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CARACTERÍSTICAS DE LA FILOSOFÍA MODERNA. 1. LOS ORÍGENES DE LA MODERNIDAD. La cultura moderna surgió como resultado de las importantes transformaciones políticas, económicas, sociales y culturales ocurridas durante el Renacimiento en los siglos XV y XVI que supusieron la ruptura con el mundo medieval. En el surgimiento de la modernidad tuvieron importancia varios factores: a. El humanismo: supuso una vuelta a los autores clásicos griegos y romanos, por el deseo de encontrar un modelo cultural distinto al medieval. Frente al teocentrismo característico del Medievo, la visión del renacimiento puede ser calificada de antropocentrismo naturalista: el ser humano es el núcleo de toda la reflexión sobrenatural característica de la época pasada. b. La reforma protestante: que intentó recuperar el espíritu originario del cristianismo y que llevó a la división de la iglesia. c. La revolución científica: iniciada en el siglo XVI y que culminó con la física de Newton, creando una nueva imagen del universo e impulsando el conocimiento racional. Galileo insistió en la necesidad de liberar a la razón humana de toda autoridad ajena a ella. Experimentación y empleo del lenguaje matemático son los dos pilares del nuevo método científico. 1.1. PRINCIPALES CORRIENTES FILOSÓFICAS DE LA MODERNIDAD. La crisis de la escolástica medieval y la influencia del pensamiento científico, llevaron a la filosofía a centrarse en dos temas principales: ¿Qué Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 1 podemos conocer? (centrándose por tanto en la teoría del conocimiento) y ¿cuál es el método que debemos seguir para conocer? (en este caso el método va a ser claramente científico, de tipo empirista o racionalista. Para afrontar estos problemas, encontramos en la modernidad dos posturas contrapuestas: a. El racionalismo: corriente filosófica inaugurada por Descartes a la que pertenecen también Espinosa y Leibniz. Las ideas que lo caracterizan son: La realidad tiene un orden necesario y determinista que podemos conocer. Los principios fundamentales y evidentes del conocimiento no proceden de la experiencia sensible, sino que el entendimiento los posee en sí mismos. Es decir, la razón humana tiene ideas innatas que no provienen de la experiencia sensible, sino que el individuo viene dotado desde el nacimiento con ellas. El ideal es la ciencia deductiva: es posible deducir un sistema explicativo del mundo a partir de ideas ciertas y principios evidentes. Las matemáticas son así el modelo de la ciencia. los filósofos racionalistas le otorgan un valor extremo a la razón entendida como la única facultad susceptible de alcanzar la verdad. La oposición típica en la Edad Media entre razón y fe (Revelación) o entre filosofía y religión, es sustituida ahora por la contraposición entre las verdades racionales frente a los engaños o ilusiones de los sentidos. Razón se opone a sensibilidad, Existencia experiencia, conocimiento de sensoperceptual, ideas no a fe. innatas Siguiendo la tradición abierta por Platón, para el cual el conocimiento verdadero podía ser alcanzado a través del recuerdo, al estar las Ideas de algún modo "presentes" en el alma humana, los racionalistas afirman que la conciencia posee ciertos contenidos o ideas en las que se encuentra asentada la verdad. La mente humana no es un receptáculo vacío, ni una "tabla rasa" como defendieron los empiristas, sino que posee naturalmente un número determinado de ideas innatas o naturalezas simples (como las denomina Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 2 Descartes) a partir de las cuales se vertebra y fundamenta deductivamente todo el edificio del conocimiento. La característica fundamental de tales ideas es su simplicidad, claridad y distinción, es decir, la evidencia. En Descartes las ideas innatas y en particular la idea de Dios garantizan y son los pilares desde los que reconstruir con plena certeza todos los saberes, desde la física hasta la metafísica. En Leibniz, por ejemplo, las mónadas contienen ("como semillas") una perspectiva parcial de la totalidad del universo, son un microcosmos en el que Adopción se de refleja un el método de macrocosmos. carácter matemático Todos los racionalistas tomaron como modelo el método utilizado por la matemática y la geometría: Descartes lo desarrolló en su obra Reglas para la dirección del espíritu; Spinoza en el Tratado de la reforma del entendimiento y Leibniz en su De Arte combinatoria, que estaba inspirado en Ramón Llull. La utilidad del método estriba no sólo en escapar del error, sino que persigue una intención clara: la unificación de las ciencias e incluso la creación de una "Mathesis Universalis" o ciencia cierta de carácter universal que pudiera utilizar un lenguaje simbólico matemático con el que analizar y reducir a lo simple (y cierto) toda proposición compleja de la ciencia. En las Regulae ad directionem ingenii (Regla IV) define Descartes el método de la siguiente manera: "Así pues, entiendo por método reglas ciertas y fáciles, mediante las cuales, el que las observe exactamente no tomará nunca nada falso por verdadero, y, no empleando inútilmente ningún esfuerzo de la mente, sino aumentando gradualmente su ciencia, llegará al conocimiento verdadero de todo aquello de que es capaz." El método es una propedeútica: sana, cura el entendimiento y lo orienta a la conquista de la verdad, reduciendo toda cuestión compleja a elementos simples, claros y distintos (evidentes) que son conocidos mediante una intuición intelectual, despojada de toda sensibilidad e independiente del ámbito Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 3 de la Metafísica experiencia basada en la (a idea priori). de substancia La metafísica racionalista desvía la atención del ser (to ón) a la substancia (substantia) y adelgaza la división categorial de Aristóteles a tres únicos fundamentos: substancia, atributos (esencia o naturaleza de la substancia) y modos (cualificaciones, afecciones y variaciones de la substancia). Por substancia entienden los racionalistas "aquello que existe de tal manera que no necesita de ninguna otra cosa para existir" (Descartes). Ahora bien, no todos estos filósofos admitieron el mismo número de ellas ni le otorgaron las mismas características. Descartes afirmó la existencia de tres substancias distintas (res infinita o Dios, res cogitans o pensamiento y res extensa o substancias corpóreas), lo cual le condujo al establecimiento de un acusado dualismo que escindió la realidad en dos ámbitos heterogéneos (lo corporal o material y lo espiritual) irreconciliables entre sí y regidos por leyes absolutamente divergentes (leyes mecánicas para el mundo físico). Spinoza afirmó la existencia de una única substancia, "Deus sive substancia, sive natura", que le hizo desembocar en una postura panteísta: pensamiento y extensión son atributos de Dios, única substancia existente, por lo que tanto el pensamiento (alma) como las cosas materiales no pueden ser consideradas sino como sus modos, no como entidades independientemente existentes. Leibniz, sin embargo, adoptó un pluralismo metafísico que afirmaba la existencia de infinitas substancias simples o mónadas caracterizadas por ser inextensas,, simples, impenetrables y dotadas de percepción y apetición. La mónada es una cierta energía, fuerza o entelequia (alma) que sigue el orden inexorable de una armonía Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. preestablecida por Dios. Página 4 b. El empirismo: es una corriente británica de pensamiento, cuyos principales representantes son Locke y Hume. Sus rasgos básicos son: El rechazo radical del innatismo. No existen ideas innatas en el entendimiento. Con anterioridad a la experiencia, nuestra mente es como una tabla rasa, una página en blanco en la que no hay nada escrito. Todo nuestro conocimiento tiene su origen en la experiencia. La crítica a todas las doctrinas metafísicas. No puede haber conocimiento alguno en este ámbito. La consideración de la física como modelo de ciencia natural experimentable. La experiencia sensible es el origen y el límite de todo conocimiento posible. Como intento de síntesis entre estas dos grandes corrientes de la filosofía moderna, teneos el criticismo de I. Kant. Para Kant, en el proceso de conocimiento interviene la sensibilidad y el entendimiento a partes iguales. Además, Kant es el filósofo más importante de la última gran corriente de la modernidad: la ilustración. c. La ilustración. Entendemos por Ilustración el periodo comprendido entre la Revolución Inglesa (1688) y la Revolución Francesa (1789), es decir: todo el siglo XVIII. Época por la que se extiende la influencia del pensamiento de John Locke (l636-1704) y Berkeley (1685-1753). Pero es significativa porque en ella tiene lugar la doctrina filosófica de David Hume (1711-1776) en Inglaterra, de Jean Jacques Rousseau (1712-1778) en Francia y, sobre todo la filosofía criticista de Immanuel Kant (1724-1804) en Alemania (Prusia en aquella época). La Ilustración no es propiamente un movimiento filosófico, ni representa una corriente filosófica determinada, sino que es un movimiento cultural, una época, con unas características muy concretas: a) Tiene sus raíces en el siglo XVII y se desarrolla a lo largo del siglo XVIII. b) Es el “siglo de las luces” (Aufklärung): los pensadores de la época se sienten llamados a una misión: iluminar a la sociedad que está sumergida en Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 5 las tinieblas de la ignorancia. Hay que sacar a los hombres de esa ignorancia: la luz será la ciencia, el saber. El saber es fruto de la razón, que es la que tiene todo el poder (rechazo de la sociedad y de la cultura tradicional: confianza en el poder de la razón). c) Esta confianza en la razón no les identifica con los racionalistas: es una confianza en la razón que supera las diferencias entre empirismo y racionalismo (confianza en el progreso constante de la humanidad). No se preguntan por el origen del conocimiento, sino por la capacidad de la razón para enfrentarse al saber. De hecho, las características que observan en la RAZÓN son: c.1. Capacidad crítica: la Razón se alza contra los prejuicios, contra la tradición y la autoridad externa (rechazo de la sociedad y la cultura tradicional y reconocimiento del valor de la educación). c.2. Capacidad analítica: la Razón puede y debe analizarlo todo, buscar una explicación racional de la realidad (exaltación de la técnica y la ciencia como forma de dominar la naturaleza, y fe en el progreso constante de la humanidad). c.3. Capacidad autocrítica: en cuanto que es capaz de hacerse una crítica a sí misma, un auto-análisis pormenorizado, para examinar su alcance y conocer sus limitaciones. c.4. La Razón es una capacidad libre: la libertad como ese don más preciado que posee el ser humano, y que nadie le puede quitar. c.5. Capacidad secularizadora: rompe la tensión y el equilibrio entre razón y fe, reduciendo la fe a lo racional. No es que la Ilustración sea un movimiento anti-teológico o anti-religioso, sino que en él se realiza una interpretación racional de la religión. c.6. La religión es, pues, deísta: la verdadera religión es racional y la razón es la verdadera revelación. Por eso no se puede admitir una religión revelada, sino una religión conocida por la razón, y razonada desde la misma razón: todo con la razón, nada sin la razón. Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 6 La Ilustración busca una razón autónoma que permita a los hombres salir de su minoría de edad (incapacidad de servirse de su propio entendimiento, y búsqueda de la seguridad en otro), para confiar sólo en la razón y servirse de ella con independencia, sin otros límites que los marcados por su propia naturaleza. Esto queda perfectamente explicado en el texto de Kant ¿Qué es Ilustración? cuando exhorta a todos con su “¡sapere aude!”: atrévete a saber (a conocer) por ti mismo (sin ayuda de tutores). Para ello solamente tenemos que ejercitar nuestra Razón. Esta seguridad en la Razón les hacen sentirse superior a los hombres de otras épocas, y les lleva a concebir la ciencia y los hallazgos naturales (descubrimientos) como los medios más seguros para el desvelamiento de la verdad y la consecución de la felicidad, que sigue considerada como el fin de la vida. Por ello, los valores de las ciencias naturales tienden a suplantar a los religiosos, y la comprensión transcendental del mundo se hace inmanente (desde el propio mundo, desde la mismísima realidad), mediante un proceso de explicación racional (lo que conlleva la exaltación de la técnica y de la ciencia como forma de dominar la naturaleza, y la fe ciega en el progreso humano). Departamento de Filosofía. Ies La Sisla. Página 7