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OJO NEGRO
Prof. Dr. Rodrigo Tardón B. M.V. Dr. Vet.
Profesor Asociado
Servicio de Oftalmología
Facultad de Ciencias Veterinarias
Universidad de Concepción
[email protected]
www.oftalmovet.cl
La presencia de pigmentación de color negro en el globo y/o a anexos oculares puede ser analizado
clínicamente de acuerdo al origen o la causa de éstos.
El origen del color negro en el globo ocular se encuentra en los pigmentos localizados en el limbo esclerocorneal (Fig. 1), la conjuntiva (Fig. 2) o la úvea (Fig. 3). Estas estructuras se caracterizan por presentar
pigmentación negra, las que producto de un proceso inflamatorio localizado en ellas o a procesos
inflamatorios secundario a enfermedades que producen una vascularización corneal que provoca una
migración de los pigmentos, ya sea desde la conjuntiva o desde el limbo esclerocorneal (Fig. 2) o a la
presencia de tejido uveal en la cornea (ruptura corneal, Fig. 3) o en la esclerótica (estafiloma escleral)
permite observar el cambio de color en el globo ocular.
Figura 1. Pigmentación del limbo esclerocorneal (Flechas) en un perro.
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Figura 2. Pigmentación corneal secundaria a migración de pigmentos conjuntivales por vascularización
de ésta.
Figura 3. Prolapso de iris secundario a perforación corneal.
Las causas de que provocan el signo de ojo negro son las siguientes (Tabla 1):
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Blefaritis Crónica. El término blefaritis, es utilizado para establecer un diagnóstico que hace referencia
a distintas condiciones inflamatorias de los párpados independiente de la causa que la provoque,
siendo en la mayoría de los casos, causas de tipo primaria, que habitualmente están enmascaradas - en
cierta medida - por complicaciones secundarias del proceso inflamatorio, debido por una parte, a la rica
vascularización palpebral y por otra, a las numerosas estructuras especializadas, como son las glándulas
palpebrales, sebáceas y sudoríparas. Este cuadro se presenta más comúnmente en perros que en gatos,
pero habitualmente es ignorado sí es parte de una dermatitis generalizada, a menos que se produzca
una úlcera corneal secundaria a esta enfermedad. La blefaritis puede ser difusa, generalizada, o localizada y de curso tanto agudo como crónico, con una presentación frecuentemente bilateral, pero
habitualmente no simétrica, afectando en diferentes grados a los cuatro párpados. Las causas de blefaritis en general son tan variadas como las causas que provocan dermatitis, siendo las más comunes en los
perros las de etiología bacteriana, micótica, inmunomediada, protozoaria, neoplásica o parasitaria. La
signología varia de acuerdo a la causa y tiempo de presentación. Sin embargo en los casos crónicos que
sólo afecta a los párpados se observará una pigmentación negra de estos secundaria al proceso inflamatorio crónico y al autotraumatismo (Fig. 4)
Simblefaron. Este término se refiere a la unión o adhesión anormal de la conjuntiva palpebral, bulbar
o del tercer párpado, entre sí o a la córnea. Es de muy una alteración muy poco frecuente en los caninos,
sin embargo, es más frecuente en los felinos. Su origen en muy pocas ocasiones es de tipo congénito,
siendo más habitual la presentación de origen adquirido por una infección neonatal, sobretodo en las
ocasionadas por Herpesvirus felino y con menor frecuencia, puede ser una complicación de otro origen,
El ojo negro en este caso, es producido por la presencia de tejido conjuntival pigmentado sobre el globo
ocular (Fig 5).
Tabla 1. Principales Causas de Ojo Negro
Párpados
Blefaritis Crónica
Conjuntiva
Simblefaron
Uvea
Prolapso del iris
Quiste de iris
QCS: Queratoconjuntivitis seca: QSC: Queratitis superficial crónica.
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Córnea
Dermoide corneal
Queratitis pigmentaria
QCS
QSC
Cuerpo extraño
Secuestro corneal
Figura 4. Labrador retriver con párpados negros secundarios a una blefaritis crónica.
Figura 5. Ojo negro en un gato DPC con simblefaron del ojo derecho secundario a una infección
por herpesvirus.
Dermoide corneal. El quistes dermoide es una malformacion congénita de origen ectodérmico, que
pude afectar a cualquier lugar del organismo, y cuando se observa sobre la córnea se caracteriza por ser
tejido dérmico pigmentado con folículos pilosos con sus glándulas accesorias (Fig. 6).
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Figura 6. Ojo negro ocasionado por la
presencia de un quiste dermoide en perro
mestizo de 6 meses de edad.
Queratoconjuntivitis seca (QCS). La deficiencia de la película lagrimal precorneal tanto de fase
acuosa (QCS Cuantitativa) como de la capa de mucina o lípidos (QCS Cualitativa) son enfermedades
crónicas que afectan a la superficie ocular y generan en particular en la córnea. El ojo negro se produce
en estos casos por la pigmentación secundaria de la córnea al traumatismo generado por la deficiencia
lagrimal, que lleva en los casos severos a la ceguera por la pérdida completa de la transparencia
corneal (Fig. 7).
Figura 7. Ojo negros secundarios a Queratoconjuntivitis Seca. Cualitativa (derecha) por deficiencia de
la capa de mucina y cuantitativa (izquierda) por deficiencia de la porción acuosa Schirmer 2 mm/min.
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Queratitis superficial crónica (QSC). Es denomina habitualmente como Pannus, Queratitis Superficial Inmunomediada o síndrome de Überreiter. Esta se caracteriza por corresponde a una vascularización subepitelial del tejido corneal, asociado con un infiltrado de tejido conectivo o tejido de granulación. Se ha establecido como enfermedad hereditaria en las razas Ovejero alemán y Dachshund, y con
una predisposición racial en las razas: Akita, Airedale Terrier, Labrado Retriver, Pastor Belga, Pastor
Australiano, Tervuren Belga, Boder Collie, Greyhound, Pinscher Miniatura, Pointer, Poodle, Siberian
Husky y Springer Spaniel. El ojo negro en este caso se produce en estos casos debido a la migración de
pigmento desde el limbo esclerocorneal secundario a la vascularización corneal (Figs. 2 y 8).
Figura 8. Casos de queratitis superficial crónica en tratamiento, caracterizado por vascularización y
pigmentación corneal.
Cuerpo extraño. Los cuerpos extraños de origen vegetal se adhieren a la superficie de la córnea, los
cuales cambian de color a negro con el paso del tiempo (4 a 7 días) y muchas veces el motivo de
consulta es la presencia de puntos negros, los que deben ser diferenciados de secuestros corneales en
gatos.
Secuestro corneal, o degeneración focal del colágeno denominada también como queratitis necrotizante, necrosis corneal, córnea nigrum o momificación corneal. Corresponde a una enfermedad que
afecta el epitelio y estroma corneales de los gatos principalmente en la raza persa y en otras razas como
himalayos, siamés, exóticos o comunes. El ojo negro es ocasionado por la presencia de pigmento de
porfirina de forma difusa en el estroma e que posteriormente se transforma en una placa necrosante de
color negra habitualmente vascularizada (Fig. 9).
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Figura 9. Secuestro corneal en gato Persa
de 2 años de edad.
Prolapso del iris. Es producido cuando se genera una ruptura corneal secundario a un traumatismo o
úlcera corneal, el que se caracterizará por la presencia de pigmetación negra puntiforme con o sin volumen
sobre la córnea (Fig. 3).
Quiste de iris. Son estructuras globosas de contenido líquido (humor acuoso) de procedencia del epitelio
del iris o de los cuerpos ciliares. Habitualmente estos están libres fotando en el segmento anterior del globo
ocular. El ojo negro en este caso es la consulta por la presencia de estas estructuras en el ojo (Fig 10).
Figura 10. Quistes de iris en un gato (izquierda) y un perro (derecha).
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