Download filosofía filosofía -"la ética" lugar

Document related concepts

Ireneo de Lyon wikipedia , lookup

Alma wikipedia , lookup

Personalismo wikipedia , lookup

Salvación wikipedia , lookup

Teología del Cuerpo wikipedia , lookup

Transcript
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
Introducción.
¿Qué es el hombre? Podemos decir que el hombre es un misterio. Él es «demasiado
malo para ser un Dios y demasiado bueno para ser un fruto del azar», expresó Lessing en su
obra Natán el Sabio.
La teología respecto al hombre es postmoderna.
La pregunta por el hombre es una exigencia de la época moderna. Kant (¿Qué es el hombre?)
La Iglesia no se planteaba la pregunta, su reflexión ha dependido de la Cristología. Se
ha estudiado el ser humano para saber de la encarnación. ¿Por qué Dios se ha hecho hombre?
La Cristología era la óptica desde la cual se hablaba del ser humano.
Surge un desafío: el interés por el ser humano es sustancial, no sólo en relación a la
cristología. Nos preguntamos por el ser humano, por nuestra propia necesidad cultural. Esta
circunstancia supone un problema metodológico, porque, la respuesta de la Iglesia sobre qué
es el hombre no será filosófica.
Es fácil confundir la Antropología Teológica y la Antropología Filosófica, pero, la
definición del hombre es distinta en ambas disciplinas. P.ej. La AFª que comienza en Aristóteles
se pregunta: ¿qué distingue al hombre, en lo esencial, respecto a otras especies? Otro
planteamiento: ¿que nos hace ser humanos? Importante cuestión en la AFª, sobre todo, al
hablar de embriones.
En la Biblia no hay definición sobre el hombre. El Magisterio asumirá la definición de
persona. La pregunta por la esencia del ser humano es filosófica, no teológica. La diferencia
estriba en si interviene o no Dios a la hora de responder a la pregunta. ¿Qué es el hombre?
La ATª la responde indirectamente, dice lo que es el hombre en relación a Dios. Se
trata de saber lo que la Revelación dice sobre el hombre. Escritura, Tradición,… “El misterio del
hombre sólo se resuelve a través del acontecimiento de Cristo.” GS22. Cristo representa el
grado más elevado de humanidad. No se busca un conocimiento del hombre en sí mismo sino
en cuanto a su vocación divina.
1.- Principales datos sobre la configuración antropológica y cristiana que se desprenden de la
Escritura.
(1) BASAR  Carne (“Cuerpo”)
(2) NEFES (“Alma”)
 Ser viviente en su totalidad
 garganta, aliento  ser viviente
 Parentesco
 centro vital, “personalidad”
 El hombre en cuanto caduco
 sede de los sentimientos y emociones
 El hombre inclinado al pecado
 el hombre “necesitado”
(*) entre comillas: las traducciones que se hacen habitualmente son imperfectas
BASAR: en algunos momentos se refiere a “carne”, sustrato biológico del ser humano, en
otras, se refiere al ser viviente en su totalidad; parentesco, los que son de la misma carne;
hombre caduco, frágil; inclinado al pecado, no siendo la carne la causa del pecado.
NEFES: ser viviente, utilizado como ser viviente en su totalidad.
Son términos del AT para describir al hombre. No hay una visión completamente
definida del ser humano. Se habla de Basar o Nefes indistintamente. Hay que tener cuidado
con la traducción de estas palabras porque, aunque parecen referirse a la corporalidad, se
corre el riesgo de entrar en el juego antropológico dualista, y esto es imposible en la
antropología bíblica.
1
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
OJO en CIC 997 Al responder que es resucitar define la muerte como la separación del alma y
el cuerpo. Hay que saber interpretarlo.
Ruiz de la Peña nos dice que BASAR y NEFES son sinónimos en el AT “ser viviente en
su totalidad”, aunque cada una expresa dimensiones distintas, pero siempre designan la
totalidad del ser humano.
En la Biblia, la inmortalidad del alma no es una cuestión central sí, en cambio, el tema
de la muerte.
Otro término que está a la altura de NEFES es LEB (no incorporado por Ruiz de la Peña)
(3) LEB  (“Corazón”)
(4) RUAH (“Espíritu”)
 Sede de los sentimientos y deseos  brisa, viento
 Poder de decisión del hombre
 respiración
fuerza creadora
 Algo que también tiene Dios
 Espíritu de Yahvé
don divino específico
Diferencia entre RUAH y NEFES:
NEFES (aliento de ser vivo); RUAH (don de Dios, que viene de Dios, no natural al hombre). En
estas expresiones se encuentra el germen de la cuestión del “sobrenatural”.
NEFES sería el aliento que constituye al ser humano de un modo natural.
RUAH sería el espíritu del ser del hombre, es sobrenatural, procede del don de Dios.
Algún escriturista descubre en RUAH un concepto “Teoantropológico”, no asigna al hombre
como un ser cualquiera, sino que expresa la dimensión del hombre a la apertura a Dios. Propia
dimensión humana. AQUÍ se encuentra la clave de la antropología bíblica. “El hombre es un
ser-para-Dios”. Constituye su especificidad.
Textos bíblicos:
Gn 2,4b  texto yavista (Gn 2,18) “Después el Señor Dios pensó: No es bueno que el
hombre esté solo; voy a proporcionarle una ayuda adecuada.” No es un relato del origen del
hombre sino un relato del origen del mal. El hombre no es hombre sin un TÚ. El señorío de la
Creación pone en la cúspide al hombre sobre todo lo creado. El origen del mal tiene que ver
con la responsabilidad personal del ser humano creado por Dios, que, a la vez que procede y
depende de su creador, tiene capacidad para afirmarse autónomamente frente a él.
Gn 1,26 “Entonces dijo Dios: Hagamos a los hombres a nuestra imagen, según nuestra
semejanza, para que dominen sobre los peces del mar, las aves del cielo, los ganados, las
bestias salvajes y los reptiles de la tierra.”  Hombre creado a imagen (algo ontológico) como
semejanza nuestra (moral Ireneo). La versión más aceptada de hombre imagen de Dios es, en
la medida que es representación (que habita en el hombre). La idea del hombre como imagen
de Dios no es desconocida, la novedad es la democratización, en todos los hombres habita
Dios, por eso la altísima dignidad conferida al ser humano (homicidio, suicidio). HAGAMOS
(plural)  teoría de la Trinidad (anacronismo teoría posterior, plural mayestático, no existe en
hebreo, Dios con otros dioses menores).
Estos relatos ponen en evidencia la creaturalidad del ser humano, tienen una intención
fundamentalmente religiosa. En el AT no hay un modelo de ser humano pero si enseñanzas:
El AT habla del hombre desde Dios, desde su radical apertura a Dios.
RUAH (espíritu) la potencia divina en el hombre que expresa esa radical apertura del
hombre a Dios.
2
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
Del AT al NT:
Hay un cambio lingüístico. En AT (hebreo con algo de griego) en NT (griego pero con
algo de mentalidad semítica). Hay términos nuevos que traducen las dimensiones del ser
humano basados en BASAR, NEFÉS, RUAH, LEB.
En el NT hay cinco términos:
LEB
NEFÉS
BASAR
RUAH
KARDIA
PSIKHE
SOMA
SARX
PNEUMA
(corazón)
(alma)
(cuerpo)
(carne)
(espíritu)
Sede de los sentimientos
Interior del ser humano
AT
NT
BASAR (carne)
KARDIA (corazón) Lugar donde se guarda el tesoro del ser humano
NEFES (alma)
PSYKHE (alma) principio espiritual del ser humano (vida) BIOS griego
RUAH (espíritu)
SOMA (cuerpo) concepto biológico
LEB (corazón)
SARX (carne) modo genérico
PNEUMA (espíritu)
Por ejemplo, en Mt 6,22-23  No vale más la PSYKHE que el alimento y el SOMA más que el
vestido
Hay que distinguir los textos sinópticos y joánicos de los escritos paulinos. La teología
de Pablo en el uso de estos términos se aleja en su significado de los textos sinópticos y
joánicos. P.ej: Sarx significa para Pablo pecado o ruptura con Dios (teología pesimista, próxima
al maniqueísmo)  Agustín  Lutero
En el NT no hay definición de qué es el hombre, no responde a esa pregunta, busca al
hombre como destinatario del mensaje de Jesús. En el NT sucede lo mismo que en el AT, la
mirada sobre el ser humano es una mirada caracterizada por la vinculación de todo hombre a
Dios.
A destacar en Pablo al referirse a los creyentes: “… que todo vuestro ser – espíritu, alma y
cuerpo – se conserve irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo”
Espíritu - pneuma
1Te 5,23 ser
Alma – psykhe
Antropología tripartita para Pablo. Pneuma principio
Cuerpo – soma
religioso del hombre. Disposición del ser humano a Dios
Fundamento de una estructura tripartita del hombre. Esto sería lo específico de la
Antropología Cristiana. En Pablo son importantes SOMA y PNEUMA desde un punto de vista
cristológico, no antropológico. No se habla tanto del hombre como de Cristo.
Si tuviéramos que buscar un título a la antropología de Pablo sería “el hombre imagen
de Dios en Cristo”. Pablo desarrolla su pensamiento desde la categoría de imagen de Dios.
Significados fundamentales
Semejanza
La categoría imagen de Dios posee estos 3 significados
IMAGO DEI Dependencia y origen
Manifestación
3
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
Semejanza: real reproducción de la realidad en la imagen. Referente significativo: en las
estatuas de los pueblos cananeo y romano habitaba la divinidad de los dioses. En el hombre se
encuentra de modo real la divinidad (real reproducción de Dios).
Dependencia y origen: El hombre es criatura que tiene su origen en Dios y depende de Él.
Manifestación: la imagen de Dios manifiesta aquella realidad que es Dios.
Pablo recurre a estas nociones al hablar en primer lugar de Cristo y, en segundo lugar, del
hombre. Pablo no utiliza en el mismo sentido Psykhe y Pneuma. Para Pablo, lo importante no
son los términos en sí, sino que son instrumentos de expresión de una experiencia de fe.
2.- Hacia una visión unitaria de la persona humana en su pluralidad de dimensiones.
Entramos en el apartado de la teología sistemática.
En la Biblia, hemos visto, se considera al hombre como unidad psicosomática. EL
planteamiento posterior será trasvasar la intuición bíblica del hombre-unidad a un lenguaje
procedente de otra visión cultural (platónico-dualista) en la que el hombre es dos cosas
(alma-cuerpo) y no una.
Cuestión de índole ontológica es la cuestión del quid del hombre ¿Qué es el hombre, de que
está constituido, de qué consta?
¿Es una realidad homogénea en todos sus estratos?  Visión monista: es espíritu o materia,
alma o cuerpo. ¿Es una realidad bidimensional?  Visión dualista: es espíritu y materia, alma
y cuerpo.
La Biblia nos suministra el dato del hombre-unidad y el dato del hombre-imagen de Dios. La
antropología cristiana, según esto, no puede ser ni dualista ni monista. ¿Cabe una tercera vía?
Para Ruiz de la Peña cabe una tercera vía por la que se afirma en el hombre una dualidad no
dualista y una unidad no monista. Tercera vía que permite seguir utilizando el lenguaje almacuerpo.
En la PATRÍSTICA: Hombre (cuerpo y alma, pero creados en unidad). Asumen la idea filosófica
pero hacen primar la idea de unidad como algo típicamente cristiano. Unidad como algo
bueno (contra el maniqueísmo) en contra del platonismo. Para el platonismo la convivencia
cuerpo/alma es accidental, las almas son preexistentes a la caída del cuerpo, terminan
purgando la cárcel del cuerpo. Por la fe en la Creación, la reflexión del ser humano Gn 1,26
(ronda la categoría de imagen de Dios).
El cristianismo supera al platonismo al decir que el alma ha sido creada. Para el
platonismo las almas vienen de un mundo superior y duran eternamente. En el cristianismo el
alma no viene de Dios no es preexistente y no es divina. Es también una criatura. Supera al
maniqueísmo al considerar el cuerpo como bueno, por ser creado por Dios (imagen de Dios).
Imagen de Dios se dice tanto del ser interior como de la corporalidad. Una idea bíblica
fundamenta la superación de las ideas de índole filosófica. Se ha acusado en los primeros
tiempos al cristianismo de estar helenizado. Pero no se heleniza sino que se va definiendo de
nuevo con el pensamiento helénico. El cristianismo no se heleniza
El problema cuerpo/alma no es cristiano, es un discurso filosófico para destacar la
singularidad del ser humano (conocimiento intuitivo, inmediato, espontáneo) alma como
principio espiritual. Actualmente se ha transformado en mente/cerebro. Mente como
epifenómeno, el mismo cerebro por su evolución proyecta para conocerse a sí mismo. Ambos
4
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
dualismos pecan del mismo error: consideran cuerpo/alma o mente/cerebro como dos cosas
distintas (objetos, sustancias, realidades).
La antropología de la patrística se construyó por dos críticas: al platonismo y al
maniqueísmo. ¿Qué obtuvo el pensamiento cristiano a la crítica del platonismo? La conciencia
creatural (el alma es criatura)
Visión del Cuerpo. Algunos autores.
Tradición
subraya
Tradición
Alejandrina
el elemento anímico-espiritual
asiático
el elemento corporal
Occidental
antioquena
CLEMENTE DE ALEJANDRÍA; ORÍGENES;
JUSTINO; TACIANO; IRENEO;
AGUSTÍN DE HIPONA
TERTULIANO
En los autores del siglo II predomina una vía escriturística. Reflexionan el AT y NT. La
antropología y visión del hombre es cristocéntrica. Posteriormente, la reelaboran desde su
visión cristocéntrica. El hombre es capaz de inteligencia y de razón.
En el pensamiento de Agustín subyace un pensamiento dualista, pero no es un
dualismo radical, se separa del maniqueísmo por el cristianismo platonizado. Para Agustín el
cuerpo no es algo malo, aunque sea inferior al alma (contrario a las ideas maniqueas).
Tomás de Aquino no es un pensador dualista, por ser aristotélico. El alma se forma del
cuerpo, eso significa que el alma no persiste. Según la teoría hilemórfica (estudio aristotélico)
el alma no es inmortal porque la forma no puede entenderse sin la materia.
Ha dominado el conocimiento del ser humano desde el Medievo hasta nuestros días. Alma
forma del cuerpo. El aristotelismo permite la unidad cuerpo/alma, unidad fuerte, pero no
permite pensar la naturaleza específica del alma. ¿El alma es algo que tiene identidad propia o
sólo existe para el cuerpo? Sto Tomás dirá que el alma es forma del cuerpo, pero, además, es
una sustancia, tiene una identidad propia.
El ser humano no es un simple compuesto de dos elementos sino una unidad original e
irreductible. El alma es la única forma del cuerpo. Ser forma del cuerpo es tan constitutivo del
alma, como el ser espiritual del alma. Esto cierra la puerta a cualquier idea del alma
preexistente o que esté unido al cuerpo de forma accidental. El hombre es espíritu encarnado.
Declaraciones magisteriales: progresión creciente hacia la afirmación de la unidad del
hombre.
Letrán IV  la naturaleza humana consta de (o está constituida por) alma y cuerpo
Viennne  alma y cuerpo se unen sustancialmente, pero el sujeto de su afirmación es el alma
(anima forma corporis)
CVII (GS14)  asevera categóricamente que el hombre es uno en cuerpo y alma.
Se pasa de “el hombre tiene alma y cuerpo” a “el hombre es en cuerpo y alma”
El hombre es todo entero y al mismo tiempo lo uno y lo otro, alma y cuerpo.
El hombre es cuerpo.
No es posible una definición, en cambio, si es posible ensayar una descripción
fenomenológica. El hombre en cuanto cuerpo es:
5
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
a) Ser-en-el-mundo. El mundo no es para el hombre un complemento circunstancial de
lugar, sino un elemento constitutivo.
b) Ser-en-el-tiempo. En tanto que cuerpo, el hombre está inmerso en este tipo de
duración continua y sucesiva que llamamos tiempo. La condición humana es condición
itinerante; el hombre es homo viator.
c) Ser mortal. La muerte es el fin del hombre entero. Suponer que el sujeto del verbo
morir es el cuerpo, no el hombre, equivale a ignorar que el hombre es cuerpo. Un
cadáver es algo sagrado.
d) Ser sexuado. En la sexualidad del hombre se proyecta su manera de ser respecto al
mundo. Esta diferenciación sexual, implicada en la corporeidad, confiere al ser
humano una doble tonalidad afectiva, un doble modo de instalación mundana y de
relación social correlativamente diferentes.
e) Expresión comunicativa del yo. Por el cuerpo, el hombre se dice a sí mismo; el cuerpo
es la mediación de todo encuentro, el hombre uno manifestándose, el sacramento o el
símbolo de la realidad personal. El único modo de ver al otro verdaderamente es
viendo en él a Cristo; de no ser así, se está viendo algo, no a alguien.
El hombre es alma.
Popper, Eccles, Zubiri, Pesch, prefieren usar otro término para denotarla: conciencia,
mente, psique, espíritu. El abuso del vocablo alma ha deteriorado el concepto. Con todo, dice
RdlaP, la idea es insustituible para la teología, con ella se expresan y tutelan una serie de
mínimos antropológicos innegociables para la fe cristiana.
El hombre en cuanto alma es:
a) Ser mundano en la forma de la trascendencia respecto al mundo. Esta mundanidad
trascendente se refleja ya en el nivel biológico: el hombre tiene (está abierto a) todo
el mundo, mientras que el animal tiene medio especializado, circunmundo, mas no
mundo. El ser humano es el único animal endémicamente insatisfecho, dicho en
términos teológicos: el ser humano es el único ser vivo capaz de esperanza. En suma:
el hombre se experimenta inseparablemente como ser en el mundo (por su
corporeidad) y como ser frente al mundo (por su espiritualidad).
b) Ser temporal en la forma de la trascendencia respecto al tiempo. El hombre tiene
tiempo, dispone o pretende disponer de él, en vez de sufrirlo pasivamente. El ser
humano es-en-el-tiempo modelándolo creativamente, acuñándolo a su medida. El
tiempo deviene en el hombre historia, proceso unitario articulado y finalizado. El
tiempo-cantidad reviste una cualidad humanizada. El ser humano se sabe temporal y,
con todo, se desea eterno. No se resigna a ser-para-la-muerte.
c) Ser mortal en la forma de la trascendencia respecto a la muerte. La mortalidad es una
de las dimensiones del ser humano en cuanto cuerpo. Pero no es su último destino.
Dios, en efecto, no lo creó para la muerte, sino para la vida. La fe cristiana espera, por
tanto, en una victoria sobre la muerte, y la teología tematiza esa esperanza con ayuda
de dos categorías: inmortalidad y resurrección. En una antropología dualista, muerte
es la separación del alma (inmortal) y del cuerpo (mortal), la liberación del alma a la
que no le afecta la muerte porque es inmortal por naturaleza. La resurrección desde la
dualidad es una devolución al alma de un aditamento exterior, la categoría clave aquí
es inmortalidad, no-muerte. En una antropología unitaria muerte es el fin del hombre
entero. Si al hombre se le promete un futuro, ese futuro sólo puede pensarse como
6
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
resurrección, a saber, recobrar la vida en todas sus dimensiones, por tanto, también
en la corporeidad. La categoría clave cristiana en el contexto de la esperanza es una
victoria sobre la muerte, es resurrección, no inmortalidad.
3.- La dimensión relacional como constitutiva de la persona: su referencia a Dios como
relación primera y fundante.
El ser humano se dice persona cuando partiendo de su ser, unidad óntica, original e
irrepetible, queda posibilitado a relacionarse con otros seres diversos. Categoría teológica que
se ha convertido mediante la secularización en una categoría jurídica. Hay una consideración
jurídica y metafísica. Desde un aspecto metafísico puede hablarse de persona con libertad,
original, irrepetible, capaz de amar.
La pregunta ahora versa sobre el quién: el hombre en efecto, no se limita a ser algo; es
alguien; no sólo tiene una naturaleza, sino que es persona, sujeto que dispone de su
naturaleza.
El ser personal es un ser libre y un ser social. Su ser-alma apunta al carácter trascendente de lo
humano respecto de lo meramente mundano. Imagen de Dios vertida en el concepto de
persona.
Patrística: Imagen de Dios
Boecio: Sustancia Racional
Biblia Ser relacional
Ricardo de San Víctor
Controversias ESSE AD – persona (relación) 
PERSONA “creada”
Trinitarias
ESSE IN – naturaleza
Tomás de Aquino
Duns Scoto
Pensamiento
Griego – Prosopon
MODERNIDAD
Uso teatral per-sona
HUSSERL
Descartes
de personare - resonar
Fenomenología
“relación”
Solipsismo radical
Hume; Marx
PERSONALISMO DIALÓGICO
(Buber)
Recorrido histórico del concepto de PERSONA.
En el discurso cristiano sobre el hombre el concepto de persona es importante, pero
curiosamente este término no aparece en la Biblia  Aunque describe al hombre por medio
de una triple relación: de dependencia, frente a Dios; de superioridad, frente al mundo; de
igualdad, frente al tú humano.
Tampoco existe el concepto persona, como lo entendemos hoy, en el mundo helénico,
lo cual genera interrogantes.
¿Cómo una categoría sin fundamento bíblico puede erigirse como un pilar del
discurso cristiano?
Hoy en día la persona está cuestionada como categoría ontológicamente constituida.
Un término similar utilizado es sujeto. La idea de sujeto en la postmodernidad está en
Descartes. La Ilustración hace suya la idea de sujeto como bastión (idea fundamental). La
postmodernidad se revela o cuestiona el concepto de sujeto. El concepto de persona como
categoría fundamental en el discurso cristiano no es retórica. Es una pregunta que Vattimo le
7
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
hace a la teología cristiana ¿por qué el cristianismo defiende el concepto de persona cuando
no es un término propio de la Biblia? ¿Por qué se empeña el cristianismo en su defensa?
No aparece el término “persona” pero en cambio si aparece “ser relacional”.
Muchos teóricos de la subjetividad descubren al inventor del sujeto occidental en San Agustín
(p.ej: Foucault o Vattimo). En la medida que Agustín deja ver el sujeto, constituido en relación
con Dios.
Importante: la noción de persona no surgió para referirse al ser humano, sino que se
“inventó” para “esclarecer” la identidad de Dios. Es en el seno de las controversias
trinitarias donde toma forma la noción de persona.
El concepto de persona surge para hablar de Dios, concepto primariamente teológico.
En la teología del Medievo podemos decir que se produce una secularización del concepto de
persona. Comienza a utilizarse para hablar del ser humano. Se dice de la persona creada
frente a las personas divinas.
ESSE AD  persona, relación
ESSE IN  naturaleza
Boecio ofrece la primera definición de persona: “naturae rationalis individua substantia” La
naturaleza humana es caracterizada por la racionalidad. Sustancia individual de naturaleza
racional
Tomás de Aquino:
Busca la síntesis. “Las personas divinas son relaciones subsistentes (sustancial)”. En su
definición de persona es capital la noción de subsistencia: por tal se entiende aquella realidad
que existe en y por sí, no en otra. Una consecuencia indeseable de la concepción de persona
en Tomás es la exclusión explícita de la relación como constitutivo de la persona humana
Ricardo de San Víctor:
“Persona est existens per se solum iuxta singularem quemdam rationalis existentiae
modum” La persona es ubicada en el ámbito metafísico de la ex-sistencia (relación de origen),
no de la esencia.
Duns Escoto:
Definición cercana a la de Ricardo de San Víctor: “persona es la sustancia
incomunicable de naturaleza racional”. A su juicio, el acento de la definición debe recaer en la
incomunicabilidad; mientras que la naturaleza es comunicable, la persona es incomunicable.
Descartes:
Antropología o egología cartesiana ve en el ser humano a un sujeto relacionado
consigo mismo y únicamente consigo mismo.
Con esta reducción del yo a la conciencia se inicia el proceso de pérdida de la persona, que en
Hume conducirá a ver en la conciencia humana una impresión global de actos perceptivos.
El idealismo romántico sacrificará el yo singular al Espíritu absoluto y objetivo, y el
marxismo clásico sumergirá la subjetividad de la persona concreta en el anonimato colectivista
de la sociedad. El yo individual no es más que una “gota” de arena en el despliegue de la
historia.
En la fenomenología de Husserl se destaca la condición de sujeto en el ser humano
frente a objetos y, sobre todo, de yo frente al tú. El solipsismo que acechaba al sujeto
cartesiano se sortea mediante la experiencia que el yo tiene del otro, la “intersubjetividad
trascendental”.
8
TEMA 19: El hombre, ser unitario y ser relacional vocacionado en Cristo
Curso 2013-2014
Alberto Pérez Ayala
Scheler dará un paso más con su “personalismo ético”: el valor de la persona es
superior a todos los valores de cosas, organizaciones y comunidades; por persona se entiende
“la unidad de ser concreta y esencial…que funda todos los actos”. La responsabilidad es la
manifestación peculiar del ser personal, “va ligada al ser de la persona por una correlación
esencial… La persona se vive a sí misma como responsable de sus actos.
Las intuiciones schelerianas van a ser desarrolladas ulteriormente por el personalismo
dialógico: F. Ebner, M. Buber, coinciden en asignar a Feuerbach el mérito de haber descubierto
la fecundidad de la relación yo-tú. Es ante el tú como el ser humano descubre el propio yo
personal. La relación interpersonal yo-tú conduce al descubrimiento del nosotros. La situación
humana fundamental es la situación dialógica lo que se cierne entre dos existencias
personales. Es en este “estar-dos-en-recíproca-presencia” la única posible respuesta a la
pregunta “qué es el hombre”.
No es extraño, por su evocación al relato yahvista de la creación de Adán y Eva, que la
corriente personalista haya arraigado a lo largo del siglo XX en un importante número de
pensadores cristianos: Guardini, Mounier…
Después de veinte siglos, la noción de persona continúa siendo sorprendentemente
inestable; parece condenada a oscilar indefinidamente entre los dos polos de un
sustancialismo des-relacionado y de una relación de-sustanciada.
4.- La vinculación real de todo hombre con Cristo, en el que alcanza la plenitud de su
vocación.
Lo único que le preocupa a la teología en todo este asunto del ser personal del hombre se
formula en la siguiente pregunta: ¿de qué modo ha de tratar el hombre al hombre y por
qué?
La respuesta en la Gaudium et Spes. Síntesis de la antropología cristiana: para iluminar el
misterio del hombre, el concilio cuenta con un punto de partida, que es la definición bíblica del
hombre como imagen de Dios (GS 12,3), y un punto de llegada, que es el misterio del Verbo
encarnado (GS 22). El planteamiento conciliar de la cuestión antropológica es decididamente
bíblico-teológico, no filosófico, psicológico o sociológico.
La fe cristiana no cuenta con una definición abstracta de la realidad humana; lo que el
hombre es, se nos explica en la realidad concreta de Cristo, quien, siendo “imagen de Dios”,
“es también el hombre perfecto”, no ya en sentido moral, sino ontológico.
En resumen: el hombre es un ser personal en cuanto que es un ser relacional; la
relación a Dios es primera y fundamenta la relación al mundo (de superioridad) y la relación al
tú (de igualdad). Valor irreductible de la persona, prima sobre cualquier otro valor, no se
confunde en la naturaleza, ni se disuelve en el anonimato colectivista de la especie,
merecedora del mismo honor debido a Dios. Todo se confirma con el hecho-Cristo, en vista del
cual ha sido creado Adán, a título de boceto o esbozo preparatorio. Por otro lado, el elemento
subsistente de la persona humana (su naturaleza) es la unidad en su dualidad de cuerpo y
alma, por su condición corporal es síntesis del universo material.
Por otro lado decir que:
La definición del ser humano HOY es cuestión de las ciencias biológicas, pero no de la
filosofía.
9