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COMENTARIO DE TEXTO ORTEGA Y GASSET
“La vida humana es una realidad extraña, de la cual lo primero que conviene decir es
que es la realidad radical, en el sentido de que a ella tenemos que referir todas las demás, ya
que las demás realidades, efectivas o presuntas, tiene de uno o de otro modo que aparecer
con ella.
La nota más trivial, pero a la vez la más importante de la vida humana, es que el
hombre no tiene otro remedio que estar haciendo algo para sostenerse en la existencia. La vida
nos es dada, puesto que no nos la damos a nosotros mismos, sino que nos encontramos en
ella de pronto y sin saber cómo. Pero la vida que nos es dada no nos es dada hecha, sino que
necesitamos hacérnosla nosotros, cada cual la suya. La vida es quehacer. Y lo más grave de
estos quehaceres en que la vida consiste no es que sea preciso hacerlos, sino en cierto modo,
lo contrario; quiero decir, que nos encontramos forzados a hacer algo pero no nos
encontramos nunca estrictamente forzados a hacer algo determinado, que no nos es impuesto
este u otro quehacer, como le es impuesta al astro su trayectoria o a la piedra su gravitación.
Antes que hacer algo, tiene cada hombre que decidir, por su cuenta y riegos, lo que va a
hacer”.
Historia como sistema.
AUTOR:
Filósofo español de la primera mitad del siglo XX, partidario de asimilar algunos rasgos
de la cultura europea para superar la crisis que reinaba en nuestro país. Su pensamiento se vio
influido por ciertas corrientes de la filosofía alemana de la época, como el neokantismo. Su
filosofía puede clasificarse como vitalista, pues parte de la vida como realidad radical.
TEMA:
La vida es la única realidad radical y consiste en el quehacer.
IDEAS PRINCIPALES:
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LA vida humana es la realidad radical porque a ella se refieren todas las demás
realidades.
El rasgo más importante de la vida es que siempre debemos estar haciendo algo.
La vida nos es dada, pero nos es dada sin determinar; nosotros tenemos que hacerla.
Antes de actuar debemos decidir qué vamos a hacer, puesto que somos libres y no se
nos impone ningún quehacer.
RELACIÓN ENTRE LAS IDEAS:
El texto comienza definiendo la vida humana: la realidad radical que da sentido a todo..
a continuación se centra en otro rasgo fundamental de nuestra vida: para existir debemos
estar haciendo algo, de ahí quesea un quehacer.
En la última parte del texto, se precisan las características de este quehacer: no está
determinado, es decir, somos libres y en consecuencia, antes de actuar hemos de decidir
cómo hacerlo.
EXPLICACIÓN DE LAS IDEAS:
El texto trata de uno de los conceptos fundamentales de la filosofía de Ortega. La vida
como realidad radical.
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Según este autor, la realidad más inmediata e indudable es la vida y no el sujeto
pensante de Descartes. Como se expresa en el texto, la primera definición de la vida
humana, es que es la realidad radical. Cualquier otra realidad ha de referirse a ella para
tener sentido; desde nuestra vida dotamos de sentid a todo lo que existe.
Es importante tener en cuenta que, según Ortega, la vida no incluye solo el sujeto sino
también el mundo; de ahí su famosa frase “yo soy yo y mis circunstancias”. Ahora bien, la
circunstancia, el mundo no es una realidad fija y determinada, depende de la perspectiva
de cada persona.
Tal y como indica Ortega en la segunda idea del texto, el hombre siempre ha de estar
haciendo algo para existir. El yo no es pasivo, sino que es precisamente su actividad la que
lo define; por el contrario, la muerte se identifica con la ausencia de toda actividad.
Nuestras acciones persiguen una finalidad que cada uno hemos elegido; la naturaleza
no fija de manera determinante el proyecto vital que somos. El ser humano no está
determinado a ser de una u otro forma; la circunstancia presenta al sujeto siempre varias
opciones.
Mientras los seres inanimados siguen las leyes de la física (como se indica en el texto
con las piedras) o los animales obedecen a sus instintos, los seres humanos no están
determinados por leyes ajenas a su propia voluntad. Somos libres para escoger, si bien las
posibilidades de elección son limitadas, se mueven dentro del margen de la circunstancia.
En conclusión, el yo, el sujeto, construye su vida, su proyecto dentro de la circunstancia
en la que se encuentra.
VIGENCIA DE LAS IDEAS DEL TEXTO EN LA ACTUALIDAD:
La importancia de la vida para los seres humanos es evidente. Nadie puede dudar de
quye nuestra existencia, nuestra vida, es la realidad fundamental a partir de la cual
interpretamos el mundo y nos relacionamos como otros seres.
Ahora bien, el individualismo de nuestra sociedad contribuye a aumentar la
consideración de la vida personal. De hecho, hoy día las ideologías más preocupadas por
la colectividad, por la igualdad social, han perdido, en gran medida, la fuerza que tuvieron
en el pasado. Este pensamiento individualista, coincidiría con Ortega a la hora de
considerar que es la propia vida personal la que da sentido a todo.
Otra idea importante y actual es la que hace referencia a que la vida es dada sin
determinar, que cada individuo se hace a sí mismo. En este sentido somos responsables
de nuestra vida y nuestras decisiones.
Muchas veces queremos eludir la responsabilidad o nuestros fracasos, pero con
frecuencia, el problema es que carecemos de lo que Ortega llamaba proyecto de vida.
Hoy día, no todos tenemos un claro objetivo en la vida, un proyecto personal que dirija
nuestras acciones. No es fácil en una sociedad en la que la comodidad y el consumo nos
dominan. No obstante, debemos reconocer y asumir que nuestra vida depende de las
decisiones que tomamos. Como dice Ortega, el yo que somos actúa en la circunstancia en
la que vive, la cual supone el marco y los límites de nuestra libertad, pero es el yo el que
decide y actúa.
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