Download Unidad 2: El saber científico
Document related concepts
Transcript
1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Unidad 2: El saber científico Índice 1. ¿Qué es la ciencia? 2. Clasificación de las ciencias 3. La cuestión del método 3.1. Método y conocimiento. El método inductivo y el método deductivo 3.2. El método hipotético-deductivo 3.3. ¿Verificación o falsación? 4. Filosofía crítica de la ciencia 4.1. El cientificismo 4.2. La neutralidad de la ciencia 4.3. Ciencia y fraude Página 1 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 1. ¿Qué es la ciencia? Todos estamos familiarizados con la imagen tópica el científico vestido con bata blanca y absorto en su microscopio. También compartimos una imagen de la ciencia como un saber lleno de prestigio, casi infalible; no en vano, vivimos en una sociedad que cambia vertiginosamente bajo el sucesivo impacto de espectaculares avances científicos y sus aplicaciones tecnológicas. Figura 1: Científico trabajando en su laboratorio A través de los medios de comunicación, la ciencia se asoma a nuestras vidas cotidianas: todos hemos visto imágenes de la famosa oveja Dolly (el primer mamífero clonado artificialmente), imágenes en color tridimensionales del cerebro humano, fotografías espectaculares de lejanas galaxias, o impactantes afirmaciones sobre inminentes desarrollos de las nuevas tecnología. Nuestro paisaje mental y cultural ha sido en gran parte dibujado por la ciencia, pero, ¿qué es la ciencia? Para empezar, podemos afirmar sin temor a equivocarnos que la ciencia es la forma de saber más eficiente descubierta por el ser humano, y que dicha eficacia no es más que una consecuencia directa de ser, la ciencia, expresión de una depurada estrategia metodológica. Figura 2: Árbol filogenético de algunos animales amniotas La ciencia es, además, una forma de conocimiento circunscrito a lo sensorial (si exceptuamos las ciencias formales, como la lógica y las matemáticas, de las que hablaremos más adelante), es decir, cuyo ámbito de acción abarca a todas las realidades que se nos hacen manifiestas a través de los sentidos, o bien a través de instrumentos de observación que son una prolongación tecnológica de nuestros órganos sensoriales (por ejemplo, un telescopio). Con todo, proclamar su eficacia y especificar su ámbito no es suficiente para caracterizar debidamente el conocimiento científico: en efecto, estamos ante una forma de conocimiento rico y complejo, y por lo tanto sus rasgos definitorios son numerosos. Mario Bunge, un prestigioso filósofo de la ciencia, ha señalado los siguientes rasgos: − La ciencia es fáctica (parte de los hechos y los respeta, no los tergiversa ni oculta) pero, a la vez, trasciende los hechos, es decir, va más allá de los hechos inmediatos y presentes. Página 2 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 − La ciencia es analítica: opera dividiendo los problemas en aspectos más y más pequeños y manejables. − La ciencia es especializada: la ciencia empieza su tarea delimitando un objeto, en el cual se especializa, lo que ha dado lugar a numerosas especialidades científicas. − La ciencia es clara y precisa. Este rasgo se debe, en gran medida, al uso de lenguajes artificiales, específicamente diseñados por los científicos para sus objetivos, y que carecen de los problemas del lenguaje ordinario (como las ambigüedades semánticas, las polisemias, las vaguedades). Hay que destacar, en este sentido, el importantísimo papel que juegan las matemáticas como lenguaje de la ciencia y como herramienta de trabajo para el científico. − La ciencia es comunicable: no es secreta ni esotérica, ni es solamente para unos pocos iniciados. − La ciencia es verificable: sus leyes y teorías son puestas a prueba y comprobadas experimentalmente (más adelante desarrollaremos específicamente este punto). − La ciencia es metódica: no procede por azar ni de forma caprichosa, sino siguiendo un método rigurosamente planificado (lo cual no excluye el papel que el azar juega a veces en la investigación científica). − La ciencia es sistemática: presenta sus resultados de forma organizada. − La ciencia es general: busca un saber que vaya más allá de lo particular, de los casos individuales. − La ciencia es legal: busca expresarse en forma de leyes y principios generales. − La ciencia es explicativa: busca explicar los fenómenos, no solamente describirlos. − La ciencia es predictiva: intenta hacer predicciones acerca de los fenómenos, de los hechos. − La ciencia es abierta: no pone a priori límites a sus conocimientos. − La ciencia es útil: si bien la motivación de la ciencia es el puro conocimiento, la aplicabilidad del conocimiento científico a la hora de diseñar tecnologías o de resolver problemas es una de sus características más notorias. Para saber más ¿Es el conocimiento científico superior a los otros saberes humanos?, por Jesús Peña Cedillo. http://universalia.usb.ve/anteriores/universalia15/colaboraciones/conocimiento_cient ifico.html Del conocimiento vulgar al conocimiento científico. Incluye las fases del método experimental. http://es.geocities.com/herprofesor2000/conovulg.html Página 3 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 TAREA 1 ¿Podrías destacar, de entre los 14 rasgos de la ciencia descritos por Mario Bunge, los tres que consideres más importantes en la ciencia? Justifica argumentalmente tu respuesta y envíasela al tutor. 2. Clasificación de las ciencias Hemos dicho, siguiendo a Mario Bunge, que la ciencia es una forma de saber especializado. Según esto, cada rama de la ciencia se especializa en un objeto, o en un ámbito o grupo de objetos, y se constituye como una ciencia separada, que a su vez puede contener múltiples especialidades subordinadas. Una consecuencia de esto es que podemos clasificar las diferentes ciencias según el objeto o tipo de objeto que estudian; de este principio, ha surgido una clasificación que es ya clásica, y que es la que se suele incluir en todos los manuales de filosofía. Pero, antes de ver esta clasificación, nos referiremos a las ciencias formales, que presentan ciertas peculiaridades respecto al resto de las ciencias. En efecto, cuando hablamos de la ciencia, o de la ciencia moderna, solemos referirnos a las ciencias empíricas, es decir, aquellas cuyo objeto es sensorialmente detectable. Sin embargo, aunque es indiscutible que las matemáticas son un auténtico saber científico, no es menos cierto que su objeto de estudio no es de carácter material, y que su verdadera naturaleza es, incluso, objeto de debate (por ejemplo, los números). Lo mismo ocurre con la lógica. Ambas disciplinas se denominan formales porque no tienen un objeto material, sino de naturaleza estrictamente formal, simbólica. Por ejemplo, las matemáticas estudian relaciones entre números; la lógica investiga razonamientos formalmente correctos, es decir, relaciones entre enunciados. Además, estas dos especialidades científicas son peculiares en su historia y en su método. En su historia, porque tanto matemáticas como lógica se han desarrollado mucho antes que las ciencias naturales y sociales. La lógica fue establecida, como ciencia, por Aristóteles, en la Grecia clásica (S. III a. de C.), mientras que las matemáticas son una forma de conocimiento de la que existen precedentes en numerosas civilizaciones de la Antigüedad. En su método, porque ambas son deductivas, es decir, en ellas se demuestran deductivamente sus postulados, pero no experimentalmente. Como dice Bunge, son probatorias, pero no verificables. Además, hay un tercer rasgo que las diferencia: tanto la lógica como las matemáticas, pero sobre todo estas últimas, son saberes instrumentales; es decir, son valiosísimas herramientas de trabajo para el resto de las ciencias, y forman parte esencial del lenguaje científico. Una vez dicho esto, veamos la clasificación: En primer lugar, como es obvio, las ciencias se dividen entre ciencias formales (aquellas cuyo objeto de estudio es de naturaleza formal) y ciencias materiales (aquellas cuyo objeto de estudio es de naturaleza material, o que al menos presenta un sustrato empírico, que puede ser experimentado sensorialmente). Respecto a las ciencias formales, como ya hemos apuntado, son fundamentalmente dos: las matemáticas, con todas sus ramas, y la lógica. Página 4 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Las ciencias materiales o empíricas se subdividen, a su vez, en ciencias naturales y ciencias humanas y sociales. Las ciencias naturales son aquellas cuyo objeto de estudio pertenece al ámbito de lo natural, entendido lo natural como la esfera de los fenómenos, sucesos y seres que no son producto del hombre. Así pues, desde el estudio de las estrellas hasta el estudio de los minerales, pasando por los animales, las plantas, los elementos químicos o los átomos son objeto de estudio de las ciencias naturales. Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Figura 3: Las ciencias de la naturaleza tienen como objeto de estudio los seres naturales: por ejemplo, la botánica estudia las plantas Históricamente, la primera de las ciencias naturales que cobró forma y se desarrolló con un cuerpo de teorías y leyes experimentalmente demostradas fue la física. En concreto, la dinámica, que es la rama de la física que estudia y establece las leyes y principios generales del movimiento. El pionero en esta rama de la física fue el genial físico y matemático italiano Galileo Galilei. Sus estudios sobre el movimiento fueron pioneros, sobre todo por la metodología usada, por la importancia de las mediciones (es decir, su aspecto cuantitativo, y no meramente descriptivo) y por la demostración experimental. Más adelante se desarrolló la química, con sus investigaciones sobre la naturaleza del calor y los elementos. Por último, la otra gran rama de las ciencias naturales: la biología, o estudio sobre la vida. Física, química y biología constituyen los tres campos básicos de las ciencias naturales, pero su amplitud y complejidad son enormes: existen literalmente cientos de subespecialidades dentro de cada uno de estos campos, con aplicaciones tecnológicas cada vez más prometedoras y complejas. Las ciencias humanas y sociales tienen como objeto de estudio el mundo del ser humano: empezando por el estudio del ser humano individual, desde el punto de vista de su conducta (psicología), hasta el estudio de la sociedad humana (sociología), pasando por el estudio científico de la diversidad cultural del mundo del hombre (antropología cultural). Figura 4: Las ciencias humanas y sociales estudian el mundo del hombre A su vez, estas tres ramas científicas se subdividen en muchas otras (por ejemplo, la psicología social, la macrosociología, o la antropología política), si bien, al ser su desarrollo más reciente que el de las ciencias naturales, y al tratarse de objetos de estudio mucho más complejos y difíciles de tratar cuantitativamente (es decir, mediante meras mediciones) hay que decir que se trata de disciplinas científicas todavía en fase de consolidación y desarrollo. Página 5 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 TAREA 2 Elabora un cuadro, basándote en los datos de la cuestión 2, donde aparezcan ordenadas y clasificadas todas las ciencias que hemos mencionado. Además, busca en Internet otras ramas de las diferentes ciencias mencionadas e inclúyelas en la clasificación. Envía tu tarea al tutor. http://es.wikipedia.org/wiki/Portal:Ciencia 3. La cuestión del método Otras de las características señaladas del conocimiento científico es que se trata de un conocimiento metódico y verificable. En efecto, la ciencia no trabaja al azar, ni siguiendo impulsos intuitivos; además, las afirmaciones que hacen los científicos no son gratuitas, ni aceptadas alegremente: son sometidas a un riguroso proceso de verificación. De hecho, podemos decir que si una afirmación de un laboratorio no puede ser verificada imparcialmente por otros laboratorios y científicos, es rechazada unánimemente por la comunidad científica. Por ello, podemos afirmar que la verificabilidad de leyes y teorías es parte esencial del conocimiento científico. De hecho, verificabilidad y método están inextricablemente unidos en el quehacer de la ciencia: la verificación es parte del método científico, y éste gira enteramente en torno a la verificación de las hipótesis, como veremos un poco más adelante. Sin embargo, antes de analizar en profundidad en qué consiste el método científico, debemos explicar qué es un método y qué tipos de métodos, en general, se han utilizado en las diversas tradiciones filosóficas y científicas. 3.1. Método y conocimiento. El método inductivo y el método deductivo La aplicación de un método para la realización de una tarea es algo cotidiano en el ser humano. Un método, en general, consiste en una serie de pasos prefijados que nos conducen a la obtención de un objetivo. El uso de un método bien contrastado es útil por muchas razones: ahorra tiempo y garantiza, si está bien utilizado, que los resultados van a ser los esperados. Figura 5: Galileo(1564-1642), fundador de la ciencia moderna Utilizamos, pues, métodos para resolver todo tipo de problemas, y así se hace también en el ámbito del conocimiento: queremos explicar un fenómeno, o desvelar las causas de un hecho, y solemos proceder metódicamente, por ejemplo, descartando hipótesis improbables y trabajando con las que mejor concuerdan con los hechos. Cuando la filosofía se centró en el problema del conocimiento, es decir, en cómo obtener un conocimiento fiable acerca de la realidad, es natural que se prestase gran atención a la cuestión del método. Muchos filósofos se preocuparon por este tema, y Página 6 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 trataron de sentar las bases para el uso de métodos que condujeran a un conocimiento riguroso. Esta preocupación por lo metodológico se produjo en los albores de la ciencia y, en términos generales, se consideró que eran básicamente dos los tipos de métodos que debían usarse, dependiendo del ámbito, del tipo de conocimiento y del objeto al que aplicarlo. El primero de ellos era el método inductivo. El filósofo inglés Francis Bacon (1561-1626) lo estudió minuciosamente y propuso que toda la ciencia debía basarse en él. El método inductivo provenía en parte de la observación del mundo natural, de los seres vivos, animales y plantas. En todas las culturas antiguas existía un amplio acervo de conocimientos sobre el entorno, sobre el mundo natural, del que dependía en gran parte la supervivencia. Había una gran acumulación de datos acerca de especies animales y vegetales, sus características, sus virtudes y peligros. Este conocimiento pragmático era desordenado y asistemático, pero muy rico en información y valioso. Figura 6: Francis Bacon (1561-1626) El método inductivo intenta dar rigor a esta forma de conocimiento, ordenando la observación y tratando de extraer conclusiones de carácter universal partiendo de la acumulación de datos particulares. Así, Bacon proponía un camino que condujera desde cientos y miles de casos individuales observados hasta el enunciado de grandes leyes y teorías de carácter general, por lo que el conocimiento tendría una estructura de pirámide, con una amplia base cimentada en la observación pura hasta una cúspide en la que se hallarían las conclusiones de carácter general y teórico. En resumen, tendríamos que dar los siguientes pasos: − Observación y registro de todos los hechos. − Análisis y clasificación de los hechos. − Derivación inductiva de una generalización a partir de los hechos. − Contrastación. Figura 7: Esquema método inductivo Página 7 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Pero esta propuesta adolecía de algunos defectos: en primer lugar, la observación “en bruto”. Para observar fructíferamente hay que saber qué observar, y para ello, debemos contar con una teoría previa que nos diga qué tenemos que observar y para qué. Por lo tanto, la observación no podía ser el inicio del método. El siguiente problema era cómo extraer conclusiones generales de la observación de casos particulares. Se han propuesto, a lo largo de la historia, variadas formas de lógica inductiva, es decir, instrucciones para extraer conclusiones a partir de observaciones particulares. John Stuart Mill (1806-1873) propuso una serie de tablas inductivas que cumplieran esa función. Si observamos el fenómeno A en repetidas ocasiones, y siempre que aparece dicho fenómeno (por ejemplo, la aparición de tormentas eléctricas) antecede un fenómeno a, (por ejemplo, una combinación de temperatura y grados de humedad del aire), podemos llegar a la conclusión de que a es la causa de A. Sin embargo, esta conclusión no es rigurosamente correcta: solamente nos indica una probabilidad, pero no una certeza absoluta. Por lo tanto, si nos apoyamos en el método inductivo conseguiremos un conocimiento probable, pero no una certeza absoluta. En resumen: el método inductivo es problemático. El segundo método era el método deductivo. Este método estaba vinculado históricamente a las ciencias formales: a la lógica, las matemáticas y la geometría. Ya entre los siglos III y II a. de C. Euclides escribió una famosa obra, Elementos de geometría, en la que, inspirándose en la Lógica aristotélica, demostraba una serie de tesis geométricas deductivamente a partir de unos principios o axiomas generales. Así funciona el método deductivo: a partir de principios generales, y con la ayuda de una serie de reglas de inferencia, se demuestran unos teoremas o principios secundarios. Figura 8 : Esquema método deductivo Las ventajas del método deductivo se cifran sobre todo en el rigor y la certeza: podemos estar seguros de que, si las premisas o principios generales son verdaderos, entonces los teoremas o conclusiones también lo son. Un ejemplo clásico, procedente de la lógica aristotélica, sería el siguiente silogismo o razonamiento: Todos los hombres son mortales Sócrates es hombre En consecuencia, Sócrates es mortal Si admitimos que las dos premisas son verdaderas, tenemos que admitir forzosamente que la conclusión es verdadera. No obstante, el método deductivo, pese a su rigor, tiene un serio inconveniente: no nos proporciona información nueva acerca de los hechos. Es un método formal, es decir, afecta a la forma de los razonamientos, y no Página 8 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 al contenido. De ahí que su esfera de aplicación la constituyan las ciencias formales, pero sea insuficiente como método para las ciencias naturales 3.2 El método hipotético-deductivo Para que eclosionara la ciencia moderna, fue necesaria una síntesis genial entre ambos métodos, un método que aunara la observación empírica con la deducción formal, el valor de los hechos con el valor de los razonamientos. Esa síntesis se produjo en el siglo XVII, y fue obra, esencialmente, de Galileo Galilei. En sus estudios sobre el movimiento de los cuerpos, Galileo utilizaba profusamente la observación y la medición, pero no se limitaba a ello: diseñaba experimentos con los que ponía a prueba sus hipótesis. De este modo, su método era, a la vez, empírico y probatorio, inductivo y deductivo. Veremos en qué consiste el método hipotético-deductivo (H-D) paso a paso y a través de un ejemplo. Observación En efecto, el primer paso del método H-D es la observación. Sin embargo, conviene matizar en qué consiste esta “observación” en el quehacer científico normal. Y lo haremos a través de un ejemplo. Supongamos que trabajamos en un proyecto de astronomía para el que debemos realizar una serie de mediciones astronómicas. Por ejemplo, debemos analizar la composición de la atmósfera marciana. Nuestro trabajo se basará, pues, en una observación sistemática y un posterior análisis químico de lo observado. Figura 9: Observatorio La Silla. La observación sistemática es el primer paso del método científico Esta es la observación denominada “normal” en ciencia: una observación que se inscribe en un marco teórico determinado. Como tal, esta observación se limita a recabar datos, datos que son los esperables en función de nuestros conocimientos previos. Este aspecto de la ciencia es inductivo. Pero, supongamos que, en nuestras observaciones, encontramos un fenómeno inesperado, una anomalía que no tiene explicación en el contexto de nuestras teorías y conocimientos aceptados. Es aquí donde se pone en marcha todo el mecanismo explicativo del método científico. Propuesta de hipótesis El segundo paso consiste en proponer hipótesis que sirvan para explicar la anomalía detectada. Imaginemos que se ha detectado la presencia de un compuesto químico orgánico en la atmósfera marciana. Para explicar esto, los científicos deben proponer una serie de hipótesis. Una hipótesis es, en realidad, una explicación provisional. Por ejemplo, nuestra hipótesis es que la presencia de dicho compuesto se debe a la presencia de la vida en Marte, de bacterias que expelen oxígeno a la atmósfera. Esta hipótesis es congruente con los hechos observados. A la vez, es sencilla y puede ser puesta a prueba, es decir, puede ser verificada. Página 9 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Estas tres características, congruencia con los hechos, sencillez y verificabilidad, son características que deberían cumplir siempre las hipótesis. Verificación Pero no basta con proponer hipótesis: hay que verificar si son correctas. Y para hacerlo hay que diseñar un experimento. Este es el momento deductivo del método H-D. Un diseño experimental se basa siempre en un razonamiento, en una deducción del siguiente tipo: si nuestra hipótesis p es correcta, entonces encontraremos el efecto observable q. ¿Encontramos q? Si es así, entonces es seguro que p es correcta. En caso contrario, p no es correcta, y deberemos formular una hipótesis alternativa. En nuestro ejemplo, si la hipótesis de la presencia de vida es correcta, entonces deberíamos encontrar rastros, por ejemplo, de clorofila. Y, por consiguiente, debemos buscar clorofila. Si la encontramos, la hipótesis recibe un espaldarazo experimental. En caso de que no se encuentre, eso significaría que probablemente nuestra hipótesis no es correcta, por lo que deberíamos empezar a pensar en otra alternativa. Leyes y teorías Una vez que una hipótesis recibe la suficiente evidencia experimental, empieza a ser aceptada por toda la comunidad científica. La hipótesis deja de ser provisional y se convierte en un hecho verificado, lo cual afecta a las teorías hasta entonces vigentes, y a las leyes conocidas sobre la naturaleza. La misma hipótesis puede ser de carácter teórico general y ser, en consecuencia, una nueva teoría, o quizás se trate de un principio menos general, parte de una teoría previa que debe ser así modificada. Una teoría es un conjunto de enunciados articulados que trata de explicar un aspecto determinado de la realidad. Es de carácter muy general, y su valor reside en que nos permite comprender, explicar y predecir los fenómenos del ámbito de la realidad a la que se refiere. Por ejemplo, la Teoría General de la Evolución de las Especies es una teoría general sobre la diversidad de los seres vivos. Explica esa diversidad, nos permite comprender mejor cómo funciona la naturaleza y nos permite predecir determinados cambios que se producirán en el futuro. La teoría se aplica a todos los seres vivos, es de alcance universal. Una ley es un aspecto también general del conocimiento científico pero que describe el funcionamiento concreto de algún aspecto de esa realidad. Por ejemplo, dentro de la teoría de la evolución puede afirmarse que siempre que se produce una mutación adaptativa ventajosa, el rasgo producto de esa mutación tiende a preservarse y a sustituir al menos ventajoso. Esto sería una ley general, pero que afecta solamente a un aspecto particular, y que se encuentra dentro de una teoría. Página 10 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Figura 10: Esquema método hipotético-deductivo Para saber más Test sobre el método hipotético-deductivo: http://www.paginasobrefilosofia.com/html/Bachi1/Tema9/ciencia2.html TAREA 3 ¿Podrías poner más ejemplos de teorías científicas generales y de leyes científicas? Tienes un enlace muy interesante sobre astronomía en: http://www.astromia.com/astronomia/leyteoria.htm Enviar al tutor. 3.3 ¿Verificación o falsación? Antes, cuando hablábamos de la verificación de las hipótesis, hemos dejado de lado una importante cuestión. Se trata de lo siguiente: cuando un experimento tiene éxito, decíamos que la hipótesis resulta verificada; cuando fracasa, decíamos que la hipótesis es refutada. Pues bien, desde un punto de vista lógico, la refutación es “más fuerte” que la verificación. ¿Por qué esto es así? Para comprenderlo, es importante comprender las reglas de la lógica de enunciados. Puesto que todavía no hemos estudiado lógica, intentaremos aclararlo mediante un ejemplo. Consideremos el siguiente razonamiento natural: “Si llueve la calle se moja. Es así que la calle se ha mojado, por lo tanto es verdad que ha llovido”. Si observas con detenimiento este razonamiento, verás que es formalmente idéntico a un ejemplo de verificación positiva. Pero, ¿es un razonamiento correcto? En el razonamiento decimos que siempre que llueve, la calle se moja, y que la calle se ha mojado. ¿Nos permite eso deducir que ha llovido? ¡No! La razón es muy sencilla: la calle se ha podido mojar por cualquier otra razón (por ejemplo, porque la han regado). Por consiguiente, puesto que la lógica interna de la verificación se apoya en una forma de razonar incorrecta, no podemos decir que la verificación, cuando es positiva, sea Página 11 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 concluyente. Nos da un indicio, una probabilidad, pero no una certeza (de igual modo que, en el razonamiento del ejemplo, el hecho de que la calle esté mojada no demuestra que haya llovido, aunque sí nos da cierta probabilidad de que así haya sido). Ahora, consideremos el siguiente razonamiento: “Si llueve, la calle se moja. La calle no se ha mojado. Luego no ha llovido”. ¿Es correcto este razonamiento? Sí, lo es: totalmente correcto. Desde un punto de vista lógico, este razonamiento es formalmente correcto. Cuando en ciencia se da una verificación negativa de la hipótesis decimos que la hipótesis es refutada, y como hemos visto, la lógica interna de la refutación es formalmente correcta. Por eso, decimos que la refutación es “más fuerte” que la verificación. Apoyándose en esto, el filósofo de la ciencia Karl R. Popper (1902-1994) propuso lo siguiente: la tarea de los científicos no es intentar verificar sus hipótesis, sino tratar de refutarlas. No obstante, otros filósofos de la ciencia adujeron que el funcionamiento normal de la ciencia no consiste en tratar de refutar las hipótesis, sino en tratar de confirmarlas. Entre ellos, el historiador de la ciencia Thomas S. Kuhn (1922-1996). Kuhn sostenía que la ciencia se desarrolla en el contexto de grandes marcos teóricos o paradigmas. Un paradigma es una especie de visión general de la realidad que es aceptado de hecho por todos los científicos. Un ejemplo era el paradigma mecanicista newtoniano. En el seno de ese paradigma, se lleva a cabo lo que antes hemos denominado “ciencia normal”. Eventualmente, sin embargo, en el seno de un paradigma, pueden acumularse anomalías, es decir, datos observacionales inexplicables dentro de ese paradigma. Cuando las anomalías se acumulan en demasía, se produce lo que Khun denominaba un “cambio revolucionario de paradigma”, momento en el Figura 11: La fórmula clave de la teoría cual la ciencia entraba en un proceso “revolucionario”. Al de la relatividad de Einstein, una de las final de este proceso, se imponía una nueva visión de la teorías más verificadas de la historia de realidad (como ocurrió con la mecánica newtoniana, sustituida por la teoría de la Relatividad General de Einstein). Popper y Khun entablaron a este respecto una interesante polémica, muy célebre en la moderna Filosofía de la Ciencia. El modo normal de funcionar la ciencia parece dar la razón, sin embargo, a Khun. ¿Qué ocurre cuando una hipótesis recibe un revés experimental? ¿Es inmediatamente abandonada? De hecho, no ocurre así: los autores de la hipótesis tratan de ajustarla, o de repetir el experimento, o de diseñar un experimento distinto. Solamente cuando se repiten los resultados negativos una y otra vez una hipótesis es considerada refutada y abandonada. Para saber más: http://www.proyectoafri.es/ffia1/cd3fciencia/ffiaciencia/falsacion1.htm Sobre Popper y el falsacionismo: http://www.liceus.com/cgi-bin/ac/pu/popper.asp Página 12 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 No obstante, esto nos lleva a la siguiente idea: en ciencia, todo el conocimiento es provisional, puesto que se apoya siempre en verificaciones. Incluso las teorías más exitosas (por ejemplo, la teoría general de la relatividad de Einstein, que es la teoría que ha recibido mayor número de confirmaciones o verificaciones experimentales, es una teoría provisional, puesto que siempre cabe la posibilidad de que un próximo experimento resulte negativo. 4. Filosofía crítica de la ciencia Hemos examinado algunas cuestiones más o menos técnicas acerca de la ciencia. Sin embargo, es importante que veamos también qué impacto tiene la ciencia en la vida del hombre: no solo en lo que respecta al impacto tecnológico, que es evidente, sino al impacto en la vida espiritual y cultural del ser humano. Es evidente que la ciencia no es tan sólo una empresa dedicada a producir conocimientos y tecnologías más y más avanzadas. Su impacto es tal, que toda la vida humana se ha visto sacudida por su éxito. Por eso, es importante que examinemos ese impacto con ojos críticos, sin dejarnos fascinar en exceso por el aura de éxito de la ciencia. Dirigiremos nuestra mirada crítica a tres aspectos importantes de ese impacto: el cientificismo, la neutralidad de la ciencia y los fraudes científicos, con el fin de desmitificar la ciencia y valorarla en su justa medida. 4.1 El cientificismo La ciencia es, pues, una forma de conocimiento riguroso y fiable, pero lo es, como hemos visto, en parte porque abandona toda pretensión de ser definitivo y absoluto, en parte porque el científico se somete siempre, con cierta humildad, al tribunal de los hechos. Es decir, que es su misma falta de pretensiones lo que convierte a la ciencia en una herramienta tan poderosa. Sin embargo, numerosas veces aceptamos acríticamente cualquier afirmación solo porque lleva el “marchamo” de científica. Y llegamos al absurdo de creer que solamente lo que ha sido demostrado científicamente es real. Esta postura es el cientificismo. El cientificismo consiste en extrapolar el conocimiento científico, sacarlo de su contexto y convertirlo en una especie de “verdad absoluta” que aceptamos acríticamente. Pero la verdadera ciencia no cae en estas posturas extremas. 4.2 La neutralidad de la ciencia ¿Es la ciencia neutral? ¿Políticamente, culturalmente neutral? O, por el contrario, ¿está la ciencia contaminada por nuestros prejuicios e ideologías? Recordemos que, durante el período nazi en Alemania, los jerarcas del régimen decían que había una “ciencia judía” (en referencia a Einstein, que era judío) y una “ciencia aria”, que era más pura y noble. También en la antigua URSS se hablaba de que había una “ciencia burguesa” y una “ciencia socialista”. Incluso hubo proyectos de investigación clamorosamente fraudulentos pero a los que el estado soviético dio gran relevancia. Figura 12: Albert Einstein, el genial científico alemán, tuvo que escapar del régimen nazi. Página 13 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Por otra parte, tenemos el hecho de que la ciencia moderna colabora activamente con el poder militar, y que muchos de los desarrollos tecnológicos y científicos reciben impulso por el dinero que reciben de las industrias armamentísticas. El caso más clamoroso es el de la tecnología atómica. La bomba de hidrógeno es la mayor fuerza destructiva desencadenada por la humanidad, y en su desarrollo trabajaron muchos científicos. Figura 13: La bomba de hidrógeno es un ejemplo del poder destructivo de la ciencia cuando es mal usada. Digámoslo, pues: los científicos pueden no ser neutrales. Como seres humanos, pueden abrazar causas políticas o ideológicas moralmente inaceptables, y poner a su servicio sus habilidades y conocimientos. Por otra parte, la ciencia, entendida como conjunto de conocimientos, tampoco es neutral. Y no lo es porque toda actividad científica se desarrolla en el contexto de una cultura, que tiene unos valores, unas preferencias, unos objetivos y unos intereses. En una sociedad como la nuestra, militarista, es lógico que tengamos una ciencia vinculada al desarrollo de las armas. En una sociedad pacifista, nadie gastaría dinero en desarrollar programas científicos armamentísticos. La ciencia está estrechamente vinculada al poder económico, sobre todo porque es una actividad que cuesta mucho dinero, y por tanto acaba subordinándose a los intereses de la industria. Pero sí podemos afirmar que el método científico es neutral. Precisamente por ello es eficiente: si pudiera ser alterado en función de las ideologías o los intereses, no funcionaría. Pero, también precisamente por ello puede ser utilizado en cualquier sociedad, para cualquier objetivo, sea éste moralmente aceptable o no lo sea. 4.3 Ciencia y fraude La ciencia, por último, no está libre de los errores, manipulaciones, mentiras y fraudes de cualquier actividad llevada a cabo por el ser humano. Probablemente, si la ciencia la hicieran los robots o los ordenadores, no habría posibilidad de fraudes científicos, pero los científicos son humanos y por tanto pueden sucumbir a las tentaciones de la ambición y el prestigio. Recientemente, hemos asistido al desvelamiento de importantes fraudes científicos. Un equipo de investigadores coreanos proclamó haber obtenido con éxito embriones humanos clonados. Poco después, se supo que todo había sido un falso montaje. Ha habido muchos y muy espectaculares fraudes en la historia de la ciencia. Para saber más: Sobre la neutralidad de la ciencia. http://www.fgbueno.es/bas/bas10105.htm Sobre fraudes científicos. http://www.bibliometria.com/una-cronologia-del-fraude-cientifico Página 14 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Por suerte, la ciencia es una actividad que se protege muy eficazmente contra todo tipo de mentiras y engaños. La razón es que en su propio funcionamiento interno, todo debe ser verificado. No basta con que un laboratorio afirme haber obtenido un resultado positivo en un determinado experimento: en todo el mundo, se ponen en marcha inmediatamente nuevos experimentos para confirmarlo. El resultado es que, antes o después, el fraude es detectado. En conclusión, la ciencia es una de las más apasionantes aventuras emprendidas por el ser humano: la aventura de una forma de saber que está empezando a desvelar algunos de los más recónditos secretos de nuestro mundo y nuestra especie. Es por ello muy importante que conozcamos su funcionamiento. Pero también, por esa misma razón, es muy importante mantener una mirada críticamente activa sobre la tarea científica, una mirada que es filosófica, respetuosa con la ciencia, conocedora de sus mecanismos y, por ello mismo, desmitificadora y realista. Comentario de Texto El texto que se te propone para esta segunda unidad no es un texto filosófico usual. Se trata, más bien, de un texto de divulgación científica, y por lo tanto ceñido a los contenidos de la unidad que acabas de estudiar. También por ese motivo el comentario que debes realizar no ha de seguir las instrucciones que recibiste en la primera unidad, sino que debes realizarlo de otro modo. A modo de ejemplo, realizaremos a continuación un ejercicio muy parecido, basado en un texto del mismo tipo, con unas cuestiones que responderemos para que puedas inspirarte. MODELO DE EJEMPLO “De la teoría de Einstein se derivaba una tercera predicción: el tiempo transcurriría más despacio cuando nos desplazásemos a campos gravitatorios más intensos. El efecto sería extremadamente pequeño salvo cuando la diferencia fuese muy grande. En el caso de la Tierra, sabemos que a medida que nos alejamos de la superficie disminuye el campo gravitatorio. Esto significa que si sincronizamos dos relojes en la superficie y luego elevamos uno de ellos, hasta una altura de 300 metros, por ejemplo, dicho reloj irá más deprisa que el que se ha quedado en la superficie. Este fenómeno se comprobó en 1925, pero no con relación a la Tierra, sino respecto a la enana blanca compañera de la estrella Sirio (una enana blanca es una estrella de una densidad extrema y con un campo gravitatorio muy intenso). Como cerca de esta enana blanca el tiempo transcurre con mayor lentitud, la radiación que emite se transforma en frecuencia. Se calculó dicha transformación y las observaciones corroboraron el cálculo efectuado. En 1956 se descubrió el efecto llamado Mossbauer, lo que permitió a los científicos comprobar este mismo resultado en la Tierra. Se encontraron en condiciones de comparar el tiempo medido por u reloj atómico emplazado sobre la superficie de la Tierra, con el registrado por otro reloj situado a quince metros de altura, y la diferencia entre los tiempos medidos por ambos relojes se ajustó a la teoría de Einstein” Página 15 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Tomado de: Parker, Barry El sueño de Einstein, Ed. Cátedra, Madrid, 1990. Cuestiones: 1) ¿Cuál era la teoría que se deseaba verificar? La teoría general de la relatividad de Einstein. 2) ¿Cuál era la predicción hecha a partir de la teoría? La predicción era que el tiempo transcurriría más despacio cuanto más cerca se midiese de un campo gravitatorio. 3) ¿En qué consistía el experimento? En realizar diversas mediciones para corroborar si se cumplía la predicción. Una se realizó midiendo la frecuencia de la radiación de una estrella enana blanca compañera de la estrella Sirio en 1925; la otra se realizó usando dos relojes atómicos en la tierra, uno situado en la superficie y otro a quince metros. La medición corroboró o predicho por la teoría. 4) El resultado del experimento, ¿verifica o refuta dicha teoría? La verifica, pero la verificación nunca puede considerarse definitiva. Ahora, deberás hacer un ejercicio de comentario parecido al anterior. En primer lugar, debes leer el texto detenidamente asegurándote de que lo entiendes bien. A continuación, deberás responder con la mayor exactitud y claridad posible las cuestiones que se proponen al final. El texto, como el anterior del ejemplo, trata acerca del método H-D, y por lo tanto las cuestiones propuestas giran en torno a ese tema. Es importante, por ello, que hayas estudiado previamente bien esta cuestión, y que la hayas entendido sin ninguna duda, pues el texto no es otra cosa que un caso real de puesta en práctica del método científico. El texto es el siguiente: Tarea 4 “La única esperanza de verificación de la GTU (Gran Teoría Unificada) sería detectar algún efecto indirecto predicho a partir de dicha teoría, y la desintegración del protón era la predicción obvia. Según las reglas de la física cuántica, 10 elevado a 31 años es la vida media del protón, y eso significa que si reunimos 10 elevado a 31 protones es de esperar que uno de ellos se desintegre en un año o dos. Hasta aquí, la predicción. Se pusieron en marcha en todo el mundo experimentos refinados. Uno de los mejores tenía lugar en una mina de sal a 600 metros por debajo del lago Erie. Los protones necesarios para el experimento llegaron bajo la forma de 8.000 toneladas de agua altamente purificada contenida en un tanque cúbico de unos 18 metros de diámetro. Página 16 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 En el agua se dispusieron 2.000 tubos fotomultiplicadores. Su tarea era detectar los minúsculos pulsos de luz que se producen cuando las veloces partículas cargadas circulan a través de un medio denso. La intención era localizar los productos energéticos de la desintegración de los protones registrando estos breves destellos de luz. Si la estimación de 10 elevado a 31 años era correcta, el experimento del lago Erie debería registrar varias desintegraciones en los primeros meses de funcionamiento. En realidad, no se detectó ni una sola desintegración protónica. Este resultado negativo no refuta la GTU, pero parece descartar las versiones más simples de la teoría”. Tomado de: Davies, Paul: Superfuerza, Salvat Editores, 1988. CUESTIONES: 1) ¿Cuál era la teoría que deseaban verificar los científicos? 2) ¿Cuál era la predicción de la teoría elegida para la verificación? 3) ¿En qué consistía el experimento diseñado en el lago Erie? 4) ¿Qué debería haber ocurrido según la teoría? 5) ¿Qué ocurrió en realidad? 6) El resultado del experimento, ¿verifica o refuta la teoría? 7) ¿Es normal que un resultado negativo en un experimento no refute una teoría? ¿Por qué? Una vez hayas finalizado la tarea, envíasela a tu tutor. Página 17 de 18 1º Bachillerato Humanidades y Ciencias Sociales Filosofía y Ciudadanía Unidad 2 Bibliografía y Recursos Libros recomendados: − Asimov, Isaac: Yo, robot, Ed. Edhasa. − Huxley, Aldous: Un mundo feliz. http://www.laeditorialvirtual.com/ar − Mason; Stephen F.: Historia de las ciencias, 5 vols., Alianza Editorial. − Ortega y Gasset, José: Meditación de la técnica, Editorial. Películas interesantes sobre el tema: − Galileo Galilei, de Liliana Cavani. − Gattaca, de Andrew Niccol. − Tiempos modernos, de Charles Chaplin. Más páginas web: − “El conocimiento científico: orígenes, métodos y límites”. Tema 2 (Ruta 2) de Aula Filosofía 1º Bachillerato CNICE (Actividades interactivas de aprendizaje) http://recursos.cnice.mec.es/filosofia/ruta1.php?tipo=2&seccion=1&ruta=2&etapa=1&explo rador=3 − Sobre la ciencia: elige en el menú izquierdo “Filosofía I” “LA CIENCIA”. http://www.bipedosimplumes.es/ − Revista Eureka, interesante revista de divulgación de temas científicos. http://www.apac-eureka.org/revista/index.htm − Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura. Página sobre ciencia, tecnología y sociedad con enlaces, foros, publicaciones… http://www.oei.es/ctsienla.htm − Sopa de Ciencias, página web interesante sobre divulgación científica. http://www.sopadeciencias.es/ − La Wikipedia es uno de los mejores recursos sobre ciencias. http://es.wikipedia.org/wiki/Ciencia_popular − Cienciateca.com, otra interesante revista digital sobre divulgación científica, con temas de actualidad y enlaces. http://www.cienciateca.com/ Página 18 de 18