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¿Qué lugar en la economía mundial?
Alberto Garzón Espinosa
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
El capitalismo español
en el siglo XXI
01
El capitalismo español está enfrentando una severa crisis que revela que los fundamentos de su
crecimiento reciente eran extraordinariamente
frágiles. Utilizando un marco teórico de inspiración neomarxista y kaleckiana analizamos los
desequilibrios comerciales y financieros de la
economía española en su inserción en la economía europea y la economía mundial. Asimismo
valoramos el papel de la desigualdad y el endeudamiento en este proceso.
1. INTRODUCCIÓN
“El yugo del capital”
El capitalismo español en el siglo XXI
¿Qué lugar en la economía mundial?
Finanzas, información y democracia
Una crítica económico-política de la mediación espectacular de la crisis
El silencio de las sirenas en el corazón de las tinieblas
Sobre la lógica de las reformas
Síntesis de una lucha inacabada
Evolución del feminismo y las políticas de igualdad en Andalucía y el Estado
La sanidad pública y la crisis
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Año 2013 · Nº02
“El capital es la sangre que fluye a través del cuerpo político de todas aquellas sociedades que nosotros llamamos capitalistas, extendiéndose, algunas veces como
un goteo y otras veces como un torrente, en cada recoveco y rendija del mundo inhabitado. Es gracias a este
flujo que nosotros, quienes vivimos bajo el capitalismo,
adquirimos el pan diario así como nuestras casas, coches, móviles, camisetas, zapatos y todos los bienes que
necesitamos en nuestra vida diaria. A través de este flujo la riqueza es creada desde los muchos servicios para la
manutención, el entretenimiento, la educación, y otros
que obtenemos. Estableciendo impuestos a este flujo
los estados aumentan su poder, su poderío militar y su
capacidad para asegurar un estándar de vida adecuado
a los ciudadanos. Con la interrupción, el estancamiento
o, incluso peor, la suspensión del flujo nos encontramos
con una crisis del capitalismo en la cual la vida no puede
continuar más tiempo en la forma en la que estábamos
acostumbrados” David Harvey (The Enigma of Capital).
desde abajo 11
Sin embargo hasta ahora ese ciclo del capital, ese
flujo de sangre, había fluido correctamente en España. Nuestro país crecía económicamente, se creaba
empleo y como consecuencia de todo ello se incrementaba el bienestar material de la sociedad (infraestructuras, servicios públicos, etc.). La sociedad estaba
subsumida en una dinámica de estabilidad que prometía durar por siempre. La interrupción del crecimiento
económico, y en la profundidad en la que ha sucedido y
está sucediendo, ha roto las promesas de futuro tanto
económicas como sociales, provocando cambios en la
vida de los ciudadanos y en sus esquemas mentales.
Wallerstein apuntaba que “una crisis implica una situación en la cual un sistema histórico, debido a su
desarrollo interno, ha acentuado sus contradicciones
hasta el punto en que no puede continuar manteniendo la misma estructura básica”. En efecto, ese ciclo
del capital operaba sobre unos determinados fundamentos que están rotos o que ya no existen, de modo
que la reactivación del ciclo requiere su sustitución por
otros diferentes. Estamos inmersos en esa encrucijada:
¿cómo podemos saber cuál es la estructura básica que
necesita la economía de España para poder volver a
crear empleo y mejorar las condiciones de vida de los
ciudadanos?
El capitalismo tiene una lógica y una dinámica específica de funcionamiento, pero no se cristaliza de una
forma perfecta en cada economía nacional. Diversos
factores económicos, históricos, culturales y sociales
dotan de rasgos propios a las economías nacionales,
las cuales a pesar de ser economías capitalistas tienen
sus propias singularidades. Asimismo, su dinámica interna viene marcada por el modo de participación en el
sistema capitalista mundial.
Dicho de otra forma, todas las economías capitalistas
obedecen al mencionado ciclo del capital y la lógica
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Año 2013 · Nº02
de funcionamiento que conlleva -necesitan tener crecimiento económico y por lo tanto encontrar espacios
de rentabilidad-, pero las piezas del sistema pueden
articularse de forma diferente para conseguirlo. Esta es
la razón por la que en el conjunto de las economías capitalistas percibimos distintas estructuras económicas,
cuyos fundamentos debemos estudiar para averiguar
qué se encuentra detrás del crecimiento económico de
cada economía en particular.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
España está en crisis porque se ha interrumpido el flujo
del capital, de forma que no se crea más empleo y cada
vez es más difícil acceder a los bienes y servicios a los
que estábamos acostumbrados hasta ahora. El ciclo
del capital, ese flujo de sangre que circula a través de
nuestras economías, se ha roto por diferentes partes y
los gobiernos no logran encontrar la forma de taponar
las heridas para poder reactivarlo.
01
Partimos de un punto básico: el principal elemento
de una economía capitalista es la ganancia, sin la cual
el sistema no puede seguir reproduciéndose. Y en el
análisis de la ganancia cobra una importancia clave la
relación que existe entre el capital y el trabajo, relación
que se cristaliza en una determinada distribución de
la renta. No en vano los economistas clásicos siempre
tuvieron muy presente el papel de la distribución, centrando sus esfuerzos académicos en entender las consecuencias de su modificación (Herrera, 2011).
A partir de una determinada relación capital-trabajo
(de una determinada distribución de la renta) podemos
decir que hay dos regímenes de crecimiento económico: aquellos basados en el crecimiento de la participación de los beneficios en la renta y aquellos que se basan en el crecimiento de la participación de los salarios
en la renta, ambos satisfaciendo la necesidad de que
exista una ganancia suficiente. Como veremos más
tarde, y a partir de nuestro marco teórico, convenimos
en llamar a estos regímenes de crecimiento económico wage-led y profit-led respectivamente.
Las políticas económicas neoliberales 1 han deteriorado el peso de la participación salarial en prácticamente
todo el mundo desarrollado, y han obligado a imponer
modelos de crecimiento que necesariamente debían
articularse a partir de un bajo peso salarial y en consecuencia con menor demanda basada en los salarios.
Para garantizar el crecimiento económico algunos países han superado dicho estancamiento de la demanda
a través de un incremento de las exportaciones netas
y por lo tanto con un superávit en la cuenta corriente,
mientras que otros países han compensado con consumo financiado por el crédito y con un consecuente
déficit comercial en la cuenta corriente.
Como veremos más adelante, lo que encontramos en
1.- El neoliberalismo, amén de ser
una ideología, “representa una
revuelta contra el rumbo del capitalismo en el siglo XX y muy especialmente contra el que adopta en
su segunda mitad, bajo el modelo
de desarrollo fordista” (Tablas,
2007b: 202). Se trata, además, de
un “proyecto político para restaurar
las condiciones para la acumulación
capitalista y el poder de las élites
económicas”, sin que ello signifique necesariamente perseguir la
reducción del peso y el papel del
Estado (Harvey, 2009: 19).
desde abajo 13
Europa son modelos de crecimiento simbióticos entre
los países del centro y los países de la periferia de Europa. Mientras los países del centro de Europa han basado su crecimiento en la exportación de bienes y servicios, gracias a ganancias de competitividad logradas a
través de la contención de costes salariales y mejoras
en la productividad, los países de la periferia han basado su crecimiento en la demanda interna y el endeudamiento privado. Más adelante tendremos oportunidad
de analizar las diferencias entre ambos modelos de
crecimiento, que definimos como export-led y debt-led
respectivamente.
Como hemos apuntado, las lógicas de estos modelos
de crecimiento hunden sus raíces en los procesos de
política económica dominantes a partir de los años 80
en todo el mundo. Las políticas de desregulación de
las finanzas internacionales han facilitado el flujo de
crédito a lo largo de todo el mundo, mientras que las
reformas laborales y los procesos de globalización comercial han deteriorado la negociación sindical y han
producido una caída en el peso de los salarios que se ha
traducido en una caída de la demanda interna.
Pero el neoliberalismo ha tenido otros efectos paralelos, como el desencadenamiento de una serie de procesos que han sido definidos por diversos autores como
financiarización. Aunque no hay acuerdo a la hora de
definir lo que es la financiarización, Epstein (2004:3) ha
proporcionado una definición amplia según la cual la
“financiarización es el incremento del rol de los motivos
financieros, los mercados financieros, los actores financieros y las instituciones financieras en las operaciones
de las economías nacionales e internacionales”. Tablas
(2007: 282) también propone una definición genérica
parecida, según la cual la financiarización es la situación
“que se deriva de la confluencia de cambios que inducen
un aumento en la cuantía, complejidad, centralidad y autonomía de las finanzas”.
En efecto, algunos autores como Stockhammer (2008)
y Hein y van Treeck (2007) han reconocido que la noción de financiarización cubre un amplio rango de fenómenos, tales como la desregulación financiera y la
proliferación de nuevos instrumentos financieros, el
cambio en la naturaleza de los sistemas financieros, la
emergencia de los inversores institucionales, la liberalización de los flujos de capital internacionales y el incre-
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Año 2013 · Nº02
mento de la inestabilidad en los mercados de tipo de
cambio, el incremento de la importancia de la financiación basada en los mercados en relación a la basada en
los bancos, el incremento de la actividad no crediticia
de los bancos comerciales o el creciente poder de los
accionistas en relación a los directivos y trabajadores,
entre otros.
De forma más específica, Hein (2011) señala siete
hechos estilizados que se dan conjuntamente en las
economías financiarizadas. En primer lugar, el fenómeno del “shareholder value”2 y la extensión de una
lógica cortoplacista en la gestión de las empresas. En
segundo lugar, el incremento de la cantidad de pagos
a dividendos. En tercer lugar, el incremento de los tipos
de interés y la carga financiera. En cuarto lugar, el incremento de los salarios más altos, especialmente los
directivos. En quinto lugar, el incremento del peso del
sector financiero y de los motivos financieros. En sexto
lugar, la proliferación de fusiones y adquisiciones. En
séptimo lugar, la liberalización de las finanzas y el comercio mundial.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Las políticas de
desregulación
de las finanzas
internacionales han facilitado el flujo
del crédito a lo
largo del todo el
mundo”
01
Todos estos fenómenos han configurado el capitalismo moderno en el que se insertan las economías nacionales, y que han facilitado los procesos de endeudamiento que están relacionados con los modelos de
crecimiento modernos.
El presente trabajo está estructurado como sigue. En el
epígrafe número 2 explicamos nuestro marco teórico,
de inspiración neomarxista y kaleckiana. En el epígrafe 3 evaluamos el crecimiento económico reciente de
España y su rol en la economía europea, haciendo hincapié en las variables vinculadas a la competitividad.
Finalmente en el epígrafe 4 estudiamos el papel que ha
tenido el endeudamiento en el modelo de crecimiento
económico español.
2. UN MARCO TEÓRICO HETERODOXO DE
INSPIRACIÓN KALECKIANAY NEOMARXISTA
Siendo el capitalismo un sistema económico con enormes contradicciones en su dinámica interna, parece
complicado no estar de acuerdo con Shaikh (1978)
cuando afirma que “la pregunta verdaderamente difícil
de contestar respecto a esta sociedad [capitalista] no
es por qué llega a desintegrarse, sino por qué continúa
2.- Se trata, grosso modo, de una
mayor orientación empresarial
hacia el beneficio derivado de un
incremento en el valor de las acciones y de un menor peso de las estrategias de crecimiento de medio
y largo plazo.
desde abajo 15
operando”. El propio Shaikh establece que la literatura económica puede dividirse en tres líneas básicas de
análisis en función de cómo se explica esta reproducción del sistema y sus crisis. La primera de ellas son las
teorías que entienden que el capitalismo es capaz de
reproducirse a sí mismo automáticamente, bien sea de
una forma fácil y eficiente (teoría neoclásica) o bien de
una forma errática y derrochadora (teoría keynesiana).
La segunda de ellas son las teorías que parten de que el
sistema económico es incapaz de reproducirse sin acudir a elementos externos al sistema, tales como el gasto
militar, el imperialismo o la financiarización. La tercera
línea son las teorías que consideran que el capitalismo
tiene límites inherentes que acaban alcanzándose, bien
a partir de una tendencia decreciente de la tasa de ganancia o bien a partir del estrangulamiento de los beneficios por el alza de los salarios.
En otro documento (Mateo y Garzón, 2012) hemos
hecho un repaso de la creciente literatura reciente en
el ámbito de la heterodoxia, mientras que ahora pretendemos justificar la adopción de un marco teórico
concreto para entender la actual crisis económica en
España y Europa. De forma más específica creemos
que a partir de los trabajos de inspiración kaleckiana y
neomarxistas podemos dotarnos del mejor instrumento de análisis para entender la crisis actual.
· El modelo de Bhaduri-Marglin y los regímenes de
crecimiento económico
3.-El producto interior bruto puede
descomponerse en dos componentes: salarios y beneficios empresariales. A esa relación que existe entre los salarios y los beneficios
empresariales se la denomina
distribución funcional del ingreso.
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Año 2013 · Nº02
Dentro de la literatura económica siempre ha habido
conflicto a la hora de averiguar los efectos que tiene
sobre el crecimiento económico un cambio en la distribución funcional del ingreso3 . Así, mientras los economistas clásicos como Ricardo o Marx consideraban
que un crecimiento en la participación de los beneficios estimula la acumulación y el crecimiento económico, otros autores clásicos como Malthus, Sismondi
y posteriormente Steindl, Keynes, Kalecki y Sweezy
consideraban que una disminución de la participación
salarial reduce la demanda agregada y afecta negativamente a la tasa de crecimiento económico. En un
intento de compaginar ambas ideas y hacer depender
los efectos de la configuración del contexto institucional, los economistas Bhaduri y Marglin desarrollaron
un modelo económico que aceptaba ambas tesis.
Uno de los primeros economistas en desarrollar la
idea del estancamiento producido por una caída
de la participación salarial fue Joseph Steindl, quien
creía que el capitalismo desarrollado tenía una fuerte tendencia hacia la concentración. Ello llevaba a la
configuración de empresas oligopolísticas que al no
enfrentar competencia se permitían incrementar los
márgenes de beneficio, todo lo cual reducía la participación salarial en la renta. Ese hecho llevaba a un
estancamiento del consumo que desincentivaba a su
vez la inversión futura. El sistema enfrentaba así una
crisis, cristalizada en estancamiento económico, si no
se lograba estimular la demanda de forma “artificial”.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Ha habido conflicto a la hora
de averiguar
los efectos que
tiene sobre el
crecimiento
económico un
cambio en la
distribución
funcional de
los ingresos”
01
Posteriormente el economista Kalecki, de formación marxista y muy influenciado por R. Luxemburgo
(King, 2002), desarrolló una teoría del ciclo económico en la que la inversión jugaba un papel central
pero también en un “mundo” distinto al ideado por
los neoclásicos. En este “mundo”, entre otras cosas,
tampoco hay competencia perfecta sino oligopolios
y, por lo tanto, los precios no dependen de las leyes de
la oferta y la demanda sino que su determinación se
realiza a través de procedimientos de tipo cost-plus,
es decir, estableciendo un margen sobre el coste unitario del producto. A partir de este supuesto queda
anulada la ley de la tendencia decreciente de la tasa
de ganancia, pivote central del marxismo determinista (Sweezy, 1981). Además, para Kalecki tanto a corto
como a largo plazo la capacidad productiva utilizada
es distinta a la capacidad productiva instalada. Ello
significa que cuando cae la demanda las empresas no
ajustan por la vía de los precios sino por la vía de la capacidad instalada. Ambos supuestos son cruciales en
el modelo básico kaleckiano.
De forma similar, los autores neomarxistas como
Sweezy, Magdoff y Foster entienden que el incremento de la concentración de las grandes empresas,
ahora operando como monopolios u oligopolios, ha
permitido altos excedentes empresariales y ha deprimido la participación salarial. Se produce entonces
la paradoja de la acumulación, es decir, el hecho de
que los beneficios crecen a costa de un incremento
sobre la explotación de los trabajadores (cristalizado
en menor participación salarial) que a su vez limita la
expansión misma del capital. Todo ello conlleva un
estancamiento en el crecimiento económico que es
desde abajo 17
Sin embargo, la realidad económica ha revelado que el
estancamiento no es un resultado necesario. Algunas
economías pueden escapar de la dependencia de los
salarios a partir del recurso al crédito, como postulan
los autores neomarxistas, y del fomento de las exportaciones, como postulan también los autores poskeynesianos. En ambos casos es posible mantener niveles
decentes de crecimiento económico que son compatibles con descensos en la participación salarial.
4.-Dichas reformas pueden
agruparse en los nueves bloques
siguientes (Kotz, 2008): 1) desregulación del comercio y de las finanzas, tanto en su nivel nacional
como internacional; 2) privatización de muchos servicios ofrecidos por el Estado hasta entonces;
3) cese de la regulación activa del
Estado en el plano macroeconómico; 4) fuerte reducción del
gasto social estatal; 5) reducción
de impuestos a negocios y riqueza individual; 6) ataque de las
grandes empresas y Estados a
los sindicatos; 7) desplazamiento
desde el dominio de los empleos
fijos hacia los empleos temporales; 8) competencia desenfrenada
y despiadada reemplazando al
comportamiento “co-respective”
practicado hasta entonces; 9)
introducción de principios de
mercado dentro de las grandes
empresas, en particular en lo
referente a la contratación de directivos..
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Año 2013 · Nº02
El modelo de Bhaduri y Marglin (1990) asume esa realidad y partiendo de los supuestos kaleckianos determina que hay dos regímenes generales de crecimiento (wage-led y profit-led). En un modelo wage-led los
salarios dirigen el crecimiento económico y la subida
de la participación salarial genera mejores resultados en términos de crecimiento que una reducción
en la misma. La subida de dicha participación puede
generar efectos positivos también en los beneficios
empresariales, a través del incremento de las ventas.
Sin embargo, y como recuerdan los autores clásicos,
también existe un límite en el cual excesivos niveles
salariales suprimen la capacidad para invertir y hacen
entrar en crisis al sistema a través de un estrangulamiento de los beneficios. En un modelo profit-led,
por el contrario, los beneficios dirigen el crecimiento
económico y un incremento de la participación de los
salarios deprime la capacidad de inversión y por lo
tanto provoca una caída del crecimiento económico.
No obstante, toda economía cerrada es por definición
un modelo wage-led, por lo que el conjunto de la economía mundial también lo es.
· La participación salarial en la renta: hechos estilizados
Las reformas 4 de las últimas décadas propiciadas por
el neoliberalismo han tenido como efecto fundamental una reducción de la participación salarial en prácticamente todo el mundo, como puede observarse en
la tabla 1.
País
1991-2008
1991-2009
1991-2010
Unión Europea (15 países)
-6,11%
Rumanía
-5,00%
Zona Euro (12 países)
-6,45%
Finlandia
-17,08%
Bélgica
-3,23%
Suecia
-4,07%
Dinamarca
3,47%
Reino Unido
-6,97%
Alemania
-7,23%
Islandia
-2,33%
Irlanda
-6,80%
Noruega
-15,02%
Grecia
-5,39%
Suiza
-1,05%
España
-8,25%
Estados Unidos
-4,04%
Francia
-3,23%
Japón
-6,84%
Italia
-8,09%
Canadá
-10,92%
Luxemburgo
-7,41%
Corea del Sur
-6,55%
Países Bajos
-4,57%
Australia
-7,67%
Austria
-12,89%
Nueva Zelanda
-4,78%
Portugal
3,79%
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
superado desde los años setenta a través de la reinversión de esos excedentes en el ámbito financiero
para generar una demanda artificial que les permita
seguir obteniendo beneficios. Ese proceso es el que
para los autores neomarxistas recibe el nombre de
financiarización.
01
Fuente: AMECO (2012)
Tabla 1. Variación participación salarial en PIB al coste de los
factores, 1991-2008
Esa situación, al producirse de forma global, debería
haber conducido a una crisis de rentabilidad al debilitar la capacidad de consumo de los salarios y un exceso de participación de los beneficios respecto a dicha
capacidad. Sin embargo, los datos también revelan
que paralelamente todos los países han disfrutado de
tasas de crecimiento ligeramente altas.
De acuerdo con la exposición anterior, las economías
han podido escapar de la crisis a través de la instauración de diferentes modelos de crecimiento económico que operaban de forma simbiótica. Por una
parte algunos países aprovecharon la menor participación salarial y otras circunstancias5 para lograr los
beneficios por la vía de las exportaciones (modelo
export-led) mientras que por otra parte otros países
recurrieron al crédito para compensar la caída salarial
y mantener una economía dirigida por la demanda
interna (modelo debt-led). Ambos modelos quedan
descritos con claridad en las cuentas corrientes de los
diferentes países.
Las reformas
de las últimas
décadas propiciadas por el
neoliberalismo
han tenido
como efecto
fundamental
un reducción
de la participación salarial”
5.- La depreciación de la moneda
con respecto a los países competidores, los diferenciales de inflación, los tipos de interés, los procesos de deslocalización…
desde abajo 19
Profit-­‐led Modelos de crecimiento Export-­‐led Así, España sería un país de tipo debt-led, además con
un perfil mucho más claro que el resto de países de la
Unión Europea. Un estudio de la composición de la balanza de pagos permite comprobar cómo el modelo de
crecimiento español ha dependido de la entrada permanente de capital extranjero (contabilizado como superávit en la cuenta financiera) para financiar el exceso
de importaciones sobre exportaciones.
Financiarización y Neoliberalismo ¿Crisis? Debt-­‐led Superávits cuenta corriente 3. EL CRECIMIENTO ECONÓMICO DE ESPAÑA Y LA INSERCIÓN EXTERIOR
Déficits cuenta corriente Esquema 1. Regímenes económicos y modelos de crecimiento en una
economía financiarizada
El resultado es un modelo de crecimiento de la economía mundial construido sobre importantes e insostenibles desequilibrios globales. Los países con un modelo
de crecimiento export-led acumulan flujos de capital que
prestan a los países que tienen un modelo de crecimiento debt-led, de modo que el sistema en su conjunto se
sostiene sobre esas relaciones. En el conjunto de la zona
euro se da la circunstancia de que existe equilibrio comercial, lo que permite ver una réplica a pequeña escala
de lo que sucede en la economía mundial.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Wage-­‐led Regímenes económicos 01
La balanza de pagos de la economía española ha reflejado recientemente fuertes distorsiones derivadas
de su modelo de crecimiento. Así, la cuenta corriente
ha sido crecientemente deficitaria desde finales de los
años noventa, especialmente empujada por la balanza
de bienes y algo menos por la balanza de rentas (EUROSTAT, 2012). De forma paralela la cuenta financiera
ha sido crecientemente superavitaria, explicando así
cómo ha financiado la economía española su elevado
déficit externo.
Por el modelo de crecimiento que mantienen, Stockhammer (2012) identifica como debt-led a países como
Estados Unidos, Reino Unido, Grecia, Irlanda, Portugal y
España, mientras que identifica como export-led a Alemania, Austria, Japón y China. Por otra parte, Hein (2011)
identifica como debt-led a Grecia, Irlanda, España, Estados Unidos y Reino Unido, y como export-led a Austria,
Bélgica, Alemania, Países Bajos, Suecia, Japón y China.
Para este último autor quedan fuera de esa clasificación,
por tener un modelo de crecimiento insuficientemente
claro, Francia, Italia y Portugal.
Gráfico 1. Balanza de pagos, España (1990-2011)
Modelo
de
crecimiento
económico
Elementos básicos
1991-2009
1991-2010
Export-led
Débil demanda interna; bajos
costes laborales unitarios; baja inflación; depreciación de la moneda.
Rumanía
-5,00%
Debt-led
Elevados costes laborales unitarios;
inflación y apreciación de la moneda; pérdida de competitividad.
Finlandia
-17,08%
Tabla 2. Elementos básicos para explicar el signo de la cuenta
corriente en la balanza de pagos
20 desde abajo
Año 2013 · Nº02
Hacia 1997 la balanza por cuenta corriente estaba
relativamente equilibrada, con una contribución
negativa de la balanza comercial y de la balanza de
rentas que era compensada por la contribución positiva de la balanza de servicios y de las transferencias
corrientes. Sin embargo, la balanza comercial (o de
bienes) se va haciendo más deficitaria a medida que
transcurren los años, sin que la contribución ligeramente cada vez más positiva de los servicios pueda
contrarrestar esa tendencia.
desde abajo 21
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
01
Gráfico 3. Balanza de pagos, Alemania (1990-2011)
Fuente: EUROSTAT (2012)
Gráfico 2.Balanza por cuenta corriente. España (1993-2012)
Saldos en millones de euros. (Fuente EUROSTAT 2012)
Como se puede comprobar en el gráfico anterior, el creciente déficit externo se explica fundamentalmente por
la evolución de la balanza comercial. No obstante, España ha conseguido fortalecer en este tiempo la mayoría de los productos que más contribuían positivamente
a la cuenta comercial hasta la última década, y que son
los productos agrícolas (vegetales, frutas y aceite). Sin
embargo, se produce un cambio de signo en el sector
automovilístico y un empeoramiento del saldo negativo de otros productos como los vehículos de cilindrada
media, los combustibles, la industria farmacéutica, la
maquinaria y la aeronáutica (Gracia, 2011). Esto significa, como recuerda el Consejo Económico y Social de
España, que “las exportaciones se orientan en mayor
medida hacia productos de contenido tecnológico bajo y
medio” (CES, 2011).
6.- En el caso alemán es notable
el hecho de que las importaciones
más importantes son productos como las partes de aviones
y helicópteros, los pistones de
vehículos y productos farmacéuticos al por mayor que luego se
empaquetan para su exportación
(Gracia, 2011).
22 desde abajo
Año 2013 · Nº02
Por el contrario, una situación inversa en términos comerciales ocurre con Alemania. Este país ha mostrado
una cuenta corriente crecientemente superavitaria, lo
que se explica por una especialización inicial en segmentos productivos de mayor gama y contenido tecnológico y por el abaratamiento relativo de las importaciones
gracias a procesos continuados de deslocalizaciones de
industrias de bienes intermedios6 (Vlachou, 2012). A diferencia del caso español, Alemania registra superávit
de forma permanente en el conjunto de productos de
alta tecnología, siendo la industria del automóvil, el sector de calderería, la industria farmacéutica, la aeronáutica y las telecomunicaciones los productos que más
contribuyen a la generación de superávit (Gracia, 2011).
Efectivamente, Luengo y Álvarez (2012) insisten en que
Alemania y los países nórdicos “colocan en el mercado
de la UE productos sofisticados y que han conquistado
posiciones de liderazgo en los segmentos de media y alta
gama” mientras que países de la periferia como España,
Grecia o Portugal tienen estructuras comerciales “dominadas por bienes de medio y bajo calado tecnológico, que
acreditan niveles de sofisticación discretos y que están presentes en los tramos inferiores de gama”.
Estos desequilibrios crecientes se han logrado compensar gracias a una incesante financiación que, como
veremos más adelante y ya adelantamos en la exposición del marco teórico, ha sido generadora de deuda.
Por lo tanto parece tener bastante sentido explicar la
evolución de las cuentas corrientes de los países del
centro y periferia (simplificados en los casos extremos
de Alemania y España) a partir de la configuración de
su modelo productivo y de la dinámica de especialización (Recio, 2010). Sin embargo, la visión convencional
deja en un lugar secundario este hecho y se centra en el
análisis de indicadores agregados para medir la competitividad.
Estos
desequilibrios crecientes
se han logrado
compensar
gracias a una
incesante financiación que
ha sido generadora de deuda”
No obstante, antes de avanzar hacia esos ámbitos conviene examinar los mecanismos de financiación de la
economía española. Como advertimos, el déficit por
cuenta corriente de la economía española ha tenido
que ser financiado, lo que ha de suponer una cuenta
financiera superavitaria. Lo más notable es que esa
llegada de financiación es, en última instancia, un endeudamiento de la economía que supone una carga a
medio y largo plazo.
desde abajo 23
El tipo de financiación que recibe una economía puede
ser tanto generadora de deuda como no generadora
de deuda. En sentido amplio podemos decir que se
pueden recibir tres tipos de financiación diferente. La
primera son las inversiones extranjeras directas, que
son las compras de empresas españolas por parte de
empresas extranjeras o la creación de nuevas empresas en España por parte de extranjeros. Este primer
tipo de financiación no genera deuda. La segunda forma de financiación es vía emisión de títulos financieros
(como bonos). Son títulos que las empresas emiten en
el mercado financiero para recibir dinero con el que llevar a cabo sus actividades. Estos títulos generan deuda
porque incluyen compromisos de pago (al cabo de un
determinado número de años la empresa tiene que devolver el precio nominal del título más unos intereses).
Y la tercera forma de financiación son los préstamos,
que también son generadores de deuda.
Para España, y como podemos comprobar en el siguiente gráfico, han sido las inversiones en cartera
(títulos financieros emitidos) los que han financiado
de forma prácticamente exclusiva la actividad económica. Las inversiones directas han tenido signo
negativo porque España es inversor neto de IED. Y los
préstamos están recobrando ahora un papel clave con
motivo de la menor importancia de las inversiones en
cartera. Esto probablemente significa que es más barato para las empresas pedir prestado fuera que pagar la rentabilidad de unos bonos en los que en estos
tiempos pocos confían.
200,000
150,000
100,000
En cualquier caso todo esto refleja que España ha financiado su crecimiento de importaciones por la vía de
los préstamos y la emisión de títulos financieros. Ello ha
supuesto la entrada de dinero en nuestro país, pero a la
vez generando una deuda creciente que se ha manifestado muy complicada de pagar una vez el modelo de
crecimiento se ha interrumpido.
· La competitividad de la economía española
La visión de la competitividad dominante asume que la
mejor forma de ampliar cuota de mercado es por la vía
del precio7 , de modo que el objetivo de toda economía
sería lograr vender productos más baratos que el resto
de competidores internacionales. Si la estrategia es adecuada y el modelo de crecimiento económico resulta
consistente, entonces la cantidad de exportaciones logrará superar al total de importaciones.
De forma convencional se asume que la competitividad
vía precios está determinada por la evolución tanto de
los salarios como de la productividad, cuya relación se
suele analizar a partir del indicador de costes laborales
unitarios nominales (CLUn). En el siguiente gráfico podemos ver cómo han evolucionado recientemente estos
costes laborales unitarios en algunos de los países de la
zona euro. Se puede observar cómo el crecimiento de los
mismos en Alemania ha sido realmente moderado en
comparación con el resto de países de la zona euro. Esto
puede explicarse a partir de la evolución salarial (menores salarios en Alemania) o de la productividad (mayor
productividad en Alemania), o bien una combinación de
ambas.
17.01%
Austria
11.16%
Italia
0
22.58%
Francia
-50,000
España
-100,000
Grecia
16.32%
21.55%
23.12%
Irlanda
Inversión extranjera directa
Inversión en cartera
Otras inversiones
Gráfico 4. Composición de la cuenta financiera. España (1993-2011)
Fuente: EUROSTAT (2012)
24 desde abajo
Año 2013 · Nº02
01
Volviendo al análisis de la cuenta corriente encontramos
que para la mayoría de los autores la analizada dinámica
de la balanza de pagos es indicadora de los problemas
de competitividad de la economía española, si bien son
fenómenos económicos que se repiten en otros países
periféricos como Grecia o Portugal.
Portugal
50,000
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
· La financiación de la economía española
Alemania
20.70%
3.11%
15.87%
Zona Euro 15
0.00%
5.00%1
0.00%
15.00%
20.00%
Gráfico 5. Variación costes laborales unitarios , 2002-2010.
Valores nominales. Fuente: AMECO(2012)
25.00%
7.- Si al hablar de competitividad
hablamos de la capacidad de ganar nuevos mercados, en realidad
hay otros factores distintos del
abaratamiento de costes salariales que hay que tener en cuenta,
tales como mercados de poca
competencia, los incrementos de
productividad, las economías de
escala y, aunque en el euro no es
posible, las devaluaciones.
desde abajo 25
Dado que los costes laborales unitarios nominales son
la relación entre los salarios y la productividad, conviene desglosar ambas variables. Y de acuerdo con los
datos, lo que encontramos es que Alemania ha estado
manteniendo una política muy agresiva de control de
los salarios. Esa política ha disparado una carrera hacia
la baja en los salarios que países como España o Grecia
no han podido, sabido o querido seguir.
País
2001
2002
2003
2004
2005
Alemania
1,66%
1,31%
1,40%
0,35%
-0,08%
Grecia
3,70%
11,44%
6,28%
4,17%
5,21%
España
3,50%
3,38%
3,44%
2,90%
3,51%
Zona Euro
2,63%
2,63%
2,57%
2,15%
2,06%
País
2006
2007
2008
Alemania
1,02%
0,78%
2,12%
0,01%
Grecia
1,41%
5,04%
6,10%
3,96%
España
3,86%
4,68%
6,07%
4,31%
Zona Euro
2,43%
2,47%
3,31%
1,70%
Sin embargo, aunque los salarios en España y en Grecia
hayan crecido más rápido siguen siendo menores que
en Alemania, como puede observarse en la siguiente
tabla. Ello significa que si la productividad laboral y el
modelo productivo hubieran sido los mismos en las
tres economías8 , los países periféricos deberían haber
sido los vencedores en la batalla competitiva vía precio.
26 desde abajo
Año 2013 · Nº02
01
2009
Tabla 3. Crecimiento anual de la compensación salarial (2001-2009)
8.- En definitiva, si tuvieran la
misma tecnología y exportaran el
mismo tipo de producto.
En consecuencia, tanto la productividad como el
modelo productivo son los que deben explicar las
diferencias de competitividad vía precio. Y, como
podemos comprobar a continuación, la productividad de Alemania es muy superior a la de España o
Grecia, lo que sin duda tiene que ver con el modelo
productivo de ambos países.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Aunque
los salarios en España
y en Grecia
hayan crecido
más rápido
siguen siendo
menores que
en Alemania”
Gráfico 6. Ganancias medias anuales brutas en industria y servicios
(euros, 2009)
Gráfico 7. PIB por hora trabajada, en euros.
(Fuente: AMECO 2012)
Esto nos sitúa en un plano de análisis nuevo y muy distinto al convencional, pues sugiere que la menor competitividad vía precio es debida al diseño productivo y
el nivel de productividad laboral y no tanto los salarios y
su crecimiento en el tiempo. Pero aún podemos avanzar preguntándonos si, efectivamente, el indicador de
costes laborales unitarios nominales es el más adecuado para medir la competitividad. Pues los CLUn no
tienen en cuenta más que el componente salarial del
precio, dejando a un lado los márgenes de beneficio.
Por esa razón algunos autores han planteado serias críticas a este indicador a la vez que recomiendan otros
alternativos (Kumar y Felipe, 2011). Estos economistas
explican que aunque los costes laborales unitarios tienen sentido en términos físicos (sillas producidas por
trabajador, por ejemplo) cuando se produce una agregación para una economía nacional no queda más remedio que valorarlo todo en términos monetarios. Esa
valoración monetaria agregada incluye un sesgo que
provoca que, en realidad, lo que se está midiendo es la
participación de salarios y beneficios en la renta multiplicada por un deflactor de precios.
desde abajo 27
Portugal
-1,25%
Austria
-2,18%
Paises Bajos
0,23%
Italia
4,23%
Francia
1,13%
España
Grecia
Alemania
-6.00%
-2,83%
-3.69%
-4,08%
-4.00%
-2.00%0
0.00%2
.00%
4.00%
6.00%
Gráfico 8: Variación costes laborales unitarios reales (2002-2010)
(Fuente: AMECO 2012)
Si los CLUr han caído en España a la vez que han subido los CLUn debemos explicar dicho fenómeno por
el comportamiento del deflactor del precio. Como
aseguran Kumar y Felipe (2011), “el incremento en los
costes laborales unitarios (en todos los países) fue debido
a un incremento en el deflactor del precio usado para calcular la productividad laboral”.
En todo caso, y aunque es necesaria más investigación,
podemos concluir algunas cuestiones. En primer lugar,
que el indicador de costes laborales unitarios nominales no tiene sentido económico y no mide adecuadamente la competitividad vía precio. En segundo lugar,
que los problemas de competitividad de las economías
de la periferia no tienen que ver con su peso salarial sino
con el diseño del modelo productivo. Como aseguran
Storm y Naastepad (2011) “el problema real de España,
Grecia, Italia y Portugal es la falta de competitividad más
allá de los precios”.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Dicho lo cual podemos concluir que es la relación entre la participación salarial en la renta y el deflactor de
los precios lo que determina la evolución de los costes
laborales unitarios nominales (Rein, 2011).Y, como podemos observar a continuación, los costes laborales
unitarios reales han caído en España.
explicar este fenómeno. La primera, que los sectores
menos expuestos a la presión de la competencia exterior hayan incrementado sus márgenes de beneficios y
además hayan ganado peso en la economía. La segunda, que estas empresas no expuestas a la competencia
hayan subido los márgenes más que la bajada que han
tenido que hacer las empresas sí expuestas a la competencia.
01
Yendo un poco más allá podríamos poner a prueba la
tesis convencional según la cual los costes laborales
unitarios nominales muestran una pérdida de competitividad. En un contexto de globalización económica
en el que China ha emergido como un extraordinario
competidor, debería haber supuesto una reducción
sistemática de las cuotas de mercado de los productos
españoles. Sin embargo, los datos aportados por la Organización Mundial del Comercio muestran que España es uno de los países que menos cuota de mercado
ha perdido en las dos últimas décadas.
Dado que los costes laborales unitarios reales (CLUr)
son la participación salarial en la renta y de esa forma
la inversa del mark-up agregado (del margen de beneficio), lo que estamos diciendo es que el crecimiento
del deflactor del precio tiene que ver con la subida de
precios impuesta por las empresas con objeto de mantener o aumentar sus márgenes de beneficio.
Kumar y Felipe (2011) sugieren dos posibilidades para
28 desde abajo
Año 2013 · Nº02
Gráfico 9: Cuota de mercado de exportaciones mercancías
Fuente: Organización Mundial del Comercio
desde abajo 29
Bajando un poco más a lo concreto podemos observar
cómo, de hecho, la cuota de mercado de España es la
que menos decrece en casi todas las partidas de bienes
entre los países seleccionados, habiendo incluso casos
(como en las prendas de vestir) donde se ha ganado
cuota de mercado.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Mientras es evidente que la irrupción de China en el
tablero global ha ido en detrimento de países como
Alemania, Francia y Reino Unido, no puede decirse lo
mismo de España.
4. UNA ECONOMÍA DIRIGIDA POR EL ENDEUDAMIENTO
Todo déficit externo tiene que ser igual a la suma de los
déficits privados y déficits públicos, es decir que (X-M) =
(S-I) + (T-G). Si el ahorro privado (S) es menor que la inversión (I) tenemos déficit privado, y si la recaudación de
impuestos (T) es menor que el gasto del gobierno (G) tenemos déficit público. Así que un déficit comercial, que
sucede cuando las importaciones (M) son mayores que
las exportaciones (X), puede darse paralelamente a tres
motivos: un incremento de la inversión, una reducción
del ahorro privado o un incremento del déficit fiscal.
En España tenemos que recordar que el Tratado de
Maastricht ha limitado las posibilidades de expansión
del déficit fiscal (se exigía un déficit máximo del 3%),
por lo que para explicar el asombroso crecimiento de
la cuenta corriente tenemos que recurrir al ahorro privado o a la inversión. Y esas variables se han comportado de manera inversa, con un ahorro que caía continuamente y una inversión que crecía dando lugar así
al creciente déficit privado de la economía española.
Tras la crisis el déficit público se ha incrementado,
pero la caída de la inversión y el incremento del ahorro han compensado y han llevado a una reducción en
el saldo de la cuenta corriente.
Esta configuración del modelo de crecimiento ha llevado, como indicábamos anteriormente, a que la deuda
privada se disparara para poder mantener al sistema
funcionando en los años anteriores a la crisis. Esa deuda
correspondía en su mayor parte a las empresas privadas y, en menor medida, a los hogares. En ningún caso,
como hemos señalado también, se debía al endeudamiento público.
01
Un ahorro que
caía continuamente y una inversión que crecía dando lugar
así al creciente
déficit privado
en la economía
española”
Gráfico 10: Variación cuota de mercado de exportaciones de
mercancías (2007-2010)
Fuente: Organización Mundial del Comercio
Estos datos señalan que en España se da la llamada Paradoja de Kaldor, la cual mostraría que crecientes costes laborales unitarios nominales son compatibles con
mantenimiento o crecimiento de la cuota de mercado.
30 desde abajo
Año 2013 · Nº02
Gráfico 10: Variación cuota de mercado de exportaciones de
mercancías (2007-2010)
Fuente: S.G. Ceccheti, M.S. Mohanty y F. Zampolli (2011):
“The real effects of debt”, BIS Working Papers
desde abajo 31
· El papel de la desigualdad
En todo caso, ¿a qué se debe ese extraordinario crecimiento del endeudamiento privado? Para muchos autores la desigualdad juega un papel fundamental en la
explicación del tipo de modelo de crecimiento económico. Hasta el punto de que hay una parte importante
de la literatura económica que vincula la desigualdad
con el endeudamiento.
Stockhammer (2012), por ejemplo, identifica que la
desigualdad estimula el endeudamiento para compensar los menores salarios y las menores prestaciones sociales en los países con modelos de crecimiento de tipo
debt-led. En opinión parecida, Palley (2010) considera
que la deuda ha proporcionado a los hogares un medio
para mantener el consumo a pesar del estancamiento
de los salarios y la extensión de la desigualdad, mientras que el boom financiero ha proporcionado los ‘colaterales’ necesarios para apoyar esa creación de deuda.
En todo caso, esta dinámica es insostenible y el sistema
tiende al colapso. No obstante, estos procesos han llevado a una extensión de la vida del modelo neoliberal,
y han provocado, debido al fuerte endeudamiento y
apalancamiento, que la crisis sea más dura. La razón
estaba en que en cada ciclo de negocios ha tenido un
nivel cada vez más alto la ratio deuda/ingreso:
9.- Una de las principales aportaciones de los teóricos de la
llamada “Escuela Política Radical”, surgida en los años sesenta
en Estados Unidos de la mano
de autores como D. Gordon, M.
Reich, T. Weisskopf, R. Edwards
y S. Bowles, fue la noción de ‘Estructura Social de Acumulación”.
Con ella se pretendía describir los
requisitos institucionales que satisfacen en cada momento histórico el proceso de acumulación de
capital, punto central del análisis
radical (Barceló, 1998).
32 desde abajo
Año 2013 · Nº02
“Cuando los ricos les prestan una gran proporción de su ingreso a los pobres y a la clase media -como parece haber sucedido
durante la larga gestación de ambas crisis [Gran Depresión de
1929 y Gran Recesión de 2007]- y cuando la desigualdad del
ingreso registra un aumento prolongado, las razones deuda/
ingreso suben lo suficiente a lo largo de algunas décadas como
para generar un riesgo de crisis grave” (Kumhof y Rancière,
2010).
Para los economistas de la escuela de las estructuras
sociales de acumulación9, el análisis es también el mismo. Según ellos (Kotz, 2008b) en el período neoliberal
la demanda crecía inadecuadamente debido a los bajos
salarios y por lo tanto era imposible que la acumulación
y el consumo capitalista mantuvieran ritmos suficientes para mantener la expansión. La única posibilidad
residía en que algún grupo social gastara más de lo que
ingresaba, es decir, que se diera un incremento del endeudamiento. Para poder endeudarse, sin embargo,
era necesaria la existencia de garantías o ‘colaterales’
que dieran respaldo a los nuevos préstamos. Las burbujas de activos (financieros e inmobiliarios) habrían
cumplido ese papel a pesar de la vulnerabilidad creciente que conllevaba ese proceso.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
La deuda es una hoja de doble filo, pues a la vez
que permite propulsar la actividad económica en
un comienzo, puede también estancarla por el volumen y carga financiera que genera. Y esto ocurre
tanto en la deuda de las empresas como en la deuda de los hogares.
01
Para los autores neomarxistas también hay una explicación similar, pues la combinación de caída de los salarios y crecimiento del consumo fue posible únicamente
gracias a una expansión masiva del endeudamiento de
los hogares y a la creación de una enorme burbuja inmobiliaria, tanto en Estados Unidos como en modelos
similares como el español.
Economía dirigida por el endeudamiento Debt-­‐led growth Export-­‐led growth Salidas capital Burbuja inmobiliaria y financiera Endeudamiento Desregulación Desigualdad Capital financiero Capital productivo Trabajadores Neoliberalismo Esquema 2. Economía dirigida por el endeudamiento
Dado que ya hemos observado que el crecimiento del
endeudamiento privado ha sido intenso en la época reciente, corresponde ahora averiguar si efectivamente
la desigualdad ha sido creciente en España y si tiene
alguna relación con el mencionado nivel de deuda.
En el siguiente gráfico podemos comprobar que la
capacidad adquisitiva de los trabajadores españoles
ha sido decreciente, puesto que los salarios reales han
decrecido anualmente desde finales de la década de
los noventa. Los salarios nominales, sin embargo, han
crecido pero cada vez a ritmos más lentos 10.
10.- El crecimiento que se observa
en los salarios reales en tiempos
de crisis es realmente un efecto
estadístico derivado de la expulsión del mercado de trabajo de
un gran número de empleados,
precisamente aquellos con menores salarios. Ese hecho determina
que el salario medio haya crecido
en tiempos de crisis y destrucción
de empleo.
desde abajo 33
15.00%
10.00%
5.00%
Salarios Nominales
2010
2008
2004
2006
2002
1998
2000
1994
1996
1992
1990
1988
1984
1986
-5.00%
1982
0.00%
Salarios Reales
Gráfico 11: Crecimiento salario por empleado, España (1980-2011)
Fuente: AMECO (2012)
Por otra parte, ya pudimos observar cómo ha sido la
evolución de la participación salarial en la renta en España, que prácticamente en los últimos veinte años
ha descendido un 8’25%. Como hemos mencionado,
dicho indicador representa la desigualdad creciente
entre salarios y beneficios empresariales, pero incluye
el efecto estadístico de una probable mayor heterogeneidad salarial. Es decir, si como está acreditado para
otros países (Duménil y Lévy, 2010) se ha producido
un crecimiento importante en los salarios de las fracciones superiores de empleados, ese hecho estaría
minimizando el verdadero impacto de la desigualdad
en nuestro país.
Observando la participación de los estratos de renta
más altos, comprobamos que han visto también un
incremento en la participación de la renta. Si bien no
es tan brusco como en otros países, sí sugiere que la
desigualdad salarial es también creciente. Pero hay un
elemento aún más importante en nuestra opinión, y es
el hecho de que son determinados sectores de la población los que más favorecidos salen de procesos de
especulación financiera e inmobiliaria.
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
20.00%
1980
La des-igualdad
personal en
España ha sido
creciente por
la propia participación en la
burbuja financiera e inmobiliaria”
01
En el siguiente gráfico podemos observar cómo según
se asciende por estratos de renta, mayor porcentaje de
ingresos significan las ganancias de capital (en contraposición con los ingresos salariales), hasta el punto de
que en los años previos a la crisis el 0’1% más rico de la
sociedad tenía un 70% de sus ingresos derivados de las
ganancias de capital. Teniendo presente que ese porcentaje disminuye absolutamente en los estratos más
bajos de la población, y que por lo tanto eso significa
que viven fundamentalmente de sus ingresos salariales, tenemos que la desigualdad personal en España ha
sido creciente por la propia participación en la burbuja
financiera e inmobiliaria.
80
70
60
50
40
30
3
20
2,5
Top 1 %
2007
2005
2003
1999
2001
1997
1995
1991
1989
1993
Top 5 %
Top 0, 1 %
Gráfico 12: Porcentaje ingresos por ganancias de capital.
España (1981-2010)
Fuente: The World Top Incomes Database (2012)
Top 0,001%
Top 0,1%
Gráfico 12: Participación en el ingreso, España (1980-2010)
Fuente: The World Incomes Database (2012)
2006
2004
2002
1998
2000
1996
1994
1992
1990
1988
1986
1984
1982
1980
0,5
34 desde abajo
Año 2013 · Nº02
1987
Top 10%
1
0
1985
1,5
1981
2
1983
10
0
Además, los datos revelan que los hogares más ricos
disponen no sólo de más activos financieros -según
el Fondo Monetario Internacional el 70% del volumen
de los activos financieros en España está en manos
del 10% más rico de los españoles (FMI, 2012)-, sino
que además disponen de los activos financieros más
desde abajo 35
Dicho lo cual, nos interesa ahora saber qué ocurre
con las deudas de los hogares y cómo se distribuyen
por estratos de renta. Ello ayudaría a vislumbrar si
efectivamente hay una relación entre la desigualdad
creciente (en términos funcionales y personales) y el
incremento del endeudamiento.
Lo primero que observamos es que el 40% del volumen de deuda está en manos del 10% más rico de la
población según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI, 2012). De hecho, el 64’7% de los hogares
más ricos tiene algún tipo de deuda, frente al 16’5%
de los hogares más pobres (ver cuadro siguiente). Sin
embargo, algunos de estos datos podrían ser confusos porque son sobre cantidades totales (los ricos suelen endeudarse por cantidades mucho mayores) y no
tienen presente la relación con los ingresos.
Si atendemos a dicha relación encontramos que el
ratio de deudas sobre renta y riqueza es decreciente,
lo que quiere decir que efectivamente los más pobres
son los más endeudados sobre su capacidad de ingreso. De hecho, los hogares más pobres tienen un ratio
del 147’7% de deudas sobre la renta, mientras que los
más ricos tienen un 62%. De la misma forma, los más
pobres dedican un 39’2% de su renta al pago de intereses de la deuda mientras que el porcentaje es del
10% en el caso de los más ricos. Además, aunque no
sea objeto de estudio en este documento, las deudas
recaen más sobre los más jóvenes tanto en cantidad
absoluta como en relación con los ingresos.
36 desde abajo
Año 2013 · Nº02
Hogares
Algún tipo
de deuda
Ratio de pagos
por deudas
sobre renta
(mediana)
Ratio de
deudas
sobre renta
(mediana)
Ratio de
deudas sobre
riqueza bruta
(mediana)
Todos los
hogares*
50,1
19
104,7
19,2
Menor de 20
16,5
39,2
147,7
25,5
20-40
42,3
26,4
137
23,9
40-60
63,6
24
148
24,5
60-80
61,2
17
95,8
19,1
80-90
68,5
14,4
84,6
15,7
90-100
64,7
10
62
12,8
Percentil de renta
El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
rentables. Así, sólo un 5’6% de los españoles tiene
suscrito un fondo de inversión, pero ese porcentaje
disminuye al 2’1% cuando hablamos del 20% más pobre de los hogares y asciende a un 18’4% cuando hablamos del 10% más rico de los hogares. De la misma
forma, sólo un 3’6% de los hogares más pobres tiene
acciones o participaciones frente a un 37’2% en los hogares más ricos. Igualmente, un 7’4% de los hogares
más pobre tiene un plan de pensiones o seguro de
vida frente a un 54’2% de los hogares más ricos (Banco de España, 2011).
01
Edad del cabeza de familia
Menor de 35
años
68,6
25,6
217,4
52
35-44
72,3
21,5
142,7
24,6
45-54
60
17,9
89,9
13,5
55-64
48,5
12,1
41
5,7
65-74
22,9
15,9
55,3
8,1
Más de 75
9,9
12,5
18,5
6,2
* En el caso de las tres últimas columnas se refiere a hogares con algún tipo de deuda
Fuente: Banco de España (2012)
Tabla 3
Así pues, tenemos datos aparentemente contradictorios. Por una parte, son pocos los hogares más
pobres que han recurrido a las deudas, frente a una
cantidad mucho mayor de hogares más ricos que
han suscrito un préstamo. Pero, por otra parte, dentro del conjunto de hogares endeudados son los más
pobres los que más lo están respecto a sus rentas y
riquezas.
Para intentar arrojar algo más de luz conviene examinar la finalidad de endeudamiento familiar. Según
el Banco de España el 90’2% de las deudas se destinaron a la adquisición de una vivienda u otra propiedad inmobiliaria, frente a un 9’8% que se destinó al
consumo de vehículos y otros bienes. La distribución
entre estratos de renta es muy similar.
De estos datos podemos deducir que el endeuda-
desde abajo 37
miento se ha producido en un entorno de burbuja
inmobiliaria que ha elevado por mucho los precios
de las viviendas, obligando a muchas familias a endeudarse para poder adquirirlas. No hay que olvidar
de que nuestro país se caracteriza por un sistema inmobiliario basado en la propiedad, y donde el 82’7%
de los hogares es propietario de una vivienda principal y el 36’1% dispone de alguna otra propiedad
inmobiliaria (siendo este porcentaje del 20% en el
caso de los más pobres y del 62% en el de los más
ricos). Lógicamente aquellas familias con menores
ingresos han quedado más atrapadas en la relación
deuda/ingreso.
Es una situación similar a la que se ha dado en el caso
de las empresas no financieras, donde más de la mitad del crecimiento del endeudamiento ha estado
vinculado al sector de la construcción y la actividad
inmobiliaria (FMI, 2012).
· Conclusiones
En consecuencia, y a partir de los datos aportados,
no podemos concluir que el crecimiento del endeudamiento haya tenido una relación directa y positiva con la desigualdad. No parece claro, en definitiva, que los más pobres hayan compensado de una
forma generalizada su pérdida de poder adquisitivo
con más deudas. Sin embargo, sí podemos afirmar
que hay una relación directa entre el modelo de crecimiento basado en la burbuja inmobiliaria y el creciente endeudamiento.
Así pues, nuestra tesis es que las familias han disfrutado de un efecto riqueza al afectar la burbuja
inmobiliaria a casi todas las familias a través de una
revalorización de sus activos inmobiliarios. Ello ha
generado una falsa ilusión de enriquecimiento al
mismo tiempo que en términos objetivos la desigualdad funcional y personal seguía creciendo. No
obstante, esta revalorización de los activos ha sido
la garante de que se pudiera mantener el endeudamiento creciente de los agentes económicos, lo que
era necesario para permitir que durante estas décadas se mantuviera el crecimiento económico. Una
vez el modelo de crecimiento económico se desploma, sólo queda el reguero de deudas privadas y una
situación agravada de desigualdad funcional.
38 desde abajo
Año 2013 · Nº02
BIBLIOGRAFÍA
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El yugo del capital
El capitalismo español en el siglo XXI
Solo queda el reguero de deudas privadas y
una situación
agravada de
desigualdad
funcional”
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El yugo del capital
Finanzas, información y democracia
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Francisco Sierra Caballero
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Año 2013 · Nº02
INTRODUCCIÓN
El cálculo, la confianza, la gestión del riesgo y la dinámica de reproducción y ampliación de los mercados
están mediatizados, en el capitalismo financiero, por
el acceso y disponibilidad de información. No hay actividad económica en la globalización capitalista que
no esté determinada por el poder de la mediación.
Pues, en esencia, la principal cualidad de lo informativo es su carácter fiduciario. Implícitamente, se
sostiene en un contrato comunicacional. Se funda
en la creencia y el reconocimiento de la veracidad de
lo representado. Informar, a priori, es representar lo
real verídico. Lo que significa dar cuenta en el mensaje de un contenido lógico de representación de lo
fáctico en tanto que noticia de lo eventual (media
events), lo contingente y/o la ruptura del acontecer.
El problema que se plantea cuando pensamos la mediación y su influencia en lo que hace décadas Eliseo
Verón denominó, como parte fundamental de la semiosis social, la producción ideológica de la realidad
es que la información es una mercancía doblemente
determinada, material e ideológicamente. Toda mediación informativa plantea, de hecho, un problema
subyacente de valorización de capitales que ha de
ser tomada en cuenta para comprender las contra-
1.-Es Profesor Titular de Teoría de
la Comunicación de la Universidad de Sevilla. Director del Grupo
Interdisciplinario de Estudios en
Comunicación, Política y Cambio
Social (www.compoliticas.org) y
Editor de la Revista de Estudios
para el Desarrollo Social de la
Comunicación (REDES.COM) del
Departamento de Periodismo I.
Fundador y responsable de Relaciones Internacionales de la Asociación Española de Investigación
de la Comunicación (AEIC), en la
actualidad, desempeña el cargo
de Secretario Internacional de la
Unión Latina de Economía Política de la Información, la Comunicación y la Cultura ( www.ulepicc.
net ) y funge en calidad de Vicepresidente de la Confederación
Iberoamericana de Asociaciones
Científicas en Comunicación
(www.confibercom.org ).
Departamento de Periodismo I.
Facultad de Comunicación
UNIVERSIDAD DE SEVILLA.
Avda. Américo Vespucio, s/n, Isla
de la Cartuja 41092 Sevilla.·
E-mail: [email protected]
www.compoliticas.org
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