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Lanza
Trabajo
/ DOMINGO, 12 DE SEPTIEMBRE DE 2010
•
00
REFLEXIONES SOBRE EMPRESA Y SOCIEDAD
Las emociones son contagiosas
Neuronas espejo
Pilar Almagro
Directora General Grupo VertiSub
www.vertisub.com
Las neuronas espejo son una clase
de neuronas (células cerebrales especializadas en la transmisión de información) que se activan simultáneamente en el observador y el observado. Es decir, cuando alguien
desarrolla una actividad, la persona
que les observa, de algún modo la reproduce en sí mismo. Se activan en
su cerebro unas neuronas que “reflejan" la acción de otro. El observador
- aunque no se mueva - está realizando la acción del observado. De
ahí su nombre de "espejo".
Conforme más se va sabiendo de
las neuronas espejo, más fenómenos
de interacción humana podemos explicar. Parece que las neuronas espejo tejen una red invisible que une a
los seres humanos entre sí,-incluso
con los antepasados a través de sus
legados-.
Algunos neurocientíficos consideran que las neuronas espejo constituyen uno de los más importantes
descubrimientos en la última década. Desempeñan un importante rol
dentro de las capacidades humanas
ligadas a la vida social, tales como la
empatía (capacidad de ponerse en el
lugar de otro) y la imitación. Gracias
a ellas es posible el teatro, la poesía y
el aprendizaje de habilidades por
imitación, incluso el lenguaje. También se ha sugerido que las disfunciones del sistema espejo podrían ser
la causa subyacente de algunos
desórdenes cognitivos, tales como el
autismo e incluso la psicosis, que se
caracteriza por la incapacidad de ponerse emocionalmente en el lugar
del otro.
Descubrimiento
En 1998 y 1990, Giacomo Rizzolatti
trabajaba con Leonardo Fogassi y
Parece que las neuronas espejo tejen una red invisible que une a los seres humanos entre sí, incluso con los antepasados
Vittorio Gallese en la Universidad de
Parma, Italia. Estos científicos
habían monitorizado la corteza
frontal inferior de un mono macaco
para estudiar las neuronas especializadas en el control de los movimientos de la mano, como por
ejemplo, el de asir objetos.
Para su sorpresa, cuando uno de
los investigadores cogió un plátano,
algunas de las neuronas del mono
reaccionaron. ¿Pero cómo habría podido suceder esto si el animal no se
había movido?. Pensaron que había
sido un error de medición hasta que
vieron que esto ocurría cada vez que
lo repetían. Pues bien, tales neuronas se encontraron también en humanos y algunas aves. En el ser humano se sitúan en el área de Broca y
en la corteza parietal.
Daniel Goleman, famoso autor del
libro "La inteligencia emocional",
afirma que estas neuronas detectan
las emociones y el movimiento, e incluso las intenciones de la persona
con quien hablamos, creando un
"contagio emocional", o sea, el que
una persona adopte los sentimientos
de otra.
Sexo, pornografía, y
neuronas espejo
El doctor Harold Mouras, de la Universidad Picardie Jules Verne, fue un
poco más allá y se interesó por la
manera en que nuestro cerebro reacciona ante los estímulos sexuales y
especialmente la pornografía. En un
reciente experimento, de hace solo
dos años, eligió a voluntarios para
visionar vídeos pornográficos mientras les realizaba una resonancia
magnética monitorizando su excitación.
Tras aquel experimento se llegó a
conclusiones muy parecidas a como
actúan las neuronas espejo en otros
ámbitos. La visión activa las neuronas espejo y éstas nos inducen a interpretar que estamos protagonizando nosotros el acto sexual, y no simplemente viéndolo al otro lado de
Imitación
La imitación
también es la base
de la cultura. Y es
que primero hay
que imitar
(aprender) para
después poder
ser originales
Las neuronas espejo explican, como
hemos dicho, la imitación. ¿Cómo
podemos imitar?. Según el propio
Rizzolatti, cuando se observa una acción hecha por otra persona se codifica en términos visuales, y hay que
hacerlo en términos motores. Algo
así como entrenar el movimiento
previamente, imaginándolo, sin realizarlo todavía. Antes no estaba claro cómo se transfería la información
visual en movimiento.
La imitación también es la base de
la cultura. Y es que primero hay que
imitar (aprender) para después poder
ser originales.
Marco Iacoboni explica los descubrimientos que se están realizando en el fascinante mundo de las neuronas espejo,
esa red a la vez íntima y suprahumana que parece unirnos como seres humanos
una pantalla.
Dado el papel de las neuronas espejo, el resultado de los experimentos podría llevarnos a una divertida
y provocadora conclusión: la de que
el sexo y su subconjunto, la pornografía, resultan ser una manifestación muy refinada de la empatía humana. Más aún; una forma realmente eficaz de comprender al otro
y “ponerse en su lugar”. Personalmente me quedo con la duda, porque aunque se activen las mismas
neuronas, yo diría que no es precisamente lo mismo, ¿qué opina usted querido lector?
Esto nos lleva a la siguiente categoría, veamos.
Las intenciones y la
comprensión
Pero ni siquiera queda ahí, sino que
este tipo de neuronas parecen permitir captar incluso las intenciones
de los demás, algo tan profundo y a
veces tan oculto en el prójimo. Y es
que estas neuronas se activan incluso cuando no se ve la acción y solo
hay ideas, representaciones mentales.
Envolviendo a lo anterior y en un
nivel superior y más amplio, está la
comprensión. No sólo somos capaces de entender a otra persona de
forma superficial, sino que podemos
comprender hasta lo que piensa y lo
que siente. Com-padecerle, es decir,
padecer con él. El sistema de espejo
hace precisamente eso, nos conecta
con el otro. La base de nuestro comportamiento social es que existan estas capacidades de comprender, imaginar, sufrir y reír con el otro.
Seres Sociales
Así el mensaje más importante de
las neuronas espejo es que demues-
tran que somos seres sociales. La sociedad, la familia y la comunidad
son valores innatos en el humano,
no solo son culturales sino que
cuentan con un substrato biológico.
Probablemente por eso siempre han
existido y existirán las redes sociales
y los grupos que crean lazos de pertenencia, desde la pandilla de jóvenes, hasta los seguidores de los clubs
de fútbol, de ideologías, de religiones o de redes por Internet como Facebook, Twiter, etc.
Los humanos estamos concebidos
para estar en contacto con los
demás. El sistema de las neuronas espejo parece “resonar” como una música que parte del interior de los
hombres desbordándonos, envolviéndonos. Parece que somos capaces de activar automáticamente las
mismas neuronas que las de las otras
personas y eso nos permite “ponemos en sintonía“, alinearnos con su
estado mental o transmitir el nuestro. Ya lo sabíamos y ahora lo ratificamos: las emociones son contagiosas. El mal que hacemos, nos alcanza, el bien también. Formamos
parte de una gran sinfonía humana,
que comienza en el útero de la madre (donde se aprende el vocabulario motor básico) y que incluye a
nuestros antepasados y su legado. Es
otro tipo de ecosistema que enlaza
con el natural; es el ecosistema humano.
Esto tal vez limite el libre albedrío,
pero a la vez abre un mundo de afectos, que es precisamente por donde
siempre he pensado que se va a reinaugurar el gran camino de la evolución humana. ¿O es que hay algo
por encima del amor en la vida de
los hombres?.
¿Acaso serán también las neuronas
espejo las que permiten sentir lo que
siente otra persona que está muy lejos, con la que tuvimos o tenemos
un profundo vínculo?. ¿O serán
otras neuronas u otros mecanismos
aún no descubiertos? ¿O no ocurre
nada de eso pero nos lo imaginamos?. En cualquier caso, les recomiendo el libro de Marco Iacoboni,
Mirroring People. Disfruten con él.
Pilar Almagro
El sistema de las
neuronas espejo
parece “resonar”
como una música
que parte del
interior de los
hombres
envolviéndonos