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Solución a
los
verdaderos
problemas
Hagamos un milagro por el
aire
Impacto de la
contaminación atmosférica
y el cambio climático en
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los recursos naturales
[¿cómo se relacionan la
deforestación con la
contaminación atmosférica
y el cambio climático?]
IMPACTO DE LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA Y EL CAMBIO CLIMÁTICO EN
LOS RECURSOS NATURALES
SI.MON Vo.Bo.
Actualmente se sabe que los bosques constituyen una parte importante de nuestro
planeta, ya que capturan el bióxido de carbono, que es la principal emisión de gas dentro
de la contaminación ambiental, además de oxigenar el ambiente.
México se ha transformado rápidamente en un país predominantemente urbano, por lo
que los efectos del cambio climático son particularmente visibles.
Uno de los pocos materiales auténticamente renovables y con capacidad de almacenar
carbono es la madera de árboles. Sumado al hecho de que existen poblaciones que viven
de la producción de materiales como harina de algarrobo, goma y miel orgánica que
provienen del bosque, la deforestación constituye actualmente un problema serio.
Factores como la escasez de agua, las lluvias impredecibles y la degradación de la tierra,
han interrumpido el crecimiento de los ecosistemas forestales. Existe también el hecho de
que cada año se desmontan 230 000 hectáreas de bosques nativos. Cabe destacar
también que el ozono a nivel del suelo y la deposición de sustancias químicas reduce el
crecimiento de los árboles y causa desequilibrios en sus nutrientes. Todo esto en conjunto
hace que el desarrollo de los bosques se vea fuertemente afectado y su extensión
disminuida en grandes cantidades.
En lo que respecta al efecto invernadero, este se ve acrecentado por el aumento de la
temperatura global del planeta, que a su vez es causado por la emisión de gases
producidos por la actividad humana. El bióxido de carbono, el gas más producido en este
proceso, es generado principalmente por el sector energético, además de otros tipos de
gases con efecto invernadero. Si bien es cierto que gran parte de la emisión de gases es
causada por la industria, una porción considerable está directamente relacionada con
nuestras actividades cotidianas.
La quema de leña, gas o gasolina, el uso de combustible, el uso irresponsable de la
energía eléctrica y el agua e incluso, la forma en que cocinamos nuestros alimentos,
tienen un impacto sobre la contaminación atmosférica. También puede incluirse la
producción de electricidad, ya que un alto porcentaje de ésta se genera a partir de
hidrocarburos como el petróleo, el carbón y el gas natural. Por último, pero no por eso
menos importante, está el problema de la disposición final de la basura, que lanza metano
hacia la atmósfera.
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La problemática del cambio climático ha sido estudiada por diferentes disciplinas, incluida
la ecología y la ordenación forestal, debido a que cada vez tenemos climas más extremos,
como lluvias intensas, huracanes de mayor magnitud, ondas cálidas y frías etc. En los
bosques boreales templados la cubierta de nieve se ha reducido y las nieves se derriten
antes de tiempo, ya que las heladas son más cortas; mientras que en los forestales
tropicales experimentan temperaturas más altas y fenómenos extremos de ciclones como
El Niño, también se ha incrementado el nivel de salinidad en los manglares y
ecosistemas similares.
La deforestación es un hecho crítico: si desaparecieran todos los árboles de la faz de la
tierra, no habría más generadores de oxígeno, por consecuencia inmediata morirían todos
los humanos y seres vivos que lo respiran. Incluso si sobrevivieran sin oxígeno, la falta de
árboles y los productos derivados de estos, afectarían el mercado mundial por completo y
el mundo entraría en crisis.
También hay que tomar en cuenta que existen miles de especies que tienen su hogar
dentro de los ecosistemas forestales, arrebatarles eso, sería como quitarles la vida.
La contaminación atmosférica es causada principalmente por nosotros, los humanos,
quienes usamos productos como los desodorantes antitranspirantes, o combustibles
altamente contaminantes que dañan la capa de ozono. Uno cree que la simple acción
propia no cambiará nada, pero si todos fueran concientes del daño que le hacen a su
planeta, las cosas serían muy diferentes. Cada uno debe considerar las acciones, tal vez
pequeñas, pero al final siempre cuentan para la mejora del fatal estado en que se
encuentra el día de hoy la Tierra.
Aunque el cambio climático es un asunto verdaderamente preocupante, los humanos no
cargamos en su totalidad con la responsabilidad, estudios científicos han demostrado que
en otras ocasiones, antes de que el humano apareciera en la tierra, se dieron cambios
radicales en la temperatura del planeta. Un ejemplo de estos cambios son las
glaciaciones, etapas en las que la temperatura global de la Tierra descendió
considerablemente, lo que causó que el hielo continental de los casquetes polares y los
glaciares se expandiera. Esto podría estar sucediendo en la actualidad, pero hay que
recordar que en las ocasiones anteriores, hubo una gran depuración de especies, muchas
de las cuales se extinguieron debido a un clima al que no estaban acostumbrados, eso
podría sucederle al hombre. Existe una pequeña diferencia, ya que el hombre posee una
mente maravillosa, capaz de pensar y crear artefactos tecnológicos que esta vez nos
podrían salvar de las altas o bajas temperaturas que el cambio climático traería.
Todos los aspectos antes mencionados se relacionan entre sí, uno depende del otro, y se
afectan mutuamente: si hay contaminación atmosférica y deforestación se agrava el
cambio climático por lo cual debemos tomar en cuenta, que al tirar basura, disminuye la
cantidad de árboles y que pocos de ellos llegarán a su etapa madura, para seguir
reproduciéndose.
Ante tal panorama sería importante que la población en general empezara a preocuparse
por su entorno, tal vez ahora no se note tanto el cambio, pero en unas décadas más, el
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cambio de los paisajes y ecosistemas será algo verdaderamente notable y no sólo
afectará el hecho de cómo se vea el planeta, sino también afectará aspectos de la
sociedad como la economía.
En fin, no es demasiado tarde, si empezamos desde ahora a trabajar en soluciones que
ayuden al medio ambiente a tener una recuperación, aún podemos detener el daño que
estamos causado.
1.- Debe considerarse a los bosques materia esencial para la mitigación del cambio
climático y sin duda, debido a la situación actual, es necesario la creación de grupos que
trabajen en las mejoras, se ha empezado a trabajar en esto, y se han creado algunos
grupos, un gran ejemplo es la Primera Conferencia Mundial sobre el Clima realizada en
Estocolmo en 1979, pero si realmente queremos un cambio, se debe poner más
disposición y trabajo de nuestra parte y sobre todo hacerlo ya, antes de que estalle un
episodio de crisis.
2.- Podemos comenzar desde lo más simple, desde nuestro hogar, con el cuidado del
agua, sería ideal que se modificaran nuestras costumbres, un ejemplo podría ser cerrar la
llave mientras te enjabonas al bañarte, o revisar con más frecuencia las tuberías de tu
casa, también se podrían colocar accesorios ahorradores de agua entre otras muchas
posibilidades. Existe el colector solar plano, es un dispositivo que al exponerse a la
radiación solar, transmite calor a otros fluidos, artefactos como este reducirían el uso de
hidrocarburos como el gas.
3.- La deforestación podría controlarse iniciando un plan de ordenación, en el que los
productos derivados de los árboles fueran cada vez menos esenciales y por consecuente,
menos explotados. En algunos países, se mantiene un seguimiento del crecimiento de los
árboles y de la situación del bosque, acción que debería ser imitada por todos los países.
4.- Debido a que los productos madereros son reciclables, se podrían utilizar al término de
su ciclo vital como energético para producir bioenergía, causando que su demanda sea
aún menor, dándole más uso a la misma cantidad de producto.
5.- Si se limitara la producción mundial de CO2 que termina en la atmósfera, ayudaría a la
conservación de los bosques que al mejorar su estabilidad, se adaptaría mejor a los
cambios climáticos. Políticas energéticas que reduzcan el valor de los productos
forestales e incentiven el consumo apropiado, ayudarían a la mitigación del cambio
climático.
6.- A nivel local, en las zonas más vulnerables, es necesaria la modificación de la
infraestructura para adecuarla a la situación, por ejemplo la construcción de barreras o
sistemas de bombeo de agua para las inundaciones y aumentos en el nivel del mar. La
disposición final de la basura, es algo a considerar, ya que emite metano que termina en
la atmósfera; la separación de inorgánicos y orgánicos, junto con el reciclado de la misma
disminuirá el nivel de basura que emite metano.
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7.- Se deben buscar especies de árboles existentes resistentes a eventuales desastres,
se podría dar estabilidad en casos de sequías, tormentas o enfermedades; también
significa, la búsqueda de nuevas opciones, se podrían crear especies tanto de animales
como de plantas que crezcan con mayor rapidez en las condiciones proyectadas por el
cambio climático.
8.- Aplicar medidas que reduzcan los efectos potenciales de incendios, ataque de insectos
y enfermedades, rehabilitando así a los bosques. La vigilancia forestal promueve la alerta
temprana y pronta evaluación de los daños, permitiendo planificar la recuperación a
mayor velocidad.
¡Hagámoslo pronto!
REFERENCIAS
• Aguilar, Adrián. “Los asentamientos humanos y el cambio climático global” en
Martínez, Julia; Fernández Bremauntz, Adrián; Osnaya, Patricia. Cambio climático:
una visión desde México. Instituto Nacional de Ecología. México, 2004
• http://www.elsantafesino.com/vida/2007/07/02/6073 17/01/10
• www.fao.org Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la
Alimentación, FAO 17/01/10}
• www.inegi.gob.mx Instituto nacional de ecología 17/01/10
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