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 Recomendaciones para el empleo de BactoCROP‐TH en cultivos de mango (Mangifera indica L) Por su capacidad de adaptación a diferentes condiciones adversas el mango es uno de los frutales más ampliamente distribuidos en el país. El mango es nativo del Sur de Asia desde donde se distribuyó a todo el mundo. El centro de diversidad genética de esta fruta se encuentra en la India. El mango es cultivado en la mayoría de los climas tropicales y subtropicales cálidos. Casi la mitad de la producción mundial de mango se cultiva en la India. mientras que China se ha consolidado como el segundo productor de mango. El mango también es producido en Andalucía, España (principalmente en la provincia de Málaga), que es uno de los pocos lugares de Europa cuyos climas Subtropicales de Costa permiten el crecimiento de plantas tropicales y árboles frutales. A nivel mundial se producen aproximadamente 16,127 millones de toneladas métricas por año, de las cuales Asia produce el 79%, América el 13% y África, Europa y Oceanía el 8%. Se consume como fruta fresca o procesada en forma de jalea, conservas, salsas, encurtidos, ensaladas, helados y jugos enlatados. El valor energético del mango común por cada 100 g es de 250 kJ (60 kcal) y el del mango manzana es ligeramente mayor (79 kcal/100 g). El mango fresco contiene una gran variedad de nutrientes, pero solamente la vitamina C y el folato están en cantidades significativas del valor diario (44% y 11%, respectivamente). El mango prefiere los climas cálidos y secos, los cuales en México se encuentran desde la zona costera del oriente, centro y occidente hasta zonas de media altura (800 msnm) con una temperatura de 26° a 32°C y una precipitación promedio de 1000 a 1500 mm. CARACTERÍSTICAS DESCRIPTIVAS Nombre científico: Mangifera indica L. Nombres comunes: Mango. Familia: Anacardiaceae. Origen: Zona comprendida entre Assam (India) y la antigua Birmania (Myanmar), también puede ser nativo de las laderas bajas del Himalaya o incluso zonas cercanas a Nepal o Bután (Galán, 2009; Mora et al., 2002). Distribución: 35° LN a 35°LS (Benacchio, 1982). Adaptación: Trópico subhúmedo y trópico semiárido (González, 1984). Ciclo de madurez: Perenne. Tipo fotosintético: C3 REQUERIMIENTOS CLIMÁTICOS Y EDÁFICOS Altitud: En los trópicos se cultiva desde el nivel del mar hasta los 1200 m, pero desarrolla mejor en alturas inferiores a 600 m (Purseglove, 1987). Fotoperíodo: Se considera una planta de día neutro (FAO, 1994). Radiación (Luz): Requiere de bastante insolación. Un periodo nublado durante el periodo de floración causa caída de flores (Benacchio, 1982). Temperatura: Rango 10‐35°C, siendo la media óptima anual 24‐27°C y la óptima para fotosíntesis 25‐30°C (Benacchio, 1982). Precipitación (agua): Prospera en zonas con precipitación anual entre 760 y 3800 mm. Requiere de estación seca con días despejados, antes y durante la floración y fructificación (Baradas, 1994). Humedad relativa: Atmósferas secas acompañadas de altas temperaturas son muy dañinas, sobre todo para frutos jóvenes y hojas (Baradas, 1994). Una humedad atmosférica medianamente alta es favorable para buenos rendimientos (Benacchio, 1982). Profundidad de suelo: Mínimo 75 cm de profundidad, aunque lo ideal son suelos de 1 a 1.5 m (Mora et al., 2002). Textura: Puede desarrollarse bien en suelos arenosos, ácidos o alcalinos moderados, siempre y cuando se fertilicen adecuadamente (Mora et al., 2002). Drenaje: Requiere de buen drenaje, en suelos mal drenados no crece ni fructifica lo suficiente (Mora et al., 2002). pH: Un pH entre 5.5 y 7 (Mora et al., 2002). Salinidad/Sodicidad: No prospera en suelos calcáreos ni salinos (Benacchio, 1982). MANEJO AGRONÓMICO Y SANITARIO Propagación. El mango requiere de plantas reproducidas vegetativamente mediante injerto para asegurar que éstas sean iguales a las de la variedad que se desea cultivar. 
Portainjertos (patrones). Se sugiere el uso de “pies francos” provenientes de semillas de árboles poliembriónicos (como los criollos regionales). Este tipo de patrones contribuyen a conseguir árboles más homogéneos, tanto en su desarrollo como en su capacidad de producción 1. Semillero (almácigo). La semilla, una vez retirada del “hueso”, se debe depositar con la concavidad hacia abajo, en hileras de 5 a 10 cm de separación y de 3 a 5 cm entre semillas, cubrirse con una capa de sustrato de dos centímetros de espesor. Posteriormente se riega para mantener la humedad. 2. Trasplante. Aproximadamente 30 días después de la siembra, cuando la plántula recién emergida todavía conserva el color vino característico, se debe trasplantar a recipientes individuales los cuales se llenan con suelo previamente esterilizado con calor. Se pueden usar plantas jóvenes de tres a cinco meses, pero se sugiere plantas de aproximadamente un año de edad y desarrollo de un metro de altura. 3. Injertación. Esta práctica se realiza cuando la base del tallo tenga de 1.0 a 1.5 cm de diámetro y se encuentre en crecimiento activo. Se sugiere usar el método de enchapado lateral tipo “veneer”. La mejor época para injertar es durante los meses de abril a septiembre, pero en el período de lluvias debe protegerse el injerto con cubiertas de plástico. 4. Preparación del terreno. Si se dispone de agua de riego por gravedad, se debe nivelar antes de plantar. En terrenos de lomerío de temporal con pendientes leves, se deben construir terrazas con curvas de nivel para conservar el suelo y la humedad. Primero se traza y marca la plantación, después se hacen los cajetes o cepas a 40 cm de profundidad, por 40 cm de largo y 40 cm de ancho. 5. Distancia de plantación. En el sistema tradicional, en general, las distancias entre plantas dependen de la fertilidad del suelo y hábito de crecimiento de la variedad. 6. Método de plantación. Se sugiere usar el “tresbolillo” o hexagonal cuando no se intercalan cultivos y el rectangular en caso de intercultivo. El número de plantas por hectárea depende de la distancia y sistema de plantación. 7. Época de trasplante. Si se dispone de agua de riego se puede plantar en cualquier época del año, preferentemente en los meses de octubre a febrero. Antes del trasplante es conveniente estresar paulatinamente las plantas, hasta que pierdan los brotes tiernos. 8. Fertilización. El mango responde rápidamente a la fertilización aumentando su ritmo de crecimiento vegetativo, principalmente con el nitrógeno, excepto en suelos con alto contenido de materia orgánica. 9. Inducción floral. El ciclo fenológico (crecimiento vegetativo y reproductivo) está controlado en la planta de mango fundamentalmente por el clima. Entre las prácticas que se realizan se tienen: podas, eliminación de inflorescencias secas, fertilización y aplicación de riego antes del periodo de lluvias, para provocar un fuerte desarrollo vegetativo posterior a la cosecha. Para favorecer el reposo de la planta, la acumulación de sustancias de reserva, la maduración de los tejidos y la diferenciación floral, se podrían utilizar entre otras, algunas de las siguientes prácticas: someter a estrés a los árboles (vía rastreo del suelo), aplicar nitratos vía foliar y el usar hormonas, como el paclobutrazol, que impidan o limiten el crecimiento vegetativo. 10. Podas. Esta práctica debe ser parte del manejo de la huerta, ya que influye en todas las etapas de crecimiento y desarrollo de la plantación. Según el objetivo y edad del árbol se distinguen cinco tipos. 
Poda de formación 
Poda de producción árboles. 
Poda sanitaria 
Sustitución de copa. 
Poda de rejuvenecimiento. 11. Riegos. El sistema de riego a utilizar depende de la disponibilidad de agua y puede ser riego superficial o bien si se tiene agua escaza y/o de mala calidad se sugieren los sistemas presurizados, así también cuando se tiene agua en competencia con la industria y sociedad; estos sistemas presurizados pueden ser: a) goteo en línea y en círculo, b) aspersión y c) microaspersión. 12. Cosecha. El futo debe ser cosechado cuando alcance la madurez fisiológica (verde sazón); nunca esperar que llegue a madurez comercial en el árbol. 13. Plagas y enfermedades.  Mosca de la fruta (Anastrepha spp). Es la plaga más importante para los productores de mango, razón por la que se mantiene en rigurosa cuarentena fitosanitaria a nivel nacional. Las principales especies son A. ludens, A. obliqua, A. striata y A. serpentina.  Trips (Selenothtrips rubocinctus Girad). Representan un problema en cultivos anuales y frutales como el mango, particularmente de diciembre a mayo. Estos insectos se caracterizan por tener un aparato del tipo “raspadorpicador”, poseen dos pares de palpos y una mandíbula bien desarrollada. Se alimentan a base de polen, esporas de hongos y son de importancia económica ya que afectan el follaje, las inflorescencias y los frutos de diferentes especies.  Escama blanca (Aulacaspis tubercularis Newstead). Esta plaga se detectó por primera vez en hojas y frutos en Nayarit, no obstante, se reporta actualmente en varias zonas productoras de mango del país. Se reportan daños directos a los frutos, a la calidad de todos los cultivares y un daño de las ninfas en hojas y frutos que causa caída prematura de hojas y el rechazo del fruto superior al 50% en el empaque (Urías et. al., 2010).  Antracnosis (Colletotrichum gloeosporioides Penz). En la panícula se observa marchitez, ennegrecimiento y caída de las flores. Los frutos no cuajan o no son sostenidos en las inflorescencias. Estos muestran puntitos café oscuro que, al crecer y unirse, forman manchas grandes irregulares de color negro y hundidas. En la hoja se notan manchas redondas o angulares de color café oscuro de uno a cinco mm de diámetro.  Cenicilla (Oidium mangiferae Berthet). Esta enfermedad se caracteriza por un polvillo blanquecino que cubre todos los órganos afectados. Ataques severos causan la muerte de las flores y caída del fruto.  Muerte descendente (Lasiodiplodia theobromae Pat (=Botryodiplodia theobromae Pat)). Necrosis apical de las hojas, defoliación y muerte descendente gradual de los brotes apicales. La enfermedad progresa hacia las ramas grandes, hasta causar la muerte total de los árboles. Los daños en frutos de mango se reporta una pudrición peduncular o basal.  Roña del fruto (Elsinoe mangiferae Bitanc & Jenkins). En el fruto joven se desarrollan manchas de color gris o café, las que aumentan de tamaño en la medida que éste crece; en el centro de las manchas se forman grietas con tejidos corchosos, que al desarrollarse rompen la epidermis del fruto y lo deforman.  Pudrición Texana (Phymatotrichum omnivorum (Shear) Dugg). Esta enfermedad causa marchitez de las hojas. Aproximadamente tres días después, el árbol muere súbitamente y las hojas quedan adheridas a la planta.  Deformación o “escoba de bruja”, “bunchy‐top” (Fusarium subglutinans). En las ramillas se observa acortamiento de los entrenudos, proliferan yemas múltiples, se detiene el crecimiento, se deforman las ramillas y desaparece la dominancia apical. En la inflorescencia, se nota un engrosamiento del raquis, las flores se compactan y “petrifican”, no producen frutos y quedan adheridas en el árbol. IMPORTANCIA ECONOMICA Asia y África concentran el 89% de la producción mundial de mango, mangostanes y guayabas, mientras América participa con el 11%. Nuestro país produce el 37% de la oferta total en América y fue el séptimo productor mundial en 2012. La producción de mango en el país ha disminuido un 7.4% respecto a la producción en el año 2006, la más alta históricamente. En 2013 alcanzó un volumen de 1.6 millones de toneladas, con un valor de cerca de 5 mil mdp. La superficie dedicada a este cultivo fue de 187 mil toneladas, con un rendimiento promedio de 9 ton/ha. El número de productores dedicados a esta actividad es de cerca de 40 mil. Del total producido en 2013, un 19% se destinó a la exportación (313 mil ton), mientras que cerca de un 16% fue a la industria (250 mil ton) y el restante 65% a la comercialización. Las exportaciones, cuyo principal destino es EEUU (87%), se han incrementado un 7% anual en los últimos cinco años y representan cada vez más un mayor porcentaje de la producción del país. Aproximadamente un 60% de la superficie es de temporal, de la cual se obtiene el 56% del volumen de producción, que genera el 50% del valor de la actividad. Por su parte, son seis las variedades que concentran el 90% del volumen y valor de producción son: Ataulfo, Manila, Tommy, Haden, Kent y Keitt. Guerrero, Nayarit, Sinaloa, Chiapas, Oaxaca, Michoacán y Veracruz son las principales entidades productoras de mango en México, las cuales concentraron en 2012 el 87.7% del volumen de la producción y 88.9% del valor generado. Gracias a la existencia de diversas variedades de mango y al adelanto de floración realizado en algunos estados, se puede disponer del fruto durante todo el año. Sin embargo, la producción se concentra entre marzo y agosto en cerca de un 90%. Esto influye en el precio de mercado, el cual se incrementa en el periodo de baja producción. BIOFERTILIZANTES También conocidos como bioinoculantes, inoculantes microbianos o inoculantes del suelo, son productos agrobiotecnológicos que contienen microorganismos vivos o latentes (bacterias u hongos, solos o combinados) y que son formulados bajo condiciones controladas de laboratorio para utilizarlos en los cultivos agrícolas para estimular su crecimiento y productividad mediante la optimización de su estatus nutricional y el control de patógenos. Biofertilizante compuesto por un consorcio de bacterias benéficas de los géneros Bacillus y Azospirillum que contribuye al aumento de la productividad de los cultivos a través de distintos mecanismos como la producción de hormonas que favorecen el desarrollo vegetal, la solubilización de nutrimentos inactivados del suelo, incremento del volumen de raíz y la protección contra enfermedades radiculares, foliares y del fruto causadas por hongos y microorganismos fitopatógenos tales como Xanthomonas, Clavibacter, Erwinia, Fusarium, Pythium, Rhizoctonia y Phytophthora, entre otros. Beneficios del uso de BactoCROP 
Incrementa significativamente el desarrollo de las raíces 
Aumenta el establecimiento de las plántulas y disminuye la pérdida de plantas 
Acelera el desarrollo de plántulas, plantas adultas y frutos 
Mejora la floración 
Acorta los tiempos de cosecha 
Alarga los tiempos de producción de las hortalizas 
Promueve un crecimiento más uniforme de los cultivos 
Incrementa la disponibilidad de nutrientes inactivados del suelo 
Incrementa el rendimiento de los cultivos en hasta 25 a 30 % en el caso de hortalizas 
Mejora la calidad de los frutos 
Reduce el uso de pesticidas químicos 
Ayuda a prevenir y controlar enfermedades bacterianas BactoCROP puede emplearse en cualquier etapa del cultivo para el tratamiento de semillas, tubérculos, rizomas, plántulas en charola, semilleros y almácigos, y puede ser aplicado mediante los sistemas de riego, mochilas de aspersión o en la base de las plantas en ‘drench’ y el follaje durante las etapas fenológicas críticas del cultivo, preferentemente desde su establecimiento. Con esto BactoCROP fomenta la masa radicular y mejora el aspecto, floración y la disponibilidad de los nutrientes del suelo, aumentando el rendimiento de los cultivos de un 25 a 30% y acelerando el desarrollo de plantas y frutos has en 15 a 20 días Adicionalmente, en el cultivo de mango BactoCROP ayuda a combatir enfermedades fúngicas tales como “Escoba de bruja” (causada por Fusarium oxysporum y F. subglutinans), Cenicilla polvorienta del mango (Oidium mangiferae), Antracnosis (Colletotrichum gloeosporioides) y Fumagina o Negrilla (Caprodium mangiferum.), por lo que los beneficios de este producto se constatan no solamente en la producción de los frutales, sino también en la calidad de los frutos cosechados. Recomendaciones de manejo biológico con BactoCROP‐TH en plantaciones de Mango (Mangifera indica) Producto Forma de Aplicación Al suelo Foliar 2 kg por año 1 kg por año 1. Aplicación al suelo o al pie de la planta 
En cultivos de temporal se recomienda disolver 1 Kg de BactoCROP en la cantidad de agua necesaria para regar abundantemente el suelo o pie de las plantas (300 a 600 litros de agua) durante el periodo de crecimiento vegetativo, al inicio de lluvias, aplicando alrededor del tallo de cada planta tres litros de la mezcla anterior. La cantidad total de agua a aplicar variará de acuerdo a la densidad de plantación. 
Posteriormente, al finalizar el temporal de lluvias se recomienda aplicar 1 Kg adicional de BactoCROP de la forma descrita previamente. 
Con los sistemas de riego presurizados (micro aspersión y riego por goteo) es posible incluir el biofertilizante en el agua de riego. 2. Aplicación foliar 
Se recomiendan aplicar 500 g de BactoCROP‐TH disueltos en la cantidad de agua necesaria para asperjar el follaje de las plantas al inicio de lluvias y una cantidad igual al finalizar el temporal. 
La inoculación de estos productos biológicos se debe realizar aplicando los productos indicados con bomba parihuela o bomba tipo remolque conectada a un tractor. La finalidad de asperjar los árboles con este equipo es asegurar una adecuada aspersión del producto iniciando desde la punta y continuando hacia debajo de los árboles. NOTA: 
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La cantidad de agua en la que se diluyen los productos varía de acuerdo al tamaño del follaje y a la densidad de plantación. NO DISUELVA EL CONTENIDO TOTAL DE LA BOLSA DE BactoCROP EN UNA CANTIDAD DE AGUA MENOR A 200 LITROS. SI VA A DOSIFICAR EL PRODUCTO, MANTENGA SIEMPRE UNA PROPORCIÓN DE 100 g DE PRODUCTO POR CADA 30 A 40 LITROS DE AGUA. PARA EVITAR LA FORMACIÓN DE GRUMOS, AGREGUE POCO A POCO EL PRODUCTO, MEZCLANDO VIGOROSAMENTE CON UNA VARA O LAS BOMBAS DE LOS TANQUES DE ASPERSIÓN. 
Una vez mezclado con agua, el producto debe ser utilizado dentro de las siguientes 24 hrs. Análisis de rentabilidad para el cultivo de mango en Veracruz comparando los rendimientos esperados utilizando el programa de manejo convencional de los productores y el paquete biotecnológico BactoCROP‐TH y Trichonator Manejo tradicional sin biofertilizantes Paquete tecnológico con BactoCROP‐TH ($1,300°°) 2 aplicaciones al año Valor de Rendimiento Rendimiento producción neto (ton/ha) (ton/ha) ($/ha) Valor de producción bruto ($/ha) Costo Paquete Tecnológico BactoCROP Año Precio medio rural ($/ton) 2010 $2,094.04 8.72 $18,260.03 12.0336 $25,198.84 $2,600.00 $22,598.84 $4,338.81 2011 $2,149.21 5.05 $10,853.51 6.9185 $14,869.31 $2,600.00 $12,269.31 $1,415.80 2012 $2,159.99 5.44 $11,750.35 7.616 $16,450.48 $2,600.00 $13,850.48 $2,100.14 2013 $3,165.72 5.18 $16,398.43 7.3556 $23,285.77 $2,600.00 $20,685.77 $4,287.34 2014 $2,588.49 5.59 $14,469.66 7.7701 $20,112.83 $2,600.00 $17,512.83 $3,043.17 Promedio $2,431.49 5.996 $14,579.21 7.43504 $18,078.23 $2,600.00 $17,383.45 $2,804.23 Nota: Estos resultados no incluyen los ahorros relacionados con la disminución de la aplicación de pesticidas químicos para el control de enfermedades, ni tampoco las ganancias obtenidas por el aumento en la calidad de las cosechas. Estos análisis tampoco incluyen los costos de producción ya que éstos varían de acuerdo al grado de tecnificación del cultivo. CONCLUSIONES Del cuadro anterior se puede concluir que es posible aumentar las ganancias netas obtenidas por hectárea de mango por lo menos en $2,804.23°° mediante el paquete tecnológico de BactoCROP‐TH. Valor de Aumento neto del producción neto valor de la ($/ha) producción Bibliografía Baradas, M. W. 1994. Crop requirements of tropical crops. In: Handbook of agricultural meteorology. J.F. Griffiths Editor.Oxford Univ. Press. New York. pp. 189‐202. Benacchio, S.S. 1982. Algunas exigencias agroecológicas en 58 especies de cultivo con potencial de producción en el Trópico Americano. FONAIAP‐Centro Nal. de Inv. Agropecuarias. Ministerio de Agricultura y Cría. Maracay, Venezuela. 202 p FAO. 1994. ECOCROP 1. The adaptability level of the FAO crop environmental requirements database. Versión 1.0. AGLS. United Nations Food and Agriculture Organization (FAO). Rome, Italy Galán S., V. 2009. El cultivo del mango. Grupo Mundi‐Prensa. Madrid, España. 340 p. González de C., M. 1984. Especies vegetales de importancia económica en México. Ed. Porrúa. México, 305 p. Mora M., J., J. Gamboa P. y R. Elizondo M. 2002. Guía para el cultivo del mango. INTA. San José, Costa Rica. 74 p. Purseglove, J.W. 1987. Tropical crops: Dycotiledons. Longman Scientific and Technical. Singapore. 719 p. Ruiz C., J.A., G. Medina G., I. J. González A., H.E. Flores L., G. Ramírez O., C. Ortiz T., K.F. Byerly M. y R.A. Martínez P. 2013. Requerimientos agroecológicos de cultivos. Segunda Edición. Libro Técnico Núm. 3. INIFAP. Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias‐CIRPAC‐Campo Experimental Centro Altos de Jalisco. Tepatitlán de Morelos, Jalisco, México. 564 p. Sistema de Información Agroalimentaria de Consulta (SIACON). 2014. SIAP, SAGARPA, México 2014.