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Bargalló, M.; Forgas, E.; Garriga, C.; Rubio, A.; Schnitzer, J. (eds.) (2001): Las
lenguas de especialidad y su didáctica, Tarragona: Universitat Rovira i Virgili,
pp. 91-102.
4. LA TERMINOLOGÍA INFORMÁTICA EN ESPAÑOL1
Gloria Clavería, Carmen Morales y Joan Torruella
Seminario de Filología e Informática
Universitat Autònoma de Barcelona
1. INTRODUCCIÓN
No existe duda de que uno de los aspectos esenciales de las lenguas de
especialidad es el léxico, por cuanto éste "refleja las características de
organización de la disciplina mediante un intento de suministrar tantas
unidades léxicas como conceptos convencionalmente establecidos existan en
el subespacio" (J. C. Sager, 1993: 42). Se reconocen, sin embargo, otras
particularidades lingüísticas importantes en las lenguas de especialidad, entre
ellas podemos destacar, siguiendo a P. Lerat (1997: 25-26), la preponderancia
del medio escrito, y algunos rasgos morfosintácticos y estilísticos que explican
que las lenguas de especialidad deban ser concebidas como plurisistemas.
Siguiendo esta concepción y aplicándola a la terminología informática de
la lengua española, a nuestro modo de ver, destacan entre sus características
esenciales:
1) Desde el punto de vista léxico o estrictamente terminológico, la
dependencia del inglés, puesto que es en esta lengua en la que se
acuñan por primera vez los términos que designan los conceptos de
esta actividad específica.
2) Desde el punto de vista expresivo y estilístico, existen también
características propias, que no deben ser desatendidas al estudiar
esta lengua de especialidad.
Los aspectos que se acaban de señalar como peculiares de la
terminología informática se han planteado continuamente al elaborar la Guía de
1
La investigación necesaria para desarrollar este trabajo ha sido parcialmente financiada con una ayuda
de la DGICYT para el proyecto "Informatización y etiquetado del Diccionario Crítico Etimológico
Castellano e Hispánico (DCECH) de J. Corominas y J. A. Pascual" (nº de referencia PB95-0656) y con el
apoyo del Comissionat per Universitats i Recerca de la Generalitat de Catalunya (nº de referencia
1997SGR-00125).
uso del programa que gestiona el CD-ROM de Don Quijote de la Mancha,
edición dirigida por Francisco Rico (1998)2. Este programa es una adaptación
al español del original italiano DBT (Data Base Testuale), elaborado por
Eugenio Picchi del Istituto di Linguistica Computazionale de Pisa.
Se analizarán a continuación los problemas surgidos al adaptar al español
la terminología empleada en la Guía de uso, y con ello se presentarán algunos
de los rasgos más importantes de esta lengua de especialidad.
2. CARACTERÍSTICAS LÉXICAS
La lengua de los textos y manuales informáticos está muy influida por el
3
inglés , debido a que la mayor parte de investigaciones y avances en dicha
disciplina se producen en países de cultura anglófona. Esta influencia tan
notable ha llevado y está llevando a los textos españoles dedicados a la
materia a tener una importante dependencia del inglés (cf. M. Lanzarone,
1997), cosa que puede tener como consecuencia la generación de un léxico
especializado alejado de los patrones lingüísticos del español.
Si se analiza la historia que ha presentado la disciplina informática en
España, se observa que a una primera etapa de gran especialización, en la que
los manuales sólo estaban escritos en lengua inglesa, ha seguido un estadio de
difusión en el que usuarios no especializados han incorporado rápidamente los
avances de esta técnica a su mundo laboral o doméstico. En unos pocos años,
pues, la informática se ha ido extendiendo como una herramienta de trabajo
utilizada por todo tipo de personas. La existencia de un número tan elevado de
usuarios provoca que términos informáticos especializados hayan pasado a ser
patrimonio de hablantes medianamente informados. Dicho vocabulario traspasa
las fronteras de los especialistas para invadir, pues, las diferentes esferas de la
sociedad; de este modo, el léxico informático aparece tanto en las revistas
especializadas como en cualquier otra publicación de contenido más general.
Esta difusión masiva no ha hecho sino recrudecer una situación de caos
terminológico originado en los inicios de esta técnica: lucha entre los términos
ingleses y los términos que resultan de la adaptación de aquellos al español.
Asimismo, debido a su constante desarrollo, este vocabulario técnico adolece
2
La Guía de uso ha sido realizada en el Seminario de Filología e Informática del Departamento de
Filología Española de la UAB.
3
Se ha puesto de manifiesto en la ponencia de Ángel Martín Municio en este mismo simposio.
de cierta inestabilidad léxico-semántica. La renovación terminológica en esta
área es muy rápida debido a la incesante sucesión de las innovaciones
tecnológicas. Los objetos obsoletos desaparecen junto con su denominación:
tarjetas perforadoras, unidad de cinco y cuarto (5¼), tarjeta gráfica Hércules,
lector de cinta, etc.; el mismo CD-ROM ya va camino de desaparecer sustituido
por un nuevo sistema denominado DVD (Digital Versatil Disc), con muchísima
más capacidad de almacenaje de datos. Se advierte, así, la estrecha relación
que en toda terminología se establece entre la situación de avance tecnológico
y la expresión de su vocabulario (M. Lanzarone, 1997: 427-28).
La terminología informática en la lengua inglesa se nutre de dos fuentes
distintas: por un lado, incorpora elementos léxicos de la lengua general,
dándoles un significado específico, y, por otro lado, crea elementos nuevos,
muchos de ellos de base latina. El diferente origen etimológico de los términos
ingleses (germánico o latino) provoca una mayor o menor aceptación por parte
de una lengua como el español, que bebe de la lengua inglesa a la hora de
crear su propia terminología. Las formas inglesas de procedencia latina
resultan mucho menos extrañas a los usuarios españoles debido a la relación
genética entre latín y español; son ejemplos las voces registro, terminal,
periférico, monitor, comando, etc., que proceden del latín registrum, terminalis,
periferia, monere y commandare (en algunas ocasiones a través de una forma
intermedia francesa) .
Los términos ingleses que no tienen un origen latino sino germánico
resultan totalmente novedosos en una lengua como el español (no sólo en
cuanto a su significado, como los primeros, sino también en cuanto a su forma).
Voces como chip, reset, buffer, backup o byte pueden despertar mayor rechazo
que las anteriores, pero a su vez conforman un grupo léxico totalmente
diferenciado, factor que, unido al prestigio que les da su origen inglés, funciona
como reclamo para los especialistas que los adoptan como elementos de su
lengua de especialidad. Ello es bien evidente en términos como hardware y
software, que han adquirido gran arraigo frente a las adaptaciones españolas
soporte físico y soporte lógico4 (F. Lázaro Carreter, 1987). Suelen ser términos
4
Compárense las traducciones catalanas programari y maquinari (Yzaguirre, 1995).
ingleses de origen familiar y coloquial (M. Lanzarone, 1997) exponentes de
que:
l'inglese dell'informatica gode di grande libertà nella formazione di nuove
parole e attinge molto di frequente a termini colloquiali e comuni che, pur
subendo nel passaggio in un linguaggio così specializzato una forte
cristallizzazione, mantengono comunque la loro originaria forza
espressiva [...]. Così differenti parti di memoria si chiamano: bucket
'secchio', cache 'nascondiglio', buffer 'tampone'
Todos esos problemas que se acaban de plantear han aparecido
constantemente al adaptar el programa informático DBT al español y al
redactar su Guía de uso. En la elaboración de estos productos se ha
procurado, siempre que ha sido factible, rehuir los extranjerismos superfluos e
innecesarios; se ha intentado, pues, usar un léxico que, sin dejar de ser
especializado, se acercara al español de la manera más respetuosa posible,
tanto por lo que se refiere al contenido semántico como por lo que se refiere a
la estructura formal de las unidades léxicas y de los sintagmas. De este modo,
se han utilizado palabras de nuestra propia lengua o calcos que siguieran su
estructura, y se ha intentado respetar la tradición que ya existe dentro de la
misma terminología informática recurriendo, sólo en determinadas ocasiones,
al préstamo léxico adaptado o, en último término, al préstamo sin adaptar.
2.1. PRÉSTAMOS DE SIGNIFICADO Y CALCOS
En los préstamos semánticos, el significante es siempre un elemento
léxico ya existente en la lengua; el término en cuestión adquiere un nuevo
significado (en este caso un significado especializado propio de la informática
que conforma una nueva acepción de la palabra) debido a la influencia que,
sobre dicho término, han ejercido la forma y el uso del referente inglés.
En los préstamos de significado y los calcos (C. Nicolas, 1994) podemos
distinguir aquellos casos que afectan a una sola palabra o unidad (2.1.1.), de
aquellos que afectan a toda una estructura sintagmática (2.1.2.).
2.1.1. UNIDADES MONOLÉXICAS
Al indagar en la formación de los términos ingleses, se advierte que en
muchos casos se trata de formas de origen latino. Este grupo de voces
presenta gran aceptación en español porque el término se integra en un léxico
de procedencia mayoritariamente latina; de este modo, la estructura de la
palabra no plantea problemas formales. Dentro de los préstamos semánticos
monoléxicos podrían establecerse dos grupos atendiendo a la relación formal
entre el término inglés y el término español.
El primer grupo presenta una gran aceptación en la lengua debido a las
relaciones de paronimia o semejanza formal entre la palabra inglesa y la
española:
- directorio (ing. directory, de origen latino).- Al igual que en inglés entra
a formar parte de una extensa familia léxica: subdirectorio, directorio
raíz, etc. Esta forma se abrevia a menudo, tanto en el medio escrito
como en el medio oral, como DIR: hacer un dir. Actualmente, la
acepción informática de la voz directorio se halla recogida en las
"Enmiendas y adiciones al DRAE" (Academia Española, 1997-1998).
- ejecutar (ing. to execute, de origen latino).- El verbo ejecutar es
traducción del inglés to execute, sinónimo de to run; de las dos
adaptaciones posibles, ejecutar y correr, ha triunfado la primera.
Actualmente, la acepción informática se halla recogida en las
"Enmiendas y adiciones al DRAE" (Academia Española, 1997-1998).
- icono (ing. icon, de origen latino).- El español, al igual que el inglés, ya
tenía documentada esta voz en las acepciones especializadas de
pintura y de semiología, pero no en la de informática. El inglés crea
esta acepción y el español la toma de éste (cf. M. Lanzarone, 1997:
452).
- instalar (ing. to install, procedente del francés installer, que a su vez se
remonta al latín medieval installare).- En inglés to install tiene el
sinónimo setup/set up que, al estar mucho más alejado de las
formas románicas, resulta más extraño que la voz instalar. En la
Guía de uso siempre se ha utilizado la forma instalar, menos en el
caso de la orden DBTSETUP (frente a la forma española instalación
del DBT), que se ha mantenido de esta manera por ser un archivo
de la configuración del programa original italiano.
- menú (ing. menu, de origen francés).- Anglicismo completamente
establecido en la lengua (sin ningún sinónimo o equivalente) como
pone de manifiesto el DRAE (1992), que ya incorpora en su última
edición la acepción informática.
- retorno (ing. return key). Se usan también en español la forma enter,
procedente de enter key y la forma intro. En nuestro caso hemos
empleado la voz retorno por existir en el léxico español.
El segundo grupo que se perfila dentro de los calcos semánticos es el
formado por las voces que se han creado a partir de la traducción de la forma
inglesa:
-archivo (ing. file).- En español conviven como sinónimos fichero y
archivo, pero sólo archivo presenta un derivado verbal (archivar). La
lengua ha rehusado formar un verbo a partir de fichero (*fichear) o
utilizar el verbo fichar, ya existente para el significado de 'guardar',
que es el que se relaciona con fichero. Por ello, mientras que las
formas nominales son archivo y fichero, el verbo correspondiente es
archivar o guardar. En la Guía de uso se ha optado por archivo y
guardar por ser las dos soluciones más generales.
- guardar (ing. to save).- Guardar es un verbo que traduce el término
inglés to save en su acepción informática. También ha sido
registrada en español la forma parónima salvar. En la Guía de uso
se ha elegido la voz guardar por ser más acorde con el valor
semántico del término inglés.
- ratón (ing. mouse).- Existe duplicidad entre el anglicismo sin adaptar
mouse y la traducción española ratón. Denominación inglesa de
origen metafórico y carácter coloquial (cf. M. Lanzarone, 1997: 434 y
490). En cuanto al uso de una y otra voz, poco a poco se va
imponiendo cada vez más la forma traducida ratón, cuya acepción
informática ya aparece en la última edición del DRAE. Por ello se ha
preferido ratón en la Guía de uso del programa.
- visualizar (ing. to display).- Se trata de un término que traduce la voz
inglesa to display; es forma ya recogida en el DRAE (1992) con una
acepción muy cercana a la del original y que, por ello, resulta más
acorde al español que el anglicismo adaptado displayar (recogido en
Aguado, 1996: 47-49), de uso mucho más restringido.
En los ejemplos anteriores, es posible advertir las nuevas relaciones
semánticas que, debido a sus conexiones en la lengua de especialidad,
adquieren los términos adaptados; las voces que en la lengua general
pertenecen a campos semánticos diferentes pasan a establecer relaciones de
sinonimia o cuasi sinonimia en la lengua de especialidad. Así guardar es
sinónimo de copiar; iniciar, de ejecutar; edición, de versión; y teclear, de picar.
2.1.2. UNIDADES SINTAGMÁTICAS
Muy frecuentes son en la terminología informática las estructuras
sintagmáticas que forman una unidad conceptual y cuyo origen se halla en una
traducción o calco de la estructura inglesa. En estos casos, la mayor o menor
dependencia del inglés puede provocar que en español aparezcan expresiones
incorrectas en las que se omiten los enlaces, del tipo compatible IBM en lugar
de compatible con el de IBM, sistema software en lugar de sistema de software
o lenguaje máquina en lugar de lenguaje de máquina (G. Aguado, 1996: 165).
Los calcos sintagmáticos que aparecen en la Guía de uso proceden de la
adaptación de un sintagma nominal inglés formado por dos sustantivos en
aposición; siempre se han resuelto, pues, con un sintagma preposicional
encabezado por de conforme a las estructuras sintácticas del español (a pesar
de que en español existe cierta tendencia a usar los sustantivos en aposición
en estructuras del tipo calle Balmes).
- administrador de archivos (ing. file manager), administrador de
programas (ing. program manager).- En ambos casos se adapta
manager como administrador. A pesar de existir manager como
anglicismo, usado especialmente en el léxico del espectáculo,
deportes y economía, no ha sido aceptado aún por la Academia
Española. Para administrador de archivos existe también la
expresión gestor de archivos o ficheros (file management program =
programa de gestión de archivos o ficheros). En la Guía de uso se
ha preferido el término administrador por ser de uso más extendido.
- panel de control (ing. control panel) y banco de datos textual (ing.
Textual Data Base) son expresiones en las que la traducción de la
forma inglesa se adapta a la estructura sintáctica del español.
- bloc de notas (ing. notepad). Concepto frecuente en la terminología
informática que no ha sido recogido en los diccionarios en su
acepción especializada.
2.2. PRÉSTAMOS LÉXICOS
En algunos casos se recurre al préstamo léxico, pues los mismos
técnicos prefieren emplear la forma inglesa del término antes que su
equivalente español porque se percibe el préstamo léxico como más
especializado, mientras que el calco o el préstamo semántico convive en la
lengua con otros significados de la misma palabra.
Dentro del grupo de los préstamos léxicos se distinguirá entre los
préstamos léxicos con adaptación (2.2.1.) y los préstamos léxicos sin
adaptación (2.2.2.).
2.2.1. PRÉSTAMOS LÉXICOS CON ADAPTACIÓN
En este apartado se recogen aquellas formas que han sido tomadas del
inglés pero que han adaptado su estructura foránea (extraña a la lengua) a las
normas fono-morfológicas del español. En general, la adaptación afecta a la
grafía y a las características morfológicas (inclusión para los verbos en una
conjugación: formatear, clicar, etc.; y adaptación de la terminación para los
nombres: disquete).
Los términos de este tipo que se han utilizado en la Guía de uso son:
- clic (ing. click).- El verbo inglés to click 'seleccionar una función
determinada con el ratón' ha sido adoptado en español de diversas
maneras (F. Rodríguez y A. Lillo, 1997). Es posible encontrar la
expresión hacer clic (con adaptación gráfica de click), el préstamo
adaptado clicar (solución que prevalece en catalán) o bien el calco
pinchar (cf. M. Lanzarone, 1997: 440). En nuestro caso se ha elegido
la variante sintáctica hacer clic para evitar la creación de un
neologismo verbal (cf. dar formato, variante sintáctica del anglicismo
adaptado formatear, equivalentes del verbo inglés to format).
- disquete (ing. floppy disk, diskette).- En la Guía de uso se utiliza la
forma gráficamente adaptada que ya aparece en el DRAE (1992).
- listado (ing. listing (program), derivado de to list).- Esta forma ha sido
clasificada por Aguado (1996: 146-147) dentro de los anglicismos
adaptados; es difícil dilucidar si se trata de una adaptación del inglés
o de un calco, ya que en español existen las formas listar y listado.
2.2.2. PRÉSTAMOS LÉXICOS SIN ADAPTACIÓN
El mayor o menor número de este tipo de préstamos resulta indicativo
del grado de servilismo que muestra la terminología informática con respecto al
inglés. Todas estas voces se caracterizan por mantener tanto la forma externa
del término original como la pronunciación del mismo; las causas de este tipo
de adopción pueden ser múltiples (G. Aguado, 1996: 16).
En general se trata de voces que han entrado en la lengua sin ningún
tipo de adaptación y así perviven durante largo tiempo; plantean, en todo caso,
problemas con respecto a la expresión de número o de género en español.
Los términos de este tipo que aparecen en la Guía de uso son:
- windows.- Esta palabra se utiliza inicialmente para denominar en inglés
el nuevo modo visual del sistema operativo; posteriormente, este
sistema se patentó con ese mismo nombre. En español Windows se
ha incorporado tanto para la marca como para el sistema, aunque
este último también tiene su traducción como sistema de ventanas,
mucho menos usado, seguramente, por la influencia del nombre del
producto. En la Guía de uso se ha mantenido el préstamo sin
adaptar por el hecho de ser marca registrada.
- setup.- Esta forma ya ha sido comentada a propósito de instalar, calco
del inglés to install (cf. epígrafe 2.1.1.).
2.3. COMPRESIÓN
Este recurso genera términos mediante algún tipo de reducción formal:
siglas (2.3.1.), acrónimos y abreviaturas (2.3.2.). Se trata de un recurso muy
productivo de creación neológica en la terminología informática que puede
estar ligado a los préstamos, por cuanto la unidad terminológica puede haber
sido importada del inglés. B. Nkwenti-Azeh (1989) cuantifica su presencia
aproximadamente en un 20% con respecto al total de la terminología
informática señalando que "the abbreviation and acronym glossary is much
required, due to the fact that compounding and compression are the dominant
term-designation strategies in Computing sublanguage."
2.3.1. SIGLAS
Con ellas se consigue abreviar una serie encadenada de términos que
forman una expresión compleja o compuesta, es decir, formas sintagmáticas
que siguen los mecanismos de estructuración sintáctica de la lengua general.
Estas estructuras complejas son propias de las lenguas terminológicas, que
necesitan precisar la denominación de cada uno de sus elementos. La
terminología española no hace sino reflejar, siguiendo las creaciones de la
lengua inglesa, esta característica de las lenguas de especialidad.
Dentro de este grupo de formaciones es posible distinguir aquellas que
se presentan como préstamos adaptados -ya por su fonética, ya por el orden
de sus elementos constitutivos-, de aquellas que lo hacen como préstamos no
adaptados, manteniendo la pronunciación o el orden sintáctico inglés, sin
correspondencia con la traducción española. Para determinar el grado de
adaptación de estas formaciones a las características del castellano, el estudio
de las siglas debe tener en cuenta dos aspectos. El primer aspecto afecta al
modo de lectura de la sigla, que puede hacerse siguiendo la fonética inglesa o
siguiendo la fonética española. El segundo aspecto afecta al orden de los
elementos de la sigla, que puede corresponderse con el español o bien
mantener el orden inglés.
La combinación grafemática de una palabra en la lengua de origen no
tiene por qué coincidir con la disposición fono-morfológica de la lengua que la
adopta como préstamo. Por esa razón, las siglas resultan un buen exponente
de la influencia del inglés en la terminología informática ya que, como caso
particular de préstamos, las siglas mantienen en la mayor parte de las
ocasiones el orden sintáctico del original. La mayoría de las siglas conserva
invariable la grafía de la forma inglesa, posiblemente por la ruptura del vínculo
con la forma extendida:
Las siglas que aparecen en la Guía de uso son:
- ASCII (ing. American Standard Code for Information Interchange).- Su
traducción sería 'código normalizado americano para el intercambio
de información'. Normalmente se alude a él como el código ascii.
Desde un punto de vista categorial, este elemento puede funcionar
como sustantivo (dámelo en ASCII) pero también es igualmente
frecuente su empleo en función adjetiva (el texto ascii, los ficheros
ascii).
-
CD-ROM (ing. Compact Disc - Read Only Memory).- En este caso la
sigla en parte se deletrea (CD) y en parte se lee como una palabra
(ROM). En la Guía de uso se ha mantenido la forma inglesa por la
gran difusión que presenta en todas las lenguas y porque aparece ya
en las "Enmiendas y adiciones al DRAE" (Academia Española, 19971998).
- MI (ing. Mutual Information).- Esta sigla procede de la lingüística
computacional. Sigue el orden inglés y, como es una expresión
bastante especializada e integra una fórmula, se ha mantenido en la
Guía de uso en su forma inglesa Mutual Information (MI).
- RAM (ing. Random Access Memory).- Al perderse la conciencia del
contenido de la sigla, uno de sus componentes (memory) se
desdobla formando con ésta una estructura sintagmática de la cual
es el núcleo: memoria RAM. Esta sigla alterna con los sinónimos
españoles memoria volátil o memoria interna (calcos o traducciones
de la forma inglesa) que presentan menor difusión de uso.
- KWIC (ing. Key Word In Context) y RTF (ing. Rich Text Format) son dos
siglas en las que, igual que las anteriores, se ha mantenido el orden
original.
Todas las siglas aparecidas en la Guía de uso conservan la estructura
sintáctica inglesa con excepción de las que dan nombre al programa: DBT.
Para su designación, se ha tomado la misma forma que se emplea en italiano,
por ser una marca registrada. En esta lengua, la sigla DBT muestra una
estructura mixta, con dos elementos que siguen el orden inglés (Data Base) y
un tercero que sigue el orden románico. Así Data Base Testuale sería el
equivalente de la forma inglesa Textual Data Base.
En la pronunciación de estas formas léxicas se dan diferentes grados de
adaptación: o bien se deletrean de acuerdo con las normas fonológicas del
español, o bien se pronuncian como una palabra. En su incorporación a la
lengua, las siglas que lo permiten muestran la tendencia a ser leídas como
cualquier otra voz; sólo son deletreadas aquellas que no permiten otro modo de
pronunciación por carecer de vocales entre sus componentes. En la lectura
deletreada de las siglas se sigue el orden inglés pero, como ya ha sido
apuntado, tal lectura respeta las normas fonéticas del español.
Se aparta de esta norma general la sigla OK, que es la abreviatura de la
pronunciación de la expresión all correct ([ :l k↔'rekt]). Esta forma,
incorporada ya a la lengua estándar, se deletrea tomando como base la
fonética inglesa ([' ↔u'kei]); se trata, por tanto, de un anglicismo sin adaptar.
En la Guía de uso se ha utilizado únicamente la expresión OK en el momento
de la instalación del programa, debido a que en este proceso actúa el programa
Windows y este elige esa solución. En el resto del programa se ha utilizado
siempre, como equivalente del anglicismo OK, la expresión española De
acuerdo.
En la atribución del género a estas formaciones influye de manera
especial la asociación semántica que para cada sigla realice el hablante. En la
mayoría de siglas el género viene dado por el de la palabra española que
funciona como núcleo del sintagma del que la sigla resulta su abreviación: una
CPU (unidad), un PC (ordenador), la RAM (memoria), el MS-DOS (programa),
el CD-ROM (disco) y la CD-ROM (unidad), etc.
Respecto al número gramatical, la sigla se mantiene invariable y se
marca el plural con la moción del artículo: los CD-ROM, a pesar de que en
algunos casos se produce la adición del morfema de plural a la sigla: los PCs5.
5
También se ha registrado la forma plural: los PC’s (Aguado, 1996: 124).
2.3.2. ABREVIATURAS
En la terminología informática aparecen elementos léxicos formados por
abreviatura. En la Guía de uso se han utilizado las siguientes:
- Alt (ing. alt procedente de alternate).- Abreviatura de alternative que, a
su vez, constituye una simplificación de Alt (graphic) key.
- Esc (ing. esc. procedente de escape).- Abreviatura de escape,
procedente de la expresión Escape key.
- Tab (ing. tab. procedente de tab(ulator) key).- Abreviatura de tabulator
key.
Las tres abreviaturas corresponden a teclas (key) de función que
aparecen en el teclado del ordenador; en ocasiones corresponden
también a algunas funciones de una máquina de escribir.
Aparece, además, la forma Mb de Megabytes, elemento compuesto por
un prefijoide de origen clásico mega-, más el acrónimo inglés Byte “Binary
term” (G. Aguado, 1996: 29). Se trata de un acortamiento de tipo fonético en el
que el término informático se representa mediante dos letras. Es posible
también encontrar la forma mega como equivalente a megabyte, cuya
formación M. Lanzarone (1997) atribuye al origen jergal de la terminología
informática. En la Guía de uso figura siempre el acortamiento Mb, y no se ha
empleado la forma alternativa megaocteto, que, aunque de formación más
autóctona, no tiene acortamiento.
3. CARACTERÍSTICAS MORFOSINTÁCTICAS Y ESTILÍSTICAS
La especial configuración que presenta la terminología informática desde
el punto de vista morfosintáctico y estilístico se debe a dos circunstancias
distintas:
- en primer lugar, a que su enseñanza y difusión (comercialización) tiene como
importante vehículo los manuales y guías de uso que muestran cómo utilizar un
determinado programa o producto informático;
- en segundo lugar, a que en esta especialidad tiene gran importancia la forma
que adopta la expresión lingüística en la pantalla, lo cual comporta cambios
que afectan a las mismas características de este tipo de lengua.
Desde el punto de vista morfosintáctico, la lengua de la informática
posee una característica propia que la diferencia de otros muchos lenguajes
especializados. En terminología la clase morfológica fundamental es el nombre,
pues los conceptos tienden a tomar cuerpo en nominalizaciones; por el
contrario, el verbo es una clase morfológica secundaria (J. C. Sager, D.
Dungworth y P. F. McDonald, 1980: 234). En la terminología informática, el
verbo es un elemento de extraordinaria importancia (G. Mensa, 1996) por
cuanto con él se expresa la acción que debe ejecutar el usuario para llevar a
cabo determinado algoritmo con el programa informático que está manejando.
La importancia del verbo se pone de manifiesto en unidades terminológicas tan
importantes dentro de la informática como instalar, activar, ejecutar, aplicar,
guardar, copiar, confirmar, visualizar, salir, etc. También se pone de manifiesto
en el hecho de que, mientras que algunos conceptos se pueden expresar tanto
en forma nominal como en forma verbal (buscar, búsqueda; instalar,
instalación), otros sólo presentan forma verbal sin la correspondiente
nominalización (activar, reiniciar).
La preponderancia terminológica de la clase verbal resulta evidente en la
Guía de uso y alcanza mayor importancia en la pantalla donde siempre
adquieren forma lingüística verbal las diferentes acciones que se pueden llevar
a cabo con el programa:
"escoja Instalar en la opción Instalar/Quitar",
"haga clic en Instalar para terminar la instalación"
"active el menú archivo",
"haga clic",
"ejecute nuevamente la función Guardar ventana"
"Guardar cuadro",
"Recuperar cuadro",
"Guardar ventana",
"Imprimir ventana",
"Modificar el estilo de la impresión" ,
"Salir".
El hecho de que en los programas informáticos la interacción con el
usuario se lleve a cabo a través de una pantalla de ordenador condiciona en
parte las características estilísticas y expresivas de la terminología informática.
La pantalla es un espacio reducido en el que deben reunirse todas las posibles
acciones del programa, por lo que la expresión lingüística en ella debe ser
necesariamente breve y condensada. En los mensajes que aparecen en el
monitor, la estructura sintáctica a menudo se ve transtornada por estos motivos
y se eliminan preposiciones o artículos que en otras circunstancias serían
naturales y necesarios: guardar cuadro/recuperar cuadro, salvar condición
DBT, guardar ventana en lugar de las expresiones completas guardar el
cuadro/recuperar el cuadro, guardar la ventana, modificar el estilo de la
impresión.
En la Guía de uso y en la versión española del programa se han
intentado evitar las expresiones sin elementos relacionales, tan habituales en
los cuadros de diálogo de los programas informáticos, porque atentan contra la
legibilidad del texto (P. Lerat, 1997: capítulo 13) y contra la misma estructura de
la lengua.
4. CONCLUSIONES
Desde un ejemplo concreto, la Guía de uso del CD-ROM de Don Quijote
de la Mancha, se ha querido incidir y profundizar en las características
definitorias de la terminología informática. Desde el punto de vista léxico, la
dependencia de la terminología informática en lengua española del inglés se
manifiesta en un importante número de préstamos de significado y de calcos.
Estos dan una configuración especial a esta terminología, resultando una
lengua de especialidad con menos préstamos léxicos de los que a priori
pudiera sospecharse.
Más perceptible resulta el influjo del inglés en los procesos de
compresión, formaciones que aparecen como un claro exponente de que todas
las innovaciones se producen en países de esta lengua, que adquiere, así, un
verdadero papel de lengua franca, tal como señala M. Lanzarone (1997: 457458): "L'importanza linguistica dell'inglese in campo informatico è fuori
discussione in Italia così come in Francia, in Germania, in Spagna, in Portogallo
e in altri paesi, tanto che qualcuno già parla di una «Europa colonizzata [in fatto
linguistico] dal modello americano»". En el caso de los procesos de compresión
(siglas y abreviaturas), la opacidad de estas unidades explica que se importen
sin ninguna modificación.
No sólo el léxico y las vías de formación de la terminología informática
caracterizan
esta
lengua
de
especialidad,
existen
además
rasgos
morfosintácticos y estilísticos que le dan una identidad propia e inconfundible.
BIBLIOGRAFÍA
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