Download Las neuronas espejo

Document related concepts

Neurona especular wikipedia , lookup

Neocórtex wikipedia , lookup

Codificación neural wikipedia , lookup

Neurona sensorial wikipedia , lookup

Corteza visual wikipedia , lookup

Transcript
 Las neuronas espejo
Alicia García Bergua
Cada vez es más evidente que el cerebro humano y el de los primates
son distintos de los del resto de los mamíferos por unas neuronas
llamadas espejo. Los numerosos experimentos conducentes al
descubrimiento de estas neuronas, conllevan una idea sumamente
novedosa del funcionamiento del cerebro humano: un cerebro
programado a lo largo de la evolución para actuar e interactuar con el
medio ambiente.
Se demostró que el sistema neuronal motor de nuestro cerebro no es
periférico, sino que sus circuitos funcionan también para integrar las
informaciones sensoriales y perceptuales que nos permiten actuar. El
hecho de que las informaciones sensoriales y motoras sean conducidas
por la misma vía y codificadas por los circuitos neuronales
parietofrontales, sugirió que el sistema de neuronas motoras no sólo se
encarga de nuestra movilidad sino de procesos cognitivos considerados
de orden superior como el sentido de identidad, la percepción de los
actos ajenos y por lo tanto de los otros individuos; la imitación y la
comunicación gestual y vocal.
En esta integración de la información que se realiza en la corteza
parietofrontal, el sistema neuronal motor no juega un papel pasivo,
como se pensaba antes; es decir, no sólo actúa según la información
recibida, sino que contribuye como si fuera una caja de resonancia, a
crear una respuesta veloz y simultánea a la información que estamos
recibiendo del medio ambiente. Por ejemplo, ahora se sabe que para
que nuestra mano pueda simplemente tomar una taza, necesita de un
mecanismo capaz de traducir la información sensorial que recibe en la
forma en que los dedos la agarrarán. Muchos tendrían la impresión de
que el primer proceso sigue al segundo, pero gracias a la investigación
actual sobre las neuronas de la corteza motora del cerebro se sabe que
ambos son simultáneos.
Experimentos de electroestimulación de las neuronas de la corteza
motora del cerebro han demostrado que en ella hay unas llamadas F4
que se activan no sólo cuando se ejecutan actos motores como alcanzar
la taza, sino a partir de la información sensorial: por ejemplo, la
información visual sobre el objeto que está al alcance. Las neuronas que
se activan ante estímulos somatosensoriales como el tacto, lo hacen a la
vez por percepciones visuales; están también enfocadas en lo que un
sujeto está observando y no sólo reaccionan ante los estímulos sino que
contribuyen a localizar visualmente los agentes del medio ambiente que
los provocan. A diferencia de otras neuronas, estas neuronas llamadas
espejo codifican no sólo simples estímulos visuales sino lo próximo, lo
lejano y la tercera dimensión, en un mapa que no es unitario; es decir,
en cada caso ayudan a representar activamente el espacio. Esto quiere
decir en resumidas cuentas que están proyectando una posibilidad de
acción y por eso también se les llama así.
Otras neuronas espejo de la corteza visual motora del cerebro de
primates y humanos, llamadas F5, intervienen en actos que se
encadenan como que alguien acerque la comida a un primate, que éste
lo vea y la agarre en consecuencia. Se activan en los actos transitivos
en el caso de los monos, pero no en los intransitivos.
Las neuronas espejo F5 en el hombre tienen la diferencia de que se
activan también en los actos intransitivos, es decir, en alguien que está
solamente contemplando actuar al otro, y posibilitan que ese alguien
reproduzca o haga un acto análogo, o que aprenda un patrón de acción
nuevo, como acordes en el piano y la guitarra; o que simplemente
disfrute viendo un partido de futbol.
Estas neuronas espejo contribuyen también en primates y humanos a la
empatía, pues permiten observar las acciones y emociones de los otros,
un rasgo evolutivo esencial para nuestra sobrevivencia como animales
sociales.
Gran parte de las interacciones humanas con el entorno y con el
comportamiento de los demás humanos dependen de nuestra capacidad
de compartir las emociones ajenas. La percepción cada vez más
desarrollada que el ser humano va teniendo de éstas emociones (los
bebés muy pequeños distinguen las caras tristes de las alegres, no sólo
permite identificar en los otros gestos de asco, de miedo, de alegría o de
dolor, sino también conducir a la empatía o identificación que refuerza
nuestros lazos sociales afirmativa o negativamente. Es decir, esta
empatía e identificación no conducen necesariamente a una reacción
similar en la otra persona (como suele suceder con los gestos de asco o
con el vómito) o a un gesto de compasión por parte de ésta. Nuestras
relaciones emotivas son de una gran complejidad como podemos ver en
Shakespeare, por ejemplo.
Referencias
Giacomo Rizzolatti y Corrado Sinigaglia, Las neuronas espejo. Los
mecanismos de la empatía emocional, Editorial Paidós, 2006