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Centro Islámico Árabe Salvadoreño
Mezquita Dar Ibrahim – Mezquita de La Luz – Mezquita Palestina Tierra
Santa – Mezquita Renacer
JUTBA DEL VIERNES 20 DE NOVIEMBRE DE 2015
Inna al hamda lillah, nahmaduhu ua nasta‘inuhu ua nastagfiruh. Ua na‘udhu billahi min
shururi anfusina ua min saii'ati a‘malina. Man iahdihillahu fala mudilla lah, ua man iudlil
fala hadia lah. Ua ashhadu an la ilaha illa Aláhu uahdahu la sharika lahu ua ashhadu anna
Mujámmadan ‘abduhu ua rasuluh - Ciertamente las alabanzas pertenecen a Aláh. A Él
alabamos, pedimos ayuda y rogamos perdón. Nos refugiamos en Aláh contra el mal de
nuestro ego y la maldad de nuestras acciones. Aquel a quien Aláh guía nada lo puede
desviar, y aquel a quien Aláh desvía nada lo puede guiar. Atestiguo que nada ni nadie
tiene derecho a ser adorado salvo Aláh, Único y sin copartícipes, y atestiguo que
Mujámmad es Su siervo y Mensajero”.
Ammabad (A continuación)
 PRIMERA PARTE
¡Hermanos y hermanas en el Islam! Tengamos temor de Allah, pues la piedad es la
mejor provisión y el camino más recto que todos debemos seguir. Allah dice en el
Sagrado Corán: “¡Oh, creyentes! Teman a Allah como es debido y no mueran sino
musulmanes sometidos a Él.” (Corán 3:102)
“¡Oh, seres humanos! Tengan temor de su Señor, Quien los ha creado de un solo ser,
del que creó a su cónyuge e hizo descender de ambos muchos hombres y mujeres.
Tengan temor de Dios, en Cuyo nombre se reclaman sus derechos, y respeten los lazos
familiares. Dios los observa.” (Corán 4:1)
“¡Oh, creyentes! Tengan temor de Dios y hablen solo con la verdad. [Si lo hacen,] Él
hará virtuosas sus obras y perdonará sus pecados. Quien obedece a Dios y a Su
Mensajero obtendrá un triunfo grandioso.” (Corán 33:70-71)
¡Hermanos! Teman a Allah y sepan que la súplica (el Du'a) es una de las mejores formas
de adoración. Relató An-Nu'man Ibn Bashir que el Profeta (pyb) dijo: “El Du'a es
adoración” y luego recitó la aleya Coránica: “Y vuestro señor ha dicho: Pedidme, que os
responderé (vuestros ruegos). Por cierto que aquellos cuya soberbia les impida
adorarme, entraran en el infierno humillados.” (Corán 40:60). [Transmitido por Abu
Dawud y At-Tirmidhi quien dijo: Hadiz Hasan Sahih.]
Allah nos ha ordenado hacer Dua en innumerables aleyas, prometiendo responder, y
elogió a sus profetas y mensajeros cuando dijo: “Todos ellos se apresuraban a las
buenas obras, nos suplicaban con anhelo y temor [devocional].” (Corán 21:90).
Allah nos informó que Él está cerca, y que ha de responder a las súplicas cuando dijo: “y
cuando mis siervos te pregunten sobre mi…yo estoy cerca y respondo al ruego del que
pide cuando me suplica” (Corán 2:186).
La súplica para ser aceptada por Allah, y concedida, tiene condiciones que el musulmán
y la musulmana deben cumplir.
Primero: Buscar los momentos en que las súplicas son escuchadas y hay más
posibilidad de que sean respondidas.
Estos momentos son: cuando comienza a llover, al amanecer, el día viernes, durante la
prosternación [suyud], entre el llamado a la oración [adhan] y el establecimiento de la
oración [iqamah], entre otros.
Segundo: Suplicar a Allah con un corazón atento.
Narró Abu Hurairah que el profeta (pyb) dijo: “Supliquen a Allah estando seguros que les
responderá, y sepan que Allah no acepta las súplicas de un corazón distraído,
negligente”. [Transmitido en al-Mustadrak de Al-Hakim]
Tercero: Alabar a Allah y pedir paz y bendiciones por el Profeta antes de iniciar la
súplica.
Fudalah Ibn ‘Ubaid narró que cierta vez el Profeta (pyb) se encontraba sentado en la
mezquita cuando entró una persona y rezó dos Raka‘at. Al terminar dijo: “¡Allah,
perdóname y ten piedad de mí!”. El Profeta (pyb) le dijo: “¡Te has precipitado! Cuando
termines tu oración, siéntate y alaba a Allah con una alabanza digna de Él y pide paz y
bendiciones por mí, luego pide lo que deseas.”
Cuarto: Comer alimentos ilícitos, beber bebidas ilícitas y vestir ropas ilícitas.
Fue narrado que el profeta (pyb) dijo: “Un hombre realiza un largo viaje, y ya
desgreñado y polvoriento, extiende sus manos al cielo diciendo: ¡Oh Señor!, ¡Oh Señor!
Pero su comida es haram, su bebida es haram, su ropa es haram y se alimenta del
haram, ¿cómo habrá de serle contestado?”. [Transmitido por Muslim]
En este Hadiz el Profeta (pyb) indicó que la comida, la bebida y la vestimenta ilícita son
una causa de la no aceptación de las súplicas.
Dijo el mensajero de Allah (pyb): “Busca que tu comida sea del Halal, y tu Du'a será
contestado”.
Hermanos y hermanas, tomen conciencia y revisen las fuentes de su sustento, para que
Allah conteste sus invocaciones y súplicas.
Quinto: Entre las razones de la no aceptación de las súplicas, se encuentra la falta de
monoteísmo y sinceridad en el momento de pedir.
Dijo Allah en su libro: “Así que invoca solamente a Allah, y solo a Él adoren…” (Corán
40:14). Y dijo: “y no invoquen a nadie unto con Allah…” (Corán 72:18)
Aquellos que asocian en sus súplicas junto con Allah, tales como ídolos, tumbas,
muertos, santos, espíritus, ángeles cayendo en la utilización de intermediarios. A estos
Allah no habrá de contestarles sus súplicas, puesto que se han apartado de Allah y han
roto su relación de monoteísmo con Él.
Allah nos ordenó que le roguemos solo a Él directamente sin intermediarios.
Dijo Allah: “y cuando mis siervos te pregunten sobre mi…estoy cerca y yo respondo al
ruego del que me pide cuando ruega”. (Corán 2:186) y dijo también: “Y vuestro señor
ha dicho: Pedidme, que yo os responderé” (Corán 40:60).
Siempre busquen rogar a Allah con súplicas sinceras, y preferiblemente que las súplicas
se encuentren registradas en el Corán o la Sunnah auténtica del Profeta (pyb).
Sexto: Existen personas que son negligentes con Allah, y solo se acuerdan de Él en
tiempos difíciles, pero en sus días felices, jamás recuerdan a Allah ni lo incluyen en sus
vidas. A éstos, Allah no ha de res-ponder a sus oraciones y súplicas.
Dijo el mensajero de Allah (pyb): “Conoce a Allah en tiempos de prosperidad que Él se
acordará de ti en tiempos de adversidad”.
Todo esto nos demuestra la importancia de las súplicas y el estatus grandioso que Allah
le ha concedido: Narró Ali Ibn Abi Talib que el Profeta (pyb) dijo: “La súplica (ad-du’a) es
el arma del creyente, el pilar de la religión y la luz de los cielos y tierra” [Transmitido por
Al-Hakim en su libro Al-Mustadrak] y dijo el Profeta (pyb): “Ciertamente la súplica tiene
beneficio ya sea que sea concedida o no, por lo que, Oh siervos de Allah, hagan
súplicas”. [Transmitido por Al-Hakim, y es un Hadiz Hasan.]
Hermanos y hermanas, teman a vuestro Señor y suplíquenle humildemente, porque
Aisha relató que el profeta (pyb) dijo: “Allah ama aquellos que son perseverantes en sus
súplicas”.
Dijo Allah: “Vuestro señor ha dicho: Pídanme, que responderé, por cierto que aquellos
cuya soberbia les impida adorarme, entrarán en el Infierno humillados.” (Corán
40:60).
Por el contrario hacer Du'a es una razón para entrar al paraíso, Allah dijo: “Y se
preguntarán unos a otros [qué les hizo merecer el Paraíso]. Dirán: Cuando estuvimos en
la vida mundanal temimos [el castigo divino]. Y Allah nos agració con la fe y nos
preservó del tormento del Fuego. Y Le suplicábamos, pues Él es Bondadoso,
Misericordioso.” (Corán 52:25-28)
Digo estas palabras, y pido perdón a Allah por todos nosotros, pidan ustedes también
perdón a Allah.
 SEGUNDA PARTE
Inna al hamda lillah Ashhadu an la ilaha illa Allahu uahdahu la sharika lahu ua ashhadu
anna Mujámmadan ‘abduhu ua rasuluh. Todas las alabanzas son para Allah. Atestiguo
que no hay otra divinidad excepto Allah, Único, sin asociados. Atestiguo que Mujámmad
es Su siervo y Mensajero.
La civilización moderna, la ruda vida material, el rápido ritmo de vida, cortan la relación
del siervo con su Señor, salvo para aquellos que Al-lah les tiene misericordia. El ser
humano, por más fuerte que sea, es un ser débil, por más sabiduría que alcance siempre
le va a faltar algo y necesita en forma imperiosa de Al-lah, más que del agua y el aire.
Recordar a Al-lah ante las desgracias es un orgullo para el musulmán y una esperanza
para aquellos que creen, es sosiego para el corazón ¿Acaso no se sosiegan los corazones
con el recuerdo de Al-lah? Si los musulmanes prestasen atención a esto se dedicarían a
recordar frecuentemente a Al-lah.
¡Teman a Al-lah hermanos! Y sepan que existen personas que recuerdan a Al-lah pero
no saben lo que significa este recuerdo, por esta razón sus corazones están alejados de
sentir la grandeza de Al-lah.
El recuerdo constante de Al-lah eriza la piel de los creyentes por temor a Al-lah, luego
sus corazones se sosiegan, pero hay personas que repiten las palabras copiando a otros
sin entender su significado. ¿Acaso piensan en el significado de Al-lahu Akbar (Al-lah es
supremo)? Es la cabeza del takbir y su pilar, es lo primero que se le encomendó al
Mensajero de Al-lah, (pyb), cuando Al-lah le ordenó que amonestara a su gente en la
Sura “El Envuelto en el Manto”: “¡Oh, tú [Muhammad] que te envuelves en el manto!
Levántate y advierte [a los hombres]. Proclama la grandeza de tu Señor”. [Corán 74:13]
El recuerdo de Al-lah es una palabra grandiosa que puede vivificar la tierra árida, su
sonido es tan hermoso como el del mar, su sola mención aleja los demonios y nos
protege contra el pecado, el recuerdo de Al-lah es un gran beneficio para el creyente. Allahu Akbar, Al-lahu Akbar kabiran.
El Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “Tomad lo que os salvará”;
le preguntaron: “¿Cuál es el enemigo que viene?” Y les respondió: “¡No! Una salvación
del Fuego, decid: glorificado y alabado sea Al-lah, no hay otra divinidad excepto Al-lah,
Al-lah es el más grande, porque estas palabras se adelantarán el Día del Juicio y son las
obras buenas que perdurarán”. [Al Hakim]
Que todo creyente sincero sepa que hay algo que tiene un efecto beneficioso y es el
recuerdo de Al-lah en forma permanente, teniendo el corazón presente, porque la
lengua es la intérprete del corazón y el corazón es una reserva de secretos y
pensamientos, lo mejor que puede pasar es que Al-lah le dé amplitud en el pecho y
sienta placer al recordarlo con la lengua, tal como se nos invita en “El Muro Divisorio”,
Al-lah dijo: {Y ten presente a tu Señor en tu corazón con sometimiento y temor, e
invócale con voz baja por la mañana y por la tarde, y no seas indiferente.} [Corán
7:205]
Por esta razón debemos siempre recordar a Al-lah en palabra y pensamiento, de nada
nos vale una lengua que constantemente esté repitiendo cuando el corazón no siente
las palabras. El Mensajero de Al-lah, (pyb), dijo: “Sabed que Al-lah no acepta el ruego de
un corazón negligente”. [Al Hakim y At- Tirmidhi]
El Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, previno de las reuniones donde
no se recuerda a Al-lah, dijo: “Todos los que se levanten de una reunión donde no se ha
recordado a Al-lah, se levantarán como el cadáver maloliente de un burro y será para
ellos perdición”. [Abu Daud y Al Hakim]
También, el Profeta, (pyb), desaprobó las reuniones de gente negligente y prohibió
reunirse sin recordar a Al-lah, porque las reuniones donde no hay recuerdo de Dios se
extienden sobre temas banales, sobre asuntos materiales, sobre pasiones, lo cual es un
descuido y una molestia. El Profeta, la paz y las bendiciones sean con él, dijo: “Quien se
reúne en un lugar donde predomina el alboroto y dice antes de irse de dicha reunión:
‘Glorificado seas Al-lah Señor nuestro y alabado seas; atestiguo que no hay más
divinidad que Tú, Te pido perdón y me arrepiento ante Ti’, le son perdonadas las cosas
fuera de lugar que pudo haber dicho y escuchado en esa reunión”. [At-Tirmidhi e Ibn
Mayah.
Me refugio en Al-lah de Satanás el maldito. Al-lah dice en la Sura “Los hipócritas”: {¡Oh,
creyentes! Que vuestros bienes y vuestros hijos no os distraigan del recuerdo de Allah. Y sabed de que quienes ésta sea su situación serán los perdedores.} [Corán 63:9]
El Profeta Muhammad, la paz sea con él, dijo: "Quien maltrata a un no musulmán o le
impone cargas superiores a las que puede soportar, me encontrará como su enemigo".
Súplicas finales
¡Oh Allah! Concede bendiciones y paz a nuestro Profeta Mujámmad, a sus familiares, a
todos sus discípulos y a quienes sigan su guía de buena manera hasta el Día del Juicio.
¡Oh Allah! Enaltece y dignifica al Islam y a los musulmanes, protégenos del mal de
nuestros detractores, la propagación de enfermedades, de la usura y el interés
monetario, del adulterio y la fornicación, de las dificultades y las tribulaciones, y de la
perversión y corrupción oculta y evidente.
¡Oh Allah! Perdónanos y perdona a nuestros hermanos creyentes que ya fallecieron, y
no hagas que en nuestro corazón se encierre el desprecio y el odio por los que han
creído en Ti como se debe. Tú eres el más Bondadoso y Misericordioso.