Liberalismo
De acuerdo con la RAE, el liberalismo es la doctrina política que defiende las libertades y la iniciativa individual, y limita la intervención del Estado y de los poderes públicos en la vida social, económica y cultural. Asimismo, puede identificarse como una actitud que propugna la libertad y la tolerancia en las relaciones humanas. Promueve, por tanto, las libertades civiles y se opone a cualquier forma de despotismo. Constituye la corriente en la que se fundamentan tanto el Estado de derecho, como la democracia participativa y la división de poderes.Desde sus primeras formulaciones, el pensamiento político liberal se ha fundamentado sobre tres grandes ideas: Los seres humanos son racionales y poseen derechos individuales inviolables, entre ellos, el derecho a configurar la propia vida en la esfera privada con plena libertad, y los derechos a la propiedad y la felicidad. El gobierno y, por tanto, la autoridad política deben resultar del consentimiento de las personas libres y regular la vida pública sin interferir en la esfera privada de los ciudadanos. El Estado de Derecho (rule of law) obliga a gobernantes y gobernados a respetar las reglas, impidiendo el ejercicio arbitrario del poder.Aboga principalmente por:[cita requerida] El desarrollo de los derechos individuales y, a partir de éstos, el progreso de la sociedad. El establecimiento de un Estado de derecho, donde todas las personas sean iguales ante la ley (igualdad formal), sin privilegios ni distinciones, en acatamiento de un mismo marco mínimo de leyes que resguarden las libertades y el bienestar de las personas.El liberalismo surgió de la lucha contra el absolutismo, inspirando en parte en la organización de un Estado de derecho con poderes limitados —que idealmente tendría que reducir las funciones del gobierno a seguridad, justicia y obras públicas— y sometido a una constitución, lo que permitió el surgimiento de la democracia liberal durante el siglo XVIII, todavía vigente hoy en muchas naciones actuales, especialmente en las de Occidente.El liberalismo europeo del siglo XX ha hecho mucho hincapié en la libertad económica, abogando por la reducción de las regulaciones económicas públicas y la no intervención del estado en la economía. Este aspecto del liberalismo ya estuvo presente en algunas corrientes liberales del siglo XIX opuestas al absolutismo y abogó por el fomento de la economía de mercado y el ascenso progresivo del capitalismo. Durante la segunda mitad del siglo XX la mayor parte de las corrientes liberales europeas estuvieron asociadas a la derecha política. En Estados Unidos una parte del liberalismo ha estado históricamente ligada a movimientos sociales y comúnmente asociadas a la izquierda política. Debe tenerse en cuenta que el liberalismo es diverso y existen diferentes corrientes dentro de los movimientos políticos que se autocalifican como liberales.