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PAGANELLI, R. Presentación Dehoniana 2009, 11-13 Per la citazione: DEH2008-01-ES Presentación Rinaldo Paganelli, scj 1 La fe es, ante todo, un don de Dios al hombre: Dios se revela, se acerca, se confía y, con esa su presencia benévola y “simpática”, sitúa al hombre en disposición de acogerlo, lo ayuda a confiarse, a referirse únicamente a él. Por ello, la fe se convierte en respuesta del hombre. A la entrega de Dios a su pueblo le corresponde la entrega del hombre a su Dios. La relación de fe se decide a partir del corazón. Apoyada en la confianza y en la confidencia, la persona es impulsada al abandono confiado al Dios de la Alianza, a la donación de sí misma en el amor. 2 Del hecho de sabernos amados nace, a su vez, la capacidad y la necesidad de amar, respondiendo al amor con el don total de nosotros mismos. No se trata de un conocimiento abstracto e impersonal, sino de algo que acontece entre personas: en el centro está la relación. Es la raíz misma de la vivencia cristiana. 3 Precisamente por ser creyentes, por estar seguros del amor que salva, no escondemos la realidad de los límites. Es una realidad que podría ser vivida como temor y miedo a Dios; por el contrario, precisamente porque sabemos que somos pecadores, nos abandonamos a él, al haber comprendido que sólo él puede salvarnos y liberarnos. Y lo hace. El abandono quedaría en un sentimiento vacío si no se convirtiera en la entrega de sí mismo a la voluntad de Dios, para llevarla a cabo. No puede existir el abandono sin unos contenidos. Abandonarse quiere decir tener confianza, entregarse a la Palabra, tomándola como norma única de la vida. 4 Estos pensamientos los explicita el P. Stanislas Halas en su contribución, que ayuda a comprender el significado de la palabra “abandono” y a situarlo en el contexto de la cultura y la espiritualidad de hoy. El contacto con los escritos del P. Dehon, con la espiritualidad francesa y con las propuestas bíblicas, ayuda a entender que el abandono es una expresión de impotencia fundamental para expresar un auténtico vínculo del cristiano con Dios. © Copyright riservato Centro Studi Dehoniani Roma – Sacerdoti Sacro Cuore di Gesù. Consentita la riproduzione integrale in fotocopia e libera circolazione senza fine di lucro. È vietato il plagio e la copiatura integrale o parziale di testi e disegni a firma degli autori – a qualunque fine – senza citare la fonte (Repubblica italiana, legge 18/08/2000 nº 248). Dehoniana 5 El abandono es, ciertamente, renuncia al protagonismo que querría poner el propio yo en el centro y en el origen de todo; pero esta renuncia al protagonismo no conduce a la pasividad. El P. John van den Hengel nos ofrece una nueva lectura del término “abandono”, dando relieve al valor cristocéntrico. Es interesante la idea, tomada en préstamo de la Escritura, según la cual Jesús es “abandonado/entregado” en manos de los hombres. 6 El verdadero abandono lleva a una vida extraordinariamente activa, ya que no es un sentimiento vacío, sino que está lleno de contenido: es una entrega a Dios con un “sí” de todo corazón a su proyecto, que se construye día a día, fiándose, en una donación total. Se expresa por medio de la confianza y la entrega; es, pues, abandono activo, ya que libra de sí mismos y libra también de la preocupación de los propios problemas y, por ello, hace libres y disponibles interiormente ante los demás, hace capaces de asumir responsabilidades sin preocuparse más de sí mismos. 7 La contribución del P. Paulus Sugino nos introduce en esa dimensión. El enfoque psicológico habla de la riqueza de una actitud que beneficia la vida de una persona. 8 Aquí ya no nos pertenecemos, porque nos hemos entregado, no hay otra cosa que hacer que vivir la única palabra que lo encierra todo: el amor. Nuestra regla ya no es el egocentrismo, el mirarnos a nosotros mismos, sino el tener cuidado, la solidaridad, la fuerte conciencia de la deuda que nos liga a unos con otros. Si, después, se vive esto con la conciencia global del abandono, se hace todo sin exagerar, es decir, sin ponerse en el centro ni siquiera cuando se está al servicio de los demás. 9 El sumario se enriquece con dos contribuciones de distinto tipo. La primera ayuda a captar mejor el sentido teológico de “compasión, misericordia y ternura”. Junto a la riqueza de la reflexión, para cada expresión se ofrece una propuesta de “lectio divina” que ayuda a rezar e interiorizar la riqueza de los términos objetos de examen. 10 La segunda intenta verificar si el culto del amor misericordioso es un nuevo modo de volver a proponer la devoción al Sagrado Corazón. 11 La vida de la Congregación en 2007 nos llevó a celebrar dos centenarios: el de la presencia en Finlandia y el de la fundación de la Escuela Apostólica de Albino. La “nueva visita” de carácter histórico que el P. Adrianus Borst hace de los cien años en Finlandia permite captar tantísimos matices hechos de interesantes resultados y aspectos problemáticos. Fue el mismo P. Dehon el que, apoyado por el sacerdote finlandés Christiensen, se compromete a asumir una misión en Finlandia. Los cien años son releídos con referencia al servicio desarrollado por cuatro cohermanos obispos. A partir de sus iniciativas se puede captar la importancia de algunas vicisitudes políticas y religiosas. 2 Dehoniana 12 El recuerdo de los cien años de la Escuela Apostólica de Albino, a cargo del P. Tarcisio Rota, es una lectura ordenada del desarrollo de una realidad que dio impulso a la difusión de la Congregación en Italia y en otros contextos diversos. 13 El número se cierra con un apartado bibliográfico. El texto que se presenta desborda los límites de un volumen, ya que es una mina para quien quiera acercarse y estudiar la espiritualidad del Sagrado Corazón: La Bible du Coeur de Jésus, del P. Édouard Glotin. Nos propone un tratado del Corazón de Jesús con una concepción absolutamente nueva. El volumen no carece de ambición, en sus 765 páginas contiene en 460 notas (cf www.labibleducoeurdejesus.com). Tiene el mérito de llamar de nuevo la atención sobre la espiritualidad del Corazón de Jesús y mostrar su riqueza. Son muchas las sugerencias para enriquecer los conocimientos y el itinerario espiritual. 3