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I.E.S. “Rodríguez Moñino”
Departamento de Filosofía
Historia de la filosofía. 2º Bachillerato
TEMA 2.
EL PENSAMIENTO PRESOCRÁTICO.
1. CARACTERÍSTICAS DEL PENSAMIENTO PRESOCRÁTICO _____________________ 3
2. LOS FILÓSOFOS PRESOCRÁTICOS. ______________________________________ 4
2.1.
LOS FILÓSOFOS DE MILETO O ESCUELA JÓNICA. ________________________ 4
TALES DE MILETO (624-546) ______________________________________________ 4
ANAXIMANDRO (610-545) ________________________________________________ 4
ANAXÍMENES (585-524) _________________________________________________ 5
2.2.
LA ESCUELA PITAGÓRICA. ___________________________________________ 5
2.3.
HERÁCLITO DE ÉFESO (544-484) ______________________________________ 6
2.4.
PARMÉNIDES DE ELEA (540-470) ______________________________________ 7
2.5.
EMPÉDOCLES DE AGRIGENTO (495-435) ________________________________ 9
2.6.
ANAXÁGORAS DE CLAZOMENE (500-428) _______________________________ 9
2.7.
DEMÓCRITO DE ABDERA (460-370) ____________________________________ 10
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Tema 2. El pensamiento presocrático. Pg. 2
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1. CARACTERÍSTICAS DEL PENSAMIENTO PRESOCRÁTICO
Bajo la denominación de “presocráticos” se suelen agrupar a una serie de
pensadores cuyo eje de reflexión era la naturaleza, la fisis. Intentaron dar una
respuesta no mítica al problema del origen y naturaleza de universo; buscaron el
principio originario de todas las cosas: el arjé. Se trata, pues, de los primeros filósofos,
de los pensadores que protagonizaron el tópico “paso del mito al logos”
Por tanto, todo lo visto en el tema anterior constituirían sus rasgos distintivos
que vamos a esquematizar a continuación:
 Los presocráticos se dedicaron a estudiar la naturaleza, el universo, su
origen y desarrollo. Es el período cosmológico del pensamiento griego.
 Tratan de dar una repuesta no mítica acerca del origen y constitución del
universo. Para ello sustituyen las personificaciones y el antropomorfismo de los
mitos por elementos naturales; sustitución que se realizó de forma progresiva
ya que en las explicaciones de los presocráticos se mezclan elementos míticos
con otros de carácter natural y racional.
 Consideración del mundo como algo ordenado. El mundo es un cosmos donde las
cosas suceden de una forma regular, todo obedece una ley universal. Esta
ley es también el arjé; es la causa que hace que todo suceda
 Eternidad de la fisis. El concepto de creación no existe en el pensamiento
griego, (será introducido con el Cristianismo). Para los griegos existe un
principio (o varios) eterno (el arjé) a partir del cual surgen todas las cosas y
todas vuelven a él. En este sentido el arjé es principio u origen y fin. Esta
idea implica una concepción circular del tiempo. La historia es algo que se
repite continuamente: eterno retorno. (A esta idea se debe la consideración de
la esfera como la figura perfecta)
 Materialismo. No conciben la distinción entre material e inmaterial o
espiritual: todo lo real es material. Admiten que el conocimiento sensorial se
refiere a lo que percibimos por los sentidos; se trataría de un tipo de
información que nos muestra lo material ligado a objetos o realidades
concretas. También consideran que la verdad es algo que está más allá de las
apariencias: la esencia o arjé es algo distinto a lo que nos muestran los
sentidos. Sin embargo, no pueden pensar en él como una idea o un concepto
abstracto, inmaterial; sólo pueden concebirlo referido a la materia. Esto les
lleva a identificar el arjé con algún elemento natural, material y sensible:
agua, aire, tierra, fuego... Este elemento estaría presente en todas las cosas;
por lo que se suele decir que es el sustrato de todo lo real.
 El hombre es interpretado como un microcosmos; un reflejo del cosmos o fisis,
que obedece a las mismas leyes que todas las cosas naturales. Por esta razón
los primeros filósofos no lo consideran como un objeto de investigación
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diferente a otros seres. Algunos autores, sin embargo, hablan del alma
humana, pero la conciben como algo corpóreo o material.
 En definitiva, se puede afirmar que en la filosofía presocrática son más
importantes los planteamientos sobre el universo que las respuestas o
soluciones que dan. Este pensamiento irá evolucionando poco a poco hacia una
distinción de lo material y lo inmaterial que culminará en el idealismo platónico.
2. LOS FILÓSOFOS PRESOCRÁTICOS.
2.1.LOS FILÓSOFOS DE MILETO O ESCUELA JÓNICA.
Se agrupa bajo este rótulo a tres pensadores de la región Jónica (suroeste
asiático), en concreto de la ciudad de Mileto, cuna de la filosofía.
Los tres comparten la idea de que el arjé de la naturaleza es eterno y único y de
él procede todo lo real; y como todo lo real es material, el arjé tiene que ser también
material y real, pues lo material no puede surgir de lo no material.
Además, si la naturaleza es dinámica, está sujeta al cambio, al devenir, entonces
el arjé también tiene que ser dinámico, pues de lo contrario sería imposible explicar el
movimiento de la naturaleza. Sin embargo cada uno de los filósofos de esta escuela
identifica el arjé con un elemento diferente:
 TALES DE MILETO (624-546)
Se le considera como uno de los 7 Sabios de Grecia, por haber predicho un
eclipse de sol, que puso fin a la guerra entre los Lidios y los Medos (28 mayo 585 a. de
C.). Hombre de negocios y de acción, matemático, astrónomo, filósofo. Es una mezcla de
filósofo y científico.
Afirma que el arjé es el agua. Para ello se basa en la consideración de que las
semillas de todas las cosas tienen una naturaleza húmeda y que todos los seres vivos
necesitan el agua para vivir. Además, en agua se transforman los distintos estados
(sólido, gaseoso), o se convierten otras cosas como la niebla, la lluvia, las fuentes
subterráneas... En la tierra todo se reduce a agua.
Concibe el universo como una esfera y la tierra como un plano que flota sobre el
agua. (Tales vive en un puerto de mar donde el agua es imprescindible).
Si bien esta propuesta es bastante rudimentaria, supuso un paso fundamental en
la evolución del pensamiento: la creencia en que el universo se puede analizar como algo
natural a partir de la información recibida por los sentidos

ANAXIMANDRO (610-545)
Comparte con Tales la idea de que el arjé tiene que ser un elemento pero
considera que no puede ser tan algo tan determinado y concreto como el agua. Esto
supone una dificultad para explicar como surgen de él elementos incompatibles como el
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fuego o la tierra. El arjé, si es aquello donde todo tiene su origen, debe ser un principio
que sea un poco de todo pero nada en concreto: lo indefinido o indeterminado, el
ápeiron. () Pero, a pesar de ser indefinido es material.
La idea de ápeiron está próxima a lo abstracto (pensamiento puramente racional),
pero Anaximandro no llega a dar el paso definitivo hasta la representación formal. De
cualquier modo esta forma de plantear el problema representa un claro avance sobre el
pensamiento de Tales
Además Anaximandro ya incluye una cosmología que narra la formación del
cosmos (y del hombre) sin recurrir a representaciones míticas, solo procesos naturales
o físicos y propone una especie de evolucionismo.

ANAXÍMENES (585-524)
Supone un retroceso respecto a Anaximandro. Vuelve a concebir el arjé como algo
determinado: el aire. Lo concibe como una especie de soplo que mantiene con vida el
universo. La originalidad de este pensador respecto a los anteriores es que explica el
doble proceso por el que todo procede de él: la rarefacción y la condensación. Por
medio de la rarefacción el aire se convierte en fuego y por la condensación se
transforma en viento, después en nube y progresivamente en agua, tierra y piedra.
2.2.LA ESCUELA PITAGÓRICA.
Respecto a Pitágoras cuesta averiguar qué fue leyenda y qué realidad. Nació en
Jonia (en la isla de Samos) hacia el 572 a.C. Abandonó Samos bajo la tiranía de
Polícrates, se trasladó a Italia y estableció en Crotona. Allí fundó una comunidad de
carácter filosófico-religiosa: hombres, mujeres y niños vivían en comunidad de bienes,
manteniendo una disciplina y ascesis rigurosa y guardando en secreto las doctrinas que
aprendían. Fue enormemente célebre e influyente. Pero la comunidad, con enorme poder
e influencia en la ciudad, despertó envidias y recelos, hasta que una revolución popular
les expulsó. Más tarde, volvió a ganar adeptos y consiguió hacerse muy fuerte entre las
ciudades de la Magna Grecia, hasta que otro movimiento popular la mermó. Cuesta mucho
averiguar qué doctrinas eran del fundador y cuáles de sus discípulos, porque todas se
las atribuían a él.
El pitagorismo tiene un contenido místico-religioso: sostiene la doctrina de la
transmigración de las almas (orfismo) y el parentesco entre todos los seres vivos.
Creían también en un eterno retorno de los mismos acontecimientos en ciclos cerrados.
Sus normas de abstinencia eran rígidas, así como sus rituales y costumbres morales.
Pero fueron sobre todo matemáticos, y recurrieron a sus conocimientos
matemáticos para elaborar sus teorías sobre la estructura del universo.
Muy aficionados a la música, los pitagóricos descubrieron que ésta puede
reducirse a proporciones numéricas; es decir, a números; en un segundo paso,
consideraron que todos los objetos del mundo también pueden reducirse a figuras
geométricas, y éstas, a expresiones numéricas. Entonces, si el objetivo es escrutar los
secretos del universo, del cosmos, (palabra que significa 'orden, organización, armonía,
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belleza), hay que estudiar las proporciones numéricas, porque la estructura del cosmos
es matemática (Esta idea influirá notablemente en el pensamiento de Platón y en el
desarrollo de la ciencia a partir del Renacimiento hasta el punto de poder afirmar que
de ella se nutre la ciencia actual).
Para esta escuela los números no son algo puramente aritmético, sino que los
interpretan espacialmente identificando los números con realidades geométricas:
 El Uno o unidad aritmética estaría representada por el punto
geométrico, elemento material al que se pueden reducir todo lo real:
las cosas se componen de agregaciones de unidades-puntos. En este
sentido hay que entender la afirmación pitagórica de que todo es
número.
 El dos es la línea (unión de dos puntos)
 El tres es la superficie (unión de tres puntos: triángulo)
 El cuatro es el volumen (unión de cuatro puntos)
2.3.HERÁCLITO DE ÉFESO (544-484)
El punto de partida de su filosofía es el testimonio de los sentidos que nos
muestra el incesante devenir de la naturaleza: "Todo fluye, nada permanece" (No
podrás bañarte dos veces en el mismo río). Pero el verdadero conocimiento sólo se
alcanza a través de la razón que nos permitirá desvelar la auténtica naturaleza o esencia
de las cosas, la ley que explica el cambio o devenir de las cosas.
De acuerdo con este planteamiento, la sustancia que sea el principio del universo
tiene que ser capaz de explicar este cambio continuo. Él la identifica con el fuego, que
es el menos corpóreo de todos los elementos. Parece ser que al hablar del fuego lo hace
metafóricamente y lo interpreta como una fuerza inteligente, activa y productora.
(Heráclito representa un esfuerzo por comprender racionalmente la realidad y aunque
sus planteamientos parecen conducirle a un pensamiento más formal o abstracto, se
encuentra aún prisionero de una mentalidad materialista)
De este fuego surgen todas las cosas, pero no deja de existir al generarlas, sino
que se oculta tras ellas. En este sentido se afirma que el cosmos es la pluralidad de la
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unidad mientras que el fuego es la unidad de la pluralidad. El fuego representa la
unidad dinámica de cuyo movimiento participan todos los seres de la naturaleza. Esta
concepción es la dialéctica.
La realidad está compuesta por elementos contrarios en lucha constante; pero
tras la dualidad y el enfrentamiento se esconde una ley, un orden, un logos, que es
justicia; si no hay lucha de opuestos (hombre, mujer; rico, pobre; joven, viejo...), hay
injusticia, porque un elemento se ha impuesto sobre el otro. Así entendida, la justicia
es enfrentamiento, polémica, guerra. Por ejemplo, en la relación entre dos personas
sólo habrá justicia cuando las dos se afirman, se imponen, quieren ser ellas mismas, y,
consecuentemente, la relación justa ha de ser tensa y polémica. A esta concepción se la
denomina Dialéctica.
La realidad está compuesta de opuestos, todo ser tiene su contrario. Estos
contrarios permanecen juntos en el fuego, forman una primitiva unidad dinámica donde
reina la tensión (como el arco o la lira): los opuestos luchan por existir separadamente,
por imponerse uno sobre otro. Cuando esta tensión crece la unidad se rompe y surge la
pluralidad, el cosmos, quedando el fuego oculto (la guerra es el señor de todas las
cosas).
Cuando las cosas dejan de existir se manifiesta de nuevo el fuego. Este ciclo se
realiza según un orden: “este mundo ha sido, es y será fuego eternamente vivo que se
enciende según medida y se apaga según medida”. En esta sentencia se recoge la idea de
Heráclito de que el devenir de la naturaleza no ocurre de forma caótica o azarosa, sino
que sigue una ley, una razón universal: el logos es la ley que rige todos los cambios: «Dios
es el día y la noche, invierno y verano, guerra y paz, saciedad y hambre, su Ser cambia
como el fuego».
La ley o logos que rige el ciclo cósmico puede ser conocida por el hombre porque,
en tanto ser racional, participa de ese logos.
2.4.PARMÉNIDES DE ELEA (540-470)
Parménides expuso su doctrina en un poema («Peri ontos» («sobre el ser»)
compuesto en hexámetros) donde dice que existen dos posibles vías de conocimiento: la
de la verdad y la de la opinión.
La vía de la verdad nos dice que el Ser es y no puede no ser, por el contrario,
el No-Ser no es y no puede ser. La vía de la opinión confunde el ser con el no-ser.
Esta concepción implica la negación de todo movimiento o cambio. Cualquier
cambio implica el paso del No-ser al Ser o viceversa: algo que comienza a ser o deja de
ser. Para Parménides esto es imposible.
Si algo comienza a ser tendría que surgir del Ser o del No-Ser. Del No-Ser no
puede surgir ninguna cosa, pues “la nada” no se puede producir o generar nada. Si
surgiera del Ser entonces éste tendría que ser “antes de empezar a ser”; luego el ser
existía antes y por consiguiente no empieza a ser sino que ya es. La consecuencia es
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evidente el movimiento, el devenir es imposible, es una ilusión de los sentidos que nos
hacen confundir el ser y el no ser.
Se trata de un claro ejercicio de lógica, pero no es demasiado convincente pues
maneja sólo dos conceptos extremos: el Ser y el No-Ser. Sin embargo, Parménides lleva
esta concepción hasta sus últimas consecuencias deduciendo los atributos del Ser:
 Es ingénito (como hemos visto) e imperecedero (por la misma razón:
si perece tendría que pasar del ser al No- ser (imposible) o al Ser,
por lo que seguiría siendo), por lo tanto es eterno en el tiempo, no
tiene duración es presente continuo.
 Es inmutable, no cambia cualquier cambio supondría un paso del ser
a otra cosa: al No-ser es imposible, luego tendría que pasar a Ser, y
seguiría siendo igual.
 Es homogéneo: no puede ser más ser en una parte que en otra. Esto
implica además que es lleno
 Es indivisible: si se pudiera dividir tendría que haber algo que lo
separara, esto es, el No-ser, y esto es imposible.
 Es material. A pesar de utilizar la razón como única vía de
conocimiento, Parménides es incapaz de concebir una realidad
abstracta, luego el ser tiene que ser material y por tanto, corpóreo.
Él lo identifica con la esfera, la figura perfecta en la que el
principio coincide con el fin.
Parece evidente que Parménides identifica este ser con la realidad: el mundo es
algo eterno y limitado donde no cabe la posibilidad del cambio. Para ello sería necesario
admitir la existencia del No ser. Pero, además, Parménides identifica ser y pensar: solo
se puede pensar el ser y sólo el ser es pensable; por lo tanto el no ser es inconcebible,
luego no puede existir.
PARMÉNIDES
HERÁCLITO
MONISMO ESTÁTICO:
el ser es único y
el movimiento no existe
MONISMO DINÁMICO:
el
verdadero
conocimiento
es
el
racional, los sentidos nos engañan
(aunque no llega a una abstracción
total). Los filósofos racionalistas
consideran
que
la
razón
es
autosuficiente
para
llegar
al
conocimiento
FILÓSOFO EMPÍRICO
FILÓSOFO
RACIONALISTA
el ser es único
y dinámico, con movimiento propio.
porque parte de
los datos sensibles y los acepta
como verdaderos, aunque va más
allá de ellos: intenta dar una
explicación
racional
de
ese
movimiento. Los empiristas admiten
la necesidad de la razón para llegar
al conocimiento, pero no es
suficiente por sí sola; necesita
tomar como punto de partida la
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información
sentidos.
recibida
por
los
Normalmente se presenta a ambos autores de forma contrapuesta pues son lo
máximos representantes de la polémica presocrática sobre el ser y el devenir. A
Partir de Parménides aceptar la argumentación racional implica admitir la existencia del
y la negación del devenir, del cambio; y por tanto renegar de nuestra experiencia. Al
contrario, admitir el testimonio de los sentidos permite aceptar el movimiento, pero
cierra las puestas a la racionalidad del ser.
Los filósofos posteriores a Parménides van a realizan un esfuerzo por conciliar
la existencia de un ser eterno, inmutable e inmóvil del que todo surge, con la
existencia del movimiento que nos muestran los sentidos.
2.5.EMPÉDOCLES DE AGRIGENTO (495-435)
Para conciliar el ser y el devenir acepta la existencia de un arjé o principio
múltiple de todas las cosas. Son los cuatro elementos: agua, aire, tierra y fuego. Son
puros, no se pueden convertir en materia de otra clase ni pueden dejar de ser lo que
son. Poseen las mismas cualidades que el ser de Parménides: eternos, inmutables,
inmóviles...
A partir de la mezcla de estos cuatro elementos se forman todos los demás
seres. Pero como carecen de movimiento propio es necesario recurrir a dos fuerzas
externas que lo ponen en movimiento: el amor y el odio. Ambas fuerzas son materiales,
están en el espacio y se mezclan con los elementos formando la realidad.
Ambas fuerzas construyen el mundo y lo destruyen alternativamente.
Mientras que el odio tiende a separar los elementos, el amor tiende a unirlos.
Empédocles explica así el ciclo cósmico: En el inicio existía una armonía completa entre
los cuatro elementos ya que impera la fuerza del amor manteniendo unidos a los cuatro
elementos. En un momento determinado la fuerza del odio, de la dispersión rompe esa
armonía. En el momento en que ambas fuerzas están equilibradas se produce la mezcla
de los elementos originándose el mundo. Pero la fuerza del odio llega a superar a la del
amor y se consigue mantener separados los cuatro elementos: el mundo desaparece.
Pero la fuerza del amor tenderá de nuevo a reunir los elementos originando la mezcla y
el universo (momento de equilibrio de ambas fuerzas). Cuando el amor domina se vuelve
a la esfera primitiva, al equilibrio para poco después iniciar un nuevo ciclo que se irá
repitiendo eternamente. Es la idea del “eterno retorno”.
2.6.ANAXÁGORAS DE CLAZOMENE (500-428)
Para este autor el ser es eterno, inmutable, estático... pero no es único sino que
son innumerables elementos a los que denomina homeomerías (término usado por
Aristóteles omoios = semejante; meros = parte) o semillas (spermata). Estas semillas
son infinitamente agregables y divisibles y cualitativamente diferentes: las hay de
todo tipo de materia.
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Las cosas se forman mediante la unión de homeomerías de todo tipo, pero
cada cosa es lo que es en función de las semillas que en ella predomine. La muerte
es la separación de estas partículas.
El mundo se origina a partir de un torbellino de partículas producido por una
fuerza externa que produce el movimiento: el Nous (inteligencia o pensamiento).
Esta fuerza está separada de las semillas, pero posee el máximo poder y el máximo
conocimiento para poder unir lo semejante con lo semejante, pero Anaxímenes la
considera, material, formada por la materia más pura que existe, diferente a todas las
semillas. (a veces se ha identificado con Dios, no como creador, sino como Arquitecto
del Mundo).
Todos los autores estudiados aceptan la existencia de una causa material: el arjé
(agua, fuego aire...) de donde todo surge. La novedad de estos dos últimos estriba en
postular una nueva causa para explicar el origen de la fisis: la causa eficiente, la que
produce el movimiento: amor-odio y Nous.
Además, Anaxágoras fue el primero en exponer la idea de una mente superior
(dios) como principio rector del universo. Aportó elementos para una concepción del
universo como resultado de una inteligencia que actúa conforme a fines, y por eso
el resultado de todos los procesos naturales es siempre la obtención de la máxima
perfección, belleza y armonía. A Platón y Aristóteles les entusiasmó mucho la idea de
una «Inteligencia universal», pero les decepcionó el que Anaxágoras limitara su
actividad a poner en marcha la Esfera, imprimiéndole un movimiento rotatorio, sin
hacerle intervenir después para nada, puesto que ya son fuerzas de carácter mecánico
las que explicarán todos los procesos físicos.
2.7.DEMÓCRITO DE ABDERA (460-370)
De familia rica, gastó todo su dinero en viajes. Su obra fundamental es «El gran
orden del Cosmos». Escribió de todo, aunque solamente se guardan algunos fragmentos.
También intenta explicar el movimiento salvando los principio o características
esenciales del ser Parménides: eternidad, inmutabilidad, materialidad, pero admite la
existencia del No-Ser, del vacío. Es el primer autor que acepta la existencia de una
realidad inmaterial. El vacío no es real si consideramos como real sólo lo material, pero
sí lo es en tanto que existe, está presente entre dos sustancias. Este principio será
fundamental para explicar la pluralidad y el movimiento que había negado Parménides:
sin él sólo existiría una masa compacta (al estilo de la propuesta de Anaxágoras) y no
sería posible el movimiento (el vacío es el lugar donde se desplazan las sustancias)
En definitiva la realidad está compuesta de dos elemento “el vacío”, el no ser y “lo
lleno o compacto”, que sería el ser. Este ser de donde todo proviene son infinitas
partículas indivisibles qué el llama átomos. Son sólidas, llenas, inmutables, no poseen
cualidades sensibles (estas se generan cuando se unen una serie de átomos diferentes),
difieren en figura, en orden y posición, poseen movimiento propio y espontáneo que
se prolonga por el choque entre ellos. Los átomos se mueven en el vacío y cuando se
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encuentran chocan. De los choques puede ocurrir que salgan disparados en direcciones
opuestas, o bien, por el contrario, que se enganchen unos con otros cuando sus figuras
coinciden. Por la acumulación de muchos átomos surgen los diferentes seres. La muerte
es la separación de los átomos.
Demócrito niega la existencia de fuerzas diferentes a la materia. Para Él la
materia tiene movimiento propio y todos los procesos naturales son fortuitos, están
regidos por el azar. No hay un orden racional, ni un ser inteligente, ni existe una
finalidad premeditada. Se inicia con él el mecanicismo.
Respecto al conocimiento, afirma que toda forma de conocer se reduce al
contacto. Los objetos emanan átomos que viajan por el vacío y, al chocar con los órganos
de nuestros sentidos, producen el conocimiento. Pero esto no significa que captemos las
cosas tal como realmente son, pues cada uno capta de manera peculiar las cualidades de
las cosas que nos transmiten los átomos. El pensamiento surge por una concentración de
átomos anímicos en alguna parte del cuerpo, dotados de movimiento espontáneo. El alma
es también un conjunto de átomos cuyas fuerzas mueven al cuerpo.
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