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CONDICIÓN DE LOS PEZONES Y MASTITIS
Janet Bosch.
Servicios técnicos ABS.
Una mala condición de los pezones incrementa el riesgo de mastitis. Los dos signos más
comunes que denotan una mala condición de los pezones son el mal estado de la piel del
pezón, que termina por agrietarse, y la hiperqueratosis, un crecimiento excesivo de
protuberancias. Por ejemplo, una piel agrietada permite una mayor facilidad para la
colonización de organismos patógenos causantes de mastitis (en especial de
Staphylococcus aureus). Es lógico pensar entonces que una mala condición de los pezones
venga asociada también con un incremento de las tasas de infección por mastitis.
En un estudio realizado por Neijenhuis, et al. (2001), se muestra como las vacas con
mastitis clínica del estudio tenían una peor condición de los pezones que las no
infectadas, especialmente animales con mastitis clínica entre el segundo y el quinto mes
de lactación.
Probabilidad de Mastitis Clínica (%) para diferentes puntuaciones de
callosidad en la punta del pezón
30%
24%
25%
20%
17%
19%
15%
10%
5%
0%
0%
Pezones sanos
Ligeramente
anormal
Moderadamente
anormal
Severamente
anormal
El gráfico muestra la probabilidad de incrementarse la mastitis clínica según el deterioro
de la condición de los pezones.
Los pezones normales o con una ligera callosidad no presentan riesgos de incrementar la
mastitis y se puede considerar como una respuesta beneficiosa del pezón durante el
ordeño mecánico. Sin embargo, las puntas de los pezones anormales que están
extremadamente rugosas y muestran signos evidentes de hiperqueratosis, están
asociadas a un incremento de nuevas infecciones (ver foto).
Las malas condiciones de los pezones
pueden estar causadas por diversos
factores: efectos ambientales (sol, viento,
temperaturas frías, aire seco, humedad y
cambios bruscos de tiempo), los agentes
químicos, la rutina de ordeño, el efecto del
ordeño mecánico y los agentes infecciosos
como los virus.
Evaluar la punta del pezón en los establos puede ayudar a identificar o resolver los
problemas relacionados con los factores antes mencionados. Las puntas de los pezones
se pueden calificar como normales si están lisas, suaves y la piel está sana. En cambio, si
se ven secas, enrojecidas, incluso con grietas y lesiones abiertas, la condición del pezón se
considera anormal. Esta evaluación debe hacerse antes del ordeño.
Un sistema numérico de calificación o evaluación de
la piel del pezón puede ser el siguiente:
1. Piel del pezón tersa, sin escamas ni grietas
2. La piel muestra alguna evidencia de escamas
3. La piel está agrietada
4. La piel está agrietada y cortada. Rojez indica
inflamación.
5. Piel severamente dañada y ulcerada, con
costras o lesiones abiertas
Evaluación de la punta del pezón:
1. El esfínter está liso, suave
2. El esfínter tiene un anillo resaltado. Sin grietas
3. El esfínter es rugoso, ligeras grietas, no hay enrojecimiento.
4. El esfínter está invertido, agrietado, con apariencia “floreada”.
5. La punta del pezón está severamente dañada y ulcerada, con costras o lesiones
abiertas.
El Dr. Andy Johnson, Total Herd Management Services Inc., recomienda revisar los
pezones una vez cada tres meses, con más frecuencia en rebaños que estén dando
problemas. Aunque algunos de esos problemas surgen en cuestión de días (los
relacionados con el clima), otros llevan más tiempo (la mayoría por efectos del
equipamiento y los procedimientos de ordeño). “Vigilar las vacas recién paridas, de
alta producción, de baja producción, las vacas que estén en la sexta semana de
lactación, a los tres meses, a los seis meses. Las vacas en primera lactación y las vacas
viejas son más propensas a tener hiperqueratosis”. Para que sea representativo
chequearemos al menos un 20 % del rebaño u 80 vacas, el número que sea mayor.
Johnson recomienda que al menos un 85% del rebaño tenga puntuaciones de 1 o 2.
“Ese anillo suavemente rugoso (puntuación 2) no es más que un callo, tal como los que
nos salen a nosotros por el trabajo. Los podemos ver en vacas ordeñadas manualmente
y también en vacas de carne”.
Para mantener la buena condición de los pezones, a la vez que se hace un seguimiento,
es recomendable adoptar una serie de medidas:
• Realizar una buena preparación pre-ordeño.
La piel del pezón contiene ácidos suaves naturales que
ayudan a crear un manto ácido. Este manto ayuda a
hidratar la superficie de la piel a la vez que inhibe el
crecimiento de bacterias. Con los lavados excesivos se
elimina el manto y los compuestos con pH altos (bases) lo
neutralizan, entonces la piel se hace más propensa a la
colonización de patógenos. La pérdida de hidratación de
la piel da como resultado el agrietamiento.
• Minimizar las tasas de flujo bajas y el tiempo de trabajo de la
unidad de ordeño.
El grado de hiperqueratosis está directamente relacionado con la duración del
ordeño, especialmente el tiempo que los pezones están expuestos a un flujo
bajo, que es definido como menos de un kilo por minuto de tasa de flujo de
leche. Una buena preparación pre-ordeño (10 o 12 segundos de estimulación
manual) y unos adecuados tiempos de preparación de demora (60 o 90
segundos desde el comienzo de la preparación hasta la colocación de la unidad)
junto con los apropiados ajustes de la retirada mecánica, minimizarán las tasas
de flujo bajas y el tiempo de trabajo de la unidad.
• Evaluar y poner a punto los procedimientos y maquinaria de
ordeño.
El efecto de pequeños problemas debidos al sistema de ordeño aumentan si la
piel está agrietada. Es como golpear la mesa con los dedos, no pasa nada
cuando las yemas de los dedos están bien, pero si una de ellas tiene una grieta
llega a ser doloroso.
• Minimizar los efectos del clima.
Proporcionar las sombras adecuadas para prevenir las quemaduras solares,
cortavientos para evitar la exposición a vientos muy fríos, echar cama extra para
proteger las ubres del frío del suelo cuando están tumbadas, mantener el
ambiente seco y evitar el acceso al lodo para evitar su efecto desecador en la
piel del pezón.
• Usar un sellador de pezones de calidad.
Que contenga un germicida potente, pero que también lleve entre un 5 y un
10% de acondicionadores de la piel que ayudarán a mantener la piel sana. El
pezón debe cubrirse por completo. “Para rebaños con hiperqueratosis
recomiendo dióxido de cloro para la pre y post-desinfección,”, dice el Dr.
Johnson “he visto como ayuda en cientos de casos. Muchos ganaderos te llaman
a las dos semanas diciéndote que no pueden creerse la diferencia. Esta clase de
desinfección parece hacer una labor en la suavización de la queratina del pezón
mejor que otros desinfectantes”.
• Desinfectar y secar con clima extremandamente frío.
No dejar de desinfectar. La película de leche que queda después de retirar la
unidad de ordeño mantiene los pezones húmedos. Se desinfecten o no, hay que
secarlos antes de exponerlos a temperaturas frías. Para evitar la propagación de
organismos contagiosos lo mejor es desinfectar los pezones, dejar en contacto
entre 20 y 30 segundos y secar.
• Correctas normas de utilización y almacenaje de los selladores.
Agitar los envases antes de rellenar los botes de los aplicadores para
homogeneizar el producto. Evitar que los desinfectantes se congelen.
• Asegurar una buena nutrición.
La nutrición juega un papel muy importante en la salud de la piel, tanto para
mantenerla íntegra como sana.
• Controlar las moscas y los edemas, evitar los objetos punzantes.
Las moscas y los edemas contribuyen al agrietamiento. Mantener las vacas
alejadas de plantas y objetos punzantes.
Referencias:
1. Mein, G.A. et al. Evaluation of Bovine Teat Condition in Comercial Dairy Herds:
1. Non-infectious factors. Proceedings AABP-NMC International Symposium on
Mastitis and Milk Quality, Vancouver, BC, Canada. Septiembre 2001.
2. Neijenhuis, F., et al. Relationship Beetween Teat-End Callosity or Hiperkeratosis
and Mastitis Proceedings AABP-NMC International Symposium on Mastitis and
Milk Quality, Vancouver, BC, Canada. Septiembre 2001
3. Reineman, D.J. et al. Evaluation of Bovine Teat Condition in Comercial Dairy
Herds: 3. Gettings the Numbers Right. Proceedings AABP-NMC International
Symposium in Mastitis and Milk Quality, Vancouver, BC, Canada. Septiembre
2001.
TABLA DE PUNTUACION DE CONDICION DE LOS PEZONES
Puntuación
1
Descripción
Ilustración
Sin Anillo
La punta del pezón es suave con
un orificio pequeño y regular
Anillo suave
2
Un anillo
abultado rodea el
orificio. la superficie del anillo es
suave
o
puede
sentirse
ligeramente rugoso pero no hay
evidencia
de
protuberancias
viejas de queratina
Anillo rugoso
3
Un anillo abultado y rugoso con
protuberancias aisladas o cúmulos
de queratina vieja que se
extienden de 1 a 3 mm desde el
orificio.
Anillo muy rugoso
4
Anillo abultado con protuberancias
rugosas o cúmulos de queratina
vieja que llegan hasta 4 mm o
más del orificio. El borde del anillo
está agrietado y rugoso, dando a
la punta del pezón una apariencia
“floreada”.
Lesiones abiertas o costras
5
La
punta
del
pezón
está
severamente dañada y ulcerada
con costras o lesiones abiertas.
Adaptado de Mein, et al., 2001, Sistema de Puntuación para la condición de la Punta
del Pezón)