Download La Inmutabilidad de la Ley Moral

Josef Urban
Panorama del Antiguo Testamento - I
Lección XII
 La Inmutabilidad de la Ley Moral de Dios
En toda la Historia de la Redención
La Ley es esencialmente igual en todos los pactos y épocas bíblicos. La teología del nuevo pacto
critica mucho la división Tripartita de la ley, su argumento es por ejemplo, que en el mandato de “amaras
a tu prójimo como a ti mismo” en Levíticos, se encuentra rodeado de aspectos ceremoniales en los
versículos siguientes, todos los aspectos están revueltos y juntos. Argumentan que la misma ley mosaica
no distingue entre lo que es en esencia moral y lo que es en esencia ceremonial. Además que los
aspectos ceremoniales de la ley para el israelita bajo el antiguo pacto eran mandamientos morales para
ellos. Por ejemplo, si comieran cerdo, estarían pecando moralmente delante de Dios, aunque esa es una
ley ceremonial, pero ellos dirían que para ellos era moral. Y argumentan que la división entre lo moral y
ceremonial es una división artificial que se impone sobre el texto de la escritura y no se extrae del texto.
Argumentan que hay que hacer una exegesis con un método teológico correcto y no imponer nuestra
teología sistemática sobre el texto.
Estamos de acuerdo que para el israelita era una transgresión moral violar los aspectos ceremoniales
de la ley. Pero ellos argumentan eso a fin de luego argumentar que no podemos decir que el decálogo
sigue siendo el estándar de justicia para todo tiempo. Dicen que el decálogo aunque sea mayormente
moral en naturaleza, pasó con el pacto mosaico, juntamente con los aspectos ceremoniales, porque todo
va junto como una unidad, y no puedes extraer unas cosas y mantener otras cosas del pacto mosaico.
Estamos de acuerdo con algunas afirmaciones, pero no estamos de acuerdo con la negación de la
distinción entre los tres aspectos de la ley. No estamos de acuerdo en su negación del decálogo como la
revelación de la justicia inmutable y perfecta de Dios, como el resumen de la esencia de la ley moral.
Distinción entre los aspectos Morales y los aspectos Ceremoniales de la Ley
1 S 15:22 “Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se
obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar
atención que la grosura de los carneros” – Samuel reprende al rey Saúl, Samuel distingue precisamente
entre lo que es moral en esencia de la ley y lo que es ceremonial en esencia de la ley. La misma ley
contenía mandatos que eran morales en naturaleza y la misma ley contenía ordenanzas de sacrificios.
Saúl desobedece el mandato de Dios y trata de obedecer por medio de ofrecer sacrificios. Bajo el mismo
pacto mosaico, Samuel dice que hay algunos mandamientos que son más importantes, pesados,
permanentes que otros mandamientos de la misma ley.
Sal 51:16-17 “Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; No quieres holocausto. Los sacrificios de
Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios” – En el
contexto, David cometió adulterio y asesinó. En su quebrantamiento, humillación en arrepentimiento
delante de Dios y obedecerlo en verdad, distingue claramente entre aspectos ceremoniales de la ley.
Pr 21:3 “Hacer justicia y juicio es a Jehová Más agradable que sacrificio” – el sacrificio en el contexto
se refiere a los aspectos ceremoniales de la ley, está hablando bajo el pacto mosaico. Es más agradable
obedecer los aspectos morales, la justicia de la ley que los aspectos ceremoniales.
Mi 6:6-8 “¿Con qué me presentaré ante Jehová, y adoraré al Dios Altísimo? ¿Me presentaré ante él
con holocaustos, con becerros de un año? ¿Se agradará Jehová de millares de carneros, o de diez mil
arroyos de aceite? ¿Daré mi primogénito por mi rebelión, el fruto de mis entrañas por el pecado de mi
alma? Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia,
y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios” – claramente distingue entre los que es ceremonial y lo
que es moralmente justo en cuanto a su esencia.
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1 Co 7:19 “La circuncisión nada es, y la incircuncisión nada es, sino el guardar los mandamientos de
Dios” – distingue claramente entre lo que es ceremonial en naturaleza (circuncisión) y lo que es moral en
naturaleza, es decir, los mandamientos que reflejan la justicia inmutable de Dios. La misma biblia enseña
que existe una distinción lógica allí entre los diferentes aspectos de la ley. Enseña que los aspectos
ceremoniales de la ley mosaica son cumplidos y abolidos en Cristo.
Col 2:16-17 “Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna
nueva o días de reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo” – los
aspectos ceremoniales de la ley tenían un significado tipológico en naturaleza que ahora se cumple en
Cristo. Y esas cosas ceremoniales de la ley ya no son vigentes para nosotros, ya que estamos en Cristo,
tenemos el cuerpo, la plenitud, la sustancia que es Cristo mismo.
Ro 14:14 “Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que
piensa que algo es inmundo, para él lo es” – nada es inmundo en sí mismo, todos los aspectos
ceremoniales de comidas ahora son cumplidos, ya no son vigentes para el creyente. El mismo N.T.
enseña que los aspectos ceremoniales de la ley ya no son vigentes Y aunque la biblia también revoca
los distintivos teocráticos de la ley, que tenían que ver con el gobierno de la nación de Israel bajo el
antiguo pacto, es evidente que no pueden ser vigentes si la nación no existe como una nación pactual de
Dios bajo el pacto mosaico si este no existe, entonces esas leyes ya no aplican. Aunque revoque los
aspectos ceremoniales y teocráticos de la ley, jamás revoca, anula los aspectos morales de la ley. Es
decir, la ley prohíbe mentir, robar, asesinar, adulterar y el N.T. jamás revoca esos mandatos, enseña que
todavía son vigentes para nosotros.
Los aspectos morales de la ley no se anulan, son vigentes. El dispensacionalismo y la teología del
nuevo pacto han argumentado que solo lo que se repite en el N.T. de la ley mosaica es vigente para el
creyente. La teología del pacto mantiene la postura que todo es vigente y obligatorio de la ley mosaica a
menos que se revoque en el N.T. y esa revocación puede ser explícita o implícita.
La postura Reformada Histórica es la correcta en cuanto a la ley.
Ro 15:4 “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de
que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza” – las escrituras del A.T.
son para el cristiano que está bajo el nuevo pacto, fueron escritas para nuestra esperanza e instrucción.
Entonces, implícitamente se sugiere que hay continuidad a menos que haya una enseñanza que los
revoque en el N.T.
2 Ti 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia” – para instruir en justicia, justicia moral. Las escrituras del A.T. nos instruyen en
cuanto a lo que es moral en naturaleza, lo que es justo, bueno, correcto en cuanto a nuestra ética como
creyentes.
Lo ceremonial se cumple, lo teocrático pasó con la nación de Israel, lo moral permanece.
Ley Natural – ley moral, escrita en el corazón del hombre en el principio, parte de la revelación natural
y general. Se contiene en el mismo testimonio de la conciencia.
Ley Positiva – para conocerla es necesario recibir revelación especial. La ley ceremonial es positiva.
Por ejemplo, en Edén, parte de ser hecho a la imagen de Dios, es ser hecho en justicia, teniendo en el
corazón el testimonio de la misma justicia de Dios, la obra de la ley escrita en el corazón (Ro 2:15), pero
hay otro mandamiento que se agrega allí, que no es un mandamiento para nosotros. Era un
mandamiento positivo que Dios agregó a la ley natural, moral que escribió en el corazón humano. Adán
necesitaba la revelación especial para saber que era malo comer del fruto prohibido, esa no estaba
escrita en su corazón.
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En el pacto mosaico, la ley ceremonial es positiva, no es moral de naturaleza, no es parte de la
esencia inmutable de la justicia perfecta de Dios. Hay un corazón de la ley moral en el pacto mosaico, y
se agrega alrededor de ese corazón, de ese núcleo, muchos mandamientos positivos. Pero la esencia
del núcleo es igual a lo que fue escrito en el corazón de Adán. Y esa esencia sigue igual en el nuevo
pacto, porque esa esencia no puede cambiar. Si Dios es inmutable y justo, eso quiere decir que su
estándar de justicia es inmutable, y su ley es su estándar de justicia y por lo tanto su ley moral no puede
cambiar.
El nuevo pacto no consiste solo de la ley natural, también hay mandamientos positivos como la cena
del Señor y el bautismo, y sabemos que son mandamientos porque la ley está escrita en nuestros
corazones, aunque no haya un versículo que lo determine como tal. Es sentido común y obvio y parte de
la revelación natural.
En cuanto a entender la estructura de la revelación progresiva, la continuidad de la ley de Dios, es
absolutamente necesario distinguir entre lo que es Ley Moral y Ley Positiva.
Según la teología del nuevo pacto, los diez mandamientos son únicos al pacto mosaico y ya no son
vigentes. Pero estos trascienden al pacto mosaico, eran vigentes antes de que se estableciera el pacto
mosaico y son vigentes para el día de hoy en cuanto a su esencia moral. Representan el resumen de la
esencia moral de la ley de Dios, su justicia inmutable, su ley perfecta.
El Decálogo Trasciende al Pacto Mosaico
En el contexto de su promulgación original, los diez mandamientos son tratados como una unidad
distinta, que se distingue del resto del pacto mosaico. El decálogo fue dado como parte del pacto
mosaico, pero por su manera de ser dado y revelado lo distingue de resto del pacto mosaico. A
diferencia del resto de los estatutos del pacto mosaico, los diez mandamientos son anunciados por la voz
de Dios, escritos por el dedo de Dios y son guardados por el mandato claro de Dios en el arca del pacto.
Anunciados por la voz de Dios – Ex 20, Dios con poder habló desde el cielo el contenido de los diez
mandamientos. En cuanto al resto de todo lo que se contenía en la Torá, que fue dado por medio de
Moisés, Dios no lo habló en voz alta. Los diez mandamientos proceden de Dios sin un mediador humano,
lo cual es una revelación de la esencia moral, de la justicia inmutable de Dios mismo.
Escritos por el dedo de Dios – en dos tablas de piedra, un antropormosismo, Dios no tiene dedos
literalmente. Ex 31:18 y eso no fue el caso con el resto de la ley, Moisés escribió el resto. Esto implica
que el decálogo es una expresión de la justicia inmutable de Dios y no solo una parte circunstancial de
una administración temporal.
Guardados por el mandamiento de Dios - el arca del pacto representa el trono de Dios, el lugar del
reinado de Dios, el Sal 89:14 declara ”Justicia y juicio son el cimiento de tu trono; Misericordia y verdad
van delante de tu rostro”; Dios se sienta sobre la justicia y el juicio figurativamente, pero forman la base
de todo lo que Dios hace. Todo eso es una sombra, el decálogo, la justicia, la ley del decálogo es el
resumen de la justicia inmutable de Dios sobre la cual Él fundamenta su trono. El decálogo representa su
justicia inmutable.
Jer 31:33 “Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová:
Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por
pueblo” (comp. Ex 31:18) – pasaje clave que explícitamente nos habla entre la continuidad de la ley y el
nuevo pacto. Dios escribe la ley, por su obra directa en el corazón del creyente. La implicación clara es
que la esencia de lo que él escribe en el corazón del creyente es precisamente igual a lo que había
escrito con su dedo antes. Y no se refiere a todos los mandamientos positivos de la ley mosaica. La ley a
que se refiere es la ley moral, y la ley moral se define aquí por implicación en términos del decálogo. Su
pueblo en el nuevo pacto va a guardar lo que su pueblo externo no guardó en el antiguo pacto, tiene que
ser la misma cosa para que la profecía tenga sentido.
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2 Co 3:2-3 “Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas y leídas por
todos los hombres; siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta,
sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón” – una
referencia directa a Jeremías 31 y Ezequiel 36, en “tablas” de carne del corazón, usa tablas para que
reconozcamos que la esencia de lo que es escrito en el corazón del creyente es igual a lo que fue escrito
en las tablas de piedra, el decálogo. La ley moral que se reveló en el decálogo trasciende el pacto
mosaico y sigue siendo vigente en el nuevo pacto.
Ro 2:12 “Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la
ley han pecado, por la ley serán juzgados” – donde no hay ley no se inculpa de pecado (Ro 5:13), si no
hay ley ninguna ley, el pecado no puede existir, el pecado es infracción de la ley (1 Jn 3:4), de alguna ley
por lo menos. Entonces, no está diciendo que los gentiles no tienen ley, está diciendo que no tienen “la
ley”, y la ley es el decálogo porque distingue entre los que no tienen la ley, los gentiles y los que tienen la
ley, los judíos.
Ro 2:14-15 “Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley,
éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos, mostrando la obra de la ley escrita en sus
corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos” – es
evidente que todos los gentiles han tenido muchas leyes, no es que no tengan ley, no tienen “la ley” del
judío dada en Sinaí. Pablo dice “obras de la ley” para distinguir aquí lo que dice la profecía de Jeremías
31. En la regeneración “la ley” es escrita en nuestros corazones. Por la creación, la “obra” de la ley es
escrita en nuestros corazones, la esencia moral de la ley que es escrita en el corazón de todo ser
humano, porque todos somos descendientes de Adán, seres humanos hechos a la imagen de Dios.
Ro 2:17, 18, 20 “He aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios,
y conoces su voluntad, e instruido por la ley apruebas lo mejor… instructor de los indoctos, maestro de
niños, que tienes en la ley la forma de la ciencia y de la verdad” – los tres usos de la ley en estos
versículos son los más cercanos al contexto del versículo 14, y en cada uno de esos usos se refiere a la
ley que fue dada a los judíos, pero él dice que los gentiles tienen la obra de la misma ley escrita en sus
corazones. ¿A qué se refiere? Ningún ser humano tiene escrito en su corazón que no puede usar ropa
que consiste de dos diferentes tipos de tela. Por lo tanto, no puede ser la totalidad de todas las leyes
positivas que fueron dadas a Moisés las que se escribieron en los corazones de todo hombre. La otra
opción es el decálogo y hay más evidencia explicita en el contexto que nos muestra esto. Por ejemplo,
en v21 hurtaras – 8º mandamiento; en v22 adulteras – 7º mandamiento; ídolos – 2º mandamiento; en v24
er
blasfemar el nombre de Dios – 3 mandamiento. En este contexto se está refiriendo a la ley del decálogo,
la obra de la cual está escrita en el corazón de cada ser humano.
Ro 3:19 “Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda
boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios” – todo el mundo refiriéndose a todo ser
humano, a todos los hombres, la ley que fue dada a los judíos condena la pecaminosidad de los judíos y
gentiles aunque los gentiles no están bajo el pacto mosaico, porque el decálogo trasciende el pacto
mosaico y la esencia moral del decálogo está escrita en el corazón del todo gentil.
Ro 7:7 “¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado
sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás” – Pablo se refiere
al decálogo: no codiciaras – 10º mandamiento
Ro 7:12-14 “De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno.
¿Luego lo que es bueno, vino a ser muerte para mí? En ninguna manera; sino que el pecado, para
mostrarse pecado, produjo en mí la muerte por medio de lo que es bueno, a fin de que por el
mandamiento el pecado llegase a ser sobremanera pecaminoso. Porque sabemos que la ley es espiritual;
mas yo soy carnal, vendido al pecado” – la culpa no es de la ley, la culpa es del pecado. Dios es Santo,
Justo y Bueno, el mandamiento no codiciaras que es parte del decálogo, es santo, justo y bueno. Hay
continuidad allí entre la esencia de la justicia de Dios y la revelación del decálogo, y es la misma ley que
condena el pecado en el apóstol. Es evidente que se refiere, no a la totalidad de la ley mosaica, sino al
decálogo como una unidad.
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Así que, por Romanos 2 vemos que la misma ley dad a Adán en Edén, es la misma ley que fue dada
en Sinaí y es la misma ley de Romanos 7 que aplica al apóstol Pablo como creyente.
Continuidad de la ley
La ley escrita en el
corazón de Adán
Continuidad
La ley dada en el
monte Sinaí
Continuidad
La ley escrita en
el corazón
Edén
Continuidad
Nuevo Pacto
Época
Adán – Moisés
Romanos 2
Ley Moral Vigente
Época
Moisés - Jesucristo
Éxodo 20
Ley Moral Vigente
Época
Cristo - Eternidad
Jeremías 31
Ley Moral Vigente
(hay un cambio de pacto, pero la
ley moral sigue vigente)
Ro 13:8-10 “No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha
cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás,
y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El
amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor” – amar a nuestro prójimo no
es una nueva ley, se encuentra en Levítico (Lv 19:18) y los mismos escribas no regenerados sabían esto.
Pero Pablo habla de la ley y luego define la ley en términos del decálogo comenzando a citar la segunda
tabla de los mandamientos del decálogo. La obra de la ley escrita en el corazón de todo ser humano, es
la misma ley que fue dada a los judíos en Sinaí, y si esta ley excluye los aspectos ceremoniales del
pacto mosaico, y si esta ley (obvia) es la esencia moral de la ley que se resume en el decálogo, entonces
la obra de la ley escrita en todos los gentiles es la esencia de lo que se contiene en el mismo decálogo y
por consiguiente el decálogo trasciende el pacto mosaico y era vigente desde antes de que se diera
formalmente en Sinaí y sigue siendo vigente.
Ro 3:31 “¿Luego por la fe invalidamos la ley? En ninguna manera, sino que confirmamos la ley” –
establecemos la ley, no anulamos o abrogamos la ley, confirmamos la importancia de la ley (que es justa,
santa y buena).
Ro 8:3-4 “Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a
su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; para
que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al
Espíritu” – el hecho de que la justicia de Cristo nos sea imputada, eso no nos quita la responsabilidad de
obedecer a Dios y glorificarle por medio de hacer lo que es agradable a él. Pablo habla de andar en el
Espíritu y no andar en el pecado, habla de la santificación, practica, ética moral del creyente, de la
justicia real y practica en la que el creyente anda por el Espíritu de Dios. La manera en la que la justicia
de la ley se cumple en nosotros es por medio de andar en obediencia a la ley como un estilo de vida,
como una práctica en nuestras vidas.
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Ef 4:28 “El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para
que tenga qué compartir con el que padece necesidad” – a partir del capítulo 4 Pablo comienza a
exhortar al creyente en cuanto a su ética. El sentido común nos enseña que si Dios aborrece que uno
hurte, entonces lo que le agrada es que uno sea generoso. Lo explicito es la prohibición, lo implícito es lo
contrario.
Ef 6:1-3 “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu
madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la
tierra” – en el Señor porque está hablando a familias e hijos creyentes. Pablo cita el decálogo tal cual,
toma el 5º mandamiento y lo lleva a aplicaciones directas al creyente, exhorta la ética del creyente como
una guía de su ética, el tercer uso de la ley.
1 Ti 1:8-11 “Pero sabemos que la ley es buena, si uno la usa legítimamente; conociendo esto, que la
ley no fue dada para el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores,
para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los fornicarios,
para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a
la sana doctrina, según el glorioso evangelio del Dios bendito, que a mí me ha sido encomendado” –
Pablo da referencia al decálogo, la ley no es contra el evangelio en cuanto a contradicción, la ley
reprende lo que el mismo evangelio reprende. El evangelio no da lugar al antinomianismo sino lo
condena. (Otros ejemplos como en Stg 2:8-12)
¿Qué hacemos con el sermón del Monte?
Oíste que fue dicho… pero yo os digo. Algunos dicen que la frase “yo os digo” implica que Jesús
cambia la ley, introduciendo una nueva ley, la ley de Cristo. Pero es la misma ley Mt 5:17, no he venido
para abrogar la ley o los profetas, sino para cumplir. La palabra griega por cumplir [pleroo] se usa en Ro
8:4 “para cumplir la justicia de la ley”. Jesús no cambia la ley o introduce nueva ley, ojo por ojo, ellos mal
interpretaban la ley mosaica para justificar su pecado y Cristo refuta sus malas interpretaciones
enseñando lo que siempre era justo, santo, bueno y perfecto incluso bajo la administración mosaica.
Moisés jamás dio al judío la justificación de vengarse personalmente, eso se refiere a justicia civil, si
alguien hacía daño a una propiedad tenía que pagar lo equivalente, ojo por ojo, si alguien cometía un
crimen tenía que hacer restitución, es parte de la teocracia de la nación de Israel. Jamás se refiere a la
venganza personal, Moisés prohíbe la venganza personal, dice “no guardaras rencor contra tu prójimo”.
Jesús da la verdadera interpretación de la ley, la correcta.
Importancia de la Inmutabilidad de la Justicia de la Ley Moral de Dios que Trasciende el mismo
Pacto Mosaico
1. Para entender todo el contexto de la estructura de la biblia.
2. Afecta el evangelismo bíblico que expone la ley, usa la ley para despertar al pecador (primer uso de
la ley) a su necesidad de la gracia de Cristo.
3. Para exhortar a la iglesia como Pablo en Efesios usando la ley.
4. Relación del A.T. con el creyente bajo el N.T., Lv 18 ¿no nos aplica? ¿para otro pueblo y pacto?
5. Puede afectar la doctrina del pecado, si no hay una ley absoluta ¿Qué es el pecado entonces, de
que reprendemos al impío sino es una infracción de la ley? ¿una falta de amor y nada más?
6. Afecta la doctrina del juicio final, si no hay un estándar de juicio.
7. Afecta los atributos de Dios
8. Afecta la naturaleza orgánica de la revelación progresiva, discontinuidad entre Moisés y Cristo.
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9. Afecta la doctrina de la expiación. Ga 4:4-5; 3:13 ¿Cuál es la ley que Cristo vivió para cumplir, cuál
es la ley que Cristo murió para satisfacer? Cristo redimió a gentiles de la maldición de la ley (gálatas
gentiles).
10. Afecta la doctrina de la justificación., porque Dios nos perdona y nos imputa con la justicia positiva y
perfecta de Cristo cuando creemos en el evangelio. La justicia positiva viene de la obediencia vicaria
de Cristo en nuestro lugar por medio de su vida irreprensible y moralmente perfecta, obediente a
toda la ley de Dios. Ahora Dios nos trata como si nosotros hubiéramos guardado la ley
perfectamente porque estamos en Cristo y él la guardó perfectamente en nuestro lugar.
Dios es santo y justo y tiene una ley que todos han violado, y esa ley no cambia pero Cristo la guardó y
ahora dice que si lo amamos a él la guardaremos. En la ley hay elementos tipológicos y elementos
morales que permanecen, los elementos tipológicos se cumplen en Cristo y los elementos morales
permanecen.
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