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Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Estado nutricional y orientación
nutricional en estudiantes de ballet de
nivel elemental.
(Parte II)
Cosette María Rodríguez Marcos
INSTITUTO SUPERIOR DE ARTE
Facultad de Artes Escénicas
Departamento de Ballet
La Habana. Cuba
El ser humano es la única criatura que puede aprender a alimentarse sanamente por ser la alimentación un
componente conciente y voluntario dentro del fenómeno alimentario-nutrimental, susceptible de
cambios por aprendizaje. Al mismo se le puede enseñar a alimentarse según sus necesidades reales y en la
misma medida en que ello se logre así será de saludable y productivo.
Dr. C. Troadio Lino Gonzále
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1. MARCO TEÓRICO
1.1 Conceptos básicos de nutrición
1.2 Alimentación sana
1.3 Nutrición en el ballet
1.4 La figura del bailarín
1.1 Conceptos básicos de alimentación-nutrición.
En el contexto cognoscitivo del ser humano la Alimentación y Nutrición
pueden ser consideradas como ciencias particulares que se ocupan del estudio
y conocimiento de aspectos de importancia para el fenómeno existencial, en el
tiempo y en el espacio, de los organismos vivientes y, por ende, del ser
humano.i
La Alimentación como ciencia tiene por objeto de estudio todo lo relacionado
con la planificación y organización de la producción, la producción, el
almacenamiento y conservación, la distribución, la preparación y elaboración,
la ingestión, la digestión y la absorción de los alimentos (llamadas categorías
químicas alimentarias y nutrimentales).i
La Nutrición como ciencia particular incluye a la Alimentación pero su campo
objeto de estudio va más allá, por cuanto, si bien lo alimentario puede decirse
que termina cuando las llamadas categorías químicas alimentarias y
nutrimentales son absorbidas o introducidas en el medio interno del individuo,
es a partir de éste preciso momento, en que para muchos comienza lo
nutricional, o lo que es lo mismo la distribución por todo el organismo de los
nutrimentos, la utilización y transformación de éstos en el metabolismo celular,
su almacenamiento o excreción.i
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Los nutrimentos contenidos en la dieta ingerida constituyen las sustancias
químicas abastecedoras y sostenedoras de la función metabólica (o
metabolismo), de aquí la importancia capital que tiene el hecho de que sean
consumidos y absorbidos en las cantidades absolutas y relativas requeridas, de
manera tal que estén biodisponibles para las células de los diferentes tejidos y
órganos que integran en su conjunto el biosistema humano, según sus
necesidades.i
La más importante de todas las funciones biológicas es la metabólica o
simplemente metabolismo y de ella dependen las demás. Fuera de la función
metabólica no tiene sentido hablar de características vitales de un sistema vivo
y la misma es un reflejo concreto de la forma, cualitativamente superior, en que
se organiza la materia en los biosistemas.i
Al Estado Nutricional se le puede concebir, desde el punto de vista
fenoménico, como la resultante de la interacción dinámica, en el tiempo y en el
espacio, de la alimentación (utilización de la energía y nutrimentos contenidos
en los alimentos) en el metabolismo de los diferentes tejidos y órganos del
cuerpo. Como es lógico suponer tal interacción puede estar influida por
múltiples factores, desde los genéticos que determinan en gran medida la
estructura metabólica del individuo y factores propios del entorno tanto de
naturaleza física como química, biológica y hasta de índole social.i
En la evaluación del Estado Nutricional del individuo debe seguirse,
estrictamente un procedimiento normalizado de operaciones, que incluye una
Historia Alimentaria, una evaluación física antropométrica y una evaluación de
indicadores fisicoquímicos, para estos últimos se hace imprescindible la
obtención de material biológico del individuo (sangre, tejidos, líquidos
corporales) y es utilizada únicamente en el área clínica. No obstante, una
evaluación del Estado Nutricional puede realizarse con uno o dos componentes
de los referidos sin dejar de tener valor diagnóstico, de seguimiento y
pronóstico.
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Componente de Historia Alimentaria.
Para algunos investigadores puede estar incluida o extraerse de un
interrogatorio anamnésico realizado al individuo objeto de la investigación. Su
importancia radica en el conocimiento con la mayor precisión retroactiva
posible, de cómo ha sido el comportamiento alimentario del individuo en
cantidad, calidad y duración, tomando ahora en consideración no sólo los
aspectos de disponibilidad y accesibilidad alimentaria, sino también, y de
manera particularmente importante, a los factores culturales alimentarios, de
educación alimentaria del individuo y de aquellos relacionados con la forma de
elaboración, preparación e ingestión de los alimentos. i
Componente antropométrico.
Constituye uno de los más importantes, baratos y fáciles de ejecutar que
permite la obtención de una información bastante acabada y acorde con la
realidad objetiva nutricional del sujeto, siempre y cuando sea bien ejecutado,
siguiendo
las
normas
internacionales
establecidas,
con
instrumentos
previamente estandarizados y por un personal debidamente entrenado.
Debe comenzar con el registro del peso, la talla, la determinación del índice de
masa corporal y de otros tipos según los propósitos del estudio, como
diferentes mensuraciones entre las que están el pliegue tricipital, pliegue
subescapular, pliegue suprailiaco, circunferencia braquial media, circunferencia
media
de
la
pierna,
circunferencia
cefálica,
circunferencia
toráxica,
circunferencia de la cintura y circunferencia de la cadera, entre otras que
después pueden ser utilizadas de manera combinada o para, mediante el
empleo de determinados algoritmos matemáticos simples, llegar a la obtención
de valores que reflejan con bastante exactitud el Estado Nutricional del sujeto.
Las mediciones antropométricas en individuos muy jóvenes o en edad mayor
deben ser realizadas aún con mayor cuidado debido a las particularidades,
peculiaridades y complejidades propias de estas etapas de la vida.i
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1.2 Alimentación sana.
En el contexto de la Alimentación, Nutrición y Dietética como ciencias, la
dieta balanceada constituye uno de los objetivos fundamentales a lograr.
Desde el punto de vista conceptual, es la dieta alimentaria o cantidad y calidad
de alimentos que debe ingerir el individuo para satisfacer sus reales
necesidades de energía y nutrimentos en un intervalo de tiempo determinado,
fijado éste en 24 horas. Como es lógico suponer, sólo la dieta balanceada es
capaz de alimentar debidamente la función metabólica general de la persona,
según el patrón metabólico que la misma ha de sostener para enfrentar
autoregenerativamente los cambios o variaciones de energía y sustancias, y de
cualquier naturaleza en definitiva, que puedan sucederse en el entorno de la
misma.
Para que una dieta sea balanceada o normal debe cumplir ocho requisitos
fundamentales:i
 Ser adecuada, es decir, ajustarse a la etapa de la vida, al sexo y al
estado funcional (fisiológico) del sujeto.
 Ser suficiente, que equivale a decir proporcione las cantidades de
energía y nutrimentos que las células de los diferentes tejidos y órganos
del cuerpo puedan necesitar.
 Ser variada, o lo que es lo mismo, en la dieta deben figurar categorías
químicas alimentarias que procedentes de diferentes fuentes (animal y
vegetal) y de distinta naturaleza, aseguren en su conjunto las demandas
energéticas y sustanciales de las células a nivel tisular y orgánico.
 Ser equilibrada, constituye posiblemente el requisito más difícil de
cumplimentar tratándose de una dieta balanceada. En su esencia,
significa que cada componente alimentario y nutrimental debe estar
presente en la dieta ingerida por el sujeto en determinadas cantidades
absolutas y relativas, con lo cual se evitaría el estrés de cualquier ruta
metabólica a nivel tísulo-orgánico.
 Ser ingerida de forma fraccionada (preferiblemente en seis “pequeñas”
porciones) donde cada una de las fracciones debe contribuir a la
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satisfacción de una determinada cantidad porcentual de la necesidad
energética total del individuo para 24 horas.
 Suministrar determinadas cantidades y tipos de fibra dietética.
 Proporcionar determinadas cantidades y tipos de sustancias fitoquímicas
con diferentes capacidades y poderes antioxidantes.
 Ser inocua (no provocar enfermedad).
Se plantea que las cantidades de alimentos y nutrimentos que deben ser
ingeridas por un sujeto para satisfacer sus necesidades energéticas
(recuérdese que la composición de la dieta está en dependencia del gasto de
energía del individuo), debe hacerse con una determinada frecuencia
(frecuencia alimentaria), correspondiendo a cada ingesta un determinado
porcentaje de las necesidades totales de energía del individuo en 24 horas.
Así se plantea que debe hacerse un desayuno o primera ingesta del día, la
más importante de todas, que aporte un 20% de los requerimientos
energéticos; una merienda matutina (2 horas después del desayuno) que
aporte un 10% del total de la energía requerida; el almuerzo (también unas 2 ó
3 horas después de la merienda matutina) que aporte el 30% de la necesidad
energética total; una merienda vespertina (unas 3 horas después del almuerzo)
que proporcione alrededor de un 10% de los requerimientos energéticos; la
comida (unas 2 horas después de la merienda vespertina) que aporte alrededor
de un 20% de la necesidad energética total del individuo y, finalmente, una
cena (unas 2 ó 3 horas después de la comida) que proporcione alrededor de un
10% de los requerimientos de energía). Recuérdese que lo referido constituye
tan sólo una propuesta ideal de frecuencia alimentaria.i
“Guías Alimentarias”:
Estas constituyen, en la práctica, un conjunto de consejos relacionados con la
forma en que deben alimentarse las personas para que la dieta que ingieren
las mismas sea o se acerque lo más posible a una dieta balanceada y, por
ende, su adecuada implementación y sistemática observación o cumplimiento,
contribuyen de manera importante al mejoramiento del estado de salud de la
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población a la cual van dirigidas. Estas constituyen una necesidad en cualquier
sistema de salud y las mismas deben ser diseminadas y retroalimentadas a
todos los niveles de la comunidad, utilizando cualquier vía o procedimiento
posible para lograr tal objetivo.
Las “Guías Alimentarias” son proposiciones instructivo-educativas que tienen
como objetivo enseñarle a poblaciones humanas y al ser humano en particular,
la forma en que debe alimentarse de manera sana, que equivale a decir a
preservar su salud psíquica, física, mental y espiritual.
Las “Guías Alimentarias” deben ser debidamente argumentadas con el objetivo
de que los mensajes que se hacen llegar a los individuos dejen una huella de
conocimiento en ellos que ayude a cambiar la conducta alimentaria para
alcanzar un incremento progresivo de su calidad de vida. Estas guías no se
imponen. Todo intento de imposición les resta eficacia práctica. Pueden llegar
a constituir un excelente material instructivo en el desarrollo y profundización
de la cultura y educación alimentaria y con ello a un mejoramiento de la calidad
de vida.
Una Alimentación Sana es un requisito para una adecuada promoción de
salud, prevención de las enfermedades, curación y facilitación de la
rehabilitación.
La Alimentación Sana proporciona la posibilidad de lograr una vida prolongada
y de calidad. Ella sustenta en gran medida, la felicidad del ser humano. El ser
humano es la única criatura que puede aprender a alimentarse sanamente por
ser la alimentación un componente conciente y voluntario dentro del fenómeno
alimentario-nutrimental, susceptible de cambios por aprendizaje. Al mismo se
le puede enseñar a alimentarse según sus necesidades reales y en la misma
medida en que ello se logre así será de saludable y productivo.i
La actitud ante el acto de alimentarse que surge en la relación del ser humano
con el alimento, es la Conducta Alimentaria, que puede variar de un individuo
a otro y entre diferentes grupos humanos. La conducta alimentaria condiciona
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también el logro o no, de una alimentación sana y por tanto la existencia de
una vida sana, con adecuado Estado Nutricional y con calidad de vida.
Las conductas en el ser humano se consideran aberrantes si estas atentan
contra su propio bienestar y subsistencia. Los ser vivos no subsiste ni
contribuyen a la conservación de su especie, si sus individuos no son capaces
de adaptarse al entorno en que viven, donde conductas contraproducentes
arruinarían su capacidad de adaptación. A esto se le puede llamar trastornos
de la conducta y en ajuste al tema que se está tratando constituyen
Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).
Con este término se engloban una serie de trastornos conductuales de los
seres humanos donde la relación del individuo con el alimento es capaz de
atentar contra su salud. Se señalan como ejemplos entidades tales como la
Anorexia Nerviosa, la Bulimia, la Ortorrexia, el Comedor Nocturno y el Comedor
Compulsivo como los más reconocidos en la literatura.
Estos TCA se presentan en determinados grupos de individuos influenciados
por específicas tendencias sociales y culturales. Es conocido como la Anorexia
Nerviosa y Bulimia puede presentarse con mayor frecuencia en mujeres
pertenecientes a estratos sociales donde la idealización de la figura femenina
es lo más importante de su razón de existir, con patrones de esbeltez extrema,
ya sea con fines profesionales (modelos de pasarelas, bailarinas, gimnastas) o
con fines puramente estéticos e imitativos (moda, ídolos de la pantalla). Lo
cierto es que las portadoras de tales trastornos constituyen grupos cada vez
más crecientes en determinas sociedades del planeta con riesgo a extenderse
a causa de la globalización cultural.
En las víctimas de estos trastornos se pueden encontrar estudiantes de ballet y
bailarinas profesionales que exhiben las manifestaciones en diferentes grados
y en ocasiones pueden pasar inapercibidas o inapreciadas por el colectivo de
profesores o guías.
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Es fácilmente entendible que trastornos como estos en estudiantes o
profesionales de la danza son contraproducentes para el buen desempeño de
la bailarina.
1.3 Nutrición en el ballet.
En el desarrollo de los seres humanos se observan dos etapas en las que el
crecimiento se acelera, la primera abarca desde la concepción hasta la edad
preescolar y la segunda desde la edad escolar a la pubertad, donde un
inadecuado aporte de nutrimentos puede producir cambios importantes que
van en detrimento de su estado nutricional futuro. Si en estas etapas se
produce un déficit permanente del abastecimiento de los requerimientos
nutricionales, disminuirá o se detendrá la ganancia de peso, y posteriormente,
como mecanismo adaptativo, se producirá una disminución del crecimiento y
de la actividad física, como vía a la que recurre el organismo para lograr
disminuir el gasto energético total.ii
En un estadío posterior estos individuos se convertirían en homeorréticos (por
un equilibrio de su peso con la talla) con una talla que quedará afectada y así
se tendrá al final de la edad del desarrollo un individuo que no pudo expresar
todo su potencial genético de crecimiento.
El individuo en esta situación puede ser portador de una serie de secuelas que
no solo tienen relación con el crecimiento somático, sino también con su
capacidad de competir en el ámbito escolar y en el ámbito del trabajo físico,
con una disminución de su capacidad para la actividad física y para el
aprendizaje. Este fenómeno no representa una mutación genética, más bien se
trata de la capacidad humana de adaptarse al medio.
En el caso de los escolares sometidos a un régimen de actividad física de
deporte, danza o ballet, pueden presentar alteraciones en su crecimiento y
desarrollo si no se tiene en cuenta que su alimentación debe ser suficiente en
energía y nutrimentos para satisfacer adecuadamente su actividad física y
posibilidades de desarrollo.ii,iii
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Entre los nutrimentos que se pudieran afectar en una dieta insuficiente está el
calcio, de gran importancia para el buen estado óseo, además del hierro, el
zinc, las proteínas, la vitamina D y el ácido ascórbico.iv
Una de las enfermedades carenciales relacionada con la dieta que es más
común entre los adolescentes es la anemia ferropénica. Los adolescentes son
especialmente susceptibles a sufrir una anemia por carencia de hierro, ya que
su volumen sanguíneo y su masa muscular aumentan durante el crecimiento y
el desarrollo. Esto incrementa la necesidad de hierro para fabricar
hemoglobina, el pigmento rojo de la sangre que transporta el oxígeno, y una
proteína llamada mioglobina que se encuentra en los músculos. El aumento de
la masa corporal magra, formada por músculo principalmente, es más evidente
en los varones adolescentes que en las hembras. Antes de la adolescencia, la
masa magra es más o menos la misma en ambos sexos. Sin embargo, cuando
comienza la adolescencia, el varón sufre una acumulación más rápida de masa
magra, por cada kilogramo de peso que aumenta durante el crecimiento, y
finalmente su valor máximo de masa magra llega a ser el doble que el de la
hembra. Otros factores que influyen en que la necesidad de hierro sea mayor
para el caso de las hembras son el aumento de peso y el comienzo de la
menstruación. Todos estos factores deberían tenerse en cuenta cuando se
evalúan las necesidades de hierro en este grupo de edad. ¿Cuánto más hay
entonces que considerar, si a estas edades hay formación extra de músculo
por un régimen de vida diferente?
Uno de los temas más importantes a tener en cuenta durante la adolescencia
es la necesidad de incrementar el consumo de alimentos ricos en hierro, como
las carnes magras y el pescado, así como los frijoles, las vegetales de color
verde, los frutos secos y los cereales enriquecidos con hierro. El hierro que
proviene de los alimentos de origen animal (conocido como hierro hemínico) se
absorbe mucho mejor que el hierro de alimentos de origen no animal (hierro no
hemínico). Los adolescentes que siguen dietas vegetarianas corren por lo tanto
más peligro de sufrir carencias de hierro. Pero, la vitamina C y las proteínas
animales favorecen la absorción de hierro no hemínico. Si se toma un vaso de
zumo de cítricos en el desayuno con cereales enriquecidos con hierro, o si se
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exprime un limón y se añade pollo a la ensalada de vegetales, se favorece la
absorción del hierro proveniente de estos alimentos.
El 99% de las reservas de calcio del cuerpo se concentran en los huesos. El
calcio se acumula en el esqueleto durante el período de crecimiento y
maduración de éste, hasta que el individuo tiene poco más de 20 años, pues
durante la aceleración del crecimiento en la adolescencia, el aumento del peso
óseo es más rápido, con requerimientos nutricionales (en la alimentación) a
estas edades de 1200 mg/día.v,vi En estas edades, en las que se registra
mayor acumulación de tejido óseo, debe tratarse de aumentar al máximo la
masa ósea y así, se retrasará la pérdida de dicha masa en los años futuros de
la involución o envejecimiento.vii Es crucial conseguir un nivel máximo de masa
ósea durante la infancia y la adolescencia para reducir el riesgo de padecer
osteoporosis más adelante.
Al rededor de un 45% de la masa ósea de un adulto se forma durante la
adolescencia, aunque continúa creciendo después, hasta aproximadamente los
treinta años. La actividad física y la alimentación son determinantes de la
formación de la masa ósea y se ha demostrado que en adolescentes
deportistas y bailarines hay mayor densidad ósea en columna vertebral,
caderas y piernas que en grupos semejantes pero con menos actividad
física.viii,ix,x, xi,xii,xiii.
Las exigencias funcionales impuestas a los huesos determinan en gran medida
sus características estructurales, es decir, existe una interacción importante
entre las exigencias mecánicas y la disponibilidad de nutrimentos en la
elaboración de tejido óseo.vii Todo el calcio que se necesita para el crecimiento
de los huesos debe provenir de la dieta. Los mayores aumentos se dan en la
primera adolescencia, entre los 10-14 años en las hembras y los 12-16 en los
varones, por tanto, varios autores han concluido en sus estudios que es
ventajoso dar calcio suplementario en los adolescentes, mucho más si su
actividad física es intensa, para garantizar un aumento en la masa y densidad
ósea, así Tom Llogil recomienda calcio suplementario para garantizar un aporte
de 1500 mg/día, incluso algo más de lo usualmente recomendado.ix
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.
Durante la cima de crecimiento de la adolescencia, el promedio de retención de
calcio en las hembras es de 200 mg/día y de 300 mg/día en los varones. El
calcio que se absorbe es aproximadamente un 30%, así que es importante que
la dieta aporte la cantidad adecuada para densificar al máximo los huesos. Si
se comen varias raciones de lácteos, como leche, yogur y queso se
conseguirán los niveles de calcio recomendados.
Además de un buen aporte de calcio que provenga de la dieta. Para fortalecer
los huesos se necesitan otras vitaminas o minerales, como la vitamina D y el
fósforo. Hacer ejercicio físico es también esencial, y en especial ejercicios en
los que se cargue con el peso del cuerpo y que estimulen el fortalecimiento y la
conservación de los huesos. Se puede fortalecer la masa ósea si se realizan
actividades, como bicicleta, gimnasia, patinaje, juegos de pelota, bailar y
ejercicios supervisados de pesas, durante al menos 30-60 minutos al día, de
tres a cinco veces por semana. Si los jóvenes adoptan un estilo de vida y una
dieta
adecuada
desde
el
principio,
desarrollarán
más
fácilmente
comportamientos sanos que podrán seguir durante el resto de su vida. La
práctica sistemática de la técnica de ballet es un ejercicio facilitador de un buen
desarrollo óseo, siempre que se acompañe de una ingesta adecuada de calcio.
El zinc por su parte, juega un papel fundamental en el organismo humano; la
deficiencia nutricional de zinc puede afectar el crecimiento y el desarrollo, las
funciones inmunes y cognitivas. xiv,xv,xvi
Es de notar que además, la insuficiencia de estos minerales se asocia con un
aumento de la susceptibilidad del individuo a las infecciones por trastornos del
sistema inmune, las que a su vez pueden perturbar la ingesta (por anorexia o
inapetencia) y la utilización de alimentos, aumentando así el déficit de
nutrimentos.
Si en estos momentos cruciales de sus vidas y por estar vinculados a
disciplinas artísticas, en este caso el ballet clásico, no están debidamente
asesorados, tanto familiares como profesores, por personal calificado que
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oriente debidamente sus dietas, pueden perjudicar en gran medida el Estado
Nutricional de su organismo.xvii,xviii
Ha sido muy estudiada la relación entre el Estado Nutricional y maduración
sexual, índice de masa corporal (IMC) y ejercicios físicos, planteándose que a
mayor actividad física y menor IMC, habrá más retardo en la menarquia,xix así
como alteraciones menstruales que se producen cuando existen variaciones en
el intervalo, duración y cantidad del sangramiento, que también pueden ser
provocadas por inmadurez hipotálamo-hipofisiaria, desnutrición, alteraciones
psíquicas y endocrinas, estrés, entre otros.
Como ya se señaló otro aspecto importante en este grupo poblacional son los
TCA. Estos alumnos también pueden ser víctimas de la Bulimia y en el peor de
los casos de la Anorexia Nerviosa debido al estrés psíquico que le ocasiona las
constantes exigencias para disminuir su peso. Se han detectado en las
bailarinas grandes disturbios dietéticos, además de las dietas mal orientadas,
como son vicios nutricionales que incluyen los períodos de ayuno prolongados,
la autoinducción del vómito y el uso inadecuado de laxantes y diuréticos..xx, xxi,xxii
En estos pequeños bailarines, dada su profesión y las exigencias estéticas, las
restricciones alimentarias son más estrictas, y la mayoría de las veces la
aplicación de dietas inadecuadas, el desconocimiento de modos de
alimentación y de los requerimientos nutricionales, los hace enfrentarse a una
actividad física intensa y extenuante sin lograr un equilibrio entre los ingresos y
el gasto. Son estas las condiciones propicias para caer en una deuda
energética con la cual solo pueden luchar sustrayendo reservas de los músculo
y de los órganos vitales, con afectación de su estado de salud.xxiii ,xxiv
Son muchos los problemas del aprendizaje y trastornos comprendidos dentro
del Síndrome de Trastornos por Déficit de la Atención con o sin Hiperactividad
(TDAH), pueden provenir de dietas inadecuadas. Niños y adolescentes mal
alimentados estarán en peores condicione para afrontar no solo la actividad
escolar, sino también las que se sobreañaden como deportes, actividades
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artísticas, idiomas, informática. Todas ellas dependen para su éxito de un buen
aporte alimenticio. xxv
1.4 La figura del bailarín
La expectativa de morfología del bailarín correlacionada con los eventos de
crecimiento y desarrollo de los estudiantes, así como la observación visual y
apreciación
de
un
profesor
de
ballet
experto,
establecen
nuevos
procedimientos de trabajo para la enseñanza metodológica del ballet.
En los últimos años los científicos han investigado mucho sobre las
características físicas de los bailarines élites que ha permitido establecer una
relación entre la figura y un mejor o peor desempeño técnico-artístico. Así la
caracterización cualitativa y cuantitativa de la figura de la bailarina o del bailarín
es aplicada en la enseñanza del ballet en las siguientes direcciones¡Error!Marcador
no definido.
:
1
En la identificación y búsqueda de talentos.
2
En la determinación y monitoreo de los proceso de crecimiento y desarrollo
de los estudiantes de ballet.
3
En el diseño del entrenamiento físico y del desempeño técnico-artístico.
4
En el control del peso corporal con sus componentes muscular y graso, en
dependencia del sexo y edad del bailarín.
El peso corporal y las características del cuerpo del bailarín son dependientes
del sexo, la edad cronológica, la edad biológica, el nivel técnico-artístico
alcanzado y la influencia de factores del entorno independientes a la práctica
del ballet, como son el medio familiar y social, la disponibilidad de alimentos, el
nivel adquisitivo económico que condiciona la accesibilidad a los alimentos, así
como factores psicoemocionales y culturales.
Para el estudio de la composición corporal es necesaria la determinación de los
componentes principales del cuerpo humano, además de tener en cuenta las
técnicas y métodos utilizados para su obtención y la influencia de los factores
propios del individuo. Por otra parte dicha composición estará determinada por
el Estado Nutricional y por el nivel y tipo de actividad física. Como se planteó
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en el diseño de este trabajo, las técnicas y métodos más utilizados son los
antropométricos.
La antropología biológica define un peso adecuado para la población sana
(normal) según su sexo, talla y edad cronológica, basado en estudios previos
poblacionales con muestras lo suficientemente amplias para establecer
patrones. De esta forma se hace posible evaluar individuos específicos de la
población sana comparándolos con los patrones establecidos en la población
de pertenencia.
Para el caso de individuos practicantes de actividades físicas especializadas
como el ballet clásico (lo que los excluye de la población normal) no existen
aún valores normativos de peso adecuado y de composición corporal ideal
publicados, que puedan ser confiables para evaluar a bailarines cubanos.
Únicamente con el estudio de una población suficiente de bailarines y
bailarinas de alto nivel de desempeño técnico-artístico que permita una
caracterización detallada de su composición corporal, correlacionando esto con
el criterio de expertos profesores de ballet, se podrán generar normas de
referencia para evaluar comparativamente a bailarines profesionales y en
formación.
En Cuba se realizó un estudio en una muestra de bailarines élites del Ballet
Nacional de Cuba (10 varones y 10 hembras) entre 18 y 34 años, donde se
estudió la composición corporal por diferentes métodos y donde concluyen que
en ausencias de normas de composición corporal derivadas de metodologías
así válidas, el control individual del peso del bailarín y sus áreas muscular y
grasa se debe realizar a partir de la reevaluación con el tiempo de sus propios
resultados.¡Error!Marcador no definido.
No obstante, en ocasiones se acuden a criterios de autores que plantean que
la cantidad óptima de grasa para una bailarina está determinada por aquel
porcentaje graso que no interfiera con la figura y el rendimiento fisiológico.xxvi
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La bailarina de ballet debe tener cantidades mínimas pero saludables de peso
graso, debido a que su especialidad le exige un bajo peso para la talla,
independientemente de la edad cronológica o biológica de la misma.
En correspondencia con estos criterios, en el Capítulo 2 de este trabajo se hizo
un análisis antropométrico de una muestra de estudiantes de ballet utilizando
los valores normativos de las población cubana adolescente normal (sana), con
el objetivo de obtener evidencias de cómo se comportan estas estudiantes en
relación al resto de la población de coetáneos.xxvii
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2. Análisis del estudio antropométrico y de la historia alimentaria.
La muestra estudiada correspondiente a las alumnas de 4to y 5to año de ballet
de nivel elemental de la escuela “Alejo Carpentier”, está compuesta por un total
de 77 alumnas, 41 de 4to año y 36 de 5to año. Ver Gráfico 1.
En este estudio se analizó en primer lugar el peso de las alumnas, que como
se ha planteado debe tener una relación específica entre las diferentes masas
corporales y debe además permitirle ejecutar correctamente el proceder físicotécnico adecuado para el patrón estético de la especialidad, pero sin afectar la
salud de los individuos.xxviii,.xxix
En la muestra de las alumnas de ballet estudiadas se encontraron 13 de 77
(16.8%) alumnas portadoras de mala nutrición por defecto, es decir,
desnutridas. De estas 13, dentro del grupo de 4to año se encontró el mayor
porcentaje de desnutrición, 8 de 41, que representa el 19,5%. (Tabla 2 B). El
porcentaje de alumnas desnutrida es considerables, más cuando la mayoría de
los autores coinciden en que en estas edades de la adolescencia es menos
frecuente la desnutrición en relación con las edades anteriores (escolares,
preescolares y lactantes).ii
En relación con las alumnas con estado nutricional eutrófico, era de suponer
que a excepción de las desnutridas el resto estuviera en este grupo por su
condición de bailarinas y que no existieran alumnas sobrepeso, ni obesas,
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evaluadas por el IMC/Edad y comparadas con las tablas percentilares del
Estado Nutricional de la población cubana de esas edades. (Tabla 2B)
Tabla 2 B: Distribución de la muestra según Estado Nutricional
Estado Nutricional evaluado Nivel de especialidad
Total de Alumnas
según el IMC/Edad
de ballet
4to año
5to año
No
%
Desnutridas (<3 percentil)
Delgadas(≥3 <10 percentil)
Eutróficas(≥10 <90 percentil)
8 (19.5 %)
0
33 (80.4%)
5 (13.8%)
0
31(86.1%)
13
0
64
16,8
0
83,1
Sobrepeso(≥90 <97 percentil)
0
0
0
0
Obesas(≥97 percentil)
Total
0
41
0
36
0
77
0
100
Por tal motivo se hacía necesario el desglose de la muestra de alumnas
eutróficas en las diferentes categorías percentilares a que pertenecen, para
tener detalles de su eutrofismo nutricional.
En la Tabla 3 A se observa que las alumnas eutróficas se distribuyen dentro de
este rango en sus mayores porcentajes entre el 25 y 50 percentil y entre el 50 y
75 percentil.
Tabla 3 A: Desglose de las alumnas eutróficas según su distribución
percentilar del IMC/Edad
Estado Nutricional
No de
No de
Eutróficas evaluado
alumnas de
alumnas de
por el IMC/Edad
4to año
5to año
Total
(≥3 <10 percentil)
0
0
0
(≥10 <25 percentil)
2
3
5 (7,8%)
(≥25 <50 percentil )
16
10
26 (40,6 %)
(≥50 <75 percentil )
14
17
31(48,4%)
(≥75 <90 percentil )
Total
1
33
1
31
2 (3,1%)
64 (100%)
En esta investigación se pudo comparar los criterios subjetivos de los
profesores (Anexo 3) con la evaluación del Estado Nutricional antropométrico
de las alumnas. Debe señalarse que a criterio de las profesoras de dicha
especialidad, las alumnas comprendidas en los percentiles por encima del 50
887
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
son catalogadas con exceso de peso para la disciplina artística, según
entrevistas personales realizadas a las profesoras. (Tabla 3 B)
Tabla 3 B: Comparación entre los dos criterios de evaluación del Estado
Nutricional de las alumnas
Estado Nutricional Estado Nutricional evaluado por el criterio
TOTAL
evaluado por el
perceptual y obsevacional de las
IMC/Edad
profesoras de ballet
No y %
Peso bajo Peso adecuado
Peso alto
<3 percentil
6
7
13 (16.8%)
(≥3 <10 percentil)
(≥10 <25 percentil)
5
(≥25 <50 percentil )
(≥50 <75 percentil )
(≥75 <90 percentil )
Total
26
31
2
6
38
33
5 (7,8%)
26 (40,6 %)
31(48,4%)
2 (3,1%)
77 (100%)
Por la experiencia de los profesores de la especialidad, ellos evalúan la figura
de sus alumnas por el método de la observación visual directa, pues es sabido
que la figura del bailarín tiene gran valor para la expresión artística, sobre todo
en el ballet clásico donde la armonía estética y plástica de la figura es
componente fundamental de dicho arte, y donde los profesores expertos tienen
percepciones visuales muy agudas de la imagen en la escena. Por tal motivo
no regulan el peso de sus alumnas de forma sistemática por parámetros
antropométricos.
El ballet persigue la búsqueda de una bailarina con una figura delgada y líneal
por su importancia en la calidad de las acciones técnico-artísticas y su
influencia en el equilibrio psicoemocional de la bailarina.xxx
Otro aspecto que tiene gran interés en el ballet clásico es la valoración del
componente de masa muscular, ya que en virtud del desarrollo muscular
alcanzado por el bailarín, así será su fuerza y su rendimiento físico. Existe una
relación directa entre fuerza y desarrollo de masa muscular. Es la fuerza una
de las cualidades físicas de importancia en el desenvolvimiento del bailarín.xxxi
888
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Al respecto se pronunció Alicia Alonso: - …a
los jóvenes corresponde
desempeñar un papel fundamental, en un arte cuyo esplendor
tiene como base primaria la fuerza física y la dinámica
corporal . xxxii (1)
En la muestra analizada, el Área de Músculo (AM) fue inadecuada o deficitaria
(menor del 3er percentil de AM/Edad) en un 40 % (5 alumnas de13) dentro del
grupo de las desnutridas. Por lo demás se presenta con un buen desarrollo en
el grupo de las eutróficas con la particularidad de que entre las alumnas que
están entre los percentiles del 25 al 75 hay algunas de ellas (15 alumnas) con
un desarrollo muscular abundante (más del 90
percentil de AM) lo que traduce adecuada correspondencia entre el ingreso de
nutrimentos y la actividad física especializada. Ver Gráfico 2.
En relación al análisis del comportamiento del Área de Grasa (AG) se observó
muy bajo nivel de tejido graso (menos del 3 percentil del AG/Edad) en las
1
Alonso A. Diálogos con la danza. 4ta edición. Editora política, 2000. ISBN 959-01-0409-6. p
50
889
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
alumnas con Estado Nutricional de mala nutrición por defecto (13 alumnas para
el 100%) como era de esperar. Ver Gráfico 3
En el resto de las alumnas con Estado Nutricional eutrófico se encontró escaso
tejido adiposo en el 60% de las comprendidas entre el 10 y el 25 percentil (3
alumnas de 5) y en el 45% de las comprendidas entre el 25 y 50 percentil del
IMC (12 alumnas de 26). Ver Gráfico 3.
Se observa además como las alumnas con un IMC/Edad por encima del 50
percentil muestran creciente acúmulo de grasa, resultando que el 45% de las
alumnas entre el 50 y el 75 percentil (14 de 31) y el 100% de las que están
entre el 75 y 90 percentil de IMC/Edad (2 de 2) tienen AG/Edad elevada por
encima del 90 percentil.
El AM y el AG son las áreas corporales más importantes de monitorear en el
ballet, debido a sus cambios constantes resultantes de la rigurosa actividad
física de esta especialidad y el régimen alimentario de los bailarines.xxxiii
La estructura morfológica de los bailarines en general, correlacionada con el
lógico proceso de crecimiento y desarrollo que acontece en las edades de la
adolescencia, momento justo donde ocurren importantes eventos de la
enseñanza técnico-artística, hace que deba ser monitoreada la talla de los
890
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
alumnos de ballet. El inicio de esta enseñanza marca un cambio en el estilo de
vida de los individuos, pues se le incorpora el hábito del entrenamiento diario.
Esto representa un gasto energético diferente a los habituales de grupos de
estudiantes coetáneos de otros regímenes de enseñanza.¡Error!Marcador no definido.
Demandas energéticas excesivas por régimen de actividad física intensa
propician deudas energéticas que afectan el crecimiento y desarrollo humano.
La talla es un elemento morfológico que es condicionada por patrones
genéticos, pero fácilmente vulnerable a factores del entorno del individuo.
Carencias nutrimentales capaces de influir en el equilibrio del Estado
Nutricional, pueden repercutir en la expresión fenotípica del potencial genético
del individuo, mermando la talla final.
En el grupo estudiado se encontraron 3 alumnas de 13 (23%) con baja talla
(menos del 3er p de T/Edad) dentro de las alumnas con IMC/Edad menor al 3er
percentil. En el grupo con IMC/Edad entre el 10 y el 25 percentil se encontró 1
caso de 5 (20%) y en el grupo de IMC/Edad entre 25 y 50 percentil se
encontraron 2 casos de 26 (9%). Ver Gráfico 4.
891
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
En relación con los hábitos de alimentación detectados por las encuestas
realizadas a las alumnas, se pudo ver que el hábito de desayunar está
afectado de forma importante con 5 alumnas de 13 (38,4%) que no desayunan
dentro del grupo de las desnutridas; en las eutróficas no desayunan 34
alumnas de 64 (53,1%). En total en el grupo estudiado (39 de 77) el 50,6 % de
las alumnas no tienen hábito de desayunar. Ver Gráfico 5.
Es reconocido por numerosos autores la importancia de un buen desayuno
para el correcto desempeño escolar y laboral en los humanos. En el ámbito
escolar son inconmesurables las evidencias científicas de la importancia del
desayuno
del
escolar
para
un
adecuado
proceso
de
enseñanza-
aprendizaje.xxxiv ,xxxv
Una buena alimentación comienza con la primera comida del día. La
importancia del desayuno radica en que es la primera ingesta luego de que el
organismo ha estado varias horas sin alimento pues la noche es el período de
ayuno más largo de las 24 horas. El desayuno no debe perturbarse por los
apuros matutinos y lo ideal es hacer de este momento un instante de
intercambio familiar grato, donde se inculque el buen hábito desde edades
tempranas.xxv
892
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
La asimilación de la técnica de la danza exige una buena memoria,
coordinación perfecta y mente ágil.xxxvi Un bailarín además de las condiciones
anatómicas requiere coeficiente intelectual normal y adecuado desarrollo del
sistema nervioso central.
El buen rendimiento físico de los individuos en las jornadas diurnas depende de
un adecuado suministro de energía alimentaria en las primeras horas de la
mañana. Esto es válido para deportistas y bailarines, especialmente si se trata
de deportistas de alto rendimiento y de bailarines de un rigor intenso de
entrenamiento, como son los de la especialidad de ballet clásico.xxxvii
Como otro hábito alimentario explorado está el comportamiento de las
frecuencias de alimentación en las 24 horas del día. En relación a esto, se
encontró que la frecuencia alimentaria donde se realizan las comidas más
abundantes, es la comida de la tarde en la casa, tanto en el grupo de las
alumnas desnutridas (9 de 13, para un 69,2%) como en el caso de las alumnas
eutróficas (57 de 64, para un 89%). Ver Gráfico 6.
El mal hábito de ingerir la mayor carga de energía alimentaria en el horario de
la tarde o nocturno está generalizado en la población cubana, según
referencias de estudios realizados por el Instituto de Nutrición e Higiene de los
893
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Alimentos de Cuba a propósito de la confección de las Guías Alimentarias de la
Población Cubana.xxxviii
Este mal hábito propicia la incorporación al medio interno de considerables
cantidades de energía que al no ser utilizadas o gastadas en el horario
nocturno facilitan la acumulación de reservas energéticas en forma de tejido
adiposo. Este es uno de los factores predisponentes de la presencia de sobre
peso y obesidad en la población general.xxxix
Los estudiantes de ballet como parte integrante de la población incorporan en
sus hábitos de alimentación la costumbre de ingerir la mayor cantidad de
alimentos del día al llegar a sus casas, después de las jornadas diurnas,
elemento contraproducente para mantener un peso adecuado a las exigencias
estéticas de la especialidad.
Otro hábito explorado en la investigación, aborda la costumbre de la ingestión
de frutas y vegetales como alimentos proveedores de vitaminas y minerales,
elementos reguladores de innumerables reacciones bioquímicas en el
organismo vivo.
Con el consumo de frutas y vegetales en cantidades adecuadas se proporciona
al organismo no solo cantidades importantes de vitaminas y minerales, sino
también de fibra dietética y de un grupo de sustancias químicas conocidas con
el nombre genérico de fitoquímicos antioxidantes que contribuyen, de manera
incuestionable, no solo a la prolongación de la vida (retardan el envejecimiento
biológico) sino también al mejoramiento de su calidad.xl,xli
En las encuestas realizadas a las alumnas se constató que la proporción de
ellas que consumen las frutas y vegetales 3 veces por semana o menos (área
verde) es inferior a las alumnas que acostumbran a consumirlas 4 veces por
semanas o más (área naranja). A pesar de esta proporción favorable en
dirección a las que consumen más, se debe señalar que es considerable el
porcentaje de alumnas que consumen frutas y vegetales 3 veces por semana o
menos, porcentaje no satisfactorio para plantear que existe una adecuada y
balanceada alimentación en todas las alumnas. Ver Gráfico 7.
894
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Otro elemento importante que puede estar en relación con este hábito, es que
con el objetivo de lograr una figura esbelta, algunas alumnas practiquen una
dieta totalmente vegetariana, que traería como consecuencias el riego del no
cumplimiento de las recomendaciones de energía y proteínas, indispensables
para la edad de la adolescencia.
Es interesante también conocer cómo es el hábito de ingerir alimentos fritos en
estas alumnas, pues si bien puede ayudar a cubrir los requerimientos
energéticos a las alumnas desnutridas, podría ser perjudicial para aquellas que
deben cuidar su peso para no sobrepasar el 50 percentil de IMC/Edad, límite
superior de este para lograr una figura esbelta y longilínea.
En la exploración de este hábito se encontró que una mayor proporción de
alumnas con Estado Nutricional correspondiente a IMC/Edad en percentiles
inferiores al 50, acostumbran a comer alimentos fritos 3 veces por semana o
menos (área amarillo ocre) y por el contrario, las alumnas con IMC/Edad en
percentiles por encima de 50, comen alimentos fritos 4 veces por semana o
más (área beig).Ver Gráfico 8.
895
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Esta proporción puede guardar relación con el mayor IMC de esas alumnas así
como con el mayor componente graso de sus cuerpos, según se pudo ver en el
análisis del AG en el gráfico 3.
Por último se exploró el hábito de la ingestión de lácteos, por la importancia
que tiene el cumplimiento de las recomendaciones diarias de calcio en la dieta
de los adolescentes, aspecto que se abordó ampliamente en el capítulo 1.xlii,
xliii xliv
,
Con esta exploración pudo comprobarse que la mayor proporción de alumnas
de cualquiera de los grupos establecidos por sus estados nutricionales,
ingieren lácteos 3 veces por semana o menos (área rosada). Ver Gráfico 9.
896
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
Resumen de los resultados obtenidos:
1. Evaluación de Estado Nutricional de las alumnas de 4to y 5to año; entre
ambos grupos hay un 16,8% de desnutridas (13 de 77), con el resto en
estado de eutrofismo. No existen alumnas sobrepeso ni obesas según
los percentiles del IMC/Edad establecidos para la población cubana
normal de esas edades.
2. Dentro de las alumnas clasificadas como eutróficas, el mayor número de
ellas están entre los percentiles 25 y 75 del IMC/Edad.
3. El AM tiene escaso desarrollo (menos del 3er percentil de AM/Edad) en
el 40% de las alumnas desnutridas.
4. El AG está aumentada (más del 90 percentil de AG/Edad) en las
alumnas con Estado Nutricional de más del 50 percentil de IMC/Edad.
5. Existe afectación de la talla para la edad en el 25 % de las alumnas
desnutridas y en el 20 % de las alumnas con Estado Nutricional entre el
10 y el 25 percentil del IMC/Edad (Eutróficas).
6. Se encontraron algunos malos hábitos de alimentación como fueron el
de no desayunar, el de realizar la comida más abundante del día en el
897
Cosette Mª Rodríguez Marcos. Trastornos de la Conducta Alimentaria 7 (2008) 870-902
horario de la noche, el de comer alimentos fritos con frecuencia y el de
no ingerir lácteos como fuente de calcio para cubrir las recomendaciones
diarias de este nutrimento.
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