Download 1.- Alienación e ideología.
Document related concepts
Transcript
EL PENSAMIENTO DE KARL MARX (resumen) 1.- Alienación e ideología. La filosofía, la reflexión debe tomar como premisa (o punto de partida) ineludible la vida real, analizarla y criticarla. Debe partir del individuo real. Y esa realidad en la que vive Marx es la de la sociedad capitalista de la industrialización, una sociedad contradictoria, deshumanizada… El pensamiento de Marx es un pensamiento crítico y en esa dimensión crítica juega un papel muy importante el concepto de alienación. “Alienación” viene del latino “alienus” (ajeno, que pertenece a otro), que a su vez, viene de “alius” (otro). Es sinónimo de “enajenación” y en Hegel significa también “extrañamiento”. Con este concepto se refiere Marx a la situación en que vive la persona que no es dueña de sí misma ni responsable de sus acciones y pensamientos. Es, como veremos, el estado en el que se encuentra el proletariado en la sociedad capitalista, pues es una sociedad de explotación que se basa en la propiedad privada de los medios de producción. 1.1. Las diversas formas de alienación: a) La alienación económica o alienación en el trabajo. Esta alienación económica es la fundamental, la que está a la base de todas las demás. trabajar es exteriorizar y proyectar lo que en nosotros hay, de esta manera el producto de esa actividad se podrá reconocer como mi producto, como mi obra. Si la esencia del hombre es el trabajo, trabajar es realizarse y uno se realiza cuando se reconoce en lo que ha hecho. Sin embargo, se da en la realidad la situación de que el resultado o el producto del trabajo no le pertenece al hombre que lo produce, sino a otro. Se da la situación en la que el trabajo no realiza al que lo lleva a cabo porque no se reconoce en su obra, la cual se le muestra como extraña; se da la situación de que el trabajo no realiza al que trabaja sino a otro, al que no trabaja… A esta situación es a la que llama Marx alienación. b.- La alienación ideológica. La palabra IDEOLOGÍA en Marx significa “falsa conciencia” y sirve para justificar el orden social existente. Es una explicación falsa de la realidad que elabora la clase dominante para convencer (y así engañar) a la clase dominada, sirve para ocultar la realidad y mantener las condiciones de explotación de una clase por otra. Por tanto, la alienación ideológica consiste en asumir, por parte del trabajador, un conjunto de ideas que dan una imagen falseadora y justificadora de la realidad y de las condiciones de vida. Se manifiesta da diversas formas: La alienación social consiste en la ilusión de que la sociedad es un todo en el que los intereses y las contradicciones de los hombres se reúnen y concilian o la ilusión de que no hay siquiera clases. 1 La alineación política. Para Marx, el estado no es más que el órgano mediante el que la clase dominante oprime a la clase débil. La alienación filosófica. Para Marx la filosofía resultante en el modo de producción capitalista no es sino la traducción a la teoría y al pensamiento de las posiciones de la clase burguesa (dominante). La alienación religiosa. La religión aparece como el máximo consuelo ante la máxima opresión, el “opio del pueblo” (lo adormece). La esperanza religiosa es un espejismo que paraliza la voluntad liberadora del hombre en esta vida. 2.- Materialismo histórico y comunismo. Análisis de la sociedad capitalista. Como ya hemos dicho, toda reflexión acerca de la realidad debe partir de la realidad concreta en la que se vive, y Marx va a arrancar de la hipótesis de que lo que mejor define a una época es la forma en que se trabaja. Y el modo de producción capitalista era el característico de su época. Esta es la concreción más clara de su materialismo histórico, analiza la historia como la evolución en las relaciones de las fuerzas de producción, por lo tanto como la evolución en la lucha de clases, toda la historia, de hecho, es la historia de la lucha de clases. Pues bien, la sociedad moderna se encuentra escindida en dos clases sociales antagónicas: la burguesía y el proletariado. Marx no definió directamente el concepto de “clase social”, pero podríamos definir “clase social” como un grupo de personas que tienen unas condiciones de existencia y unos intereses comunes, procedentes de sus relaciones con el modo y los medios de producción (factor objetivo) y de lo cual son conscientes de alguna manera (factor subjetivo). La burguesía y el proletariado son clases antagónicas, la primera se caracteriza por su individualismo, su interés por el dinero y su utilitarismo, frente al proletariado, que tiene que venderle su fuerza de trabajo para poder subsistir y que es una clase alienada, preocupada por su subsistencia, insegura, porque no sabe qué va a ser de ellos en el futuro. Ambas tienen vocación de universalidad. Marx ve el capitalismo como un modo de producción histórico, que se da en un momento, por las circunstancias que se producen en la relación de fuerzas entre las clases sociales, no es algo natural, el concepto clave de la economía capitalista es el de “mercancía”. En el régimen productor de mercancías, el capitalismo, se da la particularidad de que también es mercancía la fuerza de trabajo. En este régimen, la fuerza de trabajo es una mercancía más. Es el régimen en el que se puede vender la fuerza de trabajo o cambio del salario. Lo que sucede es que el valor producido por la fuerza de trabajo es mayor que la fuerza de trabajo mismo; a esta diferencia es a lo que se llama plusvalía. Y éste es el origen de la ganancia capitalista, es decir, el capitalista le paga al obrero menos de lo que él produce, por eso hay una “explotación del proletariado”. Al ser este un modo histórico de producción. Puede, por tanto, cambiarse, por eso Marx considera necesaria la revolución del proletariado. La única solución para la lucha de clases es que el proletariado tome el poder (dictadura del proletariado) y pueda constituir la sociedad comunista, 2 liberando, asimismo, a la clase burguesa de ese enfrentamiento y eso sólo se producirá cuando las fuerza del trabajo y la propiedad de los medios de producción coincidan en las mismas manos, de tal forma, que la plusvalía queda en manos de los propios trabajadores. De esa forma se acabaría con la explotación y con la alienación, se conseguiría la sociedad sin clases. 3