Download Centro Islámico Árabe Salvadoreño Mezquita Dar Ibrahim

1
Centro Islámico Árabe Salvadoreño
Mezquita Dar Ibrahim – Mezquita de La Luz – Mezquita Palestina Tierra Santa
Jutba del viernes 02 octubre de 2015
Inna al hamda lillah, nahmaduhu ua nasta‘inuhu ua nastagfiruh. Ua na‘udhu billahi min shururi
anfusina ua min saii'ati a‘malina. Man iahdihillahu fala mudilla lah, ua man iudlil fala hadialah. Ua
ashhadu an la ilaha illa Allahu uahdahu la sharika lahu ua ashhadu anna Mujámmadan ‘abduhu ua
rasuluh. Todas las alabanzas pertenecen a Allah, lo glorificamos y nos encomendamos en Él. Nos
refugiamos en Allah del mal que hay en nuestro ego y del que puedan generar nuestras malas
acciones. A Quien Allah guía, nadie lo podrá desviar, pero a quien Él desvíe, nadie lo podrá guiar.
Atestiguo que no hay otra di-vinidad excepto Allah, Único, sin asociados. Atestiguo que
Mujámmad es Su siervo y Mensajero. ¡Oh Allah! Bendice a Mujámmad, su familia, sus compañeros
y todos los que sigan su guía hasta el Día del Juicio Final.
Amma’bad (a continuación)
 Primera Jutbah
¡Hermanos y hermanas en el Islam! Tengamos temor de Allah, pues la piedad es la mejor provisión
y el camino más recto que todos debemos seguir. Allah dice en el Sagrado Corán: “¡Oh, creyentes!
Teman a Allah como es debido y no mueran sino musulmanes sometidos a Él.” (Corán 3:102)
“¡Oh, seres humanos! Tengan temor de su Señor, Quien los ha creado de un solo ser, del que
creó a su cónyuge e hizo descender de ambos muchos hombres y mujeres. Tengan temor de
Dios, en Cuyo nombre se reclaman sus derechos, y respeten los lazos familiares. Dios los
observa.” (Corán 4:1)
“¡Oh, creyentes! Tengan temor de Dios y hablen solo con la verdad. [Si lo hacen,] Él hará
virtuosas sus obras y perdonará sus pecados. Quien obedece a Dios y a Su Mensajero obtendrá
un triunfo grandioso.” (Corán 33:70-71)
Hermanos y hermanas, el Islam enseña la moderación, el equilibrio en todos los aspectos de la
vida, y nos enseña que el ser humano es responsable de sus actos, y que un día, el Día del Juicio
Final, estará de pie ante Allah, respondiendo por todos sus actos.
Dijo Allah en el Sagrado Corán: “Son la mejor nación que haya surgido de la humanidad: Ordenan
el bien, denuncian el mal y creen en Allah.” (Corán 3:110)
Es decir, los creyentes en Allah son la mejor nación siempre que cumplan con dos condiciones:
1. Que ordenen y recomienden el bien a los individuos y a la sociedad.
2. Que denuncien el mal que hay tanto en los individuos como en la sociedad.
Allah creó al hombre y a la mujer, mencionó en su libro cual debe ser la naturaleza de la relación
entre ellos dentro de la familia y el matrimonio, y estableció normas de conducta para los
momentos de buena relación, así como para los momentos de mala relación. Dice Allah en el
2
Corán: “Y entre Sus signos está haber creado cónyuges de entre vosotros para que encuentren
sosiego, y dispuso entre vosotros amor y compasión. Por cierto que en ello hay signos para
quienes reflexionan profundamente”. (Corán 30:21)
“Entre sus signos” es decir, de los milagros de la creación.
“Cónyuges” es decir pares, compañeros. Un compañero para el desarrollo de la vida espiritual. Un
compañero para la tranquilidad emocional. Un compañero para la convivencia harmoniosa. Un
compañero para buscar hijos y criarlos con amor.
“Para que encuentren sosiego” litaskunu ilaiha, del árabe sakan, lugar donde se encuentra la
sakinah (la paz).
“Y dispuso entre vosotros el amor” mawaddah, que viene de uno de los nombres de Allah, AlWadud, que es un amor profundo y respetuoso. El respeto implica la libertad de elección y el
respeto a la individualidad.
“y compasión” para que en los momentos de diferencia y discusión, sea la compasión y no la
severidad la actitud predominante.
El objetivo del matrimonio es el desarrollo como personas, en un ambiente harmónico (litaskunu),
pero qué pasa cuando, como en todos los matrimonios puede pasar, hay momentos de
intranquilidad, de discusión, de diferencia de opinión, Allah dice en el Corán: “Si una mujer teme
de su marido malos tratos o rechazo, no incurrirán en falta si llegan a un acuerdo, pues un
acuerdo [justo] es lo mejor”. (Corán 4:128)
Algo que Allah no permite bajo ninguna circunstancia es la opresión, dice en el Hadiz Qudsi: “Yo
me he prohibido a mi mismo la opresión, y la he prohibido entre ustedes, así que no se opriman
unos a otros”. (Muslim)
Cuantas situaciones como la del Faraón y su esposa Asia hay hoy en día. En la historia que nos
narra el Corán el Faraón era un tirano, que se creía Dios. Hay hombres que actúan como si fueran
dios. Piensan que no le tienen que rendir cuentas a nadie. Tratan a su esposa como tiranos.
Exigiéndole a sus esposas obediencia absoluta, incluso en cosas que son prohibidas en el Islam.
Eso no es Islam, el Islam es buen trato, compasión. En el Islam el matrimonio es un lugar donde
encontrar protección y amor. El maltrato y la tiranía, es parte del sistema patriarcal machista pre
islámico. Algo que debemos dejar de lado.
Además, hoy en día, si un cristiano golpea a su esposa, nadie dice que su religión tiene algo que
ver. Si un judío golpea a su esposa, nadie se atreve a decir que su religión tiene algo que ver, no
vaya a ser que lo acusen de “antisemitismo”. Pero si un musulmán golpea a su mujer, ahí si, ahí se
menciona su religión: que el Islam enseña a golpear a las mujeres, que los musulmanes pueden
golpear a sus cuatro esposas, y otros prejuicios y mitos más. Es decir hermanos, el musulmán no
solo debe cuidarse por hacer lo que es correcto, sino que además debe ser cuidadoso para que no
se manche el nombre de su religión.
3
Algunas personas comprenden mal un versículo del Corán que dice: “Los hombres están a cargo
de las mujeres debido a la elección que Allah ha hecho, por lo que deben mantenerlas con sus
bienes. Las mujeres piadosas son obedientes a Allah y cuidan en ausencia de su esposo [de su
honor y sus bienes] como ha ordenado Allah. A aquellas que hayan cometido actos de
desobediencia [a lo que Allah ordena], exhórtenlas, no cohabiten con ellas, o alejaos de ellas
[adribuhunna por un tiempo]; pero si obedecen [en lo que Allah ordena] no busquen
perjudicarlas. Allah es Sublime, Grande”. (Corán 4:34)
Este versículo fue descendido para eliminar las formas de violencia doméstica que existían en la
época del Profeta, e irónicamente, muchos lo usan en la actualidad para justificar la violencia
doméstica. Si alguien dice que este versículo justifica golpear a su esposa, a la persona más
cercana, y que como vimos, debe tener un trato de amor profundo y respetuoso, vivir en un lugar
donde se sienta segura, es una persona que está contradiciendo el mensaje de Mujámmad, quien
fue enviado como una misericordia para todos los mundos, lo que incluye también el mundo de
las mujeres.
“Te hemos enviado [¡Oh, Mujámmad!] Como misericordia para todos los seres” (Corán 21:107)
Los compañeros dijeron: “El mensajero de Allah jamás golpeó a una de sus esposas, ni a uno de
sus hijos, ni a ningún niño”. Dice el Corán: “Por cierto que tienen en el Mensajero de Allah el
mejor ejemplo”. (Corán 33:21)
El versículo nos indica cómo el Islam ordena que se resuelvan los conflictos. Es decir, primero
exhortación, segundo alejamiento temporal, tercero, según A’ta, un exegeta del Corán, significa
mostrar enojo y dejarle saber la gravedad de la situación elevando el Siwak (cepillo de dientes),
mientras que la violencia domestica es por definición: “Un patrón de conductas abusivas utilizadas
por alguien para establecer poder y control sobre la otra persona en una relación. La violencia en
el hogar sigue un patrón cíclico en el que hay periodos de calma, luego viene un aumento de la
tensión y después el abuso. Los abusadores a menudo se disculpan, pero si el ciclo se repite el
abuso por lo general empeora con el tiempo”.
Esto ocurre cuando alguien no puede controlar su ira y simplemente golpea a su esposa. No es
extraño ver o escuchar sobre los casos de mujeres con la cara morada, o un ojo morado, siendo
que el Islam prohibió absolutamente golpear en el rostro, incluso a los animales. El Islam no
permite estas expresiones de violencia. El Islam tiene su sistema de solución de conflictos, y si la
pareja no ha podido solucionar sus problemas por si mismos de una buena manera, Allah dice en
el Corán: “Si temen la ruptura de un matrimonio, pongan un mediador de la familia de él y un
mediador de la familia de ella. Si desean reconciliarse, Allah hará que lleguen a un acuerdo.
Allah todo lo sabe, y está bien informado”. (Corán 4:35)
Es decir, en caso de que la pareja no pueda solucionar los problemas por sí mismos, el Islam
recomienda una ayuda externa, de los familiares, si son competentes o de mediadores para
intentar solucionar el problema. Si el cónyuge es sincero y quiere arreglar el problema, acepta de
4
buena fe esa ayuda ex-terna. Mientras que un abusador, nunca quiere que se inmiscuyan en sus
asuntos, y se enfurece con su esposa si esta le comunica a alguien los problemas que tienen.
La condición para esta ayuda externa, es que tenga la intención de ayudar a resolver el problema,
no que quiera separar y desintegrar a la familia. Como es la actitud de algunas asociaciones que
supuestamente intentan defender a la mujer, pero que tienen una actitud divorcista, en la que ni
siquiera intentan ayudar a la familia, sino que proponen como primera medida el divorcio.
Y si esto tampoco funciona, entonces Allah dice: “Si la voluntad de divorcio se expresare dos
veces, se tiene aún la posibilidad de reconciliarse debiendo tratar a la mujer con bondad, o en
caso contrario dejarla marchar de buena manera.” (Corán 2:229)
Es decir que agotadas todas las posibilidades de reconciliación para vivir en armonía, Allah permite
el divorcio, pero en ningún caso permite la violencia y el maltrato.
Si el caso de esta pareja llegara al divorcio, eso no indica que las posibilidades de maltrato o abuso
se detengan, lamentablemente el Corán nos advierte sobre una modalidad que las personas
usaban en la antigüedad para vengarse de su ex cónyuge, y que por desgracia se sigue usando por
muchos en la actualidad. Así como la modalidad de maltrato físico, si bien existe en ambos
cónyuges, es mayoritario y causa mayor daño cuando lo causan los hombres, esta otra forma de
maltrato que es utilizando a los hijos, es mayoritariamente usada por las mujeres. Por eso dice
Allah: “Que ni la madre ni el padre utilicen a su hijo para perjudicarse mutuamente”. (Corán
2:233)
Es decir, cuando durante y después del divorcio, la madre toma como rehenes a sus hijos y le
habla mal del padre, y en muchas ocasiones no le permite al padre ver a sus hijos. Lo que
representa no solo un maltrato psicológico y emocional para el padre, sino también para los hijos.
Digo estas palabras, y pido perdón a Allah por todos nosotros, pidan ustedes también perdón a
Allah.
Segunda Jutbah
Inna al hamda lillah Ashhadu an la ilaha illa Allahu uahdahu la sharika lahu ua ashhadu anna
Mujámmadan ‘abduhu ua rasuluh. Fa inna jaira al hadizi kitabullah, ua jairu al huda huda
Mujámmadin ua sharru al umuri muhdazatuha, ua kullu muhdazatin bid‘ah ua kullu bid‘atin
dalalah ua kullu dalalatin fi an nar.
Todas las alabanzas son para Allah. Atestiguo que no hay otra divinidad excepto Allah, Único, sin
asociados. Atestiguo que Mujámmad es Su siervo y Mensajero.
Ciertamente las mejores palabras son el Libro de Allah, la mejor guía es la guía de Mujámmad y los
peores asuntos son las innovaciones. Todo invento en la religión es una innovación, y toda
innovación es perdición y toda perdición lleva al Fuego.
5
El Corán dice describiendo como debería ser la relación entre el hombre y la mujer: “Los creyentes
y las creyentes son aliados unos de otros, ordenan el bien y denuncian el mal, cumplen con la
oración prescrita, pagan el Zakát y obedecen a Allah y a Su Mensajero. Allah tendrá misericordia de ellos; Allah, es Poderoso, Sabio.” (Corán 9:71)
¿Qué puede hacer quien descubre que no puede controlar su ira y maltrata a su familia? ¿Acaso el
Islam condena a las personas y cree que nadie tiene la oportunidad de cambiar y enmendar? La
respuesta es No. Si una persona reconoce que su conducta ha sido equivocada, y sinceramente de
corazón desea cambiar, debe iniciar un camino de cambio, buscando ayuda espiritual y un
tratamiento adecuado, y reparar buscando el perdón de los que perjudicó con sus acciones, tal
como nos narra el Hadiz de la persona que había matado a cien personas, pero quería cambiar su
vida, el sabio le aconsejó que cambiara de ambiente e iniciara un viaje de cambio, lo mismo debe
hacer esta persona.
¿Cuál debe ser nuestra actitud como individuos y comunidad si somos testigos de un caso de
violencia doméstica o maltrato, ya sea dentro o fuera de nuestra comunidad musulmana? Es
nuestra responsabilidad como musulmanes no permanecer callados ante la opresión y la injusticia.
La comunidad musulmana debe apoyar y ayudar a las personas y las familias que estén sufriendo
malos tratos en el hogar, y elevar la voz para denunciar la violencia doméstica y buscar modificar
la sociedad hacia algo mejor.
Que Allah nos bendiga a través del Sagrado Corán y las enseñanzas del Mensajero de Allah.
Súplicas finales
¡Oh Allah! Concede bendiciones y paz a nuestro Profeta Mujámmad, a sus familiares, a todos sus
discípulos y a quienes sigan su guía de buena manera hasta el Día del Juicio. ¡Oh Allah! Da tu
compla-cencia a todos los discípulos de Tu Mensajero, de quienes fueron destacados Abu Baker,
Omar, ‘Uzman y ‘Ali. Complácete también con todos los seguidores de estas nobles personas,
quienes siguen su guía hasta el Día del ajuste de cuentas, y con nosotros los presentes, pues Tú
eres en verdad el más Clemen-te.
¡Oh Allah! Enaltece y dignifica al Islam y a los musulmanes, protégenos del mal de nuestros
detracto-res, y líbranos de los problemas del encarecimiento de los productos, la propagación de
enfermedades, de la usura y el interés monetario, del adulterio y la fornicación, de los terremotos,
de las dificultades y las tribulaciones, y de la perversión y corrupción oculta y evidente.