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Sobre el autor.
Soy Cristian D´Amico tengo 52 años Soy
docente. (Profesor en ciencias políticas).Hace cuatro años llegó a mi vida el trastorno de ansiedad con ataques de pánico.
Pero antes de enterarme del verdadero diagnóstico, pasé un buen tiempo corriendo junto
a mi familia de clínica en clínica por los síntomas tan desestabilizantes, creyendo morirme a cada minuto, perdiendo todo control de mi existencia. Todos
esos síntomas eran infundados ya que todos los resultados de los estudios eran muy favorables, la última atención, en una clínica, con una
tomografía incluida, daba excelente resultado, pero yo sentía morir,
hasta que aquel médico de guardia llamo al servicio psiquiátrico.
Los doctores vinieron a mi casa y diagnosticaron trastorno de pánico,
de angustia y ansiedad.
Claro que seguía sin entender el porqué de aquellas sensaciones.
Cuando fui tranquilizándome con los medicamentos y la terapia, comencé a investigar profundamente el origen de estas patologías. Llegué a la conclusión de que todo estaba ahí, en mi mente y no en mi
cuerpo. En los pensamientos y la percepción, en la forma de verme y
en las imágenes de mi propia vida y tomé consciencia de la importancia de conectar mente y cuerpo.
Hoy disfruto de mi vida renovada, entera, estoy aquí escribiendo este
libro para dar a conocer todo lo que padecen los pacientes que sufren
esta sintomatología, pero también es mi intención dejar un mensaje de
aliento para quienes lo sufren y el recado de cómo prevenir el trastorno de ansiedad que, cuando llega a tu vida, te da unos buenos coscorrones para que cambies todos tus hábitos y vuelvas a ser tú.
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Prologo.
A veces vivimos nuestra vida tan de prisa que cuando miramos atrás
nos damos cuenta de todos los momentos hermosos que dejamos pasar
sin percibirlos, no tomamos consciencia de nuestro existir, perdemos
la libertad de pensarnos como seres magníficos e irrepetibles, dejamos
de lado el cuidado de nuestra salud por la imagen y el modelo de conducta que se nos impone, en muchas oportunidades vivimos en el otro
y desde él, queriendo ser perfectos, creemos que lo podemos todo.
Hasta que un buen día la mente nos da un sacudón y nos pone en
nuestro lugar y tomamos consciencia de nuestra humanidad y la finitud de nuestra vida, entonces comenzamos a hacer los cambios que
nos permitan reencontrarnos con nuestro verdadero sentido de la vida.
Les doy a todos la bienvenida a esta lectura, vamos a recorrer en ella
ese mundo magnifico como lo es nuestra mente tan compleja, trataremos de comprobar si el fundamento de los miedos y los síntomas que
derivan de la ansiedad generalizada es de origen físico patológico o es
el resultado de la forma de pensar y sentir.
En este texto trataré las sintomatologías que surgen por la gran acumulación de ansiedad y el consecuente trastorno que puede derivar en
un ataque de pánico.
El 20% de la población mundial sufre alguna patología derivada del
estrés y la ansiedad, síntomas que repercuten fuertemente en la vida de
una persona, socava la seguridad y propende al auto aislamiento y
todas las consecuencias que esto deja en la vida social, familiar y económica.
La ansiedad generalizada y las patologías que derivan de ella, en primer lugar se pueden prevenir y en segundo lugar se pueden curar con
el conocimiento cierto y la posterior reeducación.
Todas nuestras emociones dirigen la vida, la forma de percibirlas y
expresarlas exasperaran o no todo nuestro sistema nervioso y este se
expresará en nuestro físico, dejando huellas y síntomas que mal inter-
pretados crearan un círculo vicioso que, no permitirá una mirada objetiva, porque la confusión será el motor momentáneo de nuestra vida.
La intención al escribir este texto, es la de informar cómo trabaja
nuestro cerebro condicionado por factores externos e internos y los
resultados adversos y tan significativos que deja el ataque de pánico a
nivel emocional. Leer estos capítulos nos prepararán para el auxilio de
alguna persona con las sintomatologías señaladas pero por sobre todas
las cosas, conociendo como se siente el individuo que lo sufre, seguramente detendrás tu vida por un instante para pensar y darte cuenta
si tu estrés es elevado, lo que te propondrá un cambio inmediato en la
forma en que estás viviendo y sintiendo.
Tenemos en nuestra esencia todo lo necesario para superarnos y tener
una vida tranquila aun en un entorno hostil, solo basta con cambiar los
hábitos, dejar atrás los pensamientos negativos que generan una cuota
más de ansiedad a la que ya tenemos.
Propongo como herramienta para la tranquilidad mental y el descanso
corporal la meditación y la relajación diaria, como así también una
profunda introspección que nos permita percibir e identificar si nuestro camino es correcto y saludable.
Conocer el trabajo de nuestro sistema nervioso es de gran ayuda a la
hora de saber si todas las sensaciones sufridas por un ataque de pánico
son de origen físico o psíquico, porque quien padece este trastorno no
puede razonar las diferencias ya que está “Secuestrado por la mente
emocional” y dependiente del más mínimo movimiento muscular que
mal interpretará creyendo en enfermedades catastróficas, y así pasaran
los días sumidos en ese círculo vicioso que produce el miedo.
El autocontrol y la relajación son perfectamente posibles en cualquier
momento del día, basta con saber el verdadero origen de la actitud
ante determinado suceso del diario vivir.
Y por supuesto que es importante recordar que según la OMS, el 90%
de las enfermedades físicas tienen su origen, en la mente.
Índice.
Comprendernos para superarnos, las emociones en el cerebro…….1
La emoción…………………………………………………………2
el miedo y el enojo……………………………………………..19
el miedo aprendido…………………………………………….23
el trauma………………………………………………………….33
El inconsciente………………………………………………….35
La comunicación con el subconsciente……………….48
Diferencia entre ansiedad y miedo…………………….51
El sistema nervioso, simpático y parasimpático…...55
Tu vida, tu mente………………………………………………..62
Las adicciones……………………………………………………67
Las técnicas de relajación………………………………….73
La respiración…………………………………………………….78
Técnicas para calmar pensamientos que nos provocan miedo….103
poner la mente en positivo…………………………………..114
como acompañar y ayudar………………………………….120
Ansiedad en la escuela, los docentes…………………..126
El malestar docente…………………………………………...130
cambiar el hábito………………………………………………. 133
El autocontrol…………………………………………………..138
Emociones y salud………………………………………………143
La salud escolar………………………………………………...147
En el aula…………………………………………………………...155
Crisis familiar consecuencias y superación………….157
Introducción.
Espero de todo corazón que este libro deje en ti una gota de calma y una
cuota de positividad.
la lectura que vas a realizar te llevará a ese mundo maravilloso de nuestra
mente conectada con nuestras emociones y con el imprescindible trabajo que
realiza nuestro sistema nervioso central, podrás comprobar si el fundamento
de tus miedos es de origen somático o no, tomarás un conocimiento cierto y
positivo de la raíz de tus temores e incertidumbres, propiciará para que
tengas una comprensión de tu inconsciente y la importancia que tiene en
nuestra vida y por sobre todas las cosas constatarás que tienes en ti todo lo
necesario para dominar tu ansiedad, pánico, estrés y fobias.
Por ningún motivo considero que este libro constituye la idea de abandonar la
atención psiquiátrica y psicológica, no dejes tus medicamentos sin consultarlo
y menos aún tu terapia.
Todo lo que propongo aquí, es complementario a la atención que estas
recibiendo.
Mi intención es llevar conocimiento del funcionamiento de las emociones y la
implicancia que tienen en tu vida, conocer cómo trabaja nuestro cerebro ante
una crisis, es realmente beneficioso, porque podrás incorporar la firme
convicción de que tienes en ti todas las herramientas para superarte en todos
los aspectos de tu existencia.
¿En cuántas ocasiones la vida nos dio un revés que recordamos por un
tiempo?
Dice un viejo dicho, “que el tiempo todo lo cura” y no es mentira, pero la
verdad es que a este refrán hay que agregarle, en nuestro caso, las palabras,
constancia, perseverancia, paciencia, amor y positividad. Te invito a que con
estas palabras crees tu propia máxima y la pongas en práctica.
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Comprendernos para superarnos.
Las emociones en el cerebro:
En todas las lecturas y revisiones que pude hacer en varios textos y sitios de
internet he notado que, (en este último, google y otros), en muchos casos,
existen consejos mágicos de como curar nuestra ansiedad creando una
expectativa tal que nos hará creer que, en un santiamén vamos a curar las
heridas tan profundas que va dejando esta patología.
Por ejemplo: leí en algunas páginas, un sistema que nos dice. “tu curación
definitiva esta en zambullirte en tu ansiedad porque de esa manera te curarás
inmediatamente y para siempre”. Si analizamos esa conjetura tal cual es,
podríamos caer en un error, porque la verdad es que, no es inmediato, es un
proceso de trabajo y reeducación que te llevará un tiempo, (no demasiado
largo), siempre dependerá de las características y de la personalidad de cada
sujeto. Por esto te aconsejo que si quieres buscar formas de ir cambiando tu
situación, (obviamente además de la atención psiquiátrica y psicológica),
revises opiniones basadas en datos científicos, la tecnología nos permite tener
a la mano y en segundos todo tipo de textos y opiniones científicas de gran
valor académico.
Así que lo primero que quiero decirte es que:
Por favor trates de tomarte todo el tiempo posible para leer este capítulo que
es central para comprender lo que estas experimentando, imprégnate de
paciencia y no te aceleres, ya hemos vivido muchos días, meses y años,
queriendo ganarle al tiempo y esa manera de vivir colaboró con esta situación
que nos llevó a estar completamente dependientes del trastorno de la ansiedad, que por cierto, en su actividad descontrolada, logró atraparnos. Te
aseguro que el saber nos libera de una gran cantidad de la carga negativa
que llevamos día a día, justamente por desconocer, lo que nos ocurre.
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La emoción.
Es sumamente importante definir la emoción antes de hacer cualquier
interpretación. Por este motivo he elegido esta definición.
Entre varias esta es la más oportuna. (Fuente, www.definicion.de)
” Definir el término emoción puede resultar sencillo, seguramente todos
podríamos hacerlo; sin embargo, conseguir una definición consensuada de esta
palabra, es una tarea un poco más complicada. En este artículo, sin embargo,
intentaremos hacerlo de la forma más clara posible. Esperamos que te resulte
interesante.
Emoción
Del latín emotivo, la emoción es la variación profunda pero efímera del ánimo,
la cual puede ser agradable o penosa y presentarse junto a cierta conmoción
somática. Por otra parte, tal como señala la real academia española (rae) en su
diccionario, constituye un interés repleto de expectativa con que se participa en
algo que está sucediendo.
Según lo han demostrado diversos estudios, las emociones juegan un papel
fundamental en los procesos de salud de una persona. Tal es así que en muchos
casos, sucede que una enfermedad se desencadena por una determinada
experiencia que genera una emoción particular, tal es el caso de las fobias o de
los trastornos mentales. También hay casos de epilepsia donde las emociones
son una causa imperante.
Las emociones están entendidas como fenómenos de raíz pico-fisiológica y,
según los expertos, reflejan formas eficaces de adaptación a diversos cambios
ambientales. En el aspecto psicológico, las emociones generan sobresaltos en el
índice de atención y aumentan el rango de diversas conductas en la jerarquía de
respuestas del individuo que las experimenta. En cuanto a la fisiología, las
emociones permiten ordenar las respuestas de diversas estructuras biológicas,
incluyendo las expresiones faciales, la voz, los músculos y el sistema endocrino, con el objetivo de definir un medio interno adecuado para el comportamiento más óptimo.
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Las emociones le permiten a todo individuo establecer su posición respecto al
entorno que lo rodea, siendo impulsada hacia otras personas, objetos, acciones
o ideas. Las emociones funcionan también como una especie de depósito de
influencias innatas y aprendidas.
Diversas corrientes de pensamiento
Uno de los problemas al intentar definir las emociones, se presenta al relacionarla con lo cognitivo. Aquí se bifurcan los caminos del pensamiento, por un
lado aquellos que desligan los sentimientos y la parte emocional de una
persona de todo tipo de razonamiento o proceso cognitivo, y por el otro que
relaciona ambos procesos.
Para el psicólogo jean Piaget, existen conductas emocionales que se encuentran
asociadas con los procesos de construcción de una mente individual inteligente.
Los procesos de conocimiento del entorno se incorporan mediante un mecanismo de evolución individual de la inteligencia, que escoge estructuras
internas vinculadas a la formación y las particularidades estructurales del
cerebro y los elementos del sistema nervioso, y las asocia con las percepciones
del entorno. Esto desencadena procedimientos mentales cada vez más complejos, que suponen la epigénesis de las estructuras cognitivas.
La forma más aceptada de entender este concepto es desde una dimensión
amplia, donde el proceso afectivo y el cognitivo se rozan y complementan. En
este desarrollo participan varios elementos: concientización subjetiva (los
sentimientos propiamente dichos), cambios fisiológicos (determinadas
reacciones corporales que son movidas por esos sentimientos, para predisponer
al organismo a enfrentarse a la nueva experiencia), estímulos motores internos
(cambios internos que provocan una actitud determinada) y dimensión
cognitiva (proceso mental a través del cual la persona entiende lo que le está
ocurriendo). Por todo esto, nos es imposible analizar las emociones completamente separadas del aspecto racional, ya que para conseguir comprenderlas
utilizamos los métodos cognitivos de los que disponemos.
ejemplo para comprender el desarrollo de una emoción: el miedo es un
sentimiento que puede producir cambios fisiológicos como aumento de la
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frecuencia cardíaca, dilatación de las pupilas, tensión en los músculos y
segregación de adrenalina; a su vez produce una reacción interna que se refleja
en expresiones faciales, movimientos bruscos o específicos y cambio en la
entonación. En lo cognitivo, esas respuestas son analizadas en un contexto
socio-cultural para poder comprenderlas y ubicarlas en el lugar adecuado. “la
expresión emocional cambia así como lo hace el desarrollo ontogenético del
individuo”. De igual modo, es el proceso cognitivo el que nos permite inhibir
ciertas emociones, cuando culturalmente no son consideradas como adecuadas.
Por ejemplo, cuando nos sentimos atraídos por una persona que no puede
correspondernos (por hallarse casada o simplemente no estar enamorada de
nosotros) o cuando estamos frente a nuestro jefe y sentimos deseos de matarlo
(sabemos que dar rienda suelta a este sentimiento no podría traernos más que
problemas, y no sólo el de quedarnos sin trabajo).
Es necesario comentar que en las últimas teorías cognitivas que se han hecho
sobre el proceso emocional, se ha enfatizado de forma fundamentalista en lo
cognitivo, objetando que el mundo no es de una determinada forma, sino que
depende de con qué ojos se mire; por eso una misma experiencia para dos
personas diferentes para una puede resultar traumática y para otra ser más
posible de enfrentar y resolver. De todas formas, si bien esta teoría tiene
muchos adeptos, sobre todo en las corrientes relativistas, muchos especialistas
se niegan a aprobar esta manera tan aleatoria de entender los sentimientos y el
mundo en general.
para terminar, deseo señalar algunos términos que se encuentran relacionados
con el de emoción, estos son: afecto (describe la cualidad de un sentimiento, es
decir, si es positivo o negativo para una persona), estados de ánimo (actitud
que se instala en una persona luego de presenciar una determinada experiencia), temperamento (características de una persona que la vuelven más o menos
propensa a reaccionar de tal o cual forma frente a un estímulo externo) y
sentimiento (la respuesta de una persona frente a una experiencia determinada).”
Significados: http://definicion.de/emocion/
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Somático/a: relavo al cuerpo. Se aplica a la parte corporal y material de
un ser, en
Contraposición a su parte psíquica
Cognitivo: conocimiento, desarrollo de él.
Epigénesis: proceso de desarrollo.
Ontogenético: desarrollo del individuo, la evolución del ser humano
Ci: coeficiente intelectual
Así lo sintetiza la universidad de alicante
Psicología básica.
Material extraído del portal: fuente. (http://www.psb.ua.es).
–“se considera emoción la respuesta de todo organismo que implique: una
excitación fisiológica; conductas expresivas y una experiencia consciente.
–reacción subjetiva al ambiente acompañada de respuesta neuronal y hormonal; se consideran reacciones de tipo adaptativo que afectan a nuestra manera
de ser.
–reacción subjetiva al ambiente acompañada de cambios orgánicos, de origen
innato influidos por la experiencia.
–función adaptativa de nuestro organismo a lo que nos rodea.
–en el ser humano, la experiencia de una emoción involucra un conjunto de
cogniciones, actitudes y creencias sobre el mundo, que utiliza para valorar una
situación concreta e influyen en el modo en el que se percibe dicha situación.”
las emociones y los sentimientos no son para nada nocivos en nuestra vida, de
hecho la existencia humana le debe la supervivencia a esa parte de nuestro
cerebro que de alguna manera nos protege a la hora de una reacción, ante un
peligro inminente, o un hecho feliz que sobresalta la más hermosa relación
interhumana.
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Es fundamental tratar de conocernos en lo más íntimo, si te lo propones, lo
conseguirás.
la inteligencia intrapersonal como "el conocimiento de los aspectos internos de
una persona: el acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de
sentimientos, la capacidad de efectuar discriminaciones entre las emociones y
finalmente ponerles un nombre y recurrir a ellas como un medio de interpretar
y orientar la propia conducta." ‘las inteligencias múltiples’ del Dr. Howard
Gardner, de la universidad de Harvard,” (lo subrayado es mío)
Que nos dice Daniel Goleman, (psicólogo), en su libro “inteligencia emocional.”
“cualquier concepción de la naturaleza humana que soslaye el poder de las
emociones pecará de una lamentable miopía. de hecho, a la luz de las recientes
pruebas que nos ofrece la ciencia sobre el papel desempeñado por las emociones en nuestra vida, hasta el mismo término homo sapiens —la especie
pensante— resulta un tanto equivoco. Todos sabemos por experiencia propia
que nuestras decisiones y nuestras acciones dependen tanto —y a veces más—
de nuestros sentimientos como de nuestros pensamientos. hemos sobrevalorado
la importancia de los aspectos puramente racionales (de todo lo que mide el ci)
para la existencia humana pero, para bien o para mal, en aquellos momentos en
que nos vemos arrastrados por las emociones, nuestra inteligencia se ve
francamente desbordada.”
es indiscutible que en primer lugar siempre surge un pensamiento, (aunque
debo aclarar que hay algunos autores que sostienen que en determinados
momentos se expresa la emoción antes que el pensamiento. pero de esto voy a
hablar un poco más adelante), consciente o inconsciente antes que aparezca
una emoción o un sentimiento. vemos y representamos en nuestra mente todo
lo que nos rodea, basta con solo dar un golpe de vista hacia alguien o algo
para que en milésimas de segundos surjan un sin fin de interrogantes, pensamientos, sentimientos y emociones, que nuestro subconsciente guardará, en
determinados casos, como experiencias.
Este es un ejemplo del trabajo de nuestra emoción en algunos momentos:
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“estamos en viaje de vacaciones a determinada playa, gran parte del viaje
vamos a ir pensando en esas imágenes, el color del agua, los aromas, la arena
y en llegar y salir corriendo para zambullirnos en esa ola gigante en el agua
tibia”.
Como podemos apreciar se llenó nuestra mente con una gran cantidad de
experiencias, que por una parte son reales y por otra irreales, es fundamental
poder definir las diferencias. ¿Cuál es la parte real? la respuesta es inmediata,
solo el viaje y las experiencias de ese momento lo son, ya que, ese instante
presente es la realidad absoluta, sin embargo hemos cargado en todo ese
camino una información que es vivida como una realidad, sin serlo.
Te pido no mal interpretes, no es que este mal ir emocionado, es hermoso, lo
que quiero decir es que, razonemos y podamos reflexionar juntos sobre esos
momentos en que quedamos atrapados en nuestro pensamiento y que logremos
diferenciar la realidad, o no, porque en reiteradas veces nos quedamos allí en
un pensamiento o emoción que, en el trastorno de ansiedad o pánico seguramente vamos a distorsionar o, a tomar como real y por supuesto, a magnificar
una situación que quizás sea inexistente.
Entonces debemos tratar de ser mesurados ante nuestros pensamientos o
emociones, te cuento que, no es malo controlarse la verdad es que. Quien
escribe este libro se vio atrapado en sus pensamientos y secuestrado por sus
emociones y a medida que fui reeducándome pude comprobar que, podía
hacerlo y además, lo bien que me hizo a mí y a mis seres queridos y no menos
maravilloso, tome conciencia de mi vida y lo que quiero para ella.
Muchas personas me dicen ¿”pero como hiciste”? “yo no puedo”
¿Que soy más que tú? nada. Todos tenemos esa capacidad innata de
superarnos y la descubrimos cuando el cuerpo nos dice ¡alto! ¡Para! Entonces, es momento de dejar de vernos como víctimas y pasar a ser docentes de
nuestras vidas, para hacer de ella un ejemplo de fuerza amor y pasión.
Aquí te muestro otro ejemplo.
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Aquel que todo el tiempo está pensando en su ser querido y diciéndose, “ya no
me quiere, no me soporta, no cree en mí, creo que le voy a decir que es
mejor separarse ¡¡si lo voy a hacer!! ¿Pero y si me ama? No lo creo, nunca
me lo dice” y así pasan los días interminables llenos de temores y sentimientos
infundados que quizás nos lleven a confusiones.
Y de repente. ¡¡ Te amo!! Y se nos caen todos esas sensaciones vividas y por
supuesto nos damos cuenta cuanto nos hemos equivocado o quizás mejor decir,
cuanto tiempo estuvimos viviendo una realidad equivocada.
Porque así es nuestra mente un torbellino de pensamientos y sentimientos, y la
variedad de estos, de alguna manera, contribuirán a la calidad de nuestra
vida.
Estamos todo el tiempo rumeando nuestros pensamientos los buenos y los
malos, pero son estos últimos los que nos hacen daño, nos llenan de ansiedad
innecesaria, perjudican nuestra posibilidad de recuperarnos.
Entonces, ¿no es mejor hacer buen reparo en cómo nos pensamos, o quizás,
desmitificar esas emociones anteponiendo la razón?
Queda claro que las emociones juegan un papel preponderante en nuestra
mente y la interpretación que vamos a hacer de ellas estará de acuerdo con la
información que recibimos, real o irreal.
En cuanto a esas realidades o no, aquí te propongo que hagas un alto cuando
surjan pensamientos que te puedan inquietar, por favor trata de razonarlos
como lo haces cuando tienes una conversación con alguien, nota la diferencia,
no los rechaces, solo observa, si te inquietan mucho, entonces habla con ellos
y diles, que lo vas a atender dentro de una hora, esto posibilita que el
subconsciente se reeduque y comience a interpretar que tú tienes el control.
Por supuesto a la hora, toma uno de los pensamientos y razónalo.
Si tienes dudas sobre algo o alguien, no te quedes estancado allí, ni siquiera
dejes pasar un día sin hablar de tus miedos, piensa pacíficamente y actúa
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tranquilamente. A veces nos quedamos proyectándonos en imágenes que nos
generan inquietudes que podríamos cambiar con una simple charla.
En cuanto a la emoción antes que el pensamiento, existen teóricos, científicos
que sostienen esta posibilidad por ejemplo: según Zajón (1980, 1984) nuestras
emociones pueden ser más rápidas que nuestras interpretaciones de una
situación, lo cual implica que:
–sentimos algunas emociones antes de pensarlas y que,
–algunas vías nerviosas implicadas en la emoción no pasan por las áreas
corticales vinculadas al pensamiento.
En este caso no voy a ser muy extensivo ya que en mi recopilación de datos
sobre las patologías psicosomáticas de las que estamos hablando, no he
encontrado ninguna persona que demuestre que esto es así.
Si, en todo caso se puede dar, por ejemplo:
Con un susto al cruzar una calle y en la que un auto se aproxima, quizás en ese
momento, no vamos pensando en esa situación y surge una emoción imprevista, el miedo.
En lo que si voy a coincidir, es en aquel momento en que tuvimos el primer
ataque de pánico, o el primer miedo a salir, o la primera vez que sentimos el
terror a un insecto. Porque está muy claro que nunca hubiésemos pensado en
esa posibilidad, (la de caer en esas emociones que luego nos secuestrarían y
así viviríamos pendientes de ellas).
Pero una vez recluidos en ese círculo vicioso del estrés y las sensaciones
producidas y muy internalizadas y además, grabadas en nuestro cerebro, ahí,
en ese mismo momento, comienza nuestra mente a pensar en anticiparse y a
crear nuevas reglas que prevengan un nuevo ataque de angustia y por lógica
ya, no dejamos de pensar en los síntomas experimentados.
normalmente antes de la aparición del miedo profundo,(y ya habiendo
sucumbido ante el trastorno de pánico, fobia, etc.),hay un pensamiento
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consciente o inconsciente que nos impulsa a emociones, que en una mirada
distorsionada, equivocada, o mal interpretada, nos provocarán esos síntomas
tan adversos, en esos mismos momentos nuestra mente procesará una cantidad
infinita de imágenes y pensamientos que convertirán esos diez o veinte minutos
en un mar de emociones y sensaciones que activaran todo nuestro sistema
defensivo pero, potenciado al máximo y luego cuando tomamos el control y
nos vamos relajando, ahí pensamos racionalmente y decimos ¡ah! me estoy
calmando y tomamos conciencia de esa paz, deseando eternizarla.
Podríamos defender esta teoría, (emoción antes que pensamiento), con los
pensamientos del inconsciente pero ¿cómo hacerlo si no tenemos real conciencia de ello? para esto está el psicoanálisis que con sus técnicas va desmenuzando, desentrañando el subconsciente, que normalmente se presenta durante
el descanso, el sueño.
O quizás estaría bien asociar esa conjetura. Al ataque de pánico nocturno.
Pero permítanme contarles que en mi experiencia personal, pocas veces me he
despertado con un ataque de pánico, lo que ha sucedido es que ante un sueño
estresante, ansioso, me he levantado un poco molesto y el ataque se fue
incrementando paulatinamente a medida que mi mente se fue llenado de ideas
y pensamientos equivocados.
Aunque no voy a ser necio y negar por negar les presento aquí una nota
publicada por:
http://www.20minutos.es/noticia/2310927/0/ataque-panico/nocturno/causas-tratamiento/
En la misma, la doctora Nathalie p. Lizeretti. Explica el pánico nocturno.
La Dra. Nathalie p. Lizeretti es doctora en psicología y especialista en
psicoterapia e inteligencia emocional. Es profesora asociada a la universidad
ramón Lull de Barcelona y co-directora del centro de investigación y desarrollo
de la inteligencia emocional (cidie). Es autora de numerosos artículos sobre
inteligencia emocional en el ámbito de la psicología clínica, en prestigiosas
revistas nacionales e internacionales y ha desarrollado la terapia basada en
inteligencia emocional (tie).
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“los ataques de pánico nocturnos rara vez se producen de forma aislada, por
regla general acompañan a un cuadro de ansiedad que también se manifiesta
durante el día aunque estas crisis en la noche se dan en un porcentaje reducido
de quienes padecen ansiedad. "aunque al paciente le puede parecer de larga
duración ya que el tiempo se distorsiona al estar asociado a las horas de sueño,
estos ataques de pánico nocturno suelen durar entre 10 y 20 minutos", explica
la doctora Nathalie p. Lizeretti, coordinadora del grupo de trabajo de inteligencia emocional del colegio de psicólogos de Cataluña. Se suelen producir en la
fase no-rem del sueño, cuando la persona está más relajada. Por regla general
los ataques de ansiedad en horas diurnas suelen producirse también cuando en
la persona existe cierta relajación al cesar la activación o tensión asociada a la
orientación a realizar una tarea. En las causas de los ataques de pánico, ya sean
diurnos o nocturnos, pueden intervenir tres factores: un componente genético
dependiente de que existan factores desencadenantes ambientales; trastornos
biológicos como el hipertiroidismo o hipotiroidismo, muy presente en los
ataques de pánico nocturnos; y en situaciones de dificultades en la gestión
emocional. Entre los pacientes que experimentan ansiedad durante las horas del
día sólo un 10% experimenta ataques nocturnos de pánico. "no es una entidad
aislada sino que acompaña a un cuadro de ansiedad en las horas de vigilia y no
se trata de terrores nocturnos ni pesadillas que nos producen el despertar",
aclara la psicóloga. Se dan porque existe un estado de ansiedad que repercute
en todos los ámbitos de la persona lizzetti aclara que aunque las crisis de
pánico nocturnas están menos estudiadas, se cree que en muchos casos es
posible que al día siguiente no se recuerden o no se tenga consciencia de ellas.
Pueden deberse a un acontecimiento aislado, como ser testigo de un accidente
de tráfico, del que deriva un síndrome de estrés post-traumático limitado a unos
días. "en la mayoría de los casos se dan porque existe un estado de ansiedad
que repercute en todos los ámbitos de la persona", asegura Lizzetti. Pueden
funcionar las terapias cognitivos-conductuales en las que se trabaja la higiene
del sueño, evitar la cafeína, técnicas de relajación y la habituación, sobre todo
en los casos en los que se teme ir a dormir ante la posibilidad de sufrir un
ataque de pánico nocturno. "el miedo ante la idea de ir a dormir aumenta la
ansiedad. En estos casos se debe ayudar al paciente a afrontar la experiencia",
señala la psicóloga. "hay una tendencia a la sobre medicación con tranquilizan11
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tes y antidepresivos, aunque de esta forma solo se palían los síntomas y no se
va al núcleo del problema", explica esta doctora en psicología y experta en
trastornos psicopatológicos. Lizzetti defiende el desarrollo de habilidades
emocionales, la exploración de las causas de la ansiedad y en la atención de las
necesidades de la persona con el objetivo de superar las crisis de pánico. “cada
vez más trastornos físicos se relacionan con trastornos emocionales. Somos
uno, se trate de horas de vigilia, de sueño, hablemos del cuerpo o de la mente,
somos indivisibles, cada ámbito afecta al resto", concluye Lissette.”
Con lo dicho por la doctora Lizzetti podríamos coincidir en la emoción antes
que el pensamiento, pero la realidad es que, en un mínimo porcentaje se
presenta esta sintomatología durante nuestro descanso. Y no estamos verdaderamente conscientes de ello. Lo estamos cuando abrimos los ojos y representamos conscientemente esos miedos que están íntimamente vinculados a
nuestros temores fundados en la ansiedad.
En ese momento comenzamos a pensar en esas emociones que, distorsionan la
realidad y nosotros le prestamos suma atención al miedo y a las sensaciones
emergentes. Por lógica, dejamos de razonar y perdemos el control.
He subrayado una parte del texto de la doctora Lizzetti en donde manifiesta
que,” el ataque de pánico se puede producir cuando sobreviene la relajación
luego de la tarea.”
quiero agregar en este caso que, cuando se está realizando una actividad con
plena conciencia en ello, por lo general dejamos de pensar en nuestros miedos
y síntomas, ya que estamos concentrados en otras cosas y claro está, cuando
hacemos un alto en las tareas asignadas y nos desconcentramos de ellas,
comenzamos nuevamente a revisar nuestro cuerpo o nuestra mente buscando
saber si tendremos miedo o no y además percibimos con extrema sensibilidad
las sensaciones corporales, movimientos musculares y otros que, son normales
e inherentes a la funcionalidad diaria de nuestro cuerpo, esto pasa porque
dejamos de lado la concentración en lo que estábamos haciendo y velozmente
pasamos al círculo vicioso de nuestra ansiedad.
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Entonces por lo expuesto, aquí podemos ya sacar alguna conclusión: nuestra
mente tiene la capacidad de concentrarse en una u otra cosa, por ejemplo, en
lo bueno y lo malo, en nuestro cuerpo y la naturaleza, en lo objetivo y lo
subjetivo. Y no menos importante es saber que, podemos decidir en cual o
cuántos de esos pensamientos podemos consolidar plenamente nuestra mente.
¿Se dan cuenta de la importancia de la mente consciente y plena?
Ahora, ¿cuál es la importancia de una parte de nuestro cerebro llamada
amígdala? ¿Cuál es su función?
En primer lugar quiero repetirte que, es de suma importancia tener a la mano
todos estos conocimientos ya que, nos hacen posible saber a ciencia cierta qué
es lo que nos puede estar pasando.
Si ya te hiciste todos los estudios médicos posibles y los resultados fueron
satisfactorios entonces, es momento de hacer un alto y comenzar a tener plena
consciencia de nuestras emociones o quizás de nuestros pensamientos errados.
Daniel Goleman páginas 15 y 16 “inteligencia emocional”
“no hace mucho tiempo que la ciencia ha descubierto el papel esencial
desempeñado por la amígdala cuando los sentimientos impulsivos desbordan la
razón. Una de las funciones de la amígdala consiste en escudriñar las percepciones en busca de alguna clase de amenaza. De este modo, la amígdala se
convierte en un importante vigía de la vida mental, una especie de centinela
psicológico que afronta toda situación, toda percepción, considerando una sola
cuestión, la más primitiva de todas: « ¿es algo que odio? ¿Qué me pueda herir?
¿A lo que temo?» en el caso de que la respuesta a esta pregunta sea afirmativa,
la amígdala reaccionará al momento poniendo en funcionamiento todos sus
recursos neurales y cablegrafiando un mensaje urgente a todas las regiones del
cerebro. En la arquitectura cerebral, la amígdala constituye una especie de
servicio de vigilancia dispuesto a alertar a los bomberos, la policía y los
vecinos ante cualquier señal de alarma. en el caso de que, por ejemplo, suene la
alarma de miedo, la amígdala envía mensajes urgentes a cada uno de los
centros fundamentales del cerebro, disparando la secreción de las hormonas
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corporales que predisponen a la lucha o a la huida, activando los centros del
movimiento y estimulando el sistema cardiovascular, los músculos y las
vísceras: la amígdala también es la encargada de activar la secreción de dosis
masivas de noradrenalina, la hormona que aumenta la reactividad de ciertas
regiones cerebrales clave. Entre las que destacan aquéllas que estimulan los
sentidos y ponen el cerebro en estado de alerta. Otras señales adicionales
procedentes de la amígdala también se encargan de que el tallo encefálico
inmovilice el rostro en una expresión de miedo, paralizando al mismo tiempo
aquellos músculos que no tengan que ver con la situación, aumentando la
frecuencia cardiaca y la tensión sanguínea y enlenteciendo la respiración. Otras
señales de la amígdala dirigen la atención hacia la fuente del miedo y predisponen a los músculos para reaccionar en consecuencia. Simultáneamente los
sistemas de la memoria cortical se imponen sobre cualquier otra faceta de
pensamiento en un intento de recuperar todo conocimiento que resulte relevante para la emergencia presente. Estos son algunos de los cambios cuidadosamente coordinados y orquestados por la amígdala en su función rectora del
cerebro (véase el apéndice c para tener una visión más detallada a este
respecto). De este modo, la extensa red de conexiones neuronales de la
amígdala permite, durante una crisis emocional, reclutar y dirigir una gran
parte del cerebro, incluida la mente racional.”
(Lo subrayado es mío). Por favor repásalo para que te vayas convenciendo,
que la responsabilidad de todas las sensaciones que sientes en el cuerpo no
son el producto de un mal funcionamiento de algún órgano de tu cuerpo hay
otra posibilidad, (además de todas las que pensaste de una manera catastrófica), y esta es: el sistema defensivo que ejecuta nuestro cerebro por una
determinada emoción que subyace, por ejemplo: el miedo.
Ahora vamos a leer como este órgano y la mente, lo recuerda todo sin que
nosotros tengamos consciencia de ello y además, no hagamos nada para que
así suceda.
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