prótesis parcial (hemiartroplastia) otorga modestos resultados sobre el dolor y limitada mejoría sobre la función.4
Con el afán de brindar una solución más predecible a
este difícil problema, surgieron nuevos conceptos y diseños de prótesis; así, aparecieron en el mercado las prótesis reversas semiconstreñidas y constreñidas. En 1985,
Paul Gramont8,6 demuestra en sus trabajos biomecánicos
que la medialización y el descenso del centro de rotación
de las prótesis reversas aumentan el brazo de palanca del
Recibido el 6-4-2009.
Correspondencia:
Dr. SEBASTIÁN VALBUENA
[email protected]
deltoides y, por consiguiente, su fuerza, permitiendo, aun
en ausencia de un manguito de los rotadores funcionante,
la abducción y la elevación anterior eficaces. Desde
entonces comienza una nueva etapa en el tratamiento utilizando la prótesis glenohumeral reversa (PGHR) de
hombro. El objetivo de esta comunicación es exponer las
indicaciones, contraindicaciones y detalles técnicos de la
colocación de este implante.
Indicaciones
Las indicaciones actuales para la prótesis reversa de
hombro pueden dividirse en absolutas y relativas.
Indicaciones absolutas
A. Artrosis glenohumeral excéntrica grados 4 y 5 de la
clasificación de Hamada y cols.
Tabla 1. Clasificación radiográfica de las lesiones del
manguito de los rotadores según Hamada y cols.
Grado I
Intervalo acromiohumeral mayor de 6 mm
Grado 2
Intervalo acromiohumeral es igual o menor de
5 mm
Grado 3
Acetabulización del acromion
Grado 4
Grado 3 más disminución del espacio glenohumeral
Grado 5
Colapso de la cabeza humeral, estadio final de
la artropatía secundaria a rotura del manguito
de los rotadores (cuff tear arthropathy)
Año 74 • Número 3 • Septiembre de 2009
B. Artrosis glenohumeral primaria o postraumática
asociada con rotura masiva del maguito rotador no reparable.
C. Hombro seudoparalítico secundario a rotura masiva
no reparable del manguito de los rotadores, con elevación
anterior activa de hombro inferior a 60°, en pacientes
mayores de 65 años que no mejoran luego de un exhaustivo tratamiento de rehabilitación durante un mínimo de
6 meses. En personas jóvenes, ante la imposibilidad de
reparación del manguito con colgajos musculares, o en
quienes conservan la elevación activa es preferible la
colocación de una hemiartroplastia (componente humeral).
D. Hombro seudoparalítico secundario a la realización
de una acromioplastia más sección del ligamento coracoacromial en pacientes con rotura completa del maguito de
los rotadores.11
E. Revisión de una artroplastia de hombro asociada con
roturas del manguito.
F. Resección oncológica de tumores de húmero proximal que incluyan el manguito de los rotadores y sean no
reconstruibles con aloinjerto óseo y transferencias tendinosas.
Artroplastia reversa del hombro
291
Planificación preoperatoria
a. Radiografías: proyecciones anteroposterior verdadera, lateral y axilar en vuelo de pájaro. Con estas proyecciones puede calcularse el tamaño protésico utilizando
los cartabones. Puede completarse el estudio con radiografía anteroposterior con tracción distal del brazo, que
permite evaluar el descenso de la cabeza humeral y el
consiguiente grado de retracción de las partes blandas.
b. Tomografía computarizada del hombro con inclusión
de toda la escápula y cortes axiales cada 2 mm con
reconstrucción coronal para valorar la calidad, el tamaño,
la profundidad y el espesor de la glena, que permita
determinar la viabilidad para la colocación del componente glenoideo.
c. Estudios de laboratorio: en casos de infección previa
la eritrosedimentación y los niveles de proteína C reactiva cuantitativa y, eventualmente, la punción-biopsia ósea
son elementos para considerar.
d. Electromiograma: ante la duda sobre la funcionalidad del deltoides deberá realizarse un EMG y velocidad
de conducción para el nervio axilar. La presencia de un
deltoides no funcionante contraindica la colocación de
una prótesis reversa.
Indicaciones relativas
A. Artrosis glenohumeral secundaria a artritis reumatoide: la afección del manguito de los rotadores o su posible lesión en el futuro contraindicarían la colocación de
una prótesis glenohumeral anatómica. El problema que se
plantea en este tipo de pacientes es la calidad ósea de la
glena, que condiciona la fijación del componente glenoideo. La alternativa terapéutica a la PGHR sería una artroplastia del componente humeral.
B. Fracturas del extremo proximal del húmero en
pacientes mayores de 75 años:
• Fractura y fractura/luxación de cuatro fragmentos con
tuberosidades osteoporóticas y conminutas y un manguito de los rotadores atrófico con degeneración grasa.
• Fracturas conminutas con destrucción de la superficie
articular de más del 40% y un manguito de los rotadores atrófico con degeneración grasa.
• Fracaso de osteosíntesis en fracturas o fracturas-luxaciones irreducibles y en casos de consolidación viciosa
de las tuberosidades.
Contraindicaciones
• Infección activa.
• Disfunción del deltoides (neurológica o estructural) ya
que es el único motor funcionante de la artroplastia.
• Déficit de capital óseo glenoideo que impida la colocación del implante.
• Pacientes jóvenes (exceptuando procedimientos de rescate).
Técnica quirúrgica
Anestesia: recomendamos la anestesia general asociada
con la colocación de un catéter interescalénico, que brinda
comodidad y analgesia posoperatoria durante 48 horas, lo
que permite comenzar rápidamente la rehabilitación.
Posicionamiento: se coloca al paciente semisentado en
“posición de silla de playa”, con el brazo totalmente libre
e incluido en el campo quirúrgico, de manera de permitir
su retropulsión y abducción.
Vía de abordaje: recomendamos para la cirugía primaria la realización de una incisión anteroexterna. (Fig. 1).
Está incisión comienza a nivel de la articulación acromioclavicular y sigue el borde anterior del acromion
hacia distal; evitamos extendernos más de 5 cm del borde
externo del acromion para no lesionar el nervio axilar. A
continuación se desinserta en forma subperióstica el fascículo deltoideo anterior (Fig. 2). El ligamento acromiocoracoideo y la bursa subacromial se escinden por completo, visualizándose directamente la cabeza humeral.
Utilizamos la vía deltopectoral en casos de cirugía previa de hombro por ese abordaje o en casos de revisiones
protésicas. Esta vía tiene la ventaja de no desinsertar el
deltoides, pero requiere una completa sección del tendón
subescapular y ofrece un acceso y visión más limitados
de la glena. La superioridad de una u otra vía no ha sido
validada aún, pero parecería que las luxaciones son más
frecuentes con la vía deltopectoral, debido tal vez a la
sección del subescapular.2
292
Valbuena y cols.
Figura 1. Incisión anteroexterna recomendada para la cirugía
primaria.
A
B
Figura 2. Abordaje entre los fascículos anteriores y medio
del deltoides, y desinserción del deltoides anterior del
acromion. Obsérvese el nervio axilar ubicado a unos 6 cm
distal al acromion.
Rev Asoc Argent Ortop Traumatol
Liberación de las partes blandas: se deben resecar con
bisturí eléctrico la bursa subacromial, el ligamento coracoacromial y los residuos del manguito de los rotadores.
El límite posterior para esta resección está marcado por el
redondo mayor; hacia anterior es posible resecar hasta el
tercio superior del subescapular, a fin de bajar y afrontar
la cabeza humeral a la glena. Este detalle permitirá no
sólo ser económico con los cortes óseos y evitar la colocación de una prótesis muy baja y, en consecuencia, inestable, sino también una mejor visualización de la glena.
Se debe realizar una tenotomía simple y resección de la
parte intraarticular del tendón del bíceps en aquellos
casos en que no se lo encuentra roto.
Osteotomía humeral: la sección ósea debe ser económica, comenzando en la unión entre el cartílago cefálico
y el troquíter. La guía de corte humeral debe introducirse
en el húmero por detrás del origen de la corredera bicipital para alinearse mejor a la diáfisis humeral. Una vez
introducida, se coloca el tallo guía en 10º de retroversión
humeral, alineándolo luego al antebrazo del paciente
(Fig. 3). Los 10º de retroversión son necesarios para equilibrar las rotaciones y no limitar demasiado la rotación
interna, que rara vez sobrepasa el nivel sacro con este tipo
de prótesis.
La osteotomía de la cabeza debe realizarse a 155º
siguiendo el eje de la guía de corte y teniendo como
orientación final de corte el borde inferior de la glena
(Fig. 3). Se continúa con la preparación de la epífisis y la
diáfisis humeral con raspas crecientes sucesivas, hasta la
obtención de una sensación de frote cortical “duro”,
dejando esta última raspa en el interior del húmero para
su protección durante la preparación del componente glenoideo. Si en el momento de prueba hay dificultad para la
reducción de la prótesis o parece demasiado “apretada”
(el omóplato bascula inmediatamente al comenzar la
abducción del brazo) puede realizarse un nuevo recorte
óseo humeral.
Preparación de la glena: el húmero se separa hacia
abajo con la ayuda de un separador de tipo Homman
sobre el pilar inferior del omóplato. En la vía de abordaje anteroexterna el cirujano se encuentra delante de la
glena. Se despega la cápsula articular y se la escinde por
completo con bisturí eléctrico de manera circular, manteniéndose siempre en contacto con el borde de la glena
(sobre todo en la parte inferior para evitar la lesión del
nervio axilar). Este gesto permite apreciar la orientación
y la dimensión de la glena. Se coloca un separador hacia
anterior y uno hacia posterior (además del inferior), y se
marcan con electrobisturí los ejes horizontal y vertical de
la glena, determinando cuatro cuadrantes y el centro (Fig.
4). Se coloca una clavija de Kirschner perpendicular a la
glena en su centro y se pasa una mecha canulada con tope
a fin de preparar el orificio central, para comenzar con el
fresado. Este se realiza perpendicular a la glena retirando
a la vez el cartílago y el hueso subcondral para mediali-
Año 74 • Número 3 • Septiembre de 2009
Artroplastia reversa del hombro
A
293
B
Figura 3. Posicionamiento de la guía de corte humeral en 10º de retroversión (A), y osteotomía humeral a 155º (B).
zar la glenoesfera (respetando así los principios biomecánicos básicos de la prótesis reversa).
Colocación del componente glenoideo (platillo metalico posterior o Metaglena, y de la glenoesfera): se posiciona el platillo metálico posterior definitivo en el orifico
para el perno central y se impacta para obtener un contacto homogéneo entre el fondo recubierto de hidroxiapatita y la superficie fresada de la glena. Debe implantarse
perpendicular a la glena o, en su defecto, con ligera orientación inferior para evitar el conflicto entre el implante
humeral y el pilar del omóplato, que llevaría al aflojamiento precoz del implante (Fig. 5). Por esta razón es
necesario tener una buena exposición de la parte inferior
de la glena para no fresar excesivamente su parte superior
y colocarla con “tilt” superior. Se fija el patillo metálico
posterior con dos tornillos de 5,5 mm de diámetro, uno
inferior dirigido hacia el pilar del omóplato y otro superior dirigido hacia la base de la apófisis coracoides. Es
necesario evitar la salida de este último tornillo hacia
posterior debido al riesgo de lesionar el nervio subescapular.3 La glenoesfera definitiva se solidariza al platillo
metálico posterior por encastre y atornillado.
Colocación de la prótesis de prueba. Control de la
movilidad y estabilidad de la prótesis: la prótesis de
prueba se coloca en el húmero con 10º de retroversión. La
reducción del húmero se realiza mediante tracción y
abducción del brazo, permitiendo el deslizamiento entre
la cúpula humeral y la glenoesfera. Es importante apreciar si la prótesis no está muy “apretada” o muy “floja”,
causas de dolor, limitación de la movilidad o inestabilidad posoperatoria.
El objetivo es obtener una abducción entre 0º y 60º sin
que se mueva el omóplato. Si este bascula inmediata-
Figura 4. Correcta exposición de la glena, su división en
cuatro cuadrantes y localización del centro donde deberá
introducirse la clavija guía de la fresa.
mente al comenzar la abducción la prótesis se encuentra
demasiado “apretada” y es necesario realizar una liberación de las partes blandas o un recorte óseo.
Este es un escenario de cierta frecuencia en casos con
rigidez preoperatoria importante, manifestado por ausencia de reducción en las radiografías con tracción distal.
Por el contrario, si la prótesis parece muy “floja” o inestable se pueden utilizar cúpulas humerales de mayor
294
Valbuena y cols.
A
Rev Asoc Argent Ortop Traumatol
B
Figura 5. A. y B. La metaglena debe implantarse perpendicular a la glena o en su defecto con ligera orientación inferior
a fin de evitar el conflicto entre el implante humeral y el pilar del omoplato (“tilt” superior) que pueden llevar a un aflojamiento
precoz de la prótesis.
espesor o una glenoesfera más grande. Las cúpulas de
mayor espesor limitan más la movilidad y también generan mayor fuerza de fricción sobre la metaglena. La falta
de coaptación significativa entre la glenoesfera y la cúpula humeral es causa de luxación protésica.
Una manera útil de medir la correcta tensión del deltoides es la introducción del espesor de un dedo entre la glenoesfera y la cúpula humeral. (Fig. 6) La prueba de Boileau
Figura 6. Método de verificación de tensión: deltoides sin una
tensión excesiva.
es la sensación de la tensión del tendón conjunto con el
codo en extensión y el brazo al costado del cuerpo, e indica una buena tensión del deltoides.
Es necesario, además, verificar que al colocar el brazo en aducción no exista conflicto interno debido a un
osteofito inferior que pueda generar una luxación superoexterna.
Con el brazo en abducción de 90°, será necesario alcanzar valores aceptables de rotación externa e interna, y
verificar en esas posiciones la estabilidad de la prótesis.
Colocación del implante humeral definitivo: el componente humeral debe colocarse en 10º de retroversión con
cemento o sin él, según el tipo de prótesis utilizado.
Recomendamos el cementado del vástago humeral cuando el hueso es muy osteoporótico, en ausencia de epífisis
ósea, o en casos raros de fracturas en cuatro fragmentos
en pacientes ancianos. Es posible utilizar una prótesis
humeral recubierta con hidroxiapatita en las porciones
metafisaria y epifisaria, y cementar sólo la diáfisis, rellenando con hueso esponjoso la interfaz metafisoepifisariaprótesis.
Se reduce la prótesis mediante tracción distal y abducción.
Se coloca un drenaje de vacío para drenar el hematoma
de formación constante en este tipo de cirugía debido al
espacio muerto generado entre el deltoides y la prótesis.
Se reinserta el deltoides anterior mediante puntos transóseos con sutura irreabsorbible. Se coloca un cabestrillo
durante 21 días.
Reeducación posoperatoria: la rehabilitación debe
comenzar en el primer día de la operación y consiste en
movilización pasiva suave, llevando el hombro a la
abducción, elevación y rotaciones de manera indolora. La
Año 74 • Número 3 • Septiembre de 2009
Artroplastia reversa del hombro
crioterapia y la electroterapia se realizan por 21 días. Los
ejercicios activos comienzan a partir de la tercera semana
reforzando los rotadores externos (deltoides posterior y
redondo menor). La reeducación del deltoides comienza
295
con contracciones isométricas para pasar luego progresivamente hacia un trabajo excéntrico. El trabajo contra
resistencia comienza a partir del tercer mes de la operación (Fig. 7).
Figura 7. Caso ilustrativo. Lesión del manguito de los rotadores de tipo 3 de la clasificación de Hamada y cols.
Hombro seudoparalítico con elevación anterior inferior a 50º. Resultados radiográfico y clínico de la colocación de una prótesis
glenohumeral reversa.
Bibliografía
1. Bohsali KI, Wirth MA, Rockwood CA, Jr. Complications of total shoulder arthroplasty. J Bone Joint Surg Am
2006;88(10):2279-92.
2. Boileau P, Watkinson DJ, Hatzidakis AM, et al. Grammont reverse prosthesis: design, rationale, and biomechanics.
J Shoulder Elbow Surg. 2005; 14: (Suppl 1)S 147-61.
3. De Wilde L, Mombert M, Valpetegem P, et al. Revision of shoulder replacement with a reversed shoulder prosthesis (Delta
III): Report of five cases. Acta Orthop Belg 2001;67:348-53.
4. Frankle M, Siegal S, Pupello D, et al. The Reverse Shoulder Prosthesis for glenohumeral arthritis associated with severe
rotator cuff deficiency. A minimum two-year follow-up study of sixty patients. J Bone Joint Surg Am 2005;87(8):1697-705.
296
Valbuena y cols.
Rev Asoc Argent Ortop Traumatol
5. Franklin JL, Barrett WP, Jackins SE, et al. Glenoid loosening in total shoulder arthroplasty. Association with rotator cuff
deficiency. J Arthroplasty 1988;3(1):39-46.
6. Grammont P, Trouilloud P., Laffay JP, et al. Etude et réalisation d’une nouvelle prothèse d’épaule. Rhumatologie 1987;
39(10):407-18.
7. Hamada K, Fukuda H, Mikasa M, et al. Roentgenographic findings in massive rotator cuff tears. A long-term observation.
Clin Orthop Relat Res 1990 (254):92-6.
8. Kats D, O’Tolle G, Cosgwell L, et al. A history of the reverse shoulder prosthesis. Int J Shoulder Surg. 2007;1(4):108-13.
9. Neer CS2nd, Craig EV, Fukuda H. Cuff tear arthropathy. J Bone Joint Surg Am 1983;65:1232-44.
10. Sirveaux F, Favard L, Oudet D, et al. Grammont inverted total shoulder arthroplasty in the treatment of glenohumeral osteoarthritis with massive rupture of the cuff. Results of a multicenter study of 80 shoulders. J Bone Joint Surg Br 2004;86(3):388-95.
11. Valenti P. Décompression sous acromiale sous arthroscopie. Chir. Main 2006;25(Suppl.1)S22-8.
12. Valenti P, Boutens D, Nerot C. Delta 3 reversed prosthesis for arthritis with massive rotator cuff tear: long term results (>5
years). En Walch G, Boileau P, Mole´ D, eds. 2000 shoulder prostheses 2 to 10 year follow up. Montpelier; Sauramps Medical;
2000. p. 253-59.
13. Wirth MA, Rockwood CA, Jr. Complications of total shoulder-replacement arthroplasty. J Bone Joint Surg Am 1996;
78(4):603-16.