Download Deformidades de los dedos de los pies
Document related concepts
no text concepts found
Transcript
Cap236 7/6/06 09:29 Página 1105 Sección 22 ■ Capítulo 236 Deformidades de los dedos de los pies F. Santonja Importancia Conceptos Las patologías de los dedos son notablemente frecuentes. Muchos pacientes presentan deformidades en los dedos y consultarán por la deformidad estética que, en ocasiones, será dolorosa. Es importante conocer en atención primaria los consejos más oportunos a dar y los criterios de derivación de los mismos. Hallux valgus Muchas malformaciones de los dedos son consecuencia de una alteración biomecánica del antepié o del tarso. Desde hace unos años, se ha ido imponiendo en España, la cirugía percutánea o sistema MIS. Esta cirugía suele ser conocida coloquialmente por lo pacientes como la “cirugía láser”, por las mínimas cicatrices que quedan. Muchos pacientes consultan a su médico de familia, durante el postoperatorio, sobre si su evolución es la adecuada. Otros son vistos en urgencias y el médico lo deriva a traumatología, por las múltiples fracturas que presenta en la radiografía y, en ocasiones, incluso le quita el vendaje que lleva y lo sustituye por una férula de escayola. Esta cirugía consiste en realizar osteotomías, tenotomías, capsulotomías y raspados óseos, a través de incisiones de 2-3 mm. No precisan isquemia y la anestesia es troncular en el tobillo. Las osteotomías son autoestables, al buscar una osteoclasia, por lo que no precisan osteosíntesis. El vendaje es el que proporciona la suficiente inmovilización mientras consolidan las fracturas, por lo que es fundamental conocer la adecuada técnica de inmovilización. Es la desviación del dedo gordo hacia fuera y la protrusión de la cabeza del metatarsiano (fig. 1a). Es conocido como “juanete”. Las deformidades (fig. 1b) que presenta son: A) varo del 1er metatarsiano, considerándose normal una separación de unos 10º entre el primero y el segundo metatarsiano; B) prominencia medial de la cabeza del 1º metatarsiano o “juanete”, que en ocasiones presentará un higroma; C) desviación del dedo gordo hacia fuera o en valgo, se considera normal hasta un discreto valgo de 10 a 15º; D) luxación externa de los sesamoideos. El hallux valgus es progresivo por la disfunción muscular, ya que los flexores del primer dedo se convierten en abductores y esta abducción no es neutralizada por el músculo aductor, que se convierte en flexor. Con el paso de los años, aparecerá una artrosis de la articulación que ocasionará dolor. Suele afectar al 2º dedo, deformándolo en martillo o incluso en garra (fig. 1c). Produce una sobrecarga del 2º metatarsiano por transferencia, ocasionando un aplanamiento del arco transverso del antepié. Con cierta frecuencia, se aprecia que el 2º dedo está sobre el 1º (fig. 1d) o supraductus. En ocasiones evoluciona hacia el “antepié triangular”, que consiste en la asociación del hallux valgus, quinto dedo en varo, junto a deformidades en martillo y/o luxaciones de los dedos centrales (fig. 1e). Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1105 Cap236 7/6/06 09:29 Página 1106 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia a b c d e Figura 1. a) Mujer de 69 años con hallux valgus de grado moderado bilateral. b) Rx. Dorso-plantar de una mujer con hallux valgus bilateral. El derecho fue intervenido por cirugía convencional, que recidivó. El izquierdo presenta un hallux valgus marcado. c) Hallux valgus que desplaza el 2º dedo hacia dorsal (supraductus). Obsérvense las uñas enfermas y la rotación (pronación) del primer dedo. d) Hallux valgus con el 2º dedo en supraductus. e) Antepié triangular. Existe hallux valgus y quintus varus, junto a dedos en martillo. 1106 Es más frecuente en mujeres. Existen factores congénitos predisponentes y factores desencadenantes, como utilizar calzado estrecho de puntera o de un número inferior al que le corresponde. metatarso-falángica (MTF) es normal. Suele aparecer por un excesivo crecimiento de la zona medial de la 1ª o 2ª falange de causa congénita (fig. 2). Con frecuencia se confunde con el clásico hallux valgus. Suelen ser progresivos. Hallux valgus interfalángico Hallux rigidus Es la deformidad en valgo del primer dedo a expensas de la articulación interfalángica. La Se caracteriza por la existencia de dolor en la articulación metatarso-falángica del 1er Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap236 7/6/06 09:29 Página 1107 Capítulo 236: Deformidades de los dedos de los pies Figura 2. a) Hallux valgus interfalángico bilateral en un niño de 6 años. b) Hallux valgus MTF de 40º e IF de 34º, en un adolescente de 15 años. a b dedo y disminución de la movilidad, que en la fase avanzada presentará rigidez. Existen dos tipos, el hallux rigidus primario, que se produce en varones entre 40 y 60 años, y el secundario a traumatismos, cirugía o procesos metabólicos, como la artritis gotosa. Presentan dolor al deambular en la MTF del 1er dedo, al principio sólo en la fase de despegue por la disminución de la movilidad de esta articulación (fig. 3a). Con la evolución, se modifica la marcha hiperapoyando el borde externo del pie (supina el antepié), para evitar el apoyo del 1º dedo, ocasionando una hiperqueratosis bajo la cabeza del 5º metatarsiano. En la radiografía, se aprecia un estrechamiento de la interlínea metatarso-falángica, que va evolucionando hasta su desaparición y la formación de osteófitos que producen la típica exostosis dorsal (fig. 3b). En las fases más avanzadas, existe una total destrucción de la articulación que se transforma en un bloque, con una importante hipertrofia articular que puede comprimir un colateral (fig. 3c). ser unilateral. Suele deberse a una deformidad congénita o de causa yatrógena, tras una hipercorreción quirúrgica del hallux valgus. Ocasiona una dificultad para calzarse y suele dificultar la marcha, cuando se acompaña de rigidez de la articulación. El tratamiento es quirúrgico. Hallux flexus Es la deformidad en flexión del primer dedo, acompañada de la pérdida de la flexión dorsal. Se produce por una parálisis del extensor largo del 1er dedo con hipertonía o contractura del flexor largo. Suele presentarse en los pies cavos con marcada caída del primer metatarsiano, que se compensa supinando el antepié (fig. 4). Dedo en martillo Hallux varus Es la deformidad en flexión de la articulación interfalángica proximal con extensión de la interfalángica distal; suele acompañarse de extensión de la metatarsofalángica. Es la deformidad más frecuente de los dedos trifalángicos. Su prevalencia es del 2 al 20%, aumentando claramente con la edad. Es la desviación hacia la línea media del primer dedo. Es relativamente rara y suele Se originan sobre todo por una hipertonía de los músculos extrínsecos, ya que extienden Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1107 Cap236 7/6/06 09:29 Página 1108 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia b a b’ c Figura 3. a) Hallux rigidus. Existe una disminución de la movilidad de la metatarso-falángica del primer dedo que dificulta la fase de despegue al deambular, compensándolo con una supinación del antepié. b) Hallux rigidus. Fase incipiente en la que existe un estrechamiento de la interlínea articular y la típica exostosis dorsal sobre la cabeza del primer metatarsiano. b’) Fase incipiente del hallux rigidus. Existe un estrechamiento de la interlínea articular y un pequeño osteófito en la cara lateral en forma de “tejadillo”, que es característico de los estadios iniciales. c) Hallux rigidus. Fase avanzada o de anquilosis en la que existe una marcada destrucción de la superficie articular, con gran hipertrofia articular. a b Figura 4. a) Hallux flexus por caída del primer metatarsiano en un pie cavo anterior de un prepúber de 11 años. b) Radiografía lateral del antepié de un adulto con marcado pie cavo e importante caída del primer metatarsiano, con hallux flexus. 1108 Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap236 7/6/06 09:29 Página 1109 Capítulo 236: Deformidades de los dedos de los pies a b Figura 5. a) 2º dedo en martillo y hallux valgus del 1er dedo. También se aprecia un 3º dedo en maza y un 4º dedo, con un martillo “funcional”, por presentar callosidad en la cara dorsal de la IFP con aparente alineación normal (sólo aparece al contraer la musculatura del pie). b) Hiperqueratosis bajo las cabezas de los metatarsianos centrales en la misma paciente. Obsérvese la falta de espacio entre el 1º y 3er dedos que ha obligado al 2º dedo a desplazarse. la MTF y flexionan las IF y, en menor medida por una hipotonía de los intrínsecos. Suele acompañar al hallux valgus y al pie cavo. A la inspección, la deformidad es típica (fig. 5). Existe callosidad sobre la interfalángica proximal que, en ocasiones se inflama e incluso puede infectarse (bursitis). Cuando exista luxación metatarso-falángica, suelen presentar dolor en la cabeza del metatarsiano. Existen tres fases evolutivas: 1. Reductibilidad completa; en esta fase se reduce el dedo en martillo al elevar la cabeza del metatarsiano. 2. Reductibilidad parcial, en la que existe una clara retracción de las partes blandas; y 3. Irreductible, en esta fase existe una luxación de la falange proximal, por lo que se palpa la prominencia dolorosa de la base de la falange en la cara dorsal y la protrusión de la cabeza del metatarsiano en la planta. Dedo en maza Es la flexión aislada de la interfalángica distal. Suele afectarse un solo dedo del pie (fig. 5). Clinodactilia Es la desviación lateral de los dedos. Se suele producir en reumatismos y se asocia con el dedo en martillo. Presentan callosidades interdigitales, como el “ojo de perdiz”, que se localiza entre las dos interfalángicas, o el “ojo de gallo”, cuando aparece en el fondo del espacio interdigital. Quinto dedo en varo Se caracteriza por el valgo del 5º metatarsiano, la desviación hacia dentro o en varo del 5º dedo, la exostosis de la cabeza del Dedos en garra Es la flexión exagerada de las articulaciones interfalángicas con extensión de la MTF (fig. 6). Se forma un callo hiperqueratósico doloroso en la cara dorsal de la articulación interfalángica (higroma). Figura 6. Dedos 2º y 3º en garra. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1109 Cap236 7/6/06 09:29 Página 1110 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia metatarsiano (juanete de sastre) y la rotación del dedo (fig. 7). Es una deformidad simétrica al hallux valgus. a Suele ser congénito y el 5º dedo suele estar montado sobre el 4º (supraductus) y, con menor frecuencia, está por debajo (infaductus). Con menor frecuencia, aparecerá como consecuencia de un marcado hallux valgus por insuficiencia del primer radio, que ocasiona una sobrecarga de los metatarsianos centrales, que producen deformidad de los dedos trifalángicos y quinto dedo en varo. Es el antepié triangular (fig. 1b). La anatomía patológica es similar a la del hallux valgus. Los tendones del extensor y flexor largo van a perpetuar e incrementar progresivamente la deformidad. Suelen presentar una callosidad bajo la cabeza del 5º metatarsiano y en su cara externa, por el roce con el calzado. También pueden presentar “ojo de perdiz” en la cara externa del 5º dedo. Radiología Proyección dorso-plantar Debe hacerse incluyendo todo el pie y en carga, es decir, estando de pie apoyando el peso del cuerpo sobre ambos pies. Proyección lateral del antepié Debe hacerse en bipedestación e incluyendo todo el pie. Proyección oblicua del antepié Debe hacerse sólo del antepié y en descarga. Tratamiento Hallux valgus El tratamiento conservador no suele ser eficaz (los separadores no sirven y se suelen 1110 b Figura 7. a) Quinto dedo en varo congénito. b) Quinto dedo en varo congénito y marcado hallux valgus del 1er y 2º dedo. 3er y 4º dedos en martillo. cansar de utilizarlos). Como medida preventiva se almohadillarán los zapatos y se utilizarán hormas grandes y anchas. Si existe mucho dolor o la deformidad impide la deambulación o el uso de calzado, se recurrirá a la cirugía. Existen más de 100 técnicas quirúrgicas descritas. En nuestro medio, las más utilizadas son las osteotomías, las artroplastias y la resección de la base de la primera falange. La cirugía percutánea se planifica en la radiografía (fig. 8a) y se realiza exostosectomía (limado de la exostosis de la cabeza del primer metatarsiano), osteotomía de la metáfisis distal de la base de la 1ª falange, que la ha de varizar (cerrar); tenotomía del abductor del 1er dedo con capsulotomía externa de la MTF (fig. 8b); con frecuencia, se suele añadir la osteotomía del cuello del primer metatarsiano. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap236 7/6/06 09:29 Página 1111 Capítulo 236: Deformidades de los dedos de los pies Figura 8. a) Rx dorsoplantar del pie con la planificación quirúrgica de los lugares donde realizar las osteotomías. En punteado está marcada la exéresis de la exostosis. b) Escopia quirúrgica que muestra la capsulotomía y tenotomía del abductor del 1er dedo. a La cirugía percutánea bien realizada, permite correcciones sorprendentes sin apenas dejar cicatrices (fig. 9). b El vendaje es muy importante en esta cirugía ya que, al no realizar osteosíntesis, es el único medio para evitar los desplazamientos secundarios de las osteotomías correctoras realizadas. Igualmente es necesario el uso de un calzado especial posquirúrgico con suela rígida (fig. 10). El vendaje se suele cambiar una vez a la semana durante el primer mes. A partir de este tiempo, se coloca un separador de silicona tipo carrete y, habitualmente, una cincha metatarsal (fig. 11). a b Figura 9. a) Hallux valgus bilateral. El izquierdo fue intervenido mediante artrotomía (cirugía convencional) que recidivó (misma paciente de la figura 1b). b) Hallux valgus derecho intervenido por MIS. Obsérvese el aspecto del pie a los 4,5 meses y las cicatrices puntuales en el dorso de la base del 1er y 2º dedo. c) Rx dorsoplantar en la que se aprecia la consolidación de las fracturas a los 4,5 meses de realizada la cirugía percutánea. c Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1111 Cap236 7/6/06 09:29 Página 1112 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia Figura 10. Calzado postquirúrgico con suela rígida. Hallux valgus interfalángico En los congénitos puede utilizarse un vendaje corrector durante el crecimiento, para frenar el hipercrecimiento del lado medial. Si originan sintomatología, precisarán tratamiento quirúrgico, realizando artroplastia u osteotomía de la falange. Hallux rigidus El tratamiento en la primera fase es la aplicación de una plantilla con una cuña retrocapital que eleve la cabeza del 1er meta y descargue la articulación, así como fisioterapia. Si persiste la sintomatología, el tratamiento será quirúrgico. En las fases iniciales se realiza una artrólisis y, en las fases evolucionadas, desde una resección-artroplastia hasta una artrodesis. Hallux flexus El tratamiento, cuando es funcional o reductible, se basa en la colocación de una ortesis que eleve la cabeza del 1er metatarsiano; si la deformidad es estructurada, precisará tratamiento quirúrgico, realizando una osteotomía con cuña de base dorsal en la cuneometatarsiana y, si es necesario, alargando los tendones acortados. Dedo en martillo y en garra Cuando es reductible y existe caída o hundimiento del metatarsiano, una plantilla con lágrima retrocapital que eleve la cabeza del 1112 Figura 11. Separador de silicona para hallux valgus y cincha metatarsal que ha de llevarse durante dos meses tras la retirada de la inmovilización. metatarsiano, es la mejor solución. También se pueden utilizar dispositivos correctores y esponjas que reduzcan las rozaduras. Cuando van acompañadas de pie cavo, una plantilla anatómica con lágrima puede mejorar la disposición de los dedos. Si persiste el dolor a pesar de la ortesis y no se reduce la deformidad, precisará tratamiento quirúrgico. La cirugía puede realizarse mediante una artrotomía tradicional, con resección de la cabeza de la falange, o por cirugía percutánea, que consiste en realizar una capsulotomía dorsal de la metatarso-falángica, tenotomía del extensor y osteotomía de la falange proximal y, a veces, también de la falange media (fig. 12). Quinto dedo en varo En la infancia y la pubertad, puede intentarse el tratamiento conservador aplicando un vendaje corrector. Si la deformidad no es corregible y dificulta calzarse u ocasiona dolor, estará indicada la cirugía. Durante el crecimiento, la intervención quirúrgica será de partes blandas, realizándose tenotomía del extensor y cierre de la piel con plastia para evitar el varo. En adultos, al ser la deformidad estructurada, se realiza una artroplastia, osteotomía y plastia cutánea, o puede resolverse mediante cirugía percutánea (fig. 13). Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap236 7/6/06 09:29 Página 1113 Capítulo 236: Deformidades de los dedos de los pies a a’ b b’ Figura 12. a) Marcado hallux valgus y 2º, 3º y 4º dedos en martillo. El segundo está supraductus. Existe un claro hundimiento del arco transverso metatarsal. a') Marcada hiperqueratosis bajo los metatarsianos centrales que indica hundimiento del arco transverso metatarsal, secundario al hallux valgus. Se aprecia la disposición del segundo dedos que está montado sobre el primero. b) Resultado a la semana de la cirugía percutánea. Obsérvese la correcta disposición de los tres dedos intervenidos. b’) Resultado a los tres meses de la cirugía percutánea. Obsérvese la consolidación de las osteotomías del primer dedo, pero aún no del 2º y 3er dedos. Han desaparecido las hiperqueratosis plantares y las dorsales de los dedos. Seguimiento • Los pacientes con hallux valgus asintomáticos se beneficiarán del uso de calzado ancho y con poco tacón. • El separador de la primera comisura puede utilizarse aunque raramente cambia la historia natural del hallux valgus. • Cuando exista callosidad bajo las cabezas de los metatarsianos centrales sintomáticas, indica un hundimiento del arco transverso metatarsal (fig. 5b), y está indicada una adecuada plantilla que recons- Figura 13. Tratamiento percutáneo del quinto dedo en varo. Evolución a los 45 días. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1113 Cap236 7/6/06 09:29 Página 1114 Sección 22: Procedimientos de traumatología, ortopedia, rehabilitación y medicina del deporte en medicina de familia truya el arco transverso del antepié, para aliviar o evitar la metatarsalgia. Estas plantillas tienen que tener la lágrima justo en su sitio porque, si está un poco anterior producirá más dolor y, si está retrasada, no mejorará la sintomatología. Si persiste la metatarsalgia, a pesar de una adecuada plantilla, precisará tratamiento quirúrgico. Cirugía percutánea (MIS) • La cirugía mayor ambulatoria (CMA) se está implantando cada vez más, por lo que los pacientes intervenidos mediante técnicas quirúrgicas que no precisan hospitalización, son enviados a su centro de salud, para las curas oportunas. • La cirugía del pie, realizada mediante técnicas percutáneas, reúne todas las características para ser realizada mediante CMA, debido a que no requiere isquemia, se realiza con anestesia en el tobillo y no precisa guardar reposo, ya que puede deambular algo desde el mismo momento de la intervención. • La primera cura se suele realizar a los 57 días. En esta cura se lava bien el pie, se quitan los puntos y se cambia el vendaje. • El vendaje debe mantener la hipercorreción de los dedos. El del hallux valgus se realiza con una primera capa de gasas cruzadas sobre la base del primer dedo que lo tienen que mantener en varo (fig. 14a); estas gasas están sujetas por otras gasas que las fijan al antepié (fig. 14b). • A continuación se coloca una venda que refuerza la corrección del 1er dedo (fig. 14c). 1114 • Se termina con un vendaje funcional (esparadrapo de tela) que refuerza aún más la corrección (fig. 14d). Este vendaje se mantiene durante una semana y se cambia una vez a la semana. • El paciente puede quitarse el cuarto vendaje tras llevarlo 10 días. Debe llevar un separador de silicona durante dos meses más. • El vendaje para los dedos en martillo o en garra, consiste en colocar una gasa que rodee la cara dorsal de cada dedo, empujando la falange hacia la planta; estas gasas se sujetarán con otras que rodean el antepié y con un vendaje circular. Se colocará una tira de esparadrapo que extienda los dedos (fig. 14e). Criterios de derivación • Existencia de dolor con mucha frecuencia o crónico en el hallux valgus. • Metatarsalgia con notable callosidad bajo las cabezas de los metatarsianos. • Deformidad de los dedos trifalángicos que dificultan mucho o impiden calzarse. Comentario final Las deformidades de los dedos son muy frecuentes. El hallux valgus tiende a progresar, deformando los otros dedos de los pies. Los separadores sirven de poco. Los dedos en garra se producen con mucha frecuencia por los pies cavos y por el aplanamiento del arco transverso del antepié. Cuando estas deformidades produzcan dolor, dificultad para la marcha o deformidad progresiva, deberán ser derivadas para tratamiento quirúrgico. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia Cap236 7/6/06 09:29 Página 1115 Capítulo 236: Deformidades de los dedos de los pies a d b c e Figura 14. a) Vendaje funcional para hallux valgus. Colocación de las gasas rodeando al primer dedo. b) Colocación de las gasas que rodean al antepié. Hay que mantener el primer dedo en hipercorreción. c) Colocación de la venda autocohesiva que mantiene el primer dedo en hipercorreción. d) Colocación del esparadrapo para reforzar la corrección. En este caso también fue intervenida del 2º dedo en martillo. e) Vendaje tras cirugía percutánea de hallux valgus y 2º a 4º dedos en garra. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia 1115