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Limpieza de la piel Por Jacquie Carter Directora de Capacitación y Educación de Productos de Nutrición Externa Global La limpieza es el primer paso en la rutina diaria para el cuidado de la piel y debe hacerse todas las mañanas y todas las noches. Es tan simple como lavar su rostro, ya que de eso se trata la limpieza. Además de limpiar la suciedad que se acumula en la piel diariamente (como polvo, grasa y maquillaje), se deben remover las impurezas invisibles para evitar daños futuros. Las impurezas invisibles más comunes incluyen: Humo del cigarrillo, Humo del auto, Desodorizantes o sprays en aerosol, y Polución y smog. Los limpiadores faciales son indispensables para la salud general y el buen funcionamiento de la piel. Un buen limpiador puede atacar la resequedad, al proveer humectación ligera, y puede remover el exceso de grasa, al ayudar a controlar la producción de sebo. Un buen limpiador facial no debe comprometer la humedad natural de la piel, y esto lo diferencia de un jabón regular. ¡Los limpiadores son muy fáciles de usar! Cada mañana, al levantarse, y cada noche, antes de acostarse, siga estos 5 pasos: Paso 1: Humedezca sus manos con agua tibia; Paso 2: Dispense el producto en la palma de su mano, la cantidad no debe superar el tamaño de una nuez. (Después, si lo requiere, puede usar más cantidad). Paso 3: Frote sus dos manos par activar los ingredientes; Paso 4: Aplique el limpiador a su piel con masajes suaves en movimientos circulares; Paso 5: Enjuague completamente con agua tibia. ¡Así de fácil! Para su conveniencia, tenga un limpiador en su lavamanos y otro en la ducha. Recuerde evaluar el estado de su piel con regularidad, para asegurarse de estar usando el limpiador apropiado para su piel. La línea Nourifusion® cuenta con limpiadores para cutis normal a seco y normal a graso que además de limpiar, cuidan su piel y aportan vitaminas A. C y E
