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Michelin France, centenario Nacida para vender neumáticos, Michelin France metió el pie en el plato en 1926, con la estrella de buena mesa. Hoy cumple 100 ediciones, da estrella por primera vez a “un español en París” y reina en 23 países con 1,2 millones de ejemplares. Fachada del restaurante Fogón Saint Julien, del español Alberto Herráiz. T 100 E X T O Ó S C A R C A B A L L E R O CLUB DE GOURMETS del Crillon, domina por lo tanto la ciencia del toque tabernero en gran cocina y mejor producto. Equilibrio sutil, casi genético en el país que inventó el restaurante, distingue chefs MOF, que forjaron, en cocinas de palace, los hoteles por arriba de las cinco estrellas, un abanico de oficio, del club sandwich al kulibiak de salmón. Celebración y novedades Una de las portadas de Michelin France con motivo de su edición número 100. J uan Alberto Herráiz (Fogón Saint Julien, París) es el héroe español de la centésima Michelin France, mayor best seller de la edición turística, con 370.000 ejemplares en 2008. Su estrella es la primera para un chef español en Francia en un siglo y 9 años, edad de la guía, ideada en 1900 para vender neumáticos y hoy referente gastronómico mundial. En la cien Michelin France, apenas si una docena de chefs extranjeros recibió estrella, del mauriciano Heerah al argentino Colagreco o el escocés Ramsay (2* de una tacada este año). Y, con Juan Amador (3* en Alemania) y Carme Ruscalleda (2* en Japón), Herráiz sube al podio de los españoles con estrella fuera de España. La -buena- estrella de Herráiz, que además le vale página y foto en Michelin Paris 09, según la maqueta inaugurada en 2005 cuando la guía dejó por vez primera Europa, es una de las 63 distribuidas en Francia este año. En París, le acompañan el Jules Verne de la Tour Eiffel (Ducasse), Agapé (de Laurent Lapaire, ex director de L’Arpège), CLUB DE GOURMETS Bigarrade (Christophe Pélé, ex chef del Royal Monceau)... Detalle: 1* para Andrée Rosier (Les Rosiers, en Biarritz), ex del Grand Palais de Biarritz. Y primera chef MOF (Mejor Obrero de Francia, los que pueden ostentar la bandera en el cuello de la chaqueta), como lo contara Club de Gourmets. El adelantado en París de la cocina española es este conquense, Alberto Herráiz, cuya estrella bien se la merece Un sólo triestrellado. Pero con méritos más que demostrados: Eric Frechon, chef del Bristol, el restaurante preferido de Sarkozy -lo que no es garantía de nada- pero también de gastrónomos. Frechon, que participó de la movida bistronómica, tras los pasos de Yves Camdeborde, quien le había precedido también como segundo chef Esta centésima edición -no salió durante la guerra, pero los aliados se sirvieron de su cartografía para el desembarco- fue presentada, ante 300 periodistas internacionales, en el Museo d’Orsay: primera rueda de prensa jamás convocada por la guía. Con flamante interés por las cocinas extranjeras -uno de cada cinco restaurantes incluidos en París’09-, corroborado por la nueva directora -primera mujerde Michelin France, la alemana Juliane Caspar, 38 años, inspectora en Colonia desde 2002. Consecuencia que hace temblar chauvinistes: desde 2010, la guía de Alberto Herráiz y su mujer Vanina. 101 PALABRA DE CABALLERO C Jean-Luc Naret, director de las Guías Michelin, durante la presentación. Francia integra el polo Alemania, Austria, Suiza. Si Bocuse es el decano de los triestrellados -44 años en lo alto del podio-, Le Grands Monarche -Chartres, 1* este año-, es el único establecimiento presente en la guía desde la primera edición. Novedad: Les 3 étoiles du Guide Michelin: en 330 páginas, los 67 triestrellados del mundo. Es decir, 26 de Francia (de hecho, 25: Marc Veyrat anunció tardíamente el cierre de su restaurante de Annecy), 9 de Alemania, 8 de Tokio, 7 de España, 5 de Italia, 4 de USA, 3 de Gran Bretaña y 2 de Bélgica, Suiza y Holanda. En total, 1.973 estrellas en el mundo. Y 1,2 millones de ejemplares. Otra celebración: cien propuestas de cubierta para exponer, firmadas por artistas apadrinados por un chef. Por España, Xavier Olivé y Carme Ruscalleda. Nacidas entre 1926 y 1933, las estrellas distinguen “una muy buena mesa en su categoría” (*), “mesa que merece un desvío” (**) y “mesa que justifica un viaje” (***). Michelin France 2009 acumula 548 estrellas. 102 Y entre los 3*, cinco chefs privilegiados, los de gran hotel o grupo, con 12/15.000 € de sueldo mensual, vacaciones y descanso semanal. El chef patrón, en cambio, con por lo menos un asalariado (78% de cargas sociales) por comensal, debe buscarse la vida con galas. O multiplicar locales, si es posible con financieros. Ejemplo, el trío en la cumbre: Robuchon (¡25*!), Ducasse (16*) y el inglés Gordon Ramsey (14*; factura 7,5 millones de dólares al año), con establecimientos en cinco continentes. Pero la cumbre da vértigos. En 1996, Robuchon fue el primero en abandonar la carrera de las estrellas. Senderens le imitó con éxito: aumentó su facturación de 5 a 7 millones de euros. Y vive más tranquilo. En noviembre, Rœllinger, el mayor chef bretón de la historia renunció a sus 3*. Y ahora Veyrat. Nueva tendencia: restaurantes con ambiente. Y cocina de producto modernizada. Es decir, bistronomía. Tal vez por eso, Michelin France 09 trae 527 Bib Gourmand, categoría nacida en 1997, con precios de 27/35 € y buena mesa. ! omo sólo se habla de crisis, evoquemos la penúltima, la de 1991. Y un ejemplo de que toda crisis puede ser positiva. En 1991, gracias a la guerra del Golfo, el chef Yves Camdeborde inventó el neo bistrot. Así, sin saberlo, lanzó la bistronomía -de bistró y gastronomía-, aunque el término acuñado por el crítico Sébastien Demorand sea de 2004. “Cuando abrí La Régalade, en plena crisis -recuerda Camdeborde- pensaba en un restaurante gastronómico, según mis modelos de la época, Constant y Dutournier. Pero eso conllevaba facturas de 3.500 pesetas. Imposible. ¿Qué hacer? Suprimí la platería. Y la mitad de camareros previstos. A cambio, calor humano. Me permití palmear el hombro a mis clientes, algo impensable en mis 12 años de experiencia en el Ritz, La Tour d’Argent, Crillon”. El plato, mitad bistró, mitad gastro. La morcilla reinventada en tatin. Único amuse-gueule, pâté maison. O sea, sin plato: tarrina, panera y cuchillo. Materia prima de bistró -caballa, manitas de cerdo, sardinas...-, pero maneras gastro: orden, rigor, técnica. Hoy, en su nuevo Comptoir, Camdeborde hace gastro por la noche (mantelería, vajilla, excelente cocina; más de 3 semanas para obtener mesa; menú sin embargo a sólo 50 €) y es brasserie de 11 a las 18 h. En ese lapso, no se reserva. Una secretaria come salade César y Coca-Cola por 15 € y al lado, un goloso, huevo con trufa y liebre royal. Definición de Camdeborde, con hotel pegado al Comptoir: “somos fondistas”. O.C. CLUB DE GOURMETS Un secreto compartido Relleno con dátiles y frutas. Asado al horno, a fuego muy lento. Y listo para comer. Así es el Secreto Ibérico Relleno del Club del Gourmet en El Corte Inglés. Desde hace unos años asistimos a la rehabilitación gastronómica de la carne del cerdo ibérico. La pluma, la presa o el secreto ibérico han recuperado el prestigio olvidado, y protagonizan las creaciones de los más destacados cocineros. El secreto, una de las piezas más valoradas del cerdo ibérico, se encuentra detrás de la paletilla. Se trata de una carne con mucha grasa entreverada, que le proporciona no solo su CLUB DE GOURMETS característico veteado blanco, sino una textura y sabor excepcionales. El secreto es una de las piezas más apreciadas y demandadas del cerdo ibérico Ahora, puede degustarse de una manera sencilla, rápida y sobre todo, deliciosa, gracias al Club del Gourmet en El Corte Inglés. La elaboración de su secreto ibérico es completamente artesanal. Cada pieza se rellena con dátiles y frutas de primera calidad, y se asa al horno, a fuego lento. La compañía frutal y el tiempo pasado en el horno, le confieren un sabor y una jugosidad diferenciada. Solo resta aportar nuestro toque personal y decidir cómo consumirlo. Bien en frío, acompañado, por ejemplo, de pimientos asados o una delicada compota de manzana. O en caliente, con puré de patata y unas gotas de aceite de trufa, o con cualquiera de las guarniciones que podemos encontrar en el Club del Gourmet en El Corte Inglés. Como siempre, con la mejor garantía de calidad. 103