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Adaptación a los impactos del cambio climático
en los humedales costeros del G olfo de México
Volumen II
Adaptación a los impactos del cambio
climático en los humedales costeros
del
Golfo de México
Volumen II
Jacinto Buenfil Friedman
(editor)
Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales
Instituto Nacional de Ecología
Primera edición: junio de 2009
D.R. ©Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales
Blvd. Adolfo Ruiz Cortines 4209. Col. Jardines de la Montaña
C.P. 14210. Delegación Tlalpan, México, D.F.
www.semarnat.gob.mx
Instituto Nacional de Ecología (INE-SEMARNAT)
Periférico sur 5000, Col. Insurgentes Cuicuilco
C.P. 04530, México D.F.
www.ine.gob.mx
Correción de estilo y cuidado de la edición:
Helena Rivas López
Revisión de contenido:
Margarita Caso
Miguel Ángel Altamirano
Nora Esquivel
Diseño de portada:
Álvaro Figueroa
Fotografía de la portada:
Claudio Contreras Koob
Diseño y diagramación de interiores:
O&A, Diseño y Comunicación Gráfica
ISBN 978-968-817-929-1
Impreso y hecho en México
Contenido
Volumen II
Nota sobre la organizazión de este libro y los componentes del proyecto
385
5. Descripción detallada de los sitios piloto
5.1 Sitio piloto Río San Fernando-Laguna La Nacha
5.2 Sitio piloto Río Pánuco-Altamira
5.3 Sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado
5.4 Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado
5.5 Sitio piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona
5.6 Sitio piloto Los Petenes
5.7 Sitio piloto Sistema Lagunar Nichupté (Cancún)
5.8 Sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen)
389
391
414
435
457
480
503
522
546
6. Escenarios de cambio climático y tendencias en la zona del Golfo de México
6.1 Escenarios de cambio climático para México
6.2 Escenarios de cambio climático para el Golfo de México
6.3 Escenarios socioeconómicos
6.4 Tendencias en el uso del agua
6.5 Tendencias en el uso de suelo
6.6 Escenarios de cambios locales 569
7. Medidas de adaptación por sitio piloto
7.1 Medidas generales de adaptación para la zona costera del Golfo de México
7.2 Marco organizativo y monitoreo de las medidas de adaptación
7.3 Introducción a las medidas específicas de adaptación por sitio piloto
7.4 Medidas específicas de adaptación: sitios San Fernando y Pánuco
7.5 Medidas específicas de adaptación: sitios Papaloapan y Coatzacoalcos
7.6 Medidas específicas de adaptación: sitios Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes
7.7 Medidas específicas de adaptación: sitios Nichupté y Boca Paila
675
677
571
589
599
624
642
656
696
705
715
730
747
763
8. Conclusiones
8.1 Vulnerabilidad y adaptación al cambio climático
8.2 Caracterización de la zona costera del Golfo de México
8.3 Escenarios de cambio climático, socioeconómicos y de uso de recursos
8.4 Humedales, sitios piloto y medidas de adaptación
8.5 Recomendaciones
777
779
785
795
Siglas y abreviaturas
837
Bibliografía
841
804
831
Nota sobre la organización de este libro
y los componentes del proyecto
La presente publicación no está organizada de la manera tradicional, en que cada
autor escribe una parte del libro de acuerdo con su especialidad, y después esas secciones se integran de forma casi independiente para obtener el producto final. De
haberlo hecho de esa forma se habría obtenido una serie de capítulos diferenciados
por disciplina y los aspectos normativos, socieconómicos, biofísicos, de uso de suelo,
de uso de agua, modelos de cambio climático y propuestas de adaptación a sus efectos se hubieran abordado por separado.
Los humedales de la zona costera del Golfo de México son ecosistemas complejos, de transición entre los sistemas terrestres y marinos. Debido a ello tienen una
gran riqueza en biodiversidad y recursos, que sostienen múltiples actividades económicas y buena parte de la población del país. La interacción de los procesos que ahí
ocurren crea sinergias y obliga a abordar las fuerzas determinantes de la salud de los
humedales de manera conjunta e interdisciplinaria. Bajo este enfoque se puede obtener una visión más real del estado actual de conservación o deterioro de los humedales, así como de los posibles impactos esperados en el futuro por el cambio climático
global. También obedece a la necesidad del trabajo conjunto y participativo para hacer
frente a los efectos negativos del cambio climático y aprovechar los benéficos.
Fue así como surgió la presente propuesta de centrarse en los ocho humedales
costeros del Golfo de México seleccionados como sitios piloto, e integrar los estudios
realizados tanto para cada sitio como para la zona costera a lo largo de la publicación.
La principal ventaja consiste en tener una visión amplia de lo que está sucediendo
actualmente en dichos ecosistemas, de los posibles escenarios futuros de cambio climático y de las acciones necesarias para lograr una adaptación adecuada. La principal
385
desventaja es que las contribuciones particulares de cada autor quedan inmersas en el
texto y es más difícil dar todos los créditos correspondientes a cada investigación.
En la medida de lo posible se intentó diferenciar las distintas aportaciones y hacer
referencia a los autores correspondientes. Como cada estudio involucra generalmente a varias personas, al inicio de cada sección, por simplicidad, sólo se menciona al
investigador principal, seguido de et al. (y otros). Sin embargo, cabe destacar la participación de quienes contribuyeron a la realización de este trabajo y darles el debido
crédito. A continuación se presentan los distintos componentes del proyecto Adaptación a los impactos del cambio climático en los humedales costeros del Golfo de
México, los autores principales, y las personas que colaboraron en su desarrollo.
• Coordinación de los estudios y actividades del proyecto, y redacción de la
propuesta para la segunda fase del proyecto.
Mauricio Cervantes Ábrego.
•
Análisis de impactos antropogénicos (uso de suelo).
Leticia Gómez Mendoza, Daniel Ocaña Nava y Carolina Neri Vidaurri.
Los autores agradecen la colaboración de Enrique Muñoz López
y Nora Esquivel.
• Análisis institucional.
Norma Munguía Aldaraca.
La autora agradece la colaboración de Nora Rebeca Munguía Aldaraca y José
María Estrada Stevenel.
 • Análisis de medidas de adaptación.
  Cuauhtémoc León Diez, Carolina Neri Vidaurri, Andrée Lilian Guigue y Marina
Robles García.
• Marco lógico de las medidas de adaptación y planeación del taller participativo en
Veracruz.
Francisco Manuel Noriega Echeverría.
386
• Diagnóstico biofísico, ecológico y Sistema de Soporte para la Toma de Decisiones
(SSTD).
Javier Bello Pineda, Leonardo Ortiz Lozano, Eduardo Ramírez Chávez, Reyna
Aquino Juárez, Selene Castillo Domínguez.
• Análisis socioeconómico.
Boris Graizbord, Emelina Nava García, Anabel Martínez Guzmán, Jaime Ramírez
Muñoz, Raúl Lemus Pérez.
• Modelaje de cambio climático.
Víctor Magaña Rueda, Baldemar Méndez Antonio, Ernesto Caetano dos Santos,
Juan Matías Méndez Pérez, Edgar Pérez Pérez.
• Análisis de impactos antropogénicos (uso del agua).
Pedro Hipólito Rodríguez Herrero, Rafael Palma Grayeb, Víctor Manuel Mondragón, Gilberto Chazaro García, Uriel Bando.
387
Capítulo 5
Descripción detallada de
los sitios piloto
Javier Bello Pineda
(Leonardo Ortiz Lozano, Eduardo Ramírez Chávez,
Reyna Aquino Juárez, Selene Castillo Domínguez)
Descripción física y relevancia ecológica
Leticia Gómez Mendoza
(Daniel Ocaña Nava, Carolina Neri Vidaurri)
Uso de suelo, proyecciones, vulnerabilidad y presiones
Víctor Magaña Rueda
(Baldemar Méndez Antonio, Ernesto Caetano dos Santos,
Juan Matías Méndez Pérez, Edgar Pérez Pérez)
Proyecciones de cambio climático y vulnerabilidad
Boris Graizbord
(Emelina Nava García, Anabel Martínez Guzmán, Jaime Ramírez Muñoz,
Raúl Lemus Pérez)
Proyección socioeconómica, índices de sensibilidad y de
capacidad de adaptación, presiones
Pedro Hipólito Rodríguez Herrero
(Rafael Palma Grayeb, Víctor Manuel Mondragón, Gilberto Chazaro
García, Uriel Bando)
Descripción hidrológica, uso del agua, vulnerabilidad, presiones
Mauricio Cervantes Ábrego
Relevancia ecológica
5.1 Sitio piloto Río San Fernando-
Laguna La Nacha
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.1.1 Descripción física e hidrológica
El humedal de la desembocadura del río San Fernando se encuentra en el noreste del
estado de Tamaulipas, en la costa norte del Golfo de México y pertenece a la Región
Hidrológica 25 de la CONAGUA: San Fernando-Soto La Marina. El río San Fernando
es el tributario más importante de la Laguna Madre1. Nace en el Cerro del Potosí a 3
700 msnmm, en las cercanías de Galeana, Nuevo León, con el nombre de río Pablillo
y con curso inicial hacia el noroeste. Siguiendo esa dirección pasa por Linares y recibe
numerosos afluentes, entre ellos los ríos Camarones y Potosí. Al llegar a Vaquería
toma la dirección oriente y recibe aportaciones de los arroyos San José, Burgos y San
Lorenzo hasta llegar a Villa Méndez, donde su curso cambia hacia el sureste. Recibe a
los arroyos Salado y Pamorán, y continúa en esa dirección hasta recibir al arroyo Chorreras, a unos 15 km adelante de San Fernando. Después toma la dirección noreste
hasta desembocar en la albufera Laguna Madre. La subregión del río San Fernando
ocupa el 11% de la Región Administrativa IX de la CONAGUA, Golfo Norte, con una
superficie de cuenca aproximada2 de 17 905 km2. En la figura 1 se puede apreciar
una imagen de satélite de la desembocadura del río San Fernando en el Golfo de
México, con la delimitación del sitio piloto.
1 Hernández y Ortiz, 1995; Tamayo, 1981.
2 CONAGUA, 2003.
391
Figura 1. Imagen de satélite del sistema estuarino San Fernando-La Nacha
con la delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
La cuenca se encuentra en la región media y sureste del estado y tiene como
principal tributario al río San Fernando y, en menor grado, a los ríos Pilón, Purificación, Corona, San Felipe, San Marcos, Soto La Marina, Tigre, Barberena, Carrizal,
Pedregoso y algunos riachuelos provenientes de la Sierra de Martínez3. La trayectoria
del río ha cambiado debido a los fenómenos de subsidencia que ocurren en la zona,
3 INEGI, 1981; Martínez y Novelo, 1993.
392
D escripción
detallada de los sitios piloto
producto del hundimiento acelerado del delta del Río Bravo. Su antiguo cauce fluvial
se dirigía hacia la laguna El Catán, en la parte meridional de la Laguna Madre, pero
debido al hundimiento del delta se estableció un nuevo nivel base, formando un codo
de captura4, que es la laguna La Nacha. Otro efecto de la subsidencia es la inundación
de tierras adentro y zonas de dunas, lo que ha ocasionado la salinización de suelos y
agua, y un cambio en la composición de las comunidades vegetales de la zona costera5. El río San Fernando cuenta con una estación hidrométrica cerca de la ciudad
del mismo nombre (número 12, 24° 50' 18'' N, 98° 9' 34'' O, a 45 msnmm). Se
reporta un gasto medio anual6 de 15.7 m3/s y un gasto máximo7 de 174.54 m3/s.
La figura 2 presenta el gasto anual histórico de este río.
La laguna La Nacha es una laguna natural que forma parte de la zona costera de la
Laguna Madre, a la cual abastece directamente por medio de un canal8. Se comporta
en gran medida como un estuario superior o fluvial9, caracterizado principalmente
por agua dulce, pero bajo la influencia de las mareas de la Laguna Madre10. La laguna
se mantiene a nivel debido a la construcción de un bordo de tierra en su zona norte
por parte de los propietarios colindantes, que la utilizan para riego agrícola11. Las
condiciones fisicoquímicas de lagunas y esteros son muy variables, pero se presentan
dos grandes épocas de cambios bruscos en sus condiciones: en la época de secas, la
salinidad aumenta, pues los estuarios cierran su comunicación con el mar; en la época
de lluvias, el aporte continental de agua abre las barras y renueva dicha comunicación.
En estas dos épocas, los valores fisicoquímicos toman sus rangos más elevados o
críticos12. Estos valores también dependen de la profundidad del cuerpo de agua. En
4 Codo de captura: punto en que el caudal de un río se transfiere a otro cuerpo de agua debido, principalmente, a la
erosión e incisión fluvial.
5 Hernández y Ortiz, 1995.
6 CONAGUA, 2003.
7 UAT, 1994.
8 Ross y Oviedo, 1989; Zetka, 1982.
9 Un estuario es un cuerpo de agua costero semi-cerrado que tiene una conexión libre con el mar abierto y dentro
del cual el agua marina está diluida con agua dulce proveniente del drenaje terrestre. Un estuario fluvial se refiere
a la porción con mayor cantidad de agua dulce.
10 Yáñez-Arancibia, 1987.
11 Gerdes, 1996.
12 Carrera, 2004.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
393
la figura 3 se presenta la batimetría13 de la laguna La Nacha, mientras que la figura 4
es un esquema del sitio piloto.
Figura 2. Gasto medio anual en la estación hidrométrica San Fernando sobre el río San
Fernando. Región Hidrológica 25 y Región Administrativa IX de la CONAGUA.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
13 Estudio de las profundidades de cuerpos de agua mediante el trazado de mapas de isobatas (curvas cartográficas
de puntos con igual profundidad).
394
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 3. Batimetría de la laguna La Nacha.
Fuente: Brenner, 1997.
La zona del sistema estuarino San Fernando-La Nacha se localiza en la región
climática del noreste de México. Dicha región se caracteriza por presentar frentes
fríos (denominados “nortes”) en invierno, vientos alisios y ciclones en el verano, y
zonas de altas presiones subtropicales de régimen pluvial intermedio. En esta área
se encuentran dos tipos de clima: semicálido al norte, con temperatura media anual
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
395
Figura 4. Esquema del sitio piloto San Fernando-La Nacha.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para el presente estudio.
entre los 12 y 18 °C, y cálido al sur, con temperatura media anual entre los 18 y 22
°C. Ambos climas se clasifican como semiáridos por su bajo grado de humedad. La
precipitación media anual varía entre los 500 y 550 mm, con temporada de lluvias
de mayo a octubre14.
14 Carrera, 2004.
396
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.1.2 Relevancia ecológica
El humedal conformado por el río San Fernando y la laguna La Nacha pertenece al
Área Natural Protegida Laguna Madre y Delta del Río Bravo, bajo la categoría de
Área de Protección de Flora y Fauna, cuyo decreto se firmó el 14 de abril de 2005.
Según la CONABIO es una región prioritaria terrestre y marina, y cuenta con el reconocimiento como Área de Importancia para la Conservación de las Aves (AICAS).
Este ecosistema también es considerado como hábitat de aves acuáticas y sitio de
importancia internacional bajo la convención Ramsar. Además, es uno de los humedales prioritarios para las aves acuáticas migratorias en México (Ducks Unlimited de
México, A.C. o DUMAC) y forma parte del Plan Norteamericano de Conservación
de Humedales (NAWCP, por sus siglas en inglés). Actualmente, está en proceso de
ser denominado como sitio de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras
(Western Hemispheric Shorebird Reserve Network o WHSRN).
La región de la Laguna Madre representa un corredor biológico y una zona de
transición. Es decir, un lugar que permite el desplazamiento de especies silvestres y
que se encuentra en los límites de dos ecosistemas. Esta zona es topográficamente
uniforme. Sin embargo, su amplia extensión latitudinal hace posible la presencia de un
gradiente climático con variaciones tanto en precipitación como en temperatura. La
conjunción de estos factores da como resultado la presencia de una cubierta vegetal
compleja y diversa15.
Los ecosistemas de la Laguna Madre son altamente productivos, por lo que favorecen la anidación de numerosas especies y cubren una gran variedad de asociaciones. En la laguna existe un gradiente de salinidad muy amplio: desde agua dulce hasta
agua hipersalina, dado que en algunas áreas la salinidad puede llegar a ser superior a
la del mar.
Las principales comunidades vegetales localizadas en el sitio que se encuentran
en buen estado de conservación son la vegetación acuática de agua dulce, la vege-
15 Ídem 14.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
397
tación halófila16, la vegetación de dunas costeras y los manglares. La vegetación
acuática está compuesta por tular y carrizal (Scirpus californicus, S. odoratus, Typha
domingensis y Arundo donax); vegetación flotante (Eichornia crassipes, Pistia stratiotes, Salvinia auriculata, Nymphoides sp. y Ludwigia sp.); bosque de galería o vegetación riparia (Salix humboldtiana, Taxodium mucronatum, Astianthus viminalis,
Pachira aquatica, Pterocarpus sp., Andira galeottiana y Lonchocarpus sp.); matorral
espinoso inundable (Mimosa pigra), y dunas costeras (Uniola paniculata y Croton
punctulatus)17. La vegetación halófila se compone principalmente de Croton fruticulosus, Bacharis sp., Castela texana y Jatropha dioica.
Esta región se caracteriza por la presencia de comunidades de pastizal halófilo y
vegetación halófila, con dunas móviles y especies costeras. También se encuentran
pastizales cultivados e inducidos, mezquital (Prosopis glandulosa), ébano (Pithecellobium Flexicoule), guayacán (Porlieria angustifolia), huizache (Acacia farnesiana) y
salvia (Croton torreyanus), entre otros.
En la laguna hay una gran variedad de fauna silvestre. En ella anidan los patos pijijes, así como el pato real mexicano y otras aves como garzas, pelícanos y cormoranes.
También proporciona un hábitat propicio para la reproducción de peces y crustáceos,
mamíferos y reptiles18. Es, además, un área conocida de distribución de vertebrados,
como lagarto, nutria y roedores. Se tienen registradas 36 especies de fauna, de las
cuales 25 están reguladas por la NOM-059-ECOL-2001. El cuadro 1 presenta algunas de ellas. También se tienen reconocidas 23 especies exóticas introducidas, las
cuales compiten por los recursos de la región.
16 Vegetación que vive en condiciones salinas.
17 Contreras, 1993; SEPESCA, 1988.
18 Brenner, 1997.
398
D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 1. Especies de fauna de la región protegidas bajo la norma NOM-059-ECOL-2001.
Peligro de extinción
Amenazada
Protegida
Campostoma ornatum *
Carpiodes panarcys *
Codoma panarcys *
Codoma macrolepis *
Codoma pachycephalus *
Etheostoma australe *
Gambusia alvarezi * San Gregorio
Carpiodes carpio *
Catostomus plebeius *
Cyprinella lutrensis
Cyprinella eximius *
Etheostoma pottsi *
Gambusia senilis *
Notropis amabilis *
Notropis braytoni *
Notropis chihuahua *
Notropis jemezanus *
Macrhybopsis aestivalis *
Catostomus bernardini *
Codoma elongatus
Gambusia hurtadoi * Dolores
Ictalurus lupus
* Especie endémica
Fuente: NOM-059-ECOL-2001.
La zona de la laguna se caracteriza por tener una alta proporción de endemismos,
en donde se estima que el 50% de las especies tienen una distribución restringida.
De las 36 especies registradas, 23 son endémicas. Debido a esto, se le ha reconocido como Endemic Area of the World o Área Endémica del Mundo. Sus grupos
taxonómicos presentan una profunda diferenciación fitogenética19, tanto en el nivel
de familias como de especialización en sus formas de vida20. Dentro de los géneros
endémicos al sitio se han identificado los siguientes: Clappia, Nephropetalum, Pterocaulum y Runyonia21.
19 Diferentes expresiones del material genético de las plantas.
20 Rzedowski, 1991.
21 Rzedowski, 1978.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
399
5.1.3 Descripción socioeconómica
El área de influencia del sitio piloto San Fernando-La Nacha abarca siete municipios:
Matamoros, San Fernando, Méndez, Valle Hermoso, Burgos, San Nicolás y Cruillas.
La población total de la zona en el censo del año 2000 fue de 548 034 habitantes,
siendo los municipios de Matamoros, San Fernando y Méndez los de mayor concentración poblacional22. En cuanto a servicios de salud, poco más del 50% de la
población cuenta con acceso a este derecho básico, por lo que este sitio se ubica
como uno de los de mayor cobertura en la zona del Golfo de México. Sin embargo,
el alto porcentaje de los habitantes sin atención se vuelve un tema de importancia
fundamental.
Dentro de las actividades económicas que se desarrollan en la zona destacan
la agricultura (sorgo, maíz, henequén, cártamo, cítricos y soya, principalmente), la
ganadería (ganado bovino y caprino), la pesca (acuicultura), el comercio y la industria
(empacadoras y maquiladoras). También se registran recursos mineros (zinc, dolomita, cobre y plata).
La principal actividad es la agricultura tanto de riego como de temporal. De acuerdo con datos censales23, el uso de insumos agrícolas ha crecido en un promedio anual
de 6.2% entre 1999 y 2004. El sorgo y el maíz son los cultivos de mayor producción, aunque en años recientes la introducción de sábila se ha vuelto relevante. Las
actividades agrícolas se desarrollan principalmente en la región norte de la laguna.
22 Con datos de INEGI, 2000a.
23 Con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2005.
400
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.1.4 Uso de suelo y presiones por actividades
económicas
La agricultura de riego ha crecido a una tasa del 6% anual desde 1976 y la de temporal al 2% (cuadro 2). La agricultura de riego, en primer lugar, y la agricultura de
temporal, en segundo, son los principales controladores del cambio de uso de suelo
de la zona. Los cambios más notables se localizan en las márgenes de los ríos principales, donde la vegetación hidrófila24 ha sido reemplazada por agricultura de riego y
temporal (figura 5). También se han visto ocupadas por la agricultura regiones enteras
de mezquital y matorral xerófilo, a una tasa del 5% anual25.
En la figura 5 se puede apreciar que las áreas con mayores cambios negativos
se encuentran en la zona norte de la región debido a la expansión de la frontera
agrícola sobre terrenos desérticos y de matorral. El 34% del mezquital y 14% del
matorral han pasado a terrenos agrícolas de temporal, así como 14% de la superficie
de agricultura de riego reportada en 1976 y casi el 30% de los pastizales. Sin embargo, el 20% de la superficie agrícola actual ha sido clasificada como “no apta” por
razones de salinidad, pedregosidad, erodabilidad e inundabilidad, entre otros factores
antagónicos. Estas condiciones restan productividad a los cultivos.
Aparte del impacto de la agricultura en el suelo desértico de Tamaulipas, el uso
de pesticidas y plaguicidas en los cultivos tiene efectos negativos considerables en
los cuerpos de agua, los humedales, y las poblaciones de flora y fauna. Puesto que
la Laguna Madre se encuentra en la parte baja de la cuenca, recibe los escurrimientos provenientes de más de un millón de hectáreas distribuidas en los cinco distritos
agrícolas de la zona. Entre los agroquímicos usados por los productores destacan el
malathion y parathion, ambos prohibidos en las normas mexicanas26. Las descargas
de estos plaguicidas, empleados tanto en agricultura de riego como de temporal, son
extremadamente nocivas para las especies silvestres debido a su alta toxicidad.
24 Vegetación característica de los humedales; comprende, entre otros tipos, manglares, popales, tulares y vegetación de galería inundable.
25 Gómez et al., 2007.
26 Graizbord et al., 2007, con datos de la Encuesta Nacional a Hogares Rurales de México (2002) del Programa de
Estudios del Cambio Económico y la Sustentabilidad del Agro Mexicano.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
401
La segunda actividad en importancia es la ganadería, que se desarrolla principalmente en la zona sur. De acuerdo con datos del INEGI, el 34.2% de la superficie
total de la región se encuentra bajo uso de pastizales27. En la figura 5 se puede
apreciar el crecimiento de pastizales inducidos y cultivados. Si se considera, además,
que el sorgo cultivado en la zona norte se utiliza como alimento para ganado, se
concluye que estos dos procesos económicos (agricultura y pastoreo intensivos) son
los controladores del cambio de uso del suelo en el sitio (cuadro 2). La consecuencia
de dichas actividades es una fragmentación del hábitat28, lo que ha llevado a un
decremento en las poblaciones de aves migratorias. Actualmente se reportan 134
especies, principalmente en la laguna La Nacha29.
Cuadro 2. Cambio de uso de suelo. Sitio piloto Río San Fernando-Laguna
La Nacha, Tamaulipas.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de riego y humedad
Superficie en
1976 (ha)
Superficie en
2000 (ha)
Tasa de
transformación
575
2 680
0.06
4 328
7 546
0.02
420
180
-0.03
Cuerpo de agua
7 081
9 960
0.01
Matorral xerófilo
8 134
4 751
-0.02
Mezquital
3 348
994
-0.05
Otros tipos de vegetación
9 837
7 853
-0.01
908
669
0.01
34 632
34 632
 
Agricultura de temporal
Área sin vegetación aparente
Pastizales inducidos y cultivados
Total
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para el presente estudio.
27 Rodríguez et al., 2007, con datos de INEGI, 1991.
28 Saunders et al., 1991.
29 Rappole et al., 1993.
402
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 5. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000.
Río San Fernando-Laguna La Nacha, Tamaulipas.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para el presente estudio.
Otra de las actividades económicas de relevancia es la pesca. Dentro de las especies más capturadas se encuentran las siguientes: carpa, matalote, bagre, catán,
lobina, lisa y rana. En esta actividad existe sobreexplotación de los recursos, por lo
que, entre 1999 y 2004, 19 unidades económicas salieron del sector pesquero cada
año. Dicho de otro modo, si bien la producción creció en 9%, el número de pescadores se redujo en 4.2% promedio anual en ese periodo. De igual forma, la inversión en
el sector para esta región disminuyó en promedio 2.5% cada año30.
30 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2005.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
403
Los pronósticos que se puedan hacer para el sector pesquero en San Fernando
son fatalistas. Se trata de pesquerías sobreexplotadas, con baja productividad y escasa capacidad de inversión en nuevas artes de pesca. La sobreexplotación se ha dado,
entre otras cosas, por el otorgamiento de permisos de pesca en áreas en donde las
especies capturadas no cumplen con las tallas establecidas y el uso de artes de pesca
prohibidas. De continuar las tendencias actuales del crecimiento en la producción
pesquera sin un ordenamiento adecuado, las especies explotadas en la zona pueden
desaparecer para 202031.
Recientemente la acuicultura ha cobrado importancia, pues toda la zona estuarina
se utiliza como área para crianza de crustáceos y moluscos. Aunque la acuicultura
reduce la presión sobre los recursos pesqueros silvestres, esta actividad aumenta la
demanda de recursos hídricos.
5.1.5 Uso del agua
Los datos del uso del agua se manejan en el ámbito de subregión de planeación.
Este sitio piloto pertenece a la subregión del río San Fernando, dentro de la región
administrativa Golfo Norte de la CONAGUA. En los climas semiáridos, las sequías son
comunes, lo cual produce una escasez relativa de agua en un lapso prolongado. La
consecuencia es una reducción en la disponibilidad del agua para los diversos usos:
agricultura y ganadería, urbano y municipal, así como industria y servicios. Además, se
vuelve más complicado el mantenimiento de los niveles óptimos de agua para la conservación de los procesos naturales tanto en cauces como en cuerpos superficiales.
En el otro extremo, las inundaciones son frecuentes debido a la presencia de avenidas producidas por precipitaciones extraordinarias en la época de lluvias. En efecto,
el 70% de la precipitación se concentra en el periodo de junio a octubre. Las inundaciones representan un riesgo para la seguridad de las poblaciones, especialmente las
que se localizan cerca de los cauces de ríos. La magnitud del riesgo se hace evidente
si se observan los gastos medio y máximo aproximados del río San Fernando: 16 y
175 m3/s, respectivamente. La infraestructura, los cultivos y el medio natural se ven
afectados y el riesgo aumenta con la ocurrencia de ciclones en el Golfo de México.
31 Graizbord et al., 2007.
404
D escripción
detallada de los sitios piloto
En cuanto al agua utilizada en los distintos sectores, se tiene que el total consumido en la subregión del río San Fernando asciende a 33 hm3 anuales. De la cantidad
de agua extraída, 21 hm3 corresponden a agua superficial y 12 hm3 a aguas subterráneas32. Esto indica que más de un tercio del agua consumida se extrae de fuentes
que pueden considerarse no renovables debido a las bajas precipitaciones y altas tasas
de evaporación en la región. Estas prácticas no pueden sostenerse a largo plazo. Sin
embargo, no se cuenta con infraestructura para la captación, derivación y mayor
aprovechamiento de las aguas superficiales y, por lo tanto, el establecimiento de dicha
infraestructura es esencial para garantizar un uso racional de los recursos hídricos. De
los 33 hm3 extraídos, 25.4 hm3 (77%) son consumidos por los sectores agrícola y
pecuario, 7.5 hm3 (22.7%) se utilizan para abastecer al sector público-urbano y sólo
0.1 hm3 (0.3%) se designan para el consumo industrial33.
Los datos aquí mencionados ponen de manifiesto la urgencia de volver más eficientes los sistemas de riego agrícola y de producción pecuaria, pues es el sector de
mayor consumo. Los métodos de riego empleados en la mayor parte de los distritos
y unidades de riego son tradicionales, y la eficiencia promedio en el uso del agua
se estima en un 45%. Dada la magnitud de los volúmenes ocupados en el riego,
aumentos modestos en la eficiencia de los sistemas de conducción, distribución y
aplicación del agua, podrían liberar volúmenes significativos para otros usos. También
cabe mencionar que tanto el agua superficial como subterránea de la región cuenta
con cierto grado de salinidad, por lo que el riego intensivo incrementa el proceso de
salinización de suelos, hecho que, en el largo plazo, disminuye su productividad.
Uno de los factores que afectan el desarrollo más sustentable del riego agrícola
es la escasa capacidad de capitalización de los usuarios, lo que se traduce en una
infraestructura deteriorada por falta de mantenimiento y conservación. La falta de
organización, reglamentación y supervisión al interior de las Unidades de Riego para
el Desarrollo Rural emana de la nula asistencia técnica y escasa presencia institucional
en la zona. Por otro lado, es difícil controlar el volumen de agua entregada, pues no se
cuenta con equipo de medición de los volúmenes extraídos de acuíferos o corrientes.
32 CONAGUA, 2000.
33 Ídem 31.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
405
Sin embargo, el factor de mayor repercusión en la ineficiencia del riego agrícola es
probablemente la aplicación de tarifas insuficientes y, en algunos casos, exención de
pago por el agua empleada en el riego.
La demanda de agua para el abastecimiento público-urbano ha aumentado debido al incremento de población y a la mejora en los servicios. Se estima que en 1990
la población crecía a una tasa de 3.09%. Entre 1990 y 2000, el número de viviendas
que no contaban con agua entubada disminuyó en 6.49%, mientras que aquellas sin
servicio de drenaje se redujeron en 1.18%34. Se estima que en la subregión del río
San Fernando, las coberturas de agua potable y alcantarillado se encuentran en 86 y
25%, respectivamente. Sin embargo, si se observan por separado dichos valores en
las áreas rurales y urbanas, se obtiene un panorama más real de la situación. En cuanto al agua potable, la cobertura es relativamente buena, ya que en las zonas urbanas
se ha logrado abastecer al 95% de la población, mientras que en las zonas rurales sólo
el 75% cuenta con dicho servicio. El caso del alcantarillado es más preocupante, pues
sólo un poco más del 38% de la población urbana cuenta con el servicio y cerca del
87% de la población en las áreas rurales no lo tiene35.
El tema del servicio de alcantarillado cobra relevancia cuando se observa la calidad
de agua en los cauces y cuerpos de agua superficial. Es importante notar que el simple
hecho de conducir los desechos orgánicos por medio de drenaje no implica necesariamente que exista algún tipo de tratamiento antes de ser vertidos en lagunas, ríos o el
mar. En la Región Golfo Norte, del total de carga orgánica contaminante (medida como
DBO36) sólo se trata el 9.0%. No es sorprendente, por lo tanto, que se observe una
concentración media de DBO y DQO37 en las partes bajas de la laguna La Nacha por
contaminación de aguas residuales y agroquímicos, así como la presencia de desechos
sólidos. La contaminación por nutrientes genera el proceso llamado eutrofización, en
el cual proliferan algas y maleza acuática, reduciendo la cantidad disponible de oxígeno
34 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
35 Gerencia de Planeación Hidráulica con información de INEGI, 2000a.
36 Demanda bioquímica de oxígeno: indicador del grado de contaminación por materia orgánica del agua que
muestra la cantidad de oxígeno necesaria para degradar con procesos biológicos dicha materia en cierto lapso
(normalmente cinco días).
37 Demanda química de oxígeno: indicador que mide indirectamente la cantidad de contaminantes orgánicos en el
agua.
406
D escripción
detallada de los sitios piloto
disuelto en el agua. En el caso específico de este sitio, se ha notado la alteración de los
cuerpos acuáticos por la presencia de Hydrilla verticillata.
Cuadro 3. Resumen de usos del agua por subregión de planeación
en la Región Golfo Norte (hm3).
Subregión
Agrícola y pecuario
San Fernando
Soto La Marina
Pánuco
Total
25.4
Público-urbano
7.5
Industria
0.1
Suma
33
941.6
71.5
0.9
1 014
3 546.0
433.0
344.0
4 323
4 513
512
345
5 370
Fuente: CONAGUA, 2000.
5.1.6 Vulnerabilidad
De acuerdo con los datos censales del año 2000, la tasa de crecimiento de la población
es alta, de 2.64%, y se estima que los 548 034 habitantes censados se incrementen
a 740 115 en el 2030. Como es de esperarse, tal aumento significa una mayor
demanda de servicios, recursos hídricos, infraestructura de salud y superficie para
la producción de alimentos. Es de singular relevancia el crecimiento de la población
dependiente (menor a 14 años y mayor a 65 años), con una tasa de 2.01%38, lo cual
aumenta la población expuesta a enfermedades causadas por vectores y vulnerable a
temperaturas ambientales muy elevadas.
Las principales amenazas del cambio climático a las que se enfrentará esta región
serán la sequía y los eventos extremos de calor, debido al inevitable incremento de la
temperatura. Al realizar reducciones de escala de los modelos globales del clima, se
obtienen los siguientes resultados para el sitio hacia finales del presente siglo:
• La temperatura se incrementará entre tres y cuatro grados centígrados y el periodo de cambio significativo iniciará a partir de 205039.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre abril y septiembre, resultando el periodo de mayor cambio en verano.
38 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
39 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
407
• Las ondas de calor se triplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales. Los periodos secos
serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• La precipitación tendrá una disminución de entre el 5 y 10%, sin tomar en cuenta
los eventos extremos como “nortes” y huracanes; éstos serán más intensos40.
En lo que respecta al uso del agua, la zona es vulnerable al cambio climático,
pues con el aumento en intensidad y duración de las sequías, la presión sobre los
recursos hídricos se incrementaría. El problema puede agudizarse por la contaminación de cuerpos de agua superficial, de lo que ya hay señales. Aun sin considerar los
efectos futuros del cambio climático, la situación ya es crítica y se hace evidente en la
información histórica proporcionada por la estación hidrométrica 25009, que mide el
gasto del río San Fernando. En la figura 6 se puede apreciar la tendencia decreciente
en los escurrimientos que llegan al humedal.
Figura 6. Escurrimientos en la estación hidrométrica San Fernando.
Humedal San Fernando-La Nacha.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, utilizando la base de datos de estaciones meteorológicas ERIC III.
Como el uso del agua se realiza esencialmente en los sectores agrícola y urbanomunicipal, el manejo apropiado de este recurso se vuelve uno de los principales
problemas que debe considerarse para proponer medidas de adaptación tanto en
las zonas urbanas como rurales. La eficiencia en el riego agrícola es de importancia
40 Obtenido del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
408
D escripción
detallada de los sitios piloto
primordial. Sin embargo, el riego intensificado (que hasta ahora ha sostenido a las
actividades agrícolas) puede salinizar los cuerpos de agua, degradando aún más su
calidad.
Por otro lado, el sector salud se verá afectado por el aumento de temperatura,
puesto que la población más vulnerable, en particular ancianos, niños y población
indígena, deberá ser atendida con mayor frecuencia. De hecho, en la actualidad no se
cuenta con la infraestructura necesaria para atender a la población afectada, por lo
que la información climática, y en especial los sistemas de alerta temprana se vuelven
indispensables para prevenir pérdidas tanto humanas como económicas41.
El humedal de San Fernando-La Nacha y su área de influencia se encuentran
dentro de una zona con alta vulnerabilidad ante ciclones. En particular, los municipios
con mayor riesgo de Tamaulipas son Aldama, Altamira, Matamoros, Río Bravo y San
Fernando42. También existe un alto riesgo ante las inundaciones. Los municipios
más afectados serían Camargo, Gustavo Díaz Ordaz, Matamoros, Méndez, Miguel
Alemán, Reynosa, Río Bravo, San Fernando y Valle Hermoso. En la figura 7 puede
apreciarse el efecto esperado por el aumento del nivel del mar en la costa tamaulipeca, mientras que el cuadro 4 muestra los municipios afectados por eventos climáticos
extremos en 2005.
Cuadro 4. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005.
Sitio piloto Río San Fernando-Laguna La Nacha.
Humedal
Río San Fernando-Laguna
la Nacha, Tamaulipas
Frío
Huracán
Lluvias
intensas
Total de
eventos
0
7
0
7
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
41 León et al., 2007, para este estudio.
42 Graizbord et al., 2007, con datos del CENAPRED, 2006.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
409
Figura 7. Zonas susceptibles de inundación. Sitio San Fernando-La Nacha.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para el presente estudio.
410
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.1.7 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación al cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México” se
describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo procedimiento
para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito de influencia de
cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y capaz de afrontarlos.
Para la zona de influencia del humedal se observa una tendencia decreciente en el
índice de sensibilidad ante el cambio climático conforme los municipios se acercan a la
línea fronteriza. En este sentido, los municipios de Burgos, Cruillas, Méndez y San Fernando (municipio que contiene al humedal) registran grados de sensibilidad altos. Por su
parte, tanto Valle Hermoso como Matamoros tienen un grado de sensibilidad bajo.
En la zona de influencia de San Fernando-La Nacha, el índice de capacidad de adaptación al cambio climático tiene un comportamiento inverso con respecto al grado de
sensibilidad, ya que los municipios con mayores posibilidades de adaptación se encuentran hacia la línea fronteriza, en tanto que el municipio con menor capacidad corresponde a San Nicolás. El municipio de San Fernando es una entidad político-administrativa
altamente sensible, pero también, altamente adaptable (ver figuras 8 y 9).
5.1.8 Proyecciones en el uso de suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia el 2020 en el uso de suelo para la
zona costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas entre 1976 y 2000, y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov).
De manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto, con los siguientes
resultados para el sistema estuarino San Fernando-La Nacha:
• Los usos de suelo de pastizal cultivado y agricultura de riego dominarán la parte baja
de la cuenca para el 2020, cubriendo casi la totalidad del sitio de estudio, a costa de la
vegetación de tipo mezquital y matorral. La región costera presentará ese mismo uso.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
411
Figura 8. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro de la
zona de influencia del sitio piloto Río San Fernando-Laguna La Nacha, Tamaulipas.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para el presente estudio.
Figura 9. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios dentro
de la zona de influencia del sitio piloto Río San Fernando-Laguna La Nacha, Tamaulipas.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para el presente estudio.
412
D escripción
detallada de los sitios piloto
• La expansión de la frontera agrícola también se observará sobre la parte central
y alta de la cuenca (figura 10), desplazando regiones actuales de matorrales y de
agricultura de temporal. Esto sugiere un aumento en la intensificación del uso de
suelo, y una mayor demanda de agua para la región y el sitio piloto. Al parecer,
algunas regiones de matorral que actualmente existen se observarán también en
2020 y otras sustituirán a ciertos cuerpos de agua actuales. Esto último sugiere
un posible abatimiento de los mismos.
Figura 10. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020 por clases de cobertura.
Río San Fernando-Laguna La Nacha.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para el presente estudio.
R ío S an Fernando -L aguna L a N acha
413
5.2 Sitio piloto Río
Pánuco-Altamira
Javier Bello et al.
Leticia Gómez et al.
Víctor Magaña et al.
Boris Graizbord et al.
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.2.1 Descripción física1 e hidrológica
El sistema lagunar Pánuco-Altamira está situado en la llanura costera del Golfo Norte,
entre los estados de Tamaulipas y Veracruz; precisamente, los ríos Pánuco y Tamesi
delimitan las dos entidades federativas. El río Pánuco comprende en su totalidad a la
Región Hidrológica 26, que se encuentra dentro de la Región Administrativa IX, Golfo
Norte de la CONAGUA, y abarca el 67% de su superficie. La cuenca de este río ocupa
el cuarto lugar nacional por la superficie que drena, 84 956 km2, y el quinto por sus
escurrimientos, 20 330 hm3 anuales2. El río Pánuco recibe aportaciones procedentes de los estados de México, Guanajuato, Hidalgo, Nuevo León, Puebla, Querétaro,
San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz y el Distrito Federal. Esto ha convertido a la
cuenca del Pánuco en una muy especial, pues actualmente se asientan en ella más de
quince millones de habitantes. Debido a ello se le considera la cuenca hidrológica más
poblada del país3. La figura 1 es una imagen de satélite de la desembocadura del río
Pánuco con la delimitación del sitio piloto.
1 La mayoría de la información sobre la descripción física fue obtenida de la ficha Ramsar de la laguna de Tamiahua
(características regionales), Gordillo, 2005; la base de datos para investigación en el Golfo de México, en Castañeda y Contreras, 2001, y en los Estudios Técnicos para determinar la disponibilidad del agua superficial en la
cuenca del río Pánuco, DOF, 1998.
2 CONAGUA, 2007, Escurrimiento natural medio superficial, el cual representa el valor medio anual del registro
histórico.
3 SAGARPA, 2003.
414
Figura 1. Imagen de satélite del sistema estuarino Pánuco-Altamira
con la delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
El río Pánuco nace artificialmente en la cuenca del valle de México, pues las aguas
residuales generadas en la zona metropolitana de la ciudad de México se sacan de la
cuenca por obras de ingeniería para fluir en el río Salado que, junto con el río Cuautitlán, forman el río Tula. Posteriormente este río recibe el nombre de Moctezuma y,
finalmente, el de Pánuco. Es de esperarse, por lo tanto, que el grado de contaminación
por materia orgánica sea elevado. Su curso inferior es navegable hasta la confluencia
con el río Tamuín. A través de él llegan embarcaciones de gran calado al puerto de
Tampico, 12 km arriba de la desembocadura. En la cuenca del río Pánuco se han
construido varias obras de aprovechamiento, todas con fines de riego y control de
avenidas. El gasto medio del Bajo Pánuco4, donde se encuentra el humedal, es de
449 m3/seg. En la figura 2 se pueden apreciar los gastos medios anuales.
4 CONAGUA, 2003a..
R ío P ánuco -A ltamira
415
Figura 2. Gasto medio anual en la estación hidrométrica Las Adjuntas, ubicada sobre el río
Pánuco. Región Hidrológica 26 y Región Administrativa IX.
.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
El sistema estuarino Pánuco-Altamira abarca toda una red de lagunas, que son
alimentadas por los deltas de ambas corrientes. Debido a la morfología de dunas
bajas y móviles en la zona, las lagunas permanentes e intermitentes formadas por
el Pánuco y el Tamesi son someras, de 3 a 5 m de profundidad, con espejos que
desarrollan superficies muy amplias. Como ejemplos destacan Pueblo Viejo, la laguna
más extensa de todas las veracruzanas, El Chairel, Tortuga Chila, Marland, San Andrés
y Champayán, entre otras treinta. En total, estos cuerpos, junto con las zonas de desborde de los ríos, cubren alrededor de 165 mil hectáreas5. La figura 3 es un esquema
de las características físicas de este sistema lagunar.
El clima es de tipo cálido subhúmedo, con una temperatura media anual mayor
a 22 °C, con amplias oscilaciones de temperatura de entre 7 y 14 °C. Los vientos
reinantes son de este-sureste y los dominantes del este-noreste. Durante los meses
de junio a octubre, los ciclones llegan a producir grandes daños por la intensidad de sus
vientos y precipitaciones, que pueden superar los 200 km/h y 90 mm/día, respecti5 Poligonal calculada por Bello et al., 2007, para el presente estudio. Ver ficha del sitio piloto en el DVD
interactivo.
416
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 3. Esquema del sitio piloto Río Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para el presente estudio.
R ío P ánuco -A ltamira
417
vamente. La temporada de lluvias es de junio a octubre, con precipitación promedio
mensual de 158 mm. En invierno hay precipitaciones por influencia de los “nortes”.
5.2.2 Relevancia ecológica
El sistema estuarino Pánuco-Altamira está considerado como región prioritaria terrestre y marina, así como región hidrológica prioritaria, según la CONABIO. Este sitio
se encuentra dentro del Área Natural Protegida estatal “La Vega Escondida”, cuyo
decreto data de 20036. Se le ha denominado como Área de Importancia para la
Conservación de las Aves (AICAS) y es sitio de importancia internacional de acuerdo
con la convención de Ramsar. Cuenta también con la clasificación de reserva en la
Red Hemisférica para Aves Playeras (WHSRN).
En la región existe vegetación hidrófila de humedales tropicales, como el manglar
de diferentes especies (mangle rojo, Rhizopora mangle; mangle blanco, Laguncularia
racemosa; mangle negro, Avicenia germinans) y los tulares característicos de cuerpos
de agua dulce. Cabe mencionar que los manglares cuentan con protección especial,
según la norma oficial mexicana NOM-ECOL-059-2001. De acuerdo con el Inventario Nacional Forestal 20007, las comunidades vegetales de la zona están distribuidas
como se muestra en el cuadro 1.
Cuadro 1. Comunidades vegetales y superficie en hectáreas.
Comunidades vegetales
Bosque de encino
Manglar
Popal-tular
Selva baja caducifolia y subcaducifolia
Vegetación halófila y gipsófila
Superficie (ha)
423.83
1 637.14
11 802.14
10 902.31
3 384.59
Entre la fauna de la localidad que se encuentra listada en la NOM-ECOL-0592001 existen, por lo menos, dos especies en peligro de extinción (tortuga lora,
Lepidochelys kempi, y loro tamaulipeco, Amazona viridigenalis) y una con protección
especial (el manatí, Trichechus manatus).
6 Periódico Oficial del Estado de Tamaulipas, 12 de noviembre de 2003.
7 SEMARNAP, 2001.
418
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.2.3 Descripción socioeconómica
En el estado de Tamaulipas, el sitio piloto comprende los municipios conurbados de
Tampico, Ciudad Madero y Altamira. En el estado de Veracruz, el humedal se localiza
en los municipios de Pánuco, Pueblo Viejo y Tampico Alto, pertenecientes a la región
Alta Huasteca. Según los resultados del censo del año 20008, la población de la zona
de influencia del sitio sumaba 1 300 280 habitantes9. Las principales áreas urbanas
que ahí se sitúan son, en primer término, la zona metropolitana de Tampico-MaderoAltamira, la cual se extiende hacia el estado de Veracruz con las colonias de Anáhuac,
Primero de Mayo y Ciudad Cuauhtémoc. En segundo término figuran las poblaciones
de Pánuco y Ébano. El índice de marginación para la zona metropolitana es bajo, debido en parte a la concentración de empleos y el grado de especialización observados.
Sin embargo, el sector salud carece de servicios óptimos para la población. Aunque
las coberturas son superiores a la media regional, no alcanzan el 50% de población
servida. Para el año 2030, se estima que la población de los municipios en la zona
de influencia del humedal será de 1 388 441 habitantes10. La tasa de crecimiento
poblacional para el periodo 1990-2000 fue relativamente baja, de 0.74%11.
La zona conurbada de estos tres municipios surgió por el desarrollo de la industria
petrolera y la importancia que cobraron las actividades portuarias ahí realizadas. Sin
embargo, las actividades agropecuarias y de pesca se consideran igualmente relevantes. Últimamente el sector turístico ha registrado un crecimiento significativo en la
región, del rango de 8%, en el periodo de 1999 a 200412.
El auge del turismo se debe, en parte, al crecimiento de la actividad industrial en
la zona. La producción del sector secundario ha crecido a una tasa sorprendente de
19% anual entre 1999 y 2004, debido a la instalación de maquiladoras en el área
metropolitana. Gracias a esto, el empleo se ha incrementado en 1.4% anual en el
8 INEGI, 2000a.
9 Comprende otros municipios, vinculados con los municipios del sitio piloto a través de los programas estatales de
desarrollo (ver figura 10).
10 Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO, 2006.
11 Con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
12 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2005.
R ío P ánuco -A ltamira
419
mismo periodo. Los sectores que han experimentado un decremento en su producción son el agrícola y el pesquero, ambos con una disminución del 6% en ese mismo
lapso; sus activos se redujeron 23%13.
5.2.4 Presiones por actividades económicas
El sistema estuarino Pánuco-Altamira está sometido a presiones que derivan del desarrollo de la industria petrolera, de actividades agrícolas y de la expansión de la mancha urbana en la zona conurbada Tampico-Altamira-Ciudad Madero. El río Pánuco se
encuentra altamente contaminado, pues recibe las descargas de aguas residuales del
Valle de México y de otras zonas urbanas a lo largo de la cuenca. Además, las actividades industriales en el centro del país, así como las de extracción y transformación
de hidrocarburos en la costa, degradan considerablemente la calidad del río y de los
cuerpos de agua que dependen de él.
Por otro lado, es importante destacar que en la zona de estudio se ubican diversas
actividades agropecuarias y agroindustriales que también contribuyen al deterioro de
la calidad de los cuerpos de agua y sus humedales. Como ejemplo, en esta zona se
ubica el distrito de riego de Pujal-Coy, con una extensión de 700 mil ha; un proyecto
cuyas consecuencias sociales y ambientales se consideran negativas14. La conversión
de vegetación silvestre en áreas de pastizal inducido es un rasgo que define a toda la
región (figura 4).
Tanto el origen como la expansión de las tres poblaciones principales del sitio
se deben al desarrollo de la industria petrolera, la cual, desde inicios del siglo XX,
disparó el crecimiento demográfico y atrajo a miles de inmigrantes. En la actualidad,
el principal motor del crecimiento de la mancha urbana es la expansión del puerto de
Altamira, que se ha logrado gracias a cuantiosas inversiones en infraestructura.
En la figura 5 se puede apreciar cómo los cuerpos de agua, los humedales y las
zonas inundables de la región se encuentran sometidos a una gran presión a cau13 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2005.
14 Ávila, 1993.
420
D escripción
detallada de los sitios piloto
sa de la expansión de las áreas residenciales, industriales y portuarias. Aunque los
programas de ordenamiento territorial consideran la presencia de importantes zonas
inundables contiguas a los asentamientos humanos, el riesgo que éstos experimentan
por hallarse rodeados de múltiples cuerpos lagunares no puede pasarse por alto.
Como se puede apreciar en la figura 5, las tendencias de expansión de la zona
metropolitana se orientan tanto al norte (hacia Altamira) como al sur, hacia las
poblaciones veracruzanas que albergan parte del crecimiento de los asentamientos
populares. Toda la zona se halla expuesta, en sentido transversal, a huracanes y al
eventual incremento del nivel del mar.
Figura 4. Actividades dominantes y uso del suelo. Sitio piloto Río Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para el presente estudio, con base en INEGI, 1991, 2000b, e INEGI,
2002.
Una de las lagunas más deterioradas del sistema es la laguna de San Andrés. Se
estima que dicha laguna ha sido afectada por el crecimiento del puerto de Altamira y
el área metropolitana, la contaminación causada por la zona industrial, el cambio de
R ío P ánuco -A ltamira
421
Figura 5. Presiones sobre la cuenca Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007 con base en INEGI, 1991, e INEGI, 2000b.
uso del suelo a pastizales15 en la periferia, así como la implementación y el manejo
inadecuados del canal intracostero.
Las aguas del Pánuco hacen posible que un alto porcentaje de los terrenos aledaños sean utilizados en la agricultura. Los cultivos principales son caña de azúcar, café,
arroz, maíz, naranja, tabaco, hule, piña, mango, plátano, papaya, chile, sandía y papa,
15 CONABIO, 2007; Roth y Kelly, 1994.
422
D escripción
detallada de los sitios piloto
entre otros. Asimismo, las aguas propician el crecimiento de pastizales que favorecen
la ganadería. En la región se cría el ganado bovino, porcino, ovino y caprino.
En años recientes, el turismo ha comenzado a ejercer presión sobre el sistema
lagunar. En efecto, los tres municipios que abarcan al sistema tienen proyectos de
convertir las lagunas del estero del río Pánuco en verdaderos parques recreativos.
Por ejemplo, la laguna del Chairel (en Tampico) es navegable y posee su propio
embarcadero, por lo que se pueden practicar deportes acuáticos como el esquí y la
pesca deportiva. En Altamira se localizan las lagunas de Miralta, que cuentan con
embarcadero y son navegables. En sus lechos se ha construido un campo de golf y
una zona recreativa.
Como se hizo notar en la descripción socioeconómica, la pesca se encuentra en
serio declive. La reducción de esta actividad denota un estado de alerta, pues ha
sido importante en todo el estuario desde el esplendor de Mesoamérica. En la zona
se realiza pesca de autoconsumo y comercial, siendo las especies más capturadas
mojarra, tilapia, robalo, bagre y pejelagarto. Además, organizaciones cooperativas
pescan ostión, lisa y camarón.
5.2.5 Uso de suelo
En la figura 6 se evidencia el crecimiento de la zona conurbada de Altamira-TampicoCiudad Madero entre 1976 y 2000. La región de bosques de encinos (bosques
de características tropicales), que se observa en la cartografía de 1976 al norte de
Ciudad Madero, prácticamente ha desaparecido bajo la macha urbana. Las tasas de
deforestación en este sistema lagunar son de las más elevadas entre los ocho sitios
piloto, e indican un decremento del 7% anual de los bosques, 4% de las selvas y 2%
de vegetación hidrófila.
También se puede observar la expansión de los terrenos agrícolas y el remplazo de
la vegetación natural. Selvas bajas caducifolias y fracciones de selvas altas descritas
en 1976 ahora están ocupadas por terrenos para agricultura de riego y temporal.
Incluso, regiones anteriormente ocupadas por pastizales al norte ahora son zonas
de riego. En contraste, en las zonas cercanas a la ciudad de El Ébano se observa una
intensificación de la ganadería sobre regiones de selvas bajas caducifolias (figura 6).
R ío P ánuco -A ltamira
423
Los pastizales inducidos, los asentamientos humanos y la agricultura de temporal
son los principales controladores del cambio de uso del suelo. En efecto, la zona
conurbada ha ocupado el 60% de la superficie de los bosques de encino, el 10% de
las tierras agrícolas, así como el 10% de los pastizales inducidos (figura 6). El 40% de
las selvas bajas se ha convertido en terrenos ganaderos y gran parte de los bosques de
coníferas de 1976 ahora están dominados por selvas bajas (cuadro 2). También existe
un proceso de transformación en los sistemas de producción agrícola, ya que el 10%
de terrenos de riego pasó a temporal. Es de especial importancia la transformación
de más de 15 mil hectáreas de vegetación hidrófila —la vegetación característica de
Figura 6. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000 en el sitio piloto del
estuario del río Pánuco.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para el presente estudio.
424
D escripción
detallada de los sitios piloto
los humedales— a otros usos entre 1976 y el año 2000. Esto significa una pérdida
de más de 35% de la superficie original y pone en evidencia el claro deterioro que
están experimentando las zonas inundables en el sitio. Se puede deducir, por lo tanto,
que el proceso de urbanización y de incremento de la actividad ganadera han sido los
controladores del cambio de uso de suelo en este humedal.
Cuadro 2. Cambio de uso de suelo. Sitio piloto Río Pánuco-Laguna Altamira.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de riego y humedad
Agricultura de temporal
Área sin vegetación aparente
Asentamiento humano
Bosque de latifoliadas
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Pastizales inducidos y cultivados
Selva caducifolia y subcaducifolia
Vegetación hidrófila
Bosque de coníferas y latifoliadas
Total
Superficie en
1976 (ha)
9 545
12 644
753
3 585
2 842
38 809
7 183
23 615
26 203
40 041
113
165 332
Superficie en
2000 (ha)
7 602
17 760
1 017
11 654
546
56 448
4 892
27 799
10 524
25 834
0
164 077
Tasa de
transformación
-0.01
0.01
0.01
0.05
-0.07
0.01
-0.02
0.01
-0.04
-0.02
-1.00
 
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
5.2.6 Uso del agua
Los datos para la región hidrológica del río Pánuco muestran que el volumen de agua
extraído es de 4 323 hm3 anuales. De esta cantidad, el 82% (3 456 hm3) se utiliza
para la producción agrícola, el 10% (433 hm3) para el consumo público-urbano y el
8% (344 hm3) para las actividades industriales16. Si se considera que la extracción
de agua subterránea para usos consuntivos no es sustentable, el estado de los acuíferos de la región, aunque aún no es crítico, tampoco es prometedor. En efecto, del
total de agua utilizado, 3 167 hm3 (76.3%) provienen de aguas superficiales y 1 156
hm3 (26.7%) de los mantos freáticos17.
16 CONAGUA, 2000.
17 Ídem 16.
R ío P ánuco -A ltamira
425
Dentro de los problemas del uso del agua destaca la ineficiencia en el riego
agrícola por el volumen utilizado y las bajas tasas de rendimiento. Se estima que en
esta zona la eficiencia en el riego gira alrededor del 40%, por lo que si se toma en
cuenta que ocho de cada diez litros extraídos se usan en el riego, concluimos que se
pierde cerca del 30% de toda el agua extraída en la región. De acuerdo con las metas
para 2006 del Programa Hidráulico Regional18, se pretendían modernizar 101 500
ha de riego para elevar su eficiencia al 65%. La diferencia entre el volumen perdido
antes y después de implementar las acciones sería de 112 hm3/año. Esto equivale a
un volumen suficiente de agua como para abastecer durante un año a una población
de más de un millón de habitantes.
La falta de organización en los distritos de riego, aunado a la escasa o nula asistencia técnica que reciben los usuarios, generan condiciones desalentadoras: no se
cuenta con equipo de medición de los volúmenes extraídos en acuíferos o corrientes,
por lo que la extracción descontrolada afecta a productores regularizados; la falta de
reglamentación permite que usuarios hagan derivaciones no autorizadas, y la infraestructura se encuentra deteriorada por la falta de mantenimiento y conservación, así
como la ausencia de programas que incentiven el uso apropiado.
Por su parte, el sector público-urbano utiliza 10% del volumen extraído, con
eficiencia promedio del 60%. El total de la población que cuenta con servicios de
agua potable en la subregión Pánuco es cercano al 74%, pero al analizar los datos para
comunidades rurales y urbanas se obtienen porcentajes de cobertura cercanos al 95
y 57%, respectivamente19. Las acciones para volver más eficientes los sistemas de
agua potable deben ser la parte medular de los programas de trabajo de los organismos operadores. Dadas las condiciones actuales, no es factible seguir incrementando
la oferta en tanto no se mejoren las eficiencias físicas.
De no implementarse estos programas podrían presentarse limitaciones en el
abastecimiento de agua a la población; continuará la sobreexplotación en los acuíferos, y se pondrán en riesgo aquellos que aún guardan una condición de equilibrio.
Asimismo, serán necesarias costosas obras de infraestructura, será difícil incrementar
18 CONAGUA, 2003a y 2003b.
19 Gerencia de Planeación Hidráulica con información de INEGI, 2000a.
426
D escripción
detallada de los sitios piloto
los niveles de cobertura y surgirán mayores conflictos en la competencia por el uso
del agua.
Si se habla de calidad del agua, la situación no es más prometedora. En la región
del Pánuco, sólo el 48.9% de los habitantes cuentan con servicio de alcantarillado, mientras que si se toma en cuenta la cobertura de servicio en áreas urbanas y
rurales, la diferencia es significativa: 80 y 23%, respectivamente20. Esto muestra
el grave déficit que caracteriza a la zona en conducción y tratamiento de desechos
orgánicos. Las descargas de aguas residuales sin tratamiento, tanto domésticas como
industriales, la presencia de desechos sólidos en los cauces y el uso de sustancias no
biodegradables ponen en peligro el equilibrio ecológico y la seguridad hídrica de la
región.
5.2.7 Vulnerabilidad
En el sistema lagunar Pánuco-Altamira, uno de los riesgos principales relacionados
con el cambio climático es el aumento del nivel medio del mar tanto en los litorales
como en los humedales. En esta sección del Golfo, las dunas son suaves y móviles, por
lo que favorecen la presencia de playas amplias, con poca pendiente. Tal morfología
permite que cualquier aumento del nivel oceánico recale tierra adentro a lo largo de la
línea de costa. La distribución de las tierras elevadas en la zona tiende a encajonar las
tierras más bajas y sus humedales, por lo que la mancha urbana se ha expandido sobre
espacios más vulnerables al aumento del nivel del mar. Tal es el caso del corredor que
crece rápidamente a lo largo de la franja de suelo comprendida entre el río Pánuco y
la laguna de Pueblo Viejo (congregaciones Anáhuac, Miguel Hidalgo y Benito Juárez).
Las poblaciones en la margen derecha del río desde la punta sur de Pueblo Viejo hasta Pánuco presentan riesgos de inundación por este fenómeno. La figura 7 muestra
cómo gran parte de la superficie del sitio piloto es susceptible a inundaciones.
Ante el aumento previsto de casi medio metro del nivel del mar hacia el año
2050, es muy probable que se inunden varias secciones peninsulares en los cuerpos
costeros, particularmente al sur de cabo Rojo (península de Tamiahua) e igualmente
20 Gerencia de Planeación Hidráulica con información de INEGI, 2000a.
R ío P ánuco -A ltamira
427
Figura 7. Zonas susceptibles de inundación. Sitio piloto Río Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para el presente estudio.
428
D escripción
detallada de los sitios piloto
se pierdan muchos de los humedales de agua dulce que hoy prevalecen en las épocas de estiaje. Los manglares existentes probablemente aumentarán en tamaño, al
extenderse sobre la zona inundada con agua salina. La migración de los ecosistemas
lagunares aguas arriba dependerá de condiciones topográficas puntuales y del régimen de escurrimientos que prive sobre los ríos a futuro.
Este sitio piloto se encuentra en una zona con alta vulnerabilidad a la incidencia de
ciclones y ya ha sufrido las consecuencias. En agosto de 1933, el huracán que afectó
los estados de Tamaulipas, Tabasco y Veracruz dejó ocho mil damnificados en Tampico, cinco mil en Pánuco y cientos de personas muertas. En 1955, tres huracanes
consecutivos (Gladys, Hilda y Janet) azotaron las costas de Tamaulipas, dejando más
de dos mil muertos en Tampico. El paso del huracán Gert por territorio tamaulipeco
en septiembre de 1993 obligó a la evacuación de cinco mil personas en el estado.
Hubo inundaciones en 17 colonias de Tampico, así como en 11 colonias y 22 ejidos
de Altamira. Aproximadamente 2 800 personas de esas localidades fueron atendidas
en 15 refugios temporales21. El cuadro 3 presenta el número de municipios afectados por huracanes y lluvias intensas en el 2005, y es un reflejo de la vulnerabilidad de
la zona ante estos eventos.
Cuadro 3. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005 en el sitio
piloto Río Pánuco-Altamira.
Humedal
Río Pánuco-Sistema Lagunar
Altamira, Tamaulipas y Veracruz
Frío
Huracán
Lluvias
intensas
Total de
eventos
0
36
6
42
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
Aparte del incremento en el riesgo potencial de inundaciones por tormentas y huracanes, así como por el aumento en el nivel medio del mar, las principales amenazas
del cambio climático a las que se enfrentará esta región serán la sequía y los eventos
extremos de calor. Al realizar reducciones de escala de los modelos globales del clima
se obtienen los siguientes resultados para el sitio Pánuco-Altamira hacia finales del
presente siglo:
21 Bitrán, 2001.
R ío P ánuco -A ltamira
429
• La temperatura se incrementará entre tres y cuatro grados centígrados y el periodo de cambio significativo iniciará a partir de 205022.
• Los meses de mayor incremento serán entre abril y septiembre, resultando el
periodo de mayor cambio en verano.
• Las ondas de calor se triplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales. Los periodos secos
serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los cambios en precipitación pueden variar desde una reducción del 10% hasta
un aumento del 5%. Estos resultados no toman en cuenta los eventos extremos
como “nortes” y huracanes, los cuales serán más intensos23.
El análisis histórico de los escurrimientos en los ríos Pánuco y Tamesi no arroja
resultados contundentes. Como se puede observar en las figuras 8 y 9, no existe una
tendencia clara sobre el incremento o la disminución del agua que llega al estuario.
Sin embargo, según apuntan la mayoría de los modelos climáticos elaborados hasta la
fecha, las corrientes de estas latitudes disminuirán sus descargas debido a la disminución en la precipitación, y al aumento de temperatura y la evapotranspiración.
Figura 8. Hidrograma de escurrimientos de la estación Tamesi, río Tamesi.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, usando la base de datos de estaciones meteorológicas ERIC III.
22 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
23 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al. 2007).
430
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 9. Hidrograma de escurrimientos de la estación Pánuco, río Pánuco.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, usando la base de datos de estaciones meteorológicas ERIC III.
5.2.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación ante el cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente, estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y es capaz de
afrontarlos. A continuación se presentan los resultados para el sitio piloto PánucoAltamira.
Sobre el comportamiento del grado de sensibilidad ante el cambio climático en
el ámbito de influencia de este humedal, se puede observar en la figura 10 que los
municipios más sensibles son Tampico Alto y Pánuco, con grados muy alto y alto,
respectivamente. Por otro lado, en la zona conurbada, la sensibilidad disminuye, pues
el indicador arroja valores de “muy bajo” para Tampico y Ciudad Madero, “bajo” para
Altamira y “medio” para Pueblo Viejo.
Para la capacidad de adaptación al cambio climático, encontramos que los municipios de Tampico, Ciudad Madero, Altamira y Pueblo Viejo registran grados muy altos,
R ío P ánuco -A ltamira
431
Figura 10. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro del área de
influencia del sitio piloto Río Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para el presente estudio.
Figura 11. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios
dentro del área de influencia del sitio piloto Río Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para el presente estudio.
432
D escripción
detallada de los sitios piloto
en tanto que Pánuco y Tampico Alto alcanzan un grado alto. Este humedal es de
particular complejidad, porque los grados de sensibilidad en los municipios de su zona
de influencia son divergentes y van de muy altos a bajos. La capacidad de adaptación,
por su parte, registra grados altos.
5.2.9 Proyecciones del uso del suelo
De acuerdo con las tasas de cambio en el uso del suelo entre 1976 y 2000, y asumiendo que las tendencias actuales continúen, se estimó la probabilidad de transformación del suelo a futuro (usando el módulo de Markov) hacia 2020. En la sección
6.3 se desarrollan tanto el método como los resultados para la zona costera del Golfo
de México. Como se puede apreciar en la figura 12, para 2020 se espera un aumento
de las zonas de agricultura de temporal y pastizales inducidos en las partes central
y norte de la cuenca. Estos cambios se presentarán principalmente sobre zonas de
vegetación secundaria y selvas altas perennifolias. En la zona específica del sistema
lagunar Pánuco-Altamira, dicho cambio se presentará en la porción norte.
La clase de uso de suelo de pastizal cultivado y agricultura de riego se observará
en la porción central de la cuenca y en la parte baja, incluyendo la parte sur del sitio
piloto. Este tipo de uso se sobrepondrá a regiones que hoy son de vegetación secundaria, selvas baja, y popal y tular (figura 12). Finalmente, las regiones de cuerpos de
agua en el sitio de estudio (parte baja de la cuenca) serán sustituidos por vegetación
de popal y tular. Esto sugiere un abatimiento de los actuales espejos de agua.
R ío P ánuco -A ltamira
433
Figura 12. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020 por clases de cobertura.
Sitio Pánuco-Altamira.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
434
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.3 Sitio piloto Río Papaloapan-
Laguna de Alvarado
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.,
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.3.1 Descripción física1 e hidrológica
El complejo lagunar de Alvarado es un sistema lagunar-estuarino, compuesto por
lagunas costeras salobres. Entre las más importantes destacan las de Alvarado, Buen
País y Camaronera, además de cien lagunas interiores, como Tlalixcoyan y Las Pintas.
El sitio piloto forma parte de la Región Hidrológica 28, donde se ubica la cuenca del
Papaloapan, dentro de la Región Administrativa X, Golfo Centro de la CONAGUA. El
caudal de este río ocupa el séptimo lugar mundial, con 44 829 hm3 anuales y, junto
con el río Coatzacoalcos, representa el 30% del escurrimiento fluvial del país. Es el
segundo sistema fluvial más importante de México, después del sistema GrijalvaUsumacinta. A la laguna de Alvarado descargan los escurrimientos provenientes de
las subcuencas de los ríos Blanco, Camarón y Acula. Estos ríos se interconectan en la
parte más baja de la cuenca y forman en la época de lluvias una llanura de inundación
hídrica que, junto con el sistema lagunar, constituyen un gran vaso de almacenamiento. Además de los cuerpos de agua, el sitio piloto incluye la vegetación hidrófila que
se encuentra en las zonas de inundación. La figura 1 es una imagen de satélite del
sistema estuarino Papaloapan-Alvarado con la delimitación del sitio piloto.
1 Buena parte de la información aquí presentada fue obtenida de la ficha Ramsar del sistema lagunar Alvarado,
Portilla-Ochoa, 2003.
435
Figura 1. Imagen de satélite de la desembocadura del río Papaloapan y la laguna de Alvarado
con la delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
El complejo fluvio-lagunar Papaloapan-Alvarado se caracteriza por el gran volumen
de escurrimientos continentales que recibe y por el fenómeno de subsidencia de su
cuenca marginal, lo que origina extensas lagunas, humedales de manglar y ciénagas.
Estos sistemas lagunares costeros, junto con el sistema lagunar de Tamiahua, ocupan
la mayor longitud de costas de aguas protegidas o interiores del Golfo, con cerca de
614 km. Los humedales de Alvarado están flanqueados por la costa de barrera con
cerros arenosos de más de 50 m de altura y de amplios campos de dunas costeras,
formando lenguas arenosas hasta cerca de diez kilómetros tierra adentro. La figura 2
esquematiza las características físicas de este sitio piloto.
436
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 2. Esquema del sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
Por su régimen de precipitaciones, descarga de agua dulce y evapotranspiración,
el sistema estuarino Papaloapan-Alvarado se acerca bastante al perfil de ecosistema
de los pantanos de Centla, en Tabasco, y de la laguna de Términos, en Campeche.
Esto se refleja claramente en el perfil de hábitats y modelo trófico. La trampa de
nutrientes es muy eficiente y el tiempo de residencia de aguas es medio, pero por el
pulso de descarga fluvial, su interacción ecológica con el océano es muy alta.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
437
El gran volumen de agua superficial del río Papaloapan (42 929 hm3/año en la
desembocadura) es generado por lluvias estacionales, así como de origen ciclónico,
provenientes del Golfo de México y el océano Pacífico. La cuenca del Papaloapan
tiene un área aproximada de 46 517 km2 y recoge escurrimientos de los estados de
Oaxaca, Veracruz y Puebla. La superficie que cada estado representa en la cuenca es
de 51, 35 y 12%, respectivamente. Los escurrimientos que forman los principales
afluentes de este río se originan en las sierras de Oaxaca (Sierra de Cuicatlán, Tamazulapa, Nochistlán y Mixe), la Sierra Madre Oriental y, en menor proporción, el macizo
volcánico de los Tuxtlas.
Figura 3. Gasto medio anual en la estación hidrométrica Papaloapan, ubicada sobre el río
Papaloapan. Región Hidrológica 28 y Región Administrativa X de la CONAGUA.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
Para regularizar y aprovechar los volúmenes, cuyas variaciones estacionales e
interanuales son elevadas, se ha construido en la cuenca una importante infraestruc438
D escripción
detallada de los sitios piloto
tura hidráulica que incluye 12 presas, con una capacidad de almacenamiento total
de más de 9 700 hm3. Destaca la presa Miguel Alemán con capacidad operable
aproximada de 8 000 hm3 y contrasta con ocho de los embalses existentes, cuya
capacidad es inferior a 100 hm3. Estos embalses abastecen de energía eléctrica a una
parte significativa de los habitantes de la región.
La cuenca del Papaloapan coincide con una de las áreas que registran mayor concentración de precipitación de todo el país; tiene una precipitación media anual mayor
a los 3 000 mm en el curso medio y alto de la cuenca2. En la laguna de Alvarado
se presentan los climas cálido húmedo y subhúmedo, con lluvias en verano, cuyo
promedio es de 286 a 320 mm. La temperatura media anual3 es de 22 a 26 °C. Los
“nortes” propician precipitación invernal.
Este sistema hidráulico sirve de asiento a un tejido urbano heredado siglos atrás.
Hasta los años de 1950, los ríos y sus canales naturales proporcionaban el único
medio de comunicación entre los mercados del puerto de Veracruz y Córdoba, por lo
que el desarrollo de la región se vinculó estrechamente con el sistema lagunar desde
tiempos prehispánicos4. El origen de la actividad económica fue el comercio y luego
se mantuvo con la pesca, la agricultura (principalmente caña de azúcar) y la ganadería
de doble propósito. Las principales localidades, como Alvarado, Tlacotalpan (constituida patrimonio de la humanidad por la ONU), Cosamaloapan y Carlos A. Carrillo,
sostienen su población y agroindustrias con agua tomada de pozos profundos locales,
arroyos y pequeños acueductos. Además, cuentan con protección de las inundaciones gracias a dos embalses agua arriba (Temascal y Cerro de Oro), y una serie de
bordos y terraplenes que soportan su red carretera. Sus drenajes descargan en los ríos,
provocando una contaminación que se va agregando a la generada en Tuxtepec, Tres
Valles, y otras ciudades de las partes media y alta de la cuenca, incluyendo Córdoba
y Orizaba. Los drenajes urbanos y de ingenios cañeros constituyen los principales
agentes de contaminación.
2 CONAGUA, 2003.
3 Arriaga et al., 1988.
4 ILCE, 2000.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
439
5.3.2 Relevancia ecológica
El complejo lagunar Papaloapan-Alvarado es una región prioritaria terrestre, marina
e hidrológica por parte de la CONABIO. Esta misma institución ha categorizado este
sitio como área prioritaria de diversidad costera, área costera amenazada y región
prioritaria para la conservación. Es refugio de aves migratorias5, al contar con designaciones de área de importancia para la conservación de las aves de CIPAMEX y Bird
Life International. Además, se considera un humedal prioritario para la conservación
por parte de NAWCC-SEDUE y un ecosistema altamente productivo amenazado
(UICN). En el ámbito internacional es un sitio de la Red Hemisférica de Reservas para
Aves Playeras (WHSRN) y en la convención de Ramsar se le asignó el número 1 355
por su importancia ecológica.
Los humedales de Alvarado contienen ecosistemas representativos de la planicie
costera del Golfo de México, incluyendo vegetación de dunas costeras, espadinal
(Cyperus spp.), tular (Typha spp.), apompal (Pachira acuática) y diferentes tipos de
palmas endémicas (Sabal mexicana, Scheelea liebmannii, Acrocomia mexicana), así
como vegetación acuática y subacuática. Destacan los manglares, con unas 19 mil
hectáreas de mangle rojo, blanco y negro6, todos sujetos a protección especial de
acuerdo con la NOM-059-ECOL-20017. También se ubican pastizales naturales,
cultivados e inducidos, acahuales, encinar de Quercus oleoides, selva mediana subperennifolia con vegetación secundaria, y selva baja caducifolia.
La fauna está compuesta por al menos 150 especies de anfibios, reptiles, mamíferos y 300 especies de aves, muchas de las cuales tienen importancia económica.8
Los humedales de la región de Alvarado se ubican entre las áreas con mayor diversidad aviar y biológica en el estado de Veracruz. Esta gran variedad de aves acuáticas y
terrestres está asociada con los distintos hábitats de la región: sabaleras, selvas bajas,
encinares, manglares, apompales y pastizales9 tanto inundables como acuáticos.
5
6
7
8
9
Arriaga et al., 2000.
En el mismo orden, Rhizophora mangle, Laguncularia racemosa y Avicennia germinans.
Portilla-Ochoa, 2003.
Arriaga et al., 1998a, 1998b.
Cruz, 1999.
440
D escripción
detallada de los sitios piloto
El sistema lagunar Alvarado es una zona de congregación de especies acuáticas y
de reproducción de rapaces10. Entre la gran variedad reinante se observan poblaciones de aves residentes y migratorias de 15 especies de garzas (Ardeidae), 14 de patos
(Anatidae), 28 especies de rapaces (Accipitridae, Falconidae), 27 especies de aves
playeras (Charadriidae, Recurvirostridae, Scolopacidae), 14 de gaviotas y golondrinas
marinas (Laridae), cinco de martines pescadores, 27 de mosqueros (Alcedinidae),
treinta de chipes (Parulidae), 16 de chichiltotes y calandrias (Icteridae), y así hasta
alcanzar 311 especies que hasta ahora se han registrado. Además, de acuerdo con la
base de datos de las Áreas de Importancia para la Conservación de las Aves (AICAS),
existen 35 especies que han sido registradas por otros autores y que pueden tener
ocurrencia en la zona, lo que arroja un total de 346 especies. Esto equivale al 32.64%
de las especies de aves que se encuentran en todo México11. De dichas especies
destacan algunas con poblaciones mayores a los veinte mil individuos, además de una
especie, la Cairina moschata (pato real), que se encuentra en peligro de extinción. En
el sitio existe una de las últimas poblaciones viables de dicha especie.
La diversidad faunística está representada por 45 géneros de fitoplancton, nueve
especies de zooplancton, 38 especies de moluscos, 26 familias de crustáceos, 44
especies de peces, más de cinco especies de anfibios y 24 de reptiles, y más de 15
especies de mamíferos12.
5.3.3 Descripción socioeconómica
El sitio piloto Papaloapan-Alvarado está conformado por los municipios Alvarado,
Tlacotalpan, Acula, Ignacio de la Llave e Ixmatlahuacan. La población total de la zona
de influencia de este sistema lagunar en el censo del año 2000 fue de 539 143
habitantes, con la tasa de crecimiento más baja de todos los sitios piloto: 0.16%.
De continuar esta tendencia, la población para el año 2030 en la zona se reducirá a
380 145 personas13. El crecimiento en el empleo también ha sido bajo, de 0.5%
10 INP/IIB, 2000.
11 Benítez et al., 1999.
12 Montejo, 2003.
13 Proyecciones realizadas por Graizbord et al., 2007, con datos de CONAPO, 2006.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
441
entre 1999 y 200414. Además, casi siete de cada diez habitantes en la zona no
tienen acceso a servicios de salud15.
La población que habita en la cuenca del río Papaloapan se encuentra entre las más
marginadas de toda la zona del Golfo de México. En efecto, el 40% de los municipios
con alto índice de marginalidad de toda la región administrativa de la CONAGUA está
en la subregión Medio Papaloapan. De los 245 800 habitantes que se autodefinen
como pertenecientes a uno de los múltiples grupos indígenas de la región, el 49% se
localiza en esa misma subcuenca.
Dentro de las principales actividades productivas en el área se tiene la agricultura
(dominada por caña de azúcar, árboles frutales, tabaco, algodón y café), la industria
(ingenios azucareros, compañías procesadoras de alimentos y bebidas, textiles y papel), la pesca (con serios problemas de explotación), la extracción minera (petróleo
y gas natural), y el turismo (el sector con mayor crecimiento económico actual).
También existe el comercio de maderas preciosas, como roble, caoba, encino, amate
y cedro, al igual que la cría de diversos tipos de ganado16.
Aunque entre 1999 y 2004 las actividades agrícola y pesquera han tenido
aumentos en su producción, el número de gente trabajando en estos rubros ha
decrecido, lo que muestra la falta de competitividad en los dos sectores. Por el tipo
de empresas productoras en la zona, la agricultura está muy ligada a la industria,
cuyo crecimiento ha sido lento en el periodo. La pesca se enfrenta a serios problemas de sobreexplotación por el uso de artes prohibidas y la falta de organización
de los pescadores. Incluso las condiciones del entorno han ejercido presión sobre la
pesca, ya que por cambios hidrológicos (posiblemente propiciados por los embalses
en la cuenca) los niveles de salinidad han bajado y se han modificado los flujos del
agua17.
5.3.4 Uso de suelo
14
15
16
17
Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a, e INEGI, 2005.
Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a.
ILCE, 2000.
Portilla-Ochoa, 2003.
442
D escripción
detallada de los sitios piloto
El complejo lagunar de Alvarado cuenta con una de las tasas de deforestación más
importantes de todos los sitios piloto. Los usos de suelo que predominan actualmente
son la vegetación hidrófila, de dunas costeras y los cuerpos de agua. Al analizar los
cambios de uso de suelo entre 1976 y 2000, se constató que el más significativo fue
la transformación de extensas áreas de vegetación hidrófila a zonas de pastizales cultivados y agricultura de temporal. Como muestra la figura 3, los cambios negativos más
evidentes se presentaron en las cercanías de Cosamaloapan y Carlos A. Carrillo. Las
zonas afectadas se ubican hacia el oriente del cauce del Papaloapan, y en los bordes de
las lagunas Papuyeca y Coralillo, sobre el sistema de marismas del río Camarón.
Otra región de cambios importantes es la boca de la laguna de Alvarado, donde
la vegetación de dunas costeras, palmares y manglares, descrita en 1976, prácticamente ya no existe en 2000. Las tasas de transformación más importantes fueron
las de vegetación hidrófila y vegetación de dunas costeras (catalogada bajo “otro tipo
de vegetación” en el cuadro 1), con una pérdida anual del 1 y 17%, respectivamente.
Estos datos muestran el estado crítico en que se encuentran las zonas inundables
del sitio, pues en superficies totales se perdieron cerca de siete mil hectáreas de vegetación característica de humedales y más de tres mil hectáreas de dunas; es decir,
el 22 y 98%, respectivamente, de las áreas ocupadas en 1976. Otras vegetaciones
con tasa de deforestación alarmante (del 12% anual en el mismo periodo) son las
selvas altas, que se sitúan en pequeñas zonas hacia el límite sur del sitio. Éstas y otras
transformaciones se pueden apreciar en el cuadro 1.
Los controladores del cambio de uso de suelo alrededor de la laguna de Alvarado
son los procesos de incremento de la ganadería, dada la transformación de vegetación
natural a zonas de pastizales inducidos. Incluso el 91% de las zonas de agricultura
de temporal de 1976 fue convertido a pastizales (figura 4). Sin embargo, la actividad agrícola, la pesca y la industria también ejercen presión significativa en el medio
ambiente del sitio. La expansión de la frontera agrícola y ganadera ha generado un
grado de fragmentación alto en la vegetación acuática, manglares, cuerpos de agua
y vegetación de dunas costeras. El sistema hidrológico también está alterado por los
embalses construidos en los cauces, así como por la contaminación de las corrientes
y lagunas.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
443
La deforestación no ocurre solamente cerca de los humedales. Uno de los problemas más importantes del sistema estuarino es el azolvamiento de la boca de la
laguna de Alvarado y del canal artificial que comunica a la laguna Camaronera con el
mar. Estos sedimentos se depositan al ser acarreados por las corrientes de agua desde
las zonas altas de la cuenca y se originan por la erosión de suelos, que sufrieron la
remoción de su capa forestal.
Figura 4. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000.
Sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Fuente: Gómez et al., 2007.
444
D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 1. Cambios de uso de suelo entre 1976 y 2000. Sitio Papaloapan-Alvarado.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de temporal
Área sin vegetación aparente
Asentamiento humano
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Pastizales inducidos y cultivados
Selva perennifolia y subperennifolia
Vegetación hidrófila
Bosque de latifoliadas
Total
Superficie en
1976 (ha)
881
300
0
16 120
3 321
17 827
535
35 792
75
74 850
Superficie en
2000 (ha)
949
1 174
138
3 352
65
30 066
32
28 183
0
63 960
Tasa de
transformación
0.00
0.05
1.00
-0.06
-0.17
0.02
-0.12
-0.01
-1.0
 
Fuente: Gómez et al., 2007.
5.3.5 Uso del agua
A lo largo de su cauce, el Papaloapan sufre graves problemas de contaminación
debido a los deshechos químicos que vierten en él fábricas, ingenios y plantas industriales. Las industrias ubicadas en los entornos del sistema lagunar de Alvarado
inciden en la cantidad de agua, pues la extraen para sus usos, pero sobre todo en su
calidad. En efecto, las agroindustrias generan una gran cantidad de materia orgánica
en sus procesos de transformación y posteriormente la vierten al río. Por lo tanto, la
demanda bioquímica de oxígeno (DBO) para absorber dicha carga es muy elevada.
En el noroeste del cuerpo lagunar se ubican las siguientes industrias, cuya generación
de descargas contaminantes es importante: papelera, azucarera, textil, minera y de
producción de bebidas. En el sur y sureste del sitio también figuran los siguientes giros
industriales: papel, azúcar, alimentos y textiles. Debido a la estrecha relación entre el
campo y la industria en la zona, la contaminación por materia orgánica tiene picos y
repercusiones importantes de manera estacional. La industria azucarera, con más de
cinco ingenios en la región, es de las más contaminantes.
Las descargas de aguas residuales de las localidades en la parte media y alta de
la cuenca, además de los desagües de poblados ribereños, implican otro factor de
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
445
contaminación. Por ejemplo, en la subregión Medio-Papaloapan, más del 75% de
los habitantes no cuenta con servicio de alcantarillado. La situación es relativamente
mejor en la parte baja de la cuenca, donde la cobertura es de casi 65%. El servicio a
las comunidades rurales es verdaderamente deplorable, con únicamente el 17.5% de
la población atendida18. La Región Golfo Centro ocupa el lugar número 11 de las 13
regiones administrativas del país en cuestiones de drenaje. Si se considera, además,
que una mínima porción de las aguas residuales conducidas son tratadas antes de
verterse en los cuerpos receptores, se confirma el estado crítico de la calidad del agua
tanto en el río Papaloapan como en los cuerpos lagunares del sistema de Alvarado a
causa de descargas domiciliarias e industriales.
En cuanto al servicio de agua potable, la región del Papaloapan también es una
de las más deficientes. En la subregión Medio Papaloapan, el 53% de los habitantes
cuenta con cobertura, mientras que en el Bajo Papaloapan el porcentaje aumenta a
casi 73% de la población. De acuerdo con el número de personas que vive en las partes
media y baja de la cuenca19, y los porcentajes antes mencionados, se concluye que
más de 700 mil habitantes (cerca del 30% del total) no cuentan con el derecho básico
a agua limpia y segura. La escasez en los servicios de agua potable y alcantarillado
refleja el alto grado de marginación de los habitantes de la cuenca del Papaloapan.
En la zona, el uso de agua subterránea para abastecimiento público-urbano,
consumo industrial y riego agrícola es importante. De la disponibilidad media anual
estimada en los mantos acuíferos (58.5 hm3), 20.5 hm3 están concesionados para
alguno de estos usos. Es necesario recalcar que la extracción de agua subterránea
para usos consuntivos no es sustentable, pues el tiempo de recarga es mucho mayor
al de extracción. Por otro lado, los problemas de contaminación afectan también a los
mantos freáticos, pues las fosas sépticas indebidamente construidas y las fugas en los
tanques de almacenamiento de combustibles son fuentes probadas de polución. Otro
problema, cada vez más recurrente en la zona, es la intrusión salina en los pozos, a
causa del bombeo excesivo. Los pozos profundos de las localidades de Tlacotalpan y
Alvarado ya están mostrando estos rasgos.
18 Gerencia de Planeación Hidráulica con información de INEGI, 2000a.
19 Con datos de INEGI, 2000a y 2000b, CONAPO, 2006, y CONAGUA, 2000.
446
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.3.6 Presiones por actividades económicas
En las figuras 5 y 6 se muestra la organización del sistema de actividades agrícolas,
pecuarias, industriales y urbanas alrededor del cuerpo lagunar. Por pertenecer a la
cuenca baja del Papaloapan, el complejo lagunar de Alvarado depende de lo que
ocurra en las partes altas de la misma y de los procesos productivos en torno a él.
Como se mencionó en los apartados anteriores, el aporte de sedimentos generados
por la deforestación cuenca arriba es importante y modifica los procesos estuarinos;
las descargas de aguas residuales municipales de la parte media de la cuenca son
significativas, y las agroindustrias presentes en la región del sistema lagunar realizan
descargas muy concentradas de materia orgánica, lo que degrada la calidad del agua.
Los escurrimientos provenientes de la zona agrícola también son altamente
destructivos, pues contienen cantidades importantes de nutrientes, en particular
nitrógeno y fósforo. Estos nutrientes se originan por el uso de fertilizantes para incrementar los rendimientos de cultivos y son acarreados por la escorrentía superficial.
Como los sistemas lagunarios en general se encuentran en déficit de alguno de estos
dos elementos, las especies con mayor capacidad de aprovecharlos (algas y malezas
acuáticas) se reproducen exponencialmente y rompen el equilibrio ecológico. Este
proceso, llamado eutrofización, es una grave amenaza en éste y otros humedales.
Además de los fertilizantes, el agua de los escurrimientos agrícolas contiene pesticidas
y herbicidas, que son muy tóxicos para la flora y fauna silvestre.
La falta de infraestructura de rellenos sanitarios y de cultura en la población genera un grave problema de desechos sólidos en los cuerpos de agua. Además de la
contaminación potencial del agua subterránea por los lixiviados en los tiraderos a cielo
abierto, las lagunas, los cauces y sus zonas inundables se encuentran deteriorados a
causa de los residuos sólidos municipales.
Las presiones sobre la vegetación de manglar por las actividades extractivas la
han fragmentado de manera severa y afectan a las comunidades bióticas que necesitan sus servicios. Las extracciones de recursos madereros de manglar, amparados con
permisos de aprovechamiento forestal, provocan serios impactos al entorno natural,
y ocasionan conflictos sociales y pérdidas económicas para quienes dependen de
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
447
este tipo de ecosistema. Este es el caso de las pesquerías, que se encuentran en
declive, entre otros factores, por la disminución en la capacidad de reproducción de
las especies a causa de la deforestación de los manglares. Con todo, la mayor amenaza para los manglares del Sistema Lagunar Alvarado proviene del incremento de
la frontera pecuaria. Un elemento importante a considerar es la tenencia de terrenos
con manglar, los cuales aparecen en manos de ganaderos como propiedades privadas,
mientras que la legislación reconoce este tipo de tierras como propiedad federal.
Además de la pérdida de hábitat, entre los principales problemas que enfrenta
la pesca destaca la desorganización de los pescadores. La falta de reglamentos y
Figura 5. Sistema de actividades agrícolas, pecuarias, industriales y urbanas.
Sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para este estudio, con base en INEGI, 1991, e INEGI, 2000b.
448
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 6. Sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Cultivos dominantes y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para el presente estudio, con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b, e
INEGI, 2002.
unidades de cooperación propician tanto el uso de artes prohibidas, que devastan
las reservas, como la pesca furtiva, que no respeta las tallas establecidas de captura.
Además, el aumento de la capacidad de captura, las condiciones de marginalidad de
la pesca ribereña y el uso de intermediarios agravan la situación. Todo esto se traduce
en una reducción significativa de especies de importancia económica para las pesquerías locales.
En resumen, las amenazas antropogénicas que se ciernen sobre todo el complejo
lagunar de Alvarado ponen en riesgo tanto la funcionalidad ecológica de los ecosistemas que lo componen como la subsistencia de las poblaciones locales que dependen
económicamente de los productos y servicios que ofrecen20.
20 Portilla-Ochoa, 2003.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
449
5.3.7 Vulnerabilidad
La región del sistema lagunar Alvarado se encuentra en una zona con alta incidencia
de efectos hidrometeorológicos extremos. Dentro de los más relevantes destaca el
huracán Keith, que se formó en octubre de 2000, afectando severamente al territorio
en las subregiones Bajo Papaloapan y Coatzacoalcos. Entre sus efectos se registraron
67 504 damnificados en veinte municipios de las cuencas Papaloapan, Coatzacoalcos
y Tonalá, y daños principalmente a las viviendas, infraestructura hidráulica y vías de
comunicación. Se generaron pérdidas económicas por 1 270 millones de pesos21.
Otro caso extremo se registró en el año 1999, cuando los remanentes de la
onda tropical número 11 y la interacción con el frente frío número 5 ocasionaron
lluvias puntuales de hasta 300 mm en 24 horas en la cuenca del río Tecolutla. Los
resultados fueron 63 municipios afectados en las cuencas de los ríos Tuxpan, Cazones, Tecolutla, Nautla, Misantla, Actopan, Papaloapan, Coatzacoalcos y Tonalá. Se
dañaron, principalmente, viviendas, infraestructura hidráulica y vías de comunicación.
Las pérdidas económicas se estimaron en 3 100 millones de pesos; hubo 20 940
damnificados y 120 defunciones. El cuadro 2 muestra los municipios afectados por
eventos extremos en el año 2005 y denota la vulnerabilidad de la zona.
Cuadro 2. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005
en el sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Humedal
Río Papaloapan-Laguna de Alvarado, Veracruz
Frío
Huracán
0
32
Lluvias
intensas
8
Total de
eventos
40
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
Ya que ésta es una de las cuencas más afectadas por inundaciones y los daños
económicos son cuantiosos, en los últimos años se han utilizado recursos del Fondo
de Desastres Naturales para construir obras de protección y así mitigar los efectos de
21 CONAGUA, 2003.
450
D escripción
detallada de los sitios piloto
dichos eventos. La figura 7 muestra las zonas con mayor susceptibilidad de inundación para este sitio.
Figura 7. Zonas susceptibles de inundación. Sitio Papaloapan-Alvarado.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
451
La vulnerabilidad de este sistema lagunar ante el aumento del nivel del mar es
una de las mayores de todos los sitios piloto, así como el impacto previsible de este
fenómeno en cuanto a superficies afectadas. Los humedales del interior tienen mayor
riesgo de inundación que la línea de costa debido a la geología de la zona. En efecto,
a lo largo de la costa se presentan cordones de dunas fijas que alcanzan casi los cien
metros de altura, mientras que el sistema lagunar se encuentra ceñido por estas dunas. Las únicas conexiones con el mar son la boca de Alvarado y el canal artificial de la
laguna Camaronera, que se azolvan constantemente. La boca conecta la laguna con
una compleja red de arroyos y cuerpos lagunares que se encuentran bordeados por
tierras bajas inundables. Ante los recurrentes fenómenos meteorológicos, particularmente tormentas y huracanes tropicales, las áreas inundables se expanden alrededor
de 20 km tierra adentro o aún más, siguiendo los márgenes fluviales.
Ante el aumento previsto de casi medio metro del nivel del mar, hacia el año 2050
es muy probable que se pierdan más de la mitad de los humedales de agua dulce
(acotados a su superficie promedio en época de estiaje) y los manglares se expandan
sobre ellos. La migración de los ecosistemas lagunares dependerá de condiciones
topográficas puntuales y del régimen torrencial que prive sobre los ríos a futuro.
En suma, las principales amenazas del cambio climático para este sitio son el
aumento en el nivel medio del mar y las inundaciones provocadas por tormentas y
huracanes. Ligado a ello y al cambio en los ecosistemas, las ciudades más bajas del
sitio probablemente padecerán problemas de abasto de agua e inundaciones en sus
zonas de expansión. Al realizar reducciones de escala de los modelos globales del
clima se obtienen los siguientes resultados para el sistema lagunar de Alvarado hacia
finales del presente siglo:
• La temperatura se incrementará entre dos y tres grados centígrados, y el periodo
de cambio significativo iniciará a partir de 205022.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre mayo y septiembre, siendo
el verano el periodo de mayor cambio.
22 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
452
D escripción
detallada de los sitios piloto
• Las ondas de calor se triplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales. Los periodos secos
serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los cambios en precipitación pueden variar desde una reducción del 5% hasta un
aumento del 10%. Estos resultados no toman en cuenta los eventos extremos
como “nortes” y huracanes, los cuales serán más intensos23.
Es importante recalcar la necesidad imperante de mejorar los servicios de salud
para atender a la población afectada por los eventos hidrometeorológicos extremos
y las inundaciones resultantes. En la actualidad no se cuenta con la infraestructura
necesaria para hacerlo.
5.3.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación ante el cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y su capacidad de afrontarlos. A continuación se presentan los resultados para el sitio piloto
Papaloapan-Alvarado.
En la figura 8 se puede observar que los municipios localizados en el sitio piloto
tienen grados de sensibilidad ante el cambio climático que van del nivel alto (Ignacio
de la Llave, Acula e Ixmatlahuacán), a medio (Tlacotalpan) y bajo (Alvarado). En esta
región destaca el municipio de Playa Vicente, que presenta un grado de sensibilidad
alta.
23 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
453
Figura 8. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro de la zona
de influencia del sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado, Veracruz.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
Figura 9. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático en los municipios dentro de
la zona de influencia del sitio piloto Río Papaloapan-Laguna de Alvarado, Veracruz.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
454
D escripción
detallada de los sitios piloto
En cuanto al indicador de capacidad de adaptación al cambio climático (figura 9),
encontramos que el municipio de Ignacio de la Llave tiene un grado bajo; Ixmatlahuacán y Acula cuentan con grados medios, y Alvarado y Tlacotalpan presentan una
capacidad alta para adaptarse a dicho fenómeno.
5.3.9 Proyecciones en el uso del suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia el 2020 en el uso de suelo para la
zona costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas entre 1976 y 2000 y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov).
De manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto, con los siguientes
resultados para el sistema estuarino Papaloapan-Alvarado.
De acuerdo con los resultados arrojados en este ejercicio, se deduce que en la
cuenca predominarán regiones de agricultura de temporal y pastizales inducidos (figura 10). Esto sugiere que los cambios más importantes en la cuenca se presentarán
por procesos de permanencia e intensificación de agricultura, y ganadería de tipo
extensivo. El sitio piloto experimentará cambios similares, los cuales predominarán en
ambas márgenes del río. La agricultura de temporal y el pastizal inducido sustituirán
a zonas de vegetación secundaria, y selvas bajas y medianas, así como sabanas. Las
áreas de bosque de pino en la cuenca tienen un 40% de probabilidades de permanecer. La conversión a zonas de conservación de matorral espinoso se observará para el
noroeste de la cuenca (superior al 80% de probabilidad).
R ío Papaloapan -L aguna
de
A lvarado
455
Figura 10. Probabilidades de cambio de uso de suelo para el 2020 por clases de cobertura.
Sitio Papaloapan-Alvarado.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
456
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.4 Sitio piloto Río Coatzacoalcos-
Laguna El Colorado
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.,
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.4.1 Descripción física1 e hidrológica
El río Coatzacoalcos comprende la Región Hidrológica 29 de la CONAGUA y se localiza en la vertiente del Golfo de México. Es uno de los ríos más caudalosos de la
república mexicana y recibe numerosos afluentes por ambas márgenes. Entre ellos
están los ríos Chichihua, Sarabia, Jaltepec, Solosúchil, Chalchijapa y Uxpanapa. El
Coatzacoalcos nace en la Sierra Atravesada del estado de Oaxaca a 2 000 msnm,
con una dirección inicial hacia el oeste, luego se desvía hacia el norte y, finalmente,
con una dirección noroeste, desemboca en la parte sur del Golfo de México. Ocupa el
segundo lugar del estado de Veracruz en descarga fluvial, con 32 941 hm3 al año2.
La desembocadura del río Coatzacoalcos es el punto más meridional del Golfo de
México y el que marca en línea recta hacia el Pacífico la parte más estrecha del Istmo
de Tehuantepec. Su abundante caudal lo convierte en la cuarta corriente más importante del país. Alcanza una profundidad de hasta 15 m y es navegable en dos terceras
partes de su curso (cerca de 220 km). El área aproximada de la cuenca relacionada
con el sitio piloto3 es de 21 500 km2 (incluye los ríos Coatzacoalcos, Temoloapa,
1 La mayoría de la información sobre la descripción física de este sitio puede encontrarse en la ficha Ramsar de
la laguna de Sontecomapan (datos regionales), Gómez, 2003; Jozada et al., 1986, y Contreras y Castañeda,
1995.
2 Moreno et al., 2002.
3 Estimaciones de Rodríguez et al., 2007, para este estudio.
457
Metzapa y Boca Jicacal; el río Corte, que luego se convierte en Uxpanapa, también
forma parte de esta cuenca). La figura 1 presenta los gastos medios anuales del río
Coatzacoalcos de 1953 a 1998.
Figura 1. Gasto medio anual en la estación hidrométrica Las Perlas, ubicada sobre el río
Coatzacoalcos. Región Hidrológica 29 y Región Administrativa X de la CONAGUA.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
En este sistema estuarino se desarrolla una dinámica hidrológica compleja de
zonas pantanosas, dominada por el río Coatzacoalcos y su intercambio con el
mar. Las inundaciones son periódicas y en ellas intervienen masas de agua con
características fisicoquímicas distintas (como cargas variables de sedimentos y
contaminantes) en procesos de flujo, reflujo y mezclas. Las zonas pantanosas
se localizan en áreas con altitudes que varían entre los 0 y 5 msnm. En ellas
confluyen las aguas salinas del Golfo de México, por efecto de las mareas y el
oleaje, con el agua dulce de las corrientes. El resultado es un área con gran di458
D escripción
detallada de los sitios piloto
versidad de ecosistemas, fruto de la conjunción de interacciones entre el clima
regional, el sistema hidrológico y las especies que ahí habitan. La figura 2 es una
imagen de satélite de la desembocadura del río Coatzacoalcos con la delimitación
del sitio piloto, mientras que la figura 3 representa de manera esquemática las
características físicas del lugar.
Figura 2. Imagen de satélite de la desembocadura del río Coatzacoalcos con la
delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
Se distinguen dos grandes grupos de suelos. Por un lado, las partes planas y bajas,
que ocupan una superficie aproximada de 50%, tienen suelos que presentan procesos hidromórficos4 y cuya característica es la escasa permeabilidad (baja capacidad
de drenaje). Cabe mencionar que la presencia de suelos hídricos es una de las princi4 Suelo hidromórfico: suelo sobresaturado debido al escaso drenaje, en marismas, pantanos, zonas de infiltración o
zonas inundadas.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
459
Figura 3. Esquema del sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
pales características para definir un humedal, y uno de los atributos esenciales para su
delimitación (ver sección 1.3). El otro grupo de suelos son los ferruginosos, caracterizados por estar en condiciones de fuerte oxidación, presentándose principalmente
460
D escripción
detallada de los sitios piloto
en las zonas elevadas, libres de inundación, por lo que su problemática fundamental
es la erosión.
El tipo de clima que impera en la localidad es cálido húmedo, con abundantes
lluvias en verano y pequeñas temporadas de menor precipitación dentro de la estación lluviosa, llamadas sequía de medio verano. A principios de otoño e invierno
hay precipitaciones por influencia de los “nortes”. La precipitación media anual es de
2 832.20 mm. La temperatura media anual oscila entre los 22 y 26 °C. La temperatura del mes más frío se encuentra arriba de los 18 °C.
5.4.2 Relevancia ecológica
El humedal de la desembocadura del río Coatzacoalcos está catalogado por la CONABIO como región prioritaria terrestre, marina e hidrológica. De acuerdo con el
Inventario Nacional Forestal 20005, en el sitio se encuentran diversas comunidades
vegetales, como puede apreciarse en el cuadro 1.
Cuadro 1. Comunidades vegetales y superficie en hectáreas.
Comunidades vegetales
Manglar
Popal-tular
Selva alta y mediana perennifolia
Vegetación de dunas costeras
Vegetación halófila gipsófila
Superficie (ha)
1 648.26
47 590.16
27 800.73
298.16
803.45
Es de particular importancia la presencia de amplias zonas con mangle rojo, mangle negro, mangle blanco6, tular y popal, todos ellas con la categoría de protección
especial por la norma NOM-059-ECOL-2001.
A lo largo del cauce del Coatzacoalcos se puede apreciar vegetación riparia, tular
y popal en zonas inundables, correspondientes a las cuencas baja y media; selva alta
perennifolia y mediana subperennifolia en lomeríos; bosques mesófilo de montaña, de
pino y de pino-encino en partes altas, así como pastizal cultivado y zonas de acahual.
5 SEMARNAP, 2001.
6 En el mismo orden: Rizophora mangle, Avicenia germinans y Laguncularia racemosa.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
461
Dentro de la fauna registrada en la región bajo la NOM-059-ECOL-2001 destacan las aves matraca nuca rufa (Campylopterus excellens) y Chivilín de nava (Hylorchilus navai), que poseen la categoría de amenazadas. También existen ocho especies
de peces catalogadas como amenazadas y endémicas (Atherinella sallei, A. schultzi,
Cichlasoma callolepis, C. regani, Heterandria sp., Rivulus robustus, Xiphophorus clemenciae y Priapella intermedia). Los reptiles chopontil (Claudius angustatus) y tortuga tres
lomos (Staurotypus triporcatus) son característicos del sitio, y se encuentran listados
bajo peligro de extinción y protección especial, respectivamente.
Además, se tienen registradas 656 especies de vertebrados terrestres, que incluyen 36 anfibios, 103 reptiles, 426 aves y 91 mamíferos7. Entre los vertebrados
terrestres se pueden distinguir dos grandes grupos: aquellos asociados con los humedales (pantanos, manglares y playas) y los de ambientes boscosos (bosque tropical
perennifolio y sabana). Dentro de las especies nativas, endémicas y normadas se
tienen registradas 52 especies, de las cuales cuatro están reguladas en la NOM-059ECOL-2001. Asimismo, se han registrado dos especies exóticas introducidas.
5.4.3 Descripción socioeconómica
En el año 2000, la zona de influencia8 del sitio piloto contaba con 1 084 051 habitantes y una tasa de crecimiento poblacional baja, de 0.82%9. De seguir con esta
tendencia, la población para el año 2030 será de 1 093 099 personas10. Entre los
ocho sitios piloto de estudio, el de la desembocadura del Coatzacoalcos abarca el
mayor número de municipios: Coatzacoalcos, Pajapan, Chinameca, Cosoleacaque,
Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río, Minatitlán, Las Choapas, Zaragoza, Jáltipan,
Texistepec, Sayula de Alemán e Hidalgotitlán.
Debido al auge de las actividades de extracción y procesamiento de hidrocarburos, el sistema urbano Coatzacoalcos-Minatitlán está entre las localidades con
7 Aranda y March, 1987; González-García, 1993; Hall y Dalquest, 1963; Herzig, 1986; Howell y Webb, 1995;
Pelcastre y Flores, 1992; Schaldach y Escalante, 1997.
8 Incluye otros municipios, vinculados con los situados dentro del sitio piloto a través del Programa Estatal de
Desarrollo (ver figura 12)
9 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
10 Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO, 2006.
462
D escripción
detallada de los sitios piloto
mayores tasas de urbanización y menores índices de marginalización de la zona del
Golfo. Esto se ve reflejado en la capacidad de generar empleos, pues Coatzacoalcos
ocupa entre el 1 y 4% del total de habitantes en todo el Golfo de México, aunque la
tasa de generación de empleos ha bajado en los últimos años y se ubica por debajo
de la regional11. Por otro lado, municipios aledaños como Pajapan son más rurales;
cuentan con una elevada concentración de población indígena (nahuas) e índices de
marginación más altos.
En términos económicos, la región de este humedal se encuentra en pleno
crecimiento. Las actividades agropecuarias y pesqueras han tenido un crecimiento
sostenido, con un incremento en la producción cercano al 18%. Tanto las inversiones
en estos sectores como el personal ocupado han aumentado en el periodo de 1999 a
2004. Por su lado, el sector turismo ha presentado crecimiento económico de 14%,
respaldado por la actividad industrial del sitio. La producción manufacturera, impulsada por la industria petroquímica y sus derivados, registró tasas de crecimiento de 12%
en ese mismo periodo12. Sin embargo, las condiciones particulares en las que opera la
paraestatal PEMEX hacen que el capital generado por la venta y el procesamiento del
petróleo no se quede en la región. En contraste, los efectos negativos por la presencia
de dicha industria, como la contaminación y alteración de ecosistemas, sí persisten.
A pesar de los buenos indicadores económicos, los servicios para la gente que
habita en la zona del humedal no son satisfactorios. La cobertura del sector salud en
el área es similar a la de los humedales del Papaloapan, con casi siete de cada diez
habitantes sin atención; la tasa de dotación de servicio de agua potable es inferior a
la regional y, aunque se han realizado esfuerzos en cuestión de drenaje, la cobertura
dista mucho de cubrir la demanda13. Se trata, en suma, de una región en expansión
económica que requiere obras de asistencia social, dado que no cuenta, por ejemplo,
con hospitales de primer nivel. Resulta relevante que la tasa de crecimiento de la población más pobre (quienes ganan menos de un salario mínimo) es positiva (2.05%
anual) y casi el doble de la regional.
11 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a, e INEGI, 2005.
12 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a, e INEGI, 2005.
13 Graizbord et al., 2007 con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
463
5.4.4 Presiones por actividades económicas
El principal motor de las actividades económicas alrededor del sistema estuarino de
Coatzacoalcos es la industria petroquímica. Se estima que PEMEX elabora el 85% de
los productos derivados del petróleo (gasolina, turbosina, combustóleo y gas licuado) en esta zona. La producción se realiza dentro de los parques industriales Lázaro
Cárdenas, Cosoleacaque, Cangrejera, Morelos y Pajaritos, todos en las márgenes del
río, por lo que dicha infraestructura domina el uso de suelo industrial en el sitio. El
vertido de desechos industriales provenientes de estos complejos ha ocasionado que
el Coatzacoalcos sea uno de los ríos más contaminados del país.
Gracias a su navegabilidad, el río Coatzacoalcos se utiliza como medio de transporte para llevar al mar los derivados del petróleo aquí producidos y así abastecer
a distintos puntos de la república. El tránsito de embarcaciones de gran calado, los
puertos de Coatzacoalcos y Minatitlán, al igual que la naturaleza contaminante de la
carga transportada constituyen un grave peligro para los ecosistemas presentes y para
la población que depende de ellos. Los accidentes y derrames han sido constantes
desde que PEMEX se instaló en la zona del humedal. Tanto en los procesos de carga
y descarga de buques, como en la operación de los barcos mercantes, se vierten sustancias altamente tóxicas en las aguas del río. Entre los efectos registrados se tienen
la existencia de altas concentraciones de hidrocarburos fósiles en los sedimentos y
tejidos de la fauna del estuario14; la presencia de plomo y mercurio en la columna de
agua, sedimentos y tejidos de la fauna del río Coatzacoalcos15; riesgo bioacumulativo
en la población que captura y consume peces y crustáceos de los ríos Coatzacoalcos
y Calzadas, debido a las elevadas concentraciones de plomo y mercurio encontradas
en la fauna de la región16.
Se tiene, entonces, que el complejo petroquímico ha afectado los ecosistemas y
la biodiversidad en la cuenca del río Coatzacoalcos y su zona costera; atentado contra
el desarrollo de la pesca artesanal; afectado las condiciones sanitarias de la población,
y la ha expuesto a una situación de riesgo y vulnerabilidad ambiental.
14 Botello, 1985.
15 Rosas, 1974; Pérez-Zapata, 1983.
16 Ochoa, 1972; Rosas-Zapata, 1974; Pérez-Zapata, 1983.
464
D escripción
detallada de los sitios piloto
Aunque la pesca comercial sigue incrementando su producción, las pesquerías en
la zona pantanosa se han deteriorado por el efecto de la suma de actividades productivas realizadas en el sitio. La pesca artesanal ha sido históricamente una fuente
de ingreso y alimento para numerosas familias, y está en serios problemas debido a
la contaminación de los cuerpos de agua y sus zonas inundables. Las especies más
capturadas son acamaya, robalo, camarón, bagre, mojarra y tilapia.
El desarrollo de la industria petroquímica ha propiciado la expansión de la mancha
urbana, sobre todo en el corredor Coatzacoalcos-Minatitlán, por lo que este sistema
es uno de los más impactados de los ocho sitios piloto de estudio. Además, las actividades agropecuarias han expandido sus fronteras, desplazando a la vegetación
natural. En la figura 4 se pueden ver las alteraciones del medio ambiente ocasionadas
por las actividades antropogénicas en este sitio piloto.
Figura 4. Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado. Cultivos dominantes
y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para este estudio con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b e INEGI,
2002.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
465
5.4.5 Uso de suelo
De acuerdo con el Inventario Nacional Forestal 2000 en el sitio se localizan diversos
usos de suelo, como puede observarse en el cuadro 2.
Cuadro 2. Diversos usos de suelo y superficie ocupada. Sitio piloto Coatzacoalcos.
Uso de suelo
Superficie (ha)
Agricultura de humedad
3 444.83
Agricultura de temporal
1 847.75
Asentamiento humano
Pastizal cultivado
5 484.63
111 965.91
Dentro de los ocho sitios estudiados, el humedal del Coatzacoalcos tiene una de
las mayores tasas de deforestación por la transformación de vegetación natural en
usos pecuarios y urbanos. Los usos de suelo predominantes en el sitio son la vegetación hidrófila en las márgenes de los ríos Coatzacoalcos y Uxpanapa, y los pastizales
inducidos para ganadería. En la cartografía de las dos fechas analizadas, 1976-2000,
es evidente el crecimiento de la ciudad de Coatzacoalcos hacia el sur, para prácticamente unirse con Nanchitán. También se aprecia la expansión de la mancha urbana
hacia el occidente, en dirección hacia la laguna El Ostión. Dicha concentración de
asentamientos humanos e industriales se ha hecho sobre regiones inundables y a
costa de la pérdida de vegetación hidrófila.
El aumento de agricultura de temporal y riego sobre las márgenes del río Coatzacoalcos, en dirección hacia la carretera a Minatitlán, es muy significativo y ha invadido
áreas de vegetación natural (figura 5). Los cambios negativos de uso de suelo localizados cerca del río Cuachapa (una corriente intermedia entre los ríos Coatzacoalcos y
Uxpanapa) también se deben a la apertura de zonas agrícolas. La agricultura de temporal creció de 1976 a 2000 a una tasa del 7% anual, y los asentamientos humanos
a una tasa de 5%, mientras que los cuerpos de agua perdieron 7% de su superficie
cada año (cuadro 3).
466
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 5. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000 en el sitio piloto Río
Coatzacoalcos-Laguna El Colorado, Veracruz.
Fuente: Gómez et al., 2007, para este estudio.
El principal controlador del cambio de uso de suelo es, por lo tanto, la apertura de
zonas agropecuarias. En efecto, tanto los pastizales inducidos como la agricultura de
temporal fueron los usos de suelo con mayores ganancias de superficie. Las escasas
porciones de bosques de encino pasaron en su totalidad a pastizales inducidos; el 41%
de los cuerpos de agua fue convertido a pastizales; el 40% de las selvas altas subperennifolias y perennifolias fue transformado en tierras de ganado, y el 11% de la vegetación
hidrófila fue reemplazado por pastizales (figura 5, cuadro 3). Dentro de los procesos de
cambio de frontera agrícola, el 20% de terrenos agrícolas de 1976 pasó a pastizales en
2000 y sólo el 8% de los pastizales se transformó en agricultura de riego.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
467
Cuadro 3. Cambio de uso de suelo. Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Uso de suelo y vegetación
Superficie en
1976 (ha)
Superficie en
2000 (ha)
Tasa de
transformación
Agricultura de riego y humedad
4 760
14 616
0.04
Agricultura de temporal
2 357
13 259
0.07
Asentamiento humano
1 647
5 613
0.05
12 916
2 523
-0.07
1 921
1 022
-0.03
106 628
90 588
-0.01
Selva perennifolia y subperennifolia
30 056
22 619
-0.01
Vegetación hidrófila
50 958
51 172
0.00
Bosque de latifoliadas
9
0
-1.0
Área sin vegetación aparente
0
461
1.00
211 252
201 873
 
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Pastizales inducidos y cultivados
Total
Fuente: Gómez et al., 2007, para este estudio.
5.4.6 Uso del agua
Las investigaciones del Centro de Ecodesarrollo permiten afirmar que el sitio piloto
Coatzacoalcos es una de las áreas más contaminadas del Golfo de México. Si bien la
disponibilidad de agua es abundante, su calidad la vuelve prácticamente inutilizable.
De hecho, las zonas urbanas se han visto obligadas a abastecerse de recursos hídricos
obtenidos de la sierra de Santa Martha.
Además de la problemática causada por el complejo industrial del sitio, el río
Coatzacoalcos es utilizado como receptor de las descargas de aguas residuales
municipales de las ciudades de Coatzacoalcos y Minatitlán. Cuenca arriba, la construcción de presas, la utilización y desviación del agua para diversos usos, así como
la deforestación, han ocasionado cambios en el patrón hidrológico del humedal y
las aportaciones de sedimentos. El saneamiento y la recuperación de la cuenca del
468
D escripción
detallada de los sitios piloto
Coatzacoalcos fueron, por lo tanto, prioritarios dentro del Plan Hídrico Nacional
1996-2000.
La población registrada por el consejo de cuenca del río Coatzacoalcos para la
ciudad del mismo nombre es de 225 973 habitantes, mientras que para la de Minatitlán se estiman 109 193 usuarios17. El reto de los organismos operadores de agua
en el sitio es dotar con servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento a más
de 330 mil personas. En coberturas de agua potable, la cuenca del Coatzacoalcos
atiende actualmente a 64.2% de la población18; pero, como en el resto de la región, este porcentaje no refleja las disparidades entre las áreas urbanas y rurales. El
abastecimiento de agua para usos público e industrial se realiza en gran medida por
aguas subterráneas. Esto ha ocasionado la sobreexplotación del acuífero costero de
Coatzacoalcos, que ya muestra problemas de intrusión salina. Este acuífero cuenta
con un volumen de agua concesionada de casi 37 hm3 anuales.
En cuanto al servicio de alcantarillado, se beneficia al 73.4% de la población, pero
el detalle de cobertura muestra la falta de atención a las localidades rurales, donde
casi siete de cada diez personas no cuentan con drenaje. Es evidente el contraste
con la sección urbana, donde sólo el 10% de la población carece del servicio19. En
la cuenca del Coatzacoalcos, como en el resto del país, las tasas de depuración del
total de aguas residuales generadas y conducidas es extremadamente baja, por lo
que se deben realizar esfuerzos significativos en este rubro para sanear sus ríos y
demás cuerpos de agua. Ya se cuenta con estaciones de monitoreo de contaminación
localizadas a lo largo de la cuenca, pero dada la conjunción de diversos factores contaminantes y el derrame económico del sitio, es urgente implementar medidas que
reviertan el estado actual de deterioro.
17 INEGI, 2000a.
18 Gerencia de Planeación Hidráulica, con información de INEGI, 2000a.
19 Ídem 17.
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469
5.4.7 Vulnerabilidad
El humedal de la desembocadura del río Coatzacoalcos, como gran parte de la zona
costera del golfo, es vulnerable a los efectos de eventos hidrometeorológicos extremos. Las inundaciones por abundantes y frecuentes precipitaciones representan el
mayor riesgo. Las lluvias extremas más comunes se producen por una gran afluencia
de aire marítimo tropical que se combina con la entrada de algún frente frío. Los
efectos de la interacción entre el frente frío número 5 y la onda tropical número 11
en 1999 en la cuenca del Coatzacoalcos, entre otras, sumaron pérdidas por 3 100
millones de pesos, 20 940 damnificados y 120 muertes.
Las precipitaciones ciclónicas pueden tener efectos de igual o mayor intensidad.
Los efectos de huracán Keith en el año 2000 fueron expuestos en la sección 5.3,
pues afectó tanto las cuencas del Papaloapan como del Coatzacoalcos. En suma,
fueron 67 504 damnificados y pérdidas económicas por 1 270 millones de pesos.
Un evento más reciente es el huracán Stan, la décima octava tormenta tropical y
el décimo primer huracán de la temporada de huracanes de 2005 en el Atlántico.
En México, ingresó por la costa del Golfo de México en la región de los Tuxtlas,
donde más de cien mil personas fueron evacuadas, y avanzó por las regiones costeras,
incluyendo el puerto de Veracruz, Boca del Río, Minatitlán y Coatzacoalcos. En total
se registraron 98 decesos, de los cuales 86 fueron en Chiapas, cinco en Oaxaca,
cuatro en Hidalgo, tres en Puebla y saldo blanco en Veracruz. El cuadro 4 muestra los
municipios afectados durante 2005 en la zona de este sistema lagunar.
Cuadro 4. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005,
Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Humedal
Río Coatzacoalcos (UxpanapaLaguna El Colorado), Veracruz
Frío
Huracán
Lluvias intensas
Total de eventos
0
25
13
38
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
470
D escripción
detallada de los sitios piloto
Dado que la cuenca del Coatzacoalcos es una de las más afectadas anualmente
por las inundaciones, se han construido obras de protección que en los últimos años
se realizaron con recursos del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN). En la figura
6 se pueden apreciar las zonas más vulnerables del sitio a inundaciones por lluvias
torrenciales o un aumento del nivel del mar.
Si se confirman los resultados previstos hacia el año 2050 por los modelos
climáticos, el aumento del nivel de mar y la disminución de la precipitación en el
Istmo de Tehuantepec tendrán un impacto creciente sobre las zonas pantanosas
y tierras inundables de la desembocadura del río Coatzacoalcos. Una de las áreas
más afectadas será el gran pantano que separa las ciudades de Minatitlán y Coatzacoalcos. Este humedal ha mantenido popales y tulares, a pesar de tener zonas
que alcanzan tres y cinco metros bajo el nivel del mar, gracias a los importantes
aportes fluviales que recibe de los ríos Coatzacoalcos, Uxpanapa y HuazuntlánCalzadas. El ecosistema de este pantano se ha mantenido con vida, no obstante la
contaminación, y los rellenos y movimientos de tierra realizados en él para cimentar
la autopista de 11 km que comunica a las dos ciudades, canalizar oleoductos y
gasoductos, o para ganar suelo urbano e industrial. Gracias a los aportes antes
mencionados, el ecosistema logra depurar y sedimentar los desechos y descargas
urbanas e industriales en cada ciclo anual.
La intrusión marina probablemente significará la transición de estos ecosistemas
de agua dulce a otros de agua salobre, reflejándose principalmente en el reemplazo
de tulares por manglares. La disminución prevista en la precipitación acelerará la transición, pues el agua salina, que hoy en día penetra hasta 40 km aguas arriba en las
corrientes mencionadas, podría aumentar su concentración si los regímenes torrenciales disminuyen. La entrada del mar producirá entonces cambios en la composición
actual de la flora y fauna; afectará las actividades de pesca y reducirá la disponibilidad
puntual de agua dulce tanto superficial como subterránea. Algunas porciones de la
infraestructura vial y petrolera que surca los pantanos (terraplenes de autopistas,
puentes y poliductos) probablemente funcionarán como barreras, delimitando zonas
con mayor o menor grado de salinidad. Sin embargo, sus secciones metálicas tendrán
un desgaste acelerado por la corrosión salina.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
471
Figura 6. Zonas susceptibles de inundación.
Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para el presente estudio.
472
D escripción
detallada de los sitios piloto
Los sectores aledaños a la línea de costa posiblemente vivan un impacto menor
que los humedales del interior, pues se encuentran protegidos por dunas fijas que
alcanzan varios metros de altura. Diversos tramos del litoral al oeste de la desembocadura resistirán mejor el aumento del nivel del mar, exceptuando el sector de
Barrillas, donde predominan dunas móviles más bajas y hacia donde se expande con
rapidez la mancha urbana. El sector oriente, que abarca desde la congregación de
Allende hasta Tonalá, también es vulnerable por la presencia de pequeñas lagunas
costeras, someras, conectadas con o muy cercanas al mar. En Allende, esos cuerpos
atrapados entre el litoral y la dársena de Pajaritos acortan las posibilidades del crecimiento urbano y obligan a su expansión linear a lo largo de la costa.
Las principales amenazas del cambio climático para este sitio son, por lo tanto,
el aumento en el nivel medio del mar, y las inundaciones provocadas por tormentas
severas y “nortes”. En cuanto a las actividades antropogénicas que ponen en riesgo
el ecosistema, destacan la pérdida de biodiversidad y cobertura vegetal por el crecimiento industrial, urbano y agropecuario.
Al generar reducciones de escala de los modelos globales del clima se obtuvieron
los siguientes resultados para el sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado
hacia finales del presente siglo:
• La temperatura se incrementará entre 2 y 3.5 °C, y el periodo de cambio significativo iniciará a partir de 205020.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre mayo y junio, resultando el
periodo de mayor cambio en verano.
• Las ondas de calor se duplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales.
• Los periodos secos serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los cambios en precipitación pueden variar desde una reducción del 5% hasta un
aumento del 10%. Estos resultados no toman en cuenta los eventos extremos
como “nortes” y huracanes, los cuales serán más intensos21.
20 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
21 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
473
El análisis histórico de escurrimientos a partir de la estación hidrométrica Las
Perlas no muestra una tendencia clara (figura 7). Sin embargo, al estimar los escurrimientos futuros por medio de modelos, calibrados con base en los datos históricos
(figuras 8), se obtiene una tendencia negativa para los dos escenarios estudiados
(figuras 9, 10 y 11).
Figura 7. Hidrograma de escurrimientos de la estación Las Perlas, río Coatzacoalcos.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, para este estudio utilizando la base de datos de estaciones
meteorológicas ERIC III.
Figura 8. Magnitud de los escurrimientos observados (negro) versus estimados con el modelo
HadCM3 (gris) entre 1990 y 1999 en el río Coatzacoalcos (m3/s).
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, para este estudio.
474
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 9. Magnitud de los escurrimientos medios mensuales observados versus estimados
con el modelo HadCM3 para el sistema estuarino Coatzacoalcos-El Colorado bajo el
escenario A2.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, para este estudio.
Figura 10. Magnitud de los escurrimientos medios mensuales observados versus estimados
con el modelo HadCM3 para el sistema estuarino Coatzacoalcos-El Colorado bajo el
escenario B2.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, para este estudio.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
475
Figura 11. Escenario de los escurrimientos bajo los escenarios A2 y B2 usando el modelo
HadCM3. Sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Magaña et al., 2007, para este estudio.
5.4.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación ante el cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y capaz de
afrontarlos.
El sitio piloto Coatzacoalcos-El Colorado es uno de los de mayor divergencia en
los índices de sensibilidad ante el cambio climático por municipio. Cuenta con grados
que van desde el muy alto (Hidalgotitlán), pasando por los altos registrados en los
municipios de Pajapan, Las Choapas, Oteapan, Zaragoza, Texistepec y Sayula de
476
D escripción
detallada de los sitios piloto
Alemán. En la zona del humedal se localizan municipios con grados medios de sensibilidad, como Minatitlán, Jáltipan, Chinameca, Ixhuatñan del Sureste y Moloacán,
seguidos de aquellos con grados bajos como Cosoleacaque y muy bajos, como Nanchital y Coatzacoalcos.
Figura 12. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro de la zona
de influencia del sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
Por otra parte, en cuanto a la capacidad de adaptación al cambio climático, observamos una franja continua de municipios con grados muy altos de adaptación que
contiene a Minatitlán, Cosoleacaque, Coatzacoalcos y Agua Dulce. En tanto que municipios como Chinameca, Ixhuatlán del Sureste y Jáltipan registran grados altos. En
particular, se observan los casos de Pajapan y Zaragoza con grados bajos, y Soteapan,
al extremo norte de la región, que tiene un grado de adaptación muy bajo.
R ío C oatzacoalcos -L aguna E l C olorado
477
Figura 13. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios dentro de
la zona de influencia del sitio piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
5.4.9 Proyecciones en el uso del suelo
El modelo para proyectar los cambios en el uso de suelo es de tipo probabilístico (módulo de Markov) y resulta de las tendencias encontradas en el análisis cartográfico
entre 1976 y 2000. La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia el 2020 en el
uso de suelo para la zona costera del Golfo de México. De manera similar, se realizó el
mismo ejercicio en cada sitio piloto. A continuación se presentan los resultados para
el sistema estuarino Coatzacoalcos-El Colorado.
De acuerdo con el modelo, las mayores probabilidades de cambio (entre el 0.5
y 1.0) serán para la clase de pastizal cultivado y agricultura de riego para la zona de
las márgenes del río Coatzacoalcos (figura 14). Este uso de suelo predominará sobre
regiones de cuerpos de agua, matorrales y selvas bajas. Las zonas de agricultura de
478
D escripción
detallada de los sitios piloto
temporal aumentarán en la región noroeste del sitio de estudio con probabilidades de
0.7 a 1.0. Estos cambios se presentarán principalmente sobre zonas de selvas bajas y
selvas medianas. La vegetación secundaria predominará en el pie de monte cercano
a las regiones de selvas altas y bosques de pino, lo que sugiere un aumento de las
zonas de disturbio de las serranías del Istmo de Tehuantepec. Como consecuencia,
la probabilidad de permanencia de las selvas altas perennifolias de la cabecera de la
cuenca (región sur) se reduce al 50%.
Figura 14. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020, por clases de cobertura. Sitio
piloto Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
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479
5.5 Sitio piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona
Javier Bello et al., Mauricio Cervantes Ábrego,
Leticia Gómez et al., Víctor Magaña et al.,
Boris Graizbord et al., Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.5.1 Descripción física1 e hidrológica
El sistema lagunar Carmen-Pajonal-Machona se encuentra en una llanura formada
por el delta de los ríos Mezcalapa (Grijalva) y Usumacinta, los cuales forman la Región Hidrológica 30 de la CONAGUA. Se presenta una topografía plana con áreas de
depresión, cuya altitud varía de 2 a 17 metros sobre el nivel del mar. La humedad es
una constante durante la mayor parte del año, producto del manto freático que varía
entre los cincuenta centímetros y los cuatro metros de profundidad2.
Las lagunas El Carmen y La Machona están consideradas entre las más importantes lagunas albuferas de la región. Se sitúan en el flanco noroeste del delta del río
Mezcalapa y están unidas por la laguna El Pajonal (ver figura 1). Estas lagunas son el
remanente de un cuerpo lagunar más amplio, paralelo a la actual línea de costa, del
que formaron parte las lagunas La Redonda y La Palma. Las lagunas están aisladas del
Golfo de México por una barrera litoral angosta formada por antiguas líneas de playa,
y por dunas activas o estabilizadas. La comunicación con el Golfo se realiza por medio
de dos bocas: la primera está situada al noroeste de la laguna El Carmen, es natural
1 Gran parte de la información sobre la descripción física de este sitio puede encontrarse en las siguientes referencias: Gutiérrez y Galaviz, 1983; Resource Database for Gulf of Mexico Research, 2001; Gerez, s.f; Liaño s.f.; De
Lare y Gutiérrez, s.f.; Castañeda y Contreras, 2001.
2 López et al., 1997.
480
Figura 1. Lagunas Carmen, Pajonal y Machona.
Fuente: Gutiérrez y Galaviz, 1983.
y está sometida a intensa sedimentación; la segunda se encuentra al noreste de la
laguna La Machona, es artificial y está expuesta a la erosión marina3.
La barrera litoral que separa a las lagunas del Carmen, Pajonal y La Machona del
Golfo de México tiene una longitud de 35 kilómetros; mide de 300 a 600 metros
de ancho, con una elevación de entre uno y seis metros sobre el nivel del mar. Hacia
sotavento de la barrera (en la margen noroeste del sitio) se tienen extensos pantanos
de manglar que tienden a segmentar las lagunas.
3 Gutiérrez y Galaviz, 1983.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
481
La comunicación con el mar representa el principal volumen de agua entrante
al sistema lagunar. El aporte de agua dulce hacia la laguna Machona depende esencialmente del río Santa Ana (que vierte su caudal en la porción noreste de la laguna)
mientras que la laguna del Carmen recibe los aportes de los ríos San Felipe y Naranjillo en su extremo noroeste. Estas corrientes presentan trayectorias muy cortas y
transportan escurrimientos pluviales. Su gasto medio es desconocido.
Las lagunas El Carmen y La Machona son paralelas a la línea de costa actual y se
extienden por una distancia de 36 km; la orientación de su eje principal va del noreste
al suroeste. Cuentan con un ancho medio de 6.0 km y están unidas por un cuerpo
lagunar angosto, de 9 km de longitud y 1 km de anchura media: la laguna Pajonal.
El área total cubierta por las lagunas es de 190 km2, aproximadamente, sin incluir
a las pequeñas lagunas La Palma y La Redonda. Las áreas mínimas estimadas4 son
las siguientes: laguna El Carmen, 90.0 km²; laguna Pajonal, 14.0 km², y laguna La
Machona, 84.0 km².
Las lagunas son someras, con una profundidad media, referida al nivel medio del
mar, de 0.90 m, y valores máximos de 10.0 m en la boca de Panteones. El piso de
las lagunas es sensiblemente llano y cuenta con los siguientes rasgos geomórficos
distintivos: canales naturales de marea poco desarrollados y localizados en las bocas
lagunares, abundantes bancos de ostión y un canal artificial, dragado desde la boca
Santa Ana hasta el estero de La Redonda, que comunica con los ríos San Felipe y
Santa Ana5. La figura 2 es una imagen de satélite de la zona, con la delimitación del
sitio piloto, mientras que la figura 3 representa de manera esquemática las características físicas del lugar.
La velocidad y dirección de las corrientes corresponden con el flujo de marea y el
régimen de viento, con un rango de variación entre 0 y 200 cm/s. Se observan las
mayores velocidades en las bocas de Santa Ana y Panteones al descender la marea.
Durante las tormentas, el agua que ingresa a las lagunas fluye con velocidades de
hasta 150 cm/s, a través de las dos bocas lagunares6.
4 Idem 3.
5 Idem 3.
6 Idem 3.
482
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 2. Imagen de satélite del Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona con la
delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
El clima del área es cálido húmedo, con lluvias en verano7 y temperatura media
anual de 26 °C. Durante los meses invernales existen cambios meteorológicos que
generan fuertes lluvias y el descenso de la temperatura, principalmente por los “nortes”. La precipitación pluvial media es de 1 500 mm/año, con una evaporación media
de 1 600 mm/año. El escurrimiento medio anual es de 300 mm, con máximos en
octubre y mínimos en abril8.
7 García, 1964.
8 Servicio Meteorológico Nacional, 1970.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
483
Figura 3. Esquema del sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
484
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.5.2 Relevancia ecológica
Este sitio provee protección a diferentes especies acuáticas y representa una zona
de transición donde conviven especies de los ambientes marino y estuarino. Es zona
cinegética9 de mamíferos. Gracias a los servicios ambientales que presta, el sistema
lagunar Carmen-Pajonal-Machona está considerado como región prioritaria terrestre,
marina e hidrológica de acuerdo con la CONABIO. Actualmente este sistema lagunar
se encuentra en proceso de ser catalogado como Área Natural Protegida10 y es área
de importancia para la conservación de las aves. Es, además, sitio de importancia
internacional de la Convención de Ramsar y pertenece a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (WHSRN).
La vegetación que circunda al sistema lagunar es típica de las zonas tropicales
lluviosas y está caracterizada por los bosques tropicales de manglar, con árboles de
mangle negro (Avicennia germinans) y rojo (Rizophora mangle), de hasta 4 m de
altura, que se extienden hacia los ríos y lagunas adyacentes. La distribución de los
manglares está controlada por la influencia de la marea, la disponibilidad de agua
dulce, la insolación, la temperatura ambiental y la textura de los sedimentos11. En la
ribera sur de las lagunas hay crecimientos aislados de pantanos de manglar, de escaso
desarrollo y expuestos a la erosión causada por el oleaje lagunar12.
En la región se observan porciones de selva alta y media perennifolia sobre suelos
con buen drenaje, y cuya existencia está determinada por condiciones climatológicas.
También existe vegetación secundaria o acahual, y vegetación hidrófila, en particular
popales, cuya presencia se debe a la falta de capacidad de drenaje del suelo.
En cuanto a la fauna presente en el sitio, se tiene un registro de cincuenta especies
de peces, 75 especies de reptiles, 26 especies de anfibios, 88 de mamíferos y más de
cien especies de aves. Entre las especies que se encuentran bajo la protección de la
NOM-059-ECOL-2001 destacan los siguientes reptiles: la tortuga blanca (Dermatemis mawii), el pochitoque (Kinosternos leucostomum), y la hicotea (Pseudemys
9 Cinegético: relacionado con la caza.
10 Mauricio Cervantes, comunicación personal.
11 Phleger y Ayala-Castañares, 1971.
12 Gutiérrez y Galaviz, 1983.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
485
scripta) bajo la categoría de protección especial; el guao (Staurotypus triporcatus), el
chiquiguao (Chelidra serpentina) y el cocodrilo de pantano (Crocodylus moreleti), con
categoría de peligro de extinción. Entre las aves se encuentran el halcón peregrino
(Falco peregrinus) y el águila pescadora (Pandion haliaetus), la cual está designada
bajo la categoría de especie en peligro de extinción.
5.5.3 Descripción socioeconómica
El sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona se encuentra ubicado en el estado de Tabasco y comprende los municipios de Cárdenas, Paraíso y Comalcalco. La población en
la zona de influencia de este sitio hacia el año 2000 era de 1 504 891 habitantes13,
con una tasa de crecimiento de 2.41% anual14. Se estima que para el 2030 la zona
albergará 1 744 428 personas15.
Las principales actividades productivas de este sitio son la extracción petrolera y
forestal, la agricultura y ganadería, la pesca y el turismo. La tasa de crecimiento en el
empleo fue alta durante el periodo 1999-2004, con 3.7%. Esta zona se encuentra
en pleno proceso de expansión de la producción agrícola y pesquera, con un crecimiento en la producción, durante el mismo periodo, de 21%. El personal ocupado en
estas actividades creció el 10%16.
Los suelos del municipio se caracterizan por ser sumamente fértiles y por lo tanto
de gran aptitud para la agricultura. Su alto grado de nutrientes lo califica entre las
mejores tierras que pueden destinarse a esta actividad. En el municipio de Cárdenas
se produce plátano, cacao, mango, coco, cítricos, pimienta y caña de azúcar. El arroz
también se cultiva con buenos rendimientos, a pesar de las bajas precipitaciones registradas en los primeros meses del año, que provocan una deficiencia de humedad.
Tiempo atrás, el cultivo del cacao floreció alrededor de este sitio y ahora se cultiva
poco. A pesar de esto, existe una planta beneficiadora que fabrica productos derivados de este fruto, procedente de Cárdenas y otros municipios vecinos. Las activida13 Comprende otros municipios vinculados con los situados dentro del sitio por medio del Plan Estatal de Desarrollo
(ver figura 10).
14 Con datos de INEGI, 2000a.
15 Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO, 2006.
16 Graizbord et al., 2007 con datos de INEGI, 2000a e INEGI, 2005.
486
D escripción
detallada de los sitios piloto
des ganaderas también son importantes, pues la fertilidad de los suelos beneficia a
los pastizales.
La pesca se realiza de forma intensiva, organizada en cooperativas, y de forma
artesanal, con cultivos permisionarios y libres. Las principales especies explotadas son
ostión, jaiba, camarón, moluscos, algas y peces diversos.
El sector industrial es de reciente aparición, pero la producción creció en 9%
durante el periodo de 1999 a 2004, por lo que se concluye que el proceso de industrialización apenas está comenzando. El turismo ha crecido en promedio 17% al año
en el mismo lapso, y la gente empleada en el sector aumentó en 6.2%17. El desarrollo
del ecoturismo en el sitio tiene un alto potencial, de hecho ya existe una playa de
turismo local y en la laguna El Carmen se ofrecen servicios de paseo en embarcaciones, con visitas a la isla El Pajaral. En años recientes, el turismo ha sido impulsado
por el ayuntamiento de la ciudad de Cárdenas para establecer infraestructura y sacar
provecho de los atractivos naturales del área. Sin embargo, en términos económicos,
se ha registrado un decremento en la inversión del sector de 1.2% anual.
Es importante mencionar que el 68% de los pobladores del área de influencia
del humedal no cuenta con acceso a servicios de salud. Como en el resto de la zona
del golfo, la cobertura para atender a la población en este sector es extremadamente
baja. Asimismo, se puede apreciar un incremento sustancial en la población pobre,
que gana menos de un salario mínimo, de 4.2% cada año durante el periodo 1990200018. Esta tasa es significativamente más alta que la regional. La población dependiente también está en aumento.
5.5.4 Presiones por actividades económicas
Este sistema natural ha sido objeto de diversas intervenciones en el curso del tiempo.
Desde 1965 se ha implementado el Plan Chontalpa para habilitar a la región del
mismo nombre dentro de un proyecto de desarrollo agropecuario. El Plan Chontalpa
pretendía incorporar a la producción 350 mil hectáreas, divididas en secciones de
17 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a, e INEGI, 2005.
18 Con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
487
cinco mil hectáreas cada una. Estas tierras serían otorgadas en propiedad ejidal a
grupos de quinientas familias de campesinos sin recursos de las zonas más pobladas
del estado. Cada familia tendría derecho al uso de una parcela de diez hectáreas y
toda la maquinaria proporcionada por el gobierno sería de uso colectivo. Los cultivos
proyectados fueron arroz, cacao, maíz, plátano y cítricos.
En su aplicación, el Plan Chontalpa ha pasado por diversas etapas y tropezado con
dificultades que han exigido ajustes y modificaciones. Las características topográficas
de la Chontalpa son el reflejo de la acción de los ríos Mezcalapa y Usumacinta sobre
la planicie tabasqueña. Estos ríos han creado un delta con múltiples meandros, pues
las corrientes no tienen estructuras geológicas que les restrinjan el cauce. Por lo tanto,
han cambiado su curso e inundado la zona permanentemente desde tiempos inmemoriales. En 1964 se concluyó la construcción de una de las presas más importantes
de la república mexicana: la presa NezahuaIcóyotl en Malpaso, Chiapas. Esta presa
restringe el flujo del río Grijalva, por lo que alivió considerablemente el problema de
las inundaciones, pero no lo resolvió del todo.
De manera paralela se construyeron más de 80 km de canales y drenes al interior
de lagunas y ríos para introducir maquinaria de perforación. En 1975 se abrió la "Boca
de Panteones", la cual comunica la laguna Machona con el mar. Estas obras ocasionaron que grandes volúmenes de agua salada invadieran aproximadamente 60 mil
hectáreas que estaban ocupadas por pastizales, cultivos, acahuales, popales y cuerpos
de agua dulce. La intrusión salina desencadenó una serie de fenómenos caracterizados
por un proceso de sucesión ecológica único por su magnitud en Tabasco y posiblemente en todo México19. Como resultado, las poblaciones de peces dulceacuícolas
en las lagunas han sido desplazadas por poblaciones marinas; las áreas de manglares
sustituidas por lagunas, así como los pastizales, cultivos, popales y acahuales están
siendo desplazados por manglares de Avicennia germinans, Rhizophora mangle y
Laguncularia racemosa20. La entrada masiva de agua marina, sedimentos costeros
y organismos marinos ha provocado, entre otras cosas, cambios considerables en el
régimen hidrológico, azolvamiento de las lagunas, desaparición de bancos ostrícolas
19 Gutiérrez y Galaviz, 1983.
20 Ortiz y Peña, 1993.
488
D escripción
detallada de los sitios piloto
y salinización de terrenos aledaños propicios para la ganadería. Actualmente se están
realizando obras tendientes a minimizar el impacto causado en el sistema, como el
intento por estabilizar la boca y la resiembra de bancos ostrícolas, entre otras21.
La industrialización forzada que vive el municipio hoy en día lo confronta, además,
con riesgos a la salud humana y el ambiente, pues ahí está establecida una de las
industrias más contaminantes: la petrolera. A ello hay que añadir la contaminación por
el alto contenido de fertilizantes y pesticidas en los escurrimientos agrícolas, así como
la proveniente de los tres ingenios azucareros presentes en el municipio: Santa Rosalía,
Benito Juárez y Nueva Zelanda (los dos primeros, dentro del plan Chontalpa).
La vulnerabilidad de los sistemas aquí presentes se puede ejemplificar con lo
acontecido en una de las lagunas adyacentes al sitio. “La laguna de Mecoacán ha
sufrido un grave impacto por la actividad del puerto de Dos Bocas, desde donde PEMEX exporta cientos de miles de barriles de petróleo a los Estados Unidos. Las obras
de infraestructura portuaria han afectado el comportamiento de la corriente costera,
provocando el proceso de azolve de la barra de Dos Bocas. A diferencia del sistema
El Carmen-Machona-Pajonal, donde el cuerpo lagunar se ha salinizado, en Mecoacán
el azolve ha impedido el ingreso de la salinidad necesaria para el cultivo del ostión.
Aparte de ello, esta laguna ha sido víctima de varios derrames de petróleo, entre ellos
uno proveniente de un mechero fracturado en 1991, que provocó la muerte de casi
toda la producción ostrícola”22.
Desde la llegada de Petróleos Mexicanos a Cárdenas, a principios de los años setenta, la cabecera municipal ha crecido aceleradamente, lo cual ha dificultado planear
su desarrollo23. A partir de dicha década, la ciudad de Cárdenas creció rápidamente y
hoy día cuenta con cerca de 80 mil personas. La provisión de servicios públicos no ha
podido ganar terreno sobre tal crecimiento.
21 Zabalegui, et al., 1990.
22 Greenpeace, 1997.
23 “En un medio ambiente muy degradado, la intervención petrolera actuó como un agente desencadenante de
una nueva y dramática fase del proceso de deterioro del medio físico. Sus efectos directos fueron puntuales;
los indirectos abarcaron una escala espacial muy amplia. [...] durante la década de 1970-1980 prosiguió hasta
su práctica culminación el proceso de deforestación/praderización regional. La selva alta perennifolia primaria
quedó reducida hasta 1988 a su mínima expresión. Al terminar la década de los años setenta, sólo alcanzaba algo
menos de 75 000 hectáreas, un 3% de la superficie estatal” (Tudela, 1992).
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
489
Aunado a los problemas antes mencionados, la deforestación ha llegado a niveles
muy preocupantes. Producto de la expansión de la frontera agrícola y pecuaria, así
como de la tala inmoderada de especies maderables, la deforestación conduce a la
pérdida de suelo por erosión y disminuye su fertilidad. Esta situación repercute directamente en el azolvamiento de cauces y obras hidráulicas, además de incrementar la
vulnerabilidad ante inundaciones. Se estima que la mayor parte de la cubierta vegetal
original en la región se ha perdido a causa de las actividades humanas. En la figura 4
se muestran las presiones principales que se ejercen en el sitio.
Figura 4. Sitio piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
Cultivos dominantes y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para el presente estudio con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b, e
INEGI, 2002.
490
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.5.5 Uso de suelo
De acuerdo con el Inventario Nacional Forestal 200024, en el sitio se localizan los
usos de suelo presentados en el cuadro 1.
Cuadro 1. Usos de suelo y áreas comprendidas en el sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona.
Uso de suelo
Agricultura de temporal
Asentamiento humano
Pastizal cultivado
Superficie (ha)
5 551.57
105.28
12 860.16
El uso de suelo en el sistema lagunar Carmen-Pajonal-Machona está dominado
por vegetación ribereña y costera, formada por manglar, mucal, popal-tular y tasistal.
También destacan los agroecosistemas de la zona (cocotales, huerto familiar, cacaotales, pimientales y potreros25. La transformación de la cubierta vegetal se presenta
en las zonas de oriente del sitio que, entre 1976 y 2000, pasaron de vegetación
hidrófila (popal, manglar, tular, palmar) a pastizales inducidos. El mismo proceso se
presenta al sur de la laguna Machona (figura 5).
La agricultura de temporal se ha reducido a una tasa del 1% anual, al igual que
la vegetación hidrófila, cuya pérdida de superficie es de aproximadamente cuatro mil
hectáreas en el periodo mencionado (cuadro 2). Sin embargo, dadas las condiciones
de constante inundación, este tipo de vegetación parece estar ganando superficies
pequeñas sobre terrenos de selvas bajas, otros tipos de vegetación y pastizales.
24 SEMARNAP, 2001.
25 Pérez y Romellón, 1994.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
491
Figura 5. Cambios en el uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000 del Sistema
Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco.
Fuente: Gómez et al., 2007, para este estudio.
Cuadro 2. Cambio de uso de suelo. Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de temporal
Asentamiento humano
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Pastizales inducidos y cultivados
Vegetación hidrófila
Selva perennifolia y subperennifolia
Total
Superficie en
1976 (ha)
6 125
0
11 421
725
9 558
29 335
56
57 220
Fuente: Gómez et al., 2007, para este estudio.
492
D escripción
detallada de los sitios piloto
Superficie en
2000 (ha)
4 832
85
2 882
1 392
11 411
25 344
0
45 945
Tasa de
transformación
-0.01
1.00
-0.06
0.03
0.01
-0.01
-1.00
 
5.5.6 Uso del agua
La Región Hidrológica 30, Grijalva-Usumacinta, se encuentra dentro de la Región
Administrativa Frontera Sur de la CONAGUA y recoge escurrimientos de los bosques
tropicales de Tabasco y Chiapas, aunque su cabecera se encuentra en territorio guatemalteco. Comprende una extensión territorial26 de 102 465 km2, y se ubica en
una de las zonas de mayor precipitación del país, con un promedio anual de 1 903
mm. Esto resulta en un promedio de escurrimientos de 73 647 hm3. En la planicie de
los ríos Grijalva y Usumacinta se vierte al Golfo de México un volumen de agua que
equivale a la tercera parte de los escurrimientos del país.
El río Grijalva se origina de numerosos arroyos y ríos que bajan de la sierra Cuchumatanes en Guatemala y toma el nombre de Grijalva a partir de la confluencia de
los ríos San Gregorio y San Miguel. Atraviesa el Valle de Chiapas con el nombre de
río Grijalva o río Grande de Chiapas. Sus aguas son almacenadas y su régimen regularizado en la presa Nezahualcóyotl, que fue construida aguas abajo de la confluencia
del río La Venta. El Grijalva cambia la dirección de su curso del noroeste al norte
hasta entrar a la planicie costera del Golfo de México, en donde se empieza llamar río
Mezcalapa. Se bifurca en dos ocasiones: primero en el rompido de Samaria, donde
cambia nuevamente la dirección de su curso hacia el este, y luego al dividirse forma
el río Carrizal en la margen izquierda y el Viejo Mezcalapa por la margen derecha.
Más adelante recibe por su margen derecha las aportaciones del río Pichucalco y del
río de la Sierra. Aguas abajo de la confluencia de estos ríos está localizada la estación
hidrométrica Gaviotas II (figura 6).
El río Usumacinta es una de las corrientes más importantes de México (figura 7);
se forma de la confluencia de los ríos La Pasión y Chixoy o Salinas, ambos procedentes
de territorio guatemalteco. Afluye a él, por la margen izquierda, el río Lacantún y pasa
por Boca del Cerro antes de recibir el caudal del río San Pedro. Atraviesa el estado
de Tabasco y antes de llegar al Golfo de México se divide en tres brazos. El brazo
occidental va a unirse con el Grijalva; el brazo central se llama San Pedro y San Pablo,
y desemboca directamente en el Golfo de México; el brazo oriental, denominado
Palizada, desagua en la laguna de Términos por la boca llamada Chica.
26 CONAGUA, 2005.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
493
Figura 6. Gasto medio anual en la estación hidrométrica Las Gaviotas II, ubicada sobre el río
Grijalva. Región Hidrológica 30 y Región Administrativa XI de la CONAGUA.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
Figura 7. Gasto medio anual en la estación hidrométrica Boca del Cerro, ubicada sobre el río
Usumacinta. Región Hidrológica 30 y Región Administrativa XI de la CONAGUA.
Fuente: CONAGUA, BANDAS.
494
D escripción
detallada de los sitios piloto
Las inundaciones que se presentan año con año en la planicie, producto de la
poca pendiente hidráulica de los cauces y la magnitud de los eventos hidrometeorológicos, presentan uno de los principales problemas de la región. Por otro lado,
la contaminación de corrientes y cuerpos de agua, generada por las descargas de
los centros urbanos e industriales, ha cobrado relevancia significativa. El río Grijalva
es la corriente con mayores problemas, pues en el tramo La Angostura-Chicoasén
se concentran las descargas sin tratamiento de las localidades de Tuxtla Gutiérrez,
Chiapa de Corzo, Acala y Suchiapa. En ese mismo tramo también se hace evidente
el grave problema de desechos sólidos de estas localidades. En efecto, a causa de
la disminución en la velocidad de flujo por la presa Chicoasén, los desechos vertidos
al aire libre que son transportados por corrientes superficiales se concentran en el
Cañón del Sumidero.
Dada la gran importancia de la región Grijalva-Usumacinta en la generación de
energía hidroeléctrica, también se presenta el problema de volúmenes físicamente
disponibles que no se pueden asignar para otros usos porque ya se encuentran concesionados aguas abajo para producir electricidad. Aunque estos volúmenes están categorizados como no consuntivos, sí limitan la cantidad de agua disponible en la región.
El volumen de los usos no consuntivos es de 49.34 km3, utilizado prácticamente
en su totalidad en las centrales hidroeléctricas y sólo el 0.02% es aprovechado en la
actividad acuícola. La generación de energía se realiza en siete presas hidroeléctricas
del estado de Chiapas, entre las que destaca el sistema hidroeléctrico del Grijalva:
Chicoasén, Malpaso, La Angostura y Peñitas. La capacidad instalada de generación
es de 3 928 MW, que representa el 39% de la capacidad de generación en plantas
hidroeléctricas del país y el 11% de la capacidad total instalada nacional.
En lo que respecta a los mantos acuíferos, aunque la disponibilidad de agua en la
región es alta, la calidad del agua subterránea en el sitio se ha visto deteriorada. En los
pozos de abastecimiento de la ciudad de Cárdenas se aprecia un rápido incremento en
las concentraciones iónicas (particularmente de hierro y magnesio), que sobrepasan
las mil ppm27 de sólidos totales. Las coberturas en servicio de agua potable registran
un aumento moderado de 1.17%, inferior a la media regional; los esfuerzos en alcan27 Partes por millón, unidad de concentración equivalente a mg/l.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
495
tarillado han sido más satisfactorios, con una reducción en la población sin acceso al
servicio de 5.8% anual28.
5.5.7 Vulnerabilidad
Como se ha explicado en los párrafos anteriores, las principales amenazas antropogénicas en el sitio son29:
• Contaminación por hidrocarburos debido a las actividades extractivas del Complejo Petrolero Dos Bocas de PEMEX. Se han reportado altas concentraciones de
metales pesados e hidrocarburos en las poblaciones de bivalvos30.
• Contaminación por coliformes fecales debido a las aguas residuales municipales
vertidas por la localidad de Cárdenas y otras poblaciones cuenca arriba en los
cuerpos de agua.
• Alteración de las características fisicoquímicas de los cuerpos lagunares y sus
zonas de inundación por la abertura de la boca de Panteones.
• Contaminación por nutrientes acarreados en los escurrimientos agrícolas.
• Presión sobre algunas especies de importancia pesquera, como el ostión.
Dentro de las amenazas naturales destaca la fuerza con la que eventos ciclónicos
pueden afectar el área. Un caso importante es el huracán Roxanne, que tocó tierra
entre el 8 y el 20 de octubre de 1995. Descargó precipitaciones de 204 mm en Tabasco, con vientos máximos de 185 km/h y rachas de 215 km/h. Ocasionó grandes
daños en los estados de Tabasco, Veracruz y Campeche, al generar inundaciones de
tierras de cultivo. Tuvo la peculiaridad de regresar a lugares donde ya había pasado,
como Ciudad del Carmen, Campeche, donde causó inundaciones severas y la rotura
de cinco tramos del acueducto que abastece de agua potable a la población. Se reportaron más de 40 mil damnificados31.
28 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990a, e INEGI, 2000a.
29 Greenpeace, 1997; Tabasco Hoy, 2007; El Universal, 2008.
30 Moluscos que se alimentan principalmente al filtrar el agua y tienen dos valvas (ostra, almeja, mejillón).
31 CENAPRED, 2001.
496
D escripción
detallada de los sitios piloto
En el estado de Tabasco resultaron afectadas diez embarcaciones mayores y se
perdieron 176 redes de pesca, diez atarrayas y 13 mil nazas. En apoyo a la actividad
pesquera, el gobierno federal asignó un fondo de 5.5 millones de pesos, con aportaciones de SEMARNAT (2.5 millones), el gobierno estatal (un millón) y el Fondo
Nacional de Empresas de Solidaridad (FONAES) (dos millones).
Durante 1995, el gobierno federal asignó un fondo de apoyo por 16 millones
de pesos a los damnificados por los huracanes Roxanne y Opal en los estados de
Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
La figura 8 y el cuadro 3 resaltan la exposición de este sitio ante los potenciales
efectos del cambio climático. El sistema lagunar Carmen-Pajonal-Machona es vulnerable, sobre todo, a los eventos extremos de calor e inundaciones provocadas por
tormentas severas y huracanes. Los cuerpos de agua padecerán afectaciones tanto
en humedales como en litorales a causa del aumento en el nivel medio del mar. Por
otro lado, la conjunción del incremento de temperatura y las actividades extractivas
de la zona pueden resultar en un aumento de incendios forestales.
Cuadro 3. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005.
Sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona.
Humedal
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco
Frío
Huracán
0
8
Lluvias Total de
intensas eventos
0
8
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
Al realizar reducciones de escala de los modelos globales del clima se obtienen los
siguientes resultados para el humedal Carmen-Pajonal-Machona:
• La temperatura a finales de siglo se incrementará entre 2 y 4 °C, y el periodo de
cambio significativo iniciará a partir de 205032.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre abril y septiembre, resultando el periodo de mayor cambio en verano.
32 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
S istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
497
Figura 8. Zonas susceptibles de inundación.
Sitio piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
498
D escripción
detallada de los sitios piloto
• Las ondas de calor se duplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
tres y cuatro grados centígrados en relación con las actuales. Los periodos secos
serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los cambios en precipitación pueden variar desde una reducción del 15% hasta
un aumento del 5%. Estos resultados no toman en cuenta los eventos extremos
como tormentas y huracanes. Las tormentas de verano serán más severas y los
huracanes más intensos33.
Es de particular importancia, dentro del análisis de los efectos del cambio climático en este sitio, la presencia de la industria petrolera, pues con ella se obtienen poco
más de ocho de cada diez pesos generados por las actividades productivas de este
humedal34. Las actividades del sector minero (que incluye la extracción de hidrocarburos) son vulnerables al cambio climático en el corto plazo, por lo que las medidas de
adaptación son indispensables para sostener el sistema económico aquí presente.
El efecto desastroso que puede tener el paso de un evento ciclónico sobre la
economía regional se puede ejemplificar con el huracán Emily. Del total de los daños
cuantificados, 50.5% se presentaron en PEMEX, ya que a consecuencia del fenómeno se tuvieron que evacuar las plataformas petroleras de la península de Yucatán
y la Sonda de Campeche, dejándose de explotar 23 pozos petroleros. Debido a lo
anterior, se suspendió la producción diaria de 2 millones 950 mil barriles de petróleo
y 1 600 millones de pies cúbicos de gas. De igual forma se dejaron de exportar 1
millón 870 mil barriles de crudo diarios. Los daños en PEMEX se calcularon en 4 484
millones de pesos; es decir, 423 millones de dólares y se derivaron de la suspensión
de las actividades de la empresa durante dos días35.
33 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
34 Graizbord et al., 2007, para el presente estudio.
35 Graizbord et al., 2007, con datos de CENAPRED, 2006.
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499
5.5.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación al cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y su capacidad para afrontarlos. A continuación se presentan los resultados para el sitio piloto
Carmen-Pajonal-Machona.
En la zona de influencia de este sitio, el índice de sensibilidad ante el cambio
climático registra grados que van de alto a muy bajo. Sin embargo, como puede
observarse en el mapa correspondiente, los municipios que comparten el área del
sistema lagunar, Comalcalco y Cárdenas, registran sensibilidad media. Por otra parte,
se puede constatar que los municipios aledaños, Huimanguillo y Cunduacán, cuentan
con un grado de sensibilidad alto.
Figura 9. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro de la zona
de influencia del sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
,
500
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 10. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios dentro de
la zona de influencia del sitio piloto Carmen-Pajonal-Machona.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
En cuanto a la capacidad de adaptación al cambio climático, los niveles registrados se ubican desde muy alto a medio. En este sentido, los municipios de Cárdenas y
Comalcalco son de rango alto, en tanto que Paraíso es de nivel muy alto.
5.5.9 Proyecciones en el uso del suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia 2020 en el uso de suelo para la
zona costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas entre 1976 y 2000, y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov).
De manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto, con los siguientes
resultados para el sistema lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
La cuenca del Grijalva-Usumacinta presentará un aumento de las áreas de agricultura de temporal y pastizales inducidos en su parte alta, con una probabilidad de
entre el 0.6 y 0.7 (figura 11). El aumento en la superficie de pastizales inducidos y
agricultura de temporal será a costa de las actuales zonas de matorral y vegetación
secundaria de la cuenca. Por otra parte, la agricultura de riego y los pastizales induciS istema L agunar C armen -P ajonal -M achona
501
dos ocuparán la mayor superficie de la porción baja de la cuenca, con una probabilidad
superior a 0.7. Para el sitio piloto, las probabilidades de cambio a este tipo de suelo
son de entre 0.2 y 0.3, y se presentarán sobre actuales zonas de sabana y selvas
altas.
Se estima que la vegetación secundaria se presentará para 2020 sobre regiones
actualmente ocupadas por selvas bajas y bosques de pino-encino de la cabecera de
la cuenca. Esto indica un aumento en los procesos de apertura de vegetación para
actividades agropecuarias (figura 11). Finalmente, se puede observar un aumento
de las zonas de cuerpos de agua sobre áreas que actualmente ocupan popal y tular,
aunque con muy bajas probabilidades, de 10 a 20%. En contraste, la probabilidad de
conservación de los cuerpos de agua actuales es cercana al 70%.
Figura 11. Probabilidades de cambio de uso de suelo para el 2020 por clases de cobertura.
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
Fuente: Gómez et al., 2007, para este estudio.
502
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.6 Sitio piloto Los Petenes
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.,
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.6.1 Descripción física1 e hidrológica
La Reserva de la Biosfera Los Petenes fue decretada como Zona de Protección Especial de Flora y Fauna el 4 de junio de 1996 y cambió su estatus a Reserva de la
Biosfera en mayo de 1999. El área protegida cuenta con una superficie total aproximada de 282 858 hectáreas. Está compuesta por una zona terrestre y otra marina
que abarcan, respectivamente, 100 939 y 181 919 hectáreas. El nombre petén es
un vocablo maya que significa campos llanos junto al mar a manera de islotes.
El sitio piloto Los Petenes se localiza en la Región Hidrológica 32 de la CONAGUA y pertenece a la cuenca hidrológica Yucatán Norte. Como consecuencia de la
naturaleza cárstica del terreno y su bajo relieve, los escurrimientos superficiales son
escasos, aunque existen pequeñas corrientes superficiales perennes que se originan
de manantiales y desembocan en el Golfo de México. De acuerdo con la carta hidrológica, se pueden identificar básicamente dos zonas, ambas de terrenos bajos. Una
cuenta con acuíferos superficiales y la otra con someros. Se presenta un coeficiente
de escurrimiento de 0 a 5%, con rápida infiltración del agua al subsuelo.
1 La mayoría de los datos sobre la descripción física de este sitio piloto puede encontrarse en la Ficha de Sitio
Ramsar (CONANP, 2003) y un concentrado de información elaborado por el gobierno de Campeche.
503
Este sistema de humedales se ubica en la zona costera sureste de México, al
occidente de la península de Yucatán; particularmente abarca la costa noroeste del
estado de Campeche. Forma parte de una planicie costera tropical, calcárea2, con
afloramientos de manto freático, de 15 km de ancho y 100 km de longitud. Tiene
una intensa dinámica con el mar por el drenaje subterráneo y la influencia mareal. Es
básicamente una ciénaga3 salina especial, de inundación constante, que permite la
existencia de muy diversos tipos de humedales marinos y costeros. Se caracteriza
por la presencia de petenes. Los petenes son islas de vegetación arbórea vigorosa,
asociada con manantiales u ojos de agua, que constituyen un hábitat crítico para la
fauna silvestre. Estas islas forman asociaciones que se mantienen dentro de una matriz de vegetación baja inundable; pueden estar constituidas por manglar, selva baja
inundable, selva mediana o una mezcla de ellas4. La figura 1 es una imagen de satélite
de la zona con la delimitación del sitio piloto, mientras que la figura 2 esquematiza las
características físicas del lugar.
El conjunto de humedales Los Petenes constituye la ciénaga más extensa de la
península de Yucatán, pues la elevación del terreno y la inclinación de toda la plataforma yucateca hacia esta dirección propician que el drenaje subterráneo sea mayor
en la costa oeste. Su parte más profunda se localiza cerca del litoral, formando una
laguna de poca profundidad que se vuelve somera y pantanosa hacia tierra firme. A
todo lo largo se encuentra salpicada de islas de vegetación de forma circular. Una
importante característica de estas islas (petenes) es su disponibilidad de agua durante
el año, pues a través de los cenotes reciben un aporte continuo de las corrientes
subterráneas.
La región de Los Petenes presenta una amplia diversidad de flora tanto acuática
como terrestre. Tal diversidad se crea por las condiciones hidrológicas particulares aquí
encontradas, que regulan la composición y estructura del petén mismo. La vegetación
2 Suelos ricos en carbonato de calcio.
3 Una ciénaga es un cuerpo de agua que presenta circulación de agua dulce hacia el mar en época de lluvias y del
mar hacia la ciénaga en época de estiaje.
4 CONANP, 2006.
504 D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 1. Imagen de satélite del sitio piloto Los Petenes y su delimitación.
Fuente: Google Earth.
puede variar desde herbácea hasta arbórea dentro de la transición del ecosistema marino al terrestre de acuerdo con patrones de salinidad y el nivel de la lámina de agua.
El clima dominante en la región centro-sur de la reserva es cálido subhúmedo con
lluvias en verano. En el norte del sitio, el clima cambia a semiseco y seco cálido5. La
temperatura media anual varía entre 26.1 y 27.9 ºC. La precipitación media anual se
distribuye desde 1 049.7 mm en el sur hasta 725.5 mm anuales en su extremo norte.
5 Según la clasificación de Köppen, modificada por García, 1973.
S itio
piloto
L os Petenes
505
Figura 2. Esquema del sitio piloto Los Petenes.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
5.6.2 Relevancia ecológica
Los petenes son ecosistemas muy particulares. Se han identificado dos tipos: el petén
de manglar y el petén de selva. El primero se origina sobre elevaciones en zonas de
pantano y el segundo en torno a afloraciones de acuíferos continentales. La región
de Los Petenes presenta numerosos blanquizales, que son áreas sin vegetación con
506 D escripción
detallada de los sitios piloto
alta salinidad, distribuidas en una franja continua, orientada de norte a sur, y paralela
a la costa. Su importancia radica en que ofrecen sitios de alimentación a numerosas
especies de aves de la región y migratorias. También se consideran como corredores
o vías de acceso para mamíferos, reptiles y anfibios, pues se encuentran intercalados
entre los manglares de borde y los petenes.
El área incluye, además de los petenes, otros valiosos ecosistemas críticos,
como manglares ribereños y de borde costero; en esta zona se localiza la mayor
población de mangle botoncillo6 del estado de Campeche. También hay áreas
inundables, marismas, cenotes, humedales de tierras bajas de la planicie costera y
segmentos de selvas medianas con ejemplares de maderas preciosas. Todos estos
hábitats son importantes para el descanso y la alimentación de las aves migratorias
provenientes de Canadá y los Estados Unidos, y además funcionan como áreas de
protección ante tormentas y huracanes. Es un ecosistema considerado como único
en el país y el mundo, ya que sólo se localiza en las penínsulas de Yucatán y Florida,
y en la isla de Cuba7.
La lista florística de la región de Los Petenes está comprendida por 473 especies
de plantas superiores de 94 familias y 307 géneros. Incluye 21 especies endémicas
de la península de Yucatán, tres catalogadas como amenazadas, dos en categoría de
raras y cinco que cuentan con protección especial (manglares), bajo la norma oficial
mexicana NOM-059-ECOL-2001 para especies en riesgo.
En cuanto a la fauna, existen al menos 295 especies de aves. De éstas, 160 son
residentes, 111 migratorias y 17 presentan poblaciones con individuos residentes
y migratorios. Del total de especies, 64 se encuentran señaladas en la NOM-059ECOL-2001 con alguna categoría de protección. La fauna terrestre incluye al menos
tres especies de anfibios, treinta de reptiles y 79 de mamíferos; de estas últimas, 12
son especies endémicas, 15 están en peligro de extinción, siete están amenazadas y
dos corresponden a especies con protección especial. Muchas de estas especies son
de valor comercial. Entre las especies silvestres de mamíferos más comunes de Los
Petenes se han reportado: ocelote, jaguar, jaguarundi, jabalí, tepezcuintle, venado cola
6 Conocarpus erectus.
7 Mas et al., 2001.
S itio
piloto
L os Petenes
507
blanca, agutí y zorra gris, además de varias especies de murciélagos y diversos tipos
de roedores (cuadro 1).
Cuadro 1. Algunos mamíferos en peligro de extinción, presentes en el sitio piloto.
Nombre científico
Mamíferos
Nombre común
Estatus
Ateles geoffroyi
Mono araña
Peligro de extinción y en UICN
Leopartdus pardalis
Ocelote
Peligro de extinción y en UICN
L. wieddii
Tigrillo
Peligro de extinción y en UICN
Panthera onca
Jaguar
Peligro de extinción y en UICN
Eira barbara
Cabeza de viejo
Peligro de extinción y en UICN
Fuente: NOM-059-ECOL-2001.
Por todos los servicios ambientales que presta, este sitio ha sido designado por
la CONABIO como región prioritaria terrestre, marina e hidrológica. Está catalogado
como Reserva de la Biosfera por la CONANP y forma parte de las Áreas de Importancia para la Conservación de Aves (AICAS). En el plano internacional fue reconocido
como sitio Ramsar el 2 de febrero de 2004, siendo el lugar 41 nacional en tener esta
designación y el lugar 1 354 en el mundo.
5.6.3 Descripción socioeconómica
La zona de influencia del sitio piloto Los Petenes comprende los municipios de Calkiní, Hecelchakán, Tenabo, Campeche y Champotón (los cuatro primeros dentro del
polígono)8. La zona contaba con 367 639 habitantes al año 2000 y una tasa de
crecimiento de 1.68%9, por lo que se estima que para el año 2030 contará con
493 805 personas10. El municipio de Campeche cuenta con poco más de 225 mil
habitantes y el resto de los municipios son de menor población: Calkiní con 47 mil;
Hecelchakán con 25 mil, y Tenabo con 8 500 personas.
8 Ver figura 7.
9 Con datos de INEGI, 2003, e INEGI, 2005.
10 Estimaciones de Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO 2006.
508 D escripción
detallada de los sitios piloto
La ciudad de Campeche es el principal motor económico de la región. Entre 1999
y 2004, la zona registró una tasa de crecimiento en el empleo alta, con 9.48%,
muy por encima de la tasa calculada para el conjunto de sitios piloto (2.87%). Sin
embargo, más de la mitad de los habitantes no cuenta con acceso al servicio de salud
y el crecimiento de la población que gana menos de un salario mínimo fue alto, de
3.8% en el mismo periodo11. Entre las actividades que se desarrollan en el municipio
de Campeche y otros aledaños destacan la industria petroquímica, la ganadería, el
turismo, la agricultura, la pesca y el comercio. También son importantes la avicultura,
la apicultura, y la extracción de madera y sal.
La cercanía del sitio con la capital del estado ha propiciado que el turismo sea
uno de los sectores con mayor crecimiento, 16% como promedio entre 1999 y
2004; en tanto que el sector industrial también tuvo un incremento de 14.5%, y la
agricultura de 9.5% durante el mismo periodo. Se trata de una región en expansión
económica12.
Sin embargo, en la Reserva de la Biosfera Los Petenes no existen núcleos urbanos.
Esta particularidad la distingue de otras áreas naturales protegidas de la región, como
Ría Celestún y El Palmar. Las características ambientales y el relativo aislamiento
al interior de la reserva limitan efectivamente las actividades productivas primarias,
por lo que el sitio ha conservado su sistema natural en buenas condiciones. Durante
una época, en sus alrededores se desarrolló la producción de henequén y todavía
se contemplan en el paisaje los restos de ese sistema productivo (haciendas y áreas
de cultivo). Dentro de la reserva, las principales actividades que se desarrollan en la
actualidad son pesca, agricultura y turismo, todas ellas de baja intensidad. Gracias a
esto no ha habido impactos considerables sobre los cuerpos de agua.
5.6.4 Presiones por actividades económicas
La pesca que se efectúa en el sitio es de tipo artesanal. Las principales especies que
se capturan son corvina, carito, chachi, cherna, jurel, mero, pámpano, rubia, robalo,
11 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000, e INEGI 2005.
12 Ídem 11.
S itio
piloto
L os Petenes
509
tiburón, cazón, molpich, mojarra, picuda, sierra, pulpo, caracol y cangrejo. Las artes de
pesca que se utilizan son las siguientes: agalleras de diferentes tamaños de malla, línea
y anzuelos, chinchorro playero, chinchorro charalero, arpón (ilegal), cordel con jimba
para el pulpo, trampas, buceo, recolecta manual, red de arrastre, arrastre con saca y
arrastre con chalina. El esfuerzo de pesca para diferentes especies tiene una variación
temporal: escama (todo el año), charal (de octubre a marzo), pulpo (de agosto a
diciembre). En cuanto al camarón y el caracol del género Melongena, que se pescan
en aguas interiores, la temporada principal es durante los “nortes”, de septiembre a
febrero, aproximadamente, aunque puede registrarse durante todo el año. El caracol
del género Strombus se extrae mayormente de abril a julio, antes de que comiencen
las lluvias, pues se pesca en el mar.
Algunas especies de animales son objeto de cacería legal e ilegal (que principalmente se destina al autoconsumo) y, en una menor proporción, de cacería deportiva.
Otro impacto detectado en la zona de Los Petenes es la alteración de los diferentes
hábitats por actividades relacionadas con la agricultura y la ganadería. Sin embargo, a
pesar de las actividades humanas realizadas en la región, no se han generado cambios
drásticos en los procesos naturales. Esto se debe, entre otras razones, al aislamiento
y a la propensión a inundaciones del terreno, lo que no permite el desarrollo de actividades agropecuarias extensivas. El tipo de vegetación más impactado ha sido el
manglar, debido, sobre todo, a la construcción de carreteras. La implantación de esta
infraestructura ha modificado el patrón de intercambio de agua entre los manglares y
el mar, y vuelto más salinos los suelos, propiciando con ello la muerte de los manglares. Como factores de perturbación se puede también mencionar la tala selectiva (de
la caoba y recientemente del zapote), las quemas y la caída natural de los árboles.
Por otro lado, es necesario apuntar la existencia de pesca, agricultura y ganadería
en las zonas circundantes al área natural protegida. Estas actividades se están realizando de manera irregular y sin organización en los límites este y sur de la reserva.
También es necesario monitorear la presencia de asentamientos humanos cercanos.
La agricultura que se realiza en zonas aledañas representa una amenaza por los
incendios derivados de la práctica de roza-tumba y quema. El plan de manejo de la
reserva indica que se debe demarcar adecuadamente la frontera agrícola y ganadera, y
prohibir su avance hacia la reserva. También estipula que no se debe autorizar ningún
510 D escripción
detallada de los sitios piloto
proyecto ecoturístico si no se tiene el plan de manejo y aprovechamiento sustentable
de sus aguas tanto en la toma como en la descarga. Si hay obras turísticas, no se
debe autorizar ninguna construcción que promueva asentamientos humanos, éstos
se deben promover en su área de influencia13.
La figura 3 ilustra las principales actividades en el sitio y sus alrededores.
Figura 3. Sitio piloto Los Petenes. Cultivos dominantes y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para este estudio, con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b, e INEGI,
2002.
5.6.5 Uso del suelo
Este sitio está conformado por vegetación hidrófila, en donde destacan los petenes
como formaciones vegetales centrales a cuerpos de agua (cenotes), con característi-
13 CONANP, 2006.
S itio
piloto
L os Petenes
511
cas únicas en México14. Los principales hábitats y tipos de vegetación de la Reserva
de la Biosfera Los Petenes son:
•
•
•
•
Bajos marinos cubiertos por pastos marinos.
Manglar chaparro y manglar de cuenca.
Pastizal inundable.
Petenes (con ejemplares de manglar, selva mediana subcaducifolia y selva mediana subperennifolia y perennifolia).
• Selva baja inundable, selva baja subcaducifolia y selva baja caducifolia.
• Blanquizales.
Por la superficie ocupada sobresalen los pastos marinos15, localizados en toda la
parte marina de la reserva. El manglar de franja se distribuye en todo el litoral del sitio
y el manglar de cuenca se concentra en la parte sur y centro del área. Los petenes
(con sus manantiales u ojos de agua) se hallan en toda la reserva, aunque las mayores
concentraciones se localizan en su porción sur y centro. Las principales comunidades
vegetales y animales presentes en el sitio se asocian con estos hábitats y tipo de
vegetación16. La condición de conservación de los hábitats críticos en este sistema
de humedales es buena, con excepción de los petenes. Estos hábitats han resentido
y siguen sufriendo las presiones de las actividades antropogénicas, como la caza y la
tala permanentes.
El uso de suelo y vegetación de 1976 indica un predominio de vegetación hidrófila,
que parece haber sido sustituida para 2000 por vegetación de selvas altas perennifolias
y subperenifolias (figura 4). Las regiones de pastizal, que en 1976 se ubicaban cerca
del límite este del sitio, parecen concentrarse en 2000 al norte de las poblaciones de
Calkiní, Becal y Halachó, en proximidad con la carretera Campeche-Mérida.
El límite de las coberturas de uso de suelo de 1976 y 2000 no coincide con la
actual línea de costa, lo que dificulta la interpretación de los resultados. Los mayores
cambios negativos y las mayores amenazas de cambio de uso de suelo se encuentran
al oriente del sitio, entre Ticul y Mérida (figura 4). Las tasas de transformación indican
14 Arriaga et al., 2000.
15 Thalassia testudinum y Ruppia maritima.
16 CONANP, 2007.
512 D escripción
detallada de los sitios piloto
el surgimiento de áreas de agricultura de riego y temporal donde no existían en los
últimos 24 años, así como una disminución de la vegetación hidrófila al 2% anual
(cuadro 2). El 36% de la vegetación hidrófila pasó a una vegetación de selva alta
perennifolia y subperenifolia y el 42% de los pastizales también se transformó a ese
mismo tipo de vegetación (figura 4). En este sitio, el uso de suelo atrayente es la
selva alta, que parece ganar terreno sobre la vegetación hidrófila. No existen procesos
de urbanización que amenacen el sitio al interior, pero la apertura de zonas agropastoriles al este sí representa un foco de atención para las iniciativas de conservación.
Se pueden observar vestigios de actividades agropecuarias en áreas muy pequeñas
y muy pocas quedan activas. Por lo tanto, los procesos de conservación son los que
controlan el cambio de cobertura vegetal y uso de suelo en este sitio.
Figura 4. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000
en el sistema Los Petenes, Campeche.
.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
S itio
piloto
L os Petenes
513
Cuadro 2. Cambio de uso de suelo entre 1976 y 2000. Sistema Los Petenes, Campeche.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de riego y humedad
Superficie en
1976 (ha)
0
Agricultura de temporal
Área sin vegetación aparente
Superficie en
2000 (ha)
70
Tasa de
transformación
1.00
0
371
1.00
4 584
10 067
0.03
Asentamiento humano
0
6
1.00
Cuerpo de agua
0
120
1.00
Otros tipos de vegetación
0
420
1.00
Pastizales inducidos y cultivados
3 524
3 211
0.00
Selva caducifolia y subcaducifolia
6 359
9 143
0.01
12 082
28 719
0.03
Selva perennifolia y subperennifolia
Vegetación hidrófila
57 610
32 092
-0.02
Total
84 159
84 220
 
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
5.6.6 Uso del agua
El sitio piloto Los Petenes se encuentra dentro de la Región Hidrológica 32, en la
cuenca Yucatán Norte, en la Región Administrativa XII, Península de Yucatán. La
península de Yucatán tiene características hidrológicas muy particulares, debido a la
composición del suelo calcáreo y su bajo relieve. En las cuencas de la región prácticamente no existen arroyos o ríos, pues el agua precipitada sobre la superficie se infiltra
a través del suelo poroso, creando una sola estructura subterránea: el acuífero de
Yucatán. El acuífero está interconectado por numerosas corrientes subterráneas que
afloran en forma de cenotes. Para una descripción detallada de la región referimos al
lector a la sección 4.3, donde se realiza el diagnóstico hidrológico de la zona costera
del Golfo de México.
En el cuadro 3 se presentan los volúmenes de agua extraídos en cada subregión
de planeación de la península de Yucatán. Se puede observar que en la subregión
Poniente, donde se encuentra el sitio Los Petenes, se extraen casi 366 hm3 al año, lo
que equivale a cerca del 24% del total bombeado en la región.
514 D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 3. Demanda total de los usos del agua por subregión.
Región XII, Península de Yucatán.
Volumen de extracción (hm3)
Subregión
Superficial
Subterráneo
Total
%
Candelaria
23.582
62.135
85.717
5.5
Poniente
0.079
365.781
365.860
23.6
Oriente
Total
0.629
1 095.944
1 096.573
70.9
24.290
1 523.860
1 548.150
100.0
Fuente: Gerencia Regional Península de Yucatán.
Como el sitio Los Petenes se ubica dentro de un área natural protegida, existen
limitaciones al desarrollo urbano, agrícola e industrial establecidas en el programa de
manejo. Por tal motivo, el uso del agua está prácticamente destinado a la conservación de las funciones naturales de los ecosistemas. El centro urbano más cercano es
la ciudad de Campeche, donde se han hecho esfuerzos significativos para mejorar el
servicio de agua potable y alcantarillado, pues el número de viviendas atendidas entre
1999 y 2004 aumentó en 6.7 y 1.4%, respectivamente17.
Si se respetan las medidas de conservación instauradas en el área, la presión sobre
los recursos hídricos no será tan fuerte como en otros sitios. Sin embargo, es necesario contar con esquemas de planeación a largo plazo, pues el potencial turístico de la
zona y su proximidad al centro urbano de Campeche podrían influir en la disponibilidad de los recursos hídricos.
5.6.7 Vulnerabilidad
Como se ha visto en los párrafos anteriores, las amenazas antropogénicas en este
sitio están más controladas que en otros, debido a la reglamentación ambiental establecida, por considerarse una reserva de la biosfera. Sin embargo, existen actividades
productivas en los límites del área natural protegida que deben atenderse. Un caso
relevante es la agricultura de temporal, con la práctica de roza-tumba-quema, que
puede generar incendios forestales en la época de estiaje. En contraste, en vez de
17 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2003, e INEGI, 2005.
S itio
piloto
L os Petenes
515
sobreexplotar los recursos, la pesca artesanal organizada promueve la conservación y
el funcionamiento íntegro de los ecosistemas.
El sitio piloto Los Petenes está ubicado en una zona protegida del efecto directo
de los huracanes, por lo que tiene menor riesgo de sufrir daños por estos eventos. Sin
embargo, sí es vulnerable a las inundaciones que pueden suscitar los ciclones al pasar
por el territorio. Durante un periodo de veinte años (1960-1980) se han registrado 46
huracanes en la zona del golfo. Los huracanes Opal y Roxanne (1995) afectaron con
particular intensidad la península de Yucatán, provocando lluvias intensas y elevando
el nivel del mar por arriba de dos metros. Esto ocasionó inundaciones en extensas
áreas de la zona. Los efectos secundarios de otros eventos meteorológicos, como
lluvia u oleaje de tormenta, pueden causar inundaciones en las tierras bajas como la
región de Los Petenes. Los principales daños consisten en cambios en la dinámica
hidrológica de los blanquizales y de algunas zonas de manglar, que pueden provocar
desde una degradación mínima hasta la muerte de algunas especies de mangle.
El cuadro 4 muestra la relativa protección con la que cuentan los municipios de
este sitio del efecto directo de huracanes.
Cuadro 4. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005.
Sitio piloto Los Petenes.
Humedal
Sistema Los Petenes, Campeche
Frío
0
Huracán
0
Lluvias intensas
0
Total de eventos
0
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
La figura 5 indica los lugares más susceptibles de inundarse con un aumento del
nivel del mar en el sistema de humedales Los Petenes.
En cuanto al cambio climático, el sistema de humedales Los Petenes es principalmente vulnerable a las inundaciones provocadas por tormentas, huracanes y
el aumento del nivel del mar, así como a los eventos extremos de calor. Al realizar
reducciones de escala de los modelos globales del clima se obtienen los siguientes
resultados para este sitio piloto:
516 D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 5. Zonas susceptibles de inundación. Sitio piloto Los Petenes.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
S itio
piloto
L os Petenes
517
• La temperatura a finales de siglo se incrementará entre 2 y 3.5 °C, y el periodo de
cambio significativo iniciará a partir de 205018.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre junio y octubre, resultando
el periodo de mayor cambio en verano.
• Las ondas de calor se triplicarán en frecuencia, y su intensidad será superior entre
tres y cuatro grados centígrados en relación con las actuales.
• Los periodos secos serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los cambios en precipitación pueden variar desde una reducción del 5% hasta
un aumento del 5%. Estos resultados no toman en cuenta los eventos extremos
como tormentas y huracanes. Las tormentas de verano serán más severas y los
huracanes más intensos19.
5.6.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación al cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y su capacidad
para afrontarlos.
La zona de influencia del sitio piloto Los Petenes registra grados de sensibilidad
ante el cambio climático que van de alto a muy bajo. En particular, los municipios que
se localizan en el área del humedal son de nivel alto (Calkiní), medio (Hecelchakán
y Tenabo) y bajo (Campeche). Por su parte, el municipio de Champotón registra un
grado de sensibilidad alto (figura 6).
En cuanto al grado de adaptación al cambio climático, en la figura 7 se puede
observar que los rangos se ubican en los niveles muy alto (Campeche y Hecelchakán)
y alto (Tenabo, Calkiní y Champotón).
18 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología de 2050 se forma con los
datos proyectados para el clima entre 2040 y 2069.
19 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
518 D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 6. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios
dentro de la zona de influencia del sitio piloto Los Petenes.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
Figura 7. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios
dentro de la zona de influencia del sitio piloto Los Petenes.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
S itio
piloto
L os Petenes
519
5.6.9 Proyecciones del uso de suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia 2020 en el uso de suelo para la zona
costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas
entre 1976 y 2000, y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov). De
manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto y su cuenca asociada.
A continuación se presentan los resultados para la Península de Yucatán, con algunas
anotaciones específicas para el sitio piloto Los Petenes.
La vegetación de galería está en riesgo de desaparecer, al presentar una probabilidad de permanencia de entre 0 y 0.04%. Dicha vegetación predomina en actuales
zonas riparias, principalmente en Los Petenes (figura 8).
Los principales usos de suelo atrayentes son los pastizales cultivados y la agricultura de riego. Se estima que estos usos dominarán sobre los demás hacia el año
2020. La vegetación secundaria muestra una moderada probabilidad de expandirse,
entre 0.2 y 0.3.
La vegetación hidrófila y el popal-tular dominarán las regiones costeras (figura 8).
Sin embargo, su probabilidad de permanencia será de entre el 20 y el 30%. Es decir,
que de acuerdo con el modelo no es posible distinguir cuál será el proceso de degradación de estas coberturas. El caso específico de Los Petenes es más prometedor,
pues existe una alta probabilidad de permanencia de este tipo de vegetación (entre
40 y 60%).
El proceso de intensificación de actividades agropecuarias se presentará sobre
actuales zonas de selvas bajas y medianas, y zonas de vegetación secundaria.
Es importante destacar que las medidas de conservación implementadas en este
sitio controlan la transformación del uso de suelo y, por lo tanto, atenúan el impacto
de las actividades antropogénicas. Sin embargo, dado el valor comercial de las especies encontradas en el área, los hábitats críticos de Los Petenes continúan existiendo
bajo considerable presión.
520 D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 8. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020 por clases de cobertura
en la península de Yucatán.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
S itio
piloto
L os Petenes
521
5.7 Sitio piloto Sistema Lagunar Nichupté (Cancún)
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.,
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.7.1 Descripción física1 e hidrológica
El sistema lagunar Nichupté abarca una superficie2 de 9 832 hectáreas y se encuentra en la Región Hidrológica 32, Yucatán Norte, de la CONAGUA. La naturaleza de
la península de Yucatán hace que no existan muchos escurrimientos superficiales y la
gran mayoría del agua se infiltra para formar numerosos ríos subterráneos, los cuales
son visibles solamente en los cenotes. La figura 1 muestra el polígono del sitio piloto
sobre una imagen de satélite de la zona. En ella se puede apreciar la importante mancha urbana de la ciudad de Cancún y la expansión del corredor turístico hacia el sur.
El sistema lagunar Nichupté se localiza en la costa noreste de Quintana Roo, en
el litoral correspondiente al mar Caribe. Este sistema costero está compuesto por la
laguna Nichupté (la cual representa el 46% del área) y tres lagunas periféricas: Bojórquez, Río Inglés y Somosaya3 (ver figura 2). Estas dos últimas se caracterizan por
tener numerosos cenotes sumergidos, los cuales aportan cantidades considerables de
agua dulce.
1 Buena parte de la información sobre la descripción física e hidrológica de este sitio fue obtenida de Jordán et al.,
1977; de Collado et al., 1995, y de la ficha Ramsar, CONANP, 2004.
2 Superficie calculada con la poligonal que se elaboró para este estudio, Bello et al., 2007.
3 Jordán et al., 1977.
522
Figura 1. Imagen de satélite del Sistema Lagunar Nichupté con la delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
Las aguas del sistema son prácticamente marinas, con gradientes de salinidad de
24 a 30 psu4 (el agua de mar promedia 35 psu), así como valores de oxígeno disuelto
y pH similares a los del ambiente marino. La variación anual de la temperatura del
agua es entre 26 y 27.3 °C. Los aportes subterráneos de agua dulce producen ciertas
áreas salobres; sin embargo, su influencia no alcanza a modificar la salinidad global de
Nichupté, por lo que es un efecto local. Los sedimentos son arenosos, cubiertos por
manchones de pastos y crecimiento de manglares en las orillas.
4 Practical system unit. 1 psu = 1 000 ppm.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
523
Figura 2. Cuerpos de agua del Sistema Lagunar Nichupté.
1. Canal Cancún. 2. Laguna Bojórquez. 3. Bajo Zeta. 4. Isla Cancún. 5. Canal Nizuc. 6. Río Inglés.
7. Laguna Somosaya. 8. Laguna Nichupté.
Fuente: Jordán et al., 1977.
Las lagunas de Nichupté están separadas del mar por una barreara arenosa (Isla
Cancún), así que para comunicarlas con él y facilitar la navegación se dragaron tres
canales: Cancún (al norte), Nizuc (al sur) y Zeta (en la parte central). Los cuerpos
de agua del sistema lagunar son muy someros, entre 1.5 y 2 metros de profundidad,
con suaves pendientes, excepto en los canales. En efecto, los canales denotan las
zonas más bajas del sistema, con profundidades promedio de entre 2 y 2.5 metros y
máxima de 5 metros. Su ancho varía entre 17 y 75 metros.
La comunicación del sistema lagunar con los humedales continentales5 es por
descarga del manto freático. No hay una boca de conexión típica sino que la interac-
5 Humedales que se encuentran en el interior del territorio.
524
D escripción
detallada de los sitios piloto
ción con el mar se da a todo lo largo, condicionada principalmente por el ritmo de las
mareas y la circulación litoral.
El clima predominante es cálido subhúmedo, con lluvias en verano. Las lluvias se
presentan en los meses de mayo a septiembre, con una precipitación media anual de
1 128 mm, una evaporación potencial de 1 600 mm y una evapotranspiración de
805 mm. En otoño e invierno también se presentan precipitaciones por la humedad
presente en los “nortes”. La temperatura media anual es de 25 °C, con vientos dominantes en invierno provenientes del noreste y del este (18 km/h), y en verano del
sureste y este (12 km/h). La figura 3 destaca las características físicas del sitio piloto
de manera esquemática.
Figura 3. Esquema del Sistema Lagunar Nichupté.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
525
5.7.2 Relevancia ecológica
De acuerdo con el Inventario Nacional Forestal 20006, en el sitio se encuentran
diversas comunidades vegetales, como lo muestra el cuadro 1.
Cuadro 1. Algunas comunidades vegetales presentes en el sistema lagunar Nichupté
y el área que ocupan.
Comunidades vegetales
Manglar
Palmar
Popal-tular
Selva alta y mediana subperennifolia
Superficie (ha)
996.22
9.31
2 020.31
752.55
Fuente: SEMARNAP, 2001.
Los mangles rojo (Rhizophora mangle), blanco (Laguncularia racemosa) y negro
(Avicenia germinans) cuentan con protección especial, de acuerdo con la NOMECOL-059-2001. En cuanto a la fauna, dentro de la zona se ubica a la especie Jabiru
mycteria, conocida como jaribú, catalogada en la misma norma bajo el criterio de
especie protegida.
El sistema lagunar es un sitio de protección de larvas de peces, así como de distintos invertebrados marinos y estuarinos. Otro servicio ambiental que presta es el
de actuar como zona de transición entre especies del mar y de agua dulce. Se puede
distinguir en tierra firme la siguiente vegetación: selvas medianas, al menos tres tipos
de selvas bajas, selvas enanas, tintales, tulares y ocho tipos diferentes de manglar.
En el ambiente marino se encuentra una de las razones de la popularidad del Caribe
mexicano: los arrecifes de barrera y los de caleta. Hay también, en zonas protegidas
dentro de las lagunas arrecifales, grandes manchones de pastos marinos, que son
fuente de alimento, y refugio de manatíes y tortugas marinas. Todos los hábitats aquí
encontrados se desarrollan dentro de un ambiente frágil7.
6 SEMARNAP, 2001.
7 López-Portillo, 1999.
526
D escripción
detallada de los sitios piloto
Los hábitats presentes en el sitio propician la supervivencia de numerosas especies. Por ejemplo, las playas arenosas permiten la anidación de tortugas marinas;
las selvas medianas y bajas son abrigo para el mono aullador y el mono araña; los
manglares albergan cocodrilos, y las caletas, manatíes, sólo por mencionar algunos
animales populares. Hay 49 especies animales vulnerables o en peligro de extinción
en la región: seis de reptiles, 28 de aves y 15 de mamíferos8.
Debido a éstas y otras características de importancia ecológica, el sistema lagunar
Nichupté está considerado como una región prioritaria marítima por la CONABIO y
es parte del Parque Nacional Marino Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún
y Punta Nizuc, cuyo decreto data del 19 de julio de 1996. Sin embargo, no se encuentra catalogado por la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras ni como
un sitio Ramsar.
5.7.3 Descripción socioeconómica
La laguna Nichupté se encuentra en su totalidad dentro del municipio de Benito
Juárez, inmersa en la Ciudad de Cancún, y no colinda con ningún otro municipio del
estado de Quintana Roo. Cancún es la ciudad de mayor importancia en el estado, con
más del doble de habitantes que Chetumal, la capital. En el censo del año 2000, la
zona de influencia del sitio piloto9 contaba con 575 382 habitantes y tenía la tasa
de crecimiento poblacional más alta de todos los sitios piloto entre 1990 y 2000,
con 8.77%10. Debido a ello se estima que el número de personas que habitarán aquí
para el año 2030 se incrementará casi en 300%, llegando a 2 163 735 personas11.
Como un indicio del crecimiento exponencial de este sitio, es suficiente con considerar que hacia el año 1970, antes de iniciar el desarrollo de Cancún, la zona contaba
con cien habitantes12.
8 López-Portillo, 1999.
9 La zona de influencia incluye otros municipios vinculados con Benito Juárez a través del Plan Estatal de Desarrollo
(ver figura 9).
10 Con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
11 Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO, 2000b.
12 López-Portillo, 1999.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
527
Gracias al enorme potencial turístico de la costa caribeña y a que dicho sector
ocupa a un gran número de personas, este sitio cuenta con una de las tasas de crecimiento en el empleo más altas de todos las áreas estudiadas, con 6.96%13. El
atractivo turístico del estado de Quintana Roo lo ubica en una condición privilegiada,
ya que estadísticamente presenta valores de pleno empleo.
Aunque el turismo es el principal motor de la economía de Cancún, todos los
sectores económicos de esta región han registrado un crecimiento positivo durante
el periodo de 1999 a 2004. En las actividades agrícolas, ganaderas y pesqueras se
registró un aumento de 9.5% en la producción; la industria manufacturera creció
13%, y el turismo lo hizo en 5.5% promedio anual para el mismo periodo14.
En cuanto a los servicios de salud, el sitio piloto Nichupté presenta uno de los
mejores porcentajes de cobertura de toda la región, pues poco más del 50% de la
población es atendida. Sin embargo, la otra mitad de los habitantes no tiene acceso a
este servicio básico, lo cual sigue siendo preocupante. La población que gana menos
de un salario mínimo registra una tasa baja de crecimiento de sólo 0.45% entre 1990
y 2000, pero la de la población dependiente es la más alta de todos los sitios de
estudio, con 7.89% en el mismo periodo.
Cancún es uno de los destinos del país con mayor afluencia de turismo nacional e
internacional, y una de las principales fuentes de entrada de divisas al país. En efecto,
se estiman alrededor de 2 154 600 visitantes por año a esta ciudad y un aporte entre
el 30 y 50% de los ingresos totales del sector15. Dentro del sector turístico se incluye
hoteles y restaurantes, con toda la infraestructura y los servicios correspondientes, así
como buceo, pesca recreativa y demás actividades para entretener a los visitantes. Se
puede decir que el turismo encontrado en este sitio es, por lo tanto, de alto impacto.
La pesca realizada en el sistema lagunar es escasa. Dentro de las especies que se
logran extraer se encuentran Sparisoma, Scarus y Acanthurus, pargo, sábalo, mojarra blanca (Gerres cinereus), pargo gris (Lutjanus griseus), pargo ronco (Haemulon
sciurus) y barracuda (Sphyraena barracuda). En punta Nizuc se lleva a cabo pesca
13 Con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
14 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2003, e INEGI, 2005.
15 López-Portillo, 1999.
528
D escripción
detallada de los sitios piloto
de poco rendimiento, organizada en cooperativas y libre. Se explotan crustáceos y
peces. Algunas especies de peces, como el boquinete, y de crustáceos, como la langosta, están amenazadas por la pesca ilegal. También se tienen registradas especies
introducidas de Cassuarina spp. y Columbrina spp. En la laguna Nichupté se desarrolla
actualmente la acuicultura. Finalmente, se presenta una incipiente crianza de porcinos
hacia el borde occidental de la laguna.
5.7.4 Presiones por actividades económicas16
Quintana Roo fue uno de los dos últimos territorios de México, por lo que el uso
de sus recursos no se intensifica sino a partir del desarrollo turístico de Cancún, por
1974. Cancún fue el primer destino turístico que contó con un plan maestro de desarrollo. Sin embargo, para el año 2000, el plan consideraba una población de 250 mil
habitantes, lo cual subestimó considerablemente el crecimiento real experimentado
en el sitio. En consecuencia, la infraestructura básica también fue rebasada, y es difícil
y oneroso proporcionar servicios a muchas colonias en plena expansión. Esto afecta
la calidad de vida de los habitantes y la calidad del ambiente, cuyas consecuencias en
salud deben ser calibradas continuamente. El éxito de Cancún tiene un costo tanto
económico como ambiental, pues su crecimiento no se ha detenido y los efectos
del turismo de alto impacto son cada vez más evidentes. En efecto, la presión del
turismo en la zona genera altas externalidades17, cuyo valor económico comienza a
ser cuantificado.
El turismo es la “industria sin chimeneas”, pero no sin drenajes. Para fines comparativos se tomarán los datos oficiales de 1996, correspondientes a tres municipios:
Cozumel, Benito Juárez y Solidaridad (las cabeceras municipales de estos últimos
son Cancún y Playa del Carmen, respectivamente). Dichos datos indican que en el
estado se depuraron 26.4 millones de metros cúbicos de aguas residuales en plantas
de tratamiento. De este total, 73% correspondió a Benito Juárez, 12% a Cozumel
16 Buena parte de la información aquí presentada se basa en el ensayo de López-Portillo, 1999.
17 En términos simples, una externalidad puede definirse como un beneficio o un costo que no refleja su valor real
en el mercado. Las externalidades del turismo en la zona de Cancún se relacionan, por ejemplo, con los costos
derivados del agua contaminada (enfermedades gastrointestinales, ecosistema coralino degradado, afectación en
los recursos pesqueros, entre otros).
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
529
y 4% a Solidaridad. Ese año, tres millones de turistas visitaron Quintana Roo, cifra
impresionante si se compara con los 900 mil habitantes del estado. Si asumimos que
la cantidad de agua residual producida es proporcional al número de turistas, se infiere
que no todas las aguas negras son tratadas. Los cuerpos lagunares, así como el mar,
son, por lo tanto, receptores de grandes cantidades de aguas residuales que no han
recibido un tratamiento adecuado. Destaca el caso de los drenajes clandestinos en la
zona hotelera, cuyo contenido se vierte directamente a la laguna.
Los residuos sólidos municipales representan otro problema. Se estima que en
1998 se produjeron en el estado casi 400 mil toneladas de basura. Cancún solamente cuenta con un relleno sanitario de tres hectáreas, en tanto que en Playa del Carmen
y Cozumel la disposición de desechos se hace a cielo abierto, con tiraderos de cuatro
y diez hectáreas, respectivamente. Esta práctica es alarmante, dada la fragilidad de
los ecosistemas y las condiciones de infiltración del suelo de la península. En efecto,
cuando el agua de lluvia pasa a través de la basura, arrastra consigo lixiviados18,
que son compuestos en solución, cuyo contenido puede incluir, entre otras cosas,
metales pesados y contaminantes orgánicos. Los lixiviados pasan al manto freático
sin ninguna barrera que pueda disminuir su toxicidad, poniendo en riesgo la única
fuente de abastecimiento de agua dulce para la población. De hecho, Cancún tuvo
un basurero a cielo abierto desde su nacimiento hasta 1994, cuando fue clausurado.
Probablemente, los lixiviados que ahí se generaron seguirán drenando a la laguna por
más de veinte años.
Los arrecifes coralinos representan uno de los ambientes de mayor atractivo del
sitio y son, a su vez, particularmente sensibles a la contaminación por nutrientes,
plaguicidas y desechos orgánicos. Estos contaminantes se encuentran en las aguas
negras y tratadas que, junto con los lixiviados de la basura, son introducidos intencional o inadvertidamente, pero de manera constante a la laguna y el mar. Las consecuencias son devastadoras para el frágil ecosistema coralino.
Un arrecife sano depende de la simbiosis de alga y animal. El alga requiere de una
alta transparencia de agua para aprovechar la luz y así crecer sanamente, por lo que
18 Lixiviado: líquido producido cuando el agua percola sobre un material permeable. En el caso de los residuos
sólidos, el agua reacciona con los materiales presentes y acarrea consigo sustancias contaminantes.
530
D escripción
detallada de los sitios piloto
se asocia con sistemas con bajo contenido de nutrientes (oligotróficos19). La parte
viva de las especies que constituyen los arrecifes es sólo la superficie, lo que queda
por debajo son depósitos calcáreos: viejos esqueletos sobre los que crecen nuevas
poblaciones. Cuando los arrecifes reciben aguas contaminadas, esa delgada piel (que
crece unos pocos milímetros por año) es sustituida por brotes de algas de vida libre y
bacterias; el arrecife muere y sólo queda el esqueleto milenario. A este fenómeno se
le conoce como blanqueamiento de corales y representa una catástrofe tanto ecológica como económica, pues los arrecifes degradados pierden su atractivo turístico.
Las actividades turísticas y la expansión urbana han ejercido una presión muy
importante en este sitio debido a la modificación de los ecosistemas tanto costeros
como acuáticos. En la laguna, los rellenos de material y dragados han modificado el
perímetro y las corrientes. También se ha edificado infraestructura hotelera sobre las
bocas y se han construido viviendas en zonas inundables. Todo esto modifica la permeabilidad de las barras y, finalmente, repercute sobre el ecosistema arrecifal coralino,
debido a la estrecha relación ecológica entre los sistemas lagunares y marinos.
La modificación del entorno tiene como resultado la alteración de los procesos
naturales que sostienen a la población humana y otras especies. Los ecosistemas no
sólo se han modificado sino también reducido espacial y funcionalmente. Un ejemplo
claro es la constante tala de manglar, lo cual desprovee de refugio a las larvas de peces
y crustáceos, y disminuye la capacidad de amortiguamiento del sistema en caso de
tormentas. El hábitat se fragmenta y las especies silvestres ya no cuentan con la zona
de transición entre ecosistemas.
Esto es preocupante, pues los ambientes terrestres albergan prácticamente la
tercera parte de las especies vegetales y animales de la península. Muchas de las especies animales requieren de corredores que les permitan llegar a otros sitios de forrajeo
y el desmonte excesivo les impide el acceso. El resultado es la pérdida de numerosas
poblaciones y el empobrecimiento genético de la región. Desafortunadamente, la
situación está empeorando, pues Nichupté cuenta con una de las mayores tasas de
19 Los sistemas oligotróficos (baja productividad, agua clara) son muy sensibles a cambios en la concentración de
nutrientes en el agua. Cuando ésta aumenta, se inicia el fenómeno de eutrofización y los sistemas pueden devenir
eutróficos (alta productividad, agua turbia).
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
531
deforestación de todos los sitios de estudio20. La deforestación de la franja costera,
entre otros impactos humanos, se ha extendido a lo largo del corredor Cancún-Tulum
para promover otros complejos turísticos y la consecuente expansión urbana de sus
ciudades de apoyo. Destaca Playa del Carmen, con el mayor crecimiento demográfico
de la región en los últimos años.
En el sistema lagunar Nichupté se ha registrado la introducción de especies exóticas de flora y fauna, así como la extinción de especies nativas. Esto se debe a la
sorprendente transformación de lagunas y dunas, la disminución de la calidad del agua
superficial y la reducción de su disponibilidad por contaminación. En pocas palabras,
los ecosistemas tal como existían antes del desarrollo de Cancún como destino turístico prácticamente han desaparecido. La figura 4 resume las principales presiones
encontradas en el sitio piloto.
Figura 4. Sitio piloto Sistema Lagunar Nichupté.
Cultivos dominantes y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al. 2007, para este estudio, con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b, e INEGI,
2002.
20 Gómez et al., 2007.
532
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.7.5 Uso de suelo
De acuerdo con el análisis cartográfico realizado entre los años de 1976 y 2000, se
concluye que en 1976 se presentaba un dominio de selvas perennifolias y subperennifolias al occidente de la laguna y vegetación de dunas costeras hacia el oriente
(figura 5). Para el año 2000, estas regiones fueron transformadas en zonas urbanas
(espacios de infraestructura turística) en su totalidad. En números totales, la vegetación hidrófila, que comprende palmares, manglares, popales y tulares, no parece
haber sufrido transformación. Sin embargo, sí son evidentes los cambios negativos
provocados por la presión territorial de las zonas urbanas sobre este tipo de vegetación (figura 5).
Las tasas de deforestación indican una pérdida sumamente elevada, del 18%
anual, tanto en selvas perennifolias como subperennifolias y vegetación de dunas
costeras (cuadro 2). Como es de esperarse, el proceso de cambio dominante en el
uso de suelo de Nichupté es la construcción de espacios urbanos y turísticos. El 77%
de las selvas y el 64% de la vegetación de dunas costeras pasaron a zonas de asentamientos humanos de 1976 a 2000 (cuadro 2 y figura 5). El 68% de pastizales de
1976, al norte de la laguna, está ahora ocupado por hoteles.
Cuadro 2. Cambio de uso de suelo entre 1976 y 2000 en el Sistema Lagunar Nichupté,
Quintana Roo.
Uso de suelo y vegetación
Asentamiento humano
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Pastizales inducidos y
cultivados
Selva perennifolia y
subperennifolia
Vegetación hidrófila
Total
Superficie en
1976 (ha)
Superficie en
2000 (ha)
Tasa de transformación
35
4 414
503
1 554
4 629
9
0.14
0.00
-0.18
392
0
-1.0
770
3 643
9 758
14
3 598
9 804
-0.18
0.00
 
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
533
Figura 5. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000
en el Sistema Lagunar Nichupté, Quintana Roo.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
5.7.6 Uso del agua
Para una descripción detallada de la Región Administrativa XII de la CONAGUA, Península de Yucatán, referimos al lector a la sección 4.3, donde se presenta el diagnóstico hidrológico de la zona costera del Golfo de México. La península de Yucatán es
una plataforma constituida por materiales calcáreos de origen marino. La interacción
del clima con el substrato calcáreo forma un paisaje que se caracteriza por no poseer
vías de agua superficiales. El efecto acidificante del agua de lluvia y de la actividad
biológica produce conductos de disolución en ese sustrato, a través de los cuales
fluye el agua hasta llegar al litoral. El agua infiltrada pasa al subsuelo, formando ríos
subterráneos de cauces inciertos. Como no hay arcillas o suelos profundos, el agua
pasa sin ser filtrada al acuífero.
534
D escripción
detallada de los sitios piloto
Esta es la clave de la fragilidad del sitio: cualquier elemento químico o biológico
proveniente de fertilizantes o de aguas residuales provoca, sin obstáculos, un halo
de contaminación del agua con la que entra en contacto21. La contaminación del
manto freático representa un grave peligro, pues es la única fuente de agua segura
con la que cuenta la población. Por lo tanto, es de primordial importancia prevenir
que agentes contaminantes entren al acuífero, pues removerlos del agua subterránea
resulta extremadamente costoso, además de técnicamente muy complicado. De no
implementarse medidas como construcción de drenaje con tratamiento de aguas
residuales, fosas sépticas selladas o sistemas de saneamiento ecológico22 al igual
que la instalación de rellenos sanitarios impermeables, las consecuencias pueden ser
catastróficas para la población humana y la fauna del área.
La proximidad de la costa con el sitio piloto Nichupté presenta otro factor a considerar en cuanto a la extracción de agua subterránea: la intrusión salina. Cuando los
mantos acuíferos son sobreexplotados, se crea un cono de depresión que atrae agua
salada o salobre, y disminuye su calidad. Esto tiene repercusiones tanto para el abastecimiento de la población como para los eventuales sistemas de riego. De acuerdo
con el Programa Hidráulico Nacional 2001-2006, la vulnerabilidad del acuífero de
Yucatán a este fenómeno debe considerarse con especial atención en las siguientes
localidades: Campeche, Cancún, Cozumel y Chetumal23.
El sistema lagunar Nichupté se encuentra en la Región Administrativa XII, Península de Yucatán, dentro de la subregión de planeación Oriente. En esta subregión se
extrae un total de 1 096.573 hm3 anuales, lo que representa el 70.9% del volumen
extraído en la región24. Esto se explica con el hecho de que los asentamientos humanos de mayor importancia en la península se encuentran en la subregión, incluyendo
Mérida y el corredor turístico Cancún-Tulum. Del volumen utilizado, el 99.95%
corresponde a agua subterránea, lo que demuestra la vulnerabilidad de la zona a la
contaminación de su fuente primordial de abastecimiento.
21 López-Portillo, 1999.
22 Saneamiento alternativo al sistema de alcantarillado y plantas de tratamiento, que minimiza el uso de agua y
recicla los nutrientes. El concepto básico es cerrar los ciclos del agua y los residuos orgánicos a través de la
producción de alimentos. Ver, por ejemplo, http://www.ecosanres.org.
23 CONAGUA, 2001.
24 Gerencia Regional Península de Yucatán.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
535
En cuanto a la dotación de servicios de agua potable, se observa un alto crecimiento entre 1999 y 2004 en el número de viviendas que no cuenta con agua entubada, a una tasa de 7.37% anual25. Este dato pone en evidencia cómo el crecimiento
poblacional ha sobrepasado en gran medida a la capacidad del municipio para proveer
los servicios básicos. En contraste, el número de viviendas sin drenaje disminuyó en
5.56% al año durante el mismo periodo26. Esto demuestra los esfuerzos que se han
realizado para conducir adecuadamente las aguas residuales, pero si no son acompañados con la instalación de plantas de tratamiento eficientes (o implementación de
sistemas alternativos de saneamiento), la calidad de los cuerpos de agua y el acuíferos
continuará su deterioro, así como el de los ecosistemas que dependen de ellos.
5.7.7 Vulnerabilidad
La península de Yucatán es afectada periódicamente por eventos ciclónicos que
producen lluvias torrenciales, vientos extremos, marejadas y oleaje. Entre 1886 y
2003 se registraron en la región 114 ciclones tropicales, recibiendo en promedio casi
un evento por año27. Dentro de los de mayor impacto en los últimos veinte años se
considera a los huracanes Gilberto en 1988, Opal y Roxanne en 1995, e Isidore en
2002, así como Wilma y Emily en 2005. Las afectaciones más importantes han sido
producto del oleaje y la marea de tormenta.
El 14 de septiembre de 1988, el huracán Gilberto tocó tierra mexicana al sur
de Cancún, con vientos de 270 km/h y rachas de 315 km/h. Este fenómeno meteorológico ha sido catalogado como uno de los más potentes entre los eventos
registrados, alcanzando la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson. Las olas de cinco
metros de altura afectaron navíos e instalaciones turísticas en la ciudad de Cancún.
En Quintana Roo se reportaron 16 muertos, ocho mil damnificados y 35 mil personas evacuadas, además de 100 mil hectáreas de cultivo parcialmente destruidas y
cerca de 1 500 viviendas dañadas. En Yucatán y Campeche se registró un total de 14
muertes, 10 mil damnificados, 30 mil personas evacuadas y más de dos mil viviendas
25 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2003, e INEGI, 2005.
26 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2003, e INEGI, 2005.
27 CONAGUA, 2003.
536
D escripción
detallada de los sitios piloto
destruidas28. Las pérdidas económicas totales se estimaron en más de 750 millones
de dólares29.
En 1995 hubo dos eventos ciclónicos que afectaron la península de Yucatán: los
huracanes Opal y Roxanne. El huracán Opal tocó tierra el 28 de septiembre al norte
de Chetumal y permaneció en la península durante dos días, para luego reingresar al
Golfo de México. Presentó una lluvia máxima de 245 mm en 24 horas, con vientos
máximos de 250 km/h y rachas de 300 km/h. El huracán Roxanne tocó tierra entre
el 8 y el 20 de octubre, y tuvo la particularidad de regresar a lugares por donde ya
había pasado. Causó mayores daños en la parte occidental de la región, sobre todo en
el estado de Campeche. En Quintana Roo, el impacto conjunto de estos dos eventos
provocó la destrucción de cincuenta mil hectáreas de selva baja, mediana y manglar,
así como daños parciales en 45 mil hectáreas de vegetación de dunas costeras, humedales y selvas bajas en zonas de amortiguamiento. Casi tres mil casas habitación
fueron dañadas y se reportaron 1 800 damnificados. El gobierno federal aportó 1.5
millones de nuevos pesos para apoyar a los pescadores del estado.
En 2005 también se registraron dos huracanes que produjeron severos daños
económicos: Wilma y Emily. El huracán Wilma afectó principalmente a Cancún, además de Playa del Carmen, Cozumel e Isla Mujeres. El total de las pérdidas estimadas
para el estado de Quintana Roo a causa de este fenómeno asciende a más de 18 mil
millones de pesos. Cabe destacar que los daños indirectos causados por los ingresos
perdidos por la falta de operatividad de las instalaciones turísticas representaron
cerca de tres veces el monto de los daños directos. Este fenómeno afectó a más de
110 mil personas y cerca de 23 mil viviendas, destruyendo poco menos de diez mil
hectáreas de cultivo. El huracán Emily afectó a cerca de diez mil personas, dañó 850
viviendas y destruyó casi nueve mil hectáreas de cultivo. El impacto económico de
este fenómeno fue superior a 1 100 millones de pesos, equivalente al 1% del PIB
estatal30. En el cuadro 3 se puede apreciar el detalle de los daños de este fenómeno
hidrometeorológico en el estado.
28 Bitrán, 2001.
29 CENAPRED, 2001.
30 CENAPRED, 2006.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
537
Cuadro 3. Huracán Emily: resumen de daños en el estado de Quintana Roo (miles de pesos).
Concepto
Daños
directos
Daños
indirectos
Total
Porcentaje
del total
Infraestructura social
Vivienda
Educación
Salud
Infraestructura hidráulica
26 912
3 580
6 721
0
1 056
1 896
451
2 725
27 969
5 476
7 172
2 725
2.5
0.5
0.6
0.2
Subtotal
37 214
6 128
43 342
3.9
Infraestructura económica
Infraestructura urbana y
ambiental
Sector eléctrico
26 271
1 682
27 952
2.5
50 132
1 504
51 636
4.6
Subtotal
76 403
3 186
79 588
7.2
Sector agropecuario
Sector turismo
10 128
307 400
1 960
639 299
12 088
946 699
1.1
85.2
Subtotal
317 528
641 259
958 787
86.3
0
29 134
29 134
2.6
431 145
679 706
1 110 851
100.0
Sectores productivos
Atención a la emergencia
Total
Fuente: CENAPRED, 2006.
El cuadro 4 muestra el número de municipios que se vieron afectados por huracanes en el año 2005, mientras que en la figura 6 se pueden observar los estados con
mayor número de declaratorias de desastre durante el mismo año. Relacionado con
ello, la figura 7 denota la susceptibilidad de la costa de Quintana Roo ante posibles
inundaciones.
538
D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 4. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005.
Sistema Lagunar Nichupté.
Humedal
Sistema lagunar Nichupté
(Cancún), Quintana Roo.
Frío
Huracán
Lluvias intensas
Total de eventos
0
5
0
5
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
Figura 6. Declaratorias de desastre emitidas en 2005.
Fuente: Dirección General del FONDEN.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
539
Figura 7. Zonas susceptibles de inundación. Sistema Lagunar Nichupté.
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
540
D escripción
detallada de los sitios piloto
Aunque la cantidad de lluvia generada por estos eventos ciclónicos extremos es
alta, la península de Yucatán también presenta frecuentemente periodos largos con
baja o nula precipitación. Las sequías contribuyen en gran medida a la generación
y propagación de incendios forestales, como fue el caso en junio de 1989, cuando
12 incendios afectaron 119 mil hectáreas de Quintana Roo, de las cuales 80 mil
correspondían a selva media, y 35 mil a selva baja. En 1998 se incendiaron más de
cien mil hectáreas en el estado de Yucatán.
Como se estableció en los párrafos anteriores, la vulnerabilidad por actividades
antropogénicas de este sitio consiste en la fragmentación, destrucción y modificación
de los hábitats naturales y la resultante alteración de los procesos de sustento. Resalta la contaminación de aguas superficiales y subterráneas por descargas de aguas
residuales sin tratamiento adecuado y lixiviados del antiguo tiradero a cielo abierto.
Por otro lado, la pérdida de manglar y zonas inundables hacen a Cancún particularmente vulnerable ante los efectos esperados del cambio climático: inundaciones por
el aumento del nivel del mar y mayor impacto por el incremento en la intensidad de
huracanes.
Al realizar reducciones de escala de los modelos globales del clima se obtienen los
siguientes resultados para el sistema lagunar Nichupté:
• La temperatura a finales de siglo se incrementará entre 2 y 3 °C, y el periodo de
cambio significativo iniciará a partir de 203031.
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre junio y octubre, resultando
el periodo de mayor cambio en verano.
• Las ondas de calor se duplicarán en frecuencia y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales. Los periodos secos
serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• La precipitación disminuirá entre 5 y 10%. Estos resultados no toman en cuenta
los eventos extremos como tormentas y huracanes. Las tormentas de verano
serán más severas y los huracanes más intensos32.
31 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología aquí referida se forma con
los datos proyectados para el clima entre 2010 y 2039.
32 Resultados de Magaña et al., 2007, para este estudio.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
541
Es importante destacar la dependencia que tienen en el corredor turístico Cancún- Tulum tanto el empleo del estado de Quintana Roo como la entrada de divisas al
país. Si tomamos en cuenta que cerca del 67% del empleo aquí generado se relaciona
con actividades turísticas, deducimos que casi siete de cada diez empleos de la zona
son vulnerables al cambio climático en el corto plazo33. El efecto se puede apreciar en
las pérdidas millonarias cada vez que un huracán pasa por la zona de Cancún.
5.7.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación al cambio climático
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito de
influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables
socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y su capacidad de
afrontarlos. A continuación se presentan los resultados para el sitio piloto Nichupté.
El grado de sensibilidad ante el cambio climático para la zona de influencia de este
sitio es de alto a muy bajo. Como puede observarse en la figura 8, se trata de una
región contrastante, en donde los municipios costeros del mar Caribe son poco sensibles debido, en gran medida, a las mejores condiciones de desarrollo que presentan
(Isla Mujeres, Benito Juárez, Cozumel y Solidaridad). Por otra parte, el municipio de
Lázaro Cárdenas destaca por su nivel de sensibilidad alto.
En cuanto a la capacidad de adaptación al cambio climático, en la figura 9 se
observa que la zona de influencia de este sitio presenta grados muy altos en Isla
Mujeres, Benito Juárez, Solidaridad y Cozumel, en tanto que el municipio de Lázaro
Cárdenas registra un grado medio de capacidad para adaptarse a dicho fenómeno.
33 Graizbord et al., 2007.
542
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 8. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios que se encuentran
dentro de la zona de influencia del sitio piloto Sistema Lagunar Nichupté.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
Figura 9. Índice de capacidad de adaptación de los municipios que se encuentran dentro del
sitio piloto Sistema Lagunar Nichupté.
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
543
5.7.9 Proyecciones de uso del suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia 2020 en el uso de suelo para la zona
costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas
entre 1976 y 2000, y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov). De
manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto y su cuenca asociada.
A continuación se presentan los resultados para la Península de Yucatán, con algunas
anotaciones específicas para el sitio piloto Nichupté.
• Existe una alta probabilidad en las zonas no costeras de pasar a uso de suelo de
pastizales cultivados y agricultura de riego.
• En las zonas costeras dominará la vegetación hidrófila y de popal-tular, aunque
con una probabilidad de permanencia baja, por lo que no es posible distinguir cuál
será su proceso de degradación.
• En la zona del sistema lagunar Nichupté predominará la vegetación popal-tular.
Las proyecciones para 2020 en la zona costera del Golfo de México indican que
los patrones de uso de suelo de 1976 a 2000 se van a intensificar en los próximos
veinte años. Dado el crecimiento experimentado en este sitio en las últimas décadas,
es imperativo aplicar las medidas existentes para regular el desarrollo turístico. En
particular, se debe prestar atención al decreto de la Ley de Vida Silvestre (febrero de
2007), que reglamenta la construcción de infraestructura turística en regiones de
manglares o de humedales de importancia para la biodiversidad.
544
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 10. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020 por clases de cobertura,
península de Yucatán.
Fuente: elaborado por Gómez, et al. 2007, para este estudio.
S istema L agunar N ichupté (C anc ú n )
545
5.8 Sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen)
Javier Bello et al., Leticia Gómez et al.,
Víctor Magaña et al., Boris Graizbord et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al.
5.8.1 Descripción física e hidrológica1
El sistema lagunar Boca Paila se sitúa en la porción continental de la bahía de Asunción, dentro de la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an, cuyo decreto como área natural
protegida data del 20 de enero de 1986. El sistema lagunar cuenta con un área
aproximada de 306 mil hectáreas y un perímetro de 239 km. Pertenece a la Región
Hidrológica 33 de la CONAGUA, Yucatán Este. La reserva se encuentra en la porción
central de la costa oriental del estado de Quintana Roo y cubre aproximadamente
el 10% de la superficie estatal, con 528 mil hectáreas, de las cuales, 120 mil son
marinas. La figura 1 es una imagen de satélite que incluye la delimitación del sitio
piloto, mientras que la figura 2 es una representación esquemática del mismo.
El área se sitúa sobre suelo calizo cárstico2, en la franja más joven de la península de Yucatán. Los suelos en Sian Ka’an son generalmente más pobres que los del
resto de la península: pedregosos, someros, fácilmente degradables y con potencial
forestal. Los principales tipos de suelo, de acuerdo con la terminología maya, son los
siguientes: tsek’el, en las partes altas y laderas con buen drenaje; k’ankab al pie de las
1 La mayoría de la información aquí presentada fue obtenida del Programa de Manejo de la Reserva de la Biosfera
Sian Ka’an (INE-SEMARNAP, 1996) y de la ficha Informativa de los humedales de Ramsar, Reserva de la Biosfera
de Sian Ka’an (Arellano, 2003)..
2 Suelo que contiene carbonato de calcio y puede ser fácilmente erosionado por la acción del agua.
546
Figura 1. Imagen de satélite del Sistema Lagunar Boca Paila y la delimitación del sitio piloto.
Fuente: Google Earth.
elevaciones, con drenaje parcial, y ak’alche en la partes bajas, con mal drenaje. El subsuelo está formado en su totalidad por calizas blancas y arenosas, no mineralizadas,
llamadas saskab. Con los efectos de la lluvia, viento y brisa, estas rocas se endurecen
y forman placas en la superficie, conocidas como lajas. Entre las lajas, la vegetación ha
abierto oquedades y aportado capas delgadas de materia orgánica. El área es plana,
con menos de treinta metros sobre el nivel medio del mar.
Uno de los principales atractivos de Sian Ka’an es la barrera de arrecifes ubicada
frente a la reserva, con cerca de 110 km de longitud. Esta barrera forma parte de la
segunda cadena arrecifal más larga del mundo. La presencia de los arrecifes disminuye
la energía del oleaje marino, que puede ser muy destructiva en periodo de huracanes.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
547
Figura 2. Esquema del sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
548
D escripción
detallada de los sitios piloto
La barrera da origen a aguas tranquilas en las bahías y a una abundante sedimentación
de materiales calcáreos, lo que permite la implantación y el desarrollo de manglares en
las costas. Los manglares también actúan como una barrera orgánica entre las aguas
protegidas y el mar adyacente3. La actividad biológica derivada de la barrera arrecifal
está dando lugar a la formación de una estructura geológica.
El agua de lluvia se filtra a través del sustrato poroso y corre lentamente bajo
la superficie en dirección SW-NE. El manto freático se encuentra muy cercano a la
superficie, pues aflora en las partes bajas, formando lagunas someras o zonas inundadas durante las lluvias. La superficie de tierras inundadas a finales de la temporada
lluviosa es superior al 70%, mientras que en la época seca sólo un 20% del área,
correspondiente a las zonas de manglar chaparro, permanece inundada. Como en
toda la península, la permeabilidad del sustrato determina la inexistencia de cuerpos
de agua superficiales. El agua de lluvia se filtra y da origen a las corrientes subterráneas que se manifiestan en los cenotes. En Sian Ka’an se han registrado cenotes con
más de cincuenta metros de diámetro y en las partes más altas de la reserva estos
afloramientos son los únicos cuerpos de agua existentes4. En los lugares más bajos,
el nivel topográfico coincide con el manto freático, formando así lagunas, manantiales
de agua dulce y canales, por donde circula el agua hacia la costa.
Las aguas de la reserva son por lo general muy transparentes, debido a su dureza
y a las condiciones oligotróficas5 del sitio. Esto quiere decir que hay una baja concentración tanto de nutrientes como de materia orgánica dentro del sistema, y se explica
por la naturaleza del lecho calcáreo, poco soluble. En tales condiciones, las algas y
el plancton no pueden proliferar y el agua se mantiene cristalina. Por otro lado, las
aguas de Sian Ka’an presentan abundancia en carbonatos y bicarbonatos disueltos,
una variación de pH entre 7.5 y 9.0, así como una oscilación de salinidad y dureza
entre 2 y 18% en las aguas continentales comunicadas con el mar. Cabe señalar que
las aguas de medios oligotróficos son muy sensibles a la introducción antropogénica
de nutrientes por aguas residuales o fertilizantes agrícolas.
3 Lankford, 1977; López-Portillo et al., 1999.
4 López y Consejo, 1987.
5 Pocos nutrientes, aguas claras, baja productividad.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
549
La laguna se halla colonizada por pastos marinos y presenta aporte de agua dulce
a través de la cuenca freática. La comunicación con el mar es amplia y está condicionada por corrientes litorales y mareas. La trampa de nutrientes6 es moderada y se
vincula con la actividad metabólica de sedimentos orgánicos provenientes del manglar. Por esta razón, el modelo trófico7 es complejo, pues depende de la interacción
del ecosistema coralino con el de manglar8.
El clima es cálido subhúmedo, clasificado como Aw, con lluvias en verano9. La
temperatura media anual es de 26 °C y la media mensual siempre supera los 22
°C. La variación anual de temperatura es de 4.8 °C, registrándose las temporadas
más cálidas en julio y agosto, mientras que enero es el mes más frío. Se distingue
una época de sequía de diciembre a abril. La región está comprendida dentro de
la zona ciclónica tropical del Caribe, y los vientos dominantes tienen una dirección
este-sureste.
La precipitación media es de 1 300 mm anuales, con el 75% de las precipitaciones registrándose entre los meses de mayo y octubre. Septiembre es el mes más
lluvioso, con 208.1 mm en promedio y el más seco es marzo con 29.4 mm. Los
huracanes son frecuentes en el Caribe y Sian Ka´an presenta un frente amplio a su
trayectoria; doce de ellos han entrado por sus costas en los últimos 88 años.
5.8.2 Relevancia ecológica10
La Reserva de la Biosfera Sian Ka’an incluye las principales comunidades propias de la
península de Yucatán y el Caribe. Se sitúa como una zona de transición que permite
una gran diversidad de ambientes y sustenta el desarrollo de organismos tanto mesoamericanos como antillanos. Sian ka’an presenta, además de la barrera de arrecifes
de coral, los siguientes hábitats: zonas de pastos marinos, esteros, manglares, lagunas
6 Función característica de los humedales que retienen nutrientes en los sedimentos y los liberan lentamente. Los
nutrientes también pueden ser retenidos por diferencias de densidad en la mezcla de agua dulce y salada.
7 Red alimenticia.
8 Yáñez et al., 2004.
9 García, 1988.
10 Las fuentes principales de información de este apartado son INE-SEMARNAT, 1996, y Arellano, 2003.
550
D escripción
detallada de los sitios piloto
costeras, pantanos, sabanas de agua dulce, lagunas interiores, ciénagas y selvas inundables. Las principales comunidades son11:
• Selvas tropicales de cuatro subtipos: selva mediana subperennifolia, selva baja
subcaducifolia, selva baja caducifolia y selva baja inundable. Comprenden un total
aproximado de 150 mil hectáreas.
• Vegetación inundable: incluye cayos, manglares de franja, manglares chaparros,
marismas de zacate, tasistales y comunidades inundables arboladas con dosel
abierto. Abarcan un área aproximada de 175 mil hectáreas.
• Comunidades arbustivas: se componen de acahuales (vegetación secundaria),
quemadales, vegetación de dunas costeras y áreas perturbadas. Representan
aproximadamente veinte mil hectáreas.
• Cuerpos de agua: comprenden cenotes, lagunas interiores, lagunas costeras y
canales de escorrentía; ocupan aproximadamente 17 mil hectáreas.
• Bahías: están representadas por cuerpos de agua marina someros con influencia
de agua dulce y se extienden en aproximadamente 103 mil hectáreas.
• Plataforma arrecifal: abarca hasta la isóbata12 de 50 m hacia mar abierto y cubre
un área aproximada de 15 mil hectáreas.
De las comunidades vegetales aquí encontradas, dos son de particular importancia por ser endémicas de la península de Yucatán: las selvas bajas inundables y los
petenes.
Las selvas bajas inundables son endémicas o exclusivas de la península de Yucatán y en Sian Ka´an están presentes alrededor de reholladas13 y en planicies de poca
pendiente, con suelos dispersos de tipo ak’alché. La altura arbórea varía de 6 a 14 m,
y entre las especies dominantes en las partes altas se encuentran el chechem negro
(Metopium brownei), el chicozapote (Manilkara zapota), el pucté (Bucida buceras)
y el dzalam (Lysiloma latisiliqua). En las partes más bajas (y por lo tanto con mayor
grado de inundación) son característicos el tinte (Haematoxilon campechianum), el
11 INE-SEMARNAP, 1996.
12 Curva para la representación cartográfica de los puntos de igual profundidad en océanos y mares, así como en
lagos y lagunas de gran extensión.
13 Cuerpo de agua de pequeñas dimensiones, generalmente intermitente, donde hay una disponibilidad de agua
estacional.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
551
pucté enano (Bucida spinosa), Dalbergia glabra, la jícara (Crescentia cujete) y otros
arbolillos resistentes a la inundación periódica del suelo.
Los petenes son asociaciones vegetales exclusivas de las penínsulas de Yucatán
y Florida, así como la isla de Cuba14. Son islas de selva entre las marismas, formadas
por parches de suelo un poco más elevado y, por lo tanto, a salvo de la inundación y la
intrusión salina. Los diámetros de su superficie varían de unas pocas decenas de metros
hasta más de un kilómetro. Los más grandes suelen presentar un cenote en su centro.
Existen dos tipos de petenes, los inundables y los no inundables, de acuerdo con el
tipo de suelo donde se desarrollan. En Sian Ka´an se observan centenares de petenes,
posiblemente más que en ninguna otra área protegida del mundo. Muchos de ellos son
difícilmente accesibles y la mayor parte permanece sin intervención humana.
De acuerdo con el Inventario Nacional Forestal 2000, en el sitio se encuentran
diversas comunidades vegetales, distribuidas como se muestra en el cuadro 1.
Cuadro 1. Comunidades vegetales y superficie ocupada en hectáreas.
Sistema lagunar Boca Paila.
Comunidades vegetales
Manglar
Popal-tular
Selva alta y mediana subperennifolia
Selva baja subperennifolia
Selva mediana caducifolia y subcaducifolia
Superficie (ha)
45 792.72
59 710.69
90 837.03
15 862.26
0.10
La flora presenta una gran similitud con la vegetación de la región del Golfo de
México y las Antillas; asciende a 1 048 especies, entre algas marinas, musgos, helechos y plantas superiores. Entre las especies características de flora destacan la caoba
(Swietenia macrophylla), el cedro (Cedrela odorata) y el guayacán (Guaiacum sanctum), todas ellas seriamente amenazadas debido a su valor comercial. En el cuadro 2
se pueden apreciar algunas especies relevantes que se encuentran en el sitio.
14 Mas et al., 2001.
552
D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 2. Especies relevantes encontradas en el sistema lagunar Boca Paila.
Dunas costeras
Nombre común
Nombre científico
Chit
Thrinax sp.
Skimay
Tournefortia naphaloides, Strumpfia maritima
Riñonina
Ipomoea prescaprae
Siricote de playa
Cordia sebestena
Lirio
Hymenocallis sp.
Uva de playa
Coccoloba uvifera
Chechem negro
Metopium brownei
Chicozapote
Manilkara zapota
Chacá
Bursera simarouba
Dzalam
Lysiloma latisiliqua
Chit
Thrinax radiata
Yá´xnik
Selva subperennifolia y
Guayabillo
subcaducifolia
Manglares
Vitex gaumeri
Piscidium sartorianum
Palma kuka
Pseudophoenix sargentii
Despeinada
Beaucarnea ameliae
Tasistales
Tule
Sabia
Nakax
Mangle rojo
Acoelorraphe wrightii
Typha angustifolia
Cladium jamaicense
Coccothrinax readii
Rhizophora mangle
Mangle negro
Avicennia germinans
Mangle blanco
Laguncularia racemosa
Fuente: NOM-059-ECOL-2001; INE-SEMARNAT, 1996, y Arellano, 2003.
En cuanto a la fauna, este sitio destaca como zona de anidación para tortugas,
aves acuáticas y palustres, así como por su especial riqueza en galerías subterráneas
inundadas. Es un lugar importante en la ruta migratoria de aves e inclusive de la mariposa monarca con destino aún desconocido. Entre los vertebrados terrestres existen
especies protegidas. Los inventarios realizados hasta ahora registran 2 161 especies.
En el cuadro 3 se pueden apreciar algunas de ellas.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
553
Cuadro 3. Especies protegidas reconocidas en el área de estudio.
 
Mamíferos
Aves
Reptiles
Nombre común Nombre científico
Nombre común Nombre científico
Puma
Felis concolor
Jabalí de collar
Pecari tajacu
Ocelote
Felis pardalis
Tepescuintle
Agouti paca
Tigrillo
Felis weidii
Sereque
Dasyproca punctata
Leoncillo
Felis yagouaroundi
Taira
Eira barabara
Tapir
Tapirus bardii
Oso hormiguero
Saraguato
Alouatta pigra
Mico de noche
Venado cola
blanca
Odocoileus virginianus Manatí
Trichechus manatus
Venado
temazante
Mazama americana
Cachalote
Physeter catodon
Jabalí de labios
blancos
Teyassu pecari
 
 
Fragata
Fregata magnificens
Ibis blanco
Eudocimus albus
Pelícano café
Pelicanus occidentalis
Espátula rosa
Ajaia ajaja
Cormorán
Phalacrocorax
olivaceus
Flamenco
Phoeniconterus ruber
Cigüeña
Mycteria americana
Bobo
Sula leucogaster
Tortuga blanca
Chelonia midas
Tortuga carey
Tortuga laúd
Dermochelys coriacea
Cocodrilo
Crocodylus moreletii
Tortuga
caguama
Caretta caretta
Nauyaca
Botrops asper
Tamandua
tetradactyla
Potos flavus
Eretmochelys
imbricata
Fuente: NOM-059-ECOL-2001; INE-SEMARNAT, 1996, y Arellano, 2003.
La reserva cuenta con un alto número de especies amenazadas. El cuadro 4
muestra algunas de ellas.
554
D escripción
detallada de los sitios piloto
Cuadro 4. Inventario de algunas especies amenazadas incluidas en la NOM-059-ECOL 2001.
 
Plantas
Reptiles
Aves
Mamíferos
Nombre común
Especie
Categoría
Palma chit
Thrinax radiata
Amenazada
Nakax
Coccothrinax readii
Amenazada
Tasiste
Acoelorraphe wrightii
Amenazada
Kuka
Pseudophoenix sargentii
Amenazada
Despeinada
Beaucarnea ameliar
Amenazada
Tortuga blanca
Chelonia mydas
Protegida
Tortuga laúd
Dermochelys coriacea
Protegida
Tortuga caguama
Caretta caretta
Protegida
Tortuga carey
Eretmochelys imbricata
Protegida
Cocodrilo de pantano
Crocodylus moreletii
Protegida
Cocodrilo de río
Crocodylus acutus
Protegida
Flamenco rosa
Phoeniconterus ruber
Amenazada
Bobo
Sula leucogaster
Amenazada
Jabirú
Jabiru mycteria
Protegida
Jaguar
Phantera onca
Protegida
Tapir
Tapirus bardii
Protegida
Jabalí de labios blancos
Tayassu pecari
Protegida
Manatí
Trichechus manatus
Protegida
Cachalote
Physeter catodon
Protegida
Fuente: NOM-059-ECOL-2001; INE-SEMARNAT, 1996, y Arellano, 2003.
La gran diversidad de hábitats propicia un alto grado de interacciones de los seres
vivos entre sí y con el medio físico. El resultado es un lugar único por su riqueza
natural y los servicios ambientales que presta:
• Soporte biofísico de actividades productivas como pesquerías, turismo y productos forestales.
• Regulación de la composición química de la atmósfera, depuración de agua superficial, y protección de cuencas y agua subterránea.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
555
• Protección costera por control de sedimentos e inundaciones, además de proveer
una barrera contra la erosión y los efectos del oleaje de tormenta.
• Generación de biomasa y nutrientes para el ecosistema y las actividades productivas humanas.
• Regeneración importante de recursos y materias primas.
Dada la gran importancia ecológica de este sitio, la CONABIO lo ha catalogado
como Región Prioritaria Terrestre, Marina e Hidrológica. También cuenta con la designación de Área de Importancia para la Conservación de las Aves (AICAS) y Área
Natural Protegida. En el plano internacional, este sitio piloto cuenta con el mayor
número de reconocimientos: es el sitio de Importancia Internacional 1 329 bajo la
Convención de Ramsar, pertenece a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (WHSRN) y cuenta con la distinción de ser Patrimonio Mundial Natural de la
Humanidad por IUCN, en colaboración con UNESCO (1997).
5.8.3 Descripción socioeconómica
El sistema lagunar Boca Paila (Punta Allen) se encuentra principalmente dentro
del municipio de Felipe Carrillo Puerto, pero una pequeña porción pertenece al de
Solidaridad15, en el estado de Quintana Roo. La mayor parte de la población se concentra en las colonias de pescadores, en las localidades de Javier Rojo Gómez (Punta
Allen) y Punta Herrero, con cerca de mil habitantes. Los pobladores restantes están
diseminados a lo largo de la costa en pequeños ranchos y desarrollos turísticos. Los
habitantes provienen en su mayoría de otras regiones del estado y la península. No
existen grupos indígenas dentro de la reserva, sino que están asentados en ejidos en
su periferia.
La densidad poblacional de Sian Ka’an es de 0.16 habitantes por km2 y el porcentaje de terrenos utilizados para la actividad humana es del 0.85%16. Dentro de
los ocho sitios piloto estudiados, éste es el menos poblado. En efecto, en el censo del
15 El 13 de marzo de 2008 fue aprobada la creación del municipio de Tulum, al que ahora corresponde dicha porción
de la Reserva, La Jornada, 2008.
16 INE-SEMARNAP, 1996.
556
D escripción
detallada de los sitios piloto
año 2000, la población de la zona de influencia del humedal17 ascendía a 91 41718,
con una tasa alta de crecimiento poblacional entre 1990 y 2000, de 2.36%19. Sin
embargo, se estima que para el año 2030, la cantidad de habitantes se mantendrá relativamente constante (91 477 pobladores)20. Es de particular relevancia que en este
sitio, nueve de cada diez personas no cuentan con acceso a servicios de salud21.
Dentro de las principales actividades económicas que se desarrollan destaca el
turismo, sector que registra el mayor crecimiento, con más de treinta mil visitantes
anuales. Por ejemplo, los pobladores se han organizado en tres sociedades cooperativas de servicios turísticos para aprovechar el atractivo natural de la reserva. La
pesca de langosta es la de mayor importancia y ocupa al mayor número de personas.
Además se capturan otras especies, como cangrejo moro, peces de escama y tiburón.
Una actividad alternativa en creciente desarrollo es la pesca deportiva ligera, también
conocida como pesca con mosca. Otras actividades relevantes son la agricultura, la
ganadería y el aprovechamiento forestal. La economía general de la región está en
crecimiento.
El 99% de la tierra en Sian Ka’an es de propiedad nacional. Sólo existen propiedades privadas en la franja costera que enfrenta al mar abierto y coinciden con ranchos
copreros22 y las zonas de mayor potencial turístico. Las costas en las bahías son de
propiedad nacional.
5.8.4 Presiones por actividades económicas
La pesca de langosta espinosa (Panulirus argus) es una de las actividades más importantes dentro del sitio y fue el detonador de los asentamientos humanos en el área.
Los juveniles de la langosta se desarrollan en las lagunas y las bahías hasta llegar a la
talla comercial mínima de captura de 13.5 cm de cola. La captura se realiza en el mar,
17 Incluye a otro municipio vinculado con Felipe Carrillo Puerto por medio del Plan Estatal de Desarrollo (ver figura
6).
18 Con datos de INEGI, 2000a.
19 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
20 Graizbord et al., 2007, con datos del CONAPO, 2006.
21 Con datos de INEGI, 2000a.
22 Ranchos donde se cultiva la palma de coco.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
557
por medio de trampas. Los pescadores están organizados en cinco cooperativas, aunque sólo dos tienen sus asentamientos en la reserva. En 1983 se estimó que el 74%
de los ingresos de las cooperativas provenían de la explotación de esta especie, por lo
que se consideraba necesario diversificar las especies de captura. Existe un periodo de
veda de cuatro meses, en el cual los pescadores se dedican a capturar especies menos
lucrativas, como tiburón, sábalo, robalo, pargo, langostino, caracol y huachinango; o
al turismo. La captura anual de langosta en toda la Bahía de Asunción varía entre
cincuenta y cien toneladas de colas limpias, que en su mayoría es exportada. También
existe una cantidad significativa de pesca ilegal, incluso en periodo de veda, que no se
reporta. Se ha observado, en general, la sobreexplotación de las especies comerciales,
así como la disminución de especies de importancia turística.
La explotación forestal tiene sus inicios en 1910, con el aprovechamiento del
chicle, y en 1935 se crean los primeros ejidos del estado. A partir de ese año comenzó
la extracción de maderas preciosas, las cuales han sido explotadas hasta su extinción.
Esto contrasta con los bosques utilizados por la cooperativa de producción chiclera,
que recolecta la materia prima cada cuatro años. Dichos bosques, ubicados en la parte
central y sur de la reserva, son los mejores conservados de Sian Ka’an. Las especies de
mayor demanda forestal son la palma de chit (Thrinex radiate) para la construcción
de trampas de langosta, el chechem (Metopium browned) para fabricar durmientes y
las maderas duras tropicales como el habin (Piscidia piscipula) y el dzaiam (Lysiloma
latisiliqua).
Existen actividades de caza de fauna silvestre para autoconsumo y se centran principalmente en dos especies de venado, el jabalí de collar (Pecari tajacu), el tepescuintle
(Agouti paca), el sereque (Dasyprocta punctata), el tejón (Nasua nasua), y el hocofaisán (Crax rubra)23. También se practica ilegalmente la cacería comercial, que
comprende a todos los animales anteriormente citados, además del tigrillo, el ocelote
y aves de ornato, como el pavo de monte o pavo ocelado (Agriocharis ocellata), el
cojolite (Penelope purpurescens), la paloma de ala blanca (Zenaida asiatica), el loro
de Yucatán (Amazona xantolora) y el tucán real (Ramphastos sulphuratus). Entre los
reptiles cazados destacan el cocodrilo de pantano (Crocodylus moreleffi), el cocodrilo
23 Avina, 1983; Navarro et al., 1990.
558
D escripción
detallada de los sitios piloto
de manglar (Crocodylus acutus) y las tortugas marinas: blanca (Chelonia mydas),
caguama (Careffa caretta) y carey (Eretmochelis imbricata)24.
Dado el gran número de visitantes que arriban al corredor Cancún-Tulum, las presiones del sector turístico deben considerarse con sumo cuidado para evitar efectos
similares a los encontrados en el Sistema Lagunar Nichupté. La incorporación de Sian
Ka’an al desarrollo turístico ha sido más tardía, por lo que la infraestructura construida
es menos agresiva que en Cancún. Sin embargo, el número de turistas va en aumento
y, por lo tanto, también la generación de desechos sólidos y aguas residuales. Es claro
que el turismo de este sitio debe mantenerse enfocado a la conservación del ecosistema para poder operar dentro del área natural protegida. Aunque en el programa de
manejo se especifican los lineamientos para la implantación de infraestructura hotelera en las inmediaciones de la reserva, se han registrado prácticas inadecuadas de
turismo y el incremento de esta actividad sin el seguimiento adecuado. El hecho de
estar situado al interior de una reserva de la biosfera contribuye a frenar actividades
degradantes, pero sólo si se hace respetar la reglamentación establecida.
Las actividades en la periferia de la reserva pueden repercutir en el estado de
conservación de la misma. En efecto, las prácticas agrícolas que se desarrollan en
los bordes de los principales caminos son de roza-tumba-quema y pueden resultar
en incendios forestales, además de promover la degradación de los delgados suelos.
La ganadería extensiva en la zona tiene altos índices de agostadero25, entre 15 y
20 hectáreas por unidad animal. Es decir, para engordar cada animal se necesita la
superficie mencionada. Si consideramos que la media nacional es de tres hectáreas
por unidad, la baja rentabilidad del sector pecuario en el sitio se hace evidente. Se
observan áreas agrícolas y ganaderas que han sido abandonadas por los bajos rendimientos, dejando grandes zonas de vegetación degradada. Parte del problema surge
por la irregularidad en la tenencia de la tierra y la falta de seguridad jurídica sobre
bienes nacionales.
En la figura 3 se muestran las principales presiones del sitio. Puede observarse que
el desarrollo de actividades dentro del polígono del sitio es muy limitado.
24 Avina, 1983.
25 Cantidad de superficie necesaria para sostener cada unidad animal en la cría de ganado.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
559
Figura 3. Sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
Cultivos dominantes y principales actividades económicas.
Fuente: elaborado por Rodríguez et al., 2007, para este estudio con datos de INEGI, 1991, INEGI, 2000b
e INEGI, 2002.
5.8.5 Uso de suelo
El sistema lagunar Boca Paila se encuentra dominado por selvas perennifolias, selvas
subperennifolias y vegetación hidrófila. En el análisis cartográfico del año 2000 se
observa la desaparición de una sección de selva baja caducifolia reportada en 1976.
El principal cambio negativo que amenaza a este sistema es el crecimiento de regiones de pastizales sobre vegetación hidrófila al norte del sitio de estudio (figura
4). El cuadro 5 muestra las tasas de transformación y los tipos de vegetación con
mayores cambios en el periodo. La pérdida total de los pastizales inducidos sugiere
el abandono de tierras agropecuarias. En efecto, la totalidad de pastizales inducidos
(casi 2 400 hectáreas) pasó a otro uso de suelo, transformándose principalmente
en vegetación hidrófila. Más preocupante es el hecho de que se perdieron 10 740
hectáreas de selva baja caducifolia y que los cuerpos de agua tuvieron un decremento
del 8% anual, con una pérdida total de casi 25 mil hectáreas.
560
D escripción
detallada de los sitios piloto
Figura 4. Cambios de uso de suelo y cobertura vegetal de 1976 a 2000 en el Sistema Lagunar
Boca Paila (Punta Allen), Quintana Roo.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
La vegetación hidrófila resulta como el principal atrayente, y las zonas de selvas
altas perennifolias, selvas bajas caducifolias y pastizales, los expulsores. La contracción de la frontera agropecuaria puede explicarse por la incapacidad de los suelos
para mantener dichas actividades y el decreto de área natural protegida, que incluye
políticas de conservación. El relativo éxito de estas medidas se demuestra con la
expansión de la vegetación hidrófila. Sin embargo, se debe poner especial atención a
la regulación de los usos turísticos, y su impacto en los cuerpos de agua y las zonas
costeras del sitio a futuro.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
561
Cuadro 5. Cambio de uso de suelo entre 1976 y 2000 en el Sistema Lagunar Boca Paila
(Punta Allen), Quintana Roo.
Uso de suelo y vegetación
Agricultura de temporal
Área sin vegetación aparente
Asentamiento humano
Pastizales inducidos y cultivados
Cuerpo de agua
Otros tipos de vegetación
Selva perennifolia y subperennifolia
Selva caducifolia y subcaducifolia
Vegetación hidrófila
Total
Superficie en
1976 (ha)
Superficie en
2000 (ha)
0
0
0
2 392
29 383
0
102 564
10 740
93 636
238 714
1 024
1 221
55
0
4 527
1 135
104 144
0
100 664
238 714
Tasa de
transformación
-1.00
-1.00
-1.00
1.0
0.08
-1.00
0.00
1.0
0.00
0
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
5.8.6 Uso del agua
El sistema lagunar Boca Paila, al igual que el sistema lagunar Nichupté, se encuentra
dentro de la subregión de planeación Oriente, en la Región Administrativa XII de la
CONAGUA, Península de Yucatán, donde también se ubica el sitio Los Petenes. La
descripción detallada de la cuenca y del acuífero de Yucatán se realizó en la sección
4.3 “Diagnóstico hidrológico de la zona costera del Golfo de México”. Las estimaciones de demanda y uso del agua, así como la problemática particular de la subregión
Oriente se presentaron en la discusión del sitio piloto Nichupté (sección 5.7). Referimos al lector a esas dos secciones, puesto que la información disponible para este
sitio es prácticamente idéntica.
En cuanto a los servicios de agua y saneamiento en las viviendas, durante el
periodo de 1990 a 2000, las localidades del sistema lagunar Boca Paila mostraron
una disminución en los hogares sin acceso a agua entubada de casi 5% anual. En
contraste, la situación del alcantarillado no es satisfactoria, pues hubo un aumento de
1.6% anual en el número de hogares sin este servicio durante el mismo periodo26.
26 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 1990, e INEGI, 2000a.
562
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.8.7 Vulnerabilidad
Las presiones humanas por el desarrollo turístico, así como las actividades extractivas
y agropecuarias presentan una amenaza importante para el mantenimiento de la
cobertura vegetal. En efecto, el desarrollo de infraestructura hotelera se realiza en
detrimento de la vegetación natural; la tala de especies con importancia comercial o
útiles para otras actividades productivas merma la abundancia genética del sitio y la
práctica de roza-tumba-quema representa un riesgo latente de incendios forestales.
La boca de Asunción se encuentra en la trayectoria directa del paso de los
huracanes formados en el Caribe, por lo que Punta Allen resulta un sitio con alta
vulnerabilidad a este tipo de fenómenos meteorológicos. Los últimos huracanes que
pasaron por la zona se registraron en 1974, 1987, 1995 y 2005. El aumento del
nivel del mar asociado con el cambio climático y las mareas de tormenta pone en
riesgo a la población humana y al entorno natural, tal como lo conocemos. En la figura
5 se pueden observar las zonas susceptibles a inundaciones, mientras que el cuadro 6
muestra el número de municipios relacionados con este sitio y afectados por eventos
hidrometeorológicos en 2005.
Cuadro 6. Municipios afectados por diversos eventos climáticos en 2005.
Sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
Humedal
Punta Allen (Sistema Lagunar
Boca Paila), Quintana Roo
Frío
Huracán
0
2
Lluvias intensas Total de eventos
0
2
Fuente: Coordinación General de Protección Civil, 2005.
Al realizar la reducción de escala de los modelos climáticos globales se obtienen
los siguientes resultados para el sistema lagunar Boca Paila:
• La temperatura a finales de siglo se incrementará entre 2 y 4 °C, y el periodo de
cambio significativo iniciará a partir de 203027.
27 La sección 6.1 trata sobre escenarios de cambio climático y explica que la climatología aquí referida se forma con
los datos proyectados para el clima entre 2010 y 2039.
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
563
Figura 5. Zonas susceptibles de inundación. Sistema Lagunar Boca Paila
(Punta Allen).
Fuente: elaborado por Bello et al., 2007, para este estudio.
564
D escripción
detallada de los sitios piloto
• Los meses de mayor incremento se encontrarán entre junio y septiembre, resultando el periodo de mayor cambio en verano.
• Las ondas de calor se duplicarán en frecuencia y su intensidad será superior entre
dos y tres grados centígrados en relación con las actuales.
• Los periodos secos serán más prolongados, superiores a seis días por año.
• Los resultados para la precipitación se muestran relativamente estables, con posibilidades de no sufrir cambios o hasta disminuir en un 5%. Estos valores no toman
en cuenta los eventos extremos como tormentas y huracanes. Las tormentas de
verano serán más severas y los huracanes más intensos28.
5.8.8 Índices de sensibilidad y de capacidad de
adaptación
En la sección 4.1 “Análisis socioeconómico de la zona costera del Golfo de México”
se describe en detalle cómo fueron elaborados los índices de sensibilidad y de capacidad de adaptación al cambio climático en el área de estudio. Se siguió el mismo
procedimiento para calcular dichos indicadores en los municipios dentro del ámbito
de influencia de cada sitio piloto. Básicamente estos índices integran diferentes variables socioeconómicas para determinar el grado en que la población de los distintos
humedales es susceptible a los efectos esperados del cambio climático y su capacidad
de afrontarlos. A continuación presentamos los resultados para el sitio piloto Sistema
Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
En las figuras 6 y 7 se puede observar que los dos municipios ubicados dentro
de la zona de influencia del sitio piloto (José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto)
registran grados de sensibilidad altos ante el cambio climático, en tanto que la capacidad de adaptación a este fenómeno es media para Felipe Carrillo Puerto y baja para
José María Morelos. Esto plantea un panorama de alta vulnerabilidad para la región
que comprende al sistema lagunar Boca Paila.
28 Resultados del componente de proyecciones de cambio climático de este estudio (Magaña et al., 2007).
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
565
Figura 6. Índice de sensibilidad ante el cambio climático de los municipios dentro de la zona
de influencia del sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
Figura 7. Índice de capacidad de adaptación al cambio climático de los municipios dentro de
la zona de influencia del sitio piloto Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
Fuente: elaborado por Graizbord et al., 2007, para este estudio.
566
D escripción
detallada de los sitios piloto
5.8.9Proyecciones en el uso del suelo
La sección 6.5 trata sobre las proyecciones hacia 2020 en el uso de suelo para la zona
costera del Golfo de México, de acuerdo con las tendencias de cambio encontradas
entre 1976 y 2000, y utilizando modelos probabilísticos (módulo de Markov). De
manera similar, se realizaron proyecciones en cada sitio piloto y su cuenca asociada.
A continuación se presentan los resultados específicos para el sistema lagunar Boca
Paila. Las principales proyecciones para la Península de Yucatán fueron presentadas
en las secciones 5.6 y 5.7, pues los sitios piloto Los Petenes y Nichupté comparten la
misma cuenca con el sistema lagunar Boca Paila.
El uso del suelo que parece dominar al hacer las proyecciones para el año 2020
es la vegetación hidrófila, en particular popal-tular. Las medidas de conservación establecidas en la reserva de la biósfera Sian Ka’an serán un factor determinante para el
mantenimiento de la cobertura vegetal y los procesos asociados con la interacción de
los hábitats y la población que sustentan (figura 8).
S istema L agunar B oca P aila (P unta A llen )
567
Figura 8. Probabilidades de cambio de uso de suelo para 2020 por clases de cobertura
en la península de Yucatán.
Fuente: elaborado por Gómez et al., 2007, para este estudio.
568
D escripción
detallada de los sitios piloto
Capítulo 6
Escenarios de cambio
climático y tendencias
en la zona del Golfo de
México
Víctor Magaña Rueda
(Baldemar Méndez Antonio, Ernesto Caetano dos Santos,
Juan Matías Méndez Pérez, Edgar Pérez Pérez)
Boris Graizbord
(Emelina Nava García, Anabel Martínez Guzmán,
Jaime Ramírez Muñoz, Raúl Lemus Pérez)
Jacinto Buenfil Friedman
Leticia Gómez Mendoza
(Daniel Ocaña Nava, Carolina Neri Vidaurri)
6.1 Escenarios de cambio climático para México
Víctor Magaña et al.
Boris Graizbord et al.
6.1.1 Introducción
El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) define el cambio climático como “una variación estadísticamente significativa, ya sea de las condiciones
climáticas medias o de su variabilidad, que se mantiene durante un periodo prolongado (generalmente durante decenios o por más tiempo)”. El cambio del clima
puede deberse a procesos naturales internos o a un forzamiento externo, a cambios
duraderos en la composición de la atmósfera o modificaciones en el uso del suelo,
resultado de las actividades humanas. La Convención Marco sobre el Cambio Climático (CMNUCC), en su artículo 1, define el cambio climático como “cambio del clima
atribuido directa o indirectamente a actividades humanas que alteran la composición
de la atmósfera mundial, y que viene a añadirse a la variabilidad natural del clima
observada durante periodos de tiempo comparables”. La CMNUCC hace pues una
distinción entre “cambio climático”, atribuible a actividades humanas que alteran la
composición de la atmósfera, y “variabilidad del clima”, atribuible a causas naturales.
Como país en desarrollo, México tiende a ser más vulnerable al cambio climático
que muchos países desarrollados. Las proyecciones del IPCC y otros grupos de científicos dedicados al análisis de los impactos del cambio climático sugieren que aun
con aumentos pequeños de la temperatura, el cambio climático podría traducirse en
impactos negativos serios sobre diversos sectores, principalmente aquellos relacionados con el recurso agua. Los escenarios de cambio climático son “una descripción
571
coherente, internamente consistente y plausible de un posible estado futuro del mundo”. No son pronósticos, ya que cada escenario es una alternativa de cómo se puede
comportar el clima futuro. Una proyección puede servir como material fuente para
un escenario, pero los escenarios en general requieren de información adicional; por
ejemplo, condiciones de emisiones de gases de efecto invernadero o de un escenario
base. Un conjunto de escenarios se adopta para reflejar, de la mejor manera posible,
el rango de incertidumbre en las proyecciones.
Los escenarios socioeconómicos pueden ser construidos como lo ha hecho el
IPCC en el Informe Especial de Escenarios de Emisiones (Special Report on Emissions Scenarios o SRES). Estos escenarios se realizaron para explorar el desarrollo
futuro del medio ambiente global, con especial énfasis en la producción de gases de
efecto invernadero1 (GEI). La emisión de estos gases a la atmósfera depende en gran
medida del nivel de desarrollo de los países a futuro, de su población y del uso de
hidrocarburos como fuente principal de abastecimiento de energía. Para poder hablar
de escenarios, primero se debe conocer la terminología:
• Línea evolutiva (Storyline): Descripción narrativa de un escenario (o familia de escenarios) que resalta sus principales características, las relaciones entre las fuerzas
determinantes fundamentales y la dinámica de su evolución.
• Escenario: proyecciones de un futuro potencial, con base en una lógica clara y una
línea evolutiva cuantificada.
• Familia de escenarios: escenarios que tienen una línea evolutiva similar en lo que
respecta a sus características demográficas, sociales, económicas y de cambio tecnológico. La serie de escenarios del SRES consta de cuatro familias: A1, A2, B1 y B2.
En el Informe Especial del IPCC sobre Escenarios de Emisiones se elaboraron cuatro líneas evolutivas (A1, A2, B1 y B2), donde se describen las fuerzas determinantes
en las emisiones de gases de efecto invernadero y aerosoles2, así como su evolución
1 Gases cuya presencia en la atmósfera contribuye al efecto invernadero. El efecto invernadero tiene que ver con la
capacidad de la atmósfera terrestre para retener las radiaciones emitidas por el Sol y ocurre en todos los planetas
que tienen atmósfera. El consenso científico actual es que el incremento en la concentración de ciertos gases
como el dióxido de carbono (CO2) y el metano (CH4), así como de los aerosoles, está aumentando este efecto.
2 Conjunto de partículas sólidas o líquidas en suspensión en el aire, cuyo tamaño oscila generalmente entre 0.01
y 10 mm, y que permanecen en la atmósfera como mínimo durante varias horas. Los aerosoles pueden ser de
origen natural (volcanes, incendios) o antropogénico (quema de combustibles). Los aerosoles pueden influir en
el clima de dos maneras: directamente, mediante la dispersión y la absorción de la radiación, e indirectamente,
al actuar como núcleos de condensación para la formación de nubes, o al modificar las propiedades ópticas y el
periodo de vida de las nubes.
572 E scenarios
de cambio climático y tendencias
durante el siglo XXI tanto en términos globales como de distintas regiones. Cada línea
evolutiva representa un nivel de desarrollo divergente en cuestiones demográficas,
sociales, económicas y tecnológicas.
Figura 1. Ilustración esquemática de los escenarios del SRES.
Escenarios SRES
Económico
A1
A2
Global
Regional
B1
B2
Ambiental
Población
Economía
Tecnología
Energía
Agricultura
(uso de suelo)
Fuerzas motoras
Las cuatro familias de escenarios se muestran, de manera muy simplista, como ramas de un árbol bidimensional. En
realidad, estas cuatro familias de escenarios comparten un espacio dimensional mucho más amplio, dadas las numerosas suposiciones necesarias para definir cada escenario dentro de cada modelo. El diagrama esquemático ilustra las
principales fuerzas motoras que rigen las emisiones de GEI. Cada familia de escenarios se basa en especificaciones
comunes de estas fuerzas motoras.
Fuente: Nakicenovic et al., 2000.
En términos simples, las cuatro líneas evolutivas combinan dos series de tendencias divergentes: una serie desarrolla las variaciones entre valores económicos y
ambientales; la otra serie explora las variaciones entre mayor globalización y regionalización. Estas líneas evolutivas pueden resumirse de la siguiente forma3:
3 Nakicenovic et al., 2000.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
573
• Línea evolutiva y familia de escenarios A1: presenta un mundo futuro con
crecimiento económico muy rápido; la población mundial llega a su punto
máximo a mediados del siglo y decrece desde entonces. Se asume una rápida
introducción de tecnología nueva y más eficiente.
• Línea evolutiva y familia de escenarios A2: supone un mundo muy heterogéneo, con la población global en constante aumento y el crecimiento económico orientado regionalmente; éste es más lento y fragmentado que en las otras
líneas evolutivas.
• Línea evolutiva y familia de escenarios B1: muestra un mundo convergente
con los mismos patrones de población que la familia A1, pero con cambios
rápidos en las estructuras económicas hacia una economía de servicios e información. Esto supone una reducción en la intensidad del uso de materiales,
y la introducción de tecnologías limpias y eficientes en el uso de recursos.
• Línea evolutiva y familia de escenarios B2: plantea un mundo en donde el
énfasis se concentra en soluciones locales para la sustentabilidad económica,
social y ambiental. Asume una población en continuo crecimiento (menor al
de la familia A2) y un nivel de desarrollo económico intermedio.
A partir de estas líneas evolutivas se desarrollaron cuarenta escenarios que caben
dentro de cada una de las cuatro familias. Es importante recalcar que todos los escenarios se consideran como válidos y no tienen asignada una probabilidad de ocurrencia. De las cuatro familias se tomaron seis grupos de escenarios: uno para cada una
de las familias A2, B1 y B2, y tres para la familia A1. Estos últimos caracterizan los
desarrollos alternativos de tecnologías energéticas: A1F1 (uso intensivo de recursos
fósiles), A1T (uso predominante de recursos alternativos a los fósiles) y A1B (asume
un balance de las fuentes energéticas).
Se puede decir, en resumen, que los escenarios del SRES consideran diferentes
condiciones del desarrollo global para los próximos cien años y son, en un sentido
más amplio, escenarios del estado, y crecimiento de la población y la economía. Las
dos grandes familias de escenarios conllevan a estimar las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Los escenarios “A” describen un mundo futuro con alto
crecimiento económico, mientras que en los “B” ese crecimiento es más moderado.
Los escenarios A1 y B1 suponen que habrá una globalización tal que las economías
574 E scenarios
de cambio climático y tendencias
convergerán en su desarrollo. En los A2 y B2 se considera que el desarrollo se dará
más en un nivel regional. Estos escenarios parten de un conjunto de suposiciones
acerca de la evolución de los forzantes (población, tecnología, economía, uso del
suelo, agricultura y energía) tanto en el ámbito global como regional.
Entre las suposiciones inherentes a los escenarios mencionados, se estima que
las reservas petroleras y de carbono serán la fuente principal de energía por lo menos
para los próximos cien años. El año 1990 se toma como marco de referencia para
evaluar las condiciones futuras. Así, para ese año, la población mundial constaba de
5 300 millones de habitantes, el producto interno bruto mundial era de 12 billones
de dólares por año y la tasa del ingreso era de $16.1 per cápita. La población mundial,
según los escenarios A1 y B1, crecerá a 7 mil y 7 100 millones de habitantes, respectivamente; mientras que los escenarios A2 y B2 consideran que ésta aumentará a 15
100 y 10 400 millones, respectivamente. La tasa de ingreso personal será semejante
en los escenarios A, mientras que en el escenario B2 aumentará a casi el doble. Por último, las emisiones de gases de efecto invernadero proyectadas por el IPCC, respecto
a los escenarios elaborados, pueden resumirse de la siguiente manera:
•
•
•
•
Emisiones altas Emisiones media-alta Emisiones media-baja Emisiones bajas
A1B
A2
B2
B1
6.1.2 Reducción de escala
Los experimentos numéricos con modelos de circulación general de la atmósfera (General Circulation Models o GCM) permiten concluir que el aumento en las
concentraciones de gases de efecto invernadero tendrá impactos significativos en el
clima global y regional. Sin embargo, es menos claro en qué medida se modificarán
las condiciones climáticas en sitios particulares. Las llamadas técnicas de reducción
de escala o downscaling se han desarrollado como puentes para ligar la información
generada en los experimentos de cambio climático con los posibles impactos que
pueden producirse a escalas regionales. La información requerida para estudios de
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
575
impacto del cambio climático debe tener escalas espaciales mucho más finas que las
generadas por los GCM. Dichos modelos tienen resoluciones espaciales de cientos de
kilómetros, mientras que los estudios de impacto a menudo se realizan en zonas de
tan sólo unos cuantos kilómetros. La baja resolución espacial de los GCM no permite
considerar los forzantes del clima local como topografía o uso de suelo. Algunas veces,
los impactos de las variaciones globales del clima cobran características particulares
en lugares de topografía marcada, islas o regiones de contrastes en el uso de suelo.
Esto se debe a que dichos factores generan circulaciones de mesoescala4. De ahí el
interés por aplicar técnicas de reducción de escala.
También existen algunos modelos llamados de clima regional que tienen resolución de decenas de kilómetros y pueden ser alimentados con información de los modelos de baja resolución espacial, como los GCM. Estos modelos contienen una mejor
representación de, por ejemplo, la topografía o el uso de suelo de la región de interés
que es considerada en el dominio del modelo. Sin embargo, los modelos regionales
son susceptibles a los errores sistemáticos en los campos del modelo global y pueden
incluso exacerbarlos, generando así una pobre simulación del clima regional.
La forma más directa de obtener escenarios locales de cambio climático es utilizando los cambios del clima proyectados por los modelos de baja resolución espacial
y sumarlos al clima considerado como base. Este método se utiliza generalmente
cuando no existe posibilidad de aplicar modelos de clima regional o para estimar la
incertidumbre que surge de los numerosos modelos y experimentos de cambio climático.
Sin embargo, algunos escenarios de cambio climático también pueden obtenerse
a través de técnicas estadísticas. Estas técnicas tienen la ventaja de ser económicas
en términos computacionales y por lo tanto pueden aplicarse rápidamente. Además,
pueden proveer información puntual, lo cual es importante para los estudios de impacto del cambio climático. El esquema tiene como hipótesis fundamental que las
relaciones construidas con el clima actual se mantienen aun bajo cambio climático.
Para las décadas por venir (2010-2030), la hipótesis no es mala, pues la incertidum4 La mesoescala en meteorología es el estudio de sistemas del tiempo atmosférico más pequeños que la escala
sinóptica meteorológica, pero más grandes que la microescala y la escala de tormenta de los sistemas de nubes
cúmulos. Sus dimensiones horizontales generalmente oscilan de cerca de 9 km a varios centenares de kilómetros
(brisas de mar).
576 E scenarios
de cambio climático y tendencias
bre dada por los diferentes escenarios de emisiones es mínima. Por ello, generalmente
se presta más atención a periodos en los que el cambio climático proyectado será más
notable; es decir hacia finales de siglo. Ahí, las diferencias entre escenarios cobran
importancia y se utilizan como uno de los factores de incertidumbre de la magnitud
de los cambios esperados.
Figura 2. Precipitación promedio anual en la costa del Golfo de México.
Fuente: Magaña et al., 2007.
6.1.3 Incertidumbre en las proyecciones del cambio
climático
Hay dos fuentes fundamentales de incertidumbre en los escenarios de cambio climático regional que deben considerarse en los estudios de impacto:
1. La incertidumbre acerca de las emisiones futuras de GEI y aerosoles. Los gases
como dióxido de carbono (CO2), metano (CH4) y los aerosoles afectan el forzamiento radiativo5 del sistema climático; es decir, rompen el equilibrio entre la
5 Se denomina forzamiento radiativo al cambio en el flujo neto de energía radiativa hacia la superficie de la Tierra
medido en el borde superior de la troposfera (a unos 12 000 m sobre el nivel del mar) como resultado de cambios
internos en la composición de la atmósfera, o cambios en el aporte externo de energía solar. Se expresa en W/m2.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
577
radiación solar que incide en la Tierra y la que es reflejada por el planeta. El Informe Especial sobre Escenarios de Emisiones provee una estimación de la incertidumbre en dichas emisiones. Este elemento es importante, pues los cambios en
temperatura y precipitación, incluso a escala regional, pueden variar de acuerdo
con las concentraciones proyectadas.
2. La incertidumbre en la sensibilidad global del clima y los cambios de patrones de
circulación a escala regional que simulan los modelos del clima. Las diferencias
en la formulación de los modelos de circulación general de la atmósfera llevan a
que se generen diferencias entre escenarios, incluso para un mismo forzante. Así,
mientras un modelo proyecta un cambio de 1 ºC, otro puede indicar un cambio
de 2 ºC. Por estas mismas razones, algunos modelos predicen incrementos en la
precipitación, mientras que otros sugieren una disminución.
La incertidumbre se propaga de una estimación a otra; es decir, la incertidumbre
de los escenarios produce incertidumbre en el ciclo del carbono para los modelos, y
ésta se propaga en los climas globales y regionales proyectados en los modelos que,
a su vez, generan incertidumbre cuando se estiman los impactos en una región o
localidad (figura 3).
Figura 3. Cascada de incertidumbre en la relación entre emisiones e impactos.
Escenarios
de emisiones
Respuesta del
ciclo del carbono
Sensibilidad del
clima global
Escenarios de cambio
climático regional
Rango de
posibles impactos
Una fuente adicional de duda se encuentra en la variabilidad natural del sistema
climático, que en gran medida es el resultado de inestabilidades propias, o forzamientos externos, como los que resultan de la actividad volcánica o la actividad solar.
Para analizar los impactos y las medidas de adaptación se han utilizado escenarios de
578 E scenarios
de cambio climático y tendencias
cambio climático, cuya selección, en la mayoría de los casos, ha sido arbitraria y con
poca consistencia en términos de manejo de sesgos de los modelos.
6.1.4 Tendencias de la temperatura y el clima en los
últimos cien años
Para la región de México casi no se dispone de experimentos con modelos de clima
regional que permitan estimar directamente los cambios en parámetros meteorológicos y por ello se usan técnicas de reducción de escala. Existen dos fuentes de
información de escenarios de cambio climático generados con modelos dinámicos de
clima regionales. Uno de ellos es el Modelo Japonés desarrollado por el Meteorological Research Institute (MRI), con el cual se han generado proyecciones de cambio
de clima con escalas espaciales de 22 x 22 km. Dicha información ha sido de gran
utilidad para analizar algunos de los procesos que resultarán en México bajo un clima
más cálido. También se dispone de una salida construida con el modelo PRECIS para
la región de México, Centroamérica y el Caribe, desarrollada con información del
modelo Hadley Centre. Ambas proyecciones con modelos de clima regional han sido
analizadas y sus resultados son comparables con algunos de los obtenidos con técnicas estadísticas. En la figura 4 se ilustran los pasos para obtener escenarios locales a
partir de la información generada en modelos globales.
Figura 4. Secuencia de acciones para generar escenarios locales de cambio climático.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
579
Las tendencias de la temperatura en los últimos cien años, de acuerdo con el
análisis de temperatura de superficie, indican que en la mayor parte de México han
ocurrido aumentos que varían de región en región (figura 5). Los cambios observados
en temperatura media anual varían de -0.5 °C, en ciertas partes del noreste, a cerca
de 1.5 °C, en el noroeste. Las tendencias en la temperatura en gran parte del país
podrían estar influenciadas por el efecto de la urbanización de las estaciones con las
que se construye el campo de datos. Sin embargo, es probable que dicho efecto sólo
sea perceptible en el Valle de México.
Figura 5. Tendencias de la temperatura media anual (°C/100 años) en México de acuerdo
con los datos del Climate Research Unit (CRU).
Fuente: Magaña et al., 2007.
De acuerdo con los datos del Climate Research Unit (CRU), las tendencias de la
precipitación de los últimos cien años sugieren una especie de dipolo: incremento en
el sur y disminución en el norte. Al comparar las tendencias de los últimos cien años
con las de los últimos cincuenta años, se encuentra que la precipitación en la región
del Golfo de México parece disminuir. Aún no es claro si se trata sólo de una forma de
variabilidad de la precipitación de muy baja frecuencia (ver figuras 6 y 7).
580 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 6. Tendencias de la precipitación media anual (mm/100 años) en México de acuerdo
con los datos del Climate Research Unit (CRU).
Fuente: Magaña et al., 2007.
Figura 7. Tendencias de la precipitación para los últimos cien años y para los últimos
cincuenta años de acuerdo con los datos del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM.
Fuente: Magaña et al., 2007.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
581
La figura 7 ilustra las tendencias en precipitación de los últimos cien y cincuenta
años, y ha sido elaborada al volver a analizar los patrones de precipitación construidos
en el Centro de Ciencias de la Atmósfera, con una base de datos de estaciones más
completa que la serie utilizada por CRU.
Se puede concluir que los cambios registrados en la precipitación son relativamente pequeños, si se comparan con los cambios porcentuales experimentados por
la temperatura.
6.1.5 Escenarios de cambio climático para México
El presente análisis se basa en los resultados de modelos numéricos de simulación
del clima. En él se presenta una visión de las condiciones actuales y futuras de la
región del Golfo de México en su conjunto, utilizando campos de precipitación y
temperatura tanto observados como simulados con modelos para la condición actual
y futura. Se pone especial énfasis en el modelo del Simulador de la Tierra (Earth
Simulator) del Instituto de Investigaciones Meteorológicas de Japón, ya que cuenta
con alta resolución espacial. Sin embargo, debemos mantener en mente que se trata
de un solo escenario (A1F) y que el periodo de tiempo con el que se cuenta para
este estudio es 2080-2099. Si bien el modelo arroja información sobre procesos
físicos que consideran la topografía con detalle, debe considerarse en un contexto
probabilístico, en el cual otros escenarios son posibles.
Los modelos de circulación general utilizados para el 4º Informe del IPCC incluyen a los grandes centros de pronóstico como NCAR, Hadley Centre, Centro Europeo
(ECHAM), el MRI de Japón y otros. Generalmente se utiliza el valor ensamble para
reflejar el promedio de los modelos. Además, se presenta la dispersión entre modelos
para tener una estimación de la incertidumbre en las proyecciones. No se considera que
haya un modelo superior a otro, por lo que todos, en principio, tienen el mismo peso. La
resolución promedio de los modelos es del orden de 300 x 300 km. Sin embargo, dan
una primera aproximación de las tendencias del clima para la república mexicana.
Las proyecciones de los modelos globales en forma de ensamble han sido presentadas en la Tercera Comunicación Nacional de México ante la Convención Marco
582 E scenarios
de cambio climático y tendencias
de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático6 y han servido para analizar la vulnerabilidad, y los potenciales impactos en los distintos sectores y regiones del país.
Los resultados de las proyecciones con modelos de circulación general dependen
del escenario de emisiones utilizado. Como ya se mencionó, una de las fuentes de
incertidumbre proviene de los escenarios utilizados y la otra, de las diferencias entre
modelos.
Una climatología se construye utilizando el promedio de las condiciones en
treinta años. Por ello, ha sido costumbre analizar los periodos 2010-2039, 20402069 y 2070-2099, refiriéndose a cada uno de ellos como climatologías de 2020,
2050 y 2080, respectivamente. Si se considera un ensamble de las proyecciones
de los modelos de circulación general, así como la dispersión entre las proyecciones
de temperatura y precipitación para los climas 2020, 2050 y 2080, se encuentra
que, en general, el clima de México será más cálido (de 2 a 4 °C). Los resultados
indican que la parte más continental en el norte de México será la que experimente
mayores incrementos de temperatura. Durante las primeras décadas del siglo XXI no
se distinguen marcadas diferencias si las emisiones siguen el escenario A2 o el B2
(figura 8), pero después del clima del 2050, las diferencias serán marcadas. De ahí
la importancia de promover estrategias globales de mitigación y medidas locales de
adaptación.
La figura 8 muestra claramente que para las proyecciones en las próximas décadas
no existe gran diferencia entre los escenarios A2 y B2, con los mayores incrementos
en la temperatura hacia la zona norte de México. En casi todo el país, los aumentos
en temperatura fluctúan entre 1 y 1.5 °C tanto en invierno (enero) como en verano
(julio).
Cuando las proyecciones se realizan para la parte final del presente siglo (figura
9), las diferencias de magnitud del calentamiento se vuelven evidentes. Mientras que
los aumentos promedio proyectados para la república mexicana bajo el escenario
B2 oscilan entre 1.5 y 4 °C, el incremento bajo el escenario A2 es de entre 2.5 y 5
°C. Los mayores aumentos se proyectan hacia la parte norte de México y la mayor
dispersión entre modelos (incertidumbre en la magnitud del cambio) se da hacia la
6 INE-SEMARNAT, 2006.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
583
zona noroeste y sureste de México. Tal diferencia en la magnitud del calentamiento
de un escenario a otro demuestra la importancia que tendrá la mitigación en los años
por venir.
Figura 8. Escenarios de cambio en temperatura en el clima 2010-2039 (2020) para enero
y julio (colores), correspondiente a los escenarios de emisiones A2 y B2. La dispersión entre
modelos (líneas) corresponde a una medida de la incertidumbre en las proyecciones.
Fuente: Magaña et al., 2007.
En el caso de la precipitación, la incertidumbre entre modelos es aún mayor que la
incertidumbre entre escenarios de emisiones. La magnitud de la incertidumbre en la
precipitación es, en general, del mismo orden de magnitud que el cambio proyectado
para el clima alrededor de 2020. En México, tanto en los meses de invierno (enero)
como de verano (julio), existen sólo algunas señales en el promedio de los modelos
que sugieren una disminución en la precipitación (figura 10).
584 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 9. Escenarios de cambio en temperatura en el clima 2070-2099 (2080) para enero
y julio (colores), correspondiente a los escenarios de emisiones A2 y B2. La dispersión entre
modelos (líneas) corresponde a una medida de la incertidumbre en las proyecciones.
.
Fuente: Magaña et al., 2007
Las proyecciones del clima al año 2080 parecen amplificar los cambios tanto en
los modelos que indican disminuciones en las lluvias como en aquellos que sugieren
aumentos. La dispersión entre modelos y escenarios se amplifica cuando las proyecciones de cambios en la precipitación se hacen para finales del presente siglo. Las
proyecciones promedio de los modelos a 2080 (figura 11) sugieren que el centro
occidente de México experimentará las mayores disminuciones en precipitación tanto de invierno como de verano. La zona del Golfo de México experimentará pocos
cambios en las lluvias de verano.
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
585
Figura 10. Proyecciones de cambios en la precipitación (mm/día) para el clima de 2020,
resultado de promediar diversos GCM para un mes de invierno (enero) y de verano (julio)
(colores). La dispersión entre modelos (líneas) corresponde a una medida de la incertidumbre
en las proyecciones.
Fuente: Magaña et al., 2007.
Un elemento a considerar es que las presentes simulaciones no incluyen eventos
extremos como ciclones tropicales y por lo tanto su efecto en las lluvias no está
representado. Dicho elemento resulta en una importante fuente de incertidumbre
que hasta el momento no ha sido cuantificada, pues requiere de estudios específicos
para zonas de ciclones tropicales, los cuales involucran el análisis de modelos con alta
resolución espacial.
Los cambios para las lluvias de invierno indican una disminución de entre 0 y
0.6 mm/día. Ese valor significa reducciones de menos de 10 o 15% en regiones del
586 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 11. Proyecciones de cambios en la precipitación (mm/día) para el clima de 2080,
resultado de promediar diversos GCM para un mes de invierno (enero) y de verano (julio)
(colores). La dispersión entre modelos (líneas) corresponde a una medida de la incertidumbre
en las proyecciones.
Fuente: Magaña et al., 2007.
centro de México, y de menos del 5% en la zona costera del Golfo de México. Las
menores reducciones en precipitación se estiman bajo el escenario A2 en los plazos
del clima alrededor de 2080. Sin embargo, es necesario mencionar que los cambios
proyectados son del mismo orden de magnitud que la incertidumbre resultante de la
dispersión entre modelos. Evidencia de ello es que algunos modelos proyectan ligeros
aumentos en precipitación, mientras otros proyectan disminuciones drásticas.
Los eventos extremos, como huracanes y “nortes”, requieren consideración especial en las proyecciones de precipitación para México. Es posible que los “nortes”
E scenarios
de cambio climático para
M éxico
587
se vuelvan menos frecuentes. Es incierto en qué medida dicha disminución podría
afectar las precipitaciones, pero de acuerdo con ciertos escenarios éstas tenderán a
bajar principalmente en la vertiente del Golfo de México. En el caso de los ciclones
tropicales, se espera que, en promedio, su intensidad aumente. En efecto, se estima
una aminoración en la presión central promedio de estos sistemas de alrededor de
14%, un incremento de 6% en la velocidad de los vientos más intensos y una intensificación en las precipitaciones de alrededor del 18%, en un radio de 100 km con
respecto al centro del huracán. Finalmente, puesto que el ciclo hidrológico se volverá
más intenso, las teorías sugieren un aumento en el número de tormentas severas,
así como periodos de sequía más severos y prolongados. Las observaciones de los
últimos años en México parecen coincidir con tal planteamiento.
588 E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.2 Escenarios de cambio climático para el Golfo de México
Víctor Magaña et al.
A continuación se presenta una serie de análisis de salidas de modelos regionales del
clima, que permiten dar más detalle de los cambios en sitios específicos de la zona del
Golfo de México y el mar Caribe. Hasta hoy sólo se cuenta con salidas de los modelos
MRI de Japón, conocido como el Simulador de la Tierra, para el escenario A1F y
para el periodo 2080-2099. Los resultados de este modelo se comparan con los del
modelo PRECIS del Centro Hadley del Reino Unido para el escenario A2. PRECIS es
un modelo de menor resolución espacial (la mitad) que el MRI1. Las proyecciones en
ambos casos se hacen para finales del siglo XXI y se comparan con el escenario base
de finales del siglo XX. La razón de concentrarse en finales del presente siglo radica en
que para este periodo los cambios y su tendencia se vuelven mucho más claros.
6.2.1 Temperatura media anual, modelo MRI de
Japón
En la primera parte se tiene el campo de temperatura media actual2, construido con
observaciones de 1979 a 1998 (figura 1a), y se compara con el campo simulado
para el mismo periodo con el modelo MRI (figura 1b). La proyección para el periodo
2080-2099 con el modelo, bajo el escenario de emisiones A1F, muestra el mismo
1 El modelo PRECIS tiene una resolución espacial de 50 km, mientras que la del MRI es de 22 km.
2 CCA-UNAM.
589
patrón de temperatura que el observado, pero con valores más elevados (figura 1c).
Las anomalías se pueden encontrar cuando se obtiene la diferencia entre el clima
simulado actual y la proyección hecha por el mismo modelo (figura 1d). El escenario
de emisiones A1F es algo intermedio entre A2 y B2.
Figura 1. a) Temperatura media anual (°C) observada (1979-1998); b) clima presente
(1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección del clima futuro (2080-2099)
bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre el clima presente y el escenario
futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
Los cambios proyectados con el modelo japonés de alta resolución espacial bajo
el escenario A1F indican que el calentamiento en la región del Golfo de México será
mayor a 2 °C, pero menor a 2.8 °C hacia finales del presente siglo. Esto coincide con
las proyecciones promedio obtenidas con los GCM. Los mayores aumentos parecen
ocurrir en Tamaulipas, Campeche y Yucatán.
590
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 2. a) Precipitación media anual (en mm/día) observada (1979-1998); b) clima
presente (1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección del clima futuro
(2080-2099) bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre
el clima presente y el escenario futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
6.2.2 Precipitación media anual, modelo MRI de
Japón
En el caso de la precipitación, se ha seguido la misma estrategia de comparar el clima
actual observado con el simulado por el modelo, para así poder analizar las proyecciones de las lluvias hacia finales del presente siglo (figura 2).
El modelo japonés bajo el escenario A1F proyecta que la precipitación anual
cambiará muy poco hacia finales del presente siglo, y que quizá los mayores cambios
ocurrirán en la península de Yucatán. Cabe recalcar que ésta es una de las zonas en
G olfo
de
M éxico
591
donde los huracanes tienen gran importancia dentro del balance de la precipitación
anual.
6.2.3 Temperatura y precipitación media anual,
modelo PRECIS del Hadley Centre
Cuando los cambios se comparan con otro modelo de clima regional (PRECIS), pero
bajo un escenario de emisiones distinto (A2), se encuentra que es también hacia la
parte sureste del país donde se proyectan los mayores aumentos en temperatura
(figura 3). PRECIS proyecta que para finales del presente siglo, la temperatura sobre
Campeche podrá aumentar hasta en 4 °C. Por otro lado, las proyecciones de precipitación indican una disminución máxima cercana al 10% en la zona del Golfo de México.
Los resultados son consistentes con el hecho de que el escenario A2 implica mayores
concentraciones de gases de efecto invernadero que el A1F. Debe mencionarse, sin
embargo, que el GCM que alimenta a PRECIS (el modelo del Hadley Centre) tiende a
producir uno de los mayores calentamientos de todos los GCM usados por el IPCC.
6.2.4 Temperatura mínima, modelo MRI de Japón
Los cambios en la temperatura mínima proyectados por el modelo japonés son similares a los encontrados para la temperatura media (figura 4). Sólo en Yucatán, la
disminución en precipitación podría reducir la humedad en la atmósfera y con ello el
efecto invernadero local sería menor.
6.2.5 Temperatura máxima, modelo MRI de Japón
La disminución en precipitación, como lo proyecta el modelo japonés, produce menor
nubosidad sobre Yucatán y con ello los aumentos en temperatura máxima pueden ser
mayores incluso que los de la temperatura media o mínima, alcanzando localmente
592
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 3. a) Diferencia entre la temperatura media anual (en °C) simulada por PRECIS para
el periodo actual (1961-1990) y el escenario futuro A2 (2071-2100); b) diferencia entre
la precipitación (mm/día) simulada por PRECIS para el periodo actual (1961-1990) y el
escenario futuro A2 (2071-2100).
Fuente: Magaña et al., 2007.
hasta 3.2 °C para finales del presente siglo (figura 5). Para el resto de la zona del
Golfo de México, los cambios son en general menores a 2.8 °C.
G olfo
de
M éxico
593
Figura 4. a) Temperatura mínima media anual (en °C) observada (1979-1998); b) clima
presente (1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección del clima futuro
(2080-2099) bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre el clima presente
y el escenario futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
6.2.6 Ondas de calor, periodos secos y ondas de frío,
modelo MRI de Japón
El contar con valores diarios de los parámetros meteorológicos permite calcular algunas variables derivadas, como la duración media de las ondas de calor o periodos
secos. De acuerdo con el modelo japonés, las ondas de calor y los periodos secos
aumentarán en duración (figura 6).
594
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 5. a) Temperatura máxima media anual (en °C) observada (1979-1998); b) clima
presente (1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección del clima futuro
(2080-2099) bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre el clima presente
y el escenario futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
Los valores extremos de temperatura aumentarán en menos de un grado; es
decir, cuando se presenten valores extremos de temperatura máxima, éstos serán en
promedio casi 3 °C más elevados de lo que son en la actualidad. Por ejemplo, en el
norte de Tamaulipas, la temperatura máxima en un evento extremo de calor podría
alcanzar los 43 °C a finales de siglo.
De manera opuesta a las ondas de calor, la duración de las ondas de frío disminuirá
de acuerdo con las proyecciones hechas con el modelo japonés de alta resolución
G olfo
de
M éxico
595
Figura 6. a) Duración media anual de ondas de calor (días) observada (1979-1998); b) clima
presente (1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección para el periodo
2080-2099 bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre la duración media
anual simulada para el periodo actual y el escenario futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
(figura 7). Éstas tendrían, en promedio, alrededor de un día menos de duración que
las actuales.
6.2.7 Conclusiones
Los modelos numéricos del clima proyectan que la temperatura en la zona del Golfo
de México aumentará. Tanto los modelos de circulación general como los de clima regional proyectan cambios en temperatura menores a los 3 °C para finales del
596
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 7. a) Duración media anual de ondas de frío (días) observada (1979-1998); b) clima
presente (1979-1998) simulado por el modelo MRI (AJ); c) proyección para el periodo
2080-2099 bajo el escenario de emisiones A1F (AK); d) diferencia entre la duración media
anual simulada para el periodo actual y el escenario futuro (AK-AJ).
Fuente: Magaña et al., 2007.
presente siglo. Sin embargo, es claro que los mayores incrementos resultan de los
escenarios de emisiones altas como el A2. Los escenarios de emisiones medias (A1F)
proyectan, sin embargo, que el aumento de temperatura en las regiones de mayor
cambio, como el sureste de México, no será mayor a 2.8 °C.
En cuanto a la precipitación, los cambios en promedio apuntan hacia muy ligeras
disminuciones, de menos del 10%, para finales del presente siglo. Algunas de las
proyecciones regionales sugieren que es hacia el sur y sureste de México donde se
producirán los mayores decrementos de precipitación. Debe mencionarse, sin embargo, que la dispersión entre modelos de circulación es grande, casi del mismo orden
G olfo
de
M éxico
597
de magnitud que la variación de las proyecciones, con algunos modelos indicando
posibles aumentos en la precipitación. Adicionalmente, la inadecuada representación
del efecto de los ciclones tropicales puede influir en la proyección de los cambios en
precipitación, pues ante ciclones tropicales más intensos podrían esperarse eventos
de precipitación abundante que modifiquen el balance hacia anomalías positivas.
598
E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.3 Escenarios socioeconómicos
Boris Graizbord et al.
6.3.1 Introducción
Un escenario no es una predicción, sino una descripción coherente de un posible estado del futuro del mundo. En su construcción influyen las fuerzas que determinan el
crecimiento, la tasa de cambios en la tecnología, los precios, el comercio internacional
y otras variables económicas o naturales. Los escenarios pueden constituir futuros
alternativos, con posibilidades de ocurrir o no, dado que no se elaboran con simples
extrapolaciones de tendencias históricas en una o varias variables1. Lo importante a
destacar es que los escenarios se elaboran asumiendo trayectorias posibles de emisiones contaminantes y sus probables efectos en el cambio del clima, lo cual es útil para
la determinación de medidas de adaptación y políticas de mitigación.
Como se expuso en la sección 6.1, las “Líneas evolutivas” consisten en cuadros
coherentes del futuro, dentro de los cuales ciertas tendencias tienen sentido; también
se les conoce como familias de escenarios, las cuales divergen tanto cualitativa como
cuantitativamente. Las líneas evolutivas que se elaboraron en el Informe Especial
de Escenarios de Emisiones (SRES, por sus siglas en inglés) contienen contextos
demográficos, sociales, políticos y tecnológicos, pero no incluyen políticas explícitas
para limitar emisiones de gases de efecto invernadero o de adaptación al cambio
1 Carter et al., 1994.
599
esperado. Por lo tanto, no constituyen propiamente pronósticos de las variables antes
citadas, pero es fundamental definirlas para saber cómo, a partir de ello, representar el
futuro; saber bajo qué criterios se asumen los cambios, y conocer su efecto en datos
trascendentales para los modelos tanto económicos como sociales.
Las líneas evolutivas describen progresos en dimensiones diversas: económicas,
técnicas, ambientales y sociales. Es por ello que ocupan un espacio multidimensional,
bajo el que se requieren asumir dos direcciones de análisis:
• El grado de convergencia económica, e interacciones sociales y culturales a través
de las regiones (globalización).
• El grado de equilibrio entre los objetivos económicos y ambientales
(sustentabilidad).
Los escenarios del SRES son descriptivos, no predictivos, dado que sólo podemos interpretar sus resultados como deseables o indeseables. Su utilidad deriva de
la necesidad de ver cómo los cambios del clima afectan las actividades económicas
(y viceversa), y con ello, determinar las implicaciones de las emisiones de gases de
efecto invernadero y aerosoles en el diseño de estrategias de respuesta2. El Informe
Especial de Escenarios de Emisiones incluye información sobre las principales fuerzas
impulsoras de las emisiones de GEI (como crecimiento de la población y desarrollo
económico), expresada generalmente en términos del PIB, del consumo de energía
y del uso del suelo. Para este estudio se utilizó el Producto Interno Neto Ecológico
(PINE), el cual se construye a partir del PIB, ajustado con distintas depreciaciones: del
capital manufacturero, del capital natural, y del costo por agotamiento y degradación.
De esta forma se intentó contabilizar el impacto de las actividades económicas sobre
los recursos naturales. Los cuadros 1 y 2 muestran las variables sugeridas para la
elaboración de escenarios socioeconómicos y su función.
2 Reporte Stern, 2004.
600 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Cuadro 1. Variables sugeridas para elaborar los escenarios socioeconómicos.
Variables SRES
Población
Emisiones
Consumo de energía primaria: Emisiones de CH4
cumulativas de CO2 petróleo
PIB
Secuestro de
carbono
Uso de suelo para
cultivos
Uso de suelo para
pastizales
Consumo de energía primaria:
gas
Consumo de energía primaria:
nuclear
Consumo de energía primaria:
eléctrica, no fósil
Emisiones de
NO2 1
Emisiones de
SOx 2
Emisiones de SO2
Uso de suelo para
biomasa energética
Uso de suelo de
selvas
Otros usos de suelo
Consumo de energía primaria:
biomasa
Consumo de energía primaria:
otras fuentes renovables
Consumo total de energía
primaria
Uso cumulativo de carbón
Emisiones de CFC
y HFC 3
Emisiones de
PFC 4
Emisiones de
SF6 5
Emisiones de CO
Uso cumulativo de petróleo
Emisiones de
NMVOC 6
Uso cumulativo de gas
Emisiones de
NOx 7
 
 
PIB ajustado al poder
de paridad de compra
Consumo final de
energía no comercial
Consumo final de
energía de sólidos
Consumo final de
energía de líquidos
Consumo final de
energía de gas
Consumo final de
energía eléctrica
Consumo final de
energía: otros
Consumo final de
energía total
Consumo de energía
primaria: carbón
Uso de suelo total
Emisiones de CO2
provenientes de
energía
Emisiones de CO2
provenientes de
“otros”
Emisiones de CO2
1 Dióxido de nitrógeno.
2 Óxidos de azufre (incluye SO ).
2
3 Clorofluorocarbonos e hidrofluorocarbonos.
4 Perfluorocarbonos.
5 Hexafluoruro de azufre.
6 Compuestos orgánicos volátiles distintos del metano.
7 Óxidos de nitrógeno (incluye NO y NO ).
2
Fuente: Reporte Stern, 2004.
E scenarios
socioeconómicos
601
Índice de
especialización
de cambio climático y tendencias
Permite determinar el
grado de globalización
de los municipios
y su dependencia
económica con
ciudades principales.
El PIB sirve para hacer
comparaciones entre
países y para determinar
si la riqueza crece o
decrece en el largo plazo.
En este estudio es una
variable de aproximación
de la riqueza municipal.
Esta variable es
limitada para evaluar la
desigualdad de ingresos o
los efectos de una sequía
o una inundación.
Producto Interno Es una variable de
Neto Ecológico
aproximación para medir
Municipal (PINE) la riqueza municipal,
incluyendo los activos
económicos no
producidos por el hombre
(por ejemplo, forestales y
petroleros). La limitación
es que el PINE municipal
es una variable estimada
a partir del PIB estatal.
Poder de
Indica el grado de
paridad de
integración de los
compra
municipios y su poder
de compra.
Variables de
mercado
PIB municipal
Función
Permite conocer el
grado de integración
con la región y entre
los sitios piloto.
Es un indicador
del poder
adquisitivo de
los habitantes.
Indica el acceso
a mercados de
crédito.
Puede aumentar o
Índice de Gini.
disminuir conforme lo
haga el PIB.
Aumenta si el
ingreso disminuye.
Este indicador
Nuevas variedades de
aumenta conforme
semillas resistentes a
lo hacen la población humedad y sequías.
y el PIB. Disminuye
si la distribución del
ingreso se concentra.
La capacidad de
adaptación aumenta si
este indicador lo hace.
Su vínculo con
los mercados es
a través del PIB
y las variables
económicas que lo
integran.
La capacidad adaptativa Índice de
se incrementa conforme Desarrollo
el PINE lo hace. Este
Humano.
indicador tiene la
ventaja de incluir los
costos de mitigación y
gasto ambiental.
Relación funcional
Variables
tecnológicas
Indica el crecimiento Existe una relación
Introducción de
del poder de compra inversa entre la
nuevas tecnologías
de los lugareños, su marginación y el PIB: la que sustituyan a los
nivel de pobreza y el marginación disminuye hidrocarburos.
acceso que tienen a cuando crece el PIB
mercados de bienes per cápita.
y servicios.
La capacidad de
adaptación aumenta
conforme lo hace el
nivel de ingresos.
Función
Variables
sociales
La capacidad adaptativa Índice de
aumenta conforme el
marginación.
PIB per cápita lo hace.
Relación funcional
Cuadro 2. Variables utilizadas en la construcción de los escenarios socioeconómicos.
602 E scenarios
Indica el
mejoramiento
genético y de las
condiciones de
participación de
los productores.
Es una medida
de adaptación al
cambio climático.
Indica la creación
de mercados
limpios. Es
una medida de
mitigación de GEI.
Función
Aumenta la capacidad
de adaptación; reduce
la incertidumbre en la
seguridad alimentaria.
Aumenta la capacidad
de adaptación de las
sociedades. El costo
para la sociedad es alto
cuando se introduce la
medida, pero a largo
plazo el efecto se
suaviza.
Relación funcional
6.3.2 Construcción de escenarios
Los escenarios considerados asumen que ninguna localidad puede actuar independientemente de las otras, dada la gran dependencia económica que existe entre los
municipios, los estados y sus regiones. Además, los municipios funcionan bajo la
estructura de las políticas socioeconómicas elaboradas en México en el ámbito de
estado y país. Entre las consideraciones necesarias para la construcción de escenarios
destacan los impactos climáticos y los factores socioeconómicos que influyen en la
economía local (actividades como extracción y procesamiento de petróleo, agricultura, pesca y turismo, entre otras).
El objetivo del desarrollo de un escenario es explorar alternativas futuras, tanto
cualitativa como cuantitativamente, de forma que se puedan evaluar las implicaciones de las decisiones actuales y las políticas a largo plazo sobre vulnerabilidad y
adaptación al cambio climático. De acuerdo con Lim y Moss (2001), la identificación
de los escenarios debe considerar los siguientes elementos:
1. Representar los factores importantes de la economía y la sociedad.
2. Contabilizar los efectos de la variabilidad climática, y el cambio en la sociedad y la
economía.
3. Ser coherente a escala global, nacional y regional, así como entre los sectores; es
decir, apoyar la exploración de al menos dos direcciones diferentes y coherentes
para el futuro (por ejemplo, diferentes líneas evolutivas).
Estos puntos dirigen la elaboración de escenarios, considerando que deben ser
representativos de la economía y la sociedad local, además de incorporar adecuadamente las variaciones del clima y sus efectos. Por otra parte, su desarrollo debe ser
coherente con los cambios estimados a escala global y nacional en, al menos, dos
direcciones opuestas y extremas.
Puesto que la evaluación de capacidad adaptativa y grado de vulnerabilidad no es
fácil de medir, para determinar los valores relativos entre los municipios de la región
se utilizaron variables de aproximación o proxies. El ejemplo más común del uso de
este tipo de herramientas es el PIB per cápita como indicador de bienestar. Para que
E scenarios
socioeconómicos
603
exista una correlación importante entre las variables y el indicador de interés, éstas
deben contar con las siguientes características:
1. Resumir o simplificar la información relevante existente.
2. Hacer visible o perceptible un fenómeno de interés.
3. Cuantificar, medir y comunicar dicha información relevante.
En este sentido, primero se caracterizaron las condiciones actuales y, a partir de
ello, se identificaron las variables que describieran de la manera más adecuada la vulnerabilidad actual y futura3. Para la elaboración de los escenarios socioeconómicos en
la región del Golfo de México se consideraron las variables presentadas en el cuadro
2.
Para utilizar los modelos que permiten estimar los efectos del cambio climático
sobre las variables socioeconómicas primero es indispensable proyectarlas o predecir
su comportamiento a futuro en intervalos determinados. En este caso, las proyecciones se realizaron para los años 2010, 2020, 2030 y 2040. El estudio que a
continuación se presenta es una primera estimación sobre la progresión de dichas
variables, la forma en que están relacionadas entre sí y el efecto probabilístico del
cambio climático en ellas.
Debido a la carencia de datos sociodemográficos estadísticos en series de tiempo
prolongadas para la región del Golfo de México fue necesario utilizar valores determinados de manera aleatoria a través del método de Monte Carlo. Para el año 2010, la
tendencia histórica de las variables reportadas en los censos de 1980 a 2000 fungió
como valor “semilla”. Para la determinación de las emisiones de carbono (CO2) se
usó como valor semilla la varianza de las emisiones per cápita nacionales, comparada con los puntos máximos y mínimos entre 1992 y 2002, que aparecen en la
Tercera Comunicación Nacional sobre el Cambio Climático. A partir de numerosas
iteraciones (diez mil) se obtuvo la probabilidad de ocurrencia de cada una de las
variables, con resultados relativamente confiables. Podemos decir que la proyección
3 Lim y Moss, 2001.
604 E scenarios
de cambio climático y tendencias
de las condiciones actuales denota la tendencia de “seguir como vamos” o business
as usual y construir, a partir de esta línea base, las distintas líneas evolutivas a considerar (asumiendo que todos los datos proyectados tienen una probabilidad entre cero
(0) y uno (1) de ser escogidos). El análisis detallado fue realizado para dos variables
bien definidas en el ámbito municipal (población y PINE), así como para las emisiones
de CO2.
En este estudio combinamos los métodos de extrapolación histórica con la continuación de las tendencias en el corto plazo. Adicionalmente, consideramos que las
dos líneas evolutivas con más probabilidades de desarrollarse en la región costera
del Golfo de México son la A2, que enfatiza autoconfianza y conservación de las
identidades locales, y la B1, que enfatiza las soluciones globales para la estabilidad
económica, social y ambiental. De esta manera, las condiciones del mundo heterogéneo contrastan con las del mundo convergente. El cuadro 3 retoma, en términos
generales, algunas de las consideraciones para cada escenario.
Cuadro 3. Escenarios del SRES para la zona costera del Golfo de México.
Escenarios
Productividad
media de los
Población
sectores no
agrícolas
Productividad
Eficiencia
media del
en las
sector
inversiones
primario*
Términos de
intercambio
Escenario A1
Alta
Alta
Baja
Alta
Alto
Escenario A2
Baja
Alta
Baja
Baja
Bajo
Escenario B1
Alta
Alta
Alta
Alta
Alto
Escenario B2
Alta
Alta
Baja
Alta
Alto
* Agricultura, ganadería pesca y silvicultura.
En términos generales, las zonas de influencia de los ocho sitios piloto que comprenden el área de estudio fueron delimitadas con base en lo propuesto por los planes
de desarrollo estatal de las seis entidades costeras del Golfo de México: Tamaulipas,
Veracruz, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Dichas zonas comprenden
E scenarios
socioeconómicos
605
102 municipios, pertenecientes a cinco entidades federativas4, que albergaban en
1990 una población de 4 976 468 habitantes. Esto representa el 40.22% del total
que habita en la zona costera del Golfo de México. La tendencia calculada por el
CONAPO para 2030 contabiliza 8 095 245 habitantes. La figura 1 muestra los municipios pertenecientes a la zona de influencia de los sitios piloto.
Figura 1. Municipios en la zona de estudio.
Fuente: elaboración propia.
Es importante aclarar que los efectos del cambio climático se pueden contabilizar
en el plano nacional; pero a la escala de los sitios piloto, las imprecisiones y errores
acarreados son muy grandes. Esto se debe a los vacíos de información existentes
para extrapolar algunas de las variables, sobre todo las relacionadas con emisiones
energéticas. Además de la carencia de datos municipales sobre emisiones a la atmósfera, no es posible presuponer que el comportamiento de las emisiones nacionales de
CO2 pueda aplicarse en el ámbito municipal.
4 Ningún sitio piloto fue seleccionado en Yucatán.
606 E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.3.3 Proyecciones de población
Las proyecciones de población para la zona de influencia de los ocho sitios piloto se
estimaron con base en los escenarios del SRES propuestos para América Latina, y
cuyas tasas de crecimiento por decenio se presentan en el cuadro 4. Esta decisión
fue tomada al notar que las tasas de crecimiento calculadas con las proyecciones
del CONAPO parecían modestas. El cuadro 5, por su parte, muestra las tasas de
crecimiento estimadas a partir de las tendencias sugeridas para América Latina en el
SRES, utilizando el modelo MINICAM. Finalmente, el cuadro 6 y la figura 2 resumen
las estimaciones de población para la zona de estudio.
Cuadro 4. Porcentaje que aumenta y decrece la población de América Latina, desde 1990
hasta 2100, con base en los escenarios del SRES.
2000 2010 2020 2030 2040 2050 2060 2070 2080 2090 2100
Escenario A1
24
51
81
104
124
141
148
150
147
135
123
Escenario A2
26
58
94
133
172
212
248
281
309
329
349
Escenario B1
24
51
81
104
124
141
148
150
147
135
123
Escenario B2
25
55
88
120
151
180
202
219
232
236
239
Fuente: Nakicenovic et al., 2000.
Cuadro 5. Tasas de crecimiento promedio anual para los sitios piloto, considerando el
crecimiento poblacional estimado por MINICAM para América Latina,
de acuerdo con los escenarios del SRES.
 
2010
2020
2030
2040
2050
Escenario A1
14.01%
16.83%
18.80%
20.77%
22.21%
Escenario A2
14.84%
18.77%
21.67%
24.56%
26.91%
Escenario B1
14.01%
16.83%
18.80%
20.77%
22.21%
Escenario B2
15.40%
20.01%
22.60%
25.18%
27.16%
Fuente: estimaciones propias utilizando el método de MonteCarlo y usando como variables semilla los datos
reportados por Nakicenovic et al., 2000.
E scenarios
socioeconómicos
607
Cuadro 6. Proyecciones de población en la zona de influencia de los humedales costeros del
Golfo de México, de 2010 a 2050, usando los escenarios del SRES para América Latina.
 
Escenario A1
Escenario A2
Escenario B1
Escenario B2
2000
2010
6 010 837
6 010 837
6 010 837
6 010 837
6 913 064
6 902 603
6 852 993
6 936 778
2020
2030
7 022 461 8 342 684
8 198 045 9 974 218
8 006 125 9 511 296
8 325 017 10 206 371
2040
2050
10 075 459
12 424 305
11 487 154
12 776 832
12 313 218
15 768 261
14 038 633
16 246 511
Fuente: estimaciones propias utilizando el método de MonteCarlo con datos del cuadro 5 y datos de INEGI, 2005,
por municipio.
En el cuadro 6 se puede apreciar que la diferencia entre los dos escenarios considerados como viables para la zona costera del Golfo de México hacia el año 2050
(A2 y B1) es de poco más de un millón y medio de personas. Por otro lado, en la
figura 2 se observa la tendencia de mayor crecimiento poblacional bajo el escenario
B1, con respecto al A2.
Figura 2. Resumen de las tendencias de la población de la zona de influencia de los
humedales costeros del Golfo de México, primera aproximación.
18 000 000
16 000 000
Población
14 000 000
12 000 000
10 000 000
8 000 000
6 000 000
4 000 000
2 000 000
2000
2010
2020
2030
Año
Escenario A1
Escenario A2
Escenario B1
Escenario B2
Fuente: elaboración propia usando como base el cuadro 6.
608 E scenarios
de cambio climático y tendencias
2040
2050
6.3.4 Proyecciones del PIB y del PINE
La variable económica más importante en los escenarios del SRES es el crecimiento
del PIB per cápita. El cuadro 7 muestra la tendencia esperada de la relación entre
el Producto Nacional Bruto (PNB) y el PIB generado por toda la región de América
Latina. Para hacer las proyecciones esperadas de cómo va a crecer el PIB en México,
se consideraron varios aspectos generales:
a) Tendencia histórica del PIB nacional y las proyecciones existentes hasta 2030.
Las más aventuradas eran para 2015.
b) Selección de variables altamente correlacionadas con el PIB y que sirvan para
evaluar su tendencia.
c) Estimaciones del PIB municipal, pues este dato no se obtiene tan desagregado en
el país.
d) Estimaciones del PINE para los municipios, así como de los términos de intercambio supuestos.
Cuadro 7. Porcentaje de aumento en la relación PNB/PIB para la región de América Latina,
desde el año 1990, con base en las proyecciones del MINICAM y por escenario.
2000 2010 2020
2030
2040
2050
2060
2070
2080
2090
2100
Escenario A1
47
147
289
710
Escenario A2
47
126
226
421
989 1 452 1 978 2 578 3 284
4 073
Escenario B1
47
147
289
657
1 147 1 773 2 636 3 510 4 405 5 242
6 152
Escenario B2
47
136
257
521
868 1 310 1 926 2 589 3 300 4 052
4 884
1 331 2 142 3 426 4 852 6 410 8 068
673
9 915
Fuente: Lim y Moss, 2001.
Cabe recordar que el cálculo del PINE se basa en el Producto Interno Neto5, pero
toma en cuenta los costos de agotamiento de recursos naturales y de degradación del
5 Es el total de bienes y servicios producidos en el interior de un país (PIB) menos los bienes y servicios utilizados
en el proceso productivo. Se obtiene restando el consumo de capital fijo del producto interno bruto. Este concepto permite conocer el valor de la nueva producción final, al suprimirse la parte de la formación de capital destinada
a sustituir el acervo de capital que dejó de tener utilidad económica.
E scenarios
socioeconómicos
609
ambiente. Se evaluaron los costos por agotamiento de los yacimientos y los gastos de
mitigación de PEMEX en la zona. También hubo que considerar en términos económicos la tala de bosques maderables y la pérdida de árboles cuando el suelo cambia de uso.
La erosión del suelo y la contaminación tanto de agua como de aire fueron, a su vez,
incorporadas en el análisis. Así, el PINE ajustado a través de la óptica de la producción
incluye los efectos correspondientes del agotamiento del petróleo y la deforestación, y
refleja, asimismo, el deterioro y la degradación del aire, agua y suelo.
Para las proyecciones del PIB (y por lo tanto del PINE) fue necesario considerar
las condiciones que influyen en el desarrollo de esta variable. Una de las formas de
hacer crecer el PIB per cápita es aumentando la participación laboral de la población.
En efecto, reducir el desempleo es una manera muy directa y eficiente de aumentar la
participación laboral de la población y con ello el PIB per cápita. Las tasas de desempleo en la región de los humedales son altas y evidencian la pérdida de productividad
en el sector industrial. El aumento en la participación laboral está limitado físicamente
por la cantidad de personas disponibles para trabajar.
La otra manera de incrementar el PIB per cápita es aumentando la productividad
media laboral. La productividad media laboral depende de dos factores: el acervo del
capital físico a disposición de cada trabajador y la eficiencia. El primero corresponde
a las inversiones necesarias para una óptima producción y el segundo al óptimo uso
que los trabajadores hacen del capital físico. El aumento de estos factores fomenta la
productividad. Sin embargo, dicho incremento tiene costos. Por ejemplo, presuponer
aumentos en la productividad del petróleo en la zona implicaría asumir una progresión
en la degradación ambiental y en los gastos de mitigación. Aun así, el aumento de la
productividad media laboral puede, en teoría, garantizar un crecimiento sostenido en
el largo plazo, lo que no ocurre con la participación laboral.
Los escenarios de crecimiento del PIB (y del PINE) se realizaron bajo las siguientes
suposiciones:
• El desempleo se mantiene más o menos estable con el tiempo.
• La eficiencia crece a tasas del orden del 1.7% por año. Esto representaría un gran
cambio en la tendencia de la región, cuyo promedio anual desde 1990 hasta
2004 es de -5.6%.
610 E scenarios
de cambio climático y tendencias
• El acervo de capital por trabajador crece a 2% por año. Esto implicaría un nivel de
inversión de alrededor de 23% del PIB regional.
• La participación laboral crece en el tiempo debido al incremento promedio de
0.85% anual de la población mayor de 15 años y el aumento en los niveles de alfabetismo de 3.23% entre 1990 y 2000. Se asume que la fuerza laboral crecerá
a la misma tasa que la población en edad laboral. Así, la participación laboral de la
población pasa de 36.8% en el año 2000 a 42.6% en 2030.
Bajo estos supuestos, el PIB per cápita crecería a 2.9% en promedio durante el
periodo, mientras que el PIB total crecería en promedio a 4.3%. De esta forma, en el
año 2030, los municipios de la zona de influencia de los sitios piloto6 aumentarían su
producción a tasas superiores al 15% como promedio anual, bajo escenarios optimistas de incrementos en productividad e inversión.
El cuadro 8 contiene las estimaciones por escenario del crecimiento esperado en
el PINE, valuado en términos de intercambio base 2005 para la región de influencia
de los sitios piloto. El cuadro 9 resume las proyecciones de los valores esperados
para el PINE en la zona de estudio. La figura 3 muestra gráficamente la tendencia de
crecimiento.
Cuadro 8. Porcentaje de crecimiento del PINE para la región de influencia
de los humedales costeros del Golfo de México.
 
Escenario A1
Escenario A2
Escenario B1
Escenario B2
2010
2020
2030
21.31%
18.29%
21.31%
31.81%
25.44%
30.86%
39.04%
30.79%
37.25%
46.27%
36.14%
43.64%
2040
51.70%
40.51%
48.59%
2040-2050
19.86%
28.03%
33.86%
39.70%
44.48%
Fuente: estimaciones propias.
6 En la figura 1 de esta sección se pueden apreciar los municipios comprendidos en el área estudio. El cuadro 2 de
la sección 8.4 presenta los municipios en cuestión.
E scenarios
socioeconómicos
611
Cuadro 9. Estimaciones del PINE para la región de influencia
de los humedales costeros del Golfo de México (dólares base 2005).
 
2000
2010
2020
2030
2040
2050
Escenario A1
11 664 661
14 150 141
18 651 386
25 933 373
37 933 940
57 545 086
Escenario A2
11 664 661
13 797 768
17 308 418
22 638 408
30 821 015
43 308 088
Escenario B1
11 664 661
14 150 141
18 517 179
25 414 676
36 504 676
54 243 886
Escenario B2
11 664 661
13 981 043
17 899 447
23 960 564
33 472 316
48 362 374
Fuente: estimaciones propias usando como base el cuadro 9.
Figura 3. Resumen de las tendencias del crecimiento del PINE en la región de influencia de los
humedales costeros del Golfo de México (primera aproximación).
70 000 000
PINE (dólares base 2005)
60 000 000
50 000 000
40 000 000
30 000 000
20 000 000
10 000 000
2000
Escenario A1
2010
2020
Escenario A2
Año
2030
Escenario B1
Fuente: elaboración propia usando como base el cuadro 9.
612 E scenarios
de cambio climático y tendencias
2040
2050
Escenario B2
6.3.5 Estimaciones de las emisiones de carbono (CO2)
Las estimaciones de emisiones de carbono y de otras variables que contribuyen a la
generación de GEI son necesarias para la construcción de los escenarios socioeconómicos. De acuerdo con la Tercera Comunicación Nacional sobre el Cambio Climático,
las emisiones de CO2 equivalentes al PIB en el 2002 para el país fueron de 0.34 kg
por peso PIB. Ello representó un incremento del 8% con respecto a 1990. Debido a
la inexistencia de datos para los municipios por sector generador se usó esta cifra para
obtener aproximaciones de lo que sería el porcentaje del PINE municipal, evaluado a
términos de paridad de compra, bajo las siguientes suposiciones:
• La participación de las emisiones de CO2 con respecto al PINE municipal es de
0.34 kg por dólar generado de producción. La razón de usar la tendencia nacional,
pero en dólares, se debe a que la presencia de PEMEX y del sector de petroquímica básica en la región tiene un impacto mayor en la zona costera del Golfo de
México que si se considera todo el país.
• La demanda de energía de los hogares rurales y urbanos en la región crece a tasas superiores a la media nacional como consecuencia del desarrollo económico y turístico.
• En los escenarios más viables para la región (A2 y B1), PEMEX tiene un crecimiento económico significativo y el número de pozos petroleros en Campeche
aumenta en los próximos diez años. Al correlacionar las variables de producción
del sector con viviendas y producción eléctrica en los años pasados y futuros se
obtienen las tasas de crecimiento del cuadro 10. Dichas tasas fueron usadas para
proyectar las emisiones de CO2 en la zona de influencia de los humedales costeros
del Golfo de México.
Cuadro 10. Coeficientes de correlación entre demanda de energía eléctrica
por vivienda y producción de PEMEX.
Escenarios
B1
A2
2010
0.108
2020
0.068
2030
0.136
0.190
0.250
0.290
Fuente: estimaciones propias con datos de PEMEX, 2007.
El comportamiento de las emisiones de carbono puede apreciarse en la figura 4
para los escenarios A2 y B1. Estos datos están expresados en kilogramos de CO2 por
E scenarios
socioeconómicos
613
2
Emisiones de carbono
(kg de CO /habitante-dólar)
Figura 4. Estimaciones de las emisiones por habitante/dólar en kilogramo de carbono (CO2)
para la zona de influencia de los humedales costeros del Golfo de México.
0.45
0.4
0.35
0.3
0.25
0.2
0.15
0.1
0.05
0
Escenario A2
Escenario B1
2000
2010
2020
2030
Año
Fuente: elaboración propia usando como base el cuadro 12.
habitante entre 2010 y 2030. Bajo este esquema se observa un comportamiento
claramente divergente, según el escenario escogido. Las medidas de mitigación jugarán, por lo tanto, un papel determinante en el futuro de las emisiones de CO2 y demás
gases de efecto invernadero.
Con base en lo expuesto anteriormente se realizó un resumen del comportamiento esperado de las tres variables estudiadas bajo los escenarios A2 y B1 (cuadro
11). Dicho cuadro sintetiza los supuestos considerados para la población, el PINE
municipal ajustado al poder de paridad de compra y las emisiones de CO2, además de
la tendencia esperada.
En el cuadro 12 se presentan las estimaciones obtenidas, con base en las suposiciones realizadas durante el análisis, para las variables clave de población, PINE y
emisiones de CO2 en los ocho sitios piloto.
614 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Cuadro 11. Escenarios A2 y B1 en la región de influencia de los humedales costeros del Golfo
de México y las tendencias esperadas en las variables de 2010 a 2030.
Variables
Tendencia
A2
Tendencia
B1
Población
Aumento de la población a tasas de 15% en
2010, 27% en 2050.
Aumento moderado de la
población a tasas de 14% en
2010, 22% en 2050.
Indicadores de
salud (esperanza
de vida, acceso a
servicios médicos,
educativos, pobreza y
marginación)
Se trataría de una
situación business as
usual. Históricamente,
los estados del sur
de México tienen
altos índices de
marginación y pobreza,
que no se reducirían
dramáticamente en al
menos treinta años.
Rápido crecimiento en los
servicios de salud pública
y educativos en la zona,
reducción del indice de
marginación y de la pobreza
extrema en 10%.
Sectores en declive:
la agricultura y
la manufactura
(Tamaulipas y
Vereacruz).
Sectores clave
favorecidos con políticas
emergentes:agricultura y
silvicultura.
Sectores en ascenso: el
petrolero y el turismo
(Campeche y Quintana
Roo).
Reducción de la producción
petrolera e incremento
sostenido del turismo
ambientalmente sustentable.
Temperatura
Aumento de la
temperatura de 1.5 a
2°C.
Aumento de la temperatura
de 1.5 a 2°C.
Precipitaciones
Disminuyen en la zona.
Siguen su tendencia histórica
sin cambios.
Emisiones de carbono
Crecimiento alto de
emisiones superior al
registrado en el país, que
puede llegar a los 0.64
kilogramos por peso del
PIB en 2030.
Crecimiento medio. En el
país, la tendencia fue de
0.34 kilogramos por peso
del PIB en 2002.
No hay reducción
voluntaria de emisiones.
Emisión de bonos de
carbono en los estados con
vocación forestal (Veracruz).
PINE municipal
Reducción voluntaria de
emisiones.
Ámbito internacional
PEMEX invierte en resolver
conflictos ambientales en
la zona, propiciado por una
reforma fiscal orientada
a reconvertir el sector
petrolero; estado favorecido:
Campeche.
PEMEX no invierte en
mitigación ambiental en
los estados petroleros.
Fuente: elaboración propia.
E scenarios
socioeconómicos
615
616 E scenarios
de cambio climático y tendencias
2010
2020
501 415
422 182
367 639
610 050
909 393
151 695
16 664
Río PapaloapanLaguna de
Alvarado
Sistema Lagunar
33 507
19 814
39 840
Escenario A2
2010
2000
Río Coatzacoalcos
-Laguna El
Colorado
Humedales
24 834
49 934
2020
Emisiones de CO2
6 010 837 6 902 603 8 198 045 9 974 218
747 451
124 682
629 340
104 980
548 034
91 417
Fuente: elaboración propia.
Totales
Los Petenes
Río San
Fernando-Laguna
La Nacha
Sistema Lagunar
Boca Paila (Punta
Allen)
2 157 649
954 773
894 639
1 504 891 1 728 156 2 052 487 2 497 175
784 750
735 325
Sistema Lagunar
Carmen-PajonalMachona
660 745
619 130
1 300 280 1 493 189 1 773 422
575 382
539 143
2030
2030
766 379
718 111
910 460
853 117
1 443 900 1 715 357
2020
489 676
729 953
121 763
31 944
64 230
2030
18 012
36 216
18 960
38 124
Escenario B1
2010
2020
(kilogramos/dólar base 2005)
19 457
39 122
2030
9 511 296
581 737
867 186
144 654
2 004 437 2 381 276
6 852 993 8 006 125
419 148
624 817
104 225
1 715 736
1 482 457 1 731 906 2 057 508
655 997
614 680
1 235 933
Escenario B1
2010
(habitantes)
1 798 844
Población
1 084 051 1 244 880 1 478 513
Escenario A2
2000
Río Pánuco
-Altamira
Sistema Lagunar
Nichupté
(Cancún)
Río PapaloapanLaguna de
Alvarado
Río Coatzacoalcos
-Laguna El
Colorado
Humedales
2 397 489
1 013 034
277 260
2 355 101
1 979 545
2 309 849
1 107 719
2 357 771
2010
PINE
3 007 497
1 270 787
347 805
2 954 323
2 483 212
2 897 558
1 389 563
2 957 672
2020
0.03
0.03
Escenario A2
2000
0.03
0.03
2010
2 458 717
1 038 906
284 341
2 415 246
2 030 099
2 368 839
1 136 009
2 417 984
Escenario B1
2010
22 638 408 14 150 141
3 933 631
1 662 116
454 909
3 864 084
3 247 898
3 789 838
1 817 468
3 868 464
2030
(dólares base 2005)
18 517 179
3 217 530
1 359 534
372 095
3 160 643
2 656 631
3 099 913
1 486 605
3 164 226
2020
0.03
0.03
2020
0.04
0.04
2030
0.03
0.03
Escenario B1
2010
0.03
0.03
2020
Emisiones por habitante (kilogramos/dólar base 2005/hab)
11 664 661 13 797 768 17 308 418
2 026 842
856 421
234 397
1 991 007
1 673 511
1 952 751
936 468
1 993 264
Escenario A2
2000
Cuadro 12. Proyecciones de y emisiones de CO2 por sitio piloto y el total de la zona de influencia.
Datos obtenidos por extrapolación y tendencias históricas de variables proxies.
0.02
0.02
2030
25 414 676
4 416 033
1 865 950
510 697
4 337 957
3 646 205
4 254 606
2 040 354
4 342 874
2030
422 182
367 639
501 415
747 451
610 050
909 393
489 676
729 953
6 852 993 8 006 125
419 148
624 817
9 511 296
581 737
867 186
2 397 489
1 013 034
3 007 497
1 270 787
11 664 661 13 797 768 17 308 418
2 026 842
856 421
211 388 216 921
200 809
185 790
Fuente: elaboración propia.
Totales
16 934
13 511
11 363
Los Petenes
21 783
32 471
25 244
20 141
5 416
89 165
16 939
4 211
69 318
77 042
34 092
31 944
64 230
Río San
Fernando-Laguna
La Nacha
3 360
55 307
59 893
26 503
24 834
49 934
2 826
46 515
Sistema Lagunar
Carmen-PajonalMachona
47 787
21 146
19 814
39 840
2030
12 929
19 273
3 215
52 924
45 728
20 235
18 960
38 124
13 267
19 778
3 299
54 309
46 925
20 765
19 457
39 122
2030
200 809 211 388 216 921
12 282
18 309
3 054
50 275
43 439
19 222
18 012
36 216
Escenario B1
2010
2020
(kilogramos/dólar base 2005)
Sistema Lagunar
Boca Paila (Punta
Allen)
40 190
Río Pánuco
-Altamira
17 785
16 664
Río PapaloapanLaguna de
Alvarado
Sistema Lagunar
Nichupté
(Cancún)
33 507
2020
Emisiones de CO2
Escenario A2
2010
2000
Río Coatzacoalcos
-Laguna El
Colorado
Humedales
0.03
0.03
0.26
0.03
0.25
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
2010
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
Escenario A2
2000
2 458 717
1 038 906
22 638 408 14 150 141
3 933 631
1 662 116
18 517 179
3 217 530
1 359 534
0.27
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
2020
0.29
0.04
0.04
0.04
0.04
0.04
0.04
0.04
0.04
2030
0.23
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
Escenario B1
2010
0.21
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
0.03
2020
Emisiones por habitante (kilogramos/dólar base 2005/hab)
Cuadro 12. Proyecciones de emisiones de CO2 por sitio piloto y el total de la zona de influencia.
Datos obtenidos por extrapolación y tendencias históricas de variables proxies (continuación).
6 010 837 6 902 603 8 198 045 9 974 218
Los Petenes
Totales
629 340
548 034
La Nacha
E scenarios
socioeconómicos
617
0.18
0.02
0.02
0.02
0.02
0.02
0.02
0.02
0.02
2030
25 414 676
4 416 033
1 865 950
6.3.6 Escenarios probabilísticos de los efectos del
cambio climático en la economía
Hasta ahora hemos realizado un análisis de los posibles cambios en tres variables relevantes para la formulación de escenarios. Sin embargo, el cambio climático repercute
en la economía de diversas formas, a través de múltiples variables, y es necesario
caracterizar tal impacto para formular medidas de adaptación. A continuación tratamos de estimar, en términos probabilísticos, el efecto del aumento de temperatura
(1 a 2 °C por década) en 35 variables socioeconómicas, de acuerdo con las líneas
evolutivas del SRES y una tendencia de “seguir como vamos”. Los resultados sólo
pueden ocurrir si se cumplen los supuestos realizados con el método de Monte Carlo
para los años de 2010 a 2040. El cuadro 13 presenta las variables de estudio y las
abreviaturas utilizadas en los demás cuadros de este apartado.
Cuadro 13. Variables SRES proyectadas por zona de influencia de los sitios piloto.
Nombre de la
variable
Población
Sup_has
Ind_dep
Ind_ractv
Tot_emp
Concepto
Viv_comb
Población municipal proyectada a 2030
Superficie municipal por hectárea
Índice de dependencia, 2000
Índice de reemplazo en actividad, 2000
Empleo total en 2004
Viviendas particulares que usan combustible para
cocinar, 2000
Viv_len
Viviendas particulares que usan leña o carbón, 2000
Ind_urb
Tc_90_00
Cs_90_00
Índice de urbanización, 2000
Tasa de crecimiento, 1990-2000
Tasa de crecimiento social, 1990-2000
Hog_rem
Hogares con remesas, 2000
Prpistec_12
Tmorinf
Insobinf
Innivesc
618 E scenarios
Porcentaje de población con instrucción superior
tecnológica, 2000
Tasa de mortalidad infantil
Índice de supervivencia infantil
Índice de nivel de escolaridad
de cambio climático y tendencias
Unidad
personas
ha
%
%
personas
unidades por
municipio
unidades por
municipio
%
%
%
unidades por
municipio
%
%
%
%
Cuadro 13. Variables SRES proyectadas por zona de influencia de los sitios piloto
(continuación).
Nombre de la
variable
IDH
Índice de Desarrollo Humano
%
Prind
Porcentaje de población indígena, 2000
%
Prnoind
Porcentaje de población no indígena, 2000
%
Cere
Sup_pest
Prgresc
Gra_adap
Gra_sens
VP Primario
toneladas
ha
%
%
%
pesos
Sup_bosq
CO2
CH4
NO2
Vprefr
Producción de cereales, 1991
Superficie con uso de pesticidas, 1991
Porcentaje de escolaridad, 2000
Grado de adaptación
Grado de sensibilidad
Valor bruto de la producción del sector primario, 2004
Valor bruto de la producción del sector secundario,
2004
Valor bruto de la producción del sector terciario, 2004
Producción volumen toneladas
Producto interno neto ecológico entre términos de
intercambio
Superficie de bosque en ha, 2000
Estimación de CO2, 2002
Estimación de CH4, 2000
Estimación de NO2, 2000
Valor de la producción de refrigeradores, 2000
ha
toneladas
toneladas
toneladas
pesos
Otros elec
Valor de la producción de otros electrónicos, 2000
pesos
Vpauto
Valor de la producción de autos, 2000
pesos
VP Secundario
VP Terciario
Producción
PINE
Concepto
Unidad
pesos
pesos
volumen
pesos
Fuente: elaboración propia.
La parte central de este estudio consistió en determinar qué variables estaban
correlacionadas entre sí para agruparlas y poder generar una tendencia de los posibles efectos del clima sobre ellas. El método utilizado fue el de análisis factorial
y de componentes principales. Se obtuvieron ocho componentes, que en conjunto
explicaron el 88.5% de la varianza total. A partir de este análisis se obtuvieron los
cambios marginales que miden el efecto del cambio de una unidad de temperatura en
el resto de las variables. Los valores positivos se encuentran por arriba de la media y
los negativos son datos inferiores a ella. El cuadro 14 resume los resultados.
E scenarios
socioeconómicos
619
Cuadro 14. Magnitud marginal del efecto del cambio climático en las variables SRES7 cuando
la temperatura aumenta en 1 °C.
Variable
Población
Sup_has
Ind_dep
Ind_ractv
Tot_emp
Viv_comb
Viv_len
Ind_urb
Tc_90_00
Cs_90_00
Hog_rem
Prpistec_12
Tmorinf
Insobinf
Innivesc
IDH
Prind
Prnoind
Magnitud
del cambio
-0.151
-0.02
0.062
0.489
0.533
-0.167
-0.006
0.253
0.089
0.276
-0.644
-0.408
-0.448
-0.216
-0.227
-0.062
-0.132
0.384
Variable
Cere
Sup_pest
Prgresc
Gra_adap
Gra_sens
VP Primario
VP Secundario
VP Terciario
Producción
PINE
Sup_bosq
CO2
CH4
NO2
Vprefr
Otros elec
Vpauto
 
Magnitud
del cambio
0.428
0.502
-0.046
0.242
0.212
0.33
0.426
-0.568
-0.392
-0.574
-0.428
-0.097
-0.103
0.321
0.295
0.427
-0.3
 
Fuente: estimaciones propias con el paquete SPSS versión 12.
Las variaciones marginales indican el cambio porcentual que sufre determinada
variable ante un aumento en una unidad de temperatura, con respecto al año en que
la variable fue establecida (ver cuadro 14). Por ejemplo, el incremento de temperatura en una unidad produce un cambio en la población de -0.15%, posiblemente
como consecuencia de los desastres naturales o por enfermedades relacionadas con
el cambio climático, como el dengue. Esto nos indica el tamaño de la externalidad.
Al comparar las tasas marginales de las variables porcentaje de población indíge7 El cambio es con respecto al año de determinación de la variable (ver cuadro 14).
620 E scenarios
de cambio climático y tendencias
na y porcentaje de población no indígena vemos que la primera tiene un valor de
-0.132% y la segunda de 0.384%. Esto demuestra que la población indígena es
más vulnerable ante el cambio climático en la zona de estudio. Lo mismo sucede
con la población infantil, pues el índice de su supervivencia tiene un cambio negativo
(-0.216%).
Según estos resultados, el aumento de temperatura aumenta el grado de sensibilidad en la población en 0.212%, pero también su grado de adaptabilidad en 0.242%.
Este aumento positivo significa que, conforme aumenta la temperatura, las poblaciones se vuelven más sensibles, pero se adaptan gradualmente. Una forma de explicar
la adaptación es a través del incremento de viviendas con refrigeradores y el uso de
aparatos eléctricos, con variaciones de 0.295% y 0.427%, respectivamente.
Sin embargo, no podemos aventurarnos a decir que esto ocurrirá en cuarenta años,
dado que los resultados sólo tienen validez si ocurren las predicciones elaboradas con
el modelo de Monte Carlo. Si dichas predicciones son correctas de 2010 a 2040,
el sector económico más afectado sería el terciario, con un cambio de -0.568%,
y el PINE tendría una disminución de 0.574% por el incremento en degradación
ambiental a causa del cambio climático.
El efecto del cambio climático en el sector primario no está debidamente representado, pues el análisis no incluye estimaciones del estrés hídrico, del número de
huracanes o de precipitación; la pesca tampoco fue incorporada en los componentes
principales. El índice de sequía puede ser sumamente importante, desde el punto de
vista energético, porque da una idea de la competencia que se establecería entre el
sector energético y el agrícola. Posiblemente la inclusión de la predicción de estas
variables cambiaría la magnitud de las externalidades que estos sectores generan en
todo el sistema.
El último paso del análisis consistió en proyectar las 36 variables de acuerdo con
cada escenario del SRES. A partir de los resultados obtenidos se pueden alimentar
modelos como el MINICAM y así contar con imágenes del posible estado futuro del
clima y el desarrollo socioeconómico de la zona costera del Golfo de México, al igual
que la manera en que los dos sistemas se relacionan. El cuadro 15 muestra los valores
obtenidos.
E scenarios
socioeconómicos
621
Cuadro 15. Cambios en las variables SRES para las cuatro líneas evolutivas posibles hacia el
año 2040.
 
 
A1
A2
B1
B2
 
2000
2040
2040
2040
2040
Población
6 010 837
8 232 974
5 799 730
6 762 169
4 115 066
Ind_dep
74.00
100.00
81.38
79.52
52.24
Ind_ractv
40.13
69.03
48.40
43.42
36.93
Tot_emp
911 417
1 362 847
930 297
990 675
593 843
1 985 881
3 027 260
2 028 626
2 177 710
948 997
Viv_len
599 413
1 096 182
688 142
665 731
491 357
Ind_urb
88.90
100.00
95.02
97.43
39.60
Tc_90_00
1.72
3.10
1.84
1.94
1.03
Cs_90_00
-0.77
-1.39
-0.83
-0.87
-0.46
Hog_rem
2.01
3.24
2.22
2.20
1.23
Prpistec_12
9.55
13.89
10.67
10.67
3.44
Tmorinf
29.04
47.95
34.66
31.36
23.22
Insobinf
0.80
1.36
0.91
0.89
0.59
Innivesc
1.78
2.79
2.16
1.90
1.61
IDH
74 943
124 081
86 340
83 036
49 884
Prind
70.38
100.00
70.28
79.78
89.19
29.62
40 567
70 921
30.71
47 173
31.43
44 688
10.81
29 727
Sup_pest
Prgresc
4 260
6
6 774
9
4 362
6
4 860
6
2 005
2
Gra_adap
4
6
4
4
2
Gra_sens
3
5
3
3
2
2 169 462
3 198 230
2 296 677
2 327 503
1 381 433
Viv_comb
Prnoind
Cere
VP Primario
VP Secundario
122 169 921
186 832 293
134 443 654
138 025 616
78 818 097
VP Terciario
297 181 851
452 868 219
315 472 344
338 508 506
145 159 596
Producción
422 024 961
718 249 521
468 787 283
475 406 698
266 717 168
1 872 646
3 156 652
2 069 671
2 074 452
1 417 276
PINE
CO2
11 664 661
23
20 101 459
40
13 673 673
27
12 846 694
26
8 318 106
18
CH4
NO
0
18
0
31
0
18
0
20
0
10
886 042
3 881 524
319 881
1 576 551
7 044 303
590 903
981 111
3 994 577
351 928
1 000 110
4 417 945
360 451
562 243
1 995 626
215 411
Sup_bsq
Vprefr
Otros elec
Vpauto
Fuente: elaboración propia.
622 E scenarios
de cambio climático y tendencias
Tras la realización e interpretación del análisis factorial llegamos a la conclusión
parcial de que los sectores más vulnerables de la población ante los efectos del
cambio climático son los niños, ancianos e indígenas. Aunque el sector productivo
tradicionalmente afectado por este fenómeno es el primario, también observamos
impactos en los sectores secundario y terciario. El turismo y la extracción petrolera
son de particular interés por su vulnerabilidad ante eventos hidrometeorológicos extremos en el corto plazo. En efecto, si los ocho sitios piloto son considerados como
un todo, el humedal de Cancún aporta el 36.24% del total del empleo afectado
por el cambio climático, mientras que el Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona
genera el 78.44% del total del valor de la producción. Las medidas de adaptación que
se diseñen e implementen deberán tomar en cuenta este dipolo para prevenir serios
daños económicos.
E scenarios
socioeconómicos
623
6.4 Tendencias
en el uso del
6.4 Tendencias
en agua
el uso
del agua1
Jacinto Buenfil Friedman
Víctor Magaña et al.
Jacinto Buenfil Friedman1
Víctor Magaña et al.
6.4.1 Introducción
En México, los cambios en la disponibilidad de agua representan un problema de gran
importancia, pues se ha vuelto recurrente el paso de periodos de sequía a periodos
de inundaciones. El ciclo sequías-exceso de lluvia, reflejo de la variabilidad climática
natural, frecuentemente se traduce en desastres y manifiesta nuestra alta vulnerabilidad. Parte del problema radica en que la información climática actualmente sólo
se utiliza para explicar desastres y no se ha implementado un esquema donde se
use para prevenirlos. La mayor parte de los escenarios de cambio climático sugieren
un ciclo hidrológico más intenso2, con efectos negativos para el desarrollo del país,
en caso de no reducirse la vulnerabilidad. Sin duda, en una atmósfera más cálida
habrá mayor variabilidad del clima, por lo que se requerirá de medidas de adaptación,
entre las cuales se encuentra el aprovechamiento sistemático de la información del
clima. Ya se comienzan a dar algunos pasos en esta dirección, pero el mayor reto
sigue siendo la generación de capacidades para interpretar diagnósticos y pronósticos climáticos entre científicos, autoridades de gobierno y usuarios de información
climática en general.
1 Con base en la publicación Prospectiva de la demanda de agua en México, 2000-2030, Fundación Gonzalo Río
Arronte-Fundación Javier Barros Sierra, A.C., 2004.
2 Un ciclo hidrológico más intenso se relaciona, entre otras cosas, con sequías más agudas y prolongadas, y un
mayor número de eventos de precipitación fuerte.
624
Los cambios en el ciclo hidrológico, así como el grado de desarrollo que adquiera
nuestro país en el presente siglo, determinarán en gran medida la disponibilidad de
agua en regiones sensibles como la zona costera del Golfo de México. En efecto,
lluvias de mayor intensidad implican menor cantidad de agua infiltrada y, por lo tanto,
un incremento en los escurrimientos superficiales. La mayor demanda de superficie irrigada, la intensificación de la ganadería, la generación de energía, el aumento
poblacional y el crecimiento del sector industrial, entre otros factores, tienen una
repercusión directa en la cantidad y calidad de agua disponible para sostener a las
poblaciones humanas y los ecosistemas naturales.
El futuro del agua dependerá en gran medida de las decisiones que se tomen
desde ahora, pero también de factores externos que alterarán el ciclo hidrológico en
nuestro país. Específicamente, el cambio climático será un elemento de suma importancia a considerar.
6.4.2 Escenarios de demanda de agua 2000-2030
para la zona costera del Golfo de México
El siguiente análisis toma como base la publicación Prospectiva de la demanda de
agua en México, 2000-20303, pero se enfoca en las regiones hidrológicas de la
CONAGUA que comparten la zona costera del Golfo de México. Las proyecciones
se complementan con la integración de los efectos del cambio climático4 en el grado
de presión para el área de estudio. En el documento de referencia se estima la demanda de agua futura en los tres principales usos consuntivos (servicios municipales,
agricultura e industria) por región hidrológica. Para ello, los autores seleccionaron las
siguientes variables:
•
•
•
•
La población, total, urbana y rural.
El crecimiento del PIB, sectorial y regional.
La eficiencia en el uso del agua municipal, agrícola e industrial.
El consumo de agua por persona.
3 Fundación Gonzalo Río Arronte-Fundación Barros Sierra, A.C, 2004. En lo subsiguiente FGRA-FJBS, 2004.
4 Víctor Magaña en INE-SEMARNAT, 2006.
Tendencias
en el uso del agua
625
• La demanda de alimentos por persona.
• La superficie cosechada, de ciclo anual y de perennes, tanto de riego como de
temporal.
• La importación de productos agropecuarios.
• Las extracciones regionales de agua.
• La disponibilidad regional de agua.
La figura 1 muestra esquemáticamente las relaciones de las variables estudiadas
con la demanda de agua.
Figura 1. Esquema de relación entre variables de la demanda de agua.
Fuente: FGRA-FJBS, 2004.
626
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Los escenarios futuros de demanda de agua hacia 2030 fueron creados a partir de
un análisis histórico retrospectivo de 1970 a 2000 de las variables antes mencionadas
y de acuerdo con los datos disponibles. A partir de ello se delinearon las tendencias
de crecimiento y distribución poblacional, del incremento en el PIB y de los posibles
escenarios en el uso agrícola, público-municipal e industrial. La conjunción de todos
estos elementos permite obtener un panorama aproximado de las demandas mínimas
y máximas de agua que pueden esperarse en el año 2030.
Uno de los principales indicadores de disponibilidad de agua es el grado de presión
sobre el recurso hídrico, que se estima de la siguiente manera:
Volumen total concesionado de agua
Grado de presión sobre
=
el recurso hídrico
Disponibilidad natural media de agua
En la figura 2 se muestran los grados de presión estimados por la CONAGUA en
2004 en las distintas regiones hidrológicas del país. Se puede observar que la zona
costera del Golfo de México tiene grados variados de presión: fuerte en la región VI,
moderado en la región IX y escaso en el resto.
Figura 2. Grado de presión sobre el recurso hídrico en las
13 regiones administrativas de México.
Fuente: Magaña, 2006, en INE-SEMARNAT, 2006, con datos de CONAGUA, 2006.
Tendencias
en el uso del agua
627
6.4.2.1 Escenarios de población
Con base en los registros históricos de población del CONAPO (cuadro 1) y las tasas de crecimiento registradas en el último censo, se obtuvieron las proyecciones
de población hacia el año 2030 (cuadro 2) para las regiones administrativas de la
CONAGUA en la zona de estudio.
Cuadro 1. Población histórica 1950-2000 (número de habitantes).
Región administrativa
1950
VI
Río Bravo
2 082 339
1960
3 042 915
1970
4 357 142
1980
5 979 120
1990
7 448 754
1995
8 580 927
2000
9 417 492
1 787 486
2 193 267
2 815 351
3 647 222
4 195 261
4 531 204
4 691 707
IX
Golfo Norte
X
Golfo Centro
2 896 320
3 749 484
4 974 620
6 718 458
8 044 471
8 710 954
9 121 672
XI
Frontera Sur
Península de
Yucatán
1 286 008
1 727 875
2 362 691
3 178 791
4 748 097
5 374 240
5 853 616
658 983
826 109
1 090 597
1 702 175
2 384 240
2 894 771
3 215 461
Total
8 711 136
XII
 
11 539 650 15 600 401 21 225 766 26 820 823 30 092 096 32 299 948
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004 (datos en el CD-ROM). Estimaciones de la Fundación Javier Barros Sierra,
A.C.
Cuadro 2. Proyecciones de población 2005-2030 (número de habitantes).
Región administrativa
2005
2010
2015
2020
2025
2030
Río Bravo
10 643 902
11 553 928
12 422 716
13 248 691
14 016 019
14 695 950
IX
Golfo Norte
5 041 345
5 209 377
5 351 249
5 468 399
5 553 301
5 596 296
X
Golfo Centro
9 749 239
9 973 443
10 157 947
10 305 177
10 401 217
10 428 228
XI
Frontera Sur
Península de
Yucatán
Total
6 530 819
6 929 218
7 304 903
7 656 370
7 968 443
8 226 073
3 665 642
4 035 189
4 401 284
4 757 519
5 092 851
5 396 079
35 630 947
37 701 155
39 638 099
41 436 156
43 031 831
44 342 626
VI
XII
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004 (datos en el CD-ROM). Estimaciones de la Fundación Javier Barros
Sierra, A.C., con datos del CONAPO, 2006.
En los cuadros 1 y 2 se puede apreciar que las regiones administrativas con el
incremento de población más acelerado son Río Bravo (VI), Frontera Sur (XI) y Península de Yucatán (XII).
628
E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.4.2.2 Escenarios del producto interno bruto regional
Para estimar el desarrollo económico de la región hacia 2030 se utilizaron tres alternativas de crecimiento del producto interno bruto por habitante, con tasas anuales de
2.1, 3.3 y 4.7%. La primera suposición parte de las proyecciones realizadas a partir
de la evolución histórica del PIB en México desde hace casi dos siglos. Las dos alternativas restantes asumen que el PIB del año 2000 se multiplicará en los próximos
treinta años por factores de dos y tres, respectivamente.
El cuadro 3 presenta el PIB y el PIB por habitante para estos tres posibles escenarios de crecimiento y distribución de riqueza en la región de estudio.
6.4.2.3 Escenarios de la demanda agropecuaria
Las actividades agropecuarias consumen la mayor cantidad de agua, por lo que
repercuten de manera sustancial en la disponibilidad de la misma. Cabe destacar
que dichas actividades y su creciente expansión constituyen la principal fuerza
motora del cambio de uso de suelo en la zona costera del Golfo de México. Los
escenarios propuestos utilizan datos históricos de las variables determinantes en la
demanda agropecuaria de agua: la superficie de riego, la lámina promedio de riego y
la producción de carne en canal. También se evaluaron los cambios en la superficie
de agricultura de temporal, la eficiencia de los sistemas de riego y el rendimiento
de la producción.
Los resultados obtenidos para el escenario tendencial muestran que la extracción
para usos agropecuarios se mantendrá relativamente constante, pues el abatimiento
de los acuíferos (sobre todo en el norte y centro del país) se ha traducido en un menor
uso de agua. Por su parte, la lámina de agua requerida para riego indica una tendencia
decreciente debido, entre otros factores, al incremento en los rendimientos. Estas dos
tendencias neutralizan el incremento en la cantidad de agua requerida por la apertura
de mayores extensiones para cultivo y ganado.
Considerando la producción de forrajes y el uso pecuario directo, la producción
de carne es una de las actividades que más agua demanda: aproximadamente 20%
del total extraído en el sector. La tendencia sugiere un crecimiento sostenido en los
Tendencias
en el uso del agua
629
630
E scenarios
de cambio climático y tendencias
255
141
196
1 501
X Golfo Centro
XI Frontera Sur
XII Península de Yucatán
Suma
49.4
100
13.1
9.4
17
11.2
46.5
61
24
28
36
79
PIB/hab.,
miles de
pesos
1 567
557
265
464
281
1 586
2 226
791
376
660
399
2 252
6 706
1185
563
988
597
3 373
100
17.7
8.4
14.7
8.9
50.3
PIB en 2030 (miles de millones de pesos de 2000)
Crecimien- Crecimiento
Crecimiento
% (para creto anual
anual 3.3%
anual 4.7%
cimiento de
2.1%
4.7%)
Nota: la “suma” en las columnas de PIB/hab. es el promedio ponderado.
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004.
168
VI Río Bravo
IX Golfo Norte
Región
PIB,
miles de
millones
de pesos
741
2000
%
Cuadro 3. Tres escenarios del PIB y del PIB/hab en 2030.
35.3
103
32
45
50
108
50.2
147
46
63
71
153
151.2
220
68
95
107
229
PIB/hab en 2030 (miles de pesos de 2000)
Crecimiento
Crecimiento
Crecimiento
anual 2.1%
anual 3.3%
anual 4.7%
si­guientes treinta años. En el cuadro 4 se pueden observar las extracciones históricas
y futuras asociadas con las distintas actividades del sector agropecuario.
Cuadro 4. Escenario tendencial. Extracciones de agua a 2030 requeridas
por las actividades agropecuarias.
Año
Superficie
de riego,
ha
Lámina
de riego
promedio,
cm
1981
1985
1990
1995
2000
5 170 145
5 284 715
4 943 443
4 979 706
4 679 720
121
110
124
103
120
2010
2020
2030
4 923 686
4 878 631
4 833 576
114
113
112
Extracciones
para la
agricultura,
hm3
Producción de
carne en canal,
ton
Datos históricos; promedios
56 448
2 767 675
58 132
2 920 860
61 299
2 682 494
51 291
3 685 344
56 210
4 359 457
Tendencia
55 934
5 984 664
54 992
7 615 256
54 058
9 245 847
Extracciones
para uso
pecuario
específico,
hm3
Extracciones
totales hm3
986
1 040
956
1 313
1 553
57 434
59 172
62 254
52 604
57 810
2 132
2 713
3 293
58 066
57 705
57 352
Fuente: FGRA-FJBS, 2004.
A diferencia de la superficie de riego, la de temporal tiende a aumen­tar. La superficie de temporal en el país pasaría, según las estimaciones del documento de
referencia, de 14 a 19.8 millones de hectáreas entre 2000 y 2030. Los dos cultivos
más importan­tes para el consumo alimenticio (cereales y forrajes) tienen una clara
tendencia al aumento de los rendimientos tanto en las tierras de rie­go como en las
de temporal. De cumplirse estas tendencias, la producción de cereales se multiplicaría
por un factor de 1.5 entre 2000 y 2030, y la de forrajes aumentaría 1.7 veces.
Sin embargo, estos incrementos serían insuficientes para abastecer la demanda de
cereales y carne en 2030, por lo que las importaciones de ambos crecerían.
En cuanto a la demanda de alimentos, los factores que más influyen son el tamaño de la población y la tendencia a modificar los patrones de consumo. En la medida
que se incrementa el ingreso de las personas, también aumenta su capacidad de compra y por lo tanto los productos consumidos. Uno de los principales indicadores del
Tendencias
en el uso del agua
631
crecimiento económico es el aumento en el consumo de carne, lo que implica mayor
demanda de agua para su producción. Los escenarios mostrados por las fundaciones
Río Arronte y Barros Sierra (2004) muestran que, con sólo los aumentos tendenciales de la superficie cosechada, el incremento en los rendimientos de los cultivos no
sería suficiente para atender la demanda nacional en la medida en que la economía
crezca a tasas mayores del 3% anual.
6.4.2.4 Escenarios de la demanda municipal urbana
En los escenarios de la demanda municipal urbana se utilizaron los tres factores más
influyentes para servicios municipales y domésticos: el tamaño de la población, el
ingreso promedio por habitante y las pérdidas en los sistemas de abastecimiento. El
documento asume que para el año 2030 toda la población contará con servicio de
agua potable. La relación entre consumo de agua e ingresos per cápita se obtuvo
utilizando los datos de población y las extracciones del año 2000, pero tomando en
cuenta las eficiencias regionales5, para obtener el consumo neto por habitante. La
eficiencia en los sistemas de distribución de agua se calcula como el cociente entre el
agua facturada y el agua producida.
Los escenarios del sector se estimaron bajo las siguientes hipótesis:
• Las poblaciones regionales evolucionarán según los escenarios de los cuadros 1 y
2.
• El PIB/hab en cada región varía según lo muestra el cuadro 3; la relación entre
consumo de agua e ingresos sigue la tendencia de la figura 3.
• La eficiencia de los sistemas de abastecimiento seguirá como está actualmente
(demanda máxima) o mejorará hasta llegar a 0.75 en todo el país (demanda mínima).
5 En el documento de referencia, las eficiencias se estimaron distribuyendo las poblaciones urbanas estatales de
2000 (XII Censo General de Población y Vivienda, 2000) en las regiones de CONAGUA, ponderándolas según
las eficiencias estatales (I Censo de Captación, Tratamiento y Suministro de Agua, Censos Económicos, 1999),
INEGI, 2000a.
632
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 3. Relación entre el ingreso por habitante y la demanda
neta de agua para uso público-urbano.
l/hab/ día
350
300
250
200
y = 50.604Ln(x) - 306 5
150
R2 = 0.4612
100
50
0
0
50 000
100 000
PlB/hab
150 000
200 000
Fuente: FGRA-FBS, 2004.
A partir de este análisis resulta claro que, demás de atender la mayor demanda por
el incremento poblacional y el aumento en el PIB/hab, el sector público-urbano debe
afrontar el reto de mejorar las eficiencias. En el cuadro 5 se presentan las eficiencias
estimadas en las regiones administrativas de estudio en el año 2000. Se puede observar que los valores de este parámetro son en general bajos, con mejores resultados
en las zonas de mayor estrés hídrico.
Cuadro 5. Eficiencia de los sistemas de abastecimiento de agua
para uso municipal-urbano en 2000.
Región administrativa
VI
Río Bravo
IX
Golfo Norte
X
Golfo Centro
XI
Frontera Sur
XII
Península de Yucatán
Eficiencia
0.67
0.53
0.61
0.49
0.58
Fuente: estimaciones de la Fundación Javier Barros Sierra, A.C., 2000b, basadas en INEGI, 2000b, I Censo de
Captación, Tratamiento y Suministro de Agua, 1999.
Con base en los escenarios de referencia para el crecimiento del PIB y la población,
y a partir de las eficiencias mostradas en el cuadro anterior, se determinó la demanda
Tendencias
en el uso del agua
633
634
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Río Bravo
Golfo Norte
Golfo Centro
Frontera Sur
Península de
Yucatán
260.4
175
177
236.4
176
146
141
128
2030
(2.1%)
185
108
119
112
2000
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004.
Total Región Golfo
XII
VI
IX
X
XI
Región
administrativa
284
189
190
160
155
141
2030
(3.3%)
Consumo l/hab/día
311.4
205
207
176
171
158
2030
(4.7%)
588
4 214
2
787
1 409
558
884
775
2030
(2.1%)
356
948
348
650
485
2000
4 597
635
1 521
611
971
859
2030
(3.3%)
5 040
689
1 649
673
1 072
957
2030
(4.7%)
Extracciones, hm3/año, eficiencias
de 2000
3 345
459
1 262
397
716
511
2030
(2.1%)
3 645
495
1 362
435
787
566
2030
(3.3%)
3 993
538
1 477
478
869
631
2030
(4.7%)
Extracciones, hm3/año,
eficiencias de 0.75
Cuadro 6. Escenarios de la demanda de agua municipal y urbana en 2030, con las eficiencias de 2000 y con eficiencias de 0.75, de
acuerdo con las hipótesis propuestas de crecimiento del PIB y población.
del sector público urbano hacia el año 2030 (cuadro 6). Para poner en relieve la
importancia de mejorar las eficiencias, el cuadro 6 también muestra las extracciones
esperadas si se adoptan medidas para incrementar las eficiencias hasta lograr 75% en
los sistemas de distribución.
Como lo muestra el cuadro 6 para la demanda municipal, el promedio de consumo de agua per cápita en la zona del Golfo de México se estimó, para el año 2000 en
236.4 l/hab-día. Ello es equivalente al promedio nacional estimado en la publicación
de referencia para ese año de 233 l/hab-día. Bajo los escenarios tendenciales, sin
mejora de eficiencias, el consumo promedio neto aproximado en el área de estudio
se incrementaría a 260, 288 o 311 litros por habitante por día. Por su lado, las extracciones en el año 2000 para toda la región ascendían a cerca de 2 800 hm3, y
podrían aumentar en 2 030 a 4 200 hm3 como mínimo, y hasta más de 5 000 hm3.
Bajo el supuesto de que las eficiencias en las redes de abastecimiento aumentaran
a 0.75, las extracciones totales aproximadas del sector variarían de 3 400 a 4 000
hm3. Este punto pone de manifiesto la necesidad imperante de invertir para mejorar
la operación del servicio, pues con las medidas empleadas se podrían ahorrar hasta
1 000 hm3 en la región.
6.4.2.5 Escenarios de demanda industrial
La distribución de los sectores productivos en el país muestra una tendencia hacia el
aumento del sector terciario, y la disminución de los sectores primario y secundario.
Sin embargo, a pesar de su menor aportación porcentual, el sector secundario incrementará su volumen de producción entre dos y cuatro veces más con respecto al
2000, si se cumplen los escenarios de crecimiento propuestos. El cuadro 7 muestra
la distribución de cada sector en la zona de estudio en el año 2000 y las proyecciones
para 2030.
En lo que concierne al consumo de agua, la tendencia nacional en el perfil de las
manufacturas se ha inclinado hacia industrias de menor demanda en sus procesos
productivos. Industrias que requieren de una gran cantidad de agua, como la producción de alimentos, textiles y papel, han disminuido su participación en el PIB. Por su
Tendencias
en el uso del agua
635
parte, divisiones de sustancias químicas y productos de plástico han sido más dinámicas que el conjunto manufacturero y se han expandido hacia ramas de consumo
bajo. El cuadro 8 muestra las diferencias porcentuales entre 1970 y 2000 de ambos
Cuadro 7. Distribución porcentual sectorial del PIB regional en los años 2000 y 2030.
Región
administrativa
VI
IX
X
XI
XII
2000
Primario
2.1
9.3
8.6
8.1
2.9
Río Bravo
Golfo Norte
Golfo Centro
Frontera Sur
Península de
Yucatán
Secundario
32.2
29.6
30.1
25.6
29.0
Escenarios en 2030
Terciario
65.7
61.1
61.3
66.4
68.1
Primario
0.6
3.3
3.3
2.0
0.6
Secundario
31.9
35.5
32.1
21.8
26.8
Terciario
67.5
61.2
64.6
76.2
72.6
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004.
tipos de empresas.
Cuadro 8. Cambios en la distribución porcentual del PIB manufacturero entre 1970 y 2000
(ámbito nacional).
Industria manufacturera
1970 (%)
2000 (%)
Industrias de alto consumo de agua
54.23
45.27
3.68
3.52
5.59
4.52
1.69
1.47
1.06
2.35
2.21
0.58
Industrias de bajo consumo de agua
45.77
54.73
Petroquímica básica
Elaboración de productos de plástico
Fundición y moldeo de piezas metálicas ferrosas
y no ferrosas
Industria automotriz
0.63
1.42
11.52
2.53
3.35
14.04
4.7
10.14
Beneficio y molienda de cereales
Molienda de nixtamal y fabricación de tortillas
Industria textil de fibras duras y cordelería de todo tipo
Industria básica del hierro y acero
Industria azucarera
Fuente: FGRA-FJBS, 2004.
636
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Con las consideraciones anteriores, los escenarios de demanda industrial de agua
se construyeron mediante las siguientes hipótesis:
• La tasa de crecimiento anual del PIB entre 2000 y 2030 seguirá los escenarios
propuestos.
• El PIB de la zona costera del Golfo de México se distribuirá de acuerdo con lo
expuesto en el cuadro 7.
• La eficiencia del uso del agua en las manufacturas mejorará 1% anualmente
(como se está logrando actualmente en los países desarrollados) o 2% (si se
asume que el cambio será mayor en México, porque los procesos industriales se
modernizarán a partir de niveles de tecnología inferior).
Los escenarios de la demanda de agua industrial pueden observarse en el cuadro
9. Al analizar dicho cuadro se puede inferir la importancia de promover, mediante
tarifas u otra clase de incentivos, el mejoramiento de la eficiencia en el uso industrial
del agua, sobre todo en la región Río Bravo y ciudades manufactureras como Coatzacoalcos y Tampico-Madero.
6.4.2.6 Escenarios de demanda total de agua
Al sumar las proyecciones de demanda de agua de cada uso consuntivo, se pueden
deducir los posibles escenarios en el año 2030 para la zona costera del Golfo de
México. En el cuadro 10 se incluyen las demandas mínimas y máximas esperadas
de los tres principales usos. Como la industria se multiplicaría por un factor de 3.6 y
la población por 1.9, en la región Golfo Norte el aumento de la eficiencia en el uso
agrícola no alcanzaría para cubrir las otras demandas. A causa de ello, el grado de
presión aumentaría cinco puntos en el caso de un desarrollo del PIB alto.
Tendencias
en el uso del agua
637
638
E scenarios
de cambio climático y tendencias
187
4 374
1 453
286
108
2 999
Golfo
Centro
Frontera
Sur
Península
de
Yucatán
Suma
X
XI
XII
 
Fuente: modificado de FGRA-FJBS, 2004.
324
1 875
916
541
Golfo
Norte
IX
1072
611
Si no mejora
la eficiencia
Río Bravo
2000
VI
Región
administrativa
 
 
3 236
139
240
1 387
677
793
2.1 %
Si
mejora la
eficiencia
1% anual
266
6 210
2 387
460
2 662
1 300
1 522
102
177
1 023
500
585
4 594
197
340
1 969
962
1 126
3 387
145
251
1 452
709
830
Escenarios de crecimiento del PIB
3.3 %
Si
Si
Si mejora la
Si no
mejora la mejora la
eficiencia
mejora la
eficiencia eficiencia
2% anual
eficiencia
1% anual 2% anual
9 301
398
689
3 987
1 947
2 280
Si no
mejora la
eficiencia
Cuadro 9. Escenarios de la demanda industrial en 2030 (hm3), de acuerdo con las posibles mejoras de eficiencia
y los escenarios de crecimiento económico propuestos.
6 880
295
510
2 949
1 440
1 686
4.7 %
Si
mejora la
eficiencia
1% anual
5 074
217
376
2 175
1 062
1 244
Si
mejora la
eficiencia
2% anual
Tendencias
en el uso del agua
639
20 321
6
3 345
459
511
5 040
689
957
1 072
673
2 387
102
9 301
398
689
3 987
1
023
177
1 947
2
280
Máxima
500
585
Mínima
12 516
726
921
1 587
3 727
5 555
Mínima
42 665
3 528
12
443
17
412
3 727
5 555
Máxima
1 609
3 326
4 624
7 402
Demanda
total
mínima
6
5
1
3
19
52
Grado de
presión
mínimo,
%
57 006
4 615
19 058
17 502
6 347
9 484
Demanda
total
máxima
18
17
12
17
26
67
Grado de
presión
máximo,
%
5 Las cantidades de la demanda agropecuaria corresponden a los valores mínimos y máximos según los escenarios Agr 1, Agr 2, Agr 3 y Agr 4, elaborados por FGRA-FJBS,
2004 y que son demasiado extensos para incluir en esta sección.
Fuente: modificado de FGRA-FJS, 2004.
323 635
5
1
716
397
1 649
Máxima
1 287
1 841
155 906
4
21
1 262
Mínima
Demanda total y grado de presión
18 248
3 946
102 633
1 307
5 217
24 339
26 496
8 010
14 261
56
Grado de
presión en
2000 %
 2030
Demanda
agropecuaria5
Suma
 
Extracciones
2000
Disponibilidad
2000
Región
Demanda municipal- Demanda industrial
urbana
VI Río
Bravo
IX Golfo
Norte
X Golfo
Centro
XI Frontera
Sur
XII
Península
de Yucatán
2000
 
 
Cuadro 10. Resumen de escenarios de la demanda en 2030 (hm3).
La figura 4 fue construida al tomar en cuenta los escenarios de mayor demanda
de agua para el uso agrícola, y bajo las tendencias propuestas en el crecimiento del
PIB y la población. Dicha figura permite visualizar los grados de presión para el año
2030 en las distintas regiones: la región Río Bravo se encontrará bajo muy fuerte
presión; la región Golfo Norte, bajo presión moderada, y el resto de las regiones en la
zona de estudio tendrá grados escasos.
Figura 4. Escenario de grado de presión (máxima) sobre el recurso agua al 2030,
considerando sólo las tendencias en población, PIB y agricultura.
Fuente: Magaña, 2006 en INE-SEMARNAT 2006, con datos de la Fundación Gonzalo Río Arronte-Fundación
Javier Barros Sierra, A.C. 2004.
6.4.3 Efecto del cambio climático en los escenarios
tendenciales
Los resultados de los párrafos anteriores sobre la demanda futura de agua se ven
modificados cuando se agrega el efecto del cambio climático. Tomando los escena640
E scenarios
de cambio climático y tendencias
rios para la climatología de 2020, se considera que la disponibilidad natural del agua
disminuye por el aumento en la temperatura y evapotranspiración, además de por
una ligera disminución en la precipitación anual. Esto lleva a una reducción anual de
aproximadamente 10%, con respecto a la disponibilidad de 2000. En dicho escenario se aumenta además la demanda de agua en el sector agrícola en un 10%, pues
al disminuir la humedad en el suelo (como se proyecta), se tendrá que extraer más
agua para riego.
Los escenarios con cambio climático para 2030 muestran que la región Río Bravo
continuará con grados fuertes de presión; pero el cambio más significativo sucede
en las regiones Golfo Norte, Golfo Centro y Península de Yucatán, las cuales podrían
experimentar una presión de media a fuerte. Lo anterior indica que los aumentos en
el grado de presión sobre el recurso agua por efectos del cambio climático pueden ser
tan importantes como los de orden socioeconómico para las próximas dos décadas.
También cabe recalcar que aunado a los factores de presión en los recursos hídricos aquí expuestos, la contaminación del agua reduce aún más su disponibilidad para
los distintos usos.
Figura 5. Grado de presión cuando se consideran las proyecciones socioeconómicas para el
2030 y se incluyen los escenarios de cambio climático como moduladores de la disponibilidad
natural de agua.
Fuente: Magaña, 2006 en INE-SEMARNAT 2006, con datos de la Fundación Gonzalo Río Arronte-Fundación
Javier Barros Sierra, A.C., 2004.
Tendencias
en el uso del agua
641
6.5 Tendencias en el uso de suelo
Leticia Gómez et al.
Víctor Magaña et al.
6.5.1 Introducción
El uso que tiene el suelo es uno de los factores determinantes de la vulnerabilidad al
cambio climático. Cambios como la deforestación, la expansión de la frontera agropecuaria, el dragado y relleno de humedales, al igual que la urbanización, aumentan la
vulnerabilidad, pues acarrean modificaciones en la mayoría de los procesos naturales
que sustentan y protegen la vida (pensemos en el ciclo hidrológico). Sin embargo, la
vulnerabilidad ante dicho fenómeno se reduce implementando medidas de saneamiento del agua, conservación de suelos, reforestación y restauración de ecosistemas,
entre otras. Por lo tanto, la intensidad de los efectos del cambio climático en la zona
de estudio dependerá de la dirección que tomen las modificaciones en el uso del suelo. El punto anterior destaca la importancia de contar con ordenamientos territoriales
o ecológicos, y de hacerlos respetar.
En las regiones tropicales, el cambio de uso de suelo contribuye sustancialmente
a la alteración de los ecosistemas, pues es el principal responsable de, al menos, los
siguientes problemas:
•
•
Pérdida de biodiversidad1.
Cambios en la distribución espacial de los tipos de vegetación2.
1 Sala et al., 2001.
2 Velázquez et al., 2003.
642
•
•
Emisiones “naturales” de CO2 a la atmósfera3.
Alteración del ciclo hidrológico4.
La diversidad y heterogeneidad de los procesos de uso del suelo debe ser analizada
detalladamente debido a sus efectos diferenciales sobre el ambiente. La mayor degradación ambiental se alcanza cuando la magnitud de los daños sobrepasa la capacidad
de los mecanismos naturales del ambiente (resistencia y resiliencia5) para regenerar
las estructuras y los procesos ecológicos que favorecen la permanencia del potencial
natural y de los servicios ambientales asociados con los ecosistemas6.
El efecto del cambio de uso de suelo y cobertura vegetal sobre las zonas de recarga de agua y las regiones de humedales aún no ha sido considerado en México. Por su
parte, el cambio climático a escala regional también puede influir en el funcionamiento
de los ecosistemas costeros, al modificar la cantidad y los ciclos anuales de precipitación, en igual o mayor grado que el propio cambio de uso de suelo; por ejemplo,
la disminución de la precipitación conllevaría a un cambio en la productividad de la
vegetación, haciéndola aún más vulnerable a la deforestación actual por actividades
humanas7. En este sentido, si se evalúan paralelamente el cambio de uso de suelo y el
cambio climático como dos de los principales procesos de presión sobre los recursos
hídricos en el largo plazo, se puede estar en condición de proponer políticas de adaptación o mitigación desde hoy, y lograr disminuir sus efectos en el futuro.
Los principales mecanismos controladores de los cambios de uso de suelo son
de carácter demográfico, político-económico y biofísico8. Estos alteradores han sido
integrados en diversos modelos globales, regionales y locales mediante el uso de
sistemas de información geográfica9 (SIG) para entender los patrones espaciales y
temporales del cambio. Los resultados pueden integrarse en la construcción de esce-
3 INE-SEMARNAT, 2001.
4 Magaña et al., 2007, para este estudio. Ver apartado 6.5.4.
5 La propiedad de los ecosistemas para regresar a su estado original después de un evento que altera el estado de
equilibrio. La resiliencia es mayor conforme hay mayor diversidad dentro del ecosistema.
6 Galicia et al., 2007.
7 Gerhardt y Foster, 2002.
8 Veldkamp y Lambin, 2001.
9 Galicia et al., 2007.
Tendencias
en el uso de suelo
643
narios futuros, y en la confección de políticas de desarrollo sustentable y de reducción
de la degradación ambiental.
6.5.2 Proyecciones del uso de suelo al 2020 para la
vertiente del Golfo de México
En las siguientes páginas se presentan las proyecciones elaboradas para las coberturas
de uso de suelo en la zona costera del Golfo de México hacia el año 2020. Los
resultados se elaboraron a partir de modelos probabilísticos (módulo de Markov),
alimentados con el uso de suelo del año 2000 (figura 1) y las tendencias encontradas
en los cambios entre 1976 y 200010 (cuadro 1). El módulo de Markov aplicado en
IDRISI produce una matriz de probabilidades de transición entre todas las categorías
de uso de suelo y cobertura vegetal. También se obtiene una matriz de áreas de transición que indica el número de píxeles con probabilidades de sufrir una transformación
de una categoría a otra. Finalmente el sistema da como salida una serie de mapas de
probabilidad condicional (con valores entre 0 y 1) para cada una de las categorías en
el tiempo 2020, como proyección desde el periodo 1976-2000. Para ello se asume
una evolución lineal de los usos de suelo. Es claro que, de implementarse medidas para
revertir dichas tendencias, los cambios aquí proyectados serían de menor magnitud.
En el análisis de las tendencias se identificaron dos grandes controladores del cambio de uso de suelo: la expansión de zonas agrícolas y el crecimiento de la actividad
ganadera, mediante la expansión de potreros, pastizales inducidos y cultivados. En
efecto, el mapa de uso de suelo para el año 2020 indica un aumento en la actividad
agrícola, tanto de riego como de temporal, al igual que las actividades de ganadería en
las partes más planas de la zona. Se observa también un deterioro en las regiones de
humedales costeros, debido a la expansión espacial del sector agropecuario. Las regiones de selva baja y selva mediana, situadas en las zonas de pie de monte, disminuirán su extensión debido al aumento de la frontera agrícola. En las regiones más altas
(cabeceras de cuenca), las zonas de bosques templados disminuirán drásticamente.
10 Para un análisis detallado de los cambios aquí presentados entre 1976 y 2000, referimos al lector a la sección
4.4 “Diagnóstico del uso de suelo en la zona costera del Golfo de México”.
644
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 1. Mapa de uso de suelo y vegetación del año 2000.
Fuente: Gómez et al., 2007.
Es importante señalar que, de acuerdo con el modelo utilizado, si se considera
un escenario tendiente a la conservación tanto de áreas naturales protegidas como
del Corredor Biológico Mesoamericano, y otro que permitiera la introducción de
actividades agropecuarias en dichas zonas, las disminuciones de cobertura vegetal
natural serían menos drásticas en el primero. Sin embargo, dada la complejidad del
método, no puede aseverarse que exista deforestación dentro de las áreas naturales
protegidas.
Tendencias
en el uso de suelo
645
Cuadro 1. Cambios en el uso de suelo observados entre 1976 y 2000.
Cobertura o uso de suelo
Urbano
Pastizal inducido, cultivado, agricultura de
temporal y riego
Pastizal natural (incluye pastizal-huizachal)
Matorral espinoso tamaulipeco
Vegetación secundaria arbustiva y herbácea (de
los tipos de vegetación arbórea)
Sabana
Selvas bajas caducifolias, bosques de encino,
selvas medianas y vegetación espinosa
Selvas perennifolias y subperennifolias
Bosques de pino, oyamel, ayarín y encino
Cuerpo de agua
Popal-tular
Vegetación de galería (incluye bosque de
galería, selva de galería y vegetación de galería,
manglar y comunidades inundables)
Área sin vegetación aparente
1976
(ha)
1 455 752
2000
(ha)
11 210 855
Cambio
%
670
2 212 785 879
5 088 148 997
130
8 555 252
8 907 085
4
153 878 176
137 716 807
-11
1 209 962 697
220 034 163
-82
54 742 922
3 219 102
-94
607 069 095
204 038 342
-66
2 384 270 754
73 599 347
280 525 587
371 284 317
1 730 875 851
49 881 833
12 171 279
44 982 737
-27
-32
-96
-88
112 745 332
6 812 623
-94
14 765 234
277 302
-98
Nota: en el proceso de homologación de las coberturas se crean inconsistencias que deben considerarse a la hora de
interpretar los resultados.
Fuente: Gómez et al., 2007.
6.5.3 Proyecciones para algunos tipos de cobertura
relevantes
De acuerdo con los resultados del modelo, a continuación se describen los cambios
que experimentarán algunos usos de suelo y tipos de cubierta vegetal para la región
del Golfo de México hacia el año 2020, en términos de probabilidad (con valores
entre 0 y 100%). En las figuras 3 a 8 se describen los rangos de probabilidad de
646
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 2. Proyecciones de uso de suelo en 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
que el estado del suelo actual pase a ser un uso de suelo dado, por ejemplo urbano,
pastizal o agricultura. Para los tipos de vegetación que están perdiendo superficie de
manera importante se habla de probabilidad de permanencia para la cobertura en
particular. La probabilidad para 2020 obedece a la dinámica del cambio de uso de
suelo observado de 1976 a 2000; por ello, algunas clases de uso de suelo dominarán
sobre otras.
6.5.3.1 Uso de suelo urbano
El uso de suelo urbano presentará una probabilidad máxima de 1% de aumento,
localizado en los alrededores de las actuales zonas urbanas. Las regiones de mayor
Tendencias
en el uso de suelo
647
probabilidad se ubican en la porción noreste de la península de Yucatán, posiblemente
debido a la concentración de poblaciones rurales y la expansión del corredor turístico
de la Riviera Maya. Sin embargo, las probabilidades de cambio son muy bajas.
6.5.3.2 Pastizal inducido y agricultura de temporal
Los valores de probabilidad de cambio hacia este tipo de vegetación van de 2 a 39%
en toda la región. Estos usos de suelo dominarán en la península de Yucatán, en
regiones costeras y regiones de las estribaciones11 de las cabeceras de las cuencas.
Será el uso de suelo dominante para la región (figura 3).
Figura 3. Probabilidad de cambio a pastizal inducido y agricultura de temporal para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
6.5.3.3 Pastizal cultivado y agricultura de riego
Las probabilidades de cambio hacia este uso de suelo van del 8 al 43% y los valores
más elevados se localizan a lo largo de las costas, en los humedales definidos para
11 Estribación: estribo o ramal de montaña que deriva de una cordillera.
648
E scenarios
de cambio climático y tendencias
este estudio. Tal hecho debe activar la señal de alerta para implementar medidas de
conservación. Las probabilidades intermedias (22 a 33%) se observan en regiones
que actualmente presentan uso de suelo de agricultura de riego y pastizales inducidos
(figura 4). El cambio de uso de suelo a actividades agropecuarias indica una alta
intensificación y mayor tecnificación de las actuales zonas abiertas para cultivo en la
región.
Figura 4. Probabilidad de cambio a pastizal cultivado y agricultura de riego para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
6.5.3.4 Matorral espinoso tamaulipeco
A diferencia de otros usos de suelo, este tipo de cubierta vegetal, predominante en las
zonas de pie de monte de las cabeceras de cuenca, se presentará para 2020 principalmente en la Sierra de San Carlos, Sierra de Tamaulipas, en las cabeceras de los ríos
Tuxpan, y Jamapa, y en las zonas secas de los Altos de Chiapas. Todas estas regiones
con valores de probabilidad de cambio de entre 36 y 44%.
Tendencias
en el uso de suelo
649
6.5.3.5 Vegetación secundaria
En el estudio se consideró a la vegetación secundaria como la correspondiente a
todas las coberturas de tipo herbáceo y arbustivo, de acuerdo con la clasificación del
INEGI. El modelo indica baja probabilidad de cambio de estos tipos. El estado de la
vegetación secundaria es un indicativo tanto del deterioro de la vegetación como de
su regeneración.
6.5.3.6 Selvas bajas y vegetación espinosa
La probabilidad de permanencia de estos tipos de vegetación para 2020 es muy baja
(entre 1 y 11%). En la figura 5, la superficie de permanencia, cuyo rango de valores
se ubica entre 0.09 y 0.11, corresponde a las regiones que van a ser sustituidas por
pastizal inducido y agricultura de temporal, con probabilidades de entre 25 y 35% de
la figura 3. Esto sugiere que la actividad agrícola tradicional sustituirá a la vegetación
espinosa y de selvas bajas.
Figura 5. Probabilidad de cambio a selvas bajas, bosques espinosos, selvas medianas y
vegetación espinosa para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
650
E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.5.3.7 Cuerpos de agua, popal-tular y vegetación de galería
La permanencia de esta cobertura será muy baja (0 a 1%). La probabilidad de permanencia en las regiones de humedales sólo es de cerca del 1% (figura 6). Por otro lado,
la permanencia de vegetación representativa de lagos y zonas riparias también presenta bajas probabilidades (0 a 1%). Para los sitios piloto de este estudio se identifica
una probabilidad de permanencia de sólo el 1% para popal y tular, que predominará
sobre los actuales cuerpos de agua (figura 7). La vegetación de galería presenta una
probabilidad de permanencia de entre 0 y 0.4%, predominando en actuales zonas
riparias, principalmente en el noroeste de Campeche y en Quintana Roo (figura 8).
6.5.4 Uso de suelo e hidrología
Figura 6. Probabilidad de presencia de popal y tular para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
Tendencias
en el uso de suelo
651
Figura 7. Probabilidad de presencia de cuerpos de agua para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
Figura 8. Probabilidad de presencia de vegetación de galería para 2020.
Fuente: Gómez et al., 2007.
652
E scenarios
de cambio climático y tendencias
El suelo juega un papel importante dentro de la fase terrestre del ciclo hidrológico, pues dependiendo de su grado de permeabilidad determina la fracción del agua
precipitada que se infiltra hacia los acuíferos o escurre hacia los océanos. Una parte
del agua también es retenida en la superficie antes de llegar al mar, formando lagos,
lagunas y humedales. Si se aprovechan de manera sustentable, estos ecosistemas
pueden beneficiar a la economía de las zonas aledañas y proveer sustento a la vida
silvestre. La alteración del uso de los suelos modifica el balance hídrico y altera los
frágiles ecosistemas dependientes del recurso agua.
Al comparar el mapa de uso de suelo del 2000 (figura 1) con el de proyecciones
para 2020 (figura 2), se puede observar la reducción de las áreas con mayor densidad
de vegetación, como los diferentes tipos de selva, la desaparición de los manglares
y un aumento en las áreas con vegetación rala, como los pastizales. Este cambio es
muy importante, ya que una vegetación más pobre ocasiona una menor infiltración
y el aumento de los escurrimientos. También disminuye la fricción entre el escurrimiento y la superficie del suelo, aumentando la velocidad de las corrientes. Si se toma
en cuenta que la vegetación rala tiene menor capacidad para retener tanto el suelo
como el agua, el cambio a este tipo de vegetación aumenta la erosión. Una de las
consecuencias es el mayor arrastre de sedimentos hacia las partes bajas de la cuenca,
azolvando humedales y bocas de lagunas y esteros. Así, los humedales van reduciendo su capacidad de almacenamiento del líquido, lo que afecta a todo el ecosistema.
El aumento del porcentaje de escurrimiento debido al cambio del uso del suelo se
observa principalmente en la península de Yucatán y en Tamaulipas (figuras 9 y 10),
así como en los humedales que se encuentran a la salida de estas cuencas. De acuerdo con el balance hídrico de una cuenca, si se tienen mayores escurrimientos con
lluvias intensas debido a los cambios en el uso del suelo, las infiltraciones se reducen,
y en temporadas de secas los acuíferos no serían capaces de mantener la humedad
suficiente como para alimentar los humedales. En otras palabras, la existencia de los
humedales depende de un frágil equilibrio que mantiene el balance hídrico adecuado
entre las diversas etapas del ciclo hidrológico; el cambio de uso del suelo es la variable
que más afecta este balance.
Tendencias
en el uso de suelo
653
El uso de suelo aquí proyectado tendrá los mayores impactos en el balance hídrico
regional. Las alteraciones en el uso de suelo, principalmente por pérdida de bosques,
Figura 9. Porcentaje de lluvia que escurre con una precipitación de 100 cm.
Situación actual (izquierda) y proyecciones a futuro (derecha).
Fuente: Magaña et al., 2007.
Figura 10. Porcentaje de lluvia que escurre con una precipitación de 50 cm.
Situación actual (izquierda) y futura (derecha).
Fuente: Magaña et al., 2007.
654
E scenarios
de cambio climático y tendencias
resultarán en mayores escurrimientos y menor infiltración. Estas alteraciones en el
ciclo hidrológico regional repercutirán en la salud de los humedales costeros del Golfo
de México. Por ello, es necesario que las medidas de adaptación consideren como
fundamental un reordenamiento territorial y ecológico en toda la zona de estudio.
Tendencias
en el uso de suelo
655
6.6 Escenarios de cambios locales
Víctor Magaña et al.
6.6.1 Introducción
Como se vio en las secciones 6.1 y 6.2, para obtener estimaciones locales de los
cambios futuros en el clima, se realizan reducciones de escala a partir de las proyecciones obtenidas de los modelos generales de circulación de la atmósfera. Uno de los
esquemas de reducción de escala espacial más útil en materia de generación de escenarios de cambio climático se basa en procedimientos estadísticos de regresión. El
Modelo de Reducción de Escala Espacial Estadístico (Stastistical Downscaling Model
o SDSM) constituye una de las herramientas más fáciles de usar y que aporta gran
cantidad de valiosa información para el estudio de impactos del cambio climático1.
La aplicación del SDSM requiere de información diaria de precipitación y temperatura
para construir relaciones estadísticas entre los valores observados locales y los valores
del modelo de circulación general, a partir de un arreglo en malla con baja resolución
espacial.
En el presente análisis se utilizó la información meteorológica disponible en la
base de datos conocida como ERIC III, que compila datos de más de tres mil estaciones durante un periodo promedio de cuarenta años. Para estimar las tendencias
locales en los sitios piloto, se buscaron estaciones cercanas, que reflejaran el clima
1 Wilby y Wigley, 1997; Wilby y Dawson, 2004.
656
puntual de la zona (figura 1). Los escenarios de cambio climático generados con el
SDSM complementan la información obtenida con modelos regionales y permiten
obtener un espectro más amplio de las proyecciones. De esta forma se puede estimar
la incertidumbre (dispersión) entre ellas.
Figura 1. Regiones de humedales de estudio (zonas en negro) y estaciones meteorológicas
(número) utilizadas para el análisis de cambios locales.
En prácticamente todas las zonas de estudio se encontraron estaciones meteorológicas, excepto alrededor de la parte costera media de Quintana Roo (figura 1). Se
construyeron proyecciones de cambio climático para el periodo 2010-2099, a partir
de los datos del modelo de circulación general del centro Hadley. Recordemos que el
modelo conocido como HadCM3 genera algunos de los valores de cambio climático
más elevados, comparado con cualquier otro modelo utilizado por el IPCC. De esta
forma, los escenarios obtenidos pueden considerarse como una cota superior de los
cambios esperados en temperatura y precipitación. Para los escenarios puntuales se
utilizaron dos escenarios de emisiones: A2 y B2.
E scenarios
de cambios locales
657
Las proyecciones se realizaron para una de las estaciones en cada región de los
sitios piloto para las variables temperatura y precipitación, utilizando datos diarios. En
general, la construcción de relaciones entre los valores locales (en la estación) y los
valores modelados resulta más sencilla para la temperatura que para la precipitación
diaria local. La humedad relativa local y la dirección del viento resultaron clave en la
mayoría de los casos para construir escenarios de cambios en la precipitación.
Las estaciones utilizadas para el presente análisis se enlistan en el cuadro 1.
Cuadro 1. Estaciones meteorológicas usadas para determinar las condiciones
locales de los sitios piloto.
Número de
estación
Nombre
Sitios pilotos correspondientes
28086
San Fernando, Tamaulipas
Río San Fernando-Laguna La Nacha.
Río Pánuco-Altamira.
30056
El Tejar Medellín, Veracruz
Rio Papaloapan-Laguna de Alvarado.
Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado.
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
04012
Champotón, Campeche
Reserva de la Biosfera Los Petenes.
23019
La Lagunita, Quintana Roo
Sistema Lagunar Nichupté (Cancún).
Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen).
A continuación se presentan las comparaciones del modelo con la climatología
actual observada, los cambios proyectados en la climatología hacia 2010-2030, así
como los cambios que se esperan hacia 2070-2099, ambos bajo el escenario A2. Finalmente, se presenta una comparación de la evolución del clima ante los escenarios
A2 y B2, utilizando el modelo Hadley. Como este modelo es el que predice mayores
cambios, y el escenario A2 es uno de los de mayores emisiones, los resultados corresponden a uno de los valores más extremos de cambios. Esto nos permite tener una
idea de la condición de mayor presión climática esperada. El análisis se realiza para
cuatro de los ocho sitios de estudio.
658
E scenarios
de cambio climático y tendencias
6.6.2 Humedales de Tamaulipas, estación San
Fernando (28086)
Al comparar la simulación del clima actual para San Fernando con los datos observados en la estación 28086, podemos notar que la reconstrucción de la temperatura de
superficie entrega muy buenos resultados para el clima de 1961-1990.
Figura 2. Condiciones de temperatura media mensual para el clima 1961-1990, con
observaciones en San Fernando, Tamaulipas, y con el modelo SDSM, usando los resultados
del HadCM3, bajo el escenario A2.
Con base en la confianza de que el modelo logra reproducir el ciclo anual de la
temperatura media, es posible generar escenarios de cambio en la temperatura para
este sitio piloto y extrapolarlos a otros humedales de la zona. Las proyecciones se
realizan para finales del presente siglo, pues en este periodo se vuelve más claro el
cambio en la temperatura. Como es de esperarse, los cambios de temperatura media
proyectados bajo el escenario A2 son en general superiores a los proyectados con el
B2 (figuras 3 y 4).
E scenarios
de cambios locales
659
Figura 3. Condiciones de cambio en la temperatura media mensual para el clima 2070-2099,
con respecto al periodo 1961-1990 en San Fernando, Tamaulipas, a partir del esquema
SDSM, usando datos del modelo HadCM3 bajo el escenario A2.
Nótese cómo, en general, se puede esperar un aumento cercano a los 3 °C para los humedales de Tamaulipas .
Figura 4. Condiciones de cambio en la temperatura media mensual para el clima 2070-2099,
con respecto al periodo 1961-1990 en San Fernando, Tamaulipas, a partir del esquema
SDSM, usando datos del modelo HadCM3 bajo el escenario B2.
Nótese un menor aumento promedio con respecto al escenario A2, cercano a 2 °C.
660
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Recordemos que los aumentos en la temperatura no son constantes en el tiempo.
De acuerdo con las proyecciones de modelos numéricos, los incrementos en las dos
próximas décadas no serán mayores a 1 °C. Sin embargo, para la segunda mitad
del presente siglo, la temperatura aumentará más rápidamente y los cambios para
finales del mismo alcanzarán incluso los 4 °C en el noreste del país. De este modo,
las diferencias entre los escenarios A2 y B2 se harán más evidentes. Esta es la misma
conclusión que se alcanza cuando se analiza el ensamble de modelos GCM o las
salidas del modelo japonés. La figura 5 ilustra los cambios esperados para los sitios
piloto San Fernando-La Nacha y Pánuco-Altamira.
Figura 5. Series de tiempo de la temperatura media en la estación San Fernando, Tamaulipas,
entre 1961 y 2099, bajo los escenarios A2 y B2 del modelo Hadley.
Uno de los aspectos interesantes de los cambios en la temperatura está relacionado
con las ondas de calor. Si definimos las ondas de calor como las veces que se rebasa
la temperatura media umbral de 30 °C durante el año, encontramos que después
de 2030, dicha situación se volverá más frecuente. Esto significa que los valores de
temperatura máxima podrían ser muy superiores a los 30 °C más frecuentemente.
E scenarios
de cambios locales
661
Figura 6. Simulación con el modelo HadCM3 del número de veces al año que se rebasa la
temperatura media de 30 °C (T>30 °C) en San Fernando, Tamaulipas, bajo los escenarios
A2 y B2 entre 1961 y 2099.
En cuanto a la precipitación, la construcción del ciclo anual de las lluvias a partir
de variables meteorológicas de gran escala es una tarea complicada, principalmente
en los trópicos, donde las características de los sistemas nubosos están determinadas
en gran medida por campos de vientos, transportes de humedad y condiciones de
estabilidad atmosférica. Todos ellos son sensibles a las características del modelo. En
el presente análisis, la precipitación se simuló utilizando datos de humedad relativa y
de dirección de viento, debido a que los sistemas de norte, o los vientos alisios, son
los principales generadores de episodios de lluvias en el Golfo de México. Para el
caso de San Fernando, el modelo estadístico sobreestima las precipitaciones para el
periodo 1961-1990 (figura 7). Sin embargo, reproduce el ciclo anual con lluvias más
intensas en el verano, lo cual reduce el problema de sobreestimación de lluvias a un
error sistemático.
Las proyecciones para finales del presente siglo, usando técnicas de reducción
de escala estadísticas con datos del modelo de circulación global HadCM3 y bajo el
escenario A2, sugieren que los cambios en la precipitación serán mínimos en estos
662
E scenarios
de cambio climático y tendencias
sitios (figura 8). Hacia los meses de octubre y noviembre, los resultados sugieren un
ligero aumento en la precipitación. Bajo tal esquema, las reducciones en precipitación
anual para finales del presente siglo serían de menos del 5%.
Figura 7. Simulación de la precipitación acumulada mensual para el periodo 1961-1990, bajo
el esquema SDSM en San Fernando, Tamaulipas, y comparación con valores observados.
Figura 8. Cambios en la precipitación en San Fernando, Tamaulipas, para 2070-2099 en
relación con 1979, y de acuerdo con los datos HadCM3 A2 reducidos con el esquema SDSM.
E scenarios
de cambios locales
663
6.6.3 Humedales de Veracruz y Tabasco, estación El
Tejar (30056)
En la estación El Tejar, en Medellín, Veracruz, el modelo simula adecuadamente la
temperatura promedio anual, al igual que su varianza. El modelo es capaz, incluso,
de simular los periodos y el número de veces que se producen episodios de calor, los
cuales ocurren esencialmente a mitad del verano (figura 9).
Bajo cambio climático se espera que en esta región los mayores aumentos en
temperatura ocurran en los meses de junio y julio, alcanzando incrementos de temperatura de entre 3 y 4 °C. Con ello, el número de episodios de calor (T>30 °C)
en esos meses prácticamente se cuadruplicaría para finales del presente siglo (figura
10). Tal amenaza eleva el riesgo por golpe de calor, principalmente entre la población
más vulnerable: adultos mayores y niños. El número de episodios con temperaturas
superiores a 30 °C será mucho mayor si las emisiones globales siguen el escenario A2
en lugar del B2 (figura 11).
Figura 9. Simulación y comparación con observaciones del número de episodios de
temperaturas medias superiores a los 30 °C (T>30 °C) en Medellín, Veracruz, para el periodo
1961-1990, con datos del modelo HadCM3, bajo el escenario A2.
664
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 10. Proyecciones de número de episodios de T>30 °C en Medellín, Veracruz, bajo el
escenario A2 con el modelo HadCM3, reducido con el esquema SDSM.
Figura 11. Proyecciones de episodios con temperatura media anual T>30 °C en Medellín,
Veracruz, entre 1961 y 2099, con el modelo HadCM3, bajo los escenarios A2 y B2.
Esta figura ilustra las diferencias que los distintos escenarios de emisiones tienen sobre las ondas de calor. Como es
de esperarse, el escenario A2 proyecta ondas mucho más frecuentes para finales del siglo.
E scenarios
de cambios locales
665
La temperatura promedio anual para finales del presente siglo en la región de los
humedales de Veracruz y Tabasco podrá incrementarse hasta en 2.5 °C, siendo el
escenario A2 de mayores aumentos que el B2 (figura 12).
Figura 12. Proyecciones de temperatura media anual en Medellín, Veracruz, entre 1961 y
2099, con el modelo HadCM3, bajo los escenarios A2 y B2.
En cuanto a la precipitación, el SDSM es capaz de reproducir el comportamiento
estacional de las lluvias, aunque en ciertos meses subestima el acumulado mensual.
Sin embargo, su capacidad de capturar el patrón anual de precipitación permite tener
confianza en las proyecciones futuras, al menos para el modelo Hadley bajo el escenario A2. En general, la proyección estima un aumento de entre 10 y 15% en las lluvias
en los meses de verano (figura 13). Sin embargo, existen otras proyecciones, con
otros modelos, que sugieren disminuciones en las lluvias. Como se explicó anteriormente, las proyecciones de precipitación acarrean diversos grados de incertidumbre,
que se ven reflejados en los resultados de los distintos modelos.
666
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 13. Proyecciones de cambios en la precipitación en Medellín, Veracruz, de acuerdo con
el modelo HadCM3, bajo el escenario A2, y procesado con el SDSM.
Al contrario de la temperatura, cuando se alimenta el modelo Hadley con los
escenarios de emisiones A2 y B2, la precipitación no muestra contrastes marcados.
Los cambios más evidentes en los humedales veracruzanos y tabasqueños ocurrirán
hacia finales del presente siglo (figura 14).
Figura 14. Series de tiempo de cambios de la precipitación en Medellín, Veracruz, entre 1961
y 2099 para el modelo HadCM3, bajo los escenarios A2 y B2.
E scenarios
de cambios locales
667
6.6.4 Humedales de la costa noroccidental de la
Península de Yucatán, estación Champotón
(04012), Campeche
La estación Champotón se utilizó como referencia para proyectar los posibles cambios en la costa noroccidental de la península de Yucatán. La reducción de escala
de las salidas del modelo Hadley muestra que, bajo el escenario A2, los cambios de
temperatura serán ligeramente menores a 2 °C en los meses de primavera e inicios
del verano (figura 15).
Figura 15. Proyecciones de la temperatura media mensual en Champotón, Campeche, para
los periodos 1961-1990 y 2070-2099, de acuerdo con el modelo Hadley,
bajo el escenario A2.
Estos cambios son menores comparados con los de regiones al norte de México.
Sin embargo, uno de los efectos asociados con el calentamiento es que la distribución
de probabilidades de la temperatura se desplaza hacia valores mayores. Esto quiere
decir que un mayor número de observaciones a lo largo del año se encuentra entre los
valores superiores de temperatura. Como se refleja en la figura 16, el valor del percen668
E scenarios
de cambio climático y tendencias
til 95%2 en la distribución aumenta en más de dos grados en los meses de primavera
bajo cambio climático. Dicha condición se reflejará de forma aún más marcada en
las temperaturas máximas. Por ello, si se combina el incremento de temperatura en
la región de Campeche con las prácticas tradicionales de roza-tumba-quema en la
agricultura, se hace evidente el grave riesgo en que se encuentra la zona en cuanto al
aumento en incendios forestales y pérdida de bosque tropical.
Figura 16. Valores de temperatura media para el percentil 95% en Champotón, Campeche,
de acuerdo con el modelo Hadley, bajo el escenario A2 para 1961-1990 y 2070-2099.
El percentil 95% indica que el 95% de las observaciones se encuentran por debajo de ese valor. Así, la figura
16 muestra que para el mes de junio durante el periodo 1961-1990 el 95% de las proyecciones del modelo
estuvieron por debajo de 30.6 °C; mientras que para el periodo 2070-2099, el modelo proyecta que el 95% de las
observaciones se encontrará por debajo de 31.8 °C.
Como en otros casos, la variable más difícil de reducir en escala mediante técnicas
estadísticas es la precipitación. Sin embargo, su reconstrucción a partir de parámetros de gran escala consigue mostrar las características del ciclo anual, incluyendo
2 El percentil 95% indica que el 95% de las observaciones se encuentran por debajo de ese valor.
E scenarios
de cambios locales
669
un periodo de canícula3 o sequía intraestival en julio. Al igual que en la parte media
de Veracruz, la proyección hacia finales del presente siglo sugiere un aumento en las
precipitaciones de entre 15 y 20% para los meses de verano (figura 17).
Figura 17. Precipitación acumulada mensual simulada con el modelo Hadley, bajo el escenario
A2, para Champotón, Campeche, entre 1961-1990 y 2070-2099.
Uno de los aspectos interesantes es que la forma de llover en la región también
cambia. El número de eventos de precipitación intensa, caracterizados por lluvias superiores a los 50 mm/día, se duplicará y quizá será aún mayor. En efecto, en la zona
de Campeche, las lluvias extremas ocurren generalmente en los meses de verano y,
de acuerdo con las proyecciones realizadas por el modelo Hadley bajo el escenario
A2, durante el mes de agosto estos eventos serán casi tres veces más frecuentes
hacia finales de siglo que en la actualidad (figura 18). Lo anterior tendría impactos
importantes en la erosión sobre regiones deforestadas.
3 Periodo del año en que es más fuerte el calor.
670
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Figura 18. Proyecciones del número de eventos de precipitación muy intensa (pcp > 50 mm/
día) en Campeche (Champotón), bajo el escenario A2, con el modelo Hadley.
6.6.5 Humedales del Caribe, estación La Lagunita
(23019), Quintana Roo
En la parte del Caribe superior de la península de Yucatán, alrededor de Cancún, los
cambios en la temperatura media proyectados por los modelos representan adecuadamente los observados en la estación. Como en los casos anteriores, se proyectan
cambios para finales de siglo bajo el escenario A2 con el modelo Hadley del orden de
2.5 °C. Los cambios se reflejarán en una mayor frecuencia de episodios de ondas de
calor (T>30 °C), que pasarán del promedio actual de ocho, entre julio y agosto, a casi
el doble para finales del siglo XXI (figura 19).
Los aumentos en temperatura y ondas de calor proyectados con el modelo Hadley, reducido espacialmente con la técnica SDSM, son mayores bajo el escenario A2
que bajo el escenario B2, principalmente después de la segunda mitad del presente
siglo (figura 20).
E scenarios
de cambios locales
671
Figura 19. Proyecciones con el modelo HadCM3, bajo el escenario A2, del número de veces
en que T>30 °C en periodos de treinta años, entre 1961-1990 y 2070-2099, en el noreste de
la península de Yucatán.
Figura 20. Proyecciones con el modelo HadCM3 de temperaturas medias anuales en La
Lagunita, Quintana Roo, bajo los escenarios de cambio climático A2 y B2.
Como se ha visto a lo largo del análisis, a finales del siglo XXI, el escenario A2 arroja temperaturas superiores a las
esperadas con el B2.
672
E scenarios
de cambio climático y tendencias
Para esta región del Caribe mexicano se proyectan ligeras disminuciones en la
precipitación de entre 5 y 10% mensual bajo el escenario A2. Dicha tendencia hacia
una disminución de las lluvias es menor bajo el escenario B2 (figura 21). Tal situación
se presenta en otros puntos de la costa Caribe de Mesoamérica. Debe recordarse,
sin embargo, que los ciclones tropicales afectan con frecuencia esta zona y no están
debidamente representados en los modelos. Por lo tanto, incluso bajo la consideración de que los cambios en las precipitaciones sean menores, los huracanes de mayor
intensidad constituyen el factor de mayor incremento del riesgo en la región.
Figura 21. Escenarios de precipitación en el noreste de Quintana Roo
bajo los escenarios A2 y B2.
Con lo anterior, se tiene una primera aproximación de los cambios que experimentarán las regiones donde se localizan los sistemas de humedales bajo un aumento de
temperatura y cambios en la precipitación. Es claro que aún será necesario estimar a
futuro los cambios previstos en las demandas de agua y de servicios ambientales para
poder realizar los escenarios completos de los humedales y mejorar las estimaciones
de riesgo, como función de la amenaza y la vulnerabilidad.
E scenarios
de cambios locales
673
Capítulo 7
Medidas de adaptación
por sitio piloto
Cuauhtémoc León Diez
(Carolina Neri Vidaurri, Andrée Lilian Guigue, Marina Robles García)
Norma Munguía Aldaraca
Pedro Hipólito Rodríguez Herrero
(Rafael Palma Grayeb, Víctor Manuel Mondragón,
Gilberto Chazaro García, Uriel Bando)
Leticia Gómez Mendoza
(Daniel Ocaña Nava, Carolina Neri Vidaurri)
Boris Graizbord
(Emelina Nava García, Anabel Martínez Guzmán,
Jaime Ramírez Muñoz, Raúl Lemus Pérez)
Víctor Magaña Rueda
(Baldemar Méndez Antonio, Ernesto Caetano dos Santos,
Juan Matías Méndez Pérez, Edgar Pérez Pérez)
7.1 Medidas generales de adaptación para la zona
costera del Golfo de México
Cuauhtémoc León et al.
Hasta ahora hemos definido la problemática de los humedales costeros del Golfo de
México y los posibles escenarios para los próximos años de continuar las tendencias actuales, o bajo un enfoque de “seguir como vamos”. A estas tendencias debemos añadir
el efecto sinérgico del cambio climático, lo que incrementa el impacto. También se ha
descrito la forma en que las medidas de adaptación son las principales acciones a realizar
de manera conjunta (gobierno, sociedad, municipios) para reducir la vulnerabilidad de la
zona costera ante el cambio climático. Los diagnósticos realizados no presentan una situación prometedora para la región y a ello se debe sumar la dificultad de hacer respetar
la normatividad vigente. A continuación presentamos en las primeras dos secciones del
capítulo el marco general de las medidas de adaptación y en los siguientes apartados una
descripción detallada de medidas por grupo de sitios piloto.
Puesto que los humedales son zonas de transición entre los ecosistemas terrestres
y marinos, la gran diversidad de interacciones ahí encontradas también influye en el
diseño de medidas de adaptación. Por ello, se privilegió un enfoque multisectorial y
asociado territorialmente con los distintos usuarios. Bajo este enfoque, los humedales
son vistos como un segmento (o usuario) del sistema. Por lo tanto, las medidas toman
en cuenta que la presión sobre el agua y el territorio afectan a los humedales y buscan
disminuirla. Las propuestas generales y específicas de adaptación aquí elaboradas
deben discutirse y acotarse con los actores e instituciones regionales, como parte del
proceso de desarrollo de capacidades, así como de legitimación y apropiación local
de las medidas.
677
7.1.1 Medidas de adaptación generales
El cuadro 1 enlista una serie de acciones de acuerdo con los tres principales componentes identificados en el estudio de medidas de adaptación (territorio, conocimiento
y gestión de la información, y protección civil). Si bien requieren el consenso con los
actores de los sitios piloto, son suficientemente universales como para ser consideradas las primeras acciones de adaptación identificadas para el proyecto. El propósito es
desarrollar capacidades en la región que permitan enfrentar los retos asociados con el
cambio climático y reducir así la vulnerabilidad.
Cuadro 1. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto.
Componentes
Adaptaciones
sugeridas
Identificación y
contacto de agentes,
actores e instituciones
clave.
Identificación de programas sectoriales federales y estatales
con impactos aplicables en el territorio y en las medidas
identificadas.
Restauración y
protección.
Las condiciones de deterioro actual y sus tendencias
son condicionantes de la vulnerabilidad presente y
futura. Intervenir positivamente en la recuperación de
los ecosistemas y restauración de los ciclos hidrológicos
es fundamental. El proyecto debe coadyuvar a que las
instituciones y los programas que pueden influir o están
actuando en la región intensifiquen sus acciones y se
coordinen.
Ordenamientos
territoriales.
Realizados a través de instrumentos de política urbana,
ecológica o ambiental; de protección civil (riesgos);
industriales; de desarrollo rural y planeación estatal, o
sectoriales (agricultura, ganadería, pesca y acuicultura,
entre otros).
Sistema de alerta
temprana.
Acuerdos iniciales para la conformación de centros y
sistemas de alerta temprana. Análisis y reuniones con
centros académicos y representantes comunitarios y
de gobierno. Acuerdos y capacitación con medios de
comunicación y ONG.
Territorio
Conocimiento
y gestión de la
Información
678
M edidas
Elementos del programa de acción
de adaptación por sitio piloto
Cuadro 1. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto
(continuación).
Componentes
Conocimiento
y gestión de la
Información
Conocimiento
y gestión de la
Información
Adaptaciones
sugeridas
Elementos del programa de acción
Sistema de alerta
temprana.
Acciones desarrolladas por instituciones guberna-mentales
encargadas del manejo del riesgo, coordinadas con centros
de investigación. Para su uso deben existir convenios
institucionales adecuados, así como sistemas eficientes
de comunicación. Se deberá contemplar la dimensión
de protección civil (inundaciones-huracanes), agrícolaganadera (variaciones en el clima, sequías), biológica
(plagas), salud (ondas de calor y vectores).
Información y
conocimiento
(desarrollo de
capacidades de
adaptación).
Formación de recursos humanos. Desarrollo de programas
de educación e investigación. Esquemas de comunicación
eficiente.
Desarrollo de
estrategia de
comunicación
(campañas de
comunicación y de
sensibilización).
Contratos con diseñadores, acuerdos y reuniones,
seminarios y conferencias. Sensibilización de actores clave
sobre las tendencias en el deterioro y los escenarios del
cambio climático, así como de las amenazas de la zona.
Usos de información
climática.
Utilización de información desarrollada en centros
de investigación. Para su uso deben existir convenios
institucionales adecuados, así como sistemas eficientes de
comunicación.
Compilación de
información.
Encuentros y concentración de información técnica;
creación de bancos de información de capacidades y
conocimiento técnico.
Identificación y
contacto de agentes,
actores e instituciones
clave.
Desarrollo de acuerdos estratégicos para el impulso
de acciones específicas. Contrato de facilitadores y
mediadores.
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
679
Cuadro 1. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto
(continuación).
Componentes
Adaptaciones
sugeridas
Conformación de los
centros para la gestión
de Información.
Conocimiento
y gestión de la
Información
Protección
civil
Monitoreo de la línea
base.
Elementos del programa de acción
Convenios y acuerdos para la transformación y difusión de
la información y conocimiento para la toma de decisiones
(universidades; poder legislativo, ejecutivo y judicial; medios
de comunicación; población). Investigación y desarrollo
científico: desarrollo de estudios que permitan identificar
los cambios que están ocurriendo en el territorio nacional,
propiciados por el aumento en la variabilidad del clima y sus
efectos en áreas y sectores.
Desarrollo y establecimiento o robustecimiento de un sistema de monitoreo de las condiciones ecológicas y territoriales del la región (evaluación de cambios o deterioro en
el uso de suelo). Para el caso de la costa, el referente sería
impulsar acciones de gran escala (ver http://www.epa.gov/
owow/oceans/nccr/2005/index.html).
Monitoreo de
las acciones de
adaptación.
Inclusión del monitoreo en el marco lógico del proyecto,
tanto para sus etapas (objetivos, Indicadores y supuestos),
como para sus actividades, productos y resultados. Ver sección 7.2.
Impulso de las acciones
de adaptación en
conjunto con la
estructura institucional
de protección civil
como asociado inicial
del proyecto.
Promover y entender que existe un gran potencial de realizar las acciones si se vinculan con el tema de protección civil. El discurso ambiental está en transición hacia una nueva
etapa, donde su valoración está intrínsecamente asociada
con la protección civil.
Fuente: elaboración propia.
Las acciones para reducir la vulnerabilidad pueden realizarse desde el punto
de vista de los sectores afectados por el cambio climático. El cuadro 2 enlista las
principales áreas y medidas de adaptación sectorial, lo suficientemente generales
como para poderse aplicar en la zona costera del Golfo de México.
680
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Cuadro 2. Áreas o sectores vulnerables y medidas de adaptación que pueden
aplicarse en el Golfo de México.
Áreas o sectores vulnerables y medidas de adaptación
Cambios en prácticas agrícolas: introducción de nuevas tecnologías, irrigación, uso de diferentes variedades,
planeación agrícola, uso de esquemas agroambientales (1).
Cambios en prácticas ganaderas: reubicación de abrevaderos, cambios en regímenes de pastoreo y manejo
de hatos, utilización de especies y/o razas alternativas, y manejo de escorrentía.
Cambios en prácticas pesqueras: acuicultura sustentable, planeación y ajuste de capturas.
Cambios y planeación en la producción de energía e industria limpia.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para mejorar el equilibrio térmico de
los inmuebles (2).
Información y conocimiento (desarrollo de capacidades de adaptación).
Manejo integral de cuencas y planicies inundables.
Manejo y protección costera.
Manejo del recurso agua: uso eficiente del recurso (3).
Medidas estructurales (evitar daños, potenciar la recarga del acuífero, proteger y conservar los suelos): barreras, muros de estabilización y control de avenidas; mantenimiento del sistema de drenaje: terrazas para
agricultura, rehabilitación y conservación de agostaderos.
Protección civil (4).
Protección y conservación de suelos en zonas de cultivo de ladera.
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación, restauración (5).
Manejo del riesgo: implementación de seguros.
Sistema de alerta temprana.
Sistema de monitoreo meteorológico.
Uso de energías renovables: cambios en la generación de energía eléctrica.
Uso de suelo (ordenamiento territorial) (6).
Usos de la información climática para la planeación.
1.
Siembra de cultivos y variedades con bajos requerimientos de agua. Diversificación y reconversión de productos. Mejora de prácticas de cultivo (fechas de siembra, técnicas de arado, riego, fertilización, etcétera).
Uso de especies de raíces profundas, perennes, con bajos requerimientos de agua y tolerantes a la sal, entre
otros. Rotación de cultivos y otros métodos relacionados. Desarrollo de variedades mejor adaptadas a los
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
681
2.
3.
4.
5.
6.
cambios en las condiciones del suelo. Almacenamiento preventivo de granos y alimentos para compensar
cosechas magras. Cultivo de conservación (sin uso del arado). Diversificación de especies y variedades de
cultivos.
Mejora de sistemas de aislamiento, ventilación y control de temperatura en viviendas para reducir morbilidad y mortalidad por deshidratación durante ondas de calor. Construcción o conversión (retrofitting) de
edificios para mejorar su eficiencia energética y equilibrio térmico; mejora de la ventilación en viviendas.
Captura y almacenamiento de agua de lluvia, reutilización de agua para la agricultura y la ganadería.
Construcción de un atlas de riesgo; mejora de las infraestructuras de transporte para facilitar la evacuación
en situaciones de desastre, así como para amortiguar la perturbación de ecosistemas y fragmentación de
poblaciones silvestres.
Reforestación de zonas urbanas para proveer sombra y amortiguar el incremento de la temperatura. Implementación de barreras naturales para evitar daños. Establecimiento y mantenimiento de porcentajes
mínimos de cubierta arbórea en tierras de uso agropecuario, para proteger la capacidad de los ecosistemas
de ofrecer servicios ambientales. Establecimiento de corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y áreas de vegetación natural conservada, para permitir la migración de especies y propágulos1 a zonas
climáticamente más aptas. Prevención de invasiones, control y erradicación de especies invasoras. Prevención y control de incendios forestales. Reducción de la contaminación orgánica (especialmente nitratos)
en ecosistemas acuáticos, para evitar la eutrofización (que se potencia con el ascenso de la temperatura)
y conservar hábitats, biodiversidad (incluyendo especies de importancia comercial) y calidad del agua.
Reubicación de asentamientos humanos que se encuentran en zonas de riesgo.
Fuente: elaboración propia.
7.1.2 Medidas de adaptación y su relación con
sectores o áreas
El cuadro 3 presenta una relación entre las medidas de adaptación y los propios sectores. Si bien no es exhaustiva, permite identificar un instrumento de planeación. Es
interesante notar que tanto los ecosistemas de humedales como las zonas urbanas
y rurales se relacionan con el mayor número de medidas. Ello puede resultar en un
efecto sinérgico de reducción de vulnerabilidad.
1 Propágulos: modalidad de reproducción asexual en vegetales por la que se obtienen nuevas plantas y órganos
individualizados.
682
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
683
x
 
 
Cambios en prácticas pesqueras: acuicultura
sustentable, planeación y ajuste de capturas.
Cambios y planeación en la producción de
energía e industria limpia.
Adecuar códigos de construcción y ajustar
la infraestructura existente para mejorar el
equilibrio térmico de los inmuebles (2).
x
x
 
Manejo integral de cuencas y planicies
inundables.
Manejo y protección costera.
Manejo del recurso agua: uso eficiente del
recurso (3).
x
 
Cambios en prácticas ganaderas: reubicación
de abrevaderos, cambios en regímenes de
pastoreo y manejo de hatos, utilización de
especies y/o razas alternativas, y manejo de
escorrentía.
Información y conocimiento (desarrollo de
capacidades de adaptación).
 
humedales
Ecosistemas de
Cambios en prácticas agrícolas: introducción
de nuevas tecnologías, irrigación, uso de
diferentes variedades, planeación agrícola,
uso de esquemas agroambientales (1).
Áreas o sectores vulnerables/medidas de
adaptación
x
 
x
x
x
 
 
 
 
rurales
urbanas y
Zonas
 
 
x
x
 
 
x
 
 
Pesca
 
 
 
x
x
 
 
 
 
pública
Salud
x
 
x
x
 
 
 
 
x
Agricultura
Cuadro 3. Relación entre las medidas de adaptación y los sectores vulnerables.
x
 
x
x
 
 
 
x
 
Ganadería
 
 
x
 
x
 
 
 
 
Turismo
Industria
 
 
x
x
x
x
 
 
 
manufactura)
(PEMEX,
 
 
x
x
 
x
 
 
 
Energía
Biodiversidad
 
 
x
x
 
 
 
 
 
y ecosistemas
684
M edidas
de adaptación por sitio piloto
 
 
x
 
 
x
 
x
x
Protección civil (4).
Protección y conservación de suelos en zonas
de cultivo de ladera.
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación, restauración (5).
Manejo del riesgo: implementación de
seguros.
Sistema de alerta temprana.
Sistema de monitoreo meteorológico.
Uso de energías renovables: cambios en la
generación de energía eléctrica.
Uso de suelo (ordenamiento territorial) (6).
Usos de la información climática para la
planeación.
Nota: las anotaciones son las mismas que las del cuadro 2.
Fuente: elaboración propia.
x
humedales
Ecosistemas de
Medidas estructurales (evitar daños, potenciar la recarga del acuífero, proteger y
conservar los suelos): barreras, muros de estabilización y control de avenidas; mantenimiento del sistema de drenaje: terrazas para
agricultura, rehabilitación y conservación de
agostaderos.
Áreas o sectores vulnerables/medidas de
adaptación
x
x
x
 
x
x
x
 
x
x
rurales
urbanas y
Zonas
 
 
 
 
x
 
 
 
 
 
Pesca
x
 
 
 
x
 
 
 
 
 
pública
Salud
x
x
 
x
x
x
 
x
 
 
Agricultura
x
x
 
 
 
 
 
x
 
x
Ganadería
Cuadro 3. Relación entre las medidas de adaptación y los sectores vulnerables (continuación).
x
x
 
x
x
 
 
 
 
x
Turismo
Industria
x
x
x
x
x
x
 
 
 
x
manufactura)
(PEMEX,
x
 
x
x
x
 
 
 
 
 
Energía
Biodiversidad
x
x
 
x
 
 
x
 
 
 
y ecosistemas
7.1.3 Esquema general de acciones por amenaza
Para la definición de las medidas de adaptación se desarrolló un esquema que considera de manera general a los humedales del Golfo de México. En él se presentan los
aspectos mínimos necesarios para definir medidas de adaptación, considerando como
punto central la variabilidad del clima y las amenazas principales identificadas por el
componente de proyecciones de cambio climático de este estudio2.
1. Se identifican las principales amenazas climáticas: aquellos eventos hidrometeorológicos que causan impactos negativos en la región y que podrían representar
mayores riesgos ante el cambio climático.
a) Aumento del nivel del mar.
b) Cambios en el ciclo anual del clima (variaciones de todo tipo, escala espacial o
temporal que no se consideren extremas; por ejemplo, retrasos en las lluvias o
pequeños incrementos en temperatura).
c) Eventos extremos de calor.
d) Eventos extremos de lluvia.
e) Sequías.
f) Huracanes.
2. Un aspecto de gran importancia es la definición de qué sistemas, sectores, áreas,
regiones o poblaciones pueden ser afectados por estas amenazas. En otras palabras, se responde a quiénes son vulnerables.
3. Se propone también de entre los sectores o regiones a qué se es vulnerable, y se
especifican los posibles impactos asociados con el sector y la amenaza identificada, la cual puede tratarse de inundaciones, aumentos en la demanda, o disminución en la eficiencia de abasto de agua o de transmisión de energía eléctrica, entre
otros.
4. Para poder proponer alguna medida general de adaptación hace falta responder y
reconocer el porqué se es vulnerable o, en otras palabras, qué procesos históricos,
2 Magaña et al., 2007.
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
685
socioeconómicos o políticos han hecho que un sistema, área o sector sea susceptible de sufrir daños por una amenaza determinada. Con esta información mínima
se tienen las pautas necesarias para la definición de las medidas de adaptación, y
es relativamente sencillo visualizar las debilidades o deficiencias del sistema y, por
tanto, su vulnerabilidad.
Una vez definidos estos elementos, se proponen las medidas de adaptación y algunos de los principales factores a considerar para llevarlas a cabo. Cabe recordar que
en todo proceso de adaptación, la participación activa y continua de los actores clave
es fundamental. Los cuadros 4, 5, 6, 7 8 y 9 fueron elaborados con los comentarios
de todos los consultores de este proyecto y los resultados de un taller participativo
con actores clave de la región, llevado a cabo en el puerto de Veracruz. En ellos se
pueden apreciar las medidas de adaptación respectivas para cada amenaza.
686
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Z ona
Ganadería.
de
M éxico
Reubicar y planear.
Preservar las variedades en el cultivo de especies (variabilidad genética).
Reubicar y planear.
Promover razas de ganado fuertes y adaptadas.
Fomentar ganadería intensiva, no extensiva.
Pérdida de
superficie para
cultivar.
Pérdida de
superficie.
Ineficiente
infraestructura. Mejorar la infraestructura existente.
Promover la acuicultura sustentable, con planeación y ajuste de capturas.
Reducir la contaminación orgánica (especialmente de nitratos) en ecosistemas acuáticos para
evitar la eutrofización (que se potencia con el ascenso de la temperatura) y conservar hábitats, biodiversidad (incluyendo especies de importancia comercial) y calidad del agua.
Realizar ordenamientos pesqueros por laguna que impulsen acuicultura y maricultura.
Implementar estrategias para disminuir la intrusión salina.
3 Un planeta con temperaturas más elevadas resultará en cambios en el clima a escala global, que incluyen un ciclo hidrológico más intenso, deshielo de los casquetes
polares y glaciares, y aumentos en el nivel del mar. Un aumento del nivel del mar de uno o dos metros podría traer severas consecuencias para las regiones costeras.
Fuente: elaboración propia.
Inundación.
Agricultura.
G olfo
Inundación.
Fallas en servicios urbanos por inundación.
Contaminación
Exposición a
cambios en
la calidad del
agua.
Construir obras de ingeniería costera: barreras, diques, muros de estabilización, control de
avenidas, protección.
Mantener el sistema de drenaje.
Mejorar la planeación urbana y los sistemas de drenaje (rediseño).
Reubicar asentamientos humanos.
Ubicación y
exposición
(topografía).
Zonas urbanas Inundación.
y rurales.
Adaptaciones sugeridas
Ubicación y
exposición.
Por qué son
vulnerables
Garantizar espacios vecinos para migración de especies.
Edificar barreras de protección.
Otorgar el carácter de protegida a las zonas de humedales.
Restaurar municipios con problemas de inundación utilizando modelos matemáticos.
Controlar la cantidad y calidad de agua que llega a ecosistemas costeros.
Buscar estrategias de conservación de humedales (refugio de especies).
Restituir ecosistemas de agua dulce por marinos.
A qué son vulnerables
Intrusión de agua salada
Ecosistemas
en acuíferos costeros.
de humedales. Pérdida total o parcial del
humedal.
Quiénes son
vulnerables
Aumento
en el nivel
del mar
Pesca.
Amenaza
Cuadro 4. Aumentos en el nivel del mar3.
Salud pública.
costera del
687
688
M edidas
de adaptación por sitio piloto
A qué son vulnerables
Adaptaciones sugeridas
Reducción de la capacidad de generación
hidroeléctrica debido a alteraciones en las
precipitaciones y a mayor asolvamiento
de presas y embalses.
Inundación.
Energía
Zonas
urbanas y
rurales
4 El cambio climático traerá diversas consecuencias de región en región, como cambios en la variabilidad climática. Tal es el caso de las modificaciones en el inicio y fin de la
temporada de lluvias. Si bien los sistemas están adaptados a ciertas condiciones predominantes en el clima, se tendrán que identificar nuevas formas de adaptación ante el cambio
climático.
Ubicación y
exposición
(topografía).
Modificar plantas de tratamiento de agua potable y residual.
Promover edificaciones ambientalmente eficientes.
Mejorar la red de drenaje pluvial y de aguas negras en las ciudades. Reutilizar el
agua.
Promover la captación de agua pluvial en el ámbito doméstico.
Realizar cambios en la producción de energía y planeación hacia una industria
limpia.
Usar energías renovables.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Rehabilitar o eliminar presas.
Prever aumento de demanda de hidrocarburos para energía eléctrica.
Promover cambios en la legislación para permitir el uso de energías alternativas
(certificación).
Agricultura
Tipos de
construcción.
Sequía agrícola Introducir nuevas tecnologías y variedades, irrigación, planeación agrícola y uso
de esquemas agroambientales.
Cambios en
Desarrollar variedades mejor adaptadas a los cambios en las condiciones del
condiciones
suelo.
agroclimáticas. Almacenar granos y alimentos para compensar cosechas magras.
Características Conservar, reforestar y restaurar.
generales
Prever migraciones por efectos secundarios en sectores como el turismo.
de los ciclos
Detectar y conservar hábitats y especies clave.
biológicos.
Por qué son
vulnerables
Expansión de plagas por retraso del inicio
de lluvias y temperaturas altas.
Modificación de regiones ecológicas,
migración de ecosistemas a mayores
latitudes y altitudes. Desfase del ciclo
Biodiversidad hidrológico. Transformación de hábitats
y
a tasas que excederán sus capacidades
ecosistemas naturales de adaptación. Invasión de
especies exóticas que modificarán
estructuras tróficas y eliminarán especies
nativas.
Quiénes son
vulnerables
Fuente: elaboración propia.
Cambios
en el ciclo
anual del
clima
Amenaza
Cuadro 5. Cambios en el ciclo anual del clima4.
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
689
Prevenir y controlar incendios forestales.
Establecer y mantener porcentajes mínimos de cubierta arbórea
en tierras de uso agropecuario, para proteger la capacidad de los
ecosistemas de ofrecer servicios ambientales.
Establecer corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y
áreas de vegetación natural conservada, para permitir la migración
de especies y propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Reforestar de manera exitosa.
Usar reservas territoriales.
Utilizar variedades con bajos requerimientos de agua.
Irrigar con altas eficiencias.
Planear en el sector agrícola.
Usar seguros.
Mejorar prácticas de cultivos: cambios en fechas de siembra,
sistemas de irrigación, agricultura de invernaderos.
Hacer cambios hacia una ganadería intensiva.
Las altas
temperaturas
provocan
estrés en la
vegetación,
combinado
con el uso
indiscriminado
de fuego.
Las altas
temperaturas
provocan estrés
y marchitan los
cultivos.
Energía
Agricultura
5 La temperatura en los últimos cien años ha ido en aumento. En México, esta condición varía de región en región. Las temperaturas altas causan situaciones fuera de lo
que se considera confort tanto para los humanos como para los ecosistemas terrestres y marinos.
Riesgo incremental de siniestros.
Incendios.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Formar recursos humanos.
Infraestructura
y sistemas de
transmisión
ineficientes.
Aumento de demanda y eficiencia de
transmisión de energía eléctrica.
Salud pública
Biodiversidad y
ecosistema
Construir o convertir (retrofit) edificios para mejorar su eficiencia
energética y su equilibrio térmico.
Mejorar sistemas de aislamiento, ventilación y control de
temperatura en viviendas.
Reforestar zonas urbanas para proveer sombra y amortiguar el
incremento de la temperatura.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Características
físico-biológicas
en niños y
ancianos,
principalmente.
Incremento de la morbilidad y la mortalidad
por ondas de calor y deshidratación.
Incremento y redistribución de
enfermedades transmitidas por vectores,
como mosquitos (paludismo, dengue).
Descomposición de alimentos.
Adaptaciones sugeridas
Por qué son
vulnerables
A qué son vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Fuente: elaboración propia.
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Cuadro 6. Eventos extremos de calor5.
690
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Tipos de construcción.
Daños a infraestructura
(torres y cables de
transmisión eléctrica).
Daños a infraestructura
(petroleras y petroquímicas, Tipos de construcción.
manufacturas).
Energía
Industria
6 Si bien los modelos climáticos muestran que para el sur del país la tendencia es hacia mayor precipitación y menor hacia el norte, hay gran certeza de que los eventos
extremos de lluvia aumentarán en intensidad y frecuencia. Por ello se debe poner atención particular a las lluvias intensas y sus efectos.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Tipos de construcción.
Daños a infraestructura
(caminos, puentes, puertos,
aeropuertos, ferrocarriles,
torres y cableado de
comunicación).
Usar diferentes variedades.
Planeación agrícola.
Mejorar prácticas de cultivos: cambios en fechas de siembra, rotación
de cultivos.
Incrementar la calidad de la información y el conocimiento (desarrollo
de capacidades de adaptación).
Implementar sistemas de alerta temprana.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Transporte y
comunicaciones
Aumento de vectores.
Características
topográficas.
Mayor incidencia de
enfermedades infecciosas
relacionadas con la calidad
del agua (cólera, tifoidea).
Salud
Falta de capacidad en el
sistema de drenaje.
Construir barreras, muros de estabilización y medidas de control de
avenidas.
Mantener el sistema de drenaje.
Usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
Mejorar la infraestructura en ciudades (drenaje).
Desazolvar las bocas de ríos regularmente.
Promover el uso de seguros.
Adaptaciones sugeridas
Inundaciones.
Inundaciones.
Zonas urbanas y
rurales
Ubicación y exposición en
zonas bajas.
Por qué son vulnerables
Agricultura
A qué son vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Fuente: elaboración propia.
Eventos
extremos
de lluvia
Amenaza
Cuadro 7. Lluvias intensas o extraordinarias6.
Z ona
costera del
G olfo
Ganadería
Agricultura
Zonas urbanas y
rurales
Biodiversidad y
ecosistemas
Quiénes son
vulnerables
Por qué son
vulnerables
Falta de agua para el
ganado.
Falta de agua para los
cultivos.
Disminución en la
disponibilidad de agua
para la población.
Ineficiente manejo
de agua.
Ineficiente manejo
de agua.
Ineficiente manejo
de agua.
Disminución de
Bajo nivel de
las capacidades de
resiliencia.
renovación de servicios
ambientales de los
ecosistemas.
Estrés hídrico de los
ecosistemas.
A qué son vulnerables
Mejorar las prácticas: reubicar abrevaderos, cambiar en regímenes de pastoreo y manejo
de hatos, utilizar especies y razas alternativas.
Implementar tecnologías como jagüeyes, construcción de represas y reactivación de
canales de agua.
Irrigar de manera eficiente (riego por goteo).
Captar y almacenar agua de lluvia; reutilizarla.
Considerar el reordenamiento con la inclusión de los efectos del cambio climático.
Realizar estudios de mercado previos al producto.
Usar pronósticos y desarrollar un sistema de difusión de información oportuno.
Realizar diagnósticos de sequías.
Recuperar suelos y sembrar árboles frutales.
Usar el recurso de manera eficiente.
Potenciar la recarga de acuíferos.
Implementar normas de construcción de viviendas y unidades habitacionales que
obliguen a dejar zonas de recarga de acuíferos dentro de la reserva territorial de uso
urbano.
Desarrollar un mecanismo de adaptación que considere la indemnización a futuro por
pérdida total de las zonas que, en términos legales, son propiedad privada.
Aprovechar el caudal de uso urbano aguas abajo de la cuenca (es un caudal invariable).
Establecer corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y áreas de vegetación
natural conservada para permitir la migración de especies y propágulos a zonas
climáticamente más aptas.
Considerar el reordenamiento territorial con la inclusión de los efectos del cambio
climático.
Restaurar corredores biológicos.
Mejorar el diagnóstico de las zonas de sequías mediante el fortalecimiento del sistema
de registros hidrometeorológicos de la CONAGUA.
Adaptaciones sugeridas
7 La disminución de precipitación por debajo de un valor “normal” o promedio se define como sequía meteorológica. Este tipo de sequía se manifiesta en la superficie como
una disminución en escurrimientos, caudales de ríos y niveles de almacenamiento de presas, afectando la disponibilidad de agua para diversos sectores.
Sequías
Amenaza
Cuadro 8. Sequía7.
Fuente: elaboración propia.
de
M éxico
691
692
M edidas
de adaptación por sitio piloto
8
Por qué son
vulnerables
nivel de
Disminución de las capacidades de Bajo
renovación de servicios ambientales resiliencia.
de los ecosistemas.
Afectaciones a regiones ecológicas.
A qué son vulnerables
Establecer corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y áreas de vegetación
natural conservada para permitir la migración de especies y propágulos a zonas
climáticamente más aptas.
Considerar el reordenamiento con la inclusión de los efectos del cambio climático.
Restaurar los corredores biológicos.
Adaptaciones sugeridas
Industria
Turismo
Daños a infraestructura (petrolera y Tipos de
petroquímica, manufactura).
construcción
Reducción del valor de inmuebles e
infraestructura urbana.
Riesgos incrementales de
afectaciones a infraestructura
costera.
Ubicación y
exposición.
Tipos de
construcción.
Ante el cambio climático, eventos hidrometeorológicos como los huracanes se verán modificados en su ocurrencia e intensidad. Según los modelos climáticos, para la
región de México se espera que reduzcan en número, pero aumenten en intensidad. Este tipo de eventos causa severos daños en las regiones costeras cada año.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Considerar gastos probables de restauración ante eventos extremos; pueden incluirse
dentro de la evaluación de impacto ambiental.
Estimar el producto neto ecológico en la construcción de infraestructura turística,
considerando los escenarios climáticos.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Tipos de
construcción.
Energía
Daños a infraestructura.
Mejorar la infraestructura existente.
Usar seguros.
Revisar e implementar nuevas reglas de construcción que incluyan periodos de retorno más
largos y considerando eventos extremos recientes.
Impulsar organismos de integración regional para la implementación de medidas (por
ejemplo, ACI: área costera integral).
Exposición.
Tipos de
construcción.
Suspensión de actividades.
Daños a infraestructura (caminos,
puentes, puertos, aeropuertos,
Transporte y
torres y cableado de
comunicaciones ferrocarriles,
comunicación) por inundaciones y
vientos fuertes.
Pesca
Promover la acuicultura sustentable con planeación y ajuste de capturas.
Implementar programas de acuicultura, considerando estudios de viabilidad.
Explorar la relación de la pesca con las otras amenazas e implementar políticas públicas
para incrementar la viabilidad económica del sector.
Evaluar el servicio ambiental de pesquerías, poblaciones y biodiversidad en arrecifes.
Mejorar la infraestructura existente.
Promover el uso de seguros.
Incrementar las capacidades y atribuciones del sistema de protección civil.
Inundaciones.
Ubicación y
Desarrollar local, municipal y estatalmente la prevención de efectos de los huracanes
exposición
(implementar programas de protección civil contra huracanes en zonas con vulnerabilidad
Zonas urbanas y Riesgo de daños a infraestructura
(topografía)
actual o futura).
rurales
urbana, a la vida de los pobladores y Infraestructura Fomentar el FOPREDEN.*
a sus bienes.
inadecuada.
Mejorar los atlas de riesgo y diseñarlos en municipios que no cuentan con ellos.
Aplicar normas de construcción sobre zona federal en la costa. No recuperar zonas
afectadas por ciclones previos.
Aplicar los ordenamientos territoriales.
Biodiversidad y
ecosistemas
Quiénes son
vulnerables
* Fondo para la Prevención de Desastres Naturales.
Fuente: elaboración propia.
Huracanes
Amenaza
Cuadro 9. Huracanes8.
7.1.4 Ejemplo de medidas de adaptación específicas
A continuación se exponen algunos elementos que demuestran la imperiosa necesidad
de considerar y explorar con mayor profundidad las condiciones climáticas y paisajísticas de cada región o sitio piloto. En los estudios realizados para esta publicación se ha
logrado una primera aproximación para caracterizar los sitios piloto y las principales
amenazas a las que se enfrentan. Sin embargo, las medidas de adaptación deben
puntualizarse y poder expresarse como acciones tangibles, con objetivos, metas e
indicadores para su monitoreo y evaluación. En el cuadro 10 se presentan algunas de
las principales medidas de adaptación susceptibles de aplicarse en la zona norte del
Golfo de México (sitios piloto con alta vulnerabilidad de sequía o bien para aquellos
afectados por la variación del ciclo anual de lluvias). Estas medidas fueron tomadas
del proyecto realizado en Tlaxcala9, así que son válidas para zonas de montaña y
semiáridas (Tamaulipas).
Derivado de los reportes de estudios previos, se puede inferir también que al
menos en la parte norte del Golfo de México serían previsibles disminuciones de la
productividad de los pastos10, así como de la productividad agrícola11. Aunado a
ello, la falta de información sobre el comportamiento de los acuíferos agrava la crítica
situación, como lo demuestra el estudio comparativo México-Argentina con respecto
a Tamaulipas: “… una vez más puede observarse que el municipio de González tiene
serios problemas para satisfacer la demanda de agua superficial, donde la cobertura
durante cada temporada de estiaje es de sólo 25% del total de la demanda (....).
Otros centros que utilizan agua subterránea, como los municipios de Tampico, Ciudad
Madero, Mante y González muestran serios problemas relacionados con el muy bajo
porcentaje de cobertura. El agua subterránea es un tema que requiere mayor investigación y el establecimiento de un programa permanente de monitoreo, para deter9 Landa, 2006.
10 Reportes preliminares de los estudios sobre cambio climático en Veracruz, que evalúan las zonas y actividades
ganaderas. Vulnerabilidad de la ganadería bovina del estado de Veracruz ante el cambio climático (Sonia Salazar
Lizán, Antonio Hernández Beltrán, Sergio Muñoz Melgarejo, Belisario Domínguez Mancera, Patricia Cervantes
Acosta y Carlos Lamothe Zavaleta).
11 Los resultados preliminares muestran reducciones importantes en los rendimientos de muchos de los cultivos
analizados, particularmente el maíz, pero también sorgo y trigo. Uno de los propósitos de nuestra investigación
futura es decidir cuáles cultivos pueden sembrarse en el mismo terreno y en qué proporción. Gay, 2006.
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
693
Cuadro 10. Propuesta de medidas de adaptación frente a condiciones de
cambio climático para zonas áridas.
1. Incrementar la capacidad de almacenamiento ante lluvias extremas y extraordinarias a partir de la recuperación de cuerpos de agua superficiales
• Rescate de cuerpos de agua y obras de almacenamiento.
• Diseño de un plan de largo plazo para el mantenimiento y la rehabilitación de
manantiales.
2. Favorecer la recarga hídrica
• Rescate y protección de zonas de recarga, articulación con la estrategia estatal de
áreas naturales protegidas.
• Fortalecimiento de las actividades ecoturísticas.
• Revisión y aplicación de instrumentos de gestión.
• Manejo de lapsos de veda y extracción acordes con las necesidades impuestas por
las condiciones de cambio climático previstas en los escenarios (rotar la extracción
de acuerdo con prioridades e índices de sobreexplotación).
3. Garantizar la existencia de reservorios y fuentes secundarias para consumo humano
• Conservación y rehabilitación de lagunas y cuerpos superficiales (saneamiento integral).
• Fortalecimiento de programas actuales de redistribución y cultura urbana.
• Mejoramiento de la calidad de tratamiento y ajuste de técnicas a las nuevas condiciones climáticas.
4. Fortalecer las capacidades regionales y locales por medio del rescate de estrategias
desarrolladas en zonas rurales frente a la escasez de agua
• Rescate de tecnologías y acuerdos comunitarios para el almacenamiento y uso
eficiente del agua.
• Diseño de planes de capacitación a distintos niveles encaminada a la prevención y
acción.
• Capacitación para la autogestión.
5. Otras acciones transectoriales encaminadas a la mitigación y adaptación frente a
condiciones de cambio climático
• Consolidación de una institución estatal enfocada a la gestión integral del riesgo.
• Coordinación intersectorial.
• Aprovechar oportunidades de sinergia en consejos de microcuencas, cruzadas por
el bosque y el agua, consejos forestales y ordenamientos territoriales.
Fuente: Landa, 2006.
694
M edidas
de adaptación por sitio piloto
minar la disponibilidad del agua y su calidad en cada acuífero utilizado en la cuenca.
Actualmente existe muy poca información sobre el comportamiento de todos los
acuíferos de la cuenca durante el desarrollo del ciclo hidrológico” 12.
Es importante reafirmar que en los estudios requeridos se debe contemplar no
sólo el modelaje del clima y sus efectos locales en los distintos sectores (particularmente en el nivel de cuenca y ecosistema), sino sobre todo incluir las acciones de difusión y diálogo con distintos actores (a través de talleres, grupos focales, seminarios
y reuniones, entre otros), donde se garantice la discusión sobre el cambio climático y
su influencia en las decisiones sociales y de políticas.
12 Gay, 2006.
Z ona
costera del
G olfo
de
M éxico
695
7.2 Marco organizativo y monitoreo de las medidas de adaptación
Cuauhtémoc León et al.
7.2.1 Marco organizativo
La propuesta para el desarrollo de las medidas de adaptación en los humedales
costeros del Golfo de México tiene cuatro fases y comienza por la realización de
diagnósticos y escenarios para evaluar los impactos potenciales y analizar la vulnerabilidad (fase 1). De ahí se definen las estrategias de adaptación (fase 2) y se procede
a su implementación (fase 3). Si resultan ser un éxito, se demuestra que las medidas
son viables y pueden ser parte de políticas públicas o programas a escalas mayores;
es decir, se institucionalizan (fase 4). Para esto es necesario impulsar y desarrollar
acuerdos institucionales que garanticen, por un lado, financiamiento y, por otro, la
legitimidad de dichas medidas. Las fases descritas corresponden a las siguientes etapas de priorización: preparación (fase 1-2), fortalecimiento (fase 2-3), y operación y
consolidación (fase 3-4). La figura 1 es un diagrama de flujo que explica cada fase y
los resultados finales del proceso.
Los pasos a seguir pueden representarse en una matriz programática que identifica los principios y niveles organizativos asociados con las medidas, las condiciones
institucionales de origen y una serie de actividades, metas e indicadores necesarios
para cumplirlos. El cuadro 1 resume el proceso de elaboración e instrumentación de
las medidas, además de las acciones de monitoreo y evaluación.
696
Figura 1. Diagrama de flujo que explica cada fase y los resultados finales del proceso.
Adaptación al cambio climático para humedales del Golfo de México
(diagrama de flujo para desarrollar y promover una medida por sector o amenaza)
Fase 1
Estudios técnicos
y científicos
Diagnósticos
Evaluación de
vulnerabilidad a la
variabilidad climática
actual y futura
(generación de
escenarios climáticos
por sector)
Fase 2
Fase 3
Identificar medidas de
adaptación potenciales
(mediante talleres,
encuestas, reuniones,
entre otros)
Implementar medidas
de adaptación
(proyectos demostrativos
con éxito y piloto)
Desarrollado por
instituciones
académicas,
gubernamentales (a
través de programas
preexistentes), privadas
(cámaras, fundaciones),
sociales (ONG,
cooperativas, gremios)
Formación de
capacidades
Desarrollado por
instituciones académicas
Desarrollado por
instituciones académicas,
gubernamentales (a
través de programas
preexistentes), privadas
(cámaras, fundaciones),
sociales (ONG,
cooperativas, gremios)
Fase 4
Institucionalización
Impulso y desarrollo
de acuerdos y
recomendaciones
Lograr decretos y
creación de programas,
normas, modelos y
proyectos por distintos
órdenes de gobierno y
sectores.
Generalización y
expansión del proyecto
(garantías,
financiamiento)
Garantizar la participáción de actores clave a lo largo de todo el proyecto
Fuente: elaboración propia, con base en lo propuesto por Landa, 2006, en el proyecto de Tlaxcala.
7.2.2 Monitoreo y evaluación
En la sección 2.4 se introdujo el concepto de manejo adaptativo de los recursos
naturales, que consiste básicamente en un proceso cíclico, en el cual participan tanto
científicos como sociedad: síntesis del conocimiento base, definición del ecosistema,
identificación de objetivos, desarrollo e implementación de estrategias de manejo,
y monitoreo de los resultados (ver figura 2 de dicha sección). Bajo este enfoque se
pueden medir los impactos de las medidas a largo plazo, y por lo tanto se propone
como rector del conjunto de elementos conceptuales del proyecto. Dado que en la
superficie de los humedales se desarrollan complejos procesos influenciados por el
cambio climático, es importante mantener una perspectiva de los niveles de influencia de las acciones impulsadas, y considerar esquemas de monitoreo y evaluación de
las mismas (figura 2).
M arco
organizativo y monitoreo
697
698
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Niveles
organizativos
asociados con
las medidas de
adaptación
Principios
2. La participación
de la sociedad para
la apropiación de
las propuestas y
los objetivos de las
medidas.
Instrumentación
La
(institucionalización administración
y operación).
del proyecto
o programa
principal,
operado
con fondos
específicos
(comité, consejo
o grupos de
trabajo; INEGEF).
Impulsar y crear
las capacidades
para adaptarse
(minimizar
impactos y
1. El impulso y
optimizar
promoción inicial
por quienes cuentan oportunidades).
con recursos
financieros (sede
del proyecto).
La adaptación
se realiza en dos
niveles:
Se requiere analizar y
sistematizar las condiciones
preexistentes y tendencias.
Incluye programas y
estructuras que coadyuvan
en las medidas y los
esfuerzos propuestos.
Capitalizar estructuras y
esfuerzos sociales previos.
 Condiciones institucionales de origen
Administración de
recursos financieros
y búsqueda de
contrapartidas.
Actividades
asociadas con
las instituciones
y las medidas
de adaptación
impulsadas
Medidas genéricas:
identificación
de barreras
institucionales,
propuestas de
cambios legales
y normativos;
reglas de operación
de programas
federales, estatales
y municipales, que
permitan incluir
la dimensión de
la adaptación al
cambio climático.
Cuadro 1a. Matriz programática de las acciones de adaptación al cambio climático en los
humedales del Golfo de México, condiciones institucionales de origen.
Inicio de proyectos
conjuntos e
inversión anual de
otras fuentes en la
acción o proyecto.
Creación de
programas de
gobierno estatal
o municipal, y
universitarios.
El proyecto deberá
verse a sí mismo
como un facilitador,
mediador y
promotor de
acciones conjuntas
y coordinadas.
Mainstreaming:
inversión del
proyecto e
inversión de
contrapartes.
Resultados o
metas por región,
estado o sitio
piloto
Inversión en el proyecto e
inversión de otras fuentes.
Programas de adaptación
oficiales iniciados y totales por
año (sectores, distintos órdenes
de gobierno y ONG).
Complementariedad de acciones
conjuntas.
Convenios de cooperación
interinstitucional firmados.
Indicadores
M arco
organizativo y monitoreo
699
Fuente: elaboración propia.
Niveles
organizativos
asociados con
las medidas de
adaptación
Medidas de
adaptación (pueden
ser vistas como
proyectos).
Conjunto de
personas, grupos
e instituciones
que coadyuvan
o impulsan
alguna parte o
segmento de las
propuestas.
Se requiere analizar y
sistematizar las condiciones
preexistentes y tendencias.
Incluye programas y
estructuras que coadyuvan
en las medidas y los
esfuerzos propuestos.
Los diagnósticos incluyen
análisis e identificación de
las fuerzas que experimenta
cada sitio. Las propuestas
deben incidir en ellas.
 Condiciones institucionales de origen
Actividades
asociadas con
las instituciones
y las medidas
de adaptación
impulsadas
Monitoreo y
evaluación de
las acciones de
adaptación
Cuadro 1a. Matriz programática de las acciones de adaptación al cambio climático en los
humedales del Golfo de México, condiciones institucionales de origen (continuación).
Resultados o
metas por región,
estado o sitio
piloto
Indicadores
Cuadro 1b. Matriz programática de las acciones de adaptación al cambio climático en los
humedales del Golfo de México, monitoreo y evaluación.
Monitoreo y evaluación de las acciones de adaptación
Actividades asociadas con las
instituciones y las medidas de
adaptación impulsadas
Resultados o metas por región,
estado o sitio piloto
Indicadores
Monitoreo de la línea base.
Centros responsables de evaluar
el deterioro y monitorear las
condiciones sociales y biofísicas
de la región, y el sitio piloto año
con año.
Usos de información climática.
Sistema de alerta temprana.
Sistema de alerta temprana
(monitoreo de estaciones
hidrometeorológicas y capacidades de modelaje para protección
civil y sectores
agropecuarios).
Ordenamientos territoriales y urbanos
desarrollados y decretados.
Proyectos realizados y hectáreas de
restauración y protección logradas.
Especies en peligro y ecosistemas en
riesgo por año.
Creación de sistemas de alerta temprana
(fases de desarrollo).
Número de usuarios y tamaño del sistema por año. Hectáreas siniestradas al año
influenciadas por el sistema.
Conformación de los centros
para la gestión de
información.
Nuevos
programas de gobierno o
universitarios incluyentes de las
medidas de
adaptación.
Presupuesto anual por programa creado.
Reuniones y programas de
comunicación científica por orden de
gobierno, poder (judicial, legislativo,
ejecutivo) o sector.
Decisiones tomadas
influenciadas por los centros de gestión.
Instrumentos de política impulsados o creados que
incluyen la dimensión de adaptación: financieros y fiscales
(impuestos), normativos, de
fomento o
territoriales.
Propuestas, instrumentos, decretos realizados por orden de gobierno.
Realización de contratos, estudios, acuerdos con
instituciones locales por sitio
piloto.
Medidas de adaptación
consensuadas (iniciadas y en desarrollo).
Decretos y normas (de construcción, operación, técnicas, entre
otros).
Normas y regulaciones
decretadas que inciden en la adaptación.
Recomendaciones técnicas,
normativas, de
modelos y programas, entre
otros.
Recomendaciones realizadas o ejecutadas.
Ejecución de las acciones de
adaptación.
700
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Cuadro 1b. Monitoreo y evaluación de las acciones de adaptación al cambio climático en los
humedales del Golfo de México (continuación).
Monitoreo y evaluación de las acciones de adaptación
Actividades asociadas con las
instituciones y las medidas de
adaptación impulsadas
Resultados o metas por región,
estado o sitio piloto
Proyectos generados por
comunidades, grupos, gobiernos
o universidades.
Ejecución de las acciones de
adaptación.
Desarrollo de estrategia de
comunicación (campañas de
comunicación y sensibilización).
Implementación de medidas de
adaptación demostrativas tipo
piloto donde se pruebe el éxito.
Evaluación de capacidades
conforme a las propuestas del
Programa “Capacity 2015”
(UNDP)1.
Cambios en conductas y niveles
de percepción y comprensión
de las medidas de adaptación y
los fenómenos asociados con el
cambio climático. Receptividad y
demanda de proyectos exitosos.
Mejoramiento de las capacidades
locales para impulsar medidas
de adaptación. Comunicadores
y medios formales e informales
conscientes del tema.
Comunidades utilizando
y desarrollando acciones
promovidas por el proyecto.
Desarrollo conjunto
interinstitucional de proyectos
demostrativos.
Indicadores
Proyectos iniciados, modificados y
reconocidos como consecuencia de las
acciones de las medidas de adaptación.
Porcentaje de líderes de opinión, población abierta o programas educativos que
incluye, maneja o conoce el tema. Nivel
escolar formal o informal.
Número de cursos realizados y
empleados de cada orden de gobierno
capacitados.
Percepción y aceptación del proyecto y
actividades de adaptación.
Número de comunidades, grupos
o individuos que se involucraron o
apropiaron de proyectos promovidos
(indicadores de éxito). Unidades piloto e
inversión por año.
Fuente: elaboración propia.
Prácticamente cada medida de adaptación impulsada conlleva un ciclo de proyecto. Si además cada sitio contiene un conjunto de ellas, la evaluación y el monitoreo
de las acciones podrían volverse infinitas, pues al interior de las acciones se derivan
otras y se complementan con nuevas de manera constante.1 Así que se propone un
seguimiento general; no a las medidas per se, sino a las instituciones y organizaciones
que están asociadas y relacionadas con las medidas principales. Por ello no se des1 UNDP, 2005.
M arco
organizativo y monitoreo
701
glosan los sitios ni las medidas, sino que se enfatiza el proceso. Puesto que los logros
serán de largo plazo, pero no pueden postergarse las garantías de éxito e impacto en
el corto plazo, los proyectos demostrativos juegan un papel esencial y su impacto
puede ser parte de un detonador en todos los niveles. Sería el caso de una prevención
probada del sistema de alerta temprana, así como una técnica agrícola que garantice
la cosecha ante una sequía o retraso de lluvias. Existen al menos dos niveles relacionados con el monitoreo de las condiciones del territorio que deberán promoverse y
garantizar su ejecución.
7.2.2.1 Monitoreo de las condiciones iniciales
Por un lado están aquellas que conforman la línea base de las condiciones de inicio,
documentadas en este estudio a través de la conformación del Sistema de Información Geográfica y de los análisis respectivos (biofísicos, socioeconómicos y del uso de
recursos). Estas tendencias y condiciones actuales deberán monitorearse a través de
Figura 2. Ejemplo de resultados esperados en escalas temporales y espaciales.
Fuente: Olsen, 2003.
702
M edidas
de adaptación por sitio piloto
instituciones regionales para mejorar la precisión y mantener una información certera
y oportuna que acompañará cualquier iniciativa. Ciertamente esta línea base es insuficiente a la luz de variables biofísicas, sociales o económicas para constituir puntos de
referencia específicos y estimar la evolución de los sistemas. Sin embargo, sí permite
aproximar el estado de deterioro o conservación, y las posibles amenazas para iniciar
el proceso de adaptación.
7.2.2.2Monitoreo de variables clave que dan cuenta especial
de condiciones determinantes de la evolución de los
sistemas en diferentes escalas
Las medidas derivadas de este proyecto se enmarcan dentro del Gran Ecosistema
Marino del Golfo de México2. Aunque no hay todavía propuestas institucionalizadas
internacionales formales (hasta donde se sabe), sí existen esquemas de monitoreo de
referencia para hacer comparativos los datos y las tendencias de la salud de los sitios
piloto seleccionados. Por ello se propone que el referente de inicio sea comparable
con el que se ha desarrollado para la costa del Golfo de México en Estados Unidos
por la EPA3. La EPA caracteriza el estado de sus costas a través de cinco índices: de
calidad de agua, de calidad de sedimentos, de organismos bénticos, de hábitat costero
y de tejido de peces. La condición de todos los estuarios de la costa fue analizada y
los ecosistemas caracterizados bajo una escala que va desde sin daño hasta amenazado. Los resultados se publicaron en el informe National Coastal Condition Report
II (2005) 4.
7.2.3 Gestión Basada en Resultados (GBR)
Las medidas de adaptación deben ser entendidas y visualizadas dentro de un marco institucional; es decir, pertenecer al ejecutor de las mismas o “el proyecto” que
2 UN Atlas of the Ocean, s.f.
3 USEPA, 2005..
4 USEPA, 2005
M arco
organizativo y monitoreo
703
tiene los recursos financieros. Es precisamente esta institución la que requiere dar
seguimiento al accionar de los operadores del proyecto. Una de las opciones que
generalmente se utiliza para ello es establecer y desarrollar un Sistema de Monitoreo
Basado en Resultados5. Se sabe que este sistema promueve el monitoreo regular
y riguroso de la ejecución para proceder a ajustes rápidos en caso de ser necesario.
Es un mecanismo para retroalimentar los resultados del monitoreo, así como de las
evaluaciones. Contribuye a la transparencia y rendición de cuentas de los administradores, y a mejorar la eficacia, la eficiencia y los impactos sobre la población objetivo.
En este caso se sugiere desarrollar dicho enfoque, puesto que las medidas de
adaptación se enmarcan en un contexto institucional y por otro lado se busca el
desarrollo de capacidades. De aquí que las cadenas de impacto deban ser desarrolladas con base en los primeros indicadores expuestos en el cuadro 1. En la figura 3 es
posible visualizar la secuencia de acciones en el marco de la operación del proyecto.
Figura 3. Secuencia de acciones operativas para implementar medidas de adaptación en los
humedales costeros del Golfo de México.
Cadena de impacto
Impacto
Mejoras generales y de largo plazo en
la sociedad (resultados de largo plazo)
Resultados
Efectos intermedios de los productos
en los beneficiarios (resultados de corto
y mediano plazo)
Productos
Bienes y servicios producidos y ofrecidos
por el programa
Monitoreo
tradicional
Evaluación de
impacto
Actividades
Insumos
Tareas y acciones emprendidas en la
implementación del programa
Recursos financieros, humanos y
materiales del programa
Fuente: elaboración propia.
5 Zall-Kusek y Rist, 2004.
704
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Monitoreo
basado
en resultados
7.3 Introducción a las medidas específicas de adaptación
por sitio piloto
Cuauhtémoc León et al.
Víctor Magaña et al.
Boris Graizbord et al.
7.3.1 Agrupación de sitios por amenazas comunes
En el capítulo 5, cada sitio piloto fue descrito de acuerdo con sus características físicas
e hidrológicas, relevancia ecológica, rasgos socioeconómicos, uso de agua y suelo, y
vulnerabilidad ante presiones tanto humanas como de cambio climático. Cada sitio es
vulnerable de manera particular a dichas presiones, pero también comparte amenazas
en común con otros humedales. Como recordatorio, el cuadro 1 resume los escenarios de cambio climático esperados y sus posibles efectos. Los elementos del clima
que cobran importancia en diversos plazos y distintas épocas del año están listados
en orden descendente.
Si tomamos como ejemplo las proyecciones para el sitio piloto San FernandoLaguna La Nacha durante el periodo 2010-2039, el cuadro muestra lo siguiente: el
incremento de temperatura será de entre 1 y 2 °C, con los meses de mayor cambio
entre abril y septiembre; la precipitación variará desde una disminución de 5% hasta
un aumento de 5%; los eventos extremos esperados son las ondas de calor, lo que
puede aumentar la evaporación en un 5%; se espera un mayor número de tormentas,
“nortes” y huracanes intensos.
705
Cuadro 1. Escenarios de cambio climático esperados para el presente siglo. Se indica
temperatura, precipitación y eventos extremos por sitio piloto.
Región/
periodo
cambio
clima
Río San
FernandoLaguna La
Nacha
Río PánucoAltamira
Río PapaloapanLaguna de
Alvarado
Río
CoatzacoalcosLaguna El
Colorado
Sistema Lagunar
CarmenPajonalMachona
Los Petenes
Sistema Lagunar
Nichupté
(Cancún)
Sistema Lagunar
Boca
Paila (Punta
Allen)
2010-2039
∆T (°C)
∆PCP (%)
eventos extremos
EFECTOS
1-2 abr.-sep.
-5 a + 5%
Ondas de calor
+ evaporación (5%)
+ tormentas, “nortes”
Huracanes intensos
1-2 abr.-sep.
-5 a 0%
Ondas de calor
+ evaporación (10%)
+ tormentas, “nortes”
Huracanes intensos
1-2 may.-sep.
-5 a +10%
+ tormentas, “nortes”
intensos
Ondas de calor
1-2 may.-jun.
-5 a +10%
+ tormentas,
“nortes” intensos
Nivel del mar
Ondas de calor
1-2 abr.-sep.
-15 a +5%
+ tormentas
Ondas de calor
Sequías, incendios
forestales
1-2 jun.-oct.
-5 a +5%
+ tormentas,
huracanes intensos
Ondas de calor
1-2 jun.-oct.
-5 a 0%
Huracanes intensos
+ tormentas, “nortes”
1-2 jun.-sep.
-5 a 0%
Huracanes intensos
Nivel del mar
+ tormentas
2040-2069
∆T (°C)
∆PCP (%)
eventos extremos
EFECTOS
2-3 abr.-sep.
-10 a 0%
Ondas de calor
+ evaporación (10%) Sequías
+ tormentas
Huracanes intensos
+nivel del mar
“nortes”
2-3 abr.-sep.
-10 a -5%
Ondas de calor
+ tormentas, “nortes”
inundaciones, huracanes
intensos
1-2 may.-sep.
-5 a +10%
+tormentas, “nortes”
intensos, inundaciones
Ondas de calor
1-2 may.-jun.
-5 a +10%
+ tormentas,
“nortes” intensos
+ nivel del mar
Ondas de calor
2070-2099
∆T (°C)
∆PCP (%)
eventos extremos
EFECTOS
3-4 abr.-sep.
-10 a -5%
+ evaporación (15%)
Sequías
+ nivel del mar
huracanes intensos
Ondas de calor
+ tormentas
3-4 abr.-sep.
-10 a -5%
+ tormentas, “nortes”
inundaciones
Ondas de calor
Huracanes intensos
2 – 3 may.-sep.
-5 a +10%
+ tormentas, inundaciones
“nortes”intensos
Ondas de calor
2-3.5 may.-jun.
-5 a +10%
+ nivel del mar
+ tormentas,
inundaciones
“Nortes” intensos
2-3 abr.-sep.
-15 a +5%
Ondas de calor
+ nivel del mar
Sequías
+ tormentas
1-2 jun.-oct.
-5 a +5%
Huracanes intensos
Ondas de calor
+ tormentas
1-2 jun.-oct.
-5 a -0%
Huracanes intensos
+ nivel del mar
inundaciones
+ tormentas, “nortes”
1-2 jun.-sep.
-5 a 0%
Huracanes intensos
Nivel del mar, inundaciones,
+ tormentas
2-4 abr.-sep.
-15 a 0%
Ondas de calor
+ nivel del mar
+ tormentas intensas
∆T (°C) cambio de temperatura en °C.
∆PCP (%)porcentaje de cambio en la precipitación.
Fuente: Magaña et al., 2007.
706
M edidas
de adaptación por sitio piloto
2-3.5 jun.-oct.
-5 a +5%
Huracanes intensos
Ondas de calor
+ tormentas
2-3 jun.-oct.
-10 a -5%
Huracanes intensos
Inundaciones
+ nivel del mar
+ tormentas
2-4 jun.-sep.
-10 a 0%
Huracanes intensos
Nivel del mar, inundaciones
+ tormentas
Con base en el cuadro 1 se identificaron y priorizaron las principales amenazas
para cada sitio, agrupándolos según sus similitudes en cuatro grupos. Para la agrupación se consideró el tipo de amenaza ante el cambio climático. Posteriormente se
priorizaron las estrategias de adaptación con respecto a las amenazas principales, de
tal modo que el resto de las medidas pudieran articularse a través de éstas. El cuadro
2 presenta los cuatro grupos elaborados, las amenazas comunes y las estrategias
generales de adaptación.
Cuadro 2. Amenazas y estrategias de adaptación por grupos de sitios piloto.
Grupo Sitios
1
2
3
Río San
FernandoLaguna La
Nacha
Río PánucoAltamira
Río
PapaloapanLaguna de
Alvarado
Amenazas
principales
Aumento de
temperatura del orden
2. Eventos extremos de 1 a 2 ºC por cada
de calor.
treinta años.
Manejo del recurso agua.
1. Aumento en el
nivel del mar.
Medidas (obras) estructurales
urbanas y rurales. Manejo del
recurso agua.
Sistema Lagunar 1. Huracanes.
Nichupté
(Cancún)
2. Aumento en el
nivel del mar.
Sistema Lagunar
Boca
Paila (Punta
Allen)
Estrategia de adaptación
1. Sequía.
2. Inundaciones
(tormentas).
Río
CoatzacoalcosLaguna El
Colorado
Sistema Lagunar 1. Eventos extremos
Carmende calor.
PajonalMachona
2. Inundaciones
(tormentas,
huracanes).
Los Petenes
4
Criterio
Ciclo hidrológico más
intenso.
Información climática (sistema de
alerta temprana).
Información climática (sistema de
alerta temprana).
Aumento de
temperatura del orden
de 1 a 2 ºC por cada
treinta años.
Información climática (sistema de
alerta temprana).
Prevención de incendios.
Mantener e incrementar los
esquemas de conservación.
El aumento en las
temperaturas de
superficie lleva a
mayor inestabilidad
y con ello existe una
mayor probabilidad
de que los huracanes
que se formen sean de
mayor intensidad.
Información climática (sistema de
alerta temprana).
Adecuar normas de construcción.
Mantener e incrementar los
esquemas de conservación.
Fuente: León et al., 2007.
I ntroducción
a las medidas específicas
707
El grupo 1 está compuesto por los sitios ubicados en los ríos San Fernando y
Pánuco; ambos sitios se encuentran en la parte norte del Golfo de México, por lo que
comparten características geográficas y climáticas. Las principales amenazas que se
predicen para estas regiones son la sequía y los eventos extremos de calor debido
al aumento inevitable de la temperatura. En estos sitios predominan las actividades
agropecuarias e industriales, por lo que el manejo del recurso agua tanto en el campo
como en las ciudades se vuelve uno de los principales problemas a ser considerados
para proponer medidas de adaptación. Por otro lado, sectores como el de salud se verán afectados ante un aumento de temperatura, por lo que la información climática,
esencialmente los sistemas de alerta temprana, son necesarios para prevenir pérdidas,
no sólo de vidas sino también económicas.
El grupo 2 está conformado por los sitios ubicados en los ríos Papaloapan y
Coatzacoalcos. Las principales amenazas son el aumento en el nivel del mar y las
inundaciones provocadas por tormentas. Indudablemente el cambio climático tendrá
consecuencias en el ciclo hidrológico, el cual se prevé será más intenso. Estos sitios
presentan ciudades importantes muy cercanas a los límites de costa, por lo que se
debe dar prioridad a la promoción de medidas (obras) estructurales para controlar los
cauces y las avenidas. Dichas medidas serían parte del manejo eficiente del agua para
prevenir severos daños. Al igual que para el grupo 1, la información climática es y será
necesaria para la planeación y el desarrollo de cualquier medida.
El grupo 3 está compuesto por los sitios Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona (SLCPM) y Los Petenes. Dada su ubicación geográfica, las principales amenazas para estas regiones son eventos extremos de calor e inundaciones provocadas por
tormentas y huracanes. En la región del SLCPM se presenta una fuerte presencia de
la industria petrolera, mientras que en Los Petenes predominan las áreas conservadas.
Pese a estas diferencias, la principal medida a considerar es el uso de la información
climática; en este caso, no sólo la aplicación de un sistema de alerta temprana para la
prevención de desastres, sino también para la prevención de incendios.
Para el grupo 4, conformado por los sitios ubicados en Cancún y Punta Allen, las
principales amenazas son los huracanes y el aumento en el nivel del mar. En estos
sitios predomina la actividad turística, por lo que la protección civil debe considerar
708
M edidas
de adaptación por sitio piloto
primordialmente la información climática; para el caso de los huracanes, se hace evidente el fortalecimiento del sistema de alerta temprana. Sobre el aumento en el nivel
mar, tanto las ciudades como la industria hotelera deberán adecuar sus normas de
construcción para evitar severos daños económicos.
Pese a estos agrupamientos, existen medidas de adaptación que pueden aplicarse
de forma general para todos los sitios piloto y la zona costera del Golfo de México en
su conjunto. Sin ser exhaustivo, el cuadro 3 presenta un buen número de ellas.
Cuadro 3. Medidas generales necesarias para todos los sitios.
•
•
•
•
•
•
•
•
•
Formar recursos humanos.
Promover y estimular el papel de los medios de comunicación.
Fortalecer políticas y programas en el ámbito local para la toma de decisiones.
Crear sistemas de alerta temprana intersectoriales basados en monitoreo (con capacidades) y
modelaje.
Desarrollar un sistema de difusión de información oportuno.
Promover esquemas de seguros (agropecuarios y familiares, entre otros).
Desarrollar estrategias y acciones de comunicación.
Generar y estimular centros de información para la gestión de toma de decisiones.
Fortalecer, revisar e implementar ordenamientos territoriales realizados a través de los siguientes
instrumentos: política urbana, ecológica o ambiental; de protección civil (riesgos); industriales; de
desarrollo rural; planeación estatal y sectorial (agricultura, ganadería, pesca y acuicultura, entre
otros).
Fuente: León et al., 2007.
7.3.2 Variables que condicionan la factibilidad de las
medidas de adaptación
Las condiciones y tendencias de cada sitio son elementos básicos para diseñar la
secuencia de las primeras acciones de adaptación. A continuación se presentan algunos aspectos socioeconómicos que son una limitante a considerar en el proceso
de desarrollar, impulsar, definir o reformular las medidas que se propondrán en las
secciones siguientes.
En el caso de los sitios ubicados en los ríos San Fernando, Pánuco y Papaloapan,
un primer aspecto que debe ser considerado es el número de municipios que los
I ntroducción
a las medidas específicas
709
conforman (figura 1). Esta característica se convierte en un reto al momento de
generalizar una medida para todo el sitio, ya que se pueden presentar diferencias
marcadas entre un municipio y otro. Un ejemplo de ello es el humedal del río Panuco.
En la región predomina la actividad industrial (maquilas), lo que ha propiciado un
aumento en la población urbana. Sin embargo, dicha tendencia no se ha dado en
todos los municipios y se presentan grandes diferencias entre el municipio con menor
porcentaje de población urbana y el municipio con mayor porcentaje (figura 2). El
número total de municipios que incluye un sitio piloto es un factor de complejidad
para lograr acuerdos, independientemente de la superficie total del sitio; los acuerdos
serán más difíciles y por lo tanto requerirán de mayor esfuerzo. De igual modo, las
asimetrías económicas (relación entre población rural y urbana) son un factor de
dificultad, por lo que las medidas deberán integrarse y vincularse para mantener un
balance en la zona y entre los actores clave.
Figura 1. Total de municipios por sitio piloto.
Fuente: León et al., 2007, con datos de Graizbord et al., 2007.
710
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Figura 2. Porcentaje de la población urbana por sitio piloto al año 2000.
Fuente: León et al., 2007, con datos de Graizbord et al., 2007.
Otro aspecto a considerar es el servicio de salud. En general, los servicios son
insuficientes para todos los sitios y se presentan diferencias marcadas entre sus municipios; esto, con excepción de Punta Allen y el Sistema Lagunar Carmen-PajonalMachona, donde son insuficientes para todos en promedio (figura 3). Este aspecto
resulta ser muy importante debido a las amenazas climáticas previstas; por ejemplo,
en los sitos Papaloapan, Coatzacoalcos y Nichupté ante inundaciones severas y frecuentes, o en los humedales de los ríos Pánuco y San Fernando ante la recurrencia
de ondas de calor. No se cuenta con la infraestructura necesaria para atender a la
población vulnerable, particularmente adultos mayores, niños y población indígena.
Si también se considera el Índice de Desarrollo Humano (indicador muy usado para
mostrar las diferencias socioeconómicas), se puede observar que en los humedales de
los ríos Coatzacoalcos, Papaloapan y Pánuco existen considerables diferencias entre
sus municipios (figura 4).
I ntroducción
a las medidas específicas
711
Figura 3. Porcentaje de población con algún servicio de salud por sitio piloto.
Fuente: León et al., 2007, con datos de Graizbord et al., 2007.
Figura 4. Índice de Desarrollo Humano por sitio piloto.
Fuente: León et al., 2007, con datos de Graizbord et al., 2007.
712
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Los humedales de los sistemas lagunares Nichupté (Cancún) y Boca Paila (Punta
Allen) presentan características divergentes. Mientras Punta Allen es uno de los sitios
mejor conservados por ser una reserva de la biosfera, el desarrollo turístico de Cancún
ha transformado completamente el entorno natural del sistema lagunar. En ambos
predomina la actividad turística, pero en Cancún la urbanización ejerce fuerte presión,
con una tasa de crecimiento poblacional a la alza, lo que en un futuro representará
mayores demandas de agua (figura 5). Por lo tanto, mientras que los socios principales
en Cancún podrían ser las autoridades municipales y las organizaciones de la industria
hotelera, en Punta Allen lo sería la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Las ventajas comparativas en este último caso parten del nivel de conocimiento elaborado en los planes de manejo y de la capacidad de monitoreo.
Figura 5. Tasa de crecimiento poblacional 1990-2000 por sitio piloto.
Fuente: León et al., 2007, con datos de Graizbord et al., 2007.
En las siguientes secciones se retomarán los principales puntos de vulnerabilidad
analizados en el capítulo 5 para cada sitio piloto y, a partir de ellos, se mostrarán las
potenciales medidas de adaptación, de acuerdo con los grupos presentados en este
I ntroducción
a las medidas específicas
713
apartado. El análisis incluye las instituciones clave para su instrumentación. Al final de
la discusión se presenta un cuadro resumen para cada grupo, que detalla las medidas
de adaptación propuestas por amenaza, de acuerdo con tres etapas de procedimiento:
preparación, fortalecimiento y operación. Estas etapas corresponden a una secuencia
lógica para desarrollar las medidas y marcan intrínsecamente ciertos requerimientos,
como tiempos y acuerdos. La selección de medidas y etapas se basó en las siguientes
actividades: análisis de las principales amenazas y escenarios climáticos modelados
por sitio piloto, revisión bibliográfica, discusión con el grupo de trabajo de consultores y el taller participativo de Veracruz con actores clave de la región. Con ello se
pretende responder a las preguntas, ¿quién es vulnerable?, ¿a qué es vulnerable?, ¿por
qué es vulnerable? Cabe advertir que lo anterior es indicativo y se presenta como una
propuesta programática, pero por las razones descritas en los principios que norman
la definición de adaptación, pueden sustituirse o realizarse de manera paralela, si el
equipo de trabajo del proyecto y sus interlocutores así lo deciden.
714
M edidas
de adaptación por sitio piloto
7.4 Medidas específicas
de adaptación: sitios San Fernando y Pánuco
Norma Munguía Aldaraca, Cuauhtémoc León et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al., Leticia Gómez et al.
Boris Graizbord et al., Víctor Magaña et al.
Los humedales de los ríos San Fernando y Pánuco comparten la misma zona geográfica
(norte del Golfo de México) y por lo tanto tienen características climáticas similares.
Sin embargo, cada uno presenta presiones distintas en relación con las actividades que
ahí se desarrollan y su intensidad. Por tanto, antes de describir las potenciales medidas
de adaptación ante los efectos del cambio climático propuestas para ambos sitios, se
presenta un breve resumen de las principales fuerzas motoras de cambio. Para una
descripción detallada referimos al lector a las secciones 5.1 y 5.2.
7.4.1 Humedales del río San Fernando
Los principales controladores del cambio en el uso del suelo de este sitio son la expansión de la frontera agropecuaria sobre terrenos desérticos y de matorral, a través
de agricultura y pastoreo intensivos1. Los pastizales inducidos y cultivados controlan
el uso del suelo. Por otro lado, la industria maquiladora tiene una fuerte presencia en
la zona y representa el valor mayoritario de la producción2. En cuanto a la población,
se espera un alto crecimiento demográfico para el presente siglo. Todo esto significa
mayor demanda de recursos hídricos, pues las eficiencias en el riego y abastecimiento
urbano son bajas3. Las principales amenazas por el cambio climático son las sequías y
1 Gómez et al., 2007.
2 Graizbord et al., 2007.
3 Rodríguez et al., 2007.
715
los eventos extremos de calor, además de que el sitio se encuentra en una zona con
alta incidencia de huracanes4. El cuadro 1 presenta, a manera de resumen, las amenazas previsibles por el cambio climático y las actividades actuales, su probabilidad
de ocurrencia y algunas medidas para contrarrestarlas; todo ello bajo el enfoque de
demanda de agua.
Cuadro 1. Río San Fernando: escenarios de las tendencias en el uso del agua al año 2050,
probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Urbano
Industrial
Tendencias
Las pequeñas poblaciones pueden enfrentar
restricciones en el acceso al agua.
Creciente aumento en la demanda de agua potable y
mayor presión sobre los acuíferos.
Las maquiladoras pueden suscitar contaminación de
los cuerpos de agua.
La actividad pesquera se verá afectada por la
contaminación de los cuerpos de agua.
Agricultura y
La agricultura de riego enfrentará restricciones por
pesca
la disminución de los recursos hídricos. El uso de
agroquímicos perturba la calidad del agua disponible.
Desarrollo
La región experimentará fuertes presiones por el
petrolero
probable desarrollo de actividades de extracción.
Probabilidad Medidas
Muy alta
Alta
Muy alta
Alta
Construcción
de plantas de
tratamiento.
Regulaciones
estrictas para
neutralizar la
contaminación.
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
En cuanto a las presiones relacionadas con el uso del suelo, se propone la restricción de terrenos de agricultura de riego sobre zonas de matorrales dentro de unidades
de gestión para la conservación y restauración, con el fin de reducir la expansión de la
frontera agrícola sobre áreas con vegetación natural5.
7.4.2 Humedales del río Pánuco
El crecimiento de la zona conurbada de Tampico-Madero-Altamira se debe a la
presencia de la industria petrolera y de maquila en el área, además de los servicios
portuarios. La mancha urbana se ha expandido al grado de provocar la desaparición
4 Magaña et al., 2007; Graizbord et al., 2007.
5 Gómez, et al., 2007.
716
M edidas
de adaptación por sitio piloto
de bosques de encino y grandes porciones de vegetación hidrófila. La agricultura y
ganadería también controlan de manera importante el cambio en el uso del suelo,
sobre todo por el incremento en la superficie de pastizales inducidos y de agricultura
de temporal6. Este sitio tiene tasas muy elevadas de deforestación, lo que repercute
en la recarga de mantos acuíferos (que ya presentan señales de intrusión salina) y
produce el azolvamiento del humedal. El agua del río Pánuco cuenta con altos grados
de contaminación7. Las principales amenazas del cambio climático son las inundaciones por aumento en el nivel del mar, tormentas y huracanes8. El cuadro 2 resume las
presiones previsibles tanto por el cambio climático como por las actividades humanas
para este sitio piloto, bajo el enfoque de disponibilidad de recursos hídricos. También
enlista algunas medidas para atenuar el grado de deterioración actual.
Cuadro 2. Río Pánuco: escenarios de las tendencias al año 2050; probabilidad de ocurrencia y
medidas de adaptación.
Sector
Tendencias
Probabilidad
Expansión urbana sobre zonas bajas y
pantanosas, implicando nivelaciones y rellenos.
Vulnerabilidad alta en asentamientos aledaños
a los márgenes del río Pánuco, particularmente
el derecho (veracruzano) por el aumento del
nivel del mar.
Creciente aumento en la demanda de agua
potable y mayor presión sobre los acuíferos de
la cuenca.
Urbano
Agotamiento de pozos profundos por
salinización de los mantos en suelos arenosos.
Pérdida de litoral y suelo urbano en el sector
Altamira-Miramar.
Afectaciones en la infraestructura por el
aumento del nivel del mar:
a) Renivelación de la red de drenaje en puntos
de desfogue.
b) Recurso a cárcamos de bombeo de aguas
servidas.
c) Aumento en la contaminación de lagunas.
Medidas
Adecuación de los
planes reguladores de
suelo urbano.
Muy alta
Establecimiento de
zonas perimetrales
de amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
6 Gómez et al., 2007.
7 Rodrígues et al., 2007.
8 Magaña et al., 2007.
S an Fernando y P ánuco
717
Cuadro 2. Río Pánuco: escenarios de las tendencias al año 2050; probabilidad de ocurrencia y
medidas de adaptación (continuación).
Sector
Urbano
Industrial
Portuario
Pesquero
Agropecuario
Tendencias
Probabilidad
Afectación en las zonas bajas de los municipios
de Tampico Alto, Pueblo Viejo, Altamira,
Tampico, Ciudad Madero y Pánuco; mayor
vulnerabilidad en los ranchos y poblados
cercanos a los cauces fluviales.
Muy alta
Estancamiento de la refinería de Ciudad Madero
por agotamiento de los yacimientos de crudo
nacionales; mayor importación de insumos
petroquímicos primarios.
Mayor vulnerabilidad en el corredor industrial
del litoral tamaulipeco.
Probable necesidad de reubicar los parques
industriales hacia el norte de Altamira.
Descargas de aguas industriales; mismas
tendencias que en el sector urbano.
Afectación de los malecones y muelles fiscales
de Tampico-Ciudad Madero por el aumento del
nivel del mar.
Ampliación de las fases de veda; cambios en
los calendarios por introducción de especies
marinas.
Alteración de la zona intermareal.
Cambios en los flujos de aguas contaminadas.
Salinización de praderas naturales y artificiales
colindantes con las tierras inundables.
Impactos en secciones del distrito de riego de
Pujal-Coy.
Muy alta
Medidas
Reubicación de
asentamientos
humanos en riesgo.
Establecimiento de
zonas perimetrales
de amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Alta
Muy alta
Alta
Control de la
contaminación;
subsidios fiscales
para la reubicación,
conversión y
adaptación.
Fuente: Rodríguez, et al., 2007.
Para mitigar la fragmentación del hábitat por los cambios en el uso de suelo se
propone la regulación tanto de la expansión de la frontera agrícola en zonas de humedales conservados como del uso de suelo urbano sobre zonas de vegetación de selvas
altas en regeneración9.
7.4.3 Medidas de adaptación ante los efectos del
cambio climático
De continuar las tendencias de apropiación del suelo y agua, así como las políticas actuales y los cambios previstos en la variabilidad del clima, la superficie vegetal natural
9 Gómez et al., 2007.
718
M edidas
de adaptación por sitio piloto
y la biodiversidad disminuirán drásticamente, al igual que la disponibilidad del agua.
Actualmente no hay acciones concretas de protección civil frente a las amenazas
climáticas, por lo que la población estará en riesgo en los siguientes años. La economía rural, urbana e industrial, actualmente basada en la extracción de agua de los
acuíferos próximos a agotarse, no será sostenible (cuadro 3).
Sin embargo, de implementarse medidas de adaptación, la cubierta vegetal, la
disponibilidad de agua y el estado de la economía, sobre todo la rural, puede conservarse como hasta el momento. De aplicarse medidas de protección civil para sequías
y ondas de calor, el bienestar de la población puede incrementarse (cuadro 3).
Cuadro 3. Matriz de tendencias sitios San Fernando y Pánuco.
Indicador/escenario
1. Tendencia con
cambio climático,
sin políticas y sin
adaptación
2. Tendencia con
políticas y cambio
climático
3. Tendencia
con políticas de
adaptación al
cambio climático
Conservación de la
cubierta vegetal y de la
biodiversidad
Disponibilidad de agua
Protección civil
Economía rural y urbana
Nota: las líneas se construyeron con tres puntos de referencia: el punto de inicio (1976-1980); el momento actual
(2000-2007) y el tiempo donde se sabe que las condiciones influenciadas por el cambio climático se vuelven más
evidentes (2020-2030). La pendiente de la línea representa la rapidez con la que el indicador evoluciona (de forma
paulatina, drástica o constante). Las líneas mixtas indican que el crecimiento no es sustentable, por lo que el indicador
aumenta, pero después disminuye drásticamente.
Fuente: Magaña et al., 2007; León et al., 2007; Gómez et al., 2007.
En el estudio realizado se encontró que las amenazas principales de los humedales
de los ríos San Fernando y Pánuco son los eventos extremos de calor y las sequías.
Los principales sectores previstos para sufrir afectaciones por estas amenazas son
los siguientes: salud pública, energía, biodiversidad y ecosistemas, zonas urbanas y
S an Fernando y P ánuco
719
rurales, agricultura y ganadería. A continuación se presenta un análisis detallado de
las potenciales medidas de adaptación propuestas para ambos sitios, por amenaza y
sector afectado, así como las instituciones que pueden colaborar en el desarrollo de
capacidades10.
7.4.3.1 Eventos extremos de calor
• Salud pública: la principal amenaza detectada consiste en el incremento de la
morbilidad y la mortalidad por ondas de calor y deshidratación; la redistribución de
enfermedades transmitidas por vectores, y la descomposición de alimentos. Las
medidas de adaptación sugeridas involucran la construcción o conversión de edificios para mejorar su eficiencia energética y su equilibrio térmico; mejorar sistemas
de aislamiento, ventilación y control de temperatura en viviendas; reforestar, y
usar materiales y técnicas de construcción adecuados.
La Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Ecología deberá fomentar la construcción de vivienda de interés social. Además, deben efectivamente llevarse a la práctica los planes municipales de ordenamiento territorial y
desarrollo urbano. El Instituto Tamaulipeco de Vivienda y Urbanismo, el Consejo
Estatal para el Desarrollo de las Ciudades, los comités regionales para el desarrollo
de las ciudades y los comités municipales para el desarrollo urbano deberán intervenir en la aplicación de las disposiciones en materia de vivienda. Debe hacerse
un acercamiento con éstas para que se adecuen y homologuen los códigos de
construcción. El programa Hábitat puede proporcionar apoyos en este sentido
para adultos mayores, personas con capacidades diferentes y personas residentes
en inmuebles o zonas de alto riesgo. Podría llevarse a cabo un acercamiento con
las comisiones de la legislatura relacionadas con desarrollo urbano, desarrollo sustentable, especial de la vivienda y la Comisión Especial de Comunicación Social.
• Energía: las amenazas detectadas consisten en el aumento de demanda de energía y la ineficiencia de la transmisión de ésta. Dentro de las medidas de adaptación
propuestas se encuentra la mejora de la infraestructura existente. Para la instru10 El análisis del marco institucional para instrumentar las medidas de adaptación al cambio climático fue elaborado
por Munguía, 2007, con base en datos proporcionados por León et al., 2007.
720
M edidas
de adaptación por sitio piloto
mentación de las mismas deberá involucrarse a la Secretaría de Obras Públicas,
Desarrollo Urbano y Ecología estatal en la planeación y el diseño de infraestructura
industrial y de cualquier otra especialidad que se requiera en el estado como obra
pública. Se propone también tener acercamiento con las comisiones de la legislatura relacionadas con desarrollo urbano, desarrollo sustentable, desarrollo industrial y
comercial, y la Comisión Especial de Comunicación Social, así como con la Secretaría de Energía.
• Biodiversidad y ecosistemas: la principal amenaza la constituyen los incendios derivados de las altas temperaturas y del uso indiscriminado del fuego. Las medidas
de adaptación deben enfocarse en prevenir y controlar los incendios forestales,
proteger la capacidad de los servicios ambientales de los ecosistemas, y permitir
la migración de especies a zonas más aptas.
La Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Ecología estatal deberá
involucrarse en la formulación y ejecución de planes de ordenamiento ambiental
para la conservación de los ecosistemas. Se puede usar el Programa Estatal de
Protección al Ambiente y los Programas Municipales de Protección al Ambiente.
Asimismo, es recomendable celebrar convenios de coordinación con la federación
y otros estados o municipios, e involucrar a las comisiones municipales de ecología. Existe el Programa Federal de Conservación y Restauración de Ecosistemas
Forestales, dirigido a los productores del sector rural para reforestar, conservar
y restaurar suelos, así como para la sanidad forestal. También puede utilizarse
ProÁrbol en sus programas de conservación y restauración forestal, que incluye
la prevención de incendios forestales. El acercamiento con las comisiones de la
legislatura de desarrollo sustentable y especial de comunicación social puede ayudar a detonar estas medidas.
• Agricultura: la amenaza se manifestará incrementando el riesgo de siniestros por
las altas temperaturas que marchitarán los cultivos. Las medidas de adaptación
incluyen el uso de variedades con bajos requerimientos de agua, irrigación, planeación agrícola y mejora de cultivos, entre otras.
La implementación de las medidas sugeridas involucra a la SAGARPA, que
cuenta con el Fondo para Atender a la Población Afectada por Contingencias
S an Fernando y P ánuco
721
Climatológicas (FAPRACC), cuyo objetivo es ayudar a productores primarios sin
posibilidades económicas de contratar seguros. Asimismo, debe participar la Secretaría de Desarrollo Rural estatal. Se puede utilizar también el programa federal
Alianza Contigo para la modernización de sistemas de riego tecnificado. La Secretaría de Desarrollo Rural estatal debe elaborar programas agrícolas y forestales,
y ejecutar programas de aplicación de técnicas para la conservación del suelo y
el agua. Por otro lado, se recomienda el acercamiento con las comisiones de la
legislatura relacionadas con desarrollo sustentable, desarrollo rural, especial del
recurso agua y la Comisión Especial de Comunicación Social.
7.4.3.2 Sequías
• Biodiversidad y ecosistemas: la amenaza consiste en la disminución de las capacidades de renovación de los servicios ambientales de los ecosistemas. Las medidas
de adaptación incluyen el establecimiento de corredores biológicos entre áreas
naturales protegidas para permitir la migración de especies a zonas más aptas.
Para la instrumentación de las medidas resulta crucial involucrar a la Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Ecología estatal, que elabora el
Programa Estatal de Protección al Ambiente, y a los ayuntamientos que generan
los programas municipales de protección al ambiente. Se pueden celebrar convenios de coordinación con la federación, y otros estados o municipios. Deben
intervenir también las comisiones municipales de ecología y podría hacerse uso
del Programa de Conservación y Restauración de Ecosistemas Forestales, dirigido
a los productores del sector rural para reforestar, conservar y restaurar suelos, así
como para la sanidad forestal. Los ejecutores de las medidas podrían tener acercamiento con las comisiones de la legislatura relacionadas con desarrollo sustentable
y desarrollo rural.
• Zonas urbanas y rurales: la amenaza se manifestará en la disponibilidad de agua
para la población por el ineficiente manejo de la misma. Las medidas de adaptación tienden al uso eficiente del recurso, a potenciar la recarga de los acuíferos,
imponiendo medidas en la vivienda para la recarga.
722
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Para la implementación de las medidas, la Comisión Estatal del Agua de
Tamaulipas deberá involucrarse y coordinarse con las instituciones estatales
y municipales para que la construcción de viviendas y unidades habitacionales
tienda a dejar zonas de recarga (Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y
Ecología). Se recomienda tener acercamiento con las comisiones de la legislatura
relacionadas con desarrollo sustentable, desarrollo rural y especial del recurso
agua.
• Agricultura: la falta de agua para los cultivos será la forma de manifestación de
la amenaza, por el ineficiente manejo del recurso. Las medidas de adaptación
sugeridas tienden a la irrigación, captura y almacenamiento de agua de lluvia, así
como a la reutilización del vital líquido.
La instrumentación de las medidas podría involucrar al Instituto Nacional de
Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), que coopera con los
estados para generar conocimientos o innovaciones tecnológicas que contribuyan
al desarrollo sustentable de las cadenas agroindustriales, forestales y agrícolas del
país. Además ayuda a concertar programas con organizaciones e instituciones
publicas, sociales y privadas para el apoyo a la transferencia de tecnología forestal,
agrícola, pecuaria y agroindustrial. Otra fuente de recursos es la SAGARPA, al
amparo del programa Alianza Contigo; específicamente dentro del subprograma
de manejo integral de suelo y agua, que incluye la modernización de sistemas de
riego tecnificado. También se recomienda tener un acercamiento con las comisiones de la legislatura relacionadas con desarrollo sustentable, desarrollo rural y
especial del recurso agua.
• Ganadería: la falta de agua para el ganado se ve como la manifestación de la
amenaza, por el ineficiente manejo del agua. Dentro de las medidas de adaptación
propuestas está la reubicación de abrevaderos, cambios de regímenes de pastoreo
y manejo de hatos, represas y reactivación de canales de agua.
La instrumentación de las medidas requiere de la participación de la Secretaría de Desarrollo Rural, que es la encargada del establecimiento, vigilancia
y preservación de los abrevaderos; de la regulación de los terrenos, bienes, infraestructura y equipamiento dedicados a la ganadería o relacionados con ella, y,
S an Fernando y P ánuco
723
en general, del control de toda la actividad ganadera de la entidad. Se necesita
un acercamiento de dicha secretaría con la de Obras Públicas, Desarrollo urbano y Ecología para trabajo en conjunto. También podría ser útil acercarse a las
comisiones de la legislatura relacionadas con desarrollo sustentable y desarrollo
rural, así como a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y
Alimentación.
7.4.4 Programación de las medidas
El cuadro 4 es una matriz programática de las potenciales medidas de adaptación
presentadas hasta ahora para los humedales de los ríos San Fernando y Pánuco. Es
importante recalcar que tanto las medidas como las etapas aquí presentadas son
a título indicativo y pueden variar de acuerdo con las necesidades específicas del
proyecto y de los consensos logrados con los actores clave y la población. A final
de cuentas, la instrumentación de las medidas depende del grado de participación y
apropiación por parte de la comunidad afectada por el incremento en la variabilidad
del clima regional y el cambio climático global.
724
M edidas
de adaptación por sitio piloto
S an Fernando y P ánuco
725
Infraestructura
y sistemas de
transmisión
ineficientes.
Salud pública
Aumento de demanda y
eficiencia de transmisión
de energía eléctrica.
Características
físico-biológicas en
niños y ancianos,
principalmente.
Incremento de la
morbilidad y la
mortalidad por ondas de
calor y deshidratación.
Incremento y
redistribución de
enfermedades
transmitidas por
vectores como
los mosquitos
(paludismo, dengue).
Descomposición de
alimentos.
Energía
Por qué son
vulnerables
A qué son vulnerables
Quiénes son
vulnerables
2
1
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
Creación de microclimas más sanos.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para
mejorar el equilibrio térmico de los inmuebles.
2
1
2
Promover programas de financiamiento rural para la modificación de estructuras y
viviendas que consuman menos energía.
Realizar estudios de percepción y resistencia a la adopción de medidas que
ahorren energía en zonas rurales y urbanas (subsectores ganadero, agrícola,
pesquero, comercial, industrial).
Promover el uso de energías renovables en vivienda, zonas urbanas y gobiernos
locales.
2
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción alternativos y que
permitan el ahorro de energía.
2
3
1
Evaluar y promover acuerdos con el sector salud y gobiernos locales para
armonizar medidas que protejan el medio ambiente (control de plagas, reducción
de contaminación acuática o reforestación).
Reforestar zonas urbanas para proveer sombra y amortiguar el incremento de la
temperatura, así como para desarrollar microclimas.
1
3
Etapas
Estudiar y promover medidas para el control de vectores en zonas rurales y
urbanas (coadyuvar entre sectores e instituciones).
Mejorar los sistemas de aislamiento, ventilación y control de temperatura en
viviendas.
Adaptaciones sugeridas
Etapa 1: Evaluación de la vulnerabilidad climática actual y futura; formulación de escenarios; identificación de potenciales medidas de adaptación.
Etapa 2: Formación de capacidades; implementación de medidas de adaptación a escala piloto.
Etapa 3: Evaluación del éxito de la medida; institucionalización; impulso y desarrollo de acuerdos y recomendaciones; decretos, programas, normas y modelos en distintos
órdenes de gobierno y sectores.
11 Nota: estas propuestas requieren de todo un proceso de institucionalización (acuerdos y apropiación), garantizando la participación de actores clave a lo largo del proceso.
Etapas: 1 preparación, 2 fortalecimiento, 3 operación.
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Cuadro 4. Medidas de adaptación de los sitios piloto San Fernando y Pánuco ante las principales amenazas identificadas.11
726
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Agricultura
Biodiversidad
y ecosistemas
Quiénes son
vulnerables
Riesgo incremental de
siniestros.
Incendios.
A qué son vulnerables
Las altas temperaturas provocan
estrés y marchitan
los cultivos.
Las altas
temperaturas
provocan estrés
en la vegetación,
combinado con el
uso indiscriminado
de fuego.
Por qué son
vulnerables
2
Desarrollar proyectos piloto con diversas fuentes de financiamiento y programas
federales para enfrentar los riesgos.
1
Planeación agrícola: investigar, promover y adaptar esquemas de irrigación.
1
1
Planeación agropecuaria: uso de variedades con bajos requerimientos de agua,
esquemas de manejo ganadero diferenciados.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de cultivos, cambios
en fechas de siembra.
3
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación, restauración
(incluyendo estudios sobre implicaciones ecológicas por estrés hídrico).
3
3
Establecer y mantener porcentajes mínimos de cubierta arbórea en tierras de uso
agropecuario para proteger la capacidad de los ecosistemas de ofrecer servicios
ambientales.
Establecer corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y áreas
de vegetación natural conservada para permitir la migración de especies y
propágulos a zonas climáticamente más aptas.
2
Etapas
Prevención y control de incendios forestales (coadyuvar en la creación de
programas federales y estatales entre el sector ambiental y el agropecuario).
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación de los sitios piloto San Fernando y Pánuco ante las principales amenazas identificadas (continuación).
S an Fernando y P ánuco
727
A qué son vulnerables
Estrés hídrico de
los ecosistemas.
Disminución de la
capacidad de renovación
de servicios ambientales
de los ecosistemas.
Quiénes son
vulnerables
Biodiversidad
y ecosistemas
Amenaza
Sequías
Bajo nivel de
resiliencia.
Por qué son
vulnerables
1
1
1
2
Establecimiento de zonas o bosques semilleros y calendario de colecta.
Implementar programas de pago por servicios ambientales.
Investigar y comunicar el conocimiento ecológico indígena.
Impulsar reglamentos para conservar recursos forestales a través de comités
locales.
1
Promover programas de plantación de árboles de baja talla que presenten mayor
resistencia a sequías o requieran poco riego en los primeros meses.
1
2
Promover el modelaje y monitoreo hidrometeorológico acoplado al sistema
de alerta temprana, en conjunción con investigaciones ecológicas ante estrés
hídrico.
Cambios en el calendario de siembras de árboles para asegurar una mayor
probabilidad de supervivencia.
1
Mejorar el diagnóstico de las zonas de sequías mediante el fortalecimiento del
sistema de registros hidrometeorológicos de la CONAGUA.
1
1
3
Establecer y restaurar corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y
áreas de vegetación natural conservada para permitir la migración de especies y
propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación (con especies
nativas), restauración (incluyendo estudios sobre implicaciones ecológicas por
estrés hídrico).
Considerar un reordenamiento territorial en donde se contemplen los efectos del
cambio climático.
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación de los sitios piloto San Fernando y Pánuco ante las principales amenazas identificadas (continuación).
728
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Sequías
Amenaza
Manejo ineficiente
de agua.
Manejo ineficiente
de agua.
Menor disponibilidad de
agua para la población.
Falta de agua para los
cultivos.
Zonas
urbanas y
rurales
Agricultura
Bajo nivel de
resiliencia.
Por qué son
vulnerables
Biodiversidad
y ecosistemas
A qué son vulnerables
Estrés hídrico de
los ecosistemas.
Disminución de la
capacidad de renovación
de servicios ambientales
de los ecosistemas.
Quiénes son
vulnerables
Estudio de mercados y uso de escenarios (y alertas tempranas) para ser
utilizados previos a cultivos.
Captación y almacenamiento de agua de lluvia, reutilización del agua.
1
3
2
3
3
1
Promover estudios y convenios para pagos de servicios ambientales, cuotas y
fideicomisos de retribución urbano-rural.
Promover aditamentos y políticas que disminuyan el consumo de agua en
vivienda e industria.
Cambios en prácticas agrícolas: diversificación de cultivos; irrigación (riego por
goteo).
Manejo del riesgo.
2
Coadyuvar en la vigilancia y promoción de medidas de manejo de pozos.
1
2
3
2
Coadyuvar y promover el manejo integrado del recurso agua en el nivel de
cuenca mediante medidas estructurales.
Potenciar la recarga de acuíferos.
Aprovechar el caudal de uso urbano aguas abajo de la cuenca (es un caudal
invariable).
Promover normas y técnicas para la captación de agua de lluvia.
1
Etapas
Implementación de viveros municipales, en los que las comunidades propietarias
sean responsables de su producción y del mejoramiento de especies.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación de los sitios piloto San Fernando y Pánuco ante las principales amenazas identificadas (continuación).
S an Fernando y P ánuco
729
Falta de agua para el
ganado.
Menor disponibilidad de
agua para la población.
Zonas
urbanas y
rurales
Ganadería
A qué son vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Fuente: León et al., 2007.
Sequías
Amenaza
Manejo ineficiente
de agua.
Manejo ineficiente
de agua.
Por qué son
vulnerables
1
3
1
3
2
Recuperar la calidad de agua de los canales de riego.
Incorporar el manejo del ciclo de sequías en organizaciones comunitarias.
Promover la recuperación de suelos y la utilización de variedades resistentes
como proyectos piloto (a través de programas federales o estatales de
reconversión).
Promover medidas estructurales y cambios en prácticas ganaderas para el
manejo del riesgo (garantizar la disminución de los impactos negativos sobre el
medio ambiente, directos e indirectos).
Reubicar abrevaderos, promover cambios en regímenes de pastoreo y manejo
de hatos.
Utilizar especies y razas alternativas.
Implementar tecnologías como jagüeyes.
3
2
1
1
2
1
1
Etapas
Manejo de tierras: utilización óptima de tierras, incluidos pastizales y matorrales.
Seleccionar y almacenar semillas: preservar la variedad genética de cosechas
locales.
Promover la siembra de hortalizas.
Promover difusión y estudios de diagnóstico e impactos socioeconómicos de
sequías.
Construir invernaderos.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación de los sitios piloto San Fernando y Pánuco ante las principales amenazas identificadas (continuación).
7.5 Medidas específicas de adaptación: sitios Papaloapan
y Coatzacoalcos
Norma Munguía Aldaraca, Cuauhtémoc León et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al., Leticia Gómez et al.,
Boris Graizbord et al., Víctor Magaña et al.
Los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos forman uno de los sistemas fluviales más importantes de México. Los humedales de las desembocaduras de estos ríos tienen características similares en cuanto a ecosistemas y clima por su ubicación geográfica y abundante
caudal de descarga. Ambos sitios son representativos de los estuarios del centro del
Golfo de México. Sin embargo, también tienen diferencias marcadas por ejemplo alta
urbanización en la ciudad de Coatzacoalcos y alto índice de marginación en la cuenca del
Papaloapan. A continuación se presenta un breve resumen de las principales presiones
que sufren ambos sitios por las actividades humanas y los efectos del cambio climático.
Para una descripción detallada referimos al lector a las secciones 5.3 y 5.4.
7.5.1 Humedales del río Papaloapan
En la zona de influencia de este sistema estuarino se desarrollan actividades de agroindustria que son muy contaminantes y demandan gran cantidad de agua1. El uso de
fertilizantes para los cultivos contamina los cauces de agua al ser acarreados por los
escurrimientos. En cuanto al uso de suelo, este sitio cuenta con una de las tasas de
deforestación más elevada de toda la zona de estudio, debido, principalmente, a la
expansión de la frontera pecuaria, seguida por el crecimiento agrícola, habitacional
e industrial. Grandes porciones de vegetación hidrófila han sido convertidas a pas1 Rodríguez et al., 2007.
730
tizales2. Ante el cambio climático, las inundaciones son la principal amenaza por el
aumento en el nivel del mar y el efecto de huracanes y tormentas3. Se estima que
cuatro de cada diez empleos son vulnerables a este fenómeno en el corto plazo4. El
cuadro 1 muestra algunas amenazas y presiones previsibles para estos humedales,
tanto por el cambio climático como por actividades humanas, con respecto al manejo
del agua. También se proponen ciertas medidas para reducirlas.
Cuadro 1. Humedales del río Papaloapan: escenarios de las tendencias en el uso del agua al
año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Urbano
Tendencias
Expansión urbana sobre tierras bajas, alejadas de los
montículos originales en Cosamaloapan, Tuxtepec y
Carlos A. Carrillo.
Vulnerabilidad alta en asentamientos aledaños a
los márgenes de los ríos Papaloapan, San Juan y
Tesechoacán.
Creciente aumento en la demanda de agua potable
y mayor presión sobre los acuíferos subterráneos;
problemas de contaminación por mayores reflujos.
Agotamiento de pozos profundos por salinización de
los mantos en suelos arenosos: caso de Alvarado y
Tlacotalpan.
Afectaciones en la infraestructura por el aumento en el
nivel del mar en Alvarado y Tlacotalpan:
a) Renivelación de la red de drenaje en puntos bajos de
desfogue.
b) Recurso a cárcamos de bombeo de aguas servidas.
Afectación en las zonas bajas de los municipios de
Tlalixcoyan, Ignacio de la Llave y Alvarado (con
densidades rurales altas); mayor vulnerabilidad en los
ranchos y poblados cercanos a lagunas costeras y cauces
fluviales próximos a la desembocadura.
Probabilidad Medidas
Adecuación de los
planes reguladores
de suelo urbano.
Muy alta
Establecimiento de
zonas perimetrales
de amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Reubicación de
asentamientos
humanos en riesgo.
2 Gómez et al., 2007.
3 Magaña et al., 2007.
4 Graizbord et al., 2007.
P apaloapan y C oatzacoalcos
731
Cuadro 1. Humedales del río Papaloapan: escenarios de las tendencias en el uso del agua al
año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación (continuación).
Sector
Tendencias
Industrial
Portuario
Pesquero
Agropecuario
Crisis estructural en los cinco ingenios cañeros de la
zona.
Bajo crecimiento en la demanda de agua para uso
agroindustrial.
Descargas de aguas industriales: déficit constante en las
capacidades de tratamiento.
Afectación de los malecones, muelles y antiguo astillero
de Alvarado.
Ampliación de las fases de veda; cambios en los
calendarios por introducción de especies marinas.
Cambios en los flujos de aguas contaminadas.
Salinización de praderas naturales y artificiales
colindantes con las tierras inundables; disminución en la
capacidad de irrigación de los campos cañeros.
Probabilidad Medidas
Alta
Alta
Muy alta
Control de la
contaminación;
subsidios fiscales
para la reubicación,
la conversión y la
adaptación.
Muy alta
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
Para atenuar las tendencias actuales de deterioro del suelo se propone5 instrumentar la restauración de dunas costeras en áreas determinadas y la restricción de uso
agrícola en zonas de humedales riparios6.
7.5.2 Humedales del río Coatzacoalcos
La actividad que ha dado lugar al desarrollo económico de este sistema estuarino
es la presencia de PEMEX, a través de la industria petroquímica, que genera la gran
mayoría del valor de la producción7. El río Coatzacoalcos es utilizado como medio de
transporte de los productos, por lo que este humedal es uno de los sitios más contaminados del Golfo de México8. El auge de la industria ha propiciado la expansión de la
mancha urbana, causando fuertes impactos en la vegetación natural y en los recursos
hídricos, pues el acuífero ya muestra señales de sobreexplotación. La expansión de
5
6
7
8
Gómez et al., 2007.
Humedales de las márgenes de ríos y arroyos.
Graizbord et al., 2007.
Rodríguez et al., 2007.
732
M edidas
de adaptación por sitio piloto
la frontera agropecuaria es el principal motor en el cambio de uso del suelo y, junto
con el crecimiento urbano, ha propiciado una de las mayores tasas de deforestación
de todos los lugares estudiados. Los bosques han sido convertidos en pastizales9. En
cuanto a los efectos del cambio climático, las inundaciones por tormentas severas y
“nortes”, así como el aumento del nivel del mar representan los mayores riesgos10.
El cuadro 2 presenta, a manera de resumen, algunas de las principales amenazas
previstas para este sitio, bajo el enfoque del manejo de agua. Se presentan, asimismo,
ciertas medidas para atenuar los efectos.
Cuadro 2. Humedales del río Coatzacoalcos: escenarios de las tendencias en el uso del agua al
año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Tendencias
Probabilidad
Expansión urbana sobre dunas costeras y zonas
de pantano, implicando nivelaciones y rellenos.
Vulnerabilidad alta por el aumento del nivel del mar en
asentamientos aledaños a los márgenes del río Calzadas
y margen derecha del Coatzacoalcos.
Medidas
Adecuación de los
planes reguladores
de suelo urbano.
Creciente aumento en la demanda de agua potable
y mayor presión sobre los acuíferos de la cuenca del
Huazuntlán (represa Yuribia).
Agotamiento de pozos profundos por salinización de los
mantos en suelos arenosos.
Urbano
Pérdida de litoral y suelo urbano en la Congregación de
Allende (al este de Coatzacoalcos).
Afectaciones en la infraestructura por el aumento en el
nivel del mar:
a) Renivelación de la red de drenaje en puntos de
desfogue.
b) Recurso a cárcamos de bombeo de aguas servidas.
c) Aumento en la contaminación del pantano.
Afectación en las zonas bajas de Minatitlán, Nanchital
y Tuzandépetl; mayor vulnerabilidad en los ranchos y
poblados cercanos a los cauces fluviales.
Muy alta
Establecimiento
de zonas
perimetrales de
amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Reubicación de
asentamientos
humanos en riesgo.
9 Gómez et al., 2007.
10 Magaña et al., 2007.
P apaloapan y C oatzacoalcos
733
Cuadro 2. Humedales del río Coatzacoalcos: escenarios de las tendencias en el uso del agua al
año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación (continuación).
Sector
Tendencias
Probabilidad
Medidas
Estancamiento del complejo petroquímico por
agotamiento de los yacimientos de crudo nacionales.
Industrial
Mayor importación de insumos petroquímicos
primarios.
Bajo crecimiento en la demanda de agua de la represa
Mezcalapa (río Uxpanapa).
Muy alta
Descargas de aguas industriales: mismas tendencias que
en el sector urbano.
Portuario
Pesquero
Afectación de los malecones, muelles fiscales y dársena
de Pajaritos por el aumento del nivel del mar.
Ampliación de las fases de veda; cambios en los
calendarios por introducción de especies marinas.
Alteración de la zona intermareal.
Alta
Muy alta
Cambios en los flujos de aguas contaminadas.
Agropecuario Salinización de praderas naturales y artificiales
colindantes con las tierras inundables.
Establecimiento
de zonas
perimetrales de
amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Alta
Control de la
contaminación;
subsidios fiscales
para la reubicación,
conversión y
adaptación.
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
Para contrarrestar la degradación del suelo en el sistema estuarino de Coatzacoalcos se propone la restricción de la actividad ganadera en regiones de humedales
riparios y la elaboración de un ordenamiento ecológico regional11.
7.5.3 Medidas de adaptación ante los efectos del
cambio climático
En los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos, la actividad antropogénica
ha disminuido drásticamente la vegetación. Bajo el escenario actual y de seguir como
hasta ahora, la disponibilidad de agua seguirá en decremento en los siguientes veinte
años. Si la operación de las acciones de protección civil no integra los escenarios de
aumento en el nivel del mar y de eventos hidrometeorológicos severos, la población
estará en riesgo durante los siguientes años. Lo mismo puede aplicarse a la creciente
11 Gómez et al., 2007.
734
M edidas
de adaptación por sitio piloto
actividad agropecuaria y expansión urbana. De funcionar las actuales políticas de
conservación, podría esperarse una estabilización en la disponibilidad del agua y el
sostenimiento de la economía regional. Sin embargo, de aplicarse medidas de adaptación al cambio climático, el escenario sería más sustentable e incluso podría beneficiar
las actividades económicas. El cuadro 3 presenta las tendencias esperadas en caso de
emplearse las medidas propuestas o de “seguir como vamos”.
Cuadro 3. Matriz de tendencias, sitios Papaloapan y Coatzacoalcos.
Indicador/escenario
1. Tendencia con
cambio climático,
sin políticas y sin
adaptación
2. Tendencia con
políticas y cambio
climático
3. Tendencia con
políticas de adaptación
al cambio climático
Conservación de la
cubierta vegetal y de la
biodiversidad
Disponibilidad de agua
Protección civil
Economía rural
Economía urbana
Nota: las líneas se construyeron con tres puntos de referencia: el punto de inicio (1976-1980); el momento actual
(2000-2007), y el tiempo donde se sabe que las condiciones influenciadas por el cambio climático se vuelven más
evidentes (2020-2030). La pendiente de la línea representa la rapidez con la que el indicador evoluciona (de forma
paulatina, drástica o constante). Las líneas mixtas muestran que el indicador cambia de tendencia y, para estos sitios,
los cambios pueden ser hacia un estado constante o negativo (tanto drástico como paulatino).
Fuente: Magaña et al., 2007; León et al., 2007; Gómez et al., 2007.
Ambos sitios se encuentran en el estado de Veracruz y son los que aglutinan
al mayor número de municipios sujetos a estudio. Cabe destacar que Veracruz se
encuentra entre los estados del país que, en fechas recientes, se ha beneficiado maP apaloapan y C oatzacoalcos
735
yormente de los recursos del FONDEN.12 De acuerdo con el estudio realizado, estos
dos sitios presentan vulnerabilidad común ante los siguientes efectos del cambio
climático:
1. Aumento en el nivel del mar, impactando ecosistemas de humedales, zonas urbanas y rurales, pesca, salud pública, agricultura y ganadería.
2. Cambios en el ciclo anual del clima, impactando principalmente a la agricultura.
3. Eventos extremos de lluvia, dañando zonas urbanas y rurales, salud, agricultura,
transporte, y comunicaciones e industria.
A continuación se presenta un análisis detallado de las potenciales medidas de
adaptación propuestas, de acuerdo con la amenaza para cada sector y el marco institucional disponible para su instrumentación13.
7.5.3.1 Aumento en el nivel del mar
• Ecosistemas de humedales: la amenaza detectada consiste en la intrusión de agua
salada en acuíferos costeros, con la consecuente pérdida total o parcial de los
humedales, derivado de la ubicación y exposición de dicha zona. Las medidas de
adaptación consisten principalmente en garantizar espacios vecinos para migración
de especies y propágulos, crear barreras de protección que incrementen la zona de
humedales y restaurar territorios. La implementación de estas medidas involucra
al ejecutivo estatal y a los gobiernos municipales, principalmente en relación con
la celebración de acuerdos y convenios de coordinación con la federación para el
manejo y la vigilancia de las áreas naturales con alguna categoría de protección.
El objetivo principal es la protección, conservación y restauración del equilibrio
ecológico, así como del ambiente en la zona federal marítimo terrestre y en la
zona federal de los cuerpos de agua. En el caso del municipio de Coatzacoalcos,
compete también a la Comisión de Ecología y Medio Ambiente. Cabe mencionar
que este municipio tiene un ordenamiento ecológico local aprobado el 30 de julio
de 2007.
12 LEAD, 2006.
13 Análisis realizado por Munguía et al., 2007, con datos de León et al., 2007.
736
M edidas
de adaptación por sitio piloto
• Zonas urbanas y rurales: principalmente se identificó como amenaza la inundación por razones topográficas. Las medidas de adaptación propuestas contienen
la construcción de barreras, muros de estabilización y control de avenidas, así
como el mantenimiento del drenaje. En la instrumentación de estas medidas
deben involucrarse las siguientes dependencias: la Unidad de Protección Civil del
estado de Veracruz, la Subsecretaría de Protección Civil estatal, los ayuntamientos de los municipios, las comisiones municipales de asentamientos humanos y
la Secretaría de Seguridad Pública estatal. Lo anterior en virtud de que el gobierno del estado y los municipios tienen a su cargo la zonificación y los planes
de desarrollo urbano estatal y municipal. Los municipios cuentan con la facultad
de determinar sus usos de suelo. Cada uno de estos gobiernos cuenta con sus
sistemas de protección civil (estatal y municipal). También debe involucrarse la
Secretaría de Desarrollo Regional sobre soluciones relativas a los asentamientos
humanos. Finalmente, se recomienda un acercamiento con la Dirección General
de Asentamientos Humanos y Obras Públicas estatal para los requisitos técnicos
a que deberán sujetarse las construcciones e instalaciones.
• Pesca: la contaminación es la amenaza identificada, principalmente porque el agua
se expone a cambios en su calidad. Las medidas de adaptación sugeridas incluyen
la acuicultura sustentable, planeación de capturas, reducción de contaminación orgánica en ecosistemas acuáticos, conservación de hábitats, biodiversidad y calidad
del agua. El acercamiento con la CONAPESCA para el apoyo a los ordenamientos
pesqueros forma parte de la implementación de estas medidas. Esto involucra a la
Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Pesquero estatal para celebrar convenios
para la acuicultura sustentable, promover el desarrollo de comunidades pesqueras
y de acuicultura, conservar la flora y fauna marina, y fomentar su desarrollo. Estos
convenios se celebrarían con la federación, otros estados y con los municipios.
• Salud pública: se detectó como amenaza la falla en los servicios en caso de inundación de las ciudades, por tener éstas una infraestructura ineficiente. Entre las
medidas de adaptación se contempla la mejora de la infraestructura existente
y el control de enfermedades. La implementación de las medidas involucra el
acercamiento con la Secretaría de Salud y Asistencia del estado de Veracruz, de
conformidad con el Plan Estatal de Desarrollo, en lo concerniente al control de enfermedades. Asimismo, es necesario colaborar con la Unidad de Protección Civil
del estado, la Subsecretaría de Protección Civil del estado, los ayuntamientos de
P apaloapan y C oatzacoalcos
737
los municipios y la Secretaría de Seguridad Pública, a fin de prevenir y atender las
emergencias por inundación.
• Agricultura: la inundación es la amenaza prevista en este caso, con la consecuente
pérdida de superficie para cultivar. Las medidas de adaptación que se consideran
más adecuadas consisten en la reubicación de los cultivos, la planeación y preservación de variedades y el aprovechamiento del agua.
• Ganadería: la amenaza consiste en que se presentarán inundaciones, con la consecuente pérdida de superficie para esta actividad. Dentro de las medidas propuestas destacan la reubicación y planeación, promoviendo especies de ganado
fuertes y adaptadas, así como la ganadería intensiva y el aprovechamiento del
agua del mar en las granjas.
Para lograr la instrumentación de estas medidas se planea fortalecer la producción y el desarrollo pecuario mediante el establecimiento de políticas y programas de fomento, ejecutando obras y servicios pecuarios en coordinación con el
gobierno federal y municipal, así como con los productores. Estas acciones deberán
coordinarse a través de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y
de Pesca del estado, y de la Comisión Edilicia de Fomento Agropecuario.
7.5.3.2 Cambios en el ciclo anual del clima
• Agricultura: Los cambios en el ciclo anual del clima pueden resultar en sequías y
retrasos en el inicio de lluvias, lo cual conlleva temperaturas altas y la posible la
expansión de plagas. La introducción de nuevas tecnologías, irrigación, variedades
agrícolas y el almacenamiento preventivo de granos son algunas de las medidas de
adaptación propuestas.
A través del programa Alianza Contigo pueden implementarse las medidas.
Específicamente, este programa de fomento agrícola se orienta sobre tres estrategias: reconversión productiva, integración de cadenas agroalimentarias y atención
de factores críticos. Para ello existen subprogramas como el de Fomento a la
Inversión y Capitalización, que apoya la adquisición de equipo para los siguientes
rubros: almacenamiento, transformación y transporte poscosecha de productos
agrícolas; establecimiento y modernización de invernaderos; adquisición, instalación y modernización de sistemas de riego tecnificado.
738
M edidas
de adaptación por sitio piloto
7.5.3.3 Eventos extremos de lluvia
• Zonas urbanas y rurales: las inundaciones son la amenaza principal, que se manifestará en las zonas bajas, y serán causadas en parte por falta de capacidad del
drenaje. Dentro de las medidas de adaptación propuestas se sugiere la construcción de barreras, muros de estabilización y control de avenidas, el mantenimiento
del sistema de drenaje, el desazolve planeado de bocas de ríos, los sistemas de
alerta temprana y el uso de seguros.
Para instrumentar estas medidas deberá involucrarse a la Secretaría de
Seguridad Pública estatal, la Subsecretaría de Protección Civil estatal, y las dependencias, organismos y ayuntamientos relacionados con protección civil. Las
autoridades de los ayuntamientos deberán ejercitar sus facultades de zonificación
y elaborar planes de desarrollo urbano, así como controlar y vigilar la utilización
del suelo en sus jurisdicciones territoriales a través de las Comisiones de Asentamientos Humanos, Fraccionamientos, Licencias y Regularización de la Tenencia
de la Tierra. En materia de drenaje y asentamientos humanos deberán intervenir
también las secretarías de Comunicaciones, y la de Desarrollo Social y Medio
Ambiente. Coatzacoalcos cuenta también con la posibilidad de la aplicación de su
ordenamiento ecológico territorial, mismo que fue aprobado por el Cabildo el 30
de julio de 2007.
• Salud: amenaza la mayor incidencia de enfermedades infecciosas relacionadas
con la calidad del agua; se sugieren como medidas de adaptación el uso de
sistemas de alerta temprana, materiales y técnicas de construcción adecuados,
y la contratación de seguros. La Secretaría de Salud estatal deberá involucrarse
en la instrumentación de estas medidas, principalmente para que se ocupe de
la coordinación con las instituciones de salud de los gobiernos federal y municipal.
• Agricultura: la amenaza detectada consiste en inundaciones derivadas de las
características topográficas. Las medidas de adaptación sugeridas se centran
en la utilización de diferentes variedades, la planeación agrícola, la mejora de las
prácticas de cultivos, los cambios en fechas y la rotación de cultivos.
Con la finalidad de instrumentar las medidas sugeridas, se debe involucrar
a la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y de Pesca estatal
para capacitar a los productores y para proponer, apoyar y ejecutar las obras de
P apaloapan y C oatzacoalcos
739
infraestructura agrícola e hidráulica junto con el gobierno federal, los municipios
y las organizaciones de productores. La Secretaría de Comunicaciones y la de
Desarrollo Social y Medio Ambiente pueden intervenir para los proyectos de ingeniería agrícola e hidráulica, y obras. Asimismo, se debe acudir al SINAPROC, para
coordinar la prevención y atención de desastres con los sistemas estatales y municipales de Protección civil. Finalmente, se debe involucrar a la SAGARPA, porque
de ella depende el programa para el Fondo de Apoyo a Productores Primarios sin
Posibilidades Económicas de Contratar Seguros (FAPRACC) y al INIFAP, que es
el instituto que puede cooperar con los estados para generar conocimientos o innovaciones tecnológicas que contribuyan al desarrollo sustentable de las cadenas
agroindustriales, forestales y agrícolas del país.
• Transporte y comunicaciones: la amenaza detectada consiste en daños a la infraestructura del ramo (puentes, caminos, puertos). Se sugieren como medidas
de adaptación la mejora de la infraestructura, y el uso de seguros y de sistemas
de alerta temprana. La instrumentación de parte de estas medidas corresponde
a la Secretaría de Comunicaciones del estado de Veracruz, ya que se encarga
de las obras públicas y los programas anuales de construcción, conservación y
rehabilitación de carreteras, puentes y aeropuertos de jurisdicción estatal. Dicha
secretaría debe trabajar conjuntamente con los ayuntamientos en la realización
de obras. Asimismo, se debe acudir al SINAPROC, para que se coordine con los
sistemas estatales y municipales de protección civil en la prevención y atención
de desastres.
• Industria: la amenaza para este rubro consiste en daños a la infraestructura, principalmente la petrolera, petroquímica y manufacturera, influida en gran parte por
los tipos de construcción utilizados. Como medidas de adaptación se propone
adecuar los códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para
evitar daños, así como promover el uso de materiales y técnicas de construcción
adecuados. Su instrumentación requiere de la intervención de la Dirección General de Obras Públicas y la de Desarrollo Urbano del estado para fijar los requisitos
técnicos a que deberán sujetarse las construcciones e instalaciones. También hay
que coordinarse con el INVIVIENDA, con las autoridades municipales de asentamientos humanos, fraccionamientos, licencias y regularización de la tenencia de la
740
M edidas
de adaptación por sitio piloto
tierra, y con los responsables de comunicaciones y obras públicas. Finalmente, en
materia de sistemas de alerta, se debe acudir al SINAPROC, para que se coordine
con los sistemas estatales y municipales de protección civil.
7.5.4 Programación de las medidas
El cuadro 4 es una matriz programática de las potenciales medidas de adaptación
presentadas hasta ahora para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos.
Es importante recalcar que tanto las medidas como las etapas aquí presentadas son
a título indicativo, y pueden variar de acuerdo con las necesidades específicas del
proyecto y de los consensos logrados con los actores clave y la población. A final
de cuentas, la instrumentación de las medidas depende del grado de participación y
apropiación por parte de la comunidad afectada por el incremento en la variabilidad
del clima regional y el cambio climático global.
P apaloapan y C oatzacoalcos
741
742
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Inundación.
Ecosistemas de
humedales
Zonas urbanas y
rurales
A qué son
vulnerables
Intrusión de
agua salada
en acuíferos
costeros. Pérdida
total o parcial del
humedal.
Quiénes son
vulnerables
Ubicación y
exposición
(topografía).
Ubicación y
exposición.
Por qué son
vulnerables
3
1
1
2
Controlar la cantidad y calidad de agua que llega a los ecosistemas
costeros.
Identificar estrategias de conservación de humedales (refugio de especies,
viveros y germoplasma).
Restitución de ecosistemas de agua dulce por marinos.
Promover obras de ingeniería costera: construcción de barreras, diques y
muros de estabilización para el control de aumentos considerables en el
nivel del mar.
3
2
Promover decretos de áreas protegidas para las zonas de humedales.
Reubicar asentamientos desarrollados en zonas de alto riesgo.
2
Construir barreras y muros de estabilización para el control de aumentos
considerables en el nivel del mar.
2
1
Garantizar espacios vecinos para permitir la migración de especies y
propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Mejorar (rediseñar) y reparar la infraestructura de drenaje.
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Etapa 1: Evaluación de la vulnerabilidad climática actual y futura; formulación de escenarios; identificación de potenciales medidas de adaptación.
Etapa 2: Formación de capacidades; implementación de medidas de adaptación a escala piloto.
Etapa 3: Evaluación del éxito de la medida; institucionalización; impulso y desarrollo de acuerdos y recomendaciones; decretos, programas, normas y modelos en distintos
órdenes de gobierno y sectores.
14 Nota: estas propuestas requieren de todo un proceso de institucionalización (acuerdos y apropiación), garantizando la participación de actores clave a lo largo del proceso.
Etapas: 1 preparación, 2 fortalecimiento, 3 operación.
Aumento
en el nivel
del mar
Amenaza
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos ante las principales amenazas identificadas.14
P apaloapan y C oatzacoalcos
743
Aumento
en el nivel
del mar
Amenaza
Agricultura
Etapas
1
Adaptaciones sugeridas
Promover la acuicultura y maricultura sustentables a través de los
ordenamientos territoriales y ambientales.
Reubicar y planear las superficies de siembra. Preservar las variedades en el
1
cultivo de especies (variabilidad genética).
Inundación.
Pérdida de
superficie para
cultivar.
1
1
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para 2
evitar inundaciones.
Promover ordenamientos pesqueros por laguna costera que impulsen
acuicultura y maricultura.
Promover estrategias para disminuir la intrusión salina.
Planear y ajustar fechas de captura de especies de alta demanda o alto
1
valor comercial.
Exposición a
cambios en la
Reducir la contaminación orgánica (especialmente nitratos) en ecosistemas
calidad del agua.
acuáticos, para evitar la eutrofización (que se potencia con el ascenso de la 1
temperatura) y conservar hábitats, biodiversidad y calidad del agua.
Por qué son
vulnerables
Fallas en servicios
Infraestructura
por inundación de
ineficiente.
la ciudad.
Contaminación.
Pesca
Salud pública
A qué son
vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos ante
las principales amenazas identificadas (continuación).
744
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Ganadería
Zonas urbanas y
rurales
Eventos
extremos
de lluvia
Quiénes son
vulnerables
Aumento
en el nivel
del mar
Amenaza
Inundaciones.
Inundación.
A qué son
vulnerables
Falta de
capacidad en
el sistema de
drenaje.
Ubicación y
exposición en
zonas bajas.
Pérdida de
superficie.
Por qué son
vulnerables
Mejorar y reparar la infraestructura de drenaje.
2
Construir terrazas para controlar la erosión; manejo del agua de lluvia.
2
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para
2
evitar inundaciones.
2
1
Promover medidas estructurales y cambios en prácticas ganaderas para
el manejo del riesgo (garantizar la disminución de los impactos negativos
sobre el medio ambiente, directos e indirectos).
Construir barreras y muros de estabilización para el control de avenidas.
1
3
Etapas
Utilizar especies y razas alternativas.
Reubicar zonas de pastoreo y hacer cambios en regímenes de pastoreo.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos ante
las principales amenazas identificadas (continuación).
P apaloapan y C oatzacoalcos
745
Eventos
extremos
de lluvia
Amenaza
Agricultura
Salud
Inundaciones.
Zonas urbanas y
rurales
Inundaciones.
Características
topográficas.
3
1
Etapas
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de cultivos,
cambios en fechas de siembra.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar el uso de diferentes
variedades resistentes a las lluvias.
1
1
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para
2
evitar inundaciones.
Estudiar y promover medidas para el control de vectores en zonas rurales y
1
urbanas (coadyuvar entre sectores e instituciones).
Implementar desazolve planeado de bocas de ríos.
Desarrollar programas de capacitación comunitaria de preparación ante
desastres.
Ubicación y
exposición en
zonas bajas.
Falta de
capacidad en
el sistema de
drenaje.
Adaptaciones sugeridas
Por qué son
vulnerables
Mayor incidencia
de enfermedades
Aumento de
infecciosas
relacionadas con vectores.
la calidad del agua
(cólera, tifoidea).
A qué son
vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos ante
las principales amenazas identificadas (continuación).
746
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Industria
Energía
Tipos de
construcción.
Tipos de
construcción.
Transporte
y comunicaciones
Daños a
infraestructura
(torres y cables
de transmisión
eléctrica).
Daños a
infraestructura
(petrolera y
petroquímica,
manufacturera).
Daños a
infraestructura
(caminos,
puentes, puertos, Tipos de
aeropuertos,
construcción.
ferrocarriles, torres
y cableado de
comunicación).
Características
topográficas.
Por qué son
vulnerables
Inundaciones.
A qué son
vulnerables
Agricultura
Quiénes son
vulnerables
Fuente: León et al., 2007.
Eventos
extremos
de lluvia
Amenaza
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
2
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para 2
evitar daños.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para 2
evitar daños.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente para
evitar daños.
2
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
1
1
Seleccionar y almacenar semillas.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de rotación
de cultivos.
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos ante
las principales amenazas identificadas (continuación).
7.6 Medidas específicas de adaptación: sitios Carmen-
Pajonal-Machona y Los Petenes
Norma Munguía Aldaraca, Cuauhtémoc León et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al., Leticia Gómez et al.,
Boris Graizbord et al., Víctor Magaña et al.
Los humedales del sistema lagunar Carmen-Pajonal-Machona (SLCPM) y de la
Reserva de la Biosfera Los Petenes (RBLP) comparten ciertas características climatológicas, pero tienen aspectos muy contrastantes. Mientras que en el sistema lagunar
las actividades humanas han creado un desequilibrio ecológico sin precedentes, en
la reserva de la biosfera las medidas de conservación han limitado efectivamente el
desarrollo en el área. El primero se encuentra en Tabasco y el segundo en Campeche. Antes de comentar las potenciales medidas de adaptación al cambio climático
propuestas para estos dos sitios en conjunto, se presenta un breve resumen de las
principales amenazas, tanto por actividades humanas como por eventos climáticos.
Para una descripción detallada referimos al lector a las secciones 5.5 y 5.6.
7.6.1 Humedales de las lagunas Carmen, Pajonal y
Machona
La actividad productiva más importante en la zona de influencia de este sistema
lagunar es la extracción petrolera. Entre los efectos de la presencia de PEMEX en el
sitio destaca la apertura de la Boca Panteones, en la laguna Machona, que alteró el
equilibrio ecológico al introducir agua salada en los sistemas dulceacuícolas, e inundar
y salinizar los suelos. La actividad agrícola también se desarrolla de manera intensiva, lo que demanda grandes volúmenes de agua, así como el uso de fertilizantes y
747
pesticidas que contaminan las fuentes. A ello hay que añadir la contaminación por
hidrocarburos y la proveniente de aguas residuales sin tratamiento1. En cuanto al
uso de suelo, grandes superficies de vegetación hidrófila han sido sustituidas por pastizales para ganado2. Ante el cambio climático, este sitio es vulnerable, sobre todo,
a los eventos extremos de calor e inundaciones provocadas por tormentas severas
y huracanes3. Cabe destacar que ocho de cada diez pesos producidos en este sitio
provienen de actividades vulnerables a los efectos del cambio climático (extracción
petrolera) en el corto plazo4. El cuadro 1 presenta las principales amenazas previsibles
para el Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, con base en el manejo del agua.
También se proponen algunas medidas de adaptación.
Cuadro 1. Humedales de las lagunas Carmen, Pajonal y Machona: escenarios de las
tendencias al año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Tendencias
Probabilidad
Medidas
Expansión urbana sobre zonas bajas y pantanosas,
implicando nivelaciones y rellenos.
Adecuación de los
planes reguladores
de suelo urbano.
Creciente aumento en la demanda de agua
potable y mayor presión sobre los acuíferos de la
cuenca; crecimiento de las ciudades de Cárdenas,
Huimanguillo y Jalpa.
Urbano
Afectaciones en la infraestructura por el aumento
en el nivel del mar; daños a la infraestructura de
PEMEX.
Aumento en la contaminación de lagunas.
Afectación en las zonas bajas de los municipios
de Cárdenas y Huimanguillo; mayor vulnerabilidad
en los ranchos y poblados cercanos a los cauces
fluviales.
1
2
3
4
Rodríguez et al., 2007.
Gómez et al., 2007.
Magaña et al., 2007.
Graizbord et al., 2007.
748
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Muy alta
Establecimiento de
zonas perimetrales
de amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Reubicación de
asentamientos
humanos en riesgo.
Cuadro 1. Humedales de las lagunas Carmen, Pajonal y Machona: escenarios de las tendencias
al año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación
(continuación).
Sector
Industrial
Portuario
Pesquero
Tendencias
Probabilidad
Las actividades agroindustriales competirán
de modo creciente con los ecosistemas y las
actividades agropecuarias por el uso del agua
dulce.
El puerto de Dos Bocas, situado al occidente
del cuerpo lagunar, constituye el punto de salida
de múltiples ductos, después de cruzar por los
humedales que rodean el sistema lagunar.
La actividad ostrícola sufrirá por la salinización
creciente.
Alteración de la zona intermareal.
Muy alta
Establecimiento de
zonas perimetrales
de amortiguamiento
en áreas sujetas a
inundación.
Alta
Muy alta
Cambios en los flujos de aguas contaminadas.
Agropecuario
Medidas
Las actividades desarrolladas sobre las tierras
del Plan Chontalpa se alimentan de las aguas de
los ríos Samaria y Mezcalapa, restando flujos al
sistema lagunar. La competencia por el agua dulce
entre los distritos de riego de la Chontalpa y el
Alta
sistema lagunar se agudizará. El incremento del
nivel del mar puede salinizar los cuerpos de agua
de los que se abastece el distrito de riego.
Control de la
contaminación;
subsidios fiscales
para reubicación,
conversión y
adaptación.
Uso eficiente del
agua
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
Para frenar el actual estado de deterioro se recomienda regular el uso de suelo
agrícola mediante el seguimiento del ordenamiento ecológico, que incluye regiones
de humedales bajo unidades de conservación o restauración5.
5 Gómez et al., 2007.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
749
7.6.2 Humedales de Los Petenes
La Reserva de la Biosfera Los Petenes es un área natural protegida desde 1996.
Debido a ello, al interior del sitio no se desarrollan actividades productivas. Se practica
la pesca, la agricultura y el turismo de baja intensidad6. Sin embargo, la ciudad de
Campeche se encuentra dentro de su zona de influencia y ahí se desarrollan actividades industriales, agropecuarias y turísticas7. Las medidas de conservación han
mantenido en buen estado la cubierta vegetal y no se observa mayor impacto de las
actividades humanas, excepto en el manglar y los petenes mismos. La introducción
de actividades agrícolas en los límites de la reserva señala un punto de atención,
pues las prácticas comunes de roza-tumba-quema aumentan el riesgo de incendios
forestales8. Las principales amenazas de los efectos del cambio climático se dan por
inundaciones ante tormentas, huracanes o el aumento del nivel del mar, así como por
eventos extremos de calor9. En el cuadro 2 se resumen las principales presiones por
actividades humanas y del cambio climático, junto con posibles medidas de adaptación, bajo el enfoque del uso eficiente del agua.
El plan de manejo incluye la conservación de zonas de manglares, así como el
aprovechamiento sustentable de las áreas agrícolas dentro de la reserva. Dicho plan
debe hacerse respetar, además de incentivar la conservación de vegetación hidrófila.
Deben identificarse las áreas agrícolas en los límites de la reserva para vigilar y limitar
su crecimiento10.
6 Bello et al., 2007.
7 Graizbord et al., 2007.
8 Gómez et al., 2007.
9 Magaña et al., 2007.
10 Gómez et al., 2007.
750
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Cuadro 2. Humedales de Los Petenes: escenarios de las tendencias al año 2050, probabilidad
de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Urbano
Agrícola y
pesquero
Turístico
Tendencias
Tratándose de una reserva de la biosfera hay restricciones al
desarrollo urbano.
Aumento en la demanda de agua potable y mayor presión
sobre los acuíferos.
Restricciones al desarrollo de instalaciones turísticas.
Presiones en cuanto a disponibilidad de agua.
Presiones en relación con los desechos generados por los
visitantes.
La actividad pesquera debe sujetarse a las restricciones que
se contemplan en el plan de manejo.
Posible incremento de incendios a causa de la sequía.
La región experimentará fuertes presiones para el desarrollo
de instalaciones turísticas y la visita de un número creciente
de personas. Es necesario formular estrategias que regulen
el acceso y manejo a la zona.
Probabilidad
Medidas
Muy alta
Muy alta
Actualización
y aplicación
del Plan de
Manejo de la
Reserva.
Muy alta
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
7.6.3 Medidas de adaptación ante los efectos del
cambio climático
En el estudio realizado se encontró que el Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona
y la Reserva de la Biosfera Los Petenes son vulnerables ante los siguientes efectos del
cambio climático:
1. Modificaciones en el ciclo anual del clima, afectando la biodiversidad, los ecosistemas y la agricultura.
2. Eventos extremos de calor, afectando la biodiversidad y los ecosistemas.
3. Eventos extremos de lluvia, impactando zonas urbanas y rurales, agricultura,
transporte y comunicaciones.
4. Sequías, afectando principalmente a la agricultura.
5. Huracanes, dañando zonas urbanas y rurales, transporte y comunicaciones, energía, turismo e industria.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
751
A continuación se presenta un análisis detallado de las potenciales medidas de adaptación al cambio climático propuestas para ambos sitios, de acuerdo con la amenaza
para cada sector y el marco institucional disponible para instrumentarlas11. Dado que
estos humedales tienen ciertas diferencias muy marcadas y se localizan en entidades
distintas, en algunos casos se especifican las acciones correspondientes a cada lugar.
7.6.3.1 Cambios en el ciclo anual clima
• Agricultura: El retraso del inicio de lluvias y las altas temperaturas provocarán
sequías y cambios en las condiciones agroclimáticas, que puede manifestarse
mediante la expansión de plagas. Dentro de las medidas de adaptación sugeridas destacan la introducción de nuevas tecnologías, irrigación eficiente, uso de
diferentes variedades, planeación agrícola, uso de esquemas agroambientales,
desarrollo de variedades mejor adaptadas, y el almacenamiento preventivo de
granos y alimentos.
Para instrumentar dichas medidas se propone utilizar el programa de la
SAGARPA Alianza Contigo, dedicado al fomento agrícola, y que se orienta sobre la reconversión productiva, la integración de cadenas agroalimentarias y la
atención de factores críticos. Para ello existen subprogramas de tecnificación de
la producción que dan recursos para la adquisición de maquinaria e implementos
agrícolas; equipo para el almacenamiento, transformación y trasporte poscosecha
de productos agrícolas; adquisición, instalación y modernización de sistemas de
riego tecnificado, y para el fomento productivo y reconversión de productos.
• Biodiversidad y ecosistemas12: algunas de las manifestaciones que se presentarán
como consecuencia del cambio climático son la modificación de regiones ecológicas, la migración de ecosistemas a mayores latitudes y altitudes, el desfase del
ciclo hidrológico y la transformación de hábitats, así como la invasión de especies exóticas, que modificarán estructuras tróficas y eliminarán especies nativas.
Las medidas de adaptación sugeridas tienden a la conservación, reforestación y
restauración; mismas que se espera puedan implementarse a través del conve11 Análisis realizado por Munguía, 2007, con datos de León et al., 2007.
12 Principalmente en Los Petenes.
752
M edidas
de adaptación por sitio piloto
nio suscrito entre el estado de Campeche y SEMARNAT del 19 de octubre de
2004.
7.6.3.2 Eventos extremos de calor
• Biodiversidad y ecosistemas: los incendios se identificaron como la principal
amenaza, debido a las altas temperaturas combinadas con el uso indiscriminado
de fuego. Dentro de las medidas de adaptación sugeridas se encuentran la prevención y el control de incendios forestales, la protección de la capacidad de los
ecosistemas para proveer servicios ambientales, al mantener porcentajes mínimos
de cubierta arbórea, la reforestación, y el establecimiento de corredores biológicos, para dar cabida a la migración de especies hacia zonas más aptas.
En Los Petenes se espera lograr la adaptación a través del ordenamiento
ecológico territorial estatal que se encuentra en elaboración y a través del convenio suscrito por el estado de Campeche con SEMARNAT el 19 de octubre de
2004.
Para la instrumentación de las medidas en el SLCPM, se recomienda tener
acercamientos con la Comisión Estatal Forestal, la Secretaría de Asentamientos
Humanos y Obras Públicas (específicamente con su Subsecretaría de Desarrollo
Urbano y Ordenamiento Territorial), las secretarías de Ecología y de Desarrollo
Agropecuario, Forestal y de Pesca, y con el Consejo Interinstitucional para el
Medio Ambiente y el Desarrollo Social. El estado deberá suscribir convenios de
coordinación con la federación para asumir funciones sobre el manejo y la vigilancia de las áreas naturales protegidas; el control de acciones para la protección, preservación y restauración del equilibrio ecológico, y la protección al ambiente en la
zona federal marítimo terrestre. Este tipo de acuerdos puede ser suscrito también
por los municipios con el estado. Se recomienda que los municipios emitan sus
ordenamientos ecológicos y territoriales. El Consejo Estatal de Ecología deberá
procurar la coordinación entre las dependencias federales, estatales y municipales.
Se deben buscar apoyos a través del ProÁrbol. Cabe recordar que Tabasco cuenta
con un ordenamiento ecológico territorial estatal publicado en el Diario Oficial
Estatal el 20 de diciembre de 2006.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
753
7.6.3.3 Eventos extremos de lluvia
• Zonas urbanas y rurales: las inundaciones constituyen la principal amenaza. Se
presentarán en las zonas bajas y por falta de capacidad del drenaje. Dentro de
las medidas de adaptación sugeridas se encuentran la construcción de barreras,
muros de estabilización y control de avenidas; el mantenimiento del sistema de
drenaje; el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados; el desazolve
planeado de bocas de ríos; la utilización de sistemas de alerta temprana, y el uso
de seguros.
Para instrumentar estas medidas en la RBLP, se sugiere que la Secretaría de
Ecología del estado (que reconoce sus atribuciones en ordenamientos territoriales locales, preservación y restauración de ecosistemas) establezca acuerdos
de coordinación con la federación y los municipios. Asimismo, los municipios
pueden determinar dichos acuerdos de forma directa. Las autoridades estatales y
municipales deben asumir las responsabilidades que les corresponden y se debe
aprovechar la ayuda de los centros ecológicos municipales.
En el SLCPM, el Consejo Estatal de Protección Civil deberá involucrarse
en la instrumentación de estas medidas, así como la Unidad de Protección Civil
estatal, junto con los consejos municipales de protección civil. Deberán crear una
cultura de prevención. Los sistemas municipales de protección civil son parte del
sistema estatal y los centros municipales de operaciones son los responsables
de elaborar, instrumentar, dirigir, presupuestar, operar y vigilar la ejecución de la
protección civil en el municipio.
• Agricultura: la amenaza se manifestará en forma de inundaciones por las características topográficas. Las medidas de adaptación propuestas tienden al uso de
diferentes variedades, la planeación agrícola y mejora en las prácticas de cultivos
y rotación de los mismos.
La instrumentación de estas medidas puede hacerse a través del programa
Alianza Contigo descrito anteriormente. Específicamente, el subprograma de
Fomento a la Inversión y Capitalización permite la tecnificación de la producción;
754
M edidas
de adaptación por sitio piloto
apoya labores y prácticas de mejoramiento, rehabilitación y conservación de suelo
y agua, y da recursos para el fomento productivo y la reconversión productiva.
• Transporte y comunicaciones: fundamentalmente se presentarán daños a infraestructura como caminos, puentes, puertos, aeropuertos, torres y cableado de
comunicación. Las medidas de adaptación sugeridas tienden al mejoramiento de
la infraestructura existente, al usar materiales y técnicas de construcción adecuados, aunado al uso de seguros y de sistemas de alerta temprana.
En Los Petenes, la instrumentación de estas medias involucra al Sistema Estatal de Protección Civil, específicamente al Centro Estatal de Emergencias, que
coordina con los centros municipales de protección civil. Debe intervenir también
el Comité de Planeación para el estado, que auxilia a la Secretaría de Desarrollo
Social de la entidad y los de planeación municipal. Asimismo, se puede solicitar
apoyo al FOPREDEN año con año para programas de acciones preventivas orientadas a identificar el riesgo, mitigar o reducir el riesgo, y fomentar la cultura de la
prevención.
Para la instrumentación de estas medidas en el SLCPM, el ejecutivo del
estado y los comités municipales de planeación deberán mejorar los planes estatales y municipales de desarrollo urbano para que la obra pública cumpla con los
requisitos necesarios y sea menos vulnerable.
7.6.3.4 Sequías
• Agricultura: la falta de agua para los cultivos es la principal amenaza, misma que
se debe al ineficiente manejo del líquido. Como medidas de adaptación se proponen el riego por goteo, la captación y el almacenamiento de agua de lluvia, la
recuperación de suelos y la siembra de árboles frutales.
Dentro de la instrumentación de las medidas se sugiere un acercamiento con
la SAGARPA para la utilización del programa de fomento agrícola Alianza Contigo.
Dicho programa apoya la rehabilitación y conservación de suelo y agua; la adquisición, instalación y modernización de sistemas de riego tecnificado, y el desarrollo
sustentable de las cadenas agroindustriales, forestales y agrícolas del país.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
755
7.6.3.5 Huracanes
• Zonas urbanas y rurales: la amenaza se manifestará principalmente en forma de
inundaciones, con riesgo de daños a la infraestructura urbana, la vida y los bienes.
Para contrarrestar sus efectos, se proponen las siguientes medidas: mejorar la infraestructura existente, usar seguros, incrementar las capacidades y atribuciones del
sistema de protección civil, aplicar normas de construcción sobre la zona federal y
no recuperar las áreas afectadas por ciclones previos. Se detectó la aplicabilidad de
los ordenamientos territoriales como un instrumento muy poderoso.
La instrumentación de estas medidas en Los Petenes involucra al Sistema
Estatal de Protección Civil, específicamente al Centro Estatal de Emergencias, el
cual se coordina con los centros municipales de protección civil. Deben intervenir
también los comités de planeación estatales y municipales. De igual manera, se
puede solicitar apoyo al FOPREDEN año con año para programas de acciones
preventivas orientadas a identificar, mitigar o reducir el riesgo, y fomentar la cultura de la prevención.
En el SLCPM, la instrumentación de las medidas involucra al Consejo Estatal de Protección Civil, a la Unidad de Protección Civil estatal y a los consejos
municipales de protección civil. También se requiere que las autoridades municipales y estatales del sector de desarrollo urbano mejoren los requisitos de la
construcción.
Los siguientes sectores amenazados por los huracanes, así como las medidas propuestas, corresponden únicamente al Sistema Lagunar Carmen-PajonalMachona.
• Transporte y comunicaciones: los daños a la infraestructura del sector (caminos,
puentes, puertos) son la principal amenaza identificada. Dentro de las medidas de
adaptación sugeridas se encuentran la mejora de la infraestructura existente y el
uso de seguros, así como mejorar e implementar las reglas de construcción.
• Energía: la amenaza encontrada consiste en daños a la infraestructura, por lo que
se sugiere, dentro de las medidas de adaptación, la mejora de la infraestructura
existente, al igual que el uso de seguros.
• Industria: la amenaza se manifiesta en daños a la infraestructura, principalmente la petrolera, petroquímica y manufacturera, debido al tipo de construcciones
utilizado. Como medidas de adaptación, se propone adecuar los códigos de cons756
M edidas
de adaptación por sitio piloto
trucción y ajustar la infraestructura existente para evitar daños; promover el uso
de materiales y técnicas de construcción adecuados, así como la utilización de
seguros.
• Turismo: la amenaza detectada consiste en riesgos de daños a la infraestructura
costera y urbana, así como a los inmuebles. Las medidas de adaptación sugeridas
incluyen la mejora de la infraestructura existente y el uso de seguros.
Para la instrumentación de estas medidas se debe involucrar los mismos
organismos encargados de protección civil en zonas urbanas y rurales. También se
propone tener un acercamiento con Petróleos Mexicanos.
7.6.4 Programación de las medidas
El cuadro 3 es una matriz programática de las potenciales medidas de adaptación
presentadas hasta ahora para los humedales del Sistema Lagunar Carmen-PajonalMachona y de la Reserva de la Biosfera Los Petenes. Es importante recalcar que
tanto las medidas como las etapas aquí presentadas son a título indicativo, y pueden
variar de acuerdo con las necesidades específicas del proyecto y de los consensos
logrados con la población y los actores clave. A final de cuentas, la instrumentación
de las medidas depende del grado de participación y apropiación por parte de la comunidad afectada por el incremento en la variabilidad regional del clima y el cambio
climático global.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
757
758
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Salud pública
Quiénes son
vulnerables
Descomposición de
alimentos.
Incremento en la
morbilidad y la mortalidad
por ondas de calor
y deshidratación.
Incremento y
redistribución de
enfermedades
transmitidas por vectores
(paludismo, dengue).
A qué son vulnerables
Características
físico-biológicas
de niños y
adultos mayores,
principalmente.
Por qué son
vulnerables
1
Crear microclimas más sanos.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para mejorar el equilibrio térmico de los inmuebles.
2
2
3
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
Reforestar zonas urbanas para proveer sombra, amortiguar el
incremento de la temperatura y desarrollar microclimas.
1
1
Estudiar y promover medidas para el control de vectores en zonas
rurales y urbanas (coadyuvar entre sectores e instituciones).
Evaluar y promover acuerdos con el sector salud y gobiernos locales
para armonizar medidas que protejan el medio ambiente (control de
plagas, reducción de contaminación acuática y reforestación).
3
Etapas
Mejorar sistemas de aislamiento, ventilación y control de temperatura
en viviendas.
Adaptaciones sugeridas
Etapa 1: Evaluación de la vulnerabilidad climática actual y futura; formulación de escenarios; identificación de potenciales medidas de adaptación.
Etapa 2: Formación de capacidades; implementación de medidas de adaptación a escala piloto.
Etapa 3: Evaluación del éxito de la medida; institucionalización; impulso y desarrollo de acuerdos y recomendaciones; decretos, programas, normas y modelos en distintos
órdenes de gobierno y sectores.
13 Nota: estas propuestas requieren de todo un proceso de institucionalización (acuerdos y apropiación), garantizando la participación de actores clave a lo largo del proceso.
Etapas: 1 preparación, 2 fortalecimiento, 3 operación.
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Cuadro 3. Medidas de adaptación de los sitios piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes
ante las principales amenazas identificadas13.
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
759
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Biodiversidad y
ecosistemas
Energía
Quiénes son
vulnerables
Incendios.
Aumento de demanda
y deficiencia en la
transmisión de energía
eléctrica.
A qué son vulnerables
2
Promover programas de financiamiento rural para la modificación de
estructuras y viviendas que consuman menos energía.
2
3
Prevenir y controlar incendios forestales (coadyuvar en la creación
de programas federales y estatales entre el sector ambiental y
agropecuario).
Establecer y mantener porcentajes mínimos de cubierta arbórea
en tierras de uso agropecuario para proteger la capacidad de los
ecosistemas de ofrecer servicios ambientales.
3
2
Promover el uso de energías renovables en vivienda, zonas urbanas y
gobiernos locales.
1
2
Promover uso de materiales y técnicas de construcción alternativos, y
que permitan el ahorro de energía.
Realizar estudios de percepción y resistencia a la adopción de
medidas que ahorren energía en zonas rurales y urbanas (subsectores
ganadero, agrícola, pesquero, comercial, industrial).
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Uso
indiscriminado de
Establecer corredores biológicos entre áreas naturales protegidas y
fuego.
áreas de vegetación natural conservada para permitir la migración de
especies y propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Las altas
temperaturas
provocan estrés
en la vegetación.
Infraestructura
y sistemas de
transmisión
ineficientes.
Por qué son
vulnerables
Cuadro 3. Medidas de adaptación de los sitios piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes
ante las principales amenazas identificadas (continuación).
760
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Eventos
extremos
de calor
Amenaza
Agricultura
Biodiversidad y
ecosistemas
Quiénes son
vulnerables
Riesgo incremental de
siniestros.
Incendios.
A qué son vulnerables
Las altas
temperaturas
provocan estrés
y marchitan los
cultivos.
Uso
indiscriminado de
fuego.
Las altas
temperaturas
provocan estrés
en la vegetación.
Por qué son
vulnerables
1
2
Desarrollar proyectos piloto con diversas fuentes de financiamiento y
programas federales para enfrentar los riesgos.
1
1
3
Etapas
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de
cultivos; cambios en fechas de siembra.
Planeación agrícola: investigar, promover y adaptar esquemas de
irrigación.
Planeación agropecuaria: uso de variedades con bajos requerimientos
de agua, esquemas diferenciados de manejo ganadero.
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación,
restauración (incluyendo estudios sobre implicaciones ecológicas por
estrés hídrico).
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 3. Medidas de adaptación de los sitios piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes
ante las principales amenazas identificadas (continuación).
C armen -Pajonal -M achona y L os Petenes
761
Eventos
extremos
de lluvia
Amenaza
Agricultura
Salud
Zonas urbanas y
rurales
Quiénes son
vulnerables
Falta de
capacidad en
el sistema de
drenaje.
Ubicación y
exposición en
zonas bajas.
Por qué son
vulnerables
Inundaciones.
Características
topográficas.
Mayor incidencia de
enfermedades infecciosas
Aumento de
relacionadas con la
vectores.
calidad del agua (cólera,
tifoidea).
Inundaciones.
A qué son vulnerables
2
2
2
1
3
Construcción de terrazas para controlar la erosión; manejo del agua
de lluvia.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar inundaciones.
Mejorar y reparar la infraestructura de drenaje.
Desarrollar programas de capacitación comunitaria de preparación
ante desastres.
Implementar desazolve planeado de bocas de ríos.
1
1
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar el uso de
diferentes variedades resistentes a las lluvias.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de
cultivos; cambios en fechas de siembra.
2
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar inundaciones.
1
2
Construcción de barreras y muros de estabilización para el control de
avenidas.
Estudiar y promover medidas para el control de vectores en zonas
rurales y urbanas (coadyuvar entre sectores e instituciones).
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 3. Medidas de adaptación de los sitios piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes
ante las principales amenazas identificadas (continuación).
762
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Características
topográficas.
Tipos de
construcción.
Tipos de
construcción.
Tipos de
construcción.
Daños a infraestructura
(caminos, puentes,
puertos, aeropuertos,
ferrocarriles, torres
y cableado de
comunicación).
Daños a infraestructura
(torres y cables de
transmisión eléctrica).
Daños a infraestructura
(petrolera y
petroquímica,
manufacturera).
Transporte y
comunicaciones
Energía
Industria
Por qué son
vulnerables
Inundaciones.
A qué son vulnerables
Agricultura
Quiénes son
vulnerables
Fuente: León et al., 2007.
Eventos
extremos
de lluvia
Amenaza
2
2
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar daños.
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
2
2
2
1
1
Etapas
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar daños.
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar daños.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de
rotación de cultivos.
Seleccionar y almacenar semillas.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 3. Medidas de adaptación de los sitios piloto Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona y Los Petenes ante las principales
amenazas identificadas (continuación).
7.7 Medidas específicas de adaptación: sitios Nichupté y Boca Paila
Norma Munguía Aldaraca, Cuauhtémoc León et al.,
Pedro Hipólito Rodríguez et al., Leticia Gómez et al.,
Boris Graizbord et al., Víctor Magaña et al.
Los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila se encuentran sobre
la costa del mar Caribe, en el estado de Quintana Roo, por lo que tienen características
climáticas comunes y son vulnerables ante los mismos efectos del cambio climático.
La principal diferencia es que el Sistema Lagunar Nichupté (Cancún) es uno de los
sitios más impactados de la zona de estudio por las actividades humanas; mientras
que el Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen) está dentro de una reserva natural,
donde las medidas de conservación han limitado el desarrollo de infraestructura turística. Antes de discutir las potenciales medidas de adaptación ante los efectos del
cambio climático propuestas para estos dos sistemas de humedales, se presenta un
breve resumen del estado actual de presión. Para una descripción detallada referimos
al lector a las secciones 5.7 y 5.8.
7.7.1 Humedales del Sistema Lagunar Nichupté
(Cancún)
El turismo intensivo es el principal motor de la economía del sitio, pero todos los
sectores registran crecimiento sostenido. El Sistema Lagunar Nichupté es el sitio piloto con la mayor tasa de crecimiento demográfico y también el que genera el mayor
número de empleos de los lugares estudiados1. El crecimiento urbano y el desarrollo
1 Graizbord et al., 2007.
763
de infraestructura turística son los controladores del cambio de uso de suelo, en detrimento de selvas y vegetación hidrófila2. Las aguas residuales sin tratamiento y los
lixiviados del antiguo basurero son un problema mayor, causa de blanqueamiento del
arrecife coralino y de contaminación en la única fuente de agua potable: el acuífero
de Yucatán3. En este sitio, la tasa de deforestación es de las más altas con respecto
a la zona de estudio, sobre todo del manglar4, a tal punto que algunos ecosistemas
han sido completamente transformados en un par de décadas. La vulnerabilidad ante
los huracanes es evidente tanto por el tipo de infraestructura como por las actividades que se desarrollan: siete de cada diez empleos son vulnerables a los efectos del
cambio climático en el corto plazo5. El cuadro 1 presenta algunas de las principales
presiones hacia el año 2050, bajo el enfoque del manejo del agua.
Cuadro 1. Humedales del Sistema Lagunar Nichupté (Cancún): escenarios de las tendencias
al año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Urbano
Turístico
Tendencias
Probabilidad
Medidas
Extraordinaria presión de los desarrollos urbanos sobre
los ecosistemas.
Creciente aumento en la demanda de agua potable y
mayor presión sobre los acuíferos.
Muy alta
Actualización
Contaminación de cuerpos de agua por el desarrollo de
y aplicación
emporios turísticos.
del Plan de
Manejo de la
La región continuará experimentando fuertes
Zona Turística.
presiones para el desarrollo de instalaciones turísticas
y con la visita de un número creciente de personas. Es Muy alta
necesario formular estrategias que regulen el manejo
de la zona.
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
Para frenar el deterioro del territorio y la fragmentación de los ecosistemas, se
propone dar mayor atención al decreto de la Ley General de Vida Silvestre (reformada
en febrero de 2007), que reglamenta la construcción de infraestructura turística en
regiones de manglares o de humedales de importancia para la biodiversidad6.
2
3
4
5
6
Gómez et al., 2007.
Rodríguez et al., 2007.
Gómez et al., 2007.
Graizbord et al., 2007.
Gómez et al., 2007.
764
M edidas
de adaptación por sitio piloto
7.7.2 Humedales del Sistema Lagunar Boca Paila
(Punta Allen)
El Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen) se encuentra dentro de la Reserva de
la Biosfera Sian Ka’an, cuyo decreto como área natural protegida data de 1986. Las
medidas de conservación han sido relativamente eficaces para limitar el desarrollo y
mantener los ecosistemas existentes. En Punta Allen se pesca uno de los mayores volúmenes de langosta del país7 (con periodos de veda) y se recibe cada vez un número
creciente de visitantes (turismo diurno, sin infraestructura hotelera). La vegetación
natural domina el uso del suelo, aunque áreas importantes de vegetación hidrófila
fueron convertidas a pastizales8. Por lo tanto, es fundamental hacer respetar el programa de manejo de la reserva. La bahía de Asunción se encuentra en la trayectoria
directa de los huracanes formados en el Caribe, de ahí que las inundaciones por tales
fenómenos sea una de las principales amenazas9. El cuadro 2 resume las presiones
encontradas en este sistema de humedales, bajo el enfoque del manejo de agua.
En cuanto al manejo del suelo, así como para el Sistema Lagunar Nichupté, se
propone dar mayor atención al decreto de la Ley General de Vida Silvestre (modificado en febrero de 2007), que reglamenta la construcción de infraestructura turística
en regiones de manglares o de humedales de importancia para la biodiversidad. El
programa de manejo del ANP debe hacerse respetar10.
7 INE-SEMARNAP, s.f.
8 Gómez et al., 2007.
9 Magaña et al., 2007.
10 Gómez et al., 2007.
N ichupté y B oca P aila
765
Cuadro 2. Humedales del sistema lagunar Boca Paila (Punta Allen): escenarios de las
tendencias al año 2050, probabilidad de ocurrencia y medidas de adaptación.
Sector
Tendencias
Probabilidad
Medidas
Tratándose de una reserva de la biosfera hay
restricciones al desarrollo urbano. Sin embargo, las
pequeñas localidades, que tienden a crecer, son
vulnerables a los huracanes y al incremento del nivel del
mar. Los huracanes tenderán a incrementar su impacto.
Urbano
Pesquero
Turístico
Aumento en la demanda de agua potable y mayor
presión sobre los acuíferos.
Mantener restricciones al desarrollo de establecimientos
hoteleros e instalaciones turísticas. Presiones en cuanto
a disponibilidad de agua. Presiones en relación con los
desechos generados por los visitantes.
La actividad pesquera debe sujetarse a las restricciones
que se contemplan en el plan de manejo.
Alteración de la zona intermareal.
La región experimentará fuertes presiones para el
desarrollo de instalaciones turísticas y con la visita de
un número mayor de personas. Es necesario formular
estrategias que regulen el acceso y manejo de la zona.
Muy alta
Actualización
y aplicación
del Plan de
Manejo de la
Reserva
Muy alta
Muy alta
Fuente: Rodríguez et al., 2007.
7.7.3 Medidas de adaptación ante los efectos del
cambio climático
Dado que la infraestructura turística es el principal controlador del cambio de uso de
suelo en ambos sitios (actual en Cancún y potencial en Punta Allen), podemos inferir
que si continúa el alto grado de presión sobre los humedales, la cubierta vegetal natural disminuirá de forma notable (cuadro 3). Si las actuales acciones de protección civil
no consideran el aumento en la intensidad de los huracanes en el futuro, la población
estará en grave riesgo, lo mismo que el desarrollo turístico y las actividades económicas dependientes de él. Si se siguen aplicando las actuales políticas, el escenario
futuro no diferirá mucho del actual. En cambio, si se llevan a cabo medidas de adaptación al cambio climático, que conlleven la sustentabilidad de la actividad turística y
766
M edidas
de adaptación por sitio piloto
del desarrollo tanto urbano como rural, podrán verse mejoras en la biodiversidad, la
protección civil y la economía regional (cuadro 3).
Cuadro 3. Matriz de tendencias para los sitios piloto Cancún y Punta Allen.
Indicador/
escenario
1. Tendencia con
cambio climático,
sin políticas y sin
adaptación
2. Tendencia con
políticas y cambio
climático
3. Tendencia con
políticas de adaptación
al cambio climático
Conservación
de la cubierta
vegetal y de la
biodiversidad
Disponibilidad
de agua
Protección civil
Economía rural
Economía
urbana
Nota: las líneas se construyeron con tres puntos de referencia: el punto de inicio (1976-1980); el momento actual (2000-2007), y el tiempo donde se sabe que las condiciones influenciadas por el cambio
climático se vuelven más evidentes (2020-2030). La pendiente de la línea representa la rapidez con la
que el indicador evoluciona (de forma paulatina, drástica o constante). Las líneas mixtas muestran que el
indicador cambia de tendencia. Para estos sitios se observan cambios de una tendencia negativa paulatina
a negativa drástica, y de una tendencia positiva paulatina a una negativa drástica.
Fuente: Magaña et al., 2007; León et al., 2007; Gómez et al., 2007.
De acuerdo con el estudio realizado, estos dos sistemas de humedales presentan
vulnerabilidad común ante los siguientes efectos del cambio climático:
1. Aumento en el nivel del mar, con impacto en ecosistemas de humedales, zonas
urbanas y rurales, y pesca.
2. Huracanes, con ímpacto en zonas urbanas y rurales, e infraestructura turística.
N ichupté y B oca P aila
767
A continuación se presenta un análisis detallado de las potenciales medidas de
adaptación al cambio climático propuestas para ambos sitios, por amenaza y sector
afectado, así como las instituciones que pueden colaborar para instrumentarlas11.
7.7.3.1 Aumento en el nivel del mar
• Ecosistemas de humedales: la amenaza se manifestará mediante la intrusión
de agua salada en acuíferos costeros, causando la pérdida total o parcial de los
humedales. Las medidas de adaptación sugeridas tienden a garantizar espacios
vecinos, creando barreras de protección, incrementando la superficie de las zonas
de humedales, y restaurando territorios de ayuntamientos en zonas donde hubo
o hay ecosistemas con biodiversidad alta.
La instrumentación de estas medidas involucra a la Secretaría de Desarrollo
Urbano y Medio Ambiente, ya que puede firmar convenios de coordinación con la
federación y los municipios en materia de manejo y vigilancia de ANP, protección,
preservación y restauración de la zona federal marítimo terrestre y de los cuerpos
de agua nacionales. La Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del estado,
de manera conjunta con los municipios, deberá también planear, programar y
construir las obras necesarias para el control y la prevención de la contaminación
del agua para la reutilización del recurso y para establecer plantas de tratamiento.
Se puede buscar el apoyo de las direcciones generales de ecología municipales y
hacer uso de los ordenamientos ecológicos locales vigentes, al igual que de los
planes de manejo de la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an y del Parque Nacional
Marino Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc.
• Zonas urbanas y rurales: la amenaza se manifestará en forma de inundaciones
por la topografía. Las medidas de adaptación sugeridas incluyen la construcción
de barreras, muros de estabilización y control de avenidas, así como dar mantenimiento al drenaje y mejorar la planeación urbana.
Las medidas deben implementarse involucrando a la Secretaría de Seguridad Pública, porque de ella depende la Dirección General Estatal de Protección
Civil, al igual que los sistemas municipales de protección civil. Estos sistemas
tienen comités operativos y algunos son especializados en huracanes. Deberá
11 Análisis realizado por Munguía, 2007, con base en datos de León et al., 2007.
768
M edidas
de adaptación por sitio piloto
involucrarse también a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, a la
Secretaría de Planeación y Desarrollo Regional, y a la Secretaría de Infraestructura
y Transporte, para promover los convenios de coordinación con los municipios,
para que éstos cuenten con comités de desarrollo y vivienda. De esta manera se
podrá contribuir al ordenamiento territorial y a que la construcción de vivienda
preserve el equilibrio ecológico.
• Pesca: la principal amenaza es la contaminación, porque el agua estará expuesta a
cambios en su calidad. Dentro de las medidas de adaptación sugeridas encontramos la acuicultura sustentable; la planeación y el ajuste de capturas; la reducción
de la contaminación orgánica en ecosistemas acuáticos para evitar la eutrofización
y conservar hábitats y biodiversidad, y la elaboración de ordenamientos pesqueros
por laguna que impulsen acuicultura y maricultura.
La instrumentación de estas medidas incluye un acercamiento con la
CONAPESCA para el apoyo en los ordenamientos pesqueros de la zona, junto
con la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural e Indígena. Dicha institución
puede coordinar acciones y programas con la federación y municipios para pesca,
acuicultura, y preservación y restauración de recursos naturales. Se propone que
la SAGARPA difunda técnicas, sistemas y procedimientos que permitan el mejoramiento de producción y productividad.
7.7.3.2 Huracanes
• Zonas urbanas y rurales e infraestructura turística: se detectaron como amenazas
posibles inundaciones con riesgo de daño en infraestructura urbana y turística, la
vida y bienes. Las medidas de adaptación sugeridas fundamentalmente tienden
a mejorar la infraestructura existente y el uso de seguros, aplicando normas de
construcción y los ordenamientos territoriales.
Para la implementación se han identificado, en el nivel estatal, a las autoridades de asentamientos humanos y desarrollo urbano, los sistemas municipales
de protección civil y la solicitud de apoyos al FOPREDEN. Estos apoyos pueden
solicitarse año con año si se trata de programas de acciones preventivas orientadas
a identificar, mitigar o reducir el riesgo, y fomentar la cultura de la prevención.
N ichupté y B oca P aila
769
7.7.4 Programación de las medidas
El cuadro 4 es una matriz programática de las potenciales medidas de adaptación
ante los impactos previsibles del cambio climático, presentadas hasta ahora para los
humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila. Es importante recalcar
que tanto las medidas como las etapas aquí presentadas son a título indicativo, y pueden variar de acuerdo con las necesidades específicas del proyecto y de los consensos
logrados con los actores clave y la población. A final de cuentas, la instrumentación
de las medidas depende del grado de participación y apropiación por parte de la comunidad afectada por el incremento en la variabilidad regional del clima y el cambio
climático global.
770
M edidas
de adaptación por sitio piloto
N ichupté y B oca P aila
771
Inundaciones.
A qué son
vulnerables
Ubicación y
exposición
(topografía).
Por qué son
vulnerables
Zonas urbanas y
Riesgo de daños a
rurales
infraestructura urbana,
Infraestructura
a la vida y a los bienes.
inadecuada.
Quiénes son
vulnerables
1
2
Aplicar normas de construcción sobre zona federal en la costa.
Revisar y proponer formas para que la ZOFEMATAC13 garantice
que no se construya en dunas y manglares.
Valorar la inversión para recuperar zonas afectadas por ciclones
previos. Garantizar el impulso del concepto “a prueba de clima”
(Climate safe).
2
1
Instrumentar en los ámbitos local, municipal y estatal programas
de protección civil. Promover zonas que actualmente no están
definidas en riesgo.
Mejorar los atlas de riesgos y elaborar los de municipios que no
cuentan con ellos.
3
Incrementar las capacidades y atribuciones del sistema de
protección civil.
2
2
Adecuar los códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar daños o pérdidas humanas.
Fomentar programas gubernamentales como el FOPREDEN.
Etapas
Adaptaciones sugeridas
Dirección General de Zona Federal Marítimo Terrestre y Ambientes Costeros
Etapa 1: Evaluación de la vulnerabilidad climática actual y futura; formulación de escenarios; identificación de potenciales medidas de adaptación.
Etapa 2: Formación de capacidades; implementación de medidas de adaptación a escala piloto.
Etapa 3: Evaluación del éxito de la medida; institucionalización; impulso y desarrollo de acuerdos y recomendaciones; decretos, programas, normas y modelos en distintos
órdenes de gobierno y sectores.
12 Nota: estas propuestas requieren de todo un proceso de institucionalización (acuerdos y apropiación), garantizando la participación de actores clave a lo largo del proceso.
Etapas: 1 preparación, 2 fortalecimiento, 3 operación.
Huracanes
Amenaza
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las
principales amenazas identificadas.12
772
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Huracanes
Amenaza
Inundaciones.
A qué son
vulnerables
Ubicación y
exposición
(topografía).
Por qué son
vulnerables
Pesca
Suspensión de
actividades.
Exposición.
Zonas urbanas y
Riesgo de daños a
rurales
infraestructura urbana,
Infraestructura
a la vida y a sus bienes.
inadecuada.
Quiénes son
vulnerables
Explorar la relación de la actividad pesquera con otras amenazas
climáticas e instrumentar políticas públicas sobre la viabilidad
económica del sector.
Evaluar y promover los servicios ambientales de pesquerías y
biodiversidad de arrecifes.
1
1
1
1
Planear y ajustar fechas de captura de especies de alta demanda o
alto valor comercial.
Estudios de viabilidad comercial y seguros.
2
2
 1
3
1
Etapas
Promover la acuicultura y maricultura sustentable a través de los
ordenamientos territoriales y ambientales.
Aplicar los ordenamientos territoriales.
Promover medidas coordinadas antes, durante y después del
evento, en relación con los servicios ambientales y agroecológicos
en zonas rurales (por ejemplo, riesgo de incendio).
Almacenar alimentos y contar con protección de embarcaciones en
refugios.
Desarrollar programas integrales de planeación comunitaria ante
desastres.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las principales amenazas
identificadas (continuación).
N ichupté y B oca P aila
773
Huracanes
Amenaza
Daños a
infraestructura.
Tipos de
construcción.
Transporte y
comunicaciones
Energía
Daños a
infraestructura
(caminos, puentes,
puertos, aeropuertos, Tipos de
torres y cableado de
construcción.
comunicación) por
inundaciones y vientos
fuertes.
Por qué son
vulnerables
A qué son
vulnerables
Quiénes son
vulnerables
2
1
Impulsar el desarrollo de organismos de integración regional para
implementación de acciones y medidas (por ejemplo, ACI: área
costera integral).
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar daños o pérdidas humanas.
2
2
Etapas
Revisar e instrumentar nuevas reglas de construcción, que incluyan
periodos de retorno más largos y consideren eventos extremos
recientes.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar daños o pérdidas humanas.
Adaptaciones sugeridas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las principales amenazas
identificadas (continuación).
774
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Aumento
en el nivel
del mar
Huracanes
Amenaza
Ecosistemas de
humedales
Industria
Turismo
Quiénes son
vulnerables
Daños a
infraestructura
(turística y
manufacturera).
Intrusión de agua
salada en acuíferos
costeros. Pérdida total
o parcial del humedal.
Riesgos incrementales
de afectaciones
a infraestructura
costera; reducción del
valor de inmuebles e
infraestructura urbana.
A qué son
vulnerables
Ubicación y
exposición.
Tipos de
construcción.
Tipos de
construcción.
Ubicación y
exposición.
Por qué son
vulnerables
Garantizar espacios vecinos para permitir la migración de especies y
propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar daños o pérdidas humanas.
Estimar el producto neto ecológico en la construcción de
infraestructura turística, considerando los escenarios climáticos.
Considerar gastos probables de restauración ante eventos extremos;
pueden incluirse dentro de la evaluación de impacto ambiental.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar daños o pérdidas humanas.
Adaptaciones sugeridas
1
2
1
1
2
Etapas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las principales amenazas
identificadas (continuación).
N ichupté y B oca P aila
775
Aumento
en el nivel
del mar
Amenaza
Contaminación.
Reubicar asentamientos desarrollados en zonas de alto riesgo.
Mejorar (rediseñar) y reparar la infraestructura de drenaje.
Pesca
2
Promover obras de ingeniería costera: construcción de barreras,
diques y muros de estabilización para el control del aumento
considerable en el nivel del mar.
1
3
2
1
1
Identificar estrategias de conservación de humedales (refugio de
especies, viveros y germoplasma).
Restituir ecosistemas de agua dulce por marinos.
3
Controlar la cantidad y calidad de agua que llega a los ecosistemas
costeros.
Exposición a
Promover la acuicultura y maricultura sustentable a través de los
cambios en la calidad
ordenamientos territoriales y ambientales.
del agua.
Ecosistema de
humedales
2
Promover decretos de áreas protegidas para zonas de humedales.
Zonas urbanas y
Inundación.
rurales
Ubicación y
exposición.
Intrusión de agua
salada en acuíferos
costeros. Pérdida
total o parcial de los
humedales.
2
Etapas
Construir barreras y muros de estabilización para el control del
aumento considerable en el nivel del mar.
Adaptaciones sugeridas
Ubicación y
exposición
(topografía).
Por qué son
vulnerables
A qué son
vulnerables
Quiénes son
vulnerables
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las principales amenazas
identificadas (continuación).
776
M edidas
de adaptación por sitio piloto
Inundación.
Inundación.
Salud pública
Agricultura
Ganadería
Buscar alternativas para la siembra dependiendo de la escala
Pérdida de superficie (traspatio o solares).
para cultivar.
Preservar las variedades en el cultivo de especies (variabilidad
genética).
Reubicar zonas de pastoreo y realizar cambios en regímenes de
pastoreo.
Utilizar especies y razas alternativas.
Pérdida de superficie.
Promover medidas estructurales y cambios en prácticas ganaderas
para el manejo del riesgo (garantizar la disminución de los impactos
negativos sobre el medio ambiente, directos e indirectos).
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura
existente para evitar inundaciones.
Infraestructura
ineficiente.
Fallas en servicios
por inundación de la
ciudad.
Adaptaciones sugeridas
Contaminación.
Por qué son
vulnerables
Pesca
A qué son
vulnerables
Planear y ajustar fechas de captura de especies de alta demanda o
alto valor comercial.
Reducir la contaminación orgánica (especialmente nitratos)
en ecosistemas acuáticos para evitar la eutrofización (que se
Exposición a
cambios en la calidad potencia con el ascenso de la temperatura) y conservar hábitats,
biodiversidad y calidad del agua.
del agua.
Promover ordenamientos pesqueros por laguna costera que
impulsen acuicultura y maricultura.
Promover estrategias para disminuir la intrusión salina.
Quiénes son
vulnerables
Fuente: León et al., 2007.
Aumento
en el nivel
del mar
Amenaza
1
1
3
1
1
2
1
1
1
1
Etapas
Cuadro 4. Medidas de adaptación para los humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila ante las principales amenazas
identificadas (continuación).
Capítulo 8
Conclusiones
8.1. Vulnerabilidad y adaptación al cambio climático
8.1.1 Desarrollo de capacidades
de adaptación ante
1
el cambio climático
La vulnerabilidad puede definirse como el grado en el que un sistema es susceptible o
incapaz de enfrentarse a efectos adversos ante un fenómeno, incluidos la variabilidad
y los extremos del clima2 y está en función del carácter, magnitud y rapidez del
cambio climático, así como de la variación a la que está expuesto, de su sensibilidad
y capacidad de adaptación.
La capacidad de adaptación ante el cambio climático se define como la habilidad
de un sistema para ajustarse a dicho fenómeno, moderar daños posibles y aprovechar
las oportunidades emergentes o enfrentarse a las consecuencias. Por lo tanto, la capacidad de adaptación es el mecanismo fundamental para reducir la vulnerabilidad.
La vulnerabilidad ante los efectos del cambio climático tiene implicaciones no
sólo por su definición, sino sobre todo por la dificultad de medirla social, económica y
ecológicamente3. Cualquier esfuerzo para identificar, medir o estimar la vulnerabilidad
es un paso indispensable para desarrollar acciones de adaptación.
1 León et al. 2007
2 IPCC, 2001; INE-SEMARNAT, 2006.
3 O’Brien et al. 2004.
779
Las naciones más desarrolladas están enfocando sus intenciones en la identificación de medidas de adaptación y la discusión de la existencia de políticas que
promuevan dichas medidas. Cada política debe llevar a un acuerdo relacionado con
la variación climática, la protección a la biodiversidad, la administración de los riesgos
naturales o la planeación urbana. El índice de vulnerabilidad costera de Estados Unidos, por ejemplo, es una herramienta útil en ese país para determinar la vulnerabilidad
socioeconómica de los municipios y establecer políticas de adaptación.
Algunas medidas necesarias para disminuir la vulnerabilidad tienen que ver con lo
siguiente: contar con tecnología de punta que permita prever riesgos climáticos (alerta
temprana); promover cambios institucionales y legales que robustezcan el sistema
fiscal para crear incentivos; apoyar a las organizaciones civiles, y lograr la participación
pública en la toma de decisiones. La planeación territorial (urbana, sectorial, ordenamientos ecológicos del territorio, ordenamientos comunitarios) y la transferencia
de tecnología son instrumentos que contribuyen a los procesos de adaptación.
El manejo de riesgos es un enfoque y una opción para incluir en las medidas de
adaptación, y evitar medidas inciertas que pueden provocar males mayores, como
una adaptación deficiente. Asimismo, es recomendable que las medidas para reducir
la vulnerabilidad estén integradas a la planeación nacional, y se reflejen en proyectos
y políticas. Por ejemplo, el Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (FOPREDEN) busca limitar la vulnerabilidad del país a los desastres naturales por medio
de la prevención.
En un marco de potencial cambio climático en el mediano plazo, la formulación
de estrategias y políticas anticipatorias de adaptación para reducir la vulnerabilidad
de regiones, sectores productivos, localidades y ambientes naturales, constituye una
exigencia actual hacia el desarrollo sustentable.
El fortalecer sistemas de adaptación y prevención al cambio climático no sólo
representa costos menores en relación con la respuesta a situaciones de emergencia
(de cuatro a diez veces menos), sino también genera bases de preparación social y
económica para hacer frente a situaciones riesgosas que comprometen las metas
sociales y económicas en el corto y largo plazos.
La adaptación sólo podrá realizarse a través de actores clave dentro de la co-
780
C onclusiones
munidad, y si en el proceso se incrementan las capacidades para responder a los
retos y amenazas asociados con el clima. Se puede visualizar un proceso continuo en
tres etapas: identificación de impactos, generación de capacidad, e implementación y
apropiación de la adaptación4. La evaluación y ajuste de las medidas forma parte del
proceso cíclico, a través de esquemas de monitoreo de indicadores.
El desarrollo de capacidades se manifiesta a través de instrumentos de política, espacios institucionales y conocimiento local. Cada medida de adaptación debe ser vista
como un proyecto que requiere ser desarrollado y acotado de manera conjunta con los
que finalmente se apropiarán de él o se verían afectados en caso de no implementarlo.
Su utilidad depende de que haya un usuario o beneficiario (quien experimenta las
consecuencias positivas o negativas del clima y de la medida), pues se convertirá en el
que demande la continuidad de la misma y en su principal promotor.
En todo proceso de adaptación, la participación activa y continua de los actores
clave es fundamental. En otras palabras, además de evaluar los impactos presentes y
futuros del clima, se debe realizar un diagnóstico consensuado (los actores locales deberán sancionar y estar de acuerdo, o bien ajustar el diagnóstico) de la vulnerabilidad
del sitio en su conjunto y de cada uno de los municipios que lo componen. De esta
manera se podrá evaluar conjuntamente con la sociedad si la medida propuesta es la
más adecuada a las necesidades de cada sitio y resulta viable su aplicación, además
de prever arreglos o acuerdos para su implementación.
8.1.2 Capacidad instalada de instrumentos para la
adaptación5
La adaptación al cambio climático debe estar inmersa en las leyes, políticas e instituciones nacionales. México ratificó el Protocolo de Kioto como país “No Anexo
I” y ha formulado tres Comunicaciones Nacionales ante la UNFCCC. La Comisión
Intersecretarial sobre el Cambio Climático, responsable de generar políticas públicas
y estrategias transversales de mitigación y adaptación al cambio climático, publicó la
4 GEF, 2006.
5 Munguía, 2007; Gómez et al., 2007; Rodríguez et al., 2007.
Vulnerabilidad
y adaptación al cambio climático
781
Estrategia Nacional de Cambio Climático, México, 2007. Asimismo, uno de los ejes
rectores del Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 es la sustentabilidad ambiental.
En estos documentos se pueden encontrar los lineamientos que rigen la estrategia
mexicana de adaptación.
Por otro lado, se está impulsando el desarrollo de planes estatales de cambio
climático para identificar medidas de mitigación de emisiones de GEI y de adaptación
al cambio climático en el ámbito local para incorporarlas en políticas estatales y municipales. Los principales instrumentos de conservación y gestión son los planes de
manejo de áreas naturales protegidas, los ordenamientos ecológicos territoriales y los
consejos de cuenca.
Los municipios tienen en sus manos una herramienta esencial: la definición del
uso de suelo. A través de éste pueden aterrizar acciones reales y contundentes de
cooperación en materia de protección a humedales costeros. El ordenamiento ecológico es el instrumento de política ambiental que tiene como objeto regular o inducir
el uso del suelo y las actividades productivas, a fin de lograr la protección del medio
ambiente, así como la preservación y el aprovechamiento sustentable de los recursos
naturales, a partir del análisis de las tendencias de deterioro y las potencialidades de
aprovechamiento de los mismos6. Por lo tanto, es una herramienta imprescindible
para la toma de decisiones del estado y del municipio en cuanto a prevenir y revertir
los desequilibrios ecológicos, e impulsar acciones que propicien el uso del territorio y
sus ecosistemas dentro de un marco sustentable de desarrollo.
Bajo el supuesto de una observancia real de los ordenamientos ecológicos, las
autoridades municipales y estatales tienen un plan rector para sus políticas de autorización de zonas de construcción, aprovechamiento y restauración. Sin embargo,
el avance en la elaboración de los ordenamientos regionales y locales no ha sido
satisfactorio, lo que aumenta el riesgo de la expansión de la frontera agrícola y urbana
sobre los humedales costeros.
Los planes de manejo incorporan estrategias concretas sobre la forma de aprovechamiento sustentable del suelo por las comunidades locales dentro de las áreas
naturales protegidas. Es decir, integran la experiencia local en el manejo racional de
6 Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, Título Primero, artículo 3, fracción XXIII.
782
C onclusiones
recursos. También incluyen planes de atención ante eventos climáticos extremos, que
pueden ser entendidos como políticas de adaptación permanentes frente a escenarios
de cambio climático. Los programas integran sus estrategias en el corto, mediano y
largo plazos, lo cual puede ser incorporado en los sistemas de alerta temprana.
La Ley de Aguas Nacionales promueve la participación de los consejos de cuenca en la planeación hídrica nacional. Éstos han sido concebidos como las esferas de
coordinación y concertación entre las tres instancias de gobierno y los usuarios del
agua para ordenar el aprovechamiento de los recursos hídricos en las cuencas. Tienen
la finalidad de facilitar la implantación de las políticas y los programas hidráulicos.
Asimismo, promueven la participación de los usuarios en la formulación, seguimiento
y actualización de programas hidráulicos de las cuencas nacionales. Por lo tanto, los
consejos de cuenca son socios clave para la implementación de estrategias de adaptación al cambio climático.
Entre las atribuciones de la SEMARNAT está la de promover el ordenamiento
ecológico del territorio nacional, en coordinación con las autoridades federales, estatales y municipales, y con la participación de los particulares. Sectores estratégicos
para la adaptación de los humedales costeros, como el del agua, también están a
cargo de esta dependencia. La CONAGUA, por medio de sus organismos de cuenca
y direcciones locales debe ser un socio importante. Además, instituciones de investigación, como el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua y el Instituto Nacional de
Ecología, forman parte del acervo disponible para implementar medidas exitosas.
México ha desarrollado un sistema nacional de manejo de riesgos y desastres que
comprende a las siguientes instituciones y mecanismos, todos ellos bajo el cobijo de
la Secretaría de Gobernación:
• El Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) provee la estructura central
para coordinar las actividades de respuesta durante desastres, y se encarga de
la rehabilitación y reconstrucción en los ámbitos estatal y federal después del
desastre.
• El Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) complementa el
sistema de protección civil, con el fin de promover la investigación, capacitación
de recursos humanos y mejoramiento de la tecnología para prevenir y responder
Vulnerabilidad
y adaptación al cambio climático
783
ante desastres. Ha construido una herramienta para el diagnóstico del riesgo y
generado la metodología para conformar un atlas de riesgo tanto para estados
como municipios.
• El Fondo Nacional de Desastres (FONDEN) fue establecido para la reconstrucción o rehabilitación post-desastre de infraestructura pública (escuelas, hospitales,
caminos y puentes, entre otros) y zonas con alto valor ambiental, así como para
la compensación a productores de bajos ingresos.
• El Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (FOPREDEN) busca destinar
recursos para la prevención. El mecanismo se financia con los recursos no utilizados para el FONDEN durante el año fiscal y beneficia medidas de identificación
de riesgo, conciencia social, infraestructura preventiva, desarrollo de capacidades
y participación comunitaria.
Las principales leyes que rigen el desempeño ambiental de México son la Ley de
Aguas Nacionales7, la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, y
la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable. En cuanto a regulaciones específicas
para humedales, estos ecosistemas están protegidos bajo la norma oficial mexicana
NOM-022-SEMARNAT-2003, que establece las especificaciones para la preservación, conservación, aprovechamiento sustentable y restauración de los humedales
costeros en zonas de manglar. Actualmente existe un esfuerzo multi-institucional
denominado “Inventario Nacional de Humedales”. El inventario permitirá mejorar el
estado de conocimiento de los humedales en nuestro país, apoyar la planeación y el
desarrollo de políticas en pro de los humedales, identificar aquellos de importancia
nacional e internacional, y realizar estudios sobre la pérdida y degradación de los mismos. Las universidades y los centros de investigación nacionales, estatales y privados
deben colaborar en el proceso.
7 Que otorga definiciones y principios de derecho que son de difícil aplicación.
784
C onclusiones
8.2 Caracterización de la zona costera del Golfo de México
A lo largo de este libro pudimos observar que la zona costera del Golfo de México es
un área prioritaria para implementar medidas de adaptación ante los efectos adversos
del cambio climático, dada la conjunción de características encontradas en la zona:
8.2.1. Gran biodiversidad1
El Golfo de México y el litoral del Caribe mexicano tienen, en conjunto, una extensión
de línea de costa externa cercana2 a los 2 770 km. Sin embargo, alcanza 7 670 km
si se consideran las costas internas. En este litoral se ubican los ríos más caudalosos
(Grijalva-Usumacinta, Papaloapan) y los ecosistemas estuarinos más grandes del país
(lagunas Madre y Términos, con 200 mil y 196 mil hectáreas, respectivamente)3.
La importancia de la biodiversidad de los humedales costeros del Golfo de México
es notoria. Esta región es importante para las aves, por confluir en ella las rutas migratorias orientales del continente americano. Ahí existen 224 especies de aves: 50
marinas, 112 acuáticas y 62 terrestres4.
1 Bello et al., 2007.
2 Ortiz y De la Lanza, 2006, aunque otros estudios estiman una extensión aproximada de 3 100 km (Zárate et al.,
2004).
3 Day et al., 2004.
4 Gallardo et al., 2004.
785
Los humedales y sus hábitats sirven como áreas de protección, reproducción y crianza de recursos pesqueros, que representan el 45% de la pesca de camarón, 90% de la
producción de ostiones y 40% de la captura comercial de peces. Actualmente, todo el
Golfo de México aporta capturas pesqueras de más de un millón de toneladas al año5.
En las costas del Golfo de México se han registrado al menos 586 especies de
peces, de las cuales, más del 60% pasa alguna etapa de su ciclo de vida en los sistemas lagunares-estuarinos6. El humedal más destacado en este rubro es la laguna de
Términos, con registros de hasta 214 especies de peces.
La flora de playas y dunas tiene especies endémicas, nueve en el Golfo de México
y 32 en la península de Yucatán. Para los litorales del Golfo de México se han registrado 429 especies dentro de 89 familias, mientras que el mar Caribe registra 456
especies y 78 familias7.
La superficie total de manglares fue calculada en 475 mil ha en el año 2000 y se
está perdiendo a tasas de por lo menos 1% al año desde 19768.
8.2.2. Alta exposición ante los efectos previstos del
cambio climático global9
En México, durante los últimos años, se registraron aumentos en la frecuencia y
severidad de las sequías en el centro-norte del país, en el número de depresiones
tropicales en el Golfo de México y mar Caribe y en la intensidad de los huracanes.
La temporada de huracanes del año 2004 fue la tercera más activa desde 1950 y la
temporada de 2005, la más activa jamás registrada.
Los niveles de riesgo ante ciclones tropicales en la zona de estudio van de bajo
hasta muy alto. Las zonas de alto riesgo se localizan a lo largo de toda la costa de
Tamaulipas, norte de Veracruz, y la porción nororiental de la península de Yucatán.
Destaca la isla de Cozumel con muy alto riesgo.
5
6
7
8
9
Ídem 3.
Ídem 3
Ídem 3
Gómez et al., 2007.
Graizbord et al., 2007.
786
C onclusiones
Las inundaciones pueden surgir por varios factores asociados con el cambio
climático (huracanes, aumento del nivel del mar, lluvias intensas). El norte de Tamaulipas, y centro de Veracruz y Tabasco tienen los índices más altos de riesgo por
inundaciones.
En cuanto a los eventos extremos de calor, las costas de Tamaulipas, Campeche
y Tabasco sentirán los mayores efectos. Por sus características físicasy bológicas, los
adultos mayores y niños son más vulnerables a las ondas de calor.
8.2.3. Alta presión por actividades humanas10
La población de la región ha experimentado un crecimiento acelerado en los últimos
cincuenta años. En el censo del año 2000 se estimaron 14 777 888 habitantes en
los seis estados que comparten la zona de estudio. La distribución poblacional es muy
heterogénea, pues Veracruz cuenta con 6 908 975 habitantes y Tamaulipas con 2
753 222. En la región se encuentran ciudades costeras importantes como Tampico,
Veracruz, Coatzacoalcos, Campeche y Cancún11.
Las diferentes actividades económicas que se realizan en la zona costera han provocado cambios y transformado espacios litorales naturales en sitios con presencia
humana. El crecimiento de población de la región costera responde a la aparición de
actividades económicas, principalmente turísticas, petroleras, portuarias, agrícolas e
industriales. Las actividades humanas que mayor influencia tienen en el cambio de
uso de suelo pueden agruparse en tres grandes categorías: expansión de cultivos y
pastos, explotación forestal y desarrollo de infraestructura12.
La urbanización, ganadería y explotación forestal han inducido cambios importantes en el uso de suelo, contribuyendo a la pérdida de la vegetación natural. Cerca
del 40% de la superficie de los seis estados del Golfo de México está conformado por
regiones perturbadas13.
10 Graizbord et al., 2007, y Gómez et al., 2007.
11 Graizbord et al., 2007, con datos de INEGI, 2000a.
12 Meyer y Turner II, 1992; Achard et al., 1998 y 2002; Lambin et al., 2001; Turner II et al., 2001; Carr et al.,
2004.
13 Zárate et al., 1999.
C aracterización
de la zona costera del
G olfo
de
M éxico
787
En la cobertura de uso de suelo de 1976, la mayor superficie estaba ocupada por
áreas de vegetación primaria y secundaria arbórea, con 23 491 993 ha. Mientras
tanto, las áreas completamente transformadas dominan en la cobertura del 2000,
con 20 759 471 hectáreas14.
El cambio y la fragmentación de la cobertura vegetal se localiza principalmente en
Veracruz, Tabasco y Campeche, con un nivel de impacto alto debido a la construcción
de canales, ductos, terracerías y vías de comunicación. La deforestación en Tamaulipas
y Veracruz se debe también a las actividades portuarias e industriales, mientras que
la urbanización y el turismo son causas relevantes en Veracruz y Quintana Roo. La
pérdida de cubierta vegetal ha originado erosión en 314 mil km2 en los seis estados
del Golfo de México.
El principal controlador del cambio de uso de suelo en la zona de estudio es la
apertura de zonas de vegetación natural a pastizales. La segunda causa es la expansión de la frontera agrícola y en tercer término se ubica el crecimiento urbano, ya sea
turístico, industrial o comercial15. El análisis detallado de los humedales muestra que
los sitios con mayores tasas de deforestación son:
a) Las desembocaduras de los ríos Coatzacoalcos y Papaloapan (uso pecuario y
urbano).
b) La desembocadura del río Pánuco (crecimiento urbano).
c) El Sistema Lagunar Nichupté (crecimiento urbano, actividad e infraestructura
turística).
El estado de deterioro de la vertiente del Golfo de México presenta una situación
crítica. El uso de suelo predominante está ligado con actividades agropecuarias. La
agricultura de riego ha crecido más del 100% en los últimos 24 años; mientras que
el pastizal cultivado, la agricultura de temporal y la agricultura de humedad han incrementado su superficie cerca de 40%. A su vez, el pastizal inducido ha aumentado
15% en dicho periodo. También destaca la enorme transformación de vegetación na14 Gómez et al., 2007.
15 Gómez et al., 2007.
788
C onclusiones
tural en asentamientos humanos, con más de 550% de cambio entre 1976 y 2000.
En cuanto a la vegetación hidrófila, se ha perdido el 25% de los manglares y el 12%
de la vegetación de galería en la zona de estudio durante el periodo antes citado16.
La modificación de uso de suelo y el cambio climático son fenómenos que tienden a intensificar sus efectos mutuamente. Si bien el impacto del cambio climático
global sobre los asentamientos humanos localizados en las zonas costeras es relevante (ya sea por la incidencia de huracanes y tormentas, aumentos de temperatura o
inundaciones), puede ser igual de significativo sobre la base de recursos naturales de
los humedales. La combinación de ambos factores (cambio climático y presiones por
actividades humanas) crean efectos sinérgicos que inciden, tanto de forma directa
como indirecta, en el bienestar de la población, y los bienes y servicios provistos por
los ecosistemas, así como en la biodiversidad que albergan.
8.2.4. Sectores económicos vulnerables17
Después del petróleo, las pesquerías son el recurso costero de mayor importancia
en la región. El turismo también es importante: más del 22% de la infraestructura
hotelera nacional se encuentra en Quintana Roo. La agricultura cuenta con cerca de
2 172 467 ha cultivadas18 y la ganadería está en constante crecimiento. Todas estas
actividades son vulnerables ante el cambio climático en el corto plazo.
Destaca la presencia de la industria de extracción petrolera y transformación
petroquímica en la zona de influencia de los humedales de Tampico, Coatzacoalcos y
Carmen. El efecto desastroso que puede tener sobre la economía regional un evento
ciclónico se puede ejemplificar con el huracán Emily. Del total de los daños cuantificados, 50.5% se presentaron en PEMEX, ya que a consecuencia del fenómeno se
tuvieron que evacuar las plataformas petroleras de la península de Yucatán y la Sonda
de Campeche, dejándose de explotar 23 pozos petroleros. Debido a lo anterior, se
suspendió la producción diaria de 2 millones 950 mil barriles de petróleo y 1 600
millones de pies cúbicos de gas. De igual forma se dejaron de exportar 1 millón 870
16 Gómez et al., 2007.
17 Graizbord et al., 2007.
18 Zárate et al., 1999.
C aracterización
de la zona costera del
G olfo
de
M éxico
789
mil barriles de crudo diarios. Los daños en PEMEX se calcularon en 4 484 millones
de pesos; es decir, 423 millones de dólares, y se derivaron de la suspensión de las
actividades de la empresa durante dos días19.
También es importante notar la dependencia que tienen tanto los empleos en
Quintana Roo como la entrada de divisas al país en el corredor turístico Cancún-Tulum. Casi siete de cada diez empleos en la zona de influencia del humedal de Cancún
dependen de actividades turísticas y por lo tanto son vulnerables al cambio climático
en el corto plazo20. El efecto se puede apreciar en las pérdidas millonarias cada vez
que un huracán pasa por la zona nororiental de la península de Yucatán.
Entre los huracanes que han provocado mayores daños se encuentran Gilberto,
en 1988, con pérdidas totales estimadas en 750 millones de dólares; Opal y Roxanne, en 1995, con la destrucción de casi 100 mil hectáreas combinadas de cultivos
y vegetación natural; en 2005, Wilma, con daños, sólo en Quintana Roo, de 18 mil
millones de pesos, y Emily, que ocasionó pérdidas superiores a los 1 100 millones de
pesos (sin contar los daños a PEMEX). Cabe resaltar que durante el huracán Wilma,
los ingresos perdidos por la falta de operatividad en las instalaciones turísticas representaron cerca de tres veces el monto de los daños directos.
8.2.5. Población vulnerable21
En el cuadro 1 se tienen a grandes rasgos las características de la población de la
zona costera del Golfo de México de acuerdo con los indicadores sociodemográficos
presentados en el estudio.
En cuanto a la población indígena, destaca la parte central de la península de
Yucatán, donde en la mayoría de los municipios hay presencia de población de
ascendencia maya. También hay una marcada concentración en el estado de Veracruz, en la zona colindante con Puebla y Oaxaca, donde se encuentran principalmente huastecos, chontales y nahuas. Asimismo, hay un alto porcentaje de población
indígena entre Coatzacoalcos y la frontera con Tabasco. Destaca Tamaulipas, con
19 Graizbord et al., 2007, con datos de CENAPRED, 2006.
20 Graizbord et al., 2007.
21 Graizbord et al., 2007.
790
C onclusiones
casi nula presencia de estos habitantes. Se determinó que la población indígena es
particularmente vulnerable a los impactos del cambio climático.
Cuadro 1. Características de la población de la zona costera del Golfo de México.
Indicador
Índice de dependencia
Resumen de resultados
Valores elevados en Yucatán, Campeche y Veracruz.
Agua entubada
Drenaje
Deficiencias marcadas en Veracruz, Tabasco y Campeche
Baja cobertura en Tamaulipas, Campeche y Yucatán
Salud
Bajas coberturas en general, del orden de 60%, de la población
con acceso al servicio.
Índice de marginación
Veracruz es el estado con el índice más elevado. Le siguen Campeche, Tabasco y Yucatán. Cincuenta y cinco de los 395 municipios tienen muy alta marginación.
Con respecto al nivel de ingresos, la población que gana menos de un salario
mínimo se concentra en Veracruz y Yucatán, mientras que aquellos que ganan más
de cinco salarios mínimos se ubican principalmente en Tamaulipas, y sur de Veracruz,
Tabasco, Campeche y Quintana Roo. De la población económicamente activa ocupada, Veracruz y Yucatán tienen el mayor número de municipios especializados en el
sector primario; hay 105 municipios especializados en el sector secundario (norte y
sur de Tamaulipas, sur de Veracruz y norte de Campeche), mientras que la mayoría de
municipios del estado de Quintana Roo se especializan en el sector terciario. El 90%
de los hogares en la zona de estudio recibe remesas del exterior, pero sólo en 16
municipios (principalmente en Veracruz y Yucatán) hay un número superior al 10%
de los hogares bajo este rubro.
Se elaboraron índices de sensibilidad ante los posibles efectos del cambio climático
y resalta que la categoría de municipios de alta a muy alta sensibilidad se concentra
en las entidades de Veracruz y Yucatán. En el caso de Campeche, aunque tiene municipios en todas las categorías, la mayor proporción se ubica en el estrato de media
a muy alta sensibilidad. Los municipios con muy baja a baja sensibilidad se sitúan
principalmente en la zona fronteriza y en las ciudades capitales o de importancia
económica. Los municipios con alta y muy alta sensibilidad están presentes en toda
C aracterización
de la zona costera del
G olfo
de
M éxico
791
la zona de estudio, muchos de ellos son costeros y pertenecen a Veracruz, Yucatán
y Tamaulipas. Sin embargo, la zona de mayor sensibilidad se encuentra en la sierra
huasteca y las áreas en Veracruz que colindan con los estados de Puebla y Oaxaca.
En cuanto a la capacidad de los municipios para adaptarse al cambio climático, los
que resultaron en la categoría de muy alta capacidad de adaptación son, en general,
los fronterizos, las capitales de cada una de las entidades y algunos otros que, por su
importancia turística o industrial, albergan una ciudad importante. Finalmente, los
municipios con muy baja capacidad de adaptación se localizan principalmente en la
sierra Huasteca de Veracruz y en la parte central de Yucatán.
8.2.6. Daños sufridos por eventos extremos22
A continuación relatamos algunos de los principales eventos extremos en cuanto a
daños a la vida y sus bienes.
En agosto de 1933, el huracán que afectó los estados de Tamaulipas, Tabasco y
Veracruz dejó ocho mil damnificados en Tampico, cinco mil en Pánuco y cientos de
personas muertas. En 1955, tres huracanes consecutivos (Gladys, Hilda y Janet)
azotaron las costas de Tamaulipas, dejando más de dos mil muertos en Tampico.
El 14 de septiembre de 1988, el huracán Gilberto tocó tierra mexicana al sur
de Cancún, con vientos de 270 km/h y rachas de 315 km/h. Este fenómeno meteorológico ha sido catalogado como uno de los más potentes entre los eventos
registrados, alcanzando la categoría 5 en la escala Saffir-Simpson. En Quintana Roo
se reportaron 16 muertos y 50 mil damnificados, además de cien mil hectáreas de
cultivo parcialmente destruidas y cerca de 1 500 viviendas dañadas23. En Yucatán y
Campeche se registraron ocho muertes, además de 70 mil damnificados.
El paso del huracán Gert por territorio tamaulipeco en septiembre de 1993 obligó
a la evacuación de cinco mil personas en el estado. Hubo inundaciones en 17 colonias
de Tampico, así como en 11 colonias y 22 ejidos de Altamira. Aproximadamente 2
800 personas de esas localidades fueron atendidas en 15 refugios temporales.
22 Graizbord et al., 2007.
23 Bitrán, 2001.
792
C onclusiones
En 1995 hubo dos eventos ciclónicos que afectaron la península de Yucatán: los
huracanes Opal y Roxanne. El huracán Opal tocó tierra el 28 de septiembre al norte
de Chetumal y permaneció en la península durante dos días. Presentó una lluvia
máxima de 245 mm en 24 horas, con vientos máximos de 250 km/h y rachas de
300 km/h. El huracán Roxanne tocó tierra entre el 8 y el 20 de octubre. Causó
mayores daños en la parte occidental de la península, sobre todo en el estado de
Campeche. Casi tres mil viviendas fueron dañadas y se reportaron 1 800 damnificados. El gobierno federal aportó 1.5 millones de nuevos pesos para apoyar a los
pescadores del estado.
En 1999, los remanentes de la onda tropical número 11 y su interacción con
el frente frío número 5 ocasionaron lluvias puntuales de hasta 300 mm en 24
horas en la cuenca del río Tecolutla. Los resultados fueron 63 municipios afectados.
Se dañaron, principalmente, viviendas, infraestructura hidráulica y vías de comunicación. Las pérdidas económicas se estiman en 3 100 millones de pesos; hubo
20 940 damnificados y 120 defunciones.
El huracán Stan fue la décima octava tormenta tropical y el décimo primer huracán de la temporada de huracanes de 2005 en el Atlántico. Ingresó a nuestro país
por la costa del Golfo de México en la región de los Tuxtlas, donde más de cien mil
personas fueron evacuadas, y avanzó por las regiones costeras, incluyendo el puerto
de Veracruz, Boca del Río, Minatitlán y Coatzacoalcos. En total se registraron 98
decesos, de los cuales 86 fueron en Chiapas, cinco en Oaxaca, cuatro en Hidalgo,
tres en Puebla y se tuvo saldo blanco en Veracruz.
En 2005 también se registraron dos huracanes que produjeron severos
daños: Wilma y Emily. El huracán Wilma dañó principalmente Cancún, además
de Playa del Carmen, Cozumel e Isla Mujeres. Este fenómeno afectó a más de
110 mil personas y cerca de 23 mil viviendas, destruyendo poco menos de diez
mil hectáreas de cultivo. Sólo en Quintana Roo, el huracán Emily afectó a cerca
de diez mil personas, dañó 850 viviendas y destruyó casi nueve mil hectáreas
de cultivo24 .
24 Con base en datos de CENAPRED, 2006.
C aracterización
de la zona costera del
G olfo
de
M éxico
793
La vulnerabilidad de la zona costera del Golfo de México es clara y los recursos
naturales y económicos ahí establecidos, cuantiosos. Sin embargo, las medidas de
adaptación pueden ayudar a mejorar considerablemente el estado de riesgo actual, al
promover un desarrollo sustentable desde la base comunitaria.
794
C onclusiones
8.3 Escenarios de cambio climático, socioeconómicos y de uso
de recursos
8.3.1 Escenarios de cambio climático1
El cambio climático puede definirse como una variación estadísticamente significativa
(ya sea de las condiciones climáticas medias o de su variabilidad) que se mantiene
durante un periodo prolongado (generalmente durante decenios o por más tiempo).
Dicho cambio puede ser atribuido directa o indirectamente a actividades humanas
que alteran la composición de la atmósfera mundial, y se añade a la variabilidad natural del clima observada durante periodos de tiempo comparables.
La manera de proyectar los efectos del cambio climático es a través de escenarios
que están, a su vez, influenciados por el grado de desarrollo (y emisiones de GEI)
esperado en el futuro. Las proyecciones del IPCC sugieren que aun con aumentos
pequeños de la temperatura, el cambio climático podría traducirse en impactos
negativos serios sobre diversos sectores, principalmente aquellos relacionados con
el recurso agua. Los escenarios de cambio climático son una descripción coherente,
internamente consistente y plausible de un posible estado futuro del mundo.
Los escenarios del Special Report on Emissions Scenarios (SRES) consideran
diferentes condiciones del desarrollo global para los próximos cien años y son, en un
1 Magaña et al., 2007.
795
sentido amplio, escenarios del estado y crecimiento de la población y la economía.
Las dos grandes familias de escenarios conllevan a estimar las emisiones globales de
gases de efecto invernadero. Los escenarios “A” describen un mundo futuro con alto
crecimiento económico, mientras que en los “B” ese crecimiento es más moderado.
Los escenarios A1 y B1 suponen que habrá una globalización tal que las economías
convergerán en su desarrollo. En los A2 y B2 se considera que el desarrollo se dará
más en un nivel regional. Estos escenarios parten de un conjunto de suposiciones
acerca de la evolución de los forzantes (población, tecnología, economía, uso del
suelo, agricultura y energía) tanto en el ámbito global como regional.
En términos simples, los cuatro tipos de escenarios combinan dos series
de tendencias divergentes: una serie desarrolla las variaciones entre valores
económicos y ambientales; la otra explora las variaciones entre mayor globalización
y regionalización.
Para poder incorporar las proyecciones de los modelos de circulación global en
los posibles impactos a escala regional es necesario utilizar técnicas de reducción
de escala. Hay dos fuentes fundamentales de incertidumbre en los escenarios de
cambio climático regional que deben considerarse en los estudios de impacto: la
incertidumbre acerca de las emisiones futuras de GEI y aerosoles, y la incertidumbre
en la sensibilidad global del clima y los cambios de patrones de circulación a escala
regional que simulan los modelos del clima.
Las tendencias de la temperatura en los últimos cien años indican que en la mayor
parte de México han ocurrido aumentos que varían de una región a otra. Los cambios
observados en temperatura media anual varían de -0.5 °C, en ciertas partes del noreste, a cerca de 1.5 °C, en el noroeste del país.
Al comparar las tendencias de los últimos cien años con las de los últimos cincuenta años, se encuentra que la precipitación en la región del Golfo de México
parece disminuir. Aún no es claro si se trata sólo de una forma de variabilidad de la
precipitación de muy baja frecuencia. Los cambios registrados en la precipitación son
relativamente pequeños, si se comparan con los cambios porcentuales experimentados por la temperatura.
Para las proyecciones en las próximas décadas no existe gran diferencia entre los
escenarios A2 y B2. En casi todo el país, los aumentos en temperatura fluctúan entre
796
C onclusiones
1 y 1.5 °C tanto en invierno como en verano. Cuando las proyecciones se realizan
para la parte final del presente siglo, las diferencias de magnitud del calentamiento se
vuelven evidentes. Mientras que los incrementos promedio proyectados para la república mexicana bajo el escenario B2 oscilan entre 1.5 y 4 °C, el incremento bajo el
escenario A2 es de entre 2.5 y 5 °C. Tal diferencia en la magnitud del calentamiento
de un escenario a otro demuestra la importancia que tendrá la mitigación en los años
por venir.
En el caso de la precipitación, la incertidumbre entre modelos es aun mayor que
la incertidumbre entre escenarios de emisiones. La magnitud de los cambios en la
precipitación es, en general, del mismo orden de importancia que el cambio proyectado para el clima alrededor de 2020. La dispersión entre modelos y escenarios se
amplifica cuando las proyecciones de cambios en la precipitación se hacen para finales
del presente siglo. La zona del Golfo de México experimentará pocas modificaciones
en las lluvias de verano.
Un elemento a considerar es que las presentes simulaciones no incluyen eventos
extremos como ciclones tropicales y, por lo tanto, su efecto en las lluvias no está
representado. Dicho elemento resulta en una importante fuente de incertidumbre
que hasta el momento no ha sido cuantificada, pues precisa de estudios específicos
para zonas de ciclones tropicales, los cuales involucran el análisis de modelos con alta
resolución espacial.
Los eventos extremos, como huracanes y “nortes”, requieren consideración especial en las proyecciones de precipitación para México. Es posible que los “nortes”
se vuelvan menos frecuentes. Es incierto en qué medida dicha disminución podría
afectar las precipitaciones, pero de acuerdo con ciertos escenarios, éstas tenderán
a disminuir principalmente en la vertiente del Golfo de México. En el caso de los
ciclones tropicales, se espera que, en promedio, su intensidad aumente. Puesto que
el ciclo hidrológico se volverá más intenso, las teorías sugieren un incremento en el
número de tormentas severas, así como periodos de sequía más rigurosos y prolongados. Las observaciones de los últimos años en México parecen coincidir con tal
planteamiento.
Los modelos numéricos del clima proyectan que la temperatura en la zona del
Golfo de México aumentará. Tanto los modelos de circulación general como los de
E scenarios
de cambio climático
797
clima regional proyectan cambios en temperatura menores a los 3 °C para finales del
presente siglo. Sin embargo, es claro que los mayores incrementos resultan de los
escenarios de emisiones altas como el A2. Los escenarios de emisiones medias (A1F)
proyectan, sin embargo, que la subida de temperatura en las regiones de mayor cambio, como el sureste de México, será menor a 2.8 °C.
En cuanto a la precipitación, los cambios en promedio apuntan hacia muy ligeras
disminuciones, de menos del 10%, para finales del presente siglo. Algunas de las
proyecciones regionales sugieren que se producirán los mayores decrementos hacia el sur y sureste de México. Debe mencionarse, sin embargo, que la dispersión
entre modelos de circulación es grande, casi del mismo orden de magnitud que la
variación de las proyecciones, con algunos modelos indicando posibles aumentos en
la precipitación. La inadecuada representación del efecto de los ciclones tropicales
puede influir en la proyección de los cambios en precipitación, pues si se incluyeran el
balance podría inclinarse hacia anomalías positivas.
De acuerdo con el modelo MRI de Japón, las ondas de calor y los periodos secos
aumentarán en duración. En el norte de Tamaulipas, la temperatura máxima en un
evento extremo de calor podría alcanzar los 43 °C a finales de siglo.
De manera contraria, de acuerdo con las proyecciones de dicho modelo, la duración de las ondas de frío disminuirá. Éstas tendrían, en promedio, alrededor de un día
menos de duración que las actuales.
8.3.2 Escenarios socioeconómicos y de emisiones2
La diferencia de población entre los escenarios A2 y B1, considerados como viables
para la zona costera del Golfo de México hacia el año 2050, es de poco más de un
millón y medio de personas, con una tendencia a mayor crecimiento poblacional bajo
el escenario B1, con respecto al A2.
Bajo los supuestos del análisis, el PIB per cápita crecería a 2.9% al año, en promedio, hacia el año 2030, mientras que el PIB total crecería en promedio a 4.3%. De
esta forma, los municipios de la zona de influencia de los sitios piloto aumentarían su
2 Graizbord et al., 2007.
798
C onclusiones
producción a tasas superiores al 15% como promedio anual, bajo escenarios optimistas de incrementos en productividad e inversión.
El comportamiento de las emisiones de carbono para los escenarios A2 y B1
es claramente divergente, según el escenario escogido. Por lo tanto, las medidas de
mitigación jugarán un papel determinante en el futuro de las emisiones de CO2 y
demás gases de efecto invernadero.
Los sectores de la población más vulnerables ante los efectos del cambio climático son los niños, ancianos e indígenas. Aunque el sector productivo tradicionalmente
afectado por este fenómeno es el primario, también observamos posibles impactos en
los sectores secundario y terciario. El turismo y la extracción petrolera son de particular
interés, por su vulnerabilidad ante eventos hidrometeorológicos extremos en el corto
plazo. Si los ocho sitios piloto son considerados como un todo, el humedal de Cancún
aporta el 36.24% del total del empleo afectado por el cambio climático, mientras que
el Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona genera el 78.44% del total del valor
de la producción. Las medidas de adaptación que se diseñen e implementen deberán
tomar en cuenta este dipolo para prevenir serios daños económicos.
8.3.3 Escenarios del uso de agua3
El futuro del agua dependerá en gran medida de las decisiones que se tomen desde
ahora, pero también de factores externos que alterarán el ciclo hidrológico en nuestro
país. Específicamente, el cambio climático será un elemento de suma importancia a
considerar.
La diferencia entre las demandas mínima y máxima para el sector agropecuario
en la zona costera del Golfo de México hacia 2030 es de más del triple (aproximadamente 12 500 y 42 500 hm3, respectivamente). Esto demuestra la imperiosa
necesidad de implementar medidas de riego eficiente en el sector, de capacitación
y atención a los usuarios, así como de mantenimiento y rehabilitación de la infraestructura existente. El sector agropecuario consume más del 80% del agua extraída
en la región Golfo Norte y es, en general, el sector con mayor demanda de agua. Si
3 Jacinto Buenfil, con base en datos de FGRA-FJBS, 2004, y Magaña et al., 2007.
E scenarios
de cambio climático
799
a esto añadimos que las eficiencias en los sistemas de riego son cercanas al 40%, el
desperdicio de grandes volúmenes se hace evidente.
Además de atender la mayor demanda por el incremento poblacional y el aumento en el PIB per cápita, el sector público-urbano debe afrontar el reto de mejorar las
eficiencias. En el año 2000, el promedio de consumo de agua para uso doméstico
en la zona del Golfo de México era de 236.4 l/hab-día, prácticamente equivalente al
nacional de 233 l/hab-día. Bajo los escenarios tendenciales, sin mejora de eficiencias,
el consumo promedio neto se incrementaría hasta 311 litros por habitante por día.
Siguiendo en el uso municipal y urbano, en el año 2000, las extracciones para
toda la región ascendían a cerca de 2 800 hm3, y podrían aumentar hasta más de
5 000 hm3/año, de no mejorar las eficiencias. Bajo el supuesto de que las eficiencias
en las redes de abastecimiento aumentaran a 75%, las extracciones máximas totales
del sector serían de 4 000 hm3 anuales. Este punto pone de manifiesto la necesidad
de invertir para mejorar la operación del servicio, pues con las medidas empleadas se
podrían ahorrar cada año, sólo en este rubro, hasta 1 000 hm3 en la zona.
Para la tendencia en el crecimiento del PIB de 3.3%, similar al proyectado por el
componente socioeconómico de este estudio (2.9%), la demanda industrial de agua
variaría entre aproximadamente 6 000 hm3 anuales, si no mejoran las eficiencias,
y 2 000 hm3/año, si mejoran al 2% anual. En el sector industrial pueden crearse
incentivos en las tarifas que fomenten el reciclaje y el ahorro, a fin de inducir una
mejor gestión del recurso.
Al sumar las demandas de todos los usos se obtiene que para 2030, la zona costera del Golfo de México puede utilizar como mínimo 18 200 hm3, lo cual corresponde
a un grado de presión del 6%, y como máximo 57 mil hm3, correspondiente a un
grado de presión del 18%.
Cuando se incluyen los efectos del cambio climático sobre la disponibilidad de agua
en los escenarios para 2030 se obtiene lo siguiente: la región Río Bravo continuará
con grados fuertes de presión; el cambio más significativo sucede en las regiones
Golfo Norte, Golfo Centro y Península de Yucatán, las cuales podrían experimentar
una presión de media a fuerte; los aumentos en el grado de presión sobre el recurso
agua por efectos del cambio climático pueden ser tan importantes como los de orden
socioeconómico para las próximas dos décadas.
800
C onclusiones
8.3.4 Escenarios del uso de suelo y su relación con
el ciclo hidrológico4
Los principales mecanismos controladores de los cambios de uso de suelo son de
carácter demográfico, político-económico y biofísico5. Estos alteradores han sido
integrados en modelos globales, regionales y locales mediante el uso de SIG6, para
entender los patrones espaciales y temporales del cambio. Los resultados pueden
integrarse en la construcción de escenarios futuros, y en la confección de políticas de
desarrollo sustentable y de reducción de la degradación ambiental.
En el análisis de las tendencias se identificaron dos grandes controladores del
cambio de uso de suelo: la expansión de zonas agrícolas y el crecimiento de la
actividad ganadera. Las proyecciones para el año 2020 indican un aumento en la
actividad agrícola, tanto de riego como de temporal, al igual que en las actividades
de ganadería en las partes más planas de la zona de estudio. Se observa también un
deterioro en las regiones de humedales costeros debido a la expansión espacial del
sector agropecuario. Las regiones de selva baja y selva mediana, situadas en las zonas
de pie de monte, disminuirán su extensión por el aumento de la frontera agrícola.
En las regiones más altas (cabeceras de cuenca), las zonas de bosques templados
disminuirán drásticamente.
El cuadro 1 presenta el cambio proyectado en algunos usos de suelo y cobertura
vegetal relevantes.
Las proyecciones indican una reducción de las áreas con mayor densidad de vegetación (como los diferentes tipos de selva), la desaparición de los manglares y un
aumento en las áreas con vegetación rala, como los pastizales. Este cambio es muy
importante, ya que una vegetación más pobre ocasiona una menor infiltración y el
aumento de los escurrimientos. También disminuye la fricción entre el escurrimiento y la superficie del suelo, aumentando la velocidad de las corrientes. Si se toma
en cuenta que la vegetación rala tiene menor capacidad para retener tanto el suelo
4 Gómez et al., 2007 y Magaña et al., 2007..
5 Veldkamp y Lambin, 2001.
6 Galicia et al., 2007.
E scenarios
de cambio climático
801
como el agua, el cambio a este tipo de vegetación aumenta la erosión. Una de las
consecuencias es el mayor arrastre de sedimentos hacia las partes bajas de la cuenca,
azolvando humedales, y bocas de lagunas y esteros. Así, los humedales van reduciendo su capacidad de almacenamiento del líquido, lo que afecta a todo el ecosistema.
Cuadro 1. Cambio proyectado en algunos usos de suelo y cobertura vegetal relevantes.
Uso de suelo/vegetación
Proyecciones
Uso de suelo urbano.
Probabilidades bajas de cambio.
Pastizal inducido y agricultura
de temporal.
Será el uso predominante para la región e implica deforestación de vegetación natural.
Pastizal cultivado y agricultura de riego.
Se expandirá sobre actuales zonas de humedales, lo que
debe dar una señal de alerta para implementar medidas de
protección y conservación.
Indica una alta intensificación y mayor tecnificación de las
actuales zonas abiertas para cultivo en la región.
Vegetación secundaria.
Baja probabilidad de cambio.
Selva baja y vegetación espinosa.
Muy baja probabilidad de permanencia. Serán sustituidas
por actividades agrícolas tradicionales.
Cuerpos de agua, popal-tular
y vegetación de galería.
Muy baja probabilidad de permanencia. Indica que serán
desplazados por otros usos.
El aumento del porcentaje de escurrimiento debido al cambio del uso del suelo
se observará principalmente en la península de Yucatán y en Tamaulipas. De acuerdo
con el balance hídrico de una cuenca, si se tienen mayores escurrimientos con lluvias
intensas debido a los cambios en el uso del suelo, las infiltraciones se reducen, y
en temporadas de secas los acuíferos no serían capaces de mantener la humedad
suficiente como para alimentar los humedales. En otras palabras, la existencia de los
humedales depende de un frágil equilibrio que mantiene el balance hídrico adecuado
entre las diversas etapas del ciclo hidrológico; el cambio de uso del suelo es la variable
que más afecta este balance.
El uso de suelo aquí proyectado tendrá los mayores impactos en el balance hídrico
regional. Las alteraciones en el uso de suelo, principalmente por pérdida de bosques,
802
C onclusiones
resultarán en mayores escurrimientos y menor infiltración. Estas alteraciones en el
ciclo hidrológico regional repercutirán en la salud de los humedales costeros del Golfo
de México. Por ello, es necesario que las medidas de adaptación consideren como
fundamental un reordenamiento territorial y ecológico en toda la zona de estudio.
E scenarios
de cambio climático
803
8.4 Humedales, sitios piloto y medidas de adaptación
8.4.1 Humedales1
De acuerdo con la definición de la convención de Ramsar, los humedales comprenden
“las extensiones de marismas, pantanos y turberas, o superficies cubiertas de aguas,
sean éstas de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o
corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de agua marina, cuya
profundidad en marea baja no exceda de seis metros”.
El término humedales se refiere a una amplia variedad de hábitats interiores,
costeros y marinos, que generalmente se reconocen como áreas que se inundan temporalmente, zonas donde la capa freática aflora en la superficie o con suelos de baja
permeabilidad, cubiertos por agua poco profunda.
La vegetación de humedales está adaptada para vivir en zonas inundables. Se
identifica como vegetación característica a la selva alta y mediana inundable, bosque
perennifolio inundable, manglar, tular, palmar inundable y matorral inundable.
Para la identificación y delimitación práctica de los humedales se utilizan tres
criterios, relacionados con la funcionalidad del ecosistema2:
1 Bello et al., 2007, y Gómez et al., 2007.
2 Mitsch y Gosselink, 1993.
804
1. Presencia de agua: en la superficie o dentro de la zona de raíces.
2. Suelos hídricos: suelos saturados, inundados o pantanosos durante el tiempo suficiente como para desarrollar condiciones anaeróbicas en su parte superior.
3. Vegetación hidrófila: plantas adaptadas a condiciones de inundación temporal o
permanente.
Los humedales proveen servicios muy importantes para el equilibro ecológico
del planeta. Entre las funciones y los valores reconocidos de los humedales destaca
el proveer un hábitat para la vida silvestre y acuática; actuar como barreras naturales
ante los efectos de huracanes y tormentas; fungir como lugares de enseñanza, investigación y recreación; propiciar el reciclaje y la transformación de nutrientes; atenuar
los flujos de inundación; recargar acuíferos; retener partículas y contaminantes; estabilizar los suelos, y ser uno de los ecosistemas de mayor productividad3. Los servicios
ambientales que prestan se pueden dividir en servicios de provisión, de regulación y
culturales.
Los humedales se encuentran dentro de los ecosistemas más productivos del
Golfo de México y sus características específicas dependen de los gradientes de
inundación y salinidad. En la frontera hacia el mar se tienen las lagunas costeras y
estuarios, cuya productividad depende tanto de los procesos ecológicos que ocurren
en los humedales de la planicie costera como de los procesos marino-costeros en la
plataforma continental adyacente4.
En México, muchos de los humedales enfrentan un grave deterioro por la extracción y contaminación de sus aguas, la desecación para la construcción de infraestructura urbana o turística, y su conversión a usos productivos (agrícolas, acuícolas y
pecuarios). Su sobreexplotación continuará conforme aumente la demanda de agua
para los diferentes usos humanos. Por lo tanto es indispensable definir estrategias y
políticas que consideren su identificación, delimitación, preservación, protección y
restauración, y que promuevan el uso racional de sus recursos5.
Ante los desafíos que plantea el cambio climático, es preciso anticipar algunos de
los probables impactos que puede suscitar en los humedales costeros:
3 Convención sobre los humedales, 1971. Ramsar, 2007.
4 Day et al., 2004.
5 CONAGUA-CONACYT, 2006.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
805
• Aumento del nivel del mar.
• Cambios diferenciados en la precipitación y la temperatura.
• Migración de ecosistemas.
• Modificación en la salinidad de los cuerpos de agua.
• Mayor penetración de las cuñas salinas.
• Disminución de los aportes fluviales.
• Alteración en la composición de flora y fauna.
A estos cambios hay que añadir los que generan los procesos de urbanización, industrialización y de conversión hacia una economía de servicios en las zonas costeras.
Los cambios en la disponibilidad de recursos hídricos ocasionarán una competencia
entre las demandas de los ecosistemas y las demandas de las poblaciones humanas.
8.4.2 Sitios piloto6
Los humedales piloto de la zona costera del Golfo de México fueron elegidos de
acuerdo con los siguientes criterios:
• Representatividad
o Climática.
o Geopolítica.
o Eco-regional.
o Sectorial.
• Amenaza
o Por inundación.
o Por huracanes.
o Por presión humana.
o Por cambio en regímenes de lluvia.
o Por pérdida de playas.
• De tipo de uso
o Alto valor ecológico.
o Calidad de servicios ambientales.
o Actividades dependientes directamente de los humedales.
6 Bello et al., 2007; Cervantes, 2007.
806
C onclusiones
• Económicos
o Nivel de pobreza.
o Accesibilidad a vías de transporte y comunicación.
o Especialización económica de la zona.
• Sociales
o Población.
o Dispersión de asentamientos rurales.
o Asentamientos humanos en zonas de riesgo.
o Densidad demográfica.
Después de un análisis multicriterio, se seleccionaron diversos sitios, de acuerdo con
su peso relativo de aptitud para implementar medidas de adaptación (ver cuadro 1).
Cuadro 1. Sitios piloto y calificación del análisis multicriterio.
Núm.
Sitios “piloto” y sitios “control”
Peso
1
Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado, Veracruz.
0.900
2
Río Papaloapan-Laguna de Alvarado, Veracruz.
0.835
3
4
5
6
7
Sistema Lagunar Nichupté (Cancún), Quintana Roo.
Río Pánuco-Altamira, Tamaulipas y Veracruz.
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco.
Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen), Quintana Roo.
Río San Fernando-Laguna La Nacha, Tamaulipas.
0.820
0.703
8
Los Petenes, Campeche.
0.525
0.689
0.628
0.555
Fuente: elaborado por Cervantes, 2007.
Los sitios con mayores valores de aptitud para ser considerados piloto fueron
aquellos vulnerables a desastres naturales, con alta presencia humana en zonas de
riesgo, y que ya presentan grados elevados de impacto antropogénico. Los humedales
calificados con menores valores de aptitud fueron aquellos menos vulnerables, mejor
conservados y con baja presencia humana. Así, se puede considerar a los ecosistemas
con mayor puntaje (primeros cuatro del cuadro 1) como sitios piloto en sí; mientras
que los de menor puntaje (últimos cuatro del cuadro 1), se pueden considerar sitios
control, pues están en mejores condiciones de conservación.
El cuadro 2 presenta los municipios que se encuentran dentro de la delimitación
de las poligonales de los sitios piloto, los cuales están, a la vez, vinculados con otros a
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
807
través de los planes estatales de desarrollo. El conjunto de municipios forma la zona
de influencia regional de cada sitio.
Cuadro 2. Municipios dentro de las poligonales de los sitios piloto.
Núm.
Sitio Piloto
Municipios
1
Río San Fernando-Laguna La Nacha, Tamaulipas
San Fernando
2
Río Pánuco-Altamira, Tamaulipas y Veracruz
Tamaulipas: Altamira
Tampico
Ciudad Madero
Veracruz: Pánuco
Pueblo Viejo
Tampico Alto
3
Río Papaloapan-Laguna de Alvarado, Veracruz
Alvarado
Tlacotalpan
Acula
Ignacio de la Llave
Ixmatlahuacan
4
Río Coatzacoalcos-Laguna El Colorado, Veracruz
Coatzacoalcos
Pajapan
Chinameca
Cosoleacaque
Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río
Minatitlán
Las Choapas
Zaragoza
Jáltipan
Texistepec
Sayula de Alemán
Hidalgotitlán
5
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona, Tabasco
Cárdenas
Paraíso
Comalcalco
6
Los Petenes, Campeche
7
Sistema Lagunar Nichupté (Cancún), Q. Roo
Calkini
Hecelchakan
Tenabo
Campeche
Benito Juárez
8
Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen),
Q. Roo
Solidaridad
Felipe Carrillo Puerto
Fuente: Noriega, 2007.
A continuación se presenta un resumen de las presiones principales en cada sitio
piloto:
808
C onclusiones
8.4.2.1 Humedales del río San Fernando y la laguna La Nacha
Los principales controladores del cambio en el uso del suelo de este sitio son la expansión de la frontera agropecuaria sobre terrenos desérticos y de matorral, a través
de agricultura y pastoreo intensivos7. Los pastizales inducidos y cultivados controlan
el uso del suelo. Por otro lado, la industria maquiladora tiene una fuerte presencia en
la zona y representa el valor mayoritario de la producción8. En cuanto a población,
se espera un alto crecimiento demográfico para el presente siglo. Todo esto significa
mayor demanda de recursos hídricos, pues las eficiencias en el riego y abastecimiento
urbano son bajas9. Las principales amenazas por el cambio climático son las sequías y
los eventos extremos de calor, además de que el sitio se encuentra en una zona con
alta incidencia de huracanes10.
8.4.2.2 Humedales del río Pánuco
El crecimiento de la zona conurbada de Tampico-Madero-Altamira se debe a la
presencia de la industria petrolera y de maquila en el área, además de los servicios
portuarios ahí encontrados. La mancha urbana se ha expandido al grado de provocar
la desaparición de bosques de encino y grandes porciones de vegetación hidrófila. La
agricultura y ganadería también controlan de manera importante el cambio en el uso
del suelo, sobre todo por el incremento en la superficie de pastizales inducidos y de
agricultura de temporal11. Este sitio tiene tasas muy elevadas de deforestación, lo que
repercute en la recarga de mantos acuíferos (que ya presentan señales de intrusión
salina) y produce el azolvamiento de los humedales. El agua del río Pánuco cuenta
con altos grados de contaminación12. Las principales amenazas del cambio climático
son las inundaciones por aumento en el nivel del mar, tormentas y huracanes13.
7 Gómez et al., 2007.
8 Graizbord et al., 2007.
9 Rodríguez et al., 2007.
10 Magaña et al., 2007; Graizbord et al., 2007.
11 Gómez et al., 2007.
12 Rodríguez et al., 2007.
13 Magaña et al., 2007.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
809
8.4.2.3 Humedales del río Papaloapan y la laguna de Alvarado
En la zona de influencia de este sistema estuarino se desarrollan actividades de
agroindustria que son muy contaminantes y demandan gran cantidad de agua14. El
uso de fertilizantes para los cultivos contamina los cauces de agua al ser acarreados
por los escurrimientos. En cuanto al uso de suelo, este sitio cuenta con una de las
tasas de deforestación más elevada de toda la zona de estudio, debido, principalmente, a la expansión de la frontera pecuaria, seguida por crecimiento agrícola, habitacional e industrial. Grandes porciones de vegetación hidrófila han sido convertidas a
pastizales15. Ante el cambio climático, las inundaciones son la principal amenaza por
el aumento en el nivel del mar y el efecto de huracanes y tormentas16. Se estima que
cuatro de cada diez empleos son vulnerables a este fenómeno en el corto plazo17.
8.4.2.4 Humedales del río Coatzacoalcos y la laguna
El Colorado
La actividad que ha dado lugar al desarrollo económico de este sistema estuarino es
la presencia de PEMEX, a través de la industria petroquímica, que genera la gran mayoría del valor de la producción18. El río Coatzacoalcos es utilizado como medio de
transporte de los productos, por lo que el sitio piloto es uno de los humedales costeros más contaminados del Golfo de México19. El auge de la industria ha propiciado la
expansión de la mancha urbana, causando fuertes impactos en la vegetación natural
y en los recursos hídricos, pues el acuífero ya muestra señales de sobreexplotación.
La expansión de la frontera agropecuaria es el principal motor en el cambio de uso
del suelo y, junto con el crecimiento urbano, ha propiciado una de las mayores tasas
de deforestación de todos los lugares estudiados. Los bosques han sido convertidos
14 Rodríguez et al., 2007.
15 Gómez et al., 2007.
16 Magaña et al., 2007.
17 Graizbord et al., 2007.
18 Graizbord et al., 2007.
19 Rodríguez et al., 2007.
810
C onclusiones
en pastizales20. En cuanto a los efectos del cambio climático, las inundaciones por
tormentas severas y “nortes”, así como el aumento del nivel del mar representan los
mayores riesgos21.
8.4.2.5 Humedales de las lagunas Carmen, Pajonal y Machona
La actividad productiva más importante en la zona de influencia de este sistema
lagunar es la extracción petrolera. Entre los efectos de la presencia de PEMEX en el
sitio destaca la apertura de la Boca Panteones, en la laguna Machona, que alteró el
equilibrio ecológico al introducir agua salada en los sistemas dulceacuícolas, e inundar
y salinizar los suelos. La actividad agrícola también se desarrolla de manera intensiva,
lo que demanda grandes volúmenes de agua, el uso de fertilizantes y pesticidas que
contaminan las fuentes. A ello hay que añadir la contaminación por hidrocarburos y la
proveniente de aguas residuales sin tratamiento22. En cuanto al uso de suelo, grandes
superficies de vegetación hidrófila han sido sustituidas por pastizales para ganado23.
Ante el cambio climático, este sitio es vulnerable, sobre todo ante los eventos extremos de calor e inundaciones provocadas por tormentas severas y huracanes24.
Cabe destacar que ocho de cada diez pesos producidos en este sitio provienen de
actividades vulnerables a los efectos del cambio climático (extracción petrolera) en
el corto plazo25.
8.4.2.6 Humedales de Los Petenes
La Reserva de la Biosfera Los Petenes es un área natural protegida desde 1996.
Debido a ello, al interior del sitio no se desarrollan actividades productivas. Se practica
la pesca, la agricultura y el turismo de baja intensidad26. Sin embargo, la ciudad de
Campeche se encuentra dentro de su zona de influencia y ahí se desarrollan acti20 Gómez et al., 2007.
21 Magaña et al., 2007.
22 Rodríguez et al., 2007.
23 Gómez et al., 2007.
24 Magaña et al., 2007.
25 Graizbord et al., 2007.
26 Bello et al., 2007.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
811
vidades industriales, agropecuarias y turísticas27. Las medidas de conservación han
mantenido en buen estado la cubierta vegetal y no se observa mayor impacto de las
actividades humanas, excepto en el manglar y los petenes mismos. La introducción
de actividades agrícolas en los límites de la reserva señala un punto de atención,
pues las prácticas comunes de roza-tumba-quema aumentan el riesgo de incendios
forestales28. Las principales amenazas de los efectos del cambio climático se dan por
inundaciones ante tormentas, huracanes o el aumento del nivel del mar, así como por
eventos extremos de calor29.
8.4.2.7 Humedales del Sistema Lagunar Nichupté (Cancún)
El turismo intensivo es el principal motor de la economía del sitio, pero todos los
sectores registran crecimiento sostenido. El sistema lagunar Nichupté es el sitio piloto
con la mayor tasa de crecimiento demográfico y también el que genera el mayor
número de empleos de los lugares estudiados30. El crecimiento urbano y el desarrollo
de infraestructura turística son los controladores del cambio de uso de suelo, en detrimento de selvas y vegetación hidrófila31. Las aguas residuales sin tratamiento y los
lixiviados del antiguo basurero son un problema mayor, causa de blanqueamiento del
arrecife coralino y de contaminación en la única fuente de agua potable: el acuífero de
Yucatán32. En este sitio, la tasa de deforestación es de las más altas con respecto a la
zona de estudio,, sobre todo del manglar33, a tal punto que algunos ecosistemas han
sido completamente transformados en un par de décadas. La vulnerabilidad ante los
huracanes es evidente tanto por el tipo de infraestructura como por las actividades
que se desarrollan: siete de cada diez empleos son vulnerables a los efectos en el
corto plazo del cambio climático34.
27 Graizbord et al., 2007.
28 Gómez et al., 2007.
29 Magaña et al., 2007.
30 Graizbord et al., 2007.
31 Gómez et al., 2007.
32 Rodríguez et al., 2007.
33 Gómez et al., 2007.
34 Graizbord et al., 2007.
812
C onclusiones
8.4.2.8 Humedales del Sistema Lagunar Boca Paila
(Punta Allen)
El Sistema Lagunar Boca Paila (Punta Allen) se encuentra dentro de la Reserva de
la Biosfera Sian Ka’an, cuyo decreto como área natural protegida data de 1986. Las
medidas de conservación han sido relativamente eficaces para limitar el desarrollo y
mantener los ecosistemas existentes. En Punta Allen se pesca uno de los mayores
volúmenes de langosta del país35 (con periodos de veda) y se recibe un número
creciente de visitantes (turismo diurno, sin infraestructura hotelera). La vegetación
natural domina el uso del suelo, aunque áreas importantes de vegetación hidrófila
fueron convertidas a pastizales36. Por lo tanto, es fundamental hacer respetar el programa de manejo de la reserva. La bahía de Asunción se encuentra en la trayectoria
directa de los huracanes formados en el Caribe, de ahí que las inundaciones por tales
fenómenos sea una de las principales amenazas37.
8.4.3 Medidas de adaptación generales y por grupo
de sitios piloto38
Existen medidas de adaptación que pueden aplicarse de forma general para todos los
sitios piloto y la zona costera del Golfo de México en su conjunto. Sin ser exhaustivos,
los cuadros 2 y 3 presentan un buen número de ellas.
35 INE-SEMARNAP, s.f.
36 Gómez et al., 2007.
37 Magaña et al., 2007.
38 León et al., 2007.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
813
Cuadro 2. Medidas de adaptación generales para la zona costera del Golfo de México.
•
•
•
•
•
•
•
•
•
Formar recursos humanos.
Promover y estimular el papel de los medios de comunicación.
Fortalecer políticas y programas en el ámbito local para la toma de decisiones.
Crear sistemas de alerta temprana intersectoriales basados en monitoreo (con capacidades)
y modelaje.
Desarrollar un sistema de difusión de información oportuno.
Promover esquemas de seguros (agropecuarios y familiares, entre otros).
Desarrollar estrategias y acciones de comunicación.
Generar y estimular centros de información para la gestión de toma de decisiones.
Fortalecer, revisar e implementar ordenamientos territoriales realizados a través de los
siguientes instrumentos: política urbana, ecológica o ambiental; de protección civil (riesgos);
industriales; de desarrollo rural; planeación estatal y sectorial (agricultura, ganadería, pesca
y acuicultura, entre otros).
Fuente: León et al., 2007.
Cuadro 3. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto.
Componentes
Adaptaciones sugeridas
Identificación y contacto
de agentes, actores e
instituciones clave.
Territorio
Restauración y protección.
Ordenamientos
territoriales.
814
C onclusiones
Elementos del programa de acción.
Identificación de programas sectoriales federales
y estatales con impactos aplicables en el territorio
y en las medidas identificadas.
Las condiciones de deterioro actual y
sus tendencias son condicionantes de la
vulnerabilidad presente y futura. Intervenir
positivamente en la recuperación de los
ecosistemas y restauración de los ciclos
hidrológicos es fundamental. El proyecto debe
coadyuvar a que las instituciones y programas
que pueden influir o están actuando en la región
intensifiquen sus acciones y se coordinen.
Realizados a través de instrumentos de política
urbana, ecológica o ambiental; de protección
civil (riesgos); industriales; de desarrollo rural
y planeación estatal, o sectoriales (agricultura,
ganadería, pesca, acuicultura, entre otros).
Cuadro 3. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto.
(continuación).
Componentes
Conocimiento
y gestión de la
Información
Adaptaciones sugeridas
Elementos del programa de acción.
Sistema de alerta
temprana.
Acuerdos iniciales para la conformación de
centros de sistemas de alerta temprana.
Análisis y reuniones con centros académicos
y representantes comunitarios y de gobierno.
Acuerdos y capacitación con medios de
comunicación y ONG. Acciones desarrolladas
por instituciones gubernamentales encargadas
del manejo del riesgo, coordinadas con centros
de investigación. Para su uso deben existir
convenios institucionales adecuados, así como
sistemas eficientes de comunicación. Deberán
contemplar la dimensión de protección civil
(inundaciones-huracanes), agrícola-ganadera
(variaciones en el clima, sequías), biológica
(plagas) y de salud (ondas de calor y vectores).
Información y
conocimiento (desarrollo
de capacidades de
adaptación).
Formación de recursos humanos. Desarrollo
de programas de educación e investigación.
Esquemas de comunicación eficiente.
Desarrollo de estrategia de
comunicación (campañas
de comunicación y de
sensibilización).
Contratos con diseñadores, acuerdos y reuniones,
seminarios y conferencias. Sensibilización a
actores clave sobre las tendencias en el deterioro
y los escenarios del cambio climático, así como
de las amenazas de la zona.
Usos de información
climática.
Utilización de información desarrollada en
centros de investigación. Para su uso deben
existir convenios institucionales adecuados, así
como sistemas eficientes de comunicación.
Compilación de
información.
Encuentros y concentración de información
técnica; creación de bancos de información de
capacidades y conocimiento técnico.
Identificación y contacto
de agentes, actores e
instituciones clave.
Desarrollo de acuerdos estratégicos para el
impulso de acciones específicas. Contrato de
facilitadores y mediadores.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
815
Cuadro 3. Medidas de adaptación generales para los sitios piloto.
(continuación).
Componentes
Adaptaciones sugeridas
Elementos del programa de acción.
Conformación de los
centros para la gestión de
Información.
Convenios y acuerdos para la transformación
y difusión de la información y conocimiento
para la toma de decisiones (universidades;
poder legislativo, ejecutivo y judicial; medios
de comunicación; población). Investigación
y desarrollo científico: desarrollo de estudios
que permitan identificar los cambios que están
ocurriendo en el territorio nacional, propiciados
por el aumento en la variabilidad del clima, y sus
efectos en áreas y sectores.
Monitoreo de la línea base.
Desarrollo y establecimiento o robustecimiento
de un sistema de monitoreo de las condiciones
ecológicas y territoriales del la región (evaluación
de cambios o deterioro en el uso de suelo). Para
el caso de la costa, el referente sería impulsar
acciones de gran escala (ver http://www.epa.
gov/owow/oceans/nccr/2005/index.html).
Monitoreo de las acciones
de adaptación.
Inclusión del monitoreo en el marco lógico del
proyecto, tanto para sus etapas (objetivos,
Indicadores y supuestos), como para sus
actividades, productos y resultados. Ver sección
7.2.
Impulso de las acciones
de adaptación en
conjunto con la estructura
institucional de protección
civil como asociado inicial
del proyecto.
Promover y entender que existe un gran
potencial de realizar las acciones si se vinculan
con el tema de protección civil. El discurso
ambiental está en transición hacia una nueva
etapa, donde su valoración está intrínsecamente
asociada con la protección civil.
Conocimiento
y gestión de la
Información
Protección civil
Fuente: León et al., 2007.
A continuación se presentan las medidas particulares propuestas por grupo de
sitios piloto, de acuerdo con las amenazas comunes. Entre las principales consideraciones para su implementación destacan el número de municipios dentro de cada
sitio, la diferencia en el grado de desarrollo de cada uno de ellos y los potenciales
socios para poner en marcha la adaptación39.
39 El siguiente análisis fue tomado de León et al., 2007, y Gómez et al., 2007.
816
C onclusiones
8.4.3.1 Humedales de los ríos San Fernando y Pánuco
El grupo 1 está compuesto por los sitios ubicados en los ríos San Fernando y Pánuco40; ambos en la parte norte del Golfo de México, por lo que comparten características geográficas y climáticas. Las principales amenazas que se enfrentarán en
estas regiones serán la sequía y los eventos extremos de calor debido al aumento
inevitable de la temperatura. En estas regiones predominan las actividades agropecuarias e industriales, por lo que el manejo del recurso agua tanto en el campo como
en las ciudades se vuelve uno de los principales problemas a considerar para proponer
medidas de adaptación. Por otro lado, sectores como el de salud se verán afectados
ante un aumento de temperatura, por lo que la información climática, esencialmente
los sistemas de alerta temprana, son necesarios para prevenir pérdidas, no sólo de
vidas sino también económicas.
Para disminuir las presiones relacionadas con el uso del suelo en el humedal del río
San Fernando, se propone la restricción de terrenos de agricultura de riego sobre zonas de matorrales dentro de unidades de gestión para la conservación y restauración,
con el fin de reducir la expansión de la frontera agrícola sobre áreas con vegetación
natural.
Para mitigar la fragmentación del hábitat por los cambios en el uso de suelo en el
humedal del río Pánuco se propone la regulación tanto de la expansión de la frontera
agrícola en zonas de humedales conservados como del uso de suelo urbano sobre
zonas de vegetación de selvas altas en regeneración.
8.4.3.2 Humedales de los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos
El grupo 2 está conformado por los sitios ubicados en los ríos Papaloapan y Coatzacoalcos41. Las principales amenazas son el aumento en el nivel del mar y las
inundaciones provocadas por tormentas. Indudablemente el cambio climático tendrá
consecuencias en el ciclo hidrológico, el cual se prevé será más intenso. Estos sitios
40 El cuadro 2 presenta los municipios que tienen influencia directa en cada sitio piloto.
41 Ídem 40.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
817
presentan ciudades importantes muy cercanas a los límites de costa, por lo que se
debe dar prioridad a la promoción de medidas (obras) estructurales para controlar los
cauces y las avenidas. Dichas medidas serían parte del manejo eficiente del agua para
prevenir daños severos. Al igual que para el grupo 1, la información climática es y será
necesaria para la planeación y el desarrollo de cualquier medida.
Para atenuar las tendencias actuales de deterioro del suelo en el humedal del
río Papaloapan, se propone implementar la restauración de dunas costeras en áreas
determinadas y la restricción de uso agrícola en zonas de humedales riparios.
Para contrarrestar la degradación del suelo en el humedal del río Coatzacoalcos,
se propone la restricción de la actividad ganadera en regiones de humedales riparios
y la elaboración de un ordenamiento ecológico regional.
8.4.3.3 Humedales del Sistema Lagunar Carmen-PajonalMachona y Los Petenes
El grupo 3 está compuesto por los sitios Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona
(SLCPM) y Los Petenes42. Dada su ubicación geográfica, las principales amenazas
para estas regiones son eventos extremos de calor e inundaciones provocadas por
tormentas y huracanes. En la región del SLCPM se presenta una fuerte presencia de
la industria petrolera, mientras que en Los Petenes predominan las áreas conservadas.
Pese a estas diferencias, la principal medida a considerar deberá ser el uso de la información climática; en este caso, no sólo la aplicación de un sistema de alerta temprana
para prevención de desastres, sino también para la prevención de incendios.
En el SLCPM se recomienda regular el uso de suelo agrícola mediante el seguimiento del ordenamiento ecológico, que incluye regiones de humedales bajo unidades
de conservación o restauración.
El plan de manejo de Los Petenes incluye la conservación de zonas de manglares,
así como el aprovechamiento sustentable de las áreas agrícolas dentro de la reserva.
Dicho plan debe hacerse respetar, además de incentivar la conservación de vegetación hidrófila. Deben identificarse las áreas agrícolas en los límites de la reserva para
vigilar y limitar su crecimiento.
42 Ídem 40.
818
C onclusiones
8.4.3.4 Humedales de los sistemas lagunares Nichupté y Boca
Paila
Para el grupo 4, conformado por los sistemas lagunares Nichupté y Boca Paila43, las
principales amenazas son los huracanes y el aumento en el nivel del mar. En estos
sitios predomina la actividad turística, por lo que la protección civil debe considerar
primordialmente la información climática; para el caso de los huracanes, se hace evidente el fortalecimiento del sistema de alerta temprana. Sobre el aumento en el nivel
mar, tanto las ciudades como la industria hotelera deberán adecuar sus normas de
construcción para evitar severos daños económicos.
A fin de frenar el deterioro del territorio y la fragmentación de los ecosistemas en
ambos sitios, se propone dar mayor atención al Decreto de la Ley de Vida Silvestre
(modificada en febrero de 2007), que reglamenta la construcción de infraestructura
turística en regiones de manglares o de humedales de importancia para la biodiversidad. Deben respetarse los planes de manejo de las áreas naturales protegidas.
8.4.3.5 Medidas específicas
El cuadro 4 presenta todas las medidas propuestas para los sitios piloto. En el capítulo
7 se plantearon por sector y amenaza para cada grupo de humedales. Aquí quisimos
mostrar las medidas en su conjunto e indicar cuáles se proponían para determinado grupo de sitios. Sin embargo, como quedó establecido, las medidas propuestas
deben cotejarse con la población que se beneficiará de ellas o sufrirá los efectos del
cambio climático. La utilidad del cuadro 4 consiste en tener un panorama general de
las casi cien medidas específicas para los humedales piloto del Golfo de México, con
el propósito de incorporar aquellas que están más de acuerdo con la percepción de
vulnerabilidad y necesidad de adaptación de la población local.
En el cuadro 4, las etapas son una guía para la instrumentación de las medidas
propuestas de adaptación al cambio climático. La etapa 1 puede llamarse de preparación e incluye, entre otras actividades, evaluación de la vulnerabilidad climática
43 Ídem 40.
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
819
actual y futura; formulación de escenarios, e identificación de potenciales medidas
de adaptación. La etapa 2 se puede considerar de fortalecimiento y es donde se
desarrollan las capacidades, y se implementan medidas de adaptación a escala piloto.
La etapa 3 constituye la operación y precisa de acciones como evaluación del éxito
de las medidas; institucionalización; impulso y desarrollo de acuerdos y recomendaciones, y elaboración de decretos, programas, normas y modelos en distintos órdenes
de gobierno y sectores.
Para dar el seguimiento apropiado a las medidas, se sugiere establecer y desarrollar
un Sistema de Monitoreo Basado en Resultados (ver sección 7.2).
820
C onclusiones
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
821
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar daños o pérdidas humanas.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para evitar inundaciones.
Adecuar códigos de construcción y ajustar la infraestructura existente
para mejorar el equilibrio térmico de los inmuebles.
Almacenar alimentos y contar con protección de embarcaciones en
refugios.
Aplicar los ordenamientos territoriales.
Aplicar normas de construcción sobre zona federal en la costa. Revisar
y proponer formas para que la ZOFEMATAC garantice que no se
construya en dunas y manglares.
Aprovechamiento del caudal de uso urbano aguas abajo de la cuenca
(es un caudal invariable).
Buscar alternativas para la siembra dependiendo de la escala (traspatio
o solares).
Cambios en el calendario de siembra de árboles, para asegurar una
mayor probabilidad de supervivencia.
Cambios en prácticas agrícolas: diversificación de cultivos; irrigación
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
(riego por goteo).
Medidas de adaptación
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto.
x
x
 
x
 
 
 
x
 
 
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
 
 
 
 
 
 
 
x
x
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
 
 
 
 
 
 
x
x
x
Carmen y
Petenes
 
 
x
 
x
x
x
 
x
x
Cancún y
Punta Allen
3
1
1
2
2
1
3
2
2
2
Etapa
822
C onclusiones
Crear microclimas más sanos.
Desarrollar programas integrales de capacitación comunitaria de
preparación ante desastres.
Desarrollar proyectos piloto con diversas fuentes de financiamiento y
programas federales para enfrentar los riesgos.
23
20
21
Controlar la cantidad y calidad de agua que llega a los ecosistemas
costeros.
19
22
Construir invernaderos.
Construir terrazas para controlar la erosión; manejo del agua de lluvia.
18
Construir represas y reactivar canales de agua.
Considerar un reordenamiento territorial en donde se contemplen los
efectos del cambio climático.
15
Construir barreras y muros de estabilización para controlar avenidas y
aumentos considerables en el nivel del mar.
Considerar gastos probables de restauración ante eventos extremos;
pueden incluirse dentro de la evaluación de impacto ambiental.
14
17
Coadyuvar y promover el manejo integrado del recurso agua en el nivel
de cuenca mediante medidas estructurales.
13
16
Captación y almacenamiento de agua de lluvia, reutilización del agua.
Coadyuvar en la vigilancia y promoción de medidas de manejo de
pozos.
11
Medidas de adaptación
12
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
x
 
x
 
 
x
 
x
x
 
x
x
x
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
x
 
x
x
 
x
 
 
 
 
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
x
x
x
 
x
 
x
 
 
 
 
 
 
Carmen y
Petenes
 
x
 
x
 
 
x
 
 
x
 
 
 
Cancún y
Punta Allen
2
1
1
3
2
1
2
1
 
2
2
2
3
Etapa
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
823
Estudiar y promover medidas para el control de vectores en zonas
rurales y urbanas (coadyuvar entre sectores e instituciones).
Estudio de mercados y uso de escenarios (y alertas tempranas) para ser
utilizados previos a cultivos.
Estudios de viabilidad comercial y seguros.
Evaluar y promover acuerdos con el sector salud y gobiernos locales,
para armonizar medidas que protejan el medio ambiente (control de
plagas, reducción de contaminación acuática o reforestación).
Evaluar y promover los servicios ambientales de pesquerías y
biodiversidad de arrecifes.
28
29
30
31
32
Establecer zonas o bosques semilleros y calendarios de colecta.
26
Estimar el producto neto ecológico en la construcción de
infraestructura turística, considerando los escenarios climáticos.
Establecer y restaurar corredores biológicos entre áreas naturales
protegidas y áreas de vegetación natural conservada para permitir la
migración de especies y propágulos a zonas climáticamente más aptas.
25
27
Establecer y mantener porcentajes mínimos de cubierta arbórea
en tierras de uso agropecuario para proteger la capacidad de los
ecosistemas de ofrecer servicios ambientales.
Medidas de adaptación
24
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
 
x
 
x
x
 
x
x
x
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
 
 
 
x
 
 
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
x
 
 
x
 
 
x
x
Carmen y
Petenes
x
 
x
 
 
x
 
 
 
Cancún y
Punta Allen
1
1
1
1
1
1
1
3
3
Etapa
824
C onclusiones
 
x
x
 
 
x
Fomentar programas gubernamentales como el FOPREDEN.
Garantizar espacios vecinos para permitir la migración de especies y
propágulos a zonas climáticamente más aptas.
Identificar estrategias de conservación de humedales (refugio de
especies, viveros y germoplasma).
Implementar tecnologías como jagüeyes.
Implementar viveros municipales en los que las comunidades
propietarias sean responsables de su producción y del mejoramiento de
especies.
Implementar desazolve planeado de bocas de ríos.
Implementar en los ámbitos local, municipal y estatal programas de
protección civil. Promover zonas que actualmente no están definidas
en riesgo.
Implementar programas de pago por servicios ambientales.
Impulsar el desarrollo de organismos de integración regional para
implementación de acciones y medidas (por ejemplo, ACI: área costera
integral).
34
35
36
37
38
39
40
41
42
 
 
 
 
Explorar la relación de la actividad pesquera con otras amenazas
climáticas e implementar políticas públicas de la viabilidad económica
del sector.
33
San Fernando y
Pánuco
Medidas de adaptación
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
Humedales
 
 
 
x
 
 
x
x
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
 
 
x
 
 
 
 
 
 
Carmen y
Petenes
x
 
x
 
 
 
x
x
x
x
Cancún y
Punta Allen
1
1
1
3
1
2
1
1
2
1
Etapa
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
825
Investigar y comunicar el conocimiento ecológico indígena.
Manejo de tierras: utilización óptima de tierras, incluidos pastizales y
matorrales.
Manejo del riesgo.
Mejorar (rediseñar) y reparar la infraestructura de drenaje.
Mejorar el diagnóstico de las zonas de sequías mediante el
fortalecimiento del sistema de registros hidrometeorológicos de la
CONAGUA.
Mejorar los atlas de riesgos y elaborar los de municipios que no cuentan
con ellos.
Mejorar los sistemas de aislamiento, ventilación y control de
temperatura en viviendas.
Planeación agrícola: investigar, promover y adaptar esquemas de
irrigación.
46
47
48
49
50
51
52
53
Incrementar las capacidades y atribuciones del sistema de protección
civil.
Incorporar el manejo del ciclo de sequías en organizaciones
comunitarias.
44
45
Impulsar reglamentos para conservar recursos forestales a través de
comités locales.
Medidas de adaptación
43
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
x
x
 
x
 
x
x
x
 
x
x
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
 
 
 
x
 
 
 
 
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
x
x
 
 
x
 
 
 
 
 
 
Carmen y
Petenes
 
 
x
 
x
 
 
 
x
 
 
Cancún y
Punta Allen
1
3
2
1
2
2
2
1
3
1
2
Etapa
826
C onclusiones
 
x
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de
cultivos, cambios en fechas de siembra.
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar prácticas de
rotación de cultivos.
Planeación agropecuaria: usar variedades con bajos requerimientos de
agua y esquemas de manejo ganadero diferenciados.
Planear y ajustar fechas de captura de especies de alta demanda o alto
valor comercial.
55
56
57
58
x
 
Prevenir y controlar incendios forestales (coadyuvar en la creación
de programas federales y estatales entre el sector ambiental y
agropecuario).
Promover aditamentos y políticas que disminuyan el consumo de agua
en vivienda e industria
Promover decretos de áreas protegidas para las zonas de humedales.
Promover y difundir estudios de diagnóstico e impactos
socioeconómicos de sequías.
61
62
63
64
x
x
 
Potenciar la recarga de acuíferos.
Preservar las variedades en el cultivo de especies (variabilidad
genética).
59
60
x
 
x
 
Planeación agrícola: investigar, promover y mejorar el uso de diferentes
variedades resistentes a las lluvias.
54
San Fernando y
Pánuco
Medidas de adaptación
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
 
x
 
 
x
 
x
 
x
x
x
Papaloapan y
Coatzacoalcos
Humedales
 
 
 
x
 
 
 
x
x
x
x
Carmen y
Petenes
 
x
 
 
x
 
x
 
 
 
 
Cancún y
Punta Allen
1
2
3
2
1
3
1
1
1
1
1
Etapa
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
827
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción adecuados.
Promover el uso de materiales y técnicas de construcción alternativos y
que permitan el ahorro de energía.
Promover estrategias para disminuir la intrusión salina.
Promover estudios y convenios para pagos de servicios ambientales,
cuotas y fideicomisos de retribución urbano-rural.
Promover la acuicultura y maricultura sustentables a través de los
ordenamientos territoriales y ambientales.
Promover la recuperación de suelos y la utilización de variedades
resistentes como proyectos piloto (a través de programas federales o
estatales de reconversión).
Promover la siembra de hortalizas.
Promover medidas coordinadas antes, durante y después del evento en
relación con los servicios ambientales y agroecológicos en zonas rurales
(por ejemplo, riesgo de incendio).
67
69
70
71
72
73
74
Promover el uso de energías renovables en vivienda, zonas urbanas y
gobiernos locales.
66
68
Promover el modelaje y monitoreo hidrometeorológico acoplado
al sistema de alerta temprana en conjunción con investigaciones
ecológicas ante estrés hídrico.
Medidas de adaptación
65
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
 
x
x
 
x
 
x
x
x
x
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
 
 
x
 
x
 
x
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
 
 
 
 
 
x
x
x
 
Carmen y
Petenes
x
 
 
x
 
x
 
 
 
 
Cancún y
Punta Allen
2
1
1
1
1
1
2
2
2
2
Etapa
828
C onclusiones
Promover ordenamientos pesqueros por laguna costera que impulsen
acuicultura y maricultura.
Promover programas de financiamiento rural para modificación de
estructuras y viviendas que consuman menos energía.
Promover programas de plantación de árboles de baja talla que
presenten mayor resistencia a sequías o requieran poco riego en los
primeros meses.
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación
(con especies nativas), restauración (incluyendo estudios sobre
implicaciones ecológicas por estrés hídrico).
Protección y manejo de ecosistemas: conservación, reforestación,
restauración (incluyendo estudios sobre implicaciones ecológicas por
estrés hídrico).
78
79
80
81
82
x
x
x
x
 
 
x
Promover normas y técnicas para captación de agua de lluvia.
Promover obras de ingeniería costera: construcción de barreras, diques
y muros de estabilización para el control de aumentos considerables en
el nivel del mar.
76
x
San Fernando y
Pánuco
Promover medidas estructurales y cambios en prácticas ganaderas
para el manejo del riesgo (garantizar la disminución de los impactos
negativos sobre el medio ambiente, directos e indirectos).
Medidas de adaptación
77
75
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
 
 
 
 
x
x
 
x
Papaloapan y
Coatzacoalcos
Humedales
x
 
 
x
 
 
 
 
Carmen y
Petenes
 
 
 
 
x
x
 
x
Cancún y
Punta Allen
3
1
1
2
1
2
1
2
Etapa
H umedales ,
sitios piloto y medidas de adaptación
829
x
 
Revisar e implementar nuevas reglas de construcción, que incluyan
periodos de retorno más largos y consideren eventos extremos
92
recientes.
Reubicar y planear las superficies de siembra.
Reubicar zonas de pastoreo y hacer cambios en regímenes de pastoreo.
91
Reubicar asentamientos desarrollados en zonas de alto riesgo.
89
90
Restituir ecosistemas de agua dulce por marinos.
Reubicación de abrevaderos, cambiar regímenes de pastoreo y manejo
de hatos.
87
88
 
 
 
 
x
 
85
x
Recuperación de la calidad de agua de los canales de riego.
Reducir la contaminación orgánica (especialmente nitratos) en
ecosistemas acuáticos, para evitar la eutrofización (que se potencia
con el ascenso de la temperatura) y conservar hábitats, biodiversidad y
calidad del agua.
84
x
San Fernando y
Pánuco
Reforestar zonas urbanas para proveer sombra y amortiguar el
incremento de la temperatura, así como desarrollar microclimas.
Realizar estudios de percepción y resistencia a la adopción de medidas
que ahorren energía en zonas rurales y urbanas (subsectores ganadero,
agrícola, pesquero, comercial, industrial).
83
86
Medidas de adaptación
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
Humedales
 
x
x
x
 
x
 
x
 
 
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
 
 
 
 
 
x
 
 
x
Carmen y
Petenes
x
x
 
x
 
x
 
x
 
 
Cancún y
Punta Allen
2
3
1
3
3
1
3
1
3
1
Etapa
830
C onclusiones
Utilizar especies y razas alternativas.
Valorar la inversión para recuperar zonas afectadas por ciclones previos.
Garantizar el impulso del concepto “a prueba de clima” (Climate safe).
94
95
Fuente: León et al., 2007.
Seleccionar y almacenar semillas: preservar la variedad genética de
cosechas locales.
Medidas de adaptación
93
Núm.
Cuadro 4. Medidas propuestas para los sitios piloto (continuación).
 
x
x
San Fernando y
Pánuco
Humedales
 
x
x
Papaloapan y
Coatzacoalcos
 
 
x
Carmen y
Petenes
x
x
 
Cancún y
Punta Allen
1
3
1
Etapa
8.5 Recomendaciones
8.5.1 Centros de soporte para la toma de decisiones1
La información presentada en este libro requirió de un importante esfuerzo de recopilación, análisis y síntesis, pero finalmente permitió tener una visión de los principales componentes climáticos, ecológicos, sociales, económicos e institucionales que
definen a la zona costera del Golfo de México y los ocho sitios piloto. Al considerar
los estudios realizados y la información generada por instituciones gubernamentales,
de investigación y no gubernamentales, es evidente la falta de sistematización en
la generación de productos y las restricciones tanto técnicas como institucionales
para acceder a la información en formatos que sean útiles para diferentes tipos de
usuarios.
Por lo tanto, se plantea como una prioridad para la planeación e implementación de medidas de adaptación, el desarrollo de una red de centros de soporte para
la toma de decisiones (CSTD), que facilite la recopilación, análisis y distribución de
información, opinión y conocimiento entre los actores clave del área geográfica de
influencia.
1 Bello et al., 2007.
831
Los CSTD deben constituirse en entidades que cumplan con el propósito de albergar físicamente sistemas para el soporte de decisiones espaciales y deben contar
con dos aspectos fundamentales para su funcionamiento:
• La infraestructura física que dé funcionalidad técnica y logística a estos
centros.
• La base de conocimiento física y virtual, constituida tanto por la relación entre
especialistas y usuarios como por las bases de conocimiento experto que se
generen.
Estos CSTD deben funcionar como la entidad donde se ubicarán las bases de datos físicas y electrónicas (bibliotecas virtuales). Otra de sus funciones sería la de dar
asistencia técnica gratuita a quienes estén involucrados en la planeación e implementación de medidas de adaptación en los sitios piloto. También son los centros para
facilitar la coordinación y el desarrollo de programas de entrenamiento, monitoreo y
análisis para las diferentes instancias participantes (municipal, estatal y federal).
8.5.2 Estudios2
La información presentada en este libro es el primer paso dentro de las medidas de
adaptación al cambio climático, pues intentó describir la vulnerabilidad de la zona
costera del Golfo de México a través de diagnósticos y proyecciones de múltiples
variables. Hubo muchas limitantes relacionadas con la información disponible y requerida para los modelos del clima. En general, en cuanto a la integración de las
variables socioeconómicas en las proyecciones del cambio climático, aún falta mucho
por hacer. Por ejemplo, contar con escenarios para la pesca en el presente siglo o
incluir el estrés hídrico en las proyecciones del sector agropecuario.
Es necesario tener una mejor estimación de la demanda de agua para la zona en
las próximas décadas. La gestión eficiente del agua debe ser el eje rector de las medidas de adaptación y sin embargo hay pocas soluciones específicas enfocadas en este
recurso. El uso de dispositivos ahorradores de agua, tarifas escalonadas y sistemas
2 Buenfil, 2008.
832
C onclusiones
de saneamiento ecológico son algunos ejemplos para reducir el consumo. La falta de
depuración de aguas residuales es un problema grave que necesita atención urgente.
Dado el costo de los sistemas de alcantarillado y tratamiento, se debe considerar una
amplia gama de alternativas disponibles. El DVD interactivo que acompaña a esta
publicación incluye algunas de ellas.
El cambio del uso del suelo es el termómetro del impacto humano. La situación
es crítica debido a las altas tasas de deforestación encontradas y sus efectos sobre
el ciclo hidrológico. Los ordenamientos ecológicos y territoriales deben tomar mayor relevancia dentro del desarrollo municipal y estatal. El reto consiste en hacerlos
respetar.
La aportación de los ciclones en el balance de la precipitación anual debe ser
incorporada en los escenarios de cambio en el patrón de lluvias, pues es una de las
principales causas de incertidumbre en las proyecciones. El reto no es simple, ya que
se requiere el análisis de modelos con alta resolución espacial.
8.5.3 Marco normativo3
Se debe pensar en la posibilidad de plantear reformas al marco jurídico, reconociendo
que el cambio climático no es un asunto de corto plazo y que en varios campos de
política pública no podrá ser resuelto exclusivamente con decisiones nacionales.
Falta precisar en el marco legal y los reglamentos correspondientes, el sentido de
la adaptación y la mitigación; no bastan los diagnósticos científicos; es preciso concretar el conocimiento en instrumentos jurídicos, programáticos y presupuestales.
La normatividad existente sólo se limita a la protección de los humedales que,
aunque importante, no es suficiente, porque de cualquier manera se siguen perdiendo. La afectación en los humedales costeros del Golfo de México se da por una combinación de factores, pero destaca la dificultad de aplicar las leyes federales en los
municipios. Los gobiernos municipales han tolerado y fomentado el crecimiento de
la población hacia zonas de riesgo. La adopción de patrones de crecimiento urbano
adecuado es la clave para que la población se adapte al cambio climático.
El papel de las políticas federales debe ser el de proveer el marco regulatorio y las
guías generales para su aplicación. Los estados y municipios deben comprometerse
3 Munguía, 2007.
R ecomendaciones
833
para lograr la adaptación de los humedales ante los efectos del cambio climático. La
coordinación de actividades entre distintos actores es fundamental: el sector agua
como recurso, el turismo, la extracción de petróleo, y el sector comunicaciones y
transportes, entre otros.
Debe hacerse una división clara de las responsabilidades en la mitigación de desastres y dar mayor protagonismo a los estados y municipios. Es necesario usar el
suelo de manera inteligente y reglamentada, planear adecuadamente el desarrollo y
adoptar medidas de prevención de desastres. Los municipios y estados no han asumido sus facultades y responsabilidades en relación con la planeación urbana, pero
cuentan con la normatividad y aptitud para ello, comenzando por su facultad para
desarrollar ordenamientos ecológicos locales.
De acuerdo con el Programa Nacional de Protección Civil (PNPC) 2001-20064,
el principal desafío del SINAPROC es conformar un sistema de protección civil preventivo, que pueda integrar los niveles federal, estatal y municipal, así como la población
y los sectores sociales y privados. El supuesto básico radica en que los desastres
pueden prevenirse a través de la participación de toda la sociedad.
4 SEGOB, 2001. El PNPC es el principal instrumento de política pública en materia de prevención de desastres.
Comprende una serie de objetivos, medios, estrategias y líneas de acción para regular y coordinar las acciones del
SINAPROC. El PNPC está vinculado con un marco normativo, que incluye la Ley de Protección Civil de cada estado, varios acuerdos y decretos que enmarcan la participación de las organizaciones nacionales e internacionales
de varios tipos y funciones. El PNPC tiene cuatro objetivos generales:
I. Transformar al SINAPROC en un sistema preventivo, fortaleciendo la participación social y la mitigación de los
desastres naturales y antropogénicos.
II. Articular las políticas y acciones de las secretarías, instituciones y organizaciones que integran el SINAPROC, para
prevenir y ayudar a las poblaciones afectadas en caso de emergencia.
III. Desarrollar mecanismos para detectar y pronosticar peligros naturales, y comunicar tal información a las poblaciones y al SINAPROC.
IV. Generar una cultura de la autoprotección y una actitud responsable por parte de las poblaciones expuestas a los
fenómenos perturbadores.
834
C onclusiones
Siglas y abreviaturas
ACI
AICAS ANP BIE BM CBD CC CBD
CENAPRED CEPAL CER CICC
CICY CINVESTAV
Área Costera Integral.
Área de Importancia para la Conservación de las Aves.
Área Natural Protegida.
Banco de Información Económica.
Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, o Banco Mundial.
Convención sobre Diversidad Biológica.
Cambio Climático.
Convención de la Biodiversidad.
Centro Nacional de Prevención de Desastres.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Certificados de Reducciones de Emisiones.
Comisión Intersecretarial de Cambio Climático.
Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán.
Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico
Nacional.
CGPC Coordinación General de Protección Civil.
CMNUCC Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
COLMEX Colegio de México.
CONABIO Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad.
CONACYT Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.
CONAE Comisión Nacional para el Ahorro de Energía.
CONAFOR Comisión Nacional Forestal.
CONAGUA Comisión Nacional de Agua.
CONANP Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
CONAPESCA Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca
CONAPO Consejo Nacional de Población.
CRIP
Centro Regional de Investigación Pesquera.
CRU Climate Research Unit.
CSTD
Centros de soporte para la toma de decisiones.
DBO Demanda bioquímica de oxígeno.
DGPC
Dirección General de Protección Civil.
DOF Diario Oficial de la Federación.
DQO Demanda química de oxígeno
ECOSUR Colegio de la Frontera Sur.
ENACC Estrategia Nacional de Cambio Climático.
EPA
United States Environmental Protection Agency
835
EPOMEX Programa de Ecología, Pesquerías y Oceanografía del Golfo de México de
la UAC.
EVI Environmental Vulnerability Index.
FAPRACC Fondo para Atender a la Población Afectada por Contingencias
Climatológicas.
FGRA Fundación Gonzalo Río Arronte, I.A.P.
FIDE Fideicomiso para el Ahorro de Energía.
FJBS Fundación Javier Barros Sierra, A.C.
FONATUR Fondo Nacional de Fomento al Turismo.
FONDEN Fondo de Desastres Naturales.
FOPREDEN Fondo para la Prevención de Desastres Naturales.
GCM
Modelos de Circulación General de la Atmósfera o General Circulation
Models.
GEF Fondo para el Medioambiente Mundial o Global Environment Facility.
GEI Gases de Efecto Invernadero.
GEQR Gobierno del Estado de Quintana Roo.
GT-ADAPT Grupo para Políticas y Estrategias de Adaptación que coordina el INE.
GESAMP
Grupo de Expertos en Aspectos Científicos de Protección del Medio
Ambiente Marino de la Organización de las Naciones Unidas o Group of
Experts on the Scientific Aspects of Marine Environmental Protection.
GSE HABJ IIB IMTA INE
INEGI
INI INIFAP INP
INVIVIENDA IPCC IUCN LAN LEAD
LGEEPA LGDFS 836
S iglas
Grupo de Seguimiento y Evaluación (de la Península de Yucatán).
Honorable Ayuntamiento Benito Juárez.
Instituto de Investigaciones Biológicas (Universidad Veracruzana).
Instituto Mexicano de Tecnología del Agua.
Instituto Nacional de Ecología.
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática.
Instituto Nacional Indigenista.
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias.
Instituto Nacional de Pesca (Centro Regional de Pesca Veracruz).
Instituto Veracruzano de Desarrollo Urbano Regional y Vivienda
Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático o Intergovernmental
Panel on Climate Change.
International Union for Conservation of Nature and Natural Resources.
Ley de Aguas Nacionales.
Programa de Estudios Avanzados en Desarrollo Sustentable y Medio
Ambiente.
Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.
Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable.
y abreviaturas
LOAPF
MDL MRI NAPA
NAWCP NCAR OCDE OMM ONG OXFAM PEACC PECC PEMEX PIB
PINE
PNANP PNB PND PNPC PNUD
(o UNDP)
PNUMA
POET RAMSAR
RBLP
RMP
RTP
SAGARPA. SAR SCT SDSM SE SECTUR SEDESOL SEGOB SEMAR Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Mecanismo de Desarrollo Limpio.
Meteorolical Research Institute.
Programa Nacional de Acción para la Adaptación o National Adaptation
Programs of Action.
Plan Norteamericano de Conservación de Humedales
Centro Nacional de Investigaciones Atmosféricas.
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
Organización Meteorológica Mundial.
Organismo no gubernamental.
Oxford Commitee for Famine Relief.
Programa Estatal de Acción ante el Cambio Climático.
Programa Especial de Cambio Climático de México.
Petróleos Mexicanos.
Producto Interno Bruto.
Producto Interno Neto Ecológico.
Programa Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Producto Nacional Bruto.
Plan Nacional de Desarrollo.
Programa Nacional de Protección Civil.
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial de la Región Costa Maya.
Sitio Ramsar.
Reserva de la Biosfera Los Petenes.
Región Marina Prioritaria.
Región Terrestre Prioritaria.
Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y
Alimentación.
Segundo Reporte de Evaluación del IPCC.
Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Modelo de Reducción de Escala Espacial Estadístico o Stastistical
Downscaling Model
Secretaría de Economía.
Secretaría de Turismo.
Secretaría de Desarrollo Social.
Secretaría de Gobernación.
Secretaría de Marina.
S iglas
y abreviaturas
837
SEMARNAT SEMARNAP SENER SEPESCA SHCP
SIG SINAPROC SLCPM SMN SRE SRES Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca.
Secretaría de Energía.
Secretaría de Pesca.
Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Sistema de Información Geográfica.
Sistema Nacional de Protección Civil .
Sistema Lagunar Carmen-Pajonal-Machona.
Servicio Meteorológico Nacional.
Secretaría de Relaciones Exteriores.
Informe Especial sobre los Escenarios de Emisiones o Special Report on
Emissions Scenarios.
SS Secretaría de Salud.
TAR Tercer Reporte de Evaluación del IPCC.
UAC Universidad Autónoma de Campeche.
UAM
Universidad Autónoma Metropolitana.
UGA Unidades de Gestión Ambiental.
UMAS Unidades de Conservación, Manejo y Aprovechamiento Sustentable de la
Vida Silvestre.
UNAM Universidad Nacional Autónoma de México.
UNCCD Convención para Combatir la Desertificación.
UNDP
United Nations Development Program.
UNESCO
United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization u
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura.
UNICAR Universidad Autónoma del Carmen.
UQR Universidad de Quintana Roo.
UNEP
United Nations Environment Programme.
USEPA Agencia de Protección al Ambiente de los Estados Unidos de América.
USGS United States Geological Service.
WHSRN Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras o Western Hemispheric
Shorebird Reserve Network.
WWF World Wide Fund for Nature.
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S iglas
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editado por Jacinto Buenfil Friedman se terminó de imprimir
y encuadernar en los talleres de Impresora y Encuadernadora
Progreso, S.A. de C.V. (iepsa), Calzada de San Lorenzo 244,
09830, México, D.F., durante el mes de octubre de 2009.
Se tiraron 500 ejemplares