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Transcript
Estrategia para un desarrollo sustentable1
Al cumplirse 20 años de la Primera Conferencia de la Tierra de Río de Janeiro, la
humanidad llega a la conclusión que deben analizarse los diferentes sistemas y
grupos de problemas con una aproximación que ponga de relieve las interacciones
entre estos sistemas. El triángulo de la sustentabilidad que busca el desarrollo
conservando los equilibrios entre lo económico, lo social y lo medioambiental
adquiere una mayor relevancia.
I.
Antecedentes generales
Al cumplirse 20 años de la Primera Conferencia de la Tierra de Río de Janeiro, 1982,
¿cuáles son los rasgos esenciales y más visibles de la situación mundial actual?
Estamos en una época de grandes desequilibrios: el fenómeno del cambio climático
ha sido calificado como el mayor desafío para la humanidad, las crisis financieras y
las crisis económicas se suceden una otra, crisis energética y crisis alimentaria,
fuertes tensiones sociales debidos a una inequidad creciente, cambios geopolíticos
profundos y duraderos modifican los equilibrios mundiales, crisis del agua, crisis
políticas en diferentes países: “primavera árabe”, “indignados” de Madrid, Londres,
Wall Street, Atenas, Santiago, etc. Todo esto en medio de avances sorprendentes
en las tecnologías en general y en las de la información y de la comunicación en
particular, las cuales se anunciaban como las portadoras del bienestar, seguridad,
estabilidad, desarrollo y felicidad de la humanidad.
La pregunta que debemos plantearnos es: 20 años después de la Cumbre de la
Tierra, ¿El sueño de Río 82’ de un desarrollo sustentable ya no es posible?
Biblioteca del Congreso Nacional. Contacto: Julio Vega Pais – Departamento de Estudios,
Extensión y Publicaciones BCN. Anexo 1779, E-mail: [email protected], 26-10-2011. Serie Minutas Nº 14711.
1
2
En los años 60 del pasado siglo XX, la comunidad científica comienza a alertar a las
administraciones y a la opinión pública mundial sobre los grandes problemas del
planeta:
pobreza,
marginalidad,
pérdida
de
biodiversidad
y
deterioro
medioambiental.
Se empiezan a hacer evidentes las interrelaciones entre las actividades humanas y
la naturaleza que sustenta la vida, y que el medio ambiente, -la biosfera en la que
vivimos los seres humanos y otras formas de vida- resulta ser un sistema complejo,
dinámico, sinérgico, inestable e incierto y que existe una interdependencia mutua
entre los ecosistemas y las actividades socioeconómicas.
En 1968 Aurelio Peccei y Alexander King crean el Club de Roma para atender los
retos de esta nueva realidad. En 1972, el Club encarga al MIT un informe que fue
publicado con el título de “The Limits to Growth” poco antes de la primera crisis del
petróleo. Este informe representa un primer llamado de atención acerca de la
gravedad de lo que estaba sucediendo.
La Conferencia sobre el Medio Humano de Estocolmo, en 1972, es la primera
reunión mundial sobre medio ambiente donde se ponen los cimientos para la más
importante Cumbre de la Tierra que se celebraría 20 años más tarde en Río de
Janeiro (1992).
En la Conferencia de Estocolmo participaron 113 naciones y su Secretario General,
el Dr. Maurice Strong, declaró con posterioridad que: “…Antes de ella, jamás un
tema -en este caso, el medio ambiente- considerado por entonces una novedad, fue
llevado a un nivel tan alto de discusión”.
Por primera vez en un informe de este tipo, el análisis y las conclusiones de la
conferencia se basan en la simulación informática creada para recrear el crecimiento
y movimiento de la población, el crecimiento económico y el incremento de la huella
ecológica de la población. Estos ejercicios computacionales permiten vislumbrar la
vida sobre la tierra en los próximos 100 años, según los datos disponibles a esa
fecha.
Hoy día, con los grandes avances en el hardware y el software, esta metodología ha
evolucionado a niveles muy avanzados, y, por ejemplo, el Panel Internacional de
Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) 2 apoya sus estudios, conclusiones y
recomendaciones en una multitud de diversos modelos informáticos, competitivos y
complementarios, que han permitido asegurar en su IV Informe de Evaluación, de
febrero de 2007, que el Calentamiento Global es un fenómeno real, que existe, y
que es causado, con un 90% de probabilidad, por la acción humana. Finalmente
concluye que de no tomarse medidas urgentes, la temperatura promedio de la
superficie de la Tierra aumentará en 4,7°C de aquí a finales del siglo XXI con
consecuencias catastróficas para nuestro planeta y para la vida en él.
2
El IPCC es un grupo de expertos creado en 1988 por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
3
Las conclusiones de la Conferencia de Estocolmo se recogieron posteriormente en el
Informe Brundtland, titulado “Nuestro Futuro Común”, que fue dirigido por Gro
Harlem Brundtland, ex-Primera Ministra de Noruega. Como resultado de la
Conferencia de Estocolmo se instauró el Programa del Medio Ambiente de las
Naciones Unidas (PNUMA) y la ONU estableció en 1983 la Comisión Mundial sobre
Medio Ambiente y el Desarrollo. En este informe, se utilizó por primera vez el
término desarrollo sostenible (o desarrollo sustentable), definido como aquel que
busca satisfacer las necesidades del presente sin comprometer las
necesidades de las futuras generaciones. Este concepto implicó un cambio muy
importante en cuanto a la idea de sustentabilidad, principalmente ecológica, y creó
un marco que le da también a esta variable un énfasis junto al contexto económico
y social del desarrollo.
Culminando este proceso de construcción de un consenso mundial entre la
comunidad científica internacional y los responsables de las políticas públicas a
diferentes niveles, la conferencia de Río de Janeiro, en 1992, conocida como
Cumbre de la Tierra aprueba su llamado Programa 21 (o Agenda 21, en inglés).
Dicha Cumbre reunió a 125 Jefes de Estado y de Gobierno y a 178 países. Su
Secretario General fue el mismo Dr. Maurice Strong. Participaron aproximadamente
400 representantes de organizaciones no gubernamentales (ONG), mientras que
más de 17.000 personas asistieron al Foro de ONGs celebrado paralelamente a la
Cumbre.
La Cumbre aprobó la “Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo”,
que aclara el concepto de desarrollo sostenible:
«Los seres humanos constituyen el centro de las preocupaciones
relacionadas con el desarrollo sostenible. Tienen derecho a una vida
saludable y productiva en armonía con la naturaleza», (Principio 1).
«Para alcanzar el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente
debe ser parte del proceso de desarrollo y no puede ser considerado por
separado», (Principio 4).
La Conferencia de Río también aprobó la Convención sobre el Cambio Climático, que
afirma la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, y que
condujo a la firma en 1997 del Protocolo de Kyoto. Asimismo, la Declaración sobre
los Bosques y el Convenio sobre la Diversidad Biológica, que supedita el uso de la
herencia genética mundial a ciertas condiciones, también fueron ratificados en la
Cumbre.
II.
Estrategias para lograr un desarrollo sustentable
La preocupación por el medio ambiente en el marco del desarrollo se tradujo en el
concepto de desarrollo sustentable (o desarrollo sostenible). Este busca el equilibrio
entre las dimensiones económica, ecológica y social del desarrollo. Este concepto se
concreta en llevar a cabo acciones que satisfagan las necesidades del presente sin
4
comprometer las necesidades de las futuras generaciones y de incorporar a los
beneficios del desarrollo a los países y sectores más atrasados, cuidando el medio
ambiente, velando por la conservación de los recursos naturales y sin romper los
frágiles equilibrios de la naturaleza.
El concepto de desarrollo sustentable (o sostenible) se ha graficado con el Triángulo
de la Sustentabilidad que pone en equilibrio, y en igualdad de importancia, las
dimensiones ambientales, sociales y económicas del desarrollo humano, colocando
en el centro del triángulo el concepto de sustentabilidad.
Figura 1. Triangulo de la Sustentabilidad
En forma muy simple y esquemática las tres dimensiones representan:



La Dimensión Ambiental: medio ambiente sano, explotación controlada de
los recursos naturales, protección de los recursos renovables, protección de
la vida, protección de los equilibrios naturales, etc.
Dimensión social: paz, seguridad pública, calidad de vida, etc.
Dimensión económica: crecimiento económico, innovación tecnológica,
distribución equilibrada del ingreso, inserción en el mercado mundial, etc.
Las tres dimensiones se deben analizar a escalas locales, regionales y globales.
Hoy día se está incorporando la dimensión cultural como una envolvente al triángulo
formado por las tres dimensiones originales.
5
III.
Huella ecológica y economía verde
Con la total ocupación del planeta por parte de un sistema económico mundial
densamente integrado, han aparecido, o se han agudizado, nuevos problemas, de
carácter global.
A partir de la década de los sesenta en el siglo pasado, conscientes de que la
humanidad ha venido ejerciendo intervenciones en el planeta cada vez con mayor
extensión, agresividad y profundidad, empieza a tomar fuerza la preocupación por
el necesario cuidado de la naturaleza de modo de conservar los complejos
equilibrios naturales y preservarlos para las generaciones futuras.
La huella ecológica de la humanidad, es decir, la superficie de tierra y el volumen de
agua y los recursos renovables necesarios para producir los bienes y servicios que
utiliza la población mundial durante un año, se viene duplicando año a año a partir
de 1966. Si nada cambia en los actuales modos de consumo, la humanidad
necesitará "dos planetas Tierra para el 2030”. 3
Cada día se hace más evidente que estos equilibrios son mucho más frágiles que lo
pensado. El planeta Tierra, que parecía infinito y capaz de soportar todo tipo de
cargas y agresiones comienza a demostrar un agotamiento creciente.
El desarrollo basado en el paradigma de crecimiento económico y de consumo
creciente comienza a mostrar sus límites. A escala planetaria, el crecimiento
económico mundial ha empujado las fronteras de expansión hasta sus últimos
rincones. Con la total ocupación del planeta por parte de un sistema económico
integrado han aparecido, o se han hecho evidentes, nuevos problemas a los que se
ha llamado problemas globales.
Según el informe "Planeta Vivo 2010"4 de la organización World Wide Fund for
Nature (WWF), publicado el 13 octubre pasado, la humanidad utiliza hoy día "el
equivalente de un planeta y medio" para cubrir sus necesidades.
Esto es en base a un promedio mundial. Si cada habitante del planeta viviera como
un habitante promedio de EEUU o de los Emiratos Árabes Unidos, se necesitaría de
una biocapacidad equivalente a 4,5 planetas Tierra para responder al consumo de la
humanidad.
En ocasión de la Reunión 2010 del Consejo Ministerial de la OCDE (OECD 2010
Ministerial Council Meeting –MCM-), los Ministros reunidos aprobaron un documento
de conclusiones ministeriales donde abordan, entre otros importantes tópicos, el
tema del Crecimiento Verde. Dice el documento: “El crecimiento verde está ganando
apoyo en todos los países como un paradigma para lograr crecimiento económico y
desarrollo, al mismo tiempo que responde a los desafíos ambientales, tales como el
3
http://chile.panda.org/que_hacemos/planeta_vivo_2010/
4
http://assets.wwfspain.panda.org/downloads/infoplanetavivo2010.pdf
6
cambio climático, la pérdida de biodiversidad y el uso insostenible de los recursos
naturales.”5
Para apreciar en su verdadera dimensión la magnitud del desafío que debe enfrentar
este paradigma, éste debe ser analizado en relación con la envergadura de los
desafíos que busca resolver o mitigar.
En el libro: “Viaje al Antropoceno” de Claude Lorius, co-autor con el periodista
Laurent Carpentier, publicado a principios de enero de 2011 por la editorial Actes
Sud, el glaciólogo francés, miembro de la Academia de Ciencias y Blue Planet Award
2008, describe las consecuencias de las emisiones de gases de efecto invernadero:
es toda la Tierra la que el hombre está modificando.
Un forma de mirar la magnitud del impacto de la humanidad sobre el planeta desde
1784, cuando James Watt patentó la máquina de vapor, puede resumirse, según
Claude Lorius, en que, sin saberlo, hemos cambiado nuestra era geológica. Salimos
de los diez mil años de la era del Holoceno, que, por su clima cálido y estable,
posibilitó el nacimiento de la agricultura y la industria, luego de la última glaciación
importante del Pleistoceno.6
Hemos entrado en el Antropoceno - el griego anthropos, ser humano - una época en
que el hombre se ha convertido en la principal fuerza geofísica del planeta, capaz de
cambiar su entorno y sus equilibrios.
¿Qué le ha cambiado el hombre a la geología del planeta?
Claude Lorius responde: “En primer lugar, se ha alterado la atmósfera de la Tierra
debido a las emisiones de gases de efecto invernadero que incluyen el dióxido de
carbono (CO2) y metano (CH4). Luego modifica la hidrósfera: el agua del planeta es
cada vez más ácida debido el dióxido de carbono y aumenta el nivel de los océanos
debido a la fusión de los glaciares. También ataca la litósfera, la cáscara rígida del
planeta, por medio de la erosión de los suelos, la excavación de minas y el
agotamiento de los recursos naturales. Por último, se perturba la biosfera, los
organismos vivos que habitan la Tierra, pues ya muchas especies están en peligro
de extinción.”
5
http://www.oecd.org/dataoecd/27/6/45417083.pdf
6
“Bienvenue dans une nouvelle ère géologique, l’anthropocène”, lemonde.fr, Vendredi 14 janvier 2011
7
Figura N°2. Valores históricos y proyecciones del nivel de los océanos, de la temperatura
media de la Tierra y de la concentración de CO2 en la atmósfera, en los últimos 400.000 años
Fuente: “Bienvenue dans une nouvelle ère géologique, l’anthropocène”, lemonde.fr
La “seguridad energética” y la “seguridad alimentaria” son conceptos que vuelven a
la discusión de expertos, autoridades políticas y opinión pública en general. Luego
de algunos años en que estos conceptos fueron relegados a un segundo plano frente
al paradigma universal de que el mercado era capaz de regular mejor que ningún
otro método los diferentes problemas inherentes al desarrollo económico social,
estos conceptos vuelven a estar presentes.
Términos como “economía verde”, “economía baja en carbono”, “certificaciones” y
“códigos de buenas prácticas” se abren paso en los foros y en la discusión, y se
relacionan con futuras nuevas reglas del comercio internacional: quien no este
certificado verá los precios de sus exportaciones castigados, quien no mida su huella
de carbono verá las fronteras cerradas para sus productos.
Los más pesimistas previenen que estos términos y conceptos puedan ser
manipulados como “cortinas de humo” para continuar con una depredación
creciente de los recursos naturales y ecosistemas: “Los correctivos recomendados
remiten a la buena voluntad: hay que crear certificados y códigos de buenas
prácticas, pero en ningún caso establecer reglas ni apoyarse en textos coercitivos.” 7
7
“Las finanzas a la caza de tierras”, Benoît Lallau, Le Monde Diplomatique, Edición Chilena, AñoXI, núm
122, septiembre de 2011.
8
IV.
La escala temporal del desarrollo
El fenómeno del Cambio Climático fue calificado por el economista inglés Nicholas
Stern8 como “el mayor y más generalizado fracaso del mercado jamás visto en el
mundo”. En su informe señala que: “la consecución de una importante reducción en
las emisiones tendrá su costo”. El Informe Stern ha calculado que los costos anuales
de la estabilización a nivel de 500-550 ppm CO2e9 (una cifra bastante por encima
de los niveles actuales) sería aproximadamente del 1% del PIB mundial para el
2050, nivel sin duda significativo, aunque posible de enfrentar.
Una mirada desde otro ángulo, conduce a reflexionar respecto de la lógica de corto
plazo que impera en los proyectos de inversión y de los negocios en general. La
lógica estrictamente financiera con que se abordan las inversiones conspiran contra
las acciones de largo plazo de conservación de los equilibrios naturales del planeta
Tierra. Para decirlo con un ejemplo sencillo: con la actual lógica económica nadie
siembra robles u otras maderas nobles (inversiones de lenta maduración), en vez de
pinos o eucaliptos (inversiones con retornos en el corto o mediano plazo).
El Sr. Bernard Lietaer10 ha desarrollado la tesis de que el sistema monetario actual,
que privilegia el corto plazo, conspira, y clausura cualquier posibilidad para que se
puedan incorporar de forma gravitante y significativa variables de largo plazo en la
evaluación económico-financiera de los proyectos11. Esto es especialmente
dramático para proyectos energéticos u otros relacionados con el calentamiento
global (reforestación, conservación de bosques, etc.). En otras palabras, los
actuales criterios de evaluación de proyectos de inversión solo consideran resultados
de corto, y máximo, mediano plazo. Así, inversiones cuyos resultados se midan en
plazos de 50, 100 o más años no pueden ser consideradas. Una inversión, ya sea
privada o estatal, debe entregar resultados a partir de las primeras décadas para
ser “viable”.
8
Nicholas Stern, Stern Review, 2001. Informe elaborado a solicitud del Ministerio de Hacienda Británico
9
Partes por millón de dióxido de carbono (CO2) equivalente.
10
Bernard Lietaer, es un economista belga, ex presidente del Banco Central de Bélgica, quien estuvo
encargado del diseño y monitoreo del proceso que permitió la convergencia de las diferentes monedas
nacionales europeas en el EURO.
11
LIETAER, Bernard , “El Futuro del Dinero”, Buenos Aires, 2005, coedición Erreprer/Longseller,
9
V.
Conclusiones
En conclusión, todos estos sistemas globales: economía mundial, finanzas
planetarias, desigualdades regionales, locales y mundiales, impactos globales
severos al los sistemas ecológicos, están íntimamente relacionados y generan
sinergias positivas y/o negativas entre sí.

Las emisiones de gases de efecto invernadero, que no han podido abatirse y
que siguen creciendo año a año, tuvieron un ligero punto de inflexión a raíz
de la crisis financiera del año 2008: a menor PIB menos emisiones,

Como calculó el Informe Stern, el calentamiento global o cambio climático
tendrá impactos en el crecimiento del PIB y en los costos del desarrollo,

La introducción de tecnologías avanzadas en la agricultura que permitirían
aumentar la producción de alimentos y mejorar la seguridad alimentaria de
los países, ponen en peligro la biodiversidad y arrasan con formas de
subsistencia, que, aunque a bajos niveles de desarrollo, funcionan en los
países más atrasados,

El crecimiento del PIB de los países desarrollados y en desarrollo provocan
aumentos significativos en las emisiones de gases de efecto invernadero,
incluso por la relocalización de las industrias más contaminantes,

Los efectos del cambio climático en las poblaciones son más severos en los
países y en las poblaciones más pobres de las periferias,

Los desechos industriales y de las grandes ciudades están golpeando
severamente la disponibilidad de agua dulce de calidad,

La pesca indiscriminada de los recursos marinos está agotando los mismos
poniendo en peligro la cadena trófica,

Las catástrofes naturales y las consecuentes hambrunas, generan presiones
migratorias insostenibles.
Solo una mirada que abarque el conjunto de variables y relaciones puede estar a la
base de la construcción de un nuevo paradigma de desarrollo.