Download informe “la aportación de las vacunas

Document related concepts
Transcript
VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO
INFORMACIÓN Y PREVENCIÓN
- ÍNDICE DE TEMAS -
El Virus del Papiloma Humano (VPH)
Cánceres y otras enfermedades relacionadas con el VPH
Razones para vacunarse
Preguntas y respuestas más frecuentes
Referencias
- EL VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO -
El virus del papiloma humano (VPH) es un virus muy frecuente y de fácil transmisión por
contacto genital que afecta tanto a hombres como a mujeres. Alrededor de un 75% de las
personas sexualmente activas se infectarán con el VPH en algún momento de su vidai.
Existen 100 tipos distintos de VPH. De ellos, 15 pueden llegar a provocar un cáncer. Se
denominan tipos oncogénicosii. Los más frecuentes son los tipos 16 y 18, causantes de
aproximadamente un 74% de los casos de Cáncer de Cuello de Útero (CCU)iii.
Aunque el 40% de todas las mujeres a las que se les diagnostica CCU tienen entre 35 y 54
años de edadiv, en su mayoría es probable que estuvieran expuestas al virus cuando tenían
entre 16 y 25 añosv debido a que se trasmite por contacto sexual y la infección por VPH
puede tardar años en desarrollar un cáncervi.
Por lo general, las infecciones por VPH no producen ningún síntoma. Si bien es cierto que
muchas personas superan la infección de manera natural gracias a las propias defensas de
su organismo, en otras, sin embargo, la infección puede hacerse crónica y llegar a
convertirse en cáncer.
Dado que muchos pacientes con VPH no presentan síntomas, este hecho puede pasar
inadvertido. De ahí la importancia de que las mujeres se sometan a exploraciones
ginecológicas y a citologías regularmente. Estos exámenes pueden facilitar la detección de
cambios en las células anómalas antes de que la situación se agrave. En este sentido, el
médico es la principal y más fiable fuente de información.
- CÁNCERES Y OTRAS ENFERMEDADES RELACIONADAS CON EL VPH -
En cuanto a cánceres relacionados con el VPH, si bien el cáncer de cuello de útero es el más
frecuente, existe cada vez más evidencia de su implicación en otros cánceres del aparato
genital masculino o femenino como son el cáncer de vulva, vagina, pene y ano.
También hay evidencia de la relación directa de algunos tipos de VPH, con los condilomas o
verrugas genitales.
CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO (CCU):
El CCU afecta a la zona genital femenina, desde la vagina al útero y contrariamente a lo
que se pueda pensar no es hereditario. Está causado por el VPH y puede afectar a
cualquier mujer en cualquier momento de su vida: cada año se diagnostican en España
1.948 casos de CCU y actualmente en España mueren 712 mujeres al año
(aproximadamente 2 al día) por esta causavii. Sufrir un CCU puede ocasionar graves
trastornos físicos y emocionales ya que, al igual que ocurre en otros cánceres
ginecológicos, puede afectar a la fertilidad.
Desafortunadamente, el CCU puede no presentar ningún signo o síntoma hasta haber
alcanzado un estadio avanzado. Algunos signos sonviii:
Sangrado vaginal anormal
Dolor durante las relaciones sexuales
Flujo vaginal inusual
Dolor pélvico
El CCU se detecta a través de un procedimiento sencillo denominado citología cervical.
Conocido también con el nombre de detección precoz del CCU o cribado, la citología forma
parte de las exploraciones ginecológicas. Este examen facilita la detección de células
anormales en la pared del cuello uterino antes de que puedan convertirse en cáncer o
lesión precancerosa de cuello de útero.
Es muy importante someterse de forma regular a una citología; de esta forma, se reducen
las posibilidades de desarrollo de un cáncer de cuello de úteroix. Esta sencilla prueba
permite detectar las células cervicales anómalas y ha reducido considerablemente el
número de muertes por CCU en Europa y en España. Esto se debe a que las células
cervicales anómalas, e incluso algunos cánceres, se pueden tratar con éxito si se detectan
antes de extenderse. Puesto que el CCU puede afectar a todas las mujeres, la detección
precoz mediante citologías regulares se realiza de forma generalizada en España.
El cáncer de cuello de útero se puede tratar de distintas formas. Independientemente del
tratamiento elegido, las oportunidades de recuperación son mayores cuando el cáncer se
detecta en una etapa temprana. Es importante recordar que cada persona es distinta y
reacciona de forma diferente a los tratamientos. Lo que le conviene a una persona puede
no convenirle a otra. En caso de necesitar someterse a uno de estos tratamientos, el
médico evaluará tanto los riesgos y efectos secundarios como los beneficios.
Puesto que para el desarrollo del CCU es necesaria la infección por VPH, la prevención de
esta enfermedad es posible mediante la vacunación. Además es fundamental continuar
siempre con las revisiones ginecológicas periódicas para detectar a tiempo cualquier lesión
potencialmente precancerosa.
CÁNCER DE VULVA Y DE VAGINA:
El inicio de estos tipos de cáncer siempre está relacionado con células vaginales o vulvares
anómalas que se desarrollan y, en casos poco frecuentes, originan cáncer de vulva o de
vagina. De acuerdo con la literatura más reciente, en Europa se detectan anualmente
alrededor de 2.000 casos nuevos de cáncer de vagina y de vulva x y alrededor de 27.000
lesiones precancerosas vaginales y vulvaresxi (que no evolucionan y provocan cáncer
necesariamente.)
El ginecólogo puede realizar una revisión médica completa que incluya un examen de la
pelvis. En caso de diagnosticar un cáncer de vagina, hay 2 tratamientos principales
(radiación y cirugíaxii). El tratamiento del cáncer de vulva depende de su estadio de
desarrollo. La radiación, la quimioterapia y la cirugía son los 3 tratamientos principales
que se aplican generalmentexiii.
VERRUGAS GENITALES:
Las verrugas genitales son otra posible consecuencia de la infección por el VPH. No son
potencialmente mortales, pero sí pueden ser una molestia en la vida diaria. Las verrugas
genitales son lesiones prominentes de la piel que aparecen en la parte genital externa o
cerca del ano tanto en hombres como en mujeres. Son comunes y el número de casos
identificados va en aumento en Europa. Entre 1972 y 2004 el número total de verrugas
genitales diagnosticadas (casos de primera aparición, recurrentes y registrados
nuevamente) se multiplicó por 8 y por 11 en hombres y mujeres respectivamentexiv. Estos
incrementos pueden reflejar un aumento de la incidencia de infección, una mayor
concienciación pública hacia este el problema o una mayor sensibilidad diagnóstica.
El tratamiento de las verrugas genitales es sintomático (con el objetivo primordial de
eliminar o reducir el tamaño de las lesiones clínicas aparentes, lo que puede ser difícil y
doloroso)xv. Según el tamaño y la localización de las verrugas genitales, se puede elegir
entre distintas opciones de tratamientoxvi:
Cremas
Eliminación por calor, congelación o láser
Cirugía
- RAZONES PARA VACUNARSE -
Nunca es tarde para mejorar la prevención contra el cáncer
La vacunación es una de las mejores herramientas que ha desarrollado la medicina
moderna para proteger de enfermedades infecciosas.
1. El CCU no es hereditario, siempre está provocado por el VPHxvii.
2. El CCU es el segundo cáncer más frecuente entre las mujeres españolas de entre 15
y 44 añosxviii
3. Hasta el 80% de las mujeres sexualmente activas entrarán en contacto con el VPH
durante su vidaxix
4. La vacunación ayuda a combatir los tipos de VPH responsables del 75% de los casos
de CCU en Europaxx
5. Aunque una mujer haya estado en contacto con un tipo de VPH en el pasado, la
vacunación puede protegerla contra la enfermedad genital causada por otros tipos
de virus incluidos en la vacunaxxi
6. Desde 2008 las autoridades sanitarias españolas financian la vacunación frente al
VPH para las niñas adolescentes entre 11 y 14 años. Además, las fichas técnicas de
las vacunas establecen su indicación sin límite de edad en mujeres a partir de los 9
años, para la prevención de lesiones genitales precancerosas (cervicales, vulvares y
vaginales) y cáncer cervical relacionados con los tipos de VPH que contienen; y sin
distinción de sexo (en una de las vacunas), para la prevención de condilomas
(verrugas genitales) relacionados con el VPH.
7. La OMS reconoce la alta eficacia y seguridad de la vacunación frente al VPHxxii
8. Una citología ayuda a detectar las lesiones del cuello del útero precursoras del
cáncer y la vacunación ayuda a prevenir tanto las lesiones precursoras como el
cáncer cervicalxxiii
9. La combinación de la vacuna y la citología maximiza la efectividad de la prevención
del CCUxxiv
- PREGUNTAS Y RESPUESTAS MÁS FRECUENTES -
¿Qué eficacia tiene la vacunación?
La vacunación protege frente a determinados tipos del VPH, responsables del 75% de los
casos de cáncer cervical en Europa. Se requieren 3 dosis para garantizar una protección
completa.
¿A partir de qué edad se recomienda la vacunación?
Es preferible empezar con la vacunación antes de la primera exposición al VPH, es decir,
antes del inicio de las relaciones sexuales.
¿Por qué se recomienda e incluye en el calendario de vacunación?
Las autoridades sanitarias recomiendan la vacunación para mejorar la prevención del CCU y
financian su administración en una cohorte de niñas adolescente, mediante su inclusión en
el calendario nacional de vacunación, junto al resto de vacunas que se administran
rutinariamente en la edad pediátrica.
¿Ya es tarde si una mujer es sexualmente activa?
No, aunque una mujer joven ya haya estado en contacto con un tipo de VPH en el pasado,
la vacunación puede prevenir contra la enfermedad genital causada por otros tipos de virus
incluidos en la vacuna. Sin embargo, es importante vacunarse lo antes posible.
¿Es bien tolerada la vacuna tras su administración?
El Ministerio de Sanidad y la OMS no tienen noticias de ningún acontecimiento adverso
grave relacionado con la vacunación. Síntomas como fiebre, inflamación e hinchazón en el
lugar de la inyección son reacciones breves del cuerpo y son iguales que los que provoca la
inmunización infantil, por ejemplo.
Esta vacunación siguió ensayos clínicos rigurosos antes de su aprobación por parte de las
autoridades sanitarias y se evalúa continuamente mediante los programas de seguimiento
postautorización.
¿Por qué vacunarse si existen pruebas de detección del cáncer?
Siempre es mejor prevenir que tratar; el tratamiento de las lesiones precursoras y del
cáncer de cuello de útero puede tener implicaciones o consecuencias, que incluyen la
necesidad de un seguimiento clínico estrecho, la terapia de las lesiones precursoras
mediante determinadas técnicas quirúrgicas e incluso en los casos más avanzados, la
histerectomía y la quimioterapia y/o radioterapia.
¿Hace falta continuar con los controles después de la vacunación?
Los controles ginecológicos periódicos son necesarios para aprovechar al máximo la
eficacia de la prevención
¿Por qué en ocasiones surge la controversia en cuanto a la vacunación?
En ocasiones, una minoría se opone a la vacunación por la percepción errónea de que las
vacunas pueden hacer más mal que bien, basándose en anécdotas y conjeturas más que en
pruebas científicas. Es importante subrayar que no existe controversia científica sobre la
eficacia y la seguridad de las vacunas. Las vacunas son una de las mejores herramientas
modernas con las que cuenta la medicina preventiva.
¿Por qué es mejor vacunarse a los 15 años y por qué no es tarde a los 26?
Siempre es mejor vacunar a las chicas jóvenes antes de su primera exposición al VPH.
Aunque las mujeres jóvenes ya hayan tenido contacto con un tipo de VPH en el pasado, la
vacunación puede protegerlas de todas formas. La vacunación puede prevenir contra
enfermedades genitales del VPH provocadas por otros tipos incluidos en la vacuna.
¿Qué significan los resultados obtenidos tras las pruebas?
De la citología se obtendrán resultados “normales”, “indeterminados” o “anormales”. Si
estos son indeterminados o anormales probablemente la paciente deberá someterse a más
pruebas para que el médico le confirme si los cambios en las células podrían estar
relacionados con el cáncer.
REFERENCIAS.i
Koutsky L. Epidemiology of genital human papillomavirus infection. Am J Med 1997;102:3-8.
Koutsky LA, Galloway DA and Holmes KK. Epidemiology of genital human papillomavirus infection. Epidemiol Rev
1988;10:122-163
Syrjänen S. Human papillomavirus (HPV) in head and neck cancer. J Clin Virol 2005;32(Suppl 1): S59-66.
ii
Bernard HU. The clinical importance of nomenclature evolution and taxonomy of human papillomaviruses. J Clin Virol
2005;32(Supp.1):S1-6
iii
Monoz N, Bosch FX, de Sanjose S et al. Epidemiologic classification of human papillomavirus types associated with cervical
cancer. N Engl J Med 2003;348:518-527
iv
Bosch FX and de Sanjosé S. Chapter 1: Human papillomavirus and cervical cancer - Burden and Assessment of causality. J
Natl Cancer Inst Monogr 2003; 31:3-13.
v
Jacobs MV, Walboomers JMM, Snijders PJF et al. Distribution of 37 mucosotrophic HPV types in women with cytologicaclly
normal cervical smears: The age-related patterns for high-risk and low-risk types. Int J Cancer 2000;87:221-227.
Schiffman M and Kjaer SK. Chapter 2: Natural history of anogenital human papillomavirus infection and neoplasia. J Natl
Cancer Inst Monogr 2003;31:14-19.
Sherman ME, Lorincz AT, Scott DR et al. Baseline cytology, human papillomavirus testing, and risk for cervical neoplasia: A
10-year cohort analysis. J Natl Cancer Inst 2003;95:46-52.
PHLS CDR Weekly. 2001;11(35).
vi
Winer RL, Lee S-K, Hughes JP et al. Genital human papillomavirus infection: Incidence and risk factors in a cohort of
female university students. Am J Epidemiol 2003;157:218-226.
Sonnex C, Strauss S and Gray JJ. Detection of human papillomavirus DNA on the fingers of patients with genital warts. Sex
Transm Inf 1999;75:317-319.
Herrero R, Castellsague X, Pawlita M et al. Human papillomavirus and oral cancer: The International Agency for Research on
Cancer multicentre study. J Natl Cancer Inst 2003;95:1772-1783.
vii
WHO/ICO Information Centre of HPV and Cervical cáncer (HPV Information centre). Summary report on HPV and cervical
cancer statistics in Spain. 2013.. (Acceso 23 de Septiembre de 2013). Disponible en www.who.int/hpvcentre
viii
NCI website (http://www.nci.nih.gov)
ix
NCI website (http://www.nci.nih.gov)
x
Clinical Effectiveness Group (Association for Genitourinary Medicine and the Medical Society for the Study of Venereal
Diseases). National guideline for the management of anogenital warts.
Madeleine MM, Daling JR, Carter JJ et al. Cofactors with human papillomavirus in a population-based study of vulvar cancer.
J Natl Cancer Inst 1997;89:1516-1523.
Daling JR, Madeleine MM, Schwartz SM et al. A population-based study of squamous cell vaginal cancer: HPV and cofactors.
Gynecol Oncol 2002;84:263-270.
xi
Parkin DM, Whelan SL, Ferlay J et al. Cancer incidence in five continents (CIS). Volume VIII. P606-611
Dodge JA, Eltabbakh GH, Mount SL et al. Clinical features and risk of recurrence among patients with vaginal intraepithelial
neoplasia. Gynecol Oncol 2001;83:363-369
Van Beurden M, ten Kate FJW, Smiths HL et al. Multifocal intraepithelial neoplasia grade III and multicentric lower genital tract
neoplasia is associated with transcriptionally active human papillomavirus. Cancer 1995;75:2879-2884
Hording U, Junge J, Poulson H et al. Vulvar intraepithelial neoplasia III: A viral disease if undetermined progressive potential.
Gynecol Oncol 1995;56:276-279
xii
NCI website (http://www.nci.nih.gov)
xiii
NCI website (http://www.nci.nih.gov)
xiv
http://www.hpa.org.uk/infections/topics_az/hiv_and_sti/sti-warts/epidemiology/epidemiology.htm#
xv
http://www.hpa.org.uk/infections/topics_az/hiv_and_sti/sti-warts/epidemiology/epidemiology.htm#
xvi
McMillan A. The management of difficult anogenital warts. Sex Transm Inf 1999;75:192-194.
Sawaya GF, McConnell KJ, Kulsingam SL et al. Risk of cervical cancer associated with extending the interval between
cervical cancer screenings. N Engl J Med 2003;349:1501-1509.
xvii
Walboomers JMM, Jacobs MV, Manos MM et al. Human papillomavirus is a necessary cause of invasive cervical cancer
worldwide. J Pathol 1999;189:12-19
xviii
ICO for WHO. Huma papillomavirus vaccines. HPV Information center, Spain, 2007
Syrjänen K et al. Prevalence, incidence and estimated life-time risk of cervical human papillomavirus infections in a
nonselected finnish female population. Sex Transm Dis 1990;17(1):15-19
xx
Smitj J.S et al. Human papillomavirus type distribution in invasive cervical cáncer and high-grade cervical lesions: A metaanalysis update. Int. J. Cancer: 121;621-632 (2007). *Europe = 25 members plus Iceland, Switzerland and Norway.
xxi
FUTURE II Study Group. Quadrivalent vaccine against human papillomavirus to prevent high-grade cervical lesions. N Engl
J Med 2007;356(19):1915-27
xxii
WHO Weekly epidemiological record, No 5,2009,84,37-40. http://www.who.int/wer/2009/wer8405.pdf
xxiii
Cortés J et al. Vacuna frente al virus del papiloma humano y cribado de cáncer de cuello de útero. Prog Obstet Ginecol
2009;52(6):360-8
xxiv
Cortés J et al. Vacuna frente al virus del papiloma humano y cribado de cáncer de cuello de útero. Prog Obstet Ginecol
2009;52(6):360-8
xix