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V. FUENTES ALTERNATIVAS DE
PROTEINAS
Avances en Nutrición Acuícola III
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Contenido
FUENTES ALTERNATIVAS DE PROTEINAS VEGETALES COMO SUBSTITUTOS
DE LA HARINA DE PESCADO PARA LA ALIMENTACION EN ACUICULTURA ...... 279
USO DE LA LANGOSTILLA (PLEURONCODES PLANIPES) COMO FUENTE DE
PROTEINA EN DIETAS EXPERIMENTALES PARA CAMARON ................................. 325
EVALUACION DE LA LOMBRIZ DE TIERRA EUDRILUS EUGENIAE EN LA
ALIMENTACION DE CAMARONES PENEIDOS. ........................................................ 349
278
Avances en Nutrición Acuícola III
FUENTES ALTERNATIVAS DE PROTEINAS VEGETALES
COMO SUBSTITUTOS DE LA HARINA DE PESCADO PARA LA ALIMENTACION
EN ACUICULTURA
Carlos Antonio Martínez Palacios* María Cristina Chávez Sánchez*,
Miguel Angel Olvera Novoa**, María Isabel Abdo de la Parra*.
* Unidad de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Acuicultura y Manejo
Ambiental del CIAD, A.C. Av. Sábalo Cerritos s/n, Estero del Yugo. AP. 711 Mazatlán,
CP. 82010, Sinaloa, México.
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RESUMEN
Los organismos acuáticos como peces y crustáceos tienen altos requerimientos de proteína,
consecuentemente, para su alimentación se utilizan alimentos ricos en ese nutriente. La harina
de pescado se ha usado tradicionalmente como el principal recurso; sin embargo, su alto costo
y el incremento en la demanda de la creciente acuicultura, así como en la alimentación de
organismos terrestres cultivados, han hecho que se dediquen esfuerzos para buscar fuentes
alternas de proteínas convencionales y no convencionales. El presente trabajo hace una revisión
a la búsqueda de fuentes alternas de proteínas vegetales que substituyan a la harina de pescado
parcial o totalmente en la alimentación acuícola. Se concentra la información disponible sobre
oleaginosas, leguminosas, plantas acuáticas, otras plantas superiores, algas y proteínas de
origen microbiano como hongos, bacterias y levaduras. Se discuten al final los avances logrados,
la problemática y otras alternativas de investigación.
INTRODUCCION
La acuicultura como una actividad intensiva es relativamente nueva si la comparamos con la
agricultura y la ganadería y tiene como objetivo coadyuvar a satisfacer la demanda mundial de
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Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
proteína animal a través del cultivo de organismos acuáticos. Proporciona además fuentes de
empleo y en el caso de especies de alto valor comercial, ganancias en divisas para los países
productores. Sin embargo, esta tecnología ha crecido tanto en las dos últimas décadas que
actualmente se pueden ver los efectos sobre el medio ambiente, así como la competencia por el
uso del agua y del suelo con otras empresas productivas. Otro efecto importante que no escapa
a la vista, es la competencia por la materia prima para producir los alimentos, que también son
utilizados para la alimentación humana y animal.
Actualmente, la acuicultura y la ganadería dependen en suministro proteico de las pesquerías
y la agricultura pues basan su producción en la harina de pescado y en segundo término en
harina de soya. Sin embargo, la producción de harina de pescado a nivel mundial se ha mantenido
más o menos constante con un promedio de 6,500,000 toneladas de 1986 a 1990 (Barlow, 1989;
Barlow y Pike, 1992). La producción de harina de pescado a nivel mundial para 1993 fue de
6,185,778 toneladas (FAO, 1995 In: Tacon, 1996). Se espera que las necesidades de harina de
pescado por la industria de la acuicultura para el año 2000, sea el doble (Barlow, 1989) mientras
que, la demanda de alimento acuícola para el mismo año será de 6.6 millones de toneladas
(Akiyama, 1993). Si la acuicultura va a seguir con la tasa de crecimiento que ha tenido en estas
últimas dos décadas, necesariamente se va a ver limitada a corto plazo por la falta de recursos
proteicos, lo que ocasionará que la acuicultura en muchos lugares del mundo no sea una actividad
sostenible y rentable. Por lo anterior, se han realizado esfuerzos por optimizar los métodos de
alimentación y por buscar fuentes alternas de proteínas convencionales y no convencionales
derivadas de productos vegetales, subproductos de la agricultura, ganadería y de la industria,
que tiendan a ser amigables con el medio ambiente.
El presente trabajo muestra una revisión de la información relacionada con los esfuerzos realizados
por varios investigadores en el mundo, que buscan fuentes alternas de proteínas de origen vegetal que
puedan substituir parcial o totalmente a la harina de pescado. En esta revisión no se incluye lo
reportado por New, Tacon y Casavas (1993) por considerarse un excelente trabajo que reúne la
información acerca de las estrategias económicas de alimentación y la producción de alimentos. Los
autores hacen énfasis en la producción de alimentos hechos en las propias granjas en las que utilizan
la materia prima disponible en países como Bangladesh, Cambodia, India, China, Indonesia, Malasia,
Nepal, Filipinas, Tailandia y Vietnam y en los cuales se utilizan una gran variedad de proteínas de
origen vegetal. Tacon (1993a, b y 1994) hace tres revisiones sobre las proteínas alternativas y otros
recursos para peces de agua dulce, peces carnívoros y crustáceos. Este autor reune un gran número
de datos en tablas, en donde se informa con detalle, la composición proximal, composición de
aminoácidos esenciales y limitantes de los materiales usados, así como un excelente resumen sobre
los niveles de inclusión (%) de los diferentes ingredientes alimenticios comúnmente usados en dietas
prácticas. Se recomienda ampliamente la lectura de estos documentos para ampliar lo expuesto en la
presente revisión que complementa las anteriormente citadas, les da actualidad e incorpora nuevas
alternativas.
Por último, la utilización de altos porcentajes de harina de pescado necesariamente
incrementan la aportación de fósforo disponible al ambiente, debido a los altos valores que la
harina de pescado posee y que no son aprovechados por los peces y crustáceos. De la misma
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Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
manera los fitatos de las plantas ponen a disposición del medio ambiente el fósforo no
aprovechable por los organismos en cultivo. Dietas mejor diseñadas deben de generarse para
evitar el impacto al medio ambiente que afecta la calidad del agua en la que se desarrollan los
organismos.
OLEAGINOSAS
Los subproductos de semillas oleaginosas son las proteínas vegetales más ampliamente
utilizadas en la alimentación animal, por su alto contenido de proteína, su amplia disponibilidad
y su costo generalmente menor al de la harina de pescado (Taylor y Berk, 1981). Una ventaja de
las oleaginosas es que debido a que la utilización primaria es para obtener aceites, la pasta
derivada de ese proceso incrementa su valor proteico en términos de porciento de peso seco, y
en consecuencia su uso para la acuicultura resulta adecuado. Dos desventajas ocurren con el uso
de pastas de soya: 1) la ganadería y la avicultura compiten por este producto con la acuicultura
y 2) la calidad nutricional de la soya va a depender del proceso utilizado para neutralizar los
antinutrientes.
Entre las oleaginosas se incluyen las harinas y pastas de semillas de soya, algodón, colza, girasol,
ajonjolí, cacahuate y copra. El procesamiento a que se someten las semillas para la extracción del
aceite da lugar a variaciones en el contenido de lípidos residuales, además de una posible reducción de
la disponibilidad o digestibilidad de la proteína por el tratamiento térmico aplicado. El contenido de
aminoácidos de estas plantas oleaginosas comparadas con caseína, gelatina y harina de pescado han
sido presentadas por el National Research Council (1977), en ella se observan los aminoácidos
deficientes en cada uno de ellas. Lim y Dominy (1993), hacen una evaluación de las proteínas de
plantas utilizadas en peces de agua dulce, entre las que analizan soya y algodón, una importante
cantidad de información se deriva de ese estudio.
Glycine maxima (soya). Dentro de los ingredientes vegetales, la soya es cada vez más
común en la alimentación de organismos acuáticos por su composición química, perfil de
aminoácidos, (con excepción de la metionina y en menor grado la lisina como aminoácidos
limitantes, Tacon et al., 1983), elevado contenido de vitaminas y menor costo al de la harina de
pescado (Bressani y Elias, 1980; Akiyama, 1992). Sin embargo, contiene factores antinutricionales
que afectan su valor nutricional y reducen la palatabilidad de los alimentos cuando se preparan
con niveles elevados de este material (Tacon et. al., 1983; Webster et al., 1992b). Su principal
antinutriente es un inhibidor de la tripsina, seguido por el ácido fítico, hemaglutininas, goitrógenos
e inhibidores de las proteasas. Sin embargo, diversos tratamientos con calor como tostado,
extrusión y peletización inactivan o eliminan exitosamente estos antinutrientes (Lim y Akiyama,
1993). (Tabla No. 2).
El uso de semilla sin un tratamiento que inactive los antinutrientes resulta en bajo crecimiento
y pobre utilización de la proteína cuando se incluye en alimentos para carpa, bagre, trucha y
salmón (Fowler y Banks, 1976; Fowler, 1980; Viola et al., 1983; Abel et al., 1984; Wilson y
Poe, 1985). Su eficiencia mejora después de tratarla con calor seco (micronización;
118<F128M>É<F255D> C) durante 2.5 min. o por 30 min. con calor húmedo (vapor 90-
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95<F128M>É<F255D> C), ya que se inactivan los antinutrientes sin afectar la disponibilidad
de lisina, además de reducirse la solubilidad de la proteína en el agua; el tratamiento húmedo
resulta particularmente benéfico para disminuir la actividad del inhibidor de tripsina (Abel et
al., 1984). Experimentalmente se ha observado que dietas con altos niveles de tripsina generan
desórdenes en el hepatopáncreas.
En la alimentación animal la soya se utiliza como harina integral o desengrasada. La soya
integral es un ingrediente adecuado en alimentos para trucha (Oncorhynchus mykiss), carpa
común (Cyprinus carpio), salmón del Atlántico (Salmo salar), Tilapia nilotica (Oreochromis
niloticus) y bagres (Ictalurus punctatus, I. furcatus). Después de ser tratada para inactivar los
antinutrientes puede substituir entre 30 y 75% de la proteína animal (Reinitz et al., 1978;
Lovel, 1980; Tacon et al., 1983; Abel et al., 1984; Robinson, 1989; Wilson y Poe, 1985; Wee y
Shu, 1989; Shiau et al., 1990; Van den Ingh et al., 1991; MoOyano et al., 1992; Gómez et al.,
1995; Kaushik et al., 1995). En salmón del Atlántico (Salmo salar) se ha demostrado que la
aglutinina de la soya se adhiere al intestino incrementando el efecto tóxico de la soya integral y
de los productos de soya en dietas para esta especie (Hendriks et al., 1990) (Tabla No. 4).
La harina desengrasada se ha usado como ingrediente en alimentos para salmón (Salmo
salar), trucha (Oncorhynchus mykiss), carpa, bagre, carpa herbívora (Ctenopharingodon idella),
tilapia (Oreochromis spp.), mojarra castarrica (Cichlasoma urophthalmus), tambor rojo (Scianops
ocellatus); milkfish (Chanos chanos) y mojarron (Sparus aurata; Megalobrama skolkovii),
sustituyendo en algunos casos hasta el 100% de la harina de pescado (Tabla No. 4). Sin
embargo, se ha observado que altos niveles de inclusión generalmente han resultado en bajo
crecimiento debido a deficiencia de aminoácidos y energía; así como, a la presencia de
antinutrientes y baja digestibilidad de los carbohidratos para algunas especies. Algunos autores
han evaluado la suplementación de las dietas con metionina, triptofano y lisina con resultados
variables; sin embargo, al menos el bagre azul (I. furcatus) presenta crecimiento adecuado con
dietas en 100% de soya fortalecida con 0.9% de metionina. Otra alternativa es el uso de la soya
combinada con otra proteína para balancear las deficiencias de cada componente proteico,
lográndose substituir el 100% de la harina de pescado en dietas para bagre de canal (I. punctatus).
Se recomienda también suplementar con aceite como energía y con fósforo para aliviar su alto
contenido de fitatos (Andrews y Page, 1974; Dabrowska y Wonjo, 1976, Wu y Jan, 1977;
Davis y Stickney, 1978; Dabrowski y Kozak, 1979; Jackson et al., 1981, 1982; Viola et al.,
1981/1982; Santiago et al., 1982; Tacon et al., 1983; Viola y Arieli, 1983; Viola y Zohar, 1984;
Alexis et al., 1985; Law, 1986; Martínez-Palacios, 1988; Shiau et al., 1988; Shiau et al., 1989;
Viola et al., 1988; Mohsen y Lovell, 1990; Shiau et al., 1990; Olli et al., 1995; Webster et al.,
1992a,b, 1995; Haiqing y Xiqin, 1994; Oliva-Teles et al., 1994; Davis et al., 1995, Robaina et
al., 1995) (Tabla No. 4).
La harina de soya también ha sido probada en dietas para camarón. Lawrence et al., (1986)
no encontraron diferencias significativas en el crecimiento y sobrevivencia de varias especies de
camarón (Penaeus vannamei, P. aztecus, P. duorarum, P. setiferus, P. schmitti, P. stylirostris)
(Tabla No. 4) alimentados con una dieta comercial que contenía 10% de inclusión de harina de
soya y alimento experimental con inclusiones del 40 al 50% durante 12 semanas en condiciones
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Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
de laboratorio. Los autores mencionan que es posible que se puedan incrementar los niveles en los
estanques de tierra en donde existe una productividad natural y los micronutrientes como ácidos
grasos esenciales, vitaminas y minerales no sean limitantes. Si esto es así, la utilización de soya en
lugar de harina de pescado o camarón es altamente significativo en la reducción de costos por
alimento en algunos países en donde la harina de soya tiene precios menores a la harina de pescado.
Carver et al. (1988) procesaron cabezas de camarón, vísceras de calamar y soya extrudizada. La
coextrusión de desechos de vísceras de animales marinos con soya crearon una proteína de alta
calidad, de muy bajo costo. Posteriormente Lim y Dominy (1993) evaluaron el remplazo de proteína
animal por soya y encontraron que el crecimiento se redujo conforme se incrementó la inclusión de
soya a 42, 56 y 70%, la ingestión de alimento se redujo en las dietas con 56 y 70%, el contenido de
humedad se incrementó en los camarones alimentados con 70% de soya y el fósforo del cuerpo se
redujo considerablemente a niveles superiores de 42% de inclusión de soya. Se concluyó por lo tanto
que la soya no puede substituir totalmente a la proteína de origen animal.
Lo anterior es corroborado por Dominy y Lim (1993) cuando probaron harina de soya
extruída sola y mezclada con calamar en dietas para camarón (P. vannamei) y observaron que el
mejor resultado se obtuvo con la dieta con soya/calamar en proporción 40/60 en la que no hubo
diferencias significativas en los resultados con dietas a base de 50/50 soya/calamar e inclusive
tuvieron mejores conversiones alimenticias que con 44% de pasta de soya extruída. Recomiendan
que extruir y secar una proteína vegetal con vísceras húmedas de calamar puede ser un método
de procesamiento recomendado para mejorar una proteína vegetal ya sea para ser usada como
un ingrediente para alimentos de camarón o como un alimento completo. Por otro lado, la harina
de soya integral doblemente extruída para los camarones fue comparable al de la soya comercial
extraída por solventes y reconstituída con aceite de soya. Sin embargo, la cantidad de soya
integral puede ser limitante debido a su alto contenido de aceite y a la naturaleza de sus ácidos
grasos, los cuales en altos niveles pueden causar imbalance de energía y de ácidos grasos
esenciales (Lim and Dominy, 1993).
Gossipium spp. La harina de algodón es muy popular en alimentos para bagre por su alto
valor nutritivo y buena palatabilidad. Su calidad es menor a la de la harina de soya por su
contenido de gosipol que reduce la disponibilidad de lisina, aún cuando los peces soportan
niveles altos gracias al elevado contenido de proteína en su dieta (Tabla No. 2); sin embargo, se
recomienda el uso de variedades de algodón sin glándula de pigmento o de harinas desengrasadas
con solventes para evitar su presencia (Robinson et al., 1984 a, b; Robinson y Daniels, 1987;
Robinson, 1989).
La inclusión de la semilla de algodón sin glándula de pigmento en dietas para bagre y tilapia
ha dado buenos resultados, con eficiencias semejantes a las de la soya, sin embargo, el uso de la
semilla sin desengrasar provoca reducción en el crecimiento, lo cual se atribuye a la presencia de
ácidos grasos ciclopropenóicos (Robinson et al., 1984 a, b; Robinson y Daniels, 1987; Robinson,
1989).
Las tilapias utilizan eficientemente la harina de algodón con bajos niveles de gosipol,
obteniéndose rendimientos adecuados con substituciones del 100% de la harina de pescado
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(Jackson et al., 1982; Viola y Zohar, 1984). Sin embargo, se observa retardo en el crecimiento
con niveles de inclusión superiores al 50%, atribuida a deficiencia de aminoácidos, en especial
lisina. (Robinson y Brent, 1989; Robinson y Tiersch, 1995). La pasta de algodón causa mayores
problemas en las tilapias por su contenido de gosipol (Ofojekwu y Ejike, 1984). A pesar de ello,
El-Sayed (1990) obtuvo resultados aceptables al substituir el 100% de la harina de pescado con
harina decorticada de algodón para alimentar a niloticus (Tabla No. 4).
El bagre (Ictalurus punctatus) soporta concentraciones de gosipol cercanas a 100 ppm
(Robinson y Daniels, 1987). Robinson y Brent (1995) recomiendan incluirla en un 15% para no
afectar el crecimiento de esta especie. La harina de algodón posee mejor calidad que la soya
integral como alimento para los salmones (Oncorhynchus kisutch y tshawytscha), resultando
en crecimientos y sobrevivencias similares a los obtenidos con harina de pescado cuando se
incluye 22-34% de harina de algodón en su dieta (Fowler y Banks, 1976; Fowler, 1980) (Tabla
No. 4).
En un experimento para determinar los efectos de diferentes productos vegetales y animales,
sobre el salmón chinnok (Onchorhynchus tshawytscha), Fowler y Banks (1976) substituyeron
harina de arenque por harina de algodón en proporciones de 30.8: 24.6 y 20.5: 39.2%
respectivamente. Estos autores observaron que los peces alimentados con los niveles más altos
de harina de algodón pesaron significativamente menos que los organismos alimentados con la
dieta testigo y que no hubo diferencia en la deposición de proteína y grasa comparada con la
dieta control. Histológicamente, los peces mostraron degeneración de las células del hígado y el
epitelio de las branquias se encontró hinchado. La harina de algodón para esta especie esta
limitado a 30% remplazando solamente 7.5% de la proteína de harina de pescado.
Helianthus annuus. La harina de semilla de girasol presenta un valor nutricional equivalente
al de la harina de soya aún cuando tiene un alto contenido de fibra (Tabla No. 3). Posee el mayor
contenido de aminoácidos sulfurados entre las oleaginosas; sin embargo, la composición de la
harina varía con la calidad de la semilla y el método de extracción del aceite. La harina de semilla
decorticada es un material rico en proteína y con buena digestibilidad, pero requiere de
suplementación con lisina y energía cuando se usa en cantidades elevadas en los alimentos para
monogástricos. Se considera adecuada para usarse en la alimentación de peces, como complemento
de otras proteínas de buena calidad y bajo nivel de antinutrientes (Tacon et al., 1984; MartinezPalacios, 1986) (Tabla No. 4).
Se ha demostrado que la harina de girasol puede substituir el 25% de la harina de pescado en
dietas para tilapia (mossambicus) o incluirse 25% en dietas para trucha (Oncorhynchus mykiss)
sin resultados adversos, observándose crecimientos semejantes a los que produce la harina de
soya con inclusiones de hasta 35%. Sin embargo, niveles elevados afectan el crecimiento debido
a una disminución en la digestibilidad, baja palatabilidad y probable imbalance de aminoácidos
(Jackson et al., 1982; Tacon et al., 1984; Sanz et al., 1994) (Tabla No. 4).
Arachis hipogea. La harina de cacahuate o maní posee un adecuado valor nutricional (Tabla
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pescado para la alimentación en acuicultura
No. 3) aún cuando es deficiente en algunos aminoácidos, baja palatibilidad y pueOde contener
aflatoxinas (Tabla No. 1). Los resultados obtenidos con alimentos para tilapia y carpa, indican
que no se debe de incluir más del 25%, ya que afecta el crecimiento. La carpa tiene una capacidad
mayor para utilizar esta proteína que la de otras oleaginosas, mientras Oque la tilapia exhibe una
capacidad de utilización similar entre este material, la soya y la copra (Jackson et al., 1981,
1982; Robinson et al., 1984b). (Tabla No. 4). Haiqing y Xiqin (1994), probaron pasta de
cacahuate y pasta de colza en dietas para brema (Megalobrama skolkovii Dybowski) para
substituir a la harina de pescado. Los resultados indicaron que Oes posible la incorporación de
estos recursos proteicos arriba de 42 y 21% respectivamente, y que cuando se usan a niveles
arriba de 45 y 27% , hay una reducción en los parámetros nutricionales, posiblemente debido a
imbalance de aminoácidos especialmente deficiencias de metionina y lisina y/o la presencia de
factores antinutricionales (Tabla No. 2).
Cocus nucifera (copra). El uso de la copra en la alimentación de peces es limitado debido a
su alto contenido de fibra. Las tilapias y la carpa común la toleran en su alimento, pero es la
tilapia quien la utiliza mejor debido a una mayor capacidad para digerirla. Sin embargo, su nivel
de inclusión no debe de exceder el 25% para no afectar el crecimiento por imbalance de
aminoácidos y reducción en la digestibilidad. La carpa herbívora es más eficiente para utilizarla,
aceptando hasta 30% en su dieta (Tabla No. 4). Estos niveles pueden variar según el contenido
de proteína del alimento y el sistema de cultivo empleado (Guerrero, 1980; Jackson et al., 1981;
Law, 1986).
Brassica napus, B. campestris. La colza o canola posee una adecuada calidad nutricional
(Tabla No. 3); sin embargo, su contenido de antinutrientes limita su uso en dietas para peces. La
inclusión de 25% de proteína de colza ha dado resultados favorables en dietas para salmón
(tshawytscha), mientras que niveles del 20% no afectan el crecimiento de la trucha juvenil o
adulta (Tabla No. 4); sin embargo, los peces pequeños son susceptibles al efecto de sus
antinutrientes (Higgs et al., 1982; Hardy y Sullivan, 1983).
Este material no afecta el crecimiento de tilapia (mossambicus) cuando se incluye hasta un
nivel de 50% en su dieta (Jackson et al., 1982), observándose que lo reduce a niveles superiores
debido a sus antinutrientes (Tabla No. 2). Por el contrario, Davies et al. (1990) observaron
reducción del crecimiento de tilapia con 5% de proteína de colza, mientras que Dade et al.
(1990) no encontraron ninguna diferencia con 8% de inclusión, lo que indica que las variaciones
se relacionan con el tipo de semilla y su contenido de antinutrientes.
Sesamum indicum. La harina de ajonjolí presenta adecuada calidad nutricional (Tabla No.
3), principalmente cuando se mezcla con otros ingredientes ricos en lisina. La pasta de ajonjolí
es bien aceptada por los animales, sin embargo, se ha observado que niveles altos causa pérdida
de grasa corporal en cerdos, sabor desagradable en la carne de ganado y actúa como laxante. El
ajonjolí posee un elevado contenido de ácido fítico ( Tabla No. 2), lo que da lugar a problemas
asociados a deficiencias de minerales, por lo que se recomienda fortalecer las dietas con Fe, Cu,
Ca, Zn y Mg (Viola et al., 1988; Göhl, 1991; Torre et al., 1991).
Este material se considera un adecuado substituto para la soya en la nutrición animal (Opsivedi
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Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
et al., 1992). Hossain y Jauncey (1989) así como Hossain et al. (1992), evaluaron la digestibilidad del
ajonjolí como única proteína en dietas para carpa común (C. carpio) y mossambicus respectivamente,
observando resultados inferiores a los de la soya, semilla de lino, semilla de mostaza y harina de
pescado, lo cual se atribuyó a los altos niveles de ácido fítico.
PROTEINAS VEGETALES DE ORIGEN UNICELULAR
Dependiendo de su origen, las proteínas unicelulares son ricas en proteína (Tabla No. 3) y
vitaminas. Son altamente termoestables, se pueden producir a partir de desechos agroindustriales
y se pueden cultivar en sistemas contínuos en pequeñas instalaciones y en períodos muy cortos
gracias a su breve tiempo de generación, además de que se puede controlar su composición
según el medio de cultivo y por manejo genético (Tabla No. 1). Entre las proteínas unicelulares
utilizadas en dietas para peces se encuentran levaduras, bacterias, hongos filamentosos, microalgas
y lodos activados.
Su uso en alimentación animal está limitado por su alto contenido de ácidos nucleicos y de
material indigerible, deficiencia de aminoácidos sulfurados y la posible presencia de contaminantes
derivados del medio de cultivo; adicionalmente, su costo de producción puede limitar su competencia
con proteínas convencionales (Tacon, 1978/1979; Dabrowski et al., 1980; Kaushik y Luquet, 1980;
Mahnken et al., 1980; Soeder, 1980; De la Higuera et al., 1981; Taylor y Berk, 1981; Sánchez-Muñiz
et al., 1983; Tacon y Jackson, 1985; Murray y Marchant, 1986) (Tabla No. 4).
Levaduras
Candida spp. Estos microorganismos son ricos en proteína y vitaminas del complejo B. Se
usan en alimentación animal como un suplemento para compensar deficiencias de aminoácidos
y vitaminas de los cereales. Se les considera como un material apropiado para la alimentación
animal, por su facilidad de producirse a partir de una gran variedad de substratos ricos en
carbono, incluyendo pulpa de cítricos, melazas, desechos de la industria papelera, madera
sacrificada y desperdicios de frutas (Candida utilis), e inclusive hidrocarburos (Candida
lipolytica). Su calidad nutricional varía según su origen considerándose que las cultivadas en
alcanos podrían ser de mejor calidad que las producidas a partir de carbohidratos. Adicionalmente,
es factible utilizar en la alimentación animal a los subproductos de la industria cervecera y
licorera (Saccharomyces cerevisae) (Gohl, 1991).
Los salmónidos toleran sustituciones del 25 al 50% de la harina de pescado con Candida
spp. y se observa ligera reducción en el crecimiento en el nivel de inclusión más alto, que es
evitada mediante la adición de metionina. Aparentemente la deficiencia de aminoácidos sulfurados
restringe el uso de las levaduras; sin embargo, hay otros factores que limitan su utilización entre
los que se mencionan su alto contenido de ácidos nucleicos y de materia indigerible,
particularmente carbohidratos, así como la presencia de contaminantes (metales pesados, etc.)
derivados del medio en que se cultive la levadura (Matty y Smith, 1978; Spinelli et al., 1979;
Kaushik y Loquet, 1980; Mahnken et al., 1980; De la Higuera et al., 1981; Taylor y Berk, 1981;
Sánchez-Muñiz et al., 1983; Tacon y Jackson, 1985; Murray y Marchant, 1986) (Tabla No. 4).
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Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
Candida tropicalis, C. utilis y C. lipolytica. Se ha demostrado que su inclusión en dietas
para carpa común da lugar a mejores resultados a los obtenidos con soya, harina de carne y
harina de sangre, con conversiones alimenticias adecuadas y buena digestibilidad. Así mismo,
resulta positiva la inclusión de 62-88% de C. lipolytica y C. utilis en la dieta para larvas de
carpa, combinada con harina de pescado y subproductos animales. En el caso de la tilapia
(Oreochromis aureus) se observó que su cría tiene una baja capacidad para utilizar levaduras en
dietas con 25% de proteína en sistemas estáticos (Wu y Jan, 1977; Atack et al., 1979; Hecht y
Viljoen, 1982; Dabrowski et al., 1983; Alami-Durante et al., 1991) (Tabla No. 4).
Los solubles de destilería del whisky no afectan el crecimiento de la trucha arco iris a niveles
de inclusión de hasta 50% de la proteína. El bagre por su parte, acepta hasta 70% de este
material sin efectos adversos en su crecimiento, siendo posible substituir totalmente la harina
de pescado en su dieta con una mezcla de solubles de destilería y harina de soya. Se considera
además que sería económicamente viable utilizar solubles de destilería del ron como único
alimento para tilapia, en lugar de la fertilización de los estanques (Kohler y Pagan-Font, 1978;
Murray y Marchant, 1986; Webster et al., 1991, 1992b).
Adicionalmente, las levaduras pueden utilizarse como alimento seco para crías de tilapia,
coregónidos, carpa herbívora y bagre africano, considerándose equivalente a una dieta
microencapsulada rica en proteína y vitaminas (Appelbaum, 1978; Kohler y Pagan-Font, 1978;
Appelbaum y Uland, 1979; Hecht, 1981).
Hansenula anomala. Estas levaduras puede provocar problemas metabólicos a los peces
(Tabla No. 2). Estudios realizados con trucha alimentada con ésta levadura metanofílica,
demostraron reducción de la tasa de alimentación y crecimiento, atribuida a una baja aceptabilidad
de la dieta, aunada a la acumulación de metabolitos nitrogenados derivados del catabolismo de
nucleótidos (De la Higuera et al., 1981; Sánchez-Muñiz et al., 1983).
Phaffia rhodozyma. Esta levadura de la familia Cryptococcaceae es de particular interés
para la acuicultura, porque además de sus factores nutricionales asociados como son proteínas,
lípidos, vitaminas y minerales típicos de las levaduras, también tiene factores de crecimiento,
atrayentes y lo más importante contiene el carotenoide astaxantina (Tabla No. 1), el cual es un
constituyente particular de esta levadura ya que es biosintetizada durante su ciclo normal de
vida. Sanderson y Jolly (1994) alimentaron juveniles de trucha arco iris (O. mykiss) con un
peso inicial de alrededor de 250 g durante 84 días. Los resultados indicaron que la cantidad de
astaxantina en la carne de las truchas era dependiente de la dosis y del tiempo de alimentación.
Los mismos autores explican otros beneficios potenciales de la astaxantina en el cultivo de
peces tales como el efecto en la calidad de huevos y sobrevivencia de larvas, como agente
antioxidante, como recurso de vitamina A, como factor importante para el metabolismo
intermediario del hígado de los peces e importante para la sobrevivencia de los camarones.
PROTEINA BACTERIANA
Avances en Nutrición Acuícola III
287
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Methylophilus methylotropus. Esta proteína unicelular conocida como “Pruteen” y cultivada
en metanol (Taylor y Berk, 1981), ha sido también considerada para sustituir a la harina de
pescado en los alimentos para peces gracias a su elevada calidad nutricional. La carpa crece
eficientemente con dietas a base de este material, con resultados mejores a los obtenidos con
caseína o harina de pescado. Se ha visto también que la trucha presenta un crecimiento similar
al obtenido con harina de pescado, cuando se incluye hasta 60% de proteína de pruteen en su
dieta. Esta bacteria puede reemplazar arriba del 75% de la proteína animal en dietas para
salmónidos y alrededor del 50% en dietas para tilapia (Atack et al., 1979; Kaushik y Luquet,
1980; Tacon y Jackson, 1985).
Micrococcus glutamicus. Los subproductos farmacéuticos bacterianos tienen un valor
nutricional adecuado para la Tilapia aurea (O. aureus), con resultados similares a los Oobtenidos
con dietas comerciales. Se ha demostrado que la bacteria Micrococcus glutamicus, utilizada en
la producción industrial de lisina, puede substituir el 20% de la proteína en dietas para tilapia
(O. mossambicus), mientras que la Pseudomonas spp. causa reducción en el crecimiento de la
trucha arco iris (O. mykiss). (Kohler y Pagan-Font, 1978; Matty y Smith, 1978; Davies y
Wareham, 1988) (Tabla No. 4).
Brevibacterium lactofermentum y Bacterium glutamaticum. Adultos de trucha arco iris fueron
alimentados con éstas dos proteínas unicelulares secas y esterilizadas en autoclave en dos experimentos
con inclusiones de 0, 4, 8 y 16% de substitución de harina de pescado. Los resultados indicaron que
las inclusiones de 4 a 16% de Brevibacterium lactofermentum no influenciaron significativamente la
tasa de crecimiento, conversión alimenticia, composición del cuerpo e índices hepatosomático y
gonadosomático. Mientras que la proteína de Bacterium glutamaticum tuvo los mismos resultados
en una proporción del 4%, pero a niveles mayores causó una marcada reducción en la tasa de
crecimiento y eficiencia alimenticia. Los resultados también indicaron que es posible que la proteína
de B. glutamaticum es menos digerible y/o tiene algún factor antinutricional que no tiene la de B.
lactofermentum (Kiessling y Askbrandt, 1993).
HONGOS FILAMENTOSOS
Los hongos son un importante potencial en la alimentación de peces, dada su calidad
nutricional y la facilidad de cultivarse en residuos celulósicos (Taylor y Berk, 1981; Tacon y
Jackson, 1985) (Tabla No. 1).
Geotrichum candidum. Dabrowski et al. (1980) reemplazaron con éxito en dietas para
trucha hasta el 50% de la harina de pescado con este hongo filamentoso cultivado en solubles de
destilería del whisky; sin embargo sustituciones mayores (75 y 100%) provocaron efectos
adversos sobre el crecimiento atribuidos a deficiencia de aminoácidos, particularmente sulfurados,
lisina e histidina, así como también problemas asociados a bajos niveles de Ca y Mg y deficiencias
energéticas por un bajo contenido de lípidos.
MICROALGAS
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Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
Las microalgas son una buena alternativa para la alimentación animal, ya que pueden
satisfacer la totalidad de sus requerimientos nutricionales aún cuando son pobres en energía
(Göhl, 1991). Su producción industrial es costosa pero su cultivo en aguas residuales podría
abaratar el proceso (Taylor y Berk, 1981), además de que algunas se pueden obtener como
subproductos industriales, (Tabla No. 1).
Spirulina spp. Alga filamentosa característica de lagos someros salinos y alcalinos de aguas
cálidas de Africa y América. Su velocidad de crecimiento es mayor a la de cultivos agrícolas y
cercana a la de otros microorganismos como levaduras y bacterias, duplicando su biomasa en 35 días. Bajo estas condiciones se pueden producir 25 ton/ha/año del alga, equivalentes a 15 ton
de proteína (Santillán, 1979; Richmond, 1988; Göhl, 1991). En general su perfil de aminoácidos
es bueno, sin embargo, es deficiente en aminoácidos sulfurados y triptofano. Es rica en ácidos
grasos de la serie linoléica y linolénica; contiene cantidades importantes de pigmentos (clorofila
a, carotenoides y xantofilas, ficobiliproteínas, c-ficocianina y aloficocianina), y extremadamente
rica en tiamina, niacina, piridoxina y cianocobalamina; contiene niveles importantes de pantotenato
de calcio, ácido fólico, inositol, ß-carotenos (provitamina A) y tocoferoles (E). Su contenido de
ácidos nucleicos es bajo en comparación a otros microorganismos (Richmond, 1988). Todas
estas características hacen que mejore la condición y sanidad de peces alimentados con esta
microalga (Mustafa et al., 1994).
La espirulina como alimento para peces determinó un bajo crecimiento en carpa y trucha sin
harina de pescado (Matty y Smith,1978; Atack et al. (1979), mientras que Henson (1990)
obtuvo incrementos notables en el crecimiento del salmón al suplementar su dieta con 2.5% del
alga. En general, su adición en pequeñas cantidades en la dieta de peces produce efectos
significativos sobre el crecimiento, utilización del alimento, condición fisiológica, respuesta al
estrés, resistencia a enfermedades, así como calidad de la carne en cuanto a contenido de grasa
y coloración (Hirano y Suyama, 1985; Mori et al., 1987; Chow y Woo, 1990; Watanabe et al.,
1990; Mustafa et al., 1994; Mustafa y Nakagawa, 1995) (Tabla No. 4).
Clorella vulgaris. Esta alga unicelular con altos nivel de proteína ha sido empleada en
alimentos para reochromis niloticus en combinación con otros recursos proteicos, la utilización
con C. vulgaris causó pérdida de peso. El incremento en lipofuscinas en los hepatocitos y la
alteración de la estructura de estos se encuentra bastante relacionado a la alimentación con esta
alga (Orachunwong et al. 1988; Tabthipwon et al., 1988)
Cladophora glomerata. Esta alga filamentosa verde-azul crece extensivamente en estanques
de agua dulce. Frecuentemente es un problema cuando hay una excesiva floración ya que impide
la navegación. Cuando se degrada produce un olor ofensivo junto con la reducción de oxígeno
provocando la muerte de gran cantidad de peces (Appler y Jauncey, 1983). El empleo de esta
alga como ingrediente en la dieta de los peces ha dado resultados variables. Por ejemplo esta alga
fue proporcionada a crías de tilapia O. niloticus en diversas proporciones con harina de pescadoalga. Los resultados indicaron que se puede usar como substituto parcial de la harina de pescado;
sin embargo, la inclusión de 50% en la dieta provocó reducción del crecimiento, aún cuando la
tasa de conversión alimenticia fue adecuada, su utilización dependerá de la evaluación de costos
Avances en Nutrición Acuícola III
289
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de cosecha y procesamiento. Se requieren más estudios para evaluar esta proteína junto con
otros recursos proteicos de valor nutricional similar.
Hydrodictyon reticulatum. O. niloticus y Tilapia zillii alimentados con esta alga también
filamentosa, presentaron bajo crecimiento, pero podrían ser rentables las sustituciones de hasta
33% de ésta proteína en dietas comerciales (Appler y Jauncey, 1983; Appler, 1985).
Mycrocystis aeruginosa. Tiene un alto contenido de proteína y es un buen alimento para
larvas de tilapia (O. niloticus); sin embargo, cuando se otorga en altos niveles puede disminuir
el crecimiento. Gorham (1964 in Tabthipwon et. al., 1988) menciona que esta alga verde azul
puede ser tóxica, lo cual puede explicar los efectos adversos en el crecimiento de estos organismos;
sin embargo, la mezcla de M. aeruginosa con pellets para carpa mejoran significativamente el
crecimiento (Tabthipwon et al., 1988)
LODOS ACTIVADOS
El valor nutricional de este complejo de microorganismos es equivalente al de la levadura
cervecera o cereales ricos en proteína, pero se recomienda precaución en su uso ya que pueden
reducir la palatabilidad y digestibilidad de la dieta (Tabla No. 1). Orne et al., (1979) compararon
el efecto de la inclusión de un lodo activado obtenido de una planta de tratamiento de efluentes
de una fábrica de papel en dietas para trucha, donde sustituye parcial o totalmente a la harina de
pescado, de soya y de algodón, con las cuales se formó una mezcla proteica. No observaron
efectos adversos de la inclusión de 17, 19, 25 y 50% del lodo activado con la dieta, aún cuando
el mejor crecimiento se obtuvo con las dietas sin lodo activado y con 17% del material, esta
última dieta conteniendo solamente harina de pescado (18%), lodos activados (17%) y harina
de algodón (20%) como ingredientes proteicos. Tacon y Jackson (1985) señalan que diversos
autores han obtenido resultados promisorios al alimentar truchas con dietas conteniendo lodos
activados derivados de plantas de tratamiento de efluentes de fábricas de papel, cervecerías y
aguas domésticas; sin embargo destacan la necesidad de realizar más investigaciones a fin de
evaluar la factibilidad comercial de su uso en la alimentación de peces. Son también un suplemento
adecuado en dietas para trucha, mientras que las carpas aceptan inclusiones de 40 a 70% de la
proteína con este material, con mejores resultados al los obtenidos con harina de semilla de
algodón (Tacon, 1978/1979; Tacon y Ferns, 1978/1979; Anwar et al., 1982; Tacon, 1987).
Koops et al., (1982) encontraron que solamente el 5% de lodos activados domésticos causaron
reducción en la conversión alimenticia y el crecimiento de truchas, indicando claramente que
este recurso no es un substituto apropiado para esta especie.
CONCENTRADOS DE PROTEINA FOLIAR
El empleo de concentrados proteicos en alimentos acuícolas es una buena alternativa para la
utilización de forrajes y semillas en dietas para peces, ya que eliminan el problema de su alto
contenido de fibras y el de su bajo nivel proteico que impide su uso directo. La producción de
concentrados de proteína foliar es una alternativa de alimentación importante para los trópicos,
290
Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
donde es posible tener condiciones favorables para el crecimiento de las plantas durante todo el año.
La producción de proteína foliar puede exceder a la de granos o carne por unidad de área, ya que en
una hectárea se obtienen en un año alrededor de 4,000 kg. de concentrados de proteína de alfalfa, 510
-785 kg. de proteína de soya (en grano), 262 kg. de proteína de maíz (en grano), o alrededor de 29 kg.
de proteína como carne de res (Kinsella, 1970; Nagy et al., 1978; Vinconneau, 1979; Humphries,
1980; Roe y Bruemmer, 1980; FAO, 1983; Tacon y Jackson 1985).
El contenido de proteína foliar seco es elevado, pero depende del método de extracción. Su
perfil de aminoácidos está relacionado con el del vegetal de donde se extrae, aún cuando su
balance es muy constante independientemente de su origen. El perfil de aminoácidos es muy
parecido entre plantas y las diferencias relativas en el vegetal, se deberán a la presencia de otros
elementos los cuales se eliminan durante el proceso de concentración de la proteína (Göhl,
1991). Su valor biológico se sitúa entre la harina de soya y la leche. Su costo de producción es
elevado y en el mejor de los casos no excede al de la producción de harinas animales, pero es
superior al de las harinas de oleaginosas (Kinsella, 1970), lo que limita actualmente su uso a
nivel comercial.
En la alimentación de los peces ha dado resultados variables según su origen. Atack et al.
(1979) obtuvieron bajo crecimiento en carpas alimentadas con dietas a base de concentrado de
proteína de soya, mientras que Higgs et al. (1982) observaron rendimientos similares a los
obtenidos con harina de pescado, cuando incluyeron hasta 24% de concentrado de proteína de
colza en dietas para salmón (O. tshawytscha). Teskeredi et al. (1995) sustituyeron hasta 66%
de la proteína con este material sin afectar el crecimiento de la trucha. Ogino et al. (1978)
determinaron que el crecimiento y la eficiencia de utilización del alimento no fueron afectados
cuando truchas y carpas recibieron 43% de un concentrado proteico de pasto (Lolium sp.), al
igual que Stickney et al. (1996) no encontraron diferencias en el crecimiento cuando incluyeron
50% de concentrado proteico de soya ó 25% de concentrado proteico de semilla de girasol en
dietas para trucha (Tabla No. 4).
PLANTAS SUPERIORES
Leguminosas. Son los vegetales más ampliamente utilizados como alimento animal debido
principalmente a su alto contenido proteico (Bressani y Elias, 1980). De las plantas utilizadas
por el hombre, sólo las gramíneas son más importantes que las leguminosas. Las semillas de
leguminosas se consideran los suplementos naturales de los cereales, ya que sus niveles
generalmente altos de lisina compensan su deficiencia en las gramíneas, mientras que éstas
subsanan la insuficiencia de aminoácidos sulfurados de las leguminosas. Su calidad nutricional
varía debido a la presencia de antinutrientes (NRC, 1979; Tacon, 1987; Bressani y Elias, 1980;
Liener, 1980; Nowacki, 1980; Van der Poel, 1990) (Tablas No. 1 y 2).
Leucaena leucocephala. Esta leguminosa tropical es de rápido crecimiento, resistentes a la
sequía y con una gran variedad de usos comparada con otras leguminosas (Lim y Dominy,
1993). La harina de hojas de Leucaena contienen 29% de proteína cruda en base seca y se usa en
los trópicos para alimentar ganado y aves. Sin embargo, su uso esta limitado por la presencia del
Avances en Nutrición Acuícola III
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aminoácido mimosina y la carencia de algunos aminoácidos esenciales (Tabla No. 2). La harina
de hojas de Leucaena se ha probado en alimentos para tilapia con resultados variables. Su
inclusión en la dieta provoca reducción en el crecimiento y baja eficiencia de conversión alimenticia
debido al efecto tóxico del aminoácido libre mimosina y a su deficiencia de aminoácidos sulfurados.
Cuando se remoja durante 48 horas y se seca al sol se mejora su calidad nutricional, siendo
entonces posible sustituir hasta 25% de la proteína animal sin efectos adversos notables (Jackson
et al., 1982; Wee y Wang, 1987).
Canavalia ensiformis y Sesbania grandiflora. La inclusión de harina de semillas de éstas
dos leguminosas en dietas para tilapia, provocaron reducción en el crecimiento, atribuido a la
presencia del aminoácido libre L-canavanina (Tabla No. 2) y de la lectina concanavalina. Sin
embargo, sí la Sesbania se remoja durante 12 horas se reduce el efecto adverso, siendo entonces
posible incluir hasta 25% de la proteína con esta semilla. Este tratamiento no elimina totalmente
su toxicidad que genera todavía mortalidad elevada y bajo crecimiento, debido probablemente a
deficiencia de aminoácidos; la semilla de canavalia remojada en agua y tratada con soluciones de
etanol y ácido sulfúrico presenta baja toxicidad y adecuada calidad nutricional (MartínezPalacios et al., 1988; Olvera et al., 1988) (Tabla No. 4).
Lupinus albus. La semilla de Lupinus reemplaza hasta 30% de la proteína animal en dietas
para trucha suplementadas con lisina y metionina, mientras que puede incluirse hasta 40% de
su harina en el alimento con resultados adecuados (De la Higuera et al., 1988; Hughes, 1988,
1991; Morales et al, 1994).
Brassica napus, B. campestris. La semilla de colza (nabo o canola) contiene altos niveles de
proteína de excelente calidad; y su composición de aminoácidos se compara favorablemente con
la de la soya. Sin embargo, contiene altos niveles de fibra, y glucosinolatos y otros constituyentes
fenólicos que afectan a la glándula tiroides y causan hemorragias en el hígado, además de fitatos
y taninos. Se ha investigado el uso como alimento en vertebrados superiores y se ha visto que
durante los procesos de extracción de aceite los efectos antinutricionales se pueden reducir
significativamente (Dabrowski et al., 1982). En Canadá se han desarrollado variedades genéticas
de las dos especies que contienen bajos niveles de glucosinolatos y a estas variedades siendo
conocidas como harina de canola (Higgs et al., 1982).
Al incluir esta harina en la dieta del salmón (Onchorhynchus kisutch) ésta harina causó una
reducción significativa del crecimiento e hiperplasia de la tiroides, incremento en la grasa corporal
y reducción en la utilización alimenticia y a niveles altos, el rechazo al consumo (Higgs et al.,
1982). Posteriormente en un trabajo con el salmón chinok, se probaron dietas a base de canola
procedente de las dos especies de nabo (B. campestris y B. napus). Los resultados indicaron
que la harina de nabo genéticamente seleccionada con bajos niveles de glucosinolatos proporciona
recursos proteicos adecuados como suplemento alimenticio para esta especie . El crecimiento
de estos peces son buenos cuando se incluye de 13 a 16% de proteína (equivalente a 16-20% de
materia seca) de harina de nabo tipo canola. Niveles entre 30 y 32% (25% de proteína dietarica)
no se espera que reduzcan el crecimiento de los peces debido a que los niveles de glucosinolatos
292
Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
son menos de 300 mg/g y chinok puede soportar niveles más altos. Sin embargo, las dietas se
deben suplementar con tri-iodo tironina y tal vez tirosina para contrarrestar los efectos del
glucosinolato (Higgs et al., 1982) (Tabla No. 4).
Cuando se usa harina de colza en dietas para carpa los resultados mostraron que el material
esta bien balanceada en términos de proteína y contenido de energía para ésta especie. Sin
embargo, en dietas con altos niveles de glucosinolatos, se incrementó el nivel de lípidos en el
cuerpo y se observó reducción del crecimiento. En este trabajo, se usaron harinas de colza que
contenían diferentes niveles de glucosinolatos y con adición de fósforo para reducir el problema
de los fitatos. Los resultados mostraron que las dietas contenían altos niveles de los aminoácidos
esenciales que cubrían los requerimientos de la carpa y que se puede sustituir el 50% de la harina
de pescado se puede substituir por harina de canola. Se observó que el efecto en carpas depende
de la inactivación de la mirosinasa (Dabrowski y Kolowska, 1981). Los efectos histológicos de
esta harina sobre la glándula tiroides de las carpas fueron menos pronunciados que los observados
en trucha y solamente se observó un ligero alargamiento de las células como una respuesta a la
actividad goitrogénica del glucosinolato, por lo demás los peces estuvieron normales (Dabrowski,
et al., 1982).
Vicia faba. La utilización de harina de haba, como substituto proteico en dietas para trucha
(Onchorrhynchus kisutch) puede ser hasta de un 45% siempre y cuando sea adicionado a la
dieta con 2.13% de cistina, 2.32% de lisina y 2.82% de arginina ( Koops et al., 1982).
SUBPRODUCTOS AGROINDUSTRIALES
Los subproductos agroindustriales poseen cierta calidad nutricional que puede aprovecharse
para alimentar peces. La pulpa de café se ha incluido en dietas para tilapia, con resultados
favorables con niveles de hasta 30% del material en su alimento. Mientras que la carpa común
y el bagre africano (Clarias mossambicus) presentaron reducción en su crecimiento cuando se
incluyó 30% de pulpa de café en su alimento (Bayne et al., 1976; Christensen, 1981).
Teobroma cacao. Algunos materiales pueden utilizarse como alimento suplementario, como
en el caso de la pasta de cacao, la cual se ha usado como alimento suplementario para alimentar
tilapias (Tilapia guineensis) a razón del 5% de la biomasa del estanque por día, con resultados
aceptables. El menor crecimiento registrado en comparación a una dieta comercial se debe a la
presencia del alcaloide teobromina, el cual se elimina parcialmente durante el proceso de
fermentación a que se somete la semilla de cacao, quedando valores residuales de 1-1.5%
(Fagbenro, 1988).
Trigo (Triticum aestivum). El germen de trigo ha mostrado tener un excelente valor nutritivo
en dietas para carpa Plecoglossus altivelis y trucha Salmo gairdneri. Los resultados experimentales
mostraron que el germen de trigo desengrasado y la harina de pescado mezclados en las dietas
para Plecoglossus altivelis y Salmo gairdneri con tasas de inclusión de 50:50 para el P. altivelis
Avances en Nutrición Acuícola III
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y 25 trigo: 75 harina de pescado para la trucha dieron los mejores crecimientos (Kemasamaru et
al., 1972).
El gluten de trigo y maíz fueron probados en dietas para trucha. Los resultados indicaron
que el gluten de trigo fue mejor que el gluten de maíz, utilizando substituciones entre 9 y 12.5%
(Koops et al., 1982).
Zea mayz. Cuando los solubles de maíz han sido utilizados en lugar de la harina de pescado
y germen de trigo, los salmones Onchorhynchus tzhawytscha son más pequeños y con menos
proteína depositada, por lo que se concluye que los productos de maíz son de muy pobre
calidad para los salmones. (Fowler y Banks, 1972; 1974). Contrario a lo anterior, Moyano et
al., (1992) alimentaron a la trucha (Onchorrhynchus mikiss) con dietas a base de germen de
maíz en una substitución de 0.4 a 0.6% de la proteína. Los alimentos fueron bien aceptados y
los peces tuvieron un adecuado crecimiento, a pesar de que el germen de maíz tiene imbalances
de los aminoácidos isoleucina y leucina.
Papa (Solanum sp.). Se han utilizado concentrados proteicos de papa para substituir harina
de pescado en niveles que van de 0.4 y 0.6% de la proteína en alimentos para la trucha arco iris
(Onchorhynchus mykiss). Los resultados no fueron adecuados debido a la presencia de solanina.
La única posibilidad de utilizar este producto esta relacionada a la disponibilidad de harina libre
de éste antinutriente (Moyano et al., 1992).
MACROFITAS ACUATICAS
Estas plantas pueden emplearse como forraje para peces herbívoros o transformarse en
harina para incluirse como ingrediente en alimentos balanceados, pero la factibilidad de su uso
depende de los costos de colecta y procesamiento. Las macrofitas se distribuyen mundialmente,
encontrándose en casi todos los ambientes y normalmente se consideran como plaga, ya que
interfieren con diversas actividades económicas, por lo que sería importante su utilización
(Appler y Jauncey, 1983; Singhal y Mudgal, 1984).
Eichornia crassipes. La adición de 10% de harina del lirio acuático en dietas para bagre (I.
punctatus) dieron como resultado crecimientos por arriba del testigo, sin embargo, se observó que
este pez no consume alimento con más de 40% del material , debido a la reduccion en la palatabilidad
de la dieta por el elevado contenido de fibra del lirio (Liang y Lovell, 1971; Edwards et al., 1985). Las
tilapias tienen una mejor capacidad para utilizar esta planta después de ser sometida al proceso de
composteo, aceptando hasta 50% del material en su dieta sin afectar el crecimiento.
Azolla pinnata. Santiago et al. (1988) determinaron que O. niloticus crece bien con Oniveles
de hasta 42% de inclusión de harina de ésta macrofita, en dietas con 35% de proteína. Mientras
que El-Sayed (1992) observó marcada reducción del crecimiento en la misma espeOcie, al
sustituir la proteína animal con este helecho en dietas con 30% de proteína. Al parecer las
diferencias están relacionadas con el contenido de proteína y energía en las dietas.
Se considera que el valor nutricional de las macrofitas acuáticas es mayor como alimento
fresco. Hassan y Edwards (1992) comprobaron que la Lemna perpusilla es un alimento
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Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
suplementario apropiado para peces herbívoros como la tilapia (O. niloticus).
NUEVAS ALTERNATIVAS
Se han realizado numerosos esfuerzos en la búsqueda de fuentes alternas de proteína
vegetal para la substitución total o parcial de la harina de pescado y a la fecha pocos productos
se pueden utilizar a nivel comercial por diversos motivos, tales como costos de producción,
niveles de antinutrientes, imbalance de aminoácidos, baja disponibilidad de los productos o
altos costos de los procesos, entre otras.
Es evidente que la acuicultura integral de agua dulce de Asia, especialmente de China e India
que produce el 65% de la producción mundial por acuicultura y que se basa en la fertilización,
utilización de desechos o subproductos de la ganadería, agricultura y la industria para la
producción de alimentos, es la única acuicultura sostenible (Tacon, 1993a, 1996) y la única que
“exporta” nutrientes a la agricultura a través de una integración de cultivos. La acuicultura semiintensiva e intensiva de peces y crustáceos marinos, recibe proteínas, carbohidratos y aceites de
la pesca, la agricultura y la ganadería pero la acuicultura no “exporta” o recicla ningún recurso a
estos sistemas de producción (Fig. 1), siendo por lo tanto una actividad altamente dependiente
de una industria de la producción de alimentos y en consecuencia con dificultades para ser
sostenible. Es fundamental por lo tanto, establecer modelos similares de ciclaje de nutrientes en
la acuicultura intensiva de peces y crustáceos de aguas salobres y marinas, especialmente para
reciclar el fósforo y nitrógeno que se libera a través de sus efluentes. Para ello la agricultura
alternativa de especies halófitas y sus subproductos son todo un nuevo potencial de utilización
de proteínas no convencionales, ya que estas plantas pueden ser cultivadas en las cada vez más
abundantes tierras salinas, generadas por la agricultura y la construcción de presas, así como la
reutilización de las tierras erosionadas por las malas prácticas agrícolas y ganaderas, que desde
1947 a la fecha se calcula cubren una área similar a China y la India juntas (Clarke, 1994). Los
efluentes de las granjas de aguas marinas y de aguas salobres o dulces, podrían ser utilizados
para el riego de halófitas, generando forraje para ganado del tipo de los pastos salados o semillas
de gramíneas y oleaginosas como la Salicornia sp. que ha probado tener niveles importantes de
proteínas (40%) y aceites (30%). Estos cultivos se han iniciado a nivel piloto en algunos países,
con el propósito de obtener como primer producto, aceites de calidad para el consumo humano,
generando subproductos ricos en proteína y carbohidratos que pueden ser utilizadas por la
acuicultura y la ganadería (Clarke, 1994; Yensen et al., 1988; Yensen y Weber, 1987).
DISCUSION Y CONCLUSIONES
Después de analizar casi 40 años de investigación sobre el uso de fuentes alternas de
proteínas vegetales como substituto de la harina de pescado en dietas para peces y crustáceos
se puede concluir:
De las plantas oleaginosas, las más utilizadas actualmente y que en forma importante
contribuyen a la alimentación acuícola son hasta el momento las pastas de soya, algodón, colza
y girasol. La harina de soya a pesar de su imbalance de aminoácidos y contenido de antinutrientes
Avances en Nutrición Acuícola III
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Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
es la fuente de proteína vegetal más usada en la acuicultura, llegándose a utilizar como recurso
protéico hasta el 100% en algunas especies. Sin embargo, tiene la enorme desventaja de que su
uso compite con el consumo humano y animales terrestres, lo que ha elevado los costos y en
algunos países es tan cara o inaccesible como la harina de pescado.
Otras proteínas de plantas oleaginosas como el algodón, girasol y colza, se utilizan en
proporciones que pueden llegar a substituir a la harina de pescado hasta un 25%. Su uso es
limitado debido a antinutrientes como el gosipol en el algodón y el contenido de fibras en la
pasta de girasol y varios antinutrientes en la colza, principalmente los glucosinolatos.
La pasta de cacahuate, copra y ajonjolí son utilizadas en los lugares en donde son altamente
disponibles incluyéndose en proporciones menores al 25% debido a deficiencias de aminoácidos,
baja palatabilidad y presencia de ácido fítico respectivamente
Las proteínas vegetales de origen unicelular son utilizadas como un complemento alimenticio,
pero generalmente altos niveles de inclusión en las dietas limitan el crecimiento debido a su
elevado contenido de ácidos nucleicos y deficiencias de aminoácidos sulfurados. Se han llegado
a utilizar niveles de inclusión de hasta 50% en trucha y 70% en bagre. Se considera que las
levaduras en general tienen un alto potencial como substituto de la harina de pescado, una vez
que se elimine la toxicidad por el DNA con el uso de enzimas. Se requiere investigación en este
aspecto para aprovechar estos recursos. Algunas levaduras como Paffia rodhozyma han
revolucionado su utilización dentro de la acuicultura por ser un material con proteínas adecuadas,
lípidos, vitaminas y minerales, presentando una alta producción del caroteno astaxantina,
pigmento asociado a la fertilidad y como agente antioxidante. Una desventaja de esta levadura
es el alto costo de producción, por lo que actualmente solo se utiliza como pigmento en dietas
para salmónidos
Las proteínas bacterianas han llegado a substituir experimentalmente 60% de la harina de
pescado. Estas proteínas tienen un alto potencial, sin embargo, su uso comercial dependerá de
los costos de producción.
La utilización de las microalgas en dietas balanceadas para larvas de camarón P. vanamei
está recobrando importancia (Freeman et al., 1996). Spirulina sp. se ha incorporado como un
constituyente importante y como complemento alimenticio en las dietas de larvas de peces,
principalmente debido a su riqueza en proteínas, vitaminas, carotenos y ácidos grasos.
Se requiere mayor investigación en la utilización de los complejos bacterianos de los lodos
activados, así como evaluación de costos de producción para que éstas proteínas sean incluidas
en dietas comerciales para peces y crustáceos.
Los concentrados foliares como subproductos de la agricultura son todo un potencial para
la substitución de harina de pescado. El principal problema es que las hojas y las semillas se
deben cosechar en distintos períodos de tiempo y por otro lado, las hojas de plantas adultas
296
Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
tienen más fibras y menos proteínas que las hojas de plantas jóvenes, cuando el fruto todavía no
se ha desarrollado, haciendo difícil la compatibilidad de explotar ambos productos, por ejemplo
granos y hojas de soya al mismo tiempo. En el caso de otros concentrados foliares como la
alfalfa en la que la proteína es de buena calidad, el proceso de extracción es elevado y algunos
antinutrientes no termolábiles como las saponinas, son altamente tóxicos para los peces.
Las leguminosas tienen un gran potencial para su uso en acuicultura como substituto parcial
de la harina de pescado, por los altos niveles de proteína que tienen, porque en su cultivo no
requieren fertilizantes nitrogenados y por la amplia variedad de especies que existen. Algunas
de las que se han estudiado como la semilla de colza presentan altos niveles de proteínas, pero
tienen varios antinutrientes y por tal motivo existen restricciones en su utilización. Se considera
necesario continuar con esfuerzos de investigación para identificar especies o variedades con
bajos valores de antinutrientes como los realizados con la canola. Es importante también realizar
estudios sobre técnicas efectivas y de bajo costo, para la eliminación de ciertos antinutrientes y
estudios agronómicos para incrementar la producción de las plantas seleccionadas, con el fin de
conocer el potencial de las mismas a nivel comercial. Se ha probado que las leguminosas son
vehículos adecuados en sistemas de extrusión en donde se mezclan con subproductos de origen
animal, obteniendo mezclas proteicas de alta calidad.
Los subproductos agrícolas como el café, cacao, germen de trigo, solubles de maíz y granos
secos de cervecería, se utilizan como substitutos parciales de la harina de pescado en diversas
proporciones. La utilización de estos subproductos se realiza solamente en las regiones en las
que se encuentran disponibles. Algunos de estos concentrados proteicos no pueden ser utilizados
debido a los niveles y toxicidades de algunos antinutrientes como la solanina en el caso de la
papa.
Las macrófitas acuáticas se utilizan casi exclusivamente para la alimentación de organismos
herbívoros. Los problemas de su utilización son los altos niveles de agua que contienen y los
altos costos de extracción. Se han utilizado como harina y como alimento fresco. Se considera
que la forma fresca tiene mayor valor nutricional. Debido a que la producción es local, estos
productos se utilizan regionalmente y a menos que exista un proceso industrial de bajo costo,
será difícil integrarlos en la lista de materias primas para alimentos balanceados.
Existen nuevas áreas de investigación de producción proteica masiva, en la utilización de
plantas halófitas como fuentes alternas, que puedan integrarse a los sistemas de cultivo semi
intensivo e intensivo comercial de peces, crustáceos marinos y de aguas salobres, utilizando los
efluentes cargados de nutrientes, transformándolos en proteínas, aceites y carbohidratos para
consumo humano y animal.
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Avances en Nutrición Acuícola III
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
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Figura 1. Flujo de nutrientes de la agricultura, ganadería, pesca y acuicultura para el
consumo humano. Alternativas de investigación para incrementar la producción.
Avances en Nutrición Acuícola III
311
312
Positivas
Nivel proteico superior
a 40%. Rica en vitaminas C, K, tiamina, niacina, riboflavina, y
tocoferoles
Buen nivel proteico
(26-47%). Buena palatabilidad
Buen nivel proteico
(26-42%). Muy rico en
aminoácidos sulfurados; bajo contenido de
antinutrientes
Buen nivel proteico
(33-57%)
Moderado nivel proteico (19-25%)
Material
Soya
Algodón
Girasol
Cacahuate
Avances en Nutrición Acuícola III
Copra
Generalmente cara. Alto contenido de fibra. Deficiente en lisina. De fácil descomposición por su alto contenido de aceite
residual.
Bajo contenido de aminoácidos sulfurados
y lisina. Fácil contaminación con hongos
productores de aflatoxinas.
Alto contenido de fibra.
Presenta actividad moderada de inhibidores de proteasa, arginasas y taninos.
Contiene el antinutriente gosipol presente
en las glándulas de pigmento, el cual afecta la disponibilidad de lisina, reduciendo
el crecimiento en monogástricos. Presencia de ácidos grasos ciclopropenoicos.
Pobre en lisina y aminoácidos sulfurados.
Presencia de fitatos, hemaglutininas, inhibidores de tripsina, saponinas, goitrógenos, y factores antivitaminas D, E y B12
entre otros antinutrientes.
Negativas
CARACTERÍSTICAS
Harina o pasta
Se usa harina o pasta
Harina o pasta, de preferencia material decorticado
Se usa harina desengrasada con solventes o de semilla sin glándula del
pigmento
Harina o pasta desengrasada y también entera sin desengrasar
Aplicación
Tabla 1. Características generales de los materiales proteicos de origen vegetal
utilizados en la alimentación de peces
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
Positivas
Buen nivel proteico
(32-44%), rico entionina y arginina
Rica en proteína. Elevado contenido de me
tionina y lisina.
Ricas en proteína (5070%) y vitaminas del complejo B. Pueden cultivarse
en substratos baratos.
Niveles de proteína superiores a los de otros
materiales unicelulares
(70-80%)
Ricos en proteína (3065%). Se cultivan en
residuos industriales
Ricas en proteína (4065%) y pigmentos. Se
cultivan en sistemas
continuos o en aguas
residuales
Material
Ajonjolí
Colza
Levaduras
Bacterias
Hongos
filamentos
Microalgas
Harina o pasta
Aplicación
Avances en Nutrición Acuícola III
Materia seca pulverizada
Pruteen, subproductos farmaceœticos e industriales
Levaduras cultivadas en
alcanos o melaza
Alto costo de producción; baja digestibi- Materia seca pulverizada
lidad en monogástricos; bajo valor energético
Deficientes en aminoácidos sulfurados.
Lento crecimiento.
Elevado contenido de ácidos nucleicos
Alto contenido de ácidos nucleicos, carbohidratos y material indigerible. Deficientes en aminoácidos sulfurados y
algunos minerales como el calcio.
Posee varios antinutrientes incluyendo
Harina o pasta
glucosinolatos, ácido erœcico, ácido fítico,
taninos y otros constituyentes fenólicos.
Alto contenido de ácido fítico que forma
complejos insolubles con algunas proteínas y cationes metálicos reduciendo su
disponibilidad biológica.
Negativas
CARACTERESTICAS
(Continœa Tabla 1)
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
313
314
Fuente importante de
proteína, energía (como
lípidos y carbohidratos)
y vitaminas del complejo B. Ricas en lisina
Baratos y de amplia
disponibilidad
Amplia distribución. Ele- Altos costos de colecta y procesamiento;
vado contenido de mivalor proteico variable; ricas en fibra
nerales esenciales, y
vitaminas
Semillas de
leguminosas
Subproductos
agrícolas
Avances en Nutrición Acuícola III
Macrofitas
acuáticas
Valor nutricional variable. Contienen antinutrientes
Deficiente en aminoácidos sulfurados.
Contienen mœltiples antinutrientes como aminoácidos libres (canavanina y mimosina),
alcaloides, glucósidos cianogénicos, saponinas y factores estrogénicos, entre otros
Deficientes en aminoácidos sulfurados. Concentran también los antinutrientes termoestables. Afectan el sabor. Alto costo de producción
Ricos en proteína (3670%), lípidos, minerales,
pigmentos y vitaminas
Concentrados
proteicos
Negativas
Deficientes en aminoácidos sulfurados.
Presentan altos niveles de nitrógeno no
proteico. Tienen niveles bajos de lípidos,
alto contenido de fibra y elevadas cantidades de cenizas inórganicas que pueden
provovar desbalance mineral. Pueden contener reiduos tóxicos o cancerígenos y
microbios patógenos
Positivas
Lodos activados Ricos en proteína y minerales. Son una fuente
importante de tirosina,
valina y fenilalanina y
una de las fuentes más
ricas de vitamina B12.
Material
CARACTERESTICAS
(Continœa Tabla 1)
Harina o alimento suplementario
Como harina en alimentos
o como alimento siplementario
Harina
Harina
Suplemento alimenticio o
ingrediente en la dieta
Aplicación
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
Material
Oleaginosas incluyendo:
Algodón (Gossypium spp.)
Cacahuate (Arachis hypogaea)
Colza (Brassica campestris)
Girasol (Hellianthus annus)
Soya (Glycine max)
Leguminosas incluyendo:
Alfalfa (Medicago sativa)
Leucaena (Leucaena leucocephala)
Canavalia (Canavalia spp.)
Frijoles (Phaseolus spp.)
Lupino (Lupinus albus)
Cereales y sus subproductos
Oleaginosas incluyendo:
Cachuate, soya
Leguminosas incluyendo:
Frijoles
hícharos (Cicer spp., Vigna spp.,
Cajanus spp., Pisum spp.)
Cereales y sus subproductos
Oleaginosas incluyendo:
Cacahuate,colza, soya, algodón
Ajonjolí (sesamum indicum)
Leguminosas incluyendo:
Frijoles, chícharos.
Cereales y sus subproductos.
Antrinutiente
Inhibidores de proteasas
Fitohemaglutininas
çcido fítico (Fitatos)
Avances en Nutrición Acuícola III
Forma complejos indigeribles por los sistemas
digestivos de los animales, establecer enlaces
con aniones y cationes mono y polivalentes como
proteínas, fósforo, calcio, zinc, cobre, magnesio,
etc. provocando deficiencias de minerales.
No se inactivan con calor.
Provocan coagulación de la sangre.
Son termolábiles
Afecta la actividad de la tripsina y agudiza
la deficiencia de aminoácidos sulfurados de
las proteínas vegetales.
Provoca hipertrofia pancreática asociada a
perdida de proteínas secretadas por el
páncreas, constituidas en gran medida
por enzimas ricas en Cistina.
Son termolábiles
Efecto
Tabla 2. Algunos factores antinutricionales comunes en materiales proteicos de origen vegetal
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
315
316
Oleaginosas incluyendo
Lino (Linum usitatissimum)
Leguminosas incluyendo:
Frijoles, chícharos, harina de yuca.
Soya, Frijoles, alfalfa
Soya
Cianógenos
Avances en Nutrición Acuícola III
Reducen la absorción a nivel de tracto
digestivo. Se aumenta su actividad en
Presencia de aflatoxinas.
Leguminosas incluyendo:
Leucaena
Canavalia, Sesbaina.
Leguminosas incluyendo:
Canavalia
Phaseolus sp.
Aminoácidos libres
-Mimosina
-Canavanina
-Canalina
-Lectinas
Adaptado de FAO, 1983; Tacon y Jackson, 1985, New, 1987.
Tóxicos a niveles elevados, inhibición
del crecimiento y alta mortalidad.
Estables al calor.
Oleaginosas incluyendo:
Cacahuate, colza, soya, girasol
Algodón
Leguminosas incluyendo:
Frijoles, chícharos
Cereales y sus subproductos
Elevada toxicidad Cancerígeno.
Producidas por el moho Aspergillus lafvus
bajo condiciones inadecuadas de almacenamiento,
alta humedad y temperatura. Se presenta
también en alimentos terminados.
Reducen la disponibilidad biológica de
las vitaminas. Se inactivan por calor.
Toxicidad por cianuro
El cocimiento destruye las enzimas liberadoras
del tóxico y volatiliza el HCN (çcido cianídrico)
Efecto
Micotoxinas
-Aflatoxinas
Antagonistas de vitaminas
-Anti vitamina E
-Anti vitamina
B12, D y A
Material
Antinutriente
(Continœa Tabla 2)
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
Soya integral (Glicine max)
Pasta de soya
Concentrado de proteína de soya
Semilla de algodón (Gossypium sp)
Semilla descascarada de algodón
Semilla descascarada de Girasol
(Helianthus annus)
Cacahuate (Arachis hipogaea)
H. de coco (C. nucifera)
Colza (Brassica campestris)
Levadura de cerveza
(Saccharomyces cerevisiae)
Levadura torula (torulopsis uilis)
Semilla de ajonjolí
(Sesamum indicum)
Cacao (teobrama caco)
Lino (linus usitatisimum)
Leucaena (Leucoaena leucocephala)
Lupina (Lupinus albus)
Frijol (Phaseolus vulgaris)
Chícharo (Vigna unguiculata)
Sesbania (Sesbania sp)
Chícharo de caballo
(Macrotyloma uniflorum)
Material
18.0
1.2
0.5
1.4
1.3
2.9
5.8
3.5
1.7
0.8
1.6
30
5.3
6.8
6.8
6.4
1.6
1.5
6.2
4.8
46.3
48.1
21.3
37.0
43.8
49.1
22.8
23.1
34.1
32.6
40.0
22.6
23.0
32.5
24.7
Extracto etéreo (%)
38.0
44.8
84.3
41.2
50.3
Proteína cruda (%)
Avances en Nutrición Acuícola III
6.1
8.9
10.4
10.4
12.1
4.2
5.7
10.9
2.9
2.3
11.4
6.9
14.0
12.0
5.0
5.8
0.1
12.1
8.2
Fibra cruda (%)
Tabla 3. Composición proximal de algunas fuentes proteicas de origen vegetal
2.8
5.2
5.3
4.0
4.0
4.1
4.1
3.0
1.4
6.6
7.7
7.6
5.1
6.0
6.8
4.6
6.3
3.5
6.5
6.6
Cenizas (%)
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
317
318
Adaptado de Tacon A.G.J. 1989
Haba comœn (Vicia faba)
Haba blanca
(Canavalia ensiformis)
Café (Coffea arabica)
Harina gluten de maíz
Harina germen de trigo
Alfalfa lucerna (M. sativa)
Helecho acuático (planta seca)
Lirio acuático (planta seca)
Chichicastle (Lemna minor)
Material
1.4
2.1
2.3
2.7
8.0
2.7
3.8
2.9
4.1
31.2
10.9
45.8
25.0
17.3
25.3
14.8
20.9
Extracto etéreo (%)
25.6
Proteína cruda (%)
(Continœa Tabla 3)
9.4
22.9
3.7
3.3
24.4
9.3
22.9
13.2
6.7
Fibra cruda (%)
2.7
22.1
3.2
4.7
9.5
12.5
22.1
13.6
3.7
Cenizas (%)
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
Avances en Nutrición Acuícola III
Especie
Trucha (O. mykiss)
Trucha
Trucha
Trucha
Salmón (Salmo salar)
Carpa (Cyprinus carpio)
Bagre (I. punctatus)
Tilapia (O? niloticus)
Tilapia
Trucha (O. mykiss)
Trucha
Trucha
Trucha
Trucha
Trucha
Bagre (I. punctatus)
Bagre
Bagre
Carpa
Carpa
Tilapia (Oreochromus spp)
Tilapia
Tilapia
Tilapia
Tilapia
Material
Oleaginosas
Soya entera
(Glycine max)
Harina de soya
1.57
1.14
1.01
1.60
1.22
1.68
1.31
1.17
1.70
2.78
1.54
1.67
2.37
2.86
1.46
1.70
1.11
2.31
-
73
50
30
22
33
50
28
58
30
75
21
21
62
50
85
48
100
100
100
100
100
100
30
75
30
Nivel de T.C.A.
inclusión
(%) de la
proteína
+44
+255
-10
+26
+30
+15
=
=
=
+69
-17
-49
+4
-35
=
+15
=
=
+14
+23
+15
=
-8
-35
Crecimiento
(comparado
con el
Control)
Robinson et al., 1985
Wee y Shu, 1989
Shiau et al., 1990
Tacon et al., 1983
Alexis et al., 1985
Oliva teles et al, 1994 Kaushik
et al., 1995 Stickney et al.,
1996 Robinson y Daniels, 1987
Mohsen y Lovell, 1990
Webster et al., 1992
Atack et al., 1979
Viola et al., 1981/1982
Davis y Stickney, 1978 Wu y
Jan, 1977
Viola et al., 1988
Shiau et al., 1990
Jackson et al., 1992
Robaina et al., 1995
Tidwell et al., 1993
Reinitz et al., 1978 Tacon et al., 1983
Oliva-Teles et al., 1994 Gomes et al., 1995
Fowler, 1980
Abel et al., 1994
Referencias
Tabla 4. Efectos de la inclusión de diferentes proteínas vegetales en la dieta de peces cultivados
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
Avances en Nutrición Acuícola III
319
320
Avances en Nutrición Acuícola III
25
50
5
15
Trucha
Salmón
Salmón (O. tshawytscha)
Tilapia (O. mossambicus)
Tilapia
Trucha
(Brassica campestris)
+ Chícharo
Harina de colza
40
Trucha (O. mykiss)
Trucha
Harina de colza
(Brassica napus),
20
8
10
25
Tilapia (Oreochromis spp)
Tilapia
Harina de copra (Cocus
mucifera)
Tilapia (Oreochromis spp)
25
Harina de cacahuate
Tilapia
25
25
Tilapia (O. mossambicus)
Bagre (I. punctatus)
100
20
Bagre (I. punctatus)
Bagre
25
37
100
100
Tilapia
Tilapia
Trucha (O.mykiss)
Trucha
50
47
25
1.76
1.04
2.00
1.66
1.13
17
1.65
1.37
3.60
2.14
25
2.16
1.87
4.2
1.50
0.96
1.74
1.47
4.83
2.50
1.69
1.49
2.51
-16
+16
+46
+15
+8
-2
+10
=
n.d.
+12
1.51
+14
+7
=
-1
+20
-4
=
-63
-24
+26
-28
=
Control)
Crecimiento
proteína
T.C.A.
(comparado
con el
Nivel de
inclusión
(%) de la
Tilapia (Orerchromis spp)
Tilapia
Mojarrón (Sparus aurata)
Langostino
Especie
(Arachis hipogaea)
Harina de girasol
(Helianthus annus)
Harina de algodón
(Gossypium spp)
Material
(Continœa Tabla 4)
Davies et al., 1990
Gomes et al., 1993
McCurdy y March 1992
Jackson et al., 1982
McCurdy y March 1992
Higgs et al., 1978
Hardy y Sullivn, 1983
Addou et al., 1990
Guerrero, 1980
Jackson et al., 1982
Robinson et al., 1984b
Jackson et al., 1982
Jackson et al., 1982
Robinson y Tiersch 1995
Tacon et al., 1984
Martínez-Palacios, 1988
Robinson y Daniels, 1987
Robinson y Brent, 1989
Ofojekwu y Ejike, 1984
El-Sayed, 1990
Jackson et al., 1982
Robinson et al., 1984b
Referencias
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
60
75
UA
100
4
4
20
50
100
100
2.5*
50
Trucha (O. mykiss)
Trucha
Trucha
Trucha
Trucha
Trucha
Tilapia (Oreochromis spp.)
Avances en Nutrición Acuícola III
Trucha (O. mykiss)
Trucha (O. mykiss)
Carpa (C. carpio)
Samón
Mojarron
Spirulina
Subprod. antibióticos
Pseudomona sp.
B. lactofermentina
B. glutamaticum
Subprod. industriales
HONGOS
Geotrichum candidum
MICROALGAS
Spirulina sp.
Spirulina máxima
BACTERIAS
PUTREEN
Putreen
Solubles de destilería
Hansenula anomala sp.
100
40
25
49
100
100
70
35
30
100
50
100
Trucha (O. mykiss)
Trucha
Salmón (O. kisutch)
Carpa (C. carpio)
Trucha (O.mykiss)
Trucha
Bagre (I. punctatus)
Bagre
Tilapia (Oreochromis spp.)
Carpa (C.carpio)
Trucha (O. mykiss)
Carpa (C. carpio)
Levaduras
Candida
Nivel de
inclusión
(%) de la
proteína
Especie
Material
2.45
2.50
1.81
1.64
1.52
1.23
2.10
0.99
1.40
1.86
1.51
1.44
1.79
0.70
1.79
1.88
2.19
2.05
1.40
1.55
1.44
1.14
T.C.A.
(Continœa Tabla 4)
-57
-48
+23
=
-20
=
+17
-7
-49
-2
-17
-12
+3
+6
-1
-14
-53
-17
+23
+12
+22
+13
+59
+23
Crecimiento
(comparado
con el
Control)
Matty y Smith, 1978
Atack et., 1979
Henson, 1990
El Sayed, 1994
Dabrowski et al., 1908
Kaushik y Luquet, 1980
Tacon et al., 1983
Kholer y Pagan, 1978
Kholer y Pagan, 1978
Kiessling y A. 1993
Kiessling y A. 1993
Davies y Wareham, 1988
Matty y Smith, 1978
Mahnken et al., 1980
Mahnken et al., 1980
Alami et al., 1991
Higuera et al., 1981
Sánchez et al., 1983
Webster et al., 1991
Webster et al., 1992
Poumogne et al., 1992
Atack et al., 1979
Murray y Marchant 986
Atack et al., 1979
Referencias
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
321
322
Avances en Nutrición Acuícola III
SUBPRODUCTOS
VEGETALES
Café, cascarilla
Cacao, subprod.
Cacao. pulpa
Yuca, hoja
Lupinus, semilla
Canavalia, semilla
Sesbania, semilla
CONCENTRADOS
PROTEICOS
haseolus,semilla
Lupinus, semilla
Tilapia (Oreochromis spp)
Tilapia
Clarias
Tilapia
Tilapia
Carpa (C. carpio)
Trucha (O,mikiss)
Trucha
Trucha
Trucha
Mojara
43
43
25
Carpa
trucha
Tilapia (O. niluticus)
Tilapia
Tilapia
Tilapia(O. nilotica)
Tilpia (O. nilotica)
30
UA3
45*
20
25*
30*
30
40
250
25
100
Carpa
Leucaena, hojas
40
Carpa (C. carpio)
LODOS ACTIVADOS
Biomasa
CONCENTRADOS
PROTEICOS
Soya, semilla
Pasto, hoja
Nivel de
Especie
(comparando
con el
control)
Material
inclucion
(%) de la
proteina
1.96
5.12
2.11
1.83
1.53
3.20
1.24
40*
40*
32
30
4.62
25
96
1.53
2.86
.47
T.C.A.
(Continua Tabla 4)
+2
-22
-9
-25
=
+26
-14
1.25
1.35
-
+5
+14
-17
1.46
-13
+3
-22
-45
+75
Crecimiento
Baynee et al.,1976
Fagbenro, 1988
Fagbenro. 1992
Ng y wee,1989
Silva y Guanasekera, 1989
Viola et al.,1988
Higuera et al., 1988
+6 Hughes, 1988
+7 Huges, 1991
= Moyano et al., 1992
= Robaina et al 1995
Ogino et al., 1978
Ogino et al., 1978
Jackson et al., 1982
-24 Wee y Wang, 1987
Santagoetal., 1988
Martines et al.,1988
Olvera et al., 1988
Atack et al., 1979
Anwar et al, 1982
Referencias
Carlos Antonio Martínez Palacios María Cristina Chávez Sánchez,
Miguel Angel Olvera Novoa, María Isabel Abdo de la Parra.
Avances en Nutrición Acuícola III
33
33
50
50*
UA
10
10
25
Tilapia
Bagre (I. punctatus
Tilapia
Tilapia
Nivel de T.C.A.
(comparando
con el
Control
Tilapia (S. niloticus
Tilapia
Tilapia
Tilapia (Oreochromis sp)
Especie
inclución
(%) de la
Proteina
2
1
Porcentage de sustituci˜n de la proteina animal con la vegetal
Crecimiento comparado con la dieta control
3
Unico alimento
* Nivel de inclusi˜n en la dieta
Azolla sp
Lirio acuatico
PLANTAS
ACUATICAS
Lemma sp.
PLANTAS
ACUATICAS
Algas
Material
1.60
nd
2.70
2.13
2.18
2.19
1.51
2.19
Crecimiento
(Continœa Tabla 4)
+10
+32
-44
-34
-23
-30
+28
Referencias
Hassan y Eduards, 1992
Liang y Lovell, 1971
Santiago et al., 1978b
El-Salled, 1992
Appler, 1985
Appler, 1985
Apler y Jauncey, 1983
Eduards et al.,1985
Fuentes alternativas de proteínas vegetales como sustitutos de la hrina de
pescado para la alimentación en acuicultura
323
324
Avances en Nutrición Acuícola III
USO DE LA LANGOSTILLA (PLEURONCODES PLANIPES) COMO FUENTE DE
PROTEINA EN DIETAS EXPERIMENTALES PARA CAMARON
Roberto Civera Cerecedo; Villarreal, H., Goytortúa, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, S. C.
Laboratorio de Nutrición Acuícola, División de Biología
Experimental. A. P. 128, La Paz, B.C.S., 23000, México.
Tel: (112) 5 36 33; Fax: (112) 5 47 10.
e-mail: [email protected]
RESUMEN
Conforme se intensifican los acuacultivos el alimento balanceado va cobrando una mayor
relevancia por el alto porcentaje que representa en los costos de producción. Dentro de los
alimentos, el nutriente al que se le ha prestado mayor atención es la proteína, debido a su alto
costo y al importante papel que juega en el crecimiento de los organismos. De aquí la necesidad
de buscar fuentes alternas de proteína de alta calidad nutricional para la alimentación de los
organismos acuáticos.
En la presente investigación se evaluó a la langostilla Pleuroncodes planipes, crustáceo muy
abundante en las costas de Baja California, como fuente de proteína sustituyendo parcial o
totalmente las harinas de pescado, cabeza de camarón o pasta de soya, ingredientes comúnmente
utilizados en los alimentos para camarón.
Para evaluar la calidad nutritiva de la harina de langostilla, se llevaron a cabo una serie de
estudios tanto de determinación de crecimiento, sobrevivencia y factor de conversión alimenticia,
como de digestibilidad de nutrientes in vivo, y de actividad enzimática digestiva in vitro, con
alimentos experimentales que contienen diferentes niveles de inclusión de harina de dicho
crustáceo.
Los resultados demuestran que la harina de langostilla puede ser considerada como una
fuente de proteína de alta calidad y un buen sustituto de las harinas de pescado, soya o cabeza
de camarón, ya que promueve el crecimiento del camarón a través de un mejor aprovechamiento
de los nutrientes del alimento, sin afectar negativamente la sobrevivencia, bajo condiciones de
cultivo controlado.
Avances en Nutrición Acuícola III
325
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Actualmente se lleva a cabo una prueba piloto de evaluación nutricional de la harina de
langostilla para definir la factibilidad técnica y económica de usar este ingrediente en dietas
comerciales para camarón.
INTRODUCCION
La nutrición abarca los procesos químicos y fisiológicos por medio de los cuales un animal
se provee de nutrientes para su metabolismo basal, mantenimiento, crecimiento y reproducción.
Por lo tanto involucra la ingestión, la digestión, la absorción y el transporte de nutrientes, así
como la remoción de productos de desecho (Akiyama y Dominy, 1989). La nutrición es uno de
los factores más importantes para la acuacultura ya que conforme se intensifica el sistema de
cultivo, va cobrando mayor relevancia la calidad y la cantidad del alimento suministrado. La
alimentación puede llegar a representar hasta 2/3 partes de los costos de operación de la
producción de las granjas, por lo que un óptimo aprovechamiento de este factor permitirá elevar
la eficiencia de la producción. La futura expansión de la acuacultura puede depender en primer
lugar de los sistemas de alimentación suplementaria.
Entre los ingredientes más comúnmente usados en la elaboración de dietas balanceadas para
camarón se encuentran las harinas de pescado, soya, trigo, maíz, sorgo, calamar, cabeza de
camarón y diversas levaduras (New, 1987). En la actualidad existe un decremento en el suministro
y un incremento en el costo de las proteínas de origen animal y vegetal. Un ejemplo de lo
anterior son las harinas de pescado (fuentes de proteína que generalmente se utilizan en un
mayor porcentaje en las dietas para organismos acuáticos), en donde la captura mundial de
pescado para la producción de harinas esta cercana al máximo rendimiento que es posible
sostener sin reducir significativamente las poblaciones de peces, y sin embargo, la demanda de
dichos productos sobrepasa ampliamente la oferta.
La Acuacultura consume cerca de un 10% de la producción mundial de harina de pescado, la
cual promedia aproximadamente 6’000,000 toneladas métricas por año (Barlow, 1989). Dicha
situación hace necesaria la exploración de nuevas fuentes de proteína, nutritivas y económicas.
Existen un gran número de ingredientes alternativos prometedores (ver Tacon, 1990 y
1994), como ejemplos se pueden citar la utilización de la grilleta (Pterophylla beltrani) o la
harina de camarón como fuentes de proteína en dietas para camarón (Cruz-Suárez et al., 1990
y 1993). Tinsley et al,. (1984) estudiaron el uso de la mosca doméstica (Musca domestica) en
alimentos balanceados. García y Jaime (1990) trabajaron con la lombriz de tierra (Eudrilus
eugeniae) como ingrediente en dietas para postlarvas.
En México uno de los recursos naturales con mayores probabilidades de utilizarse como
ingrediente para alimentos balanceados es la langostilla (Pleuroncodes planipes), ya que se trata
de un recurso masivo, que tiene una composición química de gran valor para la nutrición animal.
La langostilla es un crustáceo de la familia Galatheidae que en ocasiones llega a re-presentar
hasta el 70% de la fauna de acompañamiento en la pesquería de camarón en Baja California.
326
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
Dicho recurso marino se encuentra distribuido entre Cabo San Lucas y Bahía Sebastián Vizcaíno,
en el Pacífico de Baja California. Cálculos conservadores estiman una abundancia de 205,000
toneladas métricas (Ehrarhdt y Ramirez, 1982), pero estudios realizados recientemente en el
CIBNOR permiten suponer que pueden existir hasta 735,929 Tm./año, de las cuales al menos
el 10% podrían ser capturadas sin poner en riesgo las poblaciones naturales (Aurioles-Gamboa
et al., 1995).
La composición proximal de la langostilla es variable según la zona de captura, la estación
del año, la edad de los organismos, etc., sin embargo, se ha reportado que los componentes más
abundantes de la langostilla son la proteína, las cenizas, la quitina y el extracto etéreo, con
rangos de 21.2-54.7%; 12.8-35.9%; 4.76-21.6%; 4.7-14% respectivamente (Castro-González
et al., 1995). Así mismo, su contenido de carotenoides es elevado 10-16 mg/ 100 g (Spinelli y
Mahnken, 1978) y los aminoácidos presentes son adecuados para la alimentación humana.
Gallardo (1975) llevó a cabo un estudio sobre el uso de concentrados proteicos de langostilla de
plataforma continental, dirigidos al consumo humano y animal. Sin embargo, dicho recurso no
se ha destinado al consumo humano debido al reducido tamaño del músculo abdominal y en
cambio ha sido estudiado principalmente como fuente de pigmentos en dietas para algunos
organismos acuáticos y aves de corral (Carrillo-Dominguez et al., 1995).
La Langostilla tiene un gran potencial como fuente de proteína y aceite de alta calidad para
el cultivo de salmónidos (Spinelli y Mahnken, 1978) y de crustáceos (Van Olst et al., 1976).
Debido a su gran actividad enzimática, la langostilla puede ser utilizada también como una
fuente potencial de enzimas de interés para procesos biotecnológicos (García-Carreño, 1992).
Investigaciones realizadas en el CIBNOR han demostrado que la langostilla en forma de
harina puede ser incluida con éxito en dietas experimentales para camarón café Penaeus
californiensis (Villarreal et al., 1991, Civera et al., 1994; Villarreal, 1995) y para camarón blanco
P. vannamei (Casillas et al., 1988; Civera et al., 1992; Goytortúa, 1993). Van Olst et al., (1975)
usaron la harina de langostilla como alimento único y como complemento de una dieta comercial
en ensayos de crecimiento con juveniles de la langosta (Homarus americanus), obteniendo
resultados muy positivos.
En el presente trabajo se resumen una serie de experimentos llevados a cabo en los laboratorios
de Nutrición Acuícola del CIBNOR con el objetivo principal de determinar el valor nutricional
de la langostilla en alimentos para camarones peneidos, a través de la medición del crecimiento
de organismos alimentados con dietas que contienen harina de langostilla, la determinación de la
digestibilidad in vivo de dichos alimentos y la cuantificación de la actividad de las proteasas
digestivas en los organismos.
MATERIALES Y MÉTODOS
Avances en Nutrición Acuícola III
327
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
UNIDADES EXPERIMENTALES
El presente trabajo fue realizado en las instalaciones de Acuacultura del Centro de
Investigaciones Biológicas del Noroeste, S.C., dentro de dos unidades o sistemas para bioensayos
experimentales.
a) Sistema I (Bioterio). Consistente en doce acuarios de concreto de 60 lt (0.58 X 0.42X0.25
m) con vista frontal de cristal, en los cuales se llevaron a cabo los experimentos 1 y 2
(crecimiento y digestibilidad, respectivamente).
b) Sistema II. Consistente en 24 acuarios de plástico de 80 lt, en los cuales se llevaron a
cabo bioensayos de crecimiento con ejemplares de Penaeus vannamei y P. californiensis,
experimentos 3 y 4 respectivamente.
En ambos sistemas experimentales se cuenta con agua de mar filtrada en cama de arena, por
filtro de cartucho de 10m y filtro de luz ultravioleta. Cada uno de los acuarios cuenta con tubos
de alimentación y de drenaje para mantener un flujo de agua continuo. El agua de los sistemas se
mantuvo a temperatura constante con calentadores sumergibles de 250 W y se oxigenó a través
de piedras difusoras alimentadas por sopladores de 1/8 HP. El fotoperíodo fue controlado con
un reloj automático y focos de 25 watts para mantener 12 horas de iluminación por 12 horas de
oscuridad en el sistema I, mientras que en el sistema II se trabajó con fotoperíodo natural.
ORGANISMOS EXPERIMENTALES
Los organismos de la especie Penaeus vannamei fueron obtenidos del laboratorio de
producción larvaria (Sociedad Cooperativa Acuícola Acuacultores de la Península de La Paz,
B.C.S.). Las postlarvas de camarón café fueron producidas en el laboratorio de cultivo de
crustáceos del CIBNOR.
Los diferentes organismos fueron alimentados con una combinación calamar fresco/pelet
comercial (PIASA 40) y nauplios de Artemia vivos/pelet comercial (PIASA 40), alternando un
día cada una de ellas hasta alcanzar el peso deseado para iniciar los bioensayos nutricionales.
Posteriormente, se procedió a pesar y seleccionar los organismos con un peso individual similar
y se distribuyeron aleatoriamente en cada uno de los acuarios, según los diseños que se muestran
en la Tabla 1.
328
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
Tabla 1. Condiciones experimentales de los bioensayos nutricionales
Experimento
Especie
Acuario (1)
Peso inicial (g)
Organismos/acuario
Acuarios por dieta
Duración (días)
Temperatura (oC)
Salinidad (0/00)
Frecuencia de alimentación/día
Alimentación
1
2
3
4
P.v.
60
0.260
15
3
30
28
37
2
P.v.
60
3.32
8
3
45
27
37
3
ad libitum
P.v.
80
0.091
10
3
45
28
32
2
P.v.
80
0.054
10
3
30
27
37
2
MONITOREO Y CONDICIONES EXPERIMENTALES
ENSAYOS DE CRECIMIENTO (EXP. 1, 3 Y 4)
Durante los experimentos se monitorearon la temperatura, la salinidad y el oxígeno disuelto,
además de que se cuantificaron el número de mudas, el número de muertos y la cantidad de
alimento residual. El primer día del experimento se les suministró el alimento experimental a un
15% del total de la biomasa y a partir del segundo día, se corrigió dicha cantidad tomando como
base la estimación aparente del alimento residual. La alimentación fue ad libitum, dosificada en
dos raciones al día (10:00 y 17:00 hrs). Diariamente se procedió a retirar los detritos, como
exoesqueletos provenientes de mudas, heces y alimento no consumido.
ENSAYO DE DIGESTIBILIDAD IN VIVO (EXP.2)
Durante éste experimento los organismos fueron alimentados 3 veces al día (10:00, 13:00 y
16:00 h); la alimentación fue ad libitum, corrigiendo la dosificación diariamente de acuerdo al
alimento residual. Se monitoreó diariamente la temperatura, la salinidad y el oxígeno disuelto y
se contaron el número de mudas y el número de muertos. Después del monitoreo diario se
procedió al mantenimiento de los acuarios (retirando todos los detritos), para posteriormente
suministrar la primera dosis de alimento. Una vez hecho esto, se dejó que los camarones se
alimentaran por un período de dos horas, al final del cual se procedió a la recolección de las
heces por sifoneo manual con la ayuda de una pipeta pasteur. Se llevaron a cabo dos colectas
diarias en cada acuario; las heces fueron lavadas suavemente con agua destilada y se congelaron
a -50 oC. Después de 45 días de colecta, las heces se liofilizaron para conservarlas hasta el
momento de su análisis.
Avances en Nutrición Acuícola III
329
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Los análisis químicos se realizaron según la metodología de la A.O.A.C. (1990). El cálculo
de la digestibilidad aparente de los diferentes nutrientes se llevó a cabo según la fórmula
reportada por Teshima y Kanazawa (1983).
ELABORACION DE HARINA
Como primer paso en la elaboración de las harinas de langostilla de plataforma continental
y de cabeza de camarón cultivado, se sometió la materia prima a un escaldado en agua de mar a
100 oC durante cinco minutos. Una vez terminado el cocimiento, se dejó escurrir el producto
eliminando con esto el exceso de agua para acelerar el proceso de secado, mismo que se llevó a
cabo durante 5 horas en un secador de túnel con flujo de aire continuo a 75 oC y con una
humedad relativa de 70%. El producto seco se trituró en un molino de martillos con una malla
de 2 mm de diámetro. Las harinas obtenidas fueron almacenadas en bolsas de plástico, dentro de
cubetas con tapadera de cierre hermético, hasta su utilización.
ALIMENTOS EXPERIMENTALES
Se formularon diversas dietas experimentales de manera tal que cubrieran los requerimientos
nutricionales reportados por Akiyama y Dominy (1989) para Penaeus vannamei y P.
californiensis. La preparación de los alimentos peletizados se llevó a cabo según la metodología
descrita por Goytortúa, (1993).
EXPERIMENTOS 1 Y 2
La harina de pescado fue sustituida con 5, 10 y 15% de harina de langostilla (Tabla 2). Para
el ensayo de digestibilidad se usaron las mismas formulaciones, salvo que se incluyó (0.5%) de
óxido crómico y se disminuyó el contenido de harina de sorgo en la dieta para ajustar al 100%.
330
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
Tabla 2. Composición y análisis proximal de las dietas utilizadas en los experimentos
1 y 2* con juveniles de Penaeus vannamei
Ingrediente
Harina de pescado a
H. langostilla b
H. camarón b
Pasta de soya
H. trigo
H. sorgo
Premezcla de vitaminas c
Acido L-ascórbico
Premezcla de minerales d
Aceite de atún
Lecitina de soya
Grenetina
Composición proximal
(g/100g materia seca)
Proteína cruda
Extracto etéreo
Fibra cruda
Ceniza
E.L.N.1
Energía bruta (Kcal/g)
*
a
b
c
d
1
Control
HL 5
HL 10
HL 15
25.5
0
10
29
15
10
0.2
0.3
3
1.5
1.5
4
22
5
10
29
15
8.5
0.2
0.3
3
1.5
1.5
4
19
10
10
29
15
6.5
0.2
0.3
3
1.5
1.5
4
16
15
10
29
15
4.5
0.2
0.3
3
1.5
1.5
4
44.46
12.00
3.37
14.49
25.70
4.18
43.87
12.50
3.56
14.51
25.60
4.23
43.76
12.30
3.32
15.28
25.30
4.23
42.22
12.60
3.29
16.41
25.50
4.21
Para las dietas del Experimento 2 se utilizó 0.5% de óxido crómico como marcador
indirecto.
Harina de desechos de atún (PROPEPAZ, La Paz, B.C.S.)
Fabricadas en el laboratorio de Nutrición Acuícola del CIBNOR, S.C.
Premezcla de vitaminas (cantidades/kg alimento): Vit. A 15,000 UI; Vit. D3 7,500 UI;
Vit. E 400 mg; Vit. K3 20 mg; Tiamina 150 mg; Riboflavina 100 mg; Piridoxina 50 mg;
Ac. pantoténico 100 mg; Niacina 300 mg; Biotina 1 mg; Inositol 5000 mg; Colina 400
mg; Ac. fólico 20 mg; Cianocobalamina 0.1 mg.
Premezcla de minerales (g/100g alimento): KCl 0.5; MgSO4.4H2O 0.5; ZnSO4.7H2O
0.09; MnCl2.4H2O 0.0234; CuCl2.2H2O 0.005; KI 0.05; CoCl2.6H2O .0025;
Na2HPO4 2.37
Extracto Libre de Nitrógeno (calculado por diferencia a 100%).
EXPERIMENTOS 3 Y 4
La proteína aportada por las harinas de pescado, camarón o pasta de soya fueron sustituidas
parcial o totalmente con proteína aportada por la harina de langostilla. La Tabla 3 muestra los
niveles de sustitución evaluados en estos experimentos. Adicionalmente, se utilizaron dietas
comerciales Rangen 40 (Exp. 3), Purina 35 y Purina 40 (Exp. 4) como controles externos.
Avances en Nutrición Acuícola III
331
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Tabla 3. Composición y análisis proximal de las dietas utilizadas en los
Experimentos 3 y 4 con postlarvas de Penaeus vannamei y P. californiensis.
Ingrediente
Control S33P
H. pescado a
H. camarón b
H. langostilla b
Pasta de soya
H. trigo
H. sorgo
P. vitaminas c
Ac. L-ascorbico
P. minerales d
Aceite de sardina
Lecitina de soya
Grenetina
Composición proximal
(g/100g materia seca)
Proteína cruda
Extracto etéreo
Fibra cruda
Ceniza
E.L.N.1
Energía bruta 2
a
b
c
d
1
2
S66P
S100P S100C
S33S
S66S S100S
25.0
10.0
—
25.0
16.0
13.0
0.2
0.3
3.5
1.5
1.5
4.0
16.7
10.0
13.0
25.0
16.0
8.5
0.2
0.3
3.5
1.3
1.5
4.0
8.5
10.0
25.9
25.0
16.0
4.2
0.2
0.3
3.5
0.9
1.5
4.0
—
10.0
39.3
25.0
15.7
—
0.2
0.3
3.5
0.5
1.5
4.0
25.0
—
15.3
25.0
16.0
7.9
0.2
0.3
3.5
1.3
1.5
4.0
25.0
10.0
10.8
16.8
16.0
11.2
0.2
0.3
3.5
0.7
1.5
4.0
25.0
10.0
21.6
8.5
16.0
9.4
0.2
0.3
3.5
—
1.5
4.0
25.0
10.0
32.7
38.5
8.7
4.0
14.5
34.3
4.3
37.0
8.6
4.2
16.9
33.3
4.1
38.1
9.2
4.0
19.5
29.2
3.9
37.5
8.4
4.2
22.1
27.8
3.9
38.7
10.1
4.0
15.8
31.4
4.1
38.2
10.7
4.1
17.7
29.3
4.1
37.9
9.7
3.9
19.8
28.7
4.0
38.3
9.4
4.0
16.9
31.4
4.0
16.0
7.7
0.2
0.3
3.5
—
0.6
4.0
Harina de atún (PROPEPAZ, La Paz, B.C.S.)
Fabricadas en el laboratorio de Nutrición Acuícola del CIBNOR, S.C.
Premezcla de vitaminas (cantidades/kg alimento): Vit. A 15,000 UI; Vit. D3 7,500 UI; Vit. E 400 mg; Vit. K3
20 mg; Tiamina 150 mg; Riboflavina 100 mg; Piridoxina 50 mg; Ac. pantoténico 100 mg; Niacina 300 mg;
Biotina 1 mg; Inositol 5000 mg; Colina 400 mg; Ac. fólico 20 mg; Cianocobalamina 0.1 mg.
Premezcla de minerales (g/100g alimento): KCl 0.5; MgSO4.4H2O 0.5; ZnSO4.7H2O 0.09; MnCl2.4H2O
0.0234; CuCl2.2H2O 0.005; KI 0.05; CoCl2.6H2O .0025; Na2HPO4 2.37
Extracto Libre de Nitrógeno (calculado por diferencia a 100%).
(Kcal/g)
ACTIVIDAD ENZIMATICA (EXP. 2)
Al finalizar el experimento de digestibilidad in vivo, quince organismos de cada tratamiento
alimenticio fueron dejados en ayuno por 48 horas. Posteriormente los hepatopáncreas fueron
extraídos y homogeneizados en buffer de fosfato 10mM (pH 7, 1:4 peso húmedo: volúmen).
Después de centrifugar durante 5 min. a 15000 rpm, el sobrenadante (extracto crudo) se congeló
a -20oC hasta su utilización. La proteína de los extractos fue determinada por el método de
Lowry et al., (1951). Los ensayos de actividad proteolítica se realizaron por triplicado según el
método descrito por Divakaran y Ostrowski (1990).
332
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
ANALISIS ESTADISTICO DE LOS RESULTADOS
Los análisis estadísticos se realizaron utilizando el paquete de computación
STATGRAPHICSMR. El análisis de varianza (one-way) se usó para determinar si existían o no
diferencias significativas entre los tratamientos alimenticios. La prueba de rangos múltiples
LSD se utilizó para comparar las medias de los tratamientos.
RESULTADOS
EXPERIMENTO 1
Después de treinta días del experimento, la sobrevivencia obtenida con los cuatro alimentos
fue igual o superior al 98% (Tabla 4). Los juveniles de P. vannamei alimentados con la dieta HL
15 (15% de harina de langostilla) mostraron un crecimiento significativamente mayor al obtenido
con las demás dietas evaluadas (P<<0.05), desde los diez primeros días del ensayo (Figura 1).
Siendo este fenómeno muy evidente en la tasa de crecimiento final (Fig. 2). A pesar de que no se
encontraron diferencias de peso significativas (P>>0.05) entre los animales alimentados con las
dietas control, HL 5 y HL 10, tanto el peso final, como la tasa de crecimiento tienden a aumentar
ligeramente conforme se incrementa el contenido de langostilla en el alimento.
J
D
E
D
3(62
D
E
E
',$
&21752/
+/
+/
+/
Avances en Nutrición Acuícola III
333
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Figura 1. Efecto de la inclusión de harina de langostilla en la dieta sobre el
crecimiento de juveniles de Penaeus vannamei (Exp. 1)
D
E
E
E
&RQWURO
+/
+/
+/
Figura 2. Efecto de la inclusión de harina de langostilla en la dieta sobre el
crecimiento de juveniles de Penaeus vannamei al día 30 (Exp. 1)
Tabla 4. Efecto de la inclusión de harina de langostilla sobre el
crecimiento de juveniles de Penaeus vannamei a los 30 días de
cultivo en laboratorio (Experimento 1).
Dieta
Sobrevivencia
(%)
Peso inicial
(g)
Peso final
(g)
Mudas por
dieta 1
FCA 2
Control
HL 5
HL 10
HL 15
100
100
98
100
0.261 a + 0.004
0.259 a + 0.004
0.260 a + 0.004
0.260 a + 0.004
1.396 b + 0.04
1.408 b + 0.04
1.424 b + 0.05
1.678 a + 0.06
54 b
32 b
49 b
95 a
1.54 a
1.50 a
1.57 a
1.41 a
334
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
(+) Desviación estandar.
* Los valores con la misma letra en cada columna no son significativamente diferentes
(P>>0.05).
1 Total de mudas aparentes por tratamiento o dieta.
2 Factor de conversión alimenticia aparente.
El alimento HL 15 aumentó la frecuencia de muda de los organismos ya que el número total
de mudas registrado (95) fue significativamente mayor (P<<0.05) al encontrado con los otros
alimentos (Tabla 4).
Con las cuatro dietas se obtuvieron factores de conversión alimenticia inferiores a 1.6,
siendo el alimento HL 15 el que tuvo la mejor tasa de conversión (1.41), sin embargo, no hubo
diferencias significativas entre los tratamientos alimenticios
EXPERIMENTO 2
La sobrevivencia de los juveniles de P. vannamei obtenida fue del 100% y no se vió afectada
por la inclusión de la harina de langostilla o por la presencia de óxido crómico en las dietas.
La digestibilidad aparente de proteínas (DAP) varió de 79.7 a 84.0% (Fig. 3), siendo
significativamente mayor la encontrada con las dietas que contienen langostilla con respecto a
la dieta control (P<<0.05). No se encontraron diferencias significativas entre las dietas (HL 5,
10 y 15), pero se notó un ligero aumento en la DAP conforme se aumentó el porcentaje de
inclusión de harina de langostilla.
D
E
& 8
' D
F
D
D
EF
D
D
D
DE
D
&RQWUR
+/
3527(,1$
+/
/,3,'2
+/
(1(5*,$
Avances en Nutrición Acuícola III
335
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Figura 3. Efecto de la inclusión de harina de langostilla en la dieta sobre
la digestibilidad aparente de las dietas experimentales para juveniles de
Penaeus vannamei (Exp. 2)
La digestibilidad aparente de los lípidos (DAL) aumentó conforme se incrementó el nivel de
inclusión de harina de langostilla en las dietas (r = 0.844). La DAL del alimento HL 15 fue
significativamente superior (P<<0.05) a la de las dietas control y HL 5, y ligeramente mayor a
la de la dieta HL 10.
La digestibilidad aparente de energía fue superior al 90% y no varió significativamente de un
tratamiento al otro.
La actividad específica de proteasas varió de 13.37 a 21.89 Unidades / mg de proteína entre
los alimentos control y el HL15 respectivamente (Figura 4). De manera general, las dietas con
langostilla produjeron un incremento significativo (P<<0.05) de la actividad de las proteasas
digestivas.
8PJ3URWHtQD
D
DE
E
F
&RQWURO
+/
+/
+/
Figura 4. Efecto del nivel de inclución de la langostilla sobre
la actividad proteolítica del hepatopáncreas de juveniles
de Penaeus vannamei (Experimento 1)
EXPERIMENTO 3. (TABLA 5 Y FIGURA 5)
336
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
La sobrevivencia de las poslarvas de P. vannamei obtenida al final de este ensayo de 45 días
fue igual o superior a 90% con los diferentes tratamientos alimenticios. El peso final y la tasa de
crecimiento promedio de los organismos incrementó significativamente (P<<0.05) y en relación
directa con el porcentaje de inclusión de harina de langostilla en la dieta hasta un nivel de
sustitución del 66% de la harina de pescado o pasta de soya. Al incrementar el porcentaje de
sustitución de estos ingredientes de un 66% a un 100% con harina de langostilla, no aumentó
sensiblemente el crecimiento de los organismos.
3(62J
',(7$
&RQWURO
63HVF
63HVF
63HVF
66R\D
66R\D
66R\D
5$1*(1
Figura 5. Efecto de la sustitución de harina de pescado, camarón o pasta
de soya con harina de langostilla sobre el peso de juveniles de
Penaeus vannamei a los 45 días de cultivo en laboratorio (Exp. 3)
Avances en Nutrición Acuícola III
337
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Tabla 5. Efecto de la sustitución de las harinas de pescado, camarón o pasta
de soya con harina de langostilla sobre postlarvas de Penaeus vannamei
a los 45 días de cultivo en laboratorio (Experimento 3).
Dieta
Peso
inicial
(g)
Control
S33P
S66P
S100P
S100C
S33S
S66S
S100S
Rangen 40
0.091 a
0.091 a
0.091 a
0.090 a
0.090 a
0.091 a
0.090 a
0.091 a
0.091 a
Incremento
Tasa de
en peso crecimiento
(g)
(g/d)
2.301 b
2.533 b
3.155 a
3.094 a
2.408 b
2.143 b
3.274 a
3.216 a
2.382 b
Sobrevivencia Mudas
(%)
por dieta
0.051 b
0.056 b
0.070 a
0.069 a
0.054 b
0.048 b
0.073 a
0.071 a
0.053 b
97 a
93 a
93 a
100 a
100 a
90 a
100 a
97 a
97 a
69
108
133
189
102
85
159
189
144
1
FCA 2
1.71 ab
1.67 ab
1.36 bc
1.58 abc
1.79 a
1.64 abc
1.70 ab
1.70 ab
1.27 c
* Los valores con la misma letra dentro de cada columna no difieren significativamente (P>>0.05)
Total de mudas aparentes por tratamiento o dieta.
2
Factor de conversión alimenticia aparente.
1
La dieta en la que se sustituyó totalmente la harina de camarón (S100C) con harina de
langostilla permitió obtener un crecimiento similar al obtenido con las dietas control, S33P,
S33S y el alimento comercial RANGEN 40.
El mayor número de mudas se observó en los acuarios donde se suministraron las dietas
S100P y S100S (189 para cada dieta), mientras que la menor cantidad (69) correspondió a la
dieta control. En este experimento se observó claramente que las mudas aumentaron conforme
se incrementó el porcentaje de inclusión de harina de langostilla en las dietas.
338
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
El factor de conversión alimenticia aparente (FCA) obtenido con los tratamientos alimenticios
fue inferior a 1.8 en todos los casos, siendo el más bajo el obtenido con la dieta comercial Rangen
40 (1.27), mientras que el más alto corresponde a la dieta S100C (1.79). No se observaron
diferencias significativas en el FCA de las dietas donde se sustituyó la harina de pescado o la
pasta de soya con respecto al alimento control.
EXPERIMENTO 4. (TABLA 6 Y FIGURA 6).
La sobrevivencia de las postlarvas de P. californiensis obtenida al final de este ensayo de 30
días fue igual o superior a 83% con los diferentes tratamientos alimenticios.
3(62J
',(7$
&RQWURO
63HVF
63HVF
6
66R\D
66R\D
66R\D
385,1
Figura 6. Efecto de la sustitución de harina de pescado, camarón o pasta
de soya con harina de langostilla sobre el peso de juveniles de Penaeus
californiensis a los 30 días de cultivo en laboratorio (Exp. 4)
Avances en Nutrición Acuícola III
339
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
Tabla 6. Efecto de la sustitución de las harinas de pescado, camarón o pasta
de soya con harina de langostilla sobre postlarvas de Penaeus californiensis
a los 30 días de cultivo en laboratorio (Experimento 4).
Dieta
Control
S33P
S66P
S100P
S100C
S33S
S66S
S100S
PUR35
PUR40
Peso
0.054
0.055
0.054
0.054
0.054
0.054
0.055
0.054
0.054
0.055
a
a
a
a
a
a
a
a
a
a
Tasa de
inicial (g)
(g)
Sobrevivencia
crecimiento (%)
(%)
Mudas
por dieta1
1347 bc
1830 ab
2165 a
1922 ab
1334 bc
1598 abc
1773 ab
1540 abc
1370 bc
1032 c
87
90
90
90
90
83
83
87
87
87
16 abc
17 abc
14 abc
25 a
10 bc
10 bc
21 ab
12 bc
8c
6c
FCA 2
3.09
2.56
2.66
2.83
3.12
3.17
2.82
3.47
3.63
3.62
a
a
a
a
a
a
a
a
a
a
* Los valores con la misma letra dentro de cada columna no difieren significativamente (P>>0.05)
1 Total de mudas aparentes por tratamiento o dieta.
2 Factor de conversión alimenticia aparente.
El peso final promedio de los organismos incrementó en relación directa con el porcentaje
de inclusión de harina de langostilla en la dieta hasta un nivel de sustitución del 66% de la harina
de pescado o de la pasta de soya. Al aumentar el porcentaje de sustitución de estos ingredientes
de un 66% a un 100% con harina de langostilla, no se mejoró el crecimiento de los organismos
e inclusive se observó una ligera disminución, aunque no significativa (P>>0.05).
De manera general, las dietas donde se sustituyó la harina de pescado con harina de langostilla
permitieron obtener mejores tasas de crecimiento en porcentaje, que aquellas donde se sustituyó
la pasta de soya.
La dieta en la que se sustituyó totalmente la harina de camarón con harina de langostilla
340
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
permitió obtener un crecimiento similar al obtenido con las dietas control, S33S, S100S y los
alimentos comerciales PURINA 35 y PURINA 40.
En este ensayo el número aparente de mudas varió de 6 a 25 con los alimentos PURINA 40
y S100P respectivamente y no se observaron diferencias significativas entre las dietas
experimentales con langostilla y el alimento control.
El factor de conversión alimenticia aparente obtenido con los tratamientos alimenticios fue
inferior a 3.5 en todos los casos, siendo el más bajo el obtenido con la dieta S33P (2.56),
mientras que el más alto corresponde a la dieta S100S (3.47), sin embargo no se detectaron
diferencias significativas entre las dietas.
DISCUSION
Al disminuir la cantidad harina de pescado y sustituirla con harina de langostilla en los
alimentos del experimento 1, se observó un incremento en la tasa de crecimiento de los organismos,
particularmente importante cuando se alcanzó el 15% de inclusión de harina de langostilla en la
dieta. Estos resultados concuerdan con los reportados por Villarreal et al., (1991) para postlarvas
y juveniles de Penaeus californiensis. Así mismo, Villarreal y Castro (1992) observaron una
mejor tasa de crecimiento en P. vannamei al utilizar la dieta HL 10 del presente estudio,
comparada contra el crecimiento obtenido con varios alimentos comerciales.
Por otra parte, Van Olst et al., (1976) trabajando con la langosta (Homarus americanus)
obtuvieron excelentes crecimientos cuando los juveniles son alimentados con langostilla sola y
cuando es utilizada como complemento de dietas comerciales.
Tomando en cuenta que la proteína es el principal nutriente utilizado por el camarón para la
formación de tejidos durante su desarrollo (Tacon, 1990), y considerando las diferencias
encontradas aquí en las tasas de crecimiento cuando se incluye langostilla, podemos suponer
que ésta mejoró la calidad del aporte proteico de la dieta y que probablemente los demás
nutrientes fueron utilizados como fuente de energía para los diversos procesos o funciones
metabólicas involucrados en el desarrollo normal del camarón.
Los valores de digestibilidad aparente de proteína (DAP) explican en buena medida lo
observado en el experimento 1 de crecimiento, pues demuestran que la presencia de langostilla
en la dietas mejora la disponibilidad de la proteína, permitiendo un mejor crecimiento de los
juveniles de P. vannamei. En otro estudio realizado en nuestro laboratorio, se encontró que
efectivamente la DAP de la langostilla fue superior a la de la harina de desechos de atún
(Ezquerra com. pers.). Esto confirma una mejor calidad nutricional de la proteína de la harina de
langostilla con respecto a la de harina de pescado proveniente de desechos de atún, probablemente
debida a un mejor balance de aminoácidos.
Varios autores han reportado la composición en aminoácidos de la langostilla (Gallardo,
1975; Spinelli et al., 1974), y ésta es muy similar a la de los peneidos. A pesar de que no se ha
evaluado la disponibilidad de los aminoácidos de la langostilla para camarones en cultivo, es de
Avances en Nutrición Acuícola III
341
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
esperarse que ésta sea parecida a la encontrada para otras harinas de crustáceos, como la
reportada por Akiyama et al., (1988) para la harina de camarón.
La harina de langostilla no solo es una fuente rica en proteína, sino que también tiene un
aporte considerable de lípidos para el camarón, como lo demuestran los resultados de digestibilidad
aparente de lípidos (DAL) obtenidos en este trabajo. Los lípidos sirven como vehículo de
vitaminas liposolubles y proveen otros compuestos como esteroles y fosfolípidos, mismos
que son esenciales para la función metabólica normal del camarón, permitiendo con esto un
mejor aprovechamiento de las proteínas para la formación de tejidos (Tacon, 1990). Se sabe que
los crustáceos utilizan generalmente bien las grasas como fuente de energía, aunque se ha
reportado que un contenido de lípidos en la dieta mayor al 15%, produce un retardo en el
crecimiento de P. monodon (Bautista, 1986). La langostilla tiene una composición de ácidos
grasos poli-insaturados similar a la de otros crustáceos (Castro-González et al., 1995), aunque
su disponibilidad para organismos acuáticos no ha sido aún estudiada.
Condrey et al., (1972) encontraron que Penaeus setiferus y Penaeus aztecus asimilaron
mejor los lípidos de dietas naturales (86-99%) que cuando se trataba de dietas artificiales (7578%). Generalmente la digestibilidad de lípidos es menor que la de las proteínas (Fenucci et al.,
1982; Smith et al., 1983; Akiyama y Dominy, 1989). En nuestro caso los lípidos fueron
igualmente bien asimilados que las proteínas, por lo que podemos inferir que los lípidos de la
dietas son de buena calidad y que son eficientes como fuente de energía para el trabajo mecánico
(actividad muscular), permitiendo así que la proteína fuera utilizada principalmente para el
crecimiento (formación de nuevos tejidos).
La langostilla tiene un alto contenido de quitina (10.7%) como ha sido reportado por
Gallardo (1975), por lo tanto, sabemos que al ir aumentando el porcentaje de inclusión langostilla
en la dieta aumentamos también el contenido de quitina (poco digestible por el camarón), por lo
que el contenido de carbohidratos digestibles debe ser menor y como consecuencia hay una
disminución en el aporte de energía disponible para el animal. Sin embargo, al existir en la dieta
fuentes de lípidos de buena calidad (langostilla, aceite de pescado y lecitina), estos fueron
utilizados como fuente de energía. Los valores de DAE obtenidos nos indican que el camarón
aprovechó la mayor parte de la energía aportada por el alimento, implicando que la composición
química de los alimentos fue adecuada para los juveniles de P. vannamei. El hecho de que no se
encontraran diferencias en los valores de DAE de las dietas, y al sí haberlas a nivel de los lípidos
y la proteína, sugiere la idea de que los lípidos y la proteína sustituyeron, al menos parcialmente,
a los carbohidratos como fuente de energía.
Respecto a las enzimas digestivas, observamos una tendencia a aumentar la actividad de
proteasas conforme se incrementa la harina de langostilla en la dieta. Se desconocen hasta el
momento las causas de esa respuesta aunque puede estar relacionada con la proporción y tipo
de ingredientes de las dietas, así como con un aumento en el contenido de minerales en las dietas
con langostilla. Es sabido que los minerales pueden actuar como activadores de las proteasas
digestivas (Chun y Sun, 1993), sin embargo, el efecto de la langostilla debe interpretarse con
cautela y requiere de mayor estudio, ya que no ha podido ser reproducido en otros experimentos
342
Avances en Nutrición Acuícola III
Uso de la langotilla (Pleuroncodes planipes) como fuente de proteína en dietas experimentales para camarón
realizados en nuestro laboratorio.
El comportamiento de las proteasas digestivas pudo traducirse en una mayor digestibilidad de las proteínas, y por ende, en un mayor crecimiento de los juveniles de P. vannamei.
Desafortunadamente, dicha hipótesis no puede ser comprobada con los resultados obtenidos
en este trabajo.
Los resultados de los experimentos 3 y 4 demuestran que la langostilla es un buen sustituto
parcial o total de las harinas de pescado, camarón o pasta de soya, ya que se obtuvieron
sobrevivencias, crecimiento y factores de conversión alimenticia al menos similares respecto al
alimento control, tanto en P. vannamei como en P. californiensis. En el caso de las sustituciones
de la harina de atún entero o la pasta de soya, y dependiendo del nivel de inclusión de langostilla,
se puede acelerar la frecuencia de muda y el crecimiento ponderal hasta llegar a un umbral (66%
de sustitución), por arriba del cual en ambos casos se obtiene una buena sobrevivencia, pero ya
no se incrementa el crecimiento.
Desde el punto de vista nutricional, la sustitución total de la harina de atún o de la pasta de
soya con langostilla parece innecesaria, sin embargo la determinación del nivel óptimo de
inclusión en la dieta estará en función de otros factores como la relación costo/beneficio, donde
el factor de conversión alimenticia (FCA) juega un papel decisivo. Al respecto, la langostilla ha
demostrado ser un ingrediente que, al menos bajo condiciones de cultivo experimental, permite
obtener FCA’s similares o ligeramente inferiores a los obtenidos con las dietas control evaluadas,
lo que reafirma sus bondades.
Los diseños experimentales implementados en este trabajo nos permiten afirmar que la
harina de langostilla es un ingrediente de alta calidad nutricional para camarones peneidos y nos
han permitido tener evidencias de su papel como fuente de proteína. Sin embargo, para poder
definir si el efecto benéfico observado sobre el crecimiento del camarón es debido a su aporte de
proteína, de lípidos, algún otro factor o la combinación de ellos, será necesario fraccionar la
langostilla en sus diversos componentes y evaluarlos por separado. De igual manera, se hace
necesario estudiar la disponibilidad de los aminoácidos y los ácidos grasos a fin de conocer su
verdadero valor nutricional.
Si bien la langostilla ha funcionado hasta el momento como un buen complemento alimenticio
en dietas para crustáceos a nivel de bioensayos de laboratorio, por el momento se desconoce si
su eficiencia será la misma a nivel de cultivos comerciales en granja. Actualmente ya se está
llevando a cabo una prueba a nivel piloto en la cual se ha fabricado harina de langostilla en una
harinera comercial y se está evaluando la factibilidad técnica y económica de su uso en dietas
comerciales para camarón blanco en condiciones de cultivo intensivo y semi-intensivo.
Los resultados de dicha prueba piloto generarán la información necesaria para poder hacer
una estimación realista del posible costo que la harina de langostilla tendrá cuando se implemente
la pesquería a nivel comercial de éste abundante recurso mexicano.
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343
Roberto Civera Ceredo; Villareal, H., Goytoría, E., Rocha,
S., Vega, F., Nolasco, H., Pastén, J. y Camarillo, T.
CONCLUSION
Los resultados obtenidos en el presente trabajo comprueban que la harina de langostilla
puede ser utilizada con éxito como fuente de proteína para Penaeus vannamei y P. californiensis.
Las dietas que contienen harina de langostilla tienen una mejor digestibilidad de proteína y
de lípidos, permitiendo un mejor crecimiento de los juveniles de Penaeus vannamei.
La inclusión de la langostilla en dietas para camarón blanco provocó un incremento en la
actividad proteolítica del hepatopáncreas, aunque se desconocen las causas del fenómeno.
La langostilla es un buen sustituto de las harinas de pescado, camarón o pasta de soya en
alimentos para camarón, ya que permite obtener tasas de sobrevivencia, crecimiento y factores
de conversión alimenticia similares a los obtenidos con diversas dietas de refe-rencia. Además,
dependiendo del nivel de inclusión en el alimento, tiene un marcado efecto benéfico sobre el
crecimiento de P. vannamei y P. californiensis, bajo las condiciones experimentales ensayadas.
La sustitución del 66% de la proteína aportada por la harina de pescado o la pasta de soya
con proteína de langostilla maximiza el crecimiento, mientras que la sustitución total es
innecesaria desde el punto de vista nutricional.
Es preciso realizar más estudios para determinar la disponibilidad digestiva de los
aminoácidos y los ácidos grasos contenidos en la langostilla, definir si el efecto benéfico observado
sobre el crecimiento del camarón es debido a su aporte proteico, lipídico, algún otro factor o la
combinación de ellos y determinar el nivel óptimo de inclusión de langostilla en el alimento,
tomando en cuenta su eficiencia en dietas comerciales y la relación costo/beneficio.
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Avances en Nutrición Acuícola III
347
348
Avances en Nutrición Acuícola III
EVALUACION DE LA LOMBRIZ DE TIERRA EUDRILUS EUGENIAE EN LA
ALIMENTACION DE CAMARONES PENEIDOS.
Tsai García1, Elvira Alfonso 1 y Bárbaro Jaime.2
2
1
Centro de Investigaciones Marinas, Universidad de La Habana.
Centro de Investigaciones Pesqueras, Ministerio de la Industria Pesquera.
RESUMEN
Se presentan los resultados alcanzados en la utilización de la lombriz de tierra Eudrilus
eugeniae en la alimentación de Penaeus schmitti y Penaeus notialis. Bajo condiciones
experimentales las protozoeas de P. notialis presentaron mejores desarrollos cuando consumieron
cultivos de algas fertilizadas con harina de lombriz de tierra, al compararse con las crecidas en
el medio inorgánico Miquel-Matue. El empleo de dietas artificiales, en cuya composición se
encuentra presente la harina de lombriz mejora los rendimientos de larvas y postlarvas de P.
schmitti. Se compara mediante el cómputo químico y el índice de aminoácidos esenciales, el
valor biológico de la proteína de Eudrilus eugeniae con otras fuentes empleadas en la alimentación
del camarón. Su alta calidad proteica y los bajos costos de producción, hacen de esta especie un
recurso potencial para ser incluida en las dietas para camarones.
INTRODUCCION
La búsqueda de nuevas fuentes proteicas para la alimentación de peces y crustáceos es un
campo que cada día cobra mayor interés por el alto costo que ésta representa dentro de los
gastos del cultivo. Las materias primas estudiadas han sido variadas, teniendo generalmente un
posible empleo a escala local, debido a la disponibilidad del producto.
La lombricultura es una práctica que va cobrando importancia a nivel mundial por las
amplias posibilidades que ofrece. El humus es considerado como uno de los mejores fertilizantes
orgánicos que se conoce, además, la lombriz se utiliza como carnada viva en la pesca deportiva,
en la elaboración de cosméticos, como eliminadora de desechos orgánicos o como alimento
animal y humano (Catalán, 1980). Cuatro especies se cultivan comercialmente en el mundo:
Pheretima asiatica, Eisenia foetida, Lumbricus rubellus y Eudrilus eugeniae. Esta última, nativa
del oeste africano, se comienza a cultivar en Cuba en la década del 70, fundamentalmente para
ser incluida en la dieta para aves.
Avances en Nutrición Acuícola III
349
Tsai García, Elvira Alfonso y Bárbaro Jaime
El empleo de la lombriz como alimento acuícola fue investigado en truchas por Tacon et al.
(1983) y Hilton (1983). Su valor como atrayente en dietas para camarones fue consignado por
Murai et al. (1983). Posteriormente Pascual (1986), estudió el uso de tres anélidos como
componentes de dietas para juveniles de P. monodon.
Dado el auge alcanzado en el cultivo de Eudrilus eugeniae en Cuba, por su sencillo manejo
y bajo costo de producción, se inician investigaciones para su posible introdu-cción como
componente de alimentos para las diferentes fases del cultivo de camarón (Ramos et al., 1987,
García et al., 1990) así como su empleo como fertilizante orgánico para la producción de algas
unicelulares suministradas como alimento a las larvas (Alfonso y Nuñez, 1984).
En el presente trabajo se resumen las investigaciones desarrolladas en larvas y post-larvas
de Penaeus schmitti y P. notialis con la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae, con el objetivo de
evaluar su utilización como alimento.
MATERIALES Y MÉTODOS
a) OBTENCION DE LOS CAMARONES
Las larvas de P. notialis fueron obtenidas a partir de desoves logrados de hembras ovígeras
capturadas en arrastres comerciales en la Ensenada de la Broa, costa sur de La Habana. Los ejemplares
de P. schmitti procedían de desoves de hembras maduradas y copuladas en el laboratorio.
DISEÑO Y CONDICIONES EXPERIMENTALES
BIOENSAYO 1
Se ensayaron dos tratamientos donde se cultivó el alga Tetraselmis chui en dos medios
diferentes: el medio inorgánico Miquel-Matue (Hudinaga, 1942) y la lombriz de tierra como
fertilizante a razón de 200 mg/l. Nauplios V (NV) de P. notialis fueron situados en recipientes
de 25 l de capacidad con tres réplicas por tratamiento, a una densidad larval de 150 NV/l. Las
concentraciones del alga se ajustaron periódicamente a razón de 50 000 células/ml. Se determinó
el desarrollo examinando a 60 ejemplares de cada recipiente experimental bajo un microscopio
estereoscópico.
BIOENSAYO 2
Se realizó una cría larval de P. schmitti donde se evaluaron dos dietas microparticuladas.
Cada tratamiento tuvo dos réplicas y se trabajó con tanques circulares de 1 tonelada de capacidad.
La densidad inicial fue de 100 nauplios IV/litro. A partir del estadio de protozoea II se realizó
una renovación de agua diaria de 50% en cada recipiente.
La alimentación con microalgas durante todo el período experimental consistió de Chaetoceros
gracilis a partir de protozoea I que se ajustó dos veces por día a concentraciones de 40 x 10 6
350
Avances en Nutrición Acuícola III
Evaluación de la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae en la alimentación de camarones peneidos
células/ml y de Tetraselmis tetrathele que se comenzó a ofrecer desde Protozoea II a razón de
2 x 10 6 células/ml.
Los nauplios de Artemia se suministraron a partir de protozoea III, a una concentración de
0.3 n/ml, tres veces al día, incrementándose a 0.5 n/ml en mysis I-mysis II (MI-MII). Al pasar
al estadio de MIII se adicionaron una vez al día a razón de 1 n/ml hasta llegar a 2n/ml en
postlarva de cinco días de edad (PL5).
A partir de MI, se adicionó cuatro veces al día una dieta microparticulada hasta PL5 (Tabla 1).
Tabla 1. Ración diaria y diámetro de las partículas alimenticias.
MI-MII
MIII
PL1
PL2
PL3
PL4
PL5
4
50-90
6
90-150
6
90-150
7
90-150
10
150-250
12
150-250
12
150-250
Se determinó el índice de desarrollo (Villegas y Kanazawa, 1979) y al finalizar el bioensayo
en PL5, se midió el crecimiento y la sobrevivencia.
BIOENSAYO 3
Se realizó un diseño completamente aleatoreo donde se evaluaron siete dietas balanceadas.
Se sembraron 2 PL5 /l en recipientes plásticos circulares de 50 l de capacidad, con aireación
constante. Diariamente se intercambió el 50% del agua y se eliminaron los restos de heces y
alimento.
Las postlarvas de P. schmitti fueron alimentadas tres veces al día, con una ración diaria del
150% del peso inicial, la cual fue disminuyendo semanalmente hasta un 90% en los 30 días del
bioensayo. El diámetro de la partícula alimenticia se suministró de acuerdo a García y Phillip
(1987) y Jaime y García (1990).
Al finalizar el bioensayo se registró el crecimiento en largo y peso y la sobreviviencia de los
ejemplares.
Los parámetros ambientales como temperatura y salinidad fueron controlados durante el
desarrollo de los tres bioensayos.
FORMULACION DEL ALIMENTO BALANCEADO
Se prepararon dos dietas microparticuladas para el bioensayo 2 (Tabla 2) y siete dietas
donde se reemplazó parcial o totalmente la harina de pescado por harina de lombriz (Tabla 3)
(Bioensayo 3).
Avances en Nutrición Acuícola III
351
Tsai García, Elvira Alfonso y Bárbaro Jaime
Tabla 2. Composición de las dietas para larvas (Bioensayo 2).
INGREDIENTES
A (%)
B (%)
30
17
17
15
0
2
5
6.5
0.5
2
5
45
27
15
10
15
15
2
2
6.5
0.5
2
5
47
Harina de pescado
Harina de camarón
Harina de soya
Harina de lombriz
Harina de calamar
Aceite de girasol
Aceite de hígado de bacalao
Vitaminas y minerales*
Colesterol
Fosfato dicálcico
Carboximetil celulosa
Proteína determinada
*Premezcla BASF
Tabla 3. Composición de las dietas para postlarvas (Bioensayo 3).
Niveles de inclusión (%)
Ingredientes
A
B
C
D
E
F
Control
Harina de lombriz
Harina de pescado
Harina de carne
Harina de girasol
Harina de soya
Levadura torula
Aceite de girasol
Aceite de hígado de bacalao
Vitaminas y minerales*
Vitamina C
Colesterol
Carboximetil celulosa
Proteína determinada
5
25
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
35
10
20
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
35
15
15
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
36
20
10
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
37
25
5
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
37
30
0
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
38
0
30
28
4
13
10
2
2
5
0.5
0.5
5
37
* Premezcla BASF.
El alimento balanceado fue confeccionado según García (1993). El análisis proximal de las
dietas y de la harina de lombriz fue realizado siguiendo los métodos de la A.O.A.C. (1980)
(Tabla 4).
352
Avances en Nutrición Acuícola III
Evaluación de la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae en la alimentación de camarones peneidos
Tabla 4. Análisis proximal de la harina de Eudrilus eugeniae.
COMPONENTES
(%)
Proteína bruta
Lípidos totales
Fibra
Cenizas
Humedad
61.00
8.81
10.10
8.00
8.43
a) ANALISIS ESTADISTICO
Los crecimientos de las PL5 fueron comparados mediante una prueba T-student. Se realizó
un análisis de varianza de una vía y una prueba de rangos múltiples de Duncan para determinar
las diferencias significativas (p<<0.05) en los largos y pesos de las PL35.
Los datos de sobrevivencia en los bioensayos 2 y 3 se analizaron mediante una prueba de
chi-cuadrado.
b) EVALUACION DEL COMPUTO QUIMICO Y DEL INDICE DE AMINOACIDOS
ESENCIALES
Se evaluó el Cómputo Químico (Mitchell y Bloch, 1946) y el Indice de Aminoácidos
Esenciales (Oser, 1951) de las dietas empleadas en la alimentación larval y de diferentes
ingredientes, utilizándose la composición aminoacídica del músculo de la cola de las post-larvas
de P. schmitti como proteína de referencia (Gallardo et al., 1989).
RESULTADOS
BIOENSAYO 1.
Las protozoeas tuvieron un desarrollo diferente en los dos tratamientos ensayados. Las
larvas alimentadas con el alga Tetraselmis chui cultivada con harina de lombriz aceleraron su
desarrollo y a las 52 horas todas se encontraban en el estadio de PII (Tabla 5). A las 76 horas de
iniciado el bioensayo, los camarones que consumieron el alga crecida en el medio MiquelMatue, no habían alcanzado el estadio de PIII.
Avances en Nutrición Acuícola III
353
Tsai García, Elvira Alfonso y Bárbaro Jaime
Tabla 5. Desarrollo de las protozoeas de P. notialis.
Medio de cultivo de
Tetraselmis chuii
Miquel-Matue
Harina de lombriz
Miquel-Matue
Harina de lombriz
Tiempo* (horas)
28
52
Miquel-Matue
Harina de lombriz
76
PI
PII
PIII
100%
—
—
100%
—
—
55%
45 %
0%
100%
—
—
—
34%
66%
0%
0%
89%
11%
* El tiempo está referido a las horas transcurridas desde que las larvas sufrieron la
metamorfosis de nauplio a protozoea.
Los promedios de temperatura a las 0700 y 1800 horas, fueron de 26.7 + 0.6 o C y 26.9 +
0.5 o C, respectivamente. La salinidad fue de 35.5 + 0.5 0/00.
BIOENSAYO 2.
El índice de desarrollo no presentó diferencias en el transcurso del bioensayo, mostrando
ligeras variaciones en PIII y MII, donde las larvas que carecían de harina de calamar en la dieta
tuvieron un ligero adelanto en el desarrollo (Fig.1). El crecimiento y la sobrevivencia de las PL5
tampoco mostraron diferencias significativas (p>>0.05) (Tabla 6).
354
Avances en Nutrición Acuícola III
Evaluación de la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae en la alimentación de camarones peneidos
,'
3/
0,,,
0,,
0,
=,,,
%
=,,
$
=,,,
=,
=,
+RUDV
Figura 1. Indice de desarrollo larval de Penaeus schmitti.
Tabla 6. Largos finales (+ D.E.) y sobrevivencia en PL 5 de P. schmitti.
(Bioensayo 2)
Tratamientos
Largos (mm)
Sobrevivencia (%)
A
B
6.11 + 0.32
6.08 + 0.25
71
76
Al analizar el C.Q. de las dos dietas se observa que la histidina o la arginina son el 1ro. o 2do.
aminoácido limitante. Los valores del I.A.A.E. fueron muy similares en los dos tratamientos
(90 y 89) (Figura 2).
Los promedios de temperatura a las 0900 y 1800 horas fueron de 27.2 + 1.3o C y 29 + 1°C,
respectivamente. La salinidad fue de 35.8 + 0.4 0/00.
Avances en Nutrición Acuícola III
355
Tsai García, Elvira Alfonso y Bárbaro Jaime
,'
3
0
,,,
0
,,
0
,
=
,,,
,,,
=
=
,,
=
,
=
,
+RUDV
Figura 2. Cómputo Químico de las dietas para larvas.
BIOENSAYO 3
A medida que se incrementa la sustitución de la harina de pescado por la harina de lombriz,
los crecimientos tienden a aumentar significativamente (p<<0.05). Solamente en el tratamiento
con 5% de harina de lombriz, las postlarvas obtuvieron pesos semejantes al control, donde no
se adicionó este ingrediente, sin embargo, aún a este nivel, los largos eran estadísticamente
diferentes. (Figura 3).
356
Avances en Nutrición Acuícola III
Evaluación de la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae en la alimentación de camarones peneidos
R
V
H
S
F
Q
,
R
J
U
D
O
F
Q
,
SHVR
ODUJR
1LYHOHV
Figura 3. Incrementos con relación a la dieta patrón. Postlarvas de P. schmitti.
La sobrevivencia más elevada se alcanza con un 25% de harina de lombriz (93%). El efecto
de la dieta no es tan marcado en este parámetro como en el crecimiento, alcanzando altos valores
(>>75%), en todos los tratamientos.
Los promedios de temperatura a las 0800 y 1800 horas fueron de 26.1 + 0.8 o C y 27.6 +
0.5 o C. La salinidad fue de 36.3 + 0.5 0/00.
COMPUTO QUIMICO E INDICE DE AMINOACIDOS ESENCIALES
Al comparar el C.Q. y el I.A.A.E. de la harina de lombriz con otras fuentes proteicas de alto
valor biológico empleadas comúnmente en la elaboración de piensos para camarón, se observa
que la lombriz es rica en arginina e histidina, aminoácidos deficientes en la mayoría de las
harinas. Así mismo, es deficiente en treonina, el cual es abundante en la harina de pescado,
calamar y camarón, existiendo una complementación al incluirla en la dieta. El valor más elevado
del I.A.A.E. lo presenta la harina de lombriz con 94 (Tabla 7).
Avances en Nutrición Acuícola III
357
Tsai García, Elvira Alfonso y Bárbaro Jaime
Tabla 7. Cómputo Químico e Indice de Aminoácidos Esenciales
de diferentes harinas.
A.A.E.
Arginina
Metionina
Treonina
Isoleucina
Leucina
Lisina
Valina
Histidina
Fenil-alanina
I.A.A.E.
Lombriz 1
Camarón 2
Cabeza de
Camarón 2
Calamar 2
Pescado 2
90
124
86**
121
109
73*
156
102
155
94
77
124
154
75**
104
75**
96
63*
106
86
76
64*
141
131
85
105
138
68**
100
87
80**
109
167
102
96
90
88
63*
119
90
62**
144
129
86
87
83
105
54*
88
83
* 1er. aminoácido limitante; ** 2do. aminoácido limitante; Composición aminoacídica: 1
García y Jaime (1990); 2 Tacon (1989)
DISCUSION
Las protozoeas que ingirieron algas fertilizadas con harina de lombriz, aceleraron el desarrollo
con respecto a las alimentadas con Tetraselmis crecida en el medio inorgánico Miquel-Matue.
Esto puede ser debido no solamente a que el alga tenga un mayor valor nutricional, sino también
a la posibilidad de que las larvas filtren las partículas de harina suspendidas en el agua y ésta
contribuya de forma directa a su alimentación.
Las proteínas de origen marino han sido ampliamente usadas en la alimentación larval por
su alto valor biológico y por tener un efecto promotor del crecimiento tal como señalaron CruzRicque y Guillaume (1987) para la harina de calamar. Sin embargo, éstas son escasas, caras y
altamente variables en calidad (Chamberlain, 1995).
La sustitución total de la harina de calamar por lombriz de tierra, en las dietas para larvas,
no afecta su desarrollo, crecimiento ni sobrevivencia. Esto también es factible con la harina de
pescado, donde a medida que se sustituye por harina de lombriz, se incrementa el crecimiento
de las postlarvas hasta alcanzar los mayores valores con 25 y 30% de inclusión.
La harina de E. eugeniae tiene una composición aminoacícida muy cercana a la del músculo
de la cola de P. schmitti, lo cual se observa en los valores obtenidos del C.Q. y del I.A.A.E.
Estos métodos de evaluación proteica, permiten de una forma sencilla y preliminar, evaluar la
358
Avances en Nutrición Acuícola III
Evaluación de la lombriz de tierra Eudrilus eugeniae en la alimentación de camarones peneidos
calidad de una dieta o ingrediente y han sido empleados por diversos autores (Gallardo et al.,
1989, Peñaflorida, 1989, Gaxiola et al., 1996). Al comparar la harina de lombriz con otras de
origen marino, se observa que complementa a éstas en algunos aminoácidos como son: la
arginina y la histidina, deficientes en las harinas de camarón, calamar y pescado.
Los mejores resultados alcanzados con la lombriz de tierra, también pueden ser explicados
por el valor más elevado del I.A.A.E. (94). Según Oser (1959), ingredientes o dietas con valores
mayores a 90 se consideran de alta calidad, mientras que una puntuación menor (80 o 70), se
clasifican como útil o inadecuada, respectivamente.
Otro aspecto que hace atrayente el empleo de la lombriz en la camaronicultura, es su fácil
manejo y bajo costo de producción (Reinés, com. pers.). Las lombrices pueden degradar una
cantidad de materia orgánica hasta el doble de su peso diario, lo que hace que este novedoso
recurso permita el reciclaje de los excedentes orgánicos biodegradables, por lo que su cultivo
podría tener también un gran interés en otros sectores de la economía y en la recuperación del
equilibrio ecológico y el mejoramiento de la salud de la población y de esta forma aprovechar
todas las posibilidades que ese cultivo ofrece.
CONCLUSIONES
•
El alga Tetraselmis chuii fertilizada con harina de lombriz acelera el desarrollo de las
protozoeas de P. notialis al comparase con la misma especie crecida en el medio inorgánico
Miquel-Matue.
•
Es posible sustituir totalmente del alimento microparticulado la harina de calamar por
harina de lombriz, sin afectar el desarrollo, crecimiento y sobrevivencia de las larvas de
P. schmitti.
•
La sustitución de harina de pescado por harina de lombriz en la dieta mejora el crecimiento
de las postlarvas de P. schmitti.
•
El alto valor biológico de la proteína de Eudrilus eugeniae, así como su fácil manejo y
bajo costo de producción, hacen que este recurso sea atrayente para ser empleado en la
camaronicultura.
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