Download Un modelo para el estudio evolutivo en sociedades tardías de la
Document related concepts
Transcript
UN MODELO PARA EL ESTUDIO EVOLUTIVO DE LOS PROCESOS DE COMPLEJIZACIÓN SOCIAL EN POBLACIONES TARDÍAS DE LA PUNA DE SALTA Gabriel E. J. López1, Federico I. Coloca2 CONICET, Instituto de Arqueología, FFyL, UBA. 25 de mayo 217 3° piso, Ciudad de Buenos Aires, CP 1002. E-mail: [email protected] 2 CONICET, Instituto de Arqueología, FFyL, UBA. 25 de mayo 217 3° piso, Ciudad de Buenos Aires, CP 1002. E-mail: [email protected] 1 Palabras clave: Keywords: Introducción Este trabajo tiene como objetivo discutir desde una perspectiva ecológico-evolutiva los procesos económicos y sociales que se desarrollaron en las sociedades tardías de la puna de Salta. Por esta razón se plantea un modelo para el estudio de la complejidad social creciente en estas poblaciones. La ecología evolutiva utiliza modelos predictivos simples de la conducta humana, a partir de los cuales se pueden plantear hipótesis y contrastarlas empíricamente, usando un método hipotético-deductivo (Smith y Winterhalder 1992). Uno de los modelos más utilizados dentro de este marco teórico es el del tamaño óptimo de grupos, dado que permite evaluar los costos y beneficios de los individuos en relación con su agrupamiento (Boone 1992, López 2007). Este modelo se utiliza aquí para predecir hasta qué punto es conveniente agruparse o actuar solitariamente, principalmente en contextos de competencia, los cuales son propiciatorios para la emergencia de jerarquías o más aún de diferenciación social. En estos contextos, los grupos humanos pueden seguir creciendo aún a expensas de la disminución de la tasa de retorno, dado que los costos de defensa y exclusión pueden superar a los costos de incluir nuevos miembros. En ambientes como la puna, caracterizados por la heterogeneidad en la distribución de los nutrientes y la baja productividad primaria, la competencia por espacios y recursos puede ser alta. Debido a la competencia, algunos individuos pueden absorber los costos de mantener una determinada organización social con mayores beneficios que el resto de la población. Estos individuos a los que de aquí en adelante llamaremos “manipuladores”, obtienen una mayor tasa de retorno a expensas de la reducción del beneficio grupal. Esto puede mantenerse a partir de la regulación y el cumplimiento de sanciones, incluyendo el uso de la fuerza y/o la coerción ideológica. Esta última es de alto interés arqueológico porque puede dejar rastros materiales a partir de la producción y/o uso de bienes que se utilizan como despliegue de poder y riqueza, incluyendo la iconografía. Desde una perspectiva ecológico-evolutiva, autores como Hayden (1998) han distinguido entre tecnología de prestigio y tecnología práctica. Considerando el costo-beneficio las tecnologías de prestigio requieren mucha inversión de energía, aumentando los costos. Sin embargo, estas tecnologías transmiten información para obtener prestigio o roles de liderazgo a determinados individuos o grupos. Este tipo de inversiones pueden ser consideradas señales costosas, implicando la exhibición de información para obtener un beneficio que supere los costos (Muscio 2004). Este es el caso de los manipuladores que desean exhibir su riqueza implantando a su vez una ideología dominante, plasmada materialmente en determinados objetos. De esta forma avalan y legitiman su poder obteniendo mayores beneficios a partir de la posibilidad de manipular la obtención de excedentes. El retorno obtenido por los manipuladores no proviene directamente de la inversión en señales costosas sino que ésta es una herramienta importante para poder obtener beneficios del resto del grupo. La exhibición de señales costosas a partir de una alta inversión energética puede relacionarse también con las actividades rituales, la cuales son importantes para obtener beneficios de liderazgo y el prestigio. Cuanto mayor es la densidad de población, en un contexto de reducción de la movilidad residencial, hay mayores posibilidades de acentuar la desigualdad por parte de individuos manipuladores que concentran cada vez más poder y riquezas. En este sentido, la transmisión cultural permite un aprendizaje social que puede ser usado en su favor. En estos contextos, aumenta el costo del aprendizaje individual y disminuye el costo de aprendizaje social por imitación o asimilación de “paquetes” de rasgos desde un individuo o grupo modelo (ver Boyd y Richerson 1985). A medida que aumenta la escala de la organización social, se espera que los manipuladores puedan incrementar la tasa de retorno a partir de una mayor extracción de excedentes (e.g. el desarrollo estatal). Por lo tanto, partiendo del modelo de tamaño óptimo de grupos es posible que estos individuos puedan seguir obteniendo beneficios crecientes a expensas del grupo, aún cuando se supera su tamaño máximo. Aplicación a casos de estudio en la Puna de Salta A partir de este marco teórico se desarrolla brevemente la aplicación empírica a un caso de estudio. El área de investigación corresponde a la cuenca de Ratones, Puna de Salta. La misma se encuentra surcada por un salar de grandes dimensiones, dando cuenta de un ambiente muy árido. Desde el año 2009 se comenzaron a investigar dos sitios arqueológicos distantes aproximadamente 2 km entre sí. El primero se denomina Abra de minas, y se ubica próximo a una vega (López y Coloca 2015). Entre sus características salientes se destaca la alta frecuencia de estructuras arquitectónicas. El segundo sitio es la Cueva Inca Viejo, emplazada sobre un cerro a una altura de 4312 mnsm (López et al. 2015). Ambos sitios presentan ocupaciones que fueron fechadas en lo que comúnmente se denomina Período Tardío/Inca. Durante esta cronología (900 – 1500 DC), se ha propuesto el desarrollo de procesos de intensificación económica y alta complejidad social (Albeck 2001, Nielsen 2013, Tarragó 2000), que incluyó en su tramo final la expansión del Tawantinsuyu (Williams et al. 2005). Otro tema importante para este período es el tráfico interregional a partir de caravanas de llamas. Se ha discutido acerca del manejo de estas redes a partir de la consideración de modelos de control estricto por parte de elites o la posibilidad de caravaneros independientes (Nielsen 2013). Más allá de quiénes fueron los agentes encargados del transporte de bienes, es importante destacar que cierto grado de control sobre el traspaso de recursos habría favorecido a los grupos “manipuladores”. El manejo en el traslado y distribución de ciertos bienes restringidos habría tenido un alto valor simbólico e ideológico para aumentar su poder. La incorporación de distintos espacios del Noroeste argentino al estado incaico podría haber magnificado la escala y el control en el traspaso de esta clase de bienes. La información del sitio Abra de Minas muestra características espaciales, arquitectónicas y artefactuales útiles para el estudio de los procesos de complejidad social ocurridos durante períodos tardíos/incaicos. Este sitio presenta una distribución espacial heterogénea de las estructuras arquitectónicas, evidenciada especialmente en la posición altitudinal diferencial de las mismas. La estructuración del espacio incluye la presencia de recintos perimetrales compuestos (RPC), estructuras asociadas con ocupaciones estatales. Probablemente se trate de un asentamiento planificado por el estado incaico, aún cuando se registran evidencias de ocupaciones previas (López y Coloca 2015). Por el momento no se puede sostener que dicha diferenciación se corresponda necesariamente con una jerarquización social en el sitio. Sin embargo, puede ser propuesta como una hipótesis para seguir avanzando a futuro. Entre la evidencia artefactual, la cerámica presenta distintos especímenes y motivos asignables a momentos incaicos, especialmente aríbalos y platos con asas ornitomorfas. Estas formas han sido relacionadas con prácticas rituales llevadas a cabo por elites como forma de control ideológico y simbólico de las poblaciones locales (Williams et al. 2005). En la Cueva Inca Viejo también se recuperó un fragmento de aríbalo que remite a la apropiación simbólica de un espacio con un intenso uso previo. Este sitio se caracteriza por la diversidad de restos materiales vinculados con “lo ritual”. Entre ellos se destaca la presencia de distintos paneles de arte rupestre, semillas de cebil, calabazas pirograbadas, plumas de aves alóctonas y locales, y estercolamiento de las paredes (pusno) (López et al. 2015). También se registraron fragmentos de turquesas, probablemente extraídas localmente, las cuales habrían tenido un alto valor simbólico. Esta cueva se ubica en un sector de difícil acceso de un cerro cercano a Abra de Minas. La apropiación de este espacio por parte del imperio presenta indicadores tales como construcciones en el camino hacia la cueva y una plataforma que limita su acceso. En consecuencia, se plantea un uso restringido de esta cueva al menos desde momentos incaicos. En relación con el arte rupestre, se destacan los motivos caravaneros, específicamente llamas atadas y alineadas guiadas por antropomorfos. Asimismo, se evidencian seres de mayor tamaño que podrían caracterizarse como divinidades (e.g. “Punchao” o “el sacrificador”). También se registran pinturas de personajes en actitud dinámica portadores de objetos relacionados con aspectos bélicos como hachas, escudos y trompetas. Entre la evidencia más tardía, se cuenta con la presencia de motivos con formas de clepsidra, que podrían relacionarse con escutiformes o uncus. Discusión En el área andina, se han destacado procesos de complejidad creciente en momentos tardíos (ca. 900-1500 DC). Esto incluyó procesos de reducción de la movilidad residencial o sedentarismo, mayor población y densidad poblacional, economías basadas en la producción de alimentos en escalas grandes y obtención de excedentes, manipulación del ambiente para incrementar la productividad, diversificación tecnológica, aumento del tráfico de bienes de prestigio, aumento de las jerarquías sociales y presencia de liderazgos permanentes con posiciones de estatus, prestigio y poder (Albeck 2001). En muchos casos, la desigualdad fue legitimada por medio de mecanismos de manipulación simbólica o ideológica (Williams et al. 2005). En contextos de tierras altas puneñas, los limitantes ecológicos pudieron haber condicionado las estrategias económicas y sociales de los grupos humanos. La competencia por los recursos y las tierras productivas se habría acentuado en contextos tardíos, ante el aumento de la demografía y el tamaño de los grupos. Por lo tanto, desde los modelos de la ecología evolutiva, ciertos líderes podrían haber obtenido rédito de estas condiciones, manipulando la obtención de excedentes a su favor. Asimismo, en grupos de tamaño grande, el manejo de la simbología y la ideología por parte de individuos manipuladores podría mantener las relaciones de desigualdad. En estos contextos, la transmisión cultural de sanciones sociales legitima aún más estos procesos. De todas formas, considerando la evidencia macrorregional para momentos tardíos, se espera que estos procesos de competencia y aumento de la complejidad social hayan tenido un correlato en situaciones de tensión social y/o violencia intergrupal (Nielsen 2007). En la Puna de Salta, la evidencia tardía presentada en este trabajo indica el desarrollo de algunos de estos procesos de complejidad social creciente. La Cueva Inca Viejo cuenta con materiales procedentes de diversas áreas, algunas a más de 300 km., en especial bienes relacionados con lo “ritual” y que pudieron haber sido utilizados como bienes de prestigio. Este es el caso de las plumas de loros procedentes de tierras bajas, semillas de cebil y calabazas pirograbadas. De hecho, el consumo de cebil ha sido señalado como un indicador de prácticas ceremoniales propiciadas por elites (Pérez Gollán 1986). En contextos de expansión incaica, este tipo de prácticas se refleja también en la producción y consumo de chicha. Tanto en Abra de Minas como en Cueva Inca Viejo, la presencia de aríbalos decorados puede relacionarse con el uso ceremonial de esta bebida. Los incas usaron cerámica en fiestas de hospitalidad o legitimación del poder de las elites como forma de establecer relaciones asimétricas y privilegios en relación con el resto de la población (Williams et al. 2005). Específicamente estas clases de artefactos pueden ser interpretadas como señales costosas, utilizadas en festividades rituales que promueven la cohesión social y la hegemonía. Cabe destacar la importancia que los incas le otorgaron a la actividad minera, la cual posiblemente haya sido una de las causas de la ocupación en esta área. El manejo de minerales de alto valor simbólico-económico como las turquesas podría haber sido relevante para las elites. La expansión incaica implicó un nuevo ordenamiento político, económico y social. Abra de Minas presenta diversas estructuras arquitectónicas incaicas, una estructuración planificada del sitio y una alta inversión de energía, que indicarían cierta estabilidad residencial y tamaños de grupos grandes. Asimismo, la Cueva Inca Viejo muestra una plataforma en su entrada que habría limitado el acceso al sitio. Esto llevaría a un uso restringido del espacio, que podría relacionarse con la manipulación simbólica por parte de las elites. Finalmente, el arte rupestre indica la actividad caravanera como así también personajes antropomorfos vinculados con la cosmovisión andina y la tensión social. Esta última se refleja en actitudes dinámicas de personajes con escudos, hachas, trompetas y abstracciones de cabezas cercenadas (López et al. 2015). En síntesis, Cueva Inca Viejo y Abra de Minas presentan evidencia de procesos de complejidad social creciente, a partir de indicadores del manejo por parte de determinados grupos de prácticas rituales y ceremonias que serían propiciatorias de ciertos niveles de desigualdad, fundamentalmente a partir del desarrollo del Estado Incaico. El uso de bienes y recursos de prestigio en estas ceremonias puede ser considerado una señal costosa por parte de los manipuladores como forma de legitimar su poder en grupos de tamaño creciente. Al respecto, el manejo del tráfico macrorregional despierta algunas preguntas: ¿Quiénes fueron los agentes que transportaban los bienes y recursos, específicamente aquellos de prestigio? ¿Hubo un manejo de parte de las elites? La continuidad de las investigaciones permitirá avanzar en esta problemática. Bibliografía Albeck, M. 2001 La puna argentina en los periodos medio y tardío. En, Historia Argentina Prehispánica, Tomo 1, editado por E. Berberian y A. Nielsen, pp. 347-388. Brujas Córdoba. Boone, J. 1992 Competition, conflict and development of social hierarchies. En Evolutionary Ecology and Human Behavior, editado por E. Smith y B. Winterhalder, pp. 301-337. Hawthorne, N. Y. Aldine de Gruyter Boyd, R. y P. Richerson 1985. Culture and the Evolutionary Process. University of Chicago Press, Chicago. Hayden, B. 1998 Practical and prestige technologies: The evolution of material systems. Journal of Archaeological Method and Theory 5: 1-53. López, G. 2007 Aspectos sociales de la transición al pastoralismo en la Puna: una perspectiva evolutiva. En Producción y circulación prehispánicas de bienes en el sur andino, editado por A. Nielsen, M. Rivolta, V. Seldes, M. Vázquez y P. Mercolli, pp. 83- 103, editorial Brujas, Córdoba. López, G. y F. Coloca. 2015 El sitio Abra de Minas: nuevos aportes para la caracterización de las ocupaciones Tardío/Incas en las tierras altas del Noroeste argentino. Bulletin de l’Institut Français d’Études Andines 44 (1): 141-149. López, G., F. Coloca, S. Araya, J. Orsi y S. Seguí. 2015 El sitio Cueva Inca Viejo, salar de Ratones, Puna de Salta: Evidencia arqueológica y procesos de interacción macro-regional. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología 40: 45-71. Muscio, H. 2004 Dinámica Poblacional y Evolución Durante el Período Agroalfarero Temprano en el Valle de San Antonio de los Cobres, Puna de Salta, Argentina. Tesis Doctoral, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires. Nielsen, A. 2007 Armas significantes: tramas culturales, guerra y cambio social en el sur andino prehispánico. Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino 12(1): 9-41. 2013 Circulating objects and the constitution of South Andean Society (500 BC-1550 AD). (eds.), Merchants, markets, and exchange in the Pre-columbian world, editado por K. Hirth y J. Pillsbury, pp. 389-418. Washington, Dumbarton Oaks. Pérez Gollán, J. A. 1986 Iconografía religiosa andina en el Noroeste argentino. Boletín del Instituto Francés de Estudios Andinos: 61-72. Smith, E. y B. Winterhalder. 1992 Natural Selection and Decision Making: some fundamental Principles. En Evolutionary Ecology and Human Behavior, editado por E.A. Smith y B.C. Winterhalder, pp. 25-60. Aldine de Gruyter, New York. Tarragó, M. 2000 Chacras y pukará. Desarrollos sociales tardíos. En Nueva Historia Argentina. Los pueblos originarios y la conquista. Tomo 1, pp. 257-300. Buenos Aires, Sudamericana. Williams, V. I., M. P. Villegas, M. S. Gheggi y M. G. Chaparro. 2005 Hospitalidad e intercambio en los valles mesotermales del Noroeste argentino. Boletín de la PUCP 9: 335373.