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CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACIÓN FLOREAL GORINI I ENCUENTRO HACIA UNA PEDAGOGÍA EMANCIPATORIA EN NUESTRA AMÉRICA DIRECTORES DE LA PUBLICACIÓN: PABLO IMEN PABLO FRISCH NATALIA STOPPANI Publicación Anual - Nº 1 ISSN: 2347-016X Título de la publicación: I Encuentro hacia una Pedagogía Emancipatoria en Nuestra América Directores de la publicación: Pablo Imen, Pablo Frisch, Natalia Stoppani Título del artículo: "Área cooperativismo en contextos de encierro y liberados (accel)" Autor/es del artículo: Feecotra y Cooperativa de Trabajo Kbrones. Director del Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini: Prof. Juan Carlos Junio Subdirector: Ing. Horacio López Director Artístico: Juano Villafañe Secretario de Ediciones y Biblioteca: Jorge C. Testero Secretario de Investigaciones: Pablo Imen Secretario de Comunicaciones: Luis Pablo Giniger Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini Av. Corrientes 1543 (C1042AAB) - Ciudad de Buenos Aires - [011]-5077-8000 www.centrocultural.coop De los autores. ÁREA COOPERATIVISMO EN CONTEXTOS DE ENCIERRO Y LIBERADOS (ACCEL) El ACCEL se crea en el año 2011 para dar respuestas concretas a las inmensas necesidades de igualdad de oportunidades y de dignidad humana y laboral que tienen los internos de las Unidades penales de la República Argentina. Surge a partir del trabajo realizado, desde el año 2009, por FECOOTRA y la Asociación de Operadores en Psicología Social, en la Unidad 12 de Gorina. Este resultó en la constitución de la Cooperativa de Trabajo Kbrones limitada. Esta experiencia fue la 1ª Cooperativa constituida dentro de una unidad penal en la República Argentina y la 2ª en Latinoamérica. Desde el ACCEL se sistematizó la experiencia de la constitución de la cooperativa Kbrones y se elaboró un proyecto de intervención profesional que utiliza al modelo cooperativo como una alternativa de reinserción económico-social de las personas privadas de su libertad y liberados (PPLyL). Con ello se busca disminuir los índices de reincidencia al delito y contribuir de esta manera a mejorar la situación de inseguridad en la que vivimos todos los argentinos. “La salida cooperativa” Proyecto de Intervención Profesional de promoción de cooperativas para personas privadas de su libertad y liberados Las personas alojadas en las unidades penitenciarias configuran uno de los tantos grupos sociales vulnerables de la población. La privación de la libertad, se constituye finalmente en un estigma indeleble ante las posibilidades de reinserción social y laboral del sujeto al finalizar su condena. Nos guía el deseo de ser parte de una sociedad comprometida con las necesidades de las personas que se encuentran en contextos de encierro y el deseo del cumplimiento de las leyes y pactos internacionales en este complejo tema. Partimos de la premisa de que las personas privadas de libertad debieran gozar de todos los derechos reconocidos para ellas en los instrumentos nacionales e internacionales sobre derechos humanos. Esto alienta nuestra intervención de trabajar con herramientas que potencien su autoestima y faciliten tomar conciencia de su vida en prisión, de los costos individuales, familiares y sociales. Nos entusiasma la posibilidad de generar en ellos una alternativa que les permita desarrollar herramientas que faciliten su inserción social con el propósito de bajar el índice de reincidencia al delito. Con el objeto de que la sanción penal que recae en las personas que delinquen, tenga manifiesta utilidad, y en procura de utilizar nuestros conocimientos y experiencias profesionales para coadyuvar con las políticas públicas tendientes a mejorar esta situación, es que consideramos fundamental generar en ellos herramientas necesarias para el desarrollo de su vida en libertad y evitar la reincidencia en conductas delictivas. El proceso de reinserción social y económica logrado a partir de la constitución de la 1º cooperativa en contextos de Encierro en Argentina y la 2º en Latinoamérica, Cooperativa de Trabajo Kbrones Ltda. de la Unidad 12 de Gorina, nos posibilita pensar que este modelo y esta forma organizativa es una alternativa viable para la inserción al medio libre, basada en los valores y principios del cooperativismo. Nuestra formación nos orienta a que seamos facilitadores de propuestas e iniciativas planteadas por los internos y que colaboremos en su ejecución, fomentando que sean ellos agentes de cambio tanto de su situación dentro de la Unidad como en su vida personal. Nos encontramos a su vez proponiendo realizar la intervención dentro del esquema y normas del Servicio Penitenciario por lo que se hace necesario y además corresponde compaginar nuestro hacer con las autoridades respectivas, entendiendo que podemos contribuir al fortalecimiento de la dignidad humana de los actores intervinientes y al estímulo de actitudes solidarias inherentes a su condición de ser social, a partir de la satisfacción de sus necesidades y del desarrollo de sus potencialidades individuales como colectivas, siendo este un aporte importante para todos como sociedad. Es así que se impulsa la participación de los estamentos comunitarios en el proceso de reinserción social del detenido, con el objeto de generar redes sociales suficientes que permitan mantener vivos los lazos con la comunidad y de facilitar su futura integración social, laboral, educativa y familiar. Promovemos con nuestro hacer que las personas privadas de libertad tengan efectivas oportunidades de trabajo productivo, que les permita ingresar al mercado laboral y mejorar sus condiciones socioeconómicas y las de su familia. Entendemos entonces que el modelo cooperativo es una alternativa viable para la reinserción social de las personas privadas de su libertad, y que está demostrando resultados positivos, tanto en empresas recuperadas, como en aquellas impulsadas desde el estado, insertando a las personas al trabajo y a la autogestión. En este sentido, el proyecto de Intervención Profesional “La salida Cooperativa”, pretende trabajar con la población carcelaria y los liberados, para que durante su vida en contexto de encierro y luego ya en libertad, quienes quieren darse una oportunidad para reeducarse y vivir en sociedad, puedan hacerlo. El PIP propone promocionar y facilitar la constitución de cooperativas en contexto de encierro. Nuestros resultados esperados son: - La obtención de cambios favorables en la subjetividad de los internos. - Alcanzar una capacitación de los internos en los valores, principios y modo de gestión cooperativa, como la democracia, la solidaridad, la igualdad y la responsabilidad. - Lograr la construcción de una oportunidad de trabajo genuina para los internos dentro y fuera del penal. - Lograr que los internos ejerzan su derecho al trabajo en contexto de encierro. - Propiciar la disminución de la reincidencia delictiva de los beneficiarios del programa. - Fomentar la concientización de esta problemática a nivel social. - Propiciar que distintos estamentos del Estado promocionen y apoyen este tipo de iniciativas. Existen muchísimos emprendimientos dentro de las unidades carcelarias que ayudan a aminorar el conflicto entre internos y a mejorar su vida presidiaria. La intervención profesional pretende formalizar estos emprendimiento a través de la constitución de cooperativas. A partir de allí demostrar que el cooperativismo es una alternativa viable para la generación de empleo genuino para la población carcelaria y los liberados. No existe reinserción social sin educación y trabajo, por ello se está convencido de que el cooperativismo puede realizar un gran aporte como alternativa para la vida en libertad de los presidiarios. Las cooperativas a lo largo de la historia han logrado a través de la educación, adaptarse y resolver problemas económicos y sociales en diferentes contextos y bajo distintas circunstancias. La intervención utiliza la educación cooperativa como herramienta principal para cambiar la subjetividad del grupo de internos beneficiarios, y como generadora de herramientas, que les permitan administrar una empresa basada en valores y principios cooperativos. La metodología de trabajo se divide en tres etapas: Etapa de Formación, Etapa de Constitución de la cooperativa, Etapa de puesta en marcha de la empresa. Se prevé que el tiempo de ejecución del PIP es de 8 meses, para lo cual se cuenta con un equipo de profesionales (Técnico en cooperativas, Operador Psicosocial, Abogado) y el apoyo de una institución con más de 25 años de trayectoria en el Cooperativismo de Trabajo Argentino (Fecootra).