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Bolivia La soya y el VIH-SIDA BUENAS PRÁCTICAS EN ACCION La Historia Antecedentes El Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Programa Nacional de ITS/VIH/SIDA de Bolivia realizaron un estudio, el cual demuestra que el 65% de las personas que están recibiendo el tratamiento antirretroviral, viven con inseguridad alimentaria. Las personas con VIH pueden sufrir falta de apetito, dificultades para ingerir alimentos y pobre absorción de nutrientes. Ingerir una dieta no balanceada, carente de nutrientes, hace que sea mucho más difícil para el cuerpo humano luchar contra un virus. Intervención A principios del 2010, el PMA inició un proyecto con el objetivo de apoyar al menos a 650 personas con VIH a través de la distribución mensual de una canasta de alimentos que consistía en arroz, aceite vegetal, granos de soya, y sal. Como parte de un paquete de intervenciones también se brindó consejería nutricional para fortalecer la adherencia a los tratamientos antirretrovirales. Uno de los aspectos innovadores fue la introducción de la soya, fuente principal de proteína, pero poco consumida dentro de la dieta boliviana, aunque propia de las cosechas del país, Se pudo observar que la utilización de la soya no sólo contribuyó a mejorar el estado nutricional sino que también fortaleció los niveles de adherencia. Debido a su bajo consumo y la a falta de conocimiento sobre su utilización se requirió que el PMA enseñara cómo implementarla en la dieta diaria. Resultados Los beneficiarios del proyecto alcanzaron exitosamente un peso saludable y están incorporando la soya en sus dietas. El PMA pudo llegar a personas extremadamente vulnerables y cubrir una necesidad clave dentro de los servicios de atención a personas con VIH. La comunidad aprendió a incorporar la soya en sus dietas a través de clases y libros de cocina, para así maximizar su ingesta, beneficiarse de sus propiedades proteicas, fortalecer su estado inmunológico y, por ende, mejorar su habilidad para combatir el virus. La soya puede ser sustituta de la carne Lecciones Aprendidas Enseñar a las personas que viven con el VIH cómo la proteína es esencial en la dieta fue un factor clave que hizo del proyecto un éxito. Las personas que viven con el VIH no sólo están incorporando soya en sus dietas, sino que, al hacerlo, también ayudan a la economía boliviana mediante la utilización de un cultivo barato que se cosecha en su propio país. Las clases grupales sobre educación nutricional también fueron muy importantes para el éxito del proyecto, ya que proporcionaron un espacio de apoyo y fraternidad para personas que fueron rechazadas en sus comunidades a causa de su enfermedad. Beneficiarios del programa Creando conciencia en el uso de la soya Contacto: Ximena Loza Oficial de Información Pública [email protected] Implementación Paso 1 Identificar el problema: Se condujo un estudio con el Programa Nacional de ITS/ VIH/SIDA de Bolivia para ver exactamente cuál es el rol que juega la malnutrición en las personas viviendo con VIH. Se descubrió una carencia en el consumo de proteína en las dietas de las personas lo cual no contribuía al éxito esperado del tratamiento y dificultaba los niveles de adherencia. “Yo solía ser muy delgada, y el tratamiento antirretroviral me hizo sentir muy débil […] Con la asistencia alimentaria y la consejería nutricional del PMA, he subido de peso, lo que me hace sentir más fuerte para tomar mis medicinas". -Dora, madre de cuatro y beneficiada por el programa.- Puntos a Destacar Paso 2 Crear un proyecto: Se incluyó la soya en las raciones de alimentos para fomentar el consumo de proteína producida localmente y de bajo costo. La entrega de la canasta alimentaria se llevó a cabo en coordinación con la entrega de medicamentos a través de los servicios médicos. Paso 3 Educación: La dieta típica boliviana no incluye soya, por lo tanto, el PMA estableció sesiones educativas de carácter práctico con el fin de enseñar diferentes maneras de incorporar este alimento como fuente de proteínas en su dieta. Las clases no sólo fueron instructivas, sino también facilitaron la convivencia de las personas con VIH y sus familias, fortaleciendo los lazos comunitarios y disminuyendo el aislamiento. Paso 4 La soya es un cultivo con alto contenido proteico cosechado en Bolivia. Gracias a los talleres, los pacientes aprenden a elaborar platos a base de soya. Los platos que se pueden hacer con este cultivo son sorprendentemente nutritivos. La leche de soya forma parte de la alimentación de las personas viviendo con VIH/SIDA. Una buena alimentación permite un mejor desempeño en las actividades cotidianas. Con este programa se pueden superar los efectos secundarios de los medicamentos y tener una mejor calidad de vida. Sostener: Con la distribución del alimento y la consejería nutricional se creó el hábito de consumo de un alimento nutritivo, rico en proteína, de producción nacional y de bajo costo. Alianzas El Programa Nacional de ITS / VIH / SIDA de Bolivia ayudó a realizar el estudio inicial del proyecto. Las instalaciones de salud y los médicos locales ayudaron a tratar a los pacientes. Sostenibilidad Cuando el Programa Mundial de Alimentos termine el proyecto, los destinatarios serán capaces de utilizar el conocimiento obtenido a través de las clases con el fin de mantener su dieta alta en proteínas. Insumos Conocimiento Análisis del papel que juega la malnutrición en pacientes con VIH. Materiales Cestas de comida que incluyen soya, aceite vegetal, arroz y sal, junto con libros de recetas especializadas en soya. Labor Capacitaciones en nutrición, elaboración de recetas nutritivas. Contacto: Ximena Loza Oficial de Información Pública [email protected]