Download Archivo en - Colgate Profesional

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
EL
REPORTE DE CUIDADO ORAL
®
!"#$&%'
La pérdida de dientes y la
salud sistémica
Además del impacto que tiene la
pérdida de dientes en la calidad de
vida de una persona, afectando
aspectos tales como la apariencia,
autoestima, interacciones sociales
efectivas y el deleite que se deriva de
la comida, también existe la
preocupación real que la nutrición
sana es afectada perjudicialmente por
la falta de dientes, 1-3 particularmente
en las personas de edad avanzada. 4,5
La función de masticar depende del
estado de la dentición y, ya que la
pérdida de dientes disminuye la
capacidad de masticar, pueden ocurrir
cambios desfavorables en la elección
de alimentos y en la ingesta de
nutrientes. Los pobres hábitos
alimenticios resultantes han sido
implicados como causantes de los
problemas de salud sistémica;1,2,6 se
han reportado numerosas asociaciones
entre la dieta y la enfermedad. Por
ejemplo, se ha demostrado que una
dieta alta en grasa y colesterol
aumenta el riesgo de una enfermedad
cardiovascular (CVD por sus siglas en
inglés), mientras que las dietas bajas
en fibra, frutas y vegetales pueden
provocar un mayor riesgo de cáncer.2
Estado de la dentición y el
consumo de alimentos
Una investigación a gran escala
llevada a cabo por Joshipura, et al.1
analizó la asociación entre el número
de dientes y la ingesta de nutrientes en
profesionales de la salud de sexo
masculino entre 40 y 80 años de edad.
En general, se encontró que a medida
que se reducía el número de dientes
en los participantes, también lo hacía
su ingesta alimenticia promedio de
fibra, caroteno, vegetales y frutas. De
forma opuesta, la ingesta de calorías,
grasas saturadas y colesterol aumentó
con la disminución del número de
dientes (Tabla 1—página siguiente).1
A pesar de que las diferencias en las
dietas en general entre los
participantes edéntulos y dentados
fueron significativas pero pequeñas,
los efectos perjudiciales de la pérdida
de dientes pueden llevar, con el
tiempo, al incremento de riesgo de
enfermedad. Por ejemplo, se formuló
la hipótesis de que el reducir la ingesta
de fibra alimenticia en un gramo en
los edéntulos podría llevar a un
aumento de dos por ciento en el riesgo
de infarto del miocardio1, en
comparación con el grupo de
dentados. Un estudio separado, a gran
escala, de mujeres de los Estados
Unidos mostró resultados similares;
las mujeres edéntulas tenían una
ingesta significativamente más alta de
grasas saturadas, grasas trans,
colesterol y vitamina B12, y una
ingesta más baja de grasa
poliinsaturada, fibra, vegetales, frutas
y de muchas vitaminas comparado con
mujeres que tenían de 25 a 32 dientes.
Además, en un aspecto longitudinal de
la investigación, las mujeres que
perdieron un mayor número de dientes
en el transcurso del estudio mostraron
cambios de dieta insalubres, evitando
alimentos difíciles de masticar, tales
como vegetales crudos y frutas.
Al investigar si el utilizar
dentaduras postizas afectaba la
nutrición, Krall, et al.2mostró que el
masticar se veía perjudicado
significativamente en un un grupo de
cohorte de hombres veteranos
viviendo en el área de Boston, los
cuales tenían una dentadura completa
o parcialmente removible al
compararla con aquellos cuya
dentadura estaba intacta. El consumo
de proteína y fibra tendió a disminuir
con el estado de la dentadura
progresivamente deteriorada, siendo
Volumen
Número 2,
2, 2007
Volume
17,17,Number
2007
El Reporte de Cuidado Oral
está disponible en línea.
Inscríbase en
www.colgateprofessional.com
para recibir notificaciones
en el futuro de todos
los números
issues
En este número
La pérdida de dientes y la salud
sistémica
1
En la práctica
4
Página de la higiene
6
Práctica clínica
7
Tendencias en la asistencia sanitaria
10
VE
RI
TAS
Escuela de Medicina
Dental de la
Universidad de
Harvard
Programa de Educación
Profesional Continua 11
Jefe de Redacción
Chester Douglass, DMD, PhD; EE.UU.
Profesor de Política de Cuidado Oral y
Epidemiología, Escuela de Medicina Dental
y Escuela de Salud Pública de la Universidad
de Harvard
Editores Asociados
John J. Clarkson, BDS, PhD; Irlanda
Saskia Estupiñán-Day, DDS, MPH
Organización Panamericana de la Salud, Washington,
D.C.
Joan I. Gluch, RDH, PhD; EE.UU.
Kevin Roach, BSc, DDS, FACD; Canadá
Zhen-Kang Zhang, DDS, Hon. FDS, RCS (Edin.); China
Consejo Asesor Internacional
Per Axelsson, DDS, Dr. en Odontología; Suecia
Irwin Mandel, DDS; EE.UU.
Roy Page, DDS, PhD; EE.UU.
Gregory Seymour, BDS, MDSc, PhD, MCRPath;
Australia
Proporcionando Educación Continua como un Servicio a la Odontología a Nivel Mundial
aquellos que utilizan dentaduras
postizas quienes presentaban una
menor ingesta de fibra alimenticia en
comparación a cualquier otro grupo2
(Tabla 2). Contrario al estudio llevado
a cabo por Joshipura, et al.,1 el
consumo total de calorías tendió a
disminuir con la mala dentición, lo
que los investigadores del estudio
explicaron como posiblemente
atribuible a factores socioeconómicos
de las respectivas poblaciones de
estudio. Sin embargo, a pesar de que
el grupo con dentadura postiza
completa consumió significativamente
menos calorías que los otros grupos,
el porcentaje de calorías de grasa
tendió a incrementar2 (Tabla 2).
Finalmente, Sheiham, et al.5
diseñaron un estudio para evaluar si la
condición oral de personas de 65 años
o mayores estaba relacionada con la
ingesta de nutrientes específicos.5
Para la mayor parte de nutrientes, los
investigadores generalmente
encontraron que los participantes
dentados presentaban una mayor
ingesta de nutrientes que los
participantes edéntulos. Se
presentaron asociaciones
estadísticamente significativas entre el
estado dental y la ingesta de proteína,
los azúcares lácteos e intrínsecos,
fibra, calcio, hierro no pigmentado y
vitaminas C y E.5 Todos estos
estudios proporcionan evidencia de
que la ingesta de nutrientes está
asociada con el estado dental.
Además, muchos de los alimentos que
las personas con mala dentición evitan
protegen contra enfermedades como la
CVD, el infarto isquémico y el
síndrome metabólico (MetS por sus
siglas en inglés).
Tabla 1. Ingesta de Calorías y Nutrientes por el Número de Dientes
25-32
Calorías (kcals)
1,954
1,966
Fibra alimenticia (g)
22.3
22.1
1-10
Desdentados
1,979
1,999
2,000
21.9
21.6
21.6
167
165
170
167
164
Caroteno (IU)
9,829
9,379
9,362
9,386
9,069
Grasas saturadas (g)
24.3
24.6
24.7
25.1
25.2
Colesterol (mg)
302
308
313
317
321
Frutas (porciones)
2.44
2.45
2.52
2.51
2.46
Frutas (porciones
excluyendo jugos)
1.64
1.67
1.69
1.68
1.67
Vegetales (porciones)
3.71
3.55
3.58
3.49
3.40
Vitamina C (mg)
Kcals: kilocalorías; g: gramos; mg: miligramos; IU: Unidad
Internacional
Muestra del estudio: 49,501 hombres profesionales saludables
De Joshipura, et al.,19961
Tabla 2. Ingesta de Calorías y Nutrientes por el Número de Dientes
Caloría/Nutriente
Estado de la Dentadura
Dentaduras P. Dentición
Dentición
Parciales
Arreglada
Dentición
Dentadura
Intacta* Removibles Parcialmente** Arreglada*** Completa
1,894
1,865
1,744
1,795
1,677
Proteína (g)
80
80
74
74
68
Total de carbohidrato (g)
248
237
222
230
204
Fibra alimenticia (g)
21
20
19
19
16
Total de grasas (g)
55
55
53
54
52
Porcentaje de
calorías como grasas
26
27
27
26
28
Colesterol (mg)
230
245
226
226
225
Calorías (kcals)
Kcals: kilocalorías; g: gramos; mg: miligramos
Muestra del estudio: 638 hombres veteranos
* ≥ 28 dientes naturales; ** < 14 dientes naturales sobre una parte de la boca; *** < 14 dientes naturales sobre
ambos partes de la boca
From Krall, et al., 19982
La enfermedad sistémica y la
ingesta de nutrientes
La ingesta de nutrientes está
asociada con el estado dental;
muchos de los alimentos que las
personas con mala dentición
evitan protegen contra
enfermedades como la CVD, la
apoplejía isquémica y el síndrome
metabólico.
Número de Dientes
17-24
11-16
Caloría/Nutriente
La enfermedad cardiovascular y
el infarto isquémico. Los estudios
han mostrado una asociación inversa
entre la ingesta de frutas y vegetales
— en particular, vegetales de hojas
verdes y frutas cítricas — el riesgo de
CVD3,7 y de infarto isquémico.8 Los
componentes de las frutas y vegetales
que se cree protegen contra estas
enfermedades incluyen vitaminas
(incluyendo B6, B12, C, D, y E), el
potasio, el folato, la fibra, y los
página 2
flavonoides.7,8 Una evaluación
reciente9 de un estudio3 admite que la
pérdida de dientes está asociada con
los cambios de dieta reportados, y que
estos cambios en la dieta podrían tener
un efecto sobre la salud sistémica, a
pesar de que la evidencia experimental
para hacer una relación causal no está
presente.
El síndrome metabólico. El MetS
es una enfermedad que ha resultado de
la disminución en ejercicios y el
incremento en la ingesta calórica que
ha tenido lugar en la población
estadounidense en los últimos 30 años.
Esta enfermedad puede consistir en las
siguientes características: obesidad
abdominal; nivel de triglicéridos
elevado; niveles de colesterol de
lipoproteína de alta densidad
reducidos; deterioro en los niveles de
glucosa en ayunas.6
Cada una de estas características
puede resultar en arteriosclerosis,
incrementando el riesgo de infarto del
miocardio y de apoplejía. Conservar
los dientes y las encías saludables es
vital para las personas que padecen del
MetS debido a su tendencia a
desarrollar enfermedad vascular.
Como se mencionó anteriormente, las
personas que pierden sus dientes,
especialmente los dientes molares
posteriores, pueden alterar sus
elecciones de alimentos, al optar por
una dieta asociada con el riesgo
elevado de padecer de una CVD.
Adicionalmente, se ha encontrado que
las personas desdentadas tienen un
índice de masa corporal (BMI por sus
siglas en inglés) significativamente
más alto comparado con personas
dentadas similares, y estos niveles de
BMI parecen ocurrir por un
incremento en el consumo de
alimentos hipercalóricos, dulces y
suaves que propician la obesidad. Las
dentaduras postizas completas y
parciales desmontables no parecen
compensar la eficacia de masticación
de los dientes perdidos, ni mejoran
significativamente la ingesta
nutricional. Sin embargo, existe cierta
evidencia limitada de la mejora en la
ingesta nutricional de los pacientes a
los que se les ha colocado implantes
dentales. El aumento del riesgo de
una CVD en pacientes con MetS hace
que sea vital para los dentistas el
considerar tratamientos que intenten
conservar la dentición natural,
maximizando la eficacia de
masticación e incrementando la
probabilidad de consumir alimentos
que no fomentan la arteriosclerosis.6
La pérdida de la dentición natural
disminuye la capacidad de
masticación y la ingesta de
nutrientes y puede, finalmente,
afectar la salud sistémica.
Conclusión
La salud oral y el estado de la
dentición pueden tener un impacto en
la elección de alimentos y en la
ingesta de nutrientes, siendo las
personas edéntulas quienes consumen
menos frutas y vegetales y más grasa
saturada y colesterol. Estos cambios
alimenticios pueden estar relacionados
a un riesgo elevado de enfermedades
metabólicas y cardiovasculares.
Debido a la alta prevalencia de
pérdida de dientes entre los adultos
mayores, hasta un pequeño
incremento en el riesgo de desarrollar
enfermedades sistémicas a causa de
una mala dentición podría tener un
impacto significativo. Desde este
punto de vista, se aconseja que las
recomendaciones alimenticias se
integren a las visitas dentales,
especialmente para las personas de
edad avanzada, para beneficiar la
salud del paciente. La prevención de
la pérdida de dientes y el reemplazo
de los dientes con implantes dentales
pueden ayudar a las personas a
mantener una dieta saludable, la cual
puede reducir potencialmente la
incidencia de las enfermedades
sistémicas crónicas relacionadas con
la dieta.O
C
Referencias
1. Joshipura KJ, Willett WC, Douglass CW. The
impact of edentulousness on food and nutrient
intake. JADA 1996;127(4):459-467.
2. Krall E, Hayes C, Garcia R. How dentition
status and masticatory function affect nutrient
intake. JADA 1998;129(9):1261-1269.
3. Hung HC, Colditz G, Joshipura KJ. The
association between tooth loss and the selfreported intake of selected CVD-related nutrients
and foods among US women. Community Dent
Oral Epidemiol 2005;33(3):167-173.
4. Sheiham A, Steele JG, Marcenes W, Tsakos G,
Finch S, Walls AW. Prevalence of impacts of
dental and oral disorders and their effects on
eating among older people; A national survey in
Great Britain. Community Dent Oral Epidemiol
2001;29(3):195-203.
5. Sheiham A, Steele JG, Marcenes W, Lowe C,
Finch S, Bates CJ, et al. The relationship among
dental status, nutrient intake, and nutritional
status in older people. J Dent Res 2001;80(2):
408-413.
6. Friedlander AH, Weinreb J, Friedlander I,
Yagiela JA. Metabolic syndrome: Pathogenesis,
medical care and dental implications. JADA
2007;138(2):179-187.
7. Joshipura KJ, Hu FB, Manson JE, Stampfer
MJ, Rimm EB, Speizer FE, et al. The effect of
fruit and vegetable intake on risk for coronary
heart disease. Ann Intern Med 2001;134(12):
1106-1114.
8. Joshipura KJ, Ascherio A, Manson JE, Stampfer
MJ, Rimm EB, Speizer FE, et al. Fruit and
vegetable intake in relation to risk of ischemic
stroke. JAMA 1999;282(13):1233-1239.
9. Merchant AT. Losing teeth leads to an
unhealthy diet associated with cardiovascular
disease risk. J Evid Based Dent Pract 2006;6(2):
187-188.
X ŽÇœ›ŽœŽ ‘˜¢ Ž— Œ˜•ŠŽ™›˜Žœ’˜—Š• Œ˜– ™Š›Š ›ŽŒ’‹’› Š•Ž›Šœ
™˜› Œ˜››Ž˜ Ž•ŽŒ›à—’Œ˜ Ž ˜˜œ —žŽœ›˜œ —žŽŸ˜œ —ø–Ž›˜œ Ž— •Ç—ŽŠ Ž•
Ž™˜›Ž ˜•ŠŽ Ž ž’Š˜ ›Š•
página 3
El uso de implantes en
la medicina general
D urante los últimos 10 años, los
avances en técnicas protésicas y
quirúrgicas han presentado implantes
dentales más seguros y durables,
aumentando significativamente la
aceptación del paciente.1 No obstante,
el evaluar la satisfacción del paciente
con diferentes tipos de reemplazos
dentales de manera rigurosa es un
desafío debido a la falta de sesgo
cegador y de preferencia.2 Un reciente
ensayo aleatorio controlado llevado a
cabo en el Reino Unido no encontró
diferencias estadísticamente
significativas en la calidad de vida
relacionada con la salud oral (OHRQL por sus siglas en inglés) entre
los pacientes elegidos aleatoriamente
para utilizar dentaduras postizas
completas convencionales o
sobredentaduras mandibulares
retenidas con implante.2 No obstante,
un paciente de cada cuatro elegidos
aleatoriamente para utilizar implantes
dentales los rechazó y en su lugar
EN LA PRÁCTICA
recibió dentaduras postizas
convencionales.
Los pacientes que aceptaron los
implantes tenían una O-HRQL
significativamente menor (p=0.006)
previo al tratamiento y reportaron
mayores incrementos en la O-HRQL al
finalizar el tratamiento que aquellos que
los rechazaron (p < 0.001).2
Generalmente, se reconoce que además
de la mejoría en la O-HRQL, los
implantes dentales ayudan a preservar
el hueso basal y alveolar.3
La planificación del tratamiento
La colocación de los implantes
dentales requiere una estrecha
colaboración entre el dentista y los otros
miembros del equipo de implante,
incluyendo los cirujanos del área
maxilofacial y oral, el periodontólogo o
endodontista, radiólogos y los asistentes
dentales y quirúrgicos.1 El rol inicial
del dentista es evaluar el historial dental
y médico del paciente (que incluye
bruxismo, enfermedad periodontal, uso
de tabaco, diabetes mellitus y la
enfermedad metabólica ósea), para
discutir las opciones terapéuticas
Factores a considerar cuando se coloca un implante
(
(
(
Asegure el volumen óseo adecuado (por lo menos 1 mm alrededor del implante)
Determine la posición óptima de los dientes con respecto al tamaño del diente/largo del arco
Verifique la existencia de hendiduras de resorción, socavaciones u otras características que
puedan requerir el injerto de tejidos blandos u óseos
(
(
Verifique la posición lingual-facial de los dientes adyacentes en relación con el alojamiento del implante
óseo; una placa facial delgada sobre los dientes adyacentes puede estar sujeta a resorción
(
(
Verifique la pérdida ósea inducida por trauma que puede llevar a la pérdida de la placa de hueso
facial/bucal
(
Verifique las limitaciones anatómicas (cavidad, bulto neurovascular)
(
Verifique las discrepancias en cuanto al tamaño mesial-distal del diente o la longitud del arco
Verifique el aspecto anterior de los dientes en un momento de descanso o durante una conversación
(
Considere los dientes excesivamente largos con la línea de sonrisa alta, así como la formación de mordida
cruzada, posterior que crea un mal resultado estético en el corredor bucal
(
(
Considere la necesidad de apoyo para los labios
(
Evalúe la arquitectura periodontal del tejido blando y duro (biotipo de tejido delgado propenso a retracción)
Verifique la estabilidad periodontal y la prognosis clínica de los demás dientes
(
Verifique el estado restaurativo de los dientes adyacentes y la necesidad de restauraciones de cobertura
completa
(
(
Asegure suficiente control de la fuerza lateral de la prótesis
(
Verifique señales de desgaste parafuncional, facetas u otros problemas
(
Determine el diseño de prótesis adecuado (marco de diseño, retenido con tornillos versus con cemento)
Asegure suficiente acceso para la higiene oral
Asegure suficiente acceso para la instrumentación quirúrgica
De Stanford, 20051
página 4
disponibles en términos de viabilidad,
función, estética y costo, y para
obtener el consentimiento informado
del paciente. El dentista también
realiza la evaluación de diagnóstico y
diseña un plan de tratamiento general.
La evaluación de diagnóstico incluye
una evaluación cuidadosa de los
tejidos duros y blandos de las áreas
donde se realizará el implante en sus
tres dimensiones e involucra la
preparación de una de molde de
montura para diagnóstico y una
encerado diagnóstico. Se evalúan las
estructuras óseas mediante la
palpación y auscultando bajo el efecto
de anestesia, en combinación con un
examen radiográfico. La organización
del diagnóstico puede ayudar a
determinar el área exacta del injerto de
tejido blando y duro (si se requiere), y
puede utilizarse para crear una guía
quirúrgica (en base a un molde creado
al vacío o resina acrílica) que puede
ser de mucha ayuda para el cirujano
para colocar correctamente el
implante. Los factores a considerar en
la planificación del tratamiento se
enumeran en la siguiente tabla.1
El diente único y el arco
parcialmente edéntulo
El número de implantes necesarios
depende de cuántos dientes adyacentes
hacen falta; en general, se recomienda
reemplazar tres dientes con una
dentadura postiza parcial fija de
longitud corta (FPD por sus siglas en
inglés) sobre dos implantes.1 El unir
los implantes a los dientes naturales
puede llevar a movimientos erráticos
de la dentición natural; por lo tanto, se
requiere de implantes adicionales o
una forma de aumento para diseñar
prótesis que se apoyen solamente
sobre los implantes. Se recomiendan
las prótesis o coronas retenidas con
tornillos cuando el riesgo de
retracción de encías es alto, cuando el
espacio vertical entre el hueso alveolar
y el plano oclusal es limitado o si la
remoción de cemento es difícil.
Las prótesis retenidas con cemento
son preferibles con coronas angostas,
o si el material restaurador que sella el
acceso del tornillo podría afectar
desfavorablemente la estética o
estabilidad de la superficie oclusal.1
El arco edéntulo
Las sobredentaduras movibles que
están retenidas por dos implantes y
sostenidas por el tejido mucoso, son
consideradas el estándar de cuidado
para la mandíbula de los edentulosa,
mejorando la densidad ósea fisiológica
y la calidad de vida.1,3 Los pacientes
que no toleran la presión en los tejidos
mucosos requieren sobredentaduras
que se sostienen únicamente con
implantes, lo que puede lograrse al
colocar cuatro implantes conectados a
una barra rígida. En la mandíbula
superior, es posible una restauración
completa de porcelana fundida al
metal, siempre que la resorción ósea
sea mínima. Sin embargo, este
tratamiento es complejo y costoso y
representa un mayor riesgo de
problemas estéticos, fonéticos y de
higiene oral. Las sobredentaduras en
cuatro a seis implantes y de
reconstrucciones ceramometales fijas
completamente arqueadas son algunas
alternativas. Ésta última requiere de
seis a ocho implantes, cada par
portando un FDP de tres unidades.
Avances recientes
Convencionalmente, la prótesis se
carga sobre el implante después de que se
ha permitido que el área sane de tres a
seis meses. Un nuevo método permite
cargar un implante simple de corona o
una prótesis fija poco después que se
coloque el implante (carga
inmediata). Una revisión reciente de la
evidencia clínica indica que la carga
inmediata ofrece una alta subsistencia del
implante y de los índices de éxito.4 Para
incrementar el índice de éxito, la carga
inmediata se debe reservar para las áreas
que no tienen historial de enfermedad
periodontal,5 y la prótesis debe fijarse
rígidamente al implante.1
El impacto de la comorbidad
en el éxito de la terapia de
implante dental
La evidencia con respecto al
impacto de la periodontitis sobre el
éxito de implantes dentales es limitada
y ambigua. Una revisión sistemática
concluyó (con base en el análisis de
dos ensayos clínicos a largo plazo)
que la incidencia de fracaso de
implantes no es significativamente
distinta entre pacientes que perdieron
sus dientes debido a la periodontitis y
aquellos que perdieron sus dientes
La colocación de los implantes
dentales requiere de una
estrecha colaboración entre el
dentista y los otros miembros
del equipo de implante,
incluyendo el cirujano
maxilofacial y el oral, el
periodontólogo o endodontista,
radiólogos y los asistentes
dentales y quirúrgicos.
6
debido a otras causas; sin embargo,
otro análisis sistemático, que incluyó
dos estudios adicionales, concluyó que
los pacientes con un historial de
periodontitis pueden tener una mayor
incidencia de pérdida del hueso de
apoyo y del implante7 Evidentemente,
se requieren más investigaciones, que
consideren otros factores tales como el
fumar cigarrillo, antes de que se
extraer tener conclusiones concretas
acerca del impacto de la periodontitis.8
Además de la periodontitis, se han
sugerido muchas enfermedades
sistémicas que afectan el éxito de la
terapia de implante dental. Sin
embargo, un análisis reciente no
encontró estudios controlados para la
mayoría de condiciones
potencialmente relacionadas con el
fracaso de los implantes, con
excepción de la diabetes mellitus y
osteoporosis.9 Para ambas
condiciones, se encontró que la
evidencia clínica era generalmente
heterogénea y ambigua; no obstante,
el riesgo más alto del fracaso de los
implantes dentales se reportó por el
estudio más grande que examinaba el
impacto de la diabetes mellitus.9
O
C
página 5
Referencias
1. Stanford CM. Application of oral implants to
the general dental practice. JADA
2005;136(8):1092-1100.
2. Allen PF, Thomason JM, Jepson NJ, Nohl F,
Smith DG, Ellis J. A randomized controlled trial
of implant-retained mandibular overdentures. J
Dent Res 2006;85(6):547-551.
3. Shor A, Goto Y, Shor K. Mandibular twoimplant-retained overdenture: Prosthetic design
and fabrication protocol. Compend Contin Educ
Dent 2007;28(2):80-88.
4. Nkenke E, Fenner M. Indications for
immediate loading of implants and implant
success. Clin Oral Implants Res 2006;17(Suppl
2):19-34.
5. Attard NJ, Zarb GA. Immediate and early
implant loading protocols: A literature review of
clinical studies. J Prosthet Dent 2005;94(3):242258.
6. Schou S, Holmstrup P, Worthington HV,
Esposito M. Outcome of implant therapy in
patients with previous tooth loss due to
periodontitis. Clin Oral Implants Res
2006;17(Suppl 2):104-123.
7. Van der Weijden GA, van Bemmel KM,
Renvert S. Implant therapy in partially
edentulous, periodontally compromised patients:
A review. J Clin Periodontol 2005;32(5):506-511.
8. Schuler R. A diagnosis of periodontitis was
associated with an increased failure rate of
dental implants followed for approximately 2.5
years. J Evid Based Dent Pract 2005;5(2):80-81.
9. Mombelli A, Cionca N. Systemic diseases
affecting osseointegration therapy. Clin Oral
Implants Res. 2006;17(Suppl 2):97-103.
PÁGINA DE HIGIENE
Avanzando hacia las
causas fundamentales
Las nuevas tendencias en la
investigación de la salud pública han
dado lugar a recomendaciones para
reorientar nuestro enfoque para mejorar
la salud oral. Se ha sugerido un cambio
de énfasis en el comportamiento
individual preventivo que se utiliza en
gran parte para abarcar los
determinantes sociales subyacentes de
la salud oral. Adicionalmente, el
implementar políticas que abarquen
estos temas sociales puede ser clave en
nuestros esfuerzos para mejorar la salud
de poblaciones completas.
El impacto de los
determinantes sociales
El ambiente económico y
psicosocial en el que viven las
personas tiene un impacto
significativo en su salud oral y
general, el cual crea un gradiente
social de desigualdades en la salud.
Varios estudios han mostrado el
impacto de circunstancias en la niñez
en los resultados posteriores de la
salud oral.1 Por ejemplo, la baja
posición socioeconómica paterna se
asoció con mayor número de caries y
con la enfermedad periodontal en la
edad adulta. El enfoque preventivo
individual, orientado hacia individuos de
alto riesgo, no logró reducir las
desigualdades en la salud oral, ya que no
se tomó en cuenta la influencia
subyacente de los determinantes
económicos, psicosociales y ambientales
de la salud oral.
Sin embargo, el enfoque de
determinantes sociales, se centra en
identificar las causas subyacentes del
problema. La Comisión para los
Determinantes Sociales en Salud de la
Organización Mundial de la Salud
(OMS) utilizó exitosamente este método
en el 2005 para recomendar las formas
de mejorar la salud focalizando los
determinantes sociales.1
Principios de guía para las
políticas socialmente orientadas
Con base en las recomendaciones
para la política de salud pública de la
OMS, las estrategias de salud oral
deben seguir determinados principios de
guía (vea la tabla).1 En general, las
medidas sociales, económicas y de
salud pública deben ser implementadas
para reducir el riesgo de enfermedad
oral en toda la población en lugar de
enfocarse en individuos de alto riesgo.
Para este propósito, las dominios de la
política principal que necesitan ser
abarcados incluyen la seguridad social y
económica, las condiciones en la niñez
y adolescencia, una vida laboral más
saludable, la participación en la
Principios de guía para el desarrollo de estrategias de la salud oral
Fortalecimiento
• Control individual de factores ambientales, socioeconómicos y personales que
Participatorio
• Participación activa de los actores clave en la planeación de intervenciones,
Holístico
• Enfoque amplio enfocado en riesgos comunes y condiciones que
Intersectorial
• Esfuerzo colaborativo de agencias y sectores relevantes para colocar el
Equidad
• Acción enfocada en abarcar desigualdades en salud oral
Basado en evidencia
• Intervenciones futuras en base a la eficacia establecida y la buena
Sostenible
afectan la salud oral de una persona
implementación y evaluación
determinan la salud oral y general
mejoramiento de la salud oral en una agenda de salud pública más amplia
práctica
• Mejoras a largo plazo que podrían ser mantenidas por individuos y comunidades
Multi estrategia
• Acciones complementarias de políticas públicas, desarrollo comunitario y
Evaluación
• Utilizar recursos suficientes y métodos apropiados para evaluar y monitorear las
cambio ambiental
intervenciones de salud oral
De Watt, 20071
página 6
sociedad y el cambio ambiental.1
Para tener éxito en la reducción de
desigualdades en la salud oral, se
pueden implementar medidas que
facilitarían la ejecución de opciones
más saludables.1 Por ejemplo, a nivel
local se ha propuesto el limitar la
venta de refrescos con alto contenido
de azúcar y proveer subsidios para
meriendas saludables en las escuelas,
de manera que éstas sean asequibles
para estudiantes de bajos ingresos. A
nivel nacional, se han impulsado
iniciativas para que las medicinas
pediátricas libres de azúcar estén más
disponibles, además de apoyar la
regulación del contenido y del tiempo
de los anuncios de televisión que
promueven las comidas y bebidas para
niños. También se pueden requerir
cambios en la política de educación
pública; hacer obligatorio un examen
dental para inscribirse en la escuela,
similar al que existe para los
prerrequisitos médicos, esto puede
ayudar a orientar a todos los niños de
edad escolar hacia el mejoramiento de
la salud oral.
La necesidad del esfuerzo
conjunto
El reorientar las políticas de salud
oral hacia un enfoque de
determinantes sociales podría ser
exitoso para eliminar las
desigualdades en la salud oral,
solamente si esto involucra un
esfuerzo conjunto entre los equipos
complementarios. En este contexto, se
requiere establecer la colaboración
entre odontólogos, investigadores
sociales y de la conducta, así como de
los creadores de políticas. Tanto las
agencias internacionales como las
nacionales tendrían un rol importante
en coordinar los esfuerzos de
investigación para entender mejor los
determinantes sociales de la salud oral
en general.
O
C
Referencia
1. Watt RG. From victim blaming to upstream
action: Tackling the social determinants of oral
health inequalities. Community Dent Oral
Epidemiol 2007;35(1):1-11.
PRÁCTICA CLÍNICA
Mejorar la eficacia en
el cuidado de la salud
oral geriátrica
L
os programas preventivos
individuales eficaces dependen en
gran medida de la educación del
paciente para promover la buena
higiene oral y los chequeos dentales
regulares. No obstante, a pesar de los
esfuerzos de mejorar el uso de los
servicios de salud dental a lo largo
de los años, aún queda un vacío entre
los servicios ofrecidos y los que se
han empleado, particularmente para
las personas de edad avanzada. Una
encuesta a gran escala del Reino
Unido que se llevó a cabo en 1998
comprobó que solo el 60% de los
adultos dentados mayores de 75 años
reportaron tener chequeos dentales,
dejando el otro 40% en riesgo de
problemas orales sin tratamiento que
pueden empeorar e impactar
potencialmente la salud total.1
Las barreras que desaniman a los
adultos mayores para buscar
tratamiento dental incluyen: costo,
temor, debilidad y falta de percepción
de necesidad del cuidado de la salud
oral.2
¿Es suficiente la educación?
Para analizar el impacto de la
educación del paciente sobre la salud
oral en personas de edad avanzada, un
estudio evaluó la eficacia de un
programa educativo para mejorar la
salud oral y el estado nutricional del
adulto mayor que vive durante mucho
tiempo en residencias tuteladas (LTC
por sus siglas en ingles). Se sabe que
las personas de edad avanzada que
viven en residencias tuteladas (LTC)
están propensas a gingivitis crónica,
caries, dolor, perder dientes y
dificultades de masticación.3 En
Vancouver y Canadá participaron
catorce residencias tuteladas; cada
una se asignó de forma aleatoria a
ambas condiciones, tanto la activa
como de control. Los asistentes de
atención en ambas residencias
recibieron entrenamiento inicial sobre
el cuidado de la salud oral al asistir a
un seminario; tras lo cual, sólo el
grupo activo tuvo acceso a una
enfermera educadora de tiempo
enfermera educadora de tiempo
completo, durante los tres meses del
estudio. Los asistentes de atención, a
su vez, compartieron el conocimiento
a los habitantes de las residencias. Se
evaluaron, en la línea de referencia y
después de tres meses la salud
gingival, el potencial de masticación,
el Índice de Masa Corporal, una
Puntación Indicadora de Malnutrición
y auto informes de dificultades para
masticar. No se encontraron cambios
clínicos significativos entre los dos
grupos que pudieron ser atribuidos a
los programas educacionales; de este
modo, no fueron suficientes sólo los
programas educacionales para
mejorar la salud dental de los
habitantes de las residencias
tuteladas (LTC).
¿Qué otras opciones están
disponibles?
Un estudio de Glasgow, Escocia
comprobó que cuando los pacientes
de edad avanzada fueron referidos por
un profesional del cuidado de la salud
familiar, que exhortó a visitas
regulares con un dentista, mejoró
significativamente la asistencia a citas
dentales.4 Para complementar esto,
Lowe, et al.2 dirigió un estudio en el
Reino Unido para introducir un
componente de salud oral en los
controles preventivos de salud
(chequeos médicos) para las personas
MEDICINAL
de edad avanzada; el propósito fue poner
a prueba el valor al incluir un proceso de
referencia de salud oral dentro de un
parámetro de la médica general. El
estudio estuvo compuesto de tres fases:
fase 1 – el chequeo de salud preventiva;
fase 2 – la visita de salud oral; y la fase 3
– la evaluación. Los participantes
respondieron las preguntas sobre salud
oral durante el chequeo médico y se
dividieron en dos grupos; uno recibió
una oferta de una visita de salud oral,
pero el otro no. El estudio comprobó
que los participantes que tuvieron
problemas orales, eran edéntulos, quienes
tenían dentaduras postizas, o quienes no
habían visitado al dentista por muchos
años, tenían más probabilidades de
aceptar la oferta de una visita oral.2 Al
sexto mes de evaluación, más de la mitad
de los que aceptaron la oferta de una vista
de salud oral asistieron realmente a la cita
(54%), que representa un aumento
significativo de su línea de referencia
reportada sobre la asistencia a la consulta
dental (37%). Por otro lado, el personal
médico que administra la lista de control
dental indicó que ellos estaban felices de
incluirla en el chequeo de salud y les
pareció útil. La conclusión fue que al
agregar una lista de control dental
dentro de un marco de la medicina
general para pacientes de edad
avanzada, junto con la ayuda para
concretar la consulta dental, pareció
prometedor como una forma para
asegurar que las necesidades dentales
DENTAL
• Diagnóstico Oral
Pediatras
Profesionales en enfermería pediátrica
Enfermeras especializadas
Y
Personal de residencias tuteladas
• Aplicación de Fluoruro a niños < 3 años
• Educación a los padres
• Asistir a los adultos delicados con el uso
del enjuague bucal con clorhexidina
• Reducir los carbohidratos refinados en menús
• Revisar medicamentos
y señales de vida de pacientes
• Monitorear la presión sanguínea en
pacientes hipertensos
• Completar los historiales médicos
página 7
Dentistas
Proveedores de cuidado oral
Adaptado de Pearson and Douglass, 20035
de los adultos mayores se cumplan.
La integración de los servicios
dentales y médicos es
importante, especialmente para
los personas de edad avanzada,
y necesitará de la cooperación
entre los especialistas dentales y
médicos.
Fomento de la salud oral
eficaz
Partiendo de la estrategia
utilizada en el estudio de Lowe, et
al.que se describe arriba y de
acuerdo con el Informe General de
Cirujanos de E.E.U.U. en el 2000, se
han propuesto constantes esfuerzos
para asociar el cuidado de la salud
dental y general. La ilustración en la
página anterior muestra un esquema
propuesto por Pearson y Douglass5
donde solicita proveedores de
médicos para expandir su práctica
médica actual, identificar y atender
ciertas necesidades dentales de sus
pacientes y, por otra parte, para los
proveedores de servicios dentales,
atender algunas de las necesidades
médicas de sus pacientes. Para los
pacientes de edad avanzada, es
particularmente importante esta
integración de servicios dentales y
médicos, y requerirá una colaboración
de odontólogos geriátricos y médicos
especialistas, médicos generales y
especialistas para la salud pública y
preventiva.
5
O
C
Referencias
1. Office for national statistics. Adult dental
health survey: Oral health in the United
Kingdom 1998. UK: Office for National
Statistics; 1998.
2. Lowe C, Blinkhorn AS, Worthington HV,
Craven R. Testing the effect of including oral
health in general health checks for elderly
patients in medical practice — A randomized
controlled trial. Community Dent Oral Epidemiol
2007;35(1):12-17.
3. MacEntee MI, Wyatt CC, Beattie BL,
Paterson B, Levy-Milne R, McCandless L, et al.
Provision of mouth-care in long-term care
facilities: An educational trial. Community Dent
Oral Epidemiol 2007;35(1):25-34.
4. Haughney MG, Devennie JC, Macpherson
LM, Mason DK. Integration of primary care
dental and medical services: A three-year study.
Br Dent J 1998;184(7):343-347.
5. Pearson J, Douglass C. Open wide:
Integrating oral health and primary care.
Phoenix, Arizona: St. Luke’s Health Initiatives;
2003 Jun.
página 8
La única crema dental con protección antibacterial y antiinflamatoria por 12 horas, clínicamente comprobada
página 9
GUA M
TENDENCIAS EN LA ASISTENCIA SANITARIA
Nueva evidencia relaciona la enfermedad
periodontal y la función vascular sistémica
Chester W. Douglass, DMD, PhD
D urante los últimos 10 años, hemos
Jefe de Redacción Chester Douglass,
DMD, PhD; U.S.A.
Profesor de Políticas de Salud Oral y
Epidemiología, Harvard School of Dental
Medicine and School of Public Health
© 2007 Colgate-Palmolive Company.
Todos los derechos reservados.
Impreso en papel reciclado
El Reporte de Cuidado Oral
(ISSN 1520-0167) es apoyado por
Colgate-Palmolive Company para los
profesionales del cuidado oral. El
Programa de Educación Profesional
Continua es patrocinado por la
Escuela de Medicina Dental de la
Universidad de Harvard y suscrito por
una subvención de Colgate-Palmolive
Company. La Universidad de Harvard
no respalda los productos de ninguna
empresa. Los textos médicos fueron
elaborados por BioMedCom
Consultants, Inc., Montréal, QC
(Canadá).
Publicado por Professional Audience
Communications, Inc., Yardley, PA
(EE.UU.).
Dirija sus comentarios, consultas y
cambios de dirección a:
®
Reporte de Cuidado Oral
Dr. Chester W. Douglass
Departmento de Políticas de Cuidado
Oral
Harvard School of Dental Medicine
188 Longwood Ave.
Boston, MA 02115 USA
Fax # (617) 432-0047
Correo electrónico:
[email protected].
PUBLICACIÓN
MIEMBRO DE
AMERICAN
ASSOCIATION OF
DENTAL
EDITORS
informado en varias publicaciones del
Reporte de Cuidado Oral acerca del
creciente número de investigaciones
médicas enfocadas en la relación entre la
enfermedad sistémica y oral. La caries
dental, pérdida dental y la enfermedad
periodontal están siendo estudiadas
intensamente por sus asociaciones con
varias condiciones sistémicas, por lo
general más con diabetes, bajo porcentaje
de nacimientos de bebés prematuros,
enfermedades cardiovasculares (CVD),
tales como enfermedad coronaria, infarto
cerebral y enfermedad arterial periférica.
La mayor parte de estos estudios han
analizado la asociación entre la
enfermedad periodontal como la
exposición y una enfermedad
cardiovascular específica como el
resultado. Mientras estos estudios han
sido un instrumento para identificar las
relaciones y enfocar nuestra atención
sobre este tema enormemente importante,
muchos de los diseños de investigación
tienen correlación y como tal, no provee
una explicación de la vía causal entre la
enfermedad periodontal y la enfermedad
cardiovascular. La teoría que predomina
es que la inflamación es el proceso
intermediario; es decir, la enfermedad
periodontal puede iniciar un proceso
inflamatorio que es entonces, al menos,
parcialmente responsable por el
desarrollo de varias enfermedades
cardiovasculares. Se ha pensado que la
enfermedad periodontal afecta la función
vascular, pero hasta hace muy poco la
evidencia poco convincente ha sido
presentada para ilustrar la relación.
En un estudio innovador publicado en
una edición reciente de New England
Journal of Medicine, Tonetti, et al 1
reporta los descubrimientos de un ensayo
clínico controlado que experimentó el
efecto del tratamiento periodontal sobre
la función endotelial, como la evalúa el
diámetro de la arteria braquial durante el
flujo sanguíneo junto con varios
marcadores inflamatorios.
Después de una asignación aleatoria
de pacientes con periodontitis severa,
página 10
aquellos que recibieron cuidado
periodontal dirigido a la comunidad fueron
comparados con pacientes que recibieron
«tratamiento periodontal intensivo».
Este estudio provee nueva
evidencia importante de que la
enfermedad periodontal puede
estar relacionada con las
condiciones cardiovasculares, y
que el tratamiento efectivo de la
enfermedad periodontal puede
beneficiar un factor importante
en el flujo de la CVD.
La respuesta inmediata (un día) fue
negativa, o sea, la dilatación intervenida
del flujo fue menor en el grupo de
tratamiento intensivo cuando se comparó
con el grupo de tratamiento controlado.
Sin embargo, después de dos meses la
dilatación intervenida del flujo fue mayor
y los niveles plasmáticos de la E-selectina
soluble (un marcador inflamatorio) fueron
menores en el grupo de tratamiento
intensivo que en el grupo de tratamiento
controlado. Por lo tanto, mejoró la salud
sistémica de los pacientes.
Este estudio provee nueva evidencia
importante, no solamente para que la
enfermedad periodontal pueda asociarse
con condiciones cardiovasculares, pero de
forma más importante, que el tratamiento
efectivo de la enfermedad periodontal
puede beneficiar un factor importante en la
sucesión de la CVD, o sea, la función
endotelial de las arterias.
Un reporte completo de este estudio de
referencia y los puntos relacionados serán
tratados en las próximas ediciones del
Reporte de Cuidado Oral. Esté pendiente
de las alertas de su correo electrónico.
O
C
Referencia
1. Tonetti MS, D’Aiuto F, Nibali L, Donald A, Storry C,
Parkar M, Suvan J, Hingorani AD, Vallance P, Deanfield J.
Treatment of periodontitis and endothelial function. N
Engl J. Med 2007;356(9):911-920.
Este cuestionario puede completarse de forma interactiva vía www.colgateprofessional.com
VE
RI
TAS
Escuela de Medicina Dental de la Universidad de Harvard
PROGRAMA DE EDUCACIÓN PROFESIONAL CONTINUA
• El Departamento de Políticas de Salud Oral y Epidemiología de la Escuela de Medicina Dental de la Universidad de Harvard ofrece
este programa de educación continua (CE, por sus siglas en inglés).
• Cada volumen del Reporte de Cuidado Oral (OCR) consiste en 4 números, y cada uno de ellos contiene pruebas de selección múltiple (CE),
equivalente a dos horas de créditos, patrocinadas por la Escuela de Medicina Dental de la Universidad de Harvard, un proveedor del Programa de
Reconocimiento de Educación Continua (CERP por sus siglas en inglés) de la ADA.
• Los participantes que han aprobado la evaluación recibirán una Carta de Verificación de Participación, la cual les acredita dos
(2) créditos CE del programa de educación continua de la Escuela de Medicina Dental de la Universidad de Harvard..
• Las evaluaciones pueden ser presentadas en cualquier momento para recibir los créditos. Se cumplirá con las solicitudes de reembolso
relacionadas con el proceso de pago automático.
1. ¿De cuál de estos nutrientes se redujo la ingesta en las
personas edéntulas?
a) Fibra
b) Colesterol
c) Grasa
d) Todas las anteriores
2. ¿Cuál de la(s) siguiente(s) enfermedad(es)
sistémica(s) puede(n) asociarse con la pérdida
dental?
a) Cáncer
b) Enfermedad cardiovascular
c) Infarto isquémico
d) Todas las anteriores
3. ¿Cuál prótesis dental puede mejorar la eficacia de
masticar en personas edéntulas?
a) Dentaduras parciales movibles
b) Dentaduras completas movibles
c) Implantes dentales
d) Ninguna de las anteriores
4. Se piensa que la protección contra la enfermedad
cardiovascular no está asociada con
a) folato.
b) fibra.
c) grasa saturada.
d) vitamina C.
5. Los obstáculos que pueden disuadir a los adultos
mayores a buscar tratamiento dental, comprenden
a) costo
b) temor
c) falta de necesidad percibida
d) Todas las anteriores
6. En el estudio realizado por Lowe, et al., ¿qué
participantes eran más propensos de aceptar una
oferta de una visita oral?
a) Los que no habían visitado a un dentista durante
muchos años
b) Los que eran edéntulos
c) Los que tenían dentaduras postizas
d) Todas las anteriores
7. No se debe esperar que la salud oral de los adultos
mayores mejore con
a) los cambios en los menús en residencias tuteladas a
largo plazo.
b) el personal que asiste a los residentes de residencias
tuteladas a largo plazo con el uso del enjuague bucal
con clorhexidina.
c) programas educativos, únicamente.
d) la integración de los servicios médicos y dentales.
8. ¿La ingesta de cuál nutriente tiende a disminuir con el
estado de la dentición progresivamente deteriorada?
a) Proteína
b) Fibra
c) Caroteno
d) Todas las anteriores
Registre sus respuestas aquí:
Marque solamente una respuesta por
cada pregunta. Rellene la casilla
que corresponda.
1.
A
B
C
D
2.
A
B
C
D
3.
A
B
C
D
4.
A
B
C
D
5.
A
B
C
D
6.
A
B
C
D
7.
A
B
C
D
8.
A
B
C
D
9.
A
B
C
D
10.
A
B
C
D
11. Existe evidencia clínica que sostiene que
a) varias enfermedades sistémicas afectan el éxito de la
terapia de implante dental.
b) los pacientes con periodontitis tienen un mayor riesgo
de fracaso de implantes.
c) no deben colocarse implantes en pacientes con
osteoporosis.
d) Ninguna de las anteriores
11.
A
B
C
D
12.
A
B
C
D
13.
A
B
C
D
14.
A
B
C
D
12. ¿Cuál (es) de las siguientes declaraciones sobre la mejora
de la salud es (son) correcta (s)?
a) El enfoque preventivo de los determinantes sociales se
centra en el comportamiento individual de los individuos
de alto riesgo.
b) La Organización Mundial de la Salud recomienda
cambiar el comportamiento individual como la única
forma de mejorar la salud global.
c) Circunstancias socioeconómicas en la infancia afectan
el estado de la salud oral en la vida adulta.
15.
A
B
C
D
c) es difícil la remoción del cemento.
d) Todas las anteriores
10. Un estudio reciente de evidencia clínica indica que los
implantes de carga inmediata
a) están relacionados para mejorar los resultados
para pacientes con periodontitis.
b) incrementan el riesgo de fracaso de implantes en
pacientes con periodontitis.
c) ofrecen una alta subsistencia y porcentajes de éxito.
d) los prefieren los pacientes con un alto riesgo de
retracción gingival.
13. Un enfoque exitoso para la reducción de
desigualdades de salud debe
a) focalizarse en las áreas económicas, sociales,
conductuales y ambientales.
b) relacionar el esfuerzo y coordinación entre
especialistas, investigadores y creadores de políticas.
c) facilitar el uso de opciones saludables.
d) Todas las anteriores
14. ¿Cuál de las siguientes afirmaciones sobre la salud
oral es incorrecta?
a) La idea del enfoque de determinantes sociales en la
salud oral es facilitar opciones saludables.
b) Las políticas nuevas deberían basarse solamente en los
resultados de investigaciones recientes que utilizan nuevas
tecnologías.
c) Deberían censurarse los anuncios publicitarios de
meriendas saludables para mejores resultados orales en
niños.
d) b y c
15. Las sugerencias de las formas para mejorar la salud oral
comprenden
a) la expansión de prácticas médicas para incluir
materiales de salud oral.
b) cambios en la política que establece chequeos
dentales para inscribirse en la escuela.
c) colaboración de odontólogos geriátricos y
especialistas de la medicina, médicos generales y
especialistas en salud preventiva y pública.
d) Todas las anteriores
9. Se recomiendan las prótesis o coronas retenidas con
tornillos cuando
a) es alto el riesgo de retracción de encías.
b) es limitado el espacio vertical entre el hueso
Copyright 2007 Presidente y Miembros de la Universidad de Harvard. Todos los derechos reservados.
página 11
HOJ A D E R ESP U ESTAS
Y FOR M ULA RIO D E
INSC RIPCI ÓN D E
ED UC A CIÓN
C ON TIN UA
VOLUMEN 17 NO. 2
Nombre
Título
[Odontólogo, Especialidad (tipo), RDH, otros]
Dirección
Ciudad
Provincia/Estado
País
Código Postal
Teléfono de oficina (____) _____________
Correo electrónico
Adjunto se encuentran mis respuestas y pago de
$15 por medio de:
Cheque (US$ y CAN$ solamente)
Giro postal (US$ y CAN$ solamente)
Enviar las respuestas con el pago de $15,
pagadero a Harvard School of Dental
Medicine a:
Dr. Chester W. Douglass
Department of Oral Health Policy
Harvard School of Dental Medicine
188 Longwood Ave.
Boston, MA 02115 USA
E
)
R*,E+.-0P/2143.O5 6.72-9R8.19T/2E1.6.:;<D1+=8E19> ?.C6=-.34-@U+.A414I6D1+A?.8D?+.7BO?> ?4CD -=O
EFA.:@5 8.-8@R?=?A
/2-@> L
EL
R
P.O. Box 243, Yardley, PA 19067