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EL SECTOR AGROALIMENTARIO A TRAVÉS DE LAS TABLAS INPUT-OUPUT Belén Iráizoz Apezteguía Departamento de Economía Universidad Pública de Navarra El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Índice 1. Introducción 2. El marco input-output del SEC-95 2.1. La tabla de origen 2.2. La tabla de destino 2.3. La tabla simétrica 3. El complejo agroalimentario navarro en el contexto nacional 4. El complejo agroalimentario en la economía de Navarra 5. Estructura productiva del complejo agroalimentario 5.1. La oferta de productos agroalimentarios 5.2. La demanda de productos agroalimentarios 5.3. El comercio exterior de productos agroalimentarios 6. Articulación del complejo agroalimentario 6.1. Análisis de sensibilidad de los coeficientes 6.2. Ligazones específicas de oferta y demanda y coeficientes de Streit 6.3. Coeficientes de Chenery y Watanabe 6.4. Coeficientes de Rasmussen 7. Conclusiones Bibliografía Anexo -2 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output EL SECTOR AGROALIMENTARIO A TRAVÉS DE LAS TABLAS INPUT-OUPUT Belén Iráizoz Apezteguía Departamento de Economía Universidad Pública de Navarra 1. INTRODUCCIÓN Corresponde a Leontief (1936) la elaboración de la primera tabla input-output. Desde entonces, se elaboran tablas de forma periódica en muchos países y regiones 1, ya que representan uno de los instrumentos de análisis más importantes a la hora de diagnosticar el funcionamiento de una economía, facilitando el proceso de toma de decisiones de los gobiernos (Polo y Valle, 2002). En la actualidad, el análisis inputoutput constituye uno de los elementos mejor consolidados de la metodología de la economía aplicada (Fontela y Pulido, 1993). Las tablas forman parte del sistema de cuentas nacionales, y en la última versión del Sistema Europeo de Cuentas SEC-95, de obligado cumplimiento para los países miembros de la Unión Europea, su elaboración sigue nuevos criterios metodológicos que han obligado a los institutos de estadística nacionales y regionales a realizar un esfuerzo importante con el fin de adaptarse a la nueva normativa. Este es el caso que nos ocupa, puesto que el Instituto de Estadística de Navarra ha elaborado las tablas input-output correspondientes a la economía regional en el año 2000 (TION-00, en adelante) conforme a la metodología del SEC-95. Por otra parte, es conocida la importancia que el complejo de producción agroalimentaria tiene en la región. En este trabajo se pretende cuantificarla a partir de la información obtenida de dichas tablas. Este sector mantiene relaciones económicas, dentro y fuera de la región, y por tanto su crecimiento tiene un impacto sobre el resto de la economía. A partir de la información suministrada por las tablas también se van a evaluar estas relaciones. En el próximo apartado se presentan las principales características del nuevo marco input-output, para pasar a continuación al estudio del complejo agroalimentario 1 Una recopilación de los trabajos (se incluyen artículos, capítulos de libros, ponencias, comunicaciones a congresos, etc.) sobre tablas y análisis input-output en España se encuentra en Del Castillo y De la Grana (1993), que incluye más de 550 referencias. -3 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output de Navarra. Con este fin, en primer lugar, se enmarca su importancia relativa en el entorno nacional y regional. Una vez cuantificada su relevancia, se lleva a cabo un análisis desde el punto de vista de la oferta y de la demanda de productos agroalimentarios. A continuación se estudian, utilizando diferentes indicadores, las relaciones que se establecen entre las ramas del complejo y entre ellas y el resto de actividades. Finalmente, se presentan las conclusiones más relevantes del trabajo. 2. EL MARCO INPUT-OUTPUT EN EL SEC-95 En el sistema europeo de cuentas anteriormente vigente, el SEC-79 se construía solamente una tabla input-output, la tabla simétrica. La tabla input-output era un documento compuesto por tres matrices (consumos intermedios, demandas finales e inputs primarios) en las cuales las unidades productivas aparecían agrupadas en ramas de actividad. En esta tabla existía una correspondencia exacta entre las filas y las columnas. En el nuevo entorno normativo, el SEC-95, ya no cabe hablar de tabla inputoutput sino del marco input-output, dado que se deben elaborar diferentes tipos de tablas, entre las que se incluye también una tabla simétrica, la que se podría equiparar con la tabla elaborada conforme a la normativa anterior. La principal aportación del nuevo marco es la información adicional que aporta, aunque el cambio en la metodología utilizada en su elaboración dificulta la comparación con tablas anteriores. El nuevo marco pone de manifiesto la diferenciación entre los enfoques de productos y ramas de actividad no homogéneas por un lado, y productos (o ramas homogéneas) por otro. Dependiendo de enfoque utilizado, podemos hablar de diferentes tipos de tablas: a. Tablas de origen y de destino b. Tablas simétricas c. Tablas que relacionan las ramas de actividad con los sectores institucionales Hay que señalar que aparecen además otro grupo de tablas que permiten relacionar las tablas elaboradas con diferentes criterios de valoración, precios básicos y precios de adquisición. La diferencia entre ambos radica en la inclusión de los márgenes de distribución (comercio y transporte) y los impuestos netos sobre los productos. Además, igual que ocurría en el SEC-79, se puede diferenciar entre flujos interiores e importados, por lo que las tablas de destino y simétricas pueden presentarse de forma desagregada dependiendo del origen de los flujos. -4 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output A continuación, se exponen brevemente2 las principales características de las tablas de origen y destino y de las tablas simétricas en su nueva concepción. 2.1. La tabla de origen La tabla de origen ofrece información sobre la oferta por tipos de productos y por tipo de productor. Muestra los recursos a disposición de la economía, tanto de origen interior como importados. Por lo tanto, aparecen reflejadas dos variables fundamentales: la producción y las importaciones. La producción se recoge clasificada en función de dos parámetros. Por filas, aparece por tipo de producto (de acuerdo a la Clasificación Nacional de Productos por Actividades, CNPA 1996), y por columnas por ramas oferentes (de acuerdo a la Clasificación Nacional de Actividades Económicas, CNAE 1993). Esta matriz se elabora a precios básicos, es decir, sin incluir los impuestos netos sobre los productos ni los márgenes de distribución (comercio y transporte). De forma similar, las importaciones se presentan agrupadas por productos, mientras que en columnas la desagregación se realiza en función de la procedencia de las mismas (en el caso que nos ocupa, se consideran tres posibles procedencias: resto de España, Unión Europea y resto del mundo). Con el fin de que la valoración de las importaciones sea compatible con la de la producción, se valoran a precios CIF. Este requisito implica la necesidad de incluir filas con el fin de ajustar el valor de las importaciones por productos con el valor de las importaciones a nivel agregado, que se valoran a precios FOB y que deben incluir el consumo que los residentes en la región realizan fuera del territorio económico. La oferta total por productos, valorada a precios básicos, resulta de añadir las importaciones a la producción interior. La tabla de origen incluye también una serie de columnas con el fin de presentar la oferta por productos a precios de adquisición. Esto implica la inclusión de las columnas de los márgenes de distribución (comercio y transporte) y de los impuestos netos sobre los productos. Aunque el objetivo de esta tabla es presentar el origen de los productos, también permite realizar análisis sobre el comportamiento de las ramas de actividad, dado que aparece la producción elaborada por cada rama de actividad por tipos de productos, 2 Además de la publicación de Eurostat (1996) sobre el SEC-95, una exposición muy didáctica sobre las principales modificaciones que incorpora el sistema se puede encontrar en Guimbau (2003). -5 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output permitiéndonos estudiar en qué medida cada rama está especializada en la producción de unos u otros productos. De hecho, a partir de esta tabla se pueden derivar dos tipos de coeficientes (Cañada, 2001), dependiendo de la consideración de la información que se refleja en las filas o en las columnas. En cada fila se refleja para cada producto la cuantía que se produce en cada rama de actividad. A partir de esta información se pueden obtener los coeficientes de mercado, los cuales indican cuál es la participación de la rama j en la producción del producto i. Pueden interpretarse como una medida de la cuota de mercado de cada rama de actividad en cada producto (Tarancón, 2003). Estos coeficientes se calculan por tanto como la relación entre cada casilla de la tabla y la suma de la fila. Ahora bien, si se considera la información de las columnas, donde se refleja para cada rama de actividad los productos que elabora, se pueden derivar los denominados coeficientes de especialización. En este caso, cada coeficiente indica la importancia del producto i en la actividad productiva de la rama j, lo que permite analizar en qué medida las ramas se especializan en la producción de determinados productos. Se calculan como la relación entre cada casilla de la tabla y la suma de la columna. 2.2. La tabla de destino De la misma manera que la tabla de origen, la tabla de destino utiliza diferente clasificación en las filas y en las columnas. Por filas se incluyen los productos y por columnas las ramas de actividad no homogéneas. Esta tabla incluye información sobre la demanda por tipo de producto, así como sobre el valor añadido en cada rama de actividad no homogénea. Por tanto, refleja la estructura de producción por ramas de actividad. La suma de cada columna muestra el valor de la producción de cada rama, calculado como la suma de los consumos intermedios y la remuneración de los factores productivos primarios. Esta tabla muestra de forma simultánea los empleos de los productos en el sistema económico (demanda intermedia y final con sus diferentes componentes), y la estructura de costes de producción correspondiente a las diferentes ramas de actividad (consumos intermedios y valor añadido). Además, se suele elaborar utilizando dos criterios de valoración: precios básicos y precios de adquisición. A partir de la tabla de destino también se pueden derivar una serie de relaciones teóricas, una serie de coeficientes. Se trata de los tradicionales coeficientes técnicos y de -6 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output distribución, pero que hacen referencia a ramas de actividad no homogéneas y productos. Existen dos tipos de identidades entre las tablas de origen y destino, siempre y cuando los flujos estén valorados utilizando el mismo criterio. Si el sistema está en equilibrio, los totales por productos (filas) en las tablas de origen y destino deben ser idénticos, ya que nos indican la oferta total y la demanda total por productos. Es decir, la producción y las importaciones deben coincidir con la demanda intermedia más la demanda final (identidad por producto). Ahora bien, también se produce una igualdad entre los totales por columnas, que nos indican que la producción de cada rama de actividad (origen) debe ser igual a la suma de los consumos intermedios y el valor añadido (identidad por rama). 2.3. La tabla simétrica Las tablas de origen y destino se pueden obtener de forma directa a partir de las estadísticas económicas, mientras que la tabla simétrica es una tabla derivada de las anteriores, por lo que su dimensión viene condicionada por las dimensiones de las anteriores. Por regla general, las unidades que producen bienes y servicios realizan varias actividades simultáneamente, pudiendo ejercer una actividad principal y otras secundarias. Esta circunstancia impide la existencia de una correspondencia biunívoca perfecta entre las ramas de actividad y los productos. Las tablas de destino reflejan la función de producción o estructura de costes de cada rama de actividad, pero dicha estructura no puede atribuirse a un producto específico. Las unidades de producción homogéneas, que no son observables directamente en el mundo real, son las unidades más adecuadas para el análisis y estudio de las relaciones tecnológicas y los procesos de producción. Estas unidades se caracterizan por una actividad única que se identifica por los consumos intermedios, la tecnología de producción utilizada y los productos obtenidos. Son las que se utilizan para la elaboración de la tabla simétrica, una vez agregadas en lo que constituyen las ramas de actividad homogéneas. Estas últimas son ramas conceptuales y representan la estructura de costes de un tipo concreto de producto. La tabla simétrica ofrece una apariencia similar a la tabla de destino, aunque existen diferencias conceptúales importantes (Tarancón, 2003). Así, las columnas están -7 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output definidas por productos o ramas de actividad homogéneas, lo que implica que se representa la estructura de la producción por productos (y no por ramas). La matriz de consumos intermedios es, en este caso, una matriz cuadrada con el mismo número de filas que de columnas. Además, se incluyen en la parte inferior las importaciones, lo cual implica que el total de la columna es igual al total de la fila, para cada categoría de producto o rama de actividad homogénea. En la tabla simétrica se pretende presentar las ramas homogéneas, lo que supone una reasignación de las actividades secundarias3, tanto en cuanto a la producción como a los costes. Para ello, en primer lugar, se deben transferir los productos secundarios de la tabla de origen a las ramas de actividad en las que son productos principales. A continuación se deben reordenar las columnas de la tabla de destino, de forma que se pasen los consumos de las ramas de actividad a las ramas homogéneas, transferir los consumos asociados a los productos secundarios desde la rama de actividad donde se han producido realmente a la rama de actividad en la que constituyen productos principales. Se trata de obtener una estructura teórica de los costes de producción. Dado que, en general, las empresas no presentan una asignación exhaustiva de sus costes a los diferentes productos que elaboran, esta transferencia puede realizarse mediante información estadística adicional o mediante la realización de ciertas hipótesis. En el SEC-95 se recogen dos procedimientos de estimación de los coeficientes técnicos, procedimientos que difieren en la hipótesis en la que se basan. La hipótesis de tecnología de la rama de actividad o industria supone que la tecnología de elaboración de los productos secundarios no difiere de la de los demás productos principales elaborados en la rama, mientras que la hipótesis de tecnología del producto asume que los productos se elaboran con una tecnología característica, con independencia del tipo de unidad que los elabore. Para el SEC-95 ninguno de los dos métodos puede considerarse óptimo, por lo que recomienda la utilización conjunta de ambos. Finalmente, hay que agregar los productos detallados de la tabla de destino en ramas homogéneas, dando lugar a la tabla simétrica. La tabla simétrica es la que permite obtener las matrices de coeficientes técnicos y matrices de Leontief, que son la base para la elaboración de los modelos input-output. 3 Lo que en el sistema anterior se realizaba mediante la fila de transferencias y la diferenciación entre producción efectiva y producción distribuida. -8 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output 3. EL COMPLEJO AGROALIMENTARIO NAVARRO EN EL CONTEXTO NACIONAL El objetivo de este trabajo consiste en analizar la situación del sector agroalimentario en un entorno regional, la Comunidad Foral de Navarra, utilizando como base la información estadística suministrada por las TIO elaboradas para el año 2000. Pero conviene matizar qué se entiende por sector agroalimentario. El sistema agroalimentario incluye el conjunto de actividades que concurren a la formación y distribución de los productos alimentarios y en consecuencia, al cumplimiento de la función de la alimentación en una sociedad determinada (Malassis, 1979). Por lo que el sistema abarca desde la producción de inputs para la agricultura hasta su adquisición por el consumidor en un establecimiento comercial o de restauración, por lo que las diferentes empresas que participan lo hacen realizando diferentes tareas en el proceso. A los distintos participantes en ese conjunto de actividades se les puede agrupar en función de la actividad predominante que desarrollan en el conjunto del sistema. Así, se pueden distinguir básicamente cuatro subsectores: el sector primario que pone a disposición del mercado los productos agrarios, el de transformación que utilizando dichos productos elabora alimentos agroindustriales, el sector de distribución que pone a disposición del consumidor los alimentos, y las industrias auxiliares que suministran a todos ellos otros inputs intermedios y los bienes de equipo necesarios para el funcionamiento del mismo. Todo ello conforma el denominado sistema agroalimentario, pero dadas las dificultades para la obtención de información estadística correspondiente a alguno de estos subsectores, es habitual en la literatura4 centrar el análisis en los dos primeros subsectores, el sector primario y la industria de elaboración de alimentos y bebidas, lo que habitualmente se denomina como complejo agroalimentario (CAA, en adelante). Esta óptica es la que se ha adoptado en este trabajo. Antes de iniciar dicho análisis, conviene situar la importancia relativa de la región y el sector tomando como marco de referencia la economía nacional. Para ello, hubiera sido muy interesante disponer de tablas para el mismo período temporal referidas a los dos ámbitos espaciales. Sin embargo, la última tabla disponible para la economía nacional hace referencia a 1998. Ello nos ha obligado a acudir a otras fuentes de -9 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output información, en concreto, la Contabilidad Regional de España (INE, 2004). A partir de la misma se puede obtener el valor añadido bruto y el empleo por comunidades autónomas con cierto grado de desagregación por ramas de actividad. En el Cuadro 1 se reflejan los datos relativos al porcentaje de participación de la economía regional. Si analizamos dicha información, se observa que la economía navarra representa en torno al 1,7% del valor añadido bruto nacional, con una tendencia ligeramente creciente debido a las diferentes tasas de crecimiento que se han registrado en los dos ámbitos. La participación en el número de puestos de trabajo es ligeramente inferior. Por lo tanto, podemos señalar que se trata de una economía relativamente pequeña en el entorno nacional. Cuadro 1. Participación en el valor añadido bruto y empleo (1). Actividades Agricultura, ganadería y pesca Industria de la alimentación, bebidas y tabaco Complejo agroalimentario Total VAB 1995 1,96 2,64 2,24 1,70 Empleo 2000 1,91 2,65 2,19 1,73 1995 1,27 2,54 1,62 1,55 2000 1,59 2,46 1,83 1,53 Fuente: Contabilidad Regional de España y elaboración propia. (1) Las tasas de participación vienen expresadas en porcentaje de las magnitudes nacionales. Los cálculos sobre el valor añadido se han realizado sobre las magnitudes expresadas a precios constantes de 1995. Pero no todas las actividades participan de la misma manera en las macromagnitudes nacionales. El sector primario y la industria agroalimentaria presentan participaciones por encima de la media, por lo que el complejo agroalimentario navarro representa en torno al 2,20% del valor añadido nacional. También es superior a la media la participación en el empleo. Este es un primer indicio de que la economía regional presenta cierto grado de especialización en la producción agroalimentaria. Con el fin de profundizar en este aspecto, se han elaborado unos índices de especialización tomando como estructura productiva de referencia la existente a nivel nacional, utilizando como magnitud relevante el valor añadido bruto5. Para ello se han considerado las 24 ramas de actividad en que desagrega la actividad económica la contabilidad regional. Dichos índices se han calculado de acuerdo a la siguiente expresión: 4 Véase, entre otros, De la Grana y Azaceta (1990), Pérez y Feijoo (1993), Artis et al. (1994), Enciso y Sabaté (1995, a y b), Titos (1995), De Pablo y Céspedes (1996), García y Enguídanos (1999) y Santamaría et al. (1999). 5 Los índices de especialización se han calculado utilizando otras variables, pero las conclusiones que se obtienen no difieren de forma significativa, por lo que se ha decidido no incluirlos -10 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output VAB VAB i,N i,N i * 100 IE i VAB VAB i ,E i ,E i donde VAB i , j hace referencia al valor añadido bruto en la rama de actividad i en el entorno espacial j (Navarra o España6) y VAB i, j es la correspondiente magnitud para i el conjunto de la economía en cada entorno j. El índice de especialización en cada rama de actividad i va a venir determinado por la participación relativa en el valor añadido en Navarra y en el resto de España. Cuadro 2. Grado de especialización de la economía regional en 2000 (1). Rama de actividad 1Agricultura, ganadería y pesca 2Alimentación, bebidas y tabaco Complejo agroalimentario 3Textil, confección, cuero y calzado 4Madera y corcho 5Papel; edición y artes gráficas 6Industria química 7Caucho y plástico 8Otros productos minerales no metálicos 9Metalurgia y productos metálicos 10Maquinaria y equipo mecánico 11Equipo eléctrico, electrónico y óptico 12Fabricación de material de transporte 13Industrias manufactureras diversas 14Extracción productos energéticos, otros minerales y refino petróleo 15Energía eléctrica, gas y agua 16Construcción 17Comercio y reparación 18Hostelería 19Transportes y comunicaciones 20Intermediación financiera 21Inmobiliarias y servicios empresariales 22Educación y sanidad de mercado 23Otras actividades sociales y otros servicios de mercado 24Servicios de no mercado Índice de especialización 110,4 154,4 127,3 51,8 127,5 194,7 69,2 117,4 143,2 207,4 308,9 145,0 345,9 131,3 53,0 46,4 87,1 68,5 70,8 92,7 90,7 75,4 111,8 73,0 91,7 Índice de variación 95,9 98,6 96,4 98,6 97,5 98,5 98,9 98,3 98,4 98,3 98,9 99,4 98,6 98,3 106,6 98,8 99,3 89,4 97,7 100,7 99,0 103,0 95,3 104,8 103,1 Fuente: Contabilidad Regional de España y elaboración propia. (1) El índice de variación del índice de especialización asigna el valor 100 al índice de especialización en 1995. Dicho índice hace referencia al último año contemplado, pero con el fin de poner en evidencia posibles cambios ocurridos a lo largo del período analizado, también se incluye un índice de variación calculado tomando como referencia el índice de especialización en el año 1995. -11 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Del análisis de dicho cuadro se deriva la caracterización de la estructura productiva regional respecto al resto de España. La Comunidad presenta cierto grado de especialización en las actividades primarias y en la mayoría de las actividades industriales. Sin embargo, en las ramas del sector servicios el porcentaje de participación en el valor añadido es inferior en la Comunidad que en el resto del Estado, con la excepción de las actividades de educación y sanidad de mercado. En el período considerado y para la mayoría de las ramas de actividad en las que la región presenta cierto grado de especialización, se observa una disminución en el índice. Sin embargo, en aquellas actividades en las que el grado de especialización es menor, se ha producido un aumento del índice. Este resultado implica que se ha producido cierta convergencia entre las estructuras productivas regional y nacional. En lo que respecta al CAA, considerando conjuntamente las actividades primarias y de transformación, la región presenta un nivel de especialización elevado, aunque se produce una mayor especialización en las actividades de transformación, como ya se había comentado anteriormente. La industria de alimentación y bebidas participa en la generación del valor añadido regional en un porcentaje superior en un 54% al de su homónima nacional. En el período analizado se ha producido cierta disminución de la especialización regional. Por lo tanto, podemos señalar que el complejo agroalimentario navarro no tiene una gran relevancia a nivel nacional, dado el escaso tamaño relativo de la economía de Navarra. Ahora bien, la región presenta un elevado grado de especialización en las actividades agroalimentarias. Por lo tanto, el complejo agroalimentario debe tener a nivel regional cierta importancia relativa que vamos a pasar a determinar a continuación, haciendo uso de la información suministrada por las tablas input-output. 4. EL COMPLEJO AGROALIMENTARIO EN LA ECONOMÍA DE NAVARRA En las TION-00 se utiliza para clasificar a las unidades productivas la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE-93) y para clasificar los productos, la correspondiente Clasificación Nacional de Productos por Actividades (CNPA-96). Existe una correspondencia entre ellas, al menos hasta el cuarto dígito de ambas nomenclaturas. 6 Con el fin de considerar las diferencias entre Navarra y el resto de la economía nacional, de las magnitudes nacionales se han deducido los valores regionales. Las diferencias se minusvaloran si en el dato agregado se incluyen los de la propia región (Fernández y Fernández, 2000). -12 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Antes de iniciar el estudio de este sector de la economía regional resulta necesario concretar qué actividades y productos, de entre los incluidos en las TION-00, se van a considerar como integrantes del mismo. Según lo señalado anteriormente, el CAA incluye el conjunto de actividades formado por la producción primaria y por las industrias transformadoras de alimentos. Por lo tanto, en las TION-00 viene representado por las siguientes ramas de actividad: 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asociados 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco La primera rama hace referencia al sector primario de la economía, mientras que las otras 5 son las componentes del grupo denominado Industria Agroalimentaria (IAA, en adelante). Pero como se ha señalado, existe otra perspectiva de análisis igualmente importante en el nuevo marco input-output, la relativa a los productos. En nuestro caso, se consideran productos (bienes y servicios) agroalimentarios a los siguientes: 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 3. Servicios agrícolas y ganaderos 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos de la pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas preparadas y en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceite vegetales y animales 17. Alimentos preparados para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado7 Definidas las ramas y productos que se consideran dentro del ámbito de análisis, es interesante poner de manifiesto la importancia relativa que en el entorno regional tiene el sector agroalimentario. En el Cuadro 3 se reflejan los valores de las principales macromagnitudes, así como su participación porcentual en la economía de Navarra. 7 Este producto se incluye puesto que es uno de los elaborados por la rama de actividad industrias de bebidas y tabaco, aunque no existe en la región ninguna empresa que se dedique a tal actividad, y por lo tanto, todo el tabaco manufacturado procede de importaciones. -13 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Al analizar dicha información se observa que en el año 2000 el CAA representa en torno al 10% de la economía regional, aunque con una participación algo inferior en la generación de valor añadido, lo cual nos indica que se trata de actividades que incorporan poco valor añadido a los consumos intermedios. La distribución de la participación entre el sector primario y la IAA depende de la variable analizada. La IAA contribuye con mayores porcentajes en la producción y las operaciones comerciales con el exterior. En cuanto al valor añadido y el empleo, es el sector primario el que presenta una mayor participación. Cuadro 3. El complejo agroalimentario en la economía navarra en el año 2000. VAB Producción Importaciones Exportaciones Empleo S. Primario % Economía Valor (1) regional 416.988 4,27 684.672 3,00 357.247 4,05 185.173 2,04 16.246 6,53 IAA % Economía Valor (1) regional 357.021 3,65 1.548.567 6,79 739.690 8,39 1.194.204 13,18 9.985 4,02 CAA % Economía Valor (1) regional 774.009 7,92 2.233.239 9,79 1.096.938 12,45 1.379.378 15,22 26.231 10,55 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Las magnitudes vienen expresadas en miles de euros corrientes, excepto el empleo que hace referencia a número de personas ocupadas. Merece la pena destacar la elevada participación del CAA en las exportaciones regionales, participación que se debe sobre todo a la vocación exportadora de la IAA. No obstante, también son relevantes a nivel regional las importaciones de productos agroalimentarios, que superan el 12% de las importaciones regionales. Por lo tanto, el sector tiene cierta relevancia en el entorno económico regional, aunque con una tendencia marcadamente decreciente. Para contrastar este hecho se van a utilizar las sucesivas tablas input-output disponibles para la economía de Navarra, en concreto las relativas a la economía regional en 1980, 1995 y 2000. En el gráfico 1, donde se han representado los porcentajes de participación en la economía regional para cada una de las macromagnitudes consideradas, se observa claramente dicha tendencia, sobre todo en el caso del valor de la producción. Respecto a las operaciones comerciales con el exterior, la participación en las exportaciones regionales ha sufrido una disminución sensiblemente superior a la de las importaciones. Conocida la importancia del conjunto del sector, cabe plantearse qué actividades pertenecientes al propio complejo son más relevantes. Dada la doble perspectiva que ofrece la TIO, productos y ramas, el análisis se va a realizar utilizando los dos enfoques. En el Cuadro 4 aparecen reflejados los valores de la producción por tipo de producto. En el Cuadro 5 se reflejan los valores de las producciones elaboradas en las ramas -14 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output agroalimentarias. También se incluyen los porcentajes de participación en la producción regional y en la del propio CAA. Gráfico 1. Participación del sector agroalimentario en las magnitudes regionales. 25 20 15 10 5 0 VAB Producción Importaciones 1980 1995 Exportaciones Empleo 2000 Fuente: TION-80, TION-95, TION-00 y elaboración propia. En cuanto al volumen de producción, los productos más importantes son los procedentes del sector primario, productos agrícolas y de la ganadería, y las frutas y hortalizas en conserva, con participaciones superiores al 1,25% en la producción regional. Conjuntamente representan casi el 50% de la producción agroalimentaria regional. Cuadro 4. Productos agroalimentarios (1). PRODUCTOS 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 3. Servicios agrícolas y ganaderos 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos de la pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado Complejo agroalimentario Producción 371.778 289.509 11.654 13.063 3.125 252.665 447.381 79.075 34.602 127.792 275.997 255.343 66.033 0 2.233.239 % economía regional 1,63 1,27 0,05 0,06 0,01 1,11 1,96 0,35 0,15 0,56 1,21 1,12 0,29 0 9,79 % CAA 16,69 12,99 0,52 0,59 0,14 11,34 20,08 3,55 1,55 5,74 12,39 11,46 2,96 0 100 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) La producción viene expresada en miles de euros. Tampoco es despreciable la participación de la carne y los productos cárnicos, los otros productos alimenticios y las bebidas alcohólicas, productos todos ellos con una participación superior al 10% en el CAA regional. El resto de productos presentan participaciones mucho más reducidas, siendo casi despreciables en el caso de los servicios agrícolas y ganaderos, la selvicultura, el -15 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output pescado y el tabaco manufacturado, productos que participan con menos de un 1% en la producción agroalimentaria de Navarra, o que incluso no son producidos en el entorno regional, como es el caso del tabaco manufacturado. En cuanto a la participación de las ramas de actividad en el entorno regional, los resultados indican que la rama más importante es la que representa al sector primario, que elabora un 3% de la producción regional, seguida en orden de importancia por la rama de conservas vegetales, con una participación superior al 2%. Estas son las ramas que elaboran los productos que habíamos señalado como más importantes, desde un punto de vista cuantitativo, y de hecho, entre ambas alcanzan una participación superior al 50% en la producción agroalimentaria, como ocurría al analizar los productos. Son las industrias cárnicas y lácteas las que tienen un peso relativo más bajo, inferior al 1% en el entorno regional e inferior al 10% de la producción agroalimentaria. Cuadro 5. Ramas agroalimentarias RAMAS Producción 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asoc. 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco Complejo agroalimentario 684.672 217.232 474.220 86.382 404.078 366.655 2.233.239 % de la economía regional 3,00 0,95 2,08 0,38 1,77 1,61 9,79 % CAA 30,66 9,73 21,23 3,87 18,09 16,42 100 Fuente: TION-00 y elaboración propia. Estas cifras ofrecen una panorámica general sobre la participación de los componentes del complejo agroalimentario, desde el punto de vista de los productos y las ramas de actividad. A continuación, se trata de analizar con cierto detenimiento las ratios estructurales que caracterizan el sector. 5. ESTRUCTURA PRODUCTIVA DEL COMPLEJO AGROALIMENTARIO 5.1. La oferta de productos agroalimentarios A partir de la información suministrada en la tabla de origen se obtiene para cada tipo de producto la oferta total, pudiendo diferenciar en función de su procedencia. El valor, a precios de adquisición, de la oferta de productos agroalimentarios se refleja en el Cuadro 6. En primer lugar, se puede analizar la diferente procedencia de los productos agroalimentarios. Para ello, el análisis se centra en el porcentaje que la producción interior y las importaciones representan en la oferta total. En la mayoría de los casos, la -16 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output producción interior alcanza porcentajes superiores al 50% de la oferta, mientras que las importaciones se sitúan en torno al 30%. Existen algunas excepciones notables, como por ejemplo el elevado grado de autoabastecimiento (superior a la media) que se observa para los productos de la ganadería, las frutas y conservas vegetales y las bebidas. Hay dos productos, ya mencionados anteriormente, para los cuales la relevancia de la producción regional es nula o casi nula; se trata del tabaco manufacturado y de los productos de la pesca. Cuadro 6. Oferta de productos agroalimentarios y su distribución por componentes (1). PRODUCTOS 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 3. Servicios agrícolas y ganaderos 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos de la pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado Complejo agroalimentario TOTAL (sin servicios) OFERTA 714.715 346.952 10.312 59.384 68.403 463.694 626.042 183.721 79.419 210.164 544.027 389.206 97.099 104.526 3.897.664 22.014.145 Producción Importac. 52,02 83,44 113,01 22,00 4,57 54,49 71,46 43,04 43,57 60,81 50,73 65,61 68,01 0,00 57,16 55,35 32,75 15,91 0 53,19 53,25 27,88 22,67 34,16 47,39 34,60 33,97 18,89 14,97 21,56 28,14 35,07 Márgenes de distribución 23,42 4,31 0 25,52 38,04 15,47 5,85 21,64 17,26 5,52 12,83 10,20 15,52 11,12 13,68 7,08 Impuestos netos sobre los productos -8,19 -3,66 -13,01 -0,70 4,15 2,16 0,02 1,16 -8,22 -0,92 2,47 5,30 1,50 67,33 1,02 2,50 (1) La oferta valorada a precios de adquisición viene expresada en miles de Euros, mientras todas las demás magnitudes se expresan en porcentaje de la misma. Fuente: TION-00 y elaboración propia. La comparación de la producción valorada de acuerdo a los dos criterios también permite analizar las diferencias en cuanto al peso relativo que tienen los márgenes de distribución y los impuestos netos sobre los productos. Si tomamos como referencia la media regional (excluyendo los servicios para hacer los cálculos porcentuales), observamos que hay productos que soportan unos márgenes de distribución muy superiores, como por ejemplo los productos de la pesca, forestales y agrícolas. En cuanto a los impuestos netos sobre los productos, en muchas ocasiones las cifras tienen signo negativo, indicando que se trata de productos que por término medio y en términos netos reciben subvenciones a los productos. No obstante lo anterior, destaca el importante porcentaje que representan los impuestos sobre los productos en el valor de adquisición de las bebidas alcohólicas (al margen del tabaco, que por sus peculiares características soporta un impuesto que casi representa el 70% del valor a precios de adquisición). -17 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Puesto que en la tabla de origen se indica la procedencia de los productos por ramas de actividad, podemos deducir qué porcentaje de la producción interior de cada producto se realiza en las ramas que hemos considerado agroalimentarias o en la rama concreta de actividad en la que son productos principales. Para realizar estos cálculos se utilizan los denominados coeficientes de mercado, que como se ha señalado anteriormente, reflejan el porcentaje de participación de la rama j en la producción interior del producto i. Estos porcentajes se reflejan en el Cuadro 7. Cuadro 7. Porcentaje de los productos agroalimentarios elaborados en el CAA. PRODUCTOS % producido en la rama 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 3. Servicios agrícolas y ganaderos 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos de la pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado 99,97 99,79 31,01 21,00 100 82,30 99,35 99,15 98,85 98,71 79,98 98,70 96,73 0 % producido en las ramas agroalimentarias 99,97 100 31,01 21,00 100 88,76 100 99,86 99,64 99,44 97,95 99,68 99,88 0 Fuente: TION-00 y elaboración propia. En general, más del 80% de la producción de los productos y servicios agroalimentarios se realiza en el seno de la rama agroalimentaria en la que son productos principales, y se supera el 90% si se considera el conjunto de ramas agroalimentarias. Aunque cabe mencionar algunos casos particulares. Así, en el caso de los servicios agrícolas y ganaderos y de la selvicultura y explotación forestal existe una rama, la de administraciones públicas, que produce el 64,4% y el 79,0% de la producción regional. Las tablas de origen y destino permiten utilizar otra óptica de análisis, que se centra en el estudio de la oferta por productores, por ramas de actividad. Así, un aspecto susceptible de ser analizado es el que hace referencia al grado de especialización de las ramas de actividad, medido como el porcentaje de producción de cada rama que se corresponde con su producción característica. Se trata de utilizar los denominados coeficientes de especialización. Los resultados obtenidos (Cuadro 8) muestran un elevado grado de especialización de todas las ramas agroalimentarias, dado que más del 90% de su producción se corresponde con la producción característica de cada rama. -18 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output También se podría considerar la especialización en la producción agroalimentaria, en todo tipo de productos y servicios agroalimentarios. Los resultados son similares y muestran una gran especialización de las ramas agroalimentarias en la producción agroalimentaria, dado que los coeficientes obtenidos son superiores al 95%, con la excepción de la rama de conservas vegetales (en la que un 5% de su producción corresponde a comercio al por mayor). Cuadro 8. Nivel de especialización de las ramas agroalimentarias RAMAS 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios as, 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco Complejo agroalimentario % de producción de cada rama 97,86 95,73 93,73 90,76 94,31 86,15 93,94 % de producción que corresponde a productos agroalimentarios 98,71 98,85 94,19 96,69 98,26 97,06 97,33 Fuente: TION-00 y elaboración propia. A partir de la tabla de destino se pueden derivar la producción y los valores añadidos por las diferentes ramas de actividad, detrayendo de la producción el importe de los consumos intermedios utilizados. En el Cuadro 9 se presenta dicha información. En función del valor añadido generado destaca el papel del sector primario que representa más del 4% del valor añadido regional y más del 50% del valor añadido del CAA. También son importantes a este respecto las ramas de conservas vegetales y las de elaboración de bebidas, con participaciones superiores al 1% del valor añadido regional. Cuadro 9. Valor añadido bruto. RAMAS VAB (1) VAB (2) VAB (3) 53,87 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asociados 416.988 4,27 4,13 5. Industria cárnica 32.003 0,33 14,19 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 109.832 1,12 1,69 7. Industrias lácteas 13.057 0,13 11,64 8. Otras industrias alimenticias 90.083 0,92 14,48 9. Elaboración de bebidas y tabaco 112.045 1,15 100 Complejo agroalimentario 774.009 7,92 100 TOTAL 9.769.946 VAB (4) 60,9 14,7 23,2 15,1 22,3 30,6 34,7 42,8 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Magnitud expresada en miles de Euros. (2) Magnitud expresada como porcentaje del valor añadido regional. (3) Magnitud expresada como porcentaje del valor añadido del CAA. (4) Magnitud expresada en porcentaje de la producción de cada rama. La proporción de valor añadido en la producción de cada rama puede entenderse como un indicador del grado de transformación que realiza en los consumos intermedios. En este sentido, parece que las ramas con mayor grado de elaboración y -19 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output por lo tanto con una incorporación mayor de tecnología a los procesos productivos serían las industrias de bebidas y las conservas vegetales. Mención aparte merece el sector primario, dado que aunque tradicionalmente se ha caracterizado por un uso escaso de consumos intermedios, el proceso de modernización ha supuesto un crecimiento de la dependencia del sector del uso de consumos intermedios (Abad, 1997 y Colino, 2001). A partir de esta magnitud, el valor añadido, se puede obtener un indicador de la productividad del trabajo, que posteriormente se puede comparar con la remuneración de asalariados unitaria. Esta última se ha calculado sobre el número de puestos de trabajo equivalentes totales y sobre el número de puestos de trabajo asalariados. Se trata de corregir el problema que surge porque una parte de la remuneración del factor trabajo se refleja como excedente bruto de explotación, donde se incluyen las rentas mixtas, situación especialmente importante en el sector agrario donde el porcentaje de asalariados no llega al 9% del total de puestos de trabajo. Todo ello se refleja en el Cuadro 10. Cuadro 10. Productividad y remuneración de asalariados unitaria (1). RAMAS 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco Complejo agroalimentario TOTAL Productividad RA/PTE RA/PTEASA % asalariados 27.725 1.614 18.879 8,55 26.844 20.634 21.877 94,32 26.457 17.871 18.227 98,04 33.479 20.181 20.181 100 36.289 20.484 22.104 92,67 73.707 29.073 29.327 99,13 31.240 9.120 21.163 43,09 41.362 21.541 26.232 82,12 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Magnitudes expresadas en Euros, RA/PTE= Remuneración de asalariados / puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, RA/PTEASA= Remuneración de asalariados / puestos de trabajo asalariados equivalentes a tiempo completo. La productividad del trabajo es una variable económica muy importante cuando se valora la competitividad, y en ocasiones (Baldwin, 1992) se ha utilizado como variable proxy de la eficiencia, entendiéndose que un sector es más eficiente cuando genera mayor cantidad de producto por unidad de factor. La productividad media de las ramas agroalimentarias supera los 31.000 euros, siendo muy inferior a la media regional, que supera los 41.000 euros. Ahora bien, las diferencias de productividad entre las ramas son muy elevadas. A este respecto destaca el caso de las industrias de elaboración de bebidas, rama en la cual la ratio casi dobla la media regional. El resto de ramas se sitúan por debajo, aunque podríamos situar a las -20 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output industrias lácteas y a las otras industrias de alimentación en un segundo escalón, y finalmente estarían las demás, con productividades muy alejadas de la media regional. Con el fin de relativizar estas magnitudes, se ha calculado la productividad del trabajo de las ramas agroalimentarias a partir de las tablas input-output de España para 1998, las últimas disponibles. Para que las magnitudes sean comparables, se han actualizado los resultados obtenidos a nivel nacional utilizando el deflactor implícito del PIB. La media española se sitúa en 36.088 euros por puesto de trabajo equivalente, inferior a la media navarra. Algo similar ocurre con las ramas del complejo, puesto que para todas aquellas en las que es posible calcular la ratio a nivel nacional, los resultados indican una productividad inferior a la obtenida a nivel regional. No obstante, se debe exceptuar el caso de las industrias lácteas que a nivel nacional obtienen una productividad del trabajo que representa 1,3 veces la alcanzada a nivel regional. En todo caso, se observa que la productividad de las actividades del complejo a nivel estatal es también inferior a la media del conjunto de la actividad económica (en torno al 70%). Esta menor productividad de la industria agroalimentaria está influida por el tipo de proceso al que se somete a las materias primas, con un escaso valor añadido en el producto final. Este bajo valor añadido también se debe a las dificultades de las industrias para incorporar mejoras tecnológicas, lo que en parte se explica por la reducida dimensión de las empresas del sector (MAPYA, 2003). Gráfico 2. Productividad y remuneración de asalariados unitaria. 80,000 60,000 40,000 20,000 0 1.Agricult. 5.I. cárn. 6.I. veget. 7.I. láctea Productividad 8.Otras RA/PTE 9.I. beb. CAA TOTAL RA/PTEASA Respecto a la remuneración de asalariados, mantiene cierta proporción con la productividad del trabajo, sobre todo si la calculamos sobre el número de puestos de trabajo asalariados equivalentes, como se puede observar en el Gráfico 2. La rama que presenta mayores salarios es la de bebidas, mientras que la mano de obra peor remunerada es la empleada en las industrias de conservas vegetales. En todo caso, se -21 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output observa nuevamente que las ramas del complejo obtienen valores inferiores a la media regional. 5.2. La demanda de productos agroalimentarios El análisis de la tabla de destino permite realizar una análisis pormenorizado sobre el uso que se hace de los bienes y servicios a disposición de una economía. El Cuadro 11 ofrece una serie de indicadores relativos a los diferentes empleos de los productos agroalimentarios en la economía regional. Tomando como referencia la media regional, según la cual la producción se distribuye entre un 40% para producir otros bienes y servicios y un 60% para satisfacer la demanda final, el complejo agroalimentario tiene una orientación mayor hacia los destinos finales, dado que como media el 63% de la producción se utiliza para satisfacer necesidades finales. Además, las producciones del complejo tienen una vocación exportadora superior a la media, dado que se exporta el 35% de los productos agroalimentarios, mientras que la media regional es del 28%. Las características de la producción agroalimentaria explican por sí mismas el reducido porcentaje que se destina a formación bruta de capital. Cuadro 11. Destinos de los productos agroalimentarios. PRODUCTOS 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 3. Servicios agrícolas y ganaderos 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado Complejo agroalimentario TOTAL Empleos Demanda Demanda Consumo FBK Totales Intermedia Final Final 714.715 66,6 33,4 23,7 2,8 346.952 54,2 45,8 2,9 5,1 10.312 85,8 14,2 13,7 0,6 59.384 90,7 9,3 5,0 0,0 68.403 27,0 73,0 68,7 0,0 463.694 22,3 77,7 44,4 0,5 626.042 28,2 71,8 5,3 1,2 183.721 24,1 75,9 51,0 0,3 79.419 36,0 64,0 37,9 0,1 210.164 45,1 54,9 1,1 0,0 544.027 11,6 88,4 45,0 0,1 389.206 35,2 64,8 13,3 0,1 97.099 55,6 44,4 25,3 0,0 104.526 0,0 100,0 100,0 0,0 3.897.664 37,1 62,9 26,2 1,3 32.473.204 40,2 59,8 23,0 8,9 Exportac. 6,8 37,8 0,0 4,3 4,3 32,8 65,3 24,6 26,0 53,8 43,3 51,4 19,1 0,0 35,4 27,9 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Los empleos totales valorados a precios de adquisición vienen expresados en miles de Euros, mientras todas las demás magnitudes se expresan en porcentaje de los mismos. Ahora bien, existen unas disparidades muy importantes entre los productos agroalimentarios. Así, los productos elaborados en el sector primario (1-5) se utilizan mayoritariamente para la producción de otros productos, como materias primas en otros procesos productivos. Sin embargo, la producción característica de las ramas pertenecientes a la industria agroalimentaria tiene sobre todo un uso final, bien como -22 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output consumo final, bien como exportaciones. No obstante lo anterior, también existe cierta heterogeneidad entre las producciones industriales, entre las que existen algunas con mayor orientación intermedia, como por ejemplo los alimentos para animales, que se utilizan bien como un consumo intermedio en el sector agrario regional o se exportan. 5.3. El comercio exterior de productos agroalimentarios Finalmente, en el análisis de la estructura productiva del sector, conviene mencionar las relaciones de compraventa con el exterior, en tanto en cuanto nos informan de la capacidad regional para vender los productos en el exterior, así como de la dependencia que se tiene de productos elaborados en otras regiones para satisfacer las necesidades regionales. En los Cuadros 12 y 13 se incluyen los valores de importaciones y exportaciones. Ambas magnitudes se han relativizado utilizando la producción regional, con el fin de disponer de una medida comparable de la dependencia y la apertura exterior. Cuadro12. Importaciones de productos agroalimentarios (1) PRODUCTOS 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado Complejo Agroalimentario Total Valor % CAA % producción 234.052 55.189 31.584 36.422 129.275 141.932 62.765 37.637 72.714 184.798 73.502 14.538 22.531 1.096.938 8.811.537 21,34 5,03 2,88 3,32 11,79 12,94 5,72 3,43 6,63 16,85 6,70 1,33 2,05 100 62,95 19,06 241,79 1165,49 51,16 31,72 79,37 108,77 56,90 66,96 28,79 22,02 : 49,23 38,61 Procedencia (%) Esp. UE RM 85,04 12,43 2,53 79,92 15,64 4,43 46,39 48,84 4,77 38,50 40,18 21,32 89,23 9,01 1,76 24,91 32,67 42,42 90,16 9,41 0,44 75,68 11,12 13,20 98,03 1,97 0,00 73,05 19,86 7,09 54,39 45,53 0,08 99,19 0,81 0,00 99,98 0,00 0,02 72,09 18,93 8,98 67,16 25,67 7,17 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) No se incluyen los servicios agrícolas y ganaderos puesto que los intercambios con el exterior son insignificantes. En términos absolutos, las importaciones de productos agroalimentarios más importantes son los productos agrícolas, los otros productos alimenticios, las frutas y hortalizas en conserva y la carne y productos cárnicos. Estos productos representan más del 60% de las importaciones agroalimentarias. En términos relativos representan casi el 50% de la producción regional, una penetración algo superior a la media regional que no llega al 40%. Sin embargo, también se observan comportamientos diferentes dentro del propio CAA, dependiendo del tipo de producto. En algunos casos, las importaciones representan más del 100% de -23 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output la producción regional, como es el caso de los productos pesqueros, los forestales y las grasas y aceites. En otras ocasiones, la dependencia es mucho menor, no representando las importaciones ni el 50% de la producción regional. En esta situación se encontrarían los productos de la ganadería, las bebidas y las conservas vegetales, producciones con cierta relevancia en el ámbito regional. Cuadro13. Exportaciones de Navarra (1) PRODUCTOS 1. Productos agrícolas 2. Productos de la ganadería 4. Selvicultura y explotación forestal 5. Pescado y otros productos pesca 13. Carne y productos cárnicos 14. Frutas y hortalizas en conserva 15. Productos lácteos y helados 16. Grasas y aceites 17. Alimentos para animales 18. Otros productos alimenticios 19. Bebidas alcohólicas 20. Bebidas no alcohólicas 21. Tabaco manufacturado Complejo Agroalimentario Total Valor 48.352 128.212 2.450 2.833 149.649 395.947 45.287 20.060 108.657 229.278 194.735 17.896 1.343.355 9.062.364 % CAA % producción 3,51 9,52 0,19 0,21 11,04 29,65 3,27 1,50 8,19 17,08 14,51 1,35 0,00 100 13,01 44,29 18,75 90,64 59,23 88,50 57,27 57,97 85,03 83,07 76,26 27,10 60,29 39,71 Destino (%) Esp. UE RM 59,53 31,17 9,30 78,25 21,70 0,05 0,00 85,99 14,01 0,00 97,97 2,03 92,63 7,21 0,16 67,20 27,47 5,33 95,46 4,01 0,54 95,05 4,64 0,31 99,31 0,55 0,14 87,28 10,96 1,76 72,27 19,67 8,05 62,35 37,35 0,30 78,59 17,94 3,47 46,82 42,19 10,98 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) No se incluyen los servicios agrícolas y ganaderos puesto que los intercambios con el exterior son insignificantes. Los productos que se exportan en mayor cuantía son las frutas y hortalizas en conserva que representan el 30% de las exportaciones agroalimentarias regionales. También destacan los otros productos alimenticios y las bebidas alcohólicas. Además, la vocación exportadora del CAA también es superior a la media regional. Así, las exportaciones de productos agroalimentarios representan el 60% de la producción regional, mientras que para el conjunto de productos la cifra no alcanza el 40%. Esta elevada participación de las exportaciones se observa en la mayoría de los productos agroalimentarios, con la excepción de las producciones primarias que de forma mayoritaria son utilizadas en el interior de la región. A la vista de la información anterior se puede deducir el saldo comercial para cada producto. Este saldo se refleja en el Cuadro 14, donde se incluye además el saldo obtenido para diferentes ámbitos espaciales (resto de España, Unión Europea y resto del mundo), expresado como porcentaje del saldo total. Se trata de analizar, para cada tipo de producto, con qué ámbitos espaciales se genera déficit o superávit comercial. El saldo comercial positivo que presenta el complejo agroalimentario casi coincide en cuantía con el saldo positivo de la economía de Navarra, aunque ambos -24 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output difieren en cuanto al origen espacial. Así, el conjunto regional tiene un saldo negativo con el resto del Estado y, casi por el mismo importe, positivo frente a otros países de la Unión Europea, mostrando una capacidad importante para competir con otros países europeos y con el resto del mundo, frente a quien también presenta un saldo positivo relativamente importante. Los productos incluidos en el complejo agroalimentario presentan conjuntamente un saldo positivo, saldo que básicamente se obtiene frente al resto del Estado. La situación frente a los otros países de la Unión Europea muestra un saldo positivo, aunque de mucho menor cuantía, y frente a los demás países, existe cierto déficit comercial de productos alimentarios. Cuadro 14. Saldo comercial (1) Productos Productos agrícolas Productos de la ganadería Selvicultura y explotación forestal Pescado y otros productos de la pesca Carne y productos cárnicos Frutas y hortalizas en conserva Productos lácteos y helados Grasas y aceite vegetales y animales Alimentos preparados para animales Otros productos alimenticios Bebidas alcohólicas Bebidas no alcohólicas Tabaco manufacturado Complejo agroalimentario Total Saldo total Saldo España Valor % Producción -185.700 -49,9 91,7 73.023 25,2 77,2 -29.135 -223,0 50,3 -33.589 -1.074,8 41,7 20.374 8,1 114,8 254.015 56,8 91,7 -17.479 -22,1 76,2 -17.577 -50,8 53,5 35.943 28,1 102,0 44.480 16,1 147,7 121.233 47,5 84,2 3.358 5,1 -95,9 -22.531 0,0 100,0 246.418 11,1 109,4 250.826 1,1 -667,7 Saldo UE Saldo RM 7,6 26,0 45,7 35,3 -4,7 24,5 23,5 18,6 -2,3 -26,4 4,0 194,4 0,0 13,2 622,8 0,8 -3,3 4,1 23,0 -10,2 -16,1 0,3 27,9 0,4 -21,3 11,8 1,5 0,0 -22,6 144,9 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) El saldo total viene expresado en miles de Euros. Las demás magnitudes se expresan como porcentaje del saldo total. Analizando el comportamiento de los diferentes productos, el saldo para cada uno de ellos se explica sobre todo por las operaciones comerciales con España, dado que es el saldo frente a este espacio el que representa en todas las ocasiones el porcentaje más elevado. En segundo lugar de importancia se sitúan las operaciones con otros países del ámbito europeo, quedando por último las operaciones con otros países. A pesar de ello, el comportamiento difiere sensiblemente en cuanto al volumen del saldo comercial, tanto en términos absolutos como en términos relativos. En cuanto a la magnitud, destacan el saldo negativo para los productos agrícolas y el saldo positivo para las conservas de frutas y hortalizas y las bebidas alcohólicas, las dos ramas industriales con mayor proyección en otros mercados. 6. ARTICULACIÓN DEL COMPLEJO AGROALIMENTARIO -25 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Finalmente, un aspecto muy interesante que se puede analizar a partir de las tablas es el relativo al grado de articulación de los sectores productivos, utilizando para ello algunos coeficientes que se derivan de la matriz simétrica. Hay que señalar que en dicha tabla, los coeficientes cuantifican el grado de interrelación entre las ramas de actividad homogéneas, por lo que no se corresponden con las ramas existentes en la realidad. Además, dado que solamente se dispone de la matriz de coeficientes totales, las conclusiones que se derivan hacen referencia al conjunto del proceso productivo, a las relaciones tecnológicas, independientemente del origen, interior o importado, de la producción. Esta circunstancia impide, entre otros, el análisis de la dependencia exterior de las ramas de actividad. 6.1. Análisis de sensibilidad de los coeficientes El análisis de sensibilidad de los coeficientes trata de abordar el estudio de la importancia relativa de los coeficientes para prever las consecuencias que cambios en los mismos pueden tener sobre un sector o el conjunto de sectores. La matriz de coeficientes técnicos da una idea de la importancia relativa de las interrelaciones sectoriales, pero al ser cifras relativas respecto a la producción de cada rama de actividad, no queda de manifiesto la influencia que pueden tener sobre la economía. Un coeficiente a ij puede ser muy grande respecto a otros de la matriz, pero si el sector j tiene una producción pequeña, la influencia sobre i no tendrá mucha importancia. Sin embargo, siendo a ij relativamente pequeño, puede tener una influencia sobre i grande si la producción del sector j es grande. Por tanto, es aconsejable hacer un análisis de los coeficientes técnicos que permita ver la importancia de cada uno de ellos. Para ello se utiliza el análisis de sensibilidad que se presenta a continuación8, análisis que pretende identificar aquellos coeficientes cuya variación provoca mayores cambios en la producción. Conforme a la metodología propuesta por Schintke y Stäglin (1988) la importancia de un coeficiente va a depender del porcentaje máximo de cambio (p) que provoca en la producción de cualquier sector. Si denominamos w ij a dicha importancia, con p expresado en tanto por cien, se tiene que: 8 Esta metodología se explica en Pulido y Fontela (1993). -26 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Xj rji w ij p a ij p rii X i 100 (6.1) donde a ij es el coeficiente técnico, r ji y rii son los elementos correspondientes de la matriz inversa de Leontief, y X j , X i son las producciones respectivas de las ramas consideradas. Cuanto mayor sea w ij , más importante será el coeficiente a ij . Se puede demostrar que, sin que los cambios en las producciones sectoriales superen el porcentaje p, puede llegarse hasta una variación porcentual: cij p (6.2) w ij p Es decir, que los coeficientes a ij más importantes son los que tienen un límite reducido de variación porcentual c ij . Utilizando las expresiones (6.1) y (6.2), y si suponemos una variación del 1% en la producción, el porcentaje de aumento del coeficiente técnico vendrá dado por la siguiente expresión: c ij 1 (6.3) X j a ij 0,01 rji rii X i De esta manera, cuanto más importante sea el coeficiente técnico, menor será el valor de c ij , al indicar la variación porcentual máxima que puede tener el coeficiente a ij a partir de la cual se altera la producción de la rama i en más de un 1%. A partir de los valores de c ij , el criterio que se va a seguir para realizar la clasificación de los coeficientes es el siguiente9: c ij 25 Coeficientes muy importantes 10 c ij 50 Coeficientes bastante importantes 50 c ij 100 Coeficientes poco importantes c ij 100 Coeficientes no importantes 9 El criterio es una combinación de los utilizados por López y Pulido (1993) y Artis et al.(1994), que establecen la diferencia entre coeficientes muy importantes, importantes y no importantes en los límites 10 y 100 de variación, y el de Titos et al. (1995), quienes establecen como criterio para diferenciar entre coeficientes importantes y no importantes una variación menor o mayor al 50%. -27 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Con esta clasificación, la presencia de muchos coeficientes importantes en la fila correspondiente a una determinada rama indica que es muy importante como oferente de consumo intermedios para el proceso productivo de otras. Si la presencia es en la columna, indica que la rama provoca aumentos de producción importantes en otras para poder satisfacer su demanda de productos intermedios, refleja la importancia del método de producción de este sector para la demanda de output de otros sectores. Utilizando la expresión (6.3) se ha realizado el análisis de sensibilidad de los coeficientes técnicos. Teniendo en cuenta que de los 2.304 coeficientes técnicos existentes en la matriz, en 540 interviene alguna de las ramas incluidas en el CAA, se ha elaborado el Cuadro 15, donde se muestra la distribución de frecuencias de dichos coeficientes, teniendo además en cuenta que 209 son nulos. Cuadro 15. Clasificación de los coeficientes técnicos del CAA. Intervalo 0-25 25-50 50-100 Importantes >100 No nulos Número 24 22 28 74 257 331 % No Nulos 7,25 6,65 8,46 22,36 77,64 100 % Cons. Int. (1) 70,29 12,09 7,30 89,68 10,32 100 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Estos porcentajes se obtienen dividiendo el valor de las transacciones intersectoriales que representan coeficientes de este intervalo por el valor total de las transacciones intersectoriales en las que intervienen las ramas del CAA. En el mismo se puede observar cómo los coeficientes importantes representan el 22,36% de los coeficientes no nulos totales del CAA, y agrupan casi el 90% del valor de las transacciones intersectoriales del mismo. En cuanto a los muy importantes, es decir, aquellos que no pueden variar en más de un 25% sin que se altere la producción sectorial en más de un 1%, representan el 7,25% del total de los coeficientes no nulos del CAA. Ahora bien, suponen el 13% de los coeficientes muy importantes de la tabla completa, teniendo en cuenta que las ramas del CAA representan solamente el 1,5% de las 48 existentes en la TIO y, como se ha señalado anteriormente, en torno al 10% de las macromagnitudes regionales. Estos coeficientes muy importantes son los recogidos en el Cuadro 16. De su observación se puede obtener como primera conclusión que la mayoría hace referencia a relaciones dentro del propio CAA. También se observa la fuerte dependencia del sector primario respecto a las industrias agroalimentarias. A su vez, de dicha rama dependen, además de las otras industrias alimentarias, dos ramas no pertenecientes al CAA, la industria química y la distribución de agua. -28 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output En cuanto a las ramas pertenecientes a la IAA, destaca la de productos cárnicos, que es dependiente de sí misma, de la rama de otras industrias alimenticias y de la hostelería. Por su parte, la rama de otras industrias agroalimentarias depende de las ramas a quienes suministra materias primas, la ganadería incluida en el sector primario y las industrias de bebidas. A este respecto es destacable la dependencia que tienen las ramas industriales de la hostelería, rama que utiliza una parte importante de su producción. Cuadro 16. Coeficientes técnicos totales muy importantes (1). Rama oferente Rama demandante 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 2. Extracción de productos energéticos y refino 4. Captación. depuración y distribución agua 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 13. Industria de la madera y el corcho 16. Industria química 32. Transportes 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 8. Otras industrias alimenticias 31. Hostelería 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 31. Hostelería 7. Industrias lácteas 31. Hostelería 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 31. Hostelería 9. Elaboración de bebidas y tabaco 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas Fuente: TION-00 y elaboración propia. Dado que si una rama agrupa en su fila o columna respectiva muchos coeficientes importantes, dicha rama también es importante, se ha elaborado el Cuadro 17, donde aparecen el número de coeficientes importantes para las ramas de actividad incluidas en el CAA. Cuadro 17. Número de coeficientes importantes (<100). Rama 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco Complejo Agroalimentario (1) Economía Navarra (1) Filas 10 4 2 3 3 2 4,0 10,40 Columnas 14 10 8 2 16 15 10,8 10,4 Fuente: TION-00 y elaboración propia, (1) Los valores presentados son las medias de las ramas incluidas en cada agrupación, -29 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output A partir de dicha información se observa como por filas destaca el sector primario y a una considerable distancia, la industria cárnica. Por columnas, destacan además de las mencionadas, también la otras industrias alimentarias y las de bebidas, todas ellas con un número de coeficientes importantes superiores a la media regional. El análisis realizado hasta ahora nos permite vislumbrar las interrelaciones que establecen las ramas de actividad incluidas en el complejo, entre ellas y con todas las demás. Sin embargo, se carece de una cuantificación de las mismas. A continuación se pretende llevar a cabo dicha cuantificación. Para ello, vamos a utilizar las diferentes propuestas existentes en la literatura, lo cual nos permitirá contrastar si los resultados obtenidos difieren dependiendo de los coeficientes utilizados. 6.2. Ligazones específicas de oferta y demanda y coeficientes de Streit La medición de las relaciones de dependencia entre los sectores se inicia con las denominadas ligazones o eslabonamientos. Estos conceptos fueron introducidos por Hirschman (1958) en los estudios de desarrollo, quien consideraba que si se incentivan los sectores más ligados de una economía, a largo plazo se conseguirían mayores tasas de crecimiento. La dirección y el peso de las ligazones sectoriales indican la capacidad potencial de un sector para estimular a otros, por lo que la concentración de recursos en aquellas actividades con mayores ligazones impulsará más rápidamente el crecimiento de la producción, renta y empleo que la dedicación de dichos recursos a otras actividades (Del Castillo y García, 1990). Se dice que dos sectores están ligados si existe una transacción entre ambos por la que uno utiliza productos del otro como input o consumo intermedio de su propio proceso productivo. Se pueden distinguir los eslabonamientos hacia atrás que se producen cuando una rama productiva utiliza inputs intermedios procedentes de otras ramas, y eslabonamientos hacia adelante, que se producen cuando los productos de una rama son utilizados en los procesos productivos de otras ramas. Con el fin de cuantificar estas ligazones, en la literatura se han desarrollado distintos coeficientes. En primer lugar, tenemos aquellos que tratan de medir los eslabonamientos de cada rama con cada una de las demás ramas, y en segundo lugar los que tratan de medir los eslabonamientos de cada rama con el conjunto de ramas. Las primeras son las ligazones específicas y las segundas las globales. -30 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output La primera propuesta para cuantificar las ligazones específicas se debe a Leontief (1965). Bajo su óptica, dos sectores productivos pueden estar ligados por cuatro relaciones distintas. Las primeras son las ligazones específicas de oferta que tratan de cuantificar la importancia relativa que cada una de las ramas tiene para otra como demandantes de consumos intermedios. Se definen como la proporción que suponen los destinos que la rama i hace a la rama j respecto al total de los destinos intermedios de la rama i. La expresión matemática es: LEO ij x ij (6.4) j x ij De forma similar se puede definir la ligazón entre la rama j y la rama i. Aquellas consideradas como más importantes para las ramas del CAA se presentan en el Cuadro 18. El criterio utilizado ha sido considerar importantes aquellas que superan el valor 0,05, es decir, para cada rama se presentan aquellos coeficientes que representan que dicha rama destina más de un 5% de su producción intermedia a la rama correspondiente. Cuadro 18. Ligazones de oferta. Ramas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 4. Captación. depuración y distribución agua 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 8. Otras industrias alimenticias 31. Hostelería 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 31. Hostelería 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 31. Hostelería 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 31. Hostelería OFERTA 0,084 0,179 0,263 0,237 0,067 0,188 0,396 0,114 0,422 0,484 0,423 0,162 0,070 0,721 0,497 0,362 0,100 0,254 0,730 Fuente: TION-00 y elaboración propia. Desde el punto de vista de la oferta de productos para ser utilizados para la elaboración de otros bienes y servicios, el sector primario tiene relaciones importantes con casi todas las ramas del complejo, siendo las más relevantes las que mantiene con la fabricación de conservas vegetales (26,3%), con las otras industrias alimenticias -31 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output (23,72%) y con la industria cárnica (17,9%). Estas tres ramas conjuntamente utilizan casi el 70% de los destinos intermedios del sector primario. Las ramas incluidas en la IAA destinan su producción intermedia mayoritariamente a sí mismas, excepto las otras industrias alimenticias, donde están incluidas las industrias elaboradoras de piensos, que destinan casi el 50% de su producción intermedia al sector primario. También merece la pena destacar la importancia que tiene la rama de hostelería como demandante de productos procedentes de la IAA, destacando el caso de las industrias lácteas y las industrias de bebidas, ya que más del 70% de la producción intermedia de estas ramas es utilizado en la hostelería. Estas relaciones entre cada par de ramas se pueden analizar también desde el punto de vista de la rama demandante de consumos intermedios. Así, podemos cuantificar la importancia relativa que en la demanda intermedia de cada rama j tienen los consumos intermedios procedentes de la rama i, lo que se denominan como ligazones específicas de demanda, cuya expresión es la siguiente: LED ij x ij (6.5) ix ij Nuevamente, cambiando el orden de los subíndices podría establecerse otra ligazón de demanda, la importancia relativa que en los consumos intermedios de la rama i tienen los que proceden de j. Las ligazones específicas de demanda importantes (mayores a 0,05) para las seis ramas del CAA navarro se incluyen en el Cuadro 19. En el mismo se observa que el sector primario, como demandante de consumos intermedios, tiene cierta dependencia, además de sí misma, de las otras industrias alimenticias, de la industria química y del comercio al por mayor (márgenes comerciales de los productos que adquiere), que conjuntamente le suministran más del 70% de sus consumos intermedios. Las industrias agroalimentarias dependen del sector primario, que se constituye como principal suministrador de consumos intermedios, con un máximo del 60% para las industrias cárnicas y un mínimo del 22% para las industrias de bebidas. Además realizan operaciones de cierta importancia consigo mismas, y casi todas ellas dependen del sector de transportes, dado que dichos márgenes representan en torno a un 7% de sus consumos intermedios. -32 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output La hostelería vuelve a aparecer como una rama con relaciones importantes con las ramas de la IAA, ramas que participan de forma significativa en sus consumos intermedios, siendo la relación más relevante la que mantiene con la rama de bebidas, que le suministra el 27% de los inputs que utiliza. El hecho de que tanto las ligazones de demanda como de oferta entre las propias ramas de la industria sean relevantes pone de manifiesto que se están sustituyendo inputs agrarios por inputs agroalimentarios, proceso derivado de la modernización de la industria agroalimentaria. Cuadro 19. Ligazones de demanda. Ramas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 10. Industria textil 12. Industria del cuero y del calzado 13. Industria de la madera y el corcho 14. Industria del papel 30. Comercio al por menor 31. Hostelería 31. Hostelería 31. Hostelería 31. Hostelería 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 16. Industria química 29. Comercio al por mayor e intermediarios 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 32. Transportes 39. Otras actividades empresariales 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 7. Industrias lácteas 32. Transportes 39. Otras actividades empresariales 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 32. Transportes 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 18. Minerales no metálicos 32. Transportes 39. Otras actividades empresariales 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 9. Elaboración de bebidas y tabaco DEMAN 0,224 0,323 0,103 0,053 0,601 0,172 0,526 0,214 0,082 0,057 0,525 0,097 0,059 0,052 0,483 0,181 0,065 0,219 0,080 0,181 0,076 0,070 0,064 0,109 0,069 0,129 0,066 0,061 0,094 0,161 0,067 0,275 Fuente: TION-00 y elaboración propia, A través de las ligazones específicas de oferta y demanda, obtenemos cuatro medidas de las relaciones que se establecen entre cada par de ramas. Con el fin de disponer de una única medida de la relación entre cada par de ramas Streit (1969) propuso un coeficiente calculado como la media de las cuatro ligazones específicas. De -33 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output esta manera se obtiene una única medida del vínculo existente entre cada par de ramas. La formulación matemática es la siguiente: CESij x x x 1 x ij ij ji ji 4 j x ij ix ij j x ji ix ji (6.6) El cálculo de estos coeficientes permite identificar aquellas ramas a las que va una parte importante de las salidas intermedias de otras ramas y de las que procede una parte importante de los inputs intermedios utilizados por otras ramas, las denominadas ramas polarizantes. Con objeto de identificar las relaciones más importantes, se mantiene el criterio utilizado para las ligazones específicas de oferta y demanda, es decir, los coeficientes de Streit que toman valores superiores a 0,5 son los que se representan en el Cuadro 20. El sector primario es que el tiene mayor número de coeficientes de Streit relevantes, siendo en su mayoría con ramas del CAA. Esto se debe, sobre todo, a su oferta de consumos intermedios, aunque también tiene un coeficiente importante con la rama de distribución de agua, debido a la demanda de inputs intermedios que hace a la misma. Cuadro 20. Coeficientes de Streit. Ramas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 4. Captación, depuración y distribución agua 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 5. Industria cárnica 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 7. Industrias lácteas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca 8. Otras industrias alimenticias 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 5. Industria cárnica 31. Hostelería 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 6. Preparación/conservación frutas y hortalizas 31. Hostelería 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 7. Industrias lácteas 31. Hostelería 8. Otras industrias alimenticias 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 9. Elaboración de bebidas y tabaco 31. Hostelería STREIT 0,154 0,054 0,196 0,197 0,143 0,385 0,284 0,130 0,349 0,147 0,130 0,199 0,271 0,217 0,255 Fuente: TION-00 y elaboración propia. En cuanto a las IAA, en general mantienen relaciones relevantes, además de con el sector primario, con ellas mismas y con la hostelería, por las demandas de inputs intermedios que ésta hace a las industrias alimentarias. Las conclusiones derivadas del análisis de estos coeficientes, no difieren de forma significativa de las obtenidas a partir del análisis de sensibilidad, aunque en esta ocasión tenemos una cuantificación de las relaciones que nos permiten ordenarlas en función de -34 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output su importancia relativa. No obstante, hay que tener en cuenta ciertas limitaciones presenten en estos coeficientes. Así, las más relevantes señalan que estos coeficientes priman a las ramas que concentran la oferta y la demanda aunque sean insignificantes y que tratan igual las relaciones hacia atrás y hacia adelante (Muñoz Cidad, 1988). Estos coeficientes nos permiten comprender las relaciones que se establecen entre cada par de ramas. Streit también propuso un coeficiente que mide las relaciones que una rama determinada mantiene con el conjunto del sistema productivo, denominado coeficiente de ligazón global (CLG) que expresa la intensidad de las relaciones de oferta y demanda que una rama mantiene con todas las demás. Este índice se calcula para cada rama como la suma de todos los coeficientes simétricos de Streit de dicha rama. Es decir: CLG j iCES ij (6.7) Estos coeficientes son más satisfactorios puesto que en una sola cifra agrupan la medida global de las relaciones de oferta y de demanda existentes entre dos ramas cualesquiera. Pero, como apuntan Cuadrado y Mancha (1984), presentan las mismas limitaciones ya señaladas para los coeficientes de Streit. En el Cuadro 21 se reflejan dichos coeficientes para las ramas del complejo, y se incluye asimismo la media del conjunto de ramas, que es el umbral de relevancia que se suele utilizar para valorarlos. Así, la media del complejo es superior a la media regional, indicando un grado de integración relativamente elevado. Sin embargo, existen muchas diferencias entre las ramas integrantes del mismo. Destaca el sector primario por su elevado coeficiente, que solamente es superado en la región por las ramas de fabricación de vehículos de motor y otro material de transporte, construcción y hostelería10. Cuadro 21. Coeficientes de ligazón global. Ramas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asociados 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco Complejo Agroalimentario (1) Economía Navarra (1) CLG 1,570 0,795 0,888 0,626 0,941 0,827 0,941 0,930 Fuente: TION-00 y elaboración propia, (1) Los valores presentados son las medias de las ramas incluidas en cada agrupación, 10 En el Cuadro A1 del Anexo se incluyen los coeficientes de ligazón global para todas las ramas de actividad. -35 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output En cuanto a las industrias agroalimentarias, destacan con un coeficiente superior a la media las otras industrias alimenticias. Sin embargo, todas las demás presentan coeficientes inferiores a la media, siendo la menos interrelacionada la rama de industrias lácteas. 6.3. Coeficientes de Chenery y Watanabe Otra posibilidad para tratar de medir los eslabonamientos de un sector con todos los demás, es analizar su capacidad de arrastre, tanto hacia adelante como hacia atrás, a través de los coeficientes de Chenery y Watanabe (1958). Estos autores efectuaron una cuantificación de los encadenamientos, seleccionando aquellas actividades cuyos efectos eran superiores a la media. Para cuantificar los eslabonamientos hacia atrás miden la proporción de inputs intermedios respecto a la producción de cada rama. Para la rama j este coeficiente adopta la siguiente expresión: j ix ij (6.8) Xj Por su parte, los eslabonamientos hacia adelante los cuantifican a través de la proporción del output de cada rama que se destina a utilizaciones intermedias respecto al total de destinos ( Z i ). El coeficiente se define para la rama i como: i jx ij (6.9) Zi La combinación de ambos coeficientes permite clasificar las diferentes ramas de una economía de acuerdo con su efecto sobre el resto del sistema, conforme a la clasificación que se recoge en el próximo cuadro. En el mismo también se han incluido en la posición correspondiente todas las ramas de actividad de la economía de Navarra (los valores de los coeficientes se incluyen en el anexo). En la casilla I se incluyen las actividades con ambos coeficientes superiores a la media, siendo por ello, ramas con mayor capacidad que la media para crear vínculos hacia adelante y hacia atrás. Son actividades con gran capacidad para provocar presiones de desarrollo, ya que compran gran parte de sus inputs a otros sectores productivos y a su vez les venden gran parte de su producción. En el caso que nos ocupa -36 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output no se localiza en esta casilla ninguna de las ramas del complejo. Las ramas aquí incluidas pertenecen a otros sectores industriales. En la casilla II se sitúan las ramas con fuertes ligazones hacia atrás, pero bajas hacia delante. Necesitan comprar gran parte de sus inputs a otros sectores, pero la mayoría de su producción va dirigida a la demanda final. Aquí es donde se localizan todas las ramas de actividad de la industria agroalimentaria. Conviene destacar que esta situación se mantiene desde los años 80, dado que utilizando tablas anteriores11 (1980 y 1995) se llega a los mismos resultados. No obstante, la rama de otras industrias agroalimentarias se situaba en el cuadrante I, por lo que durante los veinte años contemplados ha perdido cierta capacidad de empuje. Cuadro 22. Clasificación de Chenery-Watanabe de las ramas productivas. i i i i I. Manufactureras/Destino Intermedio II. Manufactureras/Destino Final 2. Extracción de productos energéticos y refino 5. Industria cárnica 10. Industria textil 6. Preparación, conservación frutas y hortalizas 13. Industria de la madera y el corcho 7. Industrias lácteas 15. Edición y artes gráficas 8. Otras industrias alimenticias 16. Industria química 9. Elaboración de bebidas y tabaco 17. Industria del caucho y materias plásticas 11. Industria de la confección y la peletería j j 18. Minerales no metálicos 12. Industria del cuero y del calzado 19. Metalurgia 14. Industria del papel 20. Fabricación de productos metálicos 21. Maquinaria y equipo mecánico 22. Fabricación de maquinaria, material eléctrico e 23. Fabricación de material electrónico y de precisión informático 24. Fabricación de vehículos de motor y otro material de 26. Reciclaje transporte 33. Actividades anexas a los transportes 25. Muebles y otras industrias manufactureras 27. Construcción 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado III. No Manufactureras/Destino Interm. 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 4. Captación, depuración y distribución de agua 28. Venta y reparación de vehículos de motor; comercio de combustible para automoción j j 32. Transportes 34. Correos y telecomunicaciones 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 36. Seguros y planes de pensiones 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 39. Otras actividades empresariales IV. No Manufactureras/Destino Final 29. Comercio al por mayor e intermediarios 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 31. Hostelería 37. Actividades inmobiliarias 40. Educación de mercado 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 43. Actividades diversas de servicios personales 44. Administración pública 45. Educación de no mercado (AAPP) 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado 48. Hogares que emplean personal doméstico Fuente: TION-00 y elaboración propia. En la casilla III se encuentran las ramas de producción primaria intermedia, que tienen altas ligazones hacia adelante y bajas hacia atrás, es decir, son requeridas por el resto de los sectores, pero ellas dependen de pocos inputs intermedios para su proceso 11 Véase Iráizoz y Rapún ( 2001). -37 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output productivo. Aquí se sitúa el sector primario, junto con otras ramas de actividad de servicios cuya producción tiene un uso intermedio. Por último, en la casilla IV se incluyen aquellas ramas de producción con bajas ligazones en ambas direcciones. Son sectores poco demandantes de inputs intermedios cuya producción tiene un destino final, y que por tanto se pueden considerar como irrelevantes desde el punto de vista de las interrelaciones sectoriales. No se incluye ninguna rama del CAA, se trata en la mayoría de las ocasiones de ramas de actividad del sector servicios que en muchos casos producen servicios no de mercado. Muñoz Cidad (1994) señala que la utilidad de estos coeficientes es hasta cierto punto limitada ya que se utilizan los coeficientes directos, y por lo tanto se ignoran los efectos indirectos, por lo que ofrecen una visión parcial de las interdependencias sectoriales. Además son coeficientes medios, sin ponderaciones, por lo que no deben extraerse conclusiones precipitadas, ya que una rama con coeficientes superiores a la media puede ser económicamente irrelevante. Por último, son coeficientes que no tienen en cuenta si las relaciones de una rama con el resto están muy concentradas, de modo que dos ramas con los mismos coeficientes pueden tener una incidencia económica diferente en función del grado de concentración de los efectos. 6.4. Coeficientes de Rasmussen Dado que los efectos indirectos pueden tener una importancia significativa, es necesario su consideración a la hora de valorar la importancia de las relaciones intersectoriales. Para ello se hace uso de la inversa de la matriz de Leontief, la cual se expresa como I A , donde I es la matriz identidad y A es la matriz de coeficientes 1 técnicos, cuyos elementos a ij se calculan como x ij X j . Cada elemento de la matriz inversa de Leontief, rij , expresa la cantidad de producto del sector i que directa e indirectamente se necesita para que el sector j pueda suministrar una unidad de producto a la demanda final. A partir de esta matriz se pueden elaborar diferentes indicadores, siendo los más utilizados en la literatura los coeficientes de Rasmussen (1956). Estos coeficientes consisten en una reformulación de los efectos difusión y absorción, calculados a partir de la mencionada matriz inversa de Leontief. Rasmussen plantea el cálculo del coeficiente U . j , o de poder de dispersión de los efectos de una rama sobre el sistema -38 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output global, y el coeficiente U i. , o de sensibilidad de la dispersión, es decir, cómo una rama es arrastrada por el sistema. El coeficiente de poder de dispersión se expresa como: U. j R 1 irij n 1 ij rij n2 (6.10) donde n es el número de ramas y irij representa la suma de cada columna de la matriz inversa de Leontief. Esta suma recibe el nombre de efecto difusión o multiplicador del output, e indica el impacto que tendrá sobre todas las ramas productivas un aumento de una unidad en la demanda final de la rama correspondiente. Por lo tanto recoge los efectos hacia atrás, nos da una aproximación de la intensidad con la que un sector difunde en el sistema económico una variación unitaria de su demanda final. El numerador de la expresión (6.10) recoge el efecto medio que la rama j provoca en el resto de ramas. En el denominador se tiene la media de los coeficientes del numerador para todas las ramas. Por lo que si U . j >1, significa que la rama j tiene un poder de dispersión o una capacidad de arrastre hacia atrás superior a la media. Es por tanto, una medida relativa de la fuerza con que un incremento en la demanda de la rama j se dispersa a través del sistema económico. El coeficiente de sensibilidad de la dispersión trata de medir cómo un incremento en la demanda de todo el sistema “tira” de la rama i, y se define como: U i. R 1 jrij n 1 ij rij n2 (6.11) siendo jrij la suma de una fila de la matriz inversa de Leontief, el efecto absorción o valor de la expansión uniforme de la demanda. Este valor cuantifica cómo varía la producción de un sector cuando varía de forma unitaria la demanda final de todas las ramas de la economía. Este indicador recoge los efectos hacia adelante ya que expresa la intensidad con la que la rama absorbe las variaciones de la demanda final de todas las ramas de actividad -39 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output De forma similar al coeficiente de poder de dispersión, el numerador refleja la respuesta media de la rama analizada y el denominador la respuesta media del conjunto de ramas. Por lo tanto, cuando dicho coeficiente es mayor que la unidad significa que la rama en cuestión es arrastrada de forma superior a la media. Por otra parte, Jones (1976) señaló que el utilizar el índice de sensibilidad de la dispersión para medir los encadenamientos hacia adelante era cuestionable. Este autor argumentaba que no tiene mucho sentido económico analizar qué ocurre en una rama si todas las demás, independientemente de su tamaño, aumentan su demanda final en la misma cuantía, la unidad. Esta situación es muy poco probable que se produzca, así que propone utilizar la inversa de la matriz de coeficientes horizontales o coeficientes de distribución para cuantificar la capacidad que tienen las ramas para infundir efectos hacia adelante. En la matriz de coeficientes de distribución B, cada elemento b ij representa la proporción de output de la rama i que es utilizado en la rama j, por lo que cada elemento se calcula como x ij X i . Se trata del denominado modelo de oferta, que a partir de la igualdad entre producción y consumos intermedios más valor añadido llega a la expresión matricial X VI B , donde V es un vector de inputs primarios o valor 1 añadido. Cada elemento z ij de la matriz I B1 puede interpretarse como el incremento en la producción de la rama j ante incrementos unitarios en el valor añadido de la rama i. Por lo tanto, la suma de la fila i de esta matriz indica el incremento en la producción de todas las ramas cuando el valor añadido de la rama i aumenta en una unidad, asumiendo que la estructura de ventas del sector i es constante (Kol, 1991). La capacidad de empuje de las ramas se va a cuantificar utilizando estos valores. Por lo tanto, la expresión del nuevo coeficiente elaborado a partir de la matriz I B 1 es la siguiente: U i. J 1 jz ij n 1 ij z ij n2 (6.12) La interpretación de estos coeficientes es similar a los obtenidos anteriormente. Es decir, aquellas ramas con valores superiores a la unidad presentan una capacidad de -40 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output empuje superior a la media, y por lo tanto, son más importantes desde el punto de vista del desarrollo. La ventaja de estos índices estriba en que permiten realizar comparaciones intersectoriales sobre la base de que se normaliza los promedios parciales, relacionándolos con el promedio total (Domingo et al., 1987). Ahora bien, es importante incorporar a dichos coeficientes algún elemento que tenga en cuenta la diferente importancia de las ramas de actividad, incluir ponderaciones. En la literatura se han realizado diferentes propuestas, siendo la más habitual la utilización de la participación en la demanda final12 o en el valor añadido. Por lo tanto, si suponemos que la ponderación asignada a cada rama viene cuantificada por el parámetro i , los coeficientes se calcularían como: U.j U i. U i. R , R , J , 1 i i rij n 1 ij i rij n2 (6.13) 1 j j rij n 1 ij j rij n2 (6.14) 1 j j z ij n 1 ij j z ij n2 (6.15) Para valorar la dispersión de los efectos se pueden elaborar coeficientes de dispersión que relacionan la desviación estándar con respecto a la media. Cuanto mayores sean los valores de los coeficientes de variación, más concentrados se encuentran los efectos del sector analizado, y cuanto menores sean, más homogéneamente distribuidos se encuentran los efectos entre las actividades productivas que integran el sistema. Sobre la base de tales criterios, se establece una clasificación de las ramas de actividad en función de su capacidad de arrastre hacia adelante y hacia atrás, de forma similar a lo que ocurría en el caso de los coeficientes de Chenery y Watanabe. Los 12 Cuello et al. (1992) comparan los resultados ponderando en función de la participación de las ramas en la demanda final o en la producción total. -41 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output sectores clave serían aquellos que tienen coeficientes de poder y sensibilidad de la dispersión superiores a la unidad, y preferiblemente con coeficientes de variación bajos. Los sectores independientes, con escasa capacidad para afectar al resto del sistema, serían aquellos cuyos coeficientes son inferiores a la unidad. Finalmente, tendríamos las ramas impulsoras con fuertes vínculos hacia atrás y las ramas receptoras con fuertes vínculos hacia delante. Desde este punto de vista, las ramas clave así definidas son importantes porque al ser impulsadas afectan a otras muchas y pueden dar lugar a un incremento generalizado de la actividad económica, por ser fuertemente demandantes de inputs intermedios y estar, además, sus ofertas y demandas muy distribuidas entre las ramas (por tener coeficientes de variación bajos). Los coeficientes calculados de acuerdo a estas expresiones se incluyen en el anexo. Con el fin de contrastar la existencia de valores muy diferentes en función de los supuestos adoptados, se han calculado los coeficientes de correlación de Pearson entre los indicadores obtenidos y los coeficientes de correlación de rangos de Spearman entre las ordenaciones de las ramas obtenidas a partir de los mismos. Todos los coeficientes son positivos y estadísticamente significativos, por lo que las conclusiones no van a diferir de forma significativa dependiendo de qué coeficiente analicemos. A continuación se presenta la clasificación de las ramas conforme a las expresiones (6.13) y (6.15), es decir, de acuerdo al coeficiente de poder de dispersión propuesto por Rasmussen y al coeficiente de Jones para cuantificar el eslabonamiento hacia adelante. Cabe señalar que esta clasificación presenta muchas similitudes con la elaborada conforme a los coeficientes de Chenery y Watanabe, aunque se producen algunos cambios que resultan significativos. Nos vamos a centrar en los relativos a las ramas del complejo. El sector primario mantiene la posición anterior, por lo que aparece como una rama impulsora, teniendo en cuenta los efectos directos e indirectos, es por tanto una rama que dadas sus relaciones con otras ramas puede provocar efectos hacia adelante. Además, el coeficiente de variación de los efectos hacia adelante es inferior a la media, lo que indica que no tales efectos no están concentrados en pocas ramas. En cuanto a las ramas de la industria agroalimentaria, hay tres que se clasifican como receptoras, en una situación similar a la que obtenían a partir de los coeficientes -42 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output de Chenery y Watanabe. Se trata de la industria cárnica, la de conservas vegetales y las otras industrias alimenticias, ramas que por su demanda directa e indirecta de consumos intermedios tienen una capacidad superior a la media para generar efectos en el resto del sistema. Finalmente, las otras dos ramas industriales, las industrias lácteas y las de bebidas, pasan a situarse en el cuadrante de las ramas independientes. Este cambio se ha debido al hecho de incluir las ponderaciones, ya que si se consideran los efectos totales sin ponderar, los coeficientes que obtienen son superiores a la unidad, lo que implica una capacidad de afectar al sistema superior a la media. Es importante señalar que los coeficientes de variación de los efectos hacia atrás de las ramas agroindustriales son inferiores a la media. Cuadro 23. Clasificación de Rasmussen de las ramas productivas. J , J , Ui. >1 Ui. <1 I. Clave U.Rj , >1 U.Rj , <1 II. Receptoras 19. Metalurgia 5. Industria cárnica 20. Fabricación de productos metálicos 6. Preparación, conservación frutas y hortalizas 24. Fabricación de vehículos de motor y otro material 8. Otras industrias alimenticias de transporte 14. Industria del papel 26. Reciclaje 21. Maquinaria y equipo mecánico 27. Construcción 22. Fabricación de maquinaria, material electr. e 37. Actividades inmobiliarias informático 23. Fabricación de material electrónico y de precisión 25. Muebles y otras industrias manufactureras 28. Venta y reparación de vehículos de motor; comercio de combustible para automoción 31. Hostelería III. Impulsoras IV. Independientes 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios 2. Extracción de productos energéticos y refino 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 10. Industria textil 13. Industria de la madera y el corcho 16. Industria química 17. Industria del caucho y materias plásticas 18. Minerales no metálicos 32. Transportes 33. Actividades anexas a los transportes 34. Correos y telecomunicaciones 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 39. Otras actividades empresariales 4. Captación, depuración y distribución de agua 7. Industrias lácteas 9. Elaboración de bebidas y tabaco 11. Industria de la confección y la peletería 12. Industria del cuero y del calzado 15. Edición y artes gráficas 29. Comercio al por mayor e intermediarios 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 36. Seguros y planes de pensiones 40. Educación de mercado 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 43. Actividades diversas de servicios personales 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 44. Administración pública 45. Educación de no mercado (AAPP) 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado 48. Hogares que emplean personal doméstico Fuente: TION-00 y elaboración propia. Por lo tanto, ninguna rama del complejo podría considerarse como rama clave desde el punto de vista del desarrollo regional. Aunque si hubiéramos utilizado la -43 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output clasificación de acuerdo a los coeficientes de sensibilidad de la dispersión propuestos por Rasmussen (que queda reflejada en el Anexo), las otras industrias alimenticias aparecerían en esta categoría, aunque con coeficientes de variación superiores a la media, indicando cierto grado de concentración de los efectos. 7. CONCLUSIONES A partir de los resultados derivados de la tabla input-output de Navarra en el 2000 se ha podido comprobar como el complejo agroalimentario tiene una participación importante en el entorno económico regional. Así, el sector primario ocupa al 6,5% del empleo y genera en torno al 4 % del valor añadido, mientras la industria agroalimentaria participa en estas magnitudes con un 4% y 3,6% respectivamente. Sin embargo, en los últimos años se observa una disminución importante en la participación del complejo agroalimentario. En cuanto a la especialización regional, destacan además del sector primario, las industrias de conservas vegetales y las de bebidas. Las tres ramas agrupan casi el 70% de la producción agroalimentaria regional. Merece destacar el grado de apertura al exterior del complejo agroalimentario, puesto que casi el 30% de los recursos totales proceden de importaciones y un 35% de la oferta total de productos agroalimentarios tiene como destino las exportaciones. Además, el saldo comercial es positivo, saldo que se obtiene básicamente por las relaciones comerciales que se establecen con el resto de España. Las producciones más importantes a este respecto son aquellas en las que está especializada la región: conservas vegetales y bebidas alcohólicas. El análisis de las relaciones intersectoriales muestra un elevado grado de integración entre las ramas del complejo. Merece la pena destacar las relaciones que se establecen entre el sector primario y la industria agroalimentaria: para el sector primario, la industria agroalimentaria es el principal destino de su producción, mientras que para la industria agroalimentaria, el sector primario constituye su principal suministrador de consumos intermedios. Mientras que la industria agroalimentaria se considera como un sector con cierta capacidad de arrastre hacia atrás, el sector primario supera la media regional en cuanto a su capacidad de afectar a las ramas a las que suministra consumos intermedios. Sin -44 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output embargo, ninguna de las ramas del complejo agroalimentario navarro pueden considerarse como clave. Por último, destacar la importancia de las tablas input-output como instrumento de análisis de la realidad económica, aunque conviene recordar que su utilización no está exenta de limitaciones, por lo que los resultados deben interpretarse con cierta cautela. BIBLIOGRAFÍA Abad, C. (1997): “La evolución de la agricultura española en la Comunidad Europea”. En J.A. Nieto (Ed.): La economía española ante la Unión Monetaria Europea. Ed. Síntesis. Madrid. Artis, M.; Suriñach, J.; Pons, J. (1994): “El sistema agroalimentario catalán en la tabla input-output de 1987”. Investigación Agraria. Economía, vol. 9 (1), págs. 53-75. Baldwin, J. (1992): “Industrial efficiency and plant turnover in the Canadian Manufacturing sector”. En Caves, R.E. (Ed.): Industrial efficiency in six nations. MIT Press, Cambridge. Cañada, A. (2001): “Una nota sobre coeficientes y modelos multiplicadores a partir del nuevo sistema input/output del SEC-95”. Boletín Trimestral de Coyuntura, nº 82. 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Maquinaria y equipo mecánico 14. Industria del papel 20. Fabricación de productos metálicos 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 29. Comercio al por mayor e intermediarios 34. Correos y telecomunicaciones 22. Fabricación de maquinaria, material eléctrico e informático 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 8. Otras industrias alimenticias 37. Actividades inmobiliarias 18. Minerales no metálicos 17. Industria del caucho y materias plásticas 25. Muebles y otras industrias manufactureras 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 15. Edición y artes gráficas 12. Industria del cuero y del calzado 23. Fabricación de material electrónico y de precisión 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 33. Actividades anexas a los transportes 10. Industria textil 9. Elaboración de bebidas y tabaco 13. Industria de la madera y el corcho 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 5. Industria cárnica 28. Venta y reparación de vehículos motor; comercio combustible para automoción 36. Seguros y planes de pensiones 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 2. Extracción de productos energéticos y refino 11. Industria de la confección y la peletería 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 7. Industrias lácteas 4. Captación, depuración y distribución de agua 40. Educación de mercado 43. Actividades diversas de servicios personales 26. Reciclaje 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado ( AAPP e ISFLH) 44. Administración pública 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado (AAPP e ISFLH) 45. Educación de no mercado (AAPP) 48. Hogares que emplean personal doméstico Complejo Agroalimentario (1) Navarra (1) CLG 2,000 1,889 1,852 1,579 1,570 1,514 1,398 1,379 1,254 1,204 1,202 1,142 1,063 1,038 0,995 0,987 0,941 0,936 0,924 0,911 0,891 0,888 0,874 0,869 0,866 0,857 0,853 0,830 0,827 0,825 0,805 0,795 0,786 0,757 0,755 0,714 0,712 0,699 0,626 0,593 0,578 0,551 0,524 0,421 0,395 0,316 0,274 0,000 0,941 0,930 Fuente: TION-00 y elaboración propia, (1) Los valores presentados son las medias de las ramas incluidas en cada agrupación, -48 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Cuadro A2. Coeficientes de Chenery y Watanabe. Ramas 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asociados 2. Extracción de productos energéticos y refino 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 4. Captación, depuración y distribución de agua 5. Industria cárnica 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 7. Industrias lácteas 8. Otras industrias alimenticias 9. Elaboración de bebidas y tabaco 10. Industria textil 11. Industria de la confección y la peletería 12. Industria del cuero y del calzado 13. Industria de la madera y el corcho 14. Industria del papel 15. Edición y artes gráficas 16. Industria química 17. Industria del caucho y materias plásticas 18. Minerales no metálicos 19. Metalurgia 20. Fabricación de productos metálicos 21. Maquinaria y equipo mecánico 22. Fabricación de maquinaria, material eléctrico e informático 23. Fabricación de material electrónico y de precisión 24. Fabricación de vehículos de motor y otro material de transporte 25. Muebles y otras industrias manufactureras 26. Reciclaje 27. Construcción 28. Venta y reparación de vehículos motor; comercio combustible para automoción 29. Comercio al por mayor e intermediarios 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 31. Hostelería 32. Transportes 33. Actividades anexas a los transportes 34. Correos y telecomunicaciones 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 36. Seguros y planes de pensiones 37. Actividades inmobiliarias 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 39. Otras actividades empresariales 40. Educación de mercado 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 43. Actividades diversas de servicios personales 44. Administración pública 45. Educación de no mercado (AAPP) 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado (AAPP e ISFLH) 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado (AAPP e ISFLH) 48. Hogares que emplean personal doméstico Complejo Agroalimentario (1) Navarra (1) j i 0,389 0,584 0,403 0,426 0,835 0,767 0,846 0,767 0,699 0,646 0,587 0,650 0,618 0,725 0,558 0,697 0,699 0,670 0,785 0,648 0,700 0,807 0,636 0,825 0,642 0,744 0,622 0,424 0,423 0,290 0,483 0,413 0,527 0,329 0,246 0,335 0,113 0,396 0,287 0,255 0,261 0,550 0,359 0,305 0,096 0,258 0,554 0,000 0,717 0,518 0,704 0,599 0,806 0,701 0,249 0,276 0,279 0,245 0,373 0,547 0,108 0,222 0,743 0,402 0,443 0,691 0,719 0,622 0,623 0,548 0,245 0,485 0,188 0,306 0,116 0,988 0,256 0,476 0,405 0,213 0,172 0,754 0,793 0,702 0,896 0,515 0,219 0,699 0,826 0,080 0,130 0,312 0,096 0,000 0,000 0,000 0,000 0,000 0,354 0,412 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Los valores presentados son las medias de las ramas incluidas en cada agrupación, -49 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Cuadro A3. Coeficientes de Rasmussen y Jones. U. j Ramas R U i. R U. j R , U i. R , U i. J U i. J , 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios asociados 0,900 2,369 0,764 1,814 1,141 1,043 2. Extracción de productos energéticos y refino 1,013 0,897 0,627 0,488 3,288 3,518 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 0,846 1,640 0,418 1,157 1,866 1,902 4. Captación, depuración y distribución de agua 0,860 0,588 0,422 0,111 1,032 0,749 5. Industria cárnica 1,321 0,683 1,019 0,474 0,598 0,248 6. Preparación y conservación de frutas y hortalizas 1,261 0,701 1,172 0,695 0,579 0,331 7. Industrias lácteas 1,273 0,553 0,773 0,170 0,661 0,362 8. Otras industrias alimenticias 1,283 0,981 1,342 1,028 0,758 0,442 9. Elaboración de bebidas y tabaco 1,203 0,685 0,928 0,520 0,668 0,489 10. Industria textil 1,175 1,029 0,649 0,531 2,306 2,255 11. Industria de la confección y la peletería 1,098 0,553 0,693 0,349 0,627 0,339 12. Industria del cuero y del calzado 1,213 0,822 0,561 0,227 0,774 0,176 13. Industria de la madera y el corcho 1,088 0,969 0,550 0,456 1,413 1,159 14. Industria del papel 1,241 1,338 1,324 1,206 0,873 0,644 15. Edición y artes gráficas 1,069 0,844 0,722 0,450 0,930 0,769 16. Industria química 1,175 2,443 0,964 2,369 3,197 3,423 17. Industria del caucho y materias plásticas 1,251 1,231 0,889 1,342 1,668 1,989 18. Minerales no metálicos 1,122 0,867 0,928 0,870 0,922 1,189 19. Metalurgia 1,362 2,211 1,837 3,867 1,636 1,923 20. Fabricación de productos metálicos 1,217 1,817 1,587 2,492 1,359 1,622 21. Maquinaria y equipo mecánico 1,289 1,372 2,482 2,605 0,794 0,923 22. Fabricación de maquinaria, material eléctrico e informático 1,443 1,115 1,571 1,416 1,016 0,949 23. Fabricación de material electrónico y de precisión 1,180 0,673 1,171 0,664 0,631 0,376 24. Fabricación de vehículos de motor y otro material de transporte 1,620 1,245 6,733 5,998 0,654 1,263 25. Muebles y otras industrias manufactureras 1,149 0,568 1,184 0,665 0,482 0,319 26. Reciclaje 1,262 0,534 1,041 0,102 2,065 1,947 27. Construcción 1,126 1,058 2,380 2,238 0,530 1,205 28. Venta y reparación de vehículos motor; comercio combustible autom. 0,984 0,931 1,689 0,625 0,926 0,918 29. Comercio al por mayor e intermediarios 0,817 1,132 0,850 1,163 0,776 0,934 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 0,705 0,766 0,791 0,871 0,567 0,816 31. Hostelería 0,974 0,912 1,264 1,203 0,549 0,804 32. Transportes 0,828 1,911 0,747 1,616 1,273 1,503 33. Actividades anexas a los transportes 0,954 1,128 0,569 0,703 1,923 1,889 34. Correos y telecomunicaciones 0,738 1,076 0,299 0,589 1,007 1,009 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 0,643 0,821 0,195 0,329 0,606 0,779 36. Seguros y planes de pensiones 0,704 0,667 0,162 0,161 0,868 0,617 37. Actividades inmobiliarias 0,585 0,988 1,132 1,339 0,557 1,363 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 0,816 0,799 0,469 0,404 1,360 1,338 39. Otras actividades empresariales 0,708 2,318 0,387 1,913 1,257 1,825 40. Educación de mercado 0,677 0,504 0,397 0,191 0,447 0,238 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 0,696 0,647 0,680 0,572 0,466 0,554 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 0,999 0,777 0,715 0,484 0,660 0,440 43. Actividades diversas de servicios personales 0,776 0,486 0,360 0,087 0,439 0,143 44. Administración pública 0,720 0,470 0,862 0,549 0,370 0,444 45. Educación de no mercado (AAPP) 0,549 0,470 0,327 0,240 0,370 0,253 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado 0,701 0,470 0,661 0,452 0,370 0,391 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado 0,918 0,470 0,584 0,079 0,370 0,041 48. Hogares que emplean personal doméstico 0,470 0,470 0,130 0,127 0,370 0,147 Complejo agroalimentario (1) 1,270 0,995 1,000 0,783 0,734 0,486 Fuente: TION-00 y elaboración propia. (1) Los valores presentados son las medias de las ramas incluidas en cada agrupación. -50 - El sector agroalimentario a través de las tablas Input-Output Cuadro A4. Clasificación de Rasmussen de las ramas productivas. U i. U.Rj , >1 R , >1 U i. R , <1 I. Clave II. Receptoras 8. Otras industrias alimenticias 14. Industria del papel 19. Metalurgia 20. Fabricación de productos metálicos 21. Maquinaria y equipo mecánico 22. Fabricación de maquinaria, material electr. e informático 24. Fabricación de vehículos de motor y otro material de transporte 27. Construcción 31. Hostelería 37. Actividades inmobiliarias 5. Industria cárnica 6. Preparación, conservación frutas y hortalizas 23. Fabricación de material electrónico y de precisión 25. Muebles y otras industrias manufactureras 26. Reciclaje 28. Venta y reparación de vehículos de motor; comercio de combustible para automoción III. Impulsoras IV. Independientes 1. Agricultura, ganadería, caza, pesca y servicios 3. Producción y distribución de energía eléctrica y gas 16. Industria química 17. Industria del caucho y materias plásticas 29. Comercio al por mayor e intermediarios 32. Transportes 39. Otras actividades empresariales 2. Extracción de productos energéticos y refino 4. Captación, depuración y distribución de agua 7. Industrias lácteas 9. Elaboración de bebidas y tabaco 10. Industria textil 11. Industria de la confección y la peletería 12. Industria del cuero y del calzado 13. Industria de la madera y el corcho 15. Edición y artes gráficas 18. Minerales no metálicos 30. Comercio al por menor; reparación de efectos personales 33. Actividades anexas a los transportes 34. Correos y telecomunicaciones 35. Intermediación financiera y actividades auxiliares 36. Seguros y planes de pensiones 38. Actividades de alquiler, informáticas y de I+D 40. Educación de mercado 41. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de mercado 43. Actividades diversas de servicios personales 42. Actividades asociativas, recreativas, culturales y deportivas 44. Administración pública 45. Educación de no mercado (AAPP) 46. Sanidad, servicios sociales y saneamiento público de no mercado 47. Actividades recreativas y culturales de no mercado 48. Hogares que emplean personal doméstico U.Rj , <1 Fuente: TION-00 y elaboración propia. -51 -