Download *** Propiedades generales de la Miel (miel multifloral)***

*** Propiedades generales de la Miel (miel multifloral)***
-Colabora en la limpieza y regulación del tracto digestivo.
-Aporta vitaminas, minerales y enzimas muy importantes.
-Ayuda a eliminar mucosidades y toxinas.
-Es antiséptica.
-Imprescindible para deportistas, convalecientes y personas sometidas a esfuerzos físicos o
mentales.
-Aumenta la resistencia a la fatiga física y mental.
-Disminuye el tiempo de recuperación después del esfuerzo.
-Tonifica el corazón y mejora la circulación.
Propiedades específicas (mieles monoflorales de...)
Aguacate: Diurética y adelgazante.
Azahar: Calmante, relajante y anti-espasmódica. Ayuda a dormir.
Bosque y Encina: Gran aporte de sales minerales y oligoelementos. Utilísimas en la anemia,
disentería, diarreras crónicas, toxemia intestinal. En uso externo: hemorroides y fístulas anales.
Brezo: Diurética y antiséptica de las vías urinarias. Importante en casos de cistitis e insuficiencia
renal.
Cantueso: Muy digestiva. Combate cólicos, flatos, digestiones pesadas.
Espliego: Afecciones bronquiales y pulmonares, tosferina, gripe, asma. También en caso de úlceras
gastroduodenales. Mejora el rendimiento intelectual y fortalece los nervios.
Eucalipto: Afecciones de las vías respiratorias altas, como rinitis, faringitis, bronquitis. Es diurética
y antiséptica urinaria. Indicadísima en caso de cólicos nefríticos.
Romero: Estimula el hígado, la vitalidad y la circulación. Mejora la circulación arterial en general
y cerebral en particular. Se usa también en casos de debilidad general, falta de mestruación, etc...
Tomillo: Estimula las defensas naturales del organismo. Necesaria en situaciones de infecciones
repetitivas, resfriados, gripes, inmuno-depresión...
Tome nota:
El más excelente e inofensivo laxante... Miel con agua, el "hidromel" de los romanos.
Disuelva 150 gramos de Miel Multifloral Apilore en un litro de agua.
Beba, repartidos a lo largo del dia, 4 vasos grandes, o más si lo necesita. ¡Delicioso!
Importante:
Las mieles puras tienden, con el tiempo, a cristalizar.
Si se desea recuperar su estado fluido basta calentarlas ligeramente al baño maría.