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Mesoamerica
Actualización sobre seguridad alimentaria
30 de junio de 2006
La mayor parte de la región continúa recibiendo fuertes lluvias
Las lluvias a lo largo de la mayor parte de la región continuaron en junio. La parte sur del
altiplano de Guatemala, incluyendo zonas afectadas por el huracán Stan el año pasado,
estuvo excepcionalmente húmeda en junio y experimentó inundaciones localizadas,
deslizamientos de tierra y daños en cosechas. Lluvias adicionales causarán más problemas
localizados. Las fuertes lluvias a lo largo de las áreas costeras del Caribe de Belice,
Honduras y Nicaragua podrían causar inundaciones localizadas, aunque no se esperan
inundaciones generalizadas.
El Índice de Balance Hídrico (IBH) de USGS (Servicio Geográfico de Estados Unidos) es
un modelo que utiliza datos de satélite y de tierra para calcular la condición real de la
cosecha de maíz, basados principalmente en las necesidades del cultivo en las distintas
etapas del ciclo, y las condiciones hidrológicas reales. A finales de junio de 2006, este
análisis muestra que el cultivo de maíz se encuentra en una condición de buena a muy
buena en la mayor parte de Centroamérica. Si bien el modelo considera solamente el maíz,
este es por lo general un buen indicador para otros cereales que sembrados. Si bien el
índice WRSI por lo general capta el efecto de la baja precipitación sobre los cultivos, no
capta el impacto de lluvias fuertes y suelos saturados.
FIGURA 1: ÍNDICE DE BALANCE HÍDRICO:
CONDICIÓN DE LA COSECHA DE MAÍZ, A PARTIR DEL 30 JUNIO 2006
Continúan fuertes lluvias con amenaza de inundaciones localizadas
Condición de la
cosecha de maíz,
30 junio 2006
N/A
Fracaso
Escaso
Regular
Promedio
Buena
Muy buena
Fuertes lluvias continúan
causando inundaciones
localizadas, deslizamientos de
tierra y daños en cosechas.
Condiciones secas podrían
afectar cultivos emergentes
FUENTE: WRSI de USGS/FEWS NET. Amenazas climáticas de
NOAA/FEWS NET. Julio 2006
Análisis del balance de cereales – Entendiendo las Necesidades y disponibilidad de alimentos
Uno de los determinantes importantes de la seguridad alimentaria es la disponibilidad de suministros adecuados de alimentos para satisfacer las
necesidades. Observar el balance nacional alimentario proporciona una indicación referente a si podría presentarse una escasez crucial de alimentos
en un país. El uso de datos de las Hojas de Balance Alimentario de la FAO (http://faostat.fao.org/faostat) para los años 1999-2003, proporciona un
conjunto de datos consistentes a través de los países, permitiendo un análisis a nivel nacional y comparaciones regionales. Todos los datos de la FAO
se originan en los gobiernos nacionales y usualmente reflejan cifras oficiales. El análisis muestra la importancia de mantener datos exactos y
actualizados para permitir tanto un análisis coherente de la seguridad alimentaria y de alerta temprana como su correspondiente reporte.
La importancia de los cereales en la dieta
Determinar las necesidades alimentarias nacionales comienza con las necesidades individuales y nutricionales necesarias para mantener una vida
saludable y activa. Si bien la buena nutrición requiere de cantidades adecuadas de proteínas, grasas, vitaminas y micronutrientes, el balance
alimentario por lo general se analiza en términos de ingesta calórica. La figura x muestra los patrones promedio de consumo de alimentos de las
personas en países seleccionados. En estos países, los cereales proporcionan aproximadamente la mitad de las necesidades calóricas, mostrando su
importancia como fuente de alimentos y para la seguridad alimentaria en Centroamérica. Un vistazo más de cerca a los tipos de cereales consumidos
subraya la importancia del maíz en las dietas locales, el cual proporciona en promedio entre el 21 por ciento (Nicaragua) y el 40 por ciento
(Guatemala) del total de la ingesta calórica. En Nicaragua el sorgo y los frijoles contribuyen más a las dietas locales que en los otros países. Dietas
más diversificadas podrían ayudar a mitigar el posible impacto de algunos de los choques en la seguridad alimentaria. Por ejemplo, el sorgo es
típicamente más tolerante que el maíz a lluvias por debajo de lo normal. En Guatemala, los patrones de un alto consumo de cereales en general y
bajo consumo de carne son coherentes con los altos niveles de pobreza. La gente pobre tiende a comer una dieta menos variada con más cereales.
Estos patrones promedio de consumo obviamente disfrazan la variación en diferentes partes de un país, entre áreas urbanas y rurales y de acuerdo con
los niveles de ingreso. En las áreas urbanas, el trigo y el arroz son usualmente también fuentes importantes de ingesta calórica. En Nicaragua, un
estudio reciente proporcionará datos actualizados sobre los patrones promedio de consumo.
FIGURA 2: PATRONES DE CONSUMO DE ALIMENTOS EL SALVADOR, GUATEMALA, HONDURAS Y NICARAGUA, INGESTA CALÓRICA PORCENTUAL, 2003
El Salvador
Guatemala
Edulcorantes y
azúcar 13%
Productos
Animals 13%
Otro 12%
Aeites
vegetales
6%
Honduras
Edulcorantes
y azúcar 15%
Cereal
51%
Maíz
32%
Trigo 9%
Sorgo 5%
Arroz 4%
Productos
animals 9%
Otro 13%
Aeites
vegetales
7%
Nicaragua
Edulcorantes
y azúcar 16%
Edulcorantes
y azúcar 16%
Cereal
53%
Maíz
40%
Productos
animals 14%
Cereal
48%
Maíz
32%
Otro 6%
Otro 9%
Trigo 11%
Arroz 2%
Frijoles
Frijoles
Sorgo 0.2%
3%
5%
FUENTE: Hojas de Balance Alimentario de la FAO, 2003. (http://faostat.fao.org/faostat)
Productos
animals 11%
Maíz
21%
Cereal
50%
Trigo 10%
Aeites
vegetales
11%
Frijoles
3%
Arroz 5%
Sorgo 1%
Aeites
vegetales
8%
Trigo 6%
Arroz 6%
Sorgo 16%
Frijoles
10%
MFEWS es parte de la Red de Sistemas de Alerta Temprana para la Seguridad Alimentaria financiada por USAID (FEWS NET)
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La seguridad alimentaria depende más de la producción nacional
Los gráficos en la Figura 3 muestran la disponibilidad
total de cereales en El Salvador, Guatemala, Honduras
y Nicaragua para el período quinquenal de 1999 a
2003. Las líneas azules muestran cuánto cereal se
produjo a nivel local, mientras que las líneas rojas
muestra el suministro total de cereales o la disponibilidad de cereales, el cual incluye no solamente la
producción sino también la cantidad de inventarios
existentes al inicio del año, más la importación de
cereales, menos la exportación de cereales. Esto
ilustra que si bien la producción es una fuente muy
importante del suministro nacional de cereales, el
comercio internacional es además un ingrediente
crucial y debe incluirse en el análisis de la seguridad
alimentaria nacional. Cualquier interrupción de este
comercio podría afectar adversamente la situación de
la seguridad alimentaria de un país.
Las tendencias en Nicaragua durante los últimos cinco
años son alentadoras. La producción nacional de
cereales se ha incrementado de 495,000 MT a 883,000
MT, (un 78 por ciento), mientras que la proporción de
las importaciones netas de alimentos de hecho ha
decrecido levemente. Esto contrasta con otros países
de la región, donde los niveles de producción más o
menos se han estancado y las cantidades de
importaciones netas como porcentaje del total de la
disponibilidad de cereales se ha incrementado del 29 al
40 por ciento en El Salvador, del 41 al 48 por ciento en
Guatemala y del 44 al 51 por ciento en Honduras.
FIGURA 3: DISPONIBILIDAD DE CEREALES EN
EL SALVADOR, GUATEMALA, HONDURAS Y NICARAGUA, 1999-2003
El Salvador
Guatemala
2,000
2,000
1,750
1,750
1,500
1,500
1,250
1,250
1,000
1,000
750
750
500
500
250
250
0
0
1999
2000
2001
2002
2003
1999
Honduras
2000
2001
2002
2003
Nicaragua
2,000
2,000
1,750
1,750
1,500
1,500
1,250
1,250
1,000
1,000
750
750
500
500
250
250
0
0
1999
2000
2001
2002
2003
1999
2000
2001
2002
2003
Producción
Producción + Inventario inicial + importaciones - exportaciones
FUENTE: Hojas de Balance Alimentario de la FAO, 1999-2003. (http://faostat.fao.org/faostat)
Comparación de la disponibilidad de cereales con sus usos
Para facilitar la comparación y el análisis regional entre países, el gráfico a continuación muestra las fuentes y usos del cereal sobre una base
anual per cápita utilizando datos del balance alimentario elaborado por la FAO en 2003. Esto es importante para el análisis de la seguridad
alimentaria ya que el cereal no es utilizado exclusivamente como alimento para consumo humano. Por ejemplo, en Belice, Costa Rica y
Panamá, se observa que menos de la mitad del total del cereal disponible es realmente usado como alimento para consumo humano. En estos
países, más de la mitad se utiliza como alimento para ganado. En contraste con estos tres países, en El Salvador, Guatemala, Honduras y
Nicaragua la mayor parte del cereal disponible es usado como alimento para consumo humano, con cantidades relativamente pequeñas
utilizadas como alimento para ganado y otros propósitos.
Este análisis también muestra que de los países más pobres de Centroamérica, solamente Nicaragua pudo satisfacer sus necesidades de
consumo de cereales a través de la producción nacional en 2003. El Salvador, logró satisfacer un 80% de sus necesidades de cereal,
Guatemala el 70% y Honduras el 67%. Cualquier disminución en la producción nacional, debido, por ejemplo, a condiciones excesivamente
húmedas o secas, aumentará el porcentaje de cereal que necesita importarse con el fin de satisfacer las necesidades de consumo. Así,
asegurar la seguridad alimentaria a nivel nacional depende no solamente de la producción nacional sino que también de la capacidad de los
países de importar alimentos para compensar cualquier escasez. En base a las ventajas comparativas de un país, las estrategias de seguridad
alimentaria pueden enfocarse en fortalecer la capacidad de importación más que en tratar de alcanzar la autosuficiencia alimentaria.
FIGURA 4: FUENTES Y USOS DE LOS SUMINISTROS NACIONALES DE CEREAL EN CENTRO AMÉRICA, (POR PERSONA, POR AÑO), 2003
FUENTE DEL SUMINISTRO DE CEREAL
Kilogramos por Persona por año
350
Inventario inicial + Import - Export
Producción
300
USO DEL SUMINISTRO DE CEREAL
Semilla
Manufactura
Desperdicio
Otros usos
Alim. ganado
Consumo
250
200
150
100
50
0
Belice
Costa Rica
El Salvador
Guatemala
Honduras
Nicaragua
Panamá
FUENTE: Hojas de Balance Alimentario de la FAO, 2003. (http://faostat.fao.org/faostat)
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