Download UNIDAD IV: TEORÍAS, MEDICIÓN Y CAMBIO DE ACTITUDES

PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
CAPITULO IV: TEORÍAS, MEDICIÓN Y CAMBIO DE ACTITUDES
1. IMPORTANCIA PSICOSOCIAL
2. TEORÍAS CLASICAS
2.1. DEFINICIÓN Y CONCEPTO
2.2. FUNCIONES
2.2.1. ADAPTATIVA
2.2.2. ECONÓMICA
2.2.3. EXPRESIVA
2.2.4. DEFENSIVA
2.3. ESTRUCTURA, COMPONENTES Y DIMENSIONES
2.3.1. ESTRUCTURA COGNOSCITIVA
2.3.2. ESTRUCTURA AFECTIVA
2.3.3. ESTRUCTURA CONDUCTUAL
2.3.4. VALENCIA Y MULTIPLICIDAD
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PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
1. IMPORTANCIA PSICOSOCIAL
El tema de las actitudes es central en todo análisis y discusión teórica. Son varios los
motivos que hacen de este tema un conocimiento de gran relevancia para la psicología
social. Ha pretendido ser el tema de análisis central en la disciplina la de psicología
social. De hecho hay autores que así lo establecen.
 El concepto de actitud, contrariamente a otros conceptos de la psicológica, carece de
orientación teórica o filosófica, como lo son por ejemplo los conceptos derivados de la
ciencia conductista o del psicoanálisis. Ellos son propio de cada una de estas
disciplinas. En consecuencia, el concepto de actitud es común en todas las
psicologías o disciplinas (sociología, antropología, economía, política), es decir,
pertenece a un vocabulario técnico de las ciencias en general, requiere de un enfoque
multidisciplinario, interdisciplinario y transdisciplinario, sirve de puente no sólo entre
las distintas orientaciones de la psicología sino también sirve de puente para los
trabajos con otras disciplinas sociales. Un ejemplo de esto lo constituye un estudio
efectuado por los antropólogos físicos que publicaron estudios donde las personas
manifestaban sus actitudes frente a órganos de su cuerpo como el corazón, los
pulmones, etc., y se encontraron con fenómenos etic con respecto al corazón,
destacando que el corazón era el centro de los sentimientos, y por eso se habla de la
“gente de buen corazón”, refiriéndose a la calidad humana de las personas. Estos
estudios han despertado gran interés en organismos de Salud Pública, puesto que se
ha detectado que la actitud hacia los órganos humanos influye fuertemente en la
donación de órganos. Análogamente ocurre algo similar con las actitudes de las
personas en relación a la política, la economía, etc.
 Otra importancia crucial de las actitudes es que ellas siempre han sido observadas
como una de las posibles variables que permite integrar o predecir comportamientos,
en otras palabras existe la presunción que actitudes y comportamientos se relacionan
de alguna manera. Por ejemplo una actitud favorable frente al catolicismo, propicia en
la persona comportamientos orientados a un respeto a las normas o tradiciones de la
iglesia católica como lo es el bautizo de los hijos, la educación en colegios católicos,
la abstinencia de carne en Semana Santa, etc. Nuestras actitudes tienen incidencia
también en nuestros prejuicios y nuestros estereotipos, es decir, los comportamientos
de atracción o de rechazo hacia determinados grupos sociales de una u otra manera
también estarían influidos por las actitudes.
 Los seres humanos, de cualquier condición, inevitablemente desarrollan actitudes
hacia innumerables objetos. Si una persona es relativamente normal, lo más probable
es que tenga ciertas actitudes de aprobación o de rechazo, de simpatía o de antipatía,
de acuerdo o desacuerdo frente a problemas muy trascendentales como lo el divorcio,
el aborto, la pena de muerte, los derechos humanos, frente a la obligatoriedad del
servicio militar obligatorio, etc, es decir, gran cantidad de objetos de actitud
importantes o trascendentes, sin embargo, ocurre que también los seres humanos
tenemos actitudes frente a objetos de actitudes mucho menos trascendentes como
son actitudes hacia colores, hacia climas, hacia alimentos, etc. En síntesis, la cantidad
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de objetos de actitud respecto de los cuales cada uno de nosotros desarrolla actitudes
es prácticamente infinito, al contrario de los valores, cuyo numero es limitado (18
valores instrumentales y 18 valores terminales). Cuando nos referimos a las actitudes,
en consecuencia, no referimos a un número muy cercano al infinito.
Estos puntos justifican la importancia de los valores para el estudio de la psicología
social. La importancia psicosocial de las actitudes se demuestra claramente por cuanto
la psicología social desde su nacimiento, ha invertido mucho trabajo, recursos y
esfuerzo para intentar estudiar, clasificar y conocerlas. Esto ha traído como resultado
que ésta área es hoy día la de mayor estudio y productividad, por la enorme cantidad de
investigación científica. Esta prolifera investigación ha producido tres grandes logros:
 Logros en el área teórica, donde se disponen de una gran cantidad de teorías que se
han intentado agrupar en tres grandes segmentos: Teorías Clásicas, Teorías de la
Disonancia Cognitivas y las Teorías de Acción Razonada.
 Logros en la medición, que corresponde a todo un conjunto de herramientas,
instrumentos y escalas para medir las actitudes tales como las escalas tipo LIKERT,
THURSTONE, GOODMAN, FISHBEIN, BOGARDUS, etc.
 Como consecuencia del conocimiento teórico y producto de las herramientas de
medición se ha generado una gran cantidad de tecnología que ha permitido obtener
cambio de actitudes.
De lo anterior se desprende que en el tema de las actitudes no exista dificultad para
cumplir con el ciclo de la investigación aplicada que caracteriza el trabajo del profesional
de la psicología (aún cuando nunca realice trabajos de investigación o científico). En
consecuencia, este ciclo lo conforma:
 DIAGNOSTICO (Detección del trastorno)
 INTERVENCIÓN (Diseño de acciones correctivas - terapia u otras)
 EVALUACIÓN (Observación de los resultados de la intervención)
Por ejemplo. El psicólogo organizacional que es llamado por el gerente de una empresa
para estudiar la alta rotación de personal que enfrenta la empresa. Para ello deberá
diagnosticar la situación (causas de la rotación), deberá elaborar una acción de
intervención y deberá evaluar los resultados de esta intervención (si disminuyó o no la
rotación).
Esto es investigación aplicada, en cuyo caso, respecto a las actitudes, el ciclo ya
señalado se puede cumplir totalmente, es decir, podemos diagnosticar las actitudes de
la gente respecto a diferentes materias, aplicando instrumentos de medición que revelen
resultados que permitan detectar lo que ocurre en la realidad. En consecuencia, la
detección de este fenómeno da paso a un programa de cambio de actitudes y
posteriormente efectuar una evaluación para determinar si este programa dio o no los
resultados esperados.
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2. TEORÍAS CLASICAS
2.1. DEFINICIÓN Y CONCEPTO
Las teorías clásicas son aquellas que corresponden al período clásico de la psicología
social cuando empiezan a desarrollarse las primeras concepciones teóricas. Estas se
caracterizan por originarse en una definición que es atribuida a Gordon Allport, el cual
conceptualiza las actitudes como sigue:
“Actitudes son predisposiciones para reaccionar favorable o desfavorablemente frente a
un objeto organizadas a través de la experiencia y que ejercen influencia directa o
dinámica1 sobre el comportamiento”.
 El análisis de esta definición nos ilustra en primer lugar respecto de que las actitudes
son predisposiciones de reacción, es decir, ellas no pueden confundirse con
conductas sino que preceden a la conducta. Por esto, “actitud” en latín significa
postura, que permite anticipar la conducta que va a tener una persona. Por ejemplo,
los actores de teatro se preocupan de la expresión corporal, en el sentido que la
expresión corpórea permita al espectador anticipar qué tipo de reacción esta sintiendo
el actor y qué conducta va a ejecutar. El individuo desarrolla la capacidad psicosocial
de anticipar o predecir la conducta de otro individuo, observando la actitud.
 La definición dice también que estas predisposiciones implican una reacción favorable
o desfavorable frente a un objeto, es decir, si nuestro objeto de actitud es averiguar
qué piensan los estudiantes
frente a la obligatoriedad del servicio militar,
probablemente la actitud expresada irá desde un polo de máxima preferencia al
máximo desacuerdo, es decir habrá estudiantes que estarán absolutamente de
acuerdo con la obligatoriedad del servicio militar y otros que no, o bien estarán
indecisos; lo mismo ocurrirá respecto a la pena de muerte u otros temas de interés.
 Se señala también, que las actitudes se organizan a través de la experiencia. Esto
implica que las actitudes se tienen que aprender a través de la experiencia que se
denomina aprendizaje social, socialización, endoculturización. Las actitudes se
aprenden en la familia nuclear o substituta, generalmente compuesta por padres y
hermanos, mediante las opiniones aisladas que el niño escucha de sus padres,
respecto a diferentes sucesos o temas, lo cual va configurando una manera de opinar
del niño, conforme a este aprendizaje. Piaget denomina a esto “opiniones complejas”
o “sistemas de opiniones”, es decir, el niño va agrupando opiniones aisladas en
sistema de opiniones, por ejemplo: “mis papás son católicos”; ”Mis papás son
deportistas” ; Mis papás son alegres”, etc. Con ello el niño va siendo capaz de opinar
qué es lo que les gusta y qué es lo que no les gusta. Probablemente los sistemas de
opinión dan lugar a creencias que a su vez se organizan en “sistemas de creencias”
los que a su vez van a dar origen a valores, que se organizan a través de sistemas o
jerarquía de valores y esto determina lo que se conoce como Ideología Psicosocial
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Dinámica se refiere a una influencia imaginada, no real
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que hace, por ejemplo, que cuando un sujeto sea padre de familia, su Ideología
Psicosocial se exprese en las opiniones que le dirá a sus hijos (es un proceso en
cadena). Esto ejemplifica por qué las actitudes tienen una cierta organización.
 Al decir que las actitudes ejercen influencias directas y/o dinámicas sobre el
comportamiento, permite explicar que, por un lado, la actitud de una persona,
sumamente positiva hacia un objeto de actitud cualquiera permite suponer que las
conductas resultantes sean coherentes con esa actitud, si por el contrario, estamos al
frente de una persona con una actitud notablemente contraria a un objeto de actitud,
permite entender que la persona va a tener conductas negativas hacia ese objeto de
actitud. Esto explica el porqué las actitudes ejercen una influencia directa sobre la
conducta. Por otro lado, al decir que una actitud puede ejercer una influencia
dinámica, significa que puede darse el caso en que las actitudes no se relacionen con
la voluntad o que las actitudes se relacionen contra actitudinalmente, es decir, que
una persona pueda actuar en contra de sus actitudes.
En consecuencia, si tenemos infinitas posibilidades de desarrollar actitudes, para algo
servirán, alguna funcionalidad psicosocial tendrán.
2.2. FUNCIONES
Las investigaciones han podido determinar al menos cuatro funciones de las actitudes:
2.2.1. FUNCIÓN ADAPTATIVA UTILITARIA O INSTRUMENTAL
En todas las culturas los seres humanos desarrollamos algunas actitudes positivas hacia
aquellos objetos que son recompensantes y desarrollamos actitudes negativas frente a
objetos castigadores, de modo que es difícil encontrar a un sujeto que tenga una actitud
negativa frente a los padres, al contrario, tendrá una actitud positiva (puesto que ellos
son un objeto recompensante, por el apoyo , la comprensión y el afecto que nos
brindan). Obviamente la mayoría de los seres humanos desarrolla actitudes negativas
frente a aquellos objetos de actitud que son castigadores (tal es el caso de la violación,
el robo, el asesinato, etc.). De modo que muchas de nuestras actitudes nos sirven para
adaptarnos al sistema de reforzamiento evitativo que impera en nuestra sociedad, es
decir, vamos a desarrollar simpatía por aquellos objetos aprobados por la cultura o
subcultura y antipatía por objetos rechazados por la cultura o subcultura. Esto explica
cómo las actitudes se desarrollan a partir del cumplimiento de una función adaptativa.
2.2.2.ECONÓMICA
Un segundo grupo de actitudes se desarrolla a partir de una función económica. Es
decir, a partir de una escasa información nos formamos una impresión respecto de un
objeto de actitud, y en consecuencia, emitimos una actitud favorable o desfavorable.
Este fenómeno es denominado “déficit cognoscitivo”, que se suple con la función
económica, es decir, contando con escasa información logramos adoptar una actitud
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determinada que predispone una conducta. En consecuencia, a través de esta función
somos capaces de desarrollar prejuicios y estereotipos.
2.2.3. EXPRESIVA
Esta función nos permite desarrollar actitudes como una forma de expresión de nuestros
valores. De modo que muchas de nuestras actitudes se desarrollan a partir de valores
irrenunciables o trascendentales para nuestras vidas.
2.2.4.DEFENSIVA
Esta función nos permite entender por qué razón a veces las personas se comportan
anti actitudinalmente o contra actitudinalmente. Esta función tiene una fuerte influencia
de las investigaciones psicoanalíticas. Lo que se ha descubierto en estas
investigaciones es que cuando se observan expresión de actitudes extremas o
exageradas, no tenemos en psicología otro paradigma para explicarlas sino es a través
de las posturas psicoanalíticas, es decir, a través de un contenido manifiesto
diametralmente opuesto al contenido latente. El origen de este planteamiento esta
contenido en las primeras experiencias de Freud con su paciente, Ana, quien tenía la
obsesión de lavarse las manos permanentemente. Para descubrir el por qué de esta
conducta, Freud decide hipnotizar a esta paciente para descubrir qué es lo que estaba a
la base de este comportamiento y descubre a través de la regresión de que esta mujer
tenía la compulsión de lavarse las manos porque se sentía sucia, dado que en la
infancia ella fue obligada a masturbar a un hombre (familiar cercano). Esto ejemplifica
que cuando se observan expresiones de actitud sumamente exageradas, a juicio de los
psicoanalistas es sujeto de análisis.
Esto indica que las actitudes se desarrollan y nos sirven para cumplir alguna de estas
cuatro funciones. Esta información es importante puesto que si una actitud se aprende a
través de cualquiera de estas funciones, la manera de cambiarlas es
“desaprendiendolas” a través de la misma función (utilizando las técnicas de aprendizaje
pavloviano, instrumental o vicario).
2.3. ESTRUCTURA, COMPONENTES Y DIMENSIONES
2.3.1. ESTRUCTURA COGNOSCITIVA
Lo que se puede suponer ante la actitud que se tiene frente a determinado objeto, es
que se tienen cogniciones (no conocimientos), puesto que al tener una actitud, el
individuo ya sabe algunas cosas de ese objeto de actitud y es probable que este
conocimiento sea fruto de la observación, de estudios empíricos, producto de la
percepción, de las creencia o del conocimiento popular. Por esto es que en vez de
conocimiento se habla de cogniciones, las que pueden ser verdaderas, falsas,
equivocadas, erróneas, etc. Este componente es medido con itemes cognitivos (a través
de cualquiera de las escalas para medir actitudes señaladas al inicio de esta capítulo).
Por ejemplo si se pretende medir la actitud frente al servicio militar obligatorio, en una
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escala de actitudes se pretende medir el componente cognitivo de los entrevistados, es
decir, qué saben estas personas del servicio militar obligatorio. Para ello, se puede
proponer la siguiente frase, que debe ser ponderada por los entrevistados a través de
una escala de medición de actitudes de Likert :
“El servicio militar es un deber de todo patriota”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Cada una de estas respuestas tiene una puntuación, donde para la alternativa (a) se le
asignan 5 puntos, para la alternativa (b) se le asignan 4 puntos; para la alternativa (c) se
le asignan 3 puntos; para la alternativa (d) se le asignan 2 puntos y para la alternativa (e)
se le asigna 1 punto. Esto significa que, mientras más alto sea el número, más positiva
es la actitud hacia el servicio militar obligatorio.
Por el contrario, así como deben señalarse preguntas con orientación positiva (itemes
positivos), también deben señalarse preguntas o itemes redactados de tal forma que
digan algo malo del servicio militar obligatorio, en consecuencia, un segundo tipo de
preguntas puede ser similar a la siguiente:
“En el servicio militar obligatorio normalmente se producen abusos deshonestos”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Cada una de estas respuestas, al contrario de la frase anterior (que fue de orientación
positiva) tiene una puntuación distinta, donde para la alternativa (a) se le asigna 1
puntos, para la alternativa (b) se le asignan 2 puntos; para la alternativa (c) se le asignan
3 puntos; para la alternativa (d) se le asignan 4 puntos y para la alternativa (e) se le
asignan 5 puntos. Esto significa que, mientras más alto sea el número, más negativa es
la actitud hacia el servicio militar obligatorio.
De este modo, para medir el componente cognoscitivo debe redactarse un conjunto de
itemes cognitivos, que midan las cogniciones de la persona frente a determinado objeto
de actitud que se intenta medir. Así mismo también es probable que se tengan
reacciones afectivas respecto a este objeto de actitud.
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2.3.2. ESTRUCTURA AFECTIVA
Para medir la estructura afectiva, lo que se debe hacer es redactar itemes afectivos que
digan. Por ejemplo:
“Hacer el servicio militar obligatorio me produce un gran orgullo”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Ítem de carácter positivo, que miden emociones positivas, o bien :
“Las personas que hacen el servicio militar me producen desprecio”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Ítem de carácter negativo, que miden emociones negativas.
En ambos casos las puntuaciones asignadas tienen la misma estructura que aquellas
asignadas en la medición de la estructura cognoscitiva.
2.3.3. ESTRUCTURA CONDUCTUAL
Para medir esta estructura, al igual que en los casos anteriores, los itemes deberán
redactarse, por ejemplo, como sigue:
“Me inscribiré voluntariamente para hacer el servicio militar”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Ítem de carácter positivo
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“Donaré parte de mi sueldo para ayudar a una campaña contra el servicio militar”
a) completamente de acuerdo
b) de acuerdo
c) ni en acuerdo ni en desacuerdo
d) en desacuerdo
e) completamente en desacuerdo
Ítem de carácter negativo
Dicho de otra manera, si se pretende medir los tres componentes de una actitud, se
requiere tener una escala que tenga un 33,3 % de itemes cognitivos, 33.3 % de itemes
afectivos y 33.3 % de itemes conductuales. Normalmente una escala de actitud, por
consideraciones metodológicas tiene un mínimo de 30 itemes, en cuyo caso la mitad de
los itemes tiene que ser positivo y la mitad de los itemes tiene que ser negativo en cada
estructura para poder medir actitudes.
En cada set de alternativas de respuestas hay un punto central “ni en acuerdo ni en
desacuerdo” , donde las personas que optan por esta alternativa, provocan un problema
metodológico, puesto que es posible que quien opte por esta alternativa, o no tiene
conocimiento de lo que se le pregunta o no quiere comprometerse con una respuesta
definida (actitud neutral) por que no se atreve. Cualquiera sea el caso, igualmente se
obtiene 3 puntos por esta respuesta, puesto que si se le asignara el mismo dígito a tres
respuestas distintas, la validez sería muy baja, es decir, no estaría midiendo lo que
quiero medir. Para evitar esta dificultad metodológica, autores como Thurstone han
eliminado esta alternativa centran dentro de las posibles respuestas, con lo cual se gana
en precisión pero se pierde en riqueza, al “forzar a las personas” a optar por una
respuesta, aún cuando no este preparada para ello. En esto radica el problema de
mayor recurrencia de estos métodos.
Cada uno de estos tres componentes, a su vez tiene dos dimensiones: La multiplicidad y
la valencia.
2.3.4. VALENCIA Y MULTIPLICIDAD
La multiplicidad del componente cognoscitivo por ejemplo, se refiere al número de
cogniciones que una persona puede tener frente a un objeto de actitud. Es decir, una
actitud muy positiva o muy negativa frente a un objeto de actitud, puede tener una baja
multiplicidad, es decir, un bajo número de elementos cognitivos presentes en una
actitud. Lo mismo ocurre con la multiplicidad del componente afectivo, referida al número
de emociones que se experimenta frente a un objeto de actitud o a la multiplicidad del
componente actitudinal referida al número de acciones que una persona dispone en
beneficio de un objeto de actitud.
La valencia se refiere al signo de las cogniciones, emociones o conductas. Es decir si
sabemos (cognición), sentimos (afectivo) o actuamos (conductual) en forma positiva o
negativa frente a un objeto de actitud.
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De modo que cada uno de los tres componentes, cognoscitivo, afectivo o conductual
tienen a su vez dos dimensiones: la valencia y la multiplicidad. Todo esto se puede
medir, en cualquiera de estas escalas, con lo cual tenemos las estructuras de las
actitudes medidas.
Para cambiar las actitudes debemos saber primero qué función (adaptativa, económica,
expresiva y defensiva) es la responsable del aprendizaje del individuo. A partir de ello se
debe efectuar el proceso contrario, es decir aplicar los mismos procedimientos, a través
de los cuales el sujeto aprendió (aprendizaje pavloviano o clásico, instrumental,
instruccional o vicario). Otra alternativa es que en la medición puedan ocurrir sorpresas
respecto al componente cognitivo, por ejemplo al preguntarle a un fumador qué opina
sobre el cigarrillo, cuya respuesta puede ser de alta multiplicidad y valencia negativa. Sin
embargo, al preguntar por el componente afectivo, nos encontraremos con una valencia
positiva y si medimos su predisposición a comprar cigarros, nuevamente la valencia será
positiva. De modo que la posibilidad de cambiar la actitud no podrá estar orientado al
componente afectivo puesto que todas las emociones son aprendidas por el
condicionamiento clásico, es decir, están controladas por el sistema nervioso autónomo
neurovegetativo que están controladas por reacciones del sistema simpático y
parasimpático, es por ello que cambiar este componente es muy difícil . Queda entonces
propiciar un cambio mediante el componente conductual.
De lo señalado en este capítulo se puede señalar que las teorías clásicas de las
actitudes cumplen con sus tres propósitos, es decir, nos aclaran qué es lo que de
denominan actitudes, cómo están hechas, qué funciones cumplen, pero además de eso
nos entregan herramientas que nos permiten comprobar que lo que la teoría dice se
cumple y hay escalas construidas a partir de estas formulaciones que permiten medir,
pero fundamentalmente, propiciar un cambio de actitudes mediante su focalización en el
componente conductual.
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TEORÍA DE LA DISONANCIA COGNOSCITIVA
1. FESTINGER (1957)
2. ANTECEDENTES
 HEIDER (1947)
 OSGOOD Y TANNEMBUN (1955)
3. POSTULADOS BASICOS
3.1. RELACIONES ENTRE COGNICIONES
3.2. RELACIONES DE DISONANCIA
3.3. MAGNITUD DE DISONANCIA
3.4. REDUCCIÓN DE DISONANCIA
Teoría de la Disonancia Cognoscitiva
Esta teoría estuvo precedida de dos experimentos, pero antes de señalarlos es
importante saber que:
1. Esta teoría es producto de investigaciones empíricas casi puramente experimentales.
2. Los experimentos realizados impactan fuertemente la psicologia clásica y psicologia
social porque se oponen a las teorías ampliamente difundidas como lo es el
aprendizaje.
3. Los hallazgos de ésta teoría conducen a una simplificación en cuanto a sus posibles
aplicaciones que pueden llevar a pensar que “todo hombre o toda mujer tiene su
precio”.
Esta postura de que la gente puede ser sobornada, genera en los estudiantes de la
universidad de Berklin una fuerte controversia.
El 1º experimento se denomina “El Efecto Aronsons Mills” consistente en un
procedimiento efectuado en una universidad de los EE.UU escogida deliberadamente
por el hecho de ser de tipo conservadora (católica). En tal Sentido, se llamó a voluntarios
a participar en un experimento de psicologia social, teniendo entonces como requisitos el
ser mujer de 17 años. Se señalaba que en el experimento que se estaba realizando, una
de las integrantes se había enfermado y no podía seguir participando, entonces se
requería un reemplazante para suplir el puesto del voluntario en cuestión, ya que se
trataba de grupos que discutían sobre el comportamiento social (todas estas
instrucciones eran deliberadas). El tema sobre el cual ellas debían participar versadan
sobre la conducta sexual. En consecuencia la muestra de voluntarios seleccionados iba
con la convicción de que participarían en el tema de “conducta sexual”. Según un
sistema de selección, ellas eran asignadas a uno de los siguientes tres grupos:
“El de Iniciación” ..... (ver ejemplo en un texto de psicología social - falla de cassette-)
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FESTINGER
... Inventaron un nuevo término que resume los dos anteriores (balance incongruencia) y
prefiere usar los conceptos de disonancia y consonancia.
León Festinger nos señala que los seres humanos, afortunadamente y
desafortunadamente lo que más tenemos son cogniciones. Aquí nace la diferencia entre
cogniciones y conocimientos en cuyo caso, las cogniciones son las cosas que uno sabe,
que es distinto al conocimiento, por ejemplo yo se “que todos los psicólogos son un poco
locos”, y este conocimiento proviene de lo que me contaron y yo creo en eso, e indica
que no es un conocimiento científico. Es decir, cognición es cualquier conocimiento con
respecto al cual yo tengo algún grado de certeza por las razones que sea (por que lo
dice una autoridad, por que lo dice un libro, etc.)
Lo que sucede entonces es que el aparato cognitivo de los seres humanos esta
constituido por innumerable cantidad de cogniciones, porque las cogniciones refieren al
medio ambiente físico y humano. Las cogniciones se refieren hacia las otras personas o
hacia uno mismo, es decir el aparato cognitivo de los seres humanos esta constituido
por un innumerable número de cogniciones.
Lo que plantea entonces Festinger es que la adaptación humana consiste en buscar un
equilibrio entre todas estas cogniciones (tanto físicas o socioculturales provenientes del
medio ambiente; así como cognición proveniente de los demás y respecto de uno
mismo)
El problema de las justificaciones es un arreglo entre cogniciones tales como tener la
cognición de que “mis zapatos son negros, de que estoy estudiando, de que esto es
Chile, etc.”
Lo que plantea Festinger es que todas estas cogniciones, buscan un equilibrio, entonces
se señala de que las cogniciones se relacionan de dos maneras:
1. De manera Relevante
2. De manera Irrelevante
Entonces, se plantea que 2 o más cogniciones están en una relación relevante cuando
entre ellas existe una relación lógica y/o psicológica. Por ejemplo, yo en este
momento tengo la cognición de estar haciendo clases y también tengo la cognición de
estar explicando una materia. Parece ser una conexión lógica y parece ser una
conexión psicológica en el siguiente sentido: yo puedo tener la cognición de que cada
vez que me pongo una determinada corbata, me sale bien la clase (aquí también hay
una conexión). De tal manera, esta es una relación relevante donde tenemos una
conexión lógica y psicológica.
La otra relación, la de irrelevancia es cuando entre dos o mas cogniciones no existe
una relación lógica o psicológica. Por ejemplo, hoy tengo clase de psicología social y
hay una temperatura agradable (aquí no hay ningún tipo de relación).
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Las cogniciones en relación relevante pueden relacionarse de dos maneras. Dos o mas
cogniciones están en una relación relevante consonante cuando la primera de ellas se
deriva de la segunda.
Ejemplo:
Tengo la cognición de que estoy haciendo clases y estoy empeñado en que la clase sea
lo más clara posible (la primera se deriva de la segunda), es decir, son dos cogniciones
relevante y consonante.
Ahora bien, dos o mas cogniciones se encuentran en una relación relevante disonante
cuando de una de ellas se deriva una contraria.
Ejemplo:
Tengo la clara convicción de que estoy dictando una clase y cada vez que hablo me doy
cuenta que estoy más aburrido. O sea, cuando yo enseño algo en lo que no creo o no
me interesa, es sumamente incomodo.
En cambio cuando yo enseño algo en lo que creo y es importante para mí, estoy en una
relación relevante y consonante. Esto plantea que la experimentación de disonancia es
un estado desagradable. Como se trata de un estudio experimental, Festinger y sus
colaboradores descubre que el estado de disonancia es mucho más frecuente de lo que
se creé, puesto que la disonancia se produce cada vez que una persona debe tomar una
decisión, dicho de otra manera, la disonancia cognoscitiva es un producto prácticamente
inestable de la toma de decisiones. La toma de decisiones genera aplicaciones muy
trascendentales puesto que una persona que decide tiene que optar como mínimo, entre
dos alternativas, si puede escoger las dos no está tomando ninguna decisión. Por lo
tanto, para que sea una genuina decisión, ambas alternativas tienen que tener cosas
positivas y negativas.
Lo que ocurre entonces es que en la etapa pre-decicional, toda persona relativamente
normal lo que hace es buscar información para enterarse de las ventajas, atributos y
desventajas de los aspectos a decidir.
Según Festinger, en la etapa pot-decisional inevitablemente se va a experimentar
disonancia puesto que el individuo se enfrenta a al menos dos cogniciones con un costo
y un beneficio distinto. Si escoge por una alternativa, ello puede ser consonante con lo
que yo quiero y es a su vez consonante con los aspectos negativos de la alternativa
rechazada. No obstante la cognición de haber elegido una de las alternativas sujetas a
decisión, es disonante con los aspectos negativos de la alternativa escogida y también
disonante con los aspectos positivos de la alternativa rechazada.
Dicho de otra manera, cada vez que se tome una decisión inevitablemente es para
experimentar tanto consonancia como disonancia. O bien la disonancia es un producto
inevitable del proceso conocido como “Toma de Decisiones” .
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Esto es una herramienta que puede usar el psicólogo para producir disonancia con
propósitos terapéuticos. Esto es diferente al complejo de Edipo que es una variable expost-facto (uno tiene que esperar que se produzca o que no se produzca). Tampoco el
psicólogo puede producir introversión o extroversión, puesto que esto es un rasgo
adquirido por la persona.
Esta teoría permite que yo pueda producir experimentalmente disonancia cuando yo
quiera estudiarla (es decir, haciendo que el sujeto tome una decisión).
Estos experimentos conducen a saber de que depende la magnitud de la disonancia, es
decir, por qué se experimenta mucha disonancia o poca disonancia. En consecuencia
todos los estudios experimentales conducen a descubrir las tres variables que inciden en
la magnitud de la disonancia.
VARIABLES QUE INCIDEN EN LA MAGNITUD DE LA DISONANCIA
1.- Importancia de la decisión tomada: La magnitud de la disonancia depende de está
variable y ello depende del grado de importancia que otorgue la persona que tome la
decisión (la importancia la asigna el paciente y no el terapeuta). A mayor importancia de
la decisión mayor es la disonancia experimentada y viceversa. De modo que lo que
tengo que hacer con una paciente si quiero producir la disonancia es saber cual es la
importancia que tienen para él la decisión que el va a tomar.
Mientras menos cosas malas tenga la alternativa rechazada y menos cosas buenas
tenga la alternativa elegida, voy a experimentar menos disonancia, siempre y cuando el
número de cogniciones disonante no supere al número de cogniciones consonantes por
que si esto ocurre, se revierte la situación , la persona se arrepiente (si uno le encuentra
muchas cosas malas a lo escogió y puras cosas buenas a lo que rechazó, lo lógico es
que uno se arrepiente). Es por eso que cuando se quiera hacer que un sujeto tome una
decisión para que experimente mucha disonancia, tiene que hacerle tomar una decisión
entre dos alternativas que tengan muchas cosas buenas y muchas cosas malas y con
eso me aseguro que la magnitud de la disonancia cognitiva va a ser muy alta.
3. Grado de sobreposición cognoscitiva entre las alternativas, corresponde a la tercera
variable que ahora es inversamente proporcional. Es decir, es el grado de parecido
entre las dos alternativas ( dos alternativas que igualmente son de la preferencia del
individuo y que cumplen funciones similares). Esto explica por qué razón, cuando un
alumno de psicología tenga que escoger entre ps. Clínica y ps. Educacional, va a
experimentar disonancia, pero menos que cuando se tiene la disonancia entre
escoger Ingeniería y Psicología. Es por esto que es importante, para que una persona
experimente una gran disonancia, hacerlo tomar una decisión entre dos alternativas lo
más parecidas posibles.
El fenómeno de la producción de la disonancia es importante porque una persona que
experimenta disonancia es una persona que esta incómoda, angustiada, preocupada y
que tiene alternativas limitadas y los mecanismo a través de los cuales las personas
pueden reducir su disonancia también han sido estudiados experimentalmente. Todo el
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
trabajo experimental permite descubrir cómo hace una persona para poder reducir esta
disonancia que loo incomoda.
La primera posibilidad o mecanismo para reducir esta disonancia es cambiar las
cogniciones envueltas en relaciones disonantes y transformarlas en consonantes, es
decir, cambiar de actitud. Por ejemplo cuando una persona piensa que una carrera es
desagradable por que tiene muchas matemáticas, sin embargo son muchas las
personas que terminan valorando altamente las matemáticas, es decir, lo que antes no
me gustaba, termina gustándome y con eso resuelvo la disonancia. De modo que el
cambio de actitudes en esta teoría es producto de la reducción de la disonancia, que es
distinto del cambio de actitudes de la Teoría Clásica que consistía en cambiar el signo
de los componentes (componentes cognitivo, emocional y conductual). Por ejemplo. Si
se hace una medición a un individuo según la Teoría Clásica, es decir, midiendo el
componente cognoscitivo hacia el cigarrillo, el componente afectivo y el componente
conductual hacia el cigarro nos encontraremos que, cuando se llene estas escalas, se
verá que el componente cognitivo hacia el cigarrillo es negativo (el sabe que hace mal),
pero si observamos el componente conductual observaremos de que fuma de todas
maneras y si consultamos por el componente afectivo dirá que le produce mucho
agrado. Lo que se hace entonces para cambiar una actitud de una persona es este caso,
es cambiar el signo en uno de los tres componentes a través de una campaña
publicitaria de cambio de actitud para que uno de estos componentes cambie. En
cambio en esta teoría (Teoría de la Disonancia Cognoscitiva), el cambio de actitud es
producto de la reducción de la disonancia, a través por ejemplo a través de presionar
para que el individuo tome una decisión y hacer que cambien las cogniciones que están
envueltas en relaciones disonantes.
La segunda posibilidad o mecanismo a través del cual se puede reducir la disonancia es
agregar cogniciones consonantes con la decisión tomada. Por ejemplo, sometido un
alumno entre elegir ps. Clínica y ps. Educacional y habiendo escogido finalmente ps.
Educacioal, al momento de elegir toma en cuanta todas las cosas positivas de esta
opción (buen campo de trabajo, buena renta, etc.). De modo que ahora que se efectuó la
elección se encuentran más cosas buenas para reducir la disonancia.
La tercera posibilidad o mecanismo es disminuir la importancia de las cogniciones
envueltas en relaciones disonantes. Continuando el ejemplo, escogí ps. Educacional
sabiendo que voy a ganar poco (cognisión disonante), entonces digo, “la plata no es
todo”, con lo cual disminuyo la importancia. En otra palabras, efectivamente todo
psicólogo puede producir un cambio de actitudes, haciendo tomar a un apersona una
decisión tratando que dicha decisión sea lo más alta posible, haciendo que la decisión
sea importante para la persona que la toma, haciendo que la decisión tenga muchas
cogniciones disonantes y haciendo tomar una decisión que no tenga sobreposición
cognoscitiva, con eso yo me aseguro que la persona va a experimentar una fuerte
disonancia. De modo que experimentando la disonancia, es seguro que la persona va a
tener que reducirla y entonces para que se produzca el cambio de actitud lo que hago es
impedir que se produzcan las dos últimas y permitir que sólo se produzca la primera.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
Volviendo al ejemplo, tenemos dos cogniciones fuertemente disonantes, es decir, el que
yo pase por una experiencia sumamente dura y difícil y obtuve a cambio algo que no
vale la pena. Lo que ocurre entonces es que esta cognición no la puedo cambiar por que
hubo dos personas que me vieron. Sólo la puedo cambiar cuando estando en un grupo,
nadie vio bostezar a la persona aludida, por eso se produce el cambio de actitud, porque
la segunda cognición, la persona la puede cambiar . (puede entonces reducir la
disonancia)
En un segundo caso ocurre lo que se denomina Fenómeno de la Complacencia Forzada
. Este fenómeno corresponde a uno de los temas más importantes de la ps. Social que
tiene que ver con el grado de Influencia Social (derivada de la interacción social). La
influencia social se mueve en un continuo marcado por dos polos extremos que
dependen de dos variables:
1. El poder del agente influenciante
2. La aceptación del sujeto influenciado
Cuando el agente influenciante tiene todo el poder de hacer lo que el quiera y el sujeto
influenciado tiene el menor grado de aceptación, lo que ocurre es una especia de lavado
de cerebro, donde lo que se hace es cambiar las creencias de los sujetos, cambiar sus
posiciones respecto a determinados temas de interés. En cambio, en la situación
inversa, cuando el poder del agente es el mínimo y la aceptación del influenciado es el
máximo, lo que ocurre es el dirigirse, por ejemplo donde un sacerdote y pedirle que le
ayude a cambiar, o cuando se va al psicólogo en forma voluntaria. Aquí tanto el
sacerdote o el psicólogo, ambos tienen muy poco poder, puesto que si el paciente
quiere le hace caso, de lo contrario no le hace caso sin que ello le de la prerrogativa al
sacerdote o psicólogo de castigarlo por eso. De modo que al centro de estas dos
situaciones extremas hay una enorme cantidad de situaciones de influencia social que
se llaman persuasiones (ya sea propaganda, educación, etc). En esta situación puede
estar el padre o un hijo.
Lo que ocurre entonces en una situación como esta es que, cuando una persona quiere
presionar a alguien para que éste cambie sus actitudes (deje de ser católico, deje de ser
comunista o deje el cigarro), técnicamente la situación es muy clara puesto que las
presiones para que la gente cambie, se efectúa mediante el otorgamiento de premios
(reforzamiento positivo) o a través de amenazas (los castigos, la tortura, etc). De modo
que ante esta situación se pueden dar los siguientes casos:
 Cuando la presión es exitosa (premio o castigo), la persona cambia genuinamente,
produciéndose un proceso de conversión (de católico a evangélico, de marxista a
derechista, etc.)
 Cuando las presiones no son exitosas, la persona no cambia y presenta la convicción
de haber soportado una fuerte presión (grandes premios o grandes castigos), sin que
ello halla cambiado sus ideas, con lo cual queda claro que sus principios son
extremadamente sólidos e incrementa su convicción original.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
La importancia de la anteriormente señalado reside en que, cuando una persona va a un
tratamiento y la presionan para que la persona cambie, la verdad es que dicho
tratamiento puede dar efecto y se produce el cambio (por ejemplo no pegarle a la
cónyuge o dejar de fumar)
 la tercera alternativa se refiere a la complacencia forzada, es decir, la persona cambia
aparentemente, pero íntimamente mantiene su convicción original.
Lo que demuestra Festinger y Hasner en este experimento es que las personas que
tienen una cognición disonante saben que le mintieron a una persona muy querida o
muy leal, y que con ello traicionaron sus principios. Por lo tanto, estas personas que
recibieron un gran premio (recibieron dinero), experimentan menos disonancia y por
ende no cambian su actitud y racionalizan diciendo “ es verdad que mentí, pero me gane
un buena cantidad de dinero” , eso hizo que valiera la pena. Sin embargo si a alguien lo
amenazan con matar a sus hijos si no traicionan sus principios, lo que ocurre es que el
sujeto no experimenta ninguna duda para ejecutar la acción reñida con sus principios (le
produce incomodidad pero menos), en cambio las personas que recibieron dinero,
experimentan una enorme disonancia. Esto contradice notablemente la teoría del
aprendizaje que establece que a mayor recompensa, mayor cambio de actitudes. Aquí
es al revés, puesto que a mayor recompensas es menos el cambio de actitudes (la
persona puede cambiar sus conductas, pero no sus principios) y reduce la disonancia
sobrevalorando el valor del premio o el castigo. Queda demostrado aquí, cómo dos
teorías tienen predicciones distintas. Lo entónces en la psicología contemporánea es
que frente a determinadas circunstancias el modelo conductista puede ser efectivo y en
otros casos el modelo cognitivo es más efectivo.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
TEORIA DE ACCION RAZONADA DE MARTIN FISHMAN
Martín Fishman comienza a desarrollar su teoría sobre las actitudes mientras era
estudiante del Doctorado en psicología social. En esa oportunidad, al momento de
efectuar su tesis, el elige el tema de “Problema de las Actitudes” a fin de definir un tema
de investigación. A raíz de su investigación bibliográfica, Fishman llega a la conclusión
de que el término actitud es lo que se denomina en ingles (traducido), un término
autobús o (adaptable), en el sentido de que entorno a este concepto existe una gran
confusión puesto que con mucha frecuencia se confunde el termino actitud con opinión.
En la mayoría de los estudios, el investigador cree estudiar el problema de las actitudes,
cuando en realidad lo que hace es preguntar la opinión que la gente tiene sobre si es
conveniente o no la implantación, por ejemplo del uso del preservativo. De modo que
con ello lo que se mide no son actitudes sino opinión, es decir lo que el sujeto piensa
respecto a una materia particular de interés general o particular (ya sea uso del
preservativo, pena de muerte, existencia de universidades privadas, etc).
En otra
oportunidad se confunde actitud con creencia, es decir, cuando se le pregunta a la gente
si cree que por ejemplo la ley de divorcio favorecerá o no la disolución o la mantención
de la familia, de modo que en este caso cuando el investigador cree estar midiendo
actitudes, lo que efectivamente esta midiendo es una creencia respecto a lo que puede
ocurrir en relación a la adopción de una determinada medida.
De tal manera que lo primero que plantea Fishman es que existe una gran confusión
respecto a lo que es efectivamente una actitud, puesto que no hay una sola definición de
actitud, sino que múltiples o orientaciones, casi todas derivadas de la definición original
de Allport lo cual evidentemente confunde el término.
Por último, observa que, dentro de las definiciones de actitud es también evidente que
hay definiciones de éste término en que incluyen 3 componente: El afectivo, el cognitivo
y el conductual como ocurre con las teorías clásicas. Hay otras definiciones que
incluyen solo dos componentes, el afectivo y el cognitivo, porque dicen que el
componente conductual no es actitud sino que es conducta y finalmente se encuentran
definiciones que incluyen un solo componente como es el caso de la teoría de la
disonancia cognoscitiva en donde las actitudes tienen un sólo componente, el cognitivo.
De modo que con estas evidencias es dable suponer que efectivamente hay una gran
confusión conceptual respecto a lo que es el concepto de actitud.
El segundo antecedente plantea que al hacer un análisis sobre los componentes de las
actitudes se encuentran relaciones que son complejas, de este modo Fischman toma
una muestra se sujetos de la ciudad de California y formula preguntas sobre los
fenómenos parapsicológicos (dada la característica multicultural de esta ciudad),
precisamente porque en esta ciudad tienen mucha popularidad los fenómenos
esotéricos (como el tarot, budú, etc.), de hecho es muy frecuente que en las
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
universidades existan psicólogos interesados en este tema los que a su vez son
formadores de generaciones de nuevos psicólogos. De tal modo, y dado este escenario,
Fischman formula a los sujetos las siguientes preguntas:
1. Si creen o no en la existencia de estos fenómenos.
2. Si le agrada o le desagrada participar en este tipo de actividades (si se ve la suerte,
etc.)
Ante esto encuentro datos muy comprensible, es decir, con gente que cree firmemente
que esto es muy serio y que obviamente le agrada y participa de estas actividades como
el hecho de sacarse la suerte, participar en escenas de espiritismo, etc.
Por otra parte, también aparece el caso de las personas que no creen y plantean que
estos aspectos son invenciones y que ante lo cual no hay ninguna participación en estas
actividades.
Lo curioso de todo esto es que en estas opciones aparece gente que no cree y sin
embargo participa (porque lo encuentra entretenido) y por otro lado, hay gente que cree
firmemente y dice que no participa porque le da miedo esta actividad, es decir, prefiero
no saber lo que va a pasar. En otra palabras, la estructura de los componentes de las
actitudes, en vez de ser equilibradas o balanceadas o consonantes, parece ser que mas
bien tiente a ser desbalanceada, disonante o desequilibrada, es perfectamente posible
entonces que se den estas relaciones lógicamente incomprensibles y de allí que nace la
noción de la lógica que es distinto a la psicológica, es decir, la persona que dice que no
cree en actividades sobrenaturales pero participa de ellas, es capaz de explicar
racionalmente o razonadamente esta aparente contradicción. Cuando se dice “no creo”,
pero me gusta, parece irracional, lo mismo aquellas personas que dicen “creer”, pero
que no participan, también dan explicaciones aparentemente racionales ante esta
irracionalidad. De allí comienza a surgir la idea de que el comportamiento del ser
humano es un comportamiento razonado, no racional, es por ello que la Teoría se
denomina Acción Razonada. Es decir, lo asume Fischman es, que el comportamiento
humano sigue una cierta lógica, hay una cierta racionalidad detrás de cada
comportamiento, y que los seres humanos desarrollamos una especial habilidad para
explicar hasta lo inexplicable, es decir, explicar por que hacemos lo que hacemos o lo
que no hacemos. Resulta entonces, perfectamente comprensible entender cómo un
profesor universitario que sabe que fumar le hace mal por ejemplo, realiza una conducta
irracional. En otras palabra, aquí hay un paradigma otra vez, distinto, diferente a lo
señalado por las teorías clásicas y diferente al paradigma de la disonancia cognoscitiva.
Aquí el paradigma esta orientado a entender por que la gente hace cosas que pueden
incluso resultar irracionales al ojo del observador.
Ante esto se presenta un problema muy importante, puesto que hasta ese momento la
posibilidad de predecir comportamientos seguía la lógica de la teoría de la disonancia
cognoscitiva o de las teorías clásicas, dicho de otra manera, si una persona no cree lo
que yo podría predecir, entonces que no participe y con ello me puedo dar cuenta que el
saber que esa persona no cree no me autoriza a predecir que participe o no participe,
puede no creer y participar y puede no creer y no participar y creer y participar, es decir,
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
la adición de los componentes no aseguran el éxito en la producción de la conducta. No
necesariamente, leyendo los componentes de las actitudes podemos tener éxito en la
predicción de esa conducta. Eso explica porque hay gente que efectivamente tiene
componente cognoscitivo negativo, por ejemplo, hacia el cigarrillo y sin embargo tiene
componentes positivos hacia el consumo del cigarrillo o por que hay gente que tiene
componentes negativos frente al aborto y sin embargo se practica un aborto. De modo
que estas aparentes contradicciones que eran inexplicables con los otros paradigmas
comienzan a tener explicación al tenerse estos otros componentes, porque estas
contradicciones resultan perfectamente racionales en un sistema como este,
De modo que la gente se inventa o construye explicaciones “razonadas” sobre su
conducta. Esta diferencia entre explicaciones razonadas y explicaciones racionales se
hace todavía mas patente cuando Fischman descubre el rol que juegan las creencias
en cada una de estas explicaciones.
ROL DE LAS CREENCIAS
Fischman es el descubridor de la noción de creencia y señala que:
“Una creencia es la probabilidad subjetiva de que un objeto este conectado con una
creencia”
Esto esta conectado con la definición de los valores, donde se decía que los valores son
creencias y como tal (como creencias), es la probabilidad subjetiva de que un objeto
este conectado a un atributo, es decir, volviendo al ejemplo de los cigarros, cuando el
paquete de cigarrillos dice “fumar cigarrillos es dañino para la salud”, estamos en
presencia de un objeto (fumar cigarrillos)
Los seres humanos tienen la probabilidad de que ellos subjetivamente creen que eso es
absolutamente cierto, creen que ésta frase es relativamente cierto (a veces si, a veces
no), o creen que la frase es absolutamente falsa y así sucesivamente. Pero la
probabilidad de que este objeto este conectado a este atributo (lo dañino o no del
trabajo) corresponde a cada individuo indicar que tan verdad es este atributo, de modo
que ello nos indica que se puede medir la creencia en estas escala de probabilidades
subjetiva.
Dado lo ya señalado, es favorable llegar a una definición conceptual y operacional de lo
que se denomina una “creencia”. Por lo tanto lo importante de esta noción es el
descubrimiento de 3 niveles de creencias que tenemos los seres humanos:
1. Las creencias de aceptación general
2. Las creencias de aceptación de la autoridad
3. Las creencias de aceptación personal
Ejemplo:
A la población de sujetos adictos al tabaco se les efectuó una encuesta para medir la
incidencia de sus opiniones en los 3 niveles: de modo que cuando se refería la encuesta
al nivel de aceptación general ante la pregunta qué opina la mayoría de la gente con
respecto al tabaco, la respuesta era que, efectivamente y la mayoría de la gente
pensaba que el tabaco era dañino para la salud.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
Al preguntarle por el 2º nivel de creencias respecto a la aceptación de la autoridad, en
función a la pregunta ¿es verdad que la mayoría de los médicos dice que el tabaco es
dañino para la salud?, ante lo cual los sujetos nuevamente señalizaban que era difícil
que un médico dijera que el tabaco es bueno para la salud, normalmente los médicos
opinan que el tabaco es dañino para la salud. Es decir en los dos niveles de creencias
(de aceptación general, el de la aceptación de la autoridad) había un porcentaje de
posibilidad subjetivas muy alto. Sin embargo, cuando se preguntaba por el 3º nivel, el de
aceptación personal, mediante la consulta, ¿es verdad, que tú conducta de fumar
cigarrillo te va a hacer mal para tú salud?; el tipo de respuesta era negativa, es decir, la
gente fumadora considera que el cigarro no le va a hacer mal, es decir, se infiere aquí
que los tabacólicos fuman por que están convencidos que el cigarrillo le va a hacer daño
a los demás y no a ellos.
De lo anterior se desprende que los dos primeros niveles de creencias (el de aceptación
general y el de autoridad), no tienen ningún efecto conductual, es decir, no produce
ningún cambio conductual. El cambio conductual se va a producir cuando cambie el
nivel de creencia personal, es decir, en el caso del ejemplo, cuando la “persona crea
definitivamente que a ella le va a hacer mal el tabaco. Es aquí recién cuando se abre la
posibilidad de un cambio de actitud o un cambio conductual.
El último antecedente de esta teoría es que cuando Fischman comienza a observa este
estudio sobre actitudes en general, se da cuenta que el punto mas importante de estos
estudios es y normalmente cuando se miden actitudes o se estudian las actitudes, la
idea es cambiar las actitudes y predecir conductas. De modo que con esto descubre
que hay razones para sospechar de que los psicólogos (expertos en la ciencia del
comportamiento) tienen confusiones y no saben definir bien que es el comportamiento.
De modo que se ha confundido comportamiento con otras variables y que
probablemente por eso es que los psicólogos han fallado al predecir comportamiento.
Generalmente la conducta o el comportamiento se define como la variable dependiente
que depende de un conjunto de variables independientes y lo que hace normalmente el
psicólogo es tratar de predecir esta variable dependiente, por ejemplo: seguirá casado o
se divorciará, votará por un candidato o por otro, seguirá estudiando o se retirar, etc.),
es decir, son variable dependientes que la psicología intenta predecir. De modo que
para ello se necesitan conocer las variables independientes que determinan o influyen
sobre la ejecución o no de una cierta conducta.
Lo que ha pasado entonces luego de todos estos análisis, es que al predecir
manifestaciones como por ejemplo, el “hacer dieta” o “planificar la familia”, ello ha sido
imposible prever por parte de la psicología en su intento por predecir conductas, puesto
que lo que esta haciendo no es precisamente predecir una conducta en estas
manifestaciones o en muchas otras, puesto que ellos se definen como categorías
conductuales.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
CATEGORIAS CONDUCTUALES
Están compuestas de varias conductas agrupadas bajo una misma etiqueta, por ejemplo
cuando se le pregunta a una persona si planifica su familia, su respuesta será que sí,
que efectivamente esta planificando su familia puesto que lo que la persona entiende por
esta frase corresponde a la acción de usar preservativos. A su vez otra persona
también responde afirmativamente en el sentido de que también planifica su familia
puesto que para ello usa el otro método de control familiar. Una tercera persona dice
que también planifica su familia por que usa otra forma de sistema de anticonceptivos y
así sucesivamente con diferentes respuestas que dan por afirmativa la planificación
familiar. De modo que se llama Planificar la familia a 5 o más conductas específicas
agrupadas bajo una misma etiqueta, de modo que es imposible predecir a parte de una
sola medición 5 o más conductas, puesto que si son conductas diferentes, tienen
también variables independientes, también diferentes, es decir, las cuatro o más
respuestas distintas, tienen determinantes distintos. Es por ello que no ha sido posible
predecir conductas, por que se han confundido conductas con categorías conductuales .
Análogo a lo anterior, lo constituye la categoría de conducta “hacer dieta” para todas las
personas no se presentan conductas distintas.
De modo que una categoría conductual (como planificar la familia o hacer dieta) esta
compuesta de muchas conductas agrupadas bajo una misma etiqueta. Esto hace que,
si son muchas conductas, son muchas variables independientes donde cada una de
ellos tiene variables independientes distintas, de modo que no se puede predecir a partir
sólo de los componentes de las actitudes. De modo que en primer lugar se ha
confundido conductas con categorías conductuales.
En 2º lugar, hay muchos estudios que dicen que están “estudiando la conducta del
rendimiento académico” o la “conducta de los accidentes del tránsito”, ante lo cual (en
Latinoamérica), se han hecho innumerables estudios que han pretendido medir actitudes
hacia las normas del tránsito, por que se supone, que si una persona tiene actitudes
positivas hacia las normas del tránsito va a tener menos accidentes de tránsito y
aquellas personas que tienen actitudes negativas frente a las disposiciones del tránsito
va a tener más accidentes de tránsito. Lo que ha ocurrido es que estos estudios han
sido muy azarosos, es decir, a veces hay correlación y a veces no hay correlación ante
lo cual se han tratado de mejorar las mediciones.
Al respecto Fischman plantea que en este caso se esta confundiendo conducta con
resultados conductuales
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
RESULTADOS CONDUCTUALES
Tanto los accidentes del tránsito y el rendimiento académico no son conductas, son
resultados conductuales, es decir, el rendimiento académico, es una consecuencia de
a realización u omisión de muchas conductas. De modo que la probabilidad de que se
incremente el rendimiento académico depende de muchas variables independientes
tales como, por ejemplo:
1.
2.
3.
4.
5.
6.
Asistir a clases
Atender en clases
Tomar buenos apuntes
Leer la bibliografía obligatoria
Asistir a ayudantía
Leer la bibliografía recomendada
De modo que la nota que una persona se saque en una prueba es una consecuencia de
la ejecución o no de varias conductas; no es una conducta, sino el resultado de muchas
conductas y lo más importante, este resultado no depende única y exclusivamente de la
ejecución de esas conductas, es decir, la nota no la ponen los alumnos, sino que el
profesor y de acuerdo a lo analizado al observar el efecto picmalión, la calificación del
rendimiento académico en muchas oportunidades pasa por otros factores como el que le
caiga bien o el alumno, por que tenga prejuicios o estereotipos, etc. De modo que el
rendimiento académico que antes se consideraba una conducta, es claramente un
resultado conductual que depende de:
 Que se ejecuten o no cierta conducta
 Quien pone la nota o calificación
Es decir se pueden cumplir las 6 variables ya señaladas pero aún así las calificaciones
van a ser malas porque el profesor no le da la gana poner mejores calificación.
De modo que este resultado conductual no es una conducta, sino que es el resultado
de una ejecución o no de muchas conductas que están bajo la responsabilidad del actor
(ejemplo: el alumno) y del evaluador (ejemplo: el profesor). Análogamente pasa lo
mismo con los accidentes de tránsito, donde el que el individuo tenga o no accidente de
tránsito no depende de su actitud hacia las normas, sino que depende de que se
ejecuten o no cierta conductas como conducir en estado de ebriedad, revisar el estado
del auto, que respete la luz roja, etc., pero aún así, ejecutadas todas estas conductas
igualmente se puede sufrir un accidente puesto que otro, un tercero es el que puede
chocar con el sujeto del ejemplo.
De tal manera que no se saca nada como medir actitudes hacia las normas del tránsito
para predecir si la persona va a tener o no accidente del tránsito.
Caso. Examen psicotécnico, donde se median actitudes a choferes
Finalmente todos estos estudios mostraron que los psicólogos social también habían
confundido conducta con Intención conductual.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
INTENCION CONDUCTUAL
Cuando a uno le preguntan ¿por que tiene usted la intención de votar en la próxima
elección presidencial? Lo que se pregunta es cual es la intención que se tiene de votar
por uno u otro candidato a su vez si la pregunta fuera : ¿si la elección fuera hoy día por
quién votaría usted?. Esto no es conducta, puesto que aún no se ha efectuado el
momento de la votación como tal. Lo que esta mostrando es una predisposición que en
ese momento se puede manifestar. De modo que opinar sobre la posible votación, ello
no puede corresponder a la realidad porque a lo mejor no se presenta, de modo que
nadie puede predecir lo que se tiene como predicción se va a consumar en una
conducta, puesto que ello dependerá por ejemplo de que el sujeto se presente o no.
Dada estas circunstancia, Fischman lo que dice es : “ Si yo quiero predecir conductas, lo
primero que tengo que saber es definir bien que es una conducta”, de decir, debe tener
clara cual es la variable dependiente. Entonces todas las investigaciones empíricas
iniciales de esta teoría se orientan a definir en primer lugar que es efectivamente una
conducta y el resultado de estas investigaciones muestran que para definir una conducta
es aconsejable utilizar la dicotomización. Lo que plantean las investigaciones es que
cuando se puede dicotomizar, generalmente se esta más cerca de una conducta que de
una categoría conductual, de un resultado conductual o de una intervención conductual,
cuando se puede decir que “Se trata de comer o de no comer”, “votar o no votar”, “asistir
o no asistir”, “comprar o no comprar”, “divorciarse o seguir casado” “retirarse o continuar
estudiando”, lo más probable que sea una conducta, se trata de una acción
dicotomizable, el hacer a no hacer; “dejar de fumar o seguir fumando”, “dejar de
consumir droga o seguir consumiéndolas”. En estos casos según Fischman estaremos
en presencia de una conducta y no de una categoría conductual. De modo que es
distinto decir “hacer dieta” o “no hacer dieta”, puesto que hacer dieta significa varias
conductas, es decir, se trata de acciones (“como no correr”, “tomar no tomar”, “consumir
no consumir” , etc.) de tal manera que esta definición es claro decir que cuando se
quieren describir los 2 valores de estas variables dependientes (“comer no comer”,
“casarse no casarse, etc.), recién allí esteremos en presencia de una genuina conducta.
Es entonces, una acción dicotomizable, medible, observable y cuantificable
Fischman descubre que el mejor predictor de la conducta es la intensión conductual . El
señala que la intensión conductual es la probabilidad subjetiva de que una intención este
conectada a una conducta. De modo que se puede predecir la conducta de mejor
manera en relación a la medición de actitudes frente a cualquier situación en particular.
De modo se le pide a un sujeto interrogado que marque en una Escala de Fischman cual
es la probabilidad subjetiva de los sujetos de que por ejemplo, se retiran de una carrera
profesional que están estudiando. De modo que si la persona manifiesta la intensión de
retirarse de la carrera, lo que se observará es una gran correlación, de que la intensión
conductual coincide con la conducta.
Si se les pregunta a mujeres solteras ¿cuál es la probabilidad que en diciembre de este
año se casen, la predicción es probable que sea muy real. Es decir, aquella persona
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
que dice que esta firmemente decidida a casarse, lo más probable es que se case y
aquella persona que dice que no tienen ninguna probabilidad de casarse, lo más
probable es que en Diciembre no se case, es decir, normalmente lo que se descubre es
que la intención conductual tiene una altísima relación con el comportamiento,
correlación que normalmente llega a más del 85%. Esto implica que el mejor predictor de
la conducta no son las actitudes sino que es la intención conductual. En el 85% de los
casos uno hace o deja de hacer aquello que ya esta decidido.
De modo que por primera vez en la psicología social se descubre un predictor muy
seguro de la conducta. Es decir, cuando yo quiero predecir que va a hacer una persona
lo 1º que tengo que medir es la intensión conductual, a través de la “Escala de
Probabilidades Subjetivas” preguntando cual es la probabilidad de que una acción este
conectada con una conducta.
Una segunda pregunta es: ¿De que depende que yo tenga la intensión de seguir
ejecutando o dejar de ejecutar la conducta?. Es por eso que estamos en presencia de un
aspecto que nos dice que la conducta es multideterminada.
Por ejemplo: ¿De que depende que yo tenga la intensión de seguir fumando o dejar de
fumar?... de seguir estudiando o dejar de estudiar, etc.
Los estudios muestran que hay 2 variables que determinan la intensión conductual. Se
estará firmemente decidido a hacerlo o dejar de hacerlo (una conducta), dependiendo
de:
 la actitud hacia la conducta y de,
 la norma subjetiva
Este es el descubrimiento más importante en los últimos 50 años de la psicología.
Esto significa que nosotros hacemos lo que hacemos por 2 razones:
Porque hacerlo nos produce agrado, placer, simpatía, es decir, depende de nuestra
actitud hacia la conducta, no de la actitud hacia la categoría. Por ejemplo, yo estudio
psicología porque me gusta estudiar psicología, (es una actitud hacia la conducta) y lo
hago porque las personas importantes para mi aprueban lo que yo hago (la norma
subjetiva), es decir, mí papá, mi mamá, me apoyan en esta ejecución de la conducta.
Lo que descubre Fischman en esta Teoría de Acción Razonada es que la mayoría de
nuestras conductas se explica por estos dos factores . De modo que lo que hacemos, lo
hacemos porque nos produce agrado, porque nos gusta y porque recibe apoyo de las
personas importantes para nosotros.
De modo que la Racionalidad de la conducta es precisamente por que la mayoría de
nuestras conductas las ejecutamos porque están controladas por estas 2 variables.
Estos determinantes o variables, tienen una importancia relativa, es decir, hay conductas
que están controladas principalmente por el componente actitudinal y conductual que
están controladas principalmente por la norma subjetiva.
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PSICOLOGÍA SOCIAL
PS. VÍCTOR CABRERA VISTOSO
Por ejemplo:
La conducta del consumo de drogas, alcohol, cigarrillos, es una conducta controlada casi
fundamentalmente por el componente acititudinal, la enorme mayoría de los adictos
consumen la droga porque le produce mucho agrado, mucho placer, sabiendo que las
personas más cercanas quisiera que el sujeto deje el vicio, sin embargo, el que es
vicioso, sigue en esta conducta por que el peso relativo que prima es el componente
actitudinal (en un 90%) y sólo en un 10% por el componente normativo.
De modo que el mensaje de una cajetilla de cigarros que dice que “el cigarro puede ser
dañino para la salud”, es un mensaje normativo que al fumador no le hace efecto, pero
que este mensaje normativo le hace efecto a las personas que no tienen la adicción. Es
decir, todas las campañas que usan el factor normativo no tienen ningún resultado para
aquellas personas que están guiadas por el facto actitudinal.
La conducta, a lo menos de consumir alcohol y tabaco se mantiene por la importancia
del componente actitudinal, pero se aprende por el componente normativo, Es decir,
son muy pocas personas que hayan experimentado un placer infinito con el 1º cigarro o
con la 1º borrachera, al contrario, ello produce mucho desplacer, de modo que por que
entonces de adquiere la conducta si lo que produce lo desagrada. Se adquiere por
presión normativa, es decir por el componente normativo, sin embargo la mantensión
de la conducta se debe al control dado por el componente actitudinal. Es decir hay una
diferencia importante entre aprendizaje y mantensión .
El componente normativo se da mediante la frases “fuma o si no soy poco
hombre”, etc.
De modo que las campañas de cambio de actitudes pueden ser con mensajes
actitudinales o mensajes normativos, dependiendo del objetivo de la campaña. Es por
eso que a un fumador empedernido no le hacen efecto las campañas anti - tabaco.
Todo lo que se puede hacer para defender a un niño de la presión social es inútil; la
presión social funciona con otros códigos. Esto explica que hay conductas que son más
actitudinales, y conductas más normativas.
Hay mucha conducta que se ejecutan por la norma subjetiva (por cumplir una norma) por
ejemplo, asistir a clases de psicología social a las 8:00 AM, es decir, sin ningún placer.
En otras palabras, son muchas las conductas que uno ejecuta no porque se sienta un
gran placer, sino porque esta obligado a hacerlo.
Cuando alguien me produce agrado y además me siento satisfecho cumpliendo una
norma, la probabilidad de cambiar esa actitud e muy difícil, lo hago por que me gusta y
porque cumplo un deber, de modo que una conducta de este tipo es muy resistente al
cambio.
Una conducta se puede cambiar, cuando la relación entre componente actitudinal y
normativa sea 10% y 90%.
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RESUMEN
 La conducta depende de la intención conductual
 La intención conductual depende de dos determinantes: la actitud hacia la conducta y
la norma subjetiva.
Otra pregunta es ¿De que depende la actitud hacia la conducta? Porque hay conductas
que nos producen agrado y porque hay conductas que nos producen desagrado, como
se puede medir esto. De modo que las investigaciones nos muestran de que hay dos
determinantes actitudinales; las creencias respecto a que hay ciertas conductas que nos
van a producir determinadas consecuencias.
Por ejemplo si se le pregunta a alguien qué es lo que el sujeto cree que le va a pasar si
deja de ejecutar la conducta de fumar?, creemos de que ciertas conductas nos
conducen a ciertos resultado o consecuencias. Volviendo a la Teoría de Acción
Razonada, se comprueba de que las personas “saben lo que les va a pasar”. El sujeto
sabe que si deja de fumar (sus creencias), puede engordar o puede andar nervioso o
puede tener problema de insomnio o ahorrar dinero, se blanquean los dientes, va a
aumentar la capacidad respiratoria, se le va a sentir más gusto a los alimentos, etc. Es
decir que, si el sujeto sigue fumando o deja de fumar le va a producir un conjunto de
resultados o consecuencias y la avaluación de esas consecuencias.
Es decir, que todos estos beneficios ya señalados, al ser buenos para el sujeto de modo
que la sumatoria de estas evaluaciones va a determinar el “signos” de la actitud, porque
hay cosas buenas y cosas malas, por eso se mide en una Escala Tipo Fischman (muy
bueno o muy malo). Reiterando, en la sumatoria de todas las creencias (positivas o
negativas), las que determinan de que la actitud sea positiva o negativa.
Por esto que la Teoría de Acción Razonada, dice que todo sujeto relativamente normal
“sabe” las consecuencias de su acción (sabe qué le ocurrirá si sigue o no estudiando, si
sigue o no fumando, etc.) por eso es importante el rol de las creencias y por eso es que
esta teoría asume que los seres humanos son capaces de razonar su comportamiento.
Es muy raro y es muy malo cuando el sujeto no sabe lo que le pasa o no sabe porqué lo
hace. Cuando se tiene ese problema, la única solución es ir a un psicólogo.
Hay muchas conductas que no están determinadas por el componente actitudinal sino
que por el normativo y ocurre que este componente normativo tiene a su vez dos
determinantes: Las creencias respecto que algunos referentes específicos piensan que
debe ejecutado o dejar de ejecutar una conducta.
Nuevamente en esta teoría de acción razonada toda persona relativamente normal, tiene
claro quienes son estos referentes. Generalmente estos referentes son los padres,
esposa, hijos y personas muy cercanas. Naturalmente si decimos que nos vamos a
olvidar de la carrera de psicología quienes tendrán una reacción negativa precisamente
serán nuestros padres, amigos, etc.
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Es decir, el primer factor que determina que el sujeto esta normalmente determinado es
cuanto yo creo que la gente que a mí me quiere aprueba o desaprueba que yo siga
fumando o que deje de fumar, siga estudiando o deje de estudiar, etc.
El segundo factor es: Cuánto quiero hacerle caso a estas personas. Por ejemplo, cuanto
quiero hacerle caso a mi familia para no dejar de estudiar?.
Lo que se concluye es que hay ciertas variables que se pueden manejar o manipular
sociológicamente, es decir, es posible cambiarle las creencias a las personas, puedo
cambiar la evaluación de las creencias, sin embargo las variables externas no se pueden
manipular o cambiar. En estas creencias influyen variables que están fuera del control
del psicólogo. Estas variables son:
1.- VARIABLES DEMOGRAFICAS:
1.1.- VARIABLE EDAD
A medida que aumenta la edad el individuo va incorporando o incrementando la
importancia del componente normativo en su intención y en su conducta por ejemplo: a
un sujeto de edad le puede encantar usar aro y colita, pero es ridículo en una persona
de edad avanzada, distinto si fuera joven. Es decir, hay muchas cosas que un sujeto no
puede hacer porque no van con la edad, es decir, la edad va incrementando la
importancia del componente normativo, precisamente por la desaprobación social.
1.2.-SEXO
En este caso, por ejemplo la variable sexo hace que las mujeres sean mucho más
normativas que los hombres y no es por genética sino porque el aprendizaje social de la
mujer la hace mas permeable a la norma y en todos los países del mundo recibe una
sanción mucho más fuerte la mujer que engaña a su marido que viceversa, es mucho
mas feo ver a una mujer borracha en la calle que ver a un hombre. En realidad, cuando
se observan conductas no normativas parece muy extraño ver a una mujer orinando en
la calle que ver a un hombre orinando en la calle.
Es por ello que la edad y el sexo hace que las personas sean mas normativas y menos
actitudinales.
1.3.- EL ESTATUS SOCIOECONOMICO.
En todos los países el estatus socioeconómico medio es el más normativo de todos. La
gente de clase media tiene una gran preocupación a ascender y una gran miedo de
descender y por eso esta gente es tan preocupada del que dirán (de lo que sanciona la
sociedad), de modo que hay una mayor competencia normativa.
1.4.- LA RELIGION:
A mayor religiosidad mayor normatividad, puesto que la religión determina las normas
que se deben seguir independientemente del a religión que se tenga (Católico,
Musulmán, El Fundamentalismo Islámico) y donde la conducta se rige por normas,
obedientes a la religión.
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1.5.- EL NIVEL EDUCACIONAL:
A cualquier persona se le puede disculpar, pero a un universitario no, de modo que éste
debe responder a una conjunto de normas sobre todo un profesionales como los
psicólogos donde la gente espera de este profesional un comportamiento normativo (de
normalidad de equilibrio)
De modo que con estas variables aunque no se pueden trabajar si se deben considerar
puesto que si me contratan para realizar un programa de cambio de actitud de viejos,
mujeres, nivel socioeconómico, nivel educacional, ciertas ocupaciones (cargos altos),
nivel religioso, lo que yo debo emitir son mensajes normativos. Es decir, mostrando el
ejemplo.
2.- ACTITUDES HACIA CATEGORIAS (TARGET)
Es evidente que influyen en estas creencias las actitudes que yo tengo hacia
determinadas personas (por ejemplo, personas pertenecientes a religiones - Judíos,
Católicos, Masones - personas pertenecientes a categorías políticas como - derechistas,
marxistas, o hacía categorías profesionales como psicólogos, abogados, etc.) y actitudes
hacía las religiones, hacia la iglesia, hacia el estado, hacía la justicia, hacía el
parlamento, hacía la familia, etc.
Estas actitudes son actitudes hacia personas e instituciones, no son actitudes hacia
conductas. Es distintos temas actitud hacia los Arabes o Judíos o tener actitud positiva
o negativa a bailar con un Arabe o una Judía. Puede que haya relación pero no
necesariamente directa. Puede odiar a los Arabes pero juntarme con una mujer Arabe.
3.- RASGOS DE PERSONALIDAD
3.1.- INTROVERTIDO VERSUS EXTROVERTIDO
Se trata de la característica de cada persona, es así como tenemos el caso de las
personas introvertidas que suelen ser muy normativas, en cambio la personas
Extrovertida esta acostumbrado a recibir la atención, la aprobación de los demás, es
muy dependiente de la aprobación o del rechazo que produce en los otros, en cambio la
persona introvertida es muy independiente esta acostumbrada a tener su vida interior y
por ende es muy autónomo en sus conductas, independientemente que lo aprueben o lo
rechacen, por eso que los clínicos dicen que los peores pacientes son los introvertidos.
La escala de neurotisismo hace que efectivamente las personas neuróticas estén muy
preocupadas de la reacción que los demás tienen frente a su conducta, se dan cuenta
que haciendo lo que quieren hacer producen rechazo en los demás, de modo que viven
en un conflicto puesto que ellos necesitan del apoyo de los demás, no pueden vivir
independientemente y por eso que normalmente son sujetos aproblemados o
amargados, porque lo que normalmente hacen les cuesta y les produce conflictos con
personas que ellos quieren. Esto es muy importante porque la norma subjetiva se
refiere a aquellas personas que para mí son importantes (obviamente que no me va a
importar que la gente que yo odio se moleste por algo que yo hago)
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3.2.- EL AUTORITARISMO
Es obvio que las personas autoritarias son sumamente normativas, siempre están
preocupadas en como deben ser las cosas.
3.3.- LA DOMINANCIA
Estas personas, curiosamente, son sumamente dependientes porque si no tienen a
quien dominar se les pierde el sentido de la vida. Hay algunos estudios clínicos que
muestran que es más clara la correlación entre los celosos y los normativos, es decir, se
plantea que las personas en extremo celosa lo son por el miedo a la reprobación social,
es decir, que ellas sepan que les están siendo infieles, ósea , una fuerte dependencia de
lo que dicen los demás.
En consecuencia, lo importante aquí es ver de que manera estamos en presencia de
una perspectiva, de una teoría o de un paradigma completamente distinto a los otros
dos. Aquí las actitudes tienen un solo componente, el componente afectivo, es decir, se
trata del agrado o desagrado que nos produce la ejecución de la conducta. Las actitudes
solo miden el componente afectivo (cuanto agrado o desagrado me produce fumar o
dejar de fumar, usar o no usar preservativos, votar o votar, etc.).
COMPONENTE CONDUCTUAL
Lo que podríamos llamar componente conductual , estaría entre aquellos que se
relacionan directamente con la conducta, es la predisposición, es decir, la intención
conductual.
COMPONENTE COGNITIVO
Corresponde a todas las creencias, es decir, a medir de distinta manera los
determinantes conductuales. Son las creencias de lo que supongo que son las
opiniones de mi familia con respecto, por ejemplo, a mi decisión de fumar o de dejar de
fumar.
El componente cognitivo corresponde a las creencias, es decir, a los
conocimientos que yo tengo, respecto a que si hago algo me va a ocurrir una
determinada cosa.
COMPONENTE AFECTIVO
Es la evaluación de las consecuencias, es decir, por ejemplo, si yo dejo de fumar voy a
andar nervioso (Esa es una creencia que yo tengo y yo considero que andar nervioso es
malo), de modo que suceden los siguientes aspectos:
1. Racionalmente, cuando yo considero que la mayoría de la gente esta de acuerdo en
que fumar cigarrillos es dañino para la salud, eso es racional, parece de verdad cierto.
2. El nivel de aceptación de la autoridad también es racional, por ejemplo, también hay
muchos médicos que nos dicen que fumar también es malo para la salud.
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Es decir, lo que no es racional pero si razonado, es el hecho de que yo crea firmemente
que mi conducta de yo fumar cigarrillos me va ha hacer mal para mi salud (eso es
razonado, no racional), es lo mismo que el sentido de la racionalización psicoanalítica,
que es exactamente lo mismo que la reducción de la disonancia cognoscitiva (cuando
uno se engaña a si mismo).
Es decir, la única diferencia que sostiene Martin Fischman que caracteriza a la conducta
de los seres humanos, de los no humanos es que los primeros somos capaces de
razonar la conducta, entonces cuando uno se trata de explicar porque hace lo
inexplicable se esta trabajando con un ser humano relativamente normal, es decir, la
persona puede explicar razonadamente esa conducta. Es raro que una persona
reconozca que es “malo de adentro” , mas bien tiende a dar muy buenas razones de su
conducta (explicaciones razonadas).
La diferencia entre el plano clínico y el plano sicosocial es que cuando las personas no
tienen explicaciones razonadas que les permitan entender su conducta no hay otra
alternativa que ir al psicólogo para encontrar una respuesta.
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